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LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander

Serie Novias Escocesas #5

LYNSAY SANDS

Rendirse
Al
Highlander

~2~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5

Contenido

Pág.

Argumento. …………………………………………………………………………….. 4
Prólogo. …………………………………………………………………………….. 5
Capítulo 1. …………………………………………………………………………….. 10
Capítulo 2. …………………………………………………………………………….. 23
Capítulo 3. …………………………………………………………………………….. 40
Capítulo 4. …………………………………………………………………………….. 55
Capítulo 5. …………………………………………………………………………….. 69
Capítulo 6. …………………………………………………………………………….. 84
Capítulo 7. …………………………………………………………………………….. 97
Capítulo 8. …………………………………………………………………………….. 111
Capítulo 9. …………………………………………………………………………….. 126
Capítulo 10. …………………………………………………………………………….. 137
Capítulo 11. …………………………………………………………………………….. 151
Capítulo 12. …………………………………………………………………………….. 163
Capítulo 13. …………………………………………………………………………….. 177
Capítulo 14. …………………………………………………………………………….. 189
Capítulo 15. …………………………………………………………………………….. 204
Capítulo 16. …………………………………………………………………………….. 217
Capítulo 17. …………………………………………………………………………….. 228
Capítulo 18. …………………………………………………………………………….. 239

~3~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5

Serie Novias Escocesas # 5

Original:

Surrender To The Highlander.

30 de enero de 2018

Avon ISBN-10: 0062468987

Traducción:

Nanaromal.

Junio / 2018

Rendirse Al Highlander

Edith Drummond les debe su vida a Niels Buchanan y sus hermanos. Despertar
después de una enfermedad en un castillo invadido por los resistentes Highlanders es
desconcertante, pero también lo es saber que está siendo envenenada lentamente.
Niels insiste en quedarse a su lado, y Edith pronto descubre que su salvaje atracción
hacia el feroz guerrero es aún más peligrosa.

Niels nunca ha conocido a una mujer más valiente o atractiva que Lady Edith. La idea
de que una muchacha tan bondadosa sea obligada a ingresar en un convento de
monjas es más de lo que cualquier vigoroso escocés podría soportar. Con mucho gusto
se casará con ella. Pero aunque cargarla en brazos es fácil, se necesitará toda su
habilidad para derrotar a los enemigos implacables de su familia y convencerla de que
se rinda a su dulce abrazo...

~4~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5

Prólogo

Niels miró fijamente a su cuñado por un momento y luego explotó, "¿Eres tonto? No
vamos a ningún lado cerca de Drummond. Estamos viajando al norte a McKay.
Drummond está al sur”.

"Aye", Geordie estuvo de acuerdo junto a él, frunciendo el ceño al marido de su


hermana por si acaso. "Solo nos detuvimos aquí para dejar a Rory y ver a nuestra
hermana".

"Lo sé", gruñó Greer, con los ojos pasando de los cuatro hermanos Buchanan sentados
en su mesa, al rellano superior, como si esperara que su esposa apareciera en
cualquier momento.

Niels siguió su mirada, pero no había nada que ver. El rellano estaba vacío. Miró de
vuelta a su cuñado a tiempo para ver su boca reafirmarse con determinación mientras
volvía su atención hacia ellos

"Sé que se agregaría a su viaje, y no lo pediría, pero Saidh está realmente preocupada
por su amiga Edith Drummond. En la última carta que recibió hace cuatro semanas,
Edith se sentía mal, y desde entonces no ha tenido noticias suyas. No ha respondido a
sus últimos tres mensajes y está preocupada.”

"Entonces envía un maldito mensajero", espetó Niels con impaciencia. "Dios mío,
hombre. Drummond está casi tan al sur como Buchanan y luego un día más al este.
Tendríamos que viajar todo el camino de regreso allí, y luego regresar aquí solo para
continuar con nuestro viaje original”.

"Agregaría al menos una semana a nuestro viaje", Geordie frunció el ceño.

"Más", comentó Alick con una mueca. "Tenemos que ir despacio con la carreta".
Sacudiendo la cabeza, dijo, "Niels tiene razón. Harías mejor enviando un mensajero”.

"¿No me oíste decir que Edith no ha respondido a los últimos tres mensajes que
enviamos?" Greer gruñó con frustración. "El último mensajero no pudo ni siquiera entrar
al patio de Drummond. Lo obligaron a dejar el mensaje en la puerta. Regresó sin
noticias. Saidh está empecinada y decidida a cabalgar ella misma a Drummond y ver si
Edith está bien”.

"¿Y qué?" Preguntó Niels con desconcierto. "Saidh ha viajado antes y lo hará de nuevo.
¿Qué…?"

~5~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5
"Está encinta" rugió Greer como si hubieran olvidado ese pequeño hecho.

"Aye, con un niño, no muerta", dijo Niels con disgusto. "Buen Señor, tiene cinco meses
más antes del nacimiento del bebé. Seguramente no tratas de envolverla en mantas y
evitar que haga cualquier cosa solo porque ella… ¡Dios mío!", Terminó con
consternación cuando Saidh apareció en la parte superior del rellano y comenzó a bajar
las escaleras. Su querida, generalmente ágil hermana, parecía que se había tragado un
ternero... o dos. Dios santo, su vientre estaba tan hinchado y redondo que podría llevar
tres terneros allí, pensó con consternación. Parecía tan desgarbada que temió que se
balanceara y rodara por las escaleras como una pelota.

Aparentemente, él no era el único con esa preocupación, ya que Greer MacDonnell


incluso se estaba poniendo de pie para apresurarse al lado de su esposa. Todos
miraron en silencioso asombro mientras se apresuraba a subir las escaleras, la tomaba
en sus brazos y la bajaba por el resto del camino.

"Te dije que envíes tu doncella a buscarme cuando estés lista para venir abajo", Greer
estaba diciendo con exasperación mientras se acercaba a la mesa.

"Estoy encinta, no lisiada, esposo”, se quejó Saidh con irritación. "Soy perfectamente
capaz de caminar sin ayuda".

"Tal vez, pero no puedo soportar verlo", gruñó Greer, sentándola en la silla junto a la
suya con un cuidado que no era notable en su voz. "Cada vez que comienzas a bajar,
temo que solo te adelantes y ruedes como un..." Las palabras de Greer murieron en
una mueca de disculpa cuando notó la expresión rígida de Saidh. "Solo me preocupo,"
terminó sin convicción y luego ofreció una sonrisa conciliadora y dijo: "Dejaré que el
cocinero sepa que estás abajo y lista para desayunar".

"Gracias, esposo", murmuró Saidh, sonriendo cuando se inclinó para presionar un beso
en su frente antes de irse. Ella lo vio cruzar la gran sala hacia las cocinas con su cara
suave de afecto y aprecio, los cuales estaban definitivamente ausentes cuando se
volvió hacia sus hermanos. Su mirada se deslizó sobre sus expresiones abiertas y
luego dio un pequeño bufido de disgusto y dijo, "¿Bien? ¿No están contentos de
verme?”

Niels arqueó las cejas ante la pregunta gruñona y dejó que sus ojos se movieran para
acomodarse en su sobredimensionado estómago. "Aye. Todos estamos sorprendidos
de que haya mucho que ver”.

"Pareces lista para estallar", dijo Alick con asombro. "¿Creí que solo tenías cuatro
meses?"

"Así es", murmuró infelizmente, levantando una mano para acariciar su vientre
protuberante. "Creo que tal vez llevo dos niños".

~6~
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Serie Novias Escocesas #5
"Estoy pensando en seis", dijo Geordie y recibió una fuerte patada de su hermana por
su molestia.

Niels contuvo una carcajada y se volvió hacia Rory, con las cejas levantadas. "¿Debería
estar así de grande?"

Rory cerró la boca y se levantó para moverse al lado de Saidh. Poniéndole una mano
en el codo, él trató de obligarla a ponerse de pie. "Deberíamos retirarnos arriba por
unos momentos".

"¿Por encima de las escaleras?" Preguntó Saidh frunciendo el ceño y luego sacudió la
cabeza y tiró de su brazo para liberarlo de su agarre. "Nay. Acabo de bajar. Además,
tengo hambre y...”

"Y necesito examinarte", Rory respondió con firmeza. "Puedes comer después".

"O", sugirió con igual firmeza, "Podrías examinarme después de haber comido".

"O bien, podría examinarte aquí mismo en frente de todos", dijo en un tono de buen
humor que no suavizó la amenaza.

Los ojos de Saidh se estrecharon, y su mano se movió hacia el sgian-dubh en su


cintura. "Inténtalo y te pincharé donde estás parado".

"Saidh", se quejó Rory con exasperación, y luego dejó escapar un suspiro, intentó
razonar. "Estas mucho más grande de lo que deberías en esta etapa del juego,
muchacha. Puede ser peligroso. Necesito escuchar el latido de tu corazón y ver que no
está bajo tensión. Yo también deseo…"

"Estoy bien", dijo sombríamente, y cuando él abrió la boca para seguir discutiendo,
agregó: "Pero haré un trato contigo".

"¿Cuál es?" Preguntó Rory y Niels no pudo evitar darse cuenta de que su hermano
estaba repentinamente desconfiado. Lo habría estado él mismo. Uno nunca sabía qué
saldría de la boca de su hermana.

"Prométeme acompañarme para ver cómo está Edith y dejaré que me examines", dijo
firmemente Saidh.

Rory frunció el ceño. "Saidh, no puedes estar pensando seriamente en montar a caballo
en tu estado. Tú…"

"Bien. Entonces no necesito examinarme," Saidh se deshizo de su diatriba y se volvió


hacia la mesa.

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Serie Novias Escocesas #5
Niels bajó la cabeza para ocultar su diversión mientras Rory maldecía, pero luego su
hermano dejó escapar un suspiro. "Bien. Si dejas que te examine, veré qué puedo
hacer por tu amiga Edith," dijo en breve. "Ahora... ¿Podrías por favor dejarme
examinarte y estar seguro de que todo está bien?”

Saidh se relajó e incluso sonrió levemente, pero luego hizo una mueca y dijo: "Aye.
Pero dame un minuto para descansar al menos. Fue un poco agotador bajar".

Esa última parte fue admitida casi vergonzosamente, lo que les dijo que era verdad. A
Saidh no le gustaba mostrar debilidad.

"Te llevaré arriba", le ofreció Rory suavemente.

Ella parpadeó ante la sugerencia y comenzó a reír, pero esta murió rápidamente
cuando miró a Rory. Con los ojos ligeramente abiertos, se fijó en su hermano antes
delgado, y dijo: "Has engordado y tus brazos tienen músculos".

"Aye". Niels sonrió ante su comentario. "Ha estado entrenando en el patio de prácticas
con el resto de nosotros desde que llegamos a casa después de acompañar a Dougall y
Murine a Carmichael".

"¿Por qué?", Preguntó con sorpresa.

Rory hizo una mueca y respondió: "Nuestros hermanos han estado trabajando
arduamente para convencerme de que aunque saber cómo curar las heridas de los
demás es bueno, puede ser prudente aprender cómo defenderme para poder
mantenerme lo suficientemente sano como para hacerlo." Sonrió torcidamente y añadió:
"Después de todos los problemas que Dougall, tú y sus parejas encontraron
recientemente, parece que pueden estar en lo cierto".

"Aye", dijo Saidh solemnemente. "Lo están."

Rory asintió, y luego levantó una ceja. "¿Te llevo arriba?"

Lanzando un suspiro, sacudió su cabeza y se puso de pie. "Caminaré. Sin embargo,


puedes sostener mi brazo para asegurar que no me balancee excesivamente y caiga
hacia atrás por las escaleras".

Rory simplemente asintió y la tomó del brazo para guiarla.

Niels los vio irse, su mirada se entrecerró con preocupación en el estómago


protuberante de Saidh.

"Seguramente ella ya no debería estar tan grande" Geordie murmuró frunciendo el


ceño.

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Serie Novias Escocesas #5
Niels negó con la cabeza. "Nunca había visto algo así desde el principio".

"Aye, y entiendes lo que eso significa", dijo Alick sombríamente. Cuando los otros dos
hombres simplemente lo miraron en cuestión, él puso los ojos en blanco y señaló:
"Ahora tendremos que ir a Drummond. No podemos dejar que Saidh intente viajar allí
en su estado. Infiernos, estaba resoplando y cansada solo por bajar las escaleras y
Greer la cargó la mayoría del camino".

Niels dejó escapar un suspiro, pero asintió. "Nos desviaremos por ese camino a nuestro
regreso de McKay y…"

"No pueden esperar tanto tiempo".

Ese comentario decidido atrajo su mirada y vio que su cuñado estaba volviendo.
Adelgazando la boca, Niels dijo: "Tenemos que hacer una entrega, Greer. Los McKay
esperan su tela tejida para el final de la semana. No podemos solo…"

"Haré que seis de mis hombres hagan la entrega en su lugar", dijo firmemente Greer.
"Pero tienen que ir directamente a Drummond, de lo contrario Saidh insistirá en ir ella
misma".

Niels frunció los labios mientras consideraba la oferta y luego respondió: "Doce
hombres".

"¿Doce?" Greer frunció el ceño ante la sugerencia. "Solo iban a ser los tres llevando
eso allí".

"Aye, pero es una tela costosa, y un Buchanan vale cuatro de tus guerreros promedio",
señaló. "Por supuesto, si quieres viajar con ellos, entonces puedes conseguirlo con
ocho además de ti".

Algo consolado por la implicación de que era un guerrero tan bueno como sus cuñados,
Greer suspiró y luego asintió. "Está bien. Doce guerreros llevarán la tela tejida a
McKay”.

Niels sonrió lentamente. Había cambiado un largo e incómodo viaje de dos semanas a
McKay y de vuelta, por una excursión de dos días mucho más rápida a Drummond. La
vida era buena cuando los cielos te sonreían así.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 1

"¡Infierno sangriento! Abre la maldita puerta y déjanos ver a lady Edith, prostituta, o la
incendiaremos y la destruiremos nosotros mismos.

La amenaza de Alick hizo que Niels negara con la cabeza, porque amenazas eran todo
lo que eran. Prender fuego a las puertas de Drummond y destruirlas era lo último que
iban a hacer. Demonios, con solo los cuatro allí, no estaba seguro incluso de poder
hacerlo. Aunque sería divertido intentarlo, reconoció.

Aun así, no estaban aquí para comenzar una guerra con los Drummonds. Su única
tarea era verificar la amiga de su hermana e informarla sobre cómo le iba.
Desafortunadamente, era probable que nada impidiera a Saidh insistir en tratar de
llegar hasta allí para verla a menos que ellos vieran a la muchacha realmente. Y
sospechaba que incluso eso no sería suficiente. Una vez que acordaron venir, había
insistido en acompañarlos. Solo la advertencia de Rory de que el viaje podría dañar a
sus bebés por nacer la había mantenido en casa. Bueno, eso y la amenaza de Greer de
atarla a su cama y mantenerla allí bajo vigilancia hasta que nacieran los bebés si ella
siquiera intentaba montar un caballo.

Niels negó con la cabeza otra vez ante la idea. Bebes, en plural. Así que su hermana
llevaba más de un bebé. Rory sospechaba que eran gemelos. Alick y Geordie estaban
seguros de que iban a ser más y estaban apostando por el tamaño de la camada. Alick
estaba pronosticando tres, Geordie cuatro. Niels pensaba que ambos estaban locos.
Las mujeres no tenían camadas de tres y cuatro. Los gemelos en sí eran una rareza.
Tres o cuatro... bien... había escuchado historias de viejas sobre alguna mujer
regresando cuando, o desde una tierra lejana, tenía tres hijos en un solo nacimiento,
pero estaba seguro de que un viejo cuento de mujeres era todo lo que era. Aun así...
Saidh estaba lo suficientemente grande como para llevar tres o cuatro.

Levantando la mirada hacia los hombres en la torre de la puerta, gritó con calma: "Solo
deseamos ver a su señora. Nuestra hermana, su amiga Lady Saidh MacDonnell, está
preocupada por su bienestar. Si no quieren abrir la puerta, entonces solo hagan que su
señora venga a la puerta y déjennos verla para que podamos decirle a nuestra hermana
que está bien y saludable”.

Los hombres en la pared se miraron el uno al otro, y luego uno dijo: "Pensé que era
Lady Edith en la que estaban interesados, ¿no en nuestra señora?"

"Aye". Niels frunció el ceño. "¿Edith no es la señora aquí? Entendía que su madre
estaba muerta y que ella era la señora aquí ahora".

~ 10 ~
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"Ella lo era", respondió el hombre, "pero Brodie, el hijo menor, se casó y su esposa,
Lady Victoria ahora es la señora aquí. Y el laird ordenó que la puerta no se abriera a
nadie hasta que regresen”.

Las cejas de Niels se levantaron ante las noticias. No había oído hablar del matrimonio,
y estaba un poco sorprendido de que a la esposa del hijo más joven se le permitiera
intervenir y reemplazar a la hija de la casa como señora. Quizás al tener el hermano
mayor y el heredero casado, su esposa como futura señora de Drummond habría
intervenido, ¿pero la esposa del hijo más joven?

Aun así, ese no era su problema para tratar aquí, así que simplemente dejó de lado esa
información para considerarla más tarde, y dijo: "Bueno, estamos interesados en Lady
Edith. Saidh ha enviado tres mensajeros y no ha recibido respuesta. Nos pidió que
viniéramos a verla para asegurarnos de que estaba bien". Hizo una pausa y luego
agregó: "Estaba segura de que, siendo la hospitalidad escocesa lo que es, no
rechazarías los nobles como a los meros mensajeros."

Los hombres que estaban sobre ellos comenzaron a discutir de un lado a otro. Parecía
que alguien allí sentía que se les debería permitir la entrada. Otros obviamente no
estuvieron de acuerdo y él esperó pacientemente mientras la discusión continuaba. Sin
embargo, después de un momento, repitió: "No necesitamos entrar para agradar a
nuestra hermana. Si solo consiguen que lady Edith venga a la puerta para asegurarnos
que está bien, podríamos seguir nuestro camino”.

"Ella no puede", dijo el orador anterior y luego admitió con gravedad: "Ella está
demasiado débil para llegar a la puerta".

"¿Todavía está enferma entonces?", Preguntó Rory junto a él, con preocupación en su
voz.

"Mucho". El hombre parecía cansado. "Ella se agarra a un hilo y ha durado más que su
padre y los dos hermanos mayores, pero no estará por mucho tiempo en este mundo.
Una pena también, es una luchadora. Hubiera sido una buena líder de clan".

Los ojos de Niels se abrieron de par en par ante la noticia de que Ronald Drummond y
sus dos hijos mayores estaban muertos, pero supuso que explicaba cómo la esposa del
hijo menor podía ahora actuar como dama del castillo.

Rory se movió inquieto en la silla de al lado, y Niels lo miró mientras señalaba: "Saidh
no será feliz si nos vamos sin más noticias que el que la mujer todavía sufre".

Asintiendo con la cabeza, Niels levantó la cabeza para gritar: "No vamos a irnos de aquí
hasta que la muchacha esté muerta o de nuevo en pie. Nuestra hermana no aceptaría
nada menos”.

~ 11 ~
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"Les diremos cuando ella muera", respondió la voz.

Rory murmuró por lo bajo.

Haciendo caso omiso de él, Niels dijo: "O podrían dejarnos entrar. Mi hermano aquí es
el mejor sanador de Escocia. Todavía puede ser capaz de salvar a Lady Edith”.

El silencio reinó por un momento y luego se produjo otra discusión en siseo arriba.

Niels intentó esperar pacientemente, pero realmente, esto no servía. Apenas había
pensado eso cuando Alick murmuró enojado detrás de él, "Esto es una farsa. Un
escocés no deja a los aliados de pie en la puerta como mendigos y les niega la
entrada".

"No si quieren mantenerlos como aliados", Geordie estuvo de acuerdo en un gruñido.

"Geordie y Alick tienen razón, Niels. Esto está más allá de los límites", dijo Rory
sombríamente. "Podría estar ahí ahora ayudando a la muchacha, si lo hicieran pero…"

Niels levantó su mano para silenciarlo y gritó, "¡Dejen de discutir allá arriba y usen sus
cabezas! Mi hermano puede ayudarla. ¿Les importa tan poco su familia? ¿Qué pensará
su laird, su hermano, cuando le diga que la dejaron morir? Y me aseguraré bastante de
decírselo. Ahora abran las malditas puertas patanes descuidados, o yo treparé por esta
pared, les cortaré la garganta y la abriré yo mis...”

Niels se detuvo en mitad de la amenaza cuando la puerta comenzó a levantarse.


Levantando las cejas, murmuró, "Hmm. Parece que están abriendo la puerta”.

"No puedo imaginar por qué", murmuró Rory, poniendo los ojos en blanco.

"Debe ser mi encanto natural", dijo Niels encogiéndose de hombros, instando su caballo
a avanzar antes de que los hombres en el muro pudieran cambiar de opinión y bajar la
puerta de nuevo.

"Oh aye, por cierto. El encanto Buchanan gana cada vez," Geordie estuvo de acuerdo,
siguiéndolo al puente.

"Hermanos", reprendió Rory, instando a su montura entre las suyas, "si este es el tipo
de encanto que exhiben regularmente en sus viajes, no es de extrañar que siempre
tenga que coserlos cuando vuelven".

"Nay, el encanto no tiene nada que ver con eso", le aseguró Niels. "La piedad es la
razón por la que regresamos con heridas".

"¿Piedad?" Preguntó Rory con desconcierto.

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"Aye, bueno, tenemos que dejar que nuestros adversarios consigan hacernos al menos
una o dos heridas, de lo contrario estarían desmoralizados por ser superados tan
rotundamente", dijo Niels razonablemente.

"Y luego estás tú", agregó Geordie.

"¿Yo?" Preguntó Rory con consternación. "¿Qué tengo que ver con que sean heridos
en batalla?"

"Bueno, necesitas practicar la curación, ¿no? Entonces, junto con ayudar a nuestra
oposición a sentirse menos incompetente con la espada, te damos algo que hacer
cuando volvemos y eso te hace sentir importante. No es que nunca nos hayas
agradecido," añadió Geordie en un gruñido.

"¿Agradecerles?" Preguntó Rory con incredulidad. "¿Están locos? ustedes…seguro que


no… ¿no pueden hablar en serio?”

"Nay", dijo Niels con diversión. "Pero te hicimos creerlo por un minuto, ¿verdad?"

Rory cerró la boca y frunció el ceño de uno a otro.

"¿Ves toda la diversión que te pierdes cuando insistes en quedarte en casa con tus
viejos libros polvorientos y medicinas en lugar de viajar con nosotros?", Dijo Alick
alegremente, instando a su propia montura junto a la de Geordie cuando comenzaron a
cruzar el patio.

Rory le lanzó una expresión de disgusto. "¿Te refieres a comer el polvo levantado por el
caballo delante del mío, dormir en el suelo frío y duro y ser hecho una burla en cada
esquina?", Preguntó con sequedad. "Oh, aye, lamento haberme perdido eso todos
estos años".

"A veces, Rory, estoy seguro de que eres un changeling1", dijo Geordie con tristeza.

"Nay", le aseguró Niels. "Es más probable que Dios solo haya confundido un poco las
cosas cuando estaba haciendo a Saidh y Rory".

"¿Quieres decir que tal vez pretendía que Saidh fuera un muchacho y Rory una
muchacha?", Sugirió Geordie con una amplia sonrisa. "Creo que pudimos haber
discutido eso una o dos veces en nuestros viajes".

"Aye, lo hicimos", estuvo de acuerdo Alick.

"¿Qué?" Rory graznó con consternación.

1
un niño que se cree ha sido sustituido en secreto por hadas por el niño real de los padres, en la infancia.

~ 13 ~
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"Bueno, piénsalo", dijo Alick mientras se acercaban a los escalones que conducían a las
puertas dobles delanteras de la fortaleza de Drummond. "Te gusta quedarte en casa en
el agradable y cálido castillo con tus hierbas y demás, mientras que a Saidh le gusta
viajar y luchar, y puede atravesar un hombre tan pronto como lo ve. Es como si
estuviera destinada a ser otro hermano, y tú la hermana", dijo razonablemente mientras
todos frenaban los escalones.

Niels miró a Rory para ver cómo estaba tomando la sugerencia y se echó a reír ante su
expresión horrorizada, igual que Geordie y Alick.

"Oh, aye, ríanse los tres", dijo Rory agriamente. "Pero les garantizo que no me olvidaré
de esto la próxima vez que necesiten sus heridas atendidas".

Sin dejar de reír, Niels se encogió de hombros y se deslizó fuera de su montura con
despreocupación. Cualquiera que fuera el pequeño castigo que Rory eligiera más tarde,
valía la pena la reacción que tuvieron sus burlas.

"¿Van a salvar a Lady Edith?"

Niels se dio vuelta al escuchar esa suave pregunta para encontrar a un pequeño niño
rubio con ojos serios detrás de él. Al lado del muchacho había un perro de caza con un
pelaje leonado rojo. La bestia era casi más alta que el niño en cuatro patas y
ciertamente unas seis piedras más pesado. Niels nunca había visto un perro tan
grande.

"¿Lo harán?" Preguntó el niño, recordándole su pregunta.

"Haremos nuestro mejor esfuerzo", dijo Niels, volviendo su atención al muchacho.

"La abuela dice que nadie puede salvarla", el muchacho les dijo con tristeza.

"Ella lo hace, ¿verdad?", Preguntó Niels en voz baja.

El asintió. "Aye. Dice que es solo cuestión de tiempo y que se irá igual que el laird y sus
muchachos”.

Niels frunció el ceño ante la sugerencia y luego dijo: "Tal vez eso hubiera sido cierto
antes de llegar aquí, pero ¿ves a ese hombre allí?" Señaló a Rory cuando su hermano
terminó de desmontar y caminó alrededor de su caballo para unirse a ellos. "Ese es mi
hermano Rory, y él es el mejor sanador de toda Escocia. Si hay alguien que pueda
ayudar a tu señora a superar lo que la está enfermando, es él".

El chico miró a Rory con solemnidad y luego asintió. "Eso espero, mi señor. Porque
estaría terriblemente triste si ella muriera. Es muy amable. No como la esposa del Laird
Brodie, Lady Victoria. Si ella hubiera sido la señora cuando llegamos aquí, nunca nos
hubiera dejado quedarnos”.
~ 14 ~
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"Hmm." Niels hizo el sonido puramente porque no sabía qué más decir, y luego se
enderezó de nuevo, y preguntó: "¿Cuál es tu nombre, muchacho?"

"Ronson, mi señor".

"¿No eres de Drummond, Ronson?" Preguntó Rory.

"Nay, mi señor. Somos del sur. Pero cuando mi Má murió, el Laird de nuestro viejo
hogar nos echó. La abuela y yo, viajamos mucho para encontrar un nuevo hogar, pero
nadie nos quería. Dijeron que Ella era demasiado vieja y yo demasiado joven. Pero
Lady Edith, nos recibió y puso a la abuela a trabajar. También me dio un trabajo",
agregó con orgullo.

"¿Y qué trabajo es ese?", Preguntó Niels, sospechando que ya sabía la respuesta.

"Cuido a Laddie aquí", anunció, con el pecho hinchado mientras arrojaba un delgado
brazo sobre la enorme bestia. "Tiene que ser alimentado, paseado y cepillado, pero
Lady Edith no tiene tiempo para eso, con todo el trabajo que tiene que hacer por aquí.
Es un trabajo muy importante", les aseguró.

"Aye", estuvo de acuerdo Niels. "Muy importante. Ella tuvo suerte de que vinieras”.

"Aye", dijo Ronson, luego frunció el ceño y admitió: "Pero tal vez no tenga el trabajo por
mucho más tiempo".

"¿Por qué es eso?" Preguntó Rory.

Ronson vaciló, su expresión no era feliz, y luego confió: "Escuché a algunas de las
doncellas hablando y dijeron que incluso si Lady Edith sobrevive, no se quedara mucho
tiempo en Drummond. Dijeron tan seguro como escupir, que Lady Victoria la haría
enviar a la Abadía a la primera oportunidad que tenga y si eso sucede, es posible que
tengamos que irnos." Se mordió el labio brevemente y luego preguntó: "¿Creen que
ellas están en lo correcto? ¿Lady Victoria enviará a Lady Edith lejos?”

"No lo sé, muchacho", admitió Niels. "Pero vamos a atender un problema a la vez y
conseguir a Lady Edith bien nuevamente antes de comenzar a preocuparnos por otros
asuntos. ¿Si?"

"Aye", dijo Ronson, y luego frotó la cabeza del sabueso entre las orejas. "Lady Edith
está muy encariñada de Laddie. He estado pensando que tal vez se sentiría mejor si él
la visitara. Es muy importante para ella. Podría mejorar si él la visitara".

"Hmm", dijo Niels, conteniendo una sonrisa. "Aye, bueno, tal vez más tarde. Estoy
pensando que deberíamos dejar que mi hermano la mire primero y vea qué puede
hacer. ¿Está bien?"

~ 15 ~
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"Aye", dijo con decepción y luego echó un vistazo más allá de Niels y frunció el ceño.
"Aquí vienen Tormod y Cawley".

Niels miró por encima de su hombro para ver a dos hombres acercándose. Ambos eran
viejos, uno era alto y delgado con una cojera, el otro más corto y redondo.

"¿Y quiénes son Tormod y Cawley?", Preguntó Rory mientras Niels se volvía.

"Eran el primero y el segundo del antiguo laird, ahora son el primero y el segundo del
Laird Brodie. Tormod es el alto. Él es el primero... y no le gusto", agregó con tristeza.

"Estoy seguro de que eso no es cierto", le aseguró Rory.

"Aye. Lo es”, insistió Ronson. "Le dijo a Lady Edith que no nos permitiera quedarnos.
Dijo que no seríamos más que problemas y más bocas que alimentar”.

"Ah", dijo Niels y casi suspiró. No tenía dudas de que el hombre había dicho eso. Y
probablemente justo en frente del niño y su abuela. Lo cual fue desafortunado.

"Será mejor que lleve a Laddie y lo cepille ahora", murmuró Ronson.

Niels asintió y vio que el niño guiaba al perro grande antes de volverse para observar a
Tormod y Cawley que se acercaban. Parecía que la pareja estaba discutiendo y se
preguntó si serían la fuente de todas las discusiones que habían tenido lugar en el muro
mientras esperaban que se les permitiera entrar. Si es así, las disputas continuaron a
pesar de estar dentro ahora.

"Basta", espetó Tormod mientras la pareja se detenía frente a Niels y sus hermanos.
Luego dirigió su atención hacia ellos y anunció sombríamente: "Aquí Cawley conseguirá
que alguien atienda sus caballos mientras los llevo a Lady Edith".

Niels entrecerró los ojos ante el saludo poco cortés, pero simplemente preguntó: "¿Eres
tú el que está a cargo mientras el Laird Drummond está fuera?"

"Aye. Tristemente lo estoy," admitió, su boca se torció con disgusto y luego anunció,
"Soy Tormod Drummond, el hombre que responderá por dejarte entrar aquí. Y ese es
Cawley Drummond, que no será considerado responsable a pesar de que su fastidio y
acoso son la razón detrás de esto”.

"Es lo correcto y lo sabes", dijo Cawley con vehemencia. "Si pueden salvar la pequeña
Edith...”

"Aye, aye", interrumpió Tormod con irritación. "Los dejé entrar, ¿no es así? A pesar del
hecho de que Brodie probablemente me hará azotar por ello”.

~ 16 ~
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Las cejas de Niels se levantaron ante la falta de respeto evidente en el hecho de que el
hombre no usara el título de Brodie, y la sugerencia de que lo castigaría por dejarlos
entrar.

"Tu laird difícilmente se quejará cuando Rory salve la vida de su hermana", dijo Alick
con seriedad, acercándose a Niels.

"Mi hermano Alick", le presentó Niels, y luego agregó, "Y esos son Geordie, Rory y yo
soy Niels".

Tormod simplemente asintió y se volvió para responder al comentario de Alick con un


cansancio: "Si él salva su vida, puede que tengas razón. Lamentablemente, no pienso
que eso sea posible”. Con esa sombría nota, giró para guiar el camino hacia las
escaleras.

"¿Por qué? ¿Qué le pasa?" Preguntó Rory con interés, fuertemente sobre los talones
del hombre.

Tormod negó con la cabeza. "Demonios si lo sé. Nadie lo hace. Eso vino
repentinamente. Golpeó al Laird Drummond y sus hijos mayores Roderick y Hamish a la
vez. El viejo laird murió la primera noche, pero su salud ya estaba en declive de todos
modos. Los dos muchachos, sin embargo, eran jóvenes y fuertes y duraron tres o
cuatro días. Lady Edith los cuidó", agregó, no sonando feliz al respecto. Entendieron por
qué cuando agregó: "Le dije que no debería, que atraparía lo que fuera que tenían y
que debía dejar su cuidado a los sirvientes. Pero no, tenía que atenderlos ella misma, y
por supuesto yo tenía razón. Apenas enterramos al segundo muchacho, ella cayó
enferma”.

"¿Y Brodie y su nueva esposa?", Preguntó Niels, y notó la forma en que la boca del
hombre se adelgazaba.

"Cuando la criada de Lady Edith cayó enferma mientras la atendía, Brodie entró en
pánico. Temía que se extendiera a través del clan y lo tomara a él y su esposa también.
Decidió que debían irse a orillas más seguras un tiempo." Deteniéndose en las puertas
dobles, echó un vistazo hacia atrás cuando abrió una y añadió mordazmente: "No podía
salir de aquí lo suficientemente rápido. Recogió a su nueva esposa, su doncella y
algunas ropas, tomó una pequeña escolta de seis hombres y salió corriendo como si los
perros del infierno estuvieran pisándole los talones”.

"Dejando el resto de ustedes aquí para manejar las cosas", conjeturó Niels con sorna
mientras conducía a sus hermanos a través de la puerta que el hombre tenía abierta
para ellos.

"Aye. Solo así", asintió Tormod con disgusto. Los siguió y dejó que la puerta se cerrara
de golpe detrás de él.

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Serie Novias Escocesas #5
"¿Y Lady Edith ha estado enferma por más de cuatro semanas?" Preguntó Rory
mientras Tormod los guiaba a través de la concurrida sala. Eso era lo que Saidh les
había dicho, así que se sorprendieron cuando Tormod negó con la cabeza.

"Un poco más de tres semanas", corrigió Tormod.

"Pero nuestra hermana dijo que la última carta de Edith fue hace un mes y mencionó
sentirse mal entonces", dijo Niels lentamente.

"Oh, aye". Tormod lo rechazó. "Una semana antes de esta nueva dolencia, Lady Edith
tenía un poco de malestar estomacal. Ella ya había superado el problema cuando esta
nueva enfermedad atacó hace tres semanas”.

"Ah". Niels asintió. "Y sus hermanos murieron en cuestión de días, ¿pero ella todavía
está viva pero enferma?".

"Aye. Es una luchadora, es lo que es. Habría sido una buena líder del clan. Mejor que
ese hermano inútil de ella. Sin embargo, Brodie está bien y bello y en algún lugar a
salvo, mientras ella se debilita cada día." Se frotó la parte posterior del cuello con una
mano cuando llegaron a la escalera del segundo nivel. Liderando el camino hacia
arriba, agregó, "Estoy sorprendido de que haya durado tanto como lo ha hecho, pero no
puede durar mucho más".

"¿Cuáles son los síntomas?" Preguntó Rory.

"Con el padre y los hermanos era dolor de cabeza, mareos, dificultad para respirar y
alucinaciones. Por lo que he oído, es casi lo mismo con Lady Edith, excepto que tiene
náuseas por encima de todo, no puede mantener cualquier cosa y se debilita más cada
día".

Habían llegado a la parte superior de las escaleras y se quedaron en silencio mientras


seguían a Tormod hasta la segunda puerta del pasillo. Deteniéndose allí, el hombre se
volvió para examinarlos, antes de fijar su mirada en Rory. "¿Eres el sanador?"

"Aye", dijo Rory, orgulloso.

Tormod asintió. "Puedes entrar entonces. Los otros tres pueden esperar aquí”.

Niels simplemente asintió. De todos modos, no deseaba ingresar a una habitación de


enfermo. Diablos, en verdad, prefería estar esperando en la mesa de caballetes,
preferiblemente con un poco de cerveza o aguamiel. Sin embargo, no se le había dado
esa opción, así que esperaría en el pasillo para escuchar lo que Rory tenía que decir
sobre el asunto de la salud de Lady Edith.

Cuando Tormod abrió la puerta, balanceándola silenciosamente hacia adentro, Niels


miró hacia dentro con leve curiosidad, su mirada deslizándose rápidamente por la
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habitación. Una figura yacía en la cama en un extremo, mientras que en el otro lado de
la habitación, una mujer canosa, delgada y encorvada por la edad, vertía líquido de un
vial con patas en una gran taza de metal de lo que parecía ser aguamiel. Mientras la
miraba, ella tapó el frasco, lo puso sobre la mesa y luego se volvió para llevar el brebaje
que le había hecho a la mujer en la cama.

"Vamos, hora de tu medicina", canturreó la mujer con acento inglés. Se detuvo al lado
de la cama y se sentó en el borde.

Los ojos de Niels se movieron hacia la mujer en la cama entonces. Ella no había
reaccionado en absoluto a las palabras de la mujer. Permaneció inmóvil y silenciosa, su
rostro aterradoramente pálido. Su piel era tan blanca como la nieve helada en el
invierno. En comparación, su cabello estaba hecho de hebras rojas y doradas, que
parecían fuego alrededor de su cara, notó con interés y luego su visión fue brevemente
oscurecida cuando Rory se movió a la habitación.

"¿Qué le está dando?" Preguntó Rory acercándose a la cama. La vieja doncella se


sobresaltó y miró a su alrededor con sorpresa.

"Oh mi Dios, me sobresaltó", dijo la mujer, presionando una mano en su pecho y


sacudiendo la cabeza. Luego frunció el ceño levemente y miró de Rory a Tormod, que
todavía estaba en el pasillo con Niels y los demás. Su mirada se deslizó sobre todos
ellos con confusión y le preguntó a Tormod: "¿Quiénes son estos hombres? ¿Por qué
los dejas entrar a la habitación de la señora, estando tan enferma?”

"Estos hombres son Buchanan", anunció Tormod y luego asintió con la cabeza a Rory,
justo cuando él tomaba la bebida de la mano de la anciana y la levantaba para oler el
contenido. "Él es un sanador. Piensa que puede ayudar a Lady Edith”.

"Bueno, y gracias a Dios por eso", dijo la mujer en un suspiro y se puso de pie. "Tal vez
pueda descansar un poco. No me siento muy bien después de atender a Lady Edith día
y noche y...” Sus palabras y pasos terminaron abruptamente y sus ojos se abrieron de
par en par, su boca formó una O alarmada mientras vacilaba donde estaba parada. Sus
manos comenzaron a levantarse y a los lados como si buscara algo para sostenerse, y
luego simplemente se desplomó.

Niels había comenzado a entrar en la habitación en el momento en que ella titubeó por
primera vez. Atrapó a la anciana mientras caía y la tomó en sus brazos. Al notar la
palidez de su rostro, cambió su mirada a Tormod, alzando las cejas al ver que el
hombre se había alejado con miedo de la puerta y ahora estaba detrás de Alick y
Geordie en el pasillo.

"¿Hay alguna otra habitación donde podamos poner a la doncella?", Preguntó Niels,
mirando como Rory comenzaba a examinar a la mujer. Su hermano levantó los
párpados para ver sus ojos, y luego abrió la boca para una breve mirada antes de

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levantar una mano y examinar sus uñas. Niels observó en silencio, sin tener idea de lo
que su hermano estaba buscando. Le pareció que Rory estaba haciendo lo mismo que
Dougall cuando examinaba un caballo para saber si era sano.

"Nay. Esta es la habitación de la enfermedad", dijo Tormod en voz alta. "Ella la tiene
ahora también y aquí es donde se quedará".

"Acuéstala junto a Lady Edith", dijo Rory sombríamente, soltando la mano de la mujer y
dejándola caer.

Asintiendo con la cabeza, Niels llevó a la mujer a la cama y la dejó junto a Edith
Drummond. Su mirada se deslizó hacia la mujer más joven mientras él se enderezaba,
y su cabello ardiente sobre la almohada llamó su atención. La mujer podía verse como
moribunda, pero su cabello era algo especial, pensó, y luego observó a Rory realizar el
mismo examen a Lady Edith como el de la doncella hace un momento.

"¿Sabes qué enfermedad es?", Preguntó Niels, su mirada se posó en sus ojos mientras
Rory levantaba los dos párpados a la vez. Notó que estaban dilatados, los círculos
negros eran tan grandes que casi borraban el verde brillante de sus ojos, dejando solo
un fino borde del hermoso color alrededor de la pupila. No tenía idea de lo que eso
significaba.

Al principio, Rory no respondió, tomándose el tiempo para revisar dentro de su boca y


luego levantar una mano delicada para mirar sus uñas. Finalmente, él bajó la mano y se
volvió para recoger la bebida que la vieja solterona había estado a punto de darle.
Apretando la boca, dejó la bebida y anunció sombríamente: "Es veneno, no
enfermedad".

"¿Qué?" Tormod comenzó a regresar a la habitación, pero luego vaciló en la puerta


para preguntar: "¿Está seguro? Pero Effie también está enferma”.

"También veneno", le aseguró Rory y se acercó a la mesa para inspeccionar el


contenido del frasco que la mujer había usado. Negando con la cabeza frunciendo el
ceño, volvió a tapar el frasco y lo volvió a colocar. "La criada debe haber tenido algo de
lo que sea en lo que estaba el veneno".

"¿Está en el vial que ella agregó a la bebida?", Preguntó Niels.

"No estoy seguro", admitió Rory, volviendo a la cama. "Parece que hay muchas hierbas
y cosas así. Demasiadas para poder decir si esa es la fuente o no".

"¿Pero estás seguro de que es veneno?", Preguntó Niels.

"Aye", dijo Rory con firmeza. "Todas las señales están ahí."

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"Hmm." Niels miró a la mujer pálida de nuevo. "Creo que es bueno que Saidh nos haya
hecho venir entonces".

"Aye", estuvo de acuerdo Rory solemnemente.

"¿Va a sobrevivir?"

Niels levantó la vista con sorpresa al ver que Tormod, ahora que sabía que no debía
temer nada, había entrado en la habitación y estaba parado a su lado.

"Con suerte", dijo Rory con un suspiro. "Si ella es lo suficientemente fuerte como para
luchar contra los efectos de lo que ya ha tomado y le impedimos obtener más".

"No cree que el laird y sus hijos también fueron envenenados, ¿verdad?", Preguntó
Tormod frunciendo el ceño.

"¿Dijiste que tenían los mismos síntomas?" Preguntó Rory.

"Aye. Pero no estaban vomitando el contenido de sus estómagos como lo ha estado


haciendo la muchacha. Tal vez solo estaban enfermos”.

Rory negó con la cabeza. "Vomitar no es un síntoma del veneno. Es más probable que
también fueran envenenados y Lady Edith todavía sufría algunos de los efectos de su
molestia estomacal, por lo que el veneno no le se sentó bien y no pudo contenerlo. Que
es más lo que parece que salvó su vida. Ella no mantuvo suficiente del veneno en su
estómago para matarla. Solo lo suficiente para hacerla débil y enferma”.

"Maldita sea", respiró Tormod. "¿Entonces alguien se propuso matar a nuestro Laird y
sus herederos?"

"Parece que sí", murmuró Rory, mirando a las dos mujeres en la cama con
preocupación.

"¿Qué hacemos ahora?", Preguntó Niels en voz baja.

Rory guardó silencio durante un minuto, y luego anunció: "Hay poco que pueda hacer
sin saber cuál es el veneno".

"Seguramente hay algo que pueda darles", dijo Tormod. "¿Un tónico que pueda
ayudar?"

Rory negó con la cabeza. "No me atrevo a administrar nada sin saber con qué han sido
envenenadas. Si les doy algo equivocado, podría matarlas. Todo lo que podemos hacer
es tratar de que las dos tomen líquidos, vigilarlas, y luego esperar y ver qué pasa".

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Tormod se dirigió a la puerta de inmediato. "Voy a pedirle a una de las doncellas que
traigan algo de caldo y…"

"Nay", interrumpió Rory de inmediato. Cuando el anciano hizo una pausa y miró hacia
atrás con sorpresa, dijo: "No voy a arriesgarme a más veneno siendo puesto en su
comida o bebida. No creo que ninguna de las dos pueda sobrevivir".

Niels alzó las cejas. "¿Incluso la anciana? Seguramente ella estará bien. Después de
todo, Lady Edith ha estado enferma durante semanas y, a menos que me equivoque”,
añadió, lanzándole una mirada interrogante a Tormod, ¿es la primera vez que la vieja
criada muestra signos de envenenamiento?”

"No estás equivocado", le aseguró Tormod. "Esta es la primera vez que Effie ha estado
algo enferma desde que cuidaba a la muchacha".

"Aye, pero Effie es vieja, y por lo que sé, no tiene el beneficio de vomitar el veneno
como Lady Edith. Si recibió una dosis lo suficientemente grande..." Miró a la anciana
con el ceño fruncido. "Ella podría morir tan rápido como lo hizo el Laird Drummond".

Niels miró a la mujer solemnemente. "Eso probablemente significa que ella no es la


envenenadora”.

"Probablemente", estuvo de acuerdo Rory.

Suspirando, Niels se volvió hacia su hermano. "Dinos lo que necesitas para atenderlas,
Rory, y lo buscaremos".

"Agua fresca del pozo, y lo necesario para hacer caldo". Dirigiéndose a Geordie, dijo:
"Tal vez ese conejo que atrapaste esta mañana en nuestro camino, hermano y algunas
verduras".

Geordie asintió y se volvió hacia la puerta. "Voy a buscar el conejo y las cosas de mi
alforja".

"Y buscaré el agua", dijo Alick, volviéndose también.

"Asegúrate de que el agua sea fresca del pozo, Alick, y asegúrate de no dejar que nadie
se acerque en tu camino de regreso", dijo Rory con firmeza.

Asintiendo con la cabeza, Alick siguió a Geordie fuera de la habitación.

"¿Qué puedo hacer?", Preguntó Niels.

"Necesitaremos hidromiel o sidra también. Pero quiero un barril nuevo para estar
seguro de que nadie lo ha manipulado”.

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"Venga conmigo. Le conseguiré lo que necesite”, dijo Tormod abruptamente y lo
condujo fuera de la habitación. Caminaron en silencio hasta que llegaron a la escalera y
luego el hombre murmuró: "No puedo creerlo. Alguien asesinó a nuestro laird y a sus
hijos”.

Niels gruñó de acuerdo, un fruncimiento curvando sus labios. Este era un problema que
no había esperado cuando accedió a venir aquí. Y era un problema. No podía dejar a
Rory aquí para cuidar a Edith Drummond para recuperar la salud con un asesino
vagando por Drummond envenenando a la gente. Ni siquiera podía tomar a Edith y
transportarla de regreso a MacDonnell para que Saidh y Rory también la atendieran allí,
porque si Edith sobrevivía, tendría que regresar aquí... donde había un asesino
deambulando envenenando a la gente.

Niels y sus hermanos habían sido criados con la creencia de que era su lugar proteger
a los débiles y necesitados cuando podían. Edith era definitivamente débil y necesitada,
y con Greer ocupándose de su envío, podría tomarse el tiempo para ayudar a resolver
la situación aquí y mantenerla a salvo de nuevos ataques.

Con la boca apretada, consideró todo lo que Tormod les había dicho al pasar por las
escaleras y preguntó: "¿Dijiste que el laird y sus hijos mayores se enfermaron primero?"

"Aye."

"¿Y Edith no cayó enferma hasta que murió el último de los tres?"

"Aye."

"Así que ella no fue envenenada al mismo tiempo que su padre y sus hermanos", dijo
pensativamente.

"No, debe haber sido envenenada después", asintió solemnemente Tormod y luego
señaló: "Como las doncellas".

"Aye". Niels frunció el ceño.

"¿Qué está pensando?", Preguntó Tormod.

"Estoy pensando que si ella y las doncellas hubieran sido envenenadas al mismo
tiempo que el laird y sus hijos mayores, estaría esperando una explicación de Brodie,"
admitió Niels secamente.

"Porque él era el único que se beneficiaría de la muerte de sus hermanos mayores y su


padre, mientras que Lady Edith y las criadas podrían haber sido simplemente
envenenadas accidentalmente junto con ellos", dijo Tormod asintiendo, y luego admitió:
"Cuando los tres hombres murieron, pensé que era muy conveniente para Brodie. Sin
eso, nunca habría tenido la oportunidad de ser laird aquí”.
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"Aye", estuvo de acuerdo Niels, y luego negó con la cabeza. "Pero no había necesidad
de envenenar a Edith también. Es la hija menor, ¿verdad?”

"Lo es. Entonces no se beneficia de su muerte", dijo Tormod, pero agregó: "Excepto
para sacarla del camino. A la nueva esposa de Brodie no le gusta mucho Lady Edith”.

"¿Nay?", Preguntó Niels con interés.

"Nay", le aseguró Tormod. "Su relación fue tibia en el mejor de los casos antes de que
todo esto sucediera, pero cuando el anciano murió y los dos hijos mayores parecían
estar yendo por el mismo camino, Brodie se acercó para actuar como laird temporal
hasta que los hombres murieran o se recuperaran. Lady Victoria se consideró a sí
misma señora del castillo y trató de controlar a los sirvientes, pero no estaban
aceptando eso. Lady Edith ha sido la señora aquí desde la muerte de su madre y todos
automáticamente recurrieron a su guía. Lady Victoria daba una orden y los sirvientes
acudían a lady Edith para ver si la obedecían, y eso enfureció a lady Victoria”.

"Hmm", murmuró Niels, pero luego negó con la cabeza. "Aun así, Brodie podría haber
enviado fácilmente a Edith con las monjas para deshacerse de ella si su esposa se lo
hubiera pedido. Además, eso no explica el envenenamiento de las criadas”.

"Nay", Tormod estuvo de acuerdo frunciendo el ceño. "Y la vieja Effie allí es la doncella
de Lady Victoria. Lady Victoria es muy aficionada a ella, estoy seguro de que no la
envenenaría".

"¿Lady Victoria se fue sin su doncella?", Preguntó Niels con sorpresa. Aunque sabía
que su hermana, Saidh, hacía eso, la mayoría de las mujeres que él conocía no
viajarían sin una doncella para ayudarlas a vestirse y cosas por el estilo.

"Nay. Se llevó a su doncella más joven", respondió Tormod y luego explicó: "Effie era la
niñera de Lady Victoria cuando era niña y se convirtió en la doncella de su señora una
vez que tuvo la edad suficiente para necesitarla. Sin embargo, ella es una mujer mayor
y no tan rápida como solía ser, así que una segunda criada, una chica joven, fue
contratada para ayudarla con sus tareas. La doncella más joven se fue con Lady
Victoria y Effie se quedó aquí. Lady Victoria temía que el viaje fuera demasiado para la
vieja después de que llegara hace poco”.

"Hmm", murmuró Niels, y reflexionó sobre eso antes de preguntar: "¿La doncella de
Lady Edith murió?"

"Nay. Ella se recuperó", dijo solemnemente Tormod. "Ahora está ayudando en las
cocinas." Con la boca retorcida por la irritación, agregó, "la muchacha ha estado
apenada por cuidar a su señora, pero lo último que Lady Edith dijo cuándo enfermó
nuevamente fue que Moibeal debería mantenerse alejada de ella. No quería que la

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muchacha se enfermara nuevamente como lo hizo ella. Por supuesto, no tenía idea de
que estaban siendo envenenadas".

Niels asintió.

"sabe", dijo Tormod ahora, "se me ocurre que si fuera el barril de vino el que fue
envenenado, entonces la enfermedad de Lady Edith podría haber sido un resultado
secundario involuntario del intento del culpable de matar al laird y sus hijos mayores”.

"Aye", Niels estuvo de acuerdo, pero argumentó, "Sin embargo, las doncellas
difícilmente estarían bebiendo vino. Al menos no lo hacen en Buchanan. Allí el vino es
solo para la familia. Los sirvientes y los soldados beben cerveza, sidra o agua”.

"Aye, es lo mismo aquí", concordó Tormod. "Y no deberían haber tenido ninguno, pero
eso no significa que no tuvieron ninguno".

"Hmm", murmuró Niels y decidió que probablemente debería hablar con la doncella.

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Capítulo 2

El sonido de una terrible explosión despertó a Edith. Parpadeando abrió los ojos, miró
frenéticamente alrededor de la habitación, y luego movió su mirada a la derecha cuando
el sonido volvió a sonar. Ella miró boquiabierta al hombre desplomado en el asiento al
lado de la cama. Él era la fuente del sonido. No era una explosión en absoluto, sino un
fuerte bufido cuando el tipo roncaba mientras dormía. Querido Dios, nunca había
escuchado un sonido tan fuerte y horrendo.

Edith miró al hombre sin comprender, preguntándose quién demonios era y por qué
estaba en su habitación, y luego notó a la mujer en la cama junto a ella y la miró
confundida y preocupada. La reconoció de inmediato como la doncella de Victoria, Effie.
Pero encontrarla en su cama fue algo sorprendente. El hecho de que la mujer se viera
terriblemente enferma se sumó a su desconcierto. La anciana estaba extremadamente
pálida, no tenía ni un gramo de color en su delgada y arrugada piel, y también estaba
completamente inmóvil. Effie estaba tan quieta que Edith ni siquiera estaba segura de
que estaba respirando al principio. Empezaba a preocuparse de que la mujer estuviera
muerta cuando notó que su pecho subía y bajaba un poco con respiraciones lentas y
superficiales.

Aliviada, Edith dejó escapar el aliento que había estado conteniendo y luego miró
alrededor de su cámara de nuevo. Su habitación, por lo general, estaba ordenada y
limpia, pero en el momento parecía que realmente había habido una explosión. Había
una taza vacía de lado en la mesita de noche, junto a una que estaba de pie y dos
cuencos vacíos. Una costra de pan y otra taza y tazón estaban sobre la mesita de
noche en el otro lado, y luego un barril se asentaba en la mesa en el otro extremo de la
habitación con varias tazas y tazones de metal más y una pequeña pila de cáscaras
vegetales. También había lo que parecía ser una piel de conejo, recién pelada.

Preguntándose quién había celebrado una fiesta en su habitación mientras ella estaba
durmiendo, Edith echó un vistazo al piso ahora, notando los sacos alineados contra la
pared. Había cuatro en total con varios artículos derramándose de ellos: tela, verduras,
armas. Y las alfombras del piso fueron aplastadas y pateadas a un lado, mostrando
mucho uso y senderos definidos desde la puerta hasta la cama y la mesa, y luego
desde la mesa y la cama hasta la chimenea donde estaba burbujeando una olla de algo
sobre el fuego.

Edith no tenía ni idea de qué pensar de todo eso, o el hecho de que en ese momento
había un hombre junto a su cama como un ángel guardián muy ruidoso.

O tal vez solo un guardia.

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Ese último pensamiento fue un poco perturbador. Edith sabía que había estado enferma
por un tiempo. El desastre en su habitación sugirió que había pasado bastante tiempo.
¿Qué había estado sucediendo en Drummond mientras estaba fuera de sí por la
enfermedad? ¿Uno de los clanes con los que estaban enemistados sabiendo de la
muerte de su padre y sus hermanos, había decidido aprovechar y atacar el castillo?

La idea era alarmante, sobre todo porque no había estado despierta para ayudar a
defenderse contra tal casualidad. Su hermano Brodie, por mucho que lo amara, estaba
echado a perder y no era el más capaz de los hombres. Sería inútil en tal situación,
estaba segura.

Mordiéndose el labio, Edith miró cautelosamente al hombre desplomado en la silla al


lado de la cama. Era un tipo grande, con hombros anchos y una cara joven pero no
desagradable. También era un completo extraño, no uno de los hombres de
Drummond. Volvió a mirar a Effie y la empujó con el codo, esperando que la mujer se
despertara y le contara qué estaba pasando y qué había sucedido mientras estaba
enferma. Cuando el primer empujón no tuvo efecto, le dio un segundo empujón más
firme, pero eso tampoco produjo respuesta.

Decidiendo dejar que la pobre mujer descansara, se sentó o lo intentó. Honestamente,


fue un esfuerzo solo ponerse en posición vertical. Estaba tan débil como un bebé y tuvo
que ponerse de lado y deslizar los pies de la cama para que sus piernas colgaran de
ella, y luego levantarse para sentarse.

Jadeante y sudorosa debido a lo que debería haber sido una tarea fácil, Edith se
balanceó dónde estaba sentada en el borde de la cama y miró la puerta con sombría
determinación. Su cámara no era realmente tan grande. Sabía por experiencia que la
puerta estaba a solo seis pasos de la cama. Pero después de la lucha que tuvo para
sentarse, incluso seis pasos parecían una distancia terriblemente larga para cruzar.

Desafortunadamente, aunque despertar al hombre que roncaba en su habitación habría


sido la opción más fácil, Edith ni siquiera lo consideraría hasta que supiera si él era
amigo o enemigo. Lo que significaba que si quería averiguar qué estaba pasando en
Drummond, y si estaba a salvo o no, tenía que salir al pasillo y echar un vistazo.
Preferiblemente sin despertar su guardia.

Decidida a hacerlo, respiró hondo y luego usó todos los músculos a su disposición para
levantarse. Se empujó con las manos, y con las piernas, y por un momento glorioso
estuvo derecha y de pie, y luego cayó de bruces sobre la alfombra de juncos justo
cuando se abría la puerta de la habitación.

"¡Diablos, Alick! Se suponía que debías estar mirando… ¡Laddie! ¡Nay!"

Edith levantó un párpado y luego lo cerró de nuevo cuando vio la enorme lengua a solo
centímetros de su ojo. Apenas lo cerró antes de que un lado de su cara fuera azotado

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con una lengua viscosa muy grande desde la barbilla hasta la frente. Con la nariz
arrugada, escuchó el golpeteo de pies que cruzaba rápidamente la habitación. Ella notó
que los ronquidos habían terminado abruptamente justo antes de que una segunda voz
masculina, pareciendo sorprendida, gritara, "¿Qué? ¡Oye! ¿A dónde se fue?”

"Idiota", el hombre arrodillado junto a ella murmuró. Edith no estaba segura de a quién
llamaba idiota, y no le importaba en particular. Estaba demasiado agradecida de que la
lamida cariñosa de Laddie llegara a su fin y abrió los ojos para ver a un hombre
arrastrando al perro hacia la puerta por el cuello.

"¡Ronson!", Rugió.

"¡Oh hola! ¿Niels? ¿Cómo salió ella de la cama?” Edith estaba bastante segura de que
era el hombre que antes roncaba quien hizo esa pregunta porque venía del otro lado de
la cama.

"¿Cómo piensas, Alick?", Gruñó el primer hombre y luego gritó: "¡Ronson! Oh, ahí
estas. Saca a este perro de aquí”.

"Lo siento, mi lord", lloró Ronson al entrar en la habitación y apresurarse para agarrar el
cuello de Laddie. "Se escapó de mí muy rápido. Él es astuto de esa manera. Pero ha
estado extrañando a Lady Edith y... ¿Por qué Lady Edith está en el suelo? ¿Qué…?"

"Fuera", gruñó Niels. "¡Ahora!"

"Aye, mi lord", dijo Ronson, arrastrando a Laddie con él mientras se arrastraba hacia la
puerta. El chico le sonrió a Edith todo el camino. "Es realmente bueno verla despierta,
mi Lady. Muy bueno. Traeré de nuevo a Laddie para una visita cuando se sienta mejor”.

La última palabra se escuchó a través de la puerta cuando el hombre al que Alick había
llamado Niels la cerró de golpe.

Edith podía oír a Niels murmurar por lo bajo mientras veía sus grandes pies cruzar la
habitación una vez más. Parecía que estaba diciendo algo acerca de tontos,
muchachos y perros que eran realmente caballos, y luego se arrodilló junto a ella, le dio
la vuelta y luego la levantó del suelo y alejó de la desagradable alfombra donde su cara
había aterrizado. Estaba sucia y comenzaba a moldearse, obviamente necesitaba
cambiarse. Tendría que hacer que los sirvientes se las llevaran y crearan otras nuevas.

"Lo siento por eso", gruñó Niels, atrayendo su atención hacia él. "El perro tiende a
seguirme, pero por lo general se detiene en el pasillo cuando llego aquí".

"Aye, Laddie sigue a Niels a todas partes cuando sale de la habitación", le dijo Alick
solemnemente. "También el joven Ronson. A los dos parece gustarle”. Frunciendo los
labios, sacudió la cabeza y añadió: "Ninguno de nosotros puede entender por qué".

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Niels gruñó por lo bajo en respuesta.

Edith miró de un hombre a otro, sin saber qué decir. No tenía idea de si eran amigos o
enemigos. Al final, simplemente asintió ligeramente con la cabeza. Por alguna razón,
eso hizo que el hombre sonriera y ella parpadeó sorprendida cuando su rostro severo
de repente se volvió muy guapo. Él tenía una sonrisa increíblemente atractiva. Iluminó
toda su cara e hizo brillar sus hermosos ojos azules. Edith no pudo resistirse a
devolverle la sonrisa cuando sus ojos se deslizaron sobre sus pómulos altos, su nariz
recta, sus labios carnosos y el cabello largo y salvaje que lo enmarcaba. Él realmente
era muy atractivo.

"Soy Niels Buchanan", anunció y Edith dejó de mirar boquiabierta lo bonito que era y se
encontró con su mirada cuando reconoció el apellido.

"No los… de Saidh…" Eso fue todo lo que logró salir, y no fue más que un sonido
entrecortado. Tenía la boca tan seca que no podía ni siquiera escupirlo.
Afortunadamente, Niels no tenía el mismo problema y entendió lo que ella quería decir.

"Aye, uno de los hermanos de Saidh", le aseguró, volviéndose hacia la cama.


Sentándola en ella, añadió: "Y tú eres Edith Drummond, una de las amigas más
queridas de mi hermana".

"Aye", ella estuvo de acuerdo en un susurro mientras él tiraba de las sabanas y abrigos
para cubrirla. La sonrisa de Edith se ensanchó muy levemente. Drummond no había
sido invadido por enemigos. Ellos estaban siendo visitados por amigos. "¿Saidh
está...?"

"Nay, ella no está aquí", dijo casi disculpándose mientras se enderezaba. "Ella está muy
avanzada en su embarazo para hacer el viaje y nos envió en su lugar".

Edith abrió mucho los ojos. "¿Embarazada?"

"Aye, lo está", dijo el otro hombre, recordándole su presencia. Niels lo había llamado
Alick, recordó Edith mientras lo miraba. Lo que significaba que era el más joven de los
chicos Buchanan, pensó mientras miraba al hombre joven sonreír ampliamente
mientras continuaba, "Y creemos que lleva más de un bebé. Solo lleva cuatro meses
pero ya esta tan grande como una vaca. Greer ni siquiera la deja subir y bajar por la
escalera por miedo a que pierda el equilibrio y caiga como una gran pelota".

Los ojos de Edith se ensancharon ante la noticia. No podía imaginarse que Saidh no
fuera capaz de caminar por un grupo de escaleras y menos restringida de montar a
caballo. Se imaginaba que la mujer no se lo tomaría bien. Pero no entendía por qué
Saidh no había mencionado estar encinta en su última carta. Al menos la última carta
que había leído, Edith pensó y se preguntó si había recibido otras de su amiga desde
que cayó enferma.

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Serie Novias Escocesas #5
"Alick, ve y dile a Rory que está despierta", ordenó Niels, caminando hacia la mesa
donde estaba el tonel.

"Aye", respondió el hombre más joven y luego le sonrió tranquilizadoramente mientras


se movía alrededor de la cama. "Nuestro Rory es un sanador, y el mejor de todos. Por
qué, él fue quien resolvió que no estabas enferma sino envenenada. Él te hará sentir
tan bien como la lluvia en un momento".

Alick Buchanan asintió con la cabeza alegremente y se dio la vuelta para salir
apresuradamente de la habitación, dejando a Edith mirándolo con horror. ¿Veneno?

"Idiota."

Ese murmullo atrajo su mirada hacia Niels. Había terminado de llenar una de las tazas
con hidromiel y se giró para ver su expresión. Con la boca apretada, sacudió la cabeza
y cruzó de regreso a la cama. "Perdona a mi hermano. Él tiene el tacto de un toro en el
mejor de los casos”.

"¿Veneno?" Susurró con su voz ronca.

Maldiciendo, se instaló en el borde de la cama y deslizó un brazo debajo de Edith para


levantarla. "Aye. Veneno. Pero bebe esto antes de tratar de hablar de nuevo, de lo
contrario puedes hacerte algún daño", dijo, sosteniendo la taza de líquido en la boca.

Edith vaciló, más interesada en ese asunto del veneno en este momento, pero luego se
rindió y tomó un sorbo. Una vez que el líquido fresco y húmedo le golpeó la boca,
habría tomado más, pero no se le dio la opción. Apenas tuvo medio bocado de lo que
resultó ser aguamiel antes de bajar la bebida.

"Solo un sorbo. No pudiste mantenerlo cuando te despertaste la última vez, así que
vamos a ir despacio esta vez".

Los ojos de Edith se ensancharon ante el reclamo. "¿Me desperté antes?"

"Aye", dijo secamente. "Pero estabas confundida y no realmente alerta. Bebiste un poco
de aguamiel, luego lo arrojaste de vuelta sobre mí y te desmayaste nuevamente.
Prefiero no volver a pasar por eso otra vez.”

Edith gimió y bajó la cabeza con vergüenza.

"No hay nada de qué avergonzarse", dijo Niels y ella podía escuchar el ceño fruncido en
su voz. "Tengo cuatro hermanos menores a los que he tenido que cuidar mientras
arrojaban sus estómagos... y ellos no fueron envenenados. Fue que bebieron
demasiado. Tú al menos tenías una buena excusa”.

~ 30 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Recordando el veneno, Edith levantó la cabeza frunciendo el ceño. "¿Mi padre y
hermanos?"

Niels hizo una mueca ante su voz áspera y levantó el hidromiel de nuevo. "Otro trago de
esto, creo. Esta vez gíralo alrededor realmente bien y moja todas las esquinas. Estás
obviamente seca como un hueso”.

Edith obedientemente tomó otro trago de hidromiel, pero en el momento en que lo había
girado y tragado, le preguntó: "Mi padre y…"

"Aye. Rory no puede estar seguro, pero él cree que también fueron envenenados.
Tenían todos los mismos síntomas. Excepto por el... eh... problema estomacal", dijo con
delicadeza. "Pero Rory sospecha que eso es lo que te salvó. Reaccionaste al veneno y
lo vomitaste cada vez que lo tuviste. No había suficiente en ti para matarte como lo hizo
con tu padre y tus hermanos”.

Edith bajó la cabeza ante estas noticias, su mente se llenó de pena e ira. Ya había sido
bastante malo cuando pensó que había perdido a su padre y a sus dos hermanos
debido a la enfermedad, pero al saber que habían sido asesinados deliberadamente...
Levantó la cabeza y preguntó: "¿Brodie?"

"Bien y sano, por lo que sabemos", le aseguró. "Temió contagiarse él mismo y se llevó
a su esposa a orillas más seguras cuando tu doncella se enfermó".

Edith no hizo ningún comentario. Ahora que lo mencionó, recordó que Brodie se había
ido. Ella había estado bastante molesta en ese momento, pensando que era menos que
un tipo de comportamiento de un laird huir de la fortaleza y de toda su gente cuando
podrían estar al comienzo de una crisis. Notó que Niels sonaba disgustado por sus
acciones también, pero simplemente preguntó: "¿Moibeal? Esta…"

"Tu doncella está bien", le aseguró. "Y ansiosa de verte. No me sorprendería que ignore
las órdenes de Rory de mantenerse lejos y se presente aquí una vez que se dé cuenta
de que estás despierta".

Edith levantó las cejas. "¿Por qué no estaba permitida…?”

Se interrumpió y miró hacia la puerta cuando se abrió. Alick volvía con otro hombre y
Edith se encontró examinando a los tres. Todos eran similares en su aspecto con
cabello oscuro y esos hermosos ojos azules. Pero Niels obviamente era mayor que los
otros dos. También era más grande, sus hombros anchos, sus brazos gruesos y
fuertes. No es que los otros dos no parecieran fuertes, pero Niels lucía como un
guerrero acostumbrado a empuñar una espada, mientras que Alick parecía que todavía
no había crecido totalmente y Rory parecía... bueno, como si fuera un sanador más que
un guerrero.

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Serie Novias Escocesas #5
"Es bueno verte despierta, Lady Edith", dijo Rory a modo de saludo mientras caminaba
hacia la cama. "¿Cómo te sientes?"

"Sedienta", admitió Edith.

"Solo le he dado dos sorbos pequeños de aguamiel para ver cómo lo digiere", anunció
Niels, y para gran desilusión de Edith, se levantó para que Rory pudiera tomar su lugar.
No estaba segura de por qué lamentaba que se fuera, ya que apenas conocía al
hombre, pero estaba decepcionada, y sus sentimientos obviamente se reflejaron en su
rostro, se dio cuenta cuando Rory alzó levemente las cejas y miró a Niels con una
pequeña sonrisa.

Afortunadamente, él no la avergonzó al comentarlo y simplemente preguntó: "¿Cómo se


siente tu estómago después de los primeros sorbos?"

"Bien, gracias", susurró.

"Entonces Niels puede darte más en un minuto", dijo y se inclinó para mirarla a los ojos.

Edith se calmó, luchando contra la necesidad de mirar hacia otro lado y simplemente
esperó.

"Tus ojos han vuelto a la normalidad", murmuró.

Edith no tenía idea de lo que eso significaba, pero apartó la vista con alivio cuando él
volvió a sentarse. Luego frunció el ceño cuando su mirada cayó sobre la mujer en la
cama junto a ella. "¿Effie? ¿Esta…?"

"Ella parece haber ingerido el veneno también", interrumpió Rory, perdonando su voz.
"Creo que, al igual que Moibeal, no consumió mucho de lo que tenía el veneno... De lo
contrario, estaría muerta ahora. Sin embargo, es vieja y lo bastante frágil como para
que incluso un poco pueda llevarla a abajo".

"¿Saben qué fue envenenado?" Preguntó Edith, su voz se quebró en varios puntos. Le
dolía la garganta, estaba tan seca y los pocos sorbos que había tomado de aguamiel no
habían sido suficientes para aliviarla.

"Niels, ven a darle más hidromiel", dijo Rory parándose y moviéndose alrededor de la
cama para examinar a Effie ahora.

Edith frunció el ceño, pensando que planeaba ignorar su pregunta, pero cuando Niels
se acomodó junto a ella en la cama otra vez y deslizó un brazo debajo de sus hombros
para dejarla sentada, se olvidó por completo de su pregunta. Niels olía a bosque en
primavera, un aroma que ella siempre amaba. No pudo resistir girar la cabeza hacia la
curva de su cuello y hombro e inhalar profundamente. Cuando Niels se calmó, se dio
cuenta de lo que estaba haciendo y rápidamente giró su cara hacia atrás. Estaba
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Serie Novias Escocesas #5
bastante segura de que estaba sonrojada, pero Niels simplemente sonrió levemente y
le ofreció la taza de hidromiel.

"Gracias," murmuró Edith antes de tomar un sorbo.

"Moibeal dijo que tomó un par de sorbos de vino cuando no bebiste la noche en que
enfermó", comentó Rory después de tomar varios sorbos.

Mirando hacia el otro hombre, Edith vio que había levantado los párpados de Effie y los
estaba mirando en silencio. Sus palabras no habían sido una pregunta, pero ella asintió
y respondió como si fuera de todos modos. "Aye. Dije que podía. No tenía estómago
para vomitar tantas veces, entonces ella me dio su sidra y le dejé mi vino".

"Ella dijo que no bebió mucho sin embargo. ¿Es eso correcto?" Preguntó Rory,
sentándose derecho y girando su mirada interrogativa hacia ella.

"Aye. Solo tomó un sorbo. A ella no le gustó," recordó Edith, notando que su voz se
estaba volviendo más fuerte. El hidromiel estaba haciendo que su garganta se sintiera
mejor también.

"¿Y Effie también bebió vino?" Preguntó Rory.

"Yo…" Edith hizo una pausa, su mirada cayendo hacia la mujer antes de encogerse de
hombros impotente y admitir, "No estoy segura. Ella pudo hacerlo. No recuerdo mucho
de la última semana más o menos desde que enfermé otra vez”. Frunciendo el ceño,
explicó: "Al principio no pude contener nada, pero me sentí mejor una vez que había
purgado. Eso siguió sucediendo, y finalmente rechacé el vino y el caldo que Moibeal
trajo." Con los ojos entrecerrados al pensar en ello, murmuró: "Una vez que dejé de
tomarlos, pude mantener abajo una manzana y un poco de pan que Moibeal me trajo y
comencé a sentirme mejor de nuevo... y luego quise fortalecerme, así que comí un poco
de estofado y..." Ella hizo una mueca de disgusto. "No pareció hacer mucha diferencia
cuando eso volvió a aparecer. Estaba agotada y cansada y solo quería dormir".

"Te estabas debilitando por no poder mantener tu comida por tanto tiempo", dijo Rory
solemnemente.

"Tal vez," admitió Edith y miró a la mujer en la cama junto a ella. "Tengo un vago
recuerdo de Effie tratando de hacerme comer o beber y diciendo que necesitaba
aumentar mi fuerza, pero cada vez que lo hacía..." Ella hizo una mueca de desagrado y
simplemente negó con la cabeza.

"¿Tomaste vino con el estofado mientras atendías a Moibeal?", Preguntó Niels,


atrayendo su mirada hacia él.

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Edith arrugó la nariz y negó con la cabeza. "Francamente, me temo que nunca más
volveré a querer vino después de vomitarlo tantas veces. No tuve nada para beber esa
noche”.

"Entonces el veneno estaba en el vino y en el estofado", dijo Niels sombrío.

"¿Lo estaba?", Preguntó Edith con incertidumbre.

"Aye", le aseguró, su voz sonaba enojada. "Moibeal fue envenenada con un par de
sorbos de tu vino, pero volviste a enfermarte después de comer estofado. Ambos deben
haber sido envenenados”.

"Ah, aye", dijo ella al darse cuenta y luego notó la mirada sombría que intercambiaron
Niels y Rory.

Todavía un poco confusa, Edith no estaba segura de lo que significaba ese intercambio.
Al darse cuenta de su confusión, Rory explicó: "Esperábamos que tal vez el vino de la
familia hubiera sido envenenado en un esfuerzo por matar a tu padre y hermanos, y
simplemente tuviste la mala suerte de tomar un poco del vino envenenado. Pero si tu
estofado fue envenenado más tarde también..." Él señaló casi disculpándose: "Nadie
más cayó enfermo por el estofado esa noche".

Los ojos de Edith se abrieron con incredulidad ante esas palabras. Entendió lo que
estaba diciendo. Después de matar a su padre y sus hermanos, alguien había intentado
envenenarla deliberadamente. ¿Por qué alguien la querría muerta? Ella no era de
importancia.

"Sin embargo," agregó Niels ahora, volviéndose hacia su hermano, "las sirvientas,
ambas envenenadas, es muy probablemente un resultado involuntario de intentar
envenenar a Edith".

"Aye", estuvo de acuerdo Rory. "Si Effie se despierta, estoy seguro de que
encontraremos que comió o bebió algo que le enviaron a Lady Edith".

Niels asintió, su mirada se movió hacia la mesa donde estaba el barril, las verduras y la
piel de conejo. "Entonces el líquido del vial que la doncella estaba mezclando en su
bebida probablemente no sea el veneno”.

"Nay. Probablemente no," estuvo de acuerdo Rory. "Effie tampoco se envenenaría a sí


misma deliberadamente".

"¿Un pequeño frasco de vidrio azul?" Preguntó Edith, sus orejas se animaron. No lo
había notado sobre la mesa, pero era pequeño y había suficiente desorden con las
tazas y otras cosas, que podría estar oculto a su vista.

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye", dijo Niels. "Effie estaba sirviendo lo último en tu bebida para darte cuando
entramos".

"Victoria se lo dio a Effie antes de que se fuera. Dijo que me ayudaría a construir sangre
para ayudar a combatir la enfermedad o algo por el estilo", murmuró Edith e hizo una
mueca. "Era horrible. Solo el olor de eso fue suficiente para darme arcadas la primera
noche que Effie lo puso en mi copa".

"¿En serio?" Rory murmuró, y la forma en que miró hacia la mesa, ahora con interés, la
convenció de que el frasco debía estar allí en alguna parte.

"No puede ser el veneno”, Edith les aseguró en voz baja. "A Victoria no le gustó mucho,
pero no es estúpida. Apenas le daría a Effie un veneno para que me pusiera delante de
otros así”.

"Nay... Por supuesto que no", murmuró Niels, pero ni él ni sus hermanos parecían
completamente convencidos por sus palabras. "Aquí tienes más aguamiel".

Edith vaciló, pero luego dejó que él le diera más hidromiel. No pensó ni por un momento
que el tónico que Victoria le había dado a Effie pudiera contener veneno. Su cuñada
simplemente no era tan estúpida. Eso sí, no dejaría de lado que la muchacha los
envenenara a todos, pero no en algo que la llevaría directamente de vuelta a ella.
Victoria podría haber parecido toda dulzura y pestañas cuando llegó a Drummond por
primera vez como la nueva novia de Brodie, pero una vez que el padre y los hermanos
de Edith enfermaron, su ambición se había demostrado. Victoria quería ser lady
Drummond con todo lo que eso implicaba, y se había sentido terriblemente frustrada
porque los sirvientes no estaban simplemente en línea con su visión mientras los
hermanos mayores todavía vivían. La mujer había mostrado sus verdaderos colores
entonces, lanzando una rabieta de proporciones épicas. Incluso Brodie parecía
sorprendido por su comportamiento y era famoso por sus rabietas.

En verdad, Edith casi había estado contenta de enfermarse una vez que su segundo
hermano, Hamish, había muerto. Le permitió evitar ver a la mujer reclamar la posición
por la que era tan codiciosa. Estaba bastante segura de que Victoria no se habría
hecho cargo con amabilidad o gentileza en un esfuerzo por asegurar los corazones de
las personas que ahora estaban a su cargo. Probablemente había sido rencorosa y
amargada cuando había ladrado sus órdenes y exigido obediencia inmediata. Edith no
podría haber soportado ver eso.

En realidad, ya no estaba ansiosa por verlo ahora una vez que su hermano y su esposa
regresaran. Quizás una visita a Saidh estaba en orden para que ella pudiera decidir qué
debía hacer ahora. Estaba bastante segura de que sus días en Drummond estaban
contados. No tenía dudas de que Victoria querría que saliera de allí lo más rápido
posible, lo que probablemente significaba un convento para ella. Si quería evitar eso,
una visita a Saidh y las otras chicas que formaban su grupo -Murine y Jo- podría ser
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Serie Novias Escocesas #5
útil. Si las cuatro juntaban sus cabezas, podrían pensar en un futuro alternativo para
ella, y eso sería... bueno, realmente era la única esperanza que tenía. Aunque, era
delgada en el mejor de los casos.

Al tragar el aguamiel, Edith preguntó: "¿Ha habido noticias de cuándo regresarán


Brodie y Victoria?"

Niels negó con la cabeza. "Nay. Le pregunté a Tormod lo mismo esta mañana y me dijo
que nadie había tenido noticias suyas. También dijo que no las esperaba, que Brodie
iba y venía a su antojo sin preocuparse por dejar que los demás supieran de qué se
trata”.

"Aye", dijo Edith en un suspiro. "Brodie tiende a ser... impulsivo. Ni siquiera sabíamos
que se había casado hasta que llegó a casa con Victoria a cuestas. Parece que la
conoció en la corte, se enamoró perdidamente y se casó con ella en un mes”.

"¿Y sus padres lo permitieron?", Preguntó Niels con sorpresa.

"Esa fue mi primera pregunta", admitió Edith con ironía.

"¿Y su respuesta?" Preguntó Rory con curiosidad.

Edith hizo una mueca. "Dijo que estaban perfectamente bien con eso".

"¿Lo crees?" Preguntó Rory con interés.

"Nay", admitió Edith en un suspiro. "Y tampoco mi padre. Envió un mensajero a un


amigo en la corte, quien inmediatamente lo devolvió con la verdadera historia tal como
él lo sabía”.

"¿Cuál es?", Incitó suavemente Niels cuando ella dudó.

Haciendo muecas, Edith explicó: "Victoria estaba comprometida para casarse con otro
cuando conoció a Brodie. Mi hermano la cortejó con historias de que era heredero del
laird en Drummond." Los tres hombres de Buchanan se pusieron tensos ante esta
noticia y ella se apresuró a continuar: "Sus padres se enteraron y su padre lo llevó a un
lado y le dijo que sabía que él era el tercer hijo y nunca sería laird, que su hija estaba
comprometida con otro, y que la dejara sola. Pero no creo que se molestaran en
contarle a Victoria que Brodie había mentido, porque según el amigo de mi padre, lo
siguiente que se supo fue que Victoria y Brodie habían desaparecido”. Ella hizo una
mueca. "Parece que la pareja huyó de la corte para Drummond y se detuvo en un bar
en el camino para intercambiar el consentimiento delante de testigos".

"Entonces, ¿no están realmente casados?" Preguntó Alick frunciendo el ceño.

"Ah, aye, lo están", dijo Niels en voz alta.

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Fue Rory quien explicó: "De acuerdo con la ley canónica, todo lo que cada parte
necesita es dar su consentimiento para casarse. No necesitas ni siquiera tener testigos,
aunque ayudan si alguien lo rechaza".

"Entonces, ¿por qué siempre hay un sacerdote parloteando sin cesar? ¿Y qué hay de
las amonestaciones y...?

"No es estrictamente necesario", le aseguró Rory. "Simplemente preferido por la


mayoría".

"Bien..." Alick frunció el ceño, pero parecía no saber por qué alguien querría tanta
molestia.

Hubo silencio por un minuto, y luego Niels dijo: "Entonces, afirmó que iba a ser laird".

"Y ahora lo es", añadió Rory sombríamente.

Edith suspiró. Sabía que eso era justo en lo que se enfocarían. "Miren, sé que suena
mal, y francamente, mi hermano es un muchacho egoísta, poco confiable y malcriado...
pero padre es la última persona que Brodie lastimaría. Él es el que lo malcrió tanto y lo
dejó crecer tanto a su manera”.

"¿Y crees que lo respetaba por eso?", Preguntó Niels con curiosidad.

Edith lo miró sin comprender. "¿Qué?"

"¿Crees que tu hermano respetaba a tu padre por consentirlo y dejar que se saliera con
la suya?" Niels preguntó: "¿O crees que simplemente sintió que quizás a su padre no le
importó lo suficiente como para molestarse en disciplinarlo y enseñarle a sobrevivir en
este mundo como hombre?”

Edith frunció el ceño. A menudo había visto la indulgencia de su padre con Brodie como
hiriente para su hermano, sabiendo que no le estaba haciendo ningún favor, pero nunca
había pensado que Brodie podría verlo de esa manera también.

"Tu hermano tuvo suerte con Victoria", agregó Niels en voz baja. "Si hubiera intentado
algo similar con nuestra hermana y lo hubiéramos alcanzado antes de que
intercambiaran su consentimiento, lo habríamos golpeado hasta la muerte".

"Aye, y probablemente cortado sus cojones y polla para empezar", dijo Rory con
frialdad.

Los ojos de Edith se abrieron con incredulidad ante la amenaza a las joyas de la familia
de Brodie. "Nay."

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye", le aseguró Alick con una sonrisa. "Planeábamos hacer todo eso y más a
MacDonnell después de que envió un mensaje diciendo que había arruinado nuestra
Saidh y que planeaba casarse con ella." Frunciendo los labios con disgusto, añadió,
"Todavía no estoy seguro de por qué no lo hicimos".

"Porque MacDonnell es un laird, y nunca le mintió a Saidh," explicó Rory secamente.

"Además, Saidh no estaba comprometida con otro”, agregó Niels. "No tenía mejores
perspectivas. De hecho, MacDonnell fue una buena elección para marido".

"Y ella lo amaba", señaló Edith.

"Nay", dijo Niels de inmediato, y cuando frunció el ceño, le aseguró, "es cierto. Lo
deseaba y le gustaba al principio, pero aún no lo amaba. Lo dijo ella misma justo
delante de nosotros".

"¿En serio?" Preguntó Edith, su voz casi como un chillido de sorpresa.

"Aye", le aseguró Rory con diversión. "Aunque, en verdad, creo que probablemente
estaba medio enamorada de él cuando se casaron. Ella definitivamente lo ama ahora”.

"Eso no importa", agregó Niels en voz baja. "Si MacDonnell hubiera sido un tercer hijo
malcriado, mentiroso, incapaz de mantenerla a ella y a cualquier niño pequeño que
pudieran producir, lo habríamos golpeado hasta matarlo en vez de dejar que se casara
con ella... así lo amara o no".

"¿Qué?" Edith jadeó, encogiéndose lejos de él con sorpresa.

Niels frunció el ceño ante su reacción, pero luego preguntó: "Dijo que no creía que los
padres de Victoria le dijeran que Brodie había mentido. ¿Fue solo porque ella se
escapó con él?”

"Nay", admitió a regañadientes.

"¿Entonces por qué?"

Edith dejó escapar un suspiro de tristeza, pero luego admitió: "Porque ella pareció
sorprendida cuando llegaron aquí y Brodie le presentó a nuestros hermanos mayores".

"¿Qué tan sorprendida?", Preguntó Niels.

Edith lo miró en silencio, de repente sospechando que ya sabía la respuesta. Si él había


hablado con alguien aquí desde su llegada probablemente lo hacía, se dio cuenta, y se
preguntó cuánto tiempo habrían estado allí los hombres y todo lo que sabían.

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Serie Novias Escocesas #5
"Se desmayó", admitió Edith en voz baja, recordando la forma en que Victoria había
palidecido y luego colapsó. Brodie había tratado de quitarle importancia con el
cansancio del viaje cuando la había recogido y la había llevado escaleras arriba a su
habitación, pero todos oyeron los gritos saliendo de la habitación unos diez minutos
más tarde, cuando Victoria aparentemente había despertado”.

Consciente de que nadie había comentado y los tres hombres la miraban


solemnemente, Edith suspiró y preguntó: "¿Cuánto hace que han estado aquí?"

"Casi una semana", respondió Rory.

"¿Una semana?" Ella jadeó con asombro.

"Solo seis días", corrigió Niels.

"Pero..." Ella miró de hombre a hombre. "¿Qué han estado haciendo todo ese tiempo?"

"En su mayoría tomar turnos para protegerte, cazar presas, hacer caldo y derramarlo
por tu garganta mientras estabas inconsciente, con la esperanza de que te recuperaras
lo suficiente como para despertar", respondió Rory suavemente.

Edith los miró fijamente, su mente girando lentamente. Mientras Brodie había huido de
la fortaleza con la amenaza de su enfermedad, estos tres hombres, que ni siquiera la
conocían, habían estado allí casi una semana. Durante ese tiempo, no solo se habían
ocupado de ella, sino que habían cazado y cocinado su comida, goteando el caldo por
su garganta con la esperanza de obtener suficiente alimento para ayudarla a
recuperarse.

"¿Por qué?"

La palabra se escapó sin intención consciente, y por un minuto simplemente quedó


suspendida en el aire sin poder hacer nada. Entonces Niels la movió ligeramente para
que ella lo mirara y dijo simplemente, "Porque necesitabas nuestra ayuda, muchacha".

Tal vez todavía estaba exhausta y agotada por su enfermedad, o tal vez fueron las
muertes de su padre y sus hermanos las que no había tenido oportunidad de llorar,
pero los ojos de Edith se nublaron de repente con el brillo de las lágrimas. Justo cuando
sentía que comenzaba a desmoronarse en los brazos de Niels, la puerta del dormitorio
se abrió de repente. Edith se volvió para ver a otro hombre entrar a la habitación, éste
tan grande y fornido como Niels y sosteniendo dos pájaros muertos a sus pies.

"Esta vez tengo un buen par de faisanes, Rory. Si solo usas uno para el caldo, quizás
podamos hacer que el cocinero ase el otro y...” El hombre se detuvo y parpadeó al ver a
Edith medio erguida en la curva del brazo de Niels. "Oh, digo, ¡estás despierta! Bien,
¿no es eso bueno?”.

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Serie Novias Escocesas #5

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 3

Edith parpadeó abriendo los ojos y miró hacia la ventana, una sonrisa se apoderó de
sus labios cuando vio la luz del sol asomando a través de las grietas en los postigos.
Era de mañana, finalmente, y hoy podía levantarse e ir abajo. Rory y Niels se lo habían
prometido mucho.

Habían pasado tres días desde que se había despertado. Para su consternación, los
hombres habían insistido en que se quedara en su habitación, dejándola solo caminar
hacia una silla y volver a su cama y generalmente con uno de ellos flotando cerca en
caso de que sus piernas cedieran.

Para ser justa con los hombres, Había estado patéticamente débil al despertar por
primera vez. Su intento de levantarse de la cama la primera vez había sido prueba de
eso. Edith no había sido mucho más fuerte al día siguiente cuando intentó levantarse
nuevamente sin ayuda. Había logrado tres pasos antes de caer.

Afortunadamente, Niels se había despertado y rápidamente la había atrapado antes de


caer al suelo. Fue entonces cuando insistieron en que no debía levantarse sin que uno
de ellos la ayudara, y dijeron que estaba restringida a la habitación hasta que
recuperara algo de su fuerza. Había intentado discutir con ellos, pero era difícil discutir
con cuatro Buchanan determinados. Honestamente, ellos eran peores que Saidh
cuando se trataba de terquedad. Y el hecho de que, técnicamente, no tenían derecho a
mandar sobre ella no les había importado en absoluto. Pero ayer había estado decidida,
y la única forma en que habían logrado convencerla de quedarse en su habitación fue
prometerle que podría dejarla hoy sin que trataran de detenerla.

Edith se sentó en la cama y miró a su alrededor. Estaba sola en su cama, lo que era un
cambio agradable. Después de dos noches con Effie compartiendo su cama, Edith
había insistido en que la llevaran al lado a la vieja habitación de Brodie ayer. No era que
le importara compartir su cama, tanto como la silenciosa quietud y la palidez de la mujer
la hacían sentir como si la estuviera compartiendo con un cadáver respirando. Había
empezado a irritarla, y se había encontrado mirándola para asegurarse de que aún
respiraba.

Una vez que la mujer mayor fue trasladada, se había vuelto ansiosa por limpiar el caos
en el que había caído su habitación. Había asignado a los hombres sus propias
habitaciones, sugiriendo a Rory que tomara la habitación de Hamish, que estaba al lado
de la vieja habitación de Brodie para poder cuidar a Effie más fácilmente. Luego le
sugirió a Niels que tomara la vieja habitación de Roderick, que estaba al lado de esa. Lo

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Serie Novias Escocesas #5
que dejó las dos habitaciones de huéspedes al otro lado del pasillo de las habitaciones
de Roderick y Hamish para Alick y Geordie.

Fue entonces cuando Geordie y Alick hicieron las maletas y se dirigieron a MacDonnell.
Al parecer, habían estado esperando hasta que estuviera bien encaminada en la
recuperación antes de llevarle noticias de su bienestar a Saidh. Parecía que tomaron
verla ordenando y limpiando como una señal de que definitivamente estaba
recuperándose y que no era probable que recayera con ellos. Los dos hombres se
habían ido, con la intención de informar a su hermana sobre lo ocurrido en Drummond,
y luego regresarían para ayudarlos a determinar quién estaba detrás de los asesinatos
de su padre y dos hermanos mayores.

Edith frunció el ceño ante la idea. Habían hablado mucho de eso desde su despertar,
pero francamente nadie parecía tener una idea de cómo llevar a cabo esa tarea. El
envenenamiento era un asunto complicado. Sospechaban que alguien estaba
agregando veneno al vino, lo cual era más que posible. Con su estómago todavía un
poco delicado después de su dolencia la semana anterior, Edith había estado evitando
el vino. Pero cualquiera podría haber derramado veneno en el barril de vino, o las jarras
de vino en su camino hacia la mesa. Lo mismo era cierto del guiso que había comido
mientras cuidaba a Moibeal. Edith ni siquiera recordaba quién le había traído el
estofado esa noche, pero incluso si lo hubiera hecho, no tenía que ser la persona que
había dejado caer el veneno en él.

Francamente, no tenía idea de cómo podían descubrir quién había envenenado a los
miembros de su familia. Los hombres realmente no habían sugerido nada útil tampoco y
sabía que Niels había sugerido a Geordie y Alick preguntar a Saidh y Greer si tenían
alguna idea.

Edith apartó las sabanas y las pieles y deslizó sus pies al piso solo para detenerse
cuando su mirada se posó en Niels, Ronson y Laddie en el piso al lado de la puerta. El
trío estaba envuelto en el tartán de Niels. Aparentemente, Laddie se había acurrucado
frente a Niels, de lado, y Ronson se había acurrucado junto al perro. El trío había
terminado de alguna manera con el tartán de Niels cubriéndolos a todos. La vista la hizo
sonreír.

Niels había sido bastante gruñón durante la mayoría de los tres días desde que se
había despertado, dándole miradas severas, e insistiendo en que no hiciera esto y no
hiciera aquello. Pero cuando Rory finalmente permitió que Ronson llevara a Laddie a
visitarla el día anterior, había visto un lado completamente diferente de Niels. Oh,
todavía estaba gruñón y malhumorado hasta cierto punto, pero había sido
increíblemente amable y paciente con Ronson, y Edith realmente lo había apreciado. El
niño obviamente no había tenido mucha influencia masculina en su vida y parecía
admirar a Niels bastante. Laddie también parecía encariñado con el hombre,

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Serie Novias Escocesas #5
obedeciendo sus órdenes con prontitud y comportándose con mejores modales de los
que Edith jamás había visto.

Su visita había sido un soplo de aire fresco en la habitación de enfermo. Ronson había
parloteado felizmente, contándole todo lo que había pasado desde que había caído
enferma, lo que no significaba mucho, pero seguía siendo entretenido cuando el chico
se lo contó. También había disfrutado de tener a Laddie acurrucado en la cama, incluso
cuando el perro le había lamido la cara como loco. Había algo sobre los perros que
calmaba el alma, y el alma de Edith había necesitado calma después de los
acontecimientos de las últimas semanas.

Miró al trío acurrucado en el suelo y sacudió la cabeza débilmente, sin estar segura de
cómo Ronson y Laddie habían terminado quedándose en su habitación toda la noche.
Sabía que Niels había insistido en que necesitaba protección y estaba decidido a dormir
en el piso junto a la puerta. Pero lo último que recordaba era que Ronson y Laddie
estaban acurrucados a los pies de su cama, profundamente dormidos mientras ella y
Niels hablaban en voz baja, ella en la cama, él en la silla junto a su cama. Sin embargo,
se debe haber quedado dormida porque no recordaba que el hombre, niño y perro se
movieran al suelo.

Deseando tener algún talento artístico para poder pintar esta escena y nunca olvidarla,
Edith se levantó de la cama, congelándose cuando Laddie levantó la cabeza de
inmediato. Ella le hizo el gesto para que se quedara, y lo hizo, pero el perro no bajó la
cabeza y simplemente observó con atención mientras se movía hacia el baúl al pie de
su cama para recuperar un vestido. Edith eligió el primero que su mano tocó y lo tiró
rápidamente sobre su turno. Hubiera sido bueno poder cambiar su turno, pero ella no se
arriesgaría con Niels y Ronson allí. Estaba lo suficientemente ansiosa como para
quedarse en su turno a pesar de que él ya la había visto en este.

Una vez vestida, Edith se pasó rápidamente un cepillo por el pelo, se lavó la cara y las
manos en el lavabo sobre la mesa y luego se movió silenciosamente hacia la puerta,
extendiendo su mano nuevamente para ordenar a Laddie que se quedara.
Desafortunadamente, solo había un tanto que un perro podía tomar y en el momento en
que ella alcanzaba la manija de la puerta, se puso de pie y comenzó a avanzar,
arrastrando el tartán con él. Ronson se movió de inmediato, pero Edith apenas lo notó,
sus ojos se abrieron como platos en Niels, ya que una buena porción del tartán se
separó de él antes de que se cayera de Laddie y cayera para cubrir la cara de Niels.
También dejó al hombre desnudo desde la mitad hacia abajo.

No fue hasta que Ronson se puso de pie, frotándose los ojos soñoliento, que Edith
logró apartar su mirada de más de lo que había esperado ver de uno de los hermanos
de Saidh. Sacudiendo la cabeza, abrió la puerta y salió al pasillo, seguida rápidamente
por Laddie y Ronson.

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"Deberíamos..." comenzó Ronson, pero se detuvo al instante cuando ella lo calló.

Edith cerró la puerta con cuidado, y luego acompañó al muchacho por el pasillo.
Estaban en las escaleras antes de que ella se detuviera para mirarlo y le preguntó: "¿Tu
abuela sabe dónde dormiste anoche, o ha estado enferma preocupándose
preguntándose dónde estabas?"

"Le dije", dijo un poco demasiado rápido, y balbuceó: "Lord Niels me dijo que fuera
abajo y le preguntara si estaría bien, así lo hice".

"¿Hiciste qué? ¿Preguntarle o decirle?”

Ronson hizo una mueca, pero luego suspiró y admitió: "Ella se dirigía al garderobe
cuando bajé, así que le pregunte a través de la puerta y ella no dijo que no, así que
volví arriba".

Edith chasqueó la lengua y negó con la cabeza. "Probablemente ni siquiera te escuchó.


Sabes que su audición es mala, Ronson. ¿Por qué no esperaste a que saliera y le
preguntaste entonces?”

"Porque ella se queda para siempre allí", se quejó.

"Aye, bueno, me temo que cuando envejecemos todos nos tomamos un poco más de
tiempo en el garderobe", dijo Edith.

"Hmm". Ronson frunció el ceño. "No como la abuela. A veces creo que se queda
dormida haciendo su asunto, se tarda tanto." Exhalando un profundo suspiro, sacudió la
cabeza y dijo con tristeza: "Nunca me voy a hacer viejo, y esa es la verdad, mi lady. No
voy a pasar todo el tiempo cagando en el gong2”.

Los ojos de Edith se abrieron con incredulidad, y luego, decidiendo que un cambio de
tema estaba en orden, preguntó: "¿Qué ibas a decir cuando estábamos saliendo de la
alcoba, Ronson?"

"Estaba pensando que tal vez deberíamos despertar a Niels para que pueda
mantenerla a salvo del puto asesino grano-en-el-trasero que envenenó a su padre y
hermanos", dijo Ronson con seriedad.

Edith parpadeó hacia el niño varias veces mientras su cerebro intentaba aceptar las
palabras que acababan de salir de su boca. Nunca había escuchado a Ronson usar un
lenguaje tan grosero, pero no tenía que pensar mucho para saber dónde había
aprendido las palabras. Los Buchanans tenían una forma muy colorida de hablar.
Incluso Saidh tenía una boca tan horrible que podía hacer que se te sonrojaran las
orejas.

2
las letrinas y pozos negros. La palabra "gong" se usó tanto para el retrete como para su contenido.

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"Eh... aye, bueno, estoy segura de que estaré lo suficientemente segura del... eh...
grano-en-el-culo..." Edith hizo una pausa y luego negó con la cabeza y comenzó a bajar
las escaleras, diciendo: "Estoy segura de que estaremos a salvo en la mesa, ¿no
crees?"

"Pero Laddie tendrá que salir o estará orinando por todas partes como un idiota
verrugoso", protestó Ronson.

"Oh, querido", respiró Edith débilmente. Bondad. Un poco de tiempo con los Buchanan
era ciertamente mucho tiempo cuando se trataba de aprender.

"Así que tengo que sacarlo", Ronson continuó ansiosamente, siguiéndola por las
escaleras. "Y entonces estará sola. No puedo dejarla sola, mi Lady. ¡Ese maldito
asesino podría atraparla!"

"Estoy… ¡Oh!" Edith se quedó sin aliento con sorpresa cuando de repente fue levantada
en los brazos de alguien. Girando la cabeza, miró boquiabierta a Niels y protestó:
"Puedo caminar, mi lord".

"Aye, pero eres demasiado lenta. Estabas bloqueando las escaleras," Niels discutió con
un encogimiento de hombros mientras continuaba bajando las escaleras, y luego
añadió sombríamente, "Y no deberías haber salido de la habitación sin mí".

"Justo le estaba diciendo eso, mi lord", le aseguró Ronson firmemente, pisándole los
talones. "Le dije como necesitábamos que la mantuviera a salvo del idiota verrugoso
que envenenó a su papá y sus hermanos".

"En realidad, creo que él era el puto grano-en-el-trasero, y Laddie estaría meando como
un idiota verrugoso", señaló Edith secamente, mirando a Niels mientras lo hizo. Cuando
él simplemente le sonrió, ella susurró bruscamente, "Su abuela me va a matar porque
dejé que le enseñaras esas cosas".

Niels alzó las cejas y luego se detuvo en el último escalón y se volvió para decirle a
Ronson: "Un hombre no usa esas palabras delante de una dama".

Ronson parecía confundido y señaló: "Pero usted lo hace".

Niels frunció los labios y asintió. "Aye. Lo hago," admitió y luego se volvió para cruzar el
suelo del salón, murmurando, "Lo intenté, mi Lady, pero por Dios tiene razón. Me temo
que mis hermanos y yo maldecimos horrible".

"Aye", dijo Edith en un suspiro. "Lo mismo hace Saidh. Supongo que hay peores
hábitos".

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Niels gruñó lo que podría haber sido un acuerdo cuando la sentó en el banco de la
mesa, y luego miró alrededor y ordenó: "Llévate a Laddie afuera, Ronson. Tiene que ir
tan mal que sus ojos están casi flotando”.

"Aye, mi lord", dijo el niño y se alejó corriendo, llamando a Laddie para seguirlo justo
cuando el perro comenzó a levantar una pierna al final del banco en el que estaba
sentada. Afortunadamente, el perro obedeció y lo siguió de inmediato.

Niels los observó hasta que salieron del gran salón y luego se dejó caer para sentarse
en el banco junto a Edith.

"Él piensa mucho de ti", dijo en voz baja.

"Aye. Bueno, también me gusta él," dijo bruscamente Niels. "Es un buen muchacho".

"Lo es", ella estuvo de acuerdo.

"Fue bueno de ti aceptarlo a él y a su abuela", dijo Niels en voz baja para que los
demás no los escucharan.

Edith se encogió de hombros. "Haces que parezca caridad. No lo fue. Yo tenía


posiciones para ambos".

"Aye. Ronson cuida tu perro", dijo con diversión. "Dime que los dos simplemente no te
siguen alrededor de la fortaleza durante todo el día".

"¿Cómo supiste...?" Al darse cuenta, se detuvo y chasqueó la lengua con irritación por
haberse delatado.

"Debido a que me han estado siguiendo en tu ausencia, cada vez que salí de tu
habitación", Niels respondió su pregunta inacabada, su tono seco. "Es obvio que el
chico generalmente te sigue a todos lados. Cualquier pregunta que hice sobre ti, él me
dió la respuesta”.

Edith se puso rígida y se volvió para mirarlo sospechosamente. "¿Qué tipo de


preguntas?"

Ella no fue apaciguada por la amplia sonrisa que de repente reclamó sus labios.

"Ah, mi lady, no puedo decirle cuánto me complace verla despierta y bien".

Edith se volvió rápidamente y sonrió a Cawley mientras reclamaba el lugar a su otro


lado y tomaba su mano.

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"Sabía que podían salvarla", le dijo Cawley, apretando la mano que sostenía. "Gracias a
Dios que Tormod me escuchó y finalmente aceptó dejarlos entrar para que la
atendieran, de lo contrario seguramente hubiera muerto".

"La sangre de Dios, Cawley," gruñó Tormod, dejándose caer en el banco junto a él.
"Estaba siguiendo órdenes. Una vez el muchacho señaló que su hermano podría salvar
a nuestra señora, los dejé entrar, ¿no es así? ¿A pesar del hecho de que
probablemente me azoten por eso?"

"Oh azotado", dijo Cawley con disgusto. "¿Qué es un poco de flagelación cuando
nuestra señora está viva y bien?"

"No lo sé. ¿Por qué no te llevo al frente y te doy los azotes que probablemente recibiré
cuando regrese el laird y entonces puedes decir lo que es un poco de flagelación?"
Tormod dijo con gravedad.

"Oh, ahora, Tormod", dijo Cawley con alarma.

"No haría eso y tú lo sabes", dijo Tormod en un suspiro, y luego preguntó: "¿Hablaste
con el cocinero, como te pedí?"

"Claro que sí", dijo Cawley de inmediato.

"¿Y?" Preguntó Tormod.

"Y no podía recordar quién le llevó el estofado que hizo enfermar a Lady Edith", admitió
Cawley con tristeza.

"¿Y?" Repitió Tormod.

"¿Y qué?" Cawley preguntó cautelosamente.

"¿Eso es todo?" Espetó Tormod. "He estado yendo a la intemperie supervisando a los
hombres en la práctica y dirigiendo a los sirvientes en la ausencia de Lady Edith. Te
pedí que hicieras una cosa, una cosa: ‘pregunta al cocinero y a sus criadas en la cocina
y averigua lo qué puedas’, ¿y eso es todo lo que vuelves a decirme?”

"Oh bien... Lo intenté," dijo Cawley ansiosamente.

"No lo suficiente," gruñó Tormod. "Si no podemos aclarar quién puso el veneno en su
comida y bebida, entonces Lady Edith todavía está en peligro. Lleva tu trasero peludo a
la cocina y mira la comida, asegúrate de que nadie ponga veneno en nada. Y haz
preguntas mientras estás allí. Descubre lo que puedas”.

Cawley asintió ansiosamente y se levantó.

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"Y dile al cocinero que es mejor que haga y traiga la comida de Lady Edith y que nunca
quite sus ojos mientras lo hace, porque si ella es envenenada de nuevo, voy a colgar a
los dos de la pared del castillo y dejar que los cuervos recojan sus huesos".

Con los ojos muy abiertos, Cawley asintió y se fue rápidamente a las cocinas.

Tormod lo miró irse y luego se volvió hacia la mesa con un suspiro y murmuró: "Eso
debería mantenerlo fuera de nuestro cabello por uno o dos días más".

"Aye", murmuró Edith y luego miró a Niels y notó su expresión.

"Cawley es especial", dijo Tormod cuando Edith dudó en explicar.

"¿Especial?", Preguntó Niels con dudas.

"Aye", estuvo de acuerdo Edith. "Él tiene una tendencia a... eh…"

"Él cuenta historias", dijo Tormod suavemente. "Mucho. Aunque acaba de decirle a
Edith que él argumentó que los dejasen entrar, cuando Brodie regrese le dirá con la
misma seriedad, y justo enfrente de ella, que trató de advertirme para no ir en contra de
sus órdenes y abrir la puerta de entrada para ustedes."

Cuando Niels la miró, Edith asintió solemnemente. "Es lo que siempre ha hecho".

Niels frunció los labios y luego le preguntó a Tormod: "Entonces, ¿cuál es la verdad?
¿Argumentó que deberías dejarnos entrar o mantenernos fuera?”

"Ambos", dijo Tormod con el ceño fruncido. "Lo que es el infierno de eso. Él nunca
miente realmente, solo..." Vaciló y luego explicó: "Cuando llegaron aquí, argumentó que
era mejor no dejarlos entrar, y me recordó que Lady Victoria había dicho que no
dejáramos entrar a nadie. Y luego, cuando mencionó que su hermano era un sanador y
podría salvarla, él argumentó que debería dejarlos entrar. Pero en el momento en que
estuve de acuerdo, comenzó a argumentar que no deberíamos”.

Niels negó con la cabeza y preguntó desconcertado: "¿Por qué es el segundo aquí?"

"Porque es el medio hermano de mi padre y quería cuidarlo", dijo Edith en voz baja.

Niels arqueó las cejas ante el franco anuncio, y luego preguntó: "¿Medio hermano?"

"Es una historia triste", le advirtió Tormod, y luego se la dijo para que Edith no tuviera
que hacerlo. "Verá, el viejo laird bastardo, el abuelo de Edith, había desterrado a
Cawley y su madre cuando Cawley era solo un muchacho. Pero el padre de Edith lo
sabía, y cuando el anciano murió, quiso compensar su comportamiento. Encontró a
Cawley, lo trajo aquí y lo convirtió en su segundo, pero luego se aseguró de que todos

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entendiéramos que solo era de nombre. Cuando decimos que Cawley es especial, nos
referimos a que no está del todo bien de la cabeza".

"Mi abuelo no se limitó a desterrar a Cawley y su madre", explicó Edith. "Cuando era
niño, Cawley descubrió de alguna manera que mi abuelo era su padre. Se le acercó y le
dijo que lo sabía. No entiendo lo que esperaba lograr. Probablemente solo quería un
padre, era solo un niño, no mayor que Ronson en ese momento, pero el Abuelo estaba
furioso. Lo golpeó horriblemente... Casi hasta la muerte. Y luego los desterró a los dos.
La madre de Cawley se lo llevó e hizo lo mejor que pudo, pero aunque su cuerpo sanó,
su mente ya nunca volvió a ser la misma”. Se encogió de hombros impotente. "Mi padre
solía llevarles comida y monedas para tratar de ayudarlos a sobrevivir, pero podía hacer
poco más que eso hasta que su padre muriera".

"Ya veo", dijo Niels en voz baja.

"El problema es que a Cawley le gusta ser el centro de atención", dijo Tormod en voz
baja. "Si él no se mantiene ocupado, se insinuará a sí mismo en todo y tenderá a
causar confusión y conflictos".

"Así que, lo mantienes ocupado", dijo Niels con comprensión.

"Aye, y generalmente en las cocinas", dijo Tormod con una sonrisa irónica. "Porque lo
único que le gusta más en el mundo es su comida. De hecho, en cuanto esté en la
cocina olvidará todo lo que le dije y simplemente se concentrará en comer”.

"Creemos que es porque él y su madre estuvieron casi muriendo de hambre por tanto
tiempo", dijo Edith en voz baja. "Ahora come todo lo que puede por temor a que no haya
más mañana".

"Aye", dijo Tormod con tristeza. "Afortunadamente, el cocinero es del tipo amable y
simplemente lo sienta en un rincón con un tazón tras otro de comida y lo deja charlar".

"Así que no lo pretendías cuando dijiste que lo mejor para el cocinero era preparar y
traer la comida de Edith el mismo y... "

"Oh, aye, lo dije en serio", interrumpió Tormod con una sonrisa sombría. "Pero no
importa si Cawley le dice, porque anoche se lo dije al cocinero y esta mañana otra vez".

"Ah", dijo Niels relajándose e incluso logrando una sonrisa. Luego miró a Edith. "¿Es tu
tío Cawley la razón por la que aceptaste a Ronson y su abuela?"

"Nay", dijo Edith con sorpresa. "Los recibí porque necesitaban un hogar. Todos
deberían tener un lugar para llamar hogar”.

Niels miró a Edith y se preguntó si ella se daría cuenta de lo mucho que había dicho
con esas palabras. Le había dado a Ronson y a su abuela un lugar donde podían sentir
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que pertenecían y que podían llamar hogar. Les estaba dando lo que ella no tenía. Su
lugar aquí era temporal. Edith perdería el único hogar que había conocido y el resto de
su familia junto con él, todos los soldados y sirvientes con los que había crecido y
considerado su familia, amigos y responsabilidades. Incluso perdería a su maldito perro
ya que no creía que la abadía le permitiera llevar a la enorme bestia con ella.

Fue desgarrador para él, y tan injusto. Edith era una buena mujer, una mujer amable.
Se merecía algo mejor.

"Mi lady".

Niels miró alrededor justo cuando Edith lo hizo, sus ojos entrecerrándose al ver al
pequeño hombre flaco detrás con una fuente de metal con pasteles.

"Le hice sus favoritos", dijo el hombre. "Pasteles rellenos de cerezas endulzadas".

"Oh, qué adorable", dijo Edith sonriendo al hombre. "Gracias, Jaimie".

"Fue un placer", le aseguró, radiante. "Todos estamos muy contentos de verla


levantada y alrededor de nuevo, mi lady. Y le prometo que no quité los ojos de estos
pasteles de principio a fin. Incluso me puse de pie y los vi cocinar. Nadie se acercó a
ellos. Así que disfrútelos. Son seguros".

"Gracias, Jaimie", dijo Edith de nuevo, y cuando el hombre se inclinó para dejarlos en la
mesa frente a ella, le dio un rápido beso de gratitud en la mejilla que lo hizo sonrojarse
y aturdirse. Sacudiendo la cabeza repetidas veces, se apartó de la mesa y luego dio
media vuelta y corrió hacia las cocinas tan rojo como las cerezas en sus pasteles.

Niels miró los pasteles en la bandeja y tomó la mano de ella cuando fue a tomar uno.
"Tal vez debería probar uno primero en caso de que estén envenenados".

Edith parpadeó con sorpresa. "Escuchaste a Jaimie, los observó de principio a fin.
Están bien."

"Pero, ¿y si es él quien envenenó el vino y el estofado?", Señaló.

"¿Qué? Él no..." Haciendo una pausa, ella entrecerró los ojos. "Solo estás detrás de mis
pasteles de cerezas, mi Lord".

"No lo estoy, yo…" comenzó a protestar, pero se detuvo cuando ella tomó un pastel de
la fuente y se lo ofreció.

"Pruébalo entonces. Son muy buenos."

Niels aceptó el pastel con su boca hecha agua. Él estaba mordiéndolo incluso antes de
que ella se volviera para ofrecerle la fuente al otro hombre.

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"Tú también, Tormod", dijo Edith. "Posiblemente no puedo comer todo esto sola”.

"Ah, es una buena mujer, Lady Edith. Un corazón de oro es lo que tiene", dijo Tormod,
tomando un pastel también.

Niels vio que Edith sacudía la cabeza con diversión ante los halagos del hombre, pero
estaba ocupado tratando de no gemir por lo bueno que era el pastel que acababa de
morder. Querido Dios, si el cocinero de Buchanan hubiera hecho algo tan bueno como
esto, él y sus hermanos no estarían felices vagando por todas partes haciendo dinero.
Todos estarían atrapados en casa, tan grandes como Cawley e igual de satisfechos.

"¿Pasteles?" Gritó Ronson, corriendo hacia la mesa con Laddie pisándole los talones.

"Aye. De cerezas", dijo Edith y le tendió la fuente al chico. Cuando tomó uno, le dijo:
"Toma dos y siéntate junto a Niels para comer. Sin embargo, no compartas con Laddie,
ya sabes que lo enferman”.

"Lo sé", dijo Ronson. "Gracias, mi lady." Tomando su botín, se subió al banco al lado de
Niels y se puso a trabajar en devorar las delicias de cereza.

"¿Bien?"

Con la boca llena de pastel, Niels levantó una ceja en cuestión ante la pregunta de
Edith.

"¿Está envenenado?", Preguntó secamente.

Masticando, simplemente negó con la cabeza y Edith resopló y tomó tres pasteles más
y los puso frente a él, diciendo: "Disfrútalos".

Fue en ese momento que Niels Buchanan decidió que Edith Drummond era una de las
mejores mujeres que había conocido.

"Entonces, ¿cuáles son sus planes hoy?", Preguntó Tormod.

Niels sabía que le estaba preguntando a Edith, pero cuando ella abrió la boca para
responder, rápidamente se tragó el pastel y dijo con firmeza: "Cama".

"¿Qué?" Edith se volvió hacia él con sorpresa. "No voy a volver a la cama. Me acabo de
levantar."

"Tienes que tomar esto lentamente. Has estado enferma durante semanas.
Necesitas..."

“Estaba envenenada, no enferma", le recordó sombríamente. "Y estoy bien ahora".

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"No debes exagerar. Todavía estás débil", argumentó.

"Aye, lo estoy", reconoció. "Pero no me voy a poner más fuerte descansando en la


cama. Además, hay mucho que hacer por aquí".

"Tonterías", dijo Niels de inmediato.

"¿En serio?", Preguntó con incredulidad. "¿Así que no te diste cuenta del horrible olor a
moho de la alfombra de juncos en la que dormiste anoche? Porque me doy cuenta de
que ahora llevas ese hedor contigo, al igual que Ronson y Laddie.

Frunciendo el ceño, Niels se olisqueó e hizo una mueca. De hecho, había notado el olor
cuando se había acostado la noche anterior, pero tantas horas con él en la nariz
aparentemente lo habían hecho inmune al olor. Sin embargo, ahora que ella lo
mencionó, llevó el olor consigo y reemplazo el de sus pasteles de cereza.

Frunciendo el ceño, preguntó: "¿Qué tienes que hacer para que los juncos huelan
mejor?"

"Haré que las mujeres retiren y quemen las viejas esteras de junco y luego tendré que
llevar a los niños al río para recoger juncos frescos." Hizo una pausa y luego agregó, "Y
entonces las mujeres tendrán que tejer esteras frescas para reemplazar las viejas y las
podremos y rociaremos flores secas para que huelan bien".

Niels guardó silencio por un momento, considerando lo que ella había dicho. En el corto
tiempo que había conocido a Edith, había llegado a comprenderla lo suficiente como
para darse cuenta de que hacer que las mujeres quitaran y quemaran las viejas esteras
significaba que ella las ayudaría a hacerlo, y llevar a los niños a recolectar juncos
frescos probablemente significaba que estaría realizando el trabajo agotador junto a
ellos. Ese era justo el tipo de mujer que era, guiando con el ejemplo y no simplemente
quedándose atrás y ladrando órdenes. Niels también sabía que se sentía bien ahora,
pero la mujer había pasado la mayor parte del último mes enferma en la cama. Se
cansaría mucho más rápido de lo que creía.

Sin embargo, sospechaba que no iba a poder convencerla para que no se metiera en
este apresurado negocio. En verdad, él realmente no quería. Ahora que estaba
consciente de eso otra vez, encontró el hedor mohoso que había impregnado su camisa
y su tartán insoportable. Estaba pensando que un viaje rápido al lago para lavar el olor
era una buena idea, pero le haría poco bien si luego tuviera que acostarse en las
esteras malolientes esta noche. Como no tenía intención de dejar a Edith desprotegida,
allí era donde definitivamente estaría, así que las prisas eran una necesidad.

"Muy bien, sugiero que le pidas a tu doncella Moibeal que supervise la recolección y la
quema de las esteras mientras llevas a los niños a recoger los juncos", dijo Niels ahora,
y cuando ella comenzó a protestar como esperaba, agregó: "eso ayudará a acelerar las

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cosas y creo que puede ser necesario. Mi pierna estaba sensible cuando desperté esta
mañana".

Edith parpadeó con confusión. "¿Tu pierna? ¿Qué tiene eso que ver con algo?”

"Es una vieja lesión que usualmente solo actúa antes de una tormenta", explicó, lo cual
era cierto, aunque estaba bastante seguro de que la sensibilidad de esta mañana
podría atribuirse a dormir en el suelo frío y duro y no a que llovería. "Querrás los juncos
recolectados y los niños de vuelta en la fortaleza antes de que eso ocurra o tendrás un
castillo lleno de niños enfermos en tus manos".

"Oh, aye", ella estuvo de acuerdo con el ceño fruncido.

"Voy a supervisar la recolección y la quema de las viejas esteras", dijo Tormod ahora.
"Haré que los hombres también ayuden. De esa manera, puede llevar a Moibeal y otras
dos sirvientas para que le ayuden a juntar juncos y manejar a los niños. Pueden ser
difíciles”.

"Oh, eso no es necesario", dijo Edith de inmediato. "Puedo manejar a los niños".

"Aye, pero si va a llover, querrá que los muchachos y las muchachas sean rápidos en
sus asuntos, y sabe cómo se entretienen y juegan. Moibeal y las demás pueden
ayudarla a acelerar las cosas. De hecho," anunció Tormod, "estoy pensando que tal vez
debería tomar todas las criadas y dejar la recolección y la quema completamente para
mis hombres. Se hará en un abrir y cerrar de ojos, evitará la lluvia y seguro que será
como un día libre para ellos, un poco divertido. Después de estas semanas de estrés y
tragedia, todos podrían tener un poco de eso".

"Una buena idea, Tormod", dijo Niels con un asentimiento aprobatorio, apreciando su
ayuda.

"Laddie y yo iremos contigo, mi Lady", anunció Ronson.

Niels sonrió al muchacho cuando vio el relleno de cereza manchado en toda su cara.
Parecía que tenía más alrededor de su boca que en ella.

"Gracias, Ronson, eso estaría bien", dijo Edith con una sonrisa.

Asintiendo con la cabeza, Ronson lamió el relleno de cereza de su mano y agregó: "No
se preocupe, Laddie y yo la mantendremos a salvo de ese percebe cerebro-hervido del
trasero de Satanás que la envenenó".

"Dios querido, dime que Bessie no escuchó eso", respiró Edith.

"¿Quién es Bessie?", Preguntó Niels con curiosidad.

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"La abuela de Ronson", explicó Tormod.

Interesado en ver a la mujer que había ayudado a criar al buen chico junto a él, Niels
miró alrededor. "¿Ella está aquí?"

"Aye. Es ella, remendando junto al fuego. No mires", Edith jadeó cuando él se volvió
para mirar por encima de su hombro, y luego rápidamente preguntó, "¿Está mirando
hacia acá?"

"Nay. Parece estar dormida", dijo Niels, mirando a la anciana en la silla junto al fuego.
Su cabello estaba recogido en un moño apretado en la parte superior de su cabeza y su
ropa estaba andrajosa, pero limpia. Aunque sus ojos parecían estar cerrados y sus
manos yacían inmóviles en su regazo encima de una camisa que aparentemente había
estado reparando.

"Gracias a Dios", murmuró Edith. "Vamos, Ronson. Buscaremos a Moibeal y a las otras
doncellas, y luego reuniremos a los niños y saldremos tan pronto como podamos”.

"No va a dejarla salir a juntar los juncos, ¿no?", Preguntó Tormod frunciendo el ceño
una vez que Edith y Ronson se habían alejado para buscar sirvientes que llevar con
ellos.

Niels negó con la cabeza. "Nay. Yo voy. Y estoy tomando pieles para que se siente, así
como algunos pasteles de cereza y un caballo. Ella no se da cuenta ahora, pero estará
exhausta en una hora”.

"Aye, bueno, ella es obstinada", le advirtió Tormod. "Entonces no espere que admita
cuando se canse. Trabajará al borde del agotamiento y aún se obligará a seguir
adelante en lugar de admitir la derrota”.

"Aye. Ya lo sospechaba", le aseguró Niels. "Ella se parece mucho a mi hermana en


eso".

"¿Tiene un plan?" Preguntó Tormod con interés.

"Aye. Usaré al muchacho contra ella", dijo Niels simplemente.

El anciano sonrió y asintió. "Eso funcionará. Se preocupa por él lo suficiente como para
hacerte pensar que es de ella”.

"Aye", estuvo de acuerdo Niels y luego preguntó: "¿Por qué es eso?"

Tormod negó con la cabeza. "Lady Edith siempre ha tenido buen corazón... demasiado
bueno a veces. Otros se aprovechan”. Suspiró. "Me rompe el corazón pensar qué
pasará con ella cuando Brodie regrese. Lo más probable es que irá a la abadía una
hora después de su llegada. Ella se merece algo mejor”.

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"Aye", murmuró Niels, deseando que hubiera algo que él pudiera hacer por ella.

"Bueno, supongo que será mejor dejar que los muchachos sepan lo que estarán
haciendo hoy", dijo Tormod, poniéndose de pie.

"¿Les gustara?", Preguntó con curiosidad.

Tormod resopló. "No es probable. Oh, se quejarán y se quejarán por hacer el trabajo de
las mujeres mientras arrastran las esteras, pero una vez que llegue el momento de
quemar los juncos, sacarán la cerveza y beberán y se reirán alrededor del fuego”.

Niels sonrió débilmente. Es lo que él y sus hermanos también habrían hecho. Deseando
al hombre un buen día, se puso de pie y se dirigió arriba de las escaleras para
recuperar los artículos que quería para esta salida.

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Capítulo 4

"Tal vez debería descansar, mi Lady".

Edith sonrió a Moibeal por esa sugerencia, pero simplemente negó con la cabeza.
"Estoy bien."

"Aye, pero ha estado terriblemente mal durante semanas", dijo su criada con
preocupación. "No quiere exagerar y volver a enfermarse”.

"Fui envenenada, no enferma, Moibeal", señaló Edith, inclinándose para cortar en la


base del siguiente manojo de juncos con la hoz en la mano derecha.

Edith reprimió un gemido mientras agregaba los juncos al manojo recogido en su brazo
izquierdo, y luego miraba alrededor con sorpresa cuando se le quitó toda la pila.
Tragándose el "gracias" que casi se le escapó, frunció el ceño a Niels y dijo: "Puedo
hacerlo, mi Lord, tú..."

"Ronson está agotado", interrumpió Niels. "No durmió bien anoche y es más joven que
la mayoría de los otros niños aquí. Él necesita un descanso”.

Deteniéndose, Edith miró a su alrededor con el ceño fruncido para ver a Ronson
trabajando fatigosamente a lo largo de la orilla, con el cansancio claro en su rostro
pálido. "Aye", murmuró con preocupación y se enderezó. "Le diré que se detenga y
descanse ahora".

"Ya lo hice", dijo Niels encogiéndose de hombros. "Pero él insiste en que trabajará tanto
como tú".

"¿En serio?" Ella frunció el ceño.

"Aye. Esperaba convencerte para que te tomaras un pequeño descanso. El tiempo


suficiente para que el chico se detenga," agregó rápidamente, y luego la tentó con,
"traje algunos de esos pasteles de cereza y pieles para sentarse. Ya extendí las pieles.
Pensé que podríamos hacer un picnic. Sospecho que Ronson se dormirá tan pronto
como su panza este llena y luego puedes trabajar más o no, como lo desees”.

La boca de Edith comenzó a hacerse agua ante la idea de los pasteles de cereza, y su
cuerpo estaba pidiendo a gritos que descansara. Niels tenía razón. Se había cansado
antes de lo que esperaba, pero siguió insistiendo, decidida a no ceder.

~ 56 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Su mirada se deslizó sobre los otros niños y las criadas que trabajaban a lo largo de la
orilla del río para recoger los juncos necesarios y luego se elevó hacia el cielo sobre su
cabeza. Era tan azul como los ojos de Niels. Ni siquiera había un atisbo de lluvia que
pudiera ver. Parecían tener suficiente tiempo para realizar su tarea. Su mirada se movió
al lado de los carros que habían traído consigo. Uno estaba lleno, el otro apenas
comenzaba a usarse y ella asintió.

"Moibeal, haz que Sorcha conduzca el carro lleno de regreso al castillo para que las
criadas mayores que se quedaron atrás puedan comenzar a tejer las esteras. Haz que
Bryce la acompañe", agregó, eligiendo al niño mayor. "Dales una manzana a cada uno
para que lleven con ellos y luego pasa manzanas a los niños y al resto de las doncellas.
Todos pueden sentarse y descansar por unos minutos”.

"Aye, mi Lady", Moibeal sonrió agradecida, Edith notó que no era a ella, sino a Niels.
Como si hubiera logrado un milagro al hacer que ella se detuviera.

Negando con la cabeza, comenzó a darse la vuelta y estuvo a punto de caerse cuando
intentó alejarse de la orilla. El barro estaba succionando sus pies, minando su fuerza. Si
Niels no la hubiera agarrado del brazo, se habría caído. Murmurando un "gracias", dejó
que la condujera hacia los árboles donde había puesto las pieles.

"¡Ronson!", Llamó Niels al ver a Edith sentada. "Trae a Laddie y ven a sentarte un rato".

"Aye, mi Lord".

Edith hizo una mueca por el alivio en la voz del chico, y se mordió el labio cuando lo vio
salir del barro a lo largo del río y luego dejar caer su pila de juncos y dirigirse hacia
ellos. El chico estaba arrastrando los pies algo horrible hasta que Laddie se movió a su
lado. Lanzando su brazo sobre el perro, Ronson se inclinó sobre él y logró mantener el
ritmo un poco. Sin embargo, en el momento en que llegó a las pieles, soltó al perro y se
desplomó para sentarse sobre ellas.

"Esta recolección de juncos es un asunto de mierda", jadeó Ronson, cayendo de


espaldas sobre las pieles.

Edith suspiró y sacudió la cabeza, demasiado agotada para comentar su lenguaje.


Honestamente, Niels y sus hermanos habían estado en el castillo solo por diez días, la
mayor parte de ese tiempo los habían pasado en su habitación por lo que podía ver, y
ya tenían al muchacho hablando como un soldado. Solo que los soldados trataban de
no maldecir tanto frente a las mujeres, o al menos no frente a ella.

"Saca los pies embarrados de las pieles, muchacho. Y asegúrate de que Laddie no se
suba a ellas. Está empapado por tratar de atrapar peces en el río", dijo Niels
suavemente mientras se sentaba y abría el saco que había traído para comenzar a
cavar adentro.

~ 57 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Aye, mi Lord." Ronson se movió para asegurarse de que sus pies embarrados no
estaban sobre el pelaje, y luego dio unas palmaditas en la hierba junto a sus pies, y
dijo: "Ven, Laddie. Acuéstate."

El enorme perro se movió para oler la mano de Ronson, obviamente esperando un


regalo. Cuando no encontró uno, soltó un bufido, y luego se sacudió bien, haciendo que
el agua volara por todas partes.

Ronson chilló sorprendido y se cubrió la cara, pero Edith simplemente sonrió y cerró los
ojos para evitar las gotas de agua que salpicaban sobre ella. Estaba demasiado
contenta para moverse, el sol se sentía bien en su rostro y le iluminaba los párpados de
modo que todo lo que veía era una vista roja brillante.

"¿Muchacha?"

Edith abrió los ojos para ver a Niels sosteniendo un pastel de cereza y una piel con
líquido.

"Gracias," murmuró, aceptando la oferta. Tomando los dos, ella olfateó el líquido en la
piel, aliviada cuando resultó ser sidra.

"No traje vino porque mencionaste que no te gustaba mucho", murmuró, mientras le
daba a Ronson un pastel de cereza antes de tomar uno para sí mismo.

"Gracias," dijo Edith sinceramente y bebió un poco del líquido dulce antes de pasar la
piel.

Alzando su pastel, lo mordió y gimió suavemente de placer cuando el dulce centro


explotó en su boca. Nadie hacia pasteles como Jaimie. Edith comió el primero
rápidamente, pero se tomó más tiempo con el segundo, medio distraída mientras veía a
Niels pelar una manzana en una larga hebra que colgaba del borde de su cuchillo.

"¿Cómo hace eso, milord?", Preguntó Ronson, mirando lo que Niels estaba haciendo
con fascinación.

"Solo sosteniéndolo dando vueltas", dijo Niels y se detuvo para tomar otra manzana. Se
la dio al chico y le dijo: "saca tu sgian-dubh, y te mostraré".

"Ronson no tiene un sgian-dubh", dijo Edith suavemente.

Niels frunció el ceño y luego le entregó el suyo. "Puedes usar el mío entonces. Usaré mi
puñal".

Ronson aceptó el cuchillo corto de mango negro, con los ojos abiertos y reverentes.

~ 58 ~
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"Mira que no te cortes a ti mismo", advirtió Niels mientras sacaba su daga y la deslizaba
bajo la cáscara de manzana que había comenzado. "Ahora solo comienza en la parte
superior por el tallo y ve girando, pero no quieres cortar demasiado profundo si no
desperdicias la carne de la manzana. Sin embargo, no cortes demasiado fino, porque
de lo contrario se romperá".

Edith observó en silencio mientras instruía al niño, fascinada por lo amable y alentador
que era con él.

Tumbada de costado para mirar, sonrió al notar cómo Ronson sacaba la lengua y se
curvaba hacia un lado mientras trabajaba. Su concentración fue tal que pensarías que
estaba aprendiendo la tarea más importante del mundo, pensó divertida, y luego miró a
Laddie cuando de repente se puso de pie y salió corriendo. El perro se había
precipitado al agua para unirse a los demás. Habían terminado sus manzanas y volvían
a juntar juncos, vio con el ceño fruncido y se volvió hacia Ronson y Niels. Ronson
todavía estaba cerca de la parte superior de su manzana, trabajando lenta y
cuidadosamente para pelarla en una larga hebra.

Ella esperaría hasta que terminara y comiera su manzana y luego sugeriría que
volvieran a trabajar con los demás, decidió. Mientras tanto, cerraría los ojos por un
minuto y disfrutaría del sol calentando su piel y la brisa lo refrescándola.

Fue el sonido de las ruedas del carro lo que la despertó. Parpadeando abrió los ojos,
Edith miró las pieles delante de su cara y luego levantó la cabeza y miró a su alrededor.
Sus ojos se abrieron incrédulos cuando vio a las criadas y los niños que seguían el
carro desbordado de juncos fuera del claro. Habían terminado mientras dormía, se dio
cuenta con consternación. Dios mío, ¿cuánto tiempo había dormido?

Su mirada se movió hacia el cielo para ver que el sol estaba en lo más alto. Parecía ser
alrededor del mediodía. Suspirando se sentó, sus ojos volviendo al grupo que partía, de
nuevo, justo a tiempo para ver a Moibeal mirar hacia atrás y notar que estaba despierta.
La doncella sonrió, la saludó con la mano y luego siguió acompañando a los niños.

Un ladrido excitado le llamó la atención entonces y Edith miró hacia el río donde
estaban Niels, Ronson y Laddie. El perro saltaba emocionado por la orilla, parecía
querer perseguir lo que sea que Niels y Ronson estaban arrojando al agua. Tardó un
momento antes de darse cuenta de que Niels le mostraba a Ronson cómo hacer saltar
piedras en la plácida superficie del río. La comprensión la hizo sonreír débilmente. Era
algo que ella y sus hermanos habían hecho de niños. Este era el único lugar en el río
donde el agua se desaceleraba lo suficiente como para permitirlo.

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Serie Novias Escocesas #5
Observó brevemente, maravillada de nuevo de lo bueno que era con el chico, y luego
miró hacia abajo. Toda la evidencia de su picnic había desaparecido, solo quedaban las
pieles para que ella durmiera. Se levantó y las reunió rápidamente y las juntó en una
pequeña pila. Luego se dirigió hacia la orilla del agua para unirse a los hombres,
sonriendo y dándole una caricia a Laddie cuando se apresuró a su lado a saludarla.

"¡Laddie!" Ladró Niels cuando el perro trató de saltar sobre ella. El galgo obedeció al
sonido de inmediato y mantuvo los pies en el suelo mientras Edith lo acariciaba.

"¿Cómo te sientes?", Preguntó Niels suavemente mientras ella continuaba, el perro


ahora a su lado.

"Como si hubiera dormido mientras todos los demás trabajaban", dijo con disgusto.

"Aye, lo hiciste", estuvo de acuerdo Niels con facilidad. "Lo que significa que estás lista
para la segunda parte de tu día".

Edith lo miró con recelo. "¿Por qué estoy tan segura de que no significa tejer esteras?"

"Porque eres una mujer excepcionalmente inteligente", dijo solemnemente, y luego miró
a Ronson y Laddie que se habían movido más allá de la costa. "Vamos, muchacho, es
hora de irnos".

"Aye, mi Lord. Vamos, Laddie”, dijo Ronson y corrió hacia ellos.

"Todavía no me has dicho a dónde vamos", dijo Edith cuando Niels la tomó del brazo y
se volvió para llevarla hacia su caballo.

"¿Qué está en tu lista de cosas por lograr? Después de tejer las esteras que las
mujeres habrán hecho en algún momento, incluso sin tu ayuda", agregó rápidamente.

Edith se inclinó para arañar a Laddie detrás de la oreja cuando se movió hacia un lado y
le dio un golpecito en la pierna. Pero su mente estaba centrada en cualquier cosa que
pudiera necesitar hacer en la fortaleza. Tendría que hablar con Jaimie sobre el menú
durante el siguiente momento, aunque al parecer él había hecho lo suficiente sin su
aporte en las últimas semanas. Sin embargo, necesitaba averiguar qué necesitaba que
comprara para él el día de mercado en la aldea. Pero podría hacerlo mañana o al día
siguiente. El día de mercado se llevaba a cabo en el pueblo el sábado todas las
semanas. Ahora era solo el lunes.

Aparte de eso, las cosas parecían haber progresado muy bien en la fortaleza a pesar
de su enfermedad. Los sirvientes estaban bien entrenados y sabían qué hacer. Al
parecer también habían sido buenos para hacer las tareas diarias sin supervisión,
aunque sospechaba que Tormod tenía algo que ver con eso. No dudaba ni por un
momento que él había marchado sobre ellos en su ausencia, lo que apreció. Por lo

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tanto, aunque estaba segura de que había otras cosas que hacer, no sabría lo que
necesitaba hacer hasta que pudiera echar un vistazo. En realidad, los juncos habían
sido lo único que había necesitado atención urgente. El olor de ellos era insoportable.

Eso sí, eso hizo que bañar a Laddie fuera un tema bastante urgente... y a Ronson... y
encontrar al niño un tartán limpio. Niels también podría aprovechar un baño y un tartán
limpio después de pasar la noche en los juncos mohosos, pero no podía ordenarle que
se bañara. Y luego a Edith le gustaría bañarse. Había querido bañarse desde que se
había despertado pero no había ordenado uno porque se negaba a bañarse frente a los
hermanos Buchanan y parecía que habían echado raíces permanentemente en su
dormitorio. Al menos Niels lo había. Rory había pasado tanto tiempo en la habitación de
Effie como en la suya. Y Geordie y Alick se habían ido cabalgando a MacDonnell, pero
Niels todavía insistía en que ella necesitaba su protección y se negaba a dejarla sola, ni
siquiera en su habitación.

"Me gustaría bañarme y asegurarme de que Ronson y Laddie también lo hagan",


admitió mientras lo miraba enrollar rápidamente las pieles y asegurarlas a un lado del
caballo con una cuerda. Luego montó rápidamente.

"Perfecto", pronunció Niels y Edith se quedó sin aliento cuando de repente se inclinó, la
tomó por debajo de los brazos y la levantó sobre su montura frente a él.

"¿Por qué eso es perfecto?" Preguntó Edith mientras se acomodaba de lado en su


regazo.

"Porque todos vamos al lago a bañarnos", anunció, y luego se volvió y tendió una mano
hacia Ronson. "Tómame la mano, muchacho".

Ronson vaciló, pero luego levantó su mano y Niels lo hizo girar hacia arriba y detrás del
caballo. "No hay mucho espacio con los tres aquí. Envuelve tus brazos alrededor de mí,
muchacho, para que no te resbales del culo del caballo”.

"Ay, ya, yay3", respiró Edith. Nunca conseguiría que Ronson dejara de maldecir
mientras Niels siguiera usando esas palabras delante del chico. Su abuela seguramente
la culparía por esto.

"Así es, muchacho. Agárrate fuerte”, instruyó Niels, estirándose alrededor de Edith para
agarrar las riendas.

"Tal vez deberías ponerlo en mi regazo", sugirió Edith, moviéndose para tratar de mirar
a su alrededor al chico.

"Estará bien", dijo Niels con dulzura. "No es lejos".


3
Ai, yi, yi: Una expresión utilizada para mostrar frustración, desesperanza, tristeza, irritación, etc. No tiene
traducción literal.

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Edith asintió, pero también deslizó sus manos alrededor de su cintura para abrazar a
Ronson y asegurarse de que se quedara en su lugar. Por alguna razón, eso hizo que
Niels se riera. Al menos eso es lo que pensó que estaba haciendo. Sintió que su
estómago se movía y su aliento acariciaba su cabeza, aunque no había ningún sonido
detrás de la risa.

"¿Qué es tan gracioso?", Preguntó, levantando la cabeza para mirarlo.

"Nada." Niels sonrió débilmente y se encogió de hombros. "Estaba pensando que serías
una buena madre".

Edith sonrió tristemente. "Me gustaría pensar que tienes razón, pero me temo que
nunca tendré la oportunidad de averiguarlo".

Cuando Niels frunció el ceño ante sus palabras, Edith bajó la cabeza y la apoyó contra
su pecho.

"Ronson, asegúrate de que Laddie nos siga", instruyó Niels, instando su caballo a
seguir adelante.

Cuando Ronson llamó al perro, Edith cerró los ojos e intentó despejar su mente del
preocupante tema de su futuro. Había suficiente en su plato en este momento sin
pensar en eso. Todavía tenían que descubrir quién había matado a su padre y sus
hermanos, e intentado matarla a ella. Sospechaba que si Brodie descubría que habían
sido envenenados, encontraría alguna excusa u otra para no regresar a la fortaleza
hasta que se encontrara el culpable. Lo que significaba que tenía que quedarse y dirigir
el castillo en su ausencia.

No podía, en conciencia, abandonar a Tormod para manejar las cosas solo. Era un
buen primero, y sabía de qué se trataba, pero ya llevaba años en ello, y sabía que
había sido una carga para él manejar tanto a los soldados como a los sirvientes
mientras ella estaba enferma. Desafortunadamente, Brodie era lo suficientemente
egoísta como para pasar todo su tiempo en la corte, enviando a casa solo por dinero si
el culpable nunca se encontraba. Drenaría a Drummond de toda su riqueza y dejaría a
su gente miserable y muriendo de hambre sin pensarlo dos veces. Lo que la dejaba en
una posición algo precaria. Necesitaba resolver el problema de quién estaba detrás del
envenenamiento para que fuera lo suficientemente seguro para que Brodie no tuviera
una excusa para no regresar. Pero también necesitaba irse antes de que regresara si
quería evitar ser enviada a la Abadía para vivir el resto de sus días.

Hoy, en verdad, había sido un poco indulgente. Cambiar las esteras del castillo había
sido una forma de escapar brevemente de la fortaleza y retrasar el tratamiento del
problema real. Edith había sentido que se merecía el tiempo de descanso después de
estar enferma por tanto tiempo. Pero esta noche tendría que sentarse con Rory, Niels y
Tormod e intentar idear un plan para resolver el asunto. También empacaría una bolsa

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Serie Novias Escocesas #5
con lo que necesitaría para su visita a Saidh, para poder irse en cualquier momento si el
asunto se resolvía rápidamente.

Esa era la otra razón por la que había pospuesto abordar el asunto de inmediato. Ella
había enviado una carta con Geordie y Alick para Saidh, describiendo su problema y
sus esperanzas de visitar a Saidh y las otras dos mujeres que componían su grupo de
amigas para tratar de encontrar una manera de evitar la vida como monja. No podía
solo aparecer en la puerta de la mujer, mendigando la entrada.

Pero Geordie y Alick necesitaban tiempo para viajar a MacDonnell y regresar con la
respuesta de Saidh. Si no habían regresado antes de que se resolviera el problema, no
estaba segura de lo que haría. Tal vez canjeara sus hermosos vestidos por el sencillo
atuendo de una sirvienta e iría en busca de un puesto en otro castillo con otro nombre.
Seguramente tendría una mejor oportunidad de felicidad como sirvienta o doncella que
como monja.

Edith hizo una mueca ante la idea. No era tonta y sabía los peligros inherentes a tal
empresa, pero tenía pocas opciones disponibles para ella.

"Aquí estamos."

Edith levantó la cabeza y miró a su alrededor cuando Niels detuvo su montura. Entraron
en un pequeño claro cerca del lago que ella conocía bien. Estaba en el borde del lago, y
era donde a menudo venía con Laddie cuando deseaba nadar en privado. La mayor
parte del castillo usaba un tramo más largo más abajo en la costa y más cerca del
castillo, pero aquí la tierra se curvaba bruscamente hacia adentro y luego de vuelta,
creando una pequeña ensenada que ofrecía privacidad.

"Abajo, Ronson", dijo Niels y Edith soltó el agarre que había mantenido en los brazos
del niño mientras Niels se echaba hacia atrás para agarrarlo por la parte posterior de su
camisa y su tartán y lo tiraba al suelo. Laddie estuvo inmediatamente allí para saludar al
niño, lamiéndole la cara con entusiasmo.

Edith se sentó derecha, recuperando sus brazos alrededor de Niels y moviendo su


trasero para deslizarse hacia adelante y comenzar a deslizarse fuera de la montura. En
el momento que sucedió, ella torció la parte superior de su cuerpo y se agarró a la
pierna de él para aminorar su caída. Cuando su trasero dejó el caballo la siguió en el
giro y ella aterrizó en el suelo de cara al caballo y agarrándole la pierna. Edith estaba
bastante orgullosa de sí misma por desmontar sola sin necesidad de que la levantaran
como a un niño... hasta que notó la extraña quietud de Niels y la expresión indescifrable
en su rostro.

Al darse cuenta de que aún estaba agarrando su pierna, la soltó de inmediato y dio un
paso atrás, luego giró y se movió alrededor del caballo hacia donde estaban Ronson y

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Laddie cuando Niels comenzó a desmontar. Laddie se movió inmediatamente hacia ella
y Edith lo acarició, usando la acción para evitar que le saltara encima.

"Buen chico", murmuró. Pasando sus manos a lo largo del lado del perro, echó un
vistazo atrás para ver lo que Niels estaba haciendo. Había quitado las pieles enrolladas
del cabestrillo que había hecho para colgar de su silla de montar, así como también el
saco que contenía los pasteles de cerezas y las manzanas, y un saco mucho más
grande, y ahora se estaba moviendo al centro del claro con Ronson detrás de él.

"¿Qué puedo hacer para ayudar?" Preguntó Edith, siguiéndolo ahora también.

"Puedes tomar esto e ir a bañarte en el lago mientras Ronson y yo preparamos un


pequeño picnic", respondió y rebuscó en su bolsa antes de sacar un pequeño cuadrado
de jabón Alepo4. Se lo entregó y añadió: "Esperaba encontrarte alguno con aceites de
lavanda o algo así, pero este también huele bien".

Edith sonrió débilmente. "No encontrarás lavanda en Drummond".

Niels alzó las cejas. "¿Pensé que a las mujeres les gustaba la lavanda?"

"A la mayoría lo hace", admitió con una sonrisa. "Y creo que es bueno, pero nunca se
permitió en la fortaleza de Drummond".

"¿Por qué?"

"Padre se negó a tenerlo", dijo simplemente.

"¿Le daba estornudos o algo así?", Preguntó Niels con diversión.

"Nay". Edith negó con la cabeza. "Tenía una aversión a esta. Recuerdo que vino un
visitante oliendo así una vez cuando yo era niña y mi Pá se quedó callado y triste.
Cuando le pregunté a mamá por qué, me dijo que la lavanda le recordaba a su madre y
a sus hermanas Ealasaid y Glynis y lo ponía triste y melancólico. Era el aroma preferido
de las tres", dijo y explicó. "Murieron cuando él era joven. Por la enfermedad del sudor5,
creo que dijo mamá. Las tres murieron rápidamente y fue un golpe para él”. Al darse
cuenta de que estaba balbuceando nerviosamente, cerró la boca y tomó la preciosa
barra dura de jabón de laurel que sostenía, pero luego se quedó inmóvil. Ella había
traído a Ronson a nadar en alguna ocasión y no tenía ningún problema en quedarse
con su turno delante de él, pero Niels no era un niño de cinco años.

4
El Jabón de Alepo es un jabón de aceite de oliva sobre engrasado con aceite de laurel. Destaca por dar una sección
de color verde esmeralda al corte y por su densidad, ya que en comparación con otros jabones flota en el agua.
5
El sudor inglés, también llamado sudor anglicus o pestis sudorosa, fue una enfermedad muy contagiosa y
generalmente mortal que afectó a Inglaterra en varias oleadas durante los siglos XV y XVI, para desaparecer luego.
Su síntoma principal era una sudoración intensa, lo que le dio el nombre. Se desconoce el origen de esta
enfermedad, aunque se han conjeturado varias causas como la gripe o los hantavirus.

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"Ronson se asegurará de que no mire", le aseguró amablemente, y luego le sonrió al
niño y le dijo: "¿No lo harás, muchacho?"

"Aye", dijo Ronson de inmediato, y luego frunció el ceño y preguntó: "¿Pero por qué no
puede ver nadar a Lady Edith? Yo nado con ella todo el tiempo".

"Suertudo", dijo Niels en voz baja, pero no le explicó. En su lugar, le aseguró a Edith,
"Estaré aquí acomodando. Y cuando termine me sentaré dando la espalda al agua. Una
vez que hayas terminado, puedes secarte y vestirte”. Sacó una tira de lino doblada,
limpia y seca, y un vestido limpio del saco más grande que había traído y se los tendió.
Una vez que ella aceptó las ofrendas, agregó, "Y luego puedes sentarte y almorzar algo
mientras Ronson y yo bañamos a Laddie y a nosotros mismos".

Edith miró el vestido que había sacado del saco. Era uno suyo, y lo había enrollado
para evitar que se arrugara, pero por supuesto no lo había evitado por completo. "¿De
dónde lo…?"

"Moibeal lo buscó por mí", admitió con una sonrisa irónica. "Originalmente tenía la
intención de ir a buscarlo, pero luego se me ocurrió que podrías guardar cosas en el
cofre que no te gustaría que viera, así que la busque y ella me ayudó".

"Oh". Edith asintió lentamente. Moibeal había elegido su mejor vestido, uno que Edith
nunca había usado, excepto durante los ajustes. Un profundo bosque verde, era el
favorito de Moibeal. La doncella juraba que daba vida a los ojos y el cabello de Edith,
mostrándola a la perfección y que haría que cualquier hombre se enamorara de ella. La
elección del vestido para Niels, le dijo a Edith que la doncella lo veía como posible
esposo para ella, y lo aprobaba. Eso no era algo que hubiera considerado antes de
esto.

"Adelante. Prometo que no miraremos”, dijo Niels suavemente.

Mientras tragaba, Edith asintió y se giró para ir a uno de los árboles al borde del claro.
La mitad de sus ramas se extendía sobre el agua, pero la mitad estaba sobre tierra
seca. Edith colgó el vestido y la tira de lino sobre una rama que era lo suficientemente
baja como para alcanzarla, pero lo suficientemente alta como para que el vestido limpio
no llegara al suelo. Luego se volvió para mirar a los chicos, encontrando a Niels y
Ronson charlando en voz baja mientras desenrollaban y tendían las pieles.

Dándoles la espalda, dejó la barra de jabón, se desabrochó rápidamente y se quitó el


vestido, luego volvió a agarrar el jabón y se metió en el agua con solo su turno. Al
principio, el agua estaba fría, y tuvo que morderse el labio para evitar chillar mientras se
apresuraba a llegar hasta la cintura. Edith luego se zambulló bajo el agua y nadó por un
rato hasta que su cuerpo se ajustó a la temperatura.

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El ambiente era hermoso y Edith por lo general se tomaba su tiempo y disfrutaba de la
paz de la cala y del agua fresca cuando venía aquí. Hoy no lo hizo. Fue rápida y
profesional mientras se lavaba el cuerpo y su pelo, pero todo el tiempo su mente estaba
hurgando y empujando alrededor de la idea de Niels como esposo.

Ahora que estaba pensando en ello, la idea era interesante. Sin duda resolvería su
preocupación de terminar en la Abadía. En cuanto al propio Niels... bueno, le gustaba
bastante. Era guapo, y parecía listo y competente. Y más importante para ella, también
era extremadamente bueno con Ronson, mostrando bondad y paciencia. Estaba segura
de que sería un buen padre.

De las cartas de Saidh, sabía que Niels había tomado el cargo como el primero de su
hermano mayor, Aulay, en Buchanan cuando Dougall se había ido con Murine. Lo que
la hizo sentir curiosidad acerca de cómo podía estar lejos tanto tiempo. Pero supuso
que con tantos hermanos, otro lo reemplazaría en Buchanan mientras él estaba allí. En
cualquier caso, sabía que Niels nunca tendría una fortaleza propia, pero eso no le
importaba. Ella estaría muy contenta de vivir en una casita en el pueblo, teniendo y
criando niños.

Ese último pensamiento la hizo mirar hacia Niels nuevamente mientras consideraba los
aspectos prácticos de conseguir esos niños. La madre de Edith había sido una
sanadora experta y le había enseñado mucho. También la había llevado a ayudarla
mientras había cosido heridas y ayudado bebés a nacer. Conocía los fundamentos de
cómo esos bebés llegaban dentro de la mujer, y ahora consideraba tener que hacer eso
con Niels.

Era difícil imaginar lo que conducía al hombre a plantar su semilla, y lo desagradable


que podría ser. Su madre le había dicho que era doloroso la primera vez, pero su amiga
Jo había compartido un poco de su propia experiencia con ellas y les había asegurado
que también había mucho placer. Edith lo encontraba difícil de creer. Realmente,
sonaba como un acto extraño.

Su mano se deslizó bajo el agua y entre sus piernas, encontrando el lugar donde el
hombre "araba el campo con su violín" como Jo lo había llamado. Ella hurgó con
curiosidad, pero luego negó con la cabeza. No, no podía imaginar que quisiera que un
hombre le hiciera eso, incluso Niels, tan guapo como era. Aun así, si era necesario para
obtener hijos...

Al darse cuenta de que en su mente ella ya los tenía casados y teniendo hijos, Edith
sacudió su cabeza. Niels podría no estar ni un poco interesado en ella de esa manera.
Tendría que resignarse a casarse con algún desagradable barón viejo con mal aliento o
algo así.

Suspirando, Edith se metió bajo el agua para enjuagar el jabón de su cabello y cuerpo,
luego se enderezó y miró a los chicos. Niels estaba sentado de espaldas al agua,
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apoyándose en sus brazos con las piernas estiradas frente a él y cruzando los tobillos.
Ronson estaba sentado exactamente de la misma manera, obviamente copiándolo. La
visión la hizo sonreír mientras corría y arrebataba la tela del árbol para secarse
rápidamente.

Fue entonces cuando se dio cuenta de que, aunque Moibeal le había dado a Niels un
vestido limpio, no había pensado en enviar un turno limpio y seco también. Lo que
significaba que o bien tenía que ponerse su vestido sobre el turno ahora empapado, o
irse sin él. La decisión fue fácil. Ella no estaba sentándose en un turno y un vestido
empapados.

Murmurando en voz baja, echó un vistazo por encima del hombro para asegurarse de
que los chicos no estaban mirando, y luego se sacó rápidamente el turno húmedo y aún
más rápidamente tiró del vestido en su lugar. Por supuesto, en su pánico de no ser
atrapada desnuda, no pensó en secarse primero. Eso hizo que tirar del vestido fuera un
poco difícil ya que el paño suave tendía a aferrarse a su piel húmeda. Edith lo logró
después de un poco de lucha y luego exhaló un aliento exasperado y rápidamente usó
el lino para secarse el pelo tanto como pudo.

Una vez hecho eso, reconoció su próximo problema. No tenía cepillo para domar los
salvajes mechones de cabello que ahora eran sin duda un desastre. Echando el lino
sobre la rama del árbol para secarse, rápidamente se pasó los dedos por el pelo,
tratando de domar el desorden en el que sin duda estaban los mechones rojos. Luego
agarró el jabón, la camisa mojada y el vestido desechado que había estado vistiendo
cuando llegaron y se dirigió a las pieles donde los hombres esperaban.

"Su turno", dijo Edith brillantemente cuando llegó a ellos.

Niels se puso de pie de inmediato, pero se detuvo cuando se volvió para mirarla.
Cuando sus ojos se abrieron un poco y sus labios se crisparon, Edith supo que su
cabello probablemente era un desastre. Suspirando interiormente, se dejó caer sobre
las pieles y los despidió. "Vayan a bañarse. El agua está buena”.

Ronson se fue de inmediato, quitándose los braies y la camisa a medida que avanzaba.
Niels fue un poco más lento para irse, pero después de decir: "Adelante y comienza a
comer, no tardaremos mucho", recogió ropa limpia para Ronson y una camisa
prolijamente doblada y un tartán limpio para él y se volvió para hacer su camino hasta el
borde del agua.

Ella lo vio alcanzar su tartán y luego, de repente, cayó lejos. Niels quedó solo con una
camisa que no cubría su trasero. Edith se quedó boquiabierta brevemente, siguiendo
las curvas de su trasero, y luego rápidamente le dio la espalda al agua para darles la
privacidad que le habían dado. Pero fue difícil. Mientras que ella se había bañado en
absoluto silencio, Ronson y Niels no lo hicieron. El niño se estaba riendo, parloteando y

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luego chillando cuando Niels aparentemente lo salpicó. Edith estaba en apuros para no
darse la vuelta y ver qué estaba pasando.

Fue solo cuando Niels llamó a Laddie que Edith miró alrededor y se dio cuenta de que
el perro todavía estaba acostado acurrucado junto a las pieles y no los había seguido
hasta el agua. El perro abrió un ojo y luego lo cerró de nuevo y fingió no escuchar. Ella
no estaba sorprendida. Laddie odiaba los baños. En el mejor de los casos, los sufría y
luego se volvía loco, sacudía el agua y se frotaba contra cualquier cosa y todo lo que
podía para tratar de secarse después.

"Laddie", Niels gruñó en un tono de advertencia, y el perro resopló miserablemente,


pero se puso de pie y se movió lenta y renuentemente hacia el agua, con la cabeza y la
cola hacia abajo. Riéndose para sí misma, Edith resistió el impulso de volverse y mirar
lo que sucedería a continuación, y simplemente escuchó. Si él era fiel a los baños
anteriores en el lago, sabía que Laddie se detendría en la orilla del agua y tendría que
ser arrastrado hacia adentro, y luego tendría que ser retenido allí antes de que corriera
a la primera oportunidad. Pero que luego trataría de subir sobre quien lo estaba
bañando para salir del agua.

A juzgar por la risa de Ronson y las maldiciones de Niels, era exactamente lo que
estaba haciendo el perro, decidió momentos después, y se arriesgó a echar un vistazo
por encima del hombro. Laddie estaba sobre sus patas traseras, con sus patas
delanteras en el pecho de Niels, tratando de lamerle la cara. Niels se retorcía, tratando
de evitar la lengua del perro y luego se tambaleó y cayó bajo el agua llevando al perro
con él.

Edith comenzó a levantarse, preocupada de que el perro ahogara accidentalmente a


Niels. Pero apareció de inmediato, y se levantó, el agua corría por su pecho esculpido
para regresar al lago donde llegaba a su cintura.

Edith tragó saliva y volvió a hundirse en el suelo, sus grandes ojos recorrieron las
mismas curvas duras que el agua. ¿Realmente solo le pareció que era lo
suficientemente guapo? se preguntó. El hombre era magnífico. Seguro, no era el primer
hombre que había visto con el torso desnudo, tenía tres hermanos, y había cientos de
soldados en Drummond, pero ninguno se veía tan perfecto como Niels Buchanan en
ese momento con el sol haciendo que las gotas de agua en su pecho desnudo brillaran
como diamantes. Él era hermoso.

"Ven aquí, Laddie", ordenó Niels y se dio unas palmaditas en el pecho. Él también
preparó sus pies. Podía decir eso por la forma en que cambió justo antes de que Laddie
se lanzara hacia arriba, apuntalando sus patas sobre su pecho. Normalmente habría
intentado escalar a Niels en ese momento, pero él agarró las patas del perro sobre su
pecho y gruñó: "Quieto".

~ 68 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Cuando el perro mojado solo lo miró lastimosamente, Niels tomó el jabón que Ronson
había estado sosteniendo y comenzó a enjabonar a la bestia. Miró hacia ella mientras lo
hacía, y Edith rápidamente le dio la espalda una vez más, su rostro se calentó al verse
atrapada.

Suspirando, ella miró por encima la comida tendida en las pieles. Al parecer, los
pasteles de cereza no habían sido todo lo que Niels había traído del castillo. El picnic
que había empacado era una provisión impresionante. Había un pollo asado entero,
queso, pan, manzanas y más pasteles de cereza. A pesar de la sugerencia de Niels de
que comenzara a comer, no lo hizo. Había planeado esperar a que se unieran a ella,
pero cuando su estómago gruñó hambriento, decidió que una manzana no le haría
daño mientras esperaba.

Casi había terminado con su manzana cuando un Laddie de casi diez piedras de peso y
empapado se precipitó de repente sobre ella y se arrastró sobre su regazo. Chillando,
ella cayó hacia atrás y luego trató de empujarlo mientras el perro intentaba secarse en
su vestido.

"Laddie", ladró Niels.

El perro se congeló de inmediato y luego corrió hacia el agua. Edith giró ligeramente la
cabeza para mirarlo y se quedó boquiabierta cuando vio a Niels de rodillas en nada más
que su camisa, doblando pliegues en su plaid al borde del agua. Ronson estaba
ocupado tirando de sus braies, pero Niels la pilló mirando de nuevo. Cuando él le guiñó
un ojo, cerró la boca y se sentó abruptamente dándoles la espalda de nuevo.

Edith entonces se ocupó de buscar los restos de su manzana. Había aterrizado al lado
de las pieles. La recogió, arrugó la nariz por la hierba y la tierra sobre esta, y luego
volvió a dejarla junto a las pieles con un pequeño suspiro.

~ 69 ~
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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 5

"No comiste".

Edith echó un vistazo ante ese comentario y sonrió mientras Niels guiaba a Ronson y
Laddie hacia ella.

"Nay. Pensé en esperar por los dos", murmuró Edith mientras Ronson se adelantaba
para unirse a ella en el pelaje.

Laddie intentó seguirlo, pero Niels ladró, "¡No!", Interrumpiendo al perro. "Siéntate,"
ordenó y Laddie se sentó junto a las pieles donde había estado antes.

"Buen chico", elogió Niels, acariciando al perro mientras pasaba para reclamar un lugar
en las pieles.

Edith negó con la cabeza ligeramente. Laddie era un buen perro, pero rara vez
obedecía a nadie tan rápido y bien como parecía escuchar a Niels. Por lo general, tenía
que repetir una orden al menos una o dos veces antes de que el perro la obedeciera y
no había escuchado a su padre ni a sus hermanos. Por eso había acabado como su
perro en lugar de uno de los perros de caza.

Niels recogió la bolsa en la que había traído toda la comida y sacó un hueso grande
para Laddie. El perro se levantó de inmediato, inmediatamente babeando.

"Siéntate", dijo Niels con firmeza. Laddie se sentó, y Niels le dio el hueso con otro,
"Buen chico".

El perro lo agarró y se dejó caer para tumbarse en el suelo, sosteniéndolo entre sus
patas delanteras mientras comenzaba a roer el extremo.

"Así es como haces que se comporte", murmuró Edith con diversión. "Le sobornas con
huesos".

"Nay. Es un buen perro", dijo Niels, volteándose para examinar la comida entre ellos.
Cogió el pollo, rompió una pierna y se lo ofreció. "Hay aguamiel en la piel de allí. Sírvete
tú misma".

"Gracias," murmuró Edith, aceptando la pierna.

~ 70 ~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5
Los tres comieron en un silencio amistoso y Edith se encontró imaginando que eran una
familia, compartiendo una comida después de un baño: madre, padre e hijo. Después
de que comieran, regresarían a la fortaleza y...

Se detuvo allí, porque la fortaleza no sería su hogar por mucho más tiempo. Y Niels no
era su esposo ni probablemente lo sería, y Ronson no era su hijo. Laddie era el único
de los tres que pertenecía a ella, y eso podría no ser cierto por mucho más tiempo. No
si terminaba en la Abadía.

"¿Qué te hace fruncir el ceño, muchacha?", Preguntó Niels de repente.

Edith rápidamente forzó una sonrisa a sus labios. "Estaba pensando, mi lord".

"¿Sobre qué?", Preguntó.

"Nada de importancia", mintió encogiéndose de hombros y luego cambió de tema.


"Entonces, Saidh está feliz y enorme con su hijo. Pero ni tus hermanos ni tú dijeron
mucho sobre Murine y Dougall. ¿Está todo bien allí?”

"Oh, aye", sonrió débilmente. "Parecen muy felices ahora que todo está arreglado.
Aunque Dougall se queja de todo el viaje que tienen que hacer”.

"¿Viaje?" Preguntó con sorpresa.

"Además de Carmichael, tienen el castillo del hermano de ella y la gente en Inglaterra


para supervisar", dijo y explicó, "Ella heredó a Danvries cuando él murió".

Edith levantó las cejas. "¿Así que pasó de temer por no tener casa a manejar dos
castillos?"

"Aye", sonrió. "Pero significa muchos viajes ida y vuelta hasta que decidan qué hacer
con Danvries".

"¿Qué crees que harán?", Preguntó con curiosidad.

Niels consideró la pregunta y luego dijo: "Probablemente uno de mis hermanos se


encargue de eso por ellos. Al menos hasta que Dougall tenga un hijo lo suficientemente
mayor como para hacerse cargo".

"¿Tú no?", Preguntó Edith con curiosidad. "¿Eres el siguiente en edad? ¿No?"

"Aye, pero tengo planes propios para el futuro", dijo Niels solemnemente. "En este
momento, estoy ayudando a Aulay en Buchanan. Bueno, no en este momento,
obviamente”, añadió con ironía. "Pero cuando las cosas se resuelvan aquí, volveré a
Buchanan y a mi posición como primero".

~ 71 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Fue bueno del él que dejara que vinieras a verme por Saidh," dijo Edith en voz baja.
"Tendré que escribir y agradecerle".

"No hay necesidad. Él no sabe que estoy aquí", dijo Niels con diversión, y luego explicó:
"Sabíamos cuando éramos jóvenes que Aulay heredaría Buchanan y el resto de
nosotros tendríamos que hacer nuestro propio camino. Pero mis padres no nos dejaron
arruinados. Nos dejaron un poco de tierra, algo de dinero, y nos ayudaron a decidir qué
emprendimiento queríamos hacer para ganar más. Para Dougall fueron los caballos.
Siempre amó a las grandes bestias y tenía un buen ojo para ellos. Siempre fue capaz
de decir cuál sería el padre de los mejores potros y qué yegua daría el mejor y así
sucesivamente".

"¿Y cuál fue tu emprendimiento?", Preguntó Edith con curiosidad.

"Perros", respondió con una sonrisa. "Crío buenos perros de caza. Los entrenó
también".

"Ah", murmuró Edith. Eso explicaba lo bueno que era con Laddie.

"Pero no hay dinero en eso", agregó Niels con ironía. "Crío y vendo a algunos lairds en
búsqueda de buenos perros de caza, pero hago dinero con ovejas".

Edith parpadeó. "¿Ovejas?"

"Aye. Bueno, lana, realmente. Compré ovejas con mi dinero y he aumentado la manada
con los años. La mayor parte de la lana que producen se exporta a Flandes con fines
de lucro, pero conservo una parte y se hila y se transforma en lo que muchos
consideran la mejor tela tejida de Escocia. Debido a que producimos muy poco, me
pagan una tarifa exorbitante por lo que se produce. Entre la lana y la tela tejida, hago
una suma considerable".

Hizo una breve pausa y luego volvió al tema original. "Y ahí es donde Auley cree que
estoy ahora, entregando un envío de mi tela tejida a los McKays. Fue convenido antes
de que Dougall se fuera y yo asumiera el cargo como el primero de Auley, y tenía que
cumplir el contrato. Geordie y Alick estaban acompañándome, y solo nos detuvimos en
MacDonnell para ver a Saidh y escoltar a Rory de manera segura para que él pudiera
controlarla. Se suponía que íbamos a ir directos a McKay desde allí".

"Y en su lugar están aquí", dijo Edith y frunció el ceño. "Niels, no quiero interferir con tu
negocio. Si tienes que entregar tu tela tejida...”

"Nay", le aseguró. "Greer hizo que sus hombres la escoltaran hacia el norte a cambio
de que viniéramos a revisarte en nombre de Saidh".

"Oh". Edith sonrió torcidamente. "Bueno."

~ 72 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Aye". Miró hacia abajo brevemente y luego miró a Ronson cuando el chico se levantó
de repente y se movió para luchar con Laddie.

"Los muchachos se están inquietando", murmuró Edith, comenzando a empacar los


restos de su picnic. "Supongo que deberíamos regresar antes de que todos comiencen
a preocuparse".

"Aye", murmuró Niels, luego metió la mano en el saco grande y sacó un cepillo para el
pelo.

"Oh", Edith auto-conscientemente llegó hasta su cabello. "Supongo que me veo


asustada".

"Nay", le aseguró, y luego sonrió y agregó: "Pero si te llevo de vuelta viéndote así,
pensarán que hicimos más que nadar".

Los ojos de Edith se abrieron con incredulidad y se sonrojó. Le arrebató el cepillo y


comenzó a arrastrarlo rápidamente a través de su cabello anudado, haciendo una
mueca al hacerlo.

"Edith, muchacha", murmuró Niels, poniéndose de rodillas para moverse detrás de ella.
"Dame eso antes de que te dejes calva. Tu cabello es demasiado hermoso como para
abusar de él. Es obvio que estás acostumbrada a que tu doncella haga esto".

Edith lo miró sorprendida por el cumplido y luego se volvió hacia adelante cuando él
tomó el cepillo y comenzó a pasarlo suavemente por su cabello. Al principio ella
simplemente se quedó en silencio, viendo a Ronson jugar con Laddie. La pareja parecía
atrapada en un juego de persecución ahora, Ronson corriendo detrás del perro y luego
girándose y escapando mientras Laddie comenzaba a perseguirlo. Edith sonrió
mientras miraba, pero le dijo a Niels: "Ya has hecho esto antes".

Él se rió, su aliento acariciando su oreja y enviando un escalofrío por su espalda. "Se


nota, ¿verdad?"

"Aye, eres muy gentil", dijo, y luego preguntó: "¿Saidh?"

"Con nueve hijos y la fortaleza para manejar, mamá a menudo nos daba tareas para
ayudar y solía cepillarle el pelo a Saidh por las mañanas. Aprendí a ser amable
bastante rápido", agregó secamente. "Saidh no estaba por encima de una patada rápida
a las regiones inferiores en quien tuvo la desgracia de tener la tarea ese día".

"Nueve", murmuró Edith. "Saidh mencionó que ella tenía ocho hermanos cuando nos
conocimos, pero luego ella nombró solo siete y pensé que había escuchado mal. ¿Pero
había nueve de ustedes?”

~ 73 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Aye", admitió Niels, sonando reacio. "Ewan murió en la misma batalla que marcó a
nuestro hermano, Auley", explicó en voz baja. "Sin embargo, la familia no habla de eso".

"¿Por qué?" Preguntó Edith.

"Creo que porque no pudimos reclamar su cuerpo y llevarlo a casa", admitió Niels
lentamente, el cepillo se detuvo brevemente. "Dougall, Conran y yo vimos a Ewan caer
bajo una espada, pero después de la batalla no pudimos encontrar su cuerpo".

"Tal vez no murió", sugirió Edith con esperanza.

"Murió", le aseguró Niels con fuerza. "Él fue atravesado por la mitad, Edith. Nuestro
hermano no pudo haber sobrevivido a eso. Nadie podría."

"Oh", murmuró Edith, y luego no supo qué decir. Al final, solo susurró: "Lo siento".

"Gracias," fue su solemne respuesta.

Ambos se callaron entonces y Edith se encontró sacudiendo su cerebro, tratando de


pensar en algo que decir para aligerar el momento. Un chillido de Ronson la distrajo, sin
embargo, y su mirada se centró en el muchacho mientras abordaba a Laddie, tirándose
sobre la espalda del perro. Cuando el perro simplemente se dejó caer al suelo y rodó
para sacar al niño, Niels se rió suavemente detrás de ella y Edith sintió que se relajaba.
Sonrió débilmente mientras observaban a la pareja jugar.

"¿Ronson no tiene amigos entre los niños?", Preguntó Niels después de un momento.

La sonrisa de Edith se desvaneció. "Me temo que su abuela lo ha desalentado de jugar


con los otros niños".

"¿Por qué?"

Ella podía escuchar el ceño fruncido en su voz, pero admitió, "Bessie dijo que sus
circunstancias cambiarían pronto y que no tenía sentido hacer amigos con chicos con
los que pronto no tendría nada que ver." Aclarándose la garganta, agregó, "realmente
no la culpo. Probablemente tenga razón. Brodie escuchará a Victoria y los echará a los
dos una vez que ella lo convenza de que me envíe a la Abadía. La abuela de Ronson
solo está tratando de asegurarse de que se lastime lo menos posible cuando eso
suceda. De esta forma, solo perderá un hogar y no amigos junto con él”.

"¿A Victoria no le gustan Ronson y su abuela?", Preguntó Niels en voz baja.

Edith suspiró. "En verdad, a Victoria no le gusta mucho nada en Drummond. Si ella
pudiera reemplazar a todos los sirvientes, lo haría".

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Serie Novias Escocesas #5
"¿Porque no la obedecieron automáticamente por ti cuando Brodie tomó el manto
temporal del laird mientras tus hermanos estaban enfermos?"

"Aye", murmuró Edith. "Sospecho que tratará de liberarse de todas las criadas que lo
hicieron tan pronto como me vaya. Ella puede incluso tener éxito. Es una mujer
inteligente. Encontrará una excusa para manejarlo".

"Lo siento", dijo Niels en voz baja.

"Yo también", admitió. "Se merecen algo mejor".

"Quise decir el dolor que te está causando", dijo Niels solemnemente. "Es obvio que te
importan las personas, y su incierto futuro te angustia".

Edith se volvió para mirarlo a los ojos y asintió solemnemente. "Son mi familia. Hasta el
último de ellos. Crecí con ellos aquí, cuidándome y..." bajó la cabeza en un suspiro.
"Siento que les estoy fallando al no poder protegerlos".

"Muchacha, saben que los ayudarías si pudieras, pero ni siquiera puedes protegerte a ti
misma", señaló, y luego frunció el ceño con desagrado.

Ella comenzó a volverse hacia adelante, pero se detuvo cuando dijo: "¿Edith?"

"¿Aye?", Preguntó ella.

Niels abrió la boca, la cerró y luego simplemente negó con la cabeza y volvió a poner el
cepillo en la bolsa. "Tu pelo está listo".

"Gracias," dijo Edith suavemente, pero lo miró con curiosidad. Había tenido un propósito
en sus ojos por un momento. Estaba bastante segura de que había querido decir algo
más, pero no tenía idea de qué. Y aparentemente había cambiado de opinión.

Encogiéndose de hombros, se arrodilló y ayudó a recoger el resto de los artículos de su


picnic para empacarlos, y luego lo ayudó a enrollar las pieles también. Ella llevó el saco
de comida mientras él llevaba las pieles y el saco más grande con el lino húmedo y sus
ropas sucias, y caminaron hacia su caballo. Mientras él colocaba las pieles en su
cabestrillo y colgaba la bolsa grande de la silla de montar, ella se levantó para tratar de
colgar también la bolsa más pequeña y todavía estaba luchando con la tarea cuando él
terminó sus propias tareas. Al ver que estaba teniendo problemas porque no era lo
suficientemente alta como para sujetar la bolsa al pomo, se puso detrás de ella para
ayudarla.

Edith se calló en el momento en que sintió su pecho contra su espalda. Había algo tan
íntimo al respecto, y luego se dio cuenta de que Niels también se había quedado quieto.
Ambos se quedaron allí por un momento, espalda contra pecho, ambos conteniendo la
respiración, y luego él bajó las manos a su cintura. La abrazó con tanta ligereza que
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podría haber escapado si hubiera querido, pero Edith sintió que sus pies no estaban
dispuestos a moverse y simplemente se quedó esperando allí. Pareció pasar una era y
luego murmuró: "Tu pelo es tan hermoso".

"Gracias," dijo Edith respirando, tragando cuando apartó su cabello del cuello. Cuando
se inclinó para acariciarla allí, se mordió el labio para reprimir un suave jadeo y se
encontró apoyada en él. Niels dejó que sus brazos flotaran alrededor de ella, cruzaran
debajo de sus pechos y Edith los abrazó ligeramente con su cabeza inclinada mientras
mordisqueaba su oreja. Cuando él levantó una mano para tomar su barbilla y poner su
rostro hacia arriba y hacia atrás, fue voluntariamente, incluso con entusiasmo, y cerró
los ojos mientras sus labios cubrían los de ella. Su lengua se deslizó para abrirse paso
entre sus labios, ella se abrió con sorpresa y luego se calmó cuando su lengua entró.
Edith se encontró con la invasión con un gemido cuando una cacofonía de sensación
estalló en su interior. Era vagamente consciente de que su mano se deslizaba por su
garganta y luego su pecho, pero en realidad no prestó atención hasta que se detuvo
para cubrir un pecho y apretó ligeramente.

Edith se quedó sin aliento en su boca cuando su cuerpo respondió, su espalda


arqueándose instintivamente para empujar su pecho más completamente en la caricia
mientras su otra mano se levantaba repentinamente para reclamar el otro. No tenía idea
de que estaba empujando hacia él con su trasero hasta que sintió la dureza que la
encontró, y luego una de sus manos se deslizó dentro del escote de su vestido para
tocarla sin la tela entre ellos y Edith gritó en su boca mientras comenzaba a tocar el
pezón ya duro.

Edith estaba tan distraída que definitivamente no notó que su otra mano dejaba su
pecho deslizándose hacia abajo hasta que la tomó entre las piernas a través de la tela y
casi la levantó de sus pies. Esto no se parecía en nada a cuando se había estado
tocando antes por curiosidad. Incluso con la tela entre ellos, esto le provocó una
excitación insoportable que nunca había soñado posible. Y la hizo querer más. El
problema era que no estaba segura de qué más quería. Pero su cuerpo parecía tener
ideas propias y se movía contra sus manos, retorciéndose primero con una caricia y
luego con la otra en busca de algo que no entendía del todo, y luego un grito agudo
hizo que ambos se congelaran.

En el momento siguiente, Niels rompió su beso para murmurar, "Ronson", y entonces


sus amables manos la dejaron y se fue. Por un momento, Edith simplemente se quedó
allí, su cerebro lento para armar todo, y luego se volvió y miró alrededor del claro vacío.
Incluso Niels se había ido.

Confundida, Edith dio un paso alejándose del caballo de Niels, y luego se estabilizó
antes de continuar en la dirección general de donde creía que había venido el grito de
Ronson. Cuando llegó al borde del claro, se abrió paso entre la maleza en busca de los
dos varones. El grito que habían escuchado había sido de pánico, incluso aterrorizado,

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pensó mientras su cerebro comenzaba a funcionar nuevamente y una urgencia se
cambiaba por otra cuando comenzó a preocuparse por el niño.

"¿Estás bien, muchacho? ¿Qué…? Querido Dios."

Edith escuchó las palabras de Niels justo cuando empujaba más arbustos y estuvo a
punto de pisotear a Niels y Ronson antes de detenerse. Ronson se quedó congelado
con Laddie a su lado, mientras que Niels se arrodilló examinando algo en el suelo frente
al niño.

"Es Lonnie", dijo Ronson, sonando asustado y Edith miró por encima del hombro para
ver a un hombre boca abajo en el suelo, con una flecha que sobresalía de su espalda.

"¿Quién es Lonnie?", Preguntó Niels, mirando a Ronson y deteniéndose brevemente


cuando vio a Edith.

"Uno de los soldados en Drummond", respondió Edith por el chico. "Por lo general,
monta guardia en la pared".

"Aye, lo hace. Pero se fue con el Laird cuando él y Lady Victoria salieron del castillo",
les dijo Ronson.

"¿Lo hizo?" Preguntó Edith frunciendo el ceño, mirando al hombre. La cara de Lonnie
se volvió hacia ellos, su boca abierta, sus ojos también y tuvo que apartar la mirada. El
hombre obviamente había estado muerto un tiempo. Era irreconocible para ella.

"Aye. No se parece a Lonnie, pero vi a Magda darle el pañuelo cuando se fue. Ella dijo
que era para recordarla", dijo Ronson.

Edith miró de nuevo para ver el trozo de tela del que hablaba el chico atado alrededor
del brazo de Lonnie.

"Vamos". Niels se puso de pie abruptamente y comenzó a acompañarlos de regreso a


través del bosque hacia el claro. "Regresaré a los dos al castillo y luego traeré hombres
y una carreta para llevar a Lonnie".

"No podemos solo dejarlo aquí. Tal vez deberíamos llevarlo con nosotros", dijo Edith
con preocupación.

"Muchacha, solo tenemos un caballo. Además, ha estado aquí por una buena semana
al menos. Unos pocos minutos más no harán mucha diferencia", dijo Niels
sombríamente.

"Aye", murmuró Edith cuando llegaron al claro y cruzaron hacia el caballo. Esta vez,
Niels montó, la levantó en su regazo y luego levantó a Ronson en el suyo. Estaba
segura de que le dificultaba manejar las riendas, pero Niels no se quejó, y se alegró de

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poder sostener al niño. Estaba temblando levemente después de su descubrimiento. Lo
abrazó y se inclinó silenciosamente contra el pecho de Niels para el viaje de regreso a
la fortaleza.

"¿Y bien?"

Edith levantó la vista de la comida que empujaba sobre su plato ante la pregunta de
Niels, y vio a Rory uniéndose a ellos en la mesa.

"Bueno", dijo Rory, "parece que murió por la herida de la flecha".

"¿Y las otras heridas?"

Edith levantó las cejas ligeramente. No había notado ninguna otra herida, pero
entonces solo había mirado dos veces al hombre y se había enfocado principalmente
en su rostro la primera vez y en el pañuelo la segunda.

"Animales", dijo Rory en voz baja. "Después de que murió".

Edith hizo una mueca y dejó la copa de plata de hidromiel de la que había estado a
punto de beber.

"¿Puedes decir cuánto tiempo ha estado muerto?", Preguntó Niels después de una
pausa.

Rory negó con la cabeza. "Al menos una semana, pero podría ser más. No lo puedo
decir”.

"Pobre bastardo", dijo Tormod con gravedad. "Su caballo, armas y botas se habían ido,
así que supongo que fueron bandidos. Deben haberlo atrapado en su camino de
regreso a la fortaleza. Hemos tenido problemas con ellos en el área antes”.

"Aye", estuvo de acuerdo Edith, y luego frunció el ceño. "Pero Ronson dijo que Lonnie
se fue con Brodie y Victoria. ¿Por qué regresaba solo?”

Tormod apretó la boca con ira. "Tu hermano probablemente lo envió de vuelta para ver
si era seguro regresar. O tal vez, después de acomodarse se le ocurrió que debería
tener a alguien que pudiera salir y dejarle saber que era es seguro regresar, así que
envió al muchacho para ser sus ojos y oídos aquí".

Parecía la respuesta más probable, así que Edith se limitó a asentir con tristeza y,
distraídamente, giró la copa de plata con hidromiel en círculo, su mirada fija en el

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líquido interior mientras se preguntaba qué deberían hacer ahora. No tenían manera de
decirle a Brodie lo que le había sucedido a Lonnie. Ni siquiera sabían dónde había
llevado a Victoria. Podría ser a la corte o al castillo de uno de sus amigos. Aunque
Brodie era mimado y egoísta, también podía ser extremadamente encantador cuando lo
elegía y había hecho muchos amigos entre los lairds más jóvenes. Antes de casarse
con Victoria, a menudo pasaba el tiempo visitando uno tras otro, cazando aquí,
pregonando allí y bebiendo, apostando o jugando en otro. Podrían estar en cualquier
lado.

Suspirando, se enderezó y miró a los tres hombres en la mesa con ella. "Tenemos que
idear un plan para determinar quién fue el envenenador para que Brodie pueda regresar
y yo pueda irme".

"¿Irse?" Preguntó Tormod frunciendo el ceño.

Edith lo miró solemnemente. "Me enviará a la Abadía en cuanto regrese, Tormod. Lo sé


y tú también".

"Aye", gruñó Tormod infelizmente. Inclinando su cabeza, añadió en un murmullo,


"Simplemente no pensé que se rendiría e iría a la Abadía tan fácilmente".

"No tengo intención de hacerlo", le aseguró y logró sonreír cuando su cabeza volvió a
subir y él la miró interrogante. "No puedo obligarlo a que me deje quedarme aquí", dijo
suavemente y vio la decepción en su rostro. "Pero puedo evitar pasar el resto de mis
días en la Abadía. Incluso podría casarme con algún viejo laird amable de quien,
Victoria convenza a Brodie pudiera ser considerado, para tomar a alguien para
deshacerse de mí".

"Eso sería algo al menos", dijo Tormod con el ceño fruncido.

"Aye. Pero tendría que irme antes de que Brodie regrese para evitar la Abadía. Me
quedaré todo lo que pueda, pero cuando sepamos que regresará, tendré que ir a
MacDonnell”.

"¿MacDonnell?" Preguntó Rory con interés.

"Le pregunté a Saidh si podría visitarla. Eso estaba en la carta que tus hermanos se
llevaron. Mi esperanza es que Saidh y quizás Murine y Jo puedan reunirse conmigo y
ayudarme a resolver qué hacer. Una de ellas puede descubrir a un laird amable que
busca una esposa. Tengo una buena dote, así que no es como si no tuviera ni un
centavo".

"Ya veo", murmuró Rory y miró a Niels, pero luego preguntó: "¿Así que estás decidida a
casarte con un laird?"

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Edith sonrió débilmente. "Nay. Estaría feliz con una cabaña y media docena de niños.
Pero el tiempo es mi enemigo. Si me caso, la dote completa me acompaña. Si Brodie
me envía a la Abadía, probablemente podría salirse con la suya dándoles la mitad de mi
dote o menos. Encontrar un viejo laird, o incluso un joven necesitado de dinero parece
más probable que alguien enamorándose de mí en el tiempo que tengo", dijo Edith en
voz baja, evitando mirar a Niels. Todavía podía saborear su beso, y sentir sus manos
sobre su cuerpo, pero no era lo suficientemente tonta como para pensar que eso
significaba que de repente le ofrecería matrimonio y la salvaría de su destino.

Deseó que fuera así. A Edith le gustaría experimentar más de esos besos y caricias, y
dudaba mucho que tendría la suerte de sentirse atraída por el laird desesperado que
pudiera llegar a casarse con ella. Pero siempre había sido pragmática sobre tales
cosas.

"Así que..." Tormod miró a cada uno de ellos por turno. "¿Cómo resolvemos quién es el
envenenador?"

El silencio reinó por un momento y luego Rory dijo: "No estoy seguro. Ni siquiera
estamos seguros de cómo al viejo laird y sus dos hijos mayores les fue suministrado el
veneno".

Niels se volvió hacia él con sorpresa. "Pensé que habíamos decidido que la primera
dosis debía haber estado en el vino porque Edith no bebió”.

"Aye, pero seguramente Brodie y Victoria habrían tomado vino esa noche", señaló, y
luego se volvió hacia Tormod y Edith y les preguntó: "¿No es así?"

"No estoy seguro", dijo Tormod frunciendo el ceño. "Eso fue hace semanas y han
sucedido tantas cosas". Ahora miró a Edith. "¿Lo recuerda?"

Mordiéndose el labio, se recostó en su asiento, tratando de recordar la noche en


cuestión. Como él había dicho, habían pasado tres semanas y media ahora. Y ella
había estado enferma durante gran parte de ese tiempo. Finalmente, dijo: "Creo que
pudo haber sido la noche en que pelearon por la dote de Victoria".

"¿Su dote?", Preguntó Niels con curiosidad.

Suspirando, Edith asintió. "Al parecer, Brodie supuso que una vez que se había casado
con ella, el padre de Victoria le entregaría su dote".

"¿Pero no lo hizo?", Preguntó Rory.

Edith negó con la cabeza. "Nay. Envió a sus doncellas y algunos vestidos a Drummond,
pero la dote tenía que entregarse al hombre con el que había sido prometida para
casarse. Era el acuerdo. Si ella se rehusaba a casarse con él por cualquier motivo, de

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todos modos obtenía la dote." Ella hizo una mueca. "Las criadas llegaron esa mañana
con el mensaje y Brodie y Victoria discutieron sobre eso todo el día".

"Aye. Así es," dijo secamente Tormod. "Rompió el mensaje y se lo arrojó, acusándola
de engañarlo para que se casara con ella con promesas de su gran dote, y ella…" Hizo
una pausa y sonrió. "Pensé que le rompería la crisma con una jarra de cerveza, estaba
tan furiosa con esa acusación. ‘¿Te engañé?’, dijo ella con incredulidad. ‘Fui yo la que
fue engañada, mi Laird’". Sacudió la cabeza. "Estaba justamente furiosa. Ambos lo
estaban. Tanto que no les importó quién los escuchaba. Empezaron aquí en el gran
salón, y luego él la siguió a la cocina cuando ella trató de escapar allí, y luego a su
habitación”. Sacudió la cabeza. "Las criadas estaban tan ocupadas escuchando que no
podía obtener una lamida de trabajo ese día".

"Nay", Edith estuvo de acuerdo con ironía. "De todos modos, terminaron en su
habitación, gritando la mitad de la noche hasta que envié a una criada para decirles que
se callaran, que mi padre estaba mortalmente enfermo". Suspiró. "No sabía aún que
nuestros hermanos lo estaban también. Se habían retirado temprano, probablemente
porque se sentían mal, pero no sabía que estaban enfermos hasta la mañana, cuando
fui a contarles a cada uno que mi padre había fallecido".

"Así que Victoria y Brodie no bebieron el vino en la mesa esa noche", dijo Rory
pensativo.

"Y estuvieron en las cocinas en algún momento", señaló Niels.

"Pero no estaban aquí cuando enfermé la segunda vez y esa fue por el estofado, no por
el vino”, Edith les recordó con firmeza.

"Pero se fueron ese día", señaló Niels. "Deben de alguna manera haber envenenado el
estofado antes de irse. Brodie es el único que se beneficiaba de la muerte de tu padre y
hermanos".

"Se fueron esa mañana", dijo Edith pacientemente. "Moibeal se sintió mal durante la
noche, pero nadie lo supo hasta que desperté y la encontré en su estera en mi
habitación, agarrándose el estómago y delirando. Brodie temió un brote, entró pánico y
cogió a Victoria y se fue inmediatamente. No pudieron haber envenenado mi porción de
estofado más tarde ese día en la cena. Se habían ido hace mucho tiempo. Y el estofado
en sí no estaba envenenado de otro modo todo el mundo en el castillo estaría muerto",
dijo con exasperación.

"Quizá Victoria hizo que Effie echara un poco del tónico en tu estofado esa noche antes
de que te lo trajeran, y el veneno estaba en el tónico", sugirió Rory.

"Effie difícilmente tomaría el veneno", señaló Edith.

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Serie Novias Escocesas #5
"Nay, pero tal vez Effie no sabía que era veneno", dijo Rory razonablemente. “Puede
que ni siquiera tu hermano sepa lo que su esposa estaba haciendo. Puede haber sido
Victoria sola. Tal vez estaba decidida a ser la Señora de Drummond como tu hermano
había prometido y estaba dispuesta a asesinar para lograrlo.

Edith asintió lentamente. Eso en realidad parecía posible. Ciertamente le gustaba más
que la sugerencia de que Brodie podría estar detrás de las muertes. Lo que significaba
que tenían un problema. "Entonces no hay nada que podamos hacer", señaló. "No hay
forma de probar que Victoria envenenó el vino o el estofado... a menos que puedas
decir inequívocamente que el tónico tiene veneno", dijo y levantó una ceja en cuestión.

Rory sacudió la cabeza con pesar. "Nay. Hay tantas hierbas en el tónico, que sería
imposible determinar qué veneno se usó o si estaba allí".

"Entonces, a menos que Effie se despierte para decir que me lo puso en el estofado, y
que bebió o se lo comió el día anterior, Victoria se saldrá con la suya", señaló con
cansancio.

"¿Cómo está Effie?", Preguntó Tormod abruptamente.

"No hay cambio", dijo Rory, y luego frunció el ceño y agregó: "No hay ningún cambio en
absoluto, y yo esperaría que así sea. Pero ella parece exactamente como estaba
cuando llegamos aquí. No más fuerte, pero no más débil”.

"Aye, bueno, estás goteando caldo por su garganta todo el tiempo", señaló Niels. "Sin
duda eso está ayudando a prevenir que se debilite aún más".

"Hmm", murmuró Rory y luego simplemente negó con la cabeza y se levantó.


"Hablando de eso, supongo que es hora de que lo haga otra vez".

"¿Ahora?" Preguntó Tormod con sorpresa. "Pero ¿qué pasa con nuestro plan para
atrapar al envenenador?"

"¿Tienes un plan?" Preguntó Rory con interés, y cuando Tormod hizo una mueca, dijo:
"Me temo que Edith tiene razón. Realmente no hay forma de probar que Victoria lo hizo.
Al menos nada a lo que ninguno de nosotros haya llegado hasta ahora. Sugiero que
todos lo pensemos esta noche y luego nos volvamos a encontrar mañana por la
mañana y veamos si alguien tiene ideas”.

"De acuerdo", dijo Edith.

Cuando Tormod refunfuñó un infeliz acuerdo, Rory asintió y se giró para dejar la mesa.

Edith miró a Niels entonces, pero lo encontró mirando hacia el fuego. Siguiendo su
mirada, vio a Ronson acurrucado con Laddie al lado de los pies de su abuela,
durmiendo. El trío estaba rodeado por varias mujeres, todas ocupadas haciendo
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Serie Novias Escocesas #5
alfombras con los últimos juncos que se habían recogido ese día. Casi habían
terminado. No quedaban muchas prisas ahora.

Su mirada se deslizó sobre el chico rubio acurrucado contra el perro grande y suspiró
para sí misma. Ronson había corrido a su abuela en el momento en que habían
regresado, buscando consuelo del único miembro de su familia que le quedaba,
después del trauma de ver a Lonnie muerto. Edith no se había sorprendido. Había
estado terriblemente callado en el viaje de regreso a la fortaleza, simplemente
abrazándola fuerte y temblando. Supuso que era el primer cadáver que había visto.
Seguramente no sería el último, aunque afortunadamente no bajo las mismas
circunstancias. Tropezar con un hombre muerto en el bosque tenía que haber sido
desconcertante para el niño. Además, había conocido a Lonnie un poco. El joven era
uno de los pocos soldados que se había preocupado por ser amable con el nuevo
muchacho después de que él y su abuela habían llegado.

"Debes recostarte y descansar un rato antes de la cena".

Edith se encontró con la mirada de Niels brevemente y luego miró tímidamente a las
mujeres junto al fuego. No tenía sentido que se molestara en acercarse para ayudarlas.
A juzgar por la experiencia, le parecía que apenas tenían suficientes prisas para
terminar las esteras en las que estaban trabajando actualmente.

"Aye, creo que descansaré antes de la cena", decidió, poniéndose de pie. Ronson no
había sido el único sacudido por el descubrimiento ese día y realmente le gustaría tener
la oportunidad de alejarlo de sus pensamientos.

"Te llevaré arriba y estaré atento a los problemas", murmuró Niels, tomándola del brazo.

Edith se detuvo un momento, pero siguió adelante, su corazón latiendo ahora en


respuesta al toque inocente. Le hizo pensar en su toque en otro lado, y en sus besos
cuando lo había hecho, y se preguntó si la besaría de nuevo una vez que estuvieran en
su habitación. ¿La besaría? ¿Acariciaría? ¿Haría otras cosas?

No debería, su lado sensato decía con firmeza, y sabía que ese lado estaba en lo
cierto, pero quería que él lo hiciera, simplemente no estaba segura de qué era lo que
quería que hiciera. A ella le gustarían más besos y caricias sin duda. Sus pechos ya
hormigueaban al pensar en sus manos sobre ellos, sus dedos tirando de sus tiernos
pezones. Y el calor se estaba formando de nuevo entre sus piernas al pensar en él
presionando allí como lo había hecho en el claro.

Edith apenas podía creer que se hubieran comportado de esa manera con Ronson allí.
Aunque, afortunadamente, había estado corriendo por el bosque con Laddie y había
olvidado su indiscreción. Aun así, si él hubiera regresado y los hubiera atrapado...

"Aquí estás".

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Serie Novias Escocesas #5
Edith se apartó de sus pensamientos y miró a su alrededor con sorpresa para ver que
mientras se había distraído, habían subido las escaleras y habían llegado a su
habitación.

"Gracias," murmuró Edith entrando adelante.

Cuando él cerró la puerta suavemente, ella se volvió para ofrecerle una sonrisa
nerviosa que se convirtió en una O de sorpresa. Estaba sola. Parecía que no habría
más besos después de todo.

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Capítulo 6

Niels rodó sobre su costado, hizo una mueca cuando su frente golpeó contra la pared y
luego abruptamente abrió los ojos y se sentó. Se había quedado dormido en el trabajo.
Se suponía que debía estar cuidando a Edith, pero se había quedado dormido en algún
momento de la noche y aparentemente había terminado tumbado y tendido en el suelo
sin despertarse.

Sacudiendo la cabeza en un esfuerzo por despertarse, Niels miró por el pasillo hacia las
escaleras. Podía oír los sonidos de la actividad flotando desde el gran salón de abajo, y
se preguntó qué hora era. Aún debía de ser temprano, decidió, porque nadie había
salido de sus habitaciones. Ni Edith, ni ninguno de sus hermanos. Habría escuchado si
la puerta de Edith se hubiera abierto, y sus hermanos se hubieran asegurado de que
supiera que estaban levantados, pateándolo y burlándose de él sin piedad por haberse
quedado dormido. Entonces todavía tenía que ser bastante temprano.

Niels apenas había tenido la idea cuando un movimiento atrajo su mirada hacia las
escaleras. Vio a Rory moviéndose por el pasillo hacia él con un cuenco en la mano.
Conteniendo un gemido, Niels se frotó las manos en la cara e intentó parecer más
alerta. Parecía que uno de sus hermanos se había levantado y había sido testigo de su
fracaso al proteger a Edith. Le hizo preguntarse por qué Rory no se había detenido para
despertarlo en su camino a bajar las escaleras.

"Buen día, hermano", dijo Rory alegremente, deteniéndose a su lado.

Alzando una rodilla, Niels apoyó un brazo despreocupadamente y gruñó. Tan buen día
como pudiera manejar ese momento.

"¿Está todo bien?" Preguntó Rory. "¿Edith está bien y a salvo?"

"Aye", gruñó Niels.

"Hmm. ¿Y cómo puedes saberlo cuando está abajo desayunando con Geordie y Alick, y
tú estás aquí?" Preguntó Rory suavemente.

La cabeza de Niels se volvió hacia su hermano. "¿Qué?"

"Aye, ha estado levantada por una buena hora ahora, junto con todos los demás", le
informó con diversión.

"Bueno, ¿por qué diablos no me despertaron?" Gruñó, poniéndose de pie.

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"Edith no nos dejó. Salimos justo cuando ella se dirigía hacia las escaleras e insistió en
que no te despertáramos. Dijo que era obvio que estabas exhausto, para que no te
despertaras cuando tropezó contigo", finalizó Rory terminantemente.

Maldiciendo, Niels corrió hacia las escaleras, ignorando la risa de Rory.

La noche anterior había sido la tercera noche de Niels protegiendo su puerta en el


pasillo, y no podía creer que hubiera fallado tan miserablemente en eso. Aunque, tal
vez debería haberlo esperado, ya que no había dormido en absoluto las dos noches
anteriores. Niels no había podido encontrar un sueño reparador desde que besó a Edith
en el claro. Besarla había sido un gran error. Lo había sabido justo cuando lo había
hecho, pero no había sido capaz de resistirse a ella. Había sido la tentación encarnada
para él en ese claro. Su cabello parecía casi en llamas con el sol brillando sobre él, y
olía dulce desde su baño en el lago. Una vez que su cuerpo se frotó contra el suyo
cuando la levantó para ayudarla a colgar el saco de su silla de montar, se había
perdido.

Edith no había ayudado mucho. Había sido como fuego en sus manos, su boca se
aferraba ansiosamente a la de él, su cuerpo respondía apasionadamente a sus caricias.
Dios, su pezón había estado duro antes de que incluso deslizara su mano dentro del
escote de su vestido para atraparlo y pellizcarlo. Y la forma en que había presionado en
su toque cuando él la había tomado entre las piernas... El recuerdo fue suficiente para
tenerlo duro incluso ahora. En ese momento Niels no había querido nada más que
arrodillarse, subir la falda hasta su cintura y lamer el calor húmedo que seguramente lo
esperaba entre sus piernas. Incluso podría haber hecho eso si el chillido de Ronson no
les hubiese devuelto a los dos el sentido común.

Ese pensamiento hizo que Niels hiciera una mueca. En ese momento, en realidad se
las había arreglado para olvidarse de que el chico estaba con ellos. No tenía idea de
cuándo el muchacho había salido del claro con Laddie o de lo que había visto antes de
irse. Pero Niels le agradeció a Dios que no hubiera tirado del escote de Edith frente al
niño, mostrando sus pechos para un acceso más fácil, como había querido.

Suspirando, se detuvo en lo alto de la escalera y miró hacia el gran salón, buscando a


sus hermanos. Geordie y Alick habían regresado de MacDonnell la noche anterior
después de que el resto de la fortaleza se hubiera ido a la cama. Aunque agotados de
su viaje como estaban, Alick se había ofrecido a proteger la puerta de Edith para que él
diera un descanso, pero Niels se había negado y había enviado al joven a la cama.
Ahora pensó que tal vez debería haber aceptado la oferta. Había sido menos que inútil
roncando afuera de su puerta, especialmente si ella al tropezar con él no lo había
despertado. Si eso fuera cierto, entonces cualquiera podría haberlo pisado, entrado en
la habitación y haber matado a Edith. No es que eso fuera una preocupación real nunca
más. Estaban bastante seguros de que Victoria era la culpable y no estaba allí. Aun así,
bastante seguro no era definitivo y era mejor estar a salvo que lamentar.

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Serie Novias Escocesas #5
La mirada de Niels se deslizó sobre la gente que se arremolinaba de un lado a otro en
el ajetreado gran salón de abajo, y luego, de repente, se relajó contra la barandilla
cuando vio a Edith. Se destacaba entre la multitud, una figura brillante en verde pálido
con cabello ardiente. Estaba hablando con Tormod, Geordie y Alick, la vió y sonrió
cuando ella se rió. El sonido era como una campana en la habitación, claro y dulce, y
Niels se encontró queriendo escuchar más de eso.

"Ella no entiende por qué estás actuando como lo haces con ella".

Niels miró hacia atrás para ver que su hermano lo había seguido y ahora estaba a su
lado, mirando a Edith.

"¿Actuar cómo?", Preguntó Niels, aunque sabía la respuesta. Había sido bastante
gruñón y sombrío con Edith desde lo del claro. También había estado colocando a
Tormod o Ronson en la mesa entre él y Edith en las comidas, y manteniendo la
distancia. Protegiéndola, pero a más de un brazo de distancia, nunca lo suficientemente
cerca como para tocarla. Le gustaría decir que su agotamiento era la razón, pero no
sería cierto.

"Actuando como si te disgustara", dijo Rory en voz baja.

Niels casi se rió de la sugerencia, el disgusto estaba muy lejos de lo que sentía por la
mujer. Ese era el problema.

"Creo que le gustas", agregó Rory cuando Niels no hizo ningún comentario.

Se puso rígido ante la sugerencia, pero no dijo nada.

"Creo que te gusta también", agregó Rory.

"Claro que sí, es una mujer encantadora. Inteligente, bonita, divertida, hermosa,
bondadosa, encantadora, amable con su gente y hermosa”.

"Dijiste hermosa dos veces", dijo Rory con diversión. "Cuatro si cuentas preciosa y
bonita como la misma palabra que hermosa".

"Déjalo, Rory", dijo Niels cansado. "Sabes que nunca podrá haber nada entre nosotros".

"¿Y por qué es eso?" Preguntó Rory con interés.

"Porque soy un tercer hijo sin perspectivas, al igual que Brodie con Victoria. Solo que
nunca mentiría para reclamarla. Ella se merece algo mejor”.

"En realidad eres el cuarto hijo", dijo Rory en voz baja.

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Niels se volvió para ensartarlo con la mirada. "¿Puedes mencionar a nuestro Ewan en
un momento como este?" Antes de que Rory pudiera responder, añadió con gravedad:
"Está muerto y se ha ido, déjalo descansar".

"Bien". Rory miró a Edith, pero agregó: "Sin embargo, ella posiblemente no puede
merecer algo mejor que tú. Eres uno de los mejores hombres que conozco”.

"Los otros mejores hombres son nuestros hermanos", sugirió Niels con diversión.

"Aye", admitió Rory sin disculparse. Después de un momento, agregó: "Además, Edith
no tiene perspectivas. Saidh dijo que su prometido murió hace años cuando todavía era
un muchacho, y sabes tan bien como yo que Brodie la enviará a un convento de monjas
en cuanto regrese”.

"Aye, bueno, la oíste el otro día. Tiene planes para evitar eso casándose con un buen
laird adinerado con un castillo y gente para ella manejar", le recordó.

"No va a suceder", dijo Rory con certeza, y cuando Niels frunció el ceño, se encogió de
hombros y dijo: "¿Conoces a alguien que se ajuste a esa descripción?"

"Aye, uno o dos", dijo Niels con tristeza.

"¿Alguno que le recomendarías a ella?" Agregó Rory.

"Nay", dijo de inmediato. Ninguno de los dos era material de marido. Uno era
notoriamente violento, después de haber matado a dos esposas. De ahí la razón por la
que ni siquiera podía comprar una esposa en este momento. El otro no podía salir del
barril de vino el tiempo suficiente para firmar un contrato. Ninguno de los dos era lo
suficientemente bueno para Edith. Demonios, ni siquiera los recomendaría a personas
como Victoria, que bien podría ser una bruja asesina.

"Exactamente", dijo Rory con firmeza. "No va a encontrar un marido y terminará siendo
una monja".

Las manos de Niels se tensaron en la barandilla. La sola idea de Edith como monja le
revolvía el estómago. Le parecía una sugerencia sacrílega; la vibrante y ardiente Edith
como una monja, nunca experimentando amor o pasión, nunca teniendo hijos o un
hogar.

"Creo que deberías casarte con ella", dijo Rory ahora.

Niels cerró los ojos brevemente y luego negó con la cabeza. "No tengo nada que darle.
Según mi plan, pasarán cuatro años más antes de poder darle un hogar o...”

"Sería bienvenida en Buchanan contigo, Niels, y lo sabes".

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye, pero ella…"

"No es Victoria", dijo Rory solemnemente. "La escuchaste tan claro como yo cuando
dijo que estaría feliz con una cabaña y niños".

Niels vaciló y luego dijo: "¿Y si no quiere casarse conmigo?", Preguntó, y luego admitió:
"La deseo. Pero no quiero una esposa que solo se case conmigo para salvarse de tener
que ser monja”.

Rory se rió suavemente por la sugerencia. "Hermano, la mujer te ha estado comiendo


vivo con sus ojos por días. Rastrea cada movimiento tuyo, sabe dónde estás cada
minuto y no pierde una palabra de lo que dices. Y a juzgar por la expresión de sus ojos
mientras lo hace, el convento de monjas es lo último que piensa cuando te mira”. Miró a
Edith casi con melancolía y admitió: "En verdad estoy terriblemente celoso. Ella te mira
de la misma manera que Saidh mira a Greer, y Murine mira a Dougall. Solo puedo
esperar que algún día una mujer me mire así”.

"¿En serio?", Preguntó Niels esperanzado. Había estado tan ocupado tratando de evitar
mirar a Edith, que no había notado cómo lo miraba ella.

"Nunca te mentiría sobre algo así, Niels", dijo Rory solemnemente.

La risa de Edith volvió a sonar y Niels se giró para mirarla. Luego descubrió que sus
pies lo bajaban por las escaleras para unirse a ella, cuando si tuviera un poco de
sentido común, sabía que se iría a su habitación y dormiría lo suficiente. Realmente
debería estar bien descansado para considerar una decisión tan seria, lo sabía.
Desafortunadamente, no parecía tener el sentido que Dios le dio en este momento.
Todo lo que podía pensar era que quería estar con ella.

"¡No es cierto!" Edith protestaba con una sonrisa cuando llegó a la mesa.

"¿Qué no es cierto?", Preguntó Niels con una sonrisa, deteniéndose junto a Tormod y
preguntándose si sería grosero pedirle al hombre que se acercara para poder sentarse
junto a Edith. Se suponía que debía estar protegiéndola después de todo. Bueno,
técnicamente, su deber de guardia había terminado, aun así...

"Niels", dijeron Geordie y Alick juntos.

Miró a sus hermanos y asintió y luego vio la sonrisa de Edith y la devolvió mientras lo
saludaba con un alegre: "Buenos días, amable señor. Espero que hayas dormido bien”.

Niels se aquietó y fue Alick quien dijo entre risas, "Oh, eso es cruel, claro".

"¿Qué?" Preguntó Edith frunciendo el ceño, y luego sus ojos se abrieron con
consternación. "Oh, nunca quise decir… Es solo un saludo, no quería...”

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Agitando sus disculpas, Niels se dejó caer en el banco al otro lado de Tormod y se
inclinó para mirar más allá de él y verla. "No temas, no me ofende", le aseguró, y luego
añadió con disgusto, "No es menos de lo que merezco por dormir en guardia".

"Aye, bien, dormido o no, estoy segura de que tu presencia allí en mi puerta fue
suficiente para evitar que alguien me envenenara mientras dormía", le dijo con firmeza.

Niels se mordió el labio y retuvo la sonrisa que quería reclamarlo ante sus palabras.
¿Envenenarla en su sueño? Eso sería un nuevo truco. ¿Pensaba la mujer que él se
había sentado afuera de su puerta toda la noche para evitar que la envenenaran? Fue
en caso de que el envenenador no fuera Victoria y decidiera pasar a otros trucos ahora
que el envenenamiento no estaba sobre la mesa.

"Además", añadió Edith con una expresión de preocupación, "debes haberte sentido
agotado para dormir tan profundamente. Por qué, ni siquiera te moviste cuando me caí
encima de ti”.

Niels se puso rígido y preguntó bruscamente: "¿Te caíste sobre mí? Rory dijo que solo
tropezaste”.

Edith hizo una mueca, pero admitió, "Aye, bueno, me tropecé y luego caí sobre ti". Ella
se encogió de hombros. "Supongo que aún me estoy recuperando y soy un poco torpe".

"Entonces, ¿estás diciendo que realmente te caíste encima de mí y no me desperté?",


Preguntó con consternación. Sus hermanos siempre lo estaban molestando porque
podía dormir a través de una violenta batalla a su alrededor, pero Dios, si realmente
había dormido mientras Edith caía sobre él...

"Aye, estaba más preocupada de haberte lastimado, y mencioné mis preocupaciones a


Geordie y Alick cuando salieron de su habitación, pero me aseguraron que estabas
bien, solo que duermes profundamente. Y mientras me escoltaban abajo, comenzaron a
contarme historias de otras veces que dormiste profundamente”.

Niels se puso rígido, la consternación se deslizó por su espalda. Carraspeando,


preguntó cautelosamente: "¿Lo hicieron?"

"Aye, como cuando tenías dieciséis años y tus hermanos te afeitaron mientras
dormías", añadió Edith.

Niels sintió que apretaba la mandíbula y miró a sus hermanos por contar historias tan
vergonzosas sobre él.

Pareciendo incómodo, Geordie murmuró, "Aye, para ser justo, no fue tanto que dormía,
más bien estaba inconsciente", admitió. "Fue una boda, y la primera vez que se le
permitió beber. Niels estaba en sus copas y es por eso que no se despertaba".

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"¿En serio?", Preguntó con el ceño fruncido. "¿Lo afeitaste dejándolo calvo mientras
estaba inconsciente?"

"¿Qué otros cuentos dijeron?", Preguntó secamente Niels.

Edith seguía frunciendo el ceño a lo de dejarlo calvo, pero finalmente dijo: "Nos
contaron acerca de otra boda cuando pudieron transportarte, con sábanas y todo, al
corral de toros. Dijeron que incluso te dejaron caer una o dos veces y aun así no te
despertabas, y te dejaron tirado allí en el corral hasta la mañana." Volviéndose hacia
Geordie y Alick, ella preguntó: "¿Estaba en sus copas esa vez también? ¿Es realmente
por eso que no se despertó?”

"Aye", admitió Geordie, luciendo incómodo cuando Niels lo miró.

"¡Oh, aye!", Dijo Tormod de repente. "Recuerdo esta historia ahora. Pensé que sonaba
familiar". Dirigiéndose a Edith, explicó: "Su padre, el Laird Drummond, estaba en la
boda y me lo contó cuando regresó”. Echó un vistazo de Edith a Geordie y a Alick y
añadió: "Pero ustedes dejaron fuera las mejores partes".

"¿Qué dejaron?", Preguntó Edith con curiosidad.

"Bueno." Tormod echó un vistazo más allá de ella para mirar a Geordie y Alick mientras
preguntaba: "¿ustedes chicos no esperaron durante horas hasta que él finalmente se
despertó y entonces soltaron al toro mientras Niels intentaba arrastrar su ropa de cama
hacia afuera del corral?"

"¡No lo hicieron!" Edith se quedó sin aliento con horror y sus dos hermanos asintieron
con culpabilidad.

"Aye". Acomodándose de nuevo, Tormod negó con la cabeza. "El Laird Drummond dijo
que rieron como tontos mientras observaban cómo perseguía a su hermano... hasta
que Niels corrió directamente hacia ustedes muchachos y saltó sobre la valla justo en
frente. El toro lo persiguió rompiendo la valla en pedazos, pero Niels aún corría
mientras el resto de ustedes estaban allí con sus violines6 en la mano, convirtiéndose
en blancos perfectos. Dijo que así como el toro podría haberlos segado, Niels había
girado y retrocedido ante sus gritos, que el muchacho saltó sobre la espalda del toro, lo
agarró por los cuernos y lo condujo de regreso al corral y lejos de dañar a alguien hasta
que los hombres mayores pudieron llegar allí y poner un par de cuerdas alrededor del
toro. Una vez que lo tuvieron bajo control, Niels se bajó, salió del alcance y repararon la
valla".

6
Fiddle: la traducción literal es violín, aunque obviamente hace referencia al pene o miembro masculino, lo dejo
porque es usado varias veces a lo largo del libro, algo así como una referencia menos cruda o vulgar.

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Serie Novias Escocesas #5
Edith frunció el ceño al oír el final del cuento y se volvió hacia Geordie y Alick para
decirles en voz alta: "No mencionaron esa parte".

Ambos hombres evitaron su mirada y Geordie murmuró, "aye, bueno…"

"¿Qué pasa con la historia sobre el cochinillo que vistieron con un vestido de dama y lo
pusieron en la cama con él?", Preguntó Edith ahora, con un tono sospechoso. "Dijeron
que pensaban que lo despertaría y asustaría, pero en lugar de pisotearlo como
esperaban, el lechón se acomodó y se acurrucó junto a Niels y los dos durmieron
durante horas, él felizmente inconsciente de que estaba durmiendo con un cerdo." Ella
alzó las cejas. "¿Qué percance dejaron fuera de esa historia?"

Niels vio a ambos hombres retorcerse brevemente, pero luego decidió sacarlos de su
miseria y cambiar de tema. Sin embargo, cuando abrió la boca para hacerlo, Alick dijo
bruscamente: "Pintamos los labios y las mejillas del lechón de rojo, y Conran escribió el
nombre de Annie en la frente del cerdo".

"¿Annie?" Preguntó Edith con curiosidad. "¿Por qué?"

"Porque, en ese momento, a Niels le gustaba nuestra vecina, Annie", admitió Alick a
regañadientes.

"¿Así que pusieron su nombre en un lechón?", Preguntó Edith con consternación. "¿Y si
ella y su familia hubieran venido a Buchanan y lo hubieran visto? Además de insultar a
la muchacha, hubieran humillado a su hermano delante de ella”. Con la boca aplastada,
sacudió la cabeza y dijo con firmeza: "¿Saben?, ahora que lo pienso, ustedes
muchachos fueron muy desagradables con su hermano."

La boca de Niels se había tensado con cada ejemplo que le había dado de lo que sus
hermanos habían compartido con ella. Pero ahora, cuando Geordie y Alick comenzaron
a parecer consternados, comenzó a sonreír. Sus hermanos estaban realmente
avergonzados, con la cabeza colgando... y eso casi hizo reír a Niels en voz alta. Había
hecho o había participado en trucos tan malos o peores contra cada uno de sus
hermanos. Todos ellos lo hacían. Pero nunca había tenido a nadie que le defendiera
como Edith. Estaba dando una conferencia a Geordie y Alick como si fueran un par de
muchachos jóvenes, todavía mojados detrás de las orejas.

"Afeitarle su hermoso cabello de la forma en que lo hicieron fue lo suficientemente


malo", dijo Edith ahora con disgusto y Niels se sentó un poco más recto, sus orejas se
animaron con la descripción su cabello mientras continuaba, "Pero podrías haberlo
matado con ese toro sin sentido. Y tienen mucha suerte de que se haya molestado en
salvarlos de ese toro como lo hizo también. Hubiera dejado que los destrozara si fuera
yo y supiera que se sentaron afuera para verme corneada, sin duda deben haber
comprendido que eso podría pasar”.

~ 92 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Oh, nay, no hubiéramos dejado que el toro lastimara a Niels", dijo Geordie de
inmediato.

"Aye", le aseguró Alick. "Niels siempre fue el corredor más rápido de todos nosotros.
Sabíamos que podía superar al toro, y seguramente hubiéramos corrido para salvarlo si
el toro hubiera estado a punto de darle una golpiza”.

Edith los fulminó con la mirada por un momento, luego suspiró y asintió. "Aye. Lo sé.
Saidh me ha contado bastantes historias de su infancia para saber lo cercanos que son
todos. Aun así, ¿su hermoso cabello?", Preguntó con una mueca de dolor.

Niels estaba a punto de preguntarle qué le gustaba de su cabello cuando de repente


miró más allá de Tormod y sonrió.

"¿Algún cambio?", Le preguntó a Rory mientras se acercaba a la mesa.

Rory negó con la cabeza sombríamente. "Nay. Su color es un poco mejor, sus ojos han
vuelto a la normalidad, pero todavía duerme. Empiezo a temer que nunca salga del
sueño en que la droga la puso y puede que se desvanezca y muera lentamente”.

Edith frunció el ceño ante esta noticia y luego giró hacia la cocina cuando sonó un grito.
Cuando fue seguido por un gran alboroto de gritos y alaridos, se puso de pie,
obviamente con la intención de investigar, pero Niels la tomó del brazo y la guio hacia
Geordie y Alick, que también se habían puesto de pie.

"Vigílenla", ladró y corrió hacia la cocina siguiendo los pasos de Tormod y Rory.
Rápidamente alcanzó a la pareja y los superó, llegando primero a la puerta de las
cocinas. Empujando dentro, frunció el ceño al grupo de personas que bloqueaban la
entrada, de espaldas a la puerta, sin darse cuenta de que estaban en el camino. Todos
ellos también estaban ahora en silencio, notó mientras comenzaba a abrirse paso entre
la multitud para llegar a lo que llamaba su atención. Tuvo que pasar entre la gente
hasta el otro extremo de la cocina para encontrar la fuente del malestar, luego se
detuvo y simplemente miró al hombre tendido boca abajo en el suelo.

"¿Cawley?"

Niels miró alrededor bruscamente ante la voz de Edith y frunció el ceño a los dos
hombres sobre sus talones cuando ella se deslizó a su lado y corrió hacia su tío.

"Les dije que la vigilasen", espetó.

"Lo hacemos", dijo Geordie de inmediato. "Pero como ella señaló, no dijiste dónde
teníamos que vigilarla, así que la trajimos todo el camino hasta aquí y la estamos
vigilando".

~ 93 ~
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"Hablando de eso", dijo Alick ahora. "La estoy viendo a punto de untarse de sangre si
no la alejas del cuerpo".

Niels se giró hacia atrás para ver que ella se había arrodillado junto a su tío y de hecho
iba a ensangrentarse el vestido. Un charco de líquido oscuro ahora era visible
extendiéndose desde debajo del cuerpo. Maldiciendo, se movió hacia Edith y la levantó.

"¡Nay, Niels! Cawley está herido", protestó Edith, tratando de liberarse de su agarre.

"Ya no le hiere más, muchacha, está muerto", dijo Niels en voz baja, tomándola en sus
brazos para sacarla de la habitación.

"Pero, ¿qué pasó?", Preguntó ella, que parecía desconcertada.

"No lo sé, muchacha. Rory lo examinará y lo descubrirá," le aseguró.

"Pero había sangre", señaló Edith como si él hubiera pasado por alto ese hecho.

"Aye", murmuró, y la llevó a las sillas junto al fuego donde la abuela de Ronson estaba
ocupada con su reparación. La anciana echó un vistazo a su llegada, comenzó a mirar
su aguja otra vez, pero luego parpadeó y levantó la cabeza de nuevo para mirarlos con
sorpresa mientras Niels se acomodaba en la silla con Edith en su regazo y comenzaba
a frotar sus manos.

Frunciendo el ceño, dejó su reparación y preguntó: "¿Qué pasa? ¿Qué ha pasado? ¿Ha
tenido una recaída?”

Niels dejó de rozarla y miró a la mujer con cierta sorpresa, sorprendido de que
pareciera ajena al caos que estaba detrás de ella. Y luego notó que había hablado un
poco más fuerte de lo necesario, y se dio cuenta de que la anciana tenía problemas de
audición.

"Nay", dijo finalmente. "Ella está molesta. Cawley está muerto”.

La incertidumbre cruzó su rostro brevemente, y luego la abuela de Ronson asintió.


"Aye. Cawley molesta a todos en algún momento u otro, creo. Él no está bien de la
cabeza", dijo, señalando su propia cabeza. Inclinándose hacia adelante, palmeó la
rodilla de Edith. "No dejes que lo que Cawley dijo te moleste, muchacha. Él no quiere
decir eso”.

Edith la miró sin comprender durante un minuto, y luego se volvió y enterró la cara en
su pecho. Seguramente estaba llorando, aunque lo estaba haciendo en silencio, Niels le
dio unas palmaditas en la espalda con impotencia.

"Ahora, ¿ves?" Canturreó la abuela de Ronson, dándole una palmadita en la rodilla otra
vez. "Llora y olvida las tonterías que Cawley estaba vomitando. Todo estará bien”.

~ 94 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Los ojos de Niels se abrieron con alarma cuando escuchó un aullido sofocado contra su
pecho y comenzó a acariciarle la espalda con ambas manos.

"¿Es ese tipo lord Niels que mi nieto ha tomado con tanto brillo, no?", Preguntó la mujer
de repente.

Niels asintió distraídamente, seguro de que ahora podía sentir humedad en su pecho.

"No es el que le enseña todas esas malditas palabras, ¿verdad?"

Congelado, volvió sus ojos culpables hacia la mujer. Al notar la repentina tensión en su
rostro y el desagradable estrabismo con el que lo miraba, tragó saliva y dijo: "Eh…"

"Bien", dijo la anciana, su cuerpo se relajó y una sonrisa se dibujó en su rostro.


"Sospechaba que un fino lord como usted no se rebajaría a usar un lenguaje tan
grosero como lo he escuchado salir de mí dulce niño en los últimos días. Aunque, le
hubiera dado una bofetada por enseñarle tales cosas de todos modos si ese fuera el
caso, lord o no", dijo ella firmemente. "Así que estoy feliz de que no lo hiciera usted".

Sentada en su asiento, asomó la punta del hilo que sostenía por el ojo de una aguja y
añadió: "Probablemente fue Cawley. Tendré que hablar con él más tarde al respecto.
Sin embargo, no lo abofetearé a él", les aseguró cuando Edith gimió más fuerte en su
pecho. "No está bien de la cabeza y no sabe hacerlo mejor. Pero le diré en términos
muy claros que cuide su lengua alrededor del niño a partir de ahora, lo haré".

Sin dejar de palmear la espalda de Edith, Niels miró a la mujer desconcertado, sin saber
qué decir, y luego se dio vuelta con alivio cuando vio a Geordie y Alick corriendo hacia
él. Con las manos alrededor de Edith, se levantó y se acercó a ellos.

"¿Qué encontró Rory?", Preguntó en cuanto hicieron una pausa.

"Está muerto", murmuró Alick, arrastrando la mirada de Edith en sus brazos.

"¡Nay! ¿De verdad?", Preguntó Niels con fingida sorpresa.

Geordie se atragantó con una carcajada, y luego tosió para aclararse la garganta, y dijo:
"Está pensando que todos necesitamos tener una pequeña reunión y una charla, pero
en algún lado donde no seremos escuchados".

Niels asintió con tristeza y luego cambió su atención a Edith mientras ella sollozaba y
olfateaba su camisa. Suspirando, dijo: "Entonces, en la habitación de Edith, y dile a
Rory que traiga algo para que ella duerma. Está sobrecargada".

Por alguna razón, eso la hizo llorar nuevamente. Frunciendo el ceño, Niels la presionó
contra su pecho y comenzó a estrecharla ligeramente en sus brazos mientras frotaba su
espalda ahora, tratando de calmarla.

~ 95 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Le diré que traiga suficiente para los dos", dijo secamente Geordie y cuando Niels
pareció sorprendido, señaló. "Estás haciendo que se mueva como un niño, que necesita
eructar, Niels".

Niels dejó de rebotar y frunció el ceño. "Solo dile que traiga a Tormod también",
murmuró y luego se giró para dirigirse a las escaleras.

Había llevado a Edith por los escalones hasta el rellano superior y por el pasillo hasta
su habitación antes de que dijera algo, y luego ella se apartó de su pecho, y lo miró a
través de profundos charcos verdes de dolor.

"Lo siento, mi lord. No sé por qué estoy llorando. Ni siquiera lloré cuando mi padre y mis
hermanos murieron. Había tanto que hacer y..." Ella negó con la cabeza sin poder hacer
nada.

"Entonces probablemente sea por eso, muchacha", dijo Niels, presionando su rostro
contra su pecho y llegando a abrir la puerta de su habitación. "Nunca tuviste la
oportunidad de afligirte adecuadamente y ahora todo te está golpeando de una vez".

"Tal vez", Edith estuvo de acuerdo en un suspiro y sacudió la cabeza contra su pecho.
"Pobre Cawley. Él era un alma tan gentil. Y había tanta sangre. ¿Qué pasó?"

"Rory nos dirá cuándo venga", murmuró Niels, cerrando la puerta de un puntapié y
cruzando para sentarse en el borde de la cama con ella en su regazo otra vez. Había
visto la empuñadura de un cuchillo en el pecho del hombre, asomándose por los
pliegues de su tartán, pero no tenía intención de decírselo hasta que tuviera a sus
hermanos para respaldarlo. Niels no tenía idea de qué hacer con una mujer llorando.
Saidh nunca había llorado al crecer. Bueno, excepto cuando sus padres murieron. Ella
había llorado y, pensándolo bien, ninguno de ellos había sabido qué hacer al respecto
tampoco, así que la dejaron para que lo resolviera ella misma y esperaron a que los
buscara una vez la tormenta había terminado para poder distraerla y a ellos mismos, de
su tristeza.

Eso fue todo, se dio cuenta Niels. Necesitaba distraer a Edith de su tristeza, pensó y de
inmediato tuvo una idea sobre cómo hacerlo. Bueno, sabía cómo le gustaría hacerlo de
todos modos. Había querido besarla otra vez desde el incidente en el lago.
Desafortunadamente, su mejor lado preguntaba si eso era realmente adecuado para el
momento. Desatar su lujuria con ella cuando estaba afligida podría no ser lo más...

"¿Niels?"

"¿Hmm?" Preguntó, mirando hacia abajo distraídamente cuando ella se inclinó hacia
atrás para mirarlo.

"¿Podrías por favor besarme de nuevo?"

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LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5
Niels parpadeó y luego sacudió la cabeza y se maravilló, "Es como si leyeses mi mente
muchacha".

"¿Lo es?" Preguntó Edith confundida.

"Oh, aye así es" le aseguró y luego bajó la cabeza para reclamar su boca, solo para
congelarse antes de que sus labios se encontraran cuando un fuerte "ejem" llenó la
habitación.

Haciendo una pausa, ambos se volvieron para mirar fijamente a Moibeal.

Ruborizándose hasta las raíces de su pelo, la joven doncella comenzó a moverse


furtivamente hacia la puerta. "Terminaré de limpiar la habitación más tarde y me iré
ahora, ¿aye?"

"Aye", gruñó Niels, justo cuando Edith susurraba la palabra.

Asintiendo y balanceándose, la doncella llegó a la puerta, la abrió, sonrió y luego se


deslizó rápidamente.

Suspirando, Niels se volvió y le sonrió a Edith, luego comenzó a bajar la cabeza otra
vez, solo para hacer una pausa cuando un golpe sonó en la puerta.

"Moibeal", se quejó Edith.

"Moibeal se dirigió hacia abajo", anunció Geordie, abriendo la puerta y asomando la


cabeza. "¿Debería llamarla de nuevo?"

"Nay". La palabra casi fue un chillido cuando Edith se bajó de su regazo.

Niels suspiró para sí mismo. No tenía idea de por qué estaba tan avergonzada de ser
atrapada en sus brazos. Había estado llevándola y sosteniéndola en su regazo frente a
todos abajo hace unos minutos y no pareció molestarla entonces. Ahora, sin embargo,
estaba reaccionando como si hubieran sido atrapados siendo traviesos.

Eso sí, un par de minutos más y podrían haber sido atrapados siendo traviesos,
reconoció Niels. Porque sabía sin lugar a dudas que un simple beso no hubiera sido
suficiente para él. Con otros cinco minutos a solas con Edith y su dulce boca, Geordie
realmente habría interrumpido algo. La habría tenido de espaldas en la cama y sus
manos la habrían cubierto por completo.

Desafortunadamente, nunca habían logrado el beso, y parecía obvio que tendría que
esperar hasta más tarde para distraer con ellos a Edith.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 7

"¿Apuñalado?" Dijo Edith lentamente, su mente incapaz de comprender lo que estaba


diciendo Rory. "¿Alguien apuñaló a Cawley?"

"Aye. Con esto", dijo Rory y sostuvo una daga de mango negro.

"Eso es de mi padre", dijo Edith, jadeando, moviéndose rápidamente hacia delante para
mirar el adornado mango con tapa de rubí. Apenas podía creerlo.

"¿Estás segura?", Preguntó Niels, moviéndose a su lado para mirar el arma.

"Por supuesto. Es única en su tipo. No la confundiría con otra", murmuró, su mirada


deslizándose sobre el arma otra vez. Siempre había pensado que era hermosa, pero
ahora, con la sangre de Cawley todavía en esta, la belleza de alguna manera se había
empañado.

Girando, caminó hacia la cama y se sentó al final de ella. "¿Quién lo hizo?"

Todos los hombres se miraron en silencio, y luego Tormod dijo: "Nadie sabe".

"¿Qué?", Preguntó con consternación. "Pero había un montón de sirvientes en la


cocina".

"Aye, y cada uno de ellos estaba mirando la comida para estar seguro de que nadie la
envenenaba", dijo Tormod con gravedad. "Nadie estaba prestando atención a Cawley.
Simplemente lo dejaron sentado en su rincón comiendo los pasteles que Jaimie hizo
para él y..." Se encogió de hombros sin poder hacer nada. "Nadie vio nada hasta que
Cawley cayó del barril en el que estaba sentado y comenzó a sangrar en el suelo de
piedra, y dijeron que nadie estaba cerca de él cuando eso sucedió".

"¿Cómo pudo nadie haber estado cerca de él?", Preguntó con incredulidad. "Alguien
tuvo que haberlo apuñalado".

"Fue apuñalado en el corazón, Edith", dijo Rory en voz baja. "Murió casi de inmediato.
Puede haber estado sentado aturdido por una cuenta de tres o diez antes de morir y
caerse del barril, o puede haber muerto apoyado contra la pared y luego cayó de allí.
De cualquier forma, cualquiera que lo apuñalara tuvo la oportunidad de escabullirse".

"Aye", Edith suspiró la palabra y luego se frotó la frente, antes de preguntar: "¿Pero por
qué alguien mataría a Cawley? Era inofensivo".

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Serie Novias Escocesas #5
Hubo un silencio y luego Niels dijo: "¿Era el hermano de tu padre?"

"Medio hermano, aye", admitió Edith. "Técnicamente, era mi tío, aunque mis hermanos
y yo nunca lo llamábamos así", murmuró y luego entrecerró los ojos hacia él. "¿Crees
que esto está relacionado con los envenenamientos?"

Niels señaló casi disculpándose, "Bueno, es otro miembro de la familia muerto".

"Aye, pero Cawley no era oficialmente familia", dijo con el ceño fruncido.

"Dijiste que todos en Drummond sabían que era el hermano de tu padre", le recordó
Rory en voz baja.

"Bueno, aye, pero…"

"¿Podría haber heredado Drummond?", Preguntó Geordie.

Edith negó con la cabeza. "Nay. Brodie es el siguiente en la línea".

"Pero si Brodie regresara y muriera, y tú murieras", añadió en voz baja. "¿Podría


Cawley haber heredado entonces?"

"Bueno, supongo", admitió, frunciendo el ceño. "Si todos los hijos de mi padre murieran
sin herederos, supongo que podría haber pasado a Cawley como su medio hermano y
pariente vivo más cercano".

"¿Y quién heredaría después de eso?", Preguntó Rory.

Edith frunció los labios y pensó brevemente, luego se encogió de hombros impotente y
dijo: "creo que Tormod. Tu padre y mi abuelo eran hermanos, ¿no? ¿Eras el primo de
mi padre?”

"Aye", admitió a regañadientes.

Edith asintió y luego se volvió hacia Niels y dijo: "Pero Tormod no es quien mató a
Cawley. Estuvo sentado con nosotros por una buena hora antes de que vinieras abajo y
él venía del patio cuando se unió a nosotros. No lo vi ir a ninguna parte cerca de las
cocinas. No hay forma de que Cawley permaneciera sentado muerto en la cocina
durante una hora sin que nadie lo notara”.

"Nay", estuvo de acuerdo Rory. "La sangre habría corrido por su cuerpo y no había
signos de eso. No creo que haya muerto más de un minuto antes de caer al suelo. Si es
así, Tormod no pudo haberlo matado”.

"Gracias a Dios", murmuró Tormod con sentimiento.

~ 99 ~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5
Edith se acercó para darle unas palmaditas tranquilizadoras al hombre en el brazo, pero
dijo: "Tal vez no tenga nada que ver con heredar a Drummond. Tal vez sea uno de los
clanes con los que estamos peleando para sacarnos del camino, o alguien que busca
venganza contra la familia por alguna ofensa desconocida. O quizás la muerte de
Cawley no tiene nada que ver con los envenenamientos", agregó.

Cuando sus palabras se encontraron con el silencio, ella levantó las manos con
exasperación y se dirigió hacia la puerta.

"¿A dónde vas?", Preguntó Niels con preocupación, siguiéndola.

"Bueno, está claro que no sabemos más ahora que lo que hacíamos después de los
envenenamientos", dijo con impaciencia. "Y estoy harta de pensar en ello. Voy a llevar a
Laddie a dar un paseo”.

"No sola, no lo harás", dijo Niels firmemente, atrapando la puerta cuando comenzaba a
cerrarla detrás de ella. Él la siguió fuera de la habitación y hasta las escaleras antes de
preguntar: "¿Cuánto tiempo hace que has llevado tu yegua a correr?"

Edith se detuvo en la parte superior de las escaleras y admitió con tristeza: "Demasiado
tiempo".

"Entonces quizás deberíamos ir a cabalgar", sugirió amablemente. "Nos haría bien a


ambos sentir el viento en nuestro cabello y correr rápido por el bosque".

Edith vaciló y luego asintió. "aye", ella respiró.

Sonriendo, Niels tomó su mano y comenzó a bajar ansiosamente las escaleras.

Ronson estaba sentado en el piso con Laddie junto al fuego. Ambos comenzaron a
levantarse cuando los vieron, pero Niels los rechazó y tomó velocidad mientras bajaban
las escaleras y comenzaban a cruzar el gran salón.

Para cuando salieron y se dirigieron a los establos, Edith casi corría para seguirle el
ritmo. No le importaba demasiado, tenía mucha energía reprimida que necesitaba
gastar. Era algo que parecía haberle preocupado desde su viaje al lago. Había estado
inquieta y casi insatisfecha, ya que había ido a poner en orden las pequeñas cosas que
habían sido abandonadas en Drummond mientras estaba enferma, pero su mente
siempre había estado centrada en Niels y en lo que le había hecho sentir, y sus ojos lo
habían buscado repetidamente con una especie de anhelo.

Desafortunadamente, aunque quería estar más cerca de él, parecía estar evitándola
igual de impacientemente. Al menos había estado evitando tocarla, incluso de la
manera más aleatoria. No había habido una mano educada en su brazo mientras la
escoltaba abajo en la mañana, ni el roce de los brazos u otras partes del cuerpo cuando

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Serie Novias Escocesas #5
buscaba algo en la mesa. De hecho, ni siquiera se había sentado a su lado. En cambio,
se encontró entre Tormod y Ronson, o Rory y Ronson, o Rory y Tormod con Niels al
otro lado de uno de ellos. Ella no tenía idea de por qué. Pero parecía que todo lo que le
había hecho mantener su distancia se había resuelto, porque la estaba sosteniendo de
la mano mientras la conducía a los establos.

"El jefe de establo no está aquí", murmuró Niels al entrar.

"¿Qué puedo hacer para ayudar?" Preguntó Edith mientras se acercaban a los puestos
donde su caballo estaba alojado junto al suyo.

Haciendo una pausa, Niels se giró, la agarró por la cintura para colocarla en la
barandilla de uno de los puestos y le dijo: "Siéntate aquí y luce bonita. No voy a tardar
un momento".

Edith parpadeó mientras él se alejaba para ensillar su caballo, y luego se deslizó de la


barandilla y se movió para recoger la silla de su yegua. Nadie le había ordenado que se
sentara y se viera bonita. Ni siquiera sabía cómo hacer eso. Nunca había pensado en sí
misma como bonita. ¿Inteligente? Sí. ¿Trabajadora? Sí. ¿Amable? Sí. Pero nadie había
dicho alguna vez que era bonita. Ciertamente no sus hermanos, y no tenía mucha
experiencia con hombres además de su padre y sus hermanos.

"Ah, muchacha. Nunca me escuchas", dijo Niels con diversión, moviéndose para ayudar
con su caballo una vez terminado con el suyo.

"Nunca he tomado las instrucciones bien", admitió con ironía. "Mis hermanos siempre
dijeron que era difícil y terca".

"Yo hubiera dicho inteligente e independiente", respondió ligeramente, terminando con


la silla de montar. Una vez hecho esto, la colocó sobre su yegua y luego sacó al animal
del establo mientras agregaba: "Y a mí me gusta eso de ti".

Edith se encontró radiante ante las palabras.

"Vuelvo enseguida", le aseguró Niels una vez que la sacó de los establos. Volvió a
entrar, pero regresó un momento después guiando a su semental y Edith se encontró
admirando las líneas de ambos machos mientras Niels montaba. Al verla mirando,
sonrió brevemente y luego señaló con la cabeza hacia las puertas. "Conoces el área
mejor que yo. Lidera el camino”.

Edith vaciló brevemente, y luego supo exactamente a dónde quería ir y condujo su


caballo fuera del patio al trote. En el momento en que cruzaron el puente, instó a la
yegua a correr por la colina hacia el bosque. No miró hacia atrás para ver si Niels la
estaba siguiendo. Ella no tenía dudas de que él sería capaz de mantenerse al día. Su
caballo era una buena bestia.

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Serie Novias Escocesas #5
El lugar que Edith había decidido estaba a una buena distancia, pero no tanto como
para ser peligroso. Sin embargo, su yegua estaba sin aliento debido a la combinación
de la distancia y la velocidad a la que habían viajado cuando se detuvo.

Deteniéndose en el borde de un campo de brezos, Edith miró por encima del pequeño
prado y exhaló un pequeño suspiro de placer. Esto era exactamente lo que necesitaba.
Su lugar favorito cuando el mundo parecía estar cerrándose en ella. Aquí era donde
había venido cuando su madre había muerto, cuando supo que el hombre
comprometido para ser su marido había muerto y dónde quería estar ahora.

"Hermoso", murmuró Niels, deteniéndose a su lado.

Edith sonrió. Sabía que le gustaría. Deslizándose de su montura, ató las riendas
alrededor de una rama en el árbol más cercano y luego comenzó a caminar a través de
un camino trillado a través de la pradera de brezo hasta la cintura, mientras Niels ataba
a su propia bestia. Las abejas y otros insectos comenzaron a zumbar de inmediato,
pero Edith los ignoró, sabiendo que volverían a calmarse una vez que hubiesen pasado.

Niels la alcanzó y la siguió en silencio hasta que llegó a la gran roca plana en el medio
del claro. Solo llegaba a la altura de la rodilla, y el brezo alto la ocultaba hasta que te
acercabas a ella. Pero también era lo suficientemente amplia como para que tres
personas se tumbaran una al lado de la otra, y casi completamente plana, aunque
estaba ligeramente inclinada.

"Ni siquiera vi esto desde el borde del prado", dijo Niels con sorpresa mientras se subía
a la roca y se trasladaba al centro para sentarse.

"Nay, hubieras tenido que haber cabalgado mucho más lejos", le aseguró.

"Aye". Niels se acomodó a su lado y miró por encima de la pradera de flores, con una
sonrisa irónica retorciéndose los labios. "Debería haber traído un picnic".

"Acabamos de desayunar", dijo Edith con diversión y luego frunció el ceño y agregó: "Al
menos yo lo hice. Tú todavía no has comido, ¿verdad?” Sacudiendo la cabeza,
comenzó a levantarse. "Deberíamos volver para que puedas comer".

"Nay", la agarró del brazo, para evitar que se levantara y negó con la cabeza. "Está
bien. No tengo hambre”.

"¿Estás seguro?" Preguntó Edith con preocupación. Cuando él asintió, ella vaciló, pero
luego se relajó y miró el mar de flores que los rodeaba.

Sentados, solo estaban la cabeza y los hombros sobre las flores. Pero ella sabía por
experiencia que tumbados sobre la roca desaparecerían de la vista de cualquiera que
pasara por el prado. Cerrando los ojos, levantó la cara hacia el cielo e inhaló

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Serie Novias Escocesas #5
profundamente. El aire estaba impregnado de olor a brezo y, al cabo de un momento,
se recostó en la superficie de piedra calentada por el sol y miró hacia arriba, hacia las
nubes.

"Oh, mira, es Laddie", murmuró con una sonrisa.

"¿Dónde?", Preguntó Niels mirando alrededor con confusión.

Edith sonrió y señaló la nube en forma vaga como un perro corriendo. "Justo ahí, junto
a la nube con aspecto de pato".

"Ah", dijo Niels relajándose. Su mirada se deslizó sobre las nubes y luego bajó hacia
ella y ella se dio cuenta de que él la estaba mirando, pero simplemente continuó
mirando las cambiantes nubes hasta que su cabeza de repente bloqueó su vista.

Parpadeando, Edith volvió a centrar su mirada en su cara y simplemente esperó,


sabiendo que la besaría ahora. Era por eso que lo había traído hasta allí, para recibir el
beso que había estado a punto de darle en su habitación antes de que los
interrumpieran.

Niels no la decepcionó. Bajó la cabeza hasta que su boca cubrió la suya y al principio
eso fue todo lo que hizo, rozando sus labios ligeramente sobre los de ella. Pero cuando
Edith levantó las manos para deslizarlas por sus brazos, su boca se abrió sobre la de
ella y su lengua se deslizó para rastrear el pliegue entre sus labios. Edith
instintivamente se abrió a él en un pequeño suspiro y él atrapó su labio inferior con el
suyo, y lo dibujó ligeramente, casi bromeando. La hizo sonreír perezosamente, y luego
él soltó su labio e inclinó su cabeza mientras su lengua se movía para llenar su boca y
el dulce ritmo cambió repentinamente.

Con su aliento atrapado en su garganta, Edith se aferró a sus hombros y se agarró con
fuerza mientras su boca violaba la de ella. Era como si la pasión que habían compartido
en el lago hubiera sido simplemente contenida cuando habían sido interrumpidos, y
ahora la habían desatado. El propio deseo de Edith se alzó para reunirse con ella y
deslizó una mano en su cabello, sus dedos se anudaron en los mechones y lo
empujaron mientras deslizaba su lengua hacia adelante para encontrarse con la suya.

El suave zumbido de los insectos que se banqueteaban en el campo a su alrededor se


desvaneció, ahogado por el latido de su corazón, y el dulce olor a miel del brezo fue
reemplazado por el olor almizclado y amaderado de Niels mientras deslizaba un brazo
debajo de ella levantándola para sentarla a su lado. Edith fue voluntariamente,
aferrándose a él con ambos brazos y labios. Cuando él rompió el beso para llevar sus
labios a su oreja al mismo tiempo que su mano se movió para encontrar y apretar un
pecho a través de su vestido, Edith inclinó su cabeza hacia atrás y hacia un lado en un
gemido y se arqueó en la caricia. Sus ojos se abrieron brevemente al cielo y luego bajó

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Serie Novias Escocesas #5
y volvió la cabeza para encontrar su boca otra vez cuando sintió que tiraba del escote
de su vestido.

Niels la besó de inmediato, pero continuó trabajando en los lazos de su vestido


mientras lo hizo. Sintió que el material se aflojaba y que simplemente se había ido y que
sus cálidas manos cubrían sus pechos. Edith se sacudió en reacción cuando la
excitación la sobresaltó, y luego gimió en su boca cuando comenzó a apretar y amasar
los montículos de carne. Cuando rompió el beso de nuevo, ella murmuró una protesta y
luego gritó y apretó los dedos en su cabello cuando de repente se agachó para cerrar la
boca sobre un pezón ansioso.

"Niels", se quedó sin aliento, sacudiendo la cabeza mientras lamia sobre el sensible
bulto y luego cerró los dientes ligeramente sobre él. No dejó el otro pezón anhelando,
sus dedos lo movían ligeramente y tiraban por turnos y Edith se retorcía en respuesta,
arqueando la espalda y moviendo inquietas las piernas mientras un calor líquido se
acumulaba en su vientre y comenzaba a rezumar hasta el punto entre sus piernas.

Cuando finalmente dejó que su pezón se le escapara de los labios y alzó la cabeza
para besarla otra vez, Edith estaba lista para él y ella fue la que lo devoró, lo besó casi
violentamente y lo presionó lo más cerca que pudo. Ella sintió su mano en su tobillo y
luego deslizándose hacia arriba a lo largo del exterior de su pierna, empujando la tela
de su vestido por delante de ella. Cuando su parte inferior del cuerpo se giró hacia él
cuando llegó a la cadera, su mano inmediatamente aprovechó, deslizándose para
ahuecar una mejilla redonda de su trasero y apretando con fuerza. En el momento
siguiente, él se puso de rodillas y la instó a mover las suyas.

Edith siguió la dirección casi sin pensar, su boca se aferró a la suya mientras él se
movía para arrodillarse entre sus extendidas rodillas. En el momento en que lo hizo, las
manos de Niels se deslizaron hacia abajo y se curvaron para rozar su piel más sensible.
Edith rompió su beso, llevó su cabeza hacia atrás en un grito de placer, y Niels giró su
cabeza y la mordisqueó en el hombro, gruñendo, "Cristo, muchacha, estás muy mojada
por mí".

"Lo siento", murmuró Edith con confusión y una risa sobresaltada se deslizó de sus
labios.

"No lo lamentes", dijo sin aliento. "Nunca te lamentes por eso", añadió con más firmeza
y luego la besó de nuevo y la abrazó para que se recostara de lado con él. En el
momento en que Edith estiró sus piernas desde su posición doblada, Niels la hizo rodar
sobre su espalda y rompió su beso para reclamar un pezón otra vez. Pero apenas lo
notó, porque ahora su mano le había subido la falda hasta la cintura y le estaba
empujando las piernas. Edith se mordió el labio, pero dejó que sus piernas se abrieran,
y luego gritó su nombre y se resistió cuando sus hábiles dedos se deslizaron entre ellas
para encontrar el núcleo de ella otra vez. Sus piernas se cerraron alrededor de su mano

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Serie Novias Escocesas #5
en una respuesta instintiva, pero él simplemente usó ambas manos para abrirlas y
luego se deslizó por su cuerpo para colocar su boca donde habían estado sus dedos.

Edith se congeló, con los ojos abiertos y mirando las nubes que se movían sobre sus
cabezas mientras él comenzaba a hacer cosas que su mente ni siquiera podía rastrear.
Lamió y succionó e hizo cosas con la lengua que hicieron que Edith gritara y agarrara
su cabeza. Tirando de su pelo, trató de cerrar sus piernas, pero él las sostuvo abiertas y
en el momento siguiente estaba clavando los talones en la piedra y levantando sus
caderas en su boca casi violentamente, pero nuevamente él tenía el control,
manteniéndola presionada y abierta para su atención.

Indefensa y medio loca por la emoción que crecía en ella, Edith le soltó la cabeza y se
agarró a la roca sobre la que yacían, pero la superficie casi plana no ofrecía ninguna
posibilidad de agarre. Terminó agarrándose sus propios pechos, sus uñas clavándose
en su piel mientras trataba de encontrar una manera de sostenerse. Pero era
demasiado tarde, no había forma de detenerlo. Edith gritó, medio aterrorizada y medio
conmocionada cuando su placer explotó y rodó sobre ella en una ola sin sentido.
Cuando se recuperó lo suficiente como para recuperar su conciencia de dónde y quién
era, Niels la estaba acunando en sus brazos y murmurando palabras tranquilizadoras
mientras la mecía suavemente.

Con toda esa encantadora pasión desvaneciéndose, la incertidumbre y la vergüenza se


apresuraron a reclamar a Edith cuando se dio cuenta de que su vestido era un lío
torcido alrededor de su cintura y que estaba casi desnuda en sus brazos. Cerrando los
ojos, ella volvió la cara hacia su cuello y presionó más cerca, tratando de ocultar la
mayor parte de su cuerpo como pudo.

Niels hizo una pausa en sus mecidos y suaves murmullos a la vez, y echó la cabeza
hacia atrás, tratando de verla. "¿Edith?"

"¿Aye?", Murmuró, agachando la cabeza con timidez y cruzando los brazos sobre los
pechos para tratar de ocultarlos.

"¿Estás bien, muchacha?", Preguntó con preocupación.

Edith asintió con la cabeza, pero movió los brazos para que uno cruzara sobre sus
pechos, dejándola libre para tratar de ponerse la parte superior de su vestido para
cubrirse.

"No lo hagas", protestó Niels, tomando su mano. "No tienes que esconderte de mí".

"Yo..." Edith sacudió su cabeza impotente e intentó liberar su mano.

"Cásate conmigo."

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Ella se congeló ante esas palabras, su cabeza finalmente subió para poder mirarlo con
asombro. "¿Qué?"

"Sé que esperabas casarte con un laird con un castillo que pudieras manejar, y todavía
no lo tengo, pero podré empezar a construir uno después de otros cuatro años.
Mientras tanto, podemos vivir en Buchanan, ya sea en la torre del homenaje o en una
cabaña en el pueblo, si lo prefieres. Y felizmente te daré todos los niños que desees" le
aseguró Niels y luego repitió suavemente, "Cásate conmigo, Edith. Sé mi esposa y
comparte tu vida conmigo".

Edith simplemente lo miró fijamente, casi sin creer que él se lo hubiera preguntado,
pero luego frunció el ceño y preguntó: "¿Me lo estás pidiendo solo porque crees que
tienes que hacerlo ahora que me has arruinado?"

La pregunta hizo que Niels se riera y Edith frunciera el ceño.

"'No es gracioso mi Lord", dijo Edith rígidamente, alejándose de él y comenzando a


tratar de desenredar su vestido retorcido. "Si solo lo estás ofreciendo por culpa de lo
que acabamos de hacer, entonces seguramente te arrepentirás y te sentirás molesto
por ello y no podría soportar que llegues a odiarme".

"Edith, muchacha", dijo Niels suavemente, tomando sus manos para detenerla de
nuevo. "No me estoy riendo porque crea que el que estés arruinada es divertido, me
estoy riendo porque..." Vaciló y luego simplemente dijo, "No estás arruinada, Edith. Tu
virginidad sigue intacta”.

Ella parpadeó y luego lo miró dubitativa. Sabía lo básico y que un hombre generalmente
insertaba su miembro en una mujer para romper su virginidad. Sin embargo, le costaba
creer que algo hubiera sobrevivido a la explosión de placer que había experimentado.
Además, había sentido que algo empujando en ella al final. Eso fue lo que provocó la
explosión. Por supuesto, su cabeza había estado entre sus piernas y su miembro no
estaba cerca de esa parte, se dio cuenta ruborizándose. "Pero sentí algo…"

"Mi dedo", interrumpió suavemente. "Tu virginidad todavía está intacta".

"Oh." Sonrojándose, Edith bajó la cabeza.

"No quiero casarme contigo porque te he arruinado. Quiero casarme contigo porque…
bueno, francamente, porque quiero arruinarte", admitió Niels con una sonrisa irónica y
luego se encogió de hombros, disculpándose. "Te deseo de forma algo feroz, Edith".

Cuando ella frunció el ceño y comenzó a bajar la cabeza otra vez, añadió rápidamente,
"Pero también me gustas".

Haciendo una pausa, ella lo miró con incertidumbre.

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"No voy a mentir y decir que te amo, muchacha", agregó solemnemente. "Es demasiado
pronto para eso, y no deseo que haya mentiras entre nosotros, pero sí me gustas. Creo
que eres una buena mujer, bella e inteligente. Más importante aún, eres amable
también. Te importa el bienestar de tu gente, y recibes personas errantes que necesitan
un hogar. Tienes un buen corazón, Edith, y eso me gusta de ti." Sonriendo de nuevo,
añadió: "Y el hecho de que yo también te desee solo lo hace aún más dulce. Creo que
podríamos ser felices juntos".

Edith lo miró por unos minutos, repitiendo sus palabras en su mente. Le gustaba que no
mintiera y afirmara que la amaba. Y también le gustaba él. Le gustaba lo amable y
paciente que era tanto con ella como con Ronson, y le gustaba cómo manejaba a
Laddie con firme afecto. Y también lo deseaba, desesperadamente. Nadie le había
hecho sentir ni siquiera un pequeño porcentaje de la pasión que él había despertado en
ella, lo que tal vez no decía mucho ya que nunca había sido besada antes de él, pero
sabía lo suficiente como para entender que la pasión que él inspiraba en ella era raro y
tendría suerte de tenerlo en su cama matrimonial. Sin embargo, aún más importante, a
ella le gustaba y respetaba a Niels y también pensaba que podrían ser felices juntos.

Soltando el aliento que había estado conteniendo, Edith dejó caer el vestido y se inclinó
para presionar sus labios contra los suyos, pero su boca apenas rozó la suya cuando
Niels se echó hacia atrás y preguntó: "¿Es eso un aye, te casarás conmigo?"

Sonrojándose, Edith asintió y susurró: "Aye".

"Gracias a Dios", Niels gruñó y finalmente la besó.

Para su asombro, toda la pasión anterior que creía saciada volvió a cobrar vida dentro
de Edith. Gimiendo, enlazó sus brazos alrededor de su cuello y presionó contra él, sus
pezones hormigueaban mientras rozaban la tela de su camisa y su tartán. Queriendo
complacerlo tanto como él la había complacido, Edith no solo lo sostuvo esta vez, sino
que permitió que sus manos se movieran sobre su pecho, explorando, mientras
chupaba su lengua y luego dejaba que la suya luchara con la de él. Pero cuando
encontró el alfiler grande que sostenía su tartán en su lugar y lo desabrochó, Niels se
puso rígido y luego la agarró por los hombros y la empujó hacia atrás, terminando su
beso.

"Nay, muchacha, no creo…"

"Por favor", Edith gimió sin aliento, su mano alcanzando su pecho cubierto por una
camisa cuando el tartán cayó al charco en su regazo. "Solo quiero ver."

Cuando Niels vaciló, una batalla tuvo lugar en sus ojos, ella tomó su camisa y la tiró de
debajo de los pliegues de su tartán para poder deslizar sus manos debajo. Entonces
Edith las dejó deslizarse sobre la dura extensión de su estómago y luego su pecho
mientras empujaba la tela hacia arriba, revelando centímetro a centímetro de su

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perfecto pecho. Cuando la tela se elevó lo suficiente como para exponer uno de sus
pezones, se inclinó y cerró los labios sobre él y las manos de Niels se tensaron sobre
sus hombros con sorpresa.

"Muchacha", gruñó mientras succionaba y luego chasqueó la punta endurecida con la


lengua, sin estar segura de estar haciendo lo correcto, pero tratando de emular lo que le
había hecho. Pensó que podría estar haciendo lo correcto cuando gruñó por lo bajo y
dejó que una mano se deslizara por su cabello para ahuecar su cráneo mientras
trabajaba. Aun así, dijo, "muchacha, no deberíamos…"

Las palabras murieron abruptamente cuando Edith deslizó una mano hacia abajo para
encontrar la dureza cubierta por el tartán arrugado. Insegura de lo que debería hacer
con eso ahora que lo había encontrado, simplemente lo agarró a través de la tela y lo
apretó ligeramente. Lo siguiente que supo fue que estaba de espaldas sobre la piedra y
Niels estaba encima de ella, con las caderas entre sus piernas y presionándola
mientras la besaba casi violentamente.

Gruñendo en su boca, Edith separó más las piernas, levantó las rodillas y clavó los
talones en la piedra para que pudiera presionar la dureza que se frotaba contra ella a
través de la tela de su tartán. Ella también deslizó sus manos alrededor de sus caderas
y agarró su... trasero desnudo, se dio cuenta con sorpresa. Con los ojos abiertos
parpadeando, rompió el beso para mirar hacia abajo y vio que el tartán se había
deslizado fuera de él para caer entre ellos. Le dejó una hermosa vista de su trasero.

"¿Qué sucede?" Niels gruñó y se levantó ligeramente para mirar por encima de su
hombro como si pensara que ella visto a alguien Fue atrapado completamente por
sorpresa cuando Edith inmediatamente dejó de presionar hacia arriba, dejó que sus
caderas cayeran sobre la piedra y se metió en el espacio que había hecho entre ellos
para envolver sus dedos alrededor de su dura erección.

Aspirando fuertemente, Niels se volvió para mirarla con los ojos muy abiertos y Edith
usó su mano libre para tratar de bajar la cabeza para otro beso, pero se resistió. En
realidad, parecía algo congelado, se dio cuenta y le preocupaba que ella lo hubiera
lastimado. No creía que estuviera apretando demasiado, pero no sabía cuán sensible
era.

"¿Lo estoy haciendo mal?", Preguntó con incertidumbre.

"Eso depende de lo que trates de hacer", dijo entre dientes.

Edith se mordió el labio y luego admitió: "Quiero darte placer como me hiciste a mí".

Niels tragó saliva y cerró los ojos. "Muchacha", dijo finalmente. "Estás jugando con
fuego. Solo déjalo, déjame tomar aliento y volveremos a la fortaleza y...” Sus palabras

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Serie Novias Escocesas #5
murieron abruptamente otra vez cuando movió la mano. Los ojos de Edith se
ensancharon cuando él se sacudió en respuesta.

"Dime qué hacer", suplicó, moviendo la mano de nuevo.

Aparentemente fue demasiado para Niels. Maldiciendo por lo bajo, la agarró de la


muñeca y la apretó hasta que ella lo soltó, y luego se apartó inmediatamente,
llevándose el tartán.

Mordiéndose el labio, Edith se sentó y lo observó mientras dejaba su tartán en el


camino y comenzaba a doblar los pliegues en el estrecho espacio.

"¿Hice algo mal?", Preguntó con incertidumbre, acercándose al borde de la roca y


poniéndose de pie.

"Nay, solo creo que deberíamos..." Niels hizo una pausa mientras miraba en su
dirección y vio que, aunque su falda había vuelto a su lugar, la parte superior de su
vestido aún estaba alrededor de su cintura, dejando sus pechos desnudos. Mirando
hacia abajo, vio que sus pezones estaban fruncidos como si hiciera frío, y se sonrojó.
Ella también comenzó a agarrar el material de inmediato, con la intención de cubrirse,
pero él la agarró del brazo para detenerla y luego la atrajo hacia sí.

"Dios, te deseo", susurró, su aliento como una cálida descarga sobre su sensible pezón.
"No he dejado de estar dolorido desde el día en el lago", admitió.

"Entonces, ¿por qué me estabas evitando?", Preguntó Edith y se sonrojó al escuchar el


dolor en su propia voz. No había tenido la intención de dejar que él lo oyera, pero había
sido herida por lo distante y frío que había sido con ella después de besarla. También
estaba empezando a preocuparse de que pudiera actuar así nuevamente ahora a pesar
de pedirle que se casara con él”.

Niels estudió su expresión frunciendo el ceño y luego dijo: "Lo siento, muchacha. No
quise lastimarte”.

"No vas a volver a actuar así una vez que volvamos a la fortaleza, ¿verdad?", Preguntó
ella.

"Probablemente lo haga", dijo en tono de disculpa. "Pero solo hasta que estemos
casados. Es solo porque cuando estoy cerca de ti, te deseo tanto..." Sacudió la cabeza.

"Yo también te deseo", confesó. "Tanto que duele".

"Aye". Niels sonrió con ironía. "Conozco bien la sensación".

"Tal vez si te acostaras conmigo, no sería tan malo y podríamos..." Su voz murió en un
grito ahogado cuando su boca se cerró repentinamente sobre su pezón.

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Serie Novias Escocesas #5
"Niels", dijo con incertidumbre, tambaleándose contra él, y agarrándolo por el hombro
mientras de repente deslizaba una mano bajo su falda para subirla por su pierna.

"No me acostaré contigo hasta que nos casemos, muchacha", murmuró, liberando su
pecho y levantando su rostro para observar su expresión cuando sus dedos
encontraron su centro otra vez. "Pero te quitaré el dolor, por ahora".

"¿Y tú?" Edith gimió.

"Aye, también me quitaré el mío", le aseguró, y ella bajó la mirada para ver que tenía su
mano libre envuelta alrededor de su erección "Levántate la falda, Edith. Quiero ver
mientras te complazco".

Edith se inclinó temblorosa para levantarse la falda hasta que la recogió en la cintura.

"Hermosa", murmuró Niels, deslizando un dedo dentro de ella. "Acércate, amor. Quiero
probarte." La instó a acercarse con el dedo dentro de ella, y Edith se tambaleó hacia
delante.

"Extiende más las piernas", le indicó, y ella amplió su postura, aunque no estaba del
todo segura de que sus piernas la sostuvieran mucho más tiempo mientras sus dedos
se deslizaban dentro y fuera y él inclinó la cabeza hacia arriba y se inclinó para lamerla.
Ocupada con ambas manos, Edith cerró los ojos brevemente y luego los abrió y miró
hacia abajo para ver lo que se estaba haciendo a sí mismo, notando la forma en que se
sostenía y el movimiento rítmico que usaba. Ella también quería tocarlo y estar más
involucrada, pero no tenía mucha opción en el asunto hasta que sus piernas
comenzaron a temblar.

Al parecer notándolo, Niels se enderezó y gruñó, "Arrodíllate".

Edith cayó de rodillas junto a él y él la besó, su pulgar ahora acariciaba el sensible bulto
que era el centro de su excitación mientras deslizaba su dedo dentro y fuera de ella con
el mismo movimiento rítmico que usaba sobre sí mismo. Al principio le devolvió el beso,
pero pronto no pareció tener la presencia de ánimo suficiente para controlarlo y
simplemente mantuvo su boca abierta presionada contra la de él cuando su cuerpo
comenzó a temblar.

Cuando ella gritó y se abalanzó sobre él, sus manos se aferraron a sus hombros
cuando encontró su placer, Niels respondió empujando una última vez y luego gritando
en su boca cuando encontró su propia liberación. Cuando terminó, los dos jadeaban y
se combaban el uno contra el otro. Niels sacó su mano y la abrazó mientras se
recuperaban.

Después de varios momentos, él la besó en la frente y murmuró: "Tenemos que


vestirnos y regresar".

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Edith suspiró y asintió con pesar. Realmente no quería vestirse y volver a los problemas
en Drummond. Quería huir con Niels, encontrar una gran cama suave en algún lado y
que él le enseñara todo lo que había que saber sobre la cama. Desafortunadamente,
esa no era una opción, reconoció, y comenzó a moverse.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 8

Edith estaba guiando el camino mientras regresaban al patio. Yendo más rápido de lo
que probablemente debería haber hecho, estuvo a punto de atropellar a Laddie cuando
apareció de repente ante ella. Solo reacciones rápidas e instintos nacidos de años de
cabalgar salvó a la enorme bestia mientras Edith cogía derecha la rienda más arriba
tirando de ella. El caballo se volvió inmediatamente justo evitando pisotear a su pobre
perro. La yegua se detuvo y Edith se volvió para mirar con el ceño fruncido a Ronson
mientras venía corriendo.

"¡Lo siento, mi lady! ¡Se escapó de mí! ¡Lo siento!", Exclamó el chico, deslizando una
mano bajo el cuello de Laddie como si fuera a contenerlo cuando la bestia estaba
sentada felizmente en el camino, aparentemente completamente ajena a lo cerca que
había estado de la muerte. "Realmente lo hago, mi lady. Nunca pasará de nuevo. Lo
juro. Por favor no me arroje a mí y a mí abuela afuera. Lo haré mejor”.

Toda la ira de Edith, nacida en su mayoría del susto, se le escapó por esas palabras,
suspiró y negó con la cabeza. "Ven aquí, Ronson".

Vaciló brevemente, pero luego se adelantó arrastrando a Laddie con él, con el miedo en
el rostro. En el momento en que se detuvo junto a su yegua, Edith se inclinó para
acercar su cara a la de él. Ella pensó que oyó un silbido por encima o detrás de ella al
hacerlo, pero lo ignoró para decir solemnemente: "Ronson, yo nunca...”

El resto de la tranquilidad murió en la garganta de Edith cuando fue empujada de


repente, y arrastrada de su caballo por doscientas libras de músculo masculino.

"¿Niels?" Dijo Edith con desconcierto mientras se encontraba tendida de espaldas


sobre su pecho en el suelo. Ella comenzó a voltear la cabeza para mirarlo, pero se
detuvo sorprendida mientras su mirada se deslizaba sobre el frente del castillo y creyó
ver a alguien de pie en la ventana de su dormitorio. Antes de que pudiera obtener más
que una impresión de la persona, sin embargo, de repente estaba rodando y Edith se
encontró boca abajo en el barro con un gran peso en su espalda. No tuvo que pensar
mucho para adivinar quién era encima de ella, y graznó, "¡Niels!"

"Quédate abajo", ladró, empujando su cabeza en la tierra con su mano. "Ronson. Ven
aquí, muchacho.

Edith levantó la cara del fango y miró a su alrededor para ver que Ronson ya estaba
cerca de ellos, arrastrado por Laddie, quien pensó que era un buen juego y comenzó a
lamerle la cara y la cabeza en el momento en que pudo alcanzarla.

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Serie Novias Escocesas #5
"Laddie, no", ordenó, o lo intentó. Era difícil hablar con dos lenguas en su boca y en el
momento en que abrió la boca para decir las palabras, Laddie decidió comprobar y ver
si tenía alguna golosina allí para él. Girando su cabeza, Edith presionó sus labios
cerrados y luego dejó caer su cabeza en la tierra e intentó escuchar lo que Ronson
estaba diciendo.

"'¡Era una flecha, mi señor! ¡La vi pasar volando junto a ella cuando se inclinó para
hablarme! ¡Alguien intentó dispararle a Lady Edith!”

"¿Qué?" Edith graznó, y levantó la cabeza para mirar alrededor, solo para que Niels la
empujara hacia el suelo.

"Quédate abajo, muchacha. No te estoy perdiendo ahora," gruñó y luego añadió,


"Ronson, ven aquí, muchacho, de lo contrario podrías ser golpeado por accidente si
disparan de nuevo".

En el momento siguiente, Edith encontró a Ronson apretujado a su lado bajo el refugio


del cuerpo de Niels.

"¿Está bien, mi lady?", Preguntó el chico con seriedad mientras Niels comenzaba a
ladrar órdenes a la gente que ahora gritaba y corría por el patio. "Eso estuvo muy cerca.
¡Alguien casi le dispara!”.

"¿Lo hicieron?", Preguntó débilmente, su cabeza se balanceaba mientras Laddie lamía


el pelo en la parte posterior de su cabeza. No tenía idea de por qué el perro estaba
haciendo eso, pero logró sacar una mano de debajo de ella y cubrir el lugar con la
esperanza de que se detuviera. En lugar de eso, se giró con entusiasmo para lamerle la
mano y el pelo, arrastrando los mechones ahora mojados sobre el dorso de su mano, y
ella sospechó, sacando un poco. Ciertamente se sentía como si parte de su cabello
fuera arrancado desde la raíz.

"Aye", le dijo Ronson. "Si no se hubiera inclinado a hablar conmigo justo cuando lo hizo,
apuesto a que la flecha la habría golpeado en el pecho y la habría aniquilado más
muerta que una agotada ramera”.

"¿Más muerta que una qué?", Preguntó con incredulidad.

"Que una agotada…" comenzó Ronson, pero sus palabras terminaron en un


sobresaltado jadeo cuando Niels repentinamente se levantó, llevándolos a ambos con
él.

"Mantengan los escudos sobre ellos", ladró Niels. "¡La flecha vino desde arriba!
¿Enviaste a alguien a revisar las cámaras superiores?”

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Edith parpadeó hacia los seis escudos que seis soldados sostenían sobre ellos como
un techo, y luego hacia abajo en el brazo que era como una banda de acero alrededor
de su cintura. Niels estaba sosteniéndolos a ella y a Ronson del suelo y apretándolos
contra su pecho mientras corría hacia la fortaleza con los hombres que los rodeaban
para protegerlos de las flechas.

"Aye. Envié cuatro hombres. Deberían estar allí ahora. Si hay alguien allí, lo
encontrarán", dijo el hombre a su lado y Edith se volvió para ver que era Tormod quien
sostenía el escudo de ese lado. Al ver que lo miraba, él asintió con la cabeza mientras
trotaba y murmuraba: "Mi lady".

Sonriendo débilmente, Edith se volvió para mirar a los otros hombres, notando que Alick
estaba al lado de Tormod, sonriéndole como si fuera una caminata en el parque. Corrió
de lado hacia la fortaleza, sosteniendo un escudo sobre sus cabezas justo como
Tormod y los demás estaban haciendo. Geordie, notó, estaba al otro lado de Niels con
otro escudo. Él también le sonrió tranquilizadoramente cuando la vio mirar. Y Cameron,
uno de los soldados de Drummond estaba a su lado, tratando de darle a ella lo que,
supuestamente, también era una sonrisa tranquilizadora. No podía ver a los dos
hombres detrás de ellos, pero sabía que estaban allí.

Edith miró a los hombres que podía ver de nuevo y pensó que era como una especie de
sueño extraño en el que había caído. Tal vez todavía estaban en la piedra en el prado y
se había quedado dormida.

Cuando llegaron a los escalones, Niels no se detuvo, sino que corrió rápidamente hacia
ellos, los hombres lograron mantener el ritmo a pesar de subir las escaleras de lado.
Edith esperaba que los dos primeros hombres tuvieran que bajar los escudos para abrir
las puertas, pero alguien debía estar observándolos, porque en el momento en que se
acercaron, las puertas se abrieron. Su grupo entró corriendo, los escudos no bajaron
hasta estar bien dentro del gran salón.

Niels depositó a Ronson y Edith, pero luego se volvió para mirarla, sus manos
recorrieron su cuerpo como si buscaran un escondido sgian-dubh cuando preguntó:
"¿Estás bien? ¿Estás herida en absoluto? ¿Hay algo roto o...?”

"Estoy bien", dijo Edith con vergüenza, cogiéndole las manos mientras comenzaba a
acariciarle la espalda y la parte superior de las piernas. "Verdaderamente. No fui herida.
Estoy un poco sedienta, e incluso tengo hambre, pero estoy completamente sana", le
aseguró.

Soltando un aliento reprimido, Niels asintió y luego la tomó del brazo para llevarla a la
mesa.

~ 114 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Iré a decirle al cocinero que traiga la comida del mediodía para usted, mi lady", dijo
Tormod, asintiendo con la cabeza a Rory cuando el hombre llegó de las cocinas y los
dos hombres se cruzaron.

"Traeré una jarra de hidromiel", dijo Geordie, dirigiéndose a las escaleras.

"Aquí, siéntate, muchacha", murmuró Niels, instándola a subir a la mesa alta. "Has
tenido un susto".

"¿Qué pasó?" Preguntó Rory, alcanzándolos entonces. "Algunos sirvientes llegaron


corriendo a la cocina diciendo que había gritos y gente corriendo en el patio. Qué…"

"¡Alguien le disparó una flecha a Edith, y me voy a casar con ella, maldición!", Espetó
Niels.

Todo el mundo guardó total silencio al respecto. Edith sospechó que probablemente era
porque estaban tratando de resolver la información que acababa de soltar en un
estallido furioso y decidir si estaba enojado solo por la flecha, o por la parte de que se
casaba también. Sin duda estaban perplejos en cuanto a si deberían ofrecer
felicitaciones o condolencias, pensó irónicamente.

"¿Mi lady?" Moibeal apareció a su lado, y sugirió tentativamente, "Tal vez deberíamos
subir las escaleras y limpiarse".

"Nay. Estoy bien. Me cambiaré después de comer ", murmuró Edith, frunciendo el ceño
hacia Laddie y apartando al perro cuando él comenzó a acariciar su regazo.

"¿Encontraron a alguien allí arriba?" La voz de Tormod atrajo la mirada de Edith cuando
reapareció de las cocinas y se dirigió a encontrarse con cuatro hombres de rostro
sombrío que ahora bajaban la escalera.

"Nay. Buscamos en todas las habitaciones. Además de la vieja Effie, las habitaciones
estaban todas vacías", dijo el primer hombre.

"Pero creemos que dispararon la flecha desde la habitación de Lady Edith", agregó el
segundo hombre. "Sus postigos son los únicos abiertos".

"Estaban cerrados cuando salí de la habitación esta mañana", dijo Edith cuando Niels la
miró. Dirigiéndose a Moibeal, preguntó: "¿Los abriste para ventilar la habitación?"

"Aye, mientras limpiaba", admitió, y luego agregó: "Pero los cerré cuando terminé. No
deberían estar abiertos ahora”.

"El bastardo te disparó desde tu propia habitación", gruñó Niels, dejándose caer en el
banco junto a ella, con el puño golpeando la mesa con frustración.

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"Bastardo", repitió Ronson, golpeando la mesa y cayendo al banco también.

Con los ojos cada vez más abiertos, Edith miró rápidamente hacia las sillas junto al
fuego, aliviada al ver que la vieja Bessie parecía estar dormida y que no había
presenciado el uso del lenguaje grosero de su nieto.

"Tendremos que colocar hombres en las ventanas durante el día para evitar que algo
como esto suceda en el futuro y… ¡Déjalo, Laddie!" Niels se interrumpió para golpear al
perro tratando desesperadamente de lamerle la mano. Cuando apartó al perro, Laddie
se dio por vencido y regresó a Edith.

"Mi lady, realmente creo que querría limpiarse antes de comer", sugirió Moibeal con un
tono ligeramente dolorido.

Edith la hizo callar, y de nuevo apartó a Laddie de su regazo mientras Tormod fruncía el
ceño y se volvía hacia Rory para preguntar: "¿Está seguro de que Effie no está
consciente?"

"Aye", le aseguró Rory. "La examino mañana y noche para estar seguro".

Tormod asintió como si entendiera a qué se refería Rory con examinar a la anciana,
pero Edith no entendía ella misma. Antes de que pudiera preguntar qué tipo de prueba
era, Niels maldijo, atrayendo su atención nuevamente mientras tomaba la cara de
Laddie con una mano y le decía al perro con firmeza, "Suficiente. No más lamer”.

El perro lo miró con los ojos muy abiertos y luego soltó su lengua, tratando de lamer la
mano que lo sostenía.

Una pequeña risa se escapó de Edith antes de que pudiera detenerla. Negando con la
cabeza, dijo: "No sé cuál es el problema con él. Primero me está lamiendo la cabeza,
luego la mano y sigue hurgando en mis faldas como si creyera que tengo un regalo
escondido en mi bolsillo para él”.

"Probablemente te huele sobre mí", dijo Niels con un suspiro cuando Geordie regresó
con una jarra de hidromiel en la mano.

Mirando esta con interés, Edith se encogió de hombros y dijo distraídamente, "bueno, te
tiraste sobre Ronson y yo allí afuera, pero él no está lamiendo..." Sus palabras murieron
abruptamente y su mirada y toda su atención se deslizaron hacia la mano de Niels
mientras recordaba exactamente donde había estado. Su mirada se posó en su regazo
mientras Laddie volvía a mirarla con curiosidad, y luego recordó a Niels empujándole
cabeza hacia abajo con su mano, y se levantó bruscamente. "Será mejor que me limpie
antes de comer".

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"Gracias al buen Dios por eso", murmuró Moibeal, pero Edith apenas oyó a la doncella,
su atención estaba en la sonrisa lenta y sexy que ahora reclamaba los labios de Niels y
ahuyentaba su ira. Tenía una sonrisa encantadora, pero Edith no estaba pensando en
eso tanto como en las cosas que le había hecho en el prado. Solo el recuerdo de sus
manos y boca en su cuerpo hizo que sus pezones se endurecieran y el calor húmedo
se acumulara entre sus piernas. Edith no quería nada más que arrastrar al hombre por
encima de las escaleras con ella, quitarse la ropa y...

"¿Viene mi lady?", Preguntó Moibeal cuando Edith se quedó allí mirando a Niels.
"Realmente necesita…"

Edith suspiró cuando las imaginaciones en su mente chocaron contra la realidad. No


podía arrastrar a Niels a ninguna parte, y desde luego no podía tratar de seducirlo para
que volviera a sentir placer con Moibeal, persiguiéndoles. Girando sobre sus talones, se
dirigió hacia las escaleras, murmurando, "Voy, Moibeal. Aunque no entiendo por qué
estás tan molesta. Es solo un poco de barro en mi falda”.

"Y en todo su rostro, y en su pelo", dijo Moibeal con cierta exasperación mientras se
ponía a su lado. "Y su pelo se está saliendo de todas partes. No sé cómo lo consiguió.
Parece como si estuviera parada en el medio de una tormenta confusa".

"Laddie me estaba lamiendo la cabeza cuando estábamos en el suelo en el patio",


explicó Edith, alcanzando su cabello para sentir alrededor, y luego suspirando al sentir
que Moibeal tenía razón. Querido Dios, su pelo estaba mojado y casi rígido por la
lamida de Laddie. También estaba parado en todas direcciones. ¿Cómo podía Niels
mirarla con esos ojos hambrientos cuando debe parecer una completa idiota?

"Así que."

Niels apartó la mirada de Edith que se retiraba y se volvió cautelosamente hacia su


hermano. "¿Qué?"

"¿Le preguntaste y ella dijo que sí?" Preguntó Rory con una sonrisa.

Niels sonrió y se relajó por primera vez desde que se soltó la flecha. Se volvió hacia la
mesa y asintió. "Aye."

"¿Aye qué?", Preguntó Geordie con confusión.

"Voy a secundar eso", dijo Tormod, colocándose del otro lado de Ronson. "¿Qué nos
perdimos?"

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"Mi hermano se casa con su Lady Edith", le dijo Alick al anciano con una sonrisa.

"Oh." Los ojos de Tormod se abrieron de par en par y luego sonrió y se acercó pasando
a Ronson para golpearlo en la espalda. "Bueno, digo, eso está bien, eso es".

"Aye, enhorabuena", dijo Geordie sonriendo ampliamente. "Esto llama a una


celebración. ¿Alguien quiere un trago?", Preguntó sosteniendo la jarra de hidromiel que
acababa de traer.

Niels asintió, pero se detuvo cuando Tormod se levantó con una mueca.

"Aye, tomaré un trago. Pero no de hidromiel”, dijo el hombre pesadamente. "Pediré a


una de las doncellas que nos traiga un poco de cerveza".

"Incluso mejor", decidió Niels.

Geordie dejó el hidromiel a un lado con un encogimiento de hombros. "Entonces


guardaremos el hidromiel para Edith".

Niels asintió distraídamente, pensando en el problema de mantener a Edith a salvo.


Hombres en las ventanas durante el día, guardias sobre ella en todo momento...
Tampoco le haría daño tenerla adentro, pensó.

"La cerveza saldrá pronto", anunció Tormod mientras reclamaba su asiento nuevamente
un momento después. Luego se volvió para mirar a Niels con aprobación. "Bien hecho",
dijo. "Es una buena mujer. Es un hombre afortunado. ¿Cuándo planea casarte con
ella?”

"¿Dónde está su sacerdote?" Niels pregunto en respuesta.

Tormod sonrió. "Así de pronto, ¿eh?"

"Más que pronto", dijo Niels con firmeza.

Tormod asintió y se levantó. "Voy a tener una pequeña charla con nuestro padre
Tavish, entonces. Si está de buen humor, pueden casarse para la cena."

"¿No deberíamos discutir qué hacer con este último atentado a la vida de Edith?"
Preguntó Rory frunciendo el ceño.

Tormod hizo una pausa y regresó con interés. "¿Tienes alguna idea sobre quién pudo
dispararle la flecha a nuestra señora o cómo atraparlo?"

"Bien..." Rory frunció el ceño, pero finalmente admitió, "Nay".

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Tormod asintió lentamente, pero su expresión era pensativa y no se apartó de
inmediato.

"¿Tienes alguna idea, Tormod?", Preguntó Niels, mirándolo con curiosidad.

"Es posible", dijo lentamente, y luego hizo una mueca y agregó: "De algún tipo".

"¿Y qué sería eso?" Preguntó Geordie de inmediato y luego dio unas palmaditas en el
banco de donde se había levantado. "Siéntate y cuéntanos. Creo que puedo hablar con
seguridad por todos cuando digo que estaríamos felices por cualquier idea".

"Aye", los otros murmuraron juntos.

Tormod vaciló, pero luego se sentó a la mesa y carraspeó, antes de decir: "Bueno, sé
que los tres planearon protegerla por turnos, pero se me ocurre que si conseguimos
que usted y la muchacha se casen, Niels, estará un poco más segura con usted
acomodado en su cama".

"Aye", estuvo de acuerdo con un asentimiento.

"Y luego podría enviar hombres a buscar a Brodie", agregó. "Puedo enviar una pareja a
la corte y otros para cada una de las fortalezas pertenecientes a sus amigos hasta que
lo encontremos y podamos transmitirle la noticia de que ya no hay miedo a la
enfermedad".

Rory negó con la cabeza. "Brodie no puede estar detrás de los envenenamientos y
ataques, Tormod. Ellos no están aquí”.

"Nay, lo sé, pero si regresa, podemos fingir que no estamos preocupados por él y solo
estamos cuidando a Edith. Pero lo vigilamos de todos modos, de manera furtiva, y
cuando el asesino intente matarlo, con suerte podemos atraparlo en el acto", señaló.

"¿Quieres usar a tu laird como cebo?" Preguntó Rory con incredulidad.

"Bueno, mejor él que Edith", dijo Tormod bruscamente. "Estuvo en la puerta de la


muerte durante tres semanas, y casi fue asesinada hoy. Él puede tomar un turno y
ayudar a resolver esto, el cobarde bastardo. Es su lugar como laird de todos modos”.

"Aye, así es", estuvo de acuerdo Niels solemnemente. No estaba demasiado


preocupado por Brodie. No le gustaba el hombre solo por principio, pero le gustaba
menos aún por dejar a Edith sola y enferma. Tampoco le gustó que el hombre
aparentemente pudiera haber intentado enviarla a la Abadía si él no planeaba casarse
con ella primero. Además, según su experiencia, los cobardes solían ser los últimos en
ser heridos en cualquier intento. El hombre sin duda sobreviviría si siguieran con su
plan. Lo que le interesó fue que Tormod estaba dispuesto a arriesgarlo de esa manera.

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Serie Novias Escocesas #5
Además, sospechaba que el hombre no se desgarraría si Brodie moría cuando
atraparan al asesino ‘en el acto’.

No estaba realmente sorprendido. Había escuchado al hombre decir más de una vez
que Edith sería mejor líder de clan y, por lo que a Niels se refería, tenía razón. Aun así,
se suponía que un laird podía depender de su primero para tener sus mejores intereses
en el corazón, y Tormod parecía más interesado en el bienestar de Edith que en su
laird.

"De todos modos, será mejor que vaya a hablar con el padre Tavish", murmuró Tormod,
poniéndose de pie.

"¿Le dirás a Brodie que era veneno, no una enfermedad y que el asesino no ha sido
capturado todavía?", Preguntó Niels antes de que pudiera escabullirse.

"Aye", dijo Tormod en un suspiro. "Tendría que poner eso en el mensaje que envíe. Es
mi lugar. También tendré que decirle que espero que regrese y ayude a encontrar al
culpable que mató a su padre, a sus hermanos y a su tío. Tormod se encogió de
hombros. Probablemente no regrese hasta que resolvamos este asunto, pero pensé
que no podría hacer daño".

Niels se relajó, aliviado al escuchar que Tormod estaba defendiendo su posición como
primero. De lo contrario, hubiera perdido el respeto y la confianza en el hombre.
Asintiendo con la cabeza, dijo: "Si nada más, al menos nos dirá a dónde se ha fugado".

"Aye", dijo Tormod secamente y se dirigió a las puertas del patio.

"Me alegra que hayas preguntado eso", dijo Geordie en voz baja. "Estaba empezando a
preocuparme de que estuviera dispuesto a sacrificar a su propio laird".

"Lo está", dijo Niels con diversión. "Pero no sin advertirle a Brodie lo que enfrenta, y
sospecho que lo protegería con su vida también. Sin embargo, no lo detiene de esperar
que pase algo que lo libere del hombre como laird”.

"No puedo culparlo, realmente", admitió Geordie. "Según todos los informes, Brodie
secará este lugar y dejará a su gente en la miseria".

"Aye", murmuró Niels, su mirada se deslizó hacia Ronson. El chico había estado
escuchando atentamente cada palabra que decía, vio con el ceño fruncido. El
muchacho era listo, y pensó ahora que tal vez debería hablar con Edith sobre llevar
consigo al niño y a su abuela cuando se fueran a Buchanan. No creía que a Aulay le
molestaría, y luego los llevarían a su propia casa cuando se construyera.

"Bueno", dijo Alick ahora. "Primero Saidh, y luego Dougall, y ahora tú". Sacudió la
cabeza. "A este ritmo, todos nos casaremos y criaremos bebés pronto".

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Geordie resopló ante la sugerencia. "Un infierno que lo haremos. Tengo mucho que vivir
antes de asentarme y hacer que una mujer empiece a parir", dijo con disgusto, y luego
agregó: "¿Y qué pobre mujer con problemas cerebrales es esa que crees que te querría
por marido?"

Niels sonrió levemente ante el insulto y luego miró a Rory cuando golpeó su brazo.

"¿Sabe Edith que la boda tendrá lugar hoy?", Preguntó su hermano.

Niels negó con la cabeza. "No hablamos sobre cuándo deberíamos casarnos".

"Bueno, entonces tal vez deberías ir a advertirla para que pueda prepararse", sugirió
Rory.

"¿Prepararse para qué?", Preguntó con el ceño fruncido. "Todo lo que tiene que hacer
es repetir las líneas que dice el sacerdote".

"Aye", estuvo de acuerdo Rory con paciencia. "Pero ella querrá lucir bien para la
ocasión".

"Ella siempre está bonita", dijo con el ceño fruncido. En realidad, siempre estaba
hermosa. Al menos para él. Encogiéndose de hombros, dijo: "Estará bien".

"Bien", dijo Rory con exasperación, poniéndose de pie. "Voy a advertirle yo mismo.
Necesito darle este caldo a Effie de todos modos. Probablemente este helado, pero no
es probable que lo note o le importe en su estado. ¿A dónde vas?", preguntó con
sorpresa.

"A decirle a Edith que nos vamos a casar hoy", gruñó Niels, dirigiéndose a las escaleras
y añadiendo en voz baja: "Maldito si te dejo hacerlo".

"Tal vez debería tomar un baño", dijo Edith, mirándose a sí misma con el ceño fruncido
ahora que se había quitado el vestido. Estaba sucia por rodar por el patio, sus manos y
brazos y la parte inferior de sus piernas estaba cubierta de barro. Si su cara estaba tan
mala, un baño definitivamente estaba en orden.

"Pedí uno pronto cuando vi el estado en el que estaba", le aseguró Moibeal, mirando las
manchas de barro en el vestido que Edith había estado usando.

"Oh". Edith le sonrió a la niña. "¿Qué haría sin ti, Moibeal?"

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"Caminar alrededor toda embarrada con el pelo en un lío, debería pensar", dijo Moibeal
cariñosamente.

"Sin duda," Edith estuvo de acuerdo con diversión, moviéndose hacia la pileta de agua
en la mesita de noche para lavar lo peor del barro en sus manos.

"Escuché a Lord Buchanan decir que iba a casarse con él", comentó Moibeal después
de un momento. "¿Es verdad?"

Edith se detuvo y le echó un vistazo ante la pregunta, algo en la voz de la doncella


llamando su atención. Pero no había nada en la expresión de la chica que explicara la
extraña sensación que tenía de repente.

"Aye", dijo finalmente y se volvió hacia el agua.

"¿Cuándo sucederá? ¿Antes o después de que Brodie regrese?”

Edith hizo una pausa en su fregado y frunció el ceño cuando admitió: "No lo sé. No
hablamos realmente de eso”.

Estaba segura de que deberían haber hablado de eso. Realmente necesitaban casarse
antes de que Brodie volviera o no lo permitiría, y por mucho que quisiera decirle a su
hermano que se metiera en sus propios asuntos, no podría. Él era ahora su Laird, sus
decisiones tan buenas como las leyes... si él estaba allí para hacerlas, agregó el
pensamiento con gravedad.

Nay, definitivamente tenían que casarse antes de que él regresara, decidió y giró para
apresurarse hacia la puerta. "Debo hablar con él sobre eso".

"¡Mi lady!" Graznó Moibeal. "No está vestida”.

"Oh", murmuró Edith con exasperación, y luego regresó a regañadientes a la cuenca de


agua. Hablar con Niels tendría que esperar hasta que estuviera limpia, vestida y
pareciendo menos un naufragio. Él podría tener dudas acerca de casarse con ella en su
estado actual.

"Si se casa pronto", dijo Moibeal después de un momento, "¿cree que iremos a
Buchanan de inmediato?"

Edith dejó de fregar su piel otra vez, frunciendo el ceño. "Yo... no, estoy segura de
que… No crees que quiera irse de inmediato, ¿verdad?”

"Si quiere mantenerla a salvo, aye", dijo Moibeal con firmeza. "Y usted debería querer
irse también. Casi fue muerta hoy, y ese asunto del envenenamiento..." Su mano se
deslizó hasta su garganta e hizo una mueca. "Solo tuve una pequeña dosis, y estuve
enferma solo un día o dos y me sentí miserable. Usted estuvo en agonía y viendo cosas

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y vomitando durante semanas. Es una maravilla que haya sobrevivido. Cuanto antes
salgamos de aquí, mejor".

Edith se volvió para mirar a la mujer más joven. Con voz suave, dijo: "No puedo
abandonar a Drummond y a toda su gente, Moibeal. Y no puedo dejar que Brodie
vuelva del todo sin conocer al asesino. Además, ¿quién puede decir que el asesino no
nos seguiría?”

"¿Qué?" Graznó la doncella, aparentemente sin haber considerado eso.

Edith se encogió de hombros, y señaló: "Bueno, si están decididos a matarme también,


probablemente no lo abandonen simplemente porque me mudo de casa. Al menos
aquí, esperamos eso y podemos protegernos. En Buchanan podríamos no verlo venir”.

La boca de Moibeal se tensó y luego murmuró: "Una gran cantidad de bien hizo el saber
al respecto hoy, cuando casi le dispararon con una flecha".

"Aye", admitió en un suspiro y se volvió hacia el agua. "Pero no esperábamos eso. Los
otros ataques fueron veneno, que es una manera furtiva y cobarde de matar”.

"Cawley fue apuñalado", señaló Moibeal.

Edith hizo una mueca. "Aye, pero sospecho que el asesino también se acercó
furtivamente a Cawley. Probablemente mientras estaba distraído, comiendo”.

"Cawley siempre estaba distraído, comiendo", dijo Moibeal con tristeza.

"Aye". Edith tragó saliva. Realmente había estado encariñada del viejo. Todos lo habían
estado realmente. Al menos pensaba que sí. La mayoría de las personas en Drummond
habían sido amables con él, encontrando siempre excusas para enviarlo a las cocinas,
su lugar favorito. A Jaimie no parecía importarle que él estuviera allí o lo hubieran
enviado a otro lado. Un buen cocinero era difícil de encontrar en Escocia, y Jaimie era
uno de los mejores. No se habrían arriesgado a perderlo, pero siempre le había
parecido cariñoso con Cawley, sonriendo a su parloteo mientras trabajaba.

"De todos modos", dijo Edith ahora. "Ya aprendimos mucho sobre el asesino".

"Oh, aye", Moibeal estuvo de acuerdo secamente, "a cuidarse de veneno,


apuñalamiento y flechas volando".

"Que son hábiles en los tres", corrigió Edith solemnemente.

Moibeal guardó silencio durante un minuto y luego preguntó: "¿Y cómo ayuda eso?"

"Me gustaría saber tus pensamientos sobre eso, yo mismo".

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Serie Novias Escocesas #5
Edith giró para ver a Niels de pie en la puerta abierta e instintivamente chilló e intentó
cubrirse. Solo para darse cuenta después de haberlo hecho, que fue una cosa
completamente estúpida de hacer. Estaba usando su camisa, y él ya había visto cada
parte de ella sin esta. Dios mío, había estado parada a escasos centímetros de él, con
nada más que su vestido retorcido alrededor de su cintura mientras él…

"¡Lord Buchanan!", Dijo Moibeal con exasperación, apresurándose para envolver el


vestido de Edith sobre sus hombros. Ella, por supuesto, no pensó que su modestia
fuera estúpida, ya que no tenía idea de lo que habían estado haciendo. Frunciendo el
ceño, la doncella se movió frente a Edith una vez que había agarrado los bordes del
vestido y le espetó, "No se puede solo entrar al dormitorio de una dama sin llamar".

"¿Incluso si va a ser mi esposa?", Preguntó, cerrando la puerta y cruzando sus brazos


sobre su pecho mientras se recostaba contra ella.

"Aún no están casados, mi Lord", señaló Moibeal con cierta aspereza.

"Entonces, estará bien en un par de horas, ¿pero no ahora?", Preguntó con diversión.

"Exactamente", dijo Moibeal, y luego parpadeó y preguntó: "¿Un par de horas?"

"¿Un par de horas?", Se hizo eco Edith, dando un paso alrededor de Moibeal para verlo
mejor.

"Aye". Él le dio una lenta sonrisa, sus ojos deslizándose sobre su cuerpo. "Tormod se
fue a hablar con el sacerdote. Dijo que nos casaremos para la cena."

Recordando que su cara estaba sucia y su cabello un desastre terrible, Edith se volvió
rápidamente y comenzó a salpicar agua sobre su cara y cabeza. Le hubiera gustado
meter la cabeza en el lavabo de agua, pero si bien era lo suficientemente ancho para el
esfuerzo, no era lo suficientemente profundo como para poder sumergir su cara más
allá de sus orejas.

"¿Vas a decirme cómo nos ayuda que sepamos que el asesino ha usado los tres
métodos para tratar de matar a los miembros de tu familia?", Preguntó Niels, quitándole
el pequeño trozo de lino que Edith acababa de recoger y comenzando a frotarle la cara
con este.

Por supuesto, ella saltó sorprendida ante sus palabras y su acción. Ni siquiera lo había
escuchado cruzar la habitación.

"¿Hmm?", Preguntó, mojando la tela en el lavabo y luego exprimiendo lo peor del agua
antes de comenzar a frotar el jabón en la ropa húmeda.

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Serie Novias Escocesas #5
"Oh, aye", murmuró Edith mientras comenzaba a lavarle la cara. Mientras ella había
fregado bruscamente, él era sorprendentemente amable, pero como la tela estaba
cubierta rápidamente de barro, supuso que debía estar funcionando.

"¿Edith?", Preguntó Niels y cuando se encontró con su mirada en cuestión, le recordó,


"¿Cómo nos ayuda que el asesino haya usado los tres métodos diferentes?"

"Oh", suspiró y luego explicó lo que estaba pensando. "Bueno, elimina mucha gente en
Drummond como culpable", señaló.

Niels sonrió lentamente y asintió, pero Moibeal inmediatamente preguntó: "¿Cómo?"

Edith miró a la chica y le preguntó: "¿Cuántos sirvientes conoces que saben de


hierbas? ¿O dónde apuñalar para golpear el corazón? ¿Y quién puede disparar flechas
lo suficientemente bien como para golpear a alguien por las puertas desde esta
ventana?

Moibeal se movió hacia la ventana para mirar y frunció los labios. Regresando, sin
embargo, dijo, "Se lo concederé, pocos serían lo suficientemente hábiles como para
hacer un tiro así. Pero hay muchos que saben lo suficiente sobre las malas hierbas para
envenenar a alguien. Y todos saben que el corazón está en el centro del pecho".

"En realidad, está a la izquierda del centro", corrigió Edith. "Comienza en mitad el
pecho, pero luego va a la izquierda, con solo un poco a la derecha del centro".

"Oh", dijo Moibeal con el ceño fruncido. "Aun así, es posible que tengan suerte al
golpear el corazón".

"Nay", dijo Niels, su voz ligeramente distraída mientras trabajaba en limpiar la cara de
Edith. "Las costillas están en el camino. Debes golpear justo en el ángulo correcto para
evitar que detengan la cuchilla. O deslizarla por debajo de las costillas, como sucedió
con Cawley", añadió sombrío. "Y el culpable sabia lo suficiente como para dejar la hoja
adentro".

"¿Qué diferencia hace eso?", Preguntó Moibeal con curiosidad.

"El corazón continúa latiendo al menos un poco después de haber sido apuñalado",
explicó Edith. "Y al hacerlo, se hiere más con la cuchilla y no hay manera de salvarlos".

"Oh", dijo Moibeal débilmente.

"Sabes mucho sobre esas cosas, muchacha", comentó Niels, mojando la ropa en el
lavabo para enjuagarlo antes de regresar a su trabajo.

"Mi madre era una sanadora", dijo Edith en voz baja. "Cuidaba a la gente aquí todo lo
posible y me enseñó lo que sabía antes de morir".

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"¿Y ahora sanas a los que puedes?", Preguntó Niels.

"Aye", murmuró Edith, y luego hizo una mueca y agregó: "Al menos con partos, lesiones
o heridas. Se acerca de hierbas de curación, pero sé poco o nada sobre el uso de
hierbas venenosas, de lo contrario habría reconocido que todos estábamos
envenenados y no enfermos”.

Niels asintió y luego colocó la tela en la mesa junto al lavabo antes de ahuecar su rostro
y mirarla solemnemente a los ojos. "¿Estás bien en casarte conmigo tan rápido?"

"Aye", dijo Edith tímidamente, y luego preguntó con preocupación: "¿Y tú?"

"Oh, aye, mi lady. Estoy deseando que llegue", le aseguró Niels en una voz que le dijo
exactamente lo que estaba esperando.

Ruborizada, Edith intentó agachar la cabeza, pero él le sostuvo la cara en su lugar y se


inclinó para besarla. Estaba segura de que quería que fuera una unión rápida y dulce
de labios, pero en el momento en que su boca rozó la de ella, Edith se abrió hacia él y
no pudo resistir la profundización del beso. Suspirando, Edith inmediatamente liberó su
agarre del vestido envuelto alrededor de sus hombros como un chal y deslizó sus
brazos alrededor de su cuello. Ella se puso de puntillas mientras lo hacía, su cuerpo
presionando ansiosamente contra el suyo.

Niels respondió dejando que sus manos cayeran para abrazar su trasero y levantándola
levemente mientras deslizaba una pierna entre las suyas, para que ella montara su
muslo mientras la dejaba caer un poco y luego la levantaba de nuevo. Le trajo un
gemido de hambre y un fuerte "¡Ahem!" De Moibeal.

Edith no se sorprendió en absoluto cuando Niels rompió su beso con un pequeño


suspiro y la alejó de él.

Sonriendo torcidamente, prometió: "Esta noche".

"Aye", respiró Edith y luego lo vio salir de la habitación.

"¡Dios!" Respiró Moibeal, abanicándose mientras cerraba la puerta detrás de él. "¡Que
hombre, mi Lady!"

"Aye", suspiró Edith, hundiéndose para sentarse en el borde de la cama.

"Lo que no daría por estar en sus pantuflas esta noche", dijo Moibeal, sacudiendo la
cabeza mientras cruzaba de vuelta para recoger el vestido desechado del suelo.
Enderezándose, le aseguró: "Ese hombre le mostrará placer como nunca lo ha
conocido".

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye", estuvo de acuerdo Edith, y pensó para sí misma que ya lo había hecho. Niels ya
la había complacido dos veces ese día, mientras que ella no había hecho nada a
cambio. Lo había intentado, pero no sabía lo que estaba haciendo...

"¿Moibeal?", Dijo, mirando a la chica con determinación.

"¿Aye, mi lady?", Preguntó la doncella, distraída mientras comenzaba a cepillar el barro


seco de su vestido, tratando de quitar lo peor antes de lavarlo realmente.

"Debes decirme todo lo que sabes sobre agradar a un hombre", dijo Edith con firmeza.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 9

"¿Qué?" Preguntó Moibeal débilmente.

"Debes decirme todo lo que sabes sobre agradar a un hombre", repitió Edith con
firmeza, bastante segura de que la chica sería tímida ante tal conversación.

"¿Yo?" Preguntó la sirvienta con consternación.

"Bueno, eres más experimentada que yo, Moibeal. Sé que Kenny y tú son... eh...
amistosos”, dijo ella sin convicción.

"Aye, pero..." La doncella vaciló, y luego asintió con un suspiro y se acercó para
sentarse a su lado. "Bien entonces, le diré lo que sé. Lo cual no es mucho”, advirtió.

"Todavía es más de lo que yo sé", señaló Edith.

Moibeal hizo un gesto de asentimiento con la cabeza y luego pareció pensativa.


"Bueno", dijo finalmente, "a los hombres parece gustarles de pie".

"¿Lo hacen?" Preguntó Edith con sorpresa. Nadie le había mencionado eso a ella.
Había asumido que, ya que se llamaba encamarse7 se hacía en la cama. Acostado.

"Todos parecen hacerlo de pie", señaló Moibeal. "Kenny siempre me está presionando
contra una pared o un árbol, incluso una cerca una vez".

"Hmm", murmuró Edith y supuso que podría ser cierto. Después de todo, los animales
lo hacían de pie, bueno a cuatro patas, pero aún de pie. Y los sirvientes, siervos y
soldados que ella había atrapado en el acto en ocasiones parecían estar contra una
pared o cosas así. Y luego estaba Niels. En el prado cuando la había estado
acariciando allí abajo, la quería de pie. Solo la había arrodillado porque las piernas le
temblaban tanto y obviamente estaba a punto de colapsar.

Ese pensamiento la hizo fruncir el ceño mientras se preguntaba ahora si le había


decepcionado que no hubiera podido permanecer de pie.

"Parecen preferir que este oscuro también", añadió Moibeal después de un momento,
obviamente luchando por ayudarla.

"¿Oscuro?" Edith se enderezó dónde estaba sentada.


7
Bedding: acostarse juntos, para descansar o tener relaciones sexuales. No hay palabra como tal para traducirla. Se
deja encamarse por el juego de palabras.

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye, bueno, cuando es hecho, parece que siempre es en un rincón oscuro, así que
supongo que lo prefieren de esa manera", señaló.

"Oh, aye". Edith asintió e incluso lo entendió. La hombría de Niels había sido un poco
intimidante cuando la había visto... y un poco extraño al mismo tiempo, realmente.
Supuso que era mejor no tener que verlo. Aunque, a él no parecía importarle mirarla
desnuda, recordó. Pero tal vez solo estaba siendo educado e intentaba no herir sus
sentimientos, pensó Edith y luego miró a Moibeal con expectación. Cuando la doncella
se limitó a mirarla sin expresión, preguntó: "¿Qué hay de besarlo y eso allá abajo?"

"¿En su trasero?" Preguntó Moibeal con sorpresa.

"No, abajo al frente", dijo Edith, sonrojándose.

"Oh. ¡Oh! Quieres decir..." Levantó las cejas hacia arriba y hacia abajo "…Ahí”.

Edith vaciló. "No estoy segura. Por allí quieres decir... ¿ahí?"

"Me refiero a su violín", dijo Moibeal con exasperación.

"Aye", aceptó Edith, iluminándose. Debería haber pensado en llamarlo así ella misma.
Había escuchado a sus hermanos referirse a eso como tal. Diciendo cosas como, ‘el
bastardo con cerebro de zoquete solo se quedó allí con su violín en la mano y nada que
decir’, y cosas así.

"Bueno", dijo Moibeal y Edith volvió su atención a la doncella para ver que estaba
frunciendo el ceño. Con expresión de disculpa, la chica admitió: "Nunca he hecho eso
yo misma".

"Oh", dijo Edith con decepción y admitió: "Me lo hizo y pensé en complacerlo de la
misma manera, pero no estaba segura de cómo".

"¿Lo hizo?" Moibeal preguntó sin aliento y luego preguntó: "¿Cuándo? ¿Dónde?"

"En la pradera, hoy", admitió Edith, sonrojándose brillantemente, y luego le aseguró:


"Sin embargo, no tomó mi inocencia".

Moibeal resopló. "Bueno, eso es discutible".

"Nay. Él dijo eso. Dijo que mi virginidad no había sido dañada”, le aseguró Edith con
firmeza.

"Hmm." Moibeal se mordió el labio y luego preguntó: "¿Cómo fue?"

Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios cuando recordó la experiencia y luego
Edith respiró, "Fue divino. Una revelación No sabía que existiera tal placer”.

~ 129 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Dios", respiró Moibeal.

"Aye", dijo Edith en un suspiro. "Y es por eso que esperaba complacerlo de la misma
manera, pero no sé cómo".

La doncella miró hacia abajo con el ceño fruncido, y luego suspiró y dijo: "Bueno,
aunque no lo he hecho yo misma, Magda y Agnes estaban hablando de eso un día".

"¿Aye?", Preguntó Edith esperanzada, reconociendo los nombres de un par de


sirvientas que trabajaban en las cocinas.

"Aye. Agnes se quejaba con Magda de que su Donald era demasiado grande y que no
podía meterlo todo en su boca sin tener arcadas, pero siempre estaba presionando
profundamente cuando se emocionaba", explicó Moibeal.

Los ojos de Edith se abrieron con incredulidad ante la idea de poner la virilidad de Niels
en su boca. El hombre era enorme. Seguramente también se atragantaría. Pensaba
que solo se esperaría que lo besara y lamiera allí como él había hecho. Aunque parecía
que había más que eso.

"Por lo tanto, Magda dijo que Agnes debía rodearlo con la mano en frente de su boca
para que él no pueda ir tan lejos, pero todavía sentir como lo hace”.

"Mano en frente de su boca," murmuró Edith, tratando de imaginarlo.

"Aye, así". Moibeal se levantó de un salto, agarró el cepillo del lado del lavabo, lo rodeó
con la mano justo por encima de las cerdas y se colocó el mango descubierto en su
boca y luego lo movió hacia adentro y afuera.

"Está bien". Edith asintió, podía hacerlo.

Volviendo a dejar el cepillo sobre la mesa junto al lavabo, Moibeal se dejó caer en la
cama de nuevo y añadió: "Y entonces Agnes dijo cómo lo probaba, pero que a ella no le
gustaba hacerlo de todos modos, ya que la semilla de Donald sabía amarga,
especialmente cuando bebía demasiado".

Edith abrió mucho los ojos. ¿Tendría su semilla en la boca? Eso no era algo que
hubiera esperado. ¿Y si la semilla de Niels también era amarga? No querría ofenderlo
escupiéndolo. Ese pensamiento la hizo preocuparse por cómo le había sabido a Niels.
¿Ella también había sido amarga? Preocupada ahora, preguntó: "¿Magda tiene algún
consejo sobre eso?"

"Aye". Moibeal asintió. "Magda dijo como una porción de conserva de fruta de Jaimie
solucionaría eso".

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Serie Novias Escocesas #5
"Ya veo", respiró Edith, preguntándose si también funcionaría para el gusto de la
mujer... por si acaso.

"Y eso es todo lo que sé sobre ese tema", dijo Moibeal en tono de disculpa.

"Está bien". Edith le dio unas palmaditas en la mano. "Es más de lo que sabía antes".

Ambas miraron hacia la puerta cuando sonó un golpe.

"Ese será su baño", dijo Moibeal, poniéndose de pie.

"Aye". Edith también se puso de pie, pero tomó el brazo de la criada antes de que
pudiera ir a responder y dijo: "No lo hagas ahora, pero antes de acostarnos, tal vez
deberías traer algunas de las conservas de Jaimie para mí".

"Aye". Moibeal asintió solemnemente. "No me olvidaré".

"Gracias," murmuró Edith y la soltó para que la chica pudiera abrir la puerta.

"¿Te gustaría algo más para beber, muchacha?", Le preguntó Niels suavemente a
Edith, notando que apenas había tocado su hidromiel y que simplemente estaba
sentada allí, perdida en sus pensamientos. Y también pensamientos inquietos, parecía,
si uno adivinara por su expresión mientras miraba el gran salón lleno de personas que
celebraban su boda.

"Nay. Gracias”. Edith sonrió y luego dijo: "En realidad, milord, creo que me gustaría ir a
prepararme para la cama".

"Como desees", dijo Niels y se levantó de inmediato, más que feliz de retirarse,
temprano como era.

"Nay". Ella le dio unas palmaditas en la mano, su sonrisa un poco forzada. "Termina tu
cerveza, mi lord. Podría tener un momento a solas para prepararme de todos modos".

Niels vaciló, queriendo asegurarle que no era necesaria ninguna preparación, pero era
su noche de bodas y si ella deseaba un momento a solas, se lo concedería, decidió, y
asintió. "Adelante, entonces. No voy a tardar mucho... esposa", dijo al final con una
sonrisa.

Edith le devolvió la sonrisa y le apretó el brazo, y luego murmuró: "Gracias... esposo."

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Se sonrieron el uno al otro brevemente, y luego ella le apretó el brazo otra vez y se giró
hacia la escalera mientras Niels se sentaba lentamente en su asiento. La observó hasta
que desapareció por el rellano superior. Luego le dio un codazo a Rory para llamar su
atención.

Rompiendo su conversación con Tormod, el hombre más joven se volvió hacia él en


cuestión. "¿Qué?"

"¿Estaba Edith pálida para ti?", Preguntó Niels frunciendo el ceño. "Parecía callada y un
poco pálida para mí". Cuando Rory levantó una ceja y miró a su alrededor en busca de
la mujer en cuestión, agregó: "Ella se ha ido arriba para prepararse para la cama".

"Oh". Rory miró hacia las escaleras, pero dijo: "No me di cuenta de que estaba pálida.
Sin embargo, parecía un poco callada”, admitió y luego se encogió de hombros. "Pero
es el día de su boda. Ella está más como nerviosa por esta noche... a menos que ya…"

"Nay", Niels lo interrumpió con firmeza. "No me he acostado con ella. Deseé esperar
hasta tenerla casada todo bien y apropiado".

"Bueno, entonces ahí lo tienes", dijo Rory tranquilizadoramente. "Sin duda simplemente
está nerviosa de lo que está por venir esta noche. Ella está bien."

"Aye", murmuró Niels y Rory se volvió hacia Tormod, dejando a Niels con un gran
malestar. Supuso que solo podían ser los nervios lo que Edith estaba sufriendo, pero
estuvo bien durante la ceremonia. No fue hasta que se sentaron a comer que pareció
quedarse callada y pálida. Por otro lado, más bien había esperado que lo que habían
hecho en el prado pudiera haber aliviado su ansiedad por la cama. Aunque, como él
mismo le había dicho, esta mañana no había tomado su virginidad, así que todavía
tenía que lidiar con eso y sabía que podría doler mucho para algunas mujeres. Ella
probablemente también lo sabía, supuso. Niels tomó otro trago de cerveza, y luego miró
el líquido en su copa, midiendo cuántos tragos más tendría que tomar antes de poder
subir las escaleras. Según su suposición, le quedaban seis o siete tragos. No es tanto,
se aseguró a sí mismo, dejando la copa brevemente.

"¡Ey!", Dijo Alick, golpeando su espalda mientras se sentaba en el banco junto a él.
"¿Cuándo vamos a llevarte a la alcoba, desnudarte y tirarte en la cama con Edith?”

"No harán eso", le aseguró Niels con firmeza.

"Oh, vamos, hermano", regañó Geordie, sentándose junto a Alick. "Una boda no es una
boda sin una ceremonia de cama".

"Tal vez, pero por respeto a su padre y hermanos que no llevan muertos un mes
completo, Edith y yo decidimos pasar por alto la ceremonia de la cama", anunció Niels,
mintiendo entre dientes. No había hablado con Edith sobre la ceremonia de la cama. Ni

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siquiera lo había pensado hasta que Alick lo había sacado a colación, pero al recordar
la cara pálida y tranquila de Edith, no tenía intención de hacerle pasar eso.

"Oh, aye", dijo Alick ahora, sonando mucho más moderado. "En verdad, me olvidé de
eso".

"Es fácil olvidarlo", dijo Geordie en voz baja. "Aparte de la forma en que se vino abajo
cuando murió Cawley, Edith ha manejado todo como un soldado".

"Ella no ha tenido la oportunidad de llorar", dijo Rory, volviéndose para unirse a la


conversación ahora. "Murieron y Edith inmediatamente estaba terriblemente enferma, y
luego se recuperó solo para tener que cuidar a su criada, y luego se enfermó y se
recuperó nuevamente para descubrir que su familia había sido asesinada. En verdad, la
muchacha ha tenido pocas oportunidades de lidiar con los trastornos de su vida en los
últimos tiempos”. Mirando a Niels serio, dijo: “Ella tendrá que hacer eso pronto, Niels.
De lo contrario, todo la golpeará de inmediato y puede aplastarla”.

"Aye", murmuró Niels, frunciendo el ceño. No podía imaginar nada aplastando a Edith.
Su fortaleza para lidiar con todo era una de las cosas que más admiraba de ella.

"Bueno, si no vamos a tener una ceremonia de cama, ¿por qué sigues aquí?", Preguntó
Geordie, cambiando de tema.

"Porque Edith pidió un momento para prepararse antes de ir a la cama", admitió Niels, y
luego agregó: "Desafortunadamente, no estoy seguro de cuánto tiempo durará eso".

"Bueno, como su doncella está bajando las escaleras, sospecho que eso es lo que
durará", murmuró Rory, mirando más allá de Niels hacia las escaleras.

Girando bruscamente, vio a Moibeal a mitad de camino por las escaleras y se levantó
de inmediato. En el momento en que lo hizo, la doncella lo miró, sonrió y asintió
levemente. Tomando eso como una indicación de que Edith estaba lista para él, Niels
tomó su cerveza, tragó lo última de esta y golpeó la copa sobre la mesa.

"Buen sueño", murmuró a todos en general y luego se dirigió a las escaleras. Él quería
correr, pero no lo hizo. Se obligó a moverse a un ritmo tranquilo que contrastaba con los
rápidos latidos de su corazón cuando finalmente se permitió pensar en todas las cosas
que planeaba hacerle a Edith esta noche. Niels se había negado a permitirse ese lujo
toda la tarde y la noche a través de la charla con el sacerdote, la ceremonia y la
comida. Sobre todo porque temía que si pensaba demasiado en ello, habría arrastrado
a Edith directamente desde la ceremonia a su dormitorio, y quería que disfrutara la
celebración de su matrimonio.

Ahora, sin embargo, ese peligro había pasado y se permitió contemplar todas las cosas
que podía hacerle en un esfuerzo por seleccionar las que haría esa noche. Quería

~ 133 ~
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Serie Novias Escocesas #5
saborearla de nuevo, la muchacha había sido dulce como la miel en su lengua y lo
quería de nuevo. Le daría placer de esa forma, decidió, y luego la acariciaría por placer
una segunda vez para asegurarse de que ella estaba bien y lista para cuando la
penetrara. Con suerte, eso podría minimizar el dolor de alguna manera. Tendría que
tener cuidado con ella, por supuesto, esta era su primera vez. La tomaría en la cama de
la manera tradicional primero, y luego, si no le dolía tanto como esperaba, y si no
derramaba su semilla de inmediato como temía que lo haría cuando su dulce calor se
cerrara sobre él, probaría diferentes posiciones para encontrar la que más les gustara a
los dos.

Por alguna razón, a Niels le gustaba la idea de tenerla delante de él, sus manos
apretando sus pechos mientras se deslizaba dentro y fuera de ella. Esa imagen lo puso
tan duro como una piedra que su plaid de repente tuvo un notable bulto. Ignorando
eso, pensó que dejaría que Edith intentara cabalgar en él también, para ver si le
gustaba... Quizás en la cama, o incluso en una de las sillas de la habitación... o ambas.
Entonces, si todavía no era de mañana, él podría llevarla al pelaje frente al fuego, las
llamas los calentarían y arrojarían sombras en la habitación mientras él exploraba su
cuerpo y luego la reclamaba nuevamente, esta vez con los pies en sus hombros para
poder hundirse profundamente dentro de ella mientras acariciaba el nudo en su dulce
centro hasta que le suplicara su liberación.

Niels había llegado a la puerta del dormitorio que ahora compartirían y levantó una
mano para golpear, pero luego la bajó y simplemente tomó la manija. Ella lo estaba
esperando después de todo.

Al abrir la puerta, dio un paso hacia la habitación y luego se detuvo al ver que estaba
casi completamente oscura con nada más que las brasas moribundas en la chimenea.

"¿Edith?" Dijo con incertidumbre.

"Por aquí, mi señor esposo".

Girando en la dirección de su voz, entrecerró los ojos y pudo distinguir su figura en la


oscuridad. Después de una breve vacilación, él cerró la puerta y luego comenzó a
moverse cautelosamente hacia ella. "¿Por qué está tan oscuro aquí, muchacha?"

"¿No te gusta?", Preguntó sonando ansiosa. "Moibeal dijo que los hombres parecían
preferir realizar la consumación en la oscuridad".

Niels parpadeó ante el uso del término formal para acostarsen, pero preguntó con
confusión: "¿Moibeal?"

"mi doncella", explicó. "Quería darte placer esta noche, como me hiciste en el prado, así
que le pedí su consejo. Ella tiene más experiencia en estas cosas que yo", explicó casi
disculpándose.

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Serie Novias Escocesas #5
"Ah", murmuró Niels, moviéndose hacia la derecha mientras su cadera chocaba con lo
que pensaba que era una de las sillas en la habitación. Tocado porque quería
complacerlo, pero un poco preocupado por el consejo que le dieron, preguntó: "¿Y qué
más dijo ella?"

"Que los hombres prefieran realizarlo de pie", admitió. "Pensé que este era un buen
lugar. De esa manera si mis rodillas se vuelven débiles de nuevo como lo hicieron en el
prado, puedo apoyarme contra la pared y apoyarme en esta mesa para que no te
decepciones”.

Niels dejó de caminar y frunció el ceño ante sus palabras. Ella de ninguna manera lo
había decepcionado ese día y no le gustó que pensara que podría haberlo hecho.
Tampoco le gustó no poder verla mientras hablaban.

"No me decepcionaste en el prado", dijo con firmeza, cambiando de dirección y


avanzando hacia el resplandor del fuego moribundo. "Y no prefiero amarte en la
oscuridad, sino poder ver tu cara mientras te complazco".

Cayendo sobre sus ancas junto al fuego, agarró varios pedazos de madera y comenzó
a avivar el fuego. Afortunadamente, las brasas estaban lo suficientemente calientes
como para que pronto volviera a cobrar vida. Enderezándose entonces, agarró las velas
de las pequeñas repisas empotradas en la pared a cada lado de la chimenea y las
encendió en las llamas. Poniéndolas de nuevo en sus respectivas repisas, finalmente
se volvió para encontrar a Edith y casi se tragó la lengua. La mujer hacia una gran vista
al lado de la pequeña mesa que había mencionado, completamente desnuda, excepto
por las sombras proyectadas por las llamas danzantes.

Sonrojándose ahora que él la estaba mirando a la luz, Edith trató de cubrir sus pechos y
la mata de pelo entre sus piernas con sus manos.

Ya duro con su imaginación en el camino hasta aquí, Niels se endureció aún más al
verla y fue difícil no cruzar la habitación, levantar su tartán y tomarla allí contra la pared
como aparentemente había esperado. Obligándose a permanecer quieto, se aclaró la
garganta y dijo: "Y la razón por la cual la mayoría de los hombres toman a sus mujeres
de pie en rincones oscuros es porque es la única privacidad que pueden encontrar al no
tener un dormitorio”.

"Oh", dijo Edith, parpadeando y luego preguntó con incertidumbre: "¿Prefieres la cama
entonces?"

"Aye", gruñó.

Asintiendo con la cabeza, se dio vuelta y se apresuró a la cama, pero se detuvo


bruscamente antes de subir a ella y se giró para llamarlo.

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Serie Novias Escocesas #5
Niels vaciló un momento, pero luego se acercó para unirse a ella. En el momento en
que pudo alcanzarlo, Edith lo agarró del brazo y lo instó a que diera la espalda a la
cama, luego comenzó a trabajar rápidamente en el alfiler que mantenía su tartán en su
lugar.

"Muchacha", dijo cogiéndole las manos. "¿Qué estás haciendo?"

"Quiero complacerte," dijo tímidamente, sacudiendo sus manos y devolviendo sus


esfuerzos a su alfiler.

Niels frunció el ceño y casi le dijo que no era necesario, pero ella logró deshacer el
alfiler en ese momento y su tartán se deslizó de inmediato para caer al suelo. Cuando
Edith luego atrapó la parte inferior de su camisa y comenzó a tirar de ella, Niels ayudó a
levantarla e incluso la arrojó a un lado. Comenzó a alcanzarla entonces, pero se quedó
sin aliento y extendió la mano detrás de él cuando ella de repente lo empujó en el
pecho y se sentó en la cama.

"Ahí", dijo con satisfacción. "Ahora puedo darte placer como me hiciste a mí".

Los ojos de Niels se abrieron de par en par cuando Edith le separó las piernas y se
arrodilló entre sus pies todavía con botas, pero luego se levantó rápidamente y se alejó
corriendo, murmurando: "Casi lo olvido".

Sus ojos la siguieron con curiosidad, pero luego se posaron en su trasero y se vieron
atrapados allí mientras observaba cómo los globos redondos se movían mientras
caminaba. Su mirada no se alzó cuando se detuvo brevemente en la mesa junto al
fuego y luego se giró de regreso. En cambio, se concentró en el lugar entre sus piernas
que estaba ansioso por explorar y se quedó allí, hasta que de repente se detuvo frente
a él y cayó de rodillas de nuevo. Sus pechos estaban inmediatamente en su línea de
visión y suspiró mientras trataba de decidir qué quería tocar, acariciar, lamer y probar
primero. ¿Debería succionarle primero los pechos o tirarla en la cama y zambullirse
entre sus piernas donde esperaba su dulzura? ¿O tal vez debería simplemente lamerla
y...?

Sus pensamientos murieron en un grito ahogado y su mirada se dirigió a sí mismo


cuando Edith de repente tomó su polla en la mano. No era una tentativa de caricia o
tacto, era un agarre firme y sensato y tiraba de su erección hacia abajo para que
apuntara directamente entre sus pechos. Aún más sorprendente, sin embargo, fue el
hecho de que justo mientras miraba hacia abajo ella comenzó a verter lo que parecía
una especie de fruta cocida en salsa en su miembro.

"Eh... ¿Edith?" Dijo con incertidumbre. "¿Qué estás haciendo?"

"A Agnes no le gusta complacer a Donald con la boca porque dice que su semilla es
amarga", dijo.

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Serie Novias Escocesas #5
"Ah..." La cara de Niels se arrugó mientras intentaba entender qué tenía que ver eso
con lo que estaba haciendo.

Y luego continuó: "Pero Magda dijo que una cucharada de conservas de Jaimie se
llevaría el sabor, así que pensé en probarlo. No es que piense que podrías saber
amargo” añadió con seriedad, alzando su rostro pálido para mirarlo. "Pero solo por si
acaso. ¿Entiendes?"

Bajando la cabeza, agregó: "No podía preguntarte si tengo un sabor amargo porque no
estabas aquí, así que también me puse un poco en caso de que te supiera algo amarga
antes".

Niels simplemente se quedó mirando la parte superior de su cabeza con una confusión
de respuestas rodando por su cabeza. En primer lugar, sospechaba que Magda, quien
quiera que fuese, había querido decir que Agnes, quienquiera que fuese, debería
comerse una cucharada de conserva para deshacerse del sabor. Dudaba mucho de
que hubiera un tipo llamado Donald caminando sobre Drummond con conserva en su
violín. En segundo lugar, estaba teniendo problemas para evitar la idea de que Edith
estaba arrodillada delante de él con conserva untada en todo su coño. Definitivamente
tendría que lamer hasta la última gota de eso antes de hacer cualquier otra cosa que
quisiera hacer, así que fue bueno que él decidiera comenzar dándole placer con la boca
y la lengua primero, decidió Niels.

Sobre todo, sin embargo, estaba la imagen en su mente del rostro de Edith cuando lo
había levantado y lo había visto a la luz del fuego. Si bien la había creído pálida
bajando las escaleras, ahora estaba completamente muerta y él había percibido un
destello de incomodidad en su rostro antes de que ella se agachara para continuar
arrojando fruta cocida sobre su pene.

La preocupación luchó brevemente con el deseo tomar ventaja, pero ganó fácilmente y
Niels se inclinó hacia adelante con la intención de atrapar su barbilla, levantarla y
preguntarle si se sentía bien. Pero antes de que sus dedos pudieran alcanzarla, ella
terminó de revestir su violín con fruta y se metió la punta en la boca para comenzar a
lamer y chupar el dulce.

Niels se congeló, su boca se abrió y cerró y su cuerpo casi se levantó de la cama


cuando fue golpeado por sensación tras sensación. ¡Por el pene verrugoso de Satanás!
La mujer estaba... ¡Los dientes de Dios! ¿Ella hizo…? Por la Virgen, ella…

Cerrando los ojos brevemente, trató de recuperar el control de sí mismo, pero


simplemente no pudo y abrió los ojos casi de inmediato. Obviamente, Edith no tenía ni
una pizca de habilidad en lo que estaba intentando, pero era tan entusiasmada como el
infierno, ya que conscientemente le quitó hasta la última gota de conserva que acababa
de aplicar. Y maldita sea si tan solo verla arrodillada allí con su polla en su boca no
estaba cerca de matarlo de emoción.
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Serie Novias Escocesas #5
Niels apenas había pensado en su falta de habilidad cuando Edith dejó de quitar la
conserva que le había puesto y comenzó a mover su boca hacia arriba y abajo de su
longitud de una manera rítmica con su mano al frente. Era un ritmo que reconoció, tres
golpes y una leve pausa y luego tres más repetidos una y otra vez. Niels lo reconoció
porque era la forma en que se tocaba su pene como regla, y cómo lo había tocado esa
mañana en el prado, cuando le había dado placer la segunda vez. Había notado que lo
miraba una o dos veces, pero al parecer, la astuta descarada había estado prestando
más atención de lo que se había dado cuenta.

Y a menos que Moibeal le hubiera aconsejado sobre la mecánica del agarre y otras
cosas, Edith parecía ser natural, notó mientras un gemido se deslizaba de sus labios.
Ella lo sostenía firmemente con ambos labios y mano, pero no demasiado fuerte.
También tuvo cuidado de evitar rozarlo con sus dientes, lo cual le agradecería a Dios
más tarde, decidió Niels mientras se acercaba al punto de explotar y su cuerpo
comenzó a tensarse y contraerse.

Niels estaba a punto de advertirle que estaba a punto de derramar su semilla para
poder quitarse de la boca si así lo deseaba, cuando Edith se congeló de repente.
Parpadeando abrió los ojos, él la miró justo a tiempo para ver la confusión y el pánico
en su rostro cuando comenzó a tener arcadas y luego vomitar conserva sobre toda su
polla.

Con la mandíbula cayendo, Niels la miró boquiabierto, y luego se inclinó hacia adelante
con preocupación cuando de repente se desplomó y se calló en el piso convulsionando,
jadeando y sacando el resto de lo que había comido ese día.

"¡Edith!", Exclamó Niels, lanzándose de la cama para arrodillarse a su lado. Agarrándola


por los hombros, la sostuvo hasta que terminó de purgar y luego la hizo rodar sobre su
espalda. Mirando su rostro pálido e inconsciente con preocupación y confusión, él
apartó su cabello de sus mejillas, y luego hizo lo que había visto a Rory varias veces y
le levantó los párpados. Su cabeza se sacudió de inmediato como por un golpe cuando
Niels notó que sus ojos estaban dilatados. Era como habían estado cuando llegaron a
Drummond por primera vez, y Rory pareció ver eso como una indicación de que había
sido envenenada. Recordando eso, Niels sintió que su corazón se alojaba en algún
lugar de su garganta.

Levantándola del suelo, la llevó en brazos para acostarla en la cama, y luego se dio
vuelta y corrió hacia la puerta, sus botas golpeaban con tanta fuerza como los
pensamientos en su cabeza en ese momento. Abriendo la puerta, Niels salió corriendo
y subió por el pasillo hasta la parte superior de la escalera, gritando por Rory.

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Capítulo 10

"Aye. Veneno. Como pensaste", dijo Rory sombríamente. Enderezándose después de


examinar a Edith, se volvió hacia Niels y abrió la boca para decir algo más, solo para
detenerse brevemente con la boca abierta y los ojos muy abiertos, antes de decir con
disgusto, "Ponte algo de ropa, hermano, o al menos limpia el vómito de tu polla. ¡Buen
señor!".

Echando un vistazo al desastre que le cubría la ingle, Niels frunció el ceño y luego se
volvió bruscamente y se dirigió al lavabo para comenzar a asearse mientras
preguntaba: "¿Va a estar bien?"

"Eso espero, aye", dijo Rory, volviéndose hacia Edith.

"Cuando llegamos aquí por primera vez, dijiste que si volvía a ser envenenada, podría
morir", le recordó Niels con gravedad.

"Aye. Si hubiera sido envenenada de nuevo en ese momento, seguramente habría


muerto", le aseguró. "Pero ella ha estado comiendo bien y reconstruyendo su fuerza
desde que se despertó. Y parece haber arrojado el veneno. O al menos creo que lo
hizo. Ciertamente echó todo lo que sé que ha comido hoy. Y algo de lo que no sabía",
añadió secamente antes de preguntar. "¿Jaimie hizo más pasteles con conservas en
ellos? No recuerdo que haya comido fruta cocida”.

"Nay. Ella tenía eso aquí”, Niels murmuró mientras terminaba de limpiarse y se movió
para agarrar su camisa y ponérsela sobre su cabeza. Caminando hasta el pie de la
cama ahora, se inclinó y recogió la copa en la que había estado la conserva y se la dio
a Rory. "¿estaba el veneno en esto?"

Rory tomó la copa, la olió delicadamente y luego metió un dedo y la lamió para probar
las conservas. Después de un momento, negó con la cabeza.

"No creo que haya estado en esto", dijo, colocando el cáliz en la mesita de noche
cuando llamaron a la puerta.

Niels se movió para responder, sus ojos se abrieron cuando vio que se trataba de
Tormod, Geordie y Alick. Cuando vio que sus hermanos cargaban el plato y la bebida
de Edith de la cena de celebración, frunció el ceño y preguntó: "¿Para qué es eso?"

"Recuerdo que mencionaste que Edith parecía callada y pálida en la cena y me


pregunté si el veneno podría haber estado en su comida o bebida de la cena", explicó
Rory, moviéndose para unirse a él en la puerta.
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Serie Novias Escocesas #5
Niels frunció el ceño cuando lo vio olisquear los restos de comida en el plato y señaló:
"Comimos del mismo plato y no estoy enfermo. No puede ser la comida”.

Asintiendo con la cabeza, Rory devolvió el plato a Geordie y tomó el aguamiel de Alick
para oler. La forma en que se puso rígido de inmediato hizo que Niels entreabriera los
ojos.

"¿Veneno?" Tormod preguntó sombríamente.

"Aye, esto huele como el tónico que Victoria dejó atrás", murmuró Rory, olfateando de
nuevo.

"Pensé que todo había desaparecido", dijo Geordie frunciendo el ceño.

"Aye. Así fue", dijo Rory sombríamente. "Obviamente, alguien hizo más".

"¿Así que el tónico de Victoria fue la fuente del veneno?", Preguntó Niels con gravedad.

"Creo que sí. Pero ahora como entonces es difícil de decir. El olor es muy débil esta
vez, pero todavía lleva el olor de varias hierbas", dijo Rory y luego miró el vaso casi
lleno y dijo: "No parece que Edith bebió mucho de esto. Eso es algo de todos modos”.

"¿Pero cómo llegó al hidromiel?", Preguntó Geordie. "Es del jarro que obtuve del tonel
aquí en esta habitación. El barril nuevo que abrimos al llegar. Se suponía que estaba a
salvo. Y miré el cántaro que traía a cada momento hasta que Edith y tú subieron las
escaleras”.

"Excepto cuando estábamos en la boda en la iglesia", señaló Alick. "Lo dejaste sobre la
mesa entonces".

Geordie negó con la cabeza. "Nay. Si hubiera podido llevarlo a la ceremonia fuera de la
iglesia lo habría hecho, pero no pude, así que dejé esa jarra y recogí una fresca del
tonel de aquí cuando volvimos".

"El tonel de aquí", dijo Niels lentamente, volviéndose para mirar el barril en cuestión. Se
sentó en la mesa junto a la pared donde Edith lo había estado esperando desnuda en la
oscuridad. Mientras Rory se dirigía hacia allí, Niels les recordó: "El asesino le disparó
una flecha a Edith desde esta habitación justo antes del mediodía".

Geordie lo miró sin comprender y luego se volvió para mirar a Rory olfatear el líquido en
el barril abierto. Cuando lo dejó abajo, se giró con una cara sombría y asintió con la
cabeza, Geordie maldijo. "Lo siento, hermano. No pensé en el hecho de que el asesino
estaba aquí adentro y lo que podía haber hecho".

Niels negó con la cabeza, cansado. "Nay, yo tampoco. Y debería haberlo hecho.
Supongo que estaba tan distraído con la boda y todo…”

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Serie Novias Escocesas #5
Se giró para mirar a Edith en la cama. Se veía tan pequeña y frágil bajo las sabanas y
pieles que Rory había puesto sobre ella. Y fue su culpa. Él no había podido protegerla.
No pasaría de nuevo.

"La llevaré a Buchanan en el momento en que se despierte," anunció con firmeza,


moviéndose a la cama para sentarse en el borde y apartar su pelo de su cara.

"Aye. Tal vez sea lo mejor”, dijo Tormod con tristeza. "Lamentaré verla irse, pero es
posible que tenga una mejor oportunidad de mantenerla viva allí. Incluso si el asesino
los sigue... bueno, seguramente su gente sabría si un extraño estuviera en medio de
ellos. Así que solo tendría que preocuparse por las flechas perdidas cuando salieran”.

Niels se puso rígido ante las palabras, sabiendo que eran ciertas. Ella no estaría
completamente segura incluso en Buchanan. No si el asesino estaba decidido a
atacarla. Pero estaría más segura al menos... si lograba que se quede dentro de la
fortaleza. De alguna manera, sospechaba que eso no era probable.

"Debería ir abajo y ver si alguno más de los hombres que envié han regresado con
noticias de Brodie", murmuró Tormod, moviéndose hacia la puerta. "Solo uno ha
regresado y dos de las fortalezas a las que envié hombres estaban lo suficientemente
cerca que deberían haber llegado y vuelto hoy”. Haciendo una pausa en la puerta, miró
hacia atrás y dijo: "Avísenme cuando ella se despierte, o…" Apretando la boca, cambió
de opinión sobre lo que había estado a punto de decir y en su lugar dijo: "Solo déjenme
escuchar cuando se despierte".

No esperó una respuesta antes de salir de la habitación.

Niels escuchó a sus hermanos hablando en suaves murmullos junto a la puerta, pero no
se molestó en tratar de escuchar. Sospechaba que estaban discutiendo quién volvería a
Buchanan con él y quién se quedaría. Él ya sabía que Rory no estaría dispuesto a irse
todavía con Effie aun inconsciente. Sospechaba que Geordie y Alick escoltarían a Edith
y él a casa en Buchanan para ayudarlo a asegurarse de que ella llegara sana y salva,
pero luego regresarían hasta que Rory estuviera listo para renunciar a la vieja solterona
e irse.

Cuando la puerta se cerró suavemente, miró alrededor y vio que Geordie y Alick se
habían ido. Cuando Rory caminó hacia él, Niels preguntó: "¿Debería preparar caldo
para gotearle por su garganta?".

"Nay. Espera y mira si ella se despierta mañana por la mañana", dijo Rory. "No hay
nada que hacer ahora... excepto tal vez para limpiarla”.

"¿Limpiarla?", Preguntó Niels con desconcierto, volviéndose para mirar la cara pálida
pero limpia de Edith. Había lavado el desastre mientras esperaba a que Rory llegara a
la habitación. Edith estaba limpia.

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"Estaba desnuda y descubierta sobre las sabanas cuando llegué antes", le recordó
Rory.

"¿Aye?", Dijo Niels con desconcierto. Sin entender qué tenía que ver eso con nada.

"Bueno, sus piernas no estaban del todo cerradas y noté que tenía lo que parece
conserva saliendo de entre sus piernas. Puede que quieras limpiar eso para que no se
despierte y encuentre sus muslos pegados con el pegajoso desastre", dijo como si
hablara sobre la hora del día. Renunciando a su despreocupación, entonces, le
preguntó: "También tenías sobre ti cuando entré. ¿Qué demonios estaban haciendo los
dos aquí para obtener conserva en su vagina?

Niels simplemente negó con la cabeza y se movió para buscar el lavabo y el lino
húmedo de la mesa para lavar la conserva. No era así como se había imaginado
quitándolo cuando Edith había mencionado que lo había aplicado. Pero entonces nada
sobre su noche de bodas había ido como lo había planeado.

Edith despertó con fuertes ronquidos y algo pesado sobre su pecho. Al abrir los ojos,
miró a su alrededor con confusión, solo para quedarse quieta mientras su mirada se
posaba en Niels. Se quedó tumbado encima de las sabanas y pieles solo con la camisa
y las botas, mientras ella estaba desnuda bajo las cálidas sábanas.

Ella lo miró por un momento mientras los recuerdos de la noche anterior se deslizaban
sobre ella, y luego hizo una mueca y cerró los ojos otra vez, bastante segura de que
simplemente no podría enfrentar el día siguiente. O al menos a su esposo. Dios mío,
sus esfuerzos por complacerlo habían terminado en un fracaso miserable, y el pobre
hombre ahora debe preguntarse si casarse con ella no había sido un gran error.

Otro ronquido sonó a su lado y Edith abrió los ojos para examinar la habitación, ya que
se le ocurrió que si continuaba tendida allí, definitivamente tendría que enfrentarse a
Niels más temprano que tarde. Mientras que, si se levantaba y encontraba algún trabajo
pesado para asistir en otro lugar, como decir en el pueblo, bueno, podría evitar la
humillación de tener que enfrentarlo durante horas. Quizás incluso hasta la cena.

Ese pensamiento fue suficiente para tenerla deslizándose de lado en la cama,


abriéndose camino por debajo de su brazo y mano. Niels se movió solo una vez durante
esta operación y Edith se congeló, esperó un latido hasta que emitió otro ronquido, y
luego continuó de lado hasta que pudo sentarse y levantarse de la cama.

Corriendo hacia su baúl, tomó el primer vestido que tocó y se lo puso sobre la cabeza
mientras corría hacia la puerta. Edith la abrió y luego salió. Tuvo cuidado de cerrarla

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silenciosamente, y luego comenzó a alejarse antes de molestarse en arreglar los
cordones.

"¡Mi lady!"

Edith se detuvo bruscamente y miró a su alrededor para ver a su doncella corriendo


hacia ella.

"¿Qué está haciendo, mi lady?", Preguntó la chica con exasperación, agarrándola del
brazo y llevándola de vuelta hacia la habitación. "Debería todavía estar en la cama.
Estuvo muy enferma anoche. Casi murió... de nuevo”, agregó en una nota irritada.

"Estoy bien", le aseguró Edith, clavando los talones mientras la chica intentaba
arrastrarla de vuelta a la habitación de la que acababa de escapar. "Fue un poco de
malestar estomacal. Pero me siento bien esta mañana", le aseguró a su doncella,
soltándole el brazo.

"¿Malestar estomacal?" Preguntó Moibeal con asombro y luego negó con la cabeza.
"Nay. Fue envenenada otra vez, mi lady. ¿Su señor marido no se lo dijo?”.

La criada sonaba disgustada porque Niels no le hubiera dado información tan


importante, por lo que a pesar de su conmoción de ser nuevamente envenenada, ella
dijo débilmente: "Nay, todavía está durmiendo".

Moibeal parpadeó y, así de simple, la irritación con el hombre se convirtió


instantáneamente en compasión por él. "Oh, aye, y sin duda. El pobre hombre estuvo
despierto casi toda la noche cuidándola", dijo con simpatía. "Todavía estaba caminando
de un lado a otro al amanecer cuando llegué a su habitación para ver cómo estaba.
Parecía exhausto entonces y le dije que debería acostarse, que seguro lo despertaría
cuando se despertara”. Ella frunció el ceño a Edith ahora. "Lo que obviamente no hizo,
así que puede darse la vuelta y regresar allí y..."

"¡Nay!", Espetó Edith, tirando de su brazo para liberarse cuando la chica trató de
empujarla fuertemente por donde había venido. "Si está agotado, debería dejarlo
descansar", añadió con menos brusquedad, y se sintió aliviada al ver que las palabras
detenían a la doncella. Con la esperanza de distraerla aún más, preguntó: "¿Estás
segura de que fue veneno? Mi estómago me estaba molestando en la cena, pero pensé
que era sólo el nerviosismo por la noche de bodas por venir", admitió.

"Oh, nay, no fue los nervios", le aseguró Moibeal. Frunciendo el ceño al darse cuenta de
que los cordones de Edith estaban sueltos, la doncella comenzó a ordenarlos mientras
explicaba. "Descubrieron que era veneno en su hidromiel. Imaginan que el asesino
debe haber envenenado el tonel en su habitación cuando estaba allí disparándole
flechas”.

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Serie Novias Escocesas #5
"Fue solo una flecha", murmuró Edith.

Ignorando eso, Moibeal agregó, "Y Lord Rory dijo que fue una buena cosa que solo
tomara un par de sorbos en la cena, ya que piensa que el asesino ha cambiado el
veneno y ha aumentado la dosis con la esperanza de terminar con usted. Él piensa que
si hubiera bebido más de un par de sorbos, habría muerto antes de que pudiera
devolverlo. Es una suerte que tenga un estómago tan sensible y vomitó todo".

"Eso es discutible", dijo Edith en voz baja, recordando el evento. Si ella hubiera sido
verdaderamente afortunada, lo habría hecho después de complacer a Niels, no en
medio de ello y todo sobre él.

Ignorando eso también, la doncella dijo en voz baja: "Este último atentado alteró a Lord
Niels de forma algo feroz, y dijo cómo planea llevarla lejos de aquí hoy cuando se
despierte".

"¿Lejos?", Preguntó Edith con sorpresa. "¿A dónde?"

"A Buchanan", dijo solemnemente. "Es obvio que le importa y quiere que esté a salvo...
y yo también, mi lady", añadió en voz baja.

Edith frunció el ceño. "Pero Brodie no ha regresado todavía".

"Todavía no", Moibeal acordó suavemente. "Pero Tormod envió hombres ayer después
del incidente con la flecha. Cada uno llevaba un mensaje de él sobre lo que estaba
sucediendo aquí, diciéndole que no era enfermedad sino asesinato, y pidiéndole que
regresara”.

Edith se mordió el labio ante esta noticia, preguntándose por qué nadie se había
molestado en mencionárselo. Suponía que con la boda inesperada y todo, podrían
haberse olvidado. Por otro lado, realmente no importaba de todos modos. No estaba del
todo segura de sí sería más probable que Brodie regresara si supiera que había un
asesino aquí en Drummond asesinando a miembros de su familia de lo que había
estado dispuesto a quedarse cuando pensó que era solo una enfermedad.

"Ya está hecho", dijo Moibeal en voz baja, terminando con sus cordones y alejándose.

"Gracias," murmuró Edith y se giró para continuar hacia las escaleras.

Su doncella suspiró de inmediato y la siguió. "Si su señor esposo quiere irse hoy,
necesitamos empacar sus cofres y…"

"Nos preocuparemos por eso cuando se despierte", interrumpió Edith. "Si estuvo
despierto toda la noche preocupándose por mí, necesita dormir".

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"Además de lo cual, está pensando en negarse a irse, ¿no?", Preguntó Moibeal
secamente, y luego señaló: "Pero él es su marido ahora, y sabe que la elección ya no
es suya".

Edith dejó de caminar y se volvió para mirarla. "¿Qué?"

"Temía que no pensara en eso", dijo Moibeal con un suspiro, y luego enderezó los
hombros y dijo: "mi lady, su padre fue tan amable e indulgente con usted como lo fue
con Brodie. La dejó manejar la fortaleza como quiso, y permitió que visitase a lady
Saidh y Jo cuando le apeteció, pero...”

"¿Estás sugiriendo que estoy tan malcriada como Brodie?" Edith interrumpió con
consternación.

"Nay", dijo Moibeal de inmediato. "Siempre ha trabajado arduamente y se ha


preocupado por el bienestar de la gente de aquí, mientras que Brodie solo se preocupó
por él y por su placer. Pero su padre le dio libertades que muchas mujeres no tienen",
agregó solemnemente. "Si no quería hacer algo o ir a algún lado, él no la obligó. Pero
podría haberlo hecho. Era su derecho... y ahora es el derecho de su esposo. Si él
desea que vaya a Buchanan, no tiene más remedio que ir".

Edith entrecerró los ojos ante esas palabras, sabiendo que eran ciertas, pero no
complacida por ellas. Dando un molesto "hrrmph", giró para continuar hacia las
escaleras, su mente corriendo con ideas de cómo salirse con la suya y quedarse hasta
que Brodie regresara. Estaba a mitad de camino de la escalera hacia el gran salón
cuando se le ocurrió que al pensar de esa manera podría ser más parecida a su
hermano de lo que le gustaría admitir.

La idea la detuvo, pero luego su mente inmediatamente rechazó esa sugerencia. A su


hermano no le habría importado el bienestar de la gente de aquí, y esa es la razón por
la que quería quedarse hasta que Brodie regresara. No era por ella, señaló, soltó un
suspiro de alivio y comenzó a caminar de nuevo.

"Estas levantada. ¿Cómo te sientes?”

Edith levantó la vista ante el comentario y forzó una sonrisa cuando vio a Rory
acercándose desde las cocinas. No era que no estuviera feliz de verlo... pero no lo
estaba. Temía que, sabiendo que Niels quería llevársela a Buchanan hoy, el hombre
podría ir a despertar a su hermano, y ella no estaba preparada para eso. Necesitaba un
plan para evitar tener que cumplir con el plan de su esposo”.

"Me siento bien, mi Lord. Gracias”, murmuró Edith.

"Por favor, llámame Rory", dijo con diversión. "Somos familia ahora".

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Ella parpadeó sorprendida por eso. Por tonto que pareciera, no se le había ocurrido que
casarse con Niels significaba que ahora tenía seis nuevos hermanos. Y Saidh era su
hermana ahora, al menos en ley, se dio cuenta y sonrió al hombre. "Gracias, Rory. Y
debes llamarme Edith”.

Él sonrió y asintió con la cabeza, y luego miró hacia las escaleras. "¿Dónde está Niels?"

Edith vaciló, pero luego respiró hondo y dijo: "Está durmiendo, y pensé que era mejor
dejarlo descansar ya que aparentemente estuvo despierto la mayor parte de la noche
preocupándose por mí".

"Aye, lo estuvo, pero..." Rory miró hacia las escaleras de nuevo y luego a Moibeal.
Cuando sus ojos se enfocaron en su doncella, Edith notó la desaprobación en la cara
de la chica. Aparentemente, no tuvo problemas para determinar qué podría haber
detrás de esa desaprobación, porque cuando finalmente volvió su mirada hacia ella, dijo
solemnemente, "supongo que Moibeal mencionó que Niels quiere llevarte hoy a
Buchanan".

Edith vaciló, tratando de organizar una discusión sensata sobre por qué no deberían
hacer eso.

Antes de que pudiera, Rory continuó, "Y sé que eso debe ser aterrador".

Ella parpadeó por la sugerencia.

"Salir de la casa que siempre has conocido para una nueva llena de extraños es sin
duda una perspectiva desalentadora", dijo solemnemente, "pero es lo mejor. Estarías
más segura, así como la gente de aquí".

"¿La gente de aquí?", Preguntó Edith con sorpresa.

"Bueno, hemos sido afortunados hasta ahora. Al menos algo. Moibeal sobrevivió al
veneno que era para ti, y está sana y bien de nuevo. Effie, sin embargo, empiezo a
pensar que no sobrevivirá, pero al menos tuvimos suerte ayer y nadie estaba detrás de
ti cuando te inclinaste y la flecha pasó volando dejando atrás su marca. Si Niels,
Tormod o cualquier otra persona hubieran estado detrás de ti, es posible que hubieran
tomado la flecha en tu lugar. Incluso Ronson podría haberlo hecho si lo hubieras
recogido en la silla de montar contigo, o si el objetivo del tirador hubiera sido errado".

Edith estaba decaída al darse cuenta de que tenía razón, cuando Rory agregó: "Y luego
está el incidente de ayer con el hidromiel".

Ella lo miró bruscamente. "¿Qué de eso? Nadie más lo bebió, ¿verdad?”

"Nay. Pero casi lo hicimos Geordie lo buscó justo después del incidente de la flecha y
nos iba a servir a cada uno cuando subiste las escaleras para limpiarte. Pero Tormod
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dijo que preferiría tomar cerveza, y el resto de nosotros pensamos que sonaba bien y
que dejaríamos el hidromiel para ti. Si no hubiéramos hecho eso, Geordie, Alick,
Tormod, Niels y yo probablemente estaríamos muertos ahora”.

"Dios mío", respiró Edith, dejándose caer para sentarse en el banco de la mesa.

"Aye", dijo Rory sombríamente. "Tuvimos suerte. La próxima vez tal vez no. Será más
seguro para todos una vez que Niels te saque de aquí. Incluso puede ayudar a revelar
al asesino”.

Parpadeando ante eso, ella levantó la vista. "¿Cómo?"

"Bueno, si están decididos a terminar lo que han comenzado y a matarte también,


tendrían que seguirte a Buchanan", señaló. "Se revelarían a sí mismos si hicieran eso".

"Oh, aye", respiró Edith y negó con la cabeza. Ayer, le había discutido a Moibeal que
dejar a Drummond no la dejaría más segura ya que el asesino podría seguirla. Ahora
Rory había convertido esa discusión en contra de ella. Si el asesino los seguía,
seguramente sería reconocido como el asesino. Y si se quedaba, podría poner a otros
en riesgo.

Edith no podía creer que no se le hubiera ocurrido. O tal vez podría, porque aunque no
se había dado cuenta antes de que Rory lo sugiriera, estaba angustiada por dejar a
Drummond. Había sido su hogar toda su vida. Era el único hogar que conocía, y esta
era su gente. Había crecido con ellos a su alrededor y no podía imaginar su vida sin
ellos. Pero tendría que hacerlo. Todas las chicas tenían que crecer, casarse y alejarse
de las personas que amaban. Bueno, no todas, supuso pensando en Murine. Ella ahora
vivía en el hogar de su infancia con su esposo, Dougall, pero pocas mujeres tenían esa
suerte.

"Bueno", dijo Moibeal alegremente. "Entonces supongo que debería subir y comenzar a
empacar para el viaje".

"Será mejor que vaya a despertar a mi marido primero", dijo Edith en un suspiro y se
puso de pie.

"Nay", dijo Rory de inmediato. Cuando Edith lo miró con sorpresa, hizo una mueca y
dijo: "Niels puede ser un poco difícil para despertarse por las mañanas e irritable
cuando está cansado. Me detendré y lo despertaré en mi camino para alimentar a Effie
con un poco más de sopa. Las dos pueden subir y comenzar a empacar una vez que
baje. De esa manera puedes desayunar mientras esperas", agregó, y luego advirtió.
"Solo come lo que tu cocinero dice que es seguro. Y asegúrate de que abran un barril
nuevo de lo que quieras beber".

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"Aye", murmuró Edith, pero al ver a Rory girar para subir las escaleras, pensó que sería
mejor que ella simplemente no comiera ni bebiera nada hasta que se hubieran ido.
Estaba harta de estar enferma.

Niels despertó con un fuerte estrépito y se lanzó hacia arriba en la cama, mirando
frenéticamente a Edith, solo para descubrir que ya no estaba a su lado. Girando su
mirada por la habitación en busca de ella, encontró a su hermano Rory en su lugar. El
hombre estaba apoyado contra la puerta cerrada, con una sonrisa de satisfacción en su
rostro.

"¿Dónde está Edith?" Niels gruñó a modo de saludo, y Rory se apartó de la puerta con
una sonrisa y comenzó a cruzar la habitación.

"Está abajo, esperando que te despiertes para que ella y su criada puedan comenzar a
empacar".

"¿Empacar?", Preguntó con sorpresa.

"Aye. Su doncella le dijo que planeabas llevarla a Buchanan y yo la convencí de que era
lo mejor".

"¿Lo hiciste?", Preguntó Niels con sorpresa. Anoche, cuando se habían sentado junto a
la cama, él había mencionado sus preocupaciones de que Edith argumentara irse o
incluso se negara, pero no había esperado que su hermano interviniera.

"Aye", dijo Rory sonando muy satisfecho consigo mismo. "Y luego te ayudé aún más al
convencerla de que me dejara despertarte cuando ella dijo que lo haría".

"¿Cómo me ayudó eso?", Preguntó con desconcierto.

"Debido a que estoy bastante seguro de que si ella viniera aquí para despertarte, los
dos habrían terminado rodando en la cama todo el día y no se irán hasta mañana", dijo
secamente.

Niels se calmó ante la sugerencia, su mente capturada por la idea. Aún no habían
consumado la boda, se dio cuenta. Técnicamente, eso significaba que ni siquiera
estaban casados, ¿no es así? No estaba seguro, pero realmente, ¿deberían correr el
riesgo? Después de todo, si se encontraban con Brodie antes de consumarlo, él podría
ser capaz de anular el matrimonio o algo así. Asintiendo con la cabeza, comenzó, "Tal
vez…"

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"Nay", dijo Rory con firmeza.

"Nay, ¿qué?", Preguntó Niels con sorpresa. "No he dicho nada todavía".

"Estabas a punto de señalar que la boda no se había consumado y sugerir quedarte


otro día para hacerlo", dijo Rory sin una pizca de duda. "Probablemente has logrado
armar un argumento de que su hermano puede decir que la boda es invalida si te lo
encuentras antes de consumarla".

"Maldita sea, hermano, me conoces bien", dijo Niels con diversión.

"Aye", estuvo de acuerdo Rory. "Y sé que nunca te perdonarías si te quedaras ese día
extra y terminaras enviudando todo por la oportunidad de tener sexo con tu esposa".

"Aye, lo haría", estuvo de acuerdo Niels con tristeza, y arrojó las sábanas y pieles a un
lado para levantarse de la cama.

"Además, Brodie no podría probar que el matrimonio no ha sido consumado", comentó


Rory de repente.

Niels resopló ante la sugerencia mientras agarraba su camisa del suelo y se la ponía.
Una vez que su cabeza salió por el cuello, dijo: "Creo que el hecho de que ella fue
envenenada y estuvo tan enferma como podría estar probablemente lo delataría".

"Aye, pero la sábana sugiere que pudo haber estado enferma después de la
consumación. O que la boda se consumó esta mañana antes de levantarse”, señaló
Rory y Niels se volvió para mirar hacia la cama, sus ojos se abrieron cuando vio la
mancha marrón rojiza seca en la sabana inferior. Era de la conserva que Edith se había
untado gracias al consejo de la desconocida Magda, pero parecía sangre. Una lenta
sonrisa reclamó sus labios.

"La tomaré y la colgaré sobre la barandilla mientras te plisas el plaid, ¿no?" Preguntó
Rory, moviéndose hacia la cama.

Niels comenzó a asentir con la cabeza, pero luego frunció el ceño y preguntó: "¿Qué
pasa si alguien investiga y se da cuenta de que es conserva?"

Rory hizo una pausa y luego se relajó y dijo: "La dejaré solo hasta el almuerzo y luego
la bajaré y la quemaré. De esa forma todos la verán, pero Brodie no podrá examinarla
cuando regrese".

"Bien", dijo Niels, mirando a su alrededor en busca de su tartán. "Gracias".

"Un placer, hermano", dijo Rory a la ligera, quitando la sabana manchada de la cama.
"Siempre estoy feliz de ayudar en el curso del verdadero amor".

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Niels lo miró bruscamente. "¿Amor? No amo a Edith. Me gusta, pero eso es todo”.

Rory lo miró con lástima mientras se enderezaba con la sabana en la mano. "A veces,
Niels, te juro que eres un idiota sin nada en la cabeza, sino cerebro hervido... y esta es
una de esas veces si realmente crees que no amas a la muchacha. La forma en que te
preocupaste por ella anoche dejó muy claro a todos que la amas.

"¿Todos?", Preguntó Niels con los ojos muy abiertos. "¿Cómo podrían todos saber
algo? Solo tú, Tormod, Geordie y Alick estuvieron aquí”.

Rory levantó las cejas. "¿De verdad no recuerdas haber corrido hasta la cima de las
escaleras en estado de pánico, sin nada más que tus botas y vómito, y bramar como un
oso herido para que viniéramos rápido, que tu Edith había sido atacada?"

"Oh", murmuró Niels, recordando vagamente eso ahora.

"Aye, oh", dijo Rory secamente. "Créeme, todos en esta fortaleza ahora están
convencidos de que amas a su señora. Eres el único que aparentemente no se da
cuenta todavía".

Con esa nota, se volvió y sacó la sabana, dejando a Niels plegando su plaid y
reflexionando sobre el hecho de que podría amar a su esposa. Dios querido, ¿cómo
había sucedido eso?

"Hmm".

Edith miró a Moibeal ante ese comentario. La doncella se había sentado para discutir
qué tendrían que empacar para el viaje mientras Edith desayunaba. Ambas mujeres se
habían dado cuenta rápidamente de que iba a ser un esfuerzo mucho más grande de lo
que habían pensado. Aparte de sus cofres de ropa, tenía dos cofres de sábanas y
cosas así que su madre había comenzado cuando ella era solo un bebé. Ella había
dicho que debía llevarlas consigo cuando se casara. También estaba su arco y flecha y
un sin número de otros artículos personales que tendrían que ser empacados.

"¿Qué?", Preguntó Edith a Moibeal con curiosidad cuando la mujer no hizo más
comentarios.

"Parece que su marido está despierto, o al menos fuera de la cama", dijo Moibeal
divertida, señalando con la cabeza hacia las escaleras.

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Edith se volvió para seguir su mirada, esperando ver a su esposo bajando las
escaleras. En cambio, su vista se vio atrapada en la enorme tira de lino blanco que
Rory colgaba sobre la baranda superior. Su mandíbula cayó cuando su mirada se
concentró en la enorme mancha oscura en el centro.

"Y yo aquí preocupada que con usted enferma y todo, no hubieran consumado la boda",
comentó Moibeal, y luego agregó: "Al menos no tenemos que preocuparnos de que
Brodie pueda tener la boda anulada si llega antes de que nos vayamos".

Edith simplemente se quedó mirando la sabana. Por lo que podía recordar, no habían
consumado el matrimonio. Pero eso definitivamente parecía sangre en la sábana. Tal
vez Niels temía que Brodie pudiera anular el matrimonio si tuviera la oportunidad y la
había consumado mientras estaba inconsciente para asegurarse de que eso no
sucediera. Su mirada cayó sobre su regazo ante ese pensamiento y simplemente se
sentó por un momento, tratando de ver si sentía algo diferente allí abajo.

Nop, Edith finalmente decidió. No se sintió diferente en absoluto... lo cual fue un poco
decepcionante. Realmente habría esperado sentirse diferente de alguna manera,
aunque no estaba segura de cómo o por qué habría pensado eso. Cuando la besó y
metió la lengua en su boca, su boca no se sintió diferente después. Pero no había
virginidad en su boca que sangrara, y a juzgar por la cantidad de sangre en el lino, el
rompimiento no había sido algo pequeño. Edith estuvo a punto de preguntarse si no
debería encontrar algo de musgo de sangre8 y ponerse el vestido rojo oscuro que solía
llevar durante la menarquía para minimizar los signos visuales de manchas de sangre.
Si ella todavía estaba sangrando...

De pie abruptamente, Edith se dirigió a las escaleras, con la intención de verificar el


problema, pero se detuvo al pie de las escaleras cuando Niels apareció en la parte
superior y comenzó a bajar. Avergonzada y tímida, agachó la cabeza y comenzó a
caminar, pero se detuvo cuando Niels se detuvo y la tomó del brazo.

"Buenos días, esposa", murmuró, inclinándose para besarla en la frente.

"Buenos días, esposo", susurró Edith. Nerviosa, levantó la vista y luego se alejó cuando
vio que la estaba mirando con extrañeza.

"¿A dónde vas?", Preguntó.

Edith abrió la boca, y luego la cerró de inmediato, sin sentirse cómoda discutiendo las
necesidades de su cuerpo con él todavía, pero entonces dijo: "A empacar".

8
En el medioevo no usaban ropa interior, algunas mujeres usaban paños de lino o musgo como toalla sanitaria y se
cree que se fijaban en su lugar con una faja que era como un cinturón, además el rojo era un color común de
enaguas y faldas en esos días para ocultar las manchas de sangre menstrual.

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"Ah". Él sonrió y le apretó el brazo. "Solo empaca un par de vestidos por ahora. Geordie
y Alick regresaran después de acompañarnos a Buchanan para recoger a Rory y
acordaron traer un vagón para llevar a Ronson, su abuela, Laddie y todo lo que
necesites de Drummond".

Edith se olvidó de que posiblemente todavía sangraba y levantó la vista con sorpresa.
"¿Ronson y su abuela?"

"Bueno, si Bessie está dispuesta", dijo Niels con ironía. "Pensé que te gustaría que
vengan a Buchanan con nosotros. ¿Estaba equivocado?"

"Nay. Eso sería maravilloso, esposo", le aseguró rápidamente y una sonrisa curvó sus
labios. "Me preocupaba lo que podría ser de ellos después de irme. A Victoria tampoco
le gustan".

Él sonrió. "Entonces, si su abuela está dispuesta, Geordie y Alick los llevarán. Llevarán
todo lo que necesites también”. Niels frunció el ceño brevemente, y luego añadió:
"Aunque podría ser mejor que dejes a Moibeal aquí hasta entonces. Ella puede decirle
a mis hermanos todo lo que quieres que lleven. De esa forma, no dejarán nada
accidentalmente". Vaciló y luego agregó, "Si puedes prescindir de tu doncella por una
semana o…"

"Oh, aye", Edith lo interrumpió rápidamente. Una semana sin una doncella era lo
suficientemente pequeña para renunciar a cambio de asegurarse de que no quedara
nada.

"Bueno. Entonces, ve a empacar algunos vestidos y artículos esenciales y nos iremos


tan pronto como estés lista", sugirió.

"Aye, mi señor esposo", dijo Edith y se giró para irse, pero luego se detuvo y se giró de
vuelta para rodearle el cuello con los brazos y darle un rápido y entusiasta beso en los
labios. "Gracias, esposo", dijo feliz mientras retiraba sus brazos, pero él la detuvo
deslizando sus brazos alrededor de su cintura y abrazándola.

"Ese no es un beso de agradecimiento, esposa", murmuró Niels, su voz cada vez más
ronca. "Podemos hacerlo mejor que eso, ¿no crees?"

"Aye", susurró Edith y cerró los ojos cuando bajó la cabeza y reclamó su boca. Cuando
una de sus manos se levantó para ahuecar la parte de atrás de su cabeza e inclinarla
en un ángulo mejor mientras su lengua se deslizaba para acariciar sus labios, Edith se
abrió hacia él y gimió en su boca mientras él profundizaba el beso. Eso fue todo lo que
le tomó a su cuerpo revivir de emoción y dolor con necesidad. Podía sentir la dureza
que crecía entre ellos y presionar contra su vientre, así que no se sorprendió cuando
Niels repentinamente la tomó en sus brazos y comenzó a subir las escaleras sin romper

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su beso. Incluso estaba deseando que él calmara el dolor que había creado, por lo que
se sobresaltó cuando de repente rompió el beso y dejó de caminar.

Mirando hacia arriba a su rostro, vio que él estaba mirando más allá de ella con
expresión ligeramente irritada. Edith se volvió para ver que Rory ahora estaba parado
en lo alto de la escalera, con los brazos cruzados sobre el pecho y una ceja levantada.

Suspirando, Niels dejó a Edith en el escalón arriba de él. La abrazó brevemente hasta
que estuvo seguro de que tenía el equilibrio y luego la instó a subir las escaleras
diciendo: "Ve a empacar. Enviaré a Moibeal para que le cuentes los planes, y luego
buscaré a Geordie y Alick y les dejaré saber que nos iremos pronto”.

Ocultando su decepción, Edith asintió y continuó subiendo las escaleras, sola.

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Capítulo 11

"¡Geordie!"

Parpadeando para alejar las gotas de lluvia que se aferraban a sus pestañas, Edith miró
a su marido en el caballo delante de ella al oír su grito y luego miró más allá de él hacia
el hombre que estaba al frente de su grupo. Alick iba detrás de ella, pero Geordie
estaba al frente, adelantándose para ver si había algún problema. Aminoró la velocidad
ahora y luego se volvió para regresar ante la llamada de su hermano.

Deteniendo a su caballo detrás de la montura de su marido cuando este se detuvo,


Edith esperó pacientemente mientras los dos hombres comenzaban a conversar. No
podía oír lo que decían sobre la tormenta que tronaba a su alrededor, pero esperaba
que tuviera algo que ver con detenerse a esperar que pasara el aguacero. Había
comenzado alrededor del mediodía, dos horas después de que dejaran Drummond. Al
principio había sido una ligera llovizna, pero Niels inmediatamente sacó un plaid de su
bolsa y retrocedió junto a ella para sugerirle que se envolviera con la tela repelente al
agua. Al principio no lo había considerado necesario, pero había aceptado la oferta y se
lo había envuelto alrededor, apreciando el gesto.

La llovizna había continuado de forma intermitente durante la mayor parte de la tarde


mientras cabalgaban, pero hace media hora se había convertido repentinamente en un
aguacero. A cada momento que pasaba, se hacía cada vez más dura y con más viento,
y ahora Edith estaba cubierta con el plaid, con solo sus ojos asomándose, para todo lo
bien que servía. Ahora estaba casi tan oscuro como la noche, aunque sabía que solo
podía ser la última hora de la tarde, pero entre eso y el viento que soplaba la lluvia en
sus ojos le hacía difícil de ver.

Alejándose el agua de los ojos, se sentó un poco más derecha en la silla de montar y
observó cuando Niels de repente giró su caballo y se colocó junto a ella con sus
caballos mirando en direcciones opuestas.

"Estamos pensando que deberíamos detenernos y esperar a que pase la tormenta",


anunció, alejándose de su silla e inclinándose sobre ella para asegurarse de que
escuchara.

Edith asintió con alivio.

"Sin embargo, tenemos que encontrar un terreno elevado o un lugar que ofrezca un
poco de protección. Conoces esta área mejor que nosotros, muchacha. ¿Conoces un
lugar probable?”

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Serie Novias Escocesas #5
Mordiéndose el labio, Edith miró a su alrededor, buscando cualquier cosa que pudiera
parecerle familiar. La verdad era que, aunque era tierra de Drummond, no se alejaba
mucho del castillo a menudo. El lago y el prado era lo más lejos que solía ir a menos
que fuera a visitar a Saidh o Jo o algo por el estilo, y podía contar con una mano
cuántas veces había hecho eso.

A menos que incluyera viajes infantiles, Edith pensó rápidamente cuando su mirada se
posó en un árbol que tenía delante y a su derecha.

"¡La cabaña!", Soltó con entusiasmo.

"¿La cabaña?", Preguntó Niels.

Edith asintió con la primera sonrisa que había logrado desde que comenzó a llover.
"¿Ves ese árbol allí? El grande con el tronco tallado".

Niels se volvió para mirar hacia dónde señalaba y luego asintió. "Aye."

"Mi Pá hizo eso hace años cuando éramos niños. Él solía llevarnos a mi madre, mis
hermanos y a mí a la cabaña un par de veces al año cuando éramos jóvenes", explicó,
gritando para ser escuchada bajo la lluvia. "Se suponía que íbamos a cazar, pero sobre
todo jugábamos, teníamos picnics y nadamos, etc. Lo talló en uno de los viajes.
Significa que estamos cerca de la casa de campo”.

"¿Puedes encontrarla?", Preguntó Niels de inmediato.

Edith miró el árbol por un momento y luego asintió, "Aye, creo que sí".

"Entonces dirige el camino y podremos salir de la lluvia", dijo Niels con una sonrisa.

"Aye". Edith asintió, y luego empujó su caballo hacia adelante, buscando en el suelo el
camino que recordaba. Habían pasado años desde que su padre los había traído a
todos aquí, no lo hacía desde la muerte de su madre, y al principio le preocupaba que el
camino ya hubiera desaparecido por completo. Pero después de una búsqueda
sorprendentemente corta, un grito de triunfo se deslizó de sus labios y giró a su yegua
por el camino. Alguien obviamente había estado usando la cabaña para que el camino
aún estuviera allí, pensó Edith mientras conducía a los hombres hacia los árboles.
Probablemente uno de sus hermanos. Tanto a Roderick como a Hamish les había
gustado cazar.

Tardó unos veinte minutos en llegar a la cabaña. Edith no recordaba que tomara tanto
tiempo, por lo que comenzó a preocuparse de haber seguido un camino equivocado o
algo así cuando los árboles repentinamente cedieron al claro donde estaban el pequeño
edificio de piedra y el establo. Sintiendo alivio a través de ella, condujo a su yegua
directamente hacia el pequeño establo, la frenó cuando se acercaron a la puerta

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cerrada y luego se deslizó rápidamente y corrió para abrirla en lugar de esperar a que
uno de los hombres lo hiciera por ella. Estaba tan ansiosa por salir de la fría y húmeda
lluvia, que incluso los establos se veían atractivos en ese momento.

Abrió la puerta ansiosamente y luego se tambaleó hacia atrás, chocando con alguien
mientras el hedor a carne podrida se extendía sobre ella.

"Edith, ¿qué…?" Oyó a Niels decir mientras las manos se aferraban a sus hombros, y
entonces él debió haber captado el aroma que ahora la tenía cubriéndose la boca con
la mano y jadeando. Maldiciendo, su esposo la instó a alejarse del establo y hacia la
cabaña, solo para detenerse y llevarla a un árbol que ofrecería refugio en su lugar.

"Está bien. Puedes sacarte la mano ahora. Aquí está mejor", dijo Niels.

Edith bajó la mano para tomar una cautelosa inhalación y luego suspiro de alivio e hizo
varias respiraciones profundas para limpiarse la nariz y los pulmones, y calmar su
estómago. Una vez que estuvo segura de que no iba a enfermarse, echó un vistazo
hacia los establos y fue justo a tiempo para ver salir a Geordie y Alick. Ambos tenían la
tela de sus tartanes en la cara, pero sus ojos estaban sombríos mientras recogían las
riendas de los caballos y los llevaban al árbol.

"¿Qué encontraron?", Preguntó Niels solemnemente mientras los ayudaba a atar los
caballos a una rama baja en el árbol debajo del que se encontraban.

"Caballos muertos", dijo Geordie sombríamente. "Muertos de hambre sería mi


suposición. Parece que intentaron comer sus puestos, o tal vez solo intentaban salir a
buscar comida”.

"¿Cuántos?", Preguntó Niels cuando Geordie hizo una pausa.

"Siete en total".

Edith se puso rígida y lo miró fijamente. "¿Siete?"

"Aye". Geordie asintió.

"Esposo", dijo ansiosamente, agarrando el brazo de Niels. "Brodie se llevó a seis


hombres cuando él y Victoria se fueron, y Lonnie murió en el bosque con su caballo
presumiblemente robado. ¿No piensas...?"

Aplanando su boca, Niels la instó a acercarse a Alick. "Quédate aquí con mi hermano,
ya vuelvo".

Dio media vuelta para dirigirse a la cabaña con Geordie pisándole los talones. Edith se
mordió el labio mientras miraba. Sentía que debería ir con él también, pero simplemente
no podía obligarse a hacerlo. Su mente estaba pintando una imagen de lo que

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encontrarían dentro y no era bonita. Ningún hombre estaría dispuesto a dejar que los
caballos se murieran de hambre, dependían demasiado de ellos. Los propietarios
ciertamente debían estar muertos también, y lo han estado por más tiempo que los
caballos que murieron de hambre. Si se trataba de Brodie, Victoria y sus escoltas...

Mientras tragaba, Edith vio a Niels abrir la puerta de la cabaña. La forma en que ambos
hombres se echaron hacia atrás de inmediato y luego levantaron un poco de tartán para
cubrirse la nariz y la boca antes de entrar, le dijeron que definitivamente había algo
muerto dentro.

Aparentemente, Alick también lo pensó así, porque repentinamente colocó un brazo de


apoyo alrededor de sus hombros, y dijo: "Puede que no sea tu hermano y su esposa".

Sabía que estaba tratando de tranquilizarla, pero incluso él no parecía creerlo, y Edith
se vio incapaz de ver a través del repentino pozo de lágrimas en sus ojos. Alejándolos,
se mordió el labio y simplemente esperó. Pareció pasar mucho tiempo antes de que los
dos hombres volvieran a salir. Geordie inmediatamente se alejó hacia el bosque y ella
podía escuchar sus arcadas incluso por encima de la lluvia.

Aunque Niels tenía la cara tan gris como su hermano, él fue en la dirección opuesta.
Caminó directo al pozo. Ni siquiera tuvo que sacar agua, la lluvia aparentemente había
dejado el cubo que estaba en la pared del pozo lleno de agua. Niels sumergió sus
manos y parecía estar limpiándolas. Cuando terminó, arrojó el agua al suelo y luego
caminó hacia el árbol para unirse a ellos.

"¿Son ellos?", Preguntó Edith en voz baja, ya sabiendo la respuesta.

Niels abrió la boca, la cerró, suspiró y admitió: "Es difícil de decir. Han estado muertos
un tiempo, pero son seis hombres y una mujer. La mujer lleva un vestido dorado”.

Edith frunció el ceño. "Victoria llevaba un vestido dorado cuando se fueron".

Niels se limitó a asentir con la cabeza, sin parecer sorprendido, y luego levantó su
mano y dijo: "Y el hombre a su lado estaba usando esto".

Edith miró su mano cuando la tendió. Por un momento solo se quedó mirando el anillo
de oro que descansaba sobre su palma. Era un anillo de hombre, dorado con el
emblema de la familia Drummond. Era el anillo de sello que su padre había usado hasta
el día de su muerte. Lo había insertado en la cera en todos los mensajes que envió
como prueba de que eran de él. Cuando murió, Tormod se lo había quitado y se lo
había llevado a Roderick, y luego se lo había llevado a Hamish cuando murió Roderick.
La última vez que lo había visto, Brodie se lo había puesto cuando salió de Drummond.
Llevaba puesto ese anillo, y Victoria había estado cabalgando a su lado, con su vestido
dorado brillando a la luz del sol.

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Eran ellos. La mujer era Victoria, y los seis hombres muertos eran Brodie y los cinco
hombres restantes de su escolta. Ahora había perdido a todos los miembros de su
familia. Estaba sola, se dio cuenta tontamente y se preguntó de dónde venía ese agudo
sonido de lamento. Se dio cuenta de que venía de ella justo antes de que la oscuridad
se cerrara a su alrededor y comenzara a caerse.

Maldiciendo, Niels atrapó a Edith antes de que pudiera aterrizar en el barro, y luego
simplemente se quedó allí parado, abrazándola y mirando su rostro pálido,
preguntándose qué hacer. No podían quedarse aquí. Incluso si arrastraban a los
muertos fuera de la cabaña y los ponían en los establos hasta que pudieran disponerlos
para devolverlos a Drummond, el olor en la cabaña sería insoportable. Además, no
quería que Edith despertara en el lugar donde sabía que su hermano había exhalado su
último aliento.

"¿Seguimos adelante?", Preguntó Alick esperanzado mientras Geordie regresaba del


bosque.

"Nay", dijo Niels sombríamente, luego suspiró miserablemente y se volvió para llevar a
Edith a su montura.

"La sostendré mientras te montas", dijo Geordie en voz baja.

Asintiendo con la cabeza, Niels se la entregó y puso un pie en el estribo.

"¿Pero a dónde vamos?" Preguntó Alick frunciendo el ceño. "No podemos llevarla de
regreso a Drummond. Ella no está a salvo allí”.

"Nay, ella no lo está", Geordie estuvo de acuerdo solemnemente, y luego señaló, "Pero
es la última de los hijos del viejo laird. Es ahora la líder del clan. No nos agradecería
despertarse y descubrir que la hicimos tan cobarde como Brodie al llevarla a un lugar
seguro en Buchanan y dejar a su gente desprotegida”.

Niels apretó la boca mientras su hermano ponía en palabras sus propios pensamientos.
Por mucho que le gustaría de otra manera, debían regresar a Drummond. Y luego
tendrían que mantener a Edith a salvo mientras él esfumaba al asesino. Solo esperaba
por Dios poder hacerlo antes de que el asesino pueda terminar lo que había
comenzado y matar al último de la familia Drummond, su esposa.

~ 158 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Están levantando la puerta".

Niels desvió su mirada del rostro pálido y dormido de Edith a la luz de la luna y miró
hacia la fortaleza para ver que la puerta se estaba elevando. Ahora que la tormenta
finalmente había terminado, el cielo nocturno era tan claro como podría ser con una
gran luna llena y un sinnúmero de estrellas que hacían la visibilidad bastante buena
ahora que estaban fuera de la cobertura de los árboles.

Suspirando, Niels instó a su caballo a cruzar la zona abierta entre el castillo y el bosque
que lo rodeaba. Marcó el ritmo en una caminata lenta para evitar sacudir a Edith.

Niels había enviado a Geordie para advertir a los hombres en la pared que estaban
regresando y para que abrieran la puerta. Mientras hacía eso, Niels y Alick habían
esperado en la base de la colina, justo afuera de los árboles. Había querido evitar
acercarse demasiado y arriesgarse a que Edith se despertara por los gritos de un lado a
otro. Se había despertado varias veces en el viaje de regreso, y cada vez había llorado
hasta volver a dormirse. La única razón por la que sabía eso era porque, escondida
bajo el tartán que él había envuelto sobre los dos, ella había empapado su camisa con
cálidas lágrimas todas y cada una de las veces que se había despertado.

Niels sabía que todas las lágrimas no eran solo por Brodie y Victoria. Edith finalmente
estaba de luto por el fallecimiento de toda su familia. Había dejado salir un poco cuando
Cawley había muerto, pero eso solo había sido una gota en el cubo de dolor que debía
sentir. Ni siquiera podía imaginar cómo se sentiría si perdiera a todos sus hermanos y a
su hermana en unas pocas semanas. Pero sabía que sería devastador. Niels quería
ahorrarle eso tanto como fuera posible por el momento. Sabía que solo estaba
retrasando lo inevitable. Edith necesitaba liberar su dolor y llorar, y si no lo hacía ahora,
lo haría más tarde. Pero entre la siesta de poco más de una hora de anoche después
de su envenenamiento, y su muy largo e inútil viaje de hoy, Niels estaba demasiado
agotado como para poder ofrecerle la comodidad que sentía que necesitaría. Esperaba
poder meterla dentro y acostarse sin despertarla. Una vez que hubiera tenido una
siesta, incluso una breve, podría sostenerla y consolarla mientras ella agotaba sus
lágrimas.

Geordie había desmontado y esperaba en la puerta con Tormod, Rory y varios


soldados mientras Niels llegaba. Cuando Geordie se metió en su camino, detuvo su
caballo y levantó una ceja en cuestión.

Si él podía ver eso o no, Geordie explicó: "Los hombres están esperando para
protegerla de las flechas", dijo solemnemente mientras el grupo de hombres se
precipitaba con varios artículos que Niels no entendió hasta que los juntaron al lado de
su caballo. Un barril, una caja y un cubo uno al lado del otro formaban un conjunto de
escaleras improvisadas para que desmontara sin sacudir a Edith.

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Serie Novias Escocesas #5
"Gracias," Niels casi susurró las palabras. Apoyando su pie izquierdo en el barril,
levantó y movió su pierna derecha sobre la cabeza de su montura y se puso de pie con
Edith en sus brazos. Luego caminó por la caja y el cubo como si fueran escaleras para
llegar al suelo.

Cuando Alick desmontó y se llevaron a sus caballos, Tormod dijo: "Por aquí”, y se hizo
a un lado para que Niels echara un vistazo a lo que habían arreglado. La vista lo hizo
detenerse sorprendido.

Con la furiosa tormenta ralentizándolos al principio, el viaje de regreso tomó más tiempo
que el de ida. Era tarde ahora, más cerca del amanecer que del crepúsculo que
acababa de pasar. Todos menos los hombres en la pared deberían haber estado
durmiendo dentro, y probablemente lo habían estado antes de la llegada de Geordie.
Pero ahora parecía que hasta el último hombre y mujer en Drummond, desde los
soldados hasta las cocineras, estaban alineados de dos en dos desde la puerta de
entrada a las puertas de la fortaleza, cada uno de ellos sosteniendo un escudo en el
aire para que se formaran un túnel en el que Niels podría llevar a Edith con seguridad
sin el temor de las flechas de arriba.

Al tragar, Niels se volvió hacia Geordie y murmuró: "Gracias".

"No fue idea mía", dijo con una sonrisa torcida. "La noticia de que encontramos al Laird
Brodie muerto y Lady Edith regresó se extendió mientras esperábamos a que cruzases
desde el bosque hasta la puerta de embarque y los hombres solo comenzaron a
alinearse con los escudos. Antes de darme cuenta, los sirvientes estaban saliendo del
castillo para ayudar a proteger a su señora. Su gente piensa mucho de tu esposa".

Niels lo miró sin comprender durante un minuto, y luego simplemente asintió y comenzó
a caminar por el túnel que la gente de Edith había hecho para ofrecerle un paso seguro.
Pero se conmovió más allá de las palabras con esta muestra de cuidado y
preocupación por su esposa. Para él, eso indicaba que se preocupaban tanto como ella
por ellos. Estaba bastante seguro de que no habrían hecho esto por su hermano.

Niels caminó rápidamente, pero mantuvo la cabeza en alto e intentó hacer contacto
visual con cada persona que pasaba para hacerles saber que sus acciones fueron
notadas y apreciadas. Muchos asintieron como si entendieran, otros simplemente se
enderezaron un poco con orgullo, pero algunos no se dieron cuenta porque sus ojos
tristes estaban puestos en su durmiente señora.

A pesar del túnel de escudos, Niels se sintió aliviado de tener a Edith dentro de la
fortaleza. Después de horas pasando frío y humedad, el calor en el gran salón era
bienvenido.

"Envié a Moibeal para encender un fuego en la habitación de mi lady", anunció Tormod


mientras lo seguían adentro.

~ 160 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Gracias. Coge un barril de cerveza y algunas copas y sube", añadió mientras se dirigía
hacia las escaleras.

"¿Quién?", Preguntó Geordie con incertidumbre.

"Todos ustedes", dijo Niels sombríamente. Quería que Tormod y sus hermanos
estuvieran allí. Necesitaba hablar con ellos, pero no estaba dispuesto a dejar sola a
Edith. Tendrían que hablar suavemente alrededor de la mesa junto al fuego... que solo
tenía dos sillas, recordó, y cuando comenzó a subir las escaleras, Niels agregó: "Puede
que quieran agarrar algunas sillas de las otras habitaciones. Solo hay dos”.

"¿Estás seguro de que todos cabremos?" Preguntó Rory, y algo sobre la diversión en
su voz hizo que Niels se detuviera y medio giró para mirar hacia atrás. Sus ojos se
abrieron incrédulos cuando vio que hasta el último hombre y mujer que se habían
alineado para asegurar el paso seguro de Edith, los había seguido adentro y al otro lado
del gran salón, o estaban en las escaleras detrás de él, o esperando pacientemente su
turno para seguirlos arriba de las escaleras. Parecía que su "todos ustedes" había sido
escuchado y tomado literalmente cuando solo se refería a sus hermanos y Tormod.
Niels casi explicó que realmente no había querido decir a todos en el castillo, pero
luego cambió de parecer y simplemente dijo: "Hablaremos aquí".

Tan pronto como todos comenzaron a retroceder escaleras abajo, Niels miró a Alick y
preguntó: "¿Podrías buscar algunas pieles de la cama para poner a Edith junto al
fuego?"

"Por supuesto." Alick se deslizó junto a él y se apresuró a subir las escaleras mientras
Niels seguía a todos los demás hacia abajo. Fue tan lento yendo con tantos delante de
él que Alick regresó justo cuando bajó las escaleras y comenzó a caminar hacia el
fuego. Parecía que su hermano había agarrado hasta el último pelaje de la cama, y
algunos de otra habitación, notó con una sonrisa cansada mientras el hombre más
joven corría hacia adelante para acomodar y apilar las pieles para hacer una cama
cómoda. Luego colocó el último par sobre Edith una vez que Niels la había posado
gentilmente sobre los demás.

En el momento en que dieron un paso atrás, Laddie apareció y se acurrucó frente a su


ama. Edith se movió entonces, y Niels contuvo el aliento, temiendo que se despertara,
pero ella simplemente enroscó su brazo alrededor del perro y enterró su rostro en su
pelaje.

"Laddie y yo la mantendremos a salvo, mi lord", dijo Ronson solemnemente a su lado.

Niels bajó la mirada a su pequeño y serio rostro y asintió. "Gracias, muchacho".

Ronson asintió en respuesta y luego se sentó en el borde de las pieles para mirar a su
señora con ojos demasiado viejos para sus años.

~ 161 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Con un suspiro, Niels se volvió y se dirigió hacia donde los hombres estaban volviendo
a montar silenciosamente las mesas de caballete. Se desarmaban todas las noches
para dejar espacio para dormir, y luego se volvían a armar todas las mañanas, pero la
mañana llegó temprano este día. O tal vez se había extendido la noche, pensó Niels, ya
que planeaba retirarse tan pronto como terminara de hablar con su gente.

"¿Así que encontraron a Brodie?" Dijo Tormod finalmente, una vez que Niels estaba
sentado con la cerveza en la mano.

"Aye", dijo sombríamente. "En el pabellón de caza de la familia. Brodie, su esposa y los
cinco hombres restantes de su escolta estaban todos allí, muertos. Y sus caballos
estaban todos en los establos todavía y también muertos”.

"Muertos de hambre", dijo Geordie.

"¿Podrían decirnos cómo murieron Brodie y los demás?", Preguntó Rory. "¿Había
heridas o...?"

"Creo que fue veneno", interrumpió Niels. "Estaban todos en la mesa con tazones de lo
que parecía un estofado seco delante de ellos y copas medio llenas de cerveza. El
barril de cerveza tenía una pista de ese olor del hidromiel envenenado, así que supongo
que fueron envenenados, pero que esta vez fue suficiente para decir que fue de acción
rápida. A diferencia del Laird Drummond y sus hijos, ni siquiera terminaron de comer o
se levantaron de sus asientos antes de morir. Y habían estado muertos bastante
tiempo, el tiempo suficiente para que estuvieran irreconocibles".

"La doncella", murmuró Tormod.

Niels miró al guerrero con incertidumbre. "¿Moibeal?"

"Nay, la doncella de Lady Victoria, Nessa. Dijo que había una mujer y seis hombres,
pero Lady Victoria se llevó a su joven doncella y dejó a Effie aquí. Deberían haber
habido dos mujeres y seis hombres”.

"Oh, aye", dijo Niels frunciendo el ceño. "Recuerdo que Edith la mencionó, o tal vez
fuiste tú, pero solo vi una mujer". Se volvió hacia Geordie en cuestión, pero su hermano
negó con la cabeza.

"Tampoco vi a otra mujer. Solo una", dijo en voz baja.

"Tal vez no eran ellos entonces", dijo Tormod. "Dijo que estaban irreconocibles".

"Aye. Es por eso que quité esto del dedo del que estaba al lado de la mujer”. Niels se
sacó el anillo de su bolsillo y se lo ofreció a Tormod para que lo viera.

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La boca del anciano se tensó y asintió. "Aye. Brodie tenía eso cuando se fueron. Es el
anillo del laird”. Pasó una mano cansada por su canoso cabello y dijo: "Tomaré algunos
hombres e iré por los cuerpos con la primera luz. También revisaremos el área por la
doncella. Tal vez no tuvo tanto como los demás y logró arrastrarse afuera para morir".

Niels gruñó ante la sugerencia, pero luego aclaró su garganta y dijo, "Solo para que
estés preparado, son un desastre terrible. Hinchados y su piel resbalando. Tuve que
cortarle el dedo a Brodie y sacarlo para poder llevar el anillo a Edith para que lo
identificara".

"Entonces han estado muertos bastante tiempo", dijo Rory en voz baja.

"Creo que sería probablemente desde la noche en que llegaron al pabellón de caza",
dijo Niels solemnemente. "Los caballos habrían tardado tres o cuatro días, tal vez una
semana como máximo para morir sin comida y agua, y estaban lejos de estar recién
muertos también".

"¿Y ahora qué?", Preguntó Tormod en voz baja.

"Ahora mantengo a Edith a salvo y encuentro al culpable detrás de las muertes de toda
su familia", dijo Niels con gravedad, frotándose la parte posterior del cuello. Estaba tan
malditamente cansado, pero dijo: "Vamos a tener que encontrar la forma de evitar que
la comida y la bebida sean envenenadas".

"Puedo restringir el acceso a las cocinas solo para mí y para mis tres trabajadoras más
confiables".

Niels miró alrededor hasta que vio al orador, y reconoció al cocinero de Drummond,
Jaimie, entre la multitud de personas que habían estado de pie y sentadas cerca
escuchando. El hombre dio un paso adelante y continuó, "Podemos instalar mesas
afuera de la cocina. Las tres muchachas que elija pueden entregar la comida en esa
mesa cuando esté lista, para que los otros sirvientes las lleven a las mesas de
caballete. Pero personalmente llevaré a lady Edith su comida para asegurarme de que
nadie se acerque a ella.

"Moveremos varios barriles de cerveza y sidra de la bodega y los guardaremos aquí en


el gran salón hasta que esto se resuelva. De esa forma podemos guardar lo que Lady
Edith quiera beber encerrado en la bodega", agregó Tormod. "Soy el único con una
llave. Personalmente iré a buscar su bebida cuando quiera una".

"Eso cubre la intoxicación", dijo Rory en voz baja. "Pero significa que tendrás que vigilar
por si es atacada".

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"Aye", asintió Niels. "Necesitará una guardia con ella en todo momento, al menos dos
hombres. Y no puede ir al patio a menos que tenga escudos a su alrededor y sobre su
cabeza para protegerse de las flechas”.

"Ordenaré a sus guardias por turnos antes de irme", dijo Tormod en voz baja. "Estoy
seguro de que no tendremos escasez de voluntarios".

Un murmullo de acuerdo rodeó a la multitud, y Niels asintió con cansancio, pero luego
se levantó. "Gracias. Me voy a la cama”.

"Los acompañaré a Edith y a ti arriba. Yo también estoy listo para la cama”, dijo
Geordie, levantándose también.

"Aye", Alick se levantó. "Ha sido un día largo".

Niels comenzó a darse la vuelta y luego se detuvo y se volvió. "Tormod, si vas a la


cabaña, no vas a estar aquí para atender la bebida de Edith. Quizás deberías darme la
llave hasta que vuelvas”.

"Oh, aye". Tormod buscó a través de un anillo de llaves el correcto. Quitándolo, lo


sostuvo en alto, pero luego dijo: “Hay cosas acerca de las que tendré que hablar con
lady Edith y usted cuándo vuelva. Cosas que deberían saber ahora que Brodie está
muerto”.

Asintiendo con la cabeza, Niels tomó la llave. "Hablaremos cuando vuelvas", le aseguró
y luego agregó un solemne "ten un viaje seguro".

"Aye, y todos ustedes una estancia a salvo aquí también, mi Lord", dijo Tormod con
gravedad. "Debe tener en consideración que ahora que se ha casado con nuestra
señora, usted puede ser un objetivo también".

Niels se puso rígido por la sorpresa ante la sugerencia, pero luego asintió lentamente y
se volvió para acercarse a recoger a Edith. Ronson miraba adormilado mientras se
acercaban. Al verlos venir, sin embargo, empujó a Laddie para que se despertara y
luego lo agarró por el cuello para empujarlo hacia arriba, fuera de las pieles y del
camino.

Edith murmuró adormilada cuando Niels la levantó cuidadosamente, pero no se


despertó por completo.

"Traeré las pieles", Niels escuchó a Alick susurrar detrás de él mientras giraba hacia la
escalera.

Niels no se sorprendió cuando sus tres hermanos lo siguieron escaleras arriba y a la


habitación de Edith. La acostó en la cama, la cubrió con las sabanas y luego ayudó a
Alick a arreglar las pieles antes de ir a la puerta con ellos.
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Serie Novias Escocesas #5
"Tormod tiene razón", dijo Rory haciendo una pausa en la puerta y volviéndose para
mirarlo preocupado. "Podrías ser un objetivo también ahora que te casaste con Edith".

Niels se encogió de hombros. "Y como aprendimos de Moibeal y Effie, el simple hecho
de estar aquí podría envenenar o matar a una persona".

Geordie frunció el ceño. "Realmente necesitamos elaborar un plan mejor que solo tratar
de mantener a Edith a salvo. Necesitamos atrapar a este bastardo”.

"Estoy abierto a sugerencias", dijo Niels en voz baja. "Pero no hasta después de haber
dormido. Estoy demasiado cansado para pensar correctamente ahora mismo”.

"Aye, descansa un poco", dijo Rory, girando para abrir la puerta. "Hablaremos una vez
que hayas dormido un poco".

Niels gruñó de acuerdo, sostuvo la puerta cuando sus hermanos se marcharon y luego
la cerró en silencio y se dirigió a la cama. Tenía intención de quitarle el vestido a Edith
después de que los hombres se fueran para poder dormir cómodamente, pero al final ni
siquiera se molestó en quitarse la ropa. Simplemente se acostó sobre las pieles y se
durmió en el momento en que golpeó la cama con la cabeza.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 12

Edith abrió la puerta del dormitorio, y luego se detuvo y miró a los dos hombres que
yacían sobre esteras en el piso del pasillo. Geordie y Alick. Estaban acostados cabeza
a cabeza, directamente en frente de la puerta. Un movimiento captó su atención
entonces, y levantó la vista para ver a otros dos hombres de pie contra la pared
opuesta. Eran soldados de Drummond a quienes conocía desde hacía años. Dos de los
hombres más confiables de Tormod, Cameron y Fearghas. Justo cuando notó eso,
Cameron dio un paso adelante y le ofreció una mano.

Después de una vacilación, Edith aceptó y la agarró mientras levantaba su falda lo


suficientemente alto como para despejar las cabezas de los hombres en el suelo y pasó
por encima de ellos.

"Gracias," dijo Edith las palabras en un susurro de sonido para evitar despertar a
Geordie y Alick, pero Cameron pareció escucharla. Asintiendo con la cabeza, él se
inclinó para cerrar la puerta silenciosamente y luego se enderezó y simplemente se
quedó allí, esperando.

Sonriendo con incertidumbre, Edith se volvió para dirigirse por el pasillo e


inmediatamente escuchó un suave murmullo que sugería que los hombres la estaban
siguiendo. Esperó hasta que estuvo a mitad de camino a las escaleras antes de
detenerse para darse la vuelta. Ambos hombres se detuvieron a la vez, esperando.

Con la esperanza de que la distancia fuera lo suficientemente grande como para no


molestar a los dos hombres que aún dormían, levantó una ceja y preguntó en voz baja:
"¿Supongo que tienen la intención de protegerme?"

"Aye, mi Lady", respondió Cameron.

"Tormod ha dispuesto que dos hombres la protejan día y noche", agregó Fearghas.
"Debemos quedarnos hasta el final de la cena cuando seremos reemplazados por otros
dos".

"Ah". Edith suspiró. Debería haber esperado tanto, supuso, y luego frunció el ceño
cuando escuchó un movimiento de regreso por el pasillo. Inclinándose hacia un lado,
vio a Geordie que se movía sobre su estera y decidió que sería mejor que se moviera o
despertarían a la pareja. Sonriendo a los hombres torcidamente, asintió y luego se giró
para apresurarse el resto del camino hacia las escaleras, consciente de que la seguían
de inmediato.

~ 166 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"¿Qué estás haciendo? ¿Dónde está Niels?”

Saltando sorprendida por esas palabras en auge cuando llegó a la parte superior de las
escaleras, Edith se agarró a la barandilla para calmarse y se volvió para fruncir el ceño
a Geordie y Alick, que parecían soñolientos, mientras corrían hacia ella y sus guardias.
Se las había arreglado para levantarse de la cama y llegar a la puerta sin despertar a su
marido, y ahora no haría que sus hermanos lo hicieran con sus gritos.

"Mi esposo está durmiendo. Algo que ha hecho poco más de un rato, así que
mantengan sus voces bajas”, dijo Edith en un siseo suave.

"Aye", Geordie reconoció en voz más baja. "Apostaría a que no ha dormido un puñado
de horas desde que llegamos aquí la semana pasada”.

Edith frunció el ceño ante esta noticia. Sabía que Niels no había dormido mucho desde
que ella despertó, pero no se había dado cuenta de que había comenzado antes.
Suspirando, cambió de tema y dijo: "Estaba yendo abajo para desayunar. Pueden venir
conmigo si lo desean, pero como pueden ver, ya tengo hombres para protegerme, así
que quizás prefieran encontrar sus camas y dormir lo suficiente".

"Nay. Iremos contigo", dijo firmemente Geordie.

"Aye". Alick asintió.

Encogiéndose de hombros, Edith se volvió y comenzó a bajar las escaleras. Les había
dado una salida si hubieran deseado dormir. Parecía que no lo harían, y aunque
Tormod había ordenado a dos hombres que la protegieran, realmente tenía una guardia
de cuatro.

Ignorando el ruido de sus pies detrás de ella, miró alrededor del gran salón mientras
descendía. Las mesas de caballete estaban preparadas, pero la mayoría de los
habitantes del castillo aparentemente ya habían desayunado y se habían ocupado de
sus asuntos. Había solo un par de personas en la mesa, y parecían estar terminando y
preparándose para irse. Bessie estaba sentada junto al fuego como de costumbre,
reparando a mano, pero su mirada cariñosa estaba en su nieto, Ronson, mientras
dormía acurrucado junto a Laddie entre ella y el fuego.

Eso era inusual: el chico normalmente estaría despierto a esta hora, corriendo por la
fortaleza y el patio. Edith suponía que su regreso tarde la noche anterior había
perturbado el sueño de todos, aunque aparentemente había dormido a través de eso.
Ella no estaba terriblemente sorprendida. Se había pasado la mayor parte del trayecto
desde la cabaña de caza, acurrucada bajo el plaid que Niels había envuelto alrededor
de ellos, tratando de no llorar y luego rindiéndose en sollozos mientras su mente corría
en círculos repitiendo las últimas semanas en su cabeza. Su padre y sus hermanos
muriendo, Cawley muriendo y ahora el hecho de que Brodie también había muerto.

~ 167 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Había sido un alivio finalmente dormirse y escapar de su miseria. No le sorprendió en
absoluto que su mente herida se hubiera aferrado al sueño una vez que hubieran
regresado a casa.

De hecho, Edith casi se había dado la vuelta y había vuelto a dormirse cuando despertó
esta mañana. Pero sabía que no podía escapar de lo que había pasado durante el
sueño, y dejarse llevar por los sentimientos oscuros que trataban de reclamarla podría
ser peligroso. Podría ser difícil salir de un agujero una vez que tu mente cavó su camino
en él.

Lo que necesitaba era una apariencia de normalidad, pensó Edith. Para ella eso
significaba volver a su rutina habitual de atender a Drummond y su gente. Con ese
pensamiento en mente, cruzó el gran salón hasta la puerta de las cocinas, mirando con
curiosidad a los dos hombres que estaban de guardia allí. Ambos asintieron
solemnemente a modo de saludo y uno le abrió la puerta, mientras el otro se
adelantaba y extendía una mano para impedir el paso de los hombres.

"Lady Edith puede entrar, pero nadie más", dijo el hombre casi en tono de disculpa, y
Edith miró a su alrededor, sorprendida de ver el enojo reflejado en las caras de los
cuatro hombres.

"Pero debemos protegerla. Nos ordenaron no dejarla salir de nuestra vista", señaló
Cameron.

"Y se nos ordenó no dejar pasar a nadie más que al esposo de Lady Edith”, dijo el
guardia con firmeza.

"La estás dejando pasar", señaló Geordie.

"Bueno, aye", dijo el hombre como si la razón de eso fuera obvia. En caso de que no
fuera así, agregó, "Es nuestra señora. Difícilmente podemos impedirle ir a donde quiere
en su propio castillo, ¿verdad?”.

Fearghas fulminó con la mirada al hombre. "Es nuestra señora también y debemos
mantenerla a salvo, así que quítate del camino, llaga verrugosa, antes de que yo..."

"Tal vez deberías dejar que al menos uno de mis guardias me acompañe a la cocina",
interrumpió Edith, temerosa de que comenzaran una pelea. "De esa manera él puede
mantenerme a salvo y ayudarme a llevar bebidas para todos".

Hubo silencio por un momento cuando los hombres se miraron furiosos, y luego el
guardia de la cocina cedió y se hizo a un lado. "Está bien, pero solo uno de ustedes, y
yo también los acompañaré, para estar seguro de que todo está bien. El resto
esperarán aquí con Arnie”.

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"Bien", dijo Edith rápidamente antes de que nadie pudiera protestar. Echando un vistazo
a los rostros ceñudos de Geordie y Alick, sonrió tranquilizadoramente. "Solo será un
momento y nos traeré a todos algo para nuestro desayuno".

Al darse vuelta, se apresuró a entrar en la cocina, intentando evitar más protestas o


problemas. No se molestó en mirar a su alrededor para ver si era Cameron o Fearghas
el guardia que la acompañaba, sino que simplemente se dirigió hacia Jaimie tan pronto
como lo vio cortando un lado grande de carne.

"¡Oh! Mi lady”, saludó, soltando el cuchillo grande y secándose las manos rápidamente
cuando la vio acercarse. "Buen día. ¿Cómo se siente? ¿Está lista para desayunar?”

"Aye, Jaimie". Ella le sonrió con gratitud. "Geordie y Alick también están despiertos y
listos para desayunar, y..." Ella miró hacia atrás para ver que Cameron era el que la
había seguido adentro con el guardia de la puerta. Cuando levantó una ceja en
cuestión, él negó con la cabeza.

"Fearghas y yo ya desayunamos, gracias, mi lady", murmuró.

Volviéndose hacia Jaimie, dijo: "Entonces quizás solo una jarra de cerveza para los
hombres. De esa forma, Cameron y Fearghas pueden tener algo si lo desean. Pero
creo que yo tendré sidra esta mañana”. Después del incidente con el hidromiel en su
noche de bodas, ahora estaba tan reacia a beber eso como el vino. Con suerte, su
nueva aversión por las dos bebidas no duraría mucho, porque si seguía así, no habría
nada que quisiera beber, pensó Edith y luego notó que Jaimie se había quedado en
silencio y miraba hacia los guardias con alarma. Levantando las cejas, preguntó: "¿Hay
algo mal? ¿Nos hemos quedado sin sidra?”

"N-nay", tartamudeó Jaimie, y luego negó con la cabeza y explicó: "Pero no puedo ir a
buscarle algo para beber, mi lady. Tormod cerró la bodega para asegurarse de que
nadie pudiese volver a envenenarla”.

"Oh", dijo Edith desconcertada, y luego sonrió con ironía. "Supongo que tendré que
encontrar a Tormod para poder tomar algo".

"Ah..." Dijo Cameron detrás de ella y cuando Edith se volvió hacia él en cuestión, le
explicó en tono de disculpa, "Tormod tomó una carreta y algunos hombres para ir a la
cabaña con la primera luz. Él le dio la llave a su esposo antes de irse".

"Pero está durmiendo", dijo Edith con un suspiro.

"Podría enviar a Fearghas para que lo despierte y pedirle la llave", sugirió Cameron,
pero negó con la cabeza.

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"Nay. Ha dormido muy poco últimamente y lo necesita”. Forzando una sonrisa, se volvió
hacia el cocinero y dijo: "Supongo que solo tendré una manzana o algo así por ahora,
Jaimie, y luego comeré algo más relleno cuando mi esposo se despierte y pueda tomar
algo con él".

Asintiendo con la cabeza, se volvió y corrió a la despensa, ladrando a las mujeres que
cortaban vegetales para conseguir comida y bebida para los hombres.

Suspirando, Edith caminó distraídamente por las cocinas mientras esperaba y sonrió
para sus adentros. Nunca la había visto tan vacía. Por lo general, había mucha gente
corriendo y ella se preguntaba si tener a su personal tan restringido le haría las cosas
más difíciles a Jaimie.

"Aquí tiene, mi lady. Le traje dos. Las mejores del grupo”, dijo Jaimie mientras corría
hacia ella.

"Gracias”, murmuró Edith, aceptando las manzanas que le ofreció.

Él asintió con la cabeza y sonrió torcidamente, pero había preocupación en sus ojos y
Edith levantó las cejas en cuestión y preguntó: "¿Hay algo mal, Jaimie?"

"Oh, nay, nay", le aseguró, y luego frunció el ceño y agregó: "Bueno, aye, me
preguntaba…"

"¿Qué?" Edith preguntó alentadoramente.

Suspirando, Jaimie negó con la cabeza y dijo en tono de disculpa: "Este es el día de
mercado en el pueblo, mi lady".

"¿Lo es?" Preguntó Edith con sorpresa. Tenían día de mercado en el pueblo todos los
sábados. El sacerdote había querido que fuera los domingos para alentar a los
feligreses a asistir a la misa antes de visitar a los comerciantes que se alineaban con
sus mercancías, pero sus vecinos, los Lindsays, tenían el suyo los domingos y algunos
de los vendedores eran comerciantes ambulantes que comerciaban en ambos lugares,
así que era el sábado.

Edith supuso que era una señal del estrés en el que había estado, había logrado perder
la noción de qué día era y casi se había olvidado del día del mercado. Siempre iba a
comprar queso, huevos, capones9 y especias o cualquier otra cosa que Jaimie pudiera
necesitar. Le ahorraba el problema a él y le daba la oportunidad a ella de salir del
castillo. Además, le gustaba mirar todo lo que se exhibía. A veces, encontraba una tela
bonita, o algún jabón de calidad importado de España, o los países más calurosos.
Depende de lo que los comerciantes lograban llevar al día del mercado.

9
un gallo doméstico castrado engordado para comer.

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye, lo es", dijo Jaimie ahora, retorciéndose el delantal entre sus manos ansiosamente.
"Y antes de su regreso planeé asistir yo mismo para conseguir las cosas que
necesitamos, pero con las nuevas restricciones que me reducen el personal, me temo
que no tengo el tiempo y…"

"Nay, por supuesto que no", interrumpió Edith, acariciando su mano. "Iré. Solo dime lo
que necesitas y lo traeré por ti".

"Oh, gracias, mi lady", dijo Jaimie con alivio.

"No hay necesidad de agradecerme, Jaimie", le aseguró solemnemente. "Solo lamento


que tengas que recordarme mi deber. Me temo que ni siquiera me di cuenta de que era
día de mercado hasta que lo mencionaste”.

"Aye, bueno, no es de extrañar", dijo el cocinero con tristeza y simpatía en su rostro,


luego se mordió el labio y le ofreció: "Y si esta vez es demasiado problema, estoy
seguro de que puedo arreglármelas con lo que tenemos y…"

"Nay", le aseguró Edith y luego sonrió con ironía y admitió: "En verdad, sería bueno ir al
mercado y olvidar lo que ha estado sucediendo por aquí un poco".

Jaimie se iluminó de inmediato. "Oh, bueno, está bien entonces", dijo y comenzó a
recitar una lista que le hizo darse cuenta de lo dolorosa que había sido su oferta. Con
ella enferma durante semanas, y Jaimie teniendo un límite en la cantidad de monedas
que Tormod le daría para llevar al mercado, se habían quedado sin una gran cantidad
de cosas en el castillo. Le hizo preguntarse cómo había logrado producir las deliciosas
comidas que hacía. Pero ahora que estaba pensando en ello, la mayoría de las
comidas que había comido desde que había despertado habían sido guisos y sopas. Si
eso es todo lo que tenían para comer recientemente, entonces se imaginaba que todos
estarían hartos de ellos.

Mientras su lista continuaba, Edith comenzó a sentirse agradecida por tener a sus
guardias. De hecho, comenzó a desear que Geordie y Alick insistieran en acompañarla
también, porque necesitaría la ayuda para traer todo. Quizás también se llevaría a
Ronson y Laddie con ella... y una carreta. Nay, un vagón.

"Mi lady, ¿no cree que deberíamos volver al vagón ahora?"

Edith se volvió para responder a las suplicantes palabras de Cameron, y parpadeó


sorprendida cuando chocó su nariz contra el escudo que Ronson estaba luchando por
sostener detrás de ella mientras la seguía.

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Serie Novias Escocesas #5
"Lo siento, mi lady", dijo Ronson con seriedad, retrocediendo un paso.

"Está bien, muchacho", dijo con una sonrisa, y luego miró a Cameron, abrió la boca y
luego volvió a cerrarla frunciendo el ceño al ver que, aunque sus manos estaban libres,
una de ellas estaba sobre su espada. Mientras tanto, Fearghas, Geordie y Alick estaban
haciendo malabares con desbordantes cargamentos de los artículos que ella había
estado pasando hacia atrás cuando los compraba. No se había dado cuenta de que
había comprado tanto. Y solo estaba a la mitad de la lista.

Mordiéndose el labio, dijo: "Tal vez deberíamos llevar todo de vuelta al vagón. Entonces
uno puede esperar con nuestros productos mientras el resto de nosotros continuamos
comprando”.

"Mi lady", dijo Cameron cansinamente. "Realmente no debería estar aquí”.

"Aye", estuvo de acuerdo Geordie. "Niels ni siquiera quería que salieras de la fortaleza,
y mucho menos al pueblo".

"Eso puede ser, pero como señora de Drummond hay ciertas cosas que necesito hacer,
y si todos quieren llenarse los estómagos de algo que no sea estofado la próxima
semana, entonces tenemos que terminar de obtener los artículos en la lista de Jaimie”,
Edith dijo firmemente. Este fue el argumento que los había convencido de ceder a
regañadientes y dejarla irse del castillo para empezar. Lo cual era una completa tontería
para ella. Era la Señora de Drummond y simplemente podría haber ordenado a sus
guardias que hicieran que Geordie y Alick se apartaran del camino y la acompañaran al
mercado, y tendrían que haberlo hecho. Pero no creía que eso le permitiera ganar
puntos con sus nuevos cuñados, así que razonó, engatusó y suplicó hasta que los
hombres cedieron.

Aunque, en verdad, Edith sospechaba que al final había sido la amenaza de guiso otra
semana lo que había ganado su discusión. Ciertamente había cambiado el rumbo de
Cameron y Fearghas, lo que había ayudado a los reacios Geordie y Alick. Al parecer, el
estofado había sido más o menos la comida de elección durante las últimas tres
semanas y su gente estaba harta de ello.

"¿Cuánto más hay que obtener?", Preguntó Geordie finalmente después de que todos
los hombres intercambiaron miradas.

"Varias especias, capones y queso", respondió Edith a la vez, y luego frunció el ceño y
agregó: "Y casi estamos sin jabón también".

Geordie negó con la cabeza, pero dijo: "Continúa entonces. Pero uno de nosotros
pronto tendrá que comenzar a llevar los artículos al vagón. No podemos llevar mucho
más”.

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Serie Novias Escocesas #5
"Dos tendrán que llevar los artículos de vuelta y luego uno tendrá que vigilar los bienes
en el vagón mientras el otro regresa para llevar más".

Edith dio media vuelta ante esa voz seca y sonrió alegremente a Niels mientras se abría
paso entre Geordie y Alick para alcanzarla. "¡Esposo! Estás despierto”.

Él hizo una mueca ante las palabras, pero se inclinó sobre Ronson y el escudo para
besarla en la frente antes de gruñir, "Deberías haberme despertado cuando te
levantaste".

"Estabas cansado y…"

"Y no deberías estar aquí afuera. No es seguro”, la interrumpió Niels con gravedad.

"Tengo mis guardias, y tus hermanos e incluso Ronson aquí", dijo, sonriéndole al chico.

"Lo siento, hermano", murmuró Geordie. "Pero tu esposa puede ser justamente
persuasiva cuando lo desea, y parece que al cocinero se le han agotado muchos
artículos mientras ella estaba enferma y otras cosas".

"Y tenía sed", añadió Edith tratando de dar una mirada lastimosa. "Pero parece que
toda la bebida en la torre ha sido encerrada. Incluso la sidra. Así que bajamos y
tomamos un trago en la posada antes de comenzar a comprar, de lo contrario ya
estaríamos listos y regresando por ahora”.

"No es probable. Estaremos aquí hasta que el mercado cierre a este ritmo", dijo Alick en
voz baja, ganando el ceño fruncido de Edith.

"¿Dejaron que bebiera en la posada?", Preguntó Niels con consternación.

"Bueno, por supuesto que sí", dijo Edith frunciendo el ceño ahora. "¿Por qué no lo
harían? El posadero no podría ser el que me envenenó en la torre del homenaje".

"Nay, pero ¿y si el que te está envenenando te ha seguido desde la torre del homenaje
y ha logrado soltar el veneno en tu bebida en la posada?", preguntó bruscamente.

"He vigilado eso, mi lord", dijo Cameron en el acto y Edith lo miró con sorpresa. Ella ni
siquiera había pensado en eso sucediendo. Sin embargo, parecía que sus guardias sí.
Suponía que era por eso que eran algunos de los hombres más confiables de Tormod.
Pensaban en cosas como esas.

"Esposa", dijo Niels ahora, atrayendo su mirada hacia él. "La bebida está encerrada y
tienes guardias para mantenerte con vida. Pero haces que sea más difícil hacerlo
poniéndote al descubierto en donde eres un blanco fácil. No deberías haber salido de la
fortaleza”.

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Serie Novias Escocesas #5
Edith entrecerró sus ojos en él brevemente y luego preguntó, "¿Dónde están tus
guardias?"

"¿Qué?", Preguntó con sorpresa.

"Bueno, puedes ser un objetivo también ahora que te has casado conmigo", señaló, y
agregó: "Después de todo, la Victoria de Brodie fue asesinada. Deberías mantenerte en
la fortaleza también, y seguramente no deberías andar sin una guardia. Así que...
¿Dónde están?"

"Ella tiene razón en eso, hermano", dijo Geordie y le recordó, "Estábamos hablando de
eso anoche. Podrías ser un objetivo ahora también”.

Niels frunció el ceño a su hermano por su molestia, y luego tomó el brazo de Edith y
trató de alejarla. "Bien. Regresemos ambos a la fortaleza en este momento".

"Nay", dijo Edith, jadeando, clavando los talones. "Todavía hay cosas que Jaimie
necesita".

Cuando Niels hizo una pausa y se volvió para fruncir el ceño, añadió: "Nuestro trabajo
es proporcionar lo que nuestra gente necesita, esposo. ¿Seguramente sabes eso? Si
no obtengo lo que necesita, no podrá hacer su trabajo correctamente, y será por mi
fracaso, no por él”.

Maldiciendo, la soltó y alzó las manos en el aire. "Bien. Obtendremos lo que el cocinero
necesita, pero no nos demoremos, Edith. Hazlo rápido para que podamos regresar a la
fortaleza".

Edith le sonrió alegremente y asintió. "Aye, esposo. Y mira, ahora que estás aquí,
ninguno de los hombres necesita regresar al carro. Tú puedes ayudar a llevar las
especias y el jabón".

Edith dio media vuelta y corrió hacia el comerciante de especias con Ronson y los
hombres que corrían para seguirle el paso y rodearla por todos lados.

"Y ahora sabes cómo terminamos aquí de compras con tu esposa".

"Hmm", murmuró Niels ante el comentario de Geordie mientras seguían a Ronson y los
otros tres hombres que revoloteaban alrededor de su esposa.

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"Aunque", agregó Geordie, "diré que se ha iluminado considerablemente desde que
salió de la fortaleza. Estaba triste y arrastrando los pies allí, pero se animó una vez que
llegamos aquí".

Niels frunció el ceño ante la noticia de que Edith se había mostrado triste y lenta cuando
se despertó, pero supuso que se debía esperar teniendo en cuenta todo lo que había
sucedido. A pesar de que había evitado hablar sobre su padre y sus hermanos, sabía
por las cosas que había oído de Saidh y Tormod que Edith había amado a su padre, así
como a sus hermanos... incluso Brodie, que, por lo visto, era un derrochador. También
le había gustado mucho Cawley. Y todos habían muerto en poco tiempo. En su opinión,
ella lo estaba manejando increíblemente bien.

"Así que estoy pensando que salir y estar aquí hoy puede ser algo bueno a pesar del
riesgo", concluyó Geordie.

"Aye", murmuró Niels. Ciertamente, Edith parecía animada y menos pálida de lo


habitual mientras regateaba con el comerciante de especias.

"¿Niels?" Dijo Alick, acercándose a él mientras se detenía detrás de Ronson.

"¿Hmm?", Preguntó, mirando a su hermano y notando que la mayoría de lo que el


muchacho sostenía eran telas. Una era una fina tela verde del color exacto de los ojos
de Edith de la que esperaba que ella planeara hacer un vestido. Se vería encantadora
en el material.

"Casi hemos circulado de vuelta al carro", señaló Alick. "¿Por qué Geordie y yo no
llevamos nuestros artículos al vagón, y luego esperaré allí para vigilar todo mientras
Edith termina? y Geordie podrá ayudar a llevar todo lo demás que compre".

"Aye, si no te importa, eso podría ayudar", dijo Niels asintiendo.

"Créeme, no me importa en absoluto", le aseguró Alick.

"Claro que no le importa, significa que puede sentarse y coquetear con todas las chicas
guapas aquí en lugar de pasearse con Edith con los brazos llenos", dijo secamente
Geordie, y luego se dirigió al carro con Alick, agregando: "Volveré inmediatamente".

Niels sonrió débilmente mientras se giraba hacia Edith y entonces miró hacia abajo con
sorpresa cuando varios artículos fueron apilados sobre sus brazos cruzados.

"Gracias, esposo", dijo Edith mientras apilaba las especias una encima de la otra sobre
él. "Fearghas no puede llevar más, Ronson está ocupado con el escudo y Cameron
insiste en que al menos uno de ellos debe tener las manos libres para defenderme si
surge la necesidad".

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Cuando ella se alejó rápidamente y luego corrió hacia el siguiente comerciante, Niels
negó con la cabeza y movió los brazos ligeramente para sostener los objetos ahora
acunados contra su pecho. Luego siguió a los demás detrás de su esposa. Estaba con
el comerciante de queso ahora, notó, y cuando su esposa había seleccionado varios
trozos de queso y no mostraba signos de desaceleración, Niels miró a Fearghas y
sugirió, "Quizás sea mejor que lleves eso al carro y le digas a Geordie que se dé prisa
en volver."

"Podríamos mejor solo traer el carro aquí", advirtió Cameron mientras Edith seguía
recogiendo queso. "El vendedor de jabón es el siguiente, pero los capones vienen
después de eso y con todo el castillo para alimentar, ella querrá muchos de ellos".

"Aye", estuvo de acuerdo Niels.

"Llevaré esto al vagón, y haré que Alick lo traiga aquí," anunció Fearghas y se dio vuelta
para irse corriendo.

Niels se volvió hacia su esposa y parpadeó al ver que ella había continuado con
Ronson siguiéndola mientras estaban distraídos. Ahora estaba frente al comerciante de
jabón, examinando las mercancías dispuestas en un plaid en el suelo.

"Oooh, esto huele bien", estaba diciendo mientras recogía y olfateaba uno de los
jabones.

"Aye, mi lady, ese tiene aceite de rosa en él", dijo el comerciante con una sonrisa.

Al detenerse junto a su esposa, Niels esperó hasta que ella seleccionó el jabón que
quería y pagó por él antes de preguntar: "Edith, ¿no obtuviste ningún queso?"

"Aye. Seleccioné muchos, Duer dijo que lo entregaría en el castillo", dijo volviéndose
para comenzar a acumular jabón en sus brazos, y luego se detuvo frunciendo el ceño
mientras observaba las especias que ya tenía. Aparentemente, preocupada de que el
jabón pudiera afectar la especia, comenzó a mirar a Cameron, pero se detuvo
repentinamente y sonrió mientras miraba más allá de los dos hombres. "Oh, bueno,
están trayendo el carro".

"Aye. Pensamos que lo necesitarías para el queso y los capones”, dijo secamente Niels.

Edith negó con la cabeza y se movió hacia adelante para dejar el jabón que tenía en la
parte trasera del vagón cuando se detuvo junto a ellos. "Nay. Siempre consigo tantos
capones que, una vez que hago el pedido y pago, Iain también los entrega al castillo".

Niels simplemente gruñó y se movió hacia arriba para apilar las especias que sostenía
en el carro cuando ella retrocedió. Cuando terminó y se dio la vuelta, ella se había ido al
hombre de los capones y estaba intercambiando con él. Ronson, Geordie, Fearghas y

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Cameron estaban con ella, por lo que caminó hasta la parte delantera del vagón y dijo:
"Los capones son lo último, pero serán entregados. Puedes regresar a la fortaleza si lo
deseas".

Asintiendo con la cabeza, Alick tomó las riendas y se dirigió afuera, dejando a Niels
acercarse a los demás. Había visto los caballos junto a la posada cuando llegó y
también había atado su caballo, así que allí fue donde todos se fueron cuando Edith
terminó su intercambio. Niels subió a Edith delante de él en su caballo, y luego sugirió:
"Geordie, ¿por qué no llevas a Ronson delante de ti?"

"Oh, nay, mi lord" protestó Ronson de inmediato. "Debo cabalgar contigo. Tengo que
mantener el escudo al frente de Lady Edith cuando lleguemos al patio”.

Niels iba a quitarle el escudo al muchacho para darle un respiro -había empezado a
parecer cansado hacia el final-, pero asintió con la cabeza ahora. "Muy bien,
muchacho".

Geordie inmediatamente atrapó al muchacho y lo levantó sobre el regazo de Edith, pero


se aferró al escudo y dijo: "Te lo daré una vez que lleguemos a la puerta. Se ponía un
poco en el medio en el camino de descenso".

"Aye", estuvo de acuerdo Ronson. "Fue un hijo de puta muy problemático".

Sacudiendo la cabeza, Geordie se giró y montó con el escudo y salieron. Niels dejó que
Cameron liderara el camino. Fearghas lo siguió y Geordie permaneció a su lado.
Cabalgaron a gran velocidad hasta que se acercaron a la puerta y entonces Cameron
comenzó a disminuir la velocidad. Sin embargo, se detuvo por completo cuando
llegaron a la puerta. Reteniendo su propia montura, Niels miró a Geordie mientras se
detenía junto a ellos y luego miraba cómo su hermano deslizaba el escudo refractor por
la parte trasera del caballo hacia Ronson y esperaba que lo agarrara, antes de soltarlo y
alejarse en su caballo.

"¿Listos?", Preguntó Cameron.

Niels asintió. El escudo tenía dos pies de alto acostado de lado como estaba. Dejó su
cabeza y parte de su pecho sobre él para poder ver, pero ocultó completamente a
Ronson, y cubrió todo excepto la parte superior de la cabeza de Edith. Cuando
Cameron comenzó a avanzar, él siguió de inmediato a través de la puerta y al patio,
contento de que el hombre hiciera una caminata rápida para cruzar hacia las escaleras
de la fortaleza.

Estaban a medio camino cuando Edith de repente se inclinó hacia un lado para mirar
alrededor del escudo. Frunciendo el ceño, él la empujó de vuelta. Ella fue de buena
gana y se quedó detrás del escudo por el resto de la distancia hasta la escalera.

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Consciente de que estaba vulnerable desde el cielo ahora, Niels tomó el escudo de
Ronson y lo sostuvo sobre su esposa y el muchacho hasta que Cameron desmontó y
vino a sacar al niño. Una vez que el muchacho bajó, Niels apretó con más fuerza a
Edith y desmontó, llevándola consigo, y luego la empujó escaleras arriba hasta la
puerta de la fortaleza. Él no bajó el escudo hasta que estuvieron dentro.

Luego le dio el escudo a Cameron, tomó el brazo de Edith y se dirigió inmediatamente


hacia las escaleras.

"Espera, ¿a dónde vamos?" Preguntó Edith con sorpresa. "Tenía la esperanza de que
desbloquearas la bodega para que yo pudiera beber algo".

Niels hizo una pausa al instante, pero luego se quedó allí frunciendo el ceño. Tenía la
intención de instarla arriba y seducirla para que consumasen su matrimonio. Tenía la
intención de hacer eso al despertar, solo para descubrir que se había ido, y ahora se
estaba enfrentando a un nuevo obstáculo. ¿Qué clase de patán le negaría a su esposa
un trago cuando tuviera sed? Sin embargo... aye, pensó y se volvió para preguntar
educadamente: "¿Qué te gustaría beber, esposa?"

"Sidra", murmuró y luego agregó: "Pero puedo conseguirla yo misma si desbloqueas la


bodega".

"Nay. Está bien. La conseguiré”, le aseguró y luego se volvió hacia Cameron y


Fearghas. "Escolten a su señora arriba a su habitación. Recogeré la sidra y la seguiré
inmediatamente".

Edith pareció sorprendida por la petición, pero no protestó cuando Cameron y Fearghas
la alejaron. Satisfecho de poder seguir con su plan de acostarse con su esposa, Niels
cruzó el gran salón en busca de las cocinas y se detuvo cuando le llamaron. Mirando
hacia atrás, vio a Rory bajando las escaleras justo cuando Edith y sus guardias subían
y se debatió brevemente ignorar a su hermano, pero luego suspiró y esperó a ver qué
quería. Le daría dos minutos, decidió Niels, pero luego buscaría esa bebida y subiría las
escaleras para consumar su matrimonio... finalmente.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 13

"¿Está bien, mi lady? Parece moverse un poco rígida", señaló Cameron a mitad de
camino por las escaleras.

"Aye". Edith hizo una mueca. "Estoy un poco rígida, pero bien".

"No es de extrañar con lo que recorrió caminando casi todo el día de hoy... y después
de cabalgar todo el día y la noche de ayer. En la lluvia, nada menos", dijo Fearghas con
simpatía.

"Tal vez un baño caliente ayudaría con eso", sugirió Cameron. "Su Pá siempre juró que
un buen baño caliente ahuyentaba sus achaques y dolores".

"Aye, lo hacía", dijo Edith con una sonrisa suave. Su padre había sufrido terribles
dolores en los huesos y las articulaciones en los últimos años de su vida y había jurado
que lo único que aliviaba su incomodidad era un baño humeante.

"¿Debo pedir uno entonces?" Preguntó Cameron.

"Aye, por favor. Gracias, Cameron", murmuró.

Asintiendo con la cabeza, el hombre se detuvo, ella pensó que bajaría y le ordenaría un
baño, pero él solo giró sobre el escalón en el que estaba parado y gritó: "¡Traigan a su
señora un baño! ¡Lady Edith quiere un baño!”

Por un segundo, el grito fue seguido por un breve silencio de todos en el gran salón,
excepto por su marido, que gimió. Al menos pensaba que fue Niels quien gimió, y la
alegría de Rory, "¡Mira, tienes tiempo después de todo!" Parecía respaldarlo.

Preguntándose por qué había gemido, Edith echó un vistazo atrás cuando salió al
rellano superior. Todo lo que vio, sin embargo, fue que Rory sacaba a Niels de la
fortaleza. Parecía que su bebida se retrasaría.

Moibeal estaba en el dormitorio cuando entró. La doncella estaba desempacando los


cofres que había empacado después de que Edith, Niels, Geordie y Alick se dirigieran a
Buchanan. Cuando ambas pensaron que vivirían allí sus vidas.

Bueno, al menos hasta que Niels estuviera listo para construir ese hogar para ellos que
él había mencionado. Cuatro años, había dicho. Edith no se molestó en mencionar que
su dote era bastante generosa y, dependiendo de cuánto dinero había reunido él
además de lo que le había dejado su padre, podrían ser capaz de construirlo de

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inmediato. Realmente no había tenido la oportunidad, y pensó que había suficiente
tiempo para tales cosas. Ahora, no solo podría tener su dote, sino que también tenía un
hogar. Él era ahora el Laird de Drummond.

Edith lo consideró más en serio. Realmente no había pensado tanto en eso. Era la
señora aquí ahora, y Niels era el laird. Se preguntó si él había considerado eso. Y lo
que pensaba al respecto. Esperaba que estuviera feliz. No se había casado con ella
esperando obtener el castillo y el título, pero lo había hecho.

"Empecé a desempacar. Pero justo antes de que entrara empecé a preguntarme si


debería hacerlo aquí".

Edith miró a Moibeal con incertidumbre ante esas palabras. "No vamos a mudarnos a
Buchanan ahora".

"Nay". Moibeal vaciló, y luego dijo: "Pero no estaba segura de si debería hacerlo aquí o
en... el dormitorio grande".

En el dormitorio grande, Edith pensó y luego se dio cuenta de que era la forma en que
Moibeal evitaba decir la habitación del laird. La habitación de su padre, comprendió.
Moibeal no quería hacerle pensar en su padre y la pérdida de él.

Suspirando, se encogió de hombros. "Supongo que tendremos que movernos allí


eventualmente. Pero Niels tendrá que verlo primero. Puede que no le guste como es.
Es posible que tengamos que cambiar las cosas. No durmió en la habitación de Hamish
después de que se la diera”, señaló ella. "Así que solo puedo suponer que no le gustó".

Moibeal resopló ante la sugerencia. "Más bien no le gustó dejarla. Durmió en la silla
junto a su cama, en el piso e incluso en el pasillo frente a su puerta cada noche antes
de que se casaran” señaló secamente. “No fue porque no le gustara la habitación de
Hamish. No creo que él siquiera la haya visto”.

"Oh", murmuró Edith, y luego se giró y se dirigió hacia la puerta. "Bien, podemos
echarle un vistazo a la recámara del laird y ver en qué forma esta, entonces pasaremos
el tiempo mientras esperamos a que llegue mi baño".

"Aye, escuché a Cameron gritar pidiendo un baño", dijo Moibeal con diversión,
siguiéndola hasta la puerta.

Edith asintió. "Estoy un poco rígida y lo sugirió para aliviar mis dolores".

Cameron y Fearghas se enderezaron bruscamente cuando Edith abrió la puerta y salió.

"Simplemente vamos a echar un vistazo rápido a la habitación de mi padre", explicó


Edith cuando salió al pasillo. Los dos hombres asintieron y se pusieron detrás de ella y
Moibeal mientras caminaban por el pasillo.
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Serie Novias Escocesas #5
La habitación del laird era dos veces más grande que el resto de las habitaciones,
ocupando todo el extremo del pasillo. Edith abrió la puerta, entró y luego se detuvo
bruscamente. Había esperado que la habitación se sintiera vacía. No literalmente. Pero
las pocas veces que había viajado por un tiempo prolongado, había regresado para
encontrar su habitación sintiéndose fría y vacía, y oliendo a rancio. Siempre había
supuesto que era porque el fuego había estado apagado durante tanto tiempo y nadie
había vivido en la habitación. Pero la habitación de su padre había estado vacía durante
casi un mes y aun así olía a humo y... ¿era eso lavanda?

"¿Por qué la habitación está caliente?", Preguntó Moibeal. "¿Y qué es ese olor? ¿Son
flores?”

"Lavanda, creo", murmuró Edith, y luego miró hacia el piso para ver trozos de la flor
seca esparcidos por todos lados.

"La habitación de tu padre nunca olió a lavanda antes de esto", señaló Moibeal, justo
como Edith pensó.

Cameron y Fearghas habían estado parados en la puerta, pero ahora se movieron a la


habitación. Cameron fue directamente a la chimenea y agarró el atizador. Echándose
sobre sus ancas, hurgó en el hogar.

"Alguien ha estado durmiendo en la cama", dijo sombríamente Moibeal, llamando su


atención. La doncella estaba mirando a través de las cortinas cerradas alrededor de la
cama, pero ahora las abrió para revelar las sábanas y pieles desordenadas.

"¿Estás segura de que no solo quedaron así después de que mi padre fue removido?"
Preguntó Edith, moviéndose hacia la cama.

"Nay. Yo destendí la cama mientras atendías a Hamish", le dijo Moibeal. "La cama
estaba vacía y las cortinas de la cama abiertas la última vez que vi esta habitación".

"Alguien, obviamente, ha estado durmiendo aquí", dijo sombrío Cameron. "Y bastante
recientemente. Estas no son cenizas, son brasas, mi lady. Alguien prendió fuego aquí y
apenas está muriendo".

"El fantasma del antiguo laird", dijo Fearghas en un susurro temeroso.

Al ver los ojos de Cameron ensancharse por la sugerencia, Edith frunció el ceño a
Fearghas. "Nay. A mi padre nunca le gustó la lavanda. Decía que lo ponía triste.
Además, Fearghas, no existen los fantasmas, y si los hubiera, difícilmente necesitarían
un fuego. La persona que duerme aquí está viva. Probablemente Geordie o Niels se
mudaron aquí por alguna razón”.

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"Si ese fuera el caso, el fuego no estaría caliente. Esta mañana dormían afuera de su
puerta", le recordó Cameron.

"Bueno, Rory entonces", dijo con exasperación y echó un último vistazo antes de
dirigirse a la puerta. "Vamos, mi baño probablemente ya esté en camino, si no es que
ya está esperando".

La puerta de su dormitorio estaba abierta y los sirvientes agitaban cubos de agua


humeante cuando Edith condujo al trío de vuelta a su habitación. Esperaba que
Cameron y Fearghas esperaran en el pasillo, pero entraron y se pararon a cada lado de
ella hasta que los sirvientes terminaron y se fueron. Solo cuando ella y Moibeal eran las
que quedaban, asintieron y regresaron al pasillo, cerrando la puerta detrás de ellos.

"No cree realmente que el hermano de su esposo haya estado durmiendo en la


habitación de su padre, ¿verdad?", Preguntó Moibeal mientras la ayudaba a
desnudarse.

Edith suspiró ante la pregunta, pero no respondió de inmediato. La verdad era que no.
Dudaba mucho que Rory se molestaría en esparcir flores en el piso para aromatizar los
juncos. Sin embargo, tampoco quería que el castillo se llenara de historias sobre que el
fantasma de su padre habitaba en su antigua habitación. No necesitaba mucamas
temerosas de limpiar la habitación una vez que ella y Niels se mudaran a ella.
Especialmente cuando no era cierto. No podía serlo. No había fantasmas, se dijo a sí
misma. Además, su padre realmente odiaba la lavanda. Sería lo último con lo que su
fantasma perfumaría la habitación.

"Mi lady".

"¿Hmm?" Edith miró a Moibeal y suspiró al darse cuenta de que la chica todavía estaba
esperando su respuesta. Suspirando, entró en el agua caliente, haciendo una mueca
por lo caliente que estaba, y luego se relajó para sentarse. Estaba tan caliente que le
robó la respiración por un momento, pero una vez que se hubo acostumbrado, suspiró y
dijo: "No es el fantasma de mi padre, Moibeal".

"Oh, lo sé", dijo de inmediato, un poco demasiado rápido. "¿Pero realmente piensa que
es Lord Rory?"

"No lo sé", dijo antes de admitir que dudaba de eso. Por mucho que la chica lo negara,
sabía que Moibeal era tan supersticiosa como la siguiente persona. "Le preguntaré más
tarde".

"Aye", dijo la doncella y preguntó. "¿Debo lavarle el pelo primero?"

"Aye, por favor", murmuró Edith.

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Serie Novias Escocesas #5
Moibeal ayudó a lavar su cabello, luego la dejó en el baño y rápidamente recogió su
ropa desechada.

Edith se limpió a sí misma y luego se relajó un poco en el agua. Los dolores y la rigidez
habían desaparecido, y estaba considerando la posibilidad de salir cuando se abrió la
puerta de la alcoba. Mirando por encima del hombro, sonrió al ver que era Niels. Su
sonrisa se amplió cuando vio la jarra y dos copas que llevaba.

Él le sonrió de vuelta y luego miró a Moibeal y abrió la puerta más. La doncella entendió
la solicitud silenciosa de inmediato y se apresuró a salir de la habitación. Niels la cerró
silenciosamente detrás de ella y luego llevó la jarra y las copas a la mesita de noche y
sirvió dos vasos.

"Me disculpo por demorarme tanto tiempo", dijo dejando la jarra y cruzando la
habitación para recoger la gran tira de lino que Moibeal había dejado para calentarse
sobre la silla junto al fuego. Abriéndola mientras caminaba hacia ella, dijo: "Rory quería
hablar conmigo".

"Está bien", dijo Edith, reuniendo su coraje para ponerse de pie. Sabía que no debería
estar tan nerviosa al pensarlo. Él era su esposo. Y ella había estado tanto como
desnuda con él en el prado. También debe haberlo estado cuando consumaron la boda.
Sin embargo, se sintió tímida en ese momento como si nunca le hubiera visto un tobillo
desnudo, y ni siquiera se hubieran besado.

Deteniéndose al lado de la bañera, Niels10 sostuvo la toalla abierta para ella, y dijo:
"Recuérdame que te cuente sobre eso después".

"¿Después de qué?", Preguntó Edith, tratando de distraerse mientras se levantaba


rápidamente y salía de la bañera y se metía en la tela. Para su alivio, la cerró alrededor
de ella de inmediato, pero para su sorpresa, la levantó, la llevó de regreso a la mesa y
la colocó en el borde justo enfrente de una de las sillas.

Mirándolo con confusión, abrió la boca para preguntarle qué estaba haciendo, solo para
encontrar sus manos ahuecando su rostro mientras su boca de repente cubría la de
ella. Con las manos subiendo tentativamente a sus brazos, Edith comenzó simplemente
sosteniéndose mientras la besaba. Pero se apresuró a agarrarlo y besarlo
ansiosamente.

Cuando sus manos se deslizaron lejos de su rostro hasta la parte superior de la tela
para desenvolverla, Edith se quedó sin aliento. Luego gimió en su boca cuando sus
manos encontraron y ahuecaron sus pechos para que él pudiera juguetear con sus
pezones usando un pulgar y dedo de cada mano.

10
El original menciona a Rory, pero obviamente es un error, porque es Niels quien está con ella.

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Edith lo alcanzó entonces, no a su plaid, o a su camisa. Sus manos fueron directamente
por el oro, una levanto su plaid para que la otra pudiera encontrar la dureza
esperándola. En el momento en que lo hizo, Niels se sacudió en estado de shock y
luego se recompuso de repente.

Abriendo sus ojos a la vez, Edith parpadeó al ver que él se había dejado caer sobre la
silla y la estaba empujando más cerca de la mesa. Sus piernas habían estado abiertas
con él de pie entre ellas, pero ella comenzó a cerrarlas con timidez ahora. Nunca
terminó la acción. Niels atrapó cada una debajo de la rodilla, tiró de ella más cerca de
modo que estaba medio fuera de la mesa, y tuvo que apoyarse en sus brazos para no
tambalearse. Luego le abrió más las piernas y se inclinó para enterrar su rostro entre
ellas.

Edith gritó al primer golpe de su lengua sobre su ansiosa carne, pero fue seguido por
muchos más gritos mientras se daba un festín con ella. Trató de amortiguar los sonidos
que estaba haciendo, primero tapándose la boca con la mano y luego también
mordiéndose el dedo medio, pero los sonidos seguían llegando. Algunos eran gritos
sofocados, algunos jadeos suplicantes, otros casi chirridos, pero estaba bastante
segura de que los hombres en el pasillo probablemente escucharon hasta el último.
Estaba igualmente segura de que todos en el castillo escucharon su grito final,
delirante, mientras su cuerpo explotaba de placer para dejarla una masa aturdida y
temblorosa que yacía flácida sobre la mesa con la cabeza vuelta hacia el fuego.

Edith notó cuando Niels se levantó y se quitó el tartán y la camisa, pero aparte de rodar
sus ojos hacia él para mirar, no parecía tener la fuerza para moverse. Cuando la
levantó en brazos, la llevó al pelaje grande que estaba frente al fuego y se arrodilló para
tumbarla sobre este, lo agarró de los brazos y luego de las manos mientras Niels se
enderezaba para arrodillarse a su lado. Estaba tratando de abrazarlo. Pero no pudo.

"Eres una fiesta para los ojos, esposa", murmuró, simplemente sentándose en cuclillas
mirándola. "Tú pelo parece encendido y las sombras te pintan la piel".

Su energía estaba regresando lentamente ahora, lo suficiente como para que


comenzara a sentirse avergonzada de solo estar allí con él mirándola, y Edith deslizó
una mano por su pierna, hacia su ingle. Ella nunca hizo contacto. Niels inmediatamente
se movió para tumbarse junto a ella de lado.

Apoyando la cabeza en su mano con el codo sobre las pieles, sonrió. "Estas
recuperándote, ¿verdad?"

Edith asintió, y tocó su rostro suavemente.

"¿Te gustaría más?", Preguntó Niels, pasando una mano suavemente por su muslo.

~ 184 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Con un nudo en la garganta, Edith vaciló, pero cuando esa mano se detuvo justo antes
de encontrar su centro, asintió con la cabeza.

"Aye", respiró Niels, dejando que sus dedos se deslizaran entre los pliegues protectores
para tocarla. Pasó un dedo suavemente sobre ella y Edith cerró los ojos y gimió.

"Me encanta cuando me dejas escuchar tu placer", dijo en voz baja, deslizando su dedo
sobre ella otra vez y añadiendo otro. "Y me encanta lo húmeda que te sientes por mí.
Como si tu cuerpo llorara porque te ame".

"Aye", gimió Edith, sus caderas comenzaron a moverse en su caricia y luego se detuvo
cuando presionó un dedo en ella. Sus ojos se abrieron de golpe, y ella lo miró. "Niels,
por favor".

"¿Por favor qué, amor?", Preguntó Niels, deslizando su dedo hacia afuera y luego
acariciándola con su pulgar mientras se deslizaba hacia adentro. "¿Te gusta esto?"

"Aye", ella jadeó, retorciéndose bajo su toque.

"A mí también. Me gusta cómo tu cuerpo se aferra a mí, me quiere en ti".

"Aye", gimió Edith.

"¿Me quieres dentro de ti, amor?"

"¡Oh, Dios, aye!", Gritó, empujando violentamente hacia arriba en sus caricias ahora.

"Encuentra tu placer por mí, amor, y yo te tomaré". Esta vez no le dio la oportunidad de
responder, sino que se inclinó para reclamar su boca con la suya y comenzó a empujar
su lengua dentro de ella a tiempo con el dedo abajo. La mano que había estado
sosteniendo su cabeza luego bajó para acariciar y amasar su pecho al mismo tiempo y
finalmente le pellizcó el pezón. Y fue entonces cuando Edith comenzó a temblar, su
cuerpo temblaba mientras ella gritaba en su boca.

Y de repente Niels estaba encima de ella. No notó el cambio hasta que él empujó en
ella y sintió la diferencia. Este no era su dedo. Esto era mucho más grande. Sintió un
ligero pellizco y luego él entró, llenándola y forzando a su cuerpo a acomodarlo. Edith
gritó de nuevo y se agarró a sus hombros con sus caderas todavía empujando mientras
su placer continuaba latiendo desde su centro, aferrándose y apretándolo.

Niels gimió a través de sus dientes y empujó de nuevo repetidas veces, y luego, de
repente, se levantó, tomó sus piernas por los tobillos y las llevó sobre sus hombros.
Edith lo miró sorprendida y luego gritó cuando él se inclinó hacia donde se unían para
continuar acariciándola; prolongó la respuesta de su cuerpo mientras cabalgaba en la
ola que había causado. Para Edith, pareció durar para siempre y estaba segura de que

~ 185 ~
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Serie Novias Escocesas #5
no podría soportarlo, de que su corazón se detendría o simplemente moriría allí debajo
de él, abrumada por tanta sensación.

Justo cuando pensó eso, Niels se puso rígido encima de ella, su cuerpo se hundió tan
profundamente que gritó con él, y luego le arañó la espalda con las uñas y gritó cuando
su placer se intensificó y entonces se hizo añicos.

Edith despertó y descubrió que era de día y estaba acostada con la cabeza apoyada en
el pecho de Niels mientras él le acariciaba la espalda.

"Es de mañana", murmuró.

Sonriendo, sacudió su cabeza ligeramente donde estaba, y dejó que su mano se


deslizara hasta su cadera. "Nay. Todavía es de noche, esposo", dijo Edith mientras
dejaba que su mano se deslizara para reclamar su virilidad semi-erecta.

"¿Otra vez?" Parecía entretenido, pero su voz también era ronca. Estaba empezando a
reconocer eso como una señal de que la deseaba. Aunque lo hubiera sabido de todos
modos ya que se endureció completamente en su mano.

"Aye. Nuevamente", dijo Edith, acariciándolo.

"Codiciosa", la acusó, pero parecía contento y la mano en su espalda descendió para


apretar su trasero, antes de deslizarse entre sus piernas por detrás para provocarla.

Edith gimió y besó su pecho apreciativamente. Habían estado en la cama desde que
había entrado durante su baño la tarde anterior. Bueno, realmente no habían estado en
la cama todo el tiempo. Habían estado en la mesa, luego habían estado en el pelaje,
luego él la había llevado a la cama y le había hecho el amor nuevamente antes de que
se quedaran dormidos. Ellos habían despertado varias veces en la noche, cada vez
alcanzando el uno al otro de nuevo.

En verdad, Edith parecía no poder tener suficiente de él. El placer que le daba era
embriagador, y solo quería más y más. Quería aprender más también. No sabía que
había tantas posiciones y tantas cosas diferentes que hacer. Y con cada nueva
posición, su confianza crecía y se volvía más audaz.

"Tenemos que hablar primero", gruñó Niels, pero sus dedos continuaron acariciándola,
y no impidió que ella lo acariciara.

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"Aye. Habla", murmuró, moviendo la cabeza para poder lamer y luego pellizcar su
pezón.

Niels gimió, pero luego tomó su mano y la arrastró desde su erección antes de agarrarla
por los hombros y obligarla a alejarse de él. Con expresión seria, dijo, "Realmente
necesitamos hablar, Edith. Es importante”.

Ella consideró su rostro por un momento, y luego suspiró y asintió.

"Gracias," murmuró y luego se movió para sentarse en la cama con la espalda contra la
pared.

"¿Por qué?", Preguntó Edith con incertidumbre, moviéndose para sentarse a su lado.

"Si hubieras presionado el asunto, no podría haberme resistido a amarte de nuevo, y


esto es importante", le prometió.

Por un momento, estuvo tentada de presionar el asunto después de todo, pero él había
dicho que era importante y su expresión se había vuelto sombría, así que se comportó y
tiró de las sabanas para cubrirse mientras esperaba que él comenzara.

"Rory vino a verme ayer por la tarde", comenzó en voz baja.

"Aye, cuando volvimos del mercado", dijo.

Niels asintió. "Tenía parte de un plan para atrapar al asesino".

"¿En serio?", Preguntó con interés. "Dime."

Él vaciló, y luego suspiró y dijo: "Su plan era dejarte morir".

"¿Qué?", Graznó Edith, saltando sobre sus rodillas para mirarlo con incredulidad.

"Aye, esa fue mi reacción", dijo secamente Niels. "Pero su pensamiento fue que
falsificáramos tu muerte, te quedaras aquí como si hubieses sido limpiada y preparada
para el entierro y luego veías quién daba un paso adelante para intentar reclamar a
Drummond".

Edith negó con la cabeza. "Eso no funcionará. Ya sabemos que Tormod sería el
siguiente en la línea y estoy bastante segura de que él no es el que está detrás de todo
esto. Entonces, si el asesino realmente persigue a Drummond, pueden solo tratar de
hacer que parezca culpable para que se lo culpe por todo y sea colgado, dejándolos
para reclamar el título". Frunció el ceño y agregó: "Y si falsificamos mi muerte y luego
no acusan a Tormod de ser el asesino, pueden matarlo para sacarlo del camino".

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Serie Novias Escocesas #5
"Aye", hizo una mueca Niels. "Bueno, ese no fue mi argumento, pero todo eso es
verdad".

"¿Cuál fue tu argumento?" Preguntó Edith con curiosidad.

"Que no te arriesgaré a así", dijo solemnemente. "Señalé que el asesino podría


deslizarse dentro de tu habitación mientras te tenemos acostada fingiendo estar muerta
y apuñalarte o algo así cuando se dieran cuenta de que aún respiras".

"Oh, aye", dijo débilmente. "Eso sería desafortunado".

"Muy desafortunado", Niels asintió secamente, luego suspiró y admitió: "Pero mientras
hablábamos, se me ocurrió una idea a mí".

"¿Ah?" Preguntó Edith con interés. "¿Cuál es esa?"

"Darles la oportunidad de envenenarte y atraparlos", respondió.

Edith levantó sus cejas. Esto no sonaba mucho mejor que la idea de Rory a primera
vista.

Al observar su expresión, él explicó: "No serias envenenada".

"Oh, bien", dijo riendo.

Niels hizo una mueca y dijo: "Iremos abajo para desayunar. Notarás que Alick no está
allí y preguntarás por él", instruyó.

"Está bien", Edith estuvo de acuerdo solemnemente.

"Cuando lo hagas, diré que lo envié a Buchanan y luego a MacDonnell con mensajes
para dejarles saber que no vamos a ir después de todo y lo que está sucediendo aquí".

"Pero no lo enviaste a ningún lado", adivinó.

"Nay, no lo hice. Está en su habitación ahora, esperando entrar aquí y esconderse”.

"¿Esconderse?" Edith arqueó las cejas y miró a su alrededor. "Él podría esconderse
debajo de la cama, o en el cofre más grande allí. Creo que Moibeal prácticamente ha
vaciado ese, y podemos transferir lo que queda a los otros cofres".

"Debajo de la cama puede ser mejor", dijo Niels echando un vistazo alrededor de la
habitación también. "Tendríamos que hacer agujeros en el cofre para que pueda ver de
lo contrario y no quiero que su vista se oscurezca de ninguna manera".

Edith asintió y luego se volvió hacia él mientras continuaba.

~ 188 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"De todos modos, después de explicarte que Alick está ausente, deberías restregarte la
frente y quejarte de que tienes dolor de cabeza. Te sugiero que vayas a descansar un
poco, que eso puede ayudar. Entonces dices que traerás un poco de sidra contigo y yo
diré, nay, me ocuparé de eso. Ve adelante".

"Entonces vengo aquí donde Alick se está escondiendo", sugirió.

"Nay, espera a la vista en el rellano superior", dijo Niels con firmeza. "Recogeré la sidra,
el aguamiel o cualquier otra cosa, pero en lugar de subirlo yo mismo, le diré a Moibeal
que te lo suba y luego regresaré a la mesa para hablar con mi hermano. Y entonces
bajas las escaleras antes de que Moibeal pueda llegar a la cima y le pides que lo ponga
en tu habitación, y que luego regrese y te encuentre en las cocinas, que quieres hablar
con ella y Jaimie antes de acostarte. Debes decirlo lo suficientemente fuerte como para
que todos puedan oír", añadió, y luego continuó: "Y luego vas a las cocinas".

"Entonces, Moibeal tomará la bebida y la pondrá en la habitación donde se esconde


Alick, y luego vendrá abajo para dejarlo solo", dijo Edith lentamente.

"Aye. Espero que nuestro asesino corra el riesgo de deslizarse hasta aquí para
envenenar la bebida antes de que regreses y Alick vea quién es.

Edith asintió y dijo con cautela: "Puede funcionar. Si están lo suficientemente


desesperados como para arriesgarse a venir aquí cuando todos están en el gran salón
y pueden ser vistos”.

"Aye". Niels frunció el ceño, suspiró y dijo: "Tendremos que esperar que estén lo
suficientemente desesperados por el título de laird como para arriesgarse".

"Si están incluso detrás de eso", dijo Edith sombría.

"¿Qué más podrían estar buscando?", Preguntó Niels con sorpresa.

Edith negó con la cabeza. "No estoy segura, pero los asesinatos…" Tragando, ella dijo,
“Roderick y Hamish sufrieron horriblemente antes de morir, y mi padre también lo
hubiera hecho que no haber estado debilitado por su afección del corazón. Yo también
sufrí", agregó, "y sé que Rory cree que sobreviví porque mi cuerpo rechazaba el
veneno, pero la última vez que mi bebida fue envenenada, dijo que el asesino había
aumentado el veneno y que seguramente habría muerto si hubiera bebido más".

"Aye, lo recuerdo", dijo Niels cuando hizo una pausa.

"Bueno, ¿por qué no nos dieron una dosis más fuerte la primera vez que nos
envenenaron?", Preguntó en voz baja. "¿Por qué poner lo justo para matarnos después
de un gran sufrimiento? Por lo que dijiste, Brodie y los demás murieron rápidamente,

~ 189 ~
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Serie Novias Escocesas #5
así que el asesino sabía cuánto usar, y simplemente no lo hizo con el vino que mató a
mi padre y hermanos y me enfermó a mí".

"Crees que querían que sufrieras", dijo pensativamente.

"Podrían haber duplicado la dosis en cualquiera de las bebidas o estofados que tuve
durante esas tres semanas que estuve enferma", señaló. "Pero no lo hicieron. Lo
evitaron”.

"Tal vez", dijo Niels pensativamente. Él guardó silencio por un minuto y luego preguntó:
"¿Hay alguien en quien puedas pensar que puede desearte algo así?"

Edith bajó la cabeza y pensó brevemente, pero finalmente negó con la cabeza, y luego,
tratando de aligerar el estado de ánimo, dijo: "Además de tu Annie, no".

Niels parpadeó confundido. "¿Quien?"

"Tu vecina en la historia del cerdo que tus hermanos me dijeron", dijo con una pequeña
sonrisa. "Si ella tiene un cerebro en su cabeza, debe amarte locamente y seguramente
me desea una lenta y dolorosa muerte por casarme contigo".

Una risa se deslizó de sus labios, Niels la atrajo hacia su pecho para darle un abrazo y
murmuró, "Tú sí que me haces feliz, Edith".

"Bien y seguro que lo hago", dijo con ligereza. "Soy la esposa perfecta. Una que viene
con un castillo y título y muere rápidamente después de que te casas con ella,
dejándote libre para casarte con otra. Esa es la esposa perfecta, ¿no es así?”

"Nay", dijo bruscamente. "Y no voy a dejar que mueras, Edith. Te amo”.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 14

Te amo.

Esas palabras resonaron en la cabeza de Edith y se quedó sentada como congelada


por un minuto, con los ojos fijos en los de su marido, y entonces sonó un golpe en la
puerta.

Niels apartó su mirada de ella y miró hacia el sonido. Lanzando las sábanas a un lado,
murmuró: "Ese será Alick quien vendrá a esconderse".

"Marido", dijo Edith, saltando de la cama, pero era demasiado tarde, Niels abría la
puerta.

Con un chirrido de alarma, Edith se metió de nuevo en la cama y se cubrió con las
sábanas. Pero Niels solo murmuró unas palabras y luego cerró la puerta. Dando media
vuelta, frunció el ceño cuando vio que estaba de vuelta en la cama, y preguntó: "¿Qué
estás haciendo? ¿Por qué no te estás vistiendo?”

Edith vaciló por un momento, solo mirándolo, y luego se levantó de la cama. Corriendo
hacia su baúl, revisó buscando un vestido y una camisa y luego se pasó rápidamente
un cepillo por el pelo antes de ponerse la ropa. Sabía que Niels se estaba vistiendo
mientras ella lo hacía, aun así fue una sorpresa cuando se dio vuelta y vio que él ya
había terminado también. El hombre era rápido en plegar su tartán cuando quería, eso
era seguro, pensó Edith.

"Hablaremos más tarde", dijo Niels en voz baja mientras ella lo acompañaba por la
puerta.

Asintiendo, dejó que la tomara del brazo y la llevara fuera de la habitación.

Edith no vio a Alick en el pasillo cuando caminaron fuera, pero Caméron y Fearghas
estaban allí esperándolos para escoltarlos abajo. Suponiendo que Alick estaba
esperando en una de las habitaciones cercanas para esconderse en el dormitorio
después de que se fueran, Edith asintió ausentemente a los dos soldados y luego se
olvidó de ellos mientras Niels la llevaba por el pasillo. Su mente estaba demasiado
enlodada con pensamientos revoloteando en su cabeza como para pensar en otra
cosa. Seguía viendo la cara de Niels cuando le había dicho que la amaba.

Su declaración la había tomado completamente por sorpresa. Nunca se había atrevido


a soñar que tal vez podría escuchar palabras como esas de él... al menos no tan
pronto.
~ 191 ~
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Serie Novias Escocesas #5
Cuando le había pedido que se casara con él, le había dicho que la deseaba de forma
algo feroz, pero que también le gustaba. Había dicho que la consideraba buena,
inteligente y le gustaba que tuviese buen corazón. Dijo que pensaba que podrían ser
felices juntos. Esas eran todas las cosas que Edith estaba pensando de él también.
También lo había deseado, y lo había considerado bueno e inteligente. Le había
gustado su paciencia con Ronson y Laddië, y su cuidado y preocupación por ella. Y
también había pensado que podrían ser felices juntos. Todavía lo hacía.

Si era honesta consigo misma, había esperado que, a partir de todo eso, algún día el
amor crecería. Ni siquiera se lo había reconocido a sí misma, pero la esperanza había
estado ahí, como una semilla echando raíz bajo la tierra antes de empujar su camino a
la luz. La posibilidad le había parecido esperanzadora, ya que su gusto y admiración
mutuos eran una base sólida para que creciera.

‘Y no voy a dejar que mueras, Edith. Te amo’

¿Realmente podría amarla ya? Y si es así, ¿podrían los sentimientos revolviéndose


dentro de ella ser amor por el también?

"¿Esposa?"

Edith parpadeó sus pensamientos lejos, notó el banco frente a ella y su cabeza se
sacudió. Mientras se había perdido en sus pensamientos, habían descendido las
escaleras y habían cruzado el gran salón hasta las mesas de caballete.

"Oh", respiró, e inmediatamente se sentó, vagamente convencida de que Caméron y


Fearghas se estaban retirando para reclamar asientos al final de la mesa donde podían
mantener un ojo sobre ella sin entrometerse.

"Buen día, mi lady".

Edith sonrió automáticamente al hombre a su izquierda mientras Niels se sentaba a su


derecha, y luego parpadeo al ver que ese era Tormod. "Ya has vuelto".

"Aye", dijo y luego inclinó su cabeza con curiosidad. "¿Está bien, mi lady?"

"Bien", murmuró Edith y luego miró más allá de él a Geordie cuando su cuñado dijo:
"Tormod nos acaba de decir que no encontraron rastros de la doncella de Victoria,
Nessa, en el pabellón de caza".

Edith se enderezó, sus ojos se abrieron. "Me olvidé de Nessa. Ella iba con ellos
también”.

"Aye", dijo Niels, y explicó: "Pero Geordie y yo no la encontramos en la cabaña con los
otros. Tormod iba a buscarla cuando fueron a recoger a tu hermano y a los demás".

~ 192 ~
LYNSAY SANDS N Rendirse Al Highlander
Serie Novias Escocesas #5
"Pero ella no estaba allí", terminó Tormod. "Buscamos en toda la cabaña y luego en una
buena parte dentro del bosque alrededor de la cabaña, pero no había ningún signo de
ella en absoluto", les aseguró solemnemente y luego agregó: "Sin embargo, ninguno de
los caballos había desaparecido. Cabalgaba con uno de los soldados cuando salieron
porque Brodie no quería un carro deteniéndolos, y había siete caballos muertos en los
puestos. Solo el de Lonnie había desaparecido, así que no se fue cabalgando''.

"No por su cuenta", estuvo de acuerdo Niels, y luego agregó: "Pero ella podría haber
dejado la casa de campo con Lonnie para regresar aquí".

Hubo un momento de silencio mientras todos lo consideraban, y luego Tormod suspiró.


"Si es así..."

No terminó su pensamiento, pero entonces no tenía que hacerlo. Todos sabían el resto
de lo que no había dicho. Si Nessa había estado con Lonnie cuando lo mataron, y si el
hombre había sido asesinado por bandidos como lo habían supuesto, entonces la
criada probablemente había sido tomada por ellos. Nessa había sido una cosita bonita.
Si los bandidos la habían secuestrado, probablemente había sido muy usada y luego la
habían dejado muerta en algún lugar del bosque. Si no fue en Drummond, en la tierra a
donde los bandidos viajaron después de Drummond.

Sacudiendo su cabeza, Tormod dijo en el silencio que había caído, "Entre Effie siendo
envenenada y posiblemente muriendo, Victoria envenenada y muerta, y Nessa tomada
y probablemente asesinada por bandidos, a Victoria y sus doncellas no les fue bien
aquí".

"Nay", murmuró Edith, pero frunció el ceño y miró hacia la mesa, con la mente
acelerada mientras intentaba juntar los fragmentos de información que esas palabras
repentinamente habían enviado rebotando dentro de su cabeza. Ninguno de ellos tenía
sentido, o significaba algo por sí mismo, pero estaba segura de que lo harían si podía
organizarlos adecuadamente.

"¿Qué estás pensando, muchacha?", Preguntó Tormod.

Edith negó con la cabeza, pero luego se aferró a una información que no dejaba de
parpadear en su mente y dijo: "Los asesinatos comenzaron después de que Victoria y
sus doncellas llegaron aquí".

El silencio sepulcral encontró sus palabras y Edith miró a su alrededor para ver a su
esposo, sus hermanos y Tormod mirándola con los ojos muy abiertos. Parecía obvio
que no se les había ocurrido. También parecía obvio que tampoco estaban seguros de
qué hacer con eso.

Suspirando, dijo, "me parece que nos hemos estado preguntando quién y por qué sin
poder resolverlo. Pero no hemos considerado ni una vez el cuándo comenzó como algo

~ 193 ~
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Serie Novias Escocesas #5
posiblemente importante, y sin embargo, ¿por qué empezaría todo tan repentinamente
así? Un día todo estaba bien en Drummond, y luego al siguiente mi padre murió, mis
hermanos murieron y yo estaba enferma, y todo sucedió poco después de que Victoria
llegara. El día que llegaron aquí sus doncellas, de hecho”.

"No pensé en eso", dijo Tormod lentamente.

"Pero Nessa ha desaparecido y Effie también fue envenenada", señaló Rory con el
ceño fruncido.

"Aye, no podemos encontrar a Nessa”, dijo Edith pensativamente.

"Pero eso no quiere decir que está muerta, necesariamente, ¿verdad?", Dijo Niels
ahora, siguiendo su línea de pensamiento.

"Nay, supongo que no", Rory reconoció. "Pero Effie definitivamente está envenenada y
es probable que muera eventualmente".

"¿Cuándo?" Preguntó Edith.

Rory la miró inexpresivamente.

"¿Quiero decir, está mostrando signos de debilitamiento?", Preguntó Edith, y luego


señaló: "Dijiste el otro día que se veía mejor y tenía más color. Que casi creías que
estaba obteniendo otra comida además de la sopa que goteas por su garganta".

"Aye, pero la pruebo a diario. Ella no está consciente y no puede estar comiendo", dijo
con firmeza.

"¿Cómo la pruebas?", Preguntó de inmediato. Era algo que quería preguntarle desde
que Niels le había mencionado este asunto de las pruebas. Porque sospechaba que
sabía cómo. Al menos, sabía cómo la probaría ella, y si Rory estaba probando a Effie
de la misma manera...

"Le clavo una aguja en el pie", dijo Rory, con las cejas ligeramente levantadas ante la
pregunta, y luego agregó: "Demasiado profundo además. No hay forma de que ella
pueda fingir dormir a través de eso”.

"Ah", Edith pronunció la palabra, su cabeza retrocedió ligeramente ante esta noticia, y
luego se giró para mirar la mesa de nuevo, con más piezas conectadas en su mente.

"¿Muchacha?", Preguntó Tormod. "¿Qué estás pensando?"

Edith guardó silencio un minuto más, y luego admitió: "Estoy pensando que dos veces
ahora he visto lo que parecía ser una mujer en una de las ventanas de las cámaras
superiores, y..."

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"¿Cuándo?", Preguntó Niels de inmediato.

"El día en que me dispararon la flecha fue la primera vez", admitió. "Aterricé en tu pecho
sobre mí espalda, y justo antes de que me hicieras rodar debajo de ti, vi a alguien en la
ventana de mi habitación. Fue solo una rápida mirada, y solo tuve una impresión de la
persona, pero ahora que estoy pensando en ello, podría haber sido una mujer".

"¿Y la segunda vez?", Preguntó Geordie.

"Ayer en el camino de regreso del mercado", admitió. "Cuando comenzamos a recorrer


el patio recordé lo que había visto el día en que me dispararon la flecha y me asomé
fuera del escudo para mirar hacia la ventana".

"Aye, lo recuerdo", dijo Niels en voz baja. "Te empujé de vuelta detrás del escudo".

Edith asintió. "Pero en la rápida visión que tuve, creo que vi a una mujer allí otra vez."
Ella se encogió de hombros como si no fuera importante, y agregó: "Pero de nuevo,
solo pude echarle un vistazo rápido".

"Entonces, ¿estás pensando que Nessa está aquí?", Preguntó Tormod con gravedad.

"Eso o la mujer que vi fue Effie", dijo en un suspiro, bastante segura de que lo
rechazarían de inmediato.

"Nay", dijo Rory con firmeza como esperaba. "Te dije, le pincho los pies con una aguja
dos veces al día. Y lo profundizo, Edith. Ella no podría fingir dormir a través de eso”.

"Effie no tiene ninguna sensibilidad en sus pies", Edith le dijo sin rodeos.
"¿Qué?" Preguntó Rory bruscamente.
"¿Estás segura?", Preguntó Niels.
Edith asintió. "Victoria me lo dijo ella misma. Es por eso que trajo a Nessa para
ayudarla. Effie no siente nada en sus pies y sus piernas están débiles; no puede
caminar demasiado ni mantenerse de pie. Hace que su trabajo sea difícil”.
Maldiciendo, Niels comenzó a levantarse, pero Rory lo tomó del brazo.
"Espera", dijo. "Piensa en esto, hermano. ¿Por qué Effie mataría a todos? Si se hubiera
detenido en el padre y hermanos de Edith, podría creer que estaba tratando de darle a
Victoria todo lo que Brodie le prometió cuando convenció a la chica para que se casara
con él. Pero entonces ella difícilmente mataría a Victoria y Brodie. Y ahora que Victoria
está muerta, no gana nada matando a Edith.
"Victoria, y no Effie, podría haber sido la única que fue verdaderamente envenenada por
accidente", dijo solemnemente Tormod, y explicó: "A Victoria no le gustaba la cerveza.
Tal vez Effie puso el veneno en la cerveza, pensando que Victoria no podría beberlo”.

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Apretó la boca y añadió, "Y estoy seguro de que Lady Victoria no habría bebido si
hubiera tenido algo más, pero Brodie rara vez consideraba a otros y no lo hizo esta vez.
No había nada más para que Victoria bebiera”.
"Entonces ella bebió la cerveza," murmuró Edith asintiendo. Eso tenía sentido, supuso,
pero todavía había pedazos que no encajaban, pensó, y luego miró a su alrededor
cuando Niels de repente se dirigió hacia las escaleras. Tormod y Geordie estaban
pisándole los talones.
Cuando Cameron y Fearghas se levantaron y se movieron para pararse detrás de ella,
Edith se levantó para seguirlo también, pero se movió mucho más despacio. También lo
hacia Rory, notó cuando se puso a su lado. Ella guardó silencio por un momento,
consciente de que Cameron se cernía por detrás. Él estaba justo sobre sus talones,
deseoso de que ella se moviera más rápido para poder llegar a donde estaba la acción,
pero Edith lo ignoró y cuando comenzó a subir las escaleras con Rory, él dijo: "No creo
que haya sido Effie".
Rory hizo una mueca. "Quizás es solo porque la he estado cuidando durante tanto
tiempo, tratando de hacerla vivir que no quiero creerlo, pero no. No lo hago". Él la miró
bruscamente entonces y dijo: "¿Y tú?"
"No lo sé", admitió. "Todavía hay cosas que no encajan".
"¿Qué quieres decir?" Preguntó Rory con curiosidad.
"Bueno, Effie podría estar despierta, y podría tener suficientes conocimientos sobre
envenenamientos como para estar detrás de esas muertes", reconoció Edith.
"¿Pero cómo pudo haber bajado a la cocina para apuñalar a Cawley sin que nadie se
diera cuenta?", Sugirió Rory.
"Aye", dijo Edith en un suspiro. "Y me resulta difícil creer que Effie podría mantener el
arco lo suficientemente estable como para disparar una flecha tan recta. Además de
que sus pies estaban entumecidos, tenía parálisis en sus manos y brazos".
"No fue ella", dijo con alivio.
"Tenías miedo de haber estado trabajando tanto para mantener vivo al asesino", dijo
con comprensión.
"Nunca me habría perdonado a mí mismo", admitió Rory mientras salían al rellano.
Edith asintió con la cabeza, y luego miró hacia el pasillo cuando Niels salió de la
habitación en la que habían metido a Effie, con el rostro arrugado.
"Ella se ha ido", anunció sombríamente.
"¿A dónde se fue?" Preguntó Rory con sorpresa. "Estaba en la cama cuando bajé para
desayunar y alguien se habría dado cuenta si hubiera bajado las escaleras".

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"Ella debe estar aquí arriba en algún lugar", gruñó Geordie.
"Buscaré en todas las habitaciones", dijo Tormod con gravedad.
Él comenzó a alejarse, pero se detuvo cuando Cameron se acercó a Edith y le
preguntó: "¿Podría ser ella quién encendió el fuego en la habitación del laird?”
"¿Qué?", Preguntó Niels con sorpresa.
Antes de que Cameron pudiera hablar de nuevo, Edith explicó: "Ayer, mientras
esperábamos que llegara el baño, Moibeal, los muchachos y yo fuimos a echar un
vistazo a la cámara del laird para ver qué haría falta si decidimos mudarnos allí. Pero
cuando llegamos allí encontramos evidencia de que alguien ha estado usando la
habitación”.
"Aye, la habitación estaba caliente, así que revisé la chimenea", anunció Cameron.
"Pensé que todo lo que habría en el hogar serian cenizas, pero estaban tibias, algunas
en brasas aún".
"Y la cama estaba tendida con sábanas y pieles y obviamente se había dormido en
ella", agregó Fearghas.
Cuando Niels giró de inmediato y se dirigió pasillo arriba, Edith lo siguió. No se dio
cuenta de que todos los seguían hasta que Tormod ladró, "Fearghas, vuelve a las
escaleras y vigílalas. Que nadie suba ni baje”.
El hombre suspiró por perderse toda la excitación, pero se detuvo de inmediato
mientras el resto de ellos continuaba hacia la puerta del dormitorio del laird.
"¿Eso es lavanda?" Preguntó Rory olisqueando el aire mientras seguía a Edith y Niels a
la habitación.
"Aye", dijo Niels, pasando una bota sobre los pétalos secos esparcidos sobre las
alfombras de la fiebre.
"Esta cálido", comentó Tormod.
"Aye, hay rescoldos en el hogar de nuevo", dijo Cameron, arrodillado junto a la
chimenea para hurgar en ellos como lo había hecho el día anterior. Enderezándose,
miró a Tormod y le aseguró: "No vi a nadie entrar o salir de la habitación mientras
Fearghas y yo montamos guardia".
"Tearlach y Wallace hicieron guardia en el pasillo anoche. Estarán en cama, ve a
despertarlos y tráelos aquí, Cameron”, ordenó Tormod, moviéndose al lado de Niels
cuando abrió las cortinas de la cama para revelar las sábanas y pieles desarregladas.
"Moibeal abrió esas ayer, y las dejamos así cuando volvimos a mi dormitorio", dijo Edith
solemnemente. "Alguien debe haber estado aquí desde entonces".

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"Deberías haberme dicho sobre esto", dijo Niels frunciendo el ceño mientras se volvía
para mirarla.
"Tenía la intención", le aseguró, y luego se sonrojó. "Pero realmente no tuve la
oportunidad, y luego lo olvidé por completo hasta que Cameron lo mencionó".
"Suena como si la hubieses distraído completamente", dijo Geordie con diversión
cuando Niels continuó frunciendo el ceño.
"Aye, bueno, tal vez deberíamos dejar entrar un poco de luz aquí", murmuró Tormod,
corriendo hacia la ventana más cercana para abrir los postigos.
Feliz por la excusa para esconder su rostro por un momento, Edith abrió los postigos de
la segunda ventana, y luego levantó la vista con sorpresa cuando Niels repentinamente
estaba a su lado.
"Lo siento. No debería haber chasqueado sobre ti”, se disculpó, frotándole la espalda
con dulzura.
Edith sonrió torcidamente. "Realmente no chasqueas, mi laird".
"Solo gruñes como un oso", agregó Rory cuando los pasó de camino para examinar el
agua en el lavabo en la mesa entre las dos ventanas.
Frunciendo el ceño detrás de él, Niels agregó fuertemente, "Y me disculpo por el
comportamiento embarazoso de mis hermanos".
"¿Nuestro comportamiento?" Preguntó Geordie con un chirrido. "No somos nosotros
quienes mantuvimos a todos en el castillo despiertos la mitad de la noche con nuestros
aullidos".
Gimiendo, Edith cerró los ojos y apoyó su cabeza en el pecho de Niels, murmurando,
"Lo siento. Trataré de estar más callada en el futuro".
Había querido decir eso para Niels y lo había dicho lo suficientemente bajo como para
pensar que solo él la oiría, pero Geordie dijo: "Oh, muchacha, no tienes que disculparte
por ello. Tu voz era como un pájaro cantando. Fue maravillosa de escuchar. Ahora
Niels por otro lado…"
"Sonaba como un oso herido", terminó Rory secamente. "Asustó a los pequeños que
duermen en el gran salón casi hasta la muerte".
"Voy a esperar en el pasillo por Tearlach y Wallace", dijo Tormod en voz alta,
obviamente incómodo con esta conversación.
"Ahora, vean lo que han hecho", gruñó Niels. "Han avergonzado a mi esposa y a
Tormod".
"Aye", dijo Rory con un suspiro y se volvió del agua para encontrarse con la mirada de
Edith cuando ella levantó la cabeza y miró hacia él. Haciendo una mueca de disculpa,

~ 198 ~
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dijo: "Lo siento, muchacha. Pero a decir verdad, probablemente hagamos eso de nuevo
repetidas veces a lo largo de los años. Somos tu familia ahora".
"Aye", estuvo de acuerdo Geordie. "Y así es como somos con la familia".
Para consternación de Edith, sus palabras provocaron un nudo repentino en su
garganta y las lágrimas rápidamente le llenaron los ojos.
"Oh, muchacha, no llores", dijo Geordie con alarma. "Intentaremos comportarnos
mejor".
"Probablemente no funcionará, pero lo intentaremos", le aseguró Rory con
preocupación.
Retrocediendo abruptamente, Niels tomó su barbilla en su mano y le levantó la cara. Él
frunció el ceño cuando vio que las lágrimas amenazaban con desbordar sus ojos, y
Edith se encontró de repente presionada firmemente contra su pecho mientras él
comenzaba a golpear su espalda como si estuviera haciendo eructar un bebé.
"Espero que estén orgullosos de ustedes mismos", espetó. "Hombres crecidos haciendo
una pequeña muchacha llorar".
Una carcajada se escapó de los labios de Edith, y ella se apartó de su pecho. Negando
con la cabeza, dijo: "Está bien. No estoy llorando”.
"En realidad, aye muchacha, lo estas", dijo Rory suavemente mientras se deshacía de
las lágrimas que se habían derramado sobre sus mejillas.
"A menos que tus ojos solo goteen", dijo Geordie con esperanza. "Pero parece que te
hicimos llorar".
"Nay", les aseguró, y luego agregó, "Bueno, aye, pero solo porque me conmovió que
me consideren familia".
"Ah", dijo Rory con comprensión. "Bueno, me temo que te has atascado con nosotros.
Eres familia ahora que te casaste con nuestro hermano".
"Aye", gruñó Geordie, y luego bromeó: "Pero el hecho de que hayas aceptado casarte
con él demuestra que estas chiflada11".
Niels frunció el ceño a su hermano, pero Edith se rió entre dientes y luego miró hacia la
puerta cuando Tormod volvió a la habitación para anunciar: "Los hombres están
llegando".
El primero no regresó al vestíbulo entonces, sino que se paseó brevemente por el
centro de la habitación mientras esperaban la llegada de Cameron con los guardias que
habían estado en el pasillo afuera de su habitación durante la noche.

11
Juego de palabras con la mención de Edith de estar “touched”, que se traduce como tocada, conmovida o loca,
chiflada.

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Edith se mordió el labio y observó a los dos hombres con simpatía cuando entraron
apresuradamente en la habitación sobre los talones de Cameron. Ambos hombres
obviamente habían sido sacados de un sueño profundo y parecían un poco asustados,
como si pensaran que estaban en problemas. Al parecer, Cameron no había explicado
las cosas y simplemente los había sacado de sus camas en la guarnición y los había
traído de regreso aquí.
En el momento en que se detuvieron frente a Tormod, él preguntó: "¿Vieron a alguien
yendo o viniendo de esta habitación anoche?"
"Nay", dijeron al unísono, ambos obviamente sorprendidos por la pregunta. Eso, más
que nada, dijo que no.
"Bien". Tormod asintió. "Pueden encontrar sus camas otra vez".
Los dos hombres parecían más desconcertados que cuando habían entrado, pero
asintieron y se volvieron para irse.
"Ese fuego no se inició solo", dijo Niels ahora. "Debe haber una entrada secreta.
Deberíamos buscar en la habitación”.
Tormod vaciló y luego dijo: "No hay necesidad de buscar. Yo sé dónde está”.
Edith lo miró con sorpresa. "¿Hay una entrada secreta?"
"Aye."
"¿Dónde?", Preguntó, mirando alrededor con curiosidad.
Tormod vaciló y luego dijo con rigidez: "Solo el Laird y la Señora de Drummond saben
alguna vez dónde está".
"Y tú", agregó Niels.
"Aye. El Laird Drummond me dijo cuándo murió Lady Drummond. Sintió que alguien
además de él debería saber en caso de que muriera inesperadamente antes de pasar
el secreto a su hijo", explicó Tormod.
Niels asintió solemnemente y dijo: "Si prefieres solo decirle a Edith, mis hermanos y yo
podemos irnos".
Ella lo miró con sorpresa, y abrió la boca para protestar, pero antes de que pudiera,
Tormod dijo: "Nay. Es laird aquí ahora. Debería saber”.
Edith se relajó y sonrió a Tormod. El hombre acababa de dar la aprobación más
definitiva a su marido. Su gente debe haberlo aceptado. No era algo que le preocupara
siquiera antes de esto, pero estaba contenta de no tener que hacerlo.
Cuando Tormod todavía dudaba en hablar, Niels dijo en voz baja: "Confío en mis
hermanos con mi vida".

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Suspirando, el hombre asintió y se volvió hacia Cameron. "Cierra la puerta cuando
salgas".
El soldado asintió con la cabeza, salió de la habitación y cerró la puerta detrás de él.
En el momento en que se cerró, Tormod caminó hacia la repisa de la vela a la izquierda
de la chimenea y presionó la piedra más pequeña en el medio. La pared a la izquierda
de la chimenea se movió de inmediato, una parte de ella con alrededor de siete pies de
alto y tres de ancho se deslizó abriendo aproximadamente una pulgada. Tormod atrapó
el borde elevado y tiró de la puerta escondida hacia la habitación.
"¿A dónde va?", Preguntó Niels, mientras él, Geordie y Rory se apiñaban en la abertura
para mirar en la oscuridad que se les revelaba.
"Este lleva a escaleras escondidas".
"¿Escaleras a dónde?" Preguntó Edith, fascinada.
"Suben hasta el muro o bajan a un pasillo al nivel del suelo con varias puertas ocultas.
Hay una en uno de los garderobes del gran salón, uno en la despensa de las cocinas,
una desde los jardines y luego otra hacia un túnel que se extiende bajo el patio y la
pared exterior hasta una cueva en el bosque en un lugar cerca, a medio camino entre
donde comienza el bosque y donde está el lago".
Niels lo consideró y luego se volvió para preguntar: "¿Y de dónde encontramos a
Lonnie?"
"Aye", admitió Tormod, sorprendido de notar eso. "Muy cerca, de hecho. A unos seis
metros a la derecha y tres metros más allá de donde encontraron a Lonnie si se da la
espalda al castillo”.
Niels asintió y luego levantó una ceja inquisitiva. "Dijiste que este lleva al gran salón y
las cocinas. ¿Hay otro?"
Tormod se dio vuelta para caminar hacia el borde de la vela a la derecha de la
chimenea. Esta vez presionó la piedra más grande en esa repisa y una segunda puerta
secreta se deslizó hacia adentro una pulgada.
"Este conduce a los dormitorios a lo largo de la pared exterior", anunció Tormod,
abriéndolo mientras los tres hermanos se acercaban para mirar este nuevo y oscuro
pasaje. "Las habitaciones que Lady Edith y sus hermanos ocuparon y en las que ahora
están ustedes".
"¿Qué pasa con las ventanas?" Preguntó Edith frunciendo el ceño y cuando Tormod la
miró en cuestión, señaló: "Seguramente las ventanas de cada habitación están en el
camino. ¿Tienes que arrastrarte debajo de ellas?”
"El pasaje baja desde cada entrada para despejar las ventanas y luego volver a la
siguiente entrada. En verdad, la mayoría de este está entre la parte superior de la pared

~ 201 ~
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del gran salón y el muro exterior, así como entre la pared de las recámaras superiores y
el muro exterior. Y hay agujeros abiertos cada pocos metros para poder mirar hacia
abajo en el gran salón".
Frunciendo el ceño, Edith preguntó: "No hay agujeros abiertos en los dormitorios, sin
embargo, ¿no?"
Los ojos de Tormod se agrandaron ante la sugerencia y luego frunció el ceño y admitió:
"No estoy seguro, mi Lady. Su padre simplemente me llevó a cada habitación, me
mostró cómo abrir cada entrada, me explicó el pasaje que bajaba entre cada puerta
secreta y me dijo que se podía ver el gran salón a través de mirillas. No mencionó
haber podido ver las habitaciones y nunca tuve la oportunidad de entrar en los pasillos”.
Gruñendo, Niels miró alrededor de la habitación y luego dijo: "Esperen aquí", y salió al
pasillo. Abrió la puerta lo suficiente como para deslizarse a través de ella, de modo que
los pasajes abiertos no se revelaran a nadie en el pasillo.
Todos se quedaron en silencio, perdidos en sus propios pensamientos, supuso Edith.
Ella ciertamente estaba pensando. Estaba preocupada por esos agujeros. Preocupada
por si había alguien mirando en las habitaciones, específicamente en su dormitorio. Y
de ser así, ¿la persona misteriosa que había estado durmiendo en esta habitación los
miró en sus momentos privados? La posibilidad era tan angustiosa que Edith agradeció
la distracción cuando la puerta se abrió y Niels volvió a la habitación con una antorcha
encendida.
Sosteniéndola en alto, él cruzó la habitación, haciendo una pausa junto a Edith para
besarla en la frente, y luego dijo: "Ya vuelvo", y se deslizó en el pasillo. Frunciendo el
ceño, Edith se movió hacia la abertura y lo observó levantar la antorcha, pero luego
miró hacia atrás cuando Geordie preguntó: "¿Hay algún pasaje a los dormitorios
interiores?"
"Nay. Solo las habitaciones exteriores. Es por eso que a los miembros de la familia se
les dieron esas habitaciones y las habitaciones interiores se convirtieron en
habitaciones de huéspedes", explicó.
Todos los hombres asintieron. Tenía sentido. Los pasajes eran ante todo una salida de
emergencia si el castillo era invadido. Los visitantes no estarían aquí todo el tiempo y si
los pasajes fueran necesarios para una fuga de emergencia, la familia sería la primera
preocupación.
"Hay antorchas en los soportes a lo largo del pasaje".
Edith se sobresaltó al oír ese anuncio directamente detrás de ella, y se apartó para que
Niels pudiera regresar a la habitación. Sonriéndole distraídamente, cruzó a la segunda
entrada y desapareció brevemente dentro de esa.

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"En este también", anunció cuando regresó un momento después, y Edith notó el
resplandor en el pasaje. Aparentemente, él había encendido al menos la primera
antorcha, pensó y luego también vio el mismo resplandor en la otra entrada.
"Así que esta debe ser la forma en que alguien ha entrado y salido de esta habitación
sin que nadie lo haya visto", comentó Rory, caminando hacia el pasadizo del que Niels
acababa de salir.
"Muy probablemente", estuvo de acuerdo Niels, pero Edith notó que la sugerencia hizo
que Tormod frunciera el ceño.
"Puede que sea hasta cómo Effie ha logrado desaparecer", señaló Geordie.
"Nay", dijo Tormod, sacudiendo la cabeza con firmeza. "Effie no podría haber sabido
sobre estos pasajes".
"Victoria podría haberle dicho", señaló Edith.
"Victoria tampoco podría haberlo sabido", le aseguró.
"Brodie probablemente se lo dijo a Victoria en el momento en que se enteró de ellos", le
aseguró secamente.
"Es justo eso, él no sabía nada de ellos, por lo que no podría haberle dicho", explicó
Tormod.
"¿Qué?", Preguntó con sorpresa. "Pero él fue laird una vez que Hamish murió".
"Aye", estuvo de acuerdo, y luego señaló, "Por dos semanas enteras antes de huir del
castillo. Y yo habría tenido tiempo de decírselo eventualmente. Probablemente”, agregó
en un murmullo, y luego chasqueó con irritación y admitió, “me disculpo, mi lady, pero
su hermano era un idiota egoísta, mimado y tonto. Apenas podía creer que
estuviéramos atrapados con él como laird, y esperaba que no lo hiciéramos. Por
supuesto, si se hubiera molestado en preguntar qué debería saber para dirigir
Drummond, se lo habría dicho. Pero él no lo hizo. Así que... Decidí esperar hasta que
las cosas se tranquilizaran antes de compartir todos los secretos de este lugar con él".
"¿Y hubieras hecho lo mismo con nosotros si esto no hubiera surgido?", Preguntó Niels
en un tono engañosamente suave.
"Diablos no", dijo Tormod realmente sorprendido por la sugerencia. "Es un hombre cien
veces mejor que Brodie. Un buen partido para nuestra señora. Me alegro de tenerlo y
sé que la mayoría de los que están aquí en Drummond se sienten aliviados de tenerlos
a ambos como laird y señora en lugar de Brodie y Victoria. Cuando le di la llave de la
bodega, le dije que había cosas de las que tenía que hablarle una vez que regresara de
recoger los cadáveres en la cabaña", le recordó y luego hizo un gesto hacia los pasajes
secretos. "Estos estaban en esa lista".

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Asintiendo con la cabeza, Niels se relajó y preguntó: "Si Brodie no sabía de estos
pasajes, ¿quién lo hace además de tú?"
"Eso es el infierno de esto", dijo Tormod luciendo repentinamente cansado. "Por lo que
sé, soy la única persona viva que sabía acerca de estos pasajes hasta hace un
momento cuando les conté todo. Pero les juro que no soy el que ha estado durmiendo
en esta habitación”.
"Alguien más debe saber sobre los pasajes entonces", dijo Edith simplemente. Ella
creía en Tormod. Parecía tan agotado por todo esto que simplemente no podía creer
que él fuera el culpable. Además, si fuera el culpable, difícilmente les diría que era el
único que sabía sobre las entradas ocultas y los pasajes secretos. Diría que le había
contado a Brodie quién podría haberle dicho a Victoria quién lo compartió con las
criadas. O incluso podría haber afirmado que varias personas sabían sobre ellos. Pero
no lo hizo, y ella le creyó, simplemente no estaba segura de que alguien más lo hiciera,
así que se sintió aliviada cuando su esposo asintió con la cabeza pensativo.
"Aye. Entonces, alguien debe haberlos descubierto por sí mismo", razonó Niels. "Quizás
Effie mientras limpiaba".
Edith torció los labios dubitativamente. "Effie no limpiaba por lo que yo sé".
"Entonces puede que tu hermano Brodie accidentalmente lo haya encontrado cuando
jugaba de niño, se lo contó a su esposa y le dijo a la criada", sugirió Rory.
Supuso que eso era posible. Edith siempre había mantenido una distancia segura entre
ella y cualquier fuego. Cuando era niña, había estado presente cuando una de las
jóvenes doncellas se había acercado demasiado a la chimenea del gran salón. La falda
de la chica se había incendiado y había sido horriblemente quemada antes de que la
madre de Edith la cubriera con un pelaje y sofocara las llamas. Ese incidente la había
hecho precaverse de acercarse demasiado a cualquier tipo de fuego o chimenea. Sus
hermanos nunca habían tenido el mismo problema, y como ella recordó, a Brodie le
había gustado jugar al soldado alrededor de la chimenea, colocando a sus pequeños
hombres de madera tallada en las repisas de las velas y luego golpeándolos uno tras
otro, a veces incluso tirándolos en el chimenea para verlos arder. Suponía que podría
haberse apoyado contra la piedra correcta una vez y haber descubierto el pasadizo
secreto.
"Sin embargo y sea quien sea que lo descubrió, tenemos que buscar en las
habitaciones y los pasajes", dijo Rory en voz baja. "Effie está en algún lado".
"Aye". Niels asintió y luego miró a los dos pasajes y frunció el ceño. "Necesitamos
buscar en cada habitación y el pasaje al mismo tiempo. De lo contrario, corremos el
riesgo de que alguien utilice el pasaje para deslizarse de nosotros, mientras que
estamos en cada habitación”.

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Serie Novias Escocesas #5
"Si incluyes este, hay cinco dormitorios en el pasillo derecho, y somos cinco", señaló
Edith. "Podríamos dejar a alguien estacionado aquí para asegurarnos de que nadie se
escabulle por los pasajes y los otros cuatro puedan ir a cada uno de los otros
dormitorios, buscar y luego regresar a través de los pasajes para asegurarse de que no
haya nadie allí tampoco".
"Excepto que solo Tormod sabe cómo abrir los otros pasajes", señaló Geordie.
"Aye, pero podría tomar la habitación de Lady Edith", dijo Tormod lentamente, y señaló:
"Es la más alejada. Después de una búsqueda rápida, podría deslizarme en el pasillo,
asegurarme de que no haya nadie entre esa habitación y la de Brodie, y luego abrir la
entrada oculta de la habitación de Brodie desde el pasillo”.
"Entonces tú y quienquiera que haya registrado la habitación de Brodie podrían
continuar hasta la siguiente puerta escondida, y la siguiente, asegurándose que nadie
pasa por delante y nadie está en el pasillo", dijo Niels asintiendo, y luego le sonrió a
Edith y la felicitó. "Buena idea, esposa... Solo que la quinta persona será Alick. Estarás
a salvo en las mesas de caballete con tu guardia”.
Edith abrió mucho los ojos. Se había olvidado del pobre Alick escondiéndose debajo de
la cama en su habitación. El joven debía estar preguntándose qué demonios estaba
pasando en este momento. Aun así, seis personas eran mejores que una, pensó. Pero
cuando abrió la boca para decirlo, Niels la silenció con un rápido beso.
Levantó la cabeza y alzó una mano para acariciarle suavemente la mejilla con los
nudillos y dijo: "Necesito saber que estas segura, esposa. De lo contrario, me distraeré
con la preocupación y podría cometer un error que podría conseguir a Tormod, uno de
mis hermanos o a mí mismo, asesinados. Es un asesino el que estamos cazando”.
Edith frunció el ceño, pero después de un momento, suspiró y asintió renuente. No era
probable que ganara esta discusión de todos modos. Los hombres podían ser
increíblemente tercos cuando se trataba de mujeres que pisoteaban su territorio y no
tenía ninguna duda de que Niels vio que capturar al asesino era su trabajo.
Además, no creía que encontrarían nada en las cámaras o pasajes de todos modos.
Effie difícilmente se estaría escondiendo allí cuando tenía tantas salidas para elegir. La
mayoría de las cuales no estaban actualmente llenas de hombres que la perseguían.
Además de eso, también quería un momento tranquilo para pensar. Muchas cosas no
tenían sentido para ella y estaba segura de que si podía resolverlas lenta y
lógicamente, podría desentrañar este misterio.

~ 205 ~
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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 15

"¿Mi lady?"
Edith dejó de presionar las piedras en la pared detrás del banco del retrete y miró hacia
la puerta del garderobe con el ceño fruncido. "¿Moibeal?"
"Aye, mi lady", dijo su doncella con tono irónico. "Cameron me trajo para ver si estaba
bien. Parece que ha estado allí por un tiempo y comenzaron a preocuparse".
"Estoy bien. Saldré inmediatamente”, ella llamó con exasperación y luego miró a la
pared otra vez y suspiró. Había apretado cada piedra en la pared trasera del garderobe
y, por lo que podía ver, no había pasado nada. No hubo ningún clic, ni siquiera un soplo
de sonido, y ciertamente ninguna puerta oculta se deslizó hacia adentro para revelar la
entrada al pasaje desde allí. Tampoco había sucedido eso en los primeros dos
garderobes. Esta era el tercero y último que había revisado desde que dejaron a su
esposo y a los demás buscando en los dormitorios y pasajes superiores mientras
Cameron y Fearghas la escoltaban abajo.
Ahora, ella miró la pared y consideró que probablemente había más de un truco en la
entrada del garderobe que solo empujar una piedra. De lo contrario, con tanta gente
usándolo, cualquiera podría apoyarse accidentalmente en la piedra correcta y descubrir
la puerta oculta.
Pero, ¿cuál sería el truco? se preguntó, extendiendo la mano para tratar de girar una
piedra en lugar de empujarla.
"¿Mi lady?"
"¡Ya voy!", Gritó Edith con exasperación. Bajando del banco, caminó hacia la puerta y la
abrió. A pesar de estar feliz de escapar del hedor del garderobe, miró con el ceño
fruncido a Cameron, Fearghas y Moibeal mientras salía, y luego se concentró en su
doncella y le preguntó: "¿Qué?"
"Solo iba a preguntar si deseaba que trajera uno de sus tónicos", dijo pacientemente
Moibeal. "Los hombres dijeron que se ha detenido en cada garderobe desde que llegó
abajo, pasó muchísimo tiempo en cada uno, pero de inmediato se detuvo en el
siguiente, así que pensé que tal vez tenga el flujo y…"
"Nay, estoy bien", dijo Edith, sonrojada al darse cuenta de cómo su comportamiento
había sido interpretado por sus guardias. Negando con la cabeza, dio la espalda al trío
y se dirigió a las cocinas, murmurando: "Necesito hablar con Jaimie".
Ella no estaba del todo sorprendida cuando los tres la siguieron. Los hombres tenían
que hacerlo, y no era como si Moibeal tuviera algo mejor que hacer en este momento.

~ 206 ~
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Sin duda, los guardias la habían detenido en el rellano y se habían negado a dejarla
limpiar el dormitorio como lo haría normalmente.
"Alto."
Edith levantó la vista con sorpresa y miró al hombre que se había puesto delante de ella
mientras se acercaba a la puerta de la cocina. Dos nuevos soldados la estaban
protegiendo hoy, su mirada se deslizó desde la cara dura del hombre frente a ella hasta
su compañero con gesto de dolor parado junto a la puerta.
"Muévete, Sholto", gruñó Cameron antes de que Edith pudiera hablar. "Tu señora
quiere entrar a las cocinas para hablar con Jaimie".
"Tormod nos ordenó no permitir que nadie pase", dijo el hombre con firmeza.
"Bueno, tu señora vence a Tormod", dijo Fearghas con impaciencia. "Así que muévete".
"Sholto", dijo el segundo hombre preocupado. "Tal vez deberías…"
"Cállate, Roy. Tengo esto”, espetó Sholto, y luego apoyó sus manos en sus caderas y
frunció el ceño a todos ellos. "Tengo órdenes y…"
"Sholto”, interrumpió Edith placenteramente.
Cerrando la boca, la miró con cautela. "¿Aye?"
"Soy la señora aquí. Tormod trabaja para mí. Lo que significa que trabajas para mí.
Quiero que te muevas fuera del camino”. Cuando frunció el ceño y parecía que se
negaría, Edith agregó, "Y sugiero que lo hagas ahora o le diré a tu esposa que estabas
jugando con la moza de la cerveza y yo tuve que tratarte por el goteo12".
"¿Se refiere a la palmada13?" Moibeal jadeó cuando Sholto palideció y saltó a un lado.
"Hmm", murmuró Edith, abriéndose camino hacia las cocinas ahora que su camino
estaba despejado. Ella odiaba ese nombre para la dolencia. Simplemente le recordaba
lo que a menudo se tenía que hacer para tratarlo. Con bastante frecuencia, el violín del
paciente se obstruía con la descarga goteando de él. Cuando eso sucedía, su madre le
había dicho que debía palmearlo duro con las manos desde ambos lados para tratar de
desatascarlo. Aunque, ella también dijo que una mano y un libro podrían usarse en su
lugar.
Sin embargo, Sholto era un personaje tan molesto, que Edith había usado dos libros. El
hombre había gritado interminablemente después. Dudaba mucho que estaría visitando
a la moza de la cerveza de nuevo pronto. Ahora que lo pensaba, él probablemente no

12
Drip: Entre muchas cosas se refiere a alguien que tiene una secreción o una sustancia supurada que sale de la
punta del pene o la vagina. Por lo general, es sinónimo de gonorrea.
13
Clap: Un término usado para la enfermedad de transmisión sexual, gonorrea. El nombre "clap" se deriva de la
palabra francesa clapoir, que significa burdel.

~ 207 ~
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volvería a ella con ninguna necesidad de curación tampoco, reconoció con una sonrisa
mientras echaba un vistazo a la cocina en busca del cocinero.
"No está aquí", dijo Moibeal con sorpresa mientras observaban la cocina casi vacía.
Honestamente, cuatro personas eran como una gota de agua en un cubo en esta
enorme habitación.
"Preguntaré a una de las doncellas dónde está", murmuró Fearghas y se apresuró a
hacerlo.
Edith lo vio irse, pero luego descubrió que su mirada se deslizaba hacia el fondo de la
habitación cuando un recuerdo de Cawley, que yacía sangrando en el suelo, cruzó por
su mente. Su mirada se deslizó sobre la gran estera de juncos que yacía donde él
había estado y no le costó demasiado pensar que estaba cubriendo la mancha que su
sangre había dejado atrás. Limpiarla de las grietas y hendiduras de la piedra habría
sido imposible.
"¿Mi lady?"
Edith parpadeó y miró a su alrededor ante la voz de Moibeal, sorprendida de descubrir
que en su estado de distracción había cruzado la habitación y ahora se había quedado
mirando la alfombra donde había estado el cuerpo de Cawley. "¿Aye?"
"Fearghas dice que Jaimie está en el jardín recogiendo algunas hierbas", le dijo la
doncella con dulzura.
Asintiendo con la cabeza a Edith, miró de vuelta a la estera, y luego al barril detrás de
ella. Ese habría sido donde Cawley había estado sentado cuando lo apuñalaron, pensó,
y luego cambió su atención a la puerta contigua. La despensa. Tormod les había dicho
que había otra entrada escondida allí, recordó. Si el asesino la hubiera usado, tal vez ni
siquiera hubiera tenido que salir de la habitación para apuñalarlo. Solo abrir la puerta
y…
"¿Mi lady?", Dijo Moibeal suavemente.
"Aye", suspiró Edith, alejándose. Revisaría la despensa más tarde y vería si podía
encontrar la entrada oculta. O tal vez solo dejaría que Tormod les mostrara a Niels y a
ella dónde estaba después.
Dirigiéndose a la puerta de atrás de las cocinas, ella preguntó: "¿En los jardines,
dijiste?"
"Tormod dijo que no saliera de la fortaleza", le recordó Cameron cuando él y Fearghas
las alcanzaron.
"Son solo los jardines, Cameron", dijo en un suspiro. "No hay ventanas en este lado del
edificio para que alguien me dispare flechas. Estará bien”.
"Pero…"

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"Simplemente daré un paso fuera de la puerta de atrás", dijo con dulzura. "Puedes
traerme a Jaimie. Está demasiado caliente aquí como para esperar a que lo encuentres.
Al menos por la puerta trasera estará más fresco”.
Si él hubiera discutido el punto o no, no lo sabía. Habían llegado a la puerta de atrás y
ella ya estaba saliendo.
"Iré a buscar a Jaimie”, dijo Fearghas, sonando molesto mientras corría delante de ella.
"Ahí”, dijo Edith alegremente, ignorando la forma en que Cameron la miraba molesto.
"¿No es agradable esto?"
"Más agradable que los azotes que tomaremos por dejarla salir de la fortaleza", se
quejó Cameron.
"Solo estaremos un minuto. Tormod nunca lo sabrá", le aseguró. Cuando simplemente
la miró con incredulidad, levantó una mano hacia su pecho, la otra al aire y dijo con
diversión: "Que Dios me golpee si me equivoco en esto".
Cameron miró hacia arriba como si esperara ver un rayo cayendo hacia ellos, y luego el
horror cruzó su rostro y se arrojó sobre Edith y Moibeal.
Edith jadeó sorprendida cuando fue atrapada por la cintura y lanzada hacia adelante, y
luego gruñó de dolor cuando se estrelló contra el suelo al tiempo que un fuerte golpe
sonaba detrás de ellos. Por un momento, yació boca abajo, casi segura de que había
caído un rayo, pero luego la razón regresó y se dio cuenta de que lo que había oído
detrás de ella era el golpe de algo pesado golpeando el suelo, y no el rayo de un rayo.
"¿Está bien, mi lady?", Preguntó Cameron ansiosamente, poniéndose de pie junto a
ella.
"Aye", dijo Edith, y miró más allá de él a su doncella. "¿Moibeal? ¿Estás bien?”
La doncella rodó hacia un lado y miró hacia donde habían estado, murmurando, "Mejor
que ella".
Frunciendo el ceño, Edith comenzó a levantarse, pero solo logró ponerse de rodillas
antes de que Cameron la agarrara por debajo de los brazos y la levantara.
"Gracias”, murmuró ella, cepillándose el vestido mientras se giraba para ver qué había
caído. Quién se había caído, se corrigió mientras miraba el cuerpo retorcido de Effie en
el suelo a sus pies. La mujer había aterrizado exactamente donde habían estado antes
de que Cameron medio las empujara y medio las arrastrara fuera del camino. No podía
haberlos evitado por más de un pelo, pensó Edith con consternación, mirando su
cuerpo.
"¡Oh, por el aliento de Dios, mi lady!"
Edith echó un vistazo alrededor de esa voz, y se las arregló para prepararse antes de
que Jaimie lanzara su delgado cuerpo hacia ella y la abrazara con fuerza.

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Serie Novias Escocesas #5
Desafortunadamente, aunque era baja, él era más bajo, y su cabeza aterrizó entre sus
pechos. Afortunadamente, sin embargo, no tuvo que decir nada. Tan rápido como lo
hizo, el hombrecillo delgado la soltó y saltó hacia atrás ruborizado.
"Lo siento mucho, mi lady. Estaba tan abrumado. Casi muere. ¡De nuevo! Debería
haber esperado por mí adentro", añadió, atrapándola del brazo y empujándola
alrededor del cuerpo y hacia la puerta. "No es seguro que esté fuera de la fortaleza.
Podría haber sido asesinada. De nuevo”.
"Aye, es casi como si Dios mismo estuviera tratando de golpearla", dijo Moibeal en voz
baja.
A juzgar por la forma en que los labios de Cameron se crisparon, escuchó a la doncella
decir eso, pero simplemente se volvió hacia Fearghas y dijo con resignación: "Será
mejor que vayas a buscar a Tormod y al nuevo laird. Necesitan escuchar sobre esto”.
Asintiendo con la cabeza, el soldado abrió la puerta, la sostuvo para que entraran y
luego los siguió adentro y se apresuró a pasar junto a ellos para salir apresuradamente
de las cocinas.
"Fearghas dijo que quería hablar conmigo", estaba diciendo Jaimie ahora. "¿Quería
desayunar? No lo ha hecho todavía. Puedo hacerle un buen...”
"Nay", interrumpió Edith. "Gracias, pero no me gustaría que saques tiempo de tu día
para cocinar para mí. Solo quería asegurarme de que Duer e Iain entregaron el queso y
los capones que compré".
"Oh, aye, aye", le aseguró, sonriendo. "Todo está aquí. El queso está en la despensa y
los capones se ven muy bien y regordetes. Los rostizare para la cena de esta noche tan
pronto como termine de recoger las hierbas que necesito”.
"Oh, encantador, eso estará bien", murmuró Edith, dándole palmaditas en el brazo.
"Debería dejarte volver a eso entonces. Eso es todo lo que quería”.
"Muy bien, mi lady. Ahora vaya, siéntese y trate de restablecerse. Tuvo un terrible susto
allí. Le llevaré algo ligero para calmar su estómago. Solo vaya siéntese. Y tú", agregó
Jaimie bruscamente a Cameron, "vigílala. No podemos perder nuestra Lady Edith ahora
que la tenemos bien como Señora”.
"Lo estoy intentando", le aseguró Cameron, cogiendo el brazo de Edith y llevándola con
más rapidez. "Pero la Señora puede ser terca".
"Disparates. Lady Edith es un ángel", espetó Jaimie cuando llegaron a la puerta. "Y si
dejas que algo le pase a ella, no tendrás nada excepto nabos y gachas hasta el día de
tu muerte, Cameron Drummond, así que vigílala bien".
El soldado dejó que la puerta se cerrara detrás de los tres con una mueca, y
prácticamente hizo marchar a Edith a las mesas de caballete.

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"Siéntese", ordenó, luego hizo una mueca y agregó: "Por favor".
Mordiéndose el labio para contener su diversión, Edith se sentó, pero agarró el brazo de
Moibeal y la arrastró hacia abajo con ella.
"Le vas a ocasionar ataques a Cameron", dijo la doncella, mirando por sobre su hombro
para mirar al hombre cuando él comenzó a caminar de un lado a otro detrás de ellas.
"Probablemente", reconoció Edith.
"Aunque siempre es tan varonil cuando se pone mandón, ¿no?", Dijo Moibeal a
continuación, y luego agregó: "Me recuerda a su esposo el laird".
"¿En serio?" Preguntó Edith con sorpresa.
"Aye. Él es tan... dominante. Nunca noté lo guapo que es antes de esto", dijo la chica
con un suspiro.
Edith levantó sus cejas. "¿Kenny tiene algo de competencia?"
"¡Oh, Kenny!" La doncella agitó su mano con irritación.
"¿Qué?" Preguntó Edith con curiosidad.
"Bueno, después de ver cuán bueno, amable y considerado es el Laird con usted, y
escuchar cómo la complace en la cama..." Ella hizo una mueca y se encogió de
hombros. "Estoy pensando que Kenny no se está esforzando mucho. Tal vez él no es el
único para mí”.
"Ah", murmuró Edith, no queriendo decirlo, pero feliz de que la chica estuviera
pensando de esa manera. No le había gustado mucho Kenny y la forma en que trataba
a Moibeal desde el principio. Girando, miró a Cameron pensativamente y luego asintió y
se volvió para decir: "Bueno, me gusta Cameron. Así que tienes mi bendición si estás
interesada en él".
"Lo estoy", le aseguró Moibeal con un pequeño suspiro. "Ahora sí solo me notara".
Edith se encogió de hombros. "Quédate conmigo y él tendrá que tomar nota".

"Muerta."
Niels hizo una mueca ante el anuncio de Rory cuando se enderezó de examinar a Effie
donde se había caído. Él hubiera sido capaz de decirlo sin tocar siquiera a la mujer.
"¿Crees que todas sus heridas son de la caída?"
"Aye", dijo Rory. "No veo ningún hematoma o arañazo que sugiera que se haya
lastimado antes de caerse de la pared".

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"¿Crees que nos escuchó en las escaleras, pensó que veníamos y saltó?", Preguntó
Geordie.
"Esa sería mi suposición", dijo Tormod con gravedad. "Debió de haberse enterado de
que habíamos encontrado sus venenos y su arco en el dormitorio y estábamos sobre
ella".
"Su salto fue probablemente el último esfuerzo desesperado por matar a nuestra señora
y terminar con ella misma también".
Niels se giró ante ese agrio comentario para ver al cocinero que se acercaba con una
canasta grande llena de hierbas recién recogidas.
Asintiendo con la cabeza, Jaimie les informó: "Casi aterrizó sobre la cabeza de Lady
Edith, y seguramente la hubiera matado si Cameron no la hubiera empujado a ella y a
Moibeal fuera del camino”. Exhaló un suspiro, sacudió la cabeza y miró hacia abajo el
cuerpo roto de Effie. "Ella debe haber estado enojada. Todos estos asesinatos... ¿y
para qué? Sin duda, comenzó esperando ver a su señora dirigiendo Drummond como la
muchacha deseaba, pero en lugar de eso la mató con sus tontas acciones.
Probablemente estaba tratando de matar a lady Edith por rencor después de que supo
que había matado involuntariamente a Victoria”.
"Aye", dijeron Geordie y Tormod, asintiendo solemnemente.
Niels notó que Rory no estaba comentando, sino que estaba mirando a Effie con
expresión preocupada. "¿Qué estás pensando, Rory?"
Su hermano vaciló, pero luego sacudió la cabeza impotente. "No sé qué pensar.
Ciertamente, lo que dice Jaimie tiene sentido. Todo parece sugerir que Effie fue nuestra
culpable y se suicidó antes de ser atrapada. Es triste realmente”.
Niels volvió a mirar a la mujer y luego a la parte superior de la pared. Frunció el ceño,
pero luego simplemente giró y entró de nuevo a las cocinas. Necesitaba hablar con
Edith.
Al salir al gran salón, Niels vio que su esposa todavía estaba sentada susurrando con
su doncella en la mesa. Un movimiento lo hizo mirar hacia la chimenea donde la abuela
de Ronson se estaba calentando las manos junto al fuego, y parecía estar dando una
conferencia a su nieto. Probablemente acerca de lo sucio que estaba, pensó Niels con
una pequeña sonrisa. Parecía como si el chico hubiera estado revolcándose en la tierra.
Laddie no estaba mucho mejor, notó cuando su mirada se posó en el perro. Los dos
necesitaban otra visita al lago. Y ese parecía un lugar tan bueno como cualquiera para
tener esa conversación con Edith.
Niels se dirigió hacia la mesa y su esposa.

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"Mi laird".
Edith se volvió ante ese murmullo de Cameron y sonrió con incertidumbre a su marido
cuando lo vio acercarse. No podía decir por su cara si estaba enojado con ella por ir al
jardín o no. No podía leer su expresión en absoluto. Sus ojos estaban preocupados, su
boca sonreía, pero su mandíbula estaba apretada por la tensión. Fue muy confuso.
"Creo que iré a limpiar el dormitorio ahora que los hombres parecen haber terminado
allí arriba", dijo Moibeal, saltando del banco para escapar.
Edith asintió, pero la palabra cobarde flotaba en su cabeza cuando la doncella se
escabulló y tuvo que obligar a su sonrisa a ampliarse para el beneficio de su marido.
"Ronson y Laddie necesitan otro baño", anunció Niels abruptamente una vez que la
alcanzó.
Edith lo miró sin comprender. Esas eran las últimas palabras que esperaba escuchar
salir de su boca cuando lo vio acercarse.
"¡Ronson!", Llamó Niels, y Edith siguió su mirada hacia el niño que estaba siguiendo a
su abuela hasta su silla. El muchacho lanzó una mirada de esperanza a la llamada.
"¿Aye, mi laird?", Preguntó, apresurándose hacia ellos con Laddie pisándole los
talones.
"Tú y Laddie necesitan otro baño. ¿Cómo demonios te ensuciaste tanto?” añadió con
exasperación. "Tienes barro desde tus espinillas hasta tu cuello".
"Estábamos jugando", dijo Ronson como si eso explicara todo.
"Bueno, ve a decirle a tu abuela que vamos al lago para limpiarlos a los dos”, dijo Niels,
y luego le dijo a Edith, "Prepararé mi caballo. Es posible que desees juntar algunos linos
y ropa limpia mientras lo hago”.
Él se dirigió a la puerta de la fortaleza antes de que ella pudiera responder. Edith frunció
los labios mientras lo veía irse, y luego se puso de pie y se apresuró a subir las
escaleras, consciente de que Cameron y Fearghas la estaban siguiendo.
Edith recogió ropa limpia para ella y Niels, y linos para que los tres se secasen, pero
también tomó jabón y algunas pieles. Rodó las pieles y las ató con cuerdas, mientras
que Moibeal metió todo lo demás en un saco para ella. Estaba apurándose escaleras
abajo en poco tiempo.
Cameron y Fearghas se ofrecieron a llevar los artículos para ella mientras la seguían
desde su posición donde habían esperado fuera de la alcoba, pero Edith sacudió la
cabeza y siguió caminando. Estaba contenta de haberlo hecho cuando Tormod llamó a
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los dos hombres mientras bajaban apresuradamente las escaleras. Cameron y
Fearghas redujeron la velocidad y la miraron, pero ella les indicó que siguieran.
"Adelante. Iré a asomarse a la puerta y veré si mi marido ya está listo”.
Asintiendo con la cabeza, los hombres se precipitaron hacia Tormod al llegar al final de
los escalones, y Edith se volvió para apresurarse hacia la puerta de la fortaleza.
Levantando el saco sobre su hombro, abrió una puerta y miró hacia afuera, arqueando
las cejas cuando vio a Niels subir las escaleras con un escudo en la mano. Su caballo
estaba al pie de las escaleras con Laddie tumbado junto a él en la tierra, y Ronson de
pie al frente, sosteniendo las riendas.
"¿Dónde están tus guardias?", Preguntó Niels cuando salió de la fortaleza con sus
objetos.
"Tormod los llamó a la mesa. Dije que solo miraría y vería si estabas listo”.
Niels asintió con la cabeza, y luego tomó las pieles enrolladas de ella, se las metió bajo
el brazo y también agarró el saco. Levantando el escudo sobre su cabeza, dijo, "Vamos.
Iremos sin ellos esta vez. Quiero hablar."
Él la condujo rápidamente escaleras abajo, le entregó el escudo para que lo sostuviera
sobre su propia cabeza y luego la levantó sobre la silla de montar. Edith casi trató de
sentarse de lado, pero en el último momento se burló de la propiedad y movió las
piernas para aterrizar a horcajadas. Niels luego ató rápidamente el saco y las pieles a
su silla de montar antes de levantar a Ronson para que se sentara en su regazo. Un
momento después, él estaba en la silla detrás de ella y sacaba al caballo del patio.
"Puedes bajar el escudo ahora", dijo Niels una vez que estuvieron más allá de la pared.
Edith lo bajó con alivio y lo dejó colgando junto a ellos para que descansara contra su
pierna. Había sido incómodo sostenerlo así. Se había topado con la cara de Niels. Ella
había intentado evitar que sucediera, pero rebotar en el caballo lo hizo difícil.
No hablaron en el camino al lago. Niels hizo que el caballo se moviera a una velocidad
que dificultaba eso, pero a Edith no le importó. Estaba disfrutando la sensación del
viento fresco en su pelo y el calor del cuerpo de Niels detrás de ella. Tanto que casi lo
lamento cuando llegaron al lago y tuvieron que desmontar.
"Arreglaré las pieles si quieres meterte en el agua", sugirió Niels mientras la dejaba en
el suelo.
Edith sonrió débilmente, pero negó con la cabeza. Ella planeaba nadar con él y con
Ronson esta vez, no sola constantemente angustiada por ser vista en su camisa. Aún
usaría la camisa ya que Ronson estaba con ellos, pero no era tímida porque su marido
la viera con ella. Lo ayudó a desenrollar y colocar las pieles, y luego recogió los linos y
la ropa limpia y los colgó de la rama que había usado la última vez.

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Una vez hecho esto, Edith desabrochó los lazos de su vestido y se lo quitó, sorprendida
cuando Niels gimió detrás de ella.
"Ah, muchacha", suspiró, moviéndose hacia ella. "Haces difícil pensar cuando haces
cosas así".
"¿Cómo qué?", Preguntó en una risa sin aliento cuando él la abrazó por detrás y la
atrajo hacia su pecho. Edith se acurrucó contra él brevemente, disfrutando del contacto,
pero cuando sus manos comenzaron a elevarse hacia sus pechos, ella las atrapó y
susurró, "Compórtate. Ronson está aquí”.
"Aye", suspiró Niels. Liberándola, añadió secamente, "Y yo fui tan tonto como para
invitarlo también".
Edith se rió ante el comentario y comenzó a meterse en el agua.
Fue mucho más divertido nadar con Ronson y Niels que sin ellos, decidió mientras
chapoteaban y jugaban en el agua. Esta vez pudo disfrutarlo con ellos en lugar de
escucharlos divertirse. Incluso disfrutó lavando a Laddie, a pesar de que él saltó y la
metió debajo del agua dos veces. Pero finalmente tuvieron que salir.
"Aquí lo tienes," dijo Edith brillantemente mientras seguía a Ronson fuera del agua.
"Estás limpio como un bebé recién nacido ahora. Eso debería complacer a tu abuela”.
"Gracias a Dios", Ronson gruñó con irritación infantil. "Pensé que justo tendría un
ataque cuando salió del garderobe y me vió".
"¿El garderobe otra vez?", Bromeó Edith con diversión.
"Aye. Se lo dije, ella siempre está allí", se quejó Ronson, aceptando la tela que Edith le
tendió y comenzando a secarse. "Ella se dirigía hacia ahí cuando me envió a jugar, y
recién salía cuando volví".
Edith hizo una pausa con el lino medio envuelto alrededor de ella y miró al niño cuando
dejaba la tela y se ponía la ropa limpia y gastada que su abuela le había enviado. Sus
palabras se reprodujeron en su cabeza mientras lo miraba. Pero cuando Niels los
alcanzó, ella comenzó a moverse nuevamente y terminó de envolver el lino a su
alrededor. Manteniéndolo en su lugar con una mano, dejó que Niels se secara y se
vistiera con su camisa y su tartán, y siguió al niño hasta las pieles, diciendo
suavemente: “Háblame de tu abuela, Ronson”.
Se volvió para mirarla sin comprender, y luego se dejó caer sobre las pieles y preguntó:
"¿Qué hay de ella?"
Edith vaciló, insegura ella misma de lo que esperaba aprender, pero luego sugirió:
"Cuéntame sobre tu vida antes de llegar a Drummond".
Ella había querido que él le contara acerca de su casa antes de llegar a Drummond,
pero él la malentendió y le contó sobre su vida más inmediata antes de llegar aquí.

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Haciendo una mueca de tristeza, dijo, "Bueno, caminamos por mucho tiempo. Pensé
que mis pies se caían, caminamos tanto tiempo”.
"¿Qué hay de los otros castillos en los que se detuvieron en el camino?" Preguntó
Edith. Bessie le había dicho que se habían detenido en todos los castillos situados entre
este lugar y su antigua casa en el norte de Inglaterra, pero nadie los aceptó.
Ronson la miró con perplejidad. "No hubo otros castillos, mi lady. Ninguno que viera de
todos modos. Todo lo que había en el camino eran bosques y más bosques. Ni siquiera
pasamos a nadie más viajando”.
"Ya veo", murmuró Edith. Bessie obviamente había mentido. O el castillo del que venían
no había estado en el norte de Inglaterra como Bessie había dicho, o se habían
mantenido fuera de los caminos y senderos para evitar encontrarse con otros. Eso era
posible y los habría salvado de ser robados o atacados por bandidos, pero habría sido
más lento y tenía sus propios peligros. Tuvieron suerte de haber evitado ser atacados
por lobos y osos salvajes en su camino hacia aquí.
"¿Recuerdas cuántas noches dormiste en el camino, Ronson?", Preguntó
abruptamente.
Hizo una pausa y consideró la pregunta, y luego negó con la cabeza. "Demasiadas para
contar. Cientos tal vez”.
Edith dudaba seriamente de que hubieran sido cientos, pero tampoco creía que el chico
pudiera contar todavía. O si pudiera, probablemente no podría contar demasiado alto.
Pero su respuesta le dijo que debían haber recorrido una buena distancia.
"El invierno acababa de terminar cuando comenzamos", agregó de repente. "Todavía
hacía mucho frío".
Edith asintió y se relajó un poco. Ronson y su abuela habían estado viajando bastante
tiempo para llegar a Drummond. Tal vez incluso tanto como un par de meses. Eso
parecía un poco demasiado, pero... Era finales de julio, sin embargo, habían llegado a
Drummond a fines de mayo. Si comenzaron su viaje a fines de marzo... Ella frunció el
ceño, pero supuso que podrían haber caminado tanto tiempo. Ronson tenía piernas
pequeñas y era joven, su paso habría sido mucho más corto y tendrían que viajar
mucho más despacio que dos adultos... y aparentemente lo habían hecho sin detenerse
ni una vez en ninguno de los castillos o pueblos en el camino.
Con la boca apretada, preguntó: "¿Qué comiste en el camino a Drummond?"
"La abuela siempre salía y cazaba un conejo o un pájaro después de que nos
detuviéramos por el día", dijo y luego agregó con orgullo: "Ella tiene una buena mano
con el arco. Como mi Má. Má solía llevarme a cazar con ella. Me prometió que me
enseñaría a usar el arco como la abuela le enseñó, pero entonces murió”. Ronson hizo
una breve pausa, y luego, cuando Niels terminó de vestirse y se acercaba a ellos en las
pieles, el chico añadió con tristeza: “extraño mi Ma."

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Serie Novias Escocesas #5
"Me imagino que sí", dijo Edith, pero preguntó: "¿Qué hay del último castillo donde
viviste antes de Drummond? ¿Recuerdas eso?”
"Aye". Extendió la mano para acariciar a Laddie cuando el perro se dejó caer en la
hierba junto a las pieles y se quedó en silencio por un minuto, pero luego dijo: "Estuvo
bien. Teníamos la cabaña más bonita en el pueblo, la abuela, Má y yo. Pero mamá
siempre tenía que ir al castillo porque el laird quería que ella trabajara. Hacía que la
abuela maldijera algo horrible cuando enviaba a sus hombres por ella. Decía que era un
bastardo rapero, o algo así”.
Edith levantó las cejas. "¿Te refieres a violador14?"
"Aye". La frente de Ronson se aclaró. "Eso fue. Él era un bastardo violador".
Edith se sentó brevemente y luego preguntó: "¿Cómo se llamaba tu madre?"
"Esposa", Niels gruñó en voz baja.
"Glynis", dijo Ronson con una sonrisa. "Ella fue siempre tan bonita, mi lady. Y ella no
estaba siempre en el garderobe como la abuela. Le gustaba jugar conmigo”. Frunció el
ceño. "Al menos lo hacía cuando no estaba demasiado dolorida".
"¿Demasiado dolorida?", Preguntó, haciendo caso omiso del ceño fruncido que Niels le
dirigía.
"Aye. Má siempre se caía y chocaba con cosas mientras trabajaba para el lord y volvía
adolorida y magullada. Ella no podía jugar conmigo”, dijo con tristeza.
"¿Así es como murió?", Preguntó Edith. "¿Cayó o chocó contra algo?"
"Aye, se cayó del acantilado", dijo Ronson con tristeza. "Fue terrible. Ella no debe
haberse dado cuenta de lo cerca que estaba. Simplemente camino derecho fuera de
este. Traté de advertirla. Grité y lloré y corrí tan rápido como pude tratando de atraparla
para advertirle, pero ella no me escuchó y no pude correr lo suficientemente rápido”.
"Lamento escuchar eso, Ronson", dijo Niels gentilmente, "Pero estoy seguro de que ella
sabe que trataste de advertirla".
El chico gruñó y comenzó a rascar a Laddie detrás de la oreja, haciendo que la pierna
del perro comenzara a dar patadas en el aire.
Edith observó en silencio durante un minuto y luego preguntó: "¿Eso fue cuando se
fueron?"
"Esposa", espetó Niels ahora, obviamente queriendo que dejara de hacerle estas
preguntas al chico. Afortunadamente, Ronson respondió de todos modos.

14
Ronson dice “rapping” que se traduce en golpecitos o rapear. Edith corrige a “raping” que sería violar o violador.

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"Aye. El viejo Laird bajó y le dijo a la abuela que teníamos que irnos", murmuró con el
ceño fruncido, y luego dijo: "Pero creo que debe haberse referido a alguien más".
"¿Quieres decir que se refería a que se fuera alguien más?", Preguntó Edith con
incertidumbre.
"Aye. Creo que nos estaba confundiendo con otra persona. Ni siquiera sabía el nombre
de la abuela. Él seguía llamándola Ealasaid".
Edith miró a Ronson, un sonido como agua corriendo en sus oídos mientras trataba de
comprender lo que él había dicho. Cuando el sonido comenzó a retroceder, finalmente
dijo cuidadosamente: "Muchacho, ¿dijiste que la llamaba Ealasaid?"
"Aye". Ronson frunció el ceño. "Estaba tan enojada con él que no creo que siquiera lo
haya notado. Pero yo lo hice, y después de que él se fue intenté decirle que estaba
confundido y que ella debería ir al castillo y explicarle, pero la abuela solo me dijo que
me callara y me fuera a la cama a dormir, que nos íbamos con la primera luz"
Ronson hizo una mueca y admitió: "Creo que quizás estaba un poco exasperada,
porque mientras empacaba no paraba de murmurar acerca de volver a casa, pero
estábamos en casa", dijo con seriedad y luego exhaló otra vez. "De todos modos,
entonces nos fuimos y caminamos todo el camino hasta aquí, y fue difícil, mi Lady. Lo
más difícil que he hecho en mi vida. A veces me dormía sobre mis pies y me
despertaba para encontrar a la abuela cargándome. Estaba muy contento cuando
llegamos aquí y nos dejaste quedarnos”.
Edith sonrió torcidamente, pero no tenía idea de qué decir a eso. Le gustaba mucho
Ronson, pero en ese momento no podía decir honestamente que estaba contenta de
que él y su abuela hubieran venido a Drummond y de haberlos dejado quedarse. En
ese momento, estaba bastante segura de que había sido el mayor error de su vida.
"¿Hiciste…?" ella comenzó.
"Ronson", Niels la interrumpió con gravedad. "Necesito hablar con mi esposa. Solo
estaremos allí por el caballo. Quédate aquí hasta que regresemos”.
"Aye, mi laird", dijo Ronson a través de un bostezo, y luego se dejó caer de espaldas
sobre las pieles para mirar al cielo sobre su cabeza.

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Capítulo 16

Edith miró a Niels con curiosidad mientras la conducía a su montura. Parecía


terriblemente enojado, y tuvo la sensación de que era con ella, aunque no podía
imaginar por qué. Hasta que llegaron a su caballo y él se volvió hacia ella para exigir
con un gruñido, "¿Por qué estás haciendo que el muchacho hable sobre asuntos tan
inquietantes?"
"¿Oíste lo que dijo?", Preguntó Edith con asombro, porque aunque se había perdido la
parte de que Bessie era muy hábil con un arco y una flecha, había estado allí cuando el
chico dijo los nombres de Ealasaid y Glynis.
"Aye. Su pobre madre fue más como violada por su último laird e impulsada a quitarse
la vida. El viejo bastardo echó a Ronson y su pobre abuela y caminaron por lo que
debieron de ser semanas para llegar hasta Drummond”.
"¿Y los nombres?", Preguntó ella.
Su pregunta lo detuvo, y Niels frunció el ceño y preguntó: "¿Qué nombres?"
Edith dio un bufido de impaciencia. "El de su madre por decir uno".
La boca de Niels se torció y miró hacia abajo brevemente, obviamente tratando de
recordar. Finalmente, se encogió de hombros y dijo: "¿Glenna?"
"Glynis", corrigió ella. "Los nombres de las hermanas de mi padre eran Glynis y
Ealasaid", le recordó.
"Oh... Aye”, dijo finalmente, y miró a Ronson con el ceño fruncido. "Pero la abuela de
Ronson se llama Bessie".
"Bessie es como llamas una niña o una anciana llamada Elizabeth", señaló
pacientemente. "Y Elizabeth es el inglés para…"
"Ealasaid”, terminó por ella con realización.
"Aye. Que es como el viejo laird la llamó”, Edith le recordó y se giró para mirar al niño.
Sus ojos estaban cerrados ahora, aunque su pie se movía, por lo que sabía que estaba
despierto.
"Y tu padre se llamaba Ronald", murmuró Niels, siguiendo su mirada hacia Ronson.
"Y dijo que su abuela seguía murmurando sobre ir a casa", agregó Edith sombríamente.
"Aye". Miró a Ronson brevemente y luego negó con la cabeza. "Pero dijiste que las
hermanas de tu padre estaban muertas".
"Eso es lo que me dijeron", dijo Edith solemnemente.
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"Así que... ¿Podría ser esto una extraña coincidencia?", preguntó dubitativo.
Edith negó con la cabeza. "Ronson se ha quejado una o dos veces sobre la cantidad de
tiempo que su abuela pasa en los garderobes. Dijo que pasa la mayor parte de la noche
allí”, le dijo en voz baja. "Supuse que era un resultado de la edad. Pero cuando
estábamos saliendo hoy del lago, comenté que a su abuela le agradaría que él
estuviera tan limpio, y mencionó que ella le había dicho que saliera y jugara en su
camino al garderobe y cuando él regresó de jugar, ella casi tuvo un ataque cuando salió
del garderobe y lo vio”.
Niels negó con la cabeza, obviamente no estaba seguro de qué tenía eso que ver con
nada.
"Cuando llegué abajo después de dejar a los hombres y ti a buscando en los
dormitorios y túneles, el salón estaba casi vacío. Había dos guardias en la puerta de la
cocina, y tal vez un puñado de sirvientes en las mesas, incluida Moibeal, pero Ronson y
Laddie no se veían por ninguna parte. Tampoco Bessie".
"Ronson probablemente ya estaba en el patio jugando con Laddie, y Bessie estaba en
el garderobe", dijo con facilidad.
"Aye, eso es lo que pensarías, pero en el momento en que llegué abajo revisé cada uno
de los garderobes en busca de la entrada oculta que Tormod mencionó y cada uno
estaba vacío".
Niels se quedó quieto. "No podría haber estado en la cocina".
"Nay. Los guardias no habrían permitido su paso. Y no pudo haber subido las
escaleras, los hombres estaban protegiendo el rellano y el pasillo para evitarlo”, señaló
ella.
"Crees que ella sabe acerca de los pasajes porque Bessie es la hermana de tu padre,
Ealasaid y que la madre de Ronson no era su hija, sino su hermana Glynis”, razonó
lentamente.
"Nay. Sospecho que Bessie es Ealasaid, y que la madre de Ronson realmente era la
hija de Bessie, pero la llamó Glynis por su hermana. Aparentemente eran bastante
cercanas".
Niels asintió con la cabeza, y luego dijo: "¿Y crees que el niño lleva el nombre de tu
padre?"
Edith asintió.
"¿Pero crees que Bessie ha estado escabulléndose a través de los pasillos hasta la
habitación de tu padre y durmiendo allí?"
"Creo que ha estado haciendo más que eso", dijo Edith en voz baja. "Me di cuenta de
que la madre de mi padre era muy habilidosa con la curación y los venenos y le estaba

~ 220 ~
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enseñando a Ealasaid y Glynis todo lo que sabía antes de que todas murieran. O antes
de que supuestamente murieran”, añadió secamente.
"Entonces, ella podría haber sabido lo suficiente sobre malas hierbas para envenenar a
todos", murmuró Niels y luego apretó la boca y agregó: "Y su habilidad con la curación
significa que habría sabido donde estaba el corazón y la mejor manera de apuñalarlo
para detenerlo también".
Edith asintió. "Sé que los hombres quieren culpar a Effie por todo lo que ha sucedido
aquí, pero como le dije a Rory, Effie...”
"Tenía parálisis en las manos y los brazos y no podía apuntar directamente. Aye, nos lo
dijo cuándo encontramos el arco y venenos debajo de la cama", admitió Niels y explicó:
"Ya habíamos decidido que Effie no podía ser la culpable antes de que supiéramos que
estaba muerta. Pero todavía no teníamos idea de quién podría ser, así que decidimos
fingir que lo creíamos con la esperanza de que el verdadero culpable se relajaría lo
suficiente como para cometer un error y caer en la trampa que planeamos”.
"¿Qué trampa?", Preguntó con interés.
"En la que dejamos tu bebida sola en la habitación donde Alick se esconde y puede
presenciar cómo tu posible asesino la envenena", dijo y luego preguntó: "¿No te diste
cuenta de que Alick no bajó con el resto de nosotros? Nadie sabe que está aquí, solo
los dos guardias del pasillo y han jurado guardar el secreto”.
"Oh". Ella asintió, recordando el plan que había mencionado esa mañana. Parecía tan
lejos ahora.
"¿Qué edad tendría tu tía si todavía estuviera viva?", Preguntó Niels de repente.
"Ealasaid y Glynis eran siete y diez años más jóvenes que mi padre", dijo y luego
explicó: "La abuela perdió varios hijos después de que mi padre nació, antes de que
naciera Ealasaid".
Niels negó con la cabeza, decepcionado por esta noticia. "Bessie es una anciana, Edith.
No podía ser la hermana de tu padre. Además es tan sorda como puede ser, encorvada
con la edad y..." Sacudió su cabeza otra vez. "No estoy seguro de que pueda manejar
un arco y una flecha mejor que Effie".
"Ronson dijo que ella es buena con un arco y una flecha y cazaba su comida todas las
noches en el camino a Drummond”, Edith le dijo solemnemente, y luego frunció el ceño
y dijo: "Y ella…"
"¿Qué?", Preguntó cuándo ella dudó.
"Bueno, parece terriblemente vieja, pero Ronson dijo que lo cargó en el camino hasta
aquí. Y aunque parece sorda como un poste de madera, y ciega también la mayor parte
del tiempo, nunca tuvo problemas para enhebrar sus agujas, y hay momentos en que

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Serie Novias Escocesas #5
me oye murmurar cosas en un susurro que no debería haber sido capaz, siendo tan
sorda como a menudo parece ser".
"Crees que está fingiendo ser tan vieja", dijo con comprensión.
Edith asintió. "Creo que tenemos que hablar con ella, esposo".
"Esposa, no va solo a admitir todo. Eso significaría que es sospechosa de asesinato'',
señaló Niels.
"Aye". Frunciendo el ceño, miró hacia otro lado, tratando de descubrir cómo probar que
lo que sospechaba que era verdad. O demostrar que no era verdad.
"Podríamos ponerla a prueba", dijo Niels de repente.
"¿Cómo?" Preguntó Edith de inmediato.
Pensó brevemente y luego sugirió: "Lanzarle algo y ver si ella es lo suficientemente
rápida para evitar que la golpee. O cabalgamos de vuelta y corres dentro y le dices que
Ronson se ha herido algo terrible y ves si ella se mueve más rápido para salir a su lado
de lo que debería”.
"Eso podría funcionar", dijo con una sonrisa lenta. "Eso último especialmente. Lo que
sea que sea cierto acerca de ella, parece amar a Ronson”.
"Aye. Y si eso no funciona, la encerraremos en la mazmorra y haremos que nos diga la
verdad", decidió Niels sombríamente, y luego la agarró por la cintura y la levantó en la
silla de montar. En el momento en que ella se instaló, se volvió y gritó: "¡Ronson! ¡Ven!
Nos vamos”.
Edith miró alrededor bruscamente a eso, y rápidamente gritó, "¡Nay!"
Ronson hizo una pausa, a medio camino de pararse y luego se enderezó con
incertidumbre y miró a Niels.
"Quédate ahí", dijo ella, y rápidamente desmontó de nuevo cuando Niels se volvió en
cuestión. Fue lo suficientemente rápido como para agarrarla por la cintura y soltarla en
el suelo, y Edith murmuró un "gracias", y luego se volvió hacia él.
"¿Pensé que querías hablar con Bessie?" Dijo una vez que estaba frente a él.
"Aye, pero no podemos llevar de vuelta a Ronson para eso. Es su abuela", dijo
ansiosamente. "Sería terriblemente desconcertante para él, especialmente si
terminamos haciéndola arrastrar a la mazmorra por los soldados".
"Aye, supongo que tienes razón", murmuró Niels, y luego frunció el ceño. "Pero no me
gusta la idea de dejarlo aquí solo. Incluso con Laddie”.
"Nay", aceptó Edith. "Así que solo tendrás que quedarte aquí con él mientras voy a
interrogarla".

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"Un infierno que lo haré", dijo Niels de inmediato, su voz justo al punto de un rugido. "Si
alguien se queda aquí con el niño, serás tú".
Edith entrecerró los ojos sombríamente y levantó la barbilla. "Son mi padre, hermanos y
tío los que mató. Quiero estar allí cuando sea interrogada”.
Niels se pasó una mano por el cuello y frunció el ceño brevemente, pero luego se
detuvo y bajó la mano. "Está bien. No voy a hablar con ella hasta que estés allí.
Regresaré al castillo, buscaré a Bessie y la escoltaré silenciosamente hasta la
mazmorra. La encerraré en una de las celdas allí abajo y luego regresaré por los dos.
De esa forma, Ronson no verá nada que lo alarme, y podrás interrogarla conmigo”.
Edith consideró la sugerencia lentamente y luego asintió con la cabeza. "Pero
prométeme que llevarás a Tormod y a tus hermanos cuando busques a Bessie y la
encierres".
"Puedo manejar a una viejecita, esposa", dijo con rigidez.
"Ha matado a muchas personas, esposo. Preferiría que no fueras contado entre ese
número. Así que prométemelo", insistió.
"Aye, está bien", dijo Niels con exasperación. "Llevaré a mis hermanos y a Tormod para
buscarla".
"Gracias," susurró Edith.
Asintiendo con la cabeza, se giró hacia su caballo y luego se detuvo y giró de nuevo,
quitándose la espada cuando lo hizo. "Toma esto."
Edith aceptó el arma, pero frunció el ceño. "¿Qué pasa si la necesitas?"
"Iré rápido en ambos sentidos, Edith. No la necesitaré. Pero no me gusta dejarte aquí
sola y desarmada... incluso por el corto tiempo que espero estar fuera”.
"Nunca estoy desarmada, esposo, llevo mi sgian-dubh en todo momento", le recordó
solemnemente Edith, y luego agregó: "Además, no estoy sola. Tendré a Laddie y
Ronson conmigo, y a menudo hemos venido aquí juntos sin sufrir daños”.
"Solo sostén sobre ti mi espada", ordenó Niels, y luego se inclinó para presionar un
rápido beso en sus labios, antes de finalmente montar a su bestia. Mirándola entonces,
negó con la cabeza. "No me gusta dejarte aquí".
"Estaré bien", insistió. "Solo apúrate".
"Aye", suspiró, y luego asintió una vez más e instó a su caballo a alejarse.
Edith lo observó hasta que desapareció entre los árboles y luego se volvió para caminar
hacia las pieles. Ronson estaba acostado de nuevo con los ojos cerrados, y Laddie se
había colado sobre las pieles para acurrucarse junto a él. Consideró empujar al perro y
obligarlo a quitarse de las pieles, pero le pareció que Ronson se había quedado

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dormido y no quería arriesgarse a despertar al niño. Dejó al perro solo, se acomodó en
el pelaje al lado de la pareja, colocó la espada de su marido junto a ella y miró al niño
con tristeza.
Ronson era un buen muchacho y, por su bien, casi esperaba estar equivocada acerca
de que su abuela estaba detrás de las muertes en Drummond. Pero Edith sospechaba
que no lo estaba. Aunque, pensó que lo que había aprendido trajo más preguntas que
respuestas. Si Bessie era Ealasaid todavía viva, ¿por qué le habían dicho a su padre
que estaba muerta? ¿Alguna de ellas había muerto? ¿Estaban vivas Glynis y su
madre? Probablemente la madre no lo estuviera ahora, reconoció. ¿Y realmente le
habían dicho a su padre que Ealasaid y las otras estaban muertas? Edith quería creer
que no le habría mentido sobre algo así, pero después de todo lo que había sucedido,
no sabía qué pensar.
Y luego estaba la otra parte de eso... si Bessie era Ealasaid, y su padre había estado
tan cerca de sus hermanas como su madre había reclamado, ¿cómo no la había
reconocido cuando llegó a Drummond? Más importante aún, ¿por qué ella lo mataría?
Edith estaba perdida en esos pensamientos cuando Laddie repentinamente se
abalanzó sobre las pieles, ladró y se dirigió directamente hacia los bosques al borde del
claro frente a ella.
"¡Laddie!" Ronson gritó somnoliento, parándose incluso antes de que estuviera
completamente despierto. "Vuelve."
"¡Ronson, no!" Gritó Edith, y trató de agarrar su brazo, pero el chico fue casi tan rápido
como el perro y estaba cruzando el claro antes de que ella pudiera detenerlo.
Maldiciendo, se puso de pie para correr tras él, pero se detuvo bruscamente después
de solo un par de pasos cuando escuchó a Ronson gritar, "¡Abuela! ¿Qué estás
haciendo aquí?”.
"Solo quería asegurarme de que te lavaras detrás de tus oídos".
Congelada en el lugar, Edith oyó esa respuesta, y luego retrocedió lentamente hacia las
pieles y se inclinó para recoger la espada por la empuñadura. Agarrándola con fuerza,
observó el bosque, simplemente esperando, y luego se tensó aún más cuando Ronson
condujo a su abuela fuera de los árboles y hacia ella con Laddie pisándoles los talones.
Decir que la abuela de Ronson parecía molesta era algo así como un eufemismo.
Estaba mirando a Laddie como si quisiera matar y despellejar a la pobre bestia, notó
Edith. Más importante aún, en su aflicción, caminaba recta y a un ritmo normal, en lugar
de hacerlo con la forma lenta y encorvada que solía usar. Justo cuando Edith notó eso,
la mujer comenzó a encorvarse e inclinarse hacia adelante, disminuyendo su ritmo.
También cambió su expresión a una actitud más servil mientras volvía su atención
hacia Edith.

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Serie Novias Escocesas #5
"Oh, mi Lady. Fue una caminata tan larga para llegar aquí", dijo agitando su mano
frente a su cara como si se sintiera bastante débil por el esfuerzo. Como debería
hacerlo. Este lugar estaba a una buena distancia del torreón. Demasiado lejos para que
hubiera caminado hasta aquí en el tiempo desde que Edith, Niels y Ronson se habían
ido de la fortaleza. Debe tener un caballo en algún lugar cercano, pensó Edith para sí
misma.
"¡Laddie!" Rugió Ronson, soltando la mano de su abuela, y corriendo detrás del perro
cuando de repente este se apresuró al bosque.
Mientras Bessie fruncía el ceño detrás del niño, Edith nunca apartó los ojos de la mujer.
Siempre que Ronson permaneciera cerca de Laddie, él debería estar bien. Ella, por otro
lado, estaba en una situación bastante complicada. La mujer había venido para matarla,
estaba segura. La pregunta era si había planeado hacerlo frente a su nieto y esperaba
que él no se lo dijera a nadie, o si había planeado algo más. Como debía saber que
Niels había ido con ellos, lo más probable hubiera sido que fuera a disparar flechas
desde la cobertura de los árboles para que Ronson tuviera que ser testigo de las
muertes, pero no de quién las causaba, pensó, y preguntó, "¿Dónde está tu arco y
flechas, Ealasaid?"
"¿Dónde está mi...?", Comenzó la anciana con fingida confusión, y luego se detuvo
bruscamente. Con los ojos entrecerrados, preguntó en voz baja, "¿Cómo me llamó, mi
Lady?"
"Ealasaid", repitió Edith en voz baja y luego arqueó las cejas. "Es tu nombre, ¿no es
así? Ealasaid Drummond. Hermana de una Glynis y madre de otra. Hermana de mí
padre, como también su asesina”.
La mujer la miró por un momento, y luego renunció a su postura encorvada y se
enderezó, su boca se comprimió.
"Supongo que viniste a matarnos a Niels y a mí, y trajiste tu arco para hacerlo", dijo
Edith cuando la mujer solo la miró. "Justo en frente de tu nieto, también", añadió con
gravedad. "Eso hubiera sido cruel".
"Aye". Bessie asintió solemnemente. "Me molestó tener que hacerlo delante de él, pero
es necesario. Y no voy a dejar que me vea hacerlo. De hecho, es por eso que no tengo
mi arco ahora. En el momento en que el perro corrió y escuché a Ronson
persiguiéndolo, escondí mi arco y carcaj bajo un arbusto”.
Edith sintió como si le hubieran dado un puñetazo en el estómago. Lo había resuelto y
había pensado que sabía qué era qué, pero descubrir que tenía razón era diferente de
sospechar que lo era. Y parecía que la mujer todavía tenía la intención de matarla.
"¿Por qué?"
La pregunta se deslizó espontáneamente, y luego se quedó colgando en el aire por un
momento antes de que Bessie dijera: "¿Por qué piensas?"

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Serie Novias Escocesas #5
"Realmente no tengo idea", admitió Edith. "Hasta el día de hoy, pensé que todos los
miembros de mi familia estaban muertos y que solo eras una anciana tratando de cuidar
a su nieto. Ahora descubro que la tía que pensé que murió antes de que yo naciera está
viva y detrás del asesinato del resto de mi familia”.
"¿Es eso lo que tu padre te dijo? ¿Que estaba muerta? ", Preguntó con una risa dura.
"Nay, mi madre lo hizo", dijo Edith suavemente. "El tema molestaba demasiado a mi
padre como para hablar de eso".
"Apuesto a que sí", dijo Bessie con frío sarcasmo y luego extendió los brazos y dijo:
"Bueno, puedes ver que eso era una mentira. Estoy viva."
"Aye", estuvo de acuerdo Edith. "¿Entonces también están vivas Glynis y tu madre?"
"¿Qué?", Preguntó con sorpresa. "Nay. Por supuesto que no. Murieron de la
enfermedad del sudor hace casi treinta años. Justo antes de que mi padre me echara
como si fuera basura y me dijera que nunca más volviera".
"A mi padre le dijeron que habías muerto con Glynis y su madre", dijo Edith
solemnemente.
"Aye. Bueno, no lo dudaría. Nuestro padre fue lo suficientemente bastardo para hacer
eso. Pero no creo ni por un minuto que alguien más no le haya contado la verdad a
Ronald en privado después. Él debe haberlo sabido".
"Si eso fuera cierto, te habría encontrado como lo hizo con Cawley después de la
muerte de su padre", dijo Edith con certeza.
Bessie frunció el ceño ante la sugerencia y espetó, "¿Dónde está ese marido tuyo?"
"Por ahora debe haber estado de vuelta en el castillo durante bastante tiempo.
Ciertamente, el tiempo suficiente para haber dicho a todos quién eres realmente, y que
eres la que está detrás de tantas muertes. No hay duda de que ahora todos están en el
patio de armas y la fortaleza buscándote e intentando decidir si debes ser ahorcada, o
simplemente dejarte podrir en la mazmorra”.
Bessie cerró los ojos brevemente en señal de derrota, y luego los abrió de nuevo y miró
a su alrededor cuando Ronson volvió corriendo al claro y se apresuró hacia ellas con
Laddie pisándole los talones.
"Mire lo que Laddie encontró, mi lady. Un arco y un carcaj. Y mire, no están rotos ni
nada. ¿No están bien?”
"Aye, Ronson, muy bien", Edith estuvo de acuerdo sin nunca quitarle los ojos de encima
a su abuela.
"¿Cree que podría tenerlos para mí?", Preguntó esperanzado. "Pudieron haber sido de
Lonnie y puede que su familia los quieran. Tal vez yo…"

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"Estoy bastante segura de que no son de Lonnie", le aseguró Edith y luego, arqueando
una ceja hacia Bessie, dijo: “Si tu abuela dice que está bien, entonces aye, puedes
tenerlos”.
"¿Abuela?", Preguntó Ronson, corriendo hacia ella. "¿Puedo? Siempre he querido un
arco propio. Es todo lo que he querido mi vida entera. ¿Puedo tenerlo?"
Bessie lo miró con tristeza y luego asintió. Con voz brusca, ella dijo, "Aye. Son tuyos,
muchacho. Ahora ve a practicar en ese árbol junto al agua, y déjanos hablar".
"Vamos, Laddie", gritó Ronson con entusiasmo.
"Ten cuidado, no te dispares en el pie", gritó Bessie. "Y no dispares al perro tampoco".
"Aye, abuela", le devolvió la llamada felizmente.
Suspirando, Bessie miró a Edith y luego levantó una ceja en cuestión. "¿Ahora qué?"
"Ahora respondes mi preguntas", dijo Edith solemnemente.
Bessie entornó los ojos. "¿Qué preguntas?"
Edith vaciló, y luego dijo: "Tenías trece años cuando se suponía que habías muerto y
eso fue hace casi treinta años".
"Aye."
"Entonces, ¿tienes cuarenta y dos o tres?"
"Cuarenta y dos."
Edith asintió y luego preguntó: "¿Cómo hiciste para parecer tan vieja?"
Bessie rió severamente y dijo: "Mi cabello siempre fue tan rubio que parecía blanco. En
cuanto a las arrugas en mi rostro, algunas son suciedad estratégicamente manchada,
pero algunas son mías. Las campesinas no tienen el mismo lujo que una dama de
evitar el sol", explicó con amargura.
"¿Qué te pasó?" Preguntó Edith con desconcierto. No podía imaginar ninguna
circunstancia que condujera a Ealasaid, la hija de uno de los lairds más poderosos y
ricos de Escocia, a convertirse en la sirvienta, Bessie.
"¿Qué sucedió?", murmuró Bessie con dureza, y luego se encogió de hombros y dijo:
"Como aprendí demasiado tarde, mientras que una campesina no puede convertirse en
una dama, una dama puede convertirse en campesina si se atreve a ir en contra de su
padre... yo me atreví a ir contra mi padre".
"¿Cómo?" Preguntó Edith de inmediato.
"Había arreglado un matrimonio para mí con un viejo bastardo maloliente al que ni
siquiera podía soportar mirar. Decidí que no me iba a casar con él, pero no era tan
estúpida como para negarme. Simplemente me habría puesto guardias y me habría
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obligado a seguir adelante con eso. Pero pensé que mi padre no podía obligarme a
casarme si mi virginidad se había ido, así que fui inteligente. Seduje a un lord inglés
visitante. Adeney”. Su boca se tensó, "Al menos, eso es lo que me gusta decir. La
verdad es que no tenía idea de lo que estaba haciendo. Todo lo que realmente hice fue
entrar en el dormitorio de Lord Adeney a través del pasaje secreto en nada más que mi
turno. Lo siguiente que supe fue que me encontraba acostada en la cama con mi turno
levantado sobre mi rostro mientras este noble lord me penetraba, haciéndome pedazos.
Y lo hizo varias veces durante toda la noche”.
"Por la mañana apenas podía caminar de tan malo que era el dolor. Pero me arrastré
desde esa cama y volví a la mía para quedarme allí gimiendo todo el día. Todo el
tiempo completamente ignorante del hecho de que mi hermana y mi madre habían
caído enfermas por la enfermedad del sudor en la noche”.
"A la mañana siguiente me sentí un poco mejor y envié por mi padre para decirle
triunfalmente que estaba arruinada y que no podía forzar el matrimonio. Él me escuchó
y entonces me dijo que Glynis y mi madre estaban muertas, y que ahora yo también
estaba muerta para él. Que elegí a Adeney y me iría con él. Podría hacer conmigo lo
que quisiera".
"¿No lo hizo casarse contigo?", Preguntó Edith con consternación. A pesar de todo lo
que esta mujer había hecho, todavía se las arregló para sentir lástima por la niña que
Ealasaid había sido y sus elecciones tontas. Un lord más honorable habría enviado a la
niña a su habitación. Este Lord Adeney obviamente no había sido un hombre muy
honorable. Además, obviamente no se había casado con la niña que había arruinado.
Pero a Edith le costaba creer que su abuelo, por muy cabrón que a veces hubiera sido,
no hubiera hecho que Adeney se casara con Ealasaid.
"Lord Adeney ya tenía una esposa. Lo sabía cuando lo elegí", admitió Bessie, y de
repente se movió rápidamente hacia ella.

"¿Y bien?", Preguntó Niels mientras conducía a sus hermanos fuera de los pasadizos y
hacia el dormitorio del laird donde Tormod esperaba.
El viejo sacudió la cabeza solemnemente. "Los hombres han buscado en todas partes.
No está en los jardines, en el patio o en el pueblo, y nadie la ha visto desde que
Moibeal la vio deslizarse en el garderobe.
"Bueno, ella no estaba en los pasadizos o en las habitaciones", dijo Rory frunciendo el
ceño. "¿Dónde más podría estar?"

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Serie Novias Escocesas #5
"No verificamos el túnel", señaló Geordie en voz baja. "Lo miramos un poco, pero no lo
seguimos hasta el final. ¿No creen que ella fue por ese camino y está tratando de
escapar?”
"¿Escapar de qué?" Preguntó Alick secamente. "Nadie la ha visto desde poco después
de que Niels y Edith se fueran al lago con Ronson. No sabíamos hasta que Niels
regresó que ella era realmente la tía de Edith y estaba detrás de los asesinatos, por lo
que no había nada de lo que escapar".
"Los túneles salen a mitad de camino entre el torreón y el lago", murmuró Niels, y la
preocupación comenzó a afectarlo.
"Aye, mi laird", dijo Tormod frunciendo el ceño. "No está pensando que Bessie utilizó los
túneles para seguirlos hasta el lago, ¿verdad? Si es así, entonces Lady Edith está allí
sola y...”
Las palabras del anciano murieron bruscamente cuando Niels giró sobre sus talones y
se apresuró a salir de la habitación. Tenía la mala sensación de que eso era
exactamente lo que estaba haciendo la anciana. Probablemente había esperado matar
a dos pájaros de un tiro, o a Edith y él de una vez... Y había dejado a su esposa sola e
indefensa en el bosque con nada más que un niño y un perro para protegerla.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 17

Edith estaba tan sorprendida por la repentina embestida de Bessie hacia ella que tardó
en sacar la espada que sostenía. No tardó demasiado, gracias a Dios, y Bessie se
detuvo bruscamente cuando la punta afilada presionó contra su estómago.
Se miraron una a la otra brevemente y luego Bessie retrocedió un paso, lo suficiente
para alejar la punta de su piel. Luego se encogió de hombros como para decir que
había tenido que intentarlo.
Edith solo la miró. Había creído que una vez que la mujer supiera que los demás ya
estarían al tanto de su perfidia y que todo estaba perdido, dejaría de intentar matarla.
No parecía así, sin embargo... y eso hizo que se preguntara si la mujer era loca o
simplemente estúpida.
O tal vez Bessie había decidido que podía envenenar hasta a la última persona en
Drummond, culpar a alguien más y todavía reclamar el título para sí misma, pensó Edith
de repente. No tenía idea. Pero fuera lo que fuera lo que la mujer estaba pensando, era
obvio que no podía dejar la guardia baja otra vez. Bessie estaba mucho más cerca de lo
que había estado antes de esa embestida. Otro truco como ese y Edith podría terminar
muerta.
"¿Tenías alguna otra pregunta?" Preguntó Bessie complaciente.
Edith entrecerró los ojos, dio un cauteloso paso hacia atrás y luego otro. Una vez que
estuvo a una distancia más segura, preguntó: "¿Cómo se sentía Lord Adeney y su
esposa porque ahora tu cuidado era su problema?"
"No tengo idea de cómo se sintió lady Adeney, pero él estaba bien con eso", le aseguró
con ternura. "En lo que a él respectaba, todo esto fue grandioso. Tenía esposa, y ahora
me tenía a mí, con quien podía hacer lo que quisiera. Resultó que lo que deseaba era
dejarme en una cabaña en el pueblo donde su esposa no tendría que mirarme y enviar
por mi cada vez que sentía la necesidad de arar un poco".
"Por supuesto, quede embarazada", dijo Bessie conversacionalmente. "Pero eso en
realidad resultó ser algo bueno. Una vez que engordé, no estaba interesado en mí y
obtuve un respiro de sus duras atenciones".
"¿El bebé era Glynis?", Preguntó Edith.
"Nay. Ese primer bebé no lo logró y nació demasiado pronto. Llegó temprano y muerto.
Eso sucedió varias veces antes de que Glynis naciera. La semilla de Adeney era débil.
Hace doce años que araba en mi sin darme nada más que semillas débiles y bebés que
o nacían muertos o morían en mis brazos en sus primeros momentos".

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Serie Novias Escocesas #5
"Hasta Glynis", murmuró Edith.
Bessie sonrió sombríamente. "Aye, pero la pequeña Glynis no era hija de Adeney. Su
padre, William, tenía una semilla fuerte".
Edith levantó sus cejas. "¿Y quién era William?"
"Era uno de los soldados de Adeney, y un hombre bueno y amable. A menudo tenía
que acompañarme a la fortaleza y de vuelta. Él se dio cuenta de lo miserable que era y
de cómo Adeney me hacía sufrir”. Deteniéndose, ella explicó fríamente, "El lord era tan
débil como su semilla. A medida que pasaron los años, se volvió cada vez más difícil
para él ponerse duro, hasta que no pudo actuar a menos que yo sintiera dolor. Se
complacía en darme dolor".
Edith no sabía qué decir a eso. Ofrecer simpatía a una mujer que había matado a tanta
gente simplemente parecía mal, entonces no dijo nada, y Bessie continuó, "por años
William me llevó de regreso a mi casa cuando Adeney terminaba conmigo y trataba de
atender mis heridas. Él fue muy amable y gentil... Me enamoré de él, pero cuando me
dijo que me amaba, lo rechacé. Sabía que a Adeney no le gustaría compartir y que
nuestros sentimientos serían un problema. Pero llegó el día en que Adeney fue llamado
a la corte por más tiempo de lo habitual. El rey quería su consulta y compañía y lo
mantuvo durante más de medio año”.
Bessie sonrió débilmente. "Fue como si los cielos se hubieran abierto y rociado felicidad
de las nubes. Los días eran cálidos y soleados, las flores estaban en flor y William..."
Suspirando, ella miró hacia abajo. "Después de las primeras dos semanas cuando
intentamos luchar contra eso, pasamos todos los minutos de todos esos días juntos. Me
enseñó que la cama no tiene por qué ser terriblemente dolorosa y horrible, y me enseñó
que todos los hombres no eran bastardos egoístas y malvados como mi padre y
Adeney. Quería que me escapara con él, pero yo tenía demasiado miedo. Lo amaba
así, pero..." Bessie frunció el ceño. "Pero al menos allí tenia casa y comida. Si
hubiéramos huido..." Mirando fijamente a sus manos, negó con la cabeza. "Nuestro
amor le costó la vida".
"¿Adeney lo descubrió?", Preguntó Edith.
"Oh, aye. No sé quién se lo contó, y no me confrontó en ese momento, así que no
teníamos ninguna advertencia de que lo sabía. Pero poco después de su regreso,
Adeney envió a William a entregar un mensaje con dos de sus hombres más leales y
William no regresó. Afirmaron que se cayó de su caballo y se rompió el cuello y que lo
habían enterrado en el bosque en el camino”.
Bessie soltó una pequeña carcajada. "Tan tonta como era, lo creí cuando Adeney me lo
contó. Pensé que quizás Dios me estaba castigando”. Sacudiendo la cabeza, continuó.
"Glynis nació apenas seis meses y medio después de que Adeney regresara. Ella llegó
a término, pero pequeña y estaba segura de que Adeney me creía cuando le dije que
era prematura... porque fingió hacerlo. Hasta los doce años”.

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Serie Novias Escocesas #5
Con la expresión endurecida, dijo sombríamente, "había salido a recoger algunas
hierbas sanadoras para una de las mujeres de la aldea que tenían el flujo. Había estado
usando las habilidades que mi madre me había enseñado y las había aumentado a lo
largo de los años. Ese día volví a la casa de campo para encontrar a la pobre, hermosa
Glynis ensangrentada y llorando en la cama de la cabaña, mientras que Adeney
disfrutaba de una cerveza en mi mesa", dijo con amargura. "La niña apenas había
empezado sus cursos, pero él la había violado y la había desgarrado tal como me había
hecho todos esos años antes".
Su boca se tensó. "Volé en cólera. ¿Cómo podía hacerle esto a su propia hija? ¿Cómo
podía él? Y él se burló y dijo: ‘¿Te refieres a la hija de William, no? Ella no tiene nada
que ver conmigo’. Y luego sonrió de forma muy cruel y dijo: ‘Es terrible que muriera
antes de poder ver a su bastarda. Pero él no debería haber jugado con lo que era mío'".
Bessie dejó escapar un suspiro lento y agregó, "caminó hacia la puerta y luego dijo, 'Al
final, William me hizo un favor. Ella es una cosita bonita, incluso más bonita que tú en
su momento. Ella será la que los soldados vendrán a recoger a partir de ahora,
Ealasaid. Me cansé de tu feo y viejo cuerpo’. Y luego simplemente se fue, dejándome
allí sabiendo que mi amor había matado a William y había puesto a nuestra hija en el
mismo infierno que yo había soportado”.
Cerrando los ojos, exhaló un largo suspiro y luego dijo: "Fiel a su palabra, Glynis ahora
era transportada a la torre todas las noches. Eso rompió mi corazón. Lloraba y me
suplicaba que no dejara que los soldados se la llevaran, pero no había nada que yo
pudiera hacer".
Podrías haberla tomado y haberte marchado, pensó Edith, pero se mordió la lengua.
"Después de unos pocos meses, la semilla de Adeney finalmente creció en la niña y
Ronson nació un año y un mes después de la primera violación".
Bessie miró hacia donde el niño estaba intentando y no podía tirar de la cuerda del arco
lo suficiente como para propulsar una flecha más de un pie más o menos antes de caer
al suelo. "A pesar de ser de Adeney, Glynis amaba ese niño. Las dos lo hicimos. Fue el
único punto brillante en nuestras vidas. Pero aun así, él no fué suficiente. Ella se suicidó
esta primavera pasada. Se arrojó desde los acantilados detrás del castillo”. Con la boca
retorciéndose amargamente, agregó, "sin importarle en absoluto sobre cómo me
afectaría eso".
Edith tuvo que clavar sus uñas en su mano para evitar comentar mientras la mujer
continuaba.
"Los hombres apenas habían recuperado su cuerpo de las rocas y lo habían dejado
sobre la mesa de la cocina cuando Adeney llegó para ver si era cierto que estaba
muerta. Echó un vistazo a su cuerpo roto y luego se encogió de hombros y anunció que
Ronson y yo teníamos que irnos. Al mediodía del día siguiente, incendiarían la cabaña,
ya sea que estuviéramos en ella o no”.

~ 232 ~
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Serie Novias Escocesas #5
"Así que tomaste a Ronson y te dirigiste aquí", dijo Edith.
"Aye. No tenía otro lugar donde pudiera pensar ir", dijo con resentimiento. "No tenía a
nadie que me ayudara, nadie a quien le importara, y luego llegué aquí y mi propio
hermano ni siquiera me reconoció. Solo nos miró a Ronson y a mí como si fuéramos un
par de mendigos, nos envió hacia ti y siguió su camino feliz. Te tenía a ti, a sus hijos y
este hermoso castillo y yo no tenía nada. Sin hogar, y nada más que mi nieto para
alimentar y la ropa sobre mi espalda. ¡No tenía a nadie!" Ella gritó.
"No tenías a nadie por tu propia cobardía y egoísmo", espetó Edith, cansada de las
historias de ‘pobre de mí’.
"¿Qué?" Bessie jadeó, dando un furioso paso hacia adelante, pero deteniéndose de
nuevo cuando Edith movió la espada hacia adelante hasta que casi la tocó. Frunciendo
el ceño, ella dijo, "He sido lastimada mi vida entera ¿y te atreves a juzgarme? Nada de
esto fue culpa mía. Nada de esto fue...”
"Lo siento, ¿lo entendí mal?" Edith interrumpió gratamente. "Pensé que fuiste a buscar
a Adeney esperando que te quitara la virginidad para que pudieras burlar los deseos de
tu padre y obligarlo a romper tu compromiso de matrimonio".
"Aye, pero…"
"Y después de eso, ¿de verdad esperabas que tu padre solo dijera, aye, hija, bueno,
está bien entonces, vamos a tomar un poco de vino y pasteles?"
"¡Me tiró como basura!" Espetó Bessie.
"Te dio al hombre que aparentemente habías elegido", respondió Edith sombríamente.
Cuando Bessie se quedó parada allí mirándola furiosamente, agregó, "a lo largo de toda
tu historia no oí nada más que 'pobre de mí' y ‘fue la culpa de otra persona’. No ves a
tus propias acciones incluso jugando una parte en tu caída. Fué culpa de tu padre, y
culpa de Adeney e incluso culpa de Glynis". Ella dijo eso último con incredulidad y luego
negó con la cabeza.
"Elegiste ir a la habitación de Adeney e hizo exactamente lo que quisiste", dijo ella con
firmeza. "Quizás más de lo que hubieras querido, pero lo hizo. Y luego sufriste las
consecuencias, pero culpaste a tu padre y a Adeney por tu miseria todo el tiempo. Y
después de años de aparente miseria como amante de Adeney, conociste a un hombre
que dijiste que era amable, bueno y gentil, que quería llevarte lejos, pero fuiste
demasiado cobarde para hacerlo. O tal vez simplemente no deseabas abandonar tu
hermosa cabaña que Ronson dice que era más grande que todas las demás en el
pueblo. ¿Por qué cambiar eso por un futuro incierto, incluso si era con el hombre que
afirmas haber amado?” dijo ella con dureza.
"Eres tan culpable como si lo mataras tu misma. Debiste haber sabido que Adeney lo
descubriría. Y no intentes decirme que no", dijo Edith pesadamente cuando Bessie
abrió la boca para lo que sospechaba sería una protesta. "Sabes tan bien como yo que

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Serie Novias Escocesas #5
no hay nada que ocurra en un castillo y una aldea de lo que el laird no se entere
eventualmente. William estuvo en tu cama durante seis meses. Estoy segura de que fue
visto yendo y viniendo por docenas o más personas de Adeney, y al menos la mitad de
ellos felizmente correría llevando historias".
Apretando la boca, agregó, "Si no sabías que Adeney lo descubriría, era solo porque no
querías saberlo. Estabas lo suficientemente cómoda en tu miserable vida que no
querías arriesgarte a dejarlo por lo desconocido... y eso fue lo que mató a William. Tu
propia cobardía y egoísmo y el hecho de que no lo amabas lo suficiente como para ver
más allá de eso”.
Edith sacudió la cabeza sombríamente. "El pobre hombre debe haberte amado mucho
para no haberte abandonado y huido cuando te negaste a ir con él. Porque te garantizo
que él sabía que moriría por estar contigo. Lo mismo para Glynis”, agregó con disgusto.
"¿Culpas a la chica por suicidarse, por cómo te afectó a ti?" Edith negó con la cabeza.
"Mataste esa pobre niña tan seguramente como lo hiciste con mi padre y hermanos".
"¿Yo?" Bessie gritó con incredulidad. "No fue mi culpa que se suicidara".
"Aye, lo fue. Porque no abandonaste a Adeney el día que la violó. En cambio, dejaste
que él continuara violándola y simplemente te quedaste parada ociosamente llamándolo
bastardo como si no tuvieras nada que ver con eso, cuando lo estabas permitiendo
cada día que permaneciste allí".
"No teníamos a dónde ir", espetó Bessie.
"Podrías haber venido aquí como lo hiciste cuando ella murió y Adeney te echó", señaló
Edith con frialdad. "Si lo hubieras hecho, todavía tendrías tu hija. En cambio, dejaste
que fuera violada por ese bastardo durante cinco años o más. Apuesto a que ella
también quería huir como William, pero discutiste en contra de eso".
Un destello de culpa en la cara de Bessie le dijo a Edith que golpeó el objetivo en la
nariz con esa conjetura.
"Eres una cobarde egoísta, Bessie, muy parecida a mí hermano Brodie. Has pasado la
vida preocupándote de ti y tus necesidades por encima de aquellos que te amaron, y
ellos pagaron el precio. Incluyendo a mi propio padre y hermanos y todos los demás
que has matado aquí".
Bessie entrecerró los ojos fríamente.
"Por lo que respecta a que mi padre no te reconoció; llegaste aquí doblada y encorvada,
con tu cabello blanco peinado hacia atrás y tu rostro cubierto de suciedad y líneas.
Pareces una anciana. No estoy sorprendida de que no te haya reconocido. Y mientras
lo culpas a él de alguna manera por eso, yo te culpo a ti. No nos dijiste quién eras”, ella
señaló fríamente. "En lugar de eso, diste un nombre falso y luego procediste a dejar en
ruina mi familia de forma más cruel incluso de lo que Adeney te hizo a ti", dijo
sombríamente.

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Serie Novias Escocesas #5
"¿Qué?" Bessie levantó la vista rápidamente. "Yo…"
"Te admití, a pesar de que ni siquiera sabía que eras pariente, y me lo pagaste matando
a cada miembro de mi familia e incluso tratando de matarme", dijo con dureza. "¿Y por
qué? ¿Qué excusa pretendes dar por eso? ‘No fue tu culpa’, estoy segura. Si Padre te
hubiera reconocido, ¿todo habría estado bien? ¿O la verdad es que lo odiabas por
tener a Drummond y parientes que lo amaban así que querías castigarlo por ello y, de
paso, reclamar a Drummond para ti misma?”
El brazo de Bessie se curvó y Edith notó que tenía una daga en la mano que no había
estado allí antes. Observó cómo la mano de la mujer se apretaba y se aflojaba
alrededor de la empuñadura de la daga como si estuviera tratando de decidir dónde
apuñalarla. Edith retiró su sgian-dubh, pero simplemente lo dejó al descubierto para que
la otra mujer viera que no solo tenía la espada y le preguntó: "¿Realmente me obligaras
a matarte con Ronson aquí para ver?"
"¿Crees que puedes?", Preguntó Bessie sombríamente.
"No estoy segura", admitió. "Pero soy más joven y fuerte, y tengo mucho por lo que
vivir".
"Aye, ese marido que amas tanto", dijo Bessie secamente, y luego algo en la expresión
de Edith hizo que sus cejas se alzaran. "¿No sabías que lo amas? ¿O no te diste
cuenta de que era fácil de ver para cualquiera que se molestara en mirar?”
Edith permaneció en silencio, pero su mente estaba trabajando. ¿Ella lo amaba? Era
una pregunta que se había hecho antes, pero nunca encontró la respuesta.
"Sobrina, estás tan ansiosa por complacerlo que frotaste conserva en su violín y trataste
de tomarlo con tu boca", dijo secamente. "Si eso no es amor, no se lo qué es".
Edith se puso rígida. Bueno, eso respondía a la pregunta que había tenido antes sobre
si había agujeros en las habitaciones, pensó sombríamente.
"Querer complacer a otro es una señal de amor", le dijo Bessie. "Como cuidar de su
bienestar más que del propio".
Edith dejó escapar su respiración lentamente. Si Bessie tenía razón, entonces parecía
que amaba a Niels, porque quería desesperadamente complacerlo y hacerlo tan feliz
como él la hacía. Y estaba segura de que se arrojaría frente a un oso o una flecha que
se aproximara para salvarlo. Ella preferiría morir en su lugar que vivir sin él. Sí, parecía
probable que fuera amor. Solo deseó haberse dado cuenta antes y decírselo mientras
tuvo la oportunidad. Podría no obtener otra.
"Al menos eso es lo que mi madre solía decir", agregó Bessie ahora.
Edith la miró en silencio, no queriendo que esta mujer mancillara lo que sentía por Niels
al hablar de eso. Decidida a obtener las respuestas a tantas preguntas como le fuera
posible, dijo: "Has estado en Drummond desde mayo y no has comenzado las

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intoxicaciones hasta un mes después. ¿Por qué esperaste tanto para empezar a matar
gente?”.
Bessie se encogió de hombros y bajó su mano a un lado para que su daga quedara
oculta en los pliegues de su falda. Intentaba calmarla con una falsa sensación de
seguridad, supuso Edith. La mujer era como una serpiente esperando para atacar y de
repente se alegró de que fuera ella y no Niels. Su esposo estaba muy encariñado con
Ronson, y si uno de ellos tenía que matar a la abuela del niño, haciéndole odiarlos,
preferiría que fuera ella.
"Al principio no tenía intención de matar a nadie", admitió Bessie. "Estaba tan aturdida
porque mi propio hermano no me reconoció, yo..." Ella se encogió de hombros. "Solo
traté de seguir el día a día y ver qué era qué".
"Y fingiste estar medio sorda, casi ciega y mucho más vieja de lo que realmente eres",
señaló Edith.
"Los sordos no tienen que responder preguntas que no les gustan", señaló Bessie con
una sonrisa que sugería que pensaba que ella era inteligente. "Además, creyéndome
sorda, a nadie le preocupaba hablar delante de mí. No pensaban que podía oírlos”.
"Y fingir ser medio ciega y frágil significaba que se te permitía sentarte y coser en lugar
de esperar que realmente trabajaras", señaló Edith.
"Aye", estuvo de acuerdo Bessie sin disculpas.
Edith asintió solemnemente. "¿Envenenaste el barril de vino o la jarra la noche en que
mi padre murió y mis hermanos enfermaron?"
"El barril", dijo Bessie sin un ápice de remordimiento.
"Envenenaste la comida que me trajeron cuando caí enferma", agregó Edith.
"Todas las noches", admitió y luego añadió amargamente, "Para todo lo bueno que me
sirvió. No moriste", escupió, su rostro y su expresión repentinamente furiosos.
"Y tú envenenaste la cerveza que los hombres de Brodie llevaron consigo", adivinó.
Bessie asintió.
"¿Y Lonnie?", Preguntó ella.
"Oí a Brodie decirle a su esposa que iban a ir a la cabaña de la familia. Quería seguirlos
para vigilar las cosas. Me preocupaba que si uno de los hombres bebía la cerveza
antes que los demás, ellos se darían cuenta. Puse mucho veneno en ese momento.
Cualquier muerte no se habría confundido con una enfermedad. Así que, como dije,
quería seguirlos y vigilar los acontecimientos, pero los sirvientes no tienen permitidos
los caballos, lo que me obstaculizó un poco. Entonces esa noche, tomé los túneles para
ver si alguien volvía. Debieron haber bebido la cerveza inmediatamente al llegar a la
cabaña. Todos excepto Lonnie, por supuesto. Porque apenas salí de la cueva en la que

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se abren los túneles cuando llegaba montando. Me escondí detrás de un arbusto, lo
dejé pasar y entonces le disparé por la espalda. Luego tomé su caballo y sus armas, y
me dirigí a la cabaña”. Ella se encogió de hombros. "El veneno funcionó bien. Estaban
todos muertos”.
"¿Nessa?", Preguntó, pensando en la doncella desaparecida de Victoria. "¿Dónde está
ella?"
"En el pozo", le dijo Bessie con una sonrisa. "Pensé en echarle la culpa a las doncellas
de Victoria, así que arrastré a la chica al pozo y la arrojé para que no la encontraran. No
pensé que flotaría en la superficie del agua” añadió con una mueca. "Estaba segura de
que la encontrarían mientras volvía. Cuando ella no fue descubierta, supe que los cielos
estaban sonriéndome”.
Edith apretó la boca. Era más como si los cielos hubiesen estado llorando, y eso había
salvado a la mujer de ser descubierta, pensó al recordar que Niels había ido al pozo,
pero el cubo había estado allí recogiendo lluvia en la tormenta de la que habían estado
buscando cubrirse. No tuvo que sacar agua. Simplemente había usado el agua de lluvia
en el cubo. Si hubiera tenido que sacar agua del pozo, habría notado a Nessa.
"¿Qué hiciste con el caballo de Lonnie?", Preguntó Edith.
"Está de vuelta en el bosque de alguna manera. Lo he estado manteniendo en la cueva
en la que se abre el túnel. Pensé que podría necesitarlo una o dos veces todavía. No
pude cabalgarlo hasta aquí hoy, por miedo a que Niels oyera acercarse al caballo”.
"Probablemente lo habría hecho", reconoció.
"Sin duda", dijo Bessie secamente.
"¿Cawley? ¿Por qué lo mataste? Un medio hermano difícilmente heredaría a
Drummond si se descubriera a una hermana de pura sangre", señaló Edith,
descubriendo que se estaba cansando ante la idea de todos los asesinatos que esta
mujer había cometido. O tal vez por la completa falta de compunción de Bessie con
respecto a esos asesinatos.
Ella se encogió de hombros. "Lo tuvo fácil aquí mientras yo sufría, cuando él era solo un
medio hermano bastardo".
"Entonces lo mataste por despecho", dijo Edith secamente, y luego preguntó: "¿Effie?
¿La tiraste de la pared?”
"Aye."
"¿Estaba despierta?"
Bessie asintió. "Se despertó el día después de que la movieron. Los hombres no se
dieron cuenta al principio y ella los escuchó hablar sobre cómo sospechaban que su
pobre Victoria estaba detrás de las intoxicaciones. Así que la vieja tonta fingió que

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todavía estaba inconsciente para evitar incriminar a su chica”. Bessie miró brevemente
a Ronson y luego continuó: "La vi levantarse y eso desde los túneles más tarde ese día
cuando el sanador bajó para buscar más caldo para ella. Así que me deslicé y…"
"¿Cómo has sabido de los pasajes?" Edith la interrumpió para preguntar. Tormod había
dicho que tradicionalmente, solo el Laird y la Señora de Drummond sabían de ellos.
"Los descubrí cuando era niña mientras jugaba", dijo encogiéndose de hombros. "Era
mi lugar secreto cuando quería escaparme. Nadie alguna vez los usaba. Caminaba,
miraba los dormitorios y veía a mi padre y a mi madre dormidos, o a mi hermana
durmiendo, o miraba hacia el pasillo”.
Edith asintió, y luego volvió la conversación a su explicación original. "Así que te
deslizaste a la habitación en la que Effie estaba ¿y...?"
Bessie se encogió de hombros. "Fingí simpatizar y prometí traerle comida y noticias
reales hasta que resolviéramos cómo mantener a salvo a su señora. Por supuesto, solo
le traje noticias que me serían útiles. Por ejemplo, no podía decirle que Victoria estaba
muerta, que no tendría motivos para fingir que aún estaba inconsciente. No podía
arriesgarme a que le dijera a nadie sobre el pasaje por el que solía entrar y salir de su
habitación, o que ella incluso había hablado conmigo. Y no podía matarla hasta que
tuviera éxito en matarte. Después de todo, ¿cómo podría culpársele por tu muerte si ya
estuviera muerta?”
"¿Por qué la tiraste de la pared entonces?"
"Esa fue tu culpa", acusó de inmediato. "Si hubieras mantenido la boca cerrada acerca
de que ella no tenía ninguna sensación en sus pies y piernas, todo habría ido bien, pero
en el momento en que lo dijiste yo sabía que los hombres irían a picharla en otro lugar,
se darían cuenta de que estaba despierta y la interrogarían. Afortunadamente, tu
esposo se retrasó el tiempo suficiente para que yo pudiera deslizarme en el pasillo a
través de la entrada del garderobe y subir las escaleras para sacar a Effie por el túnel
hacia la habitación del laird. Desde allí la llevé por el segundo túnel y subí las escaleras
hasta el muro. Hice que me esperara en lo alto de las escaleras mientras escuchaba
todo lo que podía cuando todos ustedes estaban en la habitación del laird. Tuve que
agacharme en las escaleras un par de veces ya que todos seguían hurgando en el
pasillo, pero oí lo suficiente como para darme cuenta de que Effie había superado su
utilidad".
"Así que la llevaste al muro y la tiraste".
"Aye". Ella soltó una carcajada. "No podía creer mi suerte cuando bajé la vista y te vi
parada abajo. Pensé que el Destino volvía a sonreírme y empujé a Effie. Pero ella te
erró”, añadió con disgusto.
"Y ahora no hay nadie que acepte la caída, excepto tú", dijo Edith en voz baja, y luego
ladeó la cabeza cuando escuchó un tamborileo débil y lejano. "Creo que oigo que mi

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esposo y los demás se acercan. Varios caballos suenan”. Viendo la mano del cuchillo
de Bessie, agregó, "Al no encontrarte en la torre del homenaje, deben haberse dado
cuenta de que vendrías aquí".
Bessie giró el cuchillo en su mano, sus ojos brillando mientras trataba de decidir qué
hacer.
"Todo el mundo en Drummond sabe quién eres realmente y lo que has estado
haciendo", señaló, y luego no pudo resistirse a agregar: "Todo fue en vano. Nunca
serás la señora. Y Ronson, como todos los demás que alguna vez te amó antes que él,
sin duda sufrirá como resultado de tus acciones. Llorará a la abuela que ama, pero
odiará y se avergonzará de lo que hiciste".
Bessie se calló y protestó, "No puedes lastimar a Ronson así".
"No tengo otra opción", dijo Edith sin disculparse.
"Aye, lo haces", respondió Bessie. "Todos los hombres piensan que Effie lo hizo. Que
sigan pensando eso”.
"¿Aun quieres culpar a otro por tus acciones?", Preguntó con incredulidad. "¿Y esperas
que esté de acuerdo?"
"¿Por qué no? Effie no tiene familia para preocuparse o ser herida por eso. No como mi
Ronson”, señaló Bessie, y luego añadió, "Y yo soy tu tía".
"Quien intentó matarme", Dijo Edith secamente, y luego negó con la cabeza. "Además,
no eres mi tía. Ambas tías, Ealasaid y Glynis, murieron antes de que yo naciera. Eres la
criada Bessie que mató a mi padre, Ronald, a mi tío Cawley, a mis hermanos Roderick,
Hamish y Brodie, a la esposa de Brodie, Victoria, a sus criadas y a los seis guerreros
que salieron con ellos. Son catorce personas", señaló con voz vacía. "El único futuro
para ti es la horca, o ser encerrada en la mazmorra por el resto de tus días".
"¿Harías pasar a Ronson por eso?", Preguntó Bessie con incredulidad. "Te odiaría por
eso y creo que te importa el muchacho".
"No me has dado otra opción", dijo Edith con firmeza. Vio que el brazo de Bessie
comenzaba a moverse y entonces Ronson estaba repentinamente frente a ella.
"Escucho caballos, mi lady. ¿Cree que es el laird? Realmente me gustaría mostrarle mi
nuevo arco".
"Estoy segura de que es el laird", dijo Edith, mirando a Bessie con cautela. No estaba
del todo segura de que la mujer no intentara arrojarle su daga a pesar de la presencia
de Ronson.
"Ronson, ven aquí”, dijo Bessie de repente, y antes de que pudiera detenerlo, el chico
se había escabullido y había ido a su abuela.

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Edith se puso tensa, medio esperando que Bessie le arrojara su daga ahora que el
chico estaba fuera del camino, pero en lugar de eso le entregó el puñal a su nieto.
"Toma esto. Ahora es tuyo”.
"¿En serio?", Preguntó entusiasmado, tomando el arma. "Oh, espera hasta que le
muestre esto al laird".
"¿Por qué no vas a esperarlo en el borde del claro?" Sugirió Bessie.
"Aye". Corrió hacia donde Niels había detenido su caballo las últimas dos veces que
habían venido allí, agarrando el cuchillo contra su pecho y Edith se distrajo por un
momento mirándolo con preocupación. Le costaba mucho no gritarle que no corriera
con el cuchillo, pero luego se dio cuenta de que se había permitido distraerse y miró
cautelosamente a Bessie a tiempo de ver cómo bajaba la mano de su rostro. Edith
entrecerró los ojos sospechosamente cuando captó un destello azul en sus dedos.
"¿Qué hay en tu mano?"
Bessie vaciló y luego se sentó en la esquina de las pieles antes de extender su mano y
abrirla para revelar el pequeño frasco azul que sostenía. Cuando Edith lo miró
fijamente, dijo: "Puedes decirle al chico que tuve un ataque al corazón o algo así".
"Veneno", se dio cuenta.
"Él nunca necesitará saber lo que hice", dijo Bessie simplemente, y luego, cuando Niels
entraba al claro con sus hermanos y Tormod siguiéndolo, ella sonrió y agregó: "Y
ustedes no pueden castigarme por lo que he hecho. Yo gano."
Edith la miró inexpresivamente. En lo que a ella respectaba, nadie ganó aquí, y las
palabras fueron tan infantiles, entonces...
Dando la espalda a la mujer, caminó hacia su marido y su futuro.

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Serie Novias Escocesas #5

Capítulo 18

"¿Dónde diablos están?" Murmuró Niels, caminando hacia la puerta y abriendo para
mirar por el pasillo. Todavía no había señales de Edith y Ronson.
Suspirando, cerró la puerta y cruzó de regreso a la cama, frunció el ceño cuando vio a
Alick metiendo la aguja de nuevo en Bessie, o Ealasaid. Él no estaba seguro de cómo
llamarla. Su verdadero nombre era Ealasaid, pero Edith se negaba a llamarla así y se
referiría a ella solo como Bessie. Sospechaba que parte del motivo se debía a que no
deseaba equivocarse y confundir a Ronson, pero también sospechaba que deseaba
negar que la mujer tuviera alguna relación con ella.
"Alick, por el amor de San Pedro, deja de pinchar a la mujer con esa maldita aguja.
Escuchaste a Rory. Está muerta”, Niels gruñó cuando el joven volvió a clavar está en el
cuerpo quieto de Bessie.
"¿Cómo podemos estar seguros?", Preguntó Alick obstinadamente. "Escuchaste a
Edith. Incluso después de saber que estabas aquí diciéndonos que ella era la culpable,
se abalanzó sobre ella con el cuchillo".
"Aye, pero…"
"Y ella está bien informada sobre las malas hierbas", continuó sombrío. "¿Qué pasaría
si lo que ella tomó fuera algo solo para hacerla parecer muerta y realmente está viva y
durmiendo? Tal vez solo está esperando que bajemos la guardia y salgamos de la
habitación para poder levantarse, usar los pasajes para ir abajo y envenenar el pozo
para que todos en Drummond mueran y ella pueda reclamarlo para sí misma”.
Niels vaciló, y luego miró a Geordie, para nada tranquilizado cuando vio la misma
repentina incertidumbre en los ojos de su hermano, que él sabía tenía en los suyos.
Maldiciendo en voz baja, Geordie se sacó la daga, cruzó rápidamente a la cama y la
hundió con fuerza en el cuerpo de Bessie donde estaría su corazón. Si ella realmente
tuviera uno, Niels pensó sombríamente. Era difícil de decir por sus acciones.
"Ahí," dijo Geordie con satisfacción. "Si no lo estaba antes, definitivamente está muerta
ahora".
"Aye", murmuró Niels, y luego se inclinó rápidamente para tirar de la sabana hasta
cubrir el cuchillo en el cuerpo de Bessie cuando la puerta se abrió detrás de ellos.
"Aquí estamos, Ronson. Acaba de despedirte de tu abuela ahora y luego Geordie y
Alick se sentarán con el cuerpo hasta el entierro”.
Frunciendo el ceño, Niels se volvió ante esos comentarios en la voz de su hermano
Rory y preguntó: "¿Dónde está Edith? Pensé que ella estaba trayendo a Ronson”.

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"Aye, lo estaba, pero luego me pidió que lo hiciera y que te enviara con ella", explicó
Rory, acompañando a Ronson a la cama. "Creo que está esperando por ti… ¿qué
diablos es eso?"
Frunciendo el ceño, Niels se volvió para ver que la sabana no había escondido el
cuchillo muy bien y era obvio lo que sobresalía del pecho de Bessie. Afortunadamente,
Rory puso sus manos sobre los ojos de Ronson mientras fruncía el ceño a Geordie y
Alick y decía, "Sáquenlo".
"Bueno, teníamos que estar seguros", murmuró Alick cuando Geordie hizo una mueca,
apartó las sábanas y sacó su cuchillo del pecho de la mujer.
"Les dije que estaba…" Rory frunció el ceño hacia Ronson, y luego murmuró, "muerta".
"Aye, pero también dijiste que Effie estaba inconsciente y no lo estaba", señaló Alick.
Los ojos de Rory se entrecerraron y abrió la boca pareciendo listo para estallar a su
hermano menor, pero Niels perdió la paciencia en ese momento y espetó: "¿Dónde está
esperando ella?"
"¿Quién?", Preguntó Rory, justo cuando Geordie murmuraba: "Probablemente no esté
esperando nada, sino que fue directamente a..." Se detuvo para mirar a Ronson con
preocupación y simplemente señaló el piso.
Presumiblemente para indicar que Bessie se había ido directamente al infierno, supuso
Niels y frunció el ceño. "Me refería a mi esposa".
"Oh, bueno, tendrás que preguntárselo a Rory entonces", dijo Geordie, limpiando su
puñal mientras se alejaba de la cama.
"Lo hacía", espetó Niels y luego se volvió para ver a Rory sonriéndole. Con los ojos
entrecerrados, preguntó: "¿Qué?"
"Es tan lindo verte tan feliz y enamorado", dijo con diversión.
Niels lo fulminó con la mirada y luego se giró hacia la puerta, murmurando: "La
encontraré yo mismo".
"Primero prueba con el dormitorio", sugirió Rory, y antes de que Niels cerrara la puerta,
agregó: "La recámara del antiguo laird".
Con las cejas levantándose en esa última parte, Niels caminó por el pasillo hacia la
última puerta, luego la abrió y entró... e inmediatamente se congeló. La habitación había
sido limpiada y completamente transformada. Todos los objetos personales del viejo
laird habían sido trasladados y los de Edith y él traídos. Aparte de eso, las viejas
cortinas de la cama habían sido quitadas y reemplazadas por otras nuevas y coloridos
tapices colgados en la pared. Pero la habitación estaba vacía. Al menos pensó que lo
estaba hasta que su mirada alcanzó el fuego y vio a Edith acurrucada sobre un pelaje
grande frente al hogar tan desnuda como había venido al mundo.

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Niels dio un puntapié a la puerta para cerrarla y luego caminó rápidamente por el piso,
quitándose el tartán y la camisa mientras lo hacía.
Edith lo miró, con los ojos muy abiertos. Pero en el momento en que pisó las pieles y
comenzó a abalanzarse sobre ella, se apartó de ellas y retrocedió.
"¿A dónde vas?", Preguntó Niels con sorpresa, enderezándose para mirarla.
"Quería hablar primero, mi laird", explicó Edith, retrocediendo mientras él comenzaba a
avanzar.
"Esposa, no tienes que estar desnuda para hablar", le informó, acechándola como un
lobo tras su presa. "De hecho, es más perjudicial para hablar que útil".
"Lo sé, pero yo... Solo quiero decirte..." Hizo una pausa, miró a su alrededor y frunció el
ceño cuando tropezó con una de las esteras.
"¿Decirme qué?", Preguntó Niels, entrando en picada para atraparla mientras ella
estaba distraída y tirando de ella a sus brazos.
Suspirando, Edith apoyó las manos en su pecho y dijo: "Esto es importante".
"Habla", sugirió, inclinando la cabeza para mordisquearle la oreja.
"Yo... Quiero complacerte”, respiró Edith mientras sus labios bajaban por su cuello.
"Lo haces”, Niels murmuró contra su piel.
"Aye, pero yo... me arrojaría entre ti y una flecha para salvar tu vida", dijo ella, y las
palabras terminaron en un gemido cuando él ahuecó y agarró sus pechos.
"No te dejaría", le aseguró.
"Aye, pero lo haría, y me arrojaría entre ti y un oso también. Yo... Oh, debería haber
mantenido la ropa puesta hasta después", murmuró Edith, sonando irritada. "Esto es
duro."
"Eso es lo que me haces a mí", murmuró, apretando su dureza contra ella.
"Estoy tratando de decirte que te amo", Edith gimió y Niels se congeló.
Levantó la cabeza y la miró solemnemente. "¿Qué?"
Edith se tomó un momento para aclarar su mente y luego asintió solemnemente. "Te
amo, Niels. Me di cuenta cuando estaba en el bosque con Bessie. Ella dijo que el amor
es querer complacer a otro, y preocuparse por su bienestar más que por el propio".
Niels hizo una mueca. "Es bastante inquietante que estés recibiendo consejos sobre el
amor de una mujer que mató a catorce personas e hirió a tantas otras".
"Aye, lo sé", admitió con ironía. "Pero si te hace sentir mejor, ella dijo que su madre se
lo dijo".

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"Hmm", murmuró y decidió que tal vez eso lo hacía más pasable, especialmente si eso
había llevado a Edith a decirle que lo amaba. Ahuecando su rostro entre sus manos, él
la miró a los ojos y dijo: "Yo también te amo, Edith. No hubiera pensado que era posible
amar a alguien tan rápido, pero tú…"
Hizo una pausa, buscando las palabras para expresar cómo se sentía, luego suspiró y
admitió: "No sé cómo o cuándo sucedió, pero empujaste tu camino dentro de mi
corazón y has hecho un lugar para ti allí. Y, tan firmemente atrincherado, que no puedo
recordar la vida antes de que llegaras a ella, y no puedo imaginar la vida sin ti a mi
lado".
"Oh, Dios mío", respiró Edith.
Sonriendo, Niels agregó: "Pero no dejaría que tomes una flecha por mí, y
definitivamente nunca dejaría que te interpusieras entre un oso y yo, porque siento
exactamente lo mismo por ti".
Edith sonrió y acarició su mejilla suavemente. "Recuérdame escribir a Saidh y
agradecerle".
"Está bien", dijo Niels lentamente, un poco confundido por el brusco cambio de tema, y
luego inclinó su cabeza y preguntó con curiosidad, "¿Por qué necesitas agradecerle?"
"Por ti", dijo solemnemente. "El hecho de que te enviara a ver cómo estaba fue el mayor
regalo de mi vida".
Tragándose un nudo repentino en la garganta, Niels la tomó en sus brazos y la llevó a
la cama. Pero pensando por todo el camino que tal vez le escribiría a su hermana un
‘gracias’ también. Debido a que Edith también era un regalo para él, uno que disfrutaría
desenvolviendo todos los días de su vida.

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