Hoy, en nuestro espacio de música clásica, vamos a hablar de Johann

Sebastian Bach. Uno de los más grandes músicos de la historia,

considerado por muchos “El padre de la música, o la armonía”, aunque,
atendiendo a hechos, Bach fue “padre de 13 hijos, y aparte componía”. De
sus dos matrimonios, tuvo más de veinte hijos, aunque muchos fallecieron
prematuramente.
Pero hoy vamos a hablar de su obra, y su legado histórico, sin el cual,
seguramente no se conocería la música tal y como es hoy, ni
conoceríamos a otros grandes compositores como Mozart, Beethoven,
Chopin o Liszt. Incluso músicos contemporáneos y de otros estilos, siguen
hoy en día usando, y siendo influenciados por su música.
Nació en una familia de músicos, y consiguió ser el miembro más
destacable de todos ellos. Su música, que no pasó a la historia hasta un
siglo después de su muerte, ha conseguido ser la culminación del barroco.
Y es que este período musical, puede decirse que termina junto con su
muerte, en 1750. Con tan sólo 65 años, fallece tras una operación en la
vista.
Su síntesis musical, su profundidad intelectual, y belleza y técnicas
perfectas, le convierten en el último gran maestro del contrapunto.
En su legado, nos dejó con más de 1100 obras musicales reconocidas.
Muchas, se sabe que se perdieron, aunque también, muchas obras
podrían ser pequeños estudios y ejercicios de sus alumnos. Pues Bach
tuvo aparte de sus hijos, numerosos alumnos y estudiantes a lo largo de su
vida. Es más, su hijo Carl Philip Bach llegó a ser más reconocido en vida
que su padre.
De su obra más conocida, se encuentran los Conciertos de Brandeburgo, el
clave bien temperado, la Pasión de San Mateo, numerosas tocatas y fugas,
suites para violín, chelo; y el arte de la fuga, una de sus últimas
composiciones, que se publicó inacabada por la muerte de Bach.
Su estilo se puede dividir en tres períodos bien diferenciados. El primer
estilo, de aprendizaje y estudio, que sintetiza la música clásica europea.
Un segundo período de madurez, donde su obra era el culmen de la
música, y su tercera época, donde dominaba en Alemania la estética de la
ilustración. En esta época sus hijos y muchos críticos dicen que su música
está anticuada, es difícil y llena de adornos. Escribió en este período
grandes obras instrumentales muy densas, como más adelante haría
Beethoven.
Pese a esto, Bach escribió en todos los géneros y estilos de su época.
Era un hombre muy religioso, y toda su obra tiene referencias sacras. Una
de las más reconocidas, son sus quiasmos. Formas musicales haciendo
cruces en referencia a la Letra Griega Chi. Esta letra representa a cristo, y
por eso Bach los usaba en sus composiciones regularmente. Es más, las
letras Bach de su apellido, son un quiasmo musical, ya que corresponden a
las notas Si bemol, la, do y Si becuadro, notas que eran representadas con
la B A C y H.
Toda su música es considerada una de las más complejas y bellas que
existen en el repertorio clásico, es por ello que las agrupaciones más
prestigiosas de música siempre tienen a este peculiar compositor en su
repertorio.