Academia de Arte

Cranbrook

Ficha de Lectura
Historia de Diseño Industrial
Reedición Catedra Arq Míguez
Selección y traducción de textos Matías LANGER
Compaginación y armado original Arq. Jacqueline LEPLAT, Arq. Sergio
FELTRUP
FADU.UBA

Charles y Ray Eames sofá c. 1952
Charles y Ray Eames, armario c. 1952
Harry Bertoia, Sillón y banqueta c. 1952
Academia de Arte Cranbrook
La Academia de Arte Cranbrook fue una comunidad de educación
proyectual, fundada a principios de los '30 por un millonario
canadiense radicado en la ciudad de Detroit llamado George
BOOTH con la colaboración del arquitecto finlandés Eliel
SAARINEN. Ubicada en los alrededores de la ciudad de Michigan,
en el Medio Oeste americano, la Academia tuvo una larga y
fructífera historia como centro de estudios en Io que hace al
Diseño, entendido éste como una actividad multi-disciplinaria,
abarcando desde el diseño textil hasta la planificación urbana,
pasando por el Diseño de Interiores, de Objetos, de Cerámica y
Diseño Arquitectónico.
La Cranbrook fue la reiteración de uno de los ideales americanos,
siendo en este caso el de la creación de una comunidad autónoma,
dedicada a una finalidad determinada. Aquí, el objetivo central que
condujo a la fundación de la escuela fue la intención de Booth de
potenciar la creatividad de los creadores americanos a través del
trabajo en una comunidad de dedicación específica, en oposición
al carácter mercantil y comercial que el Diseño Americano tenía
hasta el momento y Los resultados no tardaron en hacerse visibles.
La influencia de la. Cranbrook en el Diseño americano fue
inigualada por cualquier otro centro de enseñanza, tanto
contemporáneo como posterior, y como prueba de la importancia
de la misma, se pueden citar a alumnos y profesores tales como
Eliel Saarinen y su hijo Eero, Niels Diffrient, Charles y Ray Eames;
Florence Knoll, David Rowland; Harry Bertoia; Ben Baldwin y Harry
Weese.
La escuela transitará en sus primeros anos por un Camino que
marca una transición de las ideas de las Arts & Crafts hacia el
Diseño Industrial como lo entendemos hoy en día, a través del
respeto de las tradiciones por un lado y de la exploración de
conceptos innovadores de formas y técnicas por otro, gestándose
como corolario de ello, la producción seriada. Como se podrá ver,
también fueron innovadoras sus metodologías.
Generalmente estudiada en comparación con la Bauhaus, si esta
última fue completamente germánica en su espíritu, la Cranbrook
fue en la misma medida anglosajona y americana. Eliel Saarinen
describía en 1931 la filosofía de la Academia: "..no es una Escuela
de Arte en
el sentido ordinario de la misma. Es un espacio de trabajo para la
creación de arte: el arte creativo no puede ser ensenado por otros.
Cada uno debe ser su propio Maestro, pero el Contacto con otros
artistas y intercambios con ellos amplían el espectro de la
inspiración"
La Cranbrook siempre tuvo una visión pragmática del Diseño y por
lo tanto manejó sus aspectos pedagógicos en forma práctica
favoreciendo la búsqueda de resultados concretos frente a las
especulaciones teóricas.
George Booth muere en 1949 y Eliel Saarinen al año siguiente,
concluyendo así la época de oro de la Academia. Sin la presencia
de sus dos creadores la Cranbrook pierde su especial significación,

Bemlamin Baldwin, Lámpara c. 1940
David Rowland, Silla apilable c. 1960
al tiempo que finaliza una etapa y comienza otra en la enseñanza
del
diseño en EE.UU., en nuestro siglo. Si bien en esta Segunda etapa
la Academia perderá liderazgo en la enseñanza, es también
durante estos años cuando los egresados desarrollaran con mayor
esplendor sus trabajos.
ANTECEDENTES
Existieron en los Estados Unidos numerosos seguidores de las
Arts and Crafts, sobre todo en el Medio Oeste americano; sus
ideas giraban en torno a un concepto de diseño que reemplazara
al extremadamente pobre de los objetos que llenaban los hogares
estadounidenses de principios de siglo. Buscaban integrar al
diseño los valores, tanto sociales como de la vida cotidiana y
sumarse a la ya, en Norte América al menos, incuestionable
producción industrial. Los seguidores de este movimiento
pretendían, en sus conceptos, independizar la producción de la
industrialización, de la tecnología y de la urbanización; asimismo
los hacedores de objetos debían ser mucho más que un
instrumento para realizar productos, debían sentar las bases para
una ética colectiva. Mientras tanto, del otro lado del Atlántico,
planteos similares plasmaban las múltiples versiones del
Art Nouveau. Mientras tanto en Finlandia, cuna de Saarinen, la
visión del Diseño, sin ser opuesta, pasaba por carriles distintos,
cargados de historia local: allí se veía al Diseño como un auténtico
y valedero instrumento de protección de la herencia cultural de los
finlandeses contra la histórica presión y opresión rusa de la cual
solo se libraron parcialmente al finalizar la Primera Guerra,
Mundial, cuando Finlandia dejó de ser un Ducado Ruso. Estamos
hablando de un Diseño que demostró a las demás sociedades
industrializadas, presentes y futuras, las posibilidades de crear un
medio ambiente humano, con un definido carácter formal como
identidad, y a la vez eficiente. Saarinen llegó a los Estados Unidos
en 1923, luego de lograr el segundo premio del concurso de
diseño del Chicago Tribune y de una larga y triunfal carrera en su
patria. La dislocada situación económica de Europa al finalizar la
guerra, enfrentada con la prosperidad americana; marcó su destino
y el de muchos artistas y arquitectos europeos hacia una América
donde comenzaba a reinar el acero, la goma, la producción
automotriz masiva y una inmensa planificación comercial,
residencial e industrial. En 1924 Booth y Saarinen se conocen en
la Universidad de Michigan con la común idea de fundar una
institución de enseñanza de arquitectura, artes aplicadas, escultura
y artesanía. Esta Institución seria la Cranbrook Academy of Art. La
más fuerte influencia a nivel pedagógico que tuvo la Cranbrook fue
la Academia Americana, de Roma. Ésta tuvo escasa repercusión
en Europa, pero para los artistas americanos que allí concurrían, el
hecho de hacerlo les otorgaba un importante prestigio en EE.UU.
En esta Academia la enseñanza no poseía currículo ni planes de

Harry Bertoia, Biombo metálico y
esculturas c. 1952
Harry Bertoia, Sillones y sillas
estudio, sino que estaba estructurada básicamente en la idea de
invitar artistas y maestros para, generar una actividad creativa
informal. De esta misma manera fue estructurada la Cranbrook en
sus primeros años de existencia. "El propósito de la Cranbrook es
el de formar estudiantes con un alto entrenamiento y talento, a
través de las posibilidades que brinda el trabajo en un ambiente
favorable bajo el liderazgo de artistas de destacadas capacidades",
decía Saarinen en 1931, un año antes de la apertura oficial. Esos
artistas a los que hacía referencia el arquitecto finlandés formarían
de manera semipermanente, algo similar a un Consejo de Arte.
Junto a éstos y a otros visitantes de todo el país y el extranjero, los
estudiantes a la vez que compartirían el lugar de trabajo con ellos,
aprenderían de su contacto directo. La idea principal no era, como
muchos suponían, formar artesanos, en el más amplio sentido de
la palabra, sino diseñadores. "...qué sentido tiene ser un habilidoso
artesano si se desconoce cómo desarrollar un diseño adecuado a
nuestra vida cotidiana." Respecto a las influencias que tuvieron los
creadores formados en la Cranbrook, el espectro es amplio y
heterogéneo, como quizás podría esperarse dadas las
características de la misma, pasando por Alvar Aalto (finlandés,
1878-1976) y Frank Lloyd Wright (americano,1869-1959), hasta el
Art Decó y la Bauhaus. Hay que recordar que la primera
generación de estudiantes de la Academia fue casi enteramente
europea, para entender más claramente el por qué de la influencia
de aquéllos.
LA CONCRECIÓN DE UNA IDEA
Luego de un par de años de maduración del proyecto original,
donde además se buscó un lugar físico adecuado para el
establecimiento de la Academia, en 1927 se programa dotar a la
misma de la siguiente serie de departamentos: Arquitectura,
Diseño de Interiores, Dibujo, Pintura. Escultura. Teatro, Paisajismo
y Artesanía. Como se puede apreciar, el espectro de estudios era
amplio y no demasiado homogéneo, situación que se modificaría
con el tiempo. La filosofía de la Cranbrook nunca se expresó en un
manifiesto - importante diferencia conceptual con sus contrapartes
europeas - pero la esencia del pensamiento de Saarinen y Booth
siempre fue clara: la autoeducación bajo un buen liderazgo, donde
las diferencias estaban en la experiencia y el punto de vista. Si
bien los hechos obligaron a la creación de un curso de ingreso, de
un sistema de créditos y al otorgamiento de diplomas de asistencia
a la Academia - lo cual aparejaría un cierto acartonamiento en la
pedagogía- esto no afectaría el espíritu de Cranbrook. El hecho de
que tuviera la escuela una visión completamente pragmática del
Diseño -actitud que permitiría percibir a EE.UU, si acaso se lo
desconociese, como lugar de origen de la misma- muestra además
que no existió una base ideológica que sostuviera el desarrollo de
la Academia hacia un fin social predeterminado como objetivo
claramente delineado. No obstante que desde una visión critica y

Pipsan SAARINEN SWANSON
Seda estampada. 1952
Loja y Pipsan SAARINEN, Alfombra.
c 1950
reflexiva del Diseño esto no fue nunca siquiera esbozado, es justo
recalcar que de cualquier manera, la Cranbrook hizo un importante
aporte al medio ambiente artificial de millones de oficinas y
hogares de Norteamérica, a través de la creación de un sinnúmero
de objetos industrializados, que modificaron y mejoraron la calidad
de vida de éstos. Es bajo estas bases que la Escuela empieza a
funcionar en forma oficial en 1932. Tras unos primeros años de
existencia de lento desarrollo, a fines de los '30 la Cranbrook
encontraría su apogeo, cuando contaba como Presidente y como
Director del Departamento de Arquitectura y Diseño a Eliel
Saarinen, a Carl Milles al frente del Departamento de Escultura, y
a Zoltan Sepeshy como Director del área de Pintura. Por otro lado
Harry Bertoia estaba al mando del sector de Trabajo de Metales,
Charles Eames era Instructor de Diseño, Marshal Frederiks de
Modelaje, y también era posible encontrar a Eero Saarinen como
Asistente en el Departamento de Arquitectura. De los
Departamentos de Textiles y Artesanías, bajo la conducción de
Loja Saarinen, mujer de Eliel, salió de la Escuela una enorme
cantidad de diseñadores textiles que tuvieron en los '40 y '50
máximo esplendor. En 1940 se estudio la posibilidad de abrir un
departamento de diseño de automóviles bajo la sombra de la
ciudad de Detroit, cercanía mas que adecuada; inclusive se estuvo
cerca de contar con la presencia en el puesto de Director del
posible Departamento, de Walter Baermann (un diseñador
industrial de origen alemán, radicado en Pasadena) aunque
finalmente este proyecto quedo reducido a la nada. De cualquier
manera, al año siguiente Baermann, quien había trabajado junto a
Dreyfuss y Bel Geddes, se hizo cargo, por tan solo dos
temporadas, del recientemente creado Departamento de Diseño
Industrial, de corta vida.
En 1946 Eliel Saarinen presenta su renuncia, reemplazándolo en
el puesto Sepeshy. Un par de anos mas tarde morirían tanto Booth
como Saarinen. Si bien la existencia de la Cranbrook Academy of
Art se mantiene hasta nuestros días, es en ese punto donde
concluye la etapa
más rica de su historia.
LA ARQUITECTURA EN LA CRANBROOK
Aunque muchos visitantes de la Academia quedarían
deslumbrados por el ambiente creativo existente durante los '3O y
los '40, es igualmente cierto que otros encontraban allí un aire de
irrealidad y una gran distancia con los problemas de la sociedad a
la cual pertenecían. Pero es importante destacar de la Academia,
no la intención de la creación de un "gran diseño", sino generar un
carácter de esperanza e idealización, lo cual explica en parte lo
anterior.
Si bien el tema de nuestro mayor interés no pasa por las obras
arquitectónicas producidas por la Cranbrook, no se deben dejar de
lado algunos de sus conceptos y materializaciones, que marcarían
 la identidad de la Arquitectura Americana de mediados de siglo, y
que además de su valor propio, permite un más claro
entendimiento de lo que fue la Cranbrook Academy como epicentro
de actividad proyectual.
La filosofía de Diseño con que se manejo la Escuela consistió, más
que en principios específicos, en actitudes consistentes y
enérgicas de ponderación de materiales, formas y espacios; de
esta manera se trabajaba con valores de expresión personal
dentro de una actitud pragmática más que de elaboración
intelectual. Este modo de encarar el diseño marcó una tradición en
la Arquitectura Contemporánea, quizás con Eero Saarinen como
su mejor expositor. Esto se puede ver en sus propios trabajos, en
los de su padre y en quienes trabajaron con ellos. En su momento
no existió un acercamiento a la Arquitectura sino a través de la
utilización de materiales industriales y en una nueva tipología en el
campo de la Arquitectura Industrial. Un buen ejemplo es el edificio
de la General Motors Technical Center (Saarinen, Swanson,
Saarinen, 1945), que refleja un alto nivel de sensibilidad tanto a la
escala de las partes y del todo. Es notable como se explota la
riqueza de los entonces innovadores materiales utilizados, como el
aluminio y las posibilidades técnico constructivas de la época.
Queda así clara la determinación de explotar al máximo las nuevas
tecnologías, lo cual se convertiría en el factor común de la mayoría
de los diseñadores que pasaron por la Cranbrook. Por otro lado,
en aquellos diseños donde la forma es determinada
fundamentalmente por la estructura con un aprovechamiento
máximo de las posibilidades del hormigón es donde Eero Saarinen
Eliel Saarinen, TWA Station, NY.
obtuvo sus mayores logros arquitectónicos es en esta tipología
1952
donde se observan las características organicistas del diseño de
Saarinen, modalidad que repetiría en su actividad proyectual
objetual, en donde resalta toda la fuerza de un modo nuevo y
diferente de encarar el Diseño. Uno de los mejores ejemplos es la
terminal de la T.W.A. en el John Kennnedy Airport de la ciudad de
Nueva York (1956) o el Dulles International Airport. Pero Eero
Saarinen no solo manejó las formas organicistas, sino que dominó
morfologías mucho más rígidas y geométricas, con el mismo vuelo
y dinamismo que en las anteriores; obras tales como la Capilla y el
Auditorio del Massachusetts Institute of Technology, o el Centro de
Investigaciones de la I.B.M. en Yorktown se destacan dentro de
esta tipología. También merece citarse el edificio de la CBS en
Nueva York como ejemplo de diseño de rascacielos contrapuesto
al concepto de caja de cristal en altura de Mies van Der Rohe.
Trabajos posteriores de alumnos de la Cranbrook luego de la
temprana muerte de Eero Saarinen en 1961, extendieron la
tradición de la escuela, una tradición que se basaba en el respeto
al medio ambiente circundante, al conocimiento profundo de las
técnicas constructivas y a los materiales; una tradición que
posibilitó el diseño desde una escala que se extendía hasta
ciudades partiendo de los pequeños objetos que la componían.

Harry BERTOIA. Escuptura; 1940
Eliel y Eero Saarinen, sillas 1939
Charles y Ray Eames, sillón 1956
ARTE EN LA CRANBROOK
Los trabajos producidos por escultores y pintores de la Cranbrook
reflejan los conceptos estéticos de los principales artistas-
residentes en la Escuela: Eliel Saarinen y Carl Milles. Ideas que no
fueron necesariamente coincidentes y que ni de manera individual
ni conjunta lograron producir un despegue cualitativo de real
importancia de los alumnos, que pasaron por la Academia.
Conceptualmente, la escultura -no tanto la pintura- era vista como
corolario necesario del Diseño Arquitectónico, donde los valores
funcionales y artísticos eran considerados de igual importancia.
Hay aquí esbozos de un planteo teórico, si bien bastante pobre,
que va mas allá de un resultado estético, y que no se dio en otras
áreas de la Academia. De cualquier manera este planteo no
parece ser muy original en la década del treinta, teniendo en
cuenta los movimientos de vanguardia europeos del primer cuarto
de siglo.
DISEÑADORES, PRODUCTOS Y PRODUCTORES
Si bien Booth reflejó su carácter de seguidor de las Arts and Crafts,
por otra parte Eliel Saarinen tuvo en mente la factibilidad de la
producción en masa y sus posibilidades comerciales. Las
interacciones para otorgar una integridad e identidad al objeto
industrial no siempre lograron una convivencia pacífica, y las
disputas entre el canadiense y el finlandés se repitieron en
numerosas ocasiones. Estos dos modos de encarar el diseño
coexistieron a través de los años de la misma manera que idearios
no siempre coincidentes lo hicieron en la Bauhaus o la Werkbund.
De cualquier manera compartieron un ideal de equilibrio entre el
trabajo manual y la estética de la máquina, lo que se vería
reflejado desde la primera exposición de la escuela en 1932.
Saarinen mostraría a través de prototipos y diseños para la
industria su búsqueda de formas sencillas u representativas de su
propia esencia, rechazando la utilización de estilos o expresiones
formales del pasado para la creación.
El taller donde Booth puso más energía fue el de metales, donde
se forjaron y diseñaron piezas, tanto funcionales como decorativas,
que se realizaron para las dependencias del conjunto de
edificaciones que constituirían la Cranbrook Academy of Art.
En 1937 se incorpora al taller de metales Harry Bertoia, con el
cargo de supervisor del taller. Su mirada fue mucho más moderna
en el lenguaje formal y era una persona que experimentaba de
manera constante en la aplicación de nuevas tecnologías. Sus
trabajos de joyería y orfebrería se destacaron en los 40´ como “un
clásico de lo moderno” , sin embargo se interesó en la producción
de objetos económicos en materiales no preciosos
Si bien es en el Taller de Metales donde Booth puso sus mayores
esfuerzos, no sería éste el que daría a la Cranbrook su renombre,
ya que es en el Diseño de Interiores y de Mobiliario donde la

Harry Weese y Harry Bertoia, interior
c. 1950
Benjamin Baldwin y Harry Weese.
Lámpara c. 1940
Academia se destacó. Este fue sin duda, alguna uno de los
capítulos más brillantes del Diseño americano del siglo XX, en lo
que respecta tanto a cantidad como a calidad de las obras que
fueron producidas por alumnos salidos de la Cranbrook. Este
periodo duro más de veinticinco años desde la fundación de la
Academia en 1932 y es abarcativa de dos generaciones enteras
de alumnos y docentes. La primera de ellas era básicamente
originaria de Europa, e incluía a Eliel y Eero Saarinen, y a su
familia como algunos de los más excelsos ejecutores; la Segunda
estudió en la escuela a fines de los treinta y en ella se destacaron,
entre otros, Charles Eames y Florence Knoll.
Los estudiantes de la Academia contribuyeron al modernismo
tentativo de las Exposiciones de San Francisco y Nueva York de
fines de los '30 y cuando en 1940 el Museo de Arte Moderno de
N.Y. lanza el concurso de Diseño Orgánico para el hogar, el trabajo
más importante de la muestra se debió a Eero Saarinen y Charles
Eames, teniendo también una importante participación Ben
Baldwin y Harry Weese, lo que hizo que la Cranbrook obtuviera un
gran renombre por estos años.
El mobiliario de los dos primeros conformaron el look americano de
los hogares de los '50 y sobre todo el de oficinas y corporaciones.
Colabora en este proceso en gran medida, Florence Schust, tras la
fundación con su marido, Hans Knoll de Knoll Associates, donde
produce diseños de sus colegas de la Cranbrook y suyos propios.
Hans Knoll, luego de arribar a los Estados Unidos proveniente de
Alemania en 1937, funda la que es hoy en día la productora de
mobiliario de mayor renombre del orbe: Knoll Associates Furniture
Company. Realiza este emprendimiento junto a su esposa, quien
había establecido contacto con el más joven de los Saarinen en la
Cranbrook. La idea de los Knoll era promover a los diseñadores a
través de su propio nombre, transformándolo en la firma de su
obra, y pagarles los royalties correspondientes al diseño de sus
muebles, que el matrimonio se encargaría de producir y
comercializar. De esta manera combinaron de manera ideal la
práctica de diseño europeo con el modo americano de hacer
negocios. Luego de la muerte de Hans Knoll en La Habana en
1955, Florence continuó con la política de mantener altos
estándares de diseño y calidad constructiva, donde se percibía el
hábil manejo de sus conocimientos de las tradiciones junto al
aporte del diseño contemporáneo.
Esta firma produjo muebles de ex-alumnos de la Bauhaus y de
prestigiosos diseñadores de todo el siglo, desde Mackintosh hasta
Mies, además de multitud de otros que hoy son clásicos. El joven
Saarinen fue sin ninguna duda uno de los más apreciados
arquitectos y diseñadores que salieron de la Cranbrook, y mucho
de su reconocimiento se debe a su particular visión del diseño de
mobiliario y de interiores, ya que junto a Eames, F. Knoll, y H.
Miller alcanzaron a crear una estética muy diferente al Diseño
americano que reinaba para ese entonces; basta recordar que la
etapa de oro, por ejemplo, del streamline fue durante la década del
treinta y del cuarenta, o del auge que tuvo el styling durante esos
 años.
En realidad, a partir de que los diseñadores de la Cranbrook
ubicaron sus productos en el mercado, se hizo obvia la
confrontación de dos visiones contrapuestas del Diseño, que tenía
unos años de contrapuntos ya para entonces el clásico diseño
americano por un lado, y el "buen Diseño" por el otro.
Por último, los americanos adoptaron el diseño que el conjunto de
europeos radicados en EE.UU. manejaban y era básicamente de
una sobriedad y claridad simplemente notables. A partir del
concurso organizado por el M.0.M.A. en 1940, el Diseño orgánico
se haría presente con autoridad en nuestro siglo, y sin lugar a
duda los precursores de esa tendencia fueron algunos alumnos de
Cranbrook.
La silla Grasshopper a fines de los '40 y la famosa Tulipán en
P.R.F.V. finalizando la década del cincuenta son dos buenos
ejemplos de lo acotado en el párrafo anterior. La última combinó de
manera única, en una forma escultural, todos los elementos de una
silla en un todo integrado y bajo la influencia de Knoll ésta se
convirtió en un mueble refinado tan familiar como cualquiera de
Mies o de Le Corbusier. Obras ambas de Eero, se pueden apreciar
en estas tanto la sutileza de trabajo de las formas organicistas de
Saarinen como la utilización al máximo de sus posibilidades de las
Eero SAARINEN Bocetos para la nuevas tecnologías y materiales, las que formaron una marca
silla Tulipa. patentada de la identidad del finlandés
Herman Miller fue quien se encargó de producir todos los muebles
de Charles Eames, un diseñador más que prolífico que creó un
paradigma de mobiliario de oficinas que perdura hasta nuestros
días. Su más destacada obra, muchas veces copiada y nunca
superada, fue un sillón de oficina realizado en 1955, que
prontamente se convirtió en sinónimo del Diseño moderno. Otra
obra importante de su carrera es la silla Aluminio, creada para el
Dulles International Airport de Saarinen.
El esfuerzo coordinado de Eames y Miller de involucrarse en la
mayor cantidad de exhibiciones de Diseño, convirtió al primero en
el vocero del Diseño americano, quizás más allá de la cantidad de
obras realmente en serie que pudiere autorizarlo, pero la obra que
sin lugar a dudas le otorga completa autoridad, al menos desde el
punto de vista del volumen producido, es la que hoy es otro
Eero SAARINEN clásico, su silla apilable. Construida en tubos de acero cincados,
Conjunto Tulipa. este producto representa a la perfección la tendencia de Diseño
existente en Estados Unidos en estas décadas.
Otro diseñador de mobiliario que se destacó fue David Rowland
especialmente después de conseguir el Gran Premio de la Trienale
de Milano de 1964. Competencia de máxima importancia para el
mundo del Diseño de esos años, la obra que se premio fue la silla
40-in-4-, considerada uno de los mejores diseños de mobiliario del
siglo. El nombre de esta silla, trabajada en plástico moldeado y
caños de acero, remite a la capacidad de acomodar cuarenta de
estas en un espacio de cuatro pies de altura, sin perder su
refinamiento, características que en conjunto quizás no nos
sorprenden hoy en día, pero dada la época en que esta silla fue

Charles Eames y Eero Saarinen, The
organic chair 1940
Florence KNOLL, Sillon 1960
Florence KNOLL, Mueble de
guardado c.1960
diseñada deben ponderarse.
Finalmente, dentro del Campo del Diseño Industrial en particular,
pero fuera del área de mobiliario, es posible citar a Niels Diffrient
como el más importante autor que haya pasado por la Cranbrook
Trabajó junto a Dreyfuss en la Lockheed, Learjet y Hughes tanto en
los exteriores de las aeronaves, como en sus interiores; él mismo
diseñó el equipamiento médico y de instrumental para Litton
Industries y Honeywell.
Diffrient poseía un conocimiento profundo de la naciente
ergonomía, que representó una característica común de aplicación
en todos su trabajos
LA IMPORTANCIA DE LA CRANBROOK
La historia de la Cranbrook es sintomática de los decisivos avances
ocurridos en el Diseño Americano de este siglo, como la
reconciliación de las Arts and Crafts y la producción industrial;
además resulta testimonio del rol desempeñado por los arquitectos
en el Diseño Moderno, así como el impacto de los emigrados
europeos que llegaron a los Estados Unidos después de la Primera
Guerra y durante los '30 y posteriormente de una brillante
generación de diseñadores americanos que surgieron luego de la
Segunda Guerra Mundial, como uno de los grupos líderes del
Diseño occidental.
El movimiento que conjuga en la Cranbrook satisfizo tanto al
público americano maravillado por el Diseño Europeo, como a los
creadores europeos sorprendidos por las posibilidades del
mercado americano. Fue un modo de diseñar que logró una
coexistencia entre la producción en masa y el "Buen Diseño",
buscado a partir básicamente de la Expo de 1940 de Diseño
Orgánico, cuando el objetivo de ésta era mostrar como el espíritu
del arte moderno podía tener un efecto concreto y consistente en el
medio ambiente doméstico.
La tendencia creció después de finalizada la guerra, cuando
diseñadores europeos tales como Eero Saarinen y Charles Eames
comenzaron a crear muebles que producirían la Knoll International
y Hermann Miller
En América había un elemento de realismo comercial que siempre
faltó, tanto en Inglaterra como en Alemania. En Estados Unidos el
diseño fue un aporte importante a su economía, uno de los motores
que la alimentó. También es cierto que terminó generando una
coexistencia no tan positiva entre el extremo de la obsolescencia
premeditada por
un lado y por el otro la apertura de la posibilidad otorgada al
diseñador de convertirse en un verdadero profesional, con una
estructura eficiente de soporte y con un status propio de su obra.
De la mano de Knoll, que fue el primer fabricante de muebles que
vendió sus productos bajo el nombre de sus diseñadores, y cuando
el culto a éstos emergió en el mundo entero en los '7O como una
importante herramienta de marketing, los americanos se pudieron
jactar de haber abierto el camino ya muchos años atrás.