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LETRAS-

UNIDAD 1 UNIVERSIDAD NACIONAL DE CUYO

FACULTAD DE FILOSOFIA Y LETRAS

TEORÍA LITERARIA
PÁG. 15 A 27 CRÍTICA Y TEXTUALIDAD

"CESARE SEGRE"
Grupo de Estudios sobre la Critica Literaria

8 (COPIAS) Boletín G. E. C.
\.° 9-10

Mendoza Rep. Argentina


CRÍTICA Y. TEXTUALIDAD

Ponencia leída 'en el XVI Congreso AISLLI -Associazione intemazionale


per gii Studi di Lirigua e Letteratura Italiana- realizado en Los Angeles,.
UCLA, octubre 1997, cuyo tema fue "La metamorfosis del texto y la
textualidad de la crítica". Traducción: Gloria Galli de Ortega.

1, Le cultura multimedial está provocando Una . gran


.atomización en ese conjunto de textos que llamarnos. literatura.
• Toda una literatura nacional puede ahora ser archivada én un CD-
RonlaPertír.deia, selección:: de. obras y depárrafos, lo que puede
también resultar una condena a muerte para la obra y el párrafo
que han sido omitidbs. También una obra puede.ser archivada en
un CD-Rom con enorme ventaja para los estudios lexicales y la
posibilidad de realizar análisis comparativos intertextuales pero, en
este caso, se corre el riesgo -de perder la unidad .y la personalidad
del texto. Si nos remitirnos a un panorama más amplio, sabemos
que Internet nos. ofrece una miríada, una polvareda de noticias no
verificadas ni ordenadaS'en una relación racional pero un. espíritu
bien dotado sabrá encontrar los elementos genúinos en función de
una determinada búsqueda. Y si no deben silenciarse las ventajas
cognoscitivas dé estos adelantos técnicos, tampoco debernos
desconocer que una masa de lectores podría caer en la atonía y
finalmente, en la desesperación por la incapacidad' de elegir
info-rmación.
También en la crítica :y en la filología se asiste a
fenómenos en buena parte análogos. El desconstruccionismo,
todavía no superado a pesar de su aparente crisis, reconoce, mas

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aún, celebra como único resultado de la actividad crítica la a una discusión, sin sentido: un mundo de polvo en el que algún
sustitución de un discursó, el del escritor, por otro, el del crítico. Y reflector bien dirigido pueda quizás sacar algún brillo efímero. No
corno también el lector del crítico sintetiza en discursos el discurso nos darnos cuenta de que este polvo es probablemente ése al cual
del crítico, se inicia una dispersión ehtrópíca en la cual al discurso todos retornaremos, pulvís et umbra. Lo Más tarde posible. ,
del escritor se le puede reconocer` solamente la función de
pretexto inicial. Semejantes considerabiones, es evidente, se 2. Deseo dedicar a la crítica estas palabras de apertura en
podrían adelantar también en lo que respecta al discurso moral o -nuestro Congreso. Una actividad difícil de clasificar incluso porque
histórito y se podrá comprender así cómo es posible que estos se presenta extremadamente diferenciada.
discursos terminen por enterrar toda verdad y todo principio bajo Por una elección personal que me considero emgrado de
una atomización de discursos Y hasta se podría pensar que la defender en el plano teórico, quiero excluir antetodo al crítico-cuco
palabra discurso está muy próxima a charla, cháchara, vaniloquo, o cuclillo, el que entra en competencia con el autor de que se
incluso, parloteo.. ocupa y presume de dar a su obra una exposición más refinada y
Distinto pero convergente el desastre que puede provocar coherente. El crítico cuco es un•escritor disimulado, envidioso del
la así llamada nueva filología: En general se puede decir que la escritor verdadero y decidido a quitarle su lugar -esto es, a sustituir
nueva filología intenta remover o de hecho ignora, las bases más la página del escritor por la suya. Semejante a él es el crítico-pavo
sólidas de la filología de todos los tiempos, desde la antigüedad a real, para quien la obra, cualquiera ella sea, puede y debe ser
nuestros días: el análisis lingüístico, la lógica y la inducción rebajada a pretexto de las creaciones con las cuales ,podrá
convergentes en la restauración textual. En este caso mucho de ostentar los colores de la propia fantasía, Dejaré de lado también
la nueva filología constituye solo una autodefensa de su falta de al crítico-camaleón que cree que el modo más adecuado de hablar
competencia, En directa. referencia a la crítica' textual, Irle parece de una obra es imitar su estilo o impostación; si bien
 significante el enorme ,exito del concepto de "mouvance" de reconocemos que un cierto mimetismo con el objeto de estudio es
los textos.. Bajo la etiqueta de mouvance se recoge el conjunto de las inevitable, inofensivo y hasta conveniente. Obviamente no me
variantes de un texto, aquellas sobre las cuales se puede apoyar ocuparé del crítico-efímera, .el de los diarios, que cumple, su
un análisis ecdótico serio., Pero ahí donde el verdadero filólogo función -utilísima- de señalar las obras apenas publicadas y
comienza a valorar la autenticidad,, la compatibilidad, el valor propone una valoración extemporánea. En este caso la necesaria
significativo de cada variante., intentando después rastrear tempestividad y la penuria de espacio impiden la . motivación
gradualmente y • con verificaciones • 'continuas una serie de adecuada de una consideración efímera.
relaciones, el nuevo filólogo usa la diferenCia.entre las variantes En conclusión, me ocuparé de.la crítica que describe la
corno manifestación de una tendencia incontrolable hacia la obra literaria, que la coloca én su contexto histórico y emite un
pulverización y concluye con una declaración, negligente pero juicio de valor. Esta crítica -por lo demás, como las formas
cómoda, de capitulación, mencionadas- se expresa mediante textos. En una primera
No son diferentes las consideraciones que se podrían hacer en aproximación se puede decir que se trata de textos en los que se
otros ámbitos, desde el peripdismo a la 1:l'orifica. Sería lícito habla de otros textos, las obras literarias, un estatuto no muy fácil
concluir que el hombre de hoy, habiendo rechazado padres y de disponer en la tipología de los textos, en lá Texttypologie. El
maestros, creencias e ideologiás, está debatiéndose en un
mundo donde una noticia tiene el mismo valor que otra; donde, al
ignorar cualquier juicio moral, todo se ha vuelto igual a todo y no
existen verdades sino opiniones, igualmente disponibles al debate o

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texto del crítico (no digo texto crítico para no confundirlo con la 1  critico es un lector especialmente preparado (o cree serio),
edición crítica, reconstruida con procedimientos bien conocidos), 3
que expone su propia lectura y•los significados que ha 'obtenido.
está bastante distante del texto literario por lo que puede aspirar Por eso se puede decir que cualquier operación crítica supone
a cierta autonomía pero no _tanto como para prescindir de su una relación texto-lector y que un análisis textual "puro" no
existencia. existe.
La crítica comunica los resultados 'de una lectura del texto 3.No es el caso de preguntarse ahora qué es un texto
literario con propósitos que se pueden reducir a esta alternativa. literario. Sin embargo, vale la pena tener presente algunas de sus
fundamental: 1.encaminar al lector del texto del crítico a la primera propiedades que justifiquen la operación crítica. Señalo al menos
lectura del texto literario; 2. proponer una lectura del texto literario las siguientes: tel texto' literario debe .estar provisto de sig:.
distinta o de mayor profundidad de la ya .operada por el lector, nificacios; 2. estar destinado a comunicar sus significados al lector
quien podrá comparar las conclusiones por él obtenidas con las o receptor a través de procesos de publicación; 3. ser considerado
del crítico. Para dar ti na idea de .la._garna _de . pos ib :diré- que - obra de arte, porsu conformación formal y por la ausencia de finé
el comentario, que idealmente adhiere a la sucesión de palabras prácticos inmediatos; 4. estar en grado de provocar reacciones
y oraciones del texto literario, está mucho más cerca a éste que positivas o negativas en la lectura, de goce p de participación.
,el textp „del crítico. Tanto que Genette habla de .paratexto a El crítico, al leer el texto, sigue mental o materialmente una
proOóSitó .del comentario.
 acción de expolio o develamiento, lexical o sintáctico,
En resumen, el texto del crítico remite al texto literario sin semántico o simbólico. Al . mismo tiempo identifica los
depender de él nada más que en el sentido de que, a falta del elementos del
. 'a. texto literario, -el texto del críticaino tendría razón de existir: este  contenido que en su conjúnto constituyen. la trama .si el texto es
tipo de relación se evidencia por la mediación de la lectura: el texto narrativo o, en caso contrario, la estructura ideal del texto. En un
del crítico supone que el crítico haya leído el texto del que habla. segundo rnómento, el crítico constituye el propio discúrso
Es sintomática la frecuencia con que se citan párrafos del texto ordenando, según la propia interpretación, los datos recogidos
 . estudiado, como para ponerbajo los ojos del lector los precedentemente. En esta etapa el crítico se remite a los procesos
fragmentos más hermosos o representativOs o para engullirlq a, de significación que ha individualizado y que ahora evidencia y
mejor aún, reordertaaoperando según la dialéctica texto-intérprete, sin la cual
 fagocitarlo. La naturaleza libre, es decir, no obligada de la lectura no se da signifiCación. Los dos momentos son sólo idealmente
 y la no necesidad de sacar de esta lectura una obra crítica dan la sucesivos porque el buen Orifico continúa confrontando la
medida de la independencia • del texto del crítico frente al texto reconstrucción personal con el texto literario y mociific.ándola según .
: literario. En síntesis: el texto del crítico supone, .sin depender de las sucesivas perspectivas. '
él, el texto literario del que en parte se posesiona pero el texto
literario no supone el texto del _crítico. De estos dos momentos; el primero es una especie de
desmontaje parecido al realizado por un ordenador y en parte, hoy;
De inmediato adelanto una observación olvidada por loa. posible para un ordenador. :pi se lograra construir un ordenador
teóricos pero para mí importante. Actualmente está de moda
contraponer a una interpretación estructural, que estaría orientada
sobre el texto, una interpretación readed oriented. No discuto las 18
proporciones ponderativas entre el aperte•."del lector o de los
lectores y el aporte del texto en la crítica reader ofiented, Me
interesa en cambio subrayar enseguida que quien hable del texto
3
habla de la propia lectura del texto. El texto es un puro5bjeto
gráfico hasta que opera en él la interpretación de un lector. El
r A :esta relación de dos -crítico-
más inteligente, las operaciones de esta primera etapa podrían ser texto- sigue una relación de tres
automatizadas aún más. Pero es necesario afirmar can precisión lector, críticottexto-. En realidad,
que también el desmontaje es una operación hermenéutica y por teniendo en consideración una
complicación inevitable, se
elló mismo no se puede delegar del todo en un instrumento. Por ponen en relación las
esta razón los eventuales auxiliares técnicos no resquebrajan operaciones semánticas
para nada la peculiaridad del verdadero quehacer critico, que actuadas en la relación texto
coincide: con el de la segunda etapa. Conviene reflexionar sobre literario/crítico como lector con
la importancia de la primera fase porque es ella la que garantiza aquellas surgidas de, la relación
texto del críticoflector y,
la consistencia y la autoridad de los materiales con los que opera finalmente, las surgidas de la
el crítico. También considerar que la recopilación de los materiales relación texto literario/lector.
se ha ido•haciendo en función de una hipótesis de trabajo: ninguna Nuestras mentes son a
norma a priori püede guiar el expolio. lDiligencia y libertad inventiva menudo llevadas a
operaciones igualmente
están en acción desde un primer momento. acrobáticas sin que se den
Seria cómodo pero erróneo afirmar que la segunda etapa cuenta. Dicen que si los caballos
appya totalmente en la libertad inventiva. La segunda fase es ésa pensaran en el movimiento de
sus patas, no serían capaces de
en la que [a hipótesis de trabajo se coteja permanentemente con correr; no hablemos de los
el texto literario concreto como estructura de significados. Por lo ciempiés.
mismo en, ella el trítleo descarta progresivamente todas las 4. Para algunos estudiosos el desmontaje del texto. literario,
suposiciones desmentidas por el análisit . atento del texto'. La durante el análisis, da lugar a un jniertexto. Utilizo este significado
libertad reside en las' modalidades de exposición que se abren en 'por comodidad, consciente de que cada uno de nosotros usa el
un abanico ilimitado y en el cual la:personalidad del crítico tiene la término con distinto valor, porque también existe una ambiguación
oportunidad de revelarse en pleno. Aquí el crítico puede también de los límites sémicos de la terminología. Si se acepta mí
optar por una exposición fría y distante o entusiasta y definición no puedo menos que proponer a ustedes otro intertexto
comprometida; puede forzar el texto literario en una jaula rígida o más complicado: ése en el cual el intertexto del texto literario se
realizar un remedo, a veces imperceptible, de sus mismos transfiere al interior del intertexto del texto del crítico, Incluso
procedimientos.' pretcindiendo de estas complicaciones expositivas, bastante
El texto del crítico será sometido por el lector a un análisis antipáticas, me parece evidente que quien lee un ensayo crítico se
muy semejante, esto es a un desmontaje más o menos atrevido, mueve en un espacio en que están dispuestos elementos de la
seguido de un montaje tendiente a una interpretación global que obra literaria analizada por el crítico y elementos del texto
debería hacer converger, en el caso más feliz, cuanto ha obtenido trabajado por el mismo crítico; y el resultado de estos, movimientos
ei lector con la intepretación del crítico. Y también esta vez se, será un juicio que supone tanto el texto del crítico, consideradp en
realizan cotejos entre la hipótesis de trabajo del lector y la realidad relación con la obra literaria, cuanto el texto literario, considerado
del • texto del crítico. Pero entra en juego un tercer punto de en dialéctica con el texto del crítico.
referencia, fundamental, dominante: el mismo texto literario. El Se advierte que hasta este momento he hablado de la obra
trabajo interpretativo ya no será intratextuai sino intertextual. Y la literaria como de un texto. Generalmente la crítica acepta esta
comprensión del texto del crítico recibe la influencia de la definición, incluso cuando se divide ante el hecho de valorar la
importancia de los elementos extratextuales, biográficos,
20 comprensión simultánea o la históricos, contextuales, etc. Algunos' consideran que se perciben
reconsideración del texto literaño.
en el texto; otros, que el texto se comprende solamente a la luz del
extratexto.Dejo pendiente esta discusión porque nos espera una
cuestión más importante.
Desde hace unos cincuenta años en Italia y unos veinte en
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Alemania y en Francia, un nuevo tipo de critica ha colocado la discurso crítico que he intentado antes. Habíamos hablado de un
obra *literaria en .-una visión dinámica que pone en duda la intertexto como base sobre la quai apoyar el acto hermenéutica.
configuración textual. lile refiera p la crítiCa de las variantes á Ahora que al intertexto se acompañan -por llamarlas de algún
crítica genética. En este caso el texto se revela como el resultado; Modo- las fases genéticas, valores y significados resultan
teóricamente siempre provisorio, de una sucesión infinita de
 develados en todo o en parte por esa orientación de
transformaciones. No se puede negar que el conocimiento
las operaciones de decodificacjón qué, cómo he dicho, señalan
estas transformaciones cobra valor a partir de nuestra
los materiales del escritor con.su Misma conformación, Es cierto
comprensión, aún cuando Cróce lo negara, Por otra parte no se que nos encontramos lanzados más allá del esquema
puede sostener que por transformaciones anteriores se deba expositivo mínimo, que acercaba el texto del crítico al texto
deducir la obligación de considerarla obra literaria inmersa.en un literario, con la función .de dilucidar. Esta .vez el crítico se
dinamismo sin tregua. En efecto, considero que cada fas_e de sumerge en el movimiento de /as transformaciones y Ofrece un
elaboración constituye en si un .texto'y que la historia textual de texto todavía vibrante per las transformaCiones que he intentado
una obra se resuelve en una sucesión de textos, cada uno de los aprehender.
cuales es analizable en si mismo y entre los cuales el último Esta atención a las transformaciones que se ha acentuado
puede ser considerado definitivo solamente porque no le sigue otra recientemente encierra en sí posibilidades todavía no exploradas,.
reelabaración. El punto de arribo necesario para la cuestión es el quizás apenas percibidas. Para explicarme me remitiré a la idea .
siguiente: para comprender el texto resulta útil el conocimiento de que muchos tienen del texto literario como una unidad alcanzada
los textos que lo procedieron. Esto nos lleva a integrar `el intertexto prodigiosamente, por la Tuerza • del. estilo y del compromiso.
horizontal, el de la obra definitiva, con el intertexto' vertical, el de intertextual', una unidad de experiencias de la realidad por una
sus etapas genéticas. parte, de utopiat y profecías por Otra_ Es una idea que sintetiza• de
Pero si es verdad que el dinamismo de las fases manera apresurada, quizás también superficial pero eficazmente,
pretextuales no resquebraja la naturaleza del texto de la obra  el conjunto de operaciones por las que una obra literaria grande
literaria, también se reconoce -que el conocimiento del pretexto a menor se desarrolla. Es verdad que la elaboración del texto
puede constituir, además, un aporte -crítico, • .un recorrido constituye el resultado de aria serie« de procesos mentales que
hermenéutico. Siempre se comprende mejor el producto en implican, y quizás buscan aclarar, problemas de conocimiento del
relación con la producción. En el caso de la literatura podernos mundo y formular esbozos de propuestas o temores del futuro: Y
afirmar que el pretexto, al ofrecernos algunas fases de bien, las etapas pretextuales de una obra abrazan también
elaboración del texto parcializada o en su conjunto, nos permite muchos trechos de esos procesas mentales que después serán
reconocer la orientación que ha guiado los movimientos del .
pulidos y depurados y a menudo omitidos, en el texto final.
escritor -.quizás" con desviaciones e incertidumbres-, hacia la Entonces el estudio genético nos ofrece materiales preciosos para
.

escritura o formulación definitiva consagrada por el texto la comprensión de los prOCedimientos de fiteraturalización de los
contenidos.
resultante. Escritura y formulación implican obviamente
significaciones. Así el dinamismo de la producción del texto Así podemos darnos cuenta de que el análisis genético de
favorece y orienta el dinamismo del intérprete. la obra es una maneraosofisticada pero convincente, de confirmar
5. Estas consideraciones sobre el dinamismo de la
, una concepción de la obra literaria no material y no. abstracta, no
interpretación no complican, a mf parecer, la descripción del contenidista ni formalista. Con un movimiento exactamente

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opuesto al de. la desconstruc:ción ó de la pulverización; nosotros
logramos, con las pruebas brindadas por la crítica genética, propia invención literaria.
confirmar la fortísima compactibilidad estructural del texto literario, Privilegiando con su atención una
vez al autor y otra al texto y otra
mostrando a los observadores no prevenidos su predominante e vez al lector, la crítica
inconfundible personalidad. Pero al mismo tiempo rechazamos una frecuentemente ha reducido su
concepción exclusiva de la textualidad, esto es, su aislamiento de propio ámbito de búsqueda, que
la realidad, su valor de absoluto. solamente puede ser ubicado en
el triángulo autor-texto-lector.
-

Simétrico al dinamismo de las etapas genéticas es el de


las etapas de la recepción. Aludo a las reelaboraciones en otra Buena parte de los inconvenientes encontrados en la
género o con medios comunicativos diferentes: el pasaje de la actividad de los críticos depende de la poca profundización en la
oralidad a la escritura y viceversa, el pasaje de una novela a texto naturaleza y la jerarquía de los significados. Cuando el lector lee
teatral o cinematográfico, de descripción literaria a figuración el texto, fonema a fonema, .sintagma a sintagma, enunciado a
pictórica o escultórica, de la palabra a la música. El mundo de la enunciado, totaliza progresivamente series de significados siempre
multimedialidad multiplica los desarrollos Posibles. En este bazar más amplias hasta alcanzar ése que considera significado global
nos movemos por lo general valorando la mayor o menor fidelidad -o sentido de la obra. Se. trata dé un trabajo'de tipo hermenéutica
con respecto del original y los eventuales enriqúecirnientos que se separa progresivamente de la literariedad del texto. Lo que
creativos. Aquí quiero señalar solamente que también este tipo de podría y puede impedir que avance sobre la tangente de la propia
fortieben ofrece la ocasión para eficaces ejercicios críticos. Cada fantasía, realizando una "crítica salvaje", es el continuo control de
cambio con respecto de los significados explícitos del texto la letra del texto. Por ejemplo, teniendo en consideración las
znztitOP.:1 enapropuesta,.;una aclaración verdadera o presunta. El conjeturas hermenéuticas formuladas después de la primera
critico puede entonces asomarse con utilidad a este fortlebén tan tranche de leptura.corro hipótesis de trabajo, que deben evaluarse
e~siastacomo subrepticio. Precisamente ésta es la propuesta durante el resto de la lectura o controlándolas con las relaciones
de la teoría de la recepción que, sin embargo, comete el error de
7'.
entre campos semánticos y lexicales, con la impostación de los
dejarse llevar sin más al terreno de las elaboraciones en lugar de discursos o de los ritmos y así sucesivamente.
comParar estas elaboraciones con el texto arquetipo. No es lícito ¿Y la voluntad del autor?. Porque el autor ha puesto en
que ella ofrezca deducciones a partir de valoracioneá reciprocas marcha una compleja, a veces titánica construcción de
mientras puede extraer, contrastivamente, muchas considera- significados a partir de los parámetros de tu epoca. Si el lector
ciones que haden a la intepretación. pertenece a otra época o a otra cultura, puede encontrarse en la
6. Al dedicar este trabajo a. la textualidad de la crítica me situación de atravesar esta construcción según enfoques
proponía precisar qué tipo de texto es el que logra el crítico. Pero imprevistos e imprevisibles y por lo mismo descubrir significados
ha sucedido que la demostración nos ha llevado a detenernos en no calculados por el autor. Tiempo y espacio enriquecen al infinito
particularidades del texto literario que trascienden su textualidad nuestra capacidad de captar significados.. Es importante que
final, la de la obra ne varietur. Así hemos reflexionado otra vez nuestra mirada siga atravesando la construcción de significados
sobre la textualidad del texto literario. Algunas conclusiones me de origen, más aún, conociendola cada vez mejor y que excluya
parece que se pueden dar por sentadas. Por ejemplo, que el texto cualquier conjetura que ponga en duda la construcción.
expresa sus propios significados sólo cuando se somete a la Demasiado a menudo los críticos, y no sólo los desconstruc-
lectura. Pero si bien los significados son revelados por una cionistae, crean discursos sobre discursos sin ese permanente
volver al texto que debería ser el primer mandamiento del crítico.
24 relación texto-lector, no se
puede prescindir del autor que ha 25
hecho brotar esos significados de la
No quiero hacer una defensa del sensus &latáis. Pero literarios. Y no me desagrada que en el encarnizamiento
,

quiero recordar un principio linguístico fundarnental que muchos . irrefrenable de los mass media, en el triunfo de la virtualidad, en
han olvidado: significante y significado son inseparables: Cualquier la superposición ensordecedora de voces y palabras ahora
obra es, en primerísima instancia, la sucesión de significantes que
desangradas de sentido, haya disciplinas que contengan una
la constituyen. Cualquier cambió, aunque mínimo, de los
enseñanza ideontológica mas que metodológica.
significantes la cambiaría del todo. Si Ariosto hubiera dejado su
texto como fue publiCado en 151$ o en 1521, los críticos hablarían
Cesare Segre
de un Orlando Furioso bien distinto del que ahora estudian. Si
Leopardi hubiera dejado escrito "Del celeste confine" en lugar de
"De . 1 orizzonte" o .bien . '"Fra questalimmensitate íl rnio
pan:31er s'annega" en lugar de "tra quéstal knrnensitá s'annega íl
pensíer mío", El infinito Sería interpretado de otro modo.muy
distinto dé como se hace. Los significados es verdad proliferan
incesantemente pero proliferan a partir de un determinado texto y
solamente de éste.
Pido excusas si, como estudioso de crítica textual, utilizaré
metafóricamente mis instrumentos de búsqueda para reforzar lo
que he dicho hasta ahora Nosotros podemos ver la proliferación
de los signifibados corno una arborescencia que se va extendiendo
cada vez" m ás a partir del texto literario: un árbol que sigue
_

creciendo.. Es verdad que hay ramas secas o ramas enteras que


constituyen desarrollos dañinos y hasta mortales. Este árbol
enerme será recorrido hacia. atrás, hacia el texto base, hacia 'su
realidad significante, como hace la crítica textual o ecdótica. En
• efecto, la ecdótiCa, una vez reconstruida la genealogía de los
manuscritos, remonta gradualmente los núcleos principales de la
tradición hasta acercarse al arquetipo, tachando mentalmente ,
p-ero 'respetándolas como documentos de la recepción- las
variantes erróneas o no genuinas. Finalmente, nos entrega el
texto, a veces marcado o quebrado por el tiempo pero digne de
, veneración porque todavía conserva su aspecto originario.
El texto es nuestro único bien. Ninguna de nuestras
consideraciones por brillante o sugestiva que fuere puede valer o
significar más que el texto en su Majestad. Esta majestad coincide
con la verdad, que es nuestro 'deber bulcar con emPeño, en él
texto y en cualquier parte. Podría ser éste el primer mandamiento
en una especie de juramento de Hipócrates de los críticos
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