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24 DE ENERO DE 2019
DAVID DE HARO GONZÁLEZ
2º BACH CP
Índice
Biografía ....................................................................................................................... 1, 2
Influencia ...................................................................................................................... 3
Obras
La carga de los mamelucos ........................................................................................... 4
Los fusilamientos del 3 de Mayo .................................................................................. 5
Bibliografía ....................................................................................................................... 6
Goya fue el artista europeo más importante de su tiempo y el que ejerció mayor
influencia en la evolución posterior de la pintura, ya que sus últimas obras se consideran
precursoras del impresionismo.
Goya trabajó como retratista no sólo para la familia real, sino también para la
aristocracia madrileña, y de hecho entre estos retratos se encuentran algunas de sus
obras más valoradas, como La condesa de Chinchón o las famosas La maja vestida y La
maja desnuda; sobre estas últimas dice la leyenda popular que representan a la duquesa
de Alba, quien habría mantenido con el artista una relación de tintes escandalosos. En
los retratos de Goya destaca, en líneas generales, su atento estudio de las posturas y las
expresiones, así como los contrastes de luces y sombras que realzan la figura del
protagonista.
Hacia 1799, el pintor concluyó una de sus grandes series de grabados, Los caprichos,
ochenta y dos aguafuertes que constituyen una crítica feroz de la sociedad civil y
religiosa de la época. En esta serie aparecen ya algunos personajes extraños y macabros
que acabarán protagonizando obras posteriores del maestro. Por esos mismos años,
Goya se ocupó de la decoración al fresco de la ermita de San Antonio de la Florida,
donde realizó una obra de gran impacto escenográfico.
En 1808, la invasión de España por las tropas napoleónicas colocó al artista en una
situación delicada, ya que mantuvo su puesto de pintor de corte con José Bonaparte.
Pese a todo, no se privó de plasmar los horrores de la guerra en obras como El 2 de
mayo y Los fusilamientos del 3 de mayo, que reflejan los dramáticos acontecimientos
de aquellas fechas en Madrid. Además, en los sesenta y seis grabados de Los desastres
de la guerra (1810-1814), dio testimonio de las atrocidades cometidas por los dos
bandos y acentuó visualmente la crueldad de la guerra como protesta contra ella,
lanzada a la posteridad desde la impotencia.
Por haber trabajado para José Bonaparte, el artista cayó en desgracia tras la restauración
de Fernando VII, y en 1815 se retiró de la vida pública. En 1819 experimentó una
recaída en la misteriosa enfermedad que en 1792 lo había dejado completamente sordo.
Ello, unido a su nueva vida en soledad en la Quinta del Sordo, casa solariega que había
comprado poco antes, debió de contribuir a la exacerbación imaginativa de que el artista
dio muestras en la decoración de su nueva vivienda: catorce murales de gran tamaño
con predominio de los tonos marrones, grises y negros, sobre temas macabros y
terroríficos.
Estas obras, conocidas en la actualidad como Pinturas negras, han contribuido con el
paso de los años a la consolidación del reconocimiento del genio de Goya, tanto por su
originalidad temática como por su técnica pictórica de pincelada amplia y suelta. El
pintor se trasladó en 1824 a Burdeos, donde residió hasta su muerte sin dejar de cultivar
la pintura y el grabado. La lechera de Burdeos y algunos retratos ilustran la evolución
del genio hacia una concepción de los valores plásticos que anuncia el impresionismo.
Su obra, fecunda y versátil, de gran libertad técnica y brillantez de ejecución, no ha
dejado de acrecentar la importancia de su figura hasta nuestros días.
La pintura de Goya es fiel reflejo de sus crisis individuales y de las colectivas que
afectan al pintor y a la sociedad.
No obstante, ese Goya que va más allá del tenebrismo de Alessandro Magnasco, del
misticismo de William Blake o del demonismo de Johann Heinrich Füssli, ese Goya que
no perece con el paso del tiempo y cuya obra sigue sorprendiendo en nuestros días por
sus inagotables aportaciones es, ante todo, un crítico precursor de las formas de ver el
mundo en la época contemporánea.
Por otra parte, la visión trágica y tenebrosa de la condición humana plasmada en las
llamadas "Pinturas negras" de Goya dio origen a la importante tradición expresionista
en pintura. La pincelada libre y emocional de obras como El aquelarre y Saturno
devorando a un hijo fue recuperada por el pintor belga James Ensor y por los
expresionistas alemanes a principios del siglo XX. La pincelada gestual, que Goya
utilizó para expresar estados emocionales, también la emplearon otros artistas de dicha
centuria: fue un recurso con el que experimentó el pintor español Antonio Saura y con
el que trabajó la generación del «retorno a la pintura», cuyos principales exponentes
fueron el estadounidense Julian Schnabel, el alemán Georg Baselitz y el italiano
Francesco Clemente.
El interés por las imágenes del subconsciente y por los aspectos oscuros de la
existencia, evidente en algunas obras de Goya, prefiguró los movimientos artísticos
modernos que otorgaron gran importancia a la actividad psíquica irracional. Así, pues,
tendencias creativas como el simbolismo o el surrealismo, que centraron su interés en
los procesos mentales en los que la razón ya no ejerce control, tuvieron su precedente en
las obras del pintor español.
La carga de los mamelucos.
Sobre el suelo yacen soldados o patriotas con los brazos abiertos composición que luego
recogerá en los fusilamientos del 3 de mayo y en los Desastres de la guerra.
Los escorzos, que dan sensación de profundidad, las líneas curvas y las diagonales
transmiten movimiento. Las expresiones son violentas y brutales. Los colores muy
contrastados están aplicados con pincelada suelta.
Al fondo, las figuras de los madrileños, con los ojos llenos de rabia acuchillan con sus
armas blancas a jinetes y caballos mientras los franceses rechazan el ataque e intentan
huir con los ojos desorbitados incluidos los propios caballos.En resumen gran violencia.
En definitiva, las grandes aportaciones o claves del cuadro son el movimiento y la fuerte
expresividad manifiesta en rostros desencajados e incluso en los caballos, los cuales
parecen querer huir.
Los fusilamientos del 3 de Mayo.
Al día siguiente del levantamiento contra las tropas de Napoleón, los patriotas
sublevados fueron fusilados por las tropas francesas.
El protagonista de la composición es la masa anónima. A la izquierda, destacando sobre
el fondo de la montaña de Príncipe Pío y las casas que se recortan en el cielo nocturno,
vemos a un grupo de hombres arrodillados que van a ser fusilados, mientras otros
esperan su castigo. Los cadáveres de los que acaban de ser ejecutados se encuentran
amontonados en el suelo, ensangrentado. Al fondo aparece también una mujer sentada
con un niño en los brazos. Son civiles y humildes, según aparentan sus vestimentas. Los
condenados muestran diversas actitudes ante su inminente muerte: rezan, se tapan el
rostro, se muerden los puños, se desesperan, están horrorizados. El personaje principal,
con camisa blanca, valiente y digno, mira a los franceses y levanta los brazos en cruz. A
la derecha, los soldados napoleónicos, anónimos, sin rostro, colocados en fila, levantan
los fusiles para disparar. Es una escena brutal y patética.
Hay bruscos contrastes lumínicos. Goya utiliza el tenebrismo para conseguir un efecto
dramático. Sobre un fondo oscuro, el foco de luz único proviene del farol, que ilumina
fuertemente la zona de los patriotas, mientras los soldados franceses aparecen en
penumbra, dibujándose sus sombras en el suelo. La luz separa simbólicamente las dos
zonas.
Tal vez este cuadro sea el máximo referente de denuncia frente a la guerra que se ha
pintado. Es una obra definitiva y contundente. Es imposible comprender tanta violencia.
Sobrecoge contemplar la trágica escena de los fusilamientos llevados por los franceses
el tres de mayo de 1808 contra los patriotas españoles sublevados contra el invasor.
Hay un fuerte contraste entre, por un lado, la máquina de matar de los franceses, que,
para deshumanizarlos todavía más, Goya no nos permite ver sus rostros. Y por otro,
frente al pelotón de fusilamiento, las pobres gentes se enfrentan a su castigo, unos no
pueden sostenerse en pie, otros se tapan los ojos para no ver; sin embargo, aparece un
valiente con los brazos en alto, vestido con una blanca camisa y fuertemente iluminado
desafiando a los soldados franceses.
Bibliografía.
https://temasycomentariosartepaeg.blogspot.com/p/blog-page_908.html
http://www.empresas.mundor.com/historiadelartepazromero/web/Historia%20del%20ar
te.htm/13.arteneoclasicoyromantico/13.3.goyasegundaparte.htm
https://www.biografiasyvidas.com/biografia/g/goya.htm
https://www.biografiasyvidas.com/monografia/goya/