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Maria Fernanda
21/11/2014
https://www.psyciencia.com/quieres-bajar-de-peso-la-respuesta-esta-en-la-psicologia-6-
recomendaciones-basadas-en-la-investigacion
Hiciste planes de juntarte esta tarde con tus amigos de la facultad, así que llevás unas
facturas para acompañar el mate. Más tarde vas a ir al cine con tu pareja, y claro, es
obligatorio comprar la promoción del balde de pochoclos (pop corn) y los vasos de
gaseosas que ahora también incluye un chocolate. Estás en el supermercado haciendo las
compras de la semana y te encontrás que en el pasillo de la vinoteca, tu bodega favorita
ofrece la degustación de un nuevo producto.
¿Por qué hay una epidemia de obesidad? La respuesta no está en que comemos lo que no
debemos o en que hacemos poco ejercicio. Sino que simplemente las personas están
consumiendo más calorías de las que gastan. Está explicación se basa en los reportes de
salud que han encontrado que el consumo calórico se ha incrementado por 268 calorías en
los hombres y 143 calorías en las mujeres y por el contrario, la cantidad de calorías que
gastamos no ha cambiado significativamente desde 1980.
Pero eso no es sorpresa para nadie. Lo que es interesante es que hay un modo de
solucionarlo que no implica necesariamente internarse en un gimnasio o sufrir una dieta
muy estricta. La psicología es la respuesta.
En un ingenioso estudio, Wansink se las arregló para esconder tubos en los platos de sopa,
de tal modo que sin importar cuánto ingiera el sujeto, el plato nunca se vaciará. Luego
alimentó a distintas personas. Ocurrió que las personas que comían desde platos normales
consumieron menos de medio litro de sopa, y algunos de los que comieron desde los platos
con tubos consumieron más de 1 litro. Excepto en los extremos, los que hicieron sentir
“llena” a la gente fueron sus ojos, no sus estómagos: si el plato no se veía vacío, ellos
seguían comiendo. Salvo un par de excepciones, los comensales no se dieron cuenta de que
comieron más, y aunque consumieron 73 % más, se calificaron igual que los demás
(después de todo, ellos sólo tomaron alrededor de la mitad del plato de sopa).
(Artículo relacionado: La memoria y el apetito.)
La manera en que comemos depende mucho del contexto, esto puede ser algo bueno, ya
que si manipulamos nuestro ambiente podemos perder 4.5 kg o más sin siquiera notarlo.
¿Qué debemos hacer? Aquí hay 6 recomendaciones psicológicas que pueden ayudarnos a
estar en forma de la manera más sencilla y casi sin darnos cuenta:
Wansink estudió cómo se comporta la gente delgada ante un buffet y lo comparó con el
comportamiento de las personas con sobrepeso ante la misma situación. Una de las
diferencias fue que la gente delgada mostró una mayor tendencia a sentarse dando la
espalda al buffet, y las personas con sobrepeso tendía a sentarse mirando al buffet.
El estudio Syracuse de Wansink (en Slim by Design: Mindless Eating Solutions for
Everyday Life) reveló que sólo con mirar qué comida está visible en una casa, se puede
predecir el peso de una persona. ¿Hay frutas a la vista en tu casa? Probablemente peses 3,5
kg menos que tu vecino que no las tiene. ¿Tenés cereales de desayuno en la mesada?
Probablemente peses 8,5 kg más. ¿Tenés gaseosas a la vista? En promedio, es probable que
llegues a pesar 11 kg más que alguien que no las tiene. Puedes informarte más sobre esto en
este video.
No eligieron la comida que realmente les gustaba sino que se sirvieron un poco de todo lo
que no odiaban.
Comprar con hambre es un pecado capital. No nos hace comprar más, nos hace comprar
basura, pues elegimos comida que es lo suficientemente conveniente como para comer en el
momento y que calmará nuestras ansias. “Compramos paquetes que podamos abrir y
consumir con nuestra mano derecha mientras manejamos a casa con nuestra mano
izquierda.”
Cualquier cosa que nos pueda distraer causa que comamos más porque no prestamos
atención a la cantidad que estamos comiendo. En este caso la televisión es especialmente
mala: olvidamos cuánto comemos y por cuánto tiempo lo hacemos: “Cuanto más tiempo
miraban televisión, más comían. De hecho, si miraban televisión durante una hora, comían
28 % más pochoclos que si miraban televisión por media hora.”
¿Qué es más efectivo que ejercitarse cuando se intenta perder peso? La mera lectura de las
etiquetas de los alimentos: “Los usuarios de las etiquetas que no hacían ejercicios
mostraron una probabilidad un poco mayor de pérdida de peso que aquellos que hacían
ejercicio, pero no leían las etiquetas de los alimentos.”
Y ¿qué personalidad predice más obesidad? Ser impulsivo: los investigadores encontraron
que la impulsividad fue el predictor más fuerte de quién tendría sobrepeso. Nuestro
ambiente nos llama, y si no estás pensando antes de actuar, es mejor que tus alrededores
estén arreglados apropiadamente.
4) Ve más despacio:
Las personas con sobrepeso en el buffet masticaron 12 veces por bocado. Las personas
delgadas masticaron, en promedio, 15 veces. Los investigadores muestran que comer más
despacio da tiempo a que la “señal de estar llenos” se manifieste: un estudio encontró que
las mujeres a las que se les dijo que comieran rápido, consumieron 646 calorías en nueve
minutos, pero las mismas mujeres consumieron sólo 579 calorías en 29 minutos cuando se
les pidió que hagan pausas entre los bocados y que masticaran cada bocado entre 15 y 20
veces antes de tragar.
“Muchos estudios muestran que le toma alrededor de 20 minutos a nuestro cuerpo y
cerebro la señal de saciedad, y entonces nos damos cuenta de que estamos llenos.” “Este es
el problema. Nosotros comenzamos, terminamos y limpiamos la mesa en muchas de
nuestras comidas en menos de 20 minutos.”
La misma cantidad de comida puede hacerte sentir lleno o aun con hambre dependiendo
completamente de cuán rápido comes, asi que ve maaaaaas despacio.