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Marianela/46años/Tunja/soltera/3hijos "CUANDO YO SEA GRANDE...

"
Marianela es una mujer de apariencia tranquila; sus manos se mueven con rapidez, y su voz
siempre tiene un afán desconocido; sus ojos brillan con la inocencia de una niña, mientras
que su imagen se endurece en la rutina de una mujer trabajadora del servicio doméstico y
responsable de la crianza de su hermano; ella sonríe constantemente, mientras el tiempo
recorre sus recuerdos. Sus historias se llenaban del espíritu que buscaba divorciarse de las
mujeres que la habían formado: su abuela y su madre; las huellas de las experiencia en los
cuerpos de estas mujeres se habían tatuado en el cuerpo de Helena a tal punto que ella había
crecido sin darse cuenta.
Su cuerpo, un entramado de prevenciones y miedos, profetiza su historia futura, lo que será,
los errores que no cometerá, los agravios que no pasará, los amores que no sufrirá, las
ilusiones que no serán; la niñez y juventud de Helena se pierden prendidas al porvenir, donde
según ella no sabe qué hará, pero estará a salvo.
Mi nombre es Helena, tengo 19 años, vivo en la casa con mi mami, soy la única hija mujer y
tengo un hermano hombre. Mi papá… (hace una pausa prolongada) desde que nací no
vivo con él. Mi mami me tuvo muy joven, ¡muy joven!, eso es porque la gente se deja, uno
como mujer se deja meter mucho cuento, y uno cree que estar con un hombre es una cosa
grandiosa, y pues no, eso no es posible, porque los hombres se encargan de meterle como
tanta basura, entonces uno termina cayendo, y eso le pasó a mi mami, cayó y me tuvo a mí.
Pues mi papá yo lo conozco, pero nada que ver, o sea, papá de uno es el que ve de uno
desde que nace, no después de que ya está hecho y derecho; pero nada que ver, mi papá
no me ha pasado plata, porque uno necesita, no necesitara uno, pues decía no me mande
nada, pero uno necesita también. Por lo menos mi mami; nosotros pagamos arriendo,
cosas así, es como una colaboración para los servicios.
A mí sí fue que uno nació con la idea de que solo nací con mamá y no más, y papá quién
sabe dónde estará; entonces como que uno se olvida de eso y ya; pero siempre le hace a
uno falta; ahorita de grande no le hace falta, de chiquito, en los primeros años, digamos
que si es bebecito y va empezar a caminar, y "cómo es esto", por lo menos ver otras caras,
porque siempre la mamá, la mamá, pero siempre necesita una figura paterna cuando
pequeña, pero cuando grande se olvida de eso. De niña no es que lo necesitaba, sino que
de niña pequeña cuando uno va al colegio ve a sus amiguitos, como pasa en muchas
películas que ve a sus amiguitos que, digamos, a recibir informes van sus dos papas, y uno
de niña ve a su mama sola y piensa …ahhh, yo también quisiera tener papa; y uno se hacía
esas preguntas, pero no por necesidad grande, sino que le da a uno tristeza que todo
mundo con sus papás, ambos, y uno como que solo mamá. Pero al final uno se da cuenta
que solo mi mamá, que ella salió 90
adelante y nos sacó adelante, y uno se da cuenta que pues con eso basta y es suficiente.
Si los hijos se crían con mamá sola, hijo con mamá, o hija con mamá, van a tener siempre
la figura de autoridad de la mamá, pero siempre y cuando la mamá la tenga; pero siempre
les hace falta una voz de mando, si pues como mamá sola le toca pagar, digamos, el
arriendo, si el hijo está estudiando escolaridades entonces le toca muy pesado, mientras
que si tiene la figura de autoridad que es el padre, como tienen voz fuerte, y cuando dicen
ya es ya; entonces hace falta que aporten, porque uno solo con la mamá puede hacer
trabajos, pero por ejemplo un paseo en familia no puede ser entre tres personas que sea
mamá, hijo, hija, tiene que ser entre papá, hijo, hija y mamá.
Los hijos se deben tener dentro del matrimonio, porque eso sería una formación sólida,
por fuera sería muy duro, porque si la pareja lo abandona serían problemas familiares,
digamos, los familiares maternos que siempre son los que han estado ahí, digamos, con las
señoritas de esta época, la que va estar ahí siempre va ser la mamá; que si la niña tuvo una
criaturita, entonces la abuelita de la criaturita es la que va estar pendiente, y la bisabuela;
si tiene los primos, los tíos, eso sería feo, yo creo que sería feo; porque a mi mami le ha
tocado duro. Es que todo toca con demandas, bueno, le responden por un tiempo y
después cumplen sus 18 y se olvidaron de que tenían hijos y hasta ahí llegó la ayuda y
listo, y ¿quién los ayuda después?, nadie, pueden ser mayores, pueden tener trabajo, pero
también necesitan una ayudita del papá. Y lo mejor es que ambos, según si tienen hijos
ambos, pueden contribuir con respeto, dialogando, o con los ingresos para el hogar,
porque si solo uno, digamos el padre, trae todo a la casa, después el padre le va a decir a la
esposa: "No es que usted no trae a la casa, usted no aporta, usted no se qué..."; entonces es
mejor que ambos aporten y ambos sepan qué es lo que aportan a la casa, que usted
porque se queda y usted porque se va no aporta más o aporta menos.
Mi prima demandó al papá de mi primita segunda, y le responde, pero con eso,
prácticamente le toca sacar un millón de pesos para la sola niña, es que le toca duro. Pues
no es un error, es como irresponsabilidad, a uno le dicen que tiene que cuidarse, a uno le
advierten tantas cosas que uno lo primero que hace es meter la pata. Ahí en ese caso, en
una relación de novios puede que hayan hijos y toda la cosa, lo que se quiere es que ya la
mujer quedó embarazada del novio, pues ya consolidarlo, formar la relación sólida del
matrimonio para darle el apoyo a ese hijo, pues más grande va a preguntar el porqué de
las cosas.
Sonia siempre ha vivido con mi abuela, ella era la consentida entre primos, ella era la
consentida de mis abuelos; después de que tuvo la niña empezó a trabajar. Cuando supo
que iba a tener la niña, cuando supo que estaba embarazada canceló semestre; no había
abierto la boca, no había dicho, después asistió a sus controles prenatales, ecografías y
toda la vaina, y estuvo al pendiente de la niña y todo. Nunca sospechamos de que ella
estuviera embarazada, porque ella usaba chaquetas gruesas, pues no se le notaba; claro,
yo sospechaba, pero no decía nada, porque a uno de enano qué le van a 91
creer, yo sospechaba porque cuando esa subía [hacía] como cuando la gente hace así (se
toma la cintura y echa el cuerpo para atrás) y cuando hacía así la chaqueta se inflaba y eso
se notaba, pero yo no decía nada, a mí me preguntaban y yo decía: "No, yo no sé"; mi tía
Beatriz me preguntó una vez, y yo le dije: "ay, yo no sé, yo ni siquiera he estado por acá".
Claro que el día que fue a nacer la niña eso fue una hecatombe; mi prima estaba acostada
en la cama y decía que le dolía el estómago, mi abuela y mi tía estaban haciendo como el
almuerzo, entonces llegó mi prima, y mi tía le dijo que si quería algo, y mi prima: "No que
me duele el estómago, me duele el estómago". Pues bueno, ese día estaba ahí, se fue para
el baño, y ya había reventado fuente, reventó en la cama, ya estaba la china a punto de
salir, ya iba a salir, sino como que las contracciones como que detienen o algo así,
entonces detuvo a la china un momentico, entonces fue al baño común y corriente, pero
entonces allá en el baño le empezaron los dolores, y, mejor dicho, eso subió mi tía y ushhh,
Dios mío, agarra esa china y mi abuela dice: -"¿qué fue, qué fue?", y mi tía -"No mami, que
la Sonia va tener bebé"-, -"¿Y dónde lo tenía metido?"-, -"...Deme plata", y se fueron para el
hospital y nació la pequeña, y sabía que estaba embarazada y ni siquiera fue capaz de
comprar una miserable prenda para la bebe.
El día que se fue Sonia con mi tía para el hospital duró hasta por la noche, no la pudieron
traer donde mi abuela porque mi abuela estaba hecha una fiera, entonces qué peligro que
coja y atente contra la vida de la criaturita, que no tiene la culpa, la de la culpa es de la otra
que eso sí quién la manda a no cuidarse. Mi abuela dijo que no quería ver a Sonia porque
la había embarrado, que, mejor dicho, no la quería ver ni en pintura, mi abuelo también,
porque dijeron: “No, nuestra consentida no...”. Al otro día mi abuela se iba para Cómbita,
por allá al entierro del hermano paterno de un primo, y, claro, aprovecharon que mis
abuelos se fueron para Cómbita y les tocó corra a sacar la cama, corra a sacar las cosas de
Sonia, y cuando mi abuela llegó vio la pieza desocupada y pregunto: ¿qué me hicieron con
la pieza? Eso es como al principio que les da duro, ya después se encariñan, ahorita mi
abuela es boba con esa china..., bueno, todos somos bobos.
Y todo mundo quiere a la niña, porque después de que Sonia tuvo la niña, cuando era
pequeñita, le puso cuidado, pero ya después, como la dejaban donde mis abuelos, y mi tía,
la mamá de Sonia, vivía donde mis abuelos, entonces Sonia como que perdió su conexión
con la niña, de decir: "Yo voy a cuidar a mi niña, porque es mi niña, y voy a ponerle
cuidado", y no, ya después de un tiempo para acá perdió como esa responsabilidad que
tenía con la niña, y se iba y llegaba tarde, se iba a trabajar, se iba a las 10 y llegaba a las 11,
12 de la noche, hasta el otro día, llegaba tomada, y pues eso no es de una mamá, eso es de
una mamá que da un mal ejemplo. Pues, obviamente, hay gente que se consigue unos
trabajos muy extensivos, de horas larguísimas, entonces no, según la necesidad se
consigue un trabajo acorde con su tiempo, para que ellos puedan tener su tiempo
necesario con sus hijos, como hombre, como mujer, porque no es igual que la mujer,
digamos, salió primero del trabajo y llegó a mirar los hijos, y como el hombre sabe que la
mujer está en la casa cuidando los hijos entonces 92
dice: "no, no vayamos", ¿no tienen ambos a su hora estar con los niños, hacer tareas,
colaborar.
Sonia montó un negocio con un man de la China, con un amigo; cuando conocí el negocio
de Sonia no me gustó porque es como un miniapartamento ahí y no me gustó porque la
niña, imagínese si se quedaba ahí, que la niña tuviera necesidad de algo y Sonia estuviera
atendiendo y la niña tuviera que salir o algún man…, no, mejor dicho, eso uno pensaba lo
peor, y más encima todo mundo fumando; Sonia fuma y está jodida de un pulmón, pero no
tienen Sisben, no tienen ni cédula porque todos los papeles los botó y no fue capaz de ir a
denunciar y se quedó sin papeles, los carnés de la niña…; ella de grande vale huevo, pero
es que la niña... Ya ahorita conseguí una fotocopia del carné de la niña y voy a ver si saco
otra fotocopia para tenerla pendiente por si llega a pasar algo, le llega a pasar algo, que la
atiendan por lo menos con la fotocopia. ¡Qué le cuesta ir un viernes, madrugar, pasar los
papeles y esperar que le hagan la visita para que le den el nivel del carné y listo. Pero no,
porque no le queda tiempo, imagínese si tuviera otro criaturo, ahí si la embarrábamos.
Sonia ya no es la consentida, ahorita que tuvo la niña, pues, obvio, la consentida es la china
chica y yo, que colaboro en la casa de mi abuela.
A mi abuela todavía los que quieren le rinden cuentas, porque mi mami ya no, los que
viven ahí en la casa le rinden cuentas, pero nosotros ya no, pa eso tenemos a mi mami, y a
mi mami se le rinden las cuentas y todo, ella sí nos puede regañar, ya de resto no, eso ya le
parece a uno hartísimo que lo regañe a uno otra persona que no sea la mamá de uno.
Cuando tenía como unos seis o siete años, mi abuela estaba preparando algo con mazorca,
una sopa de mazorca o sancocho, y nos pusimos a peliar con Sol y Sonia (primas) de quien
tuviera más tusas, y entonces quedaba una tusa, y Sonia se la quitó a sol, y yo se la quité a
Sonia y yo le pegué; mi abuela me cogió, ¡y yo estaba con mi vestidito!, y mi abuela cogió y
me metió a la alberca y mi vestidito flotaba, pero no me pegó, solo me metió a la alberca,
no más. Una vez mi abuela, porque llegué tarde de estudiar, salimos temprano, en ese
tiempo se salía a las 12, y ese día habíamos salido como a las 10 y algo, entonces llegamos,
nos vinimos con unas amigas ahí al parque del San Diego y nos pusimos a montar
columpio, con una amiga; entonces había una niña ahí y la niña no nos dejaba montar,
entonces nos pusimos a hablarle y que cómo se llamaba y que si nos dejaba montar,
metiéndole cuento, entonces nos hicimos amigas y eran las doce y la niña nos invitó a la
casa que quedaba al frente del Club de Leones (Escuela del Barrio) y nosotros todos
contentos. Se llegó la una y Sara (amiga) se fue porque se le hacia tarde, y yo me quedé
ahí, y se llegaron las dos de la tarde, yo me fui porque igual llegó la familia de la niña.
Venía en el parque del San Diego y venía mi tía Isabel con mi abuela y me pegó el gritó:
"¡Usted por qué llegó tarde, qué son estas horas de salir, que estaba haciendo!", y yo como
corría llegué a la casa, porque en esa época vivíamos en la casa de mi abuela, teníamos
nuestro cuartico y dormíamos las dos con mi mami en un cuartico solo para nosotras, y
entonces llegué a la casa y cogí y destendí la cama y cogí y me puse las cobijas en las
piernas porque yo sabía que me iban a pegar, me puse las cobijas en las piernas y cuando
llegó mi abuela llegó con 93
una mata de verbena, y me quitó las cobijas, y ¡pum!, me dio tres y me quedaron las
piernas marcadas y después con el tiempo se me quitaron.
Eso era terrible, uno se preguntaba que por qué la abuela le tenía que pegar a uno, si el
derecho lo tenía solo la mamá, uno quedaba como con esa inquietud, la del derecho es la
mamá, eso era injusto; la vez que llegué tarde pues hubieran dicho venga, hablemos, ¿por
qué llego tarde?, ¿qué paso?, pero es que de una vez cogieron y tan...; yo no sé por qué,
seguramente acostumbraría, cuando mi mamá era pequeña, las cogía y también les
pegaba y como mi abuelo era de mal genio, también le pegaba a mi abuela, pues yo creo
que se acuerdan de eso y como que les queda y lo repiten.
Bueno, los hombres son muy machistas, cuando el hombre le pega a la mujer es porque es
machismo y puede ser porque la mujer le ha dado motivos, de que la vio con alguien o
alguna cosa; uno puede andar con esta persona porque: "en la casa arreglamos", y le
pegan, y, mejor dicho, eso es injusto. Claro que hay mujeres que se dejan pegar y dicen
que es una caricia o resultan con un ojo negro y dicen no es que me caí, me pegué con la
puerta, con la chapa de la puerta, me caí y me pegué con la pared. No son firmes en decir:
"Sí este hombre me pegó, denúnciemelo por maltrato físico y moral a la persona" (Ríe).
Para que no le pase a uno, la confianza tanto del uno como del otro, es decir, si nosotros
vamos a formar una relación, entonces vamos a trabajar, listo, y cuando llegan, no es que
llegue el esposo y, por decir algo, me demoré, no va decir: "¡ahh es que usted llegó tarde y
ya estaba con el mozo" y pum saque la mano y me la ponga, no, porque se supone que hay
confianza, que si llegué tarde es porque tenía cosas que hacer en la oficina o si se trabaja
en una casa de familia, pero no es que porque llego tarde voy a pegarle y ya; que haya
respeto, que no todo sea a las groserías, porque ¡todo es a las groserías!
Mujer con mujer cuando se pelean, cuando se agarran siempre es por pantalones, por
hombres, sinceramente, no se pelean por algo que valga la pena, sino que se pelean por un
hobby. Mi tía Marcelina, "¡la quiero tanto!" (en tono sarcástico), un día intentó matar a mi
mamá, esa es una agresiva, ese día estaba poseída, estaba drogada. Nosotros vivíamos en
la casa de ella, entonces nosotros hicimos convenio de que se le ayudaba a pagar todo lo
de los servicios, entonces ella empezó a molestar que los servicios llegaban muy caros,
que nosotros gastábamos muchos servicios y nos... llegó y dijo: "ay, es que ustedes se van
de esta casa, que no sé". Un domingo llegó y le botó los recibos a mi mami por la cara y se
quitó la ruana, claro, yo solté lo que tenía en la mano y me tocó separarlas, porque la otra
ya le iba a lanzar un puño, pero entonces yo me metí y como que frenó el brazo, porque
sabía que yo era menor y no podía hacer nada porque la jodida era ella, entonces se frenó
y empezó con un palabrerío, estaba poseída, entonces en mi pieza teníamos un cuchillo,
estábamos desarmando el armario porque nosotros también pensábamos irnos de allá,
entonces cogió a mi mama y la botó hacia la cama y yo me metí entre el cajón y la cama,
abría los pies para atrancar que esta ni se venga pa acá ni esta pa acá, y la otra agarro el
cuchillo y le hizo así a mi mamá (lanza una mano al frente) y mi mamá se corrió y la otra
se cayó y botó el cuchillo. Ya después llegó mi abuelo y mi abuela, que no se hablaban con
mi mami 94
pero por nada del mundo, y mi abuela le decía: "Cálmense que está loca" y mi tía "Yo no
estoy loca, lárguense de mi casa".
Aunque están en la casa de mi abuela, yo no me hablo sino con Soly mi tío Mario, pero
cuando es la hora que va llegar mi tía Marcelina, córrale, eso es mejor no vaya a ser pa
problema. Yo no, yo no soy agresiva, claro que si me sacan la piedra... Yo no soy peliona,
no soy problemática, pa qué, hay gente grandes que se ponen a peliar por algo material,
no pelee, eso se hace y se deshace. Yo no sé cómo se siente uno, se siente como triste que
la gente de uno, la familia, sea peliadora, uno es pelión pero hasta cierto punto, no tanto
como esa gente, esa gente parece que estuviera drogada, esa gente no parece familia de
uno, así los acostumbraron, aprendieron de chiquitos cuando les daban en la trompa; ya
no lo hagan con los otros, ya son viejos hechos y derechos, pues compórtense. Eso uno se
siente uno como tonto dirá: "esta gente por qué pelea", pero ya después..., claro que eso no
se le olvida a uno, eso nunca se le olvida a uno porque sucedió y porque uno lo vivió en
carne propia, lo tiene presente, pero no le afecta en las cosas que haga, no me ha marcado
en nada, la gente se quedó en nada, como la gente del olvido.
Claro que a uno de chiquito sí le pegaban, de niña, ahora de grande no, es que uno cuando
pequeña piensa muchas cosas, yo era feliz, me la pasaba con mis primos jugando,
estudiaba, y los fines de semana se compartían en familia materna, así feliz, yo nunca
estuve triste... Uno cuando era pequeño, a uno le gustaba ver televisión, que digamos en
esa época le dejaban mirar a uno muñecos, y hasta novelas, entonces uno tenía ahí, se
basaba en eso y uno tenía, digamos, como un contexto ahí, mirando ahí novelas y entonces
uno pensaba, puede ser que una señora fuera alcalde en la novela, y entonces uno pensaba
voy a salvar al pueblo y todo eso. Pero ya después de que uno es grande uno dice: las
cosas ya no van a ser así.
Como mi mami trabaja, pues no le ha puesto mucho cuidado a mi hermano y, pues
obviamente, se siente como más libre y dice: "Mi mami está trabajando y puedo hacer lo
que yo quiera", pero entonces ahí entra un punto en el que entro yo como el remplazo de
mi mami y entonces yo le digo: "Cálmense ahí, pues usted no tiene tanta libertad, cuando
no está mi mami yo soy la que estoy a cargo, y usted me tiene que hacer caso a mí, usted
tiene que comportase como un caballero en la casa". Una vez mi mami casi se muere
porque Julián casi se escapó de la casa, volvió porque la patrulla, la policía, estaba que lo
buscaba, imagínese donde no volviera. Ese día mi mami y yo, nosotros lo habíamos visto,
pero yo no sé, Julián salió a correr en el parque de aquí abajo, el de Los Trigales (barrio),
cogió y rompió una botella, ¿a pico botella?, bueno no sé, rompió una botella y me iba a
chuzar e iba a chuzar a unos muchachos que me iban a ayudar a cogerlo. Lo único que
pude hacer es cogerle el brazo así (pone el brazo doblado en la espalda) y me le eché
encima (sube los brazos en señal de triunfo y ríe), después llegó mi primo y lo cogió. Llegó
a la casa y mi mamá empezó; "¿usted por qué se iba a escapar?" (mientras habla respira
entrecortadamente) y funn, se fue al suelo. Dijo el médico: "Si la señora llega cinco
minutos más tarde, la señora ya se habría muerto, ella ya estaba con un pie más allá",
mejor dicho, con medio cuerpo más pa allá que pa acá. 95
Pues mi hermano, por lo general, no le gustaba hacer nada, y yo le ponía más cuidado y le
decía que colaboraba, su cama tiéndala porque ya después de los 10 años ya es un
hombre, ya tiene que tender su cama, tiene que hacer sus cosas, porque ya va creciendo y
tiene que tener sus cositas personales: que el desodorante, no esperar a que los otros le
digan "no es que tiene que echarse desodorante porque va oler mal". ¿Fácil la tarea?, no,
porque es que una no siente tanta confianza con un hombre. ¿Por qué?, porque, pues una
mujer, una de niña le tiene mucho cuidado la mamá, que tenga cuidado, que ojo con las
relaciones sexuales, que cuídese; entonces ya decirle uno eso a mi hermano, pues
obviamente le da como cosita.
A mí mi mami me dice tiene que tener cuidado con el cuerpo, que cuando uno se pega en
lugares que no debe pegarse y no se soba o no va al médico, obviamente, eso le va a
quedar para toda la vida, puede que eso le cause alguna enfermedad o alguna cosa,
entonces debe uno cuidarse su cuerpo, que tener cuidado que cuando una mujer le
empiezan a crecer los senos tiene que tener cuidado porque esa es una zona muy delicada,
que se tiene que hacer el examen, cosa que no me he hecho, que tiene que tener cuidado,
tiene que ir al médico que le miren, que le examinen, y más siendo mujer. Cuando me
desarrollé yo me asusté, bueno no tanto por los senos, pues uno ya mira a la mamá y pues
uno va creciendo, ya toma ideas, pero bueno, ya me salen, pero lo del periodo ¡casi me da
un yeyo! (Ríe), pues ese día estábamos cuidando la casa del padrino de mi hermano y nos
fuimos allá normal, entonces yo entré al baño, yo llevaba un vestido y unas medias de esas
veladas, entonces yo cuando vi eso café pues claro yo creí que estaba enferma o alguna
cosa, casi me desmayo, entonces mi mami llego y dijo: "no, fresca que eso ya se desarrolló,
eso es el periodo" y empezó a contarme ahí eso, y yo "¡¿qué qué?!", uno queda todo
asustado, -por qué a mí-, como que eso nunca me va a pasar a mí. Pues uno a veces que se
preguntaba por qué había eso en el baño, ese paquetico raro, pero nunca me explicaron
nada, pero ya cuando el día llegó ahí sí me explicó todo.
En el colegio, por lo general, cuando van, digamos, las que hacen las charlas, de esas
muchachas que venden las toallas Nosotras, entonces ellas también le dicen a uno que
tiene que tener cuidado con su cuerpo, que tiene que saber manejar su forma de ser, no
tiene que parecerse a nadie, que tiene que ser original, que la persona cuando tenga el
periodo, que es un momento que tiene que estar tranquila, porque hay gente que le baja la
autoestima y que puede en ese momento pasar cosas que uno no quiera, entonces ahí
estar tranquila, pero no bajar la guardia en eso. La charla la hacían a hombres y mujeres
por aparte, porque es que cuando hacen la charla de hombres con mujeres, los hombres
son muy machistas y cuando le daban a uno toallas higiénicas, empiezan a decir: "qué
pena, qué oso", y empiezan, como por decirlo así, a boletearlo a uno.
A uno de mujer ya es normal que le hablen, pero a los hombres les hablan de sexo y se
ponen a reírse, o les hacen reuniones para darles condones, porque hubo un tiempo que
como a las mujeres les daban toallas higiénicas entonces a los hombres, ponían tanta
alharaca y les dieron condones, ahí sí bajaron la guardia. Entonces los condones 96
son para los hombres y las toallas higiénicas para las mujeres, más nunca dijieron que las
mujeres podían cargar con un condón en la billetera o en la maleta o cosas así, porque hay
veces el hombre no puede tener.
Mi mami me enseñó que hay que cuidarse no tanto cuando se tiene el periodo, sino
cuando se desarrolla, tiene que no, como dicen por ahí, "no andar como una cabra para
todo lado", porque se han visto casos que cuando una mujer se desarrolla hay gente,
bueno hay hombres, que abusan de ellas, entonces eso también es una parte que tiene que
tener una en cuenta que tiene uno que andar con cuidado con los seis sentidos puestos,
que tener cuidado, saberse relacionar con las personas, no con todo el mundo, sino con
ciertas personas; no tanta confianza porque eso es terrible, es que muchas de las veces da
uno mucha confianza, como dicen por ahí: "da la mano y se toma todo el brazo", entonces
debe uno saber que si a esta persona le doy la confianza, pero si esta persona ya empieza
que toque aquí o toque allá o cosas así raras, pues entonces como que uno ya sabe que esa
persona quiere algo más que, digámoslo, una amistad, entonces ya pierde confianza.
Yo he sabido poner esos límites, claro, porque lo que pasa es que, pues por lo general los
hombres..., suponiendo en una fiesta un abrazo que no es un abrazo, sino que toca más
parte de la mujer que no debe tocar, digamos la cola, o muy pegado o cosas así, entonces
uno como que "quieto, respetico, porque amigos nada más, y los amigos se quieren hasta
un cierto punto, pero no se pase porque no hay nada entre usted y yo"; yo le digo así
simplemente, puede ser un amigo que lo acepte y diga "sí, me pase" o alguna cosa o puede
ser un amigo que no le gusta que le diga las verdades en la cara, porque eso también
duele, porque si uno se queda callado puede llegar a una violación o algo más, entonces
toca de una vez. Yo nunca he ido a problemas mayores, pues han sabido comprender.
Por eso le digo: si yo quedara embarazada, eso sería terrible, a mi mami le daría el
soponcio, mejor dicho, ahora sí se me muere mi mami (Ríe). Pero yo nada que ver y
mientras que no me pase nada malo (se persigna) estamos bien, todo a su tiempo, todo a
su tiempo, criar sola es muy duro, a mi mami le ha tocado duro. Pues claro, en el colegio,
cuando yo estaba, habían muchas, por decirlo así, muchas chinas bonitas y salían del
colegio y salían embarazadas o estaban desde sexto en adelante embarazadas, y eso es
fruto de la desconfianza que tiene la familia hacia los hijos, como en este caso la familia
que yo tengo nada que ver, entonces es prácticamente con mi mami y a veces con mi
prima que hablamos.
Lo he compartido con una prima, con ella me crie, por decirlo así, pero con ella me siento
en confianza, es como estar con mi mamá, pero yo no puedo contarle mis cosas, digamos,
a otra prima, porque no siento nada, me da pena; en cambio, con Solnos contamos, yo le
cuento, ella me cuenta, yo le digo me pasa esto, entonces ella me dice: no, mire, eso es
normal, por esto y esto; entonces con ella siento una confianza cuando hablamos, hay
veces que nos reunimos y hablamos de cosas, cuando chiquitas nos bañábamos juntas,
uno cuando chiquito se bañaba y uno miraba y le parecía lo más normal que la mujer
porque tenía esto, entonces ahorita de grande pues ya no, pues 97
eso ya es personal de uno, pero digamos, cuando uno se siente gordo, como que esto no le
queda, como que se estresa de todo, entonces como que uno habla, se calma y ella
empieza a decirle a uno no haga esto y cosas así. Es que con Solhablamos a calzón quitado,
cuando nosotras éramos pequeñitas éramos flaquitas, entonces éramos flaquitas y lo
normal y entonces ya cuando empieza engordarse, entonces dice puede ser por comer
mucho o porque a veces hay enfermedades que causan la obesidad, no es que sea obesa,
entonces ella me explica que no es que usted no puede dejar de comer, porque eso no la
engorda, que comer moderadamente no tiene que tener un cuerpo de reina 90-60-90, sino
que tiene que estar bien como se sienta.
Mi cuerpo todo me encanta, me encanta todo, detesto mis pies porque cuando yo era
chiquita me la pasaba descalza y me la pasaba en la calle; entonces se me desarrolló un
hongo en un pie y no me dijeron qué era, y ahí he ido y me toman muestras y no me dicen
qué es, sino que es un hongo y ya, y no se me quita...; son una ceba; las manos son muy
grandes, los dedos son muy gordos, parecen rellenitas con uñas, qué asco, de resto me
siento bien. El cabello a mí me gusta largo, ahorita lo quiero corto, pero no mucho, como
hasta el hombro, pero no más cortico, no me gusta, queda uno como todo lentico.
A mí me dicen que estoy gorda, pero a mí no me importa que me digan que estoy gorda, sí
tengo que bajar, y eso lo sabe uno. Una señora a que días me dijo que yo estaba gorda,
porque cuando yo era más jovencita tenía un cuerpecito, era más flaca, por poco me
desaparezco, esto era pero plano (señala el área abdominal) y ya cuando uno crece se va
estirando, se va engordando. Antes, cuando vivíamos por la misma cuadra de mi abuela,
hacíamos deporte en la U por los senderos o nos íbamos con mi prima Sonia, antes de que
ella tuviera a su niña, allá a la circunvalar y ella tenía sus patines, yo tenía mis patines y
nos íbamos en patines y recorríamos toda la circunvalar y si no arriscábamos cogíamos un
atajo hasta la casa, y como era lejos, ya eso era bastante ejercicio. Pero ya después le cogí
pereza a eso porque incluso ahorita estamos viviendo muchísimo mas arriba; "dejé así, y
punto aparte". Decidí empezar porque mis primas me habían dicho que estoy gorda, y ya
después "suerte, yo soy como soy, es mejor estar gordito, pero no demasiado, ni muy
gordo ni muy flaco, que tenga de donde agarrar".
Hay gente que abusa comiendo, mi mami me dice, coma moderadamente, pero eso nada
que ver, si le gusta como estoy, bien, o si no, no hay nada que hacer, ¡es mi cuerpo y pues
uno hace con su cuerpo lo que quiera!, si se quiere engordar, si se quiere aflacar, pero eso
soy yo, no necesito que un tercero diga: "No, es que usted está gorda, míreme, yo estoy
flaca y usted esta gorda"; entonces no hay que dejarse presionar tanto por ese qué dirán,
sino por ser uno mismo. Hay gente que vive del qué dirán, si un hombre me gusta tengo
que estar una full mamacita para que le guste, porque si a él le gustan 90-60-90, entonces
tengo que estar así, y no es así, uno tiene que estar como lo haga sentir bien.
Hay veces que la gente exagera mucho, hay personas que son muy flacas, como delgadas,
pero es gente que exagera mucho no comiendo, por eso es que se produce la 98
anorexia y la bulimia, porque hay gente que no come, que son delgadas y se ven
supremamente gordas. Por ejemplo, yo me siento bien como estoy, pues obviamente uno
no se va exceder a convertirse en un obeso, sino moderar sus comidas para no estar muy
gordo ni muy flaco, y tampoco para que la gente... La gente critica mucho, que este está
muy gordo, que este está muy flaco, que este no; por eso es que la gente se aburre y le
dicen: "No, es que está muy gordo", y la gente dice: "sí, ¿estoy muy gordo?", y se miran en
un espejo y empieza que el ejercicio, que un gimnasio, y empiezan así.
La gente la va a mirar y la va a criticar, obvio, pues es que uno a veces va por el centro y la
gente empieza a mirarlo como un bicho raro, que si a este sí le quedó el pantalón gordo,
que si este usa cucos, que si usa cachetero, que si es gordo, que si es flaco, si lleva falda,
que si lleva un pantalón apretado, que si se le metió... (Rie), que si se le metió el pantalón
en la cola, o que si lo lleva suelto, entonces es que esa no tiene cola, y tampoco…; que sea
como a la manera de ser, como a su personalidad, vístase como se sienta cómoda.
Claro que uno es muy criticón, hay mujeres, sobre todo mujeres, que es que son... muy
mostronas, bueno, demasiado, y hay mujeres muy mayores que creen ser niñas, pueden
pensarlo sí, pero no vestirse como niñas, porque eso les queda mal, una mujer de años con
leguis, con botas o con una camisa superapretada, que es que se le sale todo, pues no le
queda bien. Una vez en la Plaza de Bolívar pasó una muchacha, no me gusta criticar, pero
eso me parece asqueroso, pasó una muchacha, tenía un cuerpazo, pero una chimba de
cuerpazo, yo qué digo, parecía una reina, sin la cara no, e iba con una camisa como una
espacie de camisa larga, pero llegaba como topcito y se la amarró superdurísimo, que los
senos se veían las venas, yo decía: "a qué horas se va a estallar", y se veía superasqueroso,
me dio asco, eso es superasqueroso, pero eso ya es mostrar lo demás, póngase algo que se
sienta cómodo, muestre sí, no hay problema, pero es que se excede demasiado.
Hay mujeres que se ponen faldas por el trabajo, pero puede que no les gusta usar falda, y
si se lo pueden cambiar por pantalón y no hay problema, y hay jefes o jefas que no ponen
problema, también hay mujeres que usan falda, pero porque quieren vestirse todas
mostronas, digamos, una no se va a poner una falda a estilo al ras de la colita, porque eso
ya es mostrón. Hay mujeres que se ponen medias oscuras de esas que parecen de lana y
no hay nada qué mostrar, hay que saber mostrar alguito, pero no tanto, pues tampoco hay
que ser uno muy tapado, al menos mostrar el cuello, no excederse porque hay gente que
se pone unas camisas muy escotadas y se le sale todo, entonces hay gente que tienen sus
atributos y toda la cuestión o tiene muuchooos atributos, entonces muestren, pero no
mucho; en cambio, uno que es todo pobrecito de ahí (ríe), pues uno muestra poquito. Si
usted es una mujer impecable de su casa, entonces no va ponerse una cosita chiquitica o
de pijamitas, ¡tampoco es que se va a vestir como una monja, no!, sino, digamos, una falda
hasta la rodilla o con otros accesorios o, digamos, aquí (señala el pecho) el escote y no
tienen que ser en la mitad del cuerpo casi en el ombligo, sino que no mostrar tanto, y le
agrega accesorios para que no se vea eso muy pelado, yo creo que es eso. 99
Yo me visto como me siento cómoda. La moda, dicen por ahí, "la moda no incomoda";
digamos ahorita la juventud, es decir, mi época, se habla mucho de moda, de diseñadores
y toda la cuestión, porque hay chinos y chinas que se ponen ¡unas pintas!, y que tienen
que estar a la moda, yo no sé qué le ven de moda a eso, hay manes con los pelos parados y
los pelos volteados pal otro lado, y no, - (las chicas) !es que me encanta que porque es emo
o ska!- o cosas así, y el chino - : "No, es que ella es linda porque siempre está a la moda"-.
Creen que es ufff, que tienen plata, que porque se visten bien o están a la moda que tiene
plata, entonces no, la moda a mí no me gusta, yo me visto como me siento bien, y listo;
porque hay gente que se pone ropa apretada que no se puede ni mover, entonces es mejor
usar ropa que se pueda mover los brazos, las piernas, todo, porque para sentirse como
una salchicha metida entre un vestido, -no, nada que ver, la moda, nada que ver-.
A mí me gusta más pantalones; hubo una época que tenía faldas, pero ya no, es que uno de
grande, o dependiendo la mentalidad que cada mujer tenga, puede usar falda o pantalón,
yo uso pantalón o sudaderas, cosas así. Pero yo no uso falda porque es que va
precisamente por algún lado y empiezan, esa gente, esos manes borrachos por ahí, pasa
uno por cualquier lado y le van a echar un piropo, ¡que pierna!, eso es más asqueroso
(hace gesto de desagrado, saca la lengua); entonces use mejor uno sus pantalones, no
apretados, porque las piernas necesitan oxígeno, y yo por eso no uso faldas; en el colegio
usaba falda obligatoriamente, y cuando uno estaba chiquito le ponían muchos vestidos,
pero ya después no, uno cuando es más grande pues uno ve. Claro que uno se pone, pero
no cómodo, cositas sueltas no muy ceñidas, porque eso en otras épocas se puede mostrar
no mentiras; de resto vístase cómodo, como quiera.
Pero vístase o no se vista, muestre o no muestre, igual van a echar piropos; claro que se
pasan, es que hay gente, bueno hay hombres que echan unos piropos más cebas, le echan
un piropo asqueroso, no me pregunte cuál porque, mejor dicho, reviento, que le digan a
uno un piropo, una persona mayor a usted, que le diga: "¡mamacita!" o algo así, pero se lo
diga con un tono muy asqueroso, ¿usted qué siente? A uno le da asco, no lo va a ignorar
porque usted, lo primero, tiene los sentidos puestos, y le dicen algo, usted llega y se voltea
y mejor dicho: -como que contesto o mejor sigo-, pero voltea y uno entre sí dice: "uyy, este
no sé qué, qué asco". Salga o no salga, vístase mostrando o no mostrando, ahí van a estar
los malditos piropos. Claro que es que yo sí me volteo y les miento la abuela, a mí sí me
sacan la piedra, porque es que pasa uno y le dicen una vez, y pasa uno por otro lado y otro
man le dice lo mismo, ya uno se desespera y se voltea y le dice, porque qué mamera. De
una persona joven no se siente, porque es como de edades, que vaya uno por el centro y le
diga a uno un viejito, ya con lapida en las costillas, y le diga eso, pues eso es horrible. Un
joven uno no contesta, uno no se siente mal. Porque es que los viejitos decrépitos lo dicen
de una manera que uyyy (hace gesto de asco), y los chicos lo dicen suave, lo normal, pues
le van a decir "mamacita", pero suave, en tono suave, no se lo dicen como los manes
viejitos, con estilo de insinuación; en cambio, los jóvenes a veces lo dicen como por
molestar, que le dice "¡Adiós mamacita!" y uno como que quedo ahí y ya, pero hay unos
que mejor dicho. 100
Si la gente se viste muy mostrona quiere decir que no les importa y que se sienten
superhalagados con todo eso, no, porque eso ya es regalarse, no es que va el primer
bobazo que aparezca y le va decir: "venga que me enamoré de usted y que vamos a una
pieza", y ya y listo, y al otro día resultó embarazada, porque -"no dijo usted que quería
estar conmigo, no que quería tener hijos"-. Mientras que si usted siente cariño y después
de un buen tiempo que vea que como que la relación como que fluye, fluye, fluye, entonces
no es que un mes y ya, sino espere un buen tiempo que se conozcan, persona con persona,
que diga me conviene o no me conviene.
Yo no he tenido novio, no tengo, pero sí me gustaría, el "no" definitivo de un novio
obviamente empieza por la mamá, por la familia, que le dicen: "primero está el estudio,
primero salga adelante", y uno como que le queda ahí, y bueno, está bien, porque si usted
se consigue un novio y lo hace a escondidas, lo primero que se va saber es eso..., porque es
que los amigos, las amigas van y están hablando con la mama y ¡pomm!, se les salió
entonces, lo echan al agua a uno y uno ya no puede decir "no", porque se sonroja al
instante, y si el muchacho está ahí al lado de uno ahí sí la embarramos. Pero hay chicos
con los que he estado y nos gustamos, pero no se ha dado la oportunidad. Porque es que
hay gente que es como muy visionaria para el futuro, entonces -"ay, me enamoré de este y
nos vamos a casar, y hasta que la muerte nos separe"-, eso está mal que una persona en
una fiesta vaya y haga eso, hay gente que en una fiesta empieza a tomar mucho, y no
moderan su forma de tomar, no es que tomo, tomo, tomo, porque nadie es de palo,
entonces pues obviamente uno siente y que por X o Y motivo una niña que dice "yo no sé
tomar", -"no, nosotros le enseñamos hágale, hágale"- y cuando al otro día se despierta,
porque casos se han visto que hay niñas que llegan y se levantan desnudas, y "pero por
qué, yo qué hice anoche", y por lo general, por eso es que las abusan sexualmente.
Mi hermano en el colegio ha tenido novias; un hombre, por lo general, va tener novias; mi
mami y mi prima dicen que eso, que uno que es una señorita no le queda bien que ande
con uno y con otro, por dignidad; que eso daría mal que pensar, entonces el qué dirán,
porque empiezan a decir que ella se acuesta con este, que luego se va pa donde el este, y
entonces ahí empiezan los problemas que lo pueden afectar a uno. En muchas ocasiones,
no en todas, hay hombres que son machistas, que creen que la mujer es bajo, algo
insignificante, y no ven más allá de sus narices; hay veces que llegan y dicen: "no, es que la
mujer debe ser de la casa"; eso es lo que piensan mínimamente, entonces la mujer tiene
que quedarse en la casa, ver de los niños, hacer de comer y todo eso. Pero hay muchas
mujeres que no, que trabajan, ¡antes ven de sus esposos!, y eso tampoco lo ven. En cambio
hay algunos hombres a los que le dicen: "ah, es que usted tiene cinco", empiezan -"¿Yo,
pero yo? Eso qué" -y se van y ya, mientras que a uno sí le dicen…, uno en lugar de decir:
"ahh, ese es mi problema", uno como que se sonroja, le pasan calores, de todo, hace el
"oso"; entonces a uno de mujer le preocupa que le digan eso, a un hombre le vale nada que
le digan o no le digan. Uno de mujer hay que mantener la dignidad, pues claro, porque
después dicen: "Esa mujer perdió la dignidad, la tiene por el suelo, mire con cuántos anda,
ya no tiene dignidad, eso ya no tiene presencia", y eso es feo que le digan a uno así, eso es
horrible, pues no me han dicho (Ríe). 101
No está bien visto, es que los hombres, por lo general, se ven más con mujeres; a un
hombre cuando tiene muchas mujeres se le dice mujeriego, perro y todas las cosas; pero si
una mujer tiene muchos hombres ahí se alargan los sinónimos que le ponen a la mujer, y
la diferencia es muchísima. Yo no he visto la primera mujer que tenga de tres novios en
adelante, como los hombres sí tienen una aquí, otra allá, una aquí, otra allá, y tanto que en
el círculo social se hacen llamar los duros, donde yo puedo tener más y usted no, porque
es que yo soy más que usted. Pues uno de mujer, pues obviamente, no le quedaría, a un
hombre pues ya uno le parece muy normal que ande con muchas mujeres, pero a una
mujer no le queda, que usted anda con este, usted anda con este y usted anda con este,
entonces, ¿con cuál es que anda?
No importa el qué dirán, pero no va ir a montarse con cinco allá de una vez o con dos, no,
porque una mujer también debe tener su dignidad, y los hombres…, claro que los hombres
ya tienen la dignidad por abajo. La dignidad es como los valores que le inculca desde
chiquita, cuando chiquita no le van a decir: "usted cuando grande tiene que irse con cinco
hombres y, mejor dicho, de ahí no pase". No, es enseñar, después del colegio, universidad,
después que tenga un trabajo o alguna cosa y sea responsable, bueno ya tiene su esposo, o
su novio, su esposo, no dicen ¡sus esposos!; le dicen: tiene que ser una mujer de su casa,
pero tampoco dejársela montar. ¿Qué es dejársela montar?, pues que no le vayan a poner
la mano encima o la vayan a tratar mal, sino dialogando, porque ese será un buen ejemplo
para sus hijos en el futuro.
Y si la mujer no se quiere casar puede tener una relación con un novio o yo no sé, pero no
a extenderse, obviamente que si tiene un novio y después de cinco meses terminamos no
es "cinco meses y un día y venga Ud. conmigo"; no, toca es esperar, tienen su tiempo,
empieza pues, obviamente, el ciclo del despecho (Ríe); entonces terminó su tiempo de
estar sola y consiguió una persona que le interese; obvio, se tiene que conocer, porque no
es "ahh…, quiere ser mi novio", sino que tiene su tiempo, todo a su tiempo, paso a paso.
Porque si empieza con otro mañana, eso es ya tener muchos novios, eso es andar de
casquisuelta, y eso la critica la gente, la gente es muy criticona, aquí en Colombia son muy
criticones. No hay que dar para que los demás hablen, pues a uno le puede no importar
que los demás hablen, no es por el qué dirán, allá cada uno en su cuento, pero tampoco
uno mismo, uno hablándose como entre sí: "yo que haría con tantos novios, yo cuando sea
grande no falta el del qué dirán, el X que va decir y le recuerde, es que usted estaba con
este y con este", y uno como que cae en cuenta del qué dirán y es feo.
Ahorita esto si ya es la hecatombe, porque eso ahorita sí todo esas chinitas de colegio que
están en sexto, séptimo pa’rriba (sube la voz), todas embarazadas, o salen de once
embarazadas o entran a la universidad y embarazadas, pero eso no son todas, lo que pasa
es que hay algunas que pelan el diente, que entre sonrisita y sonrisita, que si el chino le
dijo: "ayyy, es que usted es muy linda, es que usted me gusta, es que no sé qué", la china:
ahhhh, sí..., vamos una fiesta..., ahhh… sí, qué chévere..., ¿bailamos...? Pueden echarle de
todo, y al otro día amanece (hace un gesto de desnudez), después con barriga, y hasta ahí
fue, y se desaparecieron, y después ¿qué pasó?, que se quedó 102
dormida, y entonces ahí empiezan a echarle el cuento a la china, y ella queda ahí sola,
embarazada. Las mujeres de antes, como la época de las abuelitas, se cuidaban, y eso
porque si la hija se metía con el muchachito, si ya estaba embarazada los obligaban a
casarse, mientras que ahorita ¿quién obliga a quien?, ya ahorita si quedó embarazada
¡suerte!, porque quién me va a obligar, nadie me va a poner una pistola en la cabeza y me
va a obligar; en la época de antes nadie ponía pistola en la cabeza, pero eran como más
bravos (ríe) y ya sabían que era una obligación, que si se decía que perjudicaba a la mujer
entonces usted tenía que casarse con ella, "o se casa o lo mato", era eso, pero ahorita no,
"cásese si quiere".
Claro, ahorita la unión tienen que ser con iguales, para evitar problemas con los familiares
de los demás, si se casa un pobre con un rico eso es lo peor, porque como no son del
mismo nivel la gente dice que tienen que ser del mismo nivel para poderse casar, los
pobres no piensan eso, los pobres piensan..., hay pobres de pobres, hay pobres que
piensan que sus hijos pues terminan bachillerato, son profesionales y pum, se casaron con
un rico y se hace millonario y listo. En cambio un rico no va pensar en casarse con un
pobre, dirá: "antes tengo que darle", y la familia: "¡No, usted pa’qué se casó con esa
hambrienta!"; van a empezar a decir un poco de vainazos ahí, no dejar que los
sentimientos son los que valen, sino lo que importa es el billete.
Si me enamoro, que tenga un trabajo, que sea responsable y todo, tampoco que me
mantenga, porque si se va a casar uno con una persona que no hace nada, que es pobre y no
hace nada, que se la pasa echado, uno pa’qué se casa, preferiblemente sola y feliz, porque
qué va a ser uno manteniendo dos y más, supongamos que se tiene hijos y toda la vaina, uno
va tener que mantener a los hijos, al marido; si se pone las pilas y trabaja, se habla, y si va a
ser responsable y va a ayudar con lo económico y va a ayudar con sus hijos hasta de pronto,
¿porque el amor qué hace?, se siente a gusto y listo, pero uno no se va a quedar a que el amor
le trabaje, le traiga de comer, para el arriendo o para las necesidades...; el amor es como una
ilusión... Toca esperar a grande para saber qué es lo que uno va a hacer...: ¿ahora soy grande,
como voy a ser? -Me has corchado-.

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