Universidad de Oriente

Núcleo Bolívar

Escuela de Ciencias de la Salud

Metodología de la Investigación

Obesidad en los Niños que Asisten a la

Escuela Primaria “Colegio Divina
Pastora” En Ciudad Bolívar Durante el
Periodo Mayo-Julio 2015

Profesora: Bachilleres:
Olga Da Silva Bello Graisbell
Centeno Ysarelis
Seccion: 02 Peñalosa Luis
Salas Erick
Tang Lisnerys
Zamora Gabriela C.I 25331610
Mayo-2015
 CAPITULO I

INTRODUCCÍON

La obesidad es hoy un problema de dimensión mundial. El exceso de

peso, como causante de morbilidad y mortabilidad en el ser humano, es
conocido desde hace más de 2.000 años. Hipócrates describió que “La
muerte súbita es más frecuente en aquellos individuos que son naturalmente
gordos, que en las personas delgadas” la obesidad es una epidemia en casi
todos los países del mundo. (Diatz, 2008) y es una enfermedad crónica, que
se produce por un desbalance entre el gasto y la ingesta energética
(Pascuala, 2007).

La obesidad forma parte de un grupo de patologías denominadas

Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT), son la primera causa de
muerte en el mundo representando el 60% de muertes a nivel global (de
estas muertes el 80% ocurren en países subdesarrollados). La obesidad fue
la primera ECNT clasificada como pandemia (OMS, 2006).

La Obesidad es una alteración no solo con repercusiones de salud de quien

la padece, sino también económicas y sociales (Cuevas y Reyes, 2005). La
obesidad se origina por diversos factores, entre ellos por predisposición
genética, alteraciones del balance energético y factores socio-ambientales,
como la disponibilidad de alimentos, dieta y el sedentarismo estimulado por
el progreso tecnológico y el “estimulo subliminal” a que diariamente se
exponen los individuos que dedican más de cuatro horas a la contemplación
de programas televisivos (Cuevas y Reyes, 2005).

La obesidad se define por un exceso de grasa corporal, por lo que seria

necesario demostrar dicho exceso para establecer su diagnostico. Pero
medir la porción de grasa corporal no es una tarea sencilla y los métodos que
existen para ello no están disponibles en la práctica clínica, por lo cual se
debe recurrir a las medidas antropométricas, sencillas de realizar y que han
demostrado una buena correlación con la medida de la grasa corporal. Entre
todas ellas, se encuentra el índice de masa corporal (IMC) el cual es
considerado generalmente el método de referencia para el diagnostico de la
obesidad (Dietz, 2008).

La obesidad infantil se ha convertido en un problema de porciones

epidémicas, esto debido a la rapidez con que ha aumentado y la cantidad de
gente afectada, el comer excesivamente, la falta de ejercicio y el estilo de
vida sedentario trae como consecuencia la obesidad, y un mayor riesgo de
mortalidad (Dietz. 2008).

El hecho de estar inactivo físicamente crea serios problemas de salud a

estudiantes del nivel escolar elemental y la situación sigue aumentando con
tantos adelantos tecnológicos que en la actualidad están a la disposición de
los niños. Una mala alimentación, poco o ninguna actividad física y el
incremento en consumo de medios masivos, contribuye al problema de salud
para los niños, tales como niveles de colesterol alto, hipertensión arterial,
diabetes mellitus de tipo 2, enfermedades cardiovasculares, afecciones
osteoarticulares, infertilidad y ciertos canceres (Dietz, 2008).

Cuando se habla de que un niño esta en sobrepeso, significa que el peso del
niño es mayor del que se recomienda, generalmente se evalua la obesidad
usando el Indice de Masa Corporal, que se define como el peso en
kilogramos de un sujeto, dividido por el cuadrado de la altura en metros
(Kg/m2) (Rodríguez, 2006).

La actividad física puede ayudar a controlar el peso, reducir todas estas

enfermedades y disminuir los sentimientos de depresión, baja autoestima y
ansiedad. La obesidad constituye uno de los principales “estigmas sociales”,
con una marcada repercusión a nivel psicológico individual (Villaseñor,
Ontiveros & Cárdenas, 2006). La obesidad no es un trastorno psiquiátrico;
pero la alta prevalencia de psicopatología en los pacientes obesos que los
llevan a buscar ayuda medica en comparación con la población en general
ha determinado que es un problema psiquiátrico que debe identificarse y
atenderse simultáneamente con los programas de control de peso
(Villaseñor, Ontiveros & Cárdenas, 2006).

Las terapias de cambio de conducta son estrategias para modificar los

hábitos de alimentación y de actividad física de los pacientes obesos. Es
importante la enseñanza de metas realistas en cuanto a la reducción de
peso, manejo de autoestima y prevención a recaídas (Cuevas & Reyes,
2005).

La obesidad a nivel mundial es causa de una curva ascendente en la

mortalidad por enfermedades relacionadas. Por cada 5 puntos que se
incremente el índice de masa corporal (IMC) en una persona, la mortalidad
por enfermedades vasculares se incrementa un 40%, por DBT, problemas
hepáticos o renales un 60 a 120%, por cáncer un 10%, enfermedades
pulmonares 20% y otras patologías 30% (The Lancet, 2010).

La obesidad infantil es ya epidémica en algunas áreas y esta en aumento en

otras; se estima que, globalmente, 22 millones de niños menores de 5 años
presentan sobrepeso. De acuerdo al Cirujano General de Estados Unidos, en
ese país la cantidad de niños con sobrepeso se ha duplicado y la cantidad de
adolescentes con sobrepeso se ha triplicado desde 1980 (Rodriguez, 2006).

A escala mundial se estima que un 10% de los niños en edad escolar (entre
5 y 11 años) padecen de sobrepeso u obesidad. Aunque antes se
consideraba un problema exclusivo de los países de altos ingresos, el
sobrepeso y la obesidad están aumentando especialmente en los países de
ingresos bajos y medios, sobre todo en el medio urbano. La obesidad y el
Sobrepeso se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa
que puede causar daños en la salud. Según la OMS (Organización Mundial
de la Salud, 2009)

En Colombia, se registraron 42 millones de niños menores de 5 años con

sobrepeso, (casi el equivalente de la población colombiana); de ellos, 35
millones viven en países en desarrollo. Según las Cifras e Indicadores de
Salud de ACEMI, el Informe de Carga de Enfermedad en Colombia
elaborado por la Universidad Javeriana, la encuesta ENSIN del Ministerio de
la Protección Social, las Estadísticas de la Vigilancia en Salud Pública y la
Encuesta Nacional en Salud realizadas por el Instituto Nacional de Salud.
Uno de cada 6 niños y adolescentes presenta sobrepeso u obesidad en
Colombia; esta relación aumenta a medida que se incrementa el nivel del
SISBEN y el nivel educativo de la madre. El exceso de peso es mayor en el
área urbana 19,2% que en la rural 13,4%. (Organización Mundial de la Salud,
OMS, 2010)

Puerto Rico enfrenta un serio problema de obesidad que afecta la salud y la

calidad de vida de los ciudadanos. Estudios realizados evidencian que
Puerto Rico ocupa el segundo lugar en América con los porcientos más
elevados de sobrepeso y obesidad. El 62% de los Puertorriqueños se
encuentran con sobrepeso u obesos (Martínez, 2007). La Sociedad
Puertorriqueña de Pediatría al igual que la Sociedad Puertorriqueña coincide
que entre el 32% y el 35% de los niños puertorriqueños están obesos a
causa de la falta de ejercicios y dietas inadecuadas, entre otros factores. La
escuela es una área ideal para la promoción de hábitos de vida saludables.
Varios programas para prevenir y tratar la obesidad de los niños se deben
desarrollar en las escuelas, de forma que se puedan orientar a evitar la
estigmatización de los obesos y aumentar su autoestima. (Martínez, 2007).

La obesidad infantil en México ocupa el cuarto lugar con niños entre 5 y 17

años más obesos, situación que significa que un niño de cada tres tiene
sobrepeso u obesidad, el porcentaje total de niños en edad escolar con
obesidad y sobrepeso era mayor en los estados de Yucatán con 35.9%, Baja
California Sur 35.7%, Baja California 35,6%, Distrito Federal 35,2%,
Tamaulipas 31,7%. (SEP, 2012).

A simple vista, cualquiera podría decir que los niños tienen toda la vida por
delante, pero para una parte de la población infantil no es así. Los menores
con sobrepeso u obesos tienen sobre ellos una grave amenaza que crecer
conforme aumentan de peso y se vuelven más sedentarios. (Caracas, 16 de
julio- Noticias24).

En Venezuela, el 6.4% de la población infantil sufre de obesidad. Malos

hábitos alimenticios, entre los que se cuenta el consumo de mucho refresco y
frituras, hacen que muchos venezolanos sean gordos o desnutridos, dos de
los problemas a los que se enfrentan países ricos y pobres en la actualidad y
que se han instalado en el país como un desafío para las políticas públicas.
Los últimos datos oficiales en la materia fueron anunciados por el estatal
Instituto Nacional de Nutrición (INN) en 2009 tras analizar a 10.000 niños y
adolescentes en todo el país, estudio que reveló que hay 20 % de sobrepeso
y obesidad en la población de 5 a 16 años. (Caracas, 04 de noviembre.
EFE).

Actualmente en el país se describe un aumento de la prevalencia según lo

reportado por la fundación de centros de estudios sobre crecimiento y
desarrollo de la población venezolana, donde se evidencia un aumento de la
prevalencia de obesidad de 7% en 2001 a 13% en 2006.(FUNDACREDESA,
2006) En cuanto al sobrepeso en escolares venezolanos el sistema de
vigilancia alimentaria y nutricional, aumentó de 9,7% en el 2000 a 15,8% en
2005.(SISVAN, 2005).

Dentro de los múltiples factores condicionantes de la obesidad en la edad

infantil, se encuentran los factores ambientales, genéticos y psicológicos.
Este problema se presenta por la mala combinación de alimentos de la
pirámide alimenticia qué deben ingerir para poder formar su organismo y su
cuerpo de manera adecuada, siendo por lo general el abuso de azucares y
harinas y la escasa ingesta de vegetales las principales razones del aumento
de peso en los niños, además de la falta de actividad física. De acuerdo con
la especialista la solución no es quitarles a los niños de manera permanente
los dulces y harinas de su dieta, sino que se debe controlar las cantidades
que estos ingieran, pues la base de una buena nutrición no es dejar de
comer, sino saber combinar los alimentos (Jefa de Nutrición y Dietética,
Clínica La Viña, Carabobo).

Para Alberto Barradas psicólogo de la universidad de Carabobo estado

Carabobo, Venezuela (2008), la obesidad infantil afecta psicológicamente a
los niños, generando estigma y discriminación, al ser rechazado en un grupo
escolar y al ser apodado por los demás, lo cual afecta negativamente su
autoestima. Alberto Barradas psicólogo de la universidad de Carabobo
estado Carabobo, Venezuela (2008), explica que para atacar la obesidad
infantil es necesario el trabajo conjunto de un nutricionista y de un psicólogo,
pues la obesidad no sólo se debe a la mala nutrición, sino a factores
nutricionales, hereditarios y psicológicos. Los miedos, la necesidad de
sentirse seguro o tranquilos son algunas de las causas que pueden generar
que los niños coman sin control. (Alberto Barradas, 2008).
Para Alberto Barradas psicólogo de la universidad de Carabobo estado
Carabobo, Venezuela (2008), La obesidad no sólo expone a quien la padece
a una larga lista de enfermedades, sino también a psicopatías como
depresión, ansiedad, que en estos casos están asociados a trastornos de la
conducta alimentaria o distorsión de la imagen corporal. (Alberto Barradas
psicólogo de la universidad de Carabobo estado Carabobo, Venezuela
(2008).

En Venezuela la fundación de centros de estudios sobre crecimiento y

desarrollo de la población venezolana, en un estudio retrospectivo desde el
1995 al 2001 surge el sobrepeso en todos los estratos socioeconómicos. El
servicio de “nutrición, crecimiento y desarrollo” del hospital “J.M de los ríos”
(2003) reportó para el año 2002, la atención de 16,24% de niños con mal
nutrición por exceso. El servicio de endocrinología del mismo centro ese
mismo año informó atención de 14,82%. (FUNDACREDESA, 2001).

Igualmente los deseos de la aceptación en los círculos sociales de personas

con sobrepeso conducen a desórdenes alimenticios como la anorexia y la
bulimia. Poco a poco se le está dando importancia al tema de la obesidad,
pero no solo por estética sino por los riesgos para la salud que representa,
hablar de obesidad desde el punto comercial la obesidad representa,
actualmente uno de los mayores problemas de salud relacionado con la
nutrición, Si hablamos sobre las causas de la obesidad, de sus diferentes
tipos y su relación con padecimientos que llegan a ser graves. (Alberto
Barradas, 2007)

La infancia es la mejor etapa de la vida para adquirir buenos hábitos

alimentarios ya que éstos, como los demás modelos del comportamiento, son
adquiridos por repetición y casi o completamente de forma involuntaria. Por
ello los hábitos adquiridos en la infancia se modifican muy poco en los
siguientes años, ya que el aprendizaje inconsciente y la formación de las
actitudes se producen, principalmente, en esta etapa de la vida, (Alberto
Barradas, 2007)

Entre los múltiples factores condicionantes ya mencionados para presentar

la Obesidad en los niños; se encuentra la tendencia al alto consumo de
comida rápida, donde este tipo de alimento carece de valor nutricional,
aportando grandes cantidades de grasas saturadas y alto contenido
energético. Es por ello que la obesidad infantil constituye un problema de
salud pública y es uno de los padecimientos epidémicos de los países
desarrollados, dentro de la educación y en especial la educación primaria y
secundaria, (Alberto Barradas, 2007)

En los últimos años el consumo de alimentos con alto valor energético se ha

incrementado y con esto la posibilidad del aumento de niños obesos. La
alimentación es un elemento importante en la buena salud, influye la calidad
de los alimentos, la cantidad de comida y los hábitos alimentarios, con lo cual
se obtiene una nutrición equilibrada. Las frutas y los vegetales contienen
vitaminas, minerales, carbohidratos y fibra. Estas sustancias son necesarias
para mantener el funcionamiento del organismo durante todas las etapas de
la vida. Disfrutar de la comida intentar comer alimentos diferentes cada día
para gozar de una alimentación variada. (Alberto Barradas, 2007).

Cabe mencionar que la causa de obesidad en los niños es igual que a los
adultos, el depósito de grasa se produce solamente cuando la ingesta de
energía excede los requerimientos. La causa más importante de la obesidad
infantil, es la ingesta excesiva de grasas y azúcares. Además de este exceso
de nutrientes existe un desequilibrio en el gasto energético, ya que, por lo
general son niños sedentarios que no gastan suficiente energía al día lo que
produce que esa energía se deposite en grasa en el cuerpo. La conducta
alimentaria será determinante en el proceso de aumento de peso.(Alberto
Barradas, 2007).

El pediatra y secretario general del Colegio de Médicos del estado Bolívar,

seccional Ciudad Guayana, Hugo Lezama, señaló que este problema de
salud mundial, se genera por los trastornos metabólicos de las grasas que en
el paciente son reflejados en factores exógenos y endógenos.

El pediatra comentó que los factores endógenos se generan por la

predisposición genética a la obesidad “hay familias de obesos en donde los
pacientes “niños” están por encima del percentil para la edad que tienen”.

Mientras que los factores exógenos son los más comunes que se ven
actualmente “alimentación inadecuada, consumo exagerado de
carbohidratos y grasas lo cual produce un aumento de peso por encima del
percentil 90 –máximo percentil para el intervalo etario que se evalúa en dicho
caso-”, explicó Lezama.

El manejo de esta patología es de difícil manejo para los médicos, pero no

imposible. Cuando los pediatras, internistas ven muchos casos de obesidad
mórbida y crónica, los refieren a varias sub-especialidad, principalmente el
endocrino –para verificar si hay algún trastorno hormonal y metabólico- el
cual posteriormente refiere al paciente a las áreas correspondientes a la
nutrición.

Problemas cardiacos, respiratorios, hormonales y diabéticos son algunas de

las patologías que más se observan en una persona obesa, manifestó el
especialista.

A pesar de no tener un listado de todos los casos de obesidad, Lezama

expresó que en Ciudad Guayana hay muchos casos “hay una tendencia
genéticamente determinada de la obesidad”, acotó.
En la práctica diaria, el doctor aseguró que ve una tendencia en donde el
patrón de gordura es el más deseado por las madres, por lo que ha tenido la
ardua labor de cambiar esa percepción “le decimos que eso no bebé ser así,
que una buena alimentación no implica obesidad, sino un bebe dentro del
percentil 50 que es el más deseado, les aconsejamos que se manejen dentro
de los percentiles establecidos para la normalidad del crecimiento, los cuales
fueron establecidos en el año 1981-1987 por Fundacreencia”, apuntó.

“Un buen control pediátrico y una alimentación balanceada y adecuada” es el

consejo que da este especialista a todas las madres. A pesar de la crisis
económica en la que vivimos expresó “los padres tienen que luchar por
darles una alimentación adecuada a sus hijos por encima de todas las
cosas”.

La educación y orientación de las madres por parte del especialista es otra

de las cosas importante que comentó Lezama, a modo personal agregó
“estamos llegando a donde tenemos que llegar, a la educación fundamental
de las madres que con bajos recursos, pero con una buena orientación hacia
la alimentación pueden darle una buena alimentación a su bebé”

Pediatra ; Hugo Lezama