EL JUDO EN LAS ORGANIZACIONES

“La disciplina del atleta olímpico, aplicada al ámbito laboral, permite establecer objetivos concretos y aprovechar al
máximo el tiempo, fijando prioridades y poniendo el foco en lo importante”. Los expertos en judo nos enseñan cómo
aprovechar los principios del arte marcial en el desarrollo de una carrera profesional. Este deporte crea una actitud
mental positiva y un deseo de aprender y perfeccionarse de un modo incesante. La técnica de “visualización”, basada
en imaginar, paso a paso, la obtención de los objetivos propuestos, aumenta el rendimiento físico y mental.
Algunas lecciones:
1. La disciplina del atleta olímpico, aplicada al ámbito laboral, permite establecer objetivos concretos y aprovechar
al máximo el tiempo, fijando prioridades y poniendo el foco en lo importante. Además, la "visualización"
aumenta el rendimiento físico y mental.

2. Como saben los deportistas, esa técnica consiste en imaginar, paso a paso, que se consiguen los objetivos
propuestos, sin visualizar jamás las posibles fallas o equivocaciones. También hay que pensar en las
recompensas asociadas al logro de las metas.

3. En el mundo corporativo es muy difícil encontrar estímulos que produzcan las satisfacciones emocionales y
físicas experimentadas por los atletas en las competencias. Se recomienda equilibrar el trabajo con otras
actividades personales placenteras.
4. La actitud mental positiva, es básica, impulsa a los atletas a sobresalir, tanto en el judo como en cualquier otro
deporte. Al hablar de actitud mental positiva me refiero al deseo de mejorar, aprender y perfeccionarse
continuamente. Por otra parte, para llegar a la cima de una carrera corporativa hay que trabajar duro y
sacrificarse; igual que en el mundo del deporte, puesto que todo atleta empieza desde abajo, como
aprendiz.
5. Una de las premisas filosóficas del judo es el bien común. En su forma más simple, podría traducirse en que todos
los participantes de una práctica o competencia logren beneficiarse. Cuando se ejercita con alguien de nivel
intermedio, por ejemplo, se está mas relajado y se practican técnicas que se quieren mejorar; por su lado, el
oponente puede aprender de la experiencia del atleta olímpico, y descubrir lo que se hace en determinadas
situaciones o como ejecuta ciertas técnicas. Ambos se beneficiamos. Es obvio que, en los torneos, se compite para
ganar. Pero si bien ganar es importante, no es lo fundamental. Los objetivos supremos son el desarrollo personal y
tratar de ser mejor; seguramente habrᇠderrotas en el camino, pero serán experiencias de aprendizaje.
6. Suele decirse que los deportes son 90 por ciento mentales y 10 por ciento físicos. Al llegar a cierto nivel, la
actitud mental frente al juego es crítica; es la cualidad que distingue a quienes ganan y cumplen su sueño, de los
que nunca lo logran. Incorporar Žla técnica de visualización en el entrenamiento es fundamental. Básicamente, lo
que se ha de hacer es reforzar lo positivo, deshacerse de lo negativo y, algunas semanas antes de un torneo,
visualizar el juego y el triunfo. Lo mismo aplica en las organizaciones y en el desarrollo personal.
7. Reforzar lo positivo es visualizar la victoria: en judo es derrotar al oponente, tirarlo al piso, sujetarlo.
Y deshacerse de lo negativo es no imaginar la propia derrota o las equivocaciones. Más aun: ni siquiera hay que
pensar en "queŽpasaría si el oponente me hiciera cierta toma y lograra derribarme". Nunca imaginamos lo que
podría fallar; por el contrario, siempre nos vemos fuertes y ganadores. Todos los días, un mes antes de un torneo,

Ing. MDO Joel Estrada Estrada

conviene en ciertos momentos cerrar los ojos y visualizar la competencia, caminar mentalmente por los corredores,
hacerlo en vivo también, pero entonces se logra sentirse positivo y visualizar que se logra el objetivo, claro que
esto ayuda; es como si la mente le dijera al cuerpo que ganar es posible, y el cuerpo respondiera rindiendo al
máximo.
En las empresas pasa lo mismo. Un ejemplo: Digamos que los objetivos de ventas son el aumento de los ingresos
o el cierre de una operación importante. Entonces, el vendedor deberá imaginar que alcanza su meta, empezando
por visualizar desde la primera llamada telefónica a un cliente potencial, su visita a ese cliente, la demostración del
producto, la respuesta afirmativa del comprador, el entusiasmo por cerrar la transacción, etcétera. Por otra parte,
también hay que imaginarse las recompensas de haber alcanzado el objetivo propuesto: el reconocimiento del jefe,
el aumento del sueldo gracias a las mayores comisiones y el sentimiento de realización, entre otros.
Si se investiga mas a fondo acerca del judo y su filosofía, se pueden comprender principios generales y aplicarlos
a situaciones específicas, no solo en el campo del desarrollo personal, sino también de las organizaciones y de las
relaciones interpersonales, para mejorar los procesos de negociación, de logro de metas, de superar retos.

Ing. MDO Joel Estrada Estrada