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A Visão do Outro
Soberania e Cultura Política
Secretário-Geral
Embaixador Samuel Pinheiro Guimarães
ISBN 85-7631-004-X
CDU: 341.211(82)
Introdução .................................................................................. 9
Thereza Maria Machado Quintella
Sobre a Soberania
I . História
José Carlos Chiaramonte ........................................................... 23
La cuestión de la soberanía en la génesis y constitución del
Estado Argentino.
Affonso Carlos Marques dos Santos ........................................... 57
A construção do Estado Imperial no Brasil: soberania e
legitimidade.
II . Economia
Gilberto Dupas ........................................................................ 89
Identidade, Soberania e Integração sob o impacto das novas
tensões econômicas globais.
Roberto Frenkel ..................................................................... 125
El costo financiero de la soberanía.
III . Política
Francisco Delich ...................................................................... 143
Soberanías acotadas, legitimidades cuestionadas.
Comentários
Boris Fausto ........................................................................... 217
II . Dimensão Econômica
João Paulo de Almeida Magalhães................................................ 221
Condições para uma estratégia de desenvolvimento
conjunto do Brasil e Argentina.
Bernardo Kosacoff - Adrián Ramos ............................................. 245
El caso Argentino: La desorganización económica actual y la
identificación del sendero de crescimiento.
Comentários
Sergio Besserman Vianna ....................................................... 277
Felipe de la Balze ................................................................... 285
Mônica Baer ........................................................................... 291
IV . Política Externa
Comentários
Denilde Holzhacker ............................................................... 431
Carlos Perez Llana ................................................................ 434
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Boris Fausto
Professor aposentado do Departamento de Ciência Política da Universidade
de São Paulo e presidente do Conselho Acadêmico do Grupo de Análise de
Conjuntura Internacional (Gacint) da mesma Universidade. Entre suas obras
mais recentes, encontram-se “Negócios e ócios - Histórias da imigração”;
“História do Brasil” e “O pensamento autoritário brasileiro”.
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Felipe De la Balze
Académico, empresario y especialista en temas internacionales. Secretario
General del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI).
Ha publicado numerosos libros entre los que se incluyen recientemente, “El
Futuro del Mercosur. Entre la Retórica y el Realismo”, CARI, Buenos Aires;
“The Remaking of the Argentine Economy” con el Council of Foreign
Relations de Nueva York y ha sido coautor de “Paths to Regional Integration.
The Case of Mercosur”, Woodrow Wilson International Center for Scholars.
Autor, asimismo, de numerosos artículos sobre la inserción de la Argentina en
la economía y la política internacional, publicados en revistas internacionales
como Foreign Affairs (USA), Foreign Affairs (Español), Internationale Politik
(Alemania), Politica Internazionale (Italia) y Archivos del Presente (Argentina).
Profesor de Economía Internacional en el Instituto del Servicio Exterior del
Ministerio de Relaciones Exteriores, en el Curso Superior del Estado Mayor
Conjunto de las Fuerzas Armadas, en FLACSO (Fundación Latinoamericana
de Ciencias Sociales) y en la Universidad Torcuato Di Tella.
Francisco Delich
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José Nun
Director del Instituto de Altos Estudios Sociales de la Universidad Nacional
de General San Martín e Investigador Principal del CONICET. Entre sus
principales libros se cuentan: América Latina - La crisis hegemónica y el golpe
militar; La rebelión del coro - Ensayos sobre la racionalidad política y el
sentido común; Ensayos sobre la transición democrática en la Argentina (con
Juan C. Portantiero); Crisis económica y despidos en masa; Marginalidad y
exclusión social; Averiguación sobre algunos significados del peronismo;
Democracia: ¿gobierno del pueblo o gobierno de los políticos?; El gobierno
de Alfonsín y las corporaciones agrarias (con Mario Lattuada).
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Monica Baer
Sócia-Diretora da MB Associados, empresa de consultoria especializada em
análises macroeconômica e setorial, ex-Professora-Doutora do Instituto de
Economia da Universidade de Campinas/UNICAMP, foi pesquisadora do
CIDE e do CEBRAP, exerceu cargos junto às Secretarias de Planejamento de
São Paulo e do Rio de Janeiro e junto à Secretaria de Política Econômica do
Ministério da Fazenda, prestou serviços de consultoria a vários órgãos
internacionais e regionais como PNUD, ALADI, ILPES/CEPAL e SELA.
Tem vários artigos e trabalhos publicados sobre questões financeiras
internacionais e economia brasileira, destacando-se os livros, “Políticas globales
en el capitalismo”, “A internacionalização financeira no Brasil”, “Fundo
Monetário Internacional e Banco Mundial - Estratégias e políticas do poder
financeiro”, “Rumo perdido - A crise fiscal e financeira do Estado Brasileiro”.
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Renato Lessa
Roberto Frenkel
Miembro de la Task Force on Capital Market Liberalization, coordinada por
Joe Stiglitz y José Antonio Ocampo. Initiatives for Policy Dialogue, University
of Columbia, New York (desde mayo 2002). Director del Banco de la
Provincia de Buenos Aires (desde diciembre 1999). Investigador Titular en el
Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES), Argentina (desde 1977).
Director del Programa de Especialización en Mercado de Capitales. Convenio
UBA – MERVAL – Bolsa de Comercio de Buenos Aires (desde 1991).
Profesor de la Maestría en Economía, Facultad de Ciencias Económicas,
Universidad de Buenos Aires (desde 1993).
Roberto Russell
Director de la Maestría en Estudios Internacionales de la Universidad Torcuato
Di Tella y profesor del Instituto del Servicio Exterior de la Nación, Buenos
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Id., págs. 96 y 97.
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Y añade Maravall: «Tovar enumera esos miembros o estamentos, que reduce a ocho: los
religiosos, los magistrados y jueces -predomino de la ‘nobleza togada’, característica del gran
Estado administrativo-, los soldados, los nobles, los labradores, los comerciantes y mercaderes,
los oficiales liberales y mecánicos, y sobre todo, como principal ‘miembro’, la suprema potestad,
que causa la amistad, unión y obediencia en el cuerpo del Estado, es decir, que le da vida como
tal. ‘Sin ella no puede un cuerpo nombrarse vivo’. Id., pág. 100.
23
José Antonio Maravall, «Estudio Preliminar» a Francisco Martínez Marina, Discurso sobre el
origen de la monarquía y sobre la naturaleza del gobierno español, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1988, págs. 56 y 59. El Discurso... apareció en Madrid en 1813, fue reeditado
en el mismo año como prólogo a la obra mayor de Martínez Marina, Teoría de las Cortes, y se
reimprimió como Estudio Preliminar de esa misma obra en 1820. Id, pág. 7.
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24
Id., págs. 55, 57 y 66. Mientras Sieyès excluye del pueblo a los estamentos privilegiados,
Marina, que los critica duramente, no lo hace. De la antigua concepción estamental queda un
corporativismo territorial que lleva a Martínez Marina a sostener “que las provincias y los reinos
de que se compone la Monarquía, son parte de la asociación general, y si alguna de ellas faltara
en el momento del pacto o de su renovación no quedaría obligada en tanto que no ratificara el
acuerdo» Id., pág. 55.
25
José Cecilio del Valle, «Manifiesto a la nación guatemalteca, 20 de mayo de 1825», en Ídem,
Obra Escogida, Caracas, Ayacucho, 1982, pág. 29.
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R. Herr, ob. cit., pág. 369. A esta observación sobre la tradición política que se conforma en
España, el mismo autor agrega, respecto de la tradición eclesiástica española, que a la desconfianza
respecto de la política regalista reciente, suscitada por la resurrección de la Inquisición por
Floridablanca, añadían el disgusto por el dominio total del clero por el pueblo, como se había
instituido en Francia. De manera que «...en su lugar, añadieron a la receta de la nueva tradición
liberal una antigua sazón galicana, puesta recientemente a la venta en Pistoia, y llegaron al
convencimiento de que la Iglesia tenía también una verdadera constitución que confería a los
obispos la soberanía, con autoridad sobre los herejes. En sus mentes, la monarquía absoluta, la
Inquisición y la supremacía papal aparecían ahora reveladas en su forma verdadera: llagas
gangrenosas de formación reciente.” Id., lug. cit.
27
Respecto de esta confusión en la historiografía iberoamericana, véase nuestro trabajo «El
federalismo argentino en la primera mitad del siglo XIX» , ob. cit.
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30
Otto von Gierke, Teorías políticas de la Edad Media (Edición de F. W. Maitland), Madrid, Centro
de Estudios Constitucionales, 1995, págs. 116 y 117. Véanse diversas variantes de este tipo de
clasificación en la nota 64 de la página 116.
31
Jean Touchard, Historia de las ideas políticas, Madrid, Tecnos, 5a.ed., 1983, pág. 233.
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33
Andrés Bello, Derecho Internacional, I, Principios de Derecho Internacional y Escritos Complementarios,
Caracas, Ministerio de Educación, 1954, págs. 31 y 32. [Primera edición: Principios de Derecho de
Gentes, por A. B., Santiago de Chile, 1832; otras ediciones: Caracas, 1837; Bogotá, 1839; Madrid,
1843. Principios de Derecho Internacional, Segunda edición corregida y aumentada, Valparaíso,
1844]
34
Id., pág. 35. Bello sigue al pie de la letra a Vattel: [Emmer du] Vattel, Le Droit de Gens ou
Principes de la Loi Naturelle apliqués a la conduite e aux affaires des Nations et des Souverains, Nouvelle
Edition, Tome I, París, 1863 [la primera edición era de Leyden, 1758], págs. 123 y sigts. Sobre
la influencia de Vattel en Iberoamérica véase nuestro trabajo citado más arriba, “Fundamentos
iusnaturalistas de las independencias iberoamericanas...”
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«Reasunción de facultades por parte de las Provincias», Sala Capitular de Buenos Aires,
Febrero 12 de 1820, Registro Oficial de la República Argentina, Tomo I, 1810-1821, pág. 542.
41
«Manifiesto sobre las proposiciones que el gobierno ha presentado a la sanción de la H. J. sobre
el congreso general, y objetos a que deben contraerse los diputados para él, existentes en
Córdova, [1 de setiembre de 1821]», [Emilio Ravignani, comp.], Asambleas Constituyentes
Argentinas, 6 vols., Buenos Aires, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires,
Buenos Aires, 1937, vol. I, págs. 743 a 749. La cita «...reconcentrándose cada provincia
momentáneamente en sí misma...» en pág. 746.
42
Archivo de la H. Cámara de Diputados de la Provincia de Córdoba, Córdoba, 1912, Tomo I, 1820-
1825, “Sesión del 18 de Marzo de 1820", pág. 9 y sigts.
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45
Juan A. González Calderón, Derecho Constitucional Argentino, Historia, Teoría y Jurisprudencia de la
Constitución, Tomo I, Buenos Aires, Lajouane, 1930, págs. 187 y 189.
46
Carlos Ibarguren, Juan Manuel de Rosas, su tiempo, su vida, su drama, 2a. ed. [la primera es de
1929], Buenos Aires, Roldan, 1930, págs. 222 y 223.
47
Reunión secreta de la Junta de Representantes de la provincia de Buenos Aires, 22 de enero de
1831, en E. Ravignani [comp.], Relaciones Interprovinciales, La Liga del Litoral (1829-1833),
Documentos para la Historia Argentina, Tomo XVII, Buenos Aires, Peuser, 1922, pág. 83.
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49
Tomás Manuel de Anchorena a Rosas del 4 de diciembre de 1846, en Enrique M. Barba,
“Orígenes y crisis del federalismo argentino”, Unitarios y Federales, Revista de Historia, N° 2,
Buenos Aires, 1957, pág. 4. (Barba no aclara si el subrayado es suyo, aunque por lo del “(sic)”, que
no puede ser de Anchorena, se infiere que es suyo.)
47
LA ORGANIZACIÓN CONFEDERAL
50
[Pedro de Ángelis], «[Acusaciones formuladas en] El Lucero [contra el gobernador de Corrientes,
D. Pedro Ferré, al juzgar éste la conducta de Buenos Aires]» y [¿José María Roxas y Patrón?],
«[Defensa de la conducta de Buenos Aires, por] El Porteño [y ataque de la observada por Ferré]
[Año 1832]»,documentos reproducidos en E. Ravignani [comp.], Relaciones Interprovinciales..., ob.
cit., Apéndice Segundo, “Impresos Publicados por los Gobiernos de Buenos Aires y Corrientes
relativos a la Liga Litoral, /Colección / de / Documentos [publicados por el Gobierno de
Buenos Aires]”, pág. 133 y sigts. Las citas del texto la tomamos de las págs. 591 y 593 del
apéndice documental de nuestro libro Ciudades, provincias, Estados: Orígenes de la nación argentina
(1800-1846), Buenos Aires, Ariel, 1997.
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CONSIDERACIONES FINALES
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Véase, al respecto, [Emmer du] Vattel, Le Droit de Gens..., Tomo I. No sólo, como ya observa-
mos, Vattel fue ampliamente utilizado en Iberoamérica luego de las independencias, sino también
en los Estados Unidos, donde además de circular las ediciones europeas se lo editó en 1796:
Emerich de Vattel, The Law of Nations: or, Principles of the Law of Nature..., etc., [...] First
American Edition, corrected and revised from the latest London edition, New York, 1796 (dato
tomado de: “American Bibliography by Charles Evans, A Chronological Dictionary of all Books,
Pamphlets adn Peridodical Publicatios Printed in th United States of America”, [de 1769 a
1820], Vol. 11, 1796-1797, New York, 1942.)
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57
Sobre esa alternativa y su incidencia en ese conflicto, véase J. C. Chiaramonte y P. Buchbinder,
ob. cit.
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57
2
Francisco Adolfo de Varnhagen (Visconde de Porto-Seguro). História da Independência do Brasil
(até ao reconhecimento pela antiga metrópole, compreendendo, separadamente, a dos sucessos ocorridos em
algumas províncias até essa data). Rio de Janeiro: Imprensa Nacional, 1917 (Tomo LXXIX da
Revista do Instituto Histórico e Geográfico Brasileiro), p.32.
3
Georges Duby. A História Continua. Rio de Janeiro: Jorge Zahar ed./Ed. da UFRJ, 1993, p.81.
58
4
Georges Burdeau. L’État. Paris: Seuil, 1970, p.14.
5
Caio Prado Jr. Formação do Brasil Contemporâneo. Sào Paulo: Livraria Martins Editora, 1942,
p.364.
6
Paulo Mercadante. A Consciência Conservadora no Brasil. Rio de Janeiro, Ed. Saga, 1965, p.57.
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10
Novais, F. A., op.cit., p. 117.
11
Graça Silva Dias. “Ruptura cultural e ruptura política nas origens do liberalismo” in O
Liberalismo na Península Ibérica na primeira metade do século XIX (org. por Miriam Halpern Pereira).
Lisboa: Sá da Costa Editora, 1982, 2o. vol., p. 220.
12
Manuel de Oliveira Lima. Dom João VI no Brasil. Rio de Janeiro: José Olympio Ed., 1945, 1o.
vol., p. 187.
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Tratei desta questão, com alguns detalhes, no livro No Rascunho da Nação, vide cap:. 2.
27
Ofício do Conde de Resende para o Desembargador (e poeta) Antônio Diniz da Cruz e Silva.
Rio de Janeiro, 8 de dezembro de 1794. Autos da Devassa ordenada pelo vice-rei Conde de
Resende contra os membros da Sociedade Literária do Rio de Janeiro em 1794. Rio de Janeiro,
Anais da Biblioteca Nacional , 1941, vol. 61, p. 215. A devassa e a trama envolvida foi tratada,
por nós, no cap. 3 de No Rascunho da Nação , que recebeu o título “Procedendo à Devassa”, p. 77-
111.
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Graça e J. S. da Silva Dias, op. Cit., vol. 1, p. 340.
29
Ofício do Intendente Geral da Polícia, Pina Manique, para o marquês de Ponte de Lima -
Lisboa, 8 de agosto de 1799. Apud Simão José da Luz Soriano. História da guerra Civil e do
Estabelecimento do Governo Parlamentar em Portugal . Lisboa: 1866-1890, t. 3, p.70.
30
A. C. Marques dos Santos, op.cit., p. 100-107.
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D. Rodrigo de Sousa Coutinho. Biblioteca Nacional do Rio de Janeiro. Seção de Manuscritos:
Coleção Linhares: lata 2, apud Oliveira Lima, op.cit., p.54.
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Oliveira Lima, op. cit., p. 553.
42
Silvestre Pinheiro Ferreira. “Memórias Políticas sobre os Abusos Gerais e Modo de os Reformar
e Prevenir a Revolução Popular Redigidas por Ordem do Príncipe Regente no Rio de Janeiro em
1814 e 1815. Idéias Políticas. Rio de Janeiro, PUC/CFC/Ed. Documentário, 1976, p. 20-31.
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BNRJ, idem.
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Arquivo Nacional do Rio de Janeiro. Caixa 740 - pac.4 - doc.3
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Entre os vários textos que M. De Pradt escreveu sobre as colônias da América destaca-se Des
Trois Derniers Mois de L’Amérique M’’eridionale et du Brésil. Paris: F.Bechet, Libraire, 2e. ed.,
1817.
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ANRJ, idem.
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“Discurso Histórico Recitado na Seção Pública de 24 de junho de 1819 da Academia Real de
Sciencias de Lisboa pelo Secretário José Bonifácio de Andrada e Silva”. In Obras Científicas,
Políticas e Sociais. São Paulo, 1963, vol.I, p.445.
53
BNRJ. Seção de Manuscritos. Coleção José Bonifácio: I - 4, 35.
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ANRJ. Cod. 807, vol. 5, fls. 170-171.
55
Carta de José Bonifácio de Andrada e Silva. Apud Hélio Vianna. “Correspondência de José
Bonifácio (1810-1820). Revista de História. Vol. 27. São Paulo, USP, 1963.
56
B.N.R.J. Seção de Manuscritos. Coleção José Bonifácio - I - 4,35.
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A expressão é usada aqui no sentido atribuído por Benedict Anderson em Nação e Consciência
Nacional. São Paulo, Ática, 1989, p.13-16.
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Gilberto Dupas
INTRODUÇÃO
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Roberto Frenkel
I. INTRODUCCIÓN
1
El borrador de este artículo fue presentado en la conferencia Brasil-Argentina - A Visão do
Outro. Sobre a Soberanía. La versión aquí presentada fue escrita a pricipios de 2001 e incluí-
da como primera sección del artículo: Roberto Frenkel, “Reflexiones sobre el financiamiento
del desarrollo”, Revista de la CEPAL. Santiago de Chile, agosto de 2001.
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A. El riesgo de soberanía
La frontera nacional define una jurisdicción política y legal. Den-
tro de esta jurisdicción rige la soberanía del gobierno y otras instituciones
del estado nacional. En determinadas circunstancias, las autoridades
de una nación pueden decidir o avalar el incumplimiento de ciertos
contratos. Este aspecto de la soberanía limita la capacidad de un agen-
te económico extranjero de hacer cumplir el contrato que lo involucra.
Este es un riesgo de soberanía irreductible. No hay razones para suponer
a priori que el valor de este riesgo resulte muy significativo, pero hay
una tensión entre el proceso de globalización financiera y la
institucionalidad de los estados nacionales que puede resultar en
situaciones de integración financiera segmentada.
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No ignoro que hubo perdedores (por ejemplo los tres millones de inmigrantes que retornaron
entre 1880 y 1930, sin poder establecerse). Quiero decir que el número de los ganadores fue tal,
que definieron la imagen de la sociedad, las expectativas y los comportamientos.
5
José Luis Romero, Latinoamérica, las ciudades y las ideas. 2da ed., Buenos Aires, Siglo Veintiuno
Editores, 2001.
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Susana Belmartino, “Transformaciones Internas al Sector Salud: la ruptura del pacto corporativo”.
En Desarrollo Económico. N° 137, Buenos Aires, 1995.
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Guillermo O‘Donnell dejó un vívido testimonio de esto al caracterizar a los diversos kappos
que encontró en Buenos Aires en los años del Proceso. Véase su “Democracia en la Argentina.
Micro y macro”. En Oszlak, Oscar (comp.), ”Proceso”, crisis y transición democrática. Buenos Aires,
CEAL, 1984.
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22
Con un destello de realismo, en un texto enajenado, declaraba preferir una derrota, por sus
virtudes regenerativas. Manuel Gálvez, El diario de Gabriel Quiroga. Opiniones sobre la vida argenti-
na. Estudio preliminar de María Teresa Gramuglio. Colección Nueva Dimensión Argentina,
Buenos Aires, Taurus, 2001.
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Aquí se impone un caveat. El pozo de la crisis no es el lugar más adecuado para evaluar estos
cambios. Nunca lo es: cualquiera que frecuente la historia sabe que quienes viven una crisis
perciben con claridad lo que ésta destruye, y rara vez lo nuevo que empieza a emerger. A mí me
basta recordar los ajustes, a veces bastante fuertes, que he debido hacer a mis “balances” a lo
largo de los últimos diez años.
24
Distó de ser total: se salvaron los industrias automotrices, y unas cuantas industrias fantasma,
en provincias que lograron conservar regímenes de promoción gracias a la “anestesia” del perío-
do de Menem.
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INTRODUÇÃO
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MUDANÇAS RADICAIS
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A PERSISTÊNCIA DO CLIENTELISMO
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ELITE E POVO
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PARA ONDE?
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No curso da exposição as referências e análises se basearão, algumas vezes, somente na situação
brasileira sobre a qual dispomos de mais informações. Na maioria das vezes ,contudo, as
observações e conclusões propostas valem igualmente para a Argentina. Quando se falar do
MERCOSUL as referências serão apenas a esses dois países, seja pelo seu maior peso relativo,
seja por constituírem eles o objeto principal do presente texto. Assinale –se, finalmente. Que
muitas das idéias aqui expostas já foram por nós desenvolvidas em outros textos pelo que
preferimos , em vez de onerar o trabalho com citações e referência bibliográficas, remeter o
leitor diretamente aos textos pertinentes.
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Esse faro foi amplamente reconhecido tanto na literatura brasileira como internacional, con-
forme se mostra em Magalhães ( 2000)
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Quaisquer medidas protecionistas encontrarão resistência da OMC. Hoje já se generaliza,
todavia, a opinião de que as regras destas, como as do FMI, se inspiram mais na conveniência dos
desenvolvidos do que nas necessidades das economias retardatárias. Deve –se, assim, esperar
abrandamento dessas regras diante da pressão dos prejudicados. . Sobre o protecionismo como
instrumento de desenvolvimento veja –se Magalhães (2001 )
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As integrações podem ser chamadas de políticas de mercado interno porque seu objetivo é
permitir a livre circulação de mercadorias e fatores de produção dentro de dado espaço geográ-
fico. Exatamente como acontece no interior de um mesmo país.
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CONSIDERAÇÕES FINAIS
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A exceção foram as medidas protecionistas adotadas sempre, sem qualquer hesitação, sempre
que requeridas pelos interesses do país.
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José Nun
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Op. cit., pág. 5
6
Para un extenso desarrollo del tema, ver mi libro Democracia: ¿gobierno del pueblo o gobierno de los
políticos? (Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 2000). Según Robert Dahl, por ejemplo,
todos los requisitos de la democracia se condensan en la exigencia de un principio fuerte de igualdad.
Como solía recordar Schumpeter: “si un físico observa que el mismo mecanismo funciona de un
modo diferente en épocas distintas y en lugares distintos, concluye que su funcionamiento depende
de condiciones extrañas al mismo. Nosotros no podemos sino llegar a la misma conclusión por lo
que se refiere al sistema democrático”.
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7
Ver mi artículo “El enigma argentino”, en Punto de Vista, 71, diciembre 2001, pp. 1-5.
302
2.
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304
305
13
Para apreciar esta cuestión en toda su magnitud, se estima que más de dos tercios del total de
la deuda externa pública de hoy deriva de los 48.000 millones de dólares de deuda que contrajo
la última dictadura militar, ajustados por la tasa de interés. Ver Jorge Gaggero, FMI/Argentina: el
mejor alumno en la picota (Buenos Aires, 2/4/2002, monografía inédita).
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17
“Teléfonos, electricidad, agua y algunos servicios de transporte pasaron a ser monopolios
privados en vez de públicos; sus tarifas, en contratos de largo plazo, subieron según la inflación
de los Estados Unidos, aun cuando en la Argentina caían los precios. Y las tasas de interés
siguieron siendo altas. Los bancos prestaban dólares al 25 %, por más que, en teoría, el riesgo era
bajo”. Esta síntesis (válida aunque moderada) la tomo de una publicación tan conservadora
como The Economist, 2/3/2002, lanzada a explicar el derrumbe argentino. Para análisis más
extensos y rigurosos de este tema crucial, ver los Documentos de Trabajo producidos desde 1996
por el Proyecto Privatización y Regulación en la Economía Argentina, Área de Economía y
Tecnología, FLACSO/SECYT/CONICET, Buenos Aires.
18
Cf. Aldo Ferrer, “Los ciclos económicos en la Argentina: del modelo primario exportador al
sistema de hegemonía financiera” (Buenos Aires, Academia Nacional de Ciencias Económicas,
1995).
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19
“Los objetivos referidos al nivel de la actividad económica y el empleo quedan subordinados
al reciclaje de fondos externos necesarios para complementar los recursos propios destinados al
servicio de la deuda”, Aldo Ferrer, op.cit., pág. 9. Acerca de los conflictos entre las cúpulas
económicas, particularmente a partir de la crisis de 1995, ver especialmente Eduardo Basualdo,
Concentración y centralización del capital en la Argentina durante la década del noventa (Buenos Aires,
Universidad Nacional de Quilmes, 2000).
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21
Lester Thurow, “Wages and the Service Sector”, en Ray Marshall, comp., Restoring Broadly
Shared Prosperity (Austin, University of Texas, 1997)
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28
He desarrollado estas cuestiones en La rebelión del coro (Buenos Aires, Nueva Visión, 1989) y
más recientemente, en relación a la crisis argentina actual, en “Variaciones sobre un tema de
Hegel”, en J. E. Burucúa y otros, La ética del compromiso (Buenos Aires, Altamira/Fundación
OSDE, 2002)
29
“La Argentina es un Estado debilucho, que está al borde de la anomia, atravesando una
situación riesgosa que se agudiza porque tenemos instituciones débiles y una sociedad desintegrada,
propensa a caer en el fastidio”. Viene de declararlo el propio ministro de Justicia actual, Jorge
Vanossi, en La Nación, 17/3/2002, pág. 11
30
Los datos son inéditos y provienen de dos fuentes distintas. Por una parte, las encuestas
nacionales realizadas en octubre de 2001 y febrero de 2002 por PNUD para el “Informe sobre
la democracia en Argentina” del PNUD (en adelante, PNUD). Por la otra, la encuesta nacional
efectuada en febrero de 2002 por IBOPE OPSM para el “Monitor de tendencias económicas y
sociales” (en adelante, IBOPE).
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En febrero de 2002, sólo un 20 % de los entrevistados dijo haber asistido a una reunión
pública vecinal o a una marcha de protesta en los últimos dos meses (PNUD). Es claro que se
trata de datos nacionales y no reflejan en toda su intensidad los niveles de protesta que se
registran en los principales centros urbanos, especialmente la Capital Federal y el Gran Buenos
Aires. Otro indicador no desdeñable del descontento reinante es el hecho de que en las elecciones
legislativas de octubre de 2001, un 40 % de los ciudadanos o no votó o emitió un voto nulo o
en blanco.
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32
Debo subrayar que fue así aquí pues, en otros lugares – de larga tradición republicana,
instituciones consolidadas, etc. – los efectos no resultaron igualmente devastadores.
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40
Conviene aclarar que no harían falta ajustes del tipo que se exigen pero sí otros que permitiesen
ubicar al país en un sendero genuino y autosostenido de desarrollo con equidad.
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41
Algunos malos recuerdos históricos no son fáciles de olvidar, por distintas que sean las épocas
y las circunstancias. Escribe Rita Thalmann en La république de Weimar (París, P.U.F., 1986), pág.
122: “La democracia a la occidental que querían promover los republicanos de Weimar exigía
una integración de capas sociales cada vez más amplias a través de su participación creciente en
los beneficios del sistema (...) En definitiva, no podía haber democracia en Alemania sin una
reforma profunda de las estructuras de la sociedad”. Ojalá pudieran servir todavía a modo de
alerta éste y otros ejemplos parecidos.
328
*
Esta é uma versão modificada do trabalho apresentado na sessão “O universo político: o
processo democrático”, Seminário Brasil – Argentina: a visão do outro, organizado pelo
Instituto Rio Branco, em abril, 2002. Ela beneficiou-se da proveitosa discussão aí realizada.
Agradeço, particularmente, os comentários sempre argutos e pertinentes de Renato Lessa.
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3
É o caso das mudanças nos procedimentos de emenda ao Orçamento da União que ampliaram
significativamente o espaço das emendas de bancada, reduziram a iniciativa individual dos
parlamentares e procuraram estreitar as oportunidades de corrupção.
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CONCLUSÕES
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Roberto Russell y
Juan Gabriel Tokatlian
I. INTRODUCCIÓN
1
Kenneth Waltz, Theory of International Politics, Random House, Nueva York, 1979.
2
Stephen M. Walt, The Origins of Alliances, Cornell University Press, Ithaca, 1987.
3
Ibid, p. 25.
371
372
9
Las normas de una cultura se “internalizan” en distintos grados. A más bajo grado de
internalización, más probabilidades de que esa cultura pueda modificarse. Véase, Alexander
Wendt, op. cit., p. 250.
10
La cultura de la amistad requiere que los estados cumplan tanto la regla de la no violencia como
la de la mutua ayuda. Ver, Alexander Wendt, op. cit., p. 298/9.
373
374
13
La imagen del “otro” se vincula a la imagen propia. En este caso, siguiendo a Philippe Le
Prestre, lo crucial es observar el entrecruzamiento entre lo que el sistema internacional constriñe
y lo que facilita, por un lado, y lo que la identidad nacional impulsa y tolera, por el otro. Como
resulta natural un fuerte disenso sobre la identidad nacional dificulta la concreción de los
intereses nacionales; lo cual afecta la identificación del rol de un país en el mundo y,
consecuentemente, la práctica de su política exterior. Véase, Philippe G. Le Prestre, “Autor!
Autor! Defining Foreign Policy Roles after the Cold War”, en Philippe G. Le Prestre (ed.), Role
Quests in the Post-Cold War Era: Foreign Policies in Transition, McGill-Queen’s University Press,
Montreal, 1997.
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380
25
Según Camilión, “cuando esa frase se dijo, lo que unía a Brasil y a la Argentina era una
dependencia absoluta dentro del esquema clásico de la división internacional del trabajo”. Oscar
Camilión, “Relaciones argentino-brasileñas”, en Estrategia, n° 21, Marzo-Abril 1973, p. 48.
26
Lucio Moreno Quintana, La diplomacia de Irigoyen, Ediciones Inca, La Plata, 1928, p. 397.
27
Ver, José Paradiso, op. cit., cap. X.
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387
41
El tema principal que dividió a los dos países fue el de la utilización del potencial energético
de los ríos de uso compartido - más específicamente, la disputa sobre la central hidroeléctrica
que terminaría construyéndose en Itaipú - y dio lugar a un áspero enfrentamiento que trascendió
el plano bilateral. Más aún, el tercer gobierno peronista (1973-1976) decidió el ingreso de la
Argentina al Movimiento No Alineados en septiembre de 1973 y los militares que condujeron el
Proceso se quedaron en ese foro, entre otras razones de importancia (además de la búsqueda de
apoyo a la cuestión Malvinas) por considerar que ofrecía un ámbito importante para defender la
tesis argentina sustentada en la necesidad de acudir a la “consulta previa” entre países que
comparten un río de curso sucesivo con el objeto de evitar perjuicios a los de aguas abajo. Por su
parte, el Brasil consideraba que la Argentina utilizaba su posición como un pretexto para impedir
la realización de obras hidroeléctricas que eran vitales para su desarrollo económico y puso en
práctica una política de hechos consumados.
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42
Ver, por ejemplo, Nicolás Boscovich, “Análisis comparativo: Argentina y Brasil en el espacio
geoeconómico del ‘Cono Sur’”, en Estrategia, N° 31/2, Noviembre-Diciembre 1974/ Enero-
Febrero 1975 y Florencio Díaz Loza, “Geopolítica del Brasil”, en Estrategia, n° 29, Julio-Agosto
1974.
43
Dirección de Estrategia, op. cit., p. 52.
44
Ibid, p. 52.
45
Acerca del papel de las alianzas para restringir a los socios ver, Paul W. Schroeder, “Alliances,
1815-1945: Weapons of Power and Tools of Management”, en Klaus Knorr (ed.) Historical
Dimensions of National Security Problems, University Press of Kansas, Lawrence, 1975; George
Liska, Nations in Alliance: The Limits of Interdependence, The Johns Hopkins University Press,
Baltimore, 1967 y George Liska, Alliances and the Third World, The Johns Hopkins University
Press, Baltimore, 1968.
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V. CONCLUSIONES
72
Julio Cesar Carasales, De rivales a socios: El proceso de cooperación nuclear entre Argentina y Brasil,
Grupo Editor Latinoamericano, Buenos Aires, 1997, p. 35
400
73
De acuerdo a Phillip Kelly, un balance de la rivalidad entre la Argentina y el Brasil hasta los
ochenta muestra que la misma “ha obstaculizado la integración del Cono Sur, ha creado
posibilidades para el desarrollo serio de armas nucleares nativas, ha puesto en peligro el acuerdo
pacífico de las disputas en la región, ha intensificado la competencia entre los estados en el Cono
Sur por el control de la Antártida y ha evitado que Brasil se distanciara de Estados Unidos”
(subrayado del autor). Philip Kelly, “Temas tradicionales de la geopolítica brasileña y el futuro de
la geopolítica en el Cono Sur”, en Philip Kelly y Jack Child (eds.), Geopolítica del Cono Sur y de la
Antártida, Editorial Pleamar, Buenos Aires, 1990, p. 120.
74
La evolución ascendente del Brasil hizo más notoria para la Argentina su declinación que
reunió elementos materiales e identitarios. La Argentina no sólo fue perdiendo su posición
relativa en la estructura del poder mundial y sus atributos tangibles de poder, sino que fue
extraviando su identificación propia y su proyección internacional.
75
Como indica Jervis, “when balance of power assumptions no longer hold, the incentives shift so that
anarchy and the security dilemma no longer provide a powerful stimulus to undesired conflict”. Robert Jervis,
“From Balance to Concert: A Study of International Security Cooperation”, en Kenneth A. Oye
(ed.), Cooperation under Anarchy, Princeton University Press, Princeton, 1986, p. 79.
401
76
Conviene indicar que la superación de dilemas de seguridad semejantes posibilitó un avance
significativo de la integración. Por ejemplo, la derrota de Alemania en la Segunda Guerra
Mundial permitió que el histórico dilema de seguridad franco-alemán se superara y que se diera
inicio a un proceso de acercamiento y cooperación que facilitó la concreción posterior de la
Comunidad Europea. La implosión de la URSS y el fin de los “socialismos reales” en Europa —
que eliminaron de la noche a la mañana el dilema de seguridad entre Europa occidental y Europa
oriental— han contribuido a un avance cada vez más elocuente de la integración entre la Unión
Europea y las naciones de Europa del este. Asimismo, la inexistencia de un dilema de seguridad
entre Canadá y los Estados Unidos ha favorecido a una mayor integración formal e informal
entre los dos países. Inversamente la continuidad de dilemas de seguridad zonales llevó a la
guerra a Irak e Irán durante los ochenta y hoy tiene a India y Pakistán al borde de una confrontación
militar que podría involucrar el uso de armas nucleares. En cierta forma, la permanencia de un
dilema de seguridad entre palestinos e israelíes augura una continuación del conflicto entre estos
dos pueblos. A su vez, la variedad de dilemas de seguridad en Asia permite suponer la persistencia
de las tensiones en el área y la dificultad para asegurar una cooperación e integración efectivas.
77
Ver, Felipe de la Balze, “La política exterior...”op.cit.
402
403
81
Para trabajos más recientes que apoyan la visión del Brasil como amigo véase, José María
Llados y Samuel Pinheiro Guimaraes (eds.), Perspectivas Brasil y Argentina, IPRI/CARI, Brasilia,
1999, José Paradiso y Gustavo Adiolfo Smith, “¿Será posible una política exterior común?”, en
Archivos del Presente, Año 5, no 19, Enero-Marzo 2000 y Fundacao Alexandre De Gusmao, A
visao do outro, FUNAG, Brasilia, 2000.
82
Como bien señala Pllippe Schmitter las lecciones de una nueva modalidad de cooperación en
el Cono Sur no permiten afirmar concluyentemente que la democratización incrementó de
modo elocuente la interdependencia y que ello selló de manera definitiva la integración: “all we
can say with certainty is that the demise of despotic governments has produced a significant decline in the
likelihood of recourse to interstate violence and an unprecedented increase in the volume of interstate
agreement”. Philippe C. Schmitter, “Change in Regime Type and Progress in International
Relations”, en Emanuel Adler y Beverly Crawford (eds.), Progress in Postwar International Relations,
Columbia University Press, New York, 1991, p. 118.
83
Siempre es bueno recordar que para que la Argentina y el Brasil alcancen una genuina integración
se necesita lo que Deutsch llamó las “condiciones de fondo” para entender si ese proceso será
exitoso o resultará un fracaso. Dichas condiciones son: “1) relevancia mutua de los países, 2)
compatibilidad de valores y ciertas gratificaciones conjuntas reales, 3) comprensión mutua, y 4)
cierto grado de identidad o lealtad común generalizada”. Sin duda, esas condiciones están siendo
puestas a prueba para argentinos y brasileños por igual en este tormentoso comienzo de un nuevo
siglo. Karl W. Deutsch, Análisis de las relaciones internacionales, Ediciones Gernika, México D. F.,
1990, p. 366.
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Monica Hirst
Maria Regina Soares de Lima
ABERTURA
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O ESPAÇO DO ‘OUTRO’
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9
Vários autores têm abordado esta questão, destacando-se Joseph Grieco, Walter Mattli, Roberto
Bouzas eVer Grieco, Joseph “Systemic Sources of Variation in Regional Institutionalization in
Western Europe, East Asia and the Americas”, in Mansfield E. &Milner,H The Political Economy
of Regionalism, Columbia Univ. Press, NY, 1997; Mattli,Walter The Logic of Regional Integration,
Cambridge Univ. Press, 1999; Bouzas, RobertoR. Korzeniewics and “El Mercosur Diez Años
Después: ¿Proceso de Aprendizaje o Déjà Vù?”, Desarrollo Económico Núm 162, julio-septiembre
2001.
10
Ver Hakin, Peter “Dos formas de ser Global”, Foreign Affairs (en Espanol), Primavera 2001,
vol.2, n.1. e Kissinger,Henry “EE.UU y Brasil: las potencias sean unidas”.
http\\ar.clarin.com\diario\2001-05-21.
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11
Cf. Maria Regina Soares de Lima, Instituições Democráticas e Política Exterior, Contexto Internaci-
onal, vol. 22, 2000
419
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14
Neste particular, destaca-se a decisão conjunta da Conferência Nacional dos Bispos (CNBB),
da Central Única dos Trabalhadores (CUT) e outras instituições representativas da sociedade
civil de convocarem um plebiscito nacional sobre a ALCA para setembro de 2002.
15
As duas propostas de emenda constitucional são a PEC 345/01 de autoria do Deputado
Aloizio Mercadante do PT e a PEC 52/01, de autoria do Senador Roberto Requião do PMDB.
Ver, João Augusto Castro Neves, op.cit. p. 63-64.
16
Vigevani et alii “Democracia e Atores Políticos no Mercosul”, in Sierra (2001).
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Observações finais
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