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7. ASPECTOS TÉCNICOS DE LA ACUICULTURA CON


AGUAS RESIDUALES

7.1 Antecedentes

El uso de aguas residuales en acuicultura se inició en Alemania a fines del siglo


XIX (Prein, 1988) y en Calcuta, India, en 1930. Actualmente, en esta última ciudad se reporta
la mayor superficie de estanques para cultivo de peces alimentados con aguas residuales
crudas (Edwards 1985).

Los sistemas integrados de plantas de tratamiento de aguas servidas y acuicultura


son relativamente recientes y su desarrollo es promovido a nivel mundial por el PNUD y el
Banco Mundial, especialmente en países en desarrollo como el Perú, ya que representan
alternativas de bajo costo para el tratamiento de las aguas servidas y la producción de
alimentos. En la reunión de expertos en la materia, efectuada en diciembre de 1988 en Calcuta,
India, se formularon las siguientes conclusiones respecto a esta tecnología (Bartone 1990):

a. Los sistemas integrados, si se diseñan y administran adecuadamente, representan


una alternativa viable de bajo costo en comparación con las tecnologías
convencionales.

b. La producción neta de 5 a 7 t/ha/año de pescado se reporta en climas tropicales


donde la producción anual es continua y no se recurre a la alimentación
suplementaria ni a la aeración.

c. En climas templados se obtienen tasas similares de producción de 15 a 20 kg/ha/día


durante el período estival.

d. Aún cuando las lagunas de estabilización suelen diseñarse para tratar cargas
orgánicas de 200 a 300 kg de DBO/ha/día, la acuicultura opera con niveles mucho
menores del orden de 10 a 20 kg de DBO/ha/día para garantizar un adecuado
equilibrio entre la productividad, la demanda de oxígeno y el crecimiento de los
peces. Esta diferencia de magnitud en el nivel de carga orgánica manejada por los
sistemas de tratamiento de agua y acuicultura se logra mediante prácticas
adecuadas de operación a fin de no perjudicar el alcance de los objetivos de
ninguna de estas actividades.

e. En general, se utilizan tres tipos de sistemas integrados:

- un solo estanque de peces que recibe aguas servidas crudas directamente (por
ejemplo, Calcuta);
- estanques de crianza precedidos por algún tratamiento primario (por ejemplo,
Hungría); y
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- estanques de crianza donde se vierten aguas residuales tratadas a las que se


les ha eliminado agentes patógenos presentes en el crudo (por ejemplo,
Lima).

7.2 El proyecto de acuicultura de San Juan

7.2.1 Reseña histórica y objetivos del Proyecto

Entre 1983 y 1984 se desarrollaron las dos primeras fases del Proyecto "Esfuerzos
de Investigación, Desarrollo y Demostración sobre Acuicultura en las Lagunas de San Juan,
Lima, Perú", localizado en el complejo de lagunas de estabilización de San Juan, a 16 km al
sur de la ciudad de Lima. Los objetivos básicos fueron evaluar la calidad de agua aceptable
para el cultivo de tilapia del Nilo (Oreochromis niloticus), carpa común (Cyprinus carpio) y
camarón gigante de Malasia (Macrobrachium rosembergii). En estas primeras fases se
consideraron aspectos técnicos relativos a la supervivencia, crecimiento y salud, a fin de
establecer las principales variables de estudio de las fases posteriores. Estas especies fueron
cultivadas en las propias lagunas terciarias, cuaternarias y quintenarias de estabilización.

Dichas experiencias permitieron concluir que, si bien las condiciones ambientales


presentes en las lagunas cuaternarias permitían un buen crecimiento de la tilapia del Nilo (2,8
g/día) y carpa espejo (7,2 g/día), el manejo de las mismas resultaba poco práctica para una
producción comercial. La recomendación principal proponía el cultivo en estanques
construidos ex-profeso y alimentados con efluentes terciarios. Los exámenes microbiológicos,
parasitológicos y toxicológicos no reportaron niveles que indicaran algún impedimento para el
consumo de los productos obtenidos. Por otro lado, el camarón gigante no toleró bien la alta
concentración de amonio presente en el agua.

La Fase III del Proyecto se inició en mayo de 1987 con la implementación de la


Unidad de Acuicultura de San Juan. Esta Unidad recibe el efluente de una laguna terciaria
diseñada para el desarrollo experimental de campañas de producción de tilapia del Nilo en
estanques de tierra. El programa evaluó diferentes contextos de producción y analizó
diferencias en la productividad. Esta tercera fase incluyó la ejecución de una primera campaña
de producción de tilapia nilótica en monocultivo durante los meses de julio a noviembre que
son los de menor temperatura en Lima.

La Fase IV del Proyecto se desarrolló de noviembre de 1988 a mayo de 1990 y tuvo


como principales objetivos:

a. Efectuar un manejo de las lagunas de estabilización que permita obtener un efluente


adecuado para la acuicultura, en términos de calidad sanitaria y fertilidad.

b. Evaluar la calidad sanitaria de los peces cultivados con aguas residuales tratadas y
establecer protocolos para certificar su aptitud para consumo humano directo.

c. Determinar la máxima producción piscícola al utilizar efluentes de lagunas de


estabilización que estimulan la productividad natural, sin generar condiciones
ambientales adversas a los peces o consumidores.
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d. Conducir un estudio socioeconómico para evaluar el potencial de desarrollo del


sistema de tratamiento de aguas residuales para fines acuícolas en condiciones
tropicales y subtropicales.

7.2.2 Sistema de tratamiento

El gráfico 1 muestra las características del complejo de lagunas de estabilización de


San Juan. El efluente terciario, usado para alimentar la unidad de acuicultura, provenía de una
batería de lagunas de estabilización conformada por dos lagunas primarias que operan en
paralelo en una área combinada de 1,14 ha. Éstas se conectaban con una laguna secundaria y
otra terciaria, con superficies de 1,84 y 1,0 ha, respectivamente.

Las cargas hidráulicas aplicadas al sistema durante cada experimento se indican en


el cuadro 1. Las lagunas primarias operaron con una carga orgánica superficial que fluctuó
entre 256 y 412 kg de DBO5 /ha/día. El aforo se ajustó durante la ejecución de los
experimentos para adaptarse a las condiciones climáticas y de acuerdo a los resultados que
fueron obteniéndose. El efluente terciario se mantuvo inicialmente con 1 x 103 coliformes
fecales por 100 ml, de acuerdo a los estándares provisionales fijados por la OMS (1989) para
efluentes destinados a la acuicultura. Luego del primer experimento este nivel se incrementó
hasta un máximo de 1 x 105 .

7.2.3 Unidad de acuicultura

En junio de 1988 se concluyó la construcción de la Unidad Experimental de


Acuicultura de San Juan (gráfico 1), que ocupa una extensión de 1,44 ha de suelo arenoso y
está constituida por:

- doce estanques experimentales de 400 m2 cada uno;


- seis estanques de servicio de 100 m2 cada uno;
- dos estanques demostrativos de 2.700 y 3.200 m2 ; y
- un laboratorio temperado para la producción de alevinos revertidos de tilapia.
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7.2.4 Programa de monitoreo

Se evaluó un conjunto de 52 parámetros fisicoquímicos, biológicos y sanitarios en


el sistema de tratamiento, estanques de cultivo, lodos y peces durante los cuatro períodos
experimentales. En el cuadro 2 se muestran los valores promedio de los parámetros
fisicoquímicos medidos en el sistema de tratamiento, durante los dos años en que se realizaron
los cultivos experimentales.

El monitoreo del sistema de tratamiento estuvo orientado a garantizar la calidad


sanitaria para el uso de los efluentes en acuicultura. Por lo tanto, se recomendó incluir como
mínimo las mediciones diarias de caudal y temperatura del agua (máxima y mínima), y
mensuales de DBO5 y coliformes fecales, tanto en el afluente como en el efluente del sistema.

El sistema de tratamiento de aguas residuales mediante lagunas de estabilización


resultó ser eficiente para obtener una adecuada calidad sanitaria en el agua usada para la
acuicultura. El cuadro 3 y el gráfico 2 muestran la remoción de coliformes fecales en el
sistema.

7.2.5 Programa de investigación en acuicultura

Se realizaron cuatro experimentos consecutivos de 154 y 112 días en las estaciones


de invierno y verano, respectivamente, entre julio de 1988 y abril de 1990.

Las características de los cultivos experimentales se resumen en el cuadro 4. Se


cultivaron poblaciones de tilapia del Nilo (Oreochromis niloticus) con pesos iniciales
promedios de 13 a 77 g, con una densidad de 0,2 a 5 peces/m2 . En los dos últimos
experimentos se efectuó una alimentación suplementaria con subproductos del trigo.

Los resultados permitieron elaborar una matriz de datos y calcular las tasas de
supervivencia (%) y crecimiento (cm/día y g/día), factor de condición (W/L3 ), índice de
crecimiento (Pauly y Hopkins 1983), productividad (kg/ha/día) y capacidad de carga (kg/ha).
La tasa de crecimiento fue tomada como variable respuesta y pareada con los promedios de
cada uno de los parámetros monitoreados. Posteriormente se encontraron las ecuaciones de
regresión múltiple, las que fueron ajustadas a modelos como los descritos por Prein (1985) y
Pauly et al. (1988).

Las características fisicoquímicas del efluente terciario utilizado para alimentar los
estanques de acuicultura se presentan en el cuadro 5. Las curvas de crecimiento y producción
bruta de tilapia del Nilo se pueden apreciar en los gráficos 3 y 4. Los resultados obtenidos en
los cultivos experimentales permiten afirmar que es posible la acuicultura comercial asociada
al uso eficiente de las aguas residuales tratadas en lagunas de estabilización.
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Cuadro 4
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En climas templados como Lima, el crecimiento de tilapia del Nilo es positivo y


similar al obtenido en zonas tropicales durante los meses de verano. Las tilapias revertidas con
un peso inicial de 60 g pueden cultivarse durante 112 días de calor a densidades de 2 peces/m2
para alcanzar un peso comercial de 250 g.

La máxima productividad de los estanques de acuicultura durante el verano fue de


30,79 kg/ha/día, obtenida a partir de una biomasa inicial de 960 kg/ha (gráfico 5). La máxima
capacidad de carga permisible se ha fijado en 4.400 kg/ha, lograda exclusivamente con el
alimento natural que aporta el efluente de las lagunas de estabilización. Dada la alta
productividad primaria, en la práctica se ha verificado que la adición de alimento artificial
complementario no consigue elevar la capacidad de carga de los estanques. Pillay (1990)
señala que en Brasil los estanques fertilizados con abonos orgánicos logran altas producciones
de tilapia, como 1.35 t/ha, sin necesidad de alimento suplementario. Lovshin (1977) reporta
que con poblaciones de tilapia (solo machos) se ha logrado cosechar 3,2 t/ha, utilizando
alimentación suplementaria.

En el período invernal, cuando la temperatura del agua desciende hasta 17 °C, no es


factible efectuar una campaña de producción debido a la baja tasa de crecimiento de la tilapia.
Balarin y Hatton (1979) señalan que entre 17,2 y 19,6 °C se encuentra el límite inferior para
posibilitar el crecimiento de la tilapia. Por ello, se propone almacenar los peces a manera de
una pre-cría invernal hasta que mejore la temperatura.

La supervivencia obtenida en el segundo experimento fue de 88%, valor normal en


el cultivo de tilapia. En cambio, los valores de 80 y 64% registrados en los cultivos de
invierno, denotan la fragilidad de esta especie frente a temperaturas bajas.

La campaña de producción en condiciones climáticas como la de Lima, quedaría


conformada en tres fases (gráfico 6):

a) Reproducción, reversión sexual y pre-cría estival, durante los meses calurosos de


diciembre a abril, hasta lograr un peso de 2 g.

b) Pre-cría invernal, durante los siete meses fríos de mayo a noviembre hasta alcanzar
un peso final mínimo de 60 g.

c) Producción, durante los cuatro meses calurosos de diciembre a marzo, hasta obtener
el peso comercial de 250 g.

En zonas tropicales, la crianza se puede realizar en forma continua, acortando la


segunda fase a tres meses. Estas tres fases se ejecutarían en forma simultánea para lograr hasta
tres campañas al año.
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GRÁFICO 5
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GRÁFICO 6
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7.2.6 Aspectos sanitarios de los peces

Como se observa en el cuadro 6, solo en el tercer experimento se encontró 6% de


peces calificados como "rechazables", según la clasificación propuesta por Buras (1987), que
considera como "buenos" aquellos peces con menos de 50 bacterias por gramo de músculo.

Se ha encontrado evidencias de que una exposición prolongada de los peces a las


aguas con niveles de coliformes fecales superiores a 1 x 105 NMP/100 ml puede originar el
ingreso de bacterias (no necesariamente patógenas) al músculo del pez. Así mismo, se observó
que en los mismos estanques es posible la depuración de estos peces contaminados si las
concentraciones de coliformes retornan a los niveles permisibles durante un período mínimo
de un mes.

Luego de dos años de control sanitario, no fue posible detectar presencia de


bacterias, parásitos y virus patógenos en los peces cultivados. Los niveles de metales pesados,
pesticidas y PCBs estuvieron muy por debajo de los límites establecidos.

De acuerdo con los criterios de calidad para peces de aguas cálidas aplicado por el
Comisión Internacional de Especificaciones Microbiológicas de Alimentos (CIEMA 1983),
los peces cultivados en las condiciones experimentales fueron considerados aptos para
consumo humano directo (cuadro 7).

La calidad sanitaria de los peces fue óptima cuando los estanques tuvieron un nivel
de coliformes fecales de 1 x 104 /100 ml. También se ha encontrado una disminución de por lo
menos una unidad logarítmica entre la carga de coliformes fecales del efluente del sistema de
tratamiento y los estanques de acuicultura (cuadro 8). Por tal razón, el nivel máximo de
coliformes fecales en el efluente debe ser de 1 x 105 /100 ml. Este límite estaría un logaritmo
por encima del recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS 1989), ya que
correspondería a un valor de 1 x 104 para los estanques de peces.

En principio, la calidad sanitaria de los peces estaría asegurada si la colimetría del


efluente del sistema de tratamiento se mantiene por debajo de los límites fijados, por lo que el
monitoreo debe orientarse en ese sentido. En el caso de que la calidad del agua se mantenga
adecuada durante el período del cultivo, el control de calidad sanitaria de los peces cosechados
podría quedar supeditado a las exigencias de las entidades oficiales que certifican la aptitud de
los productos pesqueros para consumo humano directo.

Sin embargo, podrían existir imprevistos que determinen cambios drásticos, aunque
temporales, de la calidad del agua. Ante estas circunstancias, se recomienda verificar que el
nivel de bacterias en el músculo no exceda de 50 UFC (unidades formadoras de colonias) por
gramo. Si ese fuera el caso, el período de cultivo debe extenderse por lo menos un mes
después de ocurrido el imprevisto, con el propósito de lograr una auto-depuración de los
peces.
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Cuadro 6

Calidad sanitaria de los peces cultivados, según la clasificación propuesta por Buras (1987), en
porcentaje

Calidad Concentración de bacterias por Experimento


gramo de músculo 1 2 3 4
Muy bueno 0-10 100 100 86 100
Aceptable 10-50 0 0 8 0
Rechazable Más de 50 0 0 6 0

Cuadro 7

Calidad sanitaria de los peces cultivados, según especificaciones para alimentos de la ICMSF

Parámetro Muestra
1 2 3 4 5
Bacterias totales viables (UFC/g) 250 170 25600 380 1920
Coliformes totales (UFC/g) Negativo 40 1830 150 20
Salmonella (NMP/25 g) Negativo Negativo Negativo Negativo Negativo

Cuadro 8

Promedios geométricos de coliformes fecales en el efluente terciario y en los tanques de


acuicultura

Experimento Coliformes fecales Tasa diaria de


(NMP/100 ml) aporte de agua (%)
Efluentes Estanques
1 1.3E + 0.4 1.0E + 0.3 1.6
2 2.2E + 0.4 2.8E + 0.3 2.2
3 1.4E + 0.4 3.3E + 0.3 2.9
4 3.2E + 0.4 1.1E + 0.3 4.4
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7.2.7 Estudio de mercado

El estudio de mercado de tilapia en Lima metropolitana se realizó entre mayo y


setiembre de 1990 y comprendió cuatro etapas:

- Prueba de concepto (cualitativa), para recoger las primeras opiniones del público
acerca del nuevo producto "tilapia viva".

- Prueba de producto (cuantitativa), para evaluar la aceptación del producto por los
clientes potenciales (amas de casa).

- Prueba preliminar de mercado, para introducir el producto en mercados de


diferentes estratos sociales.

- Prueba definitiva de mercado, para evaluar la aceptación del origen del producto
"tilapia viva criada con aguas residuales tratadas", el precio y la demanda del
mismo.

Los resultados del estudio de mercado de la tilapia viva cultivada en aguas


residuales en Lima metropolitana se pueden sintetizar en los siguientes puntos:

- Esta especie ha logrado ser introducida a nivel experimental en el mercado de Lima


metropolitana con excelentes perspectivas de venta, debido principalmente a que se
oferta en vivo, característica que el consumidor percibe como evidencia de su
frescura.

- Las características sensoriales (apariencia, color, textura, sabor, etc.) de la tilapia


indican que es un sustituto de la cojinova (Serioella violácea) y la chita
(Anisostrumus scapularis).

- El conocimiento del origen del producto (aguas residuales tratadas) no ha sido un


factor que restrinja su consumo. Más bien, una adecuada estrategia de información
y difusión puede incrementar sustancialmente la velocidad de venta e incorporar
nuevos consumidores.

- Por su importancia relativa entre las opciones de comercialización, los mercados


municipales de abasto constituyen el principal punto de introducción del producto.
El 90% de los compradores regulares adquieren pescado en estos mercados.

- Los días sábados y domingos se comercializa hasta 55% de la venta semanal de


pescado. En estos días, la tasa de sustitución de otras especies por tilapia fue de
42% a un precio de venta de US$ 1,00 en junio de 1990.

- El tamaño de comercialización recomendado fue de 250 g/pez. Sin embargo, es


posible comercializar tallas menores sin sufrir una pérdida significativa en el precio
relativo. La demanda potencial de tilapia en Lima metropolitana para 1991 fue de
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casi 47.000 t, siendo la demanda real (por sustitución) de 3.000; 2.200; y 1.300 t a
US$ 0,80; 1,00; y 1,10 por kilo, respectivamente. Esta demanda real y para los
mismos precios podría incrementarse a 4.600; 3.300; y 1.900 t anuales en el año
2000 (cuadro 9).

En suma, el estudio demostró que la tilapia cultivada con aguas residuales tratadas
constituye una nueva alternativa de consumo para el mercado de Lima metropolitana, aún
cuando tradicionalmente el pescado marino haya tenido mayor preferencia.

7.2.8 Evaluación económi ca, financiera y social

Los resultados obtenidos en los cultivos experimentales han permitido elaborar un


modelo para diseñar, dimensionar y establecer los costos para granjas comerciales de cultivo
de tilapia en zonas subtropicales como Lima y proyectarlos a las zonas tropicales (con
temperaturas altas todo el año).

Se desarrollaron flujos de caja a partir de los datos de inversión, costos e ingresos


para los contextos subtropical y tropical.

La evaluación económica y financiera se ha realizado utilizando el valor actual neto


(VAN), ya que este modelo permite estimar en forma cuantitativa el aporte actual del
desarrollo del proyecto sobre la inversión. Adicionalmente, se ha incluido la tasa interna de
retorno (TIR). Como referencia para el análisis financiero, se ha considerado una línea
crediticia de fomento, con un interés anual al rebatir de 8%, un plazo de financiamiento de 5
años y un período de gracia de 2 años. La tasa de descuento de 21,8% fue determinada a partir
de la tasa libre de riesgo, inflación de la moneda y el riesgo inherente a la actividad.

El análisis de sensibilidad tuvo la finalidad de evaluar el comportamiento del VAN


frente a las variaciones del precio de venta, del costo de producción, del tamaño del proyecto y
del costo del terreno.

El modelo desarrollado para diseñar, dimensionar y costear granjas comerciales de


tilapia, ha permitido elaborar dos casos adaptados a los contextos subtropical (como Lima) y
tropical, cuyas características técnicas y económicas se presentan en el cuadro 10.

Una planta de tratamiento para climas subtropicales que reciba un caudal de 100 l/s
puede entregar aproximadamente 76 l/s de agua tratada para su uso en acuicultura, por un
costo de US$ 0,0062/m3 . En el contexto tropical, en donde la mayor temperatura eleva la
eficiencia del sistema, el costo se reduciría a US$ 0,0042/m3 ; no se considera el costo de
terreno por tratarse de áreas eriazas.
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Cuadro 9

Proyecciones de demanda de Tilapia en Lima Metropolitana (TM)

Año Jurel Lisa Bonito Tilapia


1991 52,261 32,623 24,101 2,180
1992 55,054 39,435 25,083 2,192
1993 57,847 37,964 26,066 2,435
1994 60,640 36,075 27,048 2,475
1995 63,433 43,448 28,031 2,698
1996 66,226 42,587 39,013 2,760
1997 69,019 49,046 29,996 2,960
1998 71,812 48,998 30,978 3,035
1999 74,605 54,735 31,961 3,225
2000 77,398 55,328 32,944 3,315

Cuadro 10

Características técnicas y económicas de las granjas comerciales de tilapia

Parámetro Unidad Sub-tropical Tropical


Producto anual TM 52.8 63.4
Período de crianza Meses 15 10
Campañas anuales Número 1.0 2.4
Área total Ha 16.2 9.2
Requerimiento de agua EUA$ 553,000 673,000
Costo construcción EUA$ 114,000 76,000
Costo operación/año EUA$ 17,000 16,400
Costo del agua EUA$/m3 0.0062 0.0042
Costo producción EUA$/tm 397.30 306.60
VAN económico EUA$ 12,800 68,200
VAN financiero EUA$ 46,400 95,200
TIR económico % 24.6 45.1
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Cuando la producción de tilapia absorbe los costos de tratamiento del agua, el costo
por tonelada de pescado asciende a US$ 416,20, en una granja subtropical con capacidad de
52,8 t anuales. En cambio, una granja tropical de 63,4 t anuales reduce sus costos a US$
306,60/t.

Mediante el acceso a líneas crediticias de fomento, la granja subtropical antes citada


reportará un valor actual neto económico (VANE) de US$ 12,800 y financiero (VANF) de
US$ 46.400. Pero la granja tropical también mencionada puede mejorar el VANE a US$
68.200 y el VANF a US$ 95.200, e incluso obtener valores positivos de VANF con tasas de
descuento mayores a 39%, demostrando una alta rentabilidad.

El análisis de sensibilidad permitió determinar que las granjas pueden absorber


hasta 600 y 1.200% del costo del agua tratada, antes que el VANF se torne negativo en los
contextos subtropical y tropical, respectivamente. Del mismo modo, ambos casos soportan un
costo de terreno de hasta US$ 0,50 y 1,70/m2 .

Las condiciones tropicales permiten obtener comparativamente mejores resultados


que en el contexto subtropical, por su mayor capacidad de absorción de costos, de resistencia a
menores precios en el mercado y porque reporta mejor rentabilidad.

7.2.9 Impacto social

Se evaluó el impacto social del proyecto respecto al potencial de desarrollo de los


sistemas integrados, a la generación de empleo, a la ampliación de la frontera agrícola y al
incremento de consumo per cápita de pescado. También se discutieron las restricciones para el
desarrollo de la actividad, así como los riesgos sanitarios y efectos ambientales.

El riesgo considerado sería la contaminación del producto, ocasionada por un


deficiente tratamiento de las aguas residuales, pero factible de ser controlado mediante una
regulación de los caudales y una depuración de los peces.

El principal efecto del tratamiento de las aguas residuales sobre el ambiente es la


reducción drástica de la contaminación de los cuerpos de agua, donde habitualmente se
disponen. También se debe tener en cuenta la recuperación del agua y de nutrientes para la
actividad agrícola.

La incorporación de tierras a la agricultura permitirá formar y conservar suelos en


terrenos eriazos. Por último, estas actividades agrícolas producirán oxígeno que se incorporará
a la atmósfera, lo que mejorará el ambiente de las ciudades.

7.3 Descripción del proceso productivo

La biomasa de algas producida en las lagunas constituye una excelente fuente


alimenticia, pero su extracción y procesamiento aún resultan muy costosos.
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El cultivo de peces en estanques alimentados con efluentes tratados es una


interesante opción para aprovechar la producción de algas. La tilapia del Nilo es una especie
apropiada para cultivarse en aguas tratadas, ya que tiene gran capacidad de filtrar el
fitoplancton.

7.3.1 Variables de crecimiento

Esta especie tropical puede crecer hasta 250 gramos en siete meses si el clima es
cálido todo el año. Cuando se cultiva en una zona subtropical el período puede prolongarse
hasta 12 meses, ya que el crecimiento se reduce durante la época fría del año (gráfico 6).

Si se siembran los peces a una densidad adecuada se logra la talla comercial en el


período fijado. Una mayor cantidad de peces condicionaría que el alimento natural producido
en el estanque no sea suficiente, por lo que al final del cultivo se cosecharían peces más
pequeños.

La biomasa de algas del estanque, también llamada producción primaria, se puede


verificar con el disco Secchi. Una lectura entre 15 y 25 cm de profundidad indica una
adecuada concentración de plancton.

Las aguas residuales tratadas permiten establecer un sistema piscícola productivo


por la gran cantidad de fitoplancton que generan. Ello garantiza que la tilapia crezca bien, sin
necesidad de proporcionarle alimento artificial.

7.3.2 Reproducción de la tilapia

Si bien en la acuicultura es deseable que los peces se reproduzcan en cautiverio, no


resulta una práctica conveniente cuando ésta ocurre en los estanques de producción, ya que
una excesiva cantidad de peces limita su crecimiento por insuficiencia de alimento y espacio.

Una población de machos únicamente, quienes crecen mejor que las hembras,
permite alcanzar la talla comercial en corto tiempo. Actualmente se practica la reversión
sexual como un método efectivo para obtener una población solamente de machos.

El proceso de reproducción controlada se inicia con el lle nado del estanque hasta
alcanzar 50 cm de tirante de agua. Luego se aplica sobre su superficie 150 kg de cal diluida
por hectárea, a fin de flocular las algas y evitar niveles muy bajos de oxígeno que puedan
afectar la reproducción.

Al inicio del período caluroso, un lote de reproductores que previamente ha


permanecido separado por sexo en diferentes estanques, se selecciona por su avanzada
madurez sexual. Estos peces se introducen en el estanque de reproducción a razón de uno por
metro cuadrado y en una proporción de 2 hembras por cada macho.

Los machos excavan nidos en el fondo del estanque y posteriormente estimulan a


las hembras para el desove. Luego que el macho fertiliza los óvulos, éstos son incubados en la
boca de la hembra apareada. A partir del décimo día los alevinos se extraen del estanque de
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reproducción y se trasladan a tanques de cemento con el propósito de iniciar su reversión


sexual.

Se prepara un kilo de alimento artificial con 200 gr de harina de pescado, 200 gr de


harina de soya, 300 gr de harina de trigo y 300 gr de harina de maíz. Se diluye 3 ó 4 pastillas
de la hormona mesterolona en un litro de alcohol medicinal y se mezcla con el alimento antes
descrito. La concentración de esta hormona debe ser de 60 a 100 miligramos por kilo de
alimento.

La reversión sexual será efectiva si los alevinos que inician el proceso miden menos
de 1,8 centímetros y si son alimentados durante 4 semanas consecutivas.

Después de este período, los alevinos revertidos se siembran en los estanques de


tierra para realizar su pre-cría, a una densidad de 15 individuos por metro cuadrado.

7.3.3 Manejo de los estanques

Aún cuando la tilapia es una especie muy resistente, con alguna frecuencia se
presentan casos de mortandad debido a falta de oxígeno en el agua del estanque.

Una proliferación excesiva del plancton puede provocar un descenso del oxígeno
disuelto durante la noche, hasta llegar a niveles cero, que a veces se prolonga más de 8 horas
continuas.

Al inicio los peces boquean en la superficie del agua, con el propósito de obtener
algo de oxígeno. En la siguiente noche esta situación se agrava, hasta provocar la muerte de
los animales. Si se observa boquear a los peces, inmediatamente se debe cambiar el agua o
realizar un encalado del estanque.

Un estanque recién llenado debe contar con un período de estabilización antes de


sembrar los peces. En los días siguientes al llenado normalmente se presenta un incremento
excesivo de los niveles de amonio y nitritos, como parte del proceso de nitrificación. La tilapia
no tolera niveles de amonio superiores a 1,5 miligramos por litro. Por ello, se estima
conveniente esperar un período mínimo hasta reducir los niveles por debajo del letal para estos
peces. Este período normalmente es mayor de 10 días.

Al inicio de la época calurosa se siembran dos peces de 60 gramos por cada metro
cuadrado de espejo de agua. En los cuatro meses siguientes es posible alcanzar un peso final
promedio de 250 gramos. Es indispensable que la biomasa sembrada supere los 950 kilos por
hectárea, con el objeto de controlar la proliferación de plancton y evitar una drástica reducción
de oxígeno.

Al culminar los cuatro meses de cultivo, se puede cosechar alrededor de 4.400 kilos
de peces por cada hectárea de estanque.

Los peces cosechados se trasladan a tanques de cemento con agua corriente, en


donde permanecen por un día como medida adicional para mejorar su calidad. Con un mínimo
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de manipuleo, los peces se embalan en cajas plásticas y se trasladan rápidamente a los


mercados de la ciudad, lográndose ofertar el producto vivo al consumidor. En el caso de
mercados más alejados, el pescado puede conservarse con hielo y mantenerse en cámaras de
frío.

En muchos países, el público consumidor ha demostrado su preferencia por la


tilapia del Nilo, ya que se trata de una especie de carne blanca con poco contenido de grasa.
En 1996, en Lima, Perú, el kilo de tilapia se comercializa entre 2 y 3 dólares americanos.

7.3.4 Referencias para una granja comercial

Resulta más económico derivar los desagües de sectores de la población de 50.000


a 100.000 habitantes hacia zonas aledañas para su tratamiento y reuso, que concentrar
importantes volúmenes en grandes colectores para finalmente arrojarlos al mar.

Las investigaciones efectuadas por el CEPIS en los últimos años han permitido
elaborar un modelo para diseñar, presupuestar y evaluar económicamente sistemas integrados
de tratamiento y reuso de aguas residuales en acuicultura.

Si se conocen las características de cantidad y calidad de los desagües de una


comunidad, es posible dimensionar la planta de tratamiento requerida, así como calcular el
monto de la inversión y el costo de tratamiento. Del mismo modo, se puede diseñar una granja
de peces, estimar la inversión y gastos operacionales, y luego determinar su rentabilidad
económica y financiera.

Así por ejemplo, una ciudad tropical con 50.000 habitantes requerirá una planta de
tratamiento de 9 ha conformada por 8 lagunas de estabilización y con una de inversión de 135
mil dólares podrá tratar 100 litros por segundo, a un costo menor de medio centavo de dólar
por metro cúbico (gráfico 7).

Usando la cuarta parte del agua tratada, podrá operarse una granja piscícola de 9 ha
con capacidad para producir anualmente 60 toneladas de tilapia (gráfico 8). Con una inversión
de 75.000 dólares, un costo de 30 centavos y un precio de venta de ochenta centavos por kilo,
se puede obtener un valor actual neto superior a 68.000 dólares y una tasa interna de retorno
de 45%
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Actualmente América Latina descarga directamente alrededor de 400 m3 /s de aguas


crudas a sus ríos y mares. Estas descargas tratadas en lagunas de estabilización permitirían
recuperar diariamente 480.000 t de nitrógeno, 168.000 t de fósforo y 9.400 t de potasio,
nutrientes esenciales para la agricultura.

Los 240 m3 /s correspondientes a las zonas tropicales de la Región permitirían


desarrollar más de 70.000 ha de cultivo de peces que producirían 500.000 t anuales con un
valor bruto de 400 millones de dólares. Tal producción permitiría incrementar el consumo per
cápita regional de pescado en 3 kilos anuales. También ocuparía a 700 profesionales, 260
técnicos y 8.400 obreros, además de los 25 millones de jornales anuales por concepto de
comercialización.

Las tierras desérticas de muchas partes del mundo pueden convertirse en grandes
campos agrícolas y piscícolas. De esta manera absorberían la mano de obra desocupada de las
ciudades y generarían alimentos para contribuir al abastecimiento oportuno de sus mercados.
Por último, la creación de áreas verdes alrededor de la ciudad, contribuye a purificar el
ambiente deteriorado por la contaminación.

7.4 Referencias bibliográficas

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Stirling, Scotland: University of Stirling.

- Bartone, C. 1990. International perspective on water management and wastewater


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Water Reuse Seminar, Kyoto, 29 July-3 August.

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- Edwards, P. 1985. Aquaculture: a component of low cost sanitation technology.


Washington, DC: World Bank. (Technical paper 36)

- Comisión Internacional de Especificaciones Microbiológicas para Alimentos. 1983.


Técnicas de análisis microbiológicos. 2a. ed. Madrid: CIEMA.

- Moscoso, J.; Nava, H.L. 1988. Reuse of treated ponds effluents for fishculture in
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- Moscoso, J.; Flórez, A. 1991. Reuso en acuicultura de las aguas residuales


tratadas en las lagunas de estabilización de San Juan, Sección I: Resumen
ejecutivo. Lima: CEPIS.

- Moscoso, J.; León, G.; Gil, E. 1991. Reuso en acuicultura de las aguas residuales
tratadas en las lagunas de estabilización de San Juan, Sección II: Tratamiento de
las aguas residuales y aspectos sanitarios. Lima: CEPIS.
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- Moscoso, J.; Nava, H. 1991. Reuso en acuicultura de las aguas residuales tratadas
en las lagunas de estabilización de San Juan, Sección III: Acuicultura. Lima:
CEPIS.

- Moscoso, J.; Egocheaga, L. 1991. Reuso en acuicultura de las aguas residuales


tratadas en las lagunas de estabilización de San Juan, Sección IV: Factibilidad
técnica, económica y social. Lima: CEPIS.

- Pauly, D.; Moreau, J.; Prein, M. 1988. A comparison of overall growth


performance of tilapia in open water. En: Pullin, R., Bhukaswan, T; Tonguthai, K.;
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ICLARM 15 Conference Proceedings. Manila, International Center for Living
Aquatic Resources Management. p. 469-480.

- Pillay, T. 1990. Aquaculture: principles and practices. (Fishing news books 6).

- Prein, M. 1985. The influence of environmental factors on fish production in


tropical ponds investigated with multiple regression. Thesis work. Kiel: University
of Kiel.

- Prein, M. 1988. Wastewater-fed fishculture in Germany. International Seminar on


wastewater reclamation and reuse for aquaculture, Calcutta, 6-9 December.

- OMS. 1989. Health guidelines for the use of wastewater in agriculture and
aquaculture. Ginebra: WHO. (Technical report series 778).
OPS/CEPIS/PUB/96.20
Original: español
Revisión 1: julio 1999

CURSO DE TRATAMIENTO Y USO DE AGUAS RESIDUALES

Tema 7 – Aspectos técnicos de la acuicultura


con aguas residuales

Julio Moscoso Cavallini


Asesor en Uso de Aguas Residuales

Programa de Tratamiento y Uso de Aguas Residuales

Centro Panamericano de Ingeniería Sanitaria y Ciencias del Ambiente


División de Salud y Ambiente
Organización Panamericana de la Salud
Oficina Sanitaria Panamericana - Oficina Regional de la
Organización Mundial de la Salud

Lima

1999

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