Una vez aplicado el vendaje lo más importante a la hora de valorar la
correcta colocación de la inmovilización es la comodidad de¡ paciente. Si el paciente se queja debe sustituirse y comenzar de nuevo con otro vendaje. Por este motivo se le pedirá que espere unos 20 minutos fuera de la consulta para darle tiempo a probar su vendaje y comprobar si se siente como con el y no nota rozamiento o compresión en alguna zona. Debemos dejar la puerta abierta al paciente para que acuda ante la más mínima molestia, volviendo a explorarlo y sustituir el vendaje si fuera necesario. La primera revisión se debe realizar a las 48 horas cambiando el vendaje aunque este no este deteriorado. El marcador más importante de la evolución favorable es la disminución y la desaparición del dolor residual. El vendaje lo mantendremos mientras dure la curación de la lesión. Así por ejemplo, un esguince que precisa de dos a tres semanas para su recuperación, debemos ir cambiando el vendaje cada cuatro o cinco días hasta la total recuperación del paciente.