Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
RESUMEN ABSTRACT
El trasplante es uno de los avances médicos más
Organ transplantation has become one of the
importante y, actualmente, sigue representando la
most important areas of medical research and, at pre-
única esperanza terapéutica de muchas enfermedades.
sent, is still the only therapeutical tool for several
Sin embargo, existen factores asociados al trasplante,
diseases. However, there are a number of factors
como los estados de neutropenia y la inmunosupre-
related to transplantation, like immunosuppression
sión, que favorecen la aparición de infecciones. Estas
and prolonged neutropenia that affect the incidence
infecciones tienen peculiaridades en los pacientes tras-
of infection. These infections are somehow peculiar
plantados. En este sentido, existen enfermedades infec-
to trasplant recipients. In fact, there are infectious
ciosas que prácticamente sólo aparecen en situaciones
diseases that only occur in immunodepression situa-
de inmunosupresión y además, la expresión clínica de
tions and, moreover, clinical expression of these
determinadas infecciones puede ser distinta a las que
infectious diseases can be quite different from that in
tendría un paciente inmunocompetente. Por otra
immunocompetent patients. Besides these aspects,
parte, algunas infecciones, dada su elevada prevalen-
some infections, due to the high prevalence
cia, deben ser subsidiarias de estrategias preventivas
described, must be considered for prevention strate-
ya que su aparición implica un aumento de la morbi-
gies because they continue to be a principal cause of
mortalidad, bien por la propia enfermedad o por la apa-
morbidity and mortality, either due to direct effects
rición de posibles episodios de rechazo asociados.
or to their implication in the pathogenesis of rejec-
Estas estrategias se inician antes del trasplante con la
tion. These strategies commence before trasplanta-
adecuación de pautas de vacunación tanto al propio
tion by active immunization through vaccine admin-
paciente como a las personas de su entorno y se conti-
istration to the patient and to people in the milieu
núan tras la realización del mismo con pautas de profi-
and continue after trasplantation with prophylaxis or
laxis y de tratamiento anticipado. Dada la importancia
pre-emptive therapy. The importance of infectious
de las infecciones en la evolución y pronóstico de los
diseases in the evolution and prognosis of trasplant
pacientes trasplantados es importante conocer la pato-
recipients gives a special meaning to the understand-
logía infecciosa asociada, sus manifestaciones clínicas
ing of associated infections, their clinical expression
y sus formas de prevención y tratamiento.
and ways of prevention and treatment.
Palabras clave. Trasplante de precursores hema-
topoyéticos (TPH). Trasplante de órgano sólido (TOS). Key words. Stem cell transplantation. Solid organ
Infecciones. Profilaxis. Tratamiento. trasplantation. Infections. Prophylaxis. Treatment.
modulador que contribuye a su vez al infección por CMV a través del órgano
rechazo del injerto y a una mayor predis- trasplantado (receptor seronegativo frente
posición a sufrir otras infecciones o neo- a CMV que recibe un órgano procedente de
plasias. No todos los pacientes trasplanta- un donante seropositivo) o de los produc-
dos tienen la misma susceptibilidad a las tos sanguíneos utilizados durante la ciru-
infecciones oportunistas virales. La ausen- gía, coloca al receptor en un alto riesgo de
cia de protección inmunológica específica desarrollar una enfermedad por CMV36. El
frente a determinados virus antes del tras- intestino trasplantado, al igual que el híga-
plante (pacientes seronegativos) es un fac- do y el pulmón parecen ser especialmente
tor de riesgo para contraer la primoinfec- susceptibles a la infección por CMV. A par-
ción después del trasplante, y además tir del sexto mes post-trasplante la infec-
para que ésta sea más grave. Sin embargo, ción por CMV es muy infrecuente, siendo
la mayoría de infecciones en pacientes la corioretinitis la principal forma de pre-
adultos resultan de la reactivación de virus sentación.
latentes. La utilización de determinados
fármacos inmunosupresores como, por Infección por VHS
ejemplo, anticuerpos antilinfocitarios, faci-
lita la posibilidad de desarrollar estas Las infecciones causadas por VHS en
infecciones virales oportunistas. Los virus adultos son, en general, el resultado de
del grupo herpes son los que producen una reactivación de un virus latente. La
con mayor frecuencia infección en los infección suele aparecer durante las pri-
receptores de TOS. Sin embargo, también meras 3-4 semanas post-trasplante y suele
debemos tener en cuenta otros virus, ser de características leves. La manifesta-
denominados emergentes. Entre ellos ción clínica más común es el herpes labial
haremos referencia a los virus de las hepa- en la segunda semana post-trasplante. Sin
titis, VIH, parvovirus B19, poliomavirus y embargo, algunos pacientes pueden com-
herpes virus 6, 7 y 8. Además, no debemos plicarse con lesiones ulcerativas graves en
olvidar la especial susceptibilidad que pre- superficies cutáneo-mucosas o manifesta-
sentan este tipo de pacientes a los adeno- ciones viscerales (neumonitis, hepatitis,...)
virus, VRS o virus de la influenza. Las lesiones son más severas y duraderas
que las que ocurren en el paciente inmu-
Infección por CMV nocompetente, y pueden asociarse a lesio-
nes intraorales o esofágicas (la esofagitis
La infección por CMV es la infección por VHS es indistinguible clínicamente de
vírica más frecuente en el paciente someti- la producida por CMV o levaduras)37.
do a TOS. De forma global, hasta el 60-90%
de los receptores de TOS sufren alguna
Infección por VVZ
infección por CMV tras el trasplante34. Sin
embargo, el aislamiento de CMV en una La infección por el VVZ causa dos enti-
muestra clínica (incluida la sangre) no dades clínicas distintas dependiendo de
siempre es sinónimo de enfermedad por que se trate de una primoinfección (varice-
este virus, y por lo tanto, no siempre es la) o una reactivación (herpes zóster). La
necesario instaurar un tratamiento especí- mayor parte de pacientes adultos trasplan-
fico. La enfermedad por CMV en el pacien- tados son seropositivos frente al VVZ, por
te sometido a TOS aparece habitualmente lo que no estarían en riesgo de desarrollar
entre el segundo y tercer mes post-tras- varicela. La primoinfección puede ocurrir
plante. Las manifestaciones clínicas son en cualquier momento tras el TOS, no exis-
variadas, pudiendo causar desde un sín- tiendo evidencia hasta el momento de que
drome febril con o sin leucotrombocitope- este virus se transmita a través del órgano
nia y sin evidencia de afección visceral, trasplantado. La varicela puede cursar
hasta una enfermedad diseminada (la reti- como una infección diseminada con neu-
nitis es excepcional, al contrario de lo que monía hemorrágica, encefalitis, pancreati-
ocurre en los pacientes VIH positivos)35. La tis, hepatitis,... En estos casos el pulmón es
neumonitis es menos frecuente que en los el principal órgano diana, desarrollando
receptores de TPH. La adquisición de la estos pacientes una neumonía 3-7 días des-
pués del inicio de las lesiones cutáneas. La tó en pacientes con SIDA que presentaban
incidencia de herpes zóster en pacientes este tipo de neoplasia. Esta neoplasia es
receptores de un trasplante oscila entre un relativamente común entre los pacientes
5 y un 13%, y suele ocurrir a partir del sexto trasplantados, presentándose en la mayo-
mes post-trasplante. El herpes zóster en la ría de las ocasiones como formas viscera-
población trasplantada no se diferencia del les39. En Francia se ha observado una pre-
que se observa en el resto de la población, valencia de un 8% en los donantes y
sin embargo puede existir afectación de también de un 8% en los receptores. La
más de un dermatomo. infección por el VHH-8 puede ser tanto pre-
via al trasplante como transmitida por el
Infección por virus herpes tipo 6 donante. En una revisión de 28 casos de SK
(VHH-6) en pacientes trasplantados renales, 23
casos (82%) se debieron a una reactivación
Este virus es el agente causal del exan- del virus y 5 (18%) a una primoinfección.
tema súbito de la infancia. La importancia En la actualidad, y dada la agresividad del
real de la infección por el VHH-6 en los SK, se debate la necesidad de realizar un
pacientes trasplantados no se conoce con cribado serológico frente al VHH-8 en
exactitud. Según algunas series, la inciden- pacientes trasplantados según la seropre-
cia de infección post-trasplante varía entre valencia de cada país con el objetivo de
un 23 y un 66%. Se ha descrito en TP, TR, poder administrar antivirales de forma
TH y reno-pancreático. La infección por profiláctica.
este virus se ha asociado con cuadros
febriles en las primeras semanas post-tras-
plante, además de con casos graves de Infección por el VEB
meningoencefalitis, neumonitis, hepatitis y La infección por este virus en el pacien-
aplasia medular38. Además, puede actuar te trasplantado puede producir una mono-
como cofactor del CMV y tiene un cierto nucleosis infecciosa similar a la del pacien-
efecto sobre los linfocitos T lo cual podría te inmunocompetente. La infección puede
favorecer el rechazo del órgano trasplanta- también asociarse con el desarrollo de un
do o la aparición de infecciones oportunis- SLP-VEB. La incidencia de SLP-VEB oscila
tas por hongos o bacterias. entre 1-14% siendo mayor en población
pediátrica y en los pacientes sometidos a
Infección por virus herpes tipo 7 trasplante de intestino, pulmón y de pán-
(VHH-7) creas-riñón40. El espectro clínico de esta
entidad es bastante amplio, siendo
Al igual que el VHH-6, se encuentra muchas veces multifocal, con afección vis-
ampliamente diseminado en la población ceral y con frecuente afección del órgano
general, elevándose la seroprevalencia (60- trasplantado. La seronegatividad del
80%) en torno a los dos años de edad. Su receptor frente al VEB antes del trasplante,
principal lugar de replicación son las glán- la utilización de OKT3 para el tratamiento
dulas salivares (transmitiéndose de hecho del rechazo, el tratamiento con tacrolimus
a través de la saliva). Puede causar un cua- y el desarrollo de enfermedad por CMV
dro clínico similar al que produce el VHH-6 son factores de riesgo para el desarrollo de
o un cuadro similar a la mononucleosis. un SLP-VEB.
Varios autores han observado que la infec-
ción por el VHH-7 se asocia con una mayor
incidencia de enfermedad por CMV y con Infección por papovavirus
un aumento del rechazo del injerto. Son virus DNA que están divididos en
dos géneros, polyomavirus y papilomavi-
Infección por el virus herpes tipo 8 rus. Estos virus tienen además potencial
(VHH-8) (virus herpes asociado al oncogénico.
sarcoma de Kaposi)
Fue denominado inicialmente como Polyomavirus: virus BK y JC
virus herpes asociado a sarcoma de Kapo- Se han descrito casos de cistitis hemo-
si (SK) debido a que inicialmente se detec- rrágica y estenosis ureteral por BK en
agudas y diseminadas con participación la entre un 20-40% con una tasa de morta-
pulmonar importante. Estas infecciones lidad del 25 al 70%. El 90% de estas infec-
suelen ocurrir en el post-trasplante tardío ciones ocurren durante los primeros 2
(dos años después del mismo)52. A menu- meses post-trasplante54. Las infecciones
do ocasionan síntomas crónicos que se por Aspergillus ocurren en el 1-5% y son
manifiestan como lesiones cutáneas fatales en el 80-100% de los casos. El
(nódulos cutáneos, abscesos, úlceras) en momento promedio de comienzo es un
las extremidades, tenosinovitis e infeccio- poco después del observado en las infec-
nes articulares (dedos, codos, rodillas y ciones por Candida spp. Candida albicans
tobillos). es la especie más frecuentemente aislada.
La mayoría de las infecciones aparecen
Infección por hongos durante los dos primeros meses después
del trasplante55. Puede ocasionar enferme-
Las infecciones fúngicas son la tercera dad no invasiva o invasiva. Las infeccio-
causa en frecuencia de infección en el nes invasivas pueden cursar como sepsis
paciente portador de TOS después de las asociada al uso de catéteres, abscesos
infecciones bacterianas y víricas. La mor- intraabdominales (hígado), infecciones
talidad de las formas invasoras en estos del tracto urinario (riñón) y mediastinitis
pacientes es superior al 50% debido a la (pulmón y corazón).
dificultad del diagnóstico precoz, la
moderada eficacia de los tratamientos,
las dificultades a la hora de utilizar cier- Infecciones por parásitos
tos antifúngicos por su toxicidad o inte- Las infecciones parasitarias en los
racciones con los inmunosupresores y la pacientes trasplantados se relacionan con
escasa experiencia en estrategias de pre- determinados factores de riesgo epidemio-
vención. La incidencia de la infección fún- lógicos como la visita o procedencia de
gica varía según el tipo de órgano tras- determinadas áreas geográficas. Pueden
plantado, siendo los receptores de un TH aparaecer como resultado de la reactiva-
o TP los que tienen una mayor incidencia ción de infecciones latentes transmitidas
de este tipo de infecciones53. Los factores por el injerto o como primoinfecciones. El
de riesgo para la infección fúngica invaso- número de los casos publicados en los últi-
ra son el tratamiento con corticoides y mos años ha ido en aumento. Este hecho
antibióticos pretrasplante, la coloniza- puede deberse a factores como el aumento
ción previa con hongos, la situación clíni- de trasplantes realizados en países donde
ca antes del trasplante, la cirugía compli- estas enfermedades son endémicas, el
cada, la enfermedad por CMV, el exceso aumento de viajes a estas zonas o el
de inmunosupresión, el rechazo crónico y aumento en los movimientos migratorios
el retrasplante. Los hongos que están de las poblaciones.
implicados con una mayor frecuencia en
este tipo de infecciones son: Candida spp, Toxoplasmosis
Aspergillus spp., Cr yptococcus neofor-
La importancia de la toxoplasmosis en
mans, los hongos zigomicetos y Pneu-
los receptores de TC se debe a la presencia
mocystis jiroveci. Candida spp. supone la
de microorganismos enquistados en el cora-
etiología más frecuente para la mayoría
zón del donante56. Los pacientes trasplanta-
de pacientes trasplantados, si hacemos
dos con riesgo son aquellos seronegativos
excepción de los receptores de pulmón y
que reciben órganos seropositivos. La toxo-
corazón, en los que la infección fúngica
plasmosis clínica, por lo general, ocurre
está causada predominantemente por
varios meses después del trasplante y se
Aspergillus spp. Los trasplantados de
manifiesta habitualmente como neumonitis
corazón-pulmón tienen las tasas más
necrosante, miocarditis o encefalitis.
altas de aspergilosis invasiva de entre
todos los tipos de trasplante de órgano
sólido. Las infecciones fúngicas son más Quiste hidatídico
frecuentes en los receptores de TH que en La experiencia con TH en pacientes
otros tipos de órganos. La incidencia osci- con enfermedad hepática terminal por
Trasplante de órgano sólido te86. Los resultados en Fase III del estudio
internacional PV16000 concluyen que val-
Prevención de la infección por CMV
ganciclovir administrado como dosis
(Tabla 2)
única diaria de 900 mg tiene la misma efi-
La profilaxis antiviral es capaz de pre- cacia que ganciclovir oral a dosis de 1.000
venir la enfermedad por CMV y la mortali- mg cada 8 horas como profilaxis de la
dad global precoz en el paciente con TOS. enfermedad por CMV en receptores de alto
La disminución de la mortalidad es debida riesgo de TOS87. Aunque el riesgo de neu-
a la disminución de mortalidad por enfer- tropenia es mayor con valganciclovir (8,2%
medad por CMV76. vs 3,2%), el perfil de seguridad es equipa-
El trasplante de un órgano de donante rable, la tolerancia oral es mejor con val-
seropositivo a un receptor seronegativo ganciclovir y la incidencia de viremia
representa el principal factor de riesgo de durante la profilaxis y después de la
desarrollo de enfermedad por CMV77-81. Sin misma, fue significativamente menor en
profilaxis, el 70-90% de los pacientes ten- los paciente tratados con valganciclovir
drán infección por CMV, de los cuales que en los tratados con ganciclovir oral87.
entre el 50-80% desarrollarán enfermedad El ganciclovir oral, con una biodispo-
por CMV. La mortalidad global, en ausen- nibilidad oral del 7%, unas 10 veces infe-
cia de profilaxis, es de aproximadamente rior a valganciclovir, sigue siendo un fár-
un 15%, principalmente en aquellos que maco activo en la profilaxis frente a
desarrollan neumonitis como expresión CMV88, con actividad similar a valganci-
clínica de enfermedad por CMV. La utiliza- clovir87, y mayor que con aciclovir (800
ción de inmunosupresores antilinfocita- mg/6h)89,90 y que con placebo91. El ganci-
rios (globulinas antilinfocíticas o antitimo- clovir puede asimismo administrarse por
cíticas, o los anticuerpos monoclonales vía intravenosa durante toda la profilaxis
OKT3) constituye, junto con el estado o como pauta de inicio. En este sentido,
serológico de donante seropositivo/recep- en un estudio randomizado y controlado92
tor seronegativo, las situaciones de alto en pacientes seronegativos receptores de
riesgo para infección por CMV82. Otros fac- trasplante hepático de donante seroposi-
tores de riesgo son la utilización de dosis tivo, no se objetivan diferencias en cuan-
elevadas de corticoides, las cargas virales to a enfermedad por CMV a un año pos-
elevadas de CMV, la estimulación alogéni- trasplante, se haya realizado la profilaxis
ca, la coinfección por otros virus herpes, y con ganciclovir intravenoso o con trata-
la inmunosupresión, principalmente la uti- miento secuencial de ganciclovir intrave-
lización de micofenolato mofetil83-85. Si bien noso y oral. En conclusión, las guías de
la situación serológica del donante no es consenso recomiendan el tratamiento
criterio de exclusión para la realización de secuencial para la prevención de la enfer-
un trasplante, en los receptores seronega- medad por CMV82,93.
tivos de donantes seronegativos, es reco- La gammaglobulina hiperinmune espe-
mendable que los hemoderivados sumi- cífica es un producto preparado de suero
nistrados sean CMV seronegativos o humano que contiene altas concentracio-
filtrados82. nes de anticuerpos frente a CMV. Aunque
El valganciclovir es un profármaco del puede que disminuya los efectos inmuno-
ganciclovir de administración oral. Está supresores inducidos por el CMV, su efica-
aprobada su indicación para la prevención cia no está bien establecida ya que se usa
del CMV en receptores seronegativos de en combinación con un antiviral. Otras
un órgano seropositivo. Su biodisponibili- estrategias terapéuticas vienen represen-
dad oral es de aproximadamente un 70% y tadas por la leflunomida, un inmunosupre-
estudios de farmacocinética en el trasplan- sor de administración vía oral, inhibidor
te hepático han evaluado que, a dosis de de la síntesis de pirimidinas, que tiene un
450 y 900 mg produce unas concentracio- efecto antiviral interfiriendo el ensamblaje
nes séricas de ganciclovir similares a las de los viriones. A través de este mecanis-
conseguidas con ganciclovir intravenoso a mo es capaz de disminuir la replicación de
dosis de 2,5 y de 5 mg/kg, respectivamen- CMV y de virus herpes simple tipo I94-96.
Pancreático Universal Ganciclovir i.v. 5mg/kg/12 horas x 3 semanas ó CIII Ganciclovir i.v. 5mg/kg/12 horas x 14 días ó CIII
Valganciclovir 900 mg/12 horas x 3 semanas
D+/R- Valganciclovir 900 mg/día x 3 meses CIII Valganciclovir 900 mg/12 horas x 14 días CIII
Antitimocíticos
* : Dosis recomendadas para función renal normal (Clcr>70 ml/min) y recuento de neutrófilos>1.000/µl.
191
D: donante, R: receptor. NE&: Nivel de evidencia.
INFECCIONES MÁS COMUNES EN EL PACIENTE TRASPLANTADO
J. R. Yuste y otros
mente frente a Aspergillus spp. se ha eva- conazol también puede indicarse en pacien-
luado la actividad de itraconazol como tes colonizados con Aspergillus spp. Si las
profilaxis de la infección fúngica invasiva cultivos son positivos para una levadura
(IFI). En el trabajo publicado por Marr y que no sea una Candida glabrata o una Can-
col129 en 2004, se compara itraconazol en dida krusei, se recomienda fluconazol o
solución oral (2,5 mg/kg/8horas) o intrave- itraconazol (400 mg/ día, vía oral), empe-
noso (200 mg/día) frente a fluconazol (400 zando el primer día de neutropenia y conti-
mg/día) como profilaxis de infección fúngi- nuando hasta que la inmunosupresión se
ca en pacientes sometidos a TPH alogéni- haya resuelto133.
co. La incidencia de IFI fue menor en el Respecto al tratamiento de la enferme-
grupo de itraconazol (7% vs 15%) y similar dad establecida, deben seguirse las guías
frente a candidiasis (2% vs 3%). No hubo terapéuticas recomendadas.
diferencias en cuanto a supervivencia y el
número de abandonos por intolerancia al
itraconazol (toxicidad gastrointestinal y/o Trasplante de órgano sólido (TOS)
hepática) fue notablemente superior que Existen diversas pautas de profilaxis
con fluconazol (36% vs 16%). Con todo según el tipo de trasplante. En el trasplan-
esto parece prudente realizar profilaxis te reno-pancreático se realiza profilaxis
con itraconazol a pacientes con alto riesgo universal frente a Candida spp. con fluco-
de IFI. Dadas las dificultades para su nazol y en el trasplante hepático, sólo en
correcto cumplimiento debe de valorarse situaciones de alto riesgo (reintervención,
la utilización de otros azoles con actividad transfusiones masivas, colonización fúngi-
frente a hongos filamentosos, algunos ya ca pretrasplante, uso de antibióticos,
disponibles como el voriconazol y otros estancia prolongada en UCI, insuficiencia
como posaconazol y ravuconazol que pro- renal o disfunción del injerto). La dosis
ximamente lo estarán. habitual de fluconazol son 200 mg/día y se
Micafungina, una equinocandina con mantiene un período de 4 semanas. En un
actividad frente a Candida spp y Aspergi- meta-análisis publicado en 2004134 que
llus spp, ha sido evaluada como pauta incluye 14 estudios randomizados sobre la
profiláctica en el TPH durante la neutro- eficacia de la prevención de la infección
penia a dosis de 50 mg/día frente a 400 fúngica en el TOS se concluye que: 1. la
mg/día de fluconazol. Durante la fase neu- profilaxis antifúngica no reduce la mortali-
tropénica la eficacia de micafungina fue dad; 2. en el trasplante hepático el fluco-
superior a fluconazol (80% vs 74%) al nazol reduce significativamente la IFI; 3.
igual que una mejor eficacia frente a itraconazol y anfotericina B liposomal tie-
Aspergillus (p=0,07)130. Todo ello no se tra- nen una eficacia similar al fluconazol y; 4.
duce en una mejora de la supervivencia. en receptores de trasplante renal y/o car-
díaco, ni ketoconazol ni clotrimazol redu-
Respecto a la anfotericina, los dos estu- cen significativamente la infecciones inva-
dios prospectivos multicéntricos randomi- sivas.
zados con vistas a evaluar la anfotericina B
en aerosoles para la prevención de asper- En el trasplante pulmonar y cardiopul-
gilosis invasiva no han mostrado un bene- monar se emplea profilaxis frente a Candi-
ficio significativo131,132, por lo que no se da spp. con fluconazol y frente a Aspergi-
recomienda su uso. llus spp. con anfotericina B deoxicolato
(ABD) inhalada. La anfotericina B comple-
El tratamiento anticipado consiste en la jo lipídico tiene una eficacia similar135 y la
administración de fármacos cuando se anfotericina B liposomal, dadas las altas
detecta positividad de pruebas microbioló- concentraciones que consigue a nivel de
gicas indicativas de infección en pacientes parénquima pulmonar es una estrategia a
asintomáticos. Anfotericina B se recomien- considerar136. En este tipo de trasplante se
da para pacientes que son colonizados con ha evaluado en estudios no controlados la
los hongos resistentes a fluconazol y/o tie- eficacia de itraconazol frente a flucona-
nen dos pruebas positivas consecutivas zol137 o como pauta profiláctica tras anfote-
para antigenemia de Aspergillus o PCR. Itra- ricina aerosolizada138, mostrando en ambos
Tabla 3. Vacunas recomendadas en candidatos y receptores de TOS, en sus contactos familiares (CF)
y en el personal sanitario (PS) que los atiende.
antes posible. Si no se ha podido completar polio oral, fiebre tifoidea oral, gripe intrana-
la pauta de vacunación antes del trasplante, sal, BCG y fiebre amarilla) que están con-
ésta puede completarse a partir del sexto traindicadas en el postrasplante141.
mes, salvo en el caso de las vacunas atenua- En los pacientes con TPH (Tabla 4) se
das con agentes vivos (triple vírica, varicela, produce una pérdida de la inmunidad tras
Tabla 4. Vacunas recomendadas en receptores de TPH, en sus contactos familiares (CF) y en el per-
sonal sanitario (PS) que los atiende.
la realización del trasplante y se admite 8. CHANG FY, SINGH N, GAYOWSKI T, WAGENER MM,
una recuperación completa de la capaci- MARINO IR. Fever in liver transplant recipi-
dad de respuesta a los dos años del tras- ents: changing spectrum of etiologic agents.
plante, en ausencia de EICH. En todos los Clin Infect Dis 1998; 26: 59-65.
casos de TPH está indicado un programa 9. CHOU SW. Neutralizing antibody responses
de reinmunización. Se recomienda iniciar to reinfecting strains of cytomegalovirus in
la pauta a partir de los doce meses del transplant recipients. J Infect Dis 1989; 160:
16-21.
trasplante, salvo en el caso de la vacuna de
la gripe que se pauta a partir del sexto 10. DEVAULT GA, JR., KING JW, ROHR MS, LANDRE-
NEAU MD, BROWN ST, 3RD, MCDONALD JC.
mes. En las vacunas con virus atenuados,
Opportunistic infections with Strongyloides
la triple vírica sólo puede administrarse en stercoralis in renal transplantation. Rev
pacientes inmunocompetentes tras 24 Infect Dis 1990; 12: 653-671.
meses del trasplante, que no han recibido
11. DUMMER JS, HARDY A, POORSATTAR A, HO M.
drogas inmunosupresoras y no tienen Early infections in kidney, heart, and liver
EICH. Respecto a la varicela, actualmente transplant recipients on cyclosporine.
no existen datos suficientes como para Transplantation 1983; 36: 259-267.
recomendar esta vacuna112. 12. DUNCAN AJ, DUMMER JS, PARADIS IL, DAUBER JH,
YOUSEM SA, ZENATI MA et al. Cytomegalovirus
BIBLIOGRAFÍA infection and survival in lung transplant
recipients. J Heart Lung Transplant 1991;
1. AGUADO JM, HERRERO JA, GAVALDA J, TORRE-CIS-
10(5 Pt 1): 638-44; discussion 645-646.
NEROS J, BLANES M, RUFI G et al. Clinical pre-
sentation and outcome of tuberculosis in 13. EID AJ, BROWN RA, PATEL R, RAZONABLE RR. Par-
kidney, liver, and heart transplant recipients vovirus B19 infection after transplantation:
in Spain. Spanish Transplantation Infection a review of 98 cases. Clin Infect Dis 2006; 43:
Study Group, GESITRA. Transplantation 40-48.
1997; 63: 1278-1286. 14. ELTING LS, BODEY GP, KEEFE BH. Septicemia
2. ALKAN S, KARCHER DS, ORTIZ A, KHALIL S, AKHTAR and shock syndrome due to viridans strep-
M, ALI MA. Human herpesvirus-8/Kaposi’s tococci: a case-control study of predispos-
sarcoma-associated herpesvirus in organ ing factors. Clin Infect Dis 1992; 14: 1201-
transplant patients with immunosuppres- 1207.
sion. Br J Haematol 1997; 96: 412-414. 15. ENGELHARD D, ELISHOOV H, STRAUSS N, NAPARSTEK
3. ATKINSON K, NIVISON-SMITH I, DODDS A, CONCAN- E, NAGLER A, SIMHON A et al. Nosocomial coag-
NON A, MILLIKEN S, DOWNS K. A comparison of ulase-negative staphylococcal infections in
the pattern of interstitial pneumonitis fol- bone marrow transplantation recipients with
lowing allogeneic bone marrow transplanta- central vein catheter. A 5-year prospective
tion before and after the introduction of pro- study. Transplantation 1996; 61: 430-434.
phylactic ganciclovir therapy in 1989. Bone 16. FORBES GM, HARVEY FA, PHILPOTT-HOWARD JN,
Marrow Transplant 1998; 21: 691-695. O’GRADY JG, JENSEN RD, SAHATHEVAN M et al.
4. BERENGUER J, GOMEZ-CAMPDERA F, PADILLA B, Nocardiosis in liver transplantation: varia-
RODRIGUEZ-FERRERO M, ANAYA F, MORENO S et al. tion in presentation, diagnosis and therapy.
Visceral leishmaniasis (Kala-Azar) in trans- J Infect 1990; 20: 11-19.
plant recipients: case report and review. 17. GIRGIS RE, TU I, BERRY GJ, REICHENSPURNER H,
Transplantation 1998; 65: 1401-1404. VALENTINE VG, CONTE JV et al. Risk factors for
5. BOUBENIDER S, HIESSE C, MARCHAND S, HAFI A, the development of obliterative bronchioli-
KRIAA F, CHARPENTIER B. Post-transplantation tis after lung transplantation. J Heart Lung
polyomavirus infections. J Nephrol 1999; 12: Transplant 1996; 15: 1200-1208.
24-29. 18. GOMEZ E, MELON S, AGUADO S, SANCHEZ JE, POR-
6. BRAUN WE. Long-term complications of renal TAL C, FERNANDEZ A et al. Herpes simplex virus
transplantation. Kidney Int 1990; 37: 1363- encephalitis in a renal transplant patient:
1378. diagnosis by polymerase chain reaction
7. BRIZ M, FORES R, REGIDOR C, BUSTO MJ, RAMON Y detection of HSV DNA. Am J Kidney Dis 1997;
CAJAL S, CABRERA R et al. Epstein-Barr virus 30: 423-427.
associated B-cell lymphoma after autolo- 19. HANTO DW, FRIZZERA G, PURTILO DT, SAKAMOTO
gous bone marrow transplantation for T-cell K, SULLIVAN JL, SAEMUNDSEN AK et al. Clinical
acute lymphoblastic leukaemia. Br J Haema- spectrum of lymphoproliferative disorders
tol 1997; 98: 485-487. in renal transplant recipients and evidence
for the role of Epstein-Barr virus. Cancer Res 32. LOCKSLEY RM, FLOURNOY N, SULLIVAN KM, MEY-
1981; 41(11 Pt 1): 4253-4261. ERS JD. Infection with varicella-zóster virus
20. HERBEIN G, STRASSWIMMER J, ALTIERI M, WOEHL- after marrow transplantation. J Infect Dis
JAEGLE ML, WOLF P, OBERT G. Longitudinal 1985; 152: 1172-1181.
study of human herpesvirus 6 infection in 33. LOINAZ C, MORENO-GONZALEZ E, GOMEZ R, GARCIA
organ transplant recipients. Clin Infect Dis I, GONZALEZ-PINTO I, JIMENEZ C et al. Liver
1996; 22: 171-173. transplantation in liver disease: echinococ-
21. HOLLIMAN RE, JOHNSON JD, ADAMS S, PEPPER JR. cus granulosus. Transplant Proc 1998; 30:
Toxoplasmosis and heart transplantation. J 3268-3269.
Heart Lung Transplant 1991; 10: 608-610. 34. LOWRY PW, BLANKENSHIP RJ, GRIDLEY W, TROUP
22. JAROWSKI CI, FIALK MA, MURRAY HW, GOTTLIEB NJ, TOMPKINS LS. A cluster of legionella ster-
GJ, COLEMAN M, STEINBERG CR et al. Fever, nal-wound infections due to postoperative
rash, and muscle tenderness. A distinctive topical exposure to contaminated tap water.
clinical presentation of disseminated can- N Engl J Med 1991; 324: 109-113.
didiasis. Arch Intern Med 1978; 138: 544- 35. MILLER RB, CHAVERS BM. Respiratory syncy-
546. tial virus infections in pediatric renal trans-
plant recipients. Pediatr Nephrol 1996; 10:
23. JOHN GT, SHANKAR V, ABRAHAM AM, MUKUNDAN
213-215.
U, THOMAS PP, JACOB CK. Risk factors for post-
transplant tuberculosis. Kidney Int 2001; 60: 36. NIETO-RODRIGUEZ JA, KUSNE S, MANEZ R, IRISH W,
1148-1153. LINDEN P, MAGNONE M et al. Factors associated
with the development of candidemia and
24. JUNGHANSS C, MARR KA. Infectious risks and
candidemia-related death among liver trans-
outcomes after stem cell transplantation:
plant recipients. Ann Surg 1996; 223: 70-76.
are nonmyeloablative transplants changing
the picture? Curr Opin Infect Dis 2002; 15: 37. PATEL R, PAYA CV. Infections in solid-organ
347-353. transplant recipients. Clin Microbiol Rev
1997; 10: 86-124.
25. KUSNE S, DUMMER JS, SINGH N, IWATSUKI S,
MAKOWKA L, ESQUIVEL C et al. Infections after 38. PATEL R, PORTELA D, BADLEY AD, HARMSEN WS,
liver transplantation. An analysis of 101 con- LARSON-KELLER JJ, ILSTRUP DM et al. Risk fac-
secutive cases. Medicine (Baltimore) 1988; tors of invasive Candida and non-Candida
67: 132-143. fungal infections after liver transplantation.
26. KUSNE S, MANEZ R, BONET H, ABU-ELMAGD K, Transplantation 1996; 62: 926-934.
FURUKAWA H, IRISH W et al. Infectious compli- 39. PAYA CV, HERMANS PE. Bacterial infections
cations after small bowel transplantation in after liver transplantation. Eur J Clin Micro-
adults. Transplant Proc 1994; 26: 1682-1683. biol Infect Dis 1989; 8: 499-504.
27. KWAK EJ, VILCHEZ RA, RANDHAWA P, SHAPIRO R, 40. PEREZ MG, VASSILEV T, KEMMERLY SA.
BUTEL JS, KUSNE S. Pathogenesis and manage- Rhodococcus equi infection in transplant
ment of polyomavirus infection in trans- recipients: a case of mistaken identity and
plant recipients. Clin Infect Dis 2002; 35: review of the literature. Transpl Infect Dis
1081-1087. 2002; 4: 52-56.
28. LICHTENSTEIN IH, MACGREGOR RR. Mycobacteri- 41. PETERSON PK, ANDERSON RC. Infection in renal
al infections in renal transplant recipients: transplant recipients. Current approaches
report of five cases and review of the litera- to diagnosis, therapy, and prevention. Am J
ture. Rev Infect Dis 1983; 5: 216-226. Med 1986; 81: 2-10.
29. LJUNGMAN P. Respiratory virus infections in 42. PIRSCH JD, MAKI DG. Infectious complications
bone marrow transplant recipients: the in adults with bone marrow transplantation
European perspective. Am J Med 1997; 102: and T-cell depletion of donor marrow.
44-47. Increased susceptibility to fungal infections.
30. LJUNGMAN P, GRIFFITHS P, PAYA C. Definitions of Ann Intern Med 1986; 104: 619-631.
cytomegalovirus infection and disease in 43. PURIGHALLA R, SHAPIRO R, JORDAN ML, SCANTLE-
transplant recipients. Clin Infect Dis 2002; BURY VP, GRITSCH HA, VIVAS C et al. Acute renal
34: 1094-1097. allograft rejection in patients with Epstein-
31. LOCASCIULLI A, TESTA M, PONTISSO P, BACIGALUPO Barr virus associated post-transplant lym-
A, LJUNGMAN P, FRICKHOFEN N et al. Hepatitis C phoproliferative disorder. Clin Transplant
virus genotypes and liver disease in patients 1997; 11: 574-576.
undergoing allogeneic bone marrow trans- 44. RAMSEY PG, FIFE KH, HACKMAN RC, MEYERS JD,
plantation. Bone Marrow Transplant 1997; COREY L. Herpes simplex virus pneumonia:
19: 237-240. clinical, virologic, and pathologic features in
20 patients. Ann Intern Med 1982; 97: 813- 57. STRATTA RJ. Clinical patterns and treatment
820. of cytomegalovirus infection after solid-
45. RAO KV, KASISKE BL, ANDERSON WR. Variability organ transplantation. Transplant Proc
in the morphological spectrum and clinical 1993; 25: 15-21.
outcome of chronic liver disease in hepatitis 58. TURKMEN A, SEVER MS, ECDER T, YILDIZ A, AYDIN
B-positive and B-negative renal transplant AE, ERKOC R et al. Posttransplant malaria.
recipients. Transplantation 1991; 51: 391- Transplantation 1996; 62: 1521-1523.
396. 59. UMEKAWA T, KURITA T. Acute hemorrhagic cys-
46. ROLAND M, CARLSON L, STOCK P. Solid organ titis by adenovirus type 11 with and without
transplantation in HIV-infected individuals. type 37 after kidney transplantation. Urol Int
AIDS Clin Care 2002; 14: 59-63. 1996; 56: 114-116.
47. ROONEY CM, LOFTIN SK, HOLLADAY MS, BRENNER 60. WALD A, LEISENRING W, VAN BURIK JA, BOWDEN
MK, KRANCE RA, HESLOP HE. Early identifica- RA. Epidemiology of Aspergillus infections
tion of Epstein-Barr virus-associated post- in a large cohort of patients undergoing
transplantation lymphoproliferative dis- bone marrow transplantation. J Infect Dis
ease. Br J Haematol 1995; 89: 98-103. 1997; 175: 1459-1466.
48. SARR MG, GOTT VL, TOWNSEND TR. Mediastinal 61. YOSHIKAWA T, IHIRA M, OHASHI M, SUGA S, ASANO
infection after cardiac surgery. Ann Thorac Y, MIYAZAKI H et al. Correlation between HHV-
Surg 1984; 38: 415-423. 6 infection and skin rash after allogeneic
49. SEPKOWITZ KA, BROWN AE, TELZAK EE, GOTTLIEB bone marrow transplantation. Bone Marrow
S, ARMSTRONG D. Pneumocystis carinii pneu- Transplant 2001; 28: 77-81.
monia among patients without AIDS at a can- 62. LJUNGMAN P, BRAND R, EINSELE H, FRASSONI F,
cer hospital. Jama 1992; 267: 832-837. NIEDERWIESER D, CORDONNIER C. Donor CMV
50. SHAH G, DEMETRIS AJ, GAVALER JS, LEWIS JH, serologic status and outcome of CMV-
TODO S, STARZL TE et al. Incidence, preva- seropositive recipients after unrelated
lence, and clinical course of hepatitis C fol- donor stem cell transplantation: an EBMT
lowing liver transplantation. Gastroenterolo- megafile analysis. Blood 2003; 102: 4255-
gy 1992; 103: 323-329. 4260.
51. SINGH N, WAGENER MM, MARINO IR, GAYOWSKI T. 63. GOODRICH JM, BOWDEN RA, FISHER L, KELLER C,
Trends in invasive fungal infections in liver SCHOCH G, MEYERS JD. Ganciclovir prophylax-
transplant recipients: correlation with evo- is to prevent cytomegalovirus disease after
lution in transplantation practices. Trans- allogeneic marrow transplant. Ann Intern
plantation 2002; 73: 63-67. Med. 1993; 118: 173-178.
52. SOLLINGER HW, KNECHTLE SJ, REED A, D’ALESSAN- 64. WINSTON DJ, HO WG, BARTONI K, DU MOND C,
DRO AM, KALAYOGLU M, BELZER FO et al. Expe- EBELING DF, BUHLES WC et al. Ganciclovir pro-
rience with 100 consecutive simultaneous phylaxis of cytomegalovirus infection and
kidney-pancreas transplants with bladder disease in allogeneic bone marrow trans-
drainage. Ann Surg 1991; 214: 703-711. plant recipients. Results of a placebo-con-
53. STEHMAN-BREEN CO, PSATY BM, EMERSON S, trolled, double-blind trial. Ann Intern Med.
GRETCH D, BRONNER M, MARSH C et al. Associa- 1993; 118: 179-184.
tion of hepatitis C virus infection with mor- 65. BOECKH M, GOOLEY TA, MYERSON D, CUNNINGHAM
tality and graft survival in kidney-pancreas T, SCHOCH G, BOWDEN RA. Cytomegalovirus
transplant recipients. Transplantation 1997; pp65 antigenemia-guided early treatment
64: 281-286. with ganciclovir versus ganciclovir at
54. STEINER M, VILLABLANCA J, KERSEY J, RAMSAY N, engraftment after allogeneic marrow trans-
HAAKE R, FERRIERI P et al. Viridans strepto- plantation: a randomized double-blind
coccal shock in bone marrow transplanta- study. Blood. 1996; 88: 4063-4071.
tion patients. Am J Hematol 1993; 42: 354- 66. LI CR, GREENBERG PD, GILBERT MJ, GOODRICH
358. JM, RIDDELL SR. Recovery of HLA-restricted
55. STOLF NA, HIGUSHI L, BOCCHI E, BELLOTTI G, cytomegalovirus (CMV)-specific T-cell
AULER JO, UIP D et al. Heart transplantation in responses after allogenic bone marrow
patients with Chagas’ disease cardiomyopa- transplant: correlation with CMV disease
thy. J Heart Transplant 1987; 6: 307-312. and effect of ganciclovir prophylaxis. Blood
56. STRASSER SI, MCDONALD GB. Hepatitis viruses 1994; 83: 1971-1979.
and hematopoietic cell transplantation: A 67. PRENTICE HG, GLUCKMAN E, POWLES RL, LJUNGMAN
guide to patient and donor management. P, MILPIED N, CAMARA R, MANDELLI F et al. Long-
Blood 1999; 93: 1127-1136. term survival in allogeneic bone marrow
87. PAYA C, HUMAR A, DOMINGUEZ E, WASHBURN K, 96. JOHN GT, MANIVANNAN J, CHANDY S, PETER S,
BLUMBERG E, ALEXANDER B et al. Efficacy and JACOB CK. Leflunomide therapy for
safety of valganciclovir vs. Oral ganciclovir cytomegalovirus disease in renal allograft
for prevention of cytomegalovirus disease recepients. Transplantation 2004; 77: 1460.
in solid organ transplant recipients. Am J 97. STRIPPOLI GF, HODSON EM, JONES CJ, CRAIG JC.
Transplant 2004; 4: 611-620. Pre-emptive treatment for cytomegalovirus
88. KLETZMAYR J, KREUZWIESER E, WATKINS-RIEDEL T, viraemia to prevent cytomegalovirus dis-
BERLAKOVICH G, KOVARIK J, KLAUSER R. Long- ease in solid organ transplant recipients.
term oral ganciclovir prophylaxis for pre- Cochrane Darabase Syst Rev 2006; 25:
vention of cytomegalovirus infection and CD005133.
disease in cytomegalovirus high-risk renal 98. PAYA CV, WILSON JA, ESPY MJ, SIA IG, DEBERNAR-
transplant recipients [In Process Citation]. DI MJ, SMITH TF et al. Pre-emptive use of gan-
Transplantation 2000; 70: 1174. ciclovir to prevent cytomegalovirus infec-
89. FLECHNER SM, AVERY RK, FISHER R, MASTROIAN- tion in liver transplant patients: A
NI BA, PAPAJCIK DA, O´MALLEY KJ et al. A ran- randomized, placebo-controlled trial. J
domized prospective controlled trial of Infect Dis 2002; 185: 854-860.
acyclovir versus oral ganciclovir for 99. HEBART H, KANZ L, JAHN G, EINSELE H. Manage-
cytomegalovirus prophylaxis in high-risk ment of cytomegalovirus infection after
kidney transplant recipients. Transplanta- solid-organ or stem-cell transplantation.
tion 1998; 66: 1682. Current guidelines and future prospects.
90. WINSTON DJ, BUSUTTIL RW. Randomized con- Drugs 1998; 55: 59-72.
trolled trial of oral ganciclovir versus oral acy- 100. MYLONAKIS E, KALLAS WM, FISHMAN JA. Combi-
clovir after induction with intravenous ganci- nation antiviral therapy for ganciclovir-
clovir for long-term prophylaxis of resistant cytomegalovirus infection in
cytomegalovirus disease in cytomegalovirus- solid-organ transplant recipients. Clin
seropositive liver transplant patients. Trans- Infect Dis 2002; 34: 1337-1341.
plantation 2003; 75: 229-233.
101. BABEL N, GABDRAKHMANOVA L, JUERGENSEN JS,
91. GANE E, SALIBA F, VALDECASAS GJ, O´GRADY J, EIBL N, HOERSTRUP J, HAMMER M et al. Treat-
PESCOVITZ MD, LYMAN S et al. Randomised trial ment of cytomegalovirus disease with val-
of efficacy and safety of oral ganciclovir in ganciclovir in renal transplant recipients: A
the prevention of cytomegalovirus disease single center experience. Transplantation
in liver-transplant recipients. The Oral Gan- 2004; 78: 283-285.
ciclovir International Transplantation Study 102. SMITH IL, CHERRINGTON JM, JILES RE, FULLER
Group. Lancet 1997; 350: 1729. MD, FREEMAN WR, SPECTOR SA. High-level
92. WINSTON DJ, BUSUTTIL RW. Randomized con- resistance of cytomegalovirus to ganci-
trolled trial of sequential intravenous and clovir is associated with alterations in both
oral ganciclovir versus prolonged intra- the UL97 and DNA Polymerase genes. J
venous ganciclovir for long-term prophylax- Infect Dis 1997; 176: 69-77.
is of cytomegalovirus disease in high-risk 103. SULLIVAN JL, WODA BA, HERROD HG, KOH G,
cytomegalovirus-seronegative liver trans- RIVARA FP, MULDER C. Epstein-Barr virus asso-
plant recipients with cytomegalovirus- ciated hemophagocytic symdrome: Virolog-
seropositive donors. Transplantation 2004; ical and immunopathological studies.
77: 305-308. Blood 1985; 65: 1097.
93. RAYMUND RR. Management of CMV infection 104. KHATRI VP, BAIOCCHI RA, PENG R, OBERKIRCHER
and disease in transplant patients. Herpes AR, DOLCE JM, WARD PM et al. Endogenous
2004; 11: 77-86. CD8+ T cell expansion during regression of
94. KNIGHT DA, HEJMANOWSKI AQ, DIERKSHEIDE JE, monoclonal EBV-associated post-trans-
WILLIAMS JW, CHONG AS, WALDMAN WJ. Inhibi- plant lymphoproliferative disorder. J
tion of herpes simplex virus type 1 by the Immunol 1999; 163: 500-506.
experimental immunosuppressive agent 105. MILPIED N, VASSEUR B, PARQUET N, GARNIER JL,
leflunomide. Transplantation 2001; 71: 170. ANTOINE C, QUARTIER P et al. Humanized anti-
95. WALDMAN WJ, KNIGHT DA, LURAIN NS, MILLER CD20 monoclonal antibody (Rituximab) in
DM, SEDMAK DD, WILLIAMS JW et al. Novel post transplant B-lymphoprolifetaive disor-
mechanism of inhibition of cytomegalovirus der: a retrospective analysis of 32 patients.
by the experimental immunosuppressive Ann Oncol 2000; 11: 113-116.
agent leflunomide. Transplantation 1999; 68: 106. HADDAD E, PACZESNY S, LEBLOND V, SEIGNEURIN
814. JM, STERN M, ACHKAR A et al. Treatment of B-
patients: A randomized trial of high versus ents. Cochrane Darabase Syst Rev 2004; 3:
reduced dose and determination of the CD004291.
value of maintenance therapy. Am J Med 135. DREW RH, DODDS ASHLEY E, BENJAMIN DK JR,
2002; 112: 369-379. DUANE DAVIS R, PALMER SM, PERFECT JR. Com-
128.Guidelines for preventing opportunistic infec- parative safety of amphotericin B lipid com-
tions among hematopoietic stem cell trans- plex and amphotericin B deoxycholate as
plant recipients. Biol Blood Marrow Trans- aerosolized antifungal prophylaxis in lung-
plant 2000; 6:659713, 715, 717-727, 729-733. transplant recipients. Transplantation
129. MARR KA, CRIPPA F, LEISENRING W, HOYLE M, 2004; 77: 232-237.
BOECKH M, BALAJEE SA et al. Itraconazole ver- 136. GAVALDÁ J, LÓPEZ P, MARTÍN MT, GOMIS X,
sus fluconazole for prevention og fungal RAMÍREZ JL, PAHISSA A. Eficacia de la anfo-
infections in patients receiving allogenic tericina B liposomal nebulizada en el
stem cell transplants. Blood 2004; 103: tratamiento de la aspergilosis pulmonar
1527-1533. experimental. Enferm Infecc Microbiol Clin
130. VAN BURIK JA, RATANATHARATHORN V, STEPAN DE, 2004; 22: 126.
MILLER CB, LIPTON JH, VESOLE DH et al. Mica- 137. HAMACHER J, SPILIOPOULOS A, KURT AM, NICOD
fungin versus fluconazole for prophylaxis LP. Pre-emptive therapy with azoles in lung
against invasive fungal infections during transplant patients. Geneva Lung Trans-
neutropenia in patients undergoing plantation Group. Eur Respir J 1999; 13: 180.
hematopoietic stem cell transplantation. 138. MINARI A, HUSNI R, AVERY RK, LONGWORTH DL,
Clin Infect Dis 2004; 39: 1407-1416. DECAMP M, BERTIN M et al. The incidence of
131. ROUSEY SR, RUSSLER S, GOTTLIEB M, ASH RC. invasive aspergillosis among solid organ
Low-dose amphotericin B prophylaxis transplant recipients and implications for
against invasive Aspergillus infections in prophylaxis in lung transplants. Transpl
allogeneic marrow transplantation. Am J Infect Dis 2002; 4: 195.
Med 1991; 91: 484. 139. FISHMAN JA. Prevention of infection caused
132. O’DONNELL M, SCHMIDT GM, TEGTMEIER BR, by Pneumocystis carinii in transplant recip-
FAUCETT C, FAEHY JL, ITO J et al. Prediction of ients. Clin Infect Dis 2001; 33:1397-405.
systemic fungal infection in allogeneic mar- 140. GORDON SM, LAROSA SP, KALMADI S, ARROLIGA
row recipients: Impact of amphotericin pro- AC, AVERY RK, TRUESDELL-LAROSA L et al.
phylaxis in high-risk patients. J Clin Oncol Should prophylaxis for Pneumocystis
1994; 12: 827. carinii pneumonia in solid organ transplant
133. UZUN O, ANAISSIE EJ. Antifungal prophylaxis recipients ever be discontinued? Clin Infect
in patients with hematologic malignancies: Dis 1999; 28: 240.
a reappraisal. Blood 1995; 86: 2063. 141. GURGUÍ, M. Recomendaciones de vacu-
134. PLAYFORD EG, WEBSTER AC, SORELL TC, CRAIG nación en pacientes adultos sometidos a
JC. Antifungal agents for preventing fungal trasplante de órgano sólido (documento
infections in solid organ transplant recipi- interno). SEIMC, 2006.