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CENTRO

CULTURAL

LA MONEDA

CENTRO DE DOCUMENTACiÓN
ARTES VISUALES

Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción parcial y/o total. Conforme a la ley
W 17.336 sobre Propiedad Intelectual de Chile.
PABLO
RIVERA
DIGALBONDIGA
Esculturas

Museo Nacional de Bellas Artes


7 al 31 de ] utio de 1994
Santiago de Chile

"Ahora tendría que hablar de la descorpori:ación


de la realidad, de esa especie de ruptura aplicada ,
que parece multiplicarse ella misma entre las cosas
y el sentimiento que provocan en nuestro espíritu,
el sitio que se toman",

Anronjn Anaud
El Ombligo de los Limbos
Fragmentos Políticos I
(Deformar-Presionar-Aplastar-Dil'idir-Doblar)
1994

Objeros en hierro forjado sobre tabla de lavar.


Sensor de movimienro y sonido.
128h x 82w x 23d cms

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EL SITIO DE LAS COSAS
(El objeto desaparecido sigue existente)

Los actuales trabajos de Pablo Rivera desarro- su condicionalidad inerte-pasiva, como acon-
llan la inoperatividad del objeto escultórico en tecimiento, es decir construcción/ descons-
una doble relación con el espacio que ocupan trucción simultánea. Desplazamiento del tra-
(la sala) y con su propia condición de objetos bajo-taller, su fisicalidad, a la no materialidad
escultóricos expuestos, generando un desajus- de las estructuras movilizadas, en un discurso
te en ambas funciones, buscando en la nega- escultórico que genera el terreno de síntesis
ción de estos conceptos un posible lenguaje, necesario para la experiencia y el pensamiento
haciendo de la pieza -forma abstracta- conver- que hace trama, condensa el problema (el
tida a su estado de residuo, remanente del objeto en el espacio), resolviendo la imagen
objeto escultórico inexistente. Así, a través de ausen te (o bjeto inoperante) con la ausencia de
su fragmentación, cambios de tamaño y mate- objeto. Quiero decir, espacio significado en la
rialidad, abren y cierran discursos, creando un irrealidad de las formas contenidas.
espacio ficticio -no real- constituido por suce- Por lo tanto, no espacio, no emplaza-
sivas anulaciones que sistemáticamente miento, o tal vez su opuesto, superposición de
materalizan/ desmaterializan tanto el espacio espacios, emplazamientos múltiples, remiti-
como las formas contenidas en él. De esta dos al dentro/fuera como límite de significa-
manera las relaciones y los significados implí- ción, al universo privado/público del especta-
citos en ellas, se dan en un accionar desde lo dor. Juego sabido y no sabido por el artista,
exterior a lo más exterior, remitiéndose simul- que supera la presencia monolítica de una
táneamente a lo que se ve y a lo no visible -el forma como medio, privilegiando otros aspec-
fuera y dentro de la sala y del objeto. tos de un proceso de creación, liberando su
Estrategia compleja que transgrede en fantasma -pasada que arma la nueva práctica
la medida que niega continuamente sus ante- en un pensarse a sí misma como práctica.
cedentes, presentando abiertamente como len- Si en esta muestra, no encontramos ni
guaje la superposición -en este caso de las objeto escultórico, ni emplazamiento (conse-
diversas estratificaciones formales y concep- cuencia de su distribución) claramente
tuales- definiendo la muestra como un sitio definibles, tenemos en cambio, como estruc-
perceptual-social, en el cual el sentido es logra- tura temática de la exposición, su ausencia y
do en promiscuidad dirigida al espectador, al formas de reemplazo que simulan ser lo que no
objeto, al artista, en la confusión de sus iden- son y a la vez ocultan lo que no poseen,
tidades; abriendo para su ejercicio planos de articulando la ambigüedad entre el ser y el
movilidad que reordenan este conjunto de estar en un lugar. Quiero decir, que la signi-
posiciones, replanteando el espacio (la sala), ficación de los cuerpos y del lugar que ocupan

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no se limita sólo a ellos mismos, más bien en se hace perceptible sólo como conjunro de
la sala se desencuemra su semido, volviendolo relaciones no materiales.
a encomrar en los espacios emredichos que Por otra parte, lo que salta a la vista y
organiza (planos periféricos a la muestra). De a los semidos no es. somos conducidos paula-
este modo, el objero es experimemado como tinameme a través de un hilo conducror no
ficción perceptual, comen ido en el desarrollo visible (una preguma) sobre el estatuto de una
de las superficies, movilizando un rodo inexis- práctica, su posible idemidad. Así, lo ambi-
teme, definido por la ruptura total del flujo guo o falso de las piezas remite al lugar (impre-
imerior/exterior de la forma. Así, el emplaza- ciso), el problema desde el donde se generan,
mienro no es aprehensible debido a su constituyéndose en opciones para cominuar
condicionalidad cominua de abierto/ cerrado, una práctica. De este modo, se arman en el
haciendose emendible como un concepto tras- proceso de pérdida del fetiche (lugar de culto,
pasado, forzado demro del comexto de este instancia arcaica). ¿O será que el esculror
trabajo a reconstituirse en otro plano de reali- actual, privilegia otros estadios de un proceso,
dad. ocupando ese lugar prohibido en la moderni-
auego que siempre remite a lo visible dad donde el objero escultórico ya no lo ocul-
como inoperancia del objeto ya lo no visible ta? Tal vez los procesos sean los con tenidos y
como operancia del lenguaje). los fines imagen es provisionales. De rodas
maneras, en las estrategias utilizadas aquí se
tensa un vacío por un vacío, enunciando la
importancia del remaneme dejado.
El semido amropológico de las vitri-
nas protege y parodia lo ames dicho, reducien-
do el antecedeme (la escultura) al estado de
reliquia, como trabajo y esfuerzo de taller -esa
comunidad de necesidad y sen rido de la cual la
forma es su inmediatez. En ellas se insinua un
modelo de disyunción (concepto en fragili-
dad), principio de significación comenido en
De esta manera, los fragmentos sedu- el ejercicio sobresu insistencia: confromación
cen el comportamiento perceptual (atraen a explícita en el desplazamiento de una anota-
través de una serie de elememos que se yuxta- ción sobre lo físico a un plano conceptual,
ponen ocasionalmeme a las formas: sonido, desarticulando el hacer y lo que lo designa,
superficies texturales o fácilmen re codificables), para contener el problema que es lenguaje al
significando que el artificio es la falencia, la imerior de la sala. Así, se clasifican procesos
ausencia del objero. Seducción no implícita elementales de configuración, que son descons-
en el semi do y realidad de la forma, sino mas truídos por su equivalente nominal, la palabra
bien en la superficie (su autOnomía), insiste la mano, estableciendo el choque entre
refi tiendose constan tememe a sí misma y esta- los espacios, siendo este el modelo y referente
bleciendo una tensión emre lo no comenido y que hace operativo el donde -terreno de replie-
el afuera de la superficie al que debe hacer gues de las significaciones o superposición del
significar. Aquí lo escultórico sólo existe en el lenguaje sobre la escultura. Esto es dar cuenta,
maquillaje de sí (como imposibilidad de arti- decir el desborde (autonomía del discurso/
culación pura), al igual que el emplazamiemo habla) respecro a las estructuras que pretenden

"Doblar", Hierro forjado.

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contener lo no suceptible de ser contenido. haciendo productivo un vacío relacionado a la
De este modo, la escultura y el escul- pérdida de su modelo físico , construyendo
tor, son entendidos en un estado de permeabi- emplazamientos (mentales) y entrecruces de
lidad, lugar inestable o discurso-lugar, por relaciones.
tanto inestable siempre. Esto es, en la periferia Me refiero, a que en su intento de
del lenguaje, su desborde, en la superficie del recuperar un sentido, elabora otro, arma una
objeto y fuera de ella, no constituyendo iden- estructura que contiene en si misma discurso
tidades cerradas sino circulaciones de sentido. y pensamiento. Por tanto, la escultura actual
Nomadismo complejo de las estructuras del y el trabajo aquí citado, ya no porta su bulto (la
lenguaje y de la imposibilidad de establecerlo forma) sino que traslada de lugar a lugar el
ahora unilateralmente, considerando estrate- montaje de su lenguaje.
gias de vaciamiento como medio, a partir de La muestra ya no se emplaza física-
las cuales la retórica se ve continuamente mente estableciendo señales de realidad con el
descolocada y tematizada. Así, el hacer escul- lugar, sino su sentido radica en hacer del
[Ura se revierte sobre los ejes del espacio, la espacio medio, instalándose momentáneamen-
forma y el material, salvando su inoperancia te, dejando un remanente virtual, residuo de
física y construyendo pensamiento en un dejar pensamienro sobre si misma, que ya no es la
de ver su trabajo como producción de objetos, individualidad de la pieza, sino la conjunción/
de no mirar desde la sala o el taller, sino desde disyunción de los sentidos que convocan en el
la multiplicidad de puntos que la tridi- fragmento interrumpido de un proceso en
mensionalidad ofrece como medio incluyente curso.
y no excluyente. Esto significa, que esta
práctica se organiza en la falta, restituyendo y Mauricio Bravo C. *

* Escultor, Profesor de Escultura,


Instituro de Arte Contemporáneo .

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Fragmentos Políticos 11
(Abollar-Pelforar-Torcer-Maquillar-lnclinar)
1994

Objetos en hierro forjado sobre fragmenro de lobo marino.


Sensor de movimienro y sonido.
128h x 82w x 23d cms

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DIGALBONDIGA*
(Ejercicios para un política de emplazamiento)

Hace unos años, había en el Instituto Médico en que establecen estas relaciones, ya sea estan-
Legal un pequeño museo, un reducto diminu- do solo allí inertes y pasivos (en su lugar),
to, repleto de vitrinas de madera y cristal que absorviendo el entorno, abriendo el espacio a
resguardaban en su interior algunas rarezas la mirada, entablando un diálogo con él o bien
relacionadas con la muerte. No las describiré habitándolo y otorgandole significación.
todas por que no viene al caso; pero entre éstas Es evidente que aquellos objetos que
había una muy singular: se trataba de un llamamos escul turas, aluden de alguna manera
pequeño bastidor metálico, de unos 30 x a lo espacial. Mínimo sería entonces pregun-
40 cms., dentro del cual se estiraba -como en tarse, como la escultura -en cuanto objeto- es
una cama elástica- la piel del pecho de un capaz de significar o dar sentido a su lugar y
hombre. La piel estaba intacta (color, relacionarse con el espacio en el cual se instala.
vellosidad, tetillas), había sida finamente cur- Como Rosalind Krauss señalara, la
tida y finalmente recortada y estirada en forma escultura -que antes encontraba su sentido en
rectangular. Su única mácula (por decirlo así) la lógica del monumento, en su emplazamien-
era una cicatriz que la cruzaba horizontalmen- to público, en la señalización y comemoración-
te al nivel del abdómen. Era la marca de un con el advenimiento del Modernismo elimina
cuchillazo, el registro fragmentado de una la referencia a un lugar determinado y entra en
muerte. Esta imagen ha rondado insistente- un estado autónomo y negativo. Desde en-
mente mi cabeza los últimos años y con ella un
par de cosas que me resultan de interés: el
carácter fragmentario de la pieza (trozo de
hombre) -portanto la ausencia de cuerpo (yde
su estructura)- y la piel como campo de opera- * Cuando eramos pequeños, nueSTros padres y hermanos
ción exterior de los objetos. mayores jugaban a hacernos caer en un Trabalenguas.
Este antecedente, bastaría por sí solo En el juego, ellos insistían: digalbondiga. Y nOSOTros,
para intentar dilimitar un campo de operacio- aLÍn inocenTes, respondíamos: a/bón. Y así en innumera-
nes que, a partir de lo fragmentario, de ·10 bles ocasiones, hasra que en un momenTOdado, dijimos
periférico y de la inserción de ambos en un albondiga con todas sus letras y nos percatamos de que
proyecto de lenguaje referido al emplazamien- en aquel dichoso trabalenguas se ocultaba una obviedad.
to, se interroga acerca de la ubicuidad de los Comenzábamos entonces a comprender que trás la piel
objetos. Sin embargo, si es evidente que los de la palabra, lo importante no estaba en reconocer al
objetos ocupan espacio, que establecen algún objeto del enigma, sino en descifrar el simple mecanismo
tipo de relación con él, no lo es tanto el modo que lo ocultaba.

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tonces, pasó a ser transportable, pero ya no tan Entonces es posible pensar en otro espacio,
solo como objeto, sino también como el lugar que en lugar de ser invadido y absorvido por la
y la temporalidad que el objeto en sí mismo presencia de los objetos, sea articulado por
constituye, reteniendo una identidad definida relaciones recíprocas. La escultura ya no pare-
sin interferencias del contexto en que se insta- ce ser tan solo un objeto, sino un orden de
la. Sería entonces oportuno, pensar en torno relaciones: cuerpo(s) y emplazamiento que
a este sintomático nomadismo de la escultura, puestos en interrelación abren la posibilidad
al lavado de manos que se hace de la referencia de desconstruir un lugar memal y de redefinir
al espacio en que se instala y a la capacidad que la vivencia de un espacio como acontecimien-
guarda, en esa condición, de explorar el pro- to.
blema de ser contenida por él. De hecho, es En este mismo sentido, mi interés por
posible pensar que la escultura -tal como es lo fragmentario surge por la necesidad de
pensada en la modernidad- no guarda relación desmantelar las relaciones internas del objeto
con el espacio o bien, que ha sido superada por y con ello la estructura y la dinámica ejercida
su problema y que, de no rearticularse a partir centripetamente por el cuerpo en relación a
de sus propias falencias o permearse a otros sus partes. El propósi to de esta desmantelación
lenguajes y procesos, está condenada a as- es establecer formas lo suficientemente neu-
fIXiarse en su autonomía. El problema siem- trales como para poder desplazar el problema
de la espacialidad del ob-
jeto a una manipulación
que este referida a su em-
plazamiento, donde la
cuestión de su identidad
esté desplazada de su au-
tonomía y por ello fun-
dada en las in terrelaciones
a las que se verá expuesto
en un contexto determi-
nado. Esto es, permear
pre ha estado afuera, rodeando a los objetos y sus bordes, interrogar la ubicuidad del objeto
a los cuerpos. En todo caso -como se sabe- no en un espacio ya no tan solo físico, sino
es la escultura el asunto a explorar. también -y ante todo- mental, "un espacio
A mi emender -y es lo que trato de mixto entre vivencia y pensamiento" (Mauricio
ejercitar en esta muesrra- no hay espacios Bravo). Así, los conceptos de forma, materia-
neutrales. Este es articulado en un orden de lidad y escala son subordinados a un ejercicio
relaciones mutuas, donde los objeros -someti- mental de interrelaciones y solo a partir de
dos a factores de situación- interpelan su lugar dicha interrelación los fragmentos se sobrepo-
y a la vez son rearticulados por él. El espacio nen a su carácter de remanente para confor-
no permanece el mismo, tampoco los objeros; mar un cuerpo de obra.
hablamos de la vivencia de un espacio, a partir Lo fragmentario propone una carencia
de la ubicuidad y ca-pertenencia de los objetos en el objero, vaciedad que prepara a la forma
respecto deL donde y deL como se instalan, del como continente. Así, los objetos interesan en
como ocupan su lugar y de las relaciones que la medida que actúan como soportes de otras
establecen como actores de un orden mental. realidades y vivencias, de otros lenguajes y

"Fragmento XIV". "Golpeador",


Hierro forjado, plomo y aluminio. Acero (objero encontrado).
discursos, de otros procesos. Incluso poco piel. Pero a su vez, las pieles son aquí "posti-
importa que la forma sea tal, sino que ese tal, zos" que se apropian de' la vaciedad de los
buscando situarse en relación a un espacio objetos, pués no guardan una relación de
determinado, ha mutado su escala específica continuidad interior/exterior con la estructu-
(la del fragmento), adquiriendo una dimen- ra que cubren. Dermis que no deben entonces
sión (y no un tamaño) referida al espacio en ser entendidas como periferias físicas, sino
que se emplaza y, que en esa gestión ha des- como superposiciones, restituciones de senti-
mantelado su sentido estructural original para do, camuflajes de una operación que rearticula
resituarse en un nuevo campo de relaciones la ya precaria identidad de la forma, exteriori-
denotado ahora, a partir de la superficie, en el zando los objetos, dejandolos abiertos y
orden de la materialidad, en la manipulación desprotegidos ante una familiaridad incierta.
de esa materialidad yen el campo de relaciones
que ésta establece.
Esta materialidad es aquí entendida Pablo Rivera
como límite exterior de los cuerpos, como su

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Objeto Funerario
1994

Estructura de madera aglomerada recubierta con funda de piel sintética.


115h x 340w x 80d cms

10
THE PLACE OF THINGS
(The disappeared object continues to exist)

These recent works by Pablo Rivera deal wirh the of a sculptural discourse rhat opens the space
inoperative nature of the sculptural object in its required ro symhesize personal experience and also
dual relationship with the space in occupies (the provides the intellectual infrastructure needed ro
exhibition room) and its own condition ofsculptural condense the problem (of the object in space),
object in exhibition. This causes a disorder in both solving the matter of the absem image (inoperative
functions, by seeking -through a denial of these object) through the absence of the object. That is,
aspects- a possible language, turning rhe sculptural it establishes a space ofsignificance rhat is determined
piece (abstract form) in its condition of residue, by rhe false narure of the forms ir comains.
into rhe remains ofa physicalf:¡ non-existentsculptural Therefore, rhere is no space, no positioning,
object. Through fragmentation, changes in scale or perhaps the opposite is true: superimposed spaces,
and material, rhese objects open and close (aesrhetic) multiple positionings, with a reference ro the inside/
discourses . They create a fictitious -devoid of outside as the limit of meaning in the spectators'
physical realiry- space that consists of successive privete/public universe. A game of which the artist
annulments that systematically materialize/ is aware and yet not aware, and which exceeds the
dematerialize space and the forms contained in this monolithic presence of form as rhe sculptural
space. Thus, the relationships and meanings implicit medium, privileging other aspects of sculpture in a
in those forms exist beyond the outer limits of the crearive process that frees it of its own ghost -an
object itself, and refer simultaneously ro visible and open door permits ro consider this new practice as
invisible things, the inside/outside of the object a sculptural practice on its own right.
and the exhibition room. Although in this exhibition we find no
This complex strategy is in itself a sculptural objects or any positioning (as the
transgression because it continuously denies its consequence of the sculptural objects' distribution
antecedents. It openly decleres super-imposition a in rhe room) that can be clearly defined, we do have,
language. In rhis case, the superimposing ofdifferent as rhe structure and subject-manerofrhis exhibition,
formal and conceptual stratifications -which identilY their absence and forms of substitution, which
the exhibition as a social-perceptual space where simulate being whar rhey are not, and at the same
meaning is achieved through a kind of promiscuiry rime hide what they do not possess, articulating and
directed at the spectaror, the object and rhe artist, ambiguiry between the mere fact of existing and rhe
confusing rhe objects' idemities and permitting the fact of existing in a specific point in space. What I
exercise of several levels of mobiliry, rearranging mean is, that the meaning of the bodies and the
positions, redefiningthespace-event (theexhibition place they occupy is not limired ro the objects
room) and its passive-active condi tion (because this themselves. Their meaning cannot be found in the
exercise involves simultaneously a process of cons- room where they are exhibited, and instead it is
truction and desconstruction) . The rearranged fi- rediscovered in the "reading between lines"
gures represem a mutation of the studio/work from generated by rhe exhibition, in its spatial periphery.
its material being ro an inmaterial exisrence, as part Thus, the objects themselves are experienced as a

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fiction of perception, which resides in the deve- quesrion) that refers ro me stature of me pracrice,
lopment of me surfaces, in the mobilization of a ro its possible idenriry. Thus, rheambiguous nature
non-existentwhole, asdefined bya total interruption and/or falsehood of the pieces is a reference ro a
of me inside/outside flow of form in these works. place (imprecise), to rhe problem of where rhe
Therefore, me actual position of these works cannot works are generated, works rhar beco me oprions ro
be grasped, because of rheir ongoing open/dosed continue a practice. Then, are these works are
condi cion, and can only be undersrood as a concept assembled in a process of loss of rhe ferish (a place
thar -in the context of this work- is forced ro of workship, an archaic insrance), or does rhis
redefine itself in another level of realiry. sculptor privilege other srages in the process,
(A game that always refers ro what we seeas occupying rhar place -forbidden by moderniry-
the inoperativiryofobjecrs and ro wharwe don 'tsee where SculptUIe no longer hides ir? Perhaps processes
as the operativiry oflanguage). are contentand ends are temporary images. Anyway,
Thus, these fragments seduce perception in me strategies used here, a void gives rension ro a
(mey amact our artention through a series of void, heralding rhe importance of rhe residue.
elements that are occasionally juxraposed on forms: The aforesaid is parodied by rhe anmro-
sound, rextural surfaces or easily decoded surfaces), pological echoes of the showcases, which reduce the
meaning rhar rhe artifice is the deficiency, rhe anrecedenr (the sculprure), ro the condirion of relic
of a sculptural work and workshop effon -
rhar communiry represenred by necessiry
and meaning, ofwhich form is its inmediate
embodimenr. These works insinuare a model
of disjw1Crion (fragiliry as concept), where a
principIe of meaning is contained in me
exercise of its insistence: an explicir
confronration in rhe displacement of a
physical gesrUIe rowards a conceptual plane,
disarticularing the manual process and its
significance. Basic configuration elemenrs
are idenrified, only ro be deconstrucred by
rheir nominal equivalent, theverbal reiterates
エィ・ュ。ョオセ@ causinga dash between differenr
spaces. This is the model rhat renders
operarional the where- the haven ro where
the meanings or superimposirion of
absence of rhe object. A seducrion mat is not sculprural languages wirhdraw. That is, ro point
implicir in the significance and realiry of form, but Out, ro express rhe overflowing (auronomy of rhe
instead is implicit in the surface (in irs auronomy), discourse/speech) of structures that attempt ro
in a constanr reference ro itself, establishing a contain what cannot be contained.
tension between what it does not contain and the Sculpture and the sculpror are undersrood
space beyond its physical surface, ro which ir musr here as being in a srare ofpermeabiliry, and rherefore,
provide a meaning. In rhese works, sculpture exists in place or discourse-place of permanen r instabili ry,
only as makeup, as a rendering ofirself (because of mar is, in me periphery, in an overflow oflanguage,
the impossibiliry ofcirculating in irs pure state) and on the surface of objects and beyond the surface of
the position of the works can only be perceived as objects, which are not closed idenrities bur
a series ofinmaterial (inrellectual) relarionships. circulations of meanings. The complex nomadism
On the orher hand, what we see, and yet is of the sttuctures oflanguage and rhe impossibiliry
not evident ro our senses is mar we are being of establishing that language unilaterally, using
gradually led, guided by an invisible thread (a strategies in which depriving forms of their original

"Fragmento IX", "Cuerno",


Hierro forjado. Construcción en acero soldado.
meamng, is me mediwn on rhe basis of which and rhought. Therefore, sculprure roday-including
rhewric is permanencly displaced, and used as [he works exhibired- does nor carry wim ir only i[s
subjecr-marrer. Thus, rhe acr of making sculprure physical bulk (form) bur insread, i[ carries around
reverts onto rhe axes of space, form and maner, [he assembly of irs sculptural language from one
solving rhe problem of irs physical inoperariviry, place ro ano[her.
and buildingsrrucrures of rhough[ byceasing ro see The exhibirion is no longer posirioned in
sculprure as rhe producrion of objecrs, from rhe merely physical rerms, esrablishing signs of realiry
point of view of rhe exhibirion room or rhe srudio, wi[h [he place. Insread, irs significance now lies in
and insread use rhe mulriple points ofviewafforded [he facr mar ir rurns space inro a medium, temporarily
by rhe rhree dimensions ro perceive sculprure as a occupying a given physical space, leaving a visual
medium rhar includes and nor as one rhar excludes. remnanr, me residues of reflecrion, a rhoughrabour
This means, rhar sculprure is organized on the basis irself, which no longer represenrs rhe individualiry
of a need, resroring and rendering producrive an of rbe sculprure (piece) bur rarher [he conjw1C[ion/
empriness rhar is rela[ed w rhe loss of irs physical disjuncrion of meanings mar is calJed forth by me
model, consrrucring (meral) posirions and inter- inrerrumped fragments of a process rhar is under
relarions. way.
In irs arremr ro regain a certainsignificance,
rhesculpwr consrrucrs other meanings , he assembles
a srrucrure thar contains simulraneously discourse Mauricio Bravo C. *

* Sculpwr, Sculpture Teacher,


Insri[Uw de Arte Concemporáneo.

13
Teje-Maneje
(Proyecto Chimbaronk-o)
1994

Estructura metálica recubierta en mimbre tejido.


230h x 250w x 130d cms

14
DIGALBONDIGA*
(Exercices for a P olicy on P ositioning)

A few years ago, at the Instituto Médico Legal in sculprures "rejer" in a certain way to space. The
Santiago, there was a small museum, a tiny place leasr one can do, rhen, is wonder how sculprures -
full of glass and wooden showcases containing being objects- are capable of conveying meaninigs
sorne rarities related to death. There is no point in and give a certain sen se to their place, emering into
describing every object there, but rhere was one a relarionship wirh me space they occupy.
rhat was parricularly imeresring: A small metal As Rosalind Krauss said, after Mo-dernism,
frame, measuringabour30X40 cm. Stretched inside sculpture -which used to find its meaning in the
rhis frame -taur, as if on a jumping frame- was me logic of the monumem, in its public placement, as
skin of a man's torso. The skin was intacr (color, a sign and comme-morarion -has e1iminared me
hairs, nipples). Ir had been carefully tanned, reference ro a specific place, enrering an
srrerched and given a rectangular shape. The only autonomous, negarive condirion. Since men,
f1aw (so to speak) was a scar mar crossed the piece sculprure has beco me portable, nor merely as an
of skin horizontally over rhe abdomen. Ir was rhe objecr, but also as rhe place and rime mat me objecr
slash of a knife, rhe fragmemed record of a dearh. itself embodies, maintaining a definite idenriry
This image has been on my mind insisrenrly for rhe regardless of the context in which it is immersed. Ir
pasr years, togerher wirh sorne orher characrerisrics is expediem then, to bear in mind rhis symptomatic
of rhat objecr rhat interesr me. These are: its nomadism of sculprure, to rhink abour the washing
fragmenrary narure (a piece of aman), rhe absence 01 hands mar mere has been regarding me space
of rhe acrual body (and merefore of irs srrucrure), occupied by a sculprure, and me capaciry mar a
and rhe skin as rhe ourside field of operarions of sculprure has, as such, to explore rhe problem of
objecrs. being conrained by space. In facr, ir is possible to
This antecedent by irself would be enough
to rry and ourline a field of operarions rhat, on rhe
basis of conceprs such as fragment and periphery as
part of a proyect involving a sculptural language * When we were childrel/, Ol/r parelllsand older brothers
dealing with rhe position of objects, quesrions the played a game with LIS tryil/g to confuse us in a tongue
ubiquity of objecrs. Ir is self-evidenr rhat objecrs Mister They il/sisled Ihat we repeat the expression:
occupy space, rhat rhey esrablish sorne form of digalbondiga rapidly (where "diga" = say). Innocent
relarionship wirh space. Whar is nor evident is me still, we answered albón, on countless ocasions until at
narure of rhis relarionship, which is somerhing mar some point wefil/ally said the \Vord albondiga (meatball)
occurs even when mese objects simply stand rhere, alld reali:ed that the tongue Mister hid something thal
inert and passive (in their place), absorbing their
was obviol/s. We reali:ed that behind the "skin" of the
surroundings, opening up or initiating a dialogue
words, what mattered was not to identify the object ofthe
with space or even inhabiring space, giving ir
enigma itself, but to l/nderstand the mechanism that hides
meanlIlg.
Evedenrly then, those objects we call it.

15
Salmón v/s Jurel
1994

Estructura metálica recubierta con poliuretano expandido y lacada color cobre.


195h x 225w x 165d cms

16
rhink rhar sculprure -as conceived by Moderniry- is is nor merely physical, bur a1so -and aboye all-
unrelared ro space, or rarher, rhar ir has been intellecrual. "A combinarion of moughr and per-
excceded by rhe problem ofirs sparial relarionships. sonal experience" (Mauricio Bravo). The conceprs
Therefore, unless ;r re-arriculares irselfon rhe basis of form, marerial and scale are applied ro mental
of irs own deficiencies or by absorbing orher exercises consisring of rhe interre-larionships
languages and processes, ir is condemned ro berween fragmenrs of objecrs, and only mrough
asphyxiare in irs auronomy. The problem has rhese inrerrelarionships can rhese fragmenrs
always been on rhe ourside, surrounding rhe objecrs overcome rheir condirion of residues, and become
and bodies. In any case - as is known- ir is nor rhe a body of work.
sculprural objecr rhar musr be explored. The fragmenrary narure of rheobject reveals
As 1 undersrand -and rry ro show in rhis a cerrain deficiency, an empriness rhar prepares
exhibirion- rhere are no neurral spaces. Space is form ro become a container. Thus, objecrs are of
articulared in murual relationships, where objecrs- onreresr so long as rhey are able ro contain orher
subjecred ro situationalfoctors- question theirspace reali ties and personal experiences, orher languages
and ar rhe same time are re-arriculared by mar same an discourses, orher processes. Moreover, ir is of
space. Space does nor remain rhe same, objecrs lirde imporrance whar dle forma acrually is, whar
don'r eirher. Whar we are talking abour here is rhe marrers is rhar rharform, in an arrempr ro posirion
personal experience of a given space, based on irs irselfin a given space, has undergone a murarion in
omnipresence, and of sculprural objecrs as irs specific scale (rhar ofbeing a fragmenr), and has
coparricipanrs in rhe problem of where and how acquired a dimension and
rhese objecrs are placed,or rhe way in which rhey size rhar relare ro rhe space
occupy their space and rheir relarionships as where ir has posirioned
participanrs in an inrellecrually defined order of irself. Through rhis
rhings. Ir is possible, men, ro believe in anomer murarion, ir has disman-
kind of space, rhar, insread of being invaded or ded irs original srrucrural
absorbed by rhe physical presence of rhe objecrs, is significance in order ro
arriculared by reciprocal relarionships. Ir seems, posirion irself in a new
rhen, rhar sculprure is no loger a mere objecr. field of relarionships.
Insread, ir is an order of relarionships: body (or These relarionships are
bodies) , and posirioning, which, by rheir now defined from rhe
interrelarions, a1low us ro deconsrrucr a place in our surface of rhe objecr
minds and redefine our personal experience of rowards rhe ourside, by manipularing rhe objecr's
space as an even r. physical being wirhin rhe field of relationships
In rhis sense, my interesr in rhe concepr of defined by rhis manipularion.
rhe fragmenrary comes from a need ro dismande This physicalliry is undersrood here as rhe
rhe inrernal relarionships of objecrs, and rhus ourer limir ofbodies, as rheir skin. Bur, ar rhe same
dismande rhe srrucrure and cenrriperal dynamics rime, rhe skins used in rhese works are "fakes" rhar
exercised by rhe body as a whole in relarion ro irs appropriare rhe emptiness of objecrs because rhey
parrs. The purpose of mis dismanrling is ro identifY have no inside/ourside conrinuiry in rheir
forms rhar are sufficiendy neurral as ro displace rhe relarionship with rhe srrucrure mey cover. These
problem of rhe objecr's sparial narure rowards a skins musr nor be undersroodas physical peripheries
manipularion (of form) mar refers ro rhe posirion but rarher as superimposirions, resrorations of
of rhe objecr in a given space, where the quesrion of meaning, camouflage in rhe mission ro rearriculare
irs identity is displaced from rhe marrer of rhe rhe a1ready precarious identiryofform, exrernalizing
objecr's auronomy, and now resides in rhe objecrs, leaving rhem open and defenseless, facing
inrerrelarionships ro which rhe objecr is subjecred an uncerrain fomiliarity.
in a given conrexr. Thar is, ro permeare irs borders,
quesrion rhe ubiquiry of rhe objecr in a space rhar Pablo Rivera

"A islollle".
Hierro forjado (fragmento de una reja).
PABLO
RIVERA
1961 Nace en Santiago,
Chile.
1987 Licenciado en Arte,
Mención Escultura,
Pontificia Universidad
Católica de Chile,
Santiago.

Experiencia Docente Exposiciones Individuales Exposiciones Colectivas

1994 - Profesor Tridimensión 1, 1994 - DIGALBONDIGA , 1993 - Expo Arte


Instituto de Arte Museo Nacional de Chile-México '93,
Contemporáneo, Bellas Artes, Museo de Arte
Santiago de Chile. Santiago de Chile. Contemporáneo,
1993 - Profesor Tridimensión l. 1987 - Zona de Identidad, Santiago de Chile.
- Profesor Cuarto Año Esculrura - Excavación - - COllcurso Escultura
Escultura, Performance, Pequeño Formato,
Instituto de Arte Campus Comendador, Sala Parque de las
Contemporáneo, U. Católica, Esculturas,
Santiago de Chile. Santiago de Chile. Santiago de Chile.
1991 - Profesor Curso 1991 - M useo de Arte Moderno
Escultura lll, de Chiloé,
Escuela de Arte, Exposiciones Bipersonales CasttO, Chile.
U. Católica, Arte hoy: los protago-
Santiago de Chile. 1991 - lllllomini, nistas de la década,
1987 - Ayudante Curso Obra colectiva junto a Feria del Hogar.
Composición 11 Félix Lazo, Parq ue Cerrillos,
(Tridimensión), Galería de Arte, Santiago de Chile.
Escuela de Arte, Centro de Exrensión U.c., 1990 - Museo Abierto,
U. Católica, Santiago de Chile. Museo Nacional de
Santiago de Chile. 1990 - Fragilidad de Zona, Bellas Artes,
1986 - Ayudante Curso Instalación junto a Alvaro Santiago de Chile.
Escultura lJ, Oyarzún, - Encounter in the Arts,
Escuela de Arte, InstitutO Culrural de American Association of
U. Católica, Las Condes, Chile,
Santiago de Chile. Santiago de Chiie. Santiago de Chile.
1985 - Ayudante Curso - ENART90,
Escultura Básica, Estación Mapocho,
Escuela de Arte, Santiago de Chile.
U. Católica, - Demodacia, Escul-
Santiago de Chile. tura y Performance
Omnium,
Santiago de Chile.

18
1988 - Primer Encuelllro de Simposiums Ferrocarriles del Estado,
Escultores '88, Santiago de Chile.
Plaza del Mulato Gil 1992 - Primer Simposium
Santiago de Chile. Internacional de Universidad Católica,
1987 - VIII Bienalll1lernacio- Escultura Iberoamerica- Talca, Chile.
nal de Ar/e, na y del Caribe,
Val paraíso, Chile. Museo Nacional de Colecciones Privadas.
- Los Escultores presen- Bellas Artes - UNESCO,
tan a los Escultores, Santiago de Chile.
Galería Plástica 3, 1991 - Ferrosculturas, Premios
Santiago de Chile. Simposium de Esculrura
Salón de Alumnos Uni- en Acero, Beca The British Council, 1994,
versidad Católica, Maestranza San Eugenio, Londres, Gran Bretaña.
Instituto Cultural de FFCC - Museo Nacional
Las Condes, de Bellas Artes, Beca Amigos del Arte, 1993,
Santiago de Chile. Santiago de Chile. Santiago de Chile.
1986 - The Las//Lost Des 1986 - Patio de América,
Generatioll, Villa Culrural Mención de Honor, Concurso de
Galería Bucci, Huilquilemu, Escultura Raúl Sáez,
Santiago de Chile. Universidad Católica, Ministerio de Minería, 1993,
- Pin/ura-Escultura Talca, Chile. Santiago de Chile.
Galería Espaciocal,
Santiago de Chile. Beca de Investigación FONDART,
1985 - Ayudantes Escuela de Colecciones Ministerio de Educación, 1993,
Arte U.C., Santiago de Chile.
Escuela Moderna de Museo Chileno de Arte Moderno,
Música, Santiago de Chile. Primer Premio, Concurso de
Santiago de Chile. Escultura ENAP, 1991 ,
1984 - Encuentro U. Católica - Empresa Nacional de Petróleo Santiago/Punta Arenas, Chile.
U. de Chile, ENAP Magallanes,
Goethe Instirut, Punta Arenas,
Santiago de Chile. Chile.
1983 - Arte Joven ,
Centro Canta Gallo, Museo de Arte Moderno Chiloé,
Santiago de Chile. Castro, Chile.

19
Reconocimientos
Este trabajo ha sido posible en
parte, gracias al aporte del Fondo
de Desarrollo de la Cultura y las
Artes, FONDART, del Ministerio
de Educación.

Agradecimientos
Johan Voigr, Smiljan Radie,
Mauricio Bravo, Hernán Puelma,
Carlos Fernández, [van
Petrowitsch, Paul Beuchat, Ariela
Escalona, María Paz Rivera,
Alberto Mozo, Gamal Pichara,
Ximena Milosevic, Tania Radie,
Denise Ratinoff, Maya Castro,
Ademir Flores, Marisol Bravo,
Luis Felipe Forteza, Milan [velic,
Ramón Castillo, y a rodos aquellos
que me han apoyado y colaborado
en este proyecro.

FotograRa Blanco y Negro


María Paz Rivera

FotograRa Color
[van Petrowitsch

Traducción Textos
Paul Beuchat

Edición y diagramación
Ximena Milosevic

Impresión
Kontiki

Auspicios
Siscom (Chile) Alarmas Ltda.
Cerveza Cristal en el Arte
Corporación de Amigos Museo
de Bellas Artes
Museo Nacional de Bellas Artes
Dirección de Bibliotecas Archivos
y Museos


useo@ DIRECCION
ACIONAL DE BIBLIOTECAS
DE ELLAS ARCHIVOS
ARTES Y MUSEOS

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