Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Así fue como durante los años 50, Suiza llegó a implantar un modelo de diseño
“exportable”, llamado “Estilo Tipográfico Internacional”, que viene a satisfacer estas
necesidades. Este enfoque del diseño gráfico persistió por más de 20 años. Las raíces
del estilo provienen de la corriente De Stijl, la Bauhaus, el constructivismo ruso y la
nueva tipografía de los años veinte y treinta.
Cabe destacar que este país trilingüe fue el único de Europa que no se vio envuelto en
ninguna de las dos grandes guerras mundiales, hecho que confiere a Suiza una
situación de privilegio en el desarrollo económico y social, cuyos balances se resumen
en una prosperidad económica y en la inexistencia de traumas, ni sociales ni políticos.
CARACTERÍSTICAS VISUALES
Buena parte de la comunicación publicitaria vial es, en Suiza, propiedad del Estado. El
Estado va a convocar a los diseñadores suizos para diseñar carteles para eventos
culturales, campañas de turismo, etc. Por otro lado, las empresas multinacionales
(especialmente la industria farmacéutica y química) van a posibilitar que la gráfica
suiza sea de excelencia e incida en el mundo. Muchos alumnos de la escuela de
Basilea (ciudad que alberga algunas de las más poderosas industrias químicas del
mundo) encontraban empleo en ellas al finalizar sus estudios. Durante los años 60, la
internalización del diseño suizo coincide con la expansión industrial y comercial de las
empresas más dinámicas.
En el año 1918, Keller, con 27 años, se unió a la Escuela de Artes y Oficios de Zurich,
donde elaboró un curso profesional de diseño y tipografía. Más que casarse con un
estilo específico, Keller opinaba que la solución a los problemas de diseño debía surgir
del contenido. Su cartel del año 1931 para una exposición de arquitectura de Walter
Gropius, muestra una mano de contornos geométricos sujetando una llana de albañil.
El cartel para una exposición de 1948 es bastante distinto, con alusiones medievales y
un equilibrio simétrico riguroso.
En el cartel para büro, de 1928, los rastros de los cuadrados de la red usados para
construir el cartel permanecen como líneas blancas delgadas entre las letras. El rótulo
muestra una comprensión de los experimentos de Van Doesburg (De Stijl) con letras
geométricas. Los colores rojo, blanco y negro son influencias del constructivismo.
En el cartel para norm, también del año 1928, la cuadrícula se convierte en un tema
visual. También se utiliza un alfabeto geométrico inspirado en el de Van Doesburg, y
los colores, rojo, blanco y negro, heredados del constructivismo.
Trabajó como diseñador gráfico en Zurich desde el año 1929 hasta el año 1937. En
1937 se trasladó a Alemania, donde estuvo activo como pintor y diseñador gráfico por
más de cuatro décadas.
El arte concreto es expresión del intelecto humano y posee una claridad y perfección
que debe esperarse de las obras del intelecto humano. Ideas abstractas antes sólo
existentes en la mente se hacen visibles en formas concretas. Es real e intelectual, no
natural, y sin embargo cercano a la naturaleza, aspira a lo universal reprimiendo la
individualidad del artista.
En 1936 fue hacia Estados Unidos, donde trabajó para Harper´s Bazaar, Vogue y otras
revistas. De 1946 a 1966 trabajó como consultor de Knoll Asociados.
Durante los años treinta fue otro innovador en el uso de la fotografía en el diseño
gráfico. Realizó extraordinarias publicidades para los lugares de vacaciones suizos.
Son conocidos sus carteles para esquiar de St. Mortiz, lugar de recreo.
Al igual que Max Bill, es un representante importante del arte concreto. Este arte es la
herencia de lo que Theo van Doesburg llamó arte concreto en 1930.
En 1959 editó, junto con Müller Brockmann, Hans Neuburg y Carlo Vivarelli, la revista
trilingüe Neue Grafik – New Graphic Design – Graphisme actuel. Esta revista presentó
la filosofía y los méritos del movimiento suizo a un público internacional.
Fundó y edito junto con Müller Brockmann, Carlo Vivareli y Richard Lohse la revists
New Graphic (también Neue Graphik y Graphisme Actuel) que, en 18 números y entre
1958 y 1965, revolucionó el diseño gráfico. El libro “Publicity and graphic design in the
chemical industry”, de 1967, es de su autoría.
Buscó una expresión gráfica absoluta y universal a partir de una presentación objetiva
e impersonal, sin interferencia de los sentimientos subjetivos del diseñador. Es autor
de célebres carteles fotográficos-tipográficos. Son famosos sus carteles de conciertos
para el Auditorio de Zurich, el programa “Música Viva” y sus carteles para acrecentar la
conciencia pública acerca de la polución por el ruido y los accidentes viales.
El artista zuriqués Carlo Vivarelli es unote los gráficos más brillantes de la época por
su rigor y sus invenciones formales, tal como se observa en sus realizaciones para la
empresa Adolf Feller de material elétrico y en su cartel Para la vejez de 1949 (donde
hace gala del uso genial de la fotografía y de la rotulación vertical).
Es quizás el más ortodoxo de los suizos. Afirma que hay que crear un sistema de
diseño que cubra todo tipo de problemáticas y se pueda aplicar ante cualquier
situación. Su claridad intelectual se evidencia en sus numerosos escritos. La
teorización de la disciplina del diseño gráfico es una característica que une a todos los
suizos.
Diseñador gráfico autodidacta, abrió su propio estudio en 1950. Trabajó para clientes
corporativos, jugando un papel importante en la definición del Estilo Tipográfico
Internacional aplicado a la comunicación de negocios e industrial.