AUTOFALSIFICACION POR DISIMULO

1.3.- Variación de la escritura(9).

Las variaciones de la escritura son los diversos signos disímiles
al modelo caligráfico que el escribiente deja en la escritura, como:
.Permanentes, cuando las variaciones son constantes en la grafía
genuina de una misma persona y tiene mucha importancia para la
identificación escritural.
.Transitorias, son las variaciones que aparecen en un momento o
periodo determinado, por influencias endógenas o exógenos, ya sea
involuntarios y/o voluntarios.
-Voluntarios, constituyen modificaciones generalmente fraudulentas,
-Involuntarios, como consecuencia del material que se emplea, al
factor somático y /o psíquico del escribiente.
En este caso al realizar el análisis de la escritura debitada
comparativamente con las autenticas, se requiere tener en cuenta la
posible causa perturbadora, siendo indispensable que el experto
tenga a la vista muestras graficas trazadas en diferentes momentos
o épocas.
Causa perturbadora, es aquella que modifica involuntariamente el
acto de escribir, y son:
a. Causas materiales.

La casuística de la pericial caligráfica es amplísima. En ocasiones

se da el caso de que una persona niega la autenticidad de una firma
suya estampada en un contrato o recibí.

Niega su autoría y alega las diferencias escriturales de su firma con

respecto a esa firma dubitada.

El perito calígrafo, sin embargo reconoce la presencia de algunos

rasgos grafonómicos y sin embargo analiza unas discrepancias y
trazos anómalos en la firma auténtica.

Fácilmente puede llegarse a la conclusión de que dicha firma es

una burda falsificación; sin embargo la otra parte alega con
rotundidad la veracidad de esa firma.
Analizando el contexto en el que se produjo supuestamente esa
rúbrica, se confirma posiblemente una situación incómoda en la que
esa persona tenía sus dudas o reticencias a la hora de firmar ese
documento.

¿Qué hacer?

Modificar la propia firma para poder negar después, si procede,

la autenticidad de la misma.

Estamos ante un caso de una modificación documental fraudulenta.

Según el libro de Análisis de textos manuscritos, firmas y

alteraciones documentales de F. Antón Barberá, las modificaciones
fraudulentas “Son aquellas alteraciones voluntarias de textos o
firmas manuscritas, realizadas con una clara finalidad delictiva.
Podemos clasificarlas en los apartados siguientes:

a) Desfiguración de la propia letra: anónimos,

autofalsificaciones. El fin perseguido es eludir la
responsabilidad derivada de su autoría.

b) Imitación de grafismos: en este supuesto se trata de usurpar la

personalidad gráfica de otro para obtener un beneficio no legítimo.

C) Alteración del contenido o significado de un texto manuscrito.

Las borraduras, lavados químicos, añadidos, retoques, enmiendas,
sustituciones, tachaduras, etc.”.

En la desfiguración de la propia letra, según el mismo autor señala

que “el falsificador intentará deformar o enmascarar su
escritura para dificultar su identificación”.
 La autofalsificación “se trata de la intencionalidad manifiesta de
disfrazar la propia escritura para atribuirla o no a otra persona. “

”El que modifica conscientemente su propia firma o escritura para

no reconocerla posteriormente, está adoptando la personalidad de
alguien anónimo o inexistente o incluso imitando una personalidad
distinta para que no se le identifique”.

En definitiva es el propio escritor que disfraza su escritura para

negarle autenticidad.

Es un disfraz parcial o integral, como este caso en el que se adopta

una personalidad diferente usurpando una identidad distinta.

Sin embargo, el disfraz nunca puede ser integral al cien por cien,
porque el escritor tratando de ocultar los aspectos morfológicos o
estructurales más evidentes, no puede o no sabe ocultar aquellos
aspectos más nimios, pero que son auténticas idiotismos a modo de
huellas dactilares de la escritura, y por tanto con una función
identificadora

Los puntos característicos de una firma autofalsificada son:

Rasgos comunes esenciales

1. Rasgos dispares para atraer la atención

2. Temblores, trazos trémulos, paradas, rigideces inhabituales y
forzados porque la persona está empleando una escritura no
habitual.
3. Variación de los aspectos más visibles del trazado como el
tamaño, la inclinación, la forma etc.
4. Añadido o supresión de trazos o desarrollos gráficos.
5. Excesiva lentitud o rigidez.
6. Presión fuerte.
7. Cambio en el modelo de las mayúsculas.
8. Ejecución de grafías que denotan escasa destreza gráfica.
9. Alteraciones en la parte inicial o final aumentando los desarrollos
gráficos.
10. Adoptando cambios posturales: escribiendo de
pie, variando el modo de asentar y coger el útil y el papel,
cambiando la posición de los brazos, escribiendo con la mano
contrariada (distinta a la habitual).
11. Utilización de letras de trazado simple o
estereotipado: versal, tipográfico, caligráfico.

En la ponderación de semejanzas y diferencias nos encontramos

incoherencias gráficas ya que se mezclan rasgos incompatibles en
un desarrollo gráfico espontáneo. A veces se producen errores que
un falsificador no pasaría por alto.

El análisis de este tipo de firmas en las que se enmascara la propia

escritura debe centrarse en las características grafonómicas más
peculiares o menos evidentes, es decir en los llamados gestos-tipos
y rasgos personales, en la forma y el grado de tensión de los trazos
verticales y horizontales, en la caja de renglón, en el grado de
apertura de los óvalos y en el lugar de inicio y cierre de su trazado,
en las características de los rasgos de comienzo y final de las
grafías etc.Un reto difícil para cualquier perito.

Firma auténtica y firma autofalsificada: diferencias y coincidencias

en el comportamiento escrito. En los últimos años se ha producido
en los juzgados un incremento de solicitudes de informes periciales
cuyo objeto es analizar una posible autofalsificación de firmas. Sin
embargo, la investigación se ha centrado mayoritariamente en el
estudio de la falsificación de la grafía en situaciones en las cuales
una persona pretende suplantar la escritura de otra. En la presente
investigación abordamos el estudio de la falsificación de la propia
grafía con la intención de eludir un futuro compromiso legal. Para
ello se utiliza una muestra de 121 individuos los cuales realizan su
propia firma y una firma autofalsificada. Se analizan las variables de
presión, velocidad, legibilidad y existencias de gestos tipo. Se
comprueba la existencia de diferencias estadísticamente
significativas en la presión, velocidad y gestos tipo, siendo la firma
autofalsificada menos presionada y me nos rápida que la
autofalsificada y existiendo más probabilidad de aparición de gestos
tipo en la firma auténtica.