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Equipo Técnico
LA PAZ, BOLIVIA
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CONTENIDO
1. Introducción ......................................................................................................... 5
2. Importancia en la aplicación de la aplicación de proyecto de riego .................... 5
3. Normas de evaluación .......................................................................................... 6
4. Proyectos de Microriego ...................................................................................... 7
5. Evaluación especifica en Proyectos de Riego ..................................................... 12
6. Recomendaciones de manejo ............................................................................ 18
7. Anexos ................................................................................................................ 18
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1. Introducción
Dentro de los planes del nuevo gobierno y concretamente de su Ministerio de Agua (Viceministerio de
Riego), se considera que es importante aumentar la superficie de áreas regables en el país, en base a la
implementación de nuevos proyectos o el mejoramiento de los que están en funcionamiento. En ese
sentido, este plan considera para los próximos cinco años, incrementar las áreas bajo riego en
aproximadamente 40000 ha, lo que significa en aumentar las áreas regadas en el país en aproximadamente
un 20%, en virtud de que la superficie actual regada alcanza cerca de las 280.000 ha (PRONAR).
Sin embargo, en vista de que los suelos de algunas zonas de riego en el país han sufrido procesos de
degradación como: salinización, alcalinización, acumulación de metales pesados y otros, se ha reducido la
capacidad productiva de los mismos. En este sentido, es importante tomar en cuenta estos aspectos en los
nuevos proyectos de riego que el gobierno piensa emprender.
Por otro lado, gran parte de los recursos hídricos en el país (principalmente en las cuencas del Altiplano y
Pilcomayo), presentan problemas de contaminación. Así Beveridge (1983); Quintanilla (1987); Noras (1992);
Plan Binacional del Sistema TDPS (1993); Orsag y Miranda (2000 y 2004) y Quispe (2003) en la cuenca del
Altiplano y Castro y Puch (1998); Sandi (1998) Murillo (1998) y Michel Et al. (2006) en la cuenca del
Pilcomayo, indican que las aguas de estos dos ríos y sus afluentes presentan contenidos importantes de
sales y metales como el cadmio, plomo, níquel, cromo, zinc, arsénico y otros. En ese sentido, la calidad de
estas aguas, podría ser una limitante para su uso sostenible en proyectos de riego u otros principalmente en
la época seca del año, cuando aumenten las demandas de agua y en la que generalmente los ríos presentan
menores caudales y mayores concentraciones de contaminantes.
En el caso del recurso del suelo, en muchos casos no se hacen los estudios necesarios para determinar y
conocer las características físico – químicas del suelo y por ende su cualidad (aptitud para riego) o se utilizan
metodologías y clasificaciones poco adecuadas.
Ante este panorama, es importante que en el país, se evalúe la cantidad y la calidad de los recursos suelo y
agua en las diferentes fases de un proyecto de riego, y en base a las características de estos definir qué
medidas preventivas de acompañamiento deben ser consideradas para el manejo adecuado de estos
recursos para un cultivo determinado, y considerando los aspectos climáticos socioeconómicos y
ambientales. Esto principalmente, con el objeto de evitar o disminuir los procesos de degradación que se
dan en los proyectos de riego en el país (salinización y solidificación, acumulación de metales pesados,
acidificación y otros), disminuyendo su capacidad productiva y afectando por otro lado, la cantidad y calidad
de los productos agrícolas o forrajeros.
Consideraciones generales
Es de conocimiento general, que las instituciones encargadas del riego en el país, solo han dado énfasis a los
aspectos físicos del proyecto, es decir a la fase de construcción de obras para el represamiento y captación
de agua, su conducción y distribución y no así a la parte de acompañamiento que debe tener todo proyecto
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de riego, como ser capacitación de los usuarios en el manejo de suelo y agua (a nivel parcelario), en función
de los cultivos a sembrar, y por otro lado aspectos de sanidad vegetal, comercialización y otros.
En este sentido, la presente metodología para evaluar y clasificar los suelos del agua de una zona con fines
de riego, no solo debe servir para definir un proyecto de riego (Microriego y Riego) en sus diferentes fases.
Identificación, Pretensión y/o Diseño Final, sino también debe ser el instrumento técnico para que el
proyecto en su fase de acompañamiento, pueda capacitar a los beneficiarios en las limitaciones que puedan
tener sus recursos y dar las recomendaciones en el tipo de prácticas que deben ser utilizadas para el
manejo adecuado de un determinado suelo y calidad de agua, todo esto en relación al cultivo y su rotación y
otros aspectos, como clima, cantidad de agua disponible, topografía, drenaje, aspectos socioeconómicos.
etc.
Por otro lado, considerando los problemas de calidad que presentan las aguas de riego en varias cuencas,
subcuencas y microcuencas en el país, esta metodología de evaluación y clasificación de suelos y agua
debería servir además para que el Gobierno a través de su Ministerio de Desarrollo Rural y Medio
Ambiente, y del Agua (Viceministerio de Riego) a través de las instancias correspondientes, realicen
monitoreo en zonas críticas de riego y limitaciones de suelo a emplearse en el proyecto, o por no haber
incorporado las prácticas de manejo de suelos, agua y cultivos, recomendadas para este fin.
Así mismo esta normativa, debería servir en proyectos antiguos, donde solo se considera necesario ampliar
las áreas de riego, o mejorar la eficiencia del mismo.
Esta normativa, luego de su análisis, discusión, consenso y aprobación, entre técnicos de los ministerios
involucrados, regantes autoridades y otros, luego de su promulgación respectiva, deberá ser puesta a
conocimiento y alcance de todas aquellas Instituciones Gubernamentales y No Gubernamentales,
vinculados a la producción agrícola bajo regadío.
3. Normas de evaluación
La presente normativa Preliminar de Evaluación y Clasificación de Suelos y Agua para Riego (Proyectos
Nuevos), luego de las presentaciones y discusiones con técnicos de los Ministerios de Desarrollo Rural y
Medio Ambiente, y del Agua (Viceministerio de Suelos y de Riego, Consultores de Proagro/GTZ) Y Asesores
del PIEN, tomando como base de partida, las disposiciones del viceministerio de Inversion Publica y
Financiera Externo (VIPFE) y otra, se ha visto por conveniente separar los proyectos de riego de la siguiente
manera.
a) De acuerdo a su Extensión:
Esta separación se ha realizado considerando que los primeros corresponden a pequeños proyectos de
riego, llevados a cabo generalmente por los municipios, y sirven para apoyar a pequeños agricultores y de
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esta manera mejorar sus ingresos. Estos proyectos generalmente no tienen o no cuentan con el apoyo
financiero necesario.
Por otro lado, los proyectos de riego mayores a 100 ha que son aprobados por la Prefectura o el Gobierno, y
en algunos casos por su extensión y magnitud, puede requerir un apoyo económico importante de alguna
institución internacional.
Para los proyectos nuevos de riego, se utilizaran las siguientes Fases de Estudio:
Fase de Identificación
Fase de Pretensión *
Fase de Diseño Final
4. Proyectos de Microriego
En la Fase de Identificación de Proyectos Nuevos de Microriego, para la evaluación de los recursos Suelo y
Agua se recomienda emplear una metodología simple de carácter Cualitativo y Semicualitativo. Mientras
que en la Fase de Diseño Final se utiliza una metodología Semicuantitativa y Cuantitativa, para completar
algunas interrogantes surgidas y en función a los problemas y limitaciones que hayan detectado los
evaluadores durante la fase Inicial.
Recurso suelo
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Información sobre suelos y otros.
Aplicación del área de estudio en una Carta Nacional 1: 50.000 (mapa base).
Trabajo de Campo:
Recurso de agua
Para la Fase de Identificación, tanto para Proyectos de Microriego y Riego, la evaluación y clasificación de la
calidad de agua para fines de riego, imprescindiblemente deberá ser efectuada a partir de estudios
cuantitativos. Esto debido a que el recurso agua es fundamental para un proyecto de riego y considerando
los problemas que se tiene en el país, principalmente con su calidad.
Alguna información sobre el recurso agua, debe ser obtenida antes del trabajo de campo, a través de la
recopilación de información secundaria. La misma que deberá ser complementada con un muestreo puntual
de este recurso para su análisis de laboratorio respectivo.
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Los parámetros que deben ser considerados para la evaluación y clasificación de la calidad del agua para
fines de riego son básicamente los siguientes:
En esta fase se evaluara y determinara la calidad del agua para el riego considerando las directrices actuales
del Sistema de Evaluación y Clasificación propuesto por la FAO (Ver tablas 2,3,4,5 de Clasificación de Aguas
para Fines de Riego en Anexo 2), para este fin se debe emplear los resultados de los parámetros
determinados en laboratorio.
Por otro lado, en base a un reconocimiento de la microcuenca o cuenca y tomando en cuenta los relatos de
informantes claves de la zona, (autoridades, profesores, agricultores), se identificará la presencia de fuentes
potenciales de contaminación natural o antropogénica del recurso hídrico, por ejemplo la presencia de la
actividad minera en la parte alta de la cuenca o la presencia de pasivos ambientales cerca de los cursos de
agua de interés, por lo que se debe considerar una ampliación de los parámetros de evaluación del agua
para la fase de Diseño Final, por ejemplo el estudio y evaluación de metales pesados y otros componentes
químicos. De la misma manera para otras fuentes de contaminación que se pueden identificar en la parte
alta de la cuenca por una agricultura intensiva (contaminación con pesticidas, etc.)
Recurso suelo
Para los proyectos de microriego (Fase de Diseño Final), considerando el limitado financiamiento para la
evaluación de los recursos suelo y agua, se utilizará la misma información obtenida durante la Fase de
Identificación. Sin embargo, en caso de que hayan surgido algunas interrogantes y existan dudas sobre la
calidad y aptitud del suelo, se complementará con otros parámetros, por ejemplo el análisis de fertilidad
química de suelos u otros, para tal efecto será necesario complementar con algunos análisis de laboratorio
o ensayos o mediciones directas en campo respectivamente.
Las características principales a ser evaluadas en el tema de fertilidad de suelos son: niveles de Nitrógeno,
Fósforo, Potasio y pH del suelo.
En caso necesario (aguas de mala calidad y suelos con presencia de sales y/o sodio), y si el caso así lo
amerita, se determinará en campo la velocidad de infiltración del suelo, la misma que será determinada a
través de métodos como el infiltrometro de cilindro doble u otros según las condiciones de terreno.
Recurso agua
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Para el recurso agua, se utilizara la información de Fase de Identificación. Sin embargo, se podrá completar
en esta fase, con otros estudios complementarios recomendados en la fase inicial (identificación), como ser
metales pesados, plaguicidas, pesticidas y otros (ver tablas de límites Permisibles de Agentes
Contaminantes en Anexo 3).
Proyecto de ampliación:
Fase de Identificación
Recurso suelo
En esta fase, se deberá establecer las limitaciones y problemas que presentan las zonas regadas, para
posteriormente dar las recomendaciones para las nuevas zonas a rergar.
En caso de que los suelos de las zonas potenciales sean diferentes a los antiguos (por encontrarse en otra
unidad), se utilizara la misma metodología propuesta para los proyectos de nuevos de microriego.
Trabajo en campo
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Textura de la capa arable y de sus horizontes inferiores (en base a sensación al tacto, plasticidad,
cohesividad, adhesividad y otros).
Estructura (visual)
Color, relacionado especialmente con problemas de drenaje interno y anegamiento.
Salinidad y Sodicidad (visualmente: detectar afloración salina y costras superficiales; ver reacción del
suelo al jugo de limón o ácido clorhídrico diluido al 10% que por efervescencia indica la presencia de
sales y/o carbonatos. También a través de la vista y el sabor determinar las posibles sales presentes en el Commented [U1]:
suelo.
Presencia de gravas y piedra (para relacionarlo con el drenaje).
Fertilidad (a través de indicadores como cobertura vegetal, presencia de materia orgánica, proporción
relativa de arcilla, presencia y/o actividad de microfauna y otros).
Profundidad de la napa freática (observando en pozos cercanos o a través de informantes claves de la
zona de estudio).
Riesgo de inundación (a través de informantes claves del lugar de estudio).
La clasificación de suelo será realizada con ayuda de tabla 1 (ver Anexo 1), empleada en casos de proyectos
nuevos de riego y microriego.
Para identificar los impactos de riego en el suelo y su comparación con un suelo no regado (en la misma
unidad de paisaje), se realizará algunas evaluaciones comparativas sobre el pH, Conductividad Eléctrica
(CEe) y Porcentaje de Sodio Intercambiable (PSI), todo esto en extracto de suelo saturado y de manera
cuantitativa. Además será necesario, determinar posibles campos en el desplazamiento de sales u otros.
Recurso agua
En esta fase dado que muchos proyectos de Microriego no cuentan con la evaluación y clasificación de agua
para fines de riego, se recomienda la realización de un estudio y evaluación cuantitativa de este recurso. La
clasificación de agua deberá ser efectuada con la normativa propuesta para los anteriores casos de
proyectos de riego (ver Anexo 2). Se deberá recomendar, para la fase de Diseño Final, la posibilidad de
estudios complementarios de contenidos de contaminantes de metales pesados y otros en caso de que en
la evaluación de esta fase se identifique contaminación del recurso hídrico por actividades mineras y otras
fuentes.
Recurso suelo
En esta fase, se realizaran los estudios complementarios de suelos (antiguos y nuevos) de acuerdo a los
impactos encontrados en la fase inicial y las recomendaciones efectuadas. Se consideraran los parámetros
de evaluación, según los impactos del riego en el suelo.
En caso, de que el proyecto de riego se amplíe a unidades de paisaje diferentes, se recomienda utilizar a la
misma metodología recomendada para este fin y luego de la evaluación de sus recursos efectuar la
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clasificación de suelos respectivos, en base al análisis cualitativo y semicuantitativo y de acuerdo al
procedimiento para los Proyectos Nuevos de Microriego (ver Tabla en Anexo 1).
Recurso agua
El recurso agua tendrá la ampliación de estudio de calidad para riego, si en la evaluación de la fase de
Identificación se ha detectado la presencia de fuentes contaminantes, sea por actividad minera u otros.
La evaluación de la calidad del agua para riego deberá basarse en las normas que se presentan para los
casos de proyectos nuevos (ver Anexo 2 y 6), la misma que deberá ser realizada necesariamente en dos
épocas diferentes del año (húmedo y seco).
Considerando el poco tiempo asignado y el escaso o nulo financiamiento que tiene un proyecto nuevo de
riego y su Fase de Identificación, se utilizará la misma metodología indicada para los proyectos de
Microriego, es decir para la Fase de Identificación, en los Proyectos Nuevos de Riego, se empleara una
metodología simple y de carácter Cualitativo y Semicuantitativo para la evaluación de sus recursos.
En base a los problemas y limitaciones detectadas en la fase inicial y de acuerdo a las recomendaciones
realizadas por el evaluador, en la fase de Preinversión de un Proyecto de Riego (Prefactibilidad y/o
Factibilidad) se realizaran evaluaciones de suelos y aguas con mayor detalle (semicuantitativo y
principalmente cuantitativo), dando énfasis a los problemas y limitaciones detectados.
En la fase de Diseño Final, se dará énfasis a la determinación de algunos parámetros específicos, en caso de
existir sospechas o dudas, sobre algunas características del agua y suelo y que han sido detectadas en la fase
de Preinversion y que requieren ser estudiados o corroboradas.
Fase de Identificación
Recurso suelo
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Los pasos a seguir son los siguientes:
Trabajo de Campo:
Recurso de agua
Para la Fase de Identificación, tanto para Proyectos de Riego, la evaluación y clasificación de la calidad de
agua para fines de riego, imprescindiblemente deberá ser efectuada a partir de estudios cuantitativos. Esto
debido a que el recurso agua es fundamental para un proyecto de riego y considerando los problemas que
se tiene en el país, principalmente con su calidad.
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Alguna información sobre el recurso agua, debe ser obtenida antes del trabajo de campo, a través de la
recopilación de información secundaria. La misma que deberá ser complementada con un muestreo puntual
de este recurso para su análisis de laboratorio respectivo.
Los parámetros que deben ser considerados para la evaluación y clasificación de la calidad del agua para
fines de riego son básicamente los siguientes:
En esta fase se evaluara y determinará la calidad del agua para el riego considerando las directrices actuales
del Sistema de Evaluación y Clasificación propuesto por la FAO (Ver Tablas de Clasificación de Aguas para
Fines de Riego en Anexo 2), para este fin se debe emplear los resultados de los parámetros determinados en
laboratorio.
Por otro lado, en base a un reconocimiento de la microcuenca o cuenca y tomando en cuenta los relatos de
informantes claves de la zona, (autoridades, profesores, agricultores), se identificará la presencia de fuentes
potenciales de contaminación natural o antropogénica del recurso hídrico, por ejemplo la presencia de la
actividad minera en la parte alta de la cuenca o la presencia de pasivos ambientales cerca de los cursos de
agua de interés, por lo que se debe considerar una ampliación de los parámetros de evaluación del agua
para la fase de Diseño Final, por ejemplo el estudio y evaluación de metales pesados y otros componentes
químicos. De la misma manera para otras fuentes de contaminación que se pueden identificar en la parte
alta de la cuenca por una agricultura intensiva (contaminación con pesticidas, etc.)
Fase de Preinversión
Recurso suelo
En los Proyectos Nuevos de Riego a nivel de Preinversion, considerando que estos ocupan grandes
extensiones de terreno y pueden requerir alta inversión, es importante para esta fase hacer una evaluación
de suelos más completa y detallada que durante la fase de Identificacion. Esto con el fin de determinar la
aptitud de estos suelos para el riego en sus diferentes unidades de paisaje involucradas a nivel de clases y
sub clases (método semicuantitativo a cuantitativo), dando énfasis a problemas detectados en la Fase de
Identificación y a las interrogantes surgidas en esta. Si los Proyectos Nuevos de riego, no son tan extensos y
van a ser financiados con fondos locales (prefectura), se puede utilizar la clasificación cualitativa y
semicuantitativa propuesta en la Tabla 1 del Anexo 1.
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subclases su distribución espacial y las áreas que ocupan, en base a la propuesta del Bureau of Reclamation
de los EE.UU. de Norte América (1953, 1973) y adecuado a nuestras condiciones (ver Tabla en Anexo 3)
Recurso agua
Para la evaluación del recurso agua, se partirá de la información obtenida de la Fase de Identificación y de
las recomendaciones o dudas surgidas en esta. Así se podrá completar con estudios de la cantidad y calidad
del agua para riego, principalmente en dos épocas diferentes del año (húmeda y seca).
Las nuevas evaluaciones de agua que se realizan en esta fase de Preinversión, deberá determinar los
mismos parámetros recomendados para la Fase de Identificación y emplearse el mismo sistema de
clasificación de la FAO (1987) (ver Anexo 2). Así mismo, en caso de que en la fase inicial se haya
recomendado la evaluación de metales pesados y/o otros contaminantes químicos, se deberá realizar los
muestreos y análisis respectivos, y para este fin deberá emplearse las normas de evaluación de la
Reglamentación Boliviana de la ley 1333, como también del Sistema de Evaluación de la FAO para Metales
Pesados. Así mismo, para la evaluación de contaminación con pesticidas se empleara las Tablas
comparativas de límites permisibles presentadas en esta normativa (ver Tabla en Anexo 6).
Recurso suelo
En la Fase de Diseño Final, se dará énfasis solo a las zonas aptas para riego con mayor detalle, descartando
las zonas clasificadas como no aptas (fase de preinversión). En esta fase, se realizarán algunos estudios
complementarios recomendados para verificar algunos problemas y limitaciones detectados, además se
llevara a cabo un estudio de suelos más detallado a nivel de clases y subclase. Para tal efecto, se utilizará la
metodología propuesta por el Bureau of Reclamation del os EE.UU. de Norte América (1953,1973) (ver
Anexo 3), y de acuerdo a las zonas agroecológicas y unidades de paisajes, descritas en el área de interés.
Además, en zonas potenciales a la sodificacion de suelos, se debe dar énfasis a la determinación de sulfatos
tanto en su capa arable como en el sub suelo, esto con el propósito de determinar el potencial de
neutralización de sodio que puede tener este suelo de manera natural.
Recurso agua
Para el recurso de agua, se utilizara la información de la fase de Preinversión. Sin embargo, en esta fase la
evaluación del recurso agua debe ser completada con evaluaciones y mediciones tanto en la época húmeda
como seca del año, principalmente en lo referente a algunos metales pesados, debido a la existencia de
fuentes de contaminación existentes en la parte alta y media de la cuenca o microcuenca o debido al uso
intensivo de agroquímicos aguas arriba, para estos fines el evaluador deberá considerar los parámetros más
importantes.
La metodología para la evaluación y clasificación de aguas para riego, en esta fase, deberá ser la misma que
se presenta para la Fase de Preinversión (ver Anexo 6).
Proyectos de ampliación
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Fase de Identificación
Recurso suelo
En caso de tratarse de las mismas unidades de paisaje, solo se llevará a cabo una evaluación comparativa
entre los suelos regados y los nuevos, para determinar el posible impacto que haya sufrido el recurso suelo
debido al mal manejo de sus recursos o debido a su calidad.
En este sentido, para este tipo de proyectos, también se deberá emplear la metodología Cualitativa y
Semmicuantitativa, propuesta en el caso anterior, empleándose también la Tabla 1 para la Clasificación de
suelos por su Aptitud para Riego. Asimismo se deberá considerar la determinación cualitativa y cuantitativa
de los parámetros de pH, Conductividad Eléctrica (CEe) y Porcentaje de Sodio Intercambiable (PSI) en
extracto de suelo saturado, para la evaluación de impactos respecto a procesos de salinización y/o
sodificación.
En esta fase, se deberá establecer las recomendaciones de ampliación de algunos estudios cuantitativos
para la fase de Preinversión, en función al grado de impacto de riego identificado. Asimismo, para el caso de
que las aguas puedan contener metales pesados debido a las actividades mineras o existencia de pasivos
ambientales en la parte alta, se recomendará estudios complementarios para la fase de Preinversion.
Las metodologías de evaluación y clasificación de suelos a adoptarse son las mismas que se emplean en el
caso de identificación de proyectos nuevos (ver Anexo 1).
Recurso de agua
Previo al trabajo en esta fase, se debe recopilar información existente sobre la calidad y cantidad de aguas
con el objeto de analizarla y evaluarla y determinar su consistencia. Los parámetros que deben ser
considerados para la evaluación y clasificación de la calidad del agua para fines de riego son básicamente los
siguientes:
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En esta fase se evaluara y determinara la calidad del agua para el riego considerando las directrices actuales
del Sistema de Evaluación y Clasificación propuesto por la FAO (Ver Anexo 2), para este fin se debe emplear
los resultados de los parámetros determinados en laboratorio.
Fase de Preinversión
Recurso suelo
Para esta fase, en el caso de que las áreas antiguas presenten impactos marcados en relación a los suelos no
regados y es necesario realizar algunos estudios complementarios de acuerdo a las recomendaciones de la
primera fase, se realizara u n estudio más preciso de evaluación comparativa entre estos suelos.
En función al grado de impacto del riego identificado, será necesario recomendar la implementación de
prácticas de manejo y conservación de suelos y manejo del agua de riego, en función a los cultivos a
sembrar, clima, aspectos socioeconómicos y otros.
En el caso de que las áreas a regar se encuentren en Unidades de Paisajes diferentes, se deberá aplicar la
metodología cualitativa y semicuantitativa propuesta para el caso de proyectos nuevos de riego,
asumiendo, como si se tratara de un proyecto nuevo para riego.
Las metodologías de evaluación y clasificación de suelos a adoptarse son las mismas que se emplean en el
caso de Preinversión de Proyectos de Riego Nuevos (ver Anexo 1).
Recurso agua
En el caso del recurso agua, será necesario ampliar la evaluación, a nivel más detallado, en caso de que en la
fase de identificación se haya detectado la presencia de fuentes contaminantes, sea por actividad minera u
otras clases de fuentes. En esta fase deberá detallarse la evaluación de agua tanto para la época seca como
para la época húmeda.
La evaluación de la calidad del agua para riego deberá basarse en las normas que se presentan para los
casos de proyectos nuevos (ver Anexo 6).
Recurso de suelo
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la posibilidad de comparar con los suelos antiguos, será necesario aplicar la metodología de evaluación
propuesta para el caso de Diseño Final de Proyectos Nuevos de Riego (ver Anexos 1, 2, 3, 4 y 5).
Recurso agua
Para esta fase, no será necesario realizar otros estudios de la fuente de agua, sino se repetirá la información
obtenida de la Fase de Preinversión
6. Recomendaciones de manejo
Manejo de suelo
Objetivos, métodos
Manejo de agua
Objetivo, métodos
Manejo de cultivos
Objetivo, métodos
Manejo con riego tecnificado
Recomendaciones Normas de Clasificación
7. Anexos
Cuadros.
Tablas.
Métodos específicos.
Plantas indicadoras, etc.
Cálculos ejemplares.
Laboratorio (referencias).
Licenciatura especifica.
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ANEXOS
ANEXO 1. CLASIFICACION DE SUELOS CUALITATIVA Y SEMICUANTITATIVA PARA FINES DE RIEGO,
(PROYECTOS DE MICRORIEGO Y RIEGO) ........................................................................................21
TABLAS
Tabla 1. Evaluación y Clasificación de Suelos por su Aptitud para Riego, en Base a Determinaciones
Cualitativas y Semicuantitativa en el Terreno. ................................................................................21
Tabla 2. Directrices para Evaluar los Problemas de Salinidad del Agua de Riego (Sistema de la FAO, 1987).
...........................................................................................................................................................23
Tabla 3. Directrices para Evaluar la Calidad del Agua de Riego Según los Problemas de Infiltración
(Sistema de la FAO) ...........................................................................................................................24
Tabla 4. Concentración de Calcio (Cax2+) en el Agua del Suelo, contenida en el suelo cerca de la
superficie, que resultaría de regar con agua de una determinada CE y un determinado valor de
HCO 3-/Ca2+ (FAO) ..............................................................................................................................26
Tabla 5. Directrices para Evaluar la Calidad del Agua de Riego, Según los Problemas de Toxicidad Iónica
(Na, Cl, B, Nitratos, Bicarbonatos) a los Cultivos (Sistema de la FAO, 1987) ..................................29
Tabla 6. Directrices Orientativas para Evaluar la Calidad del Agua de Riego Según el Riesgo de Obstrucción
en Riego Localizado (Sistema de la FAO, 1987) ................................................................................29
Tabla 7. Riesgo de obstrucción según índice de Langelier ............................................................................30
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Tabla 8. Calculo de pHc ....................................................................................................................................31
Tabla 9. Clases de Tierras Según su Aptitud para el Riego, Sistema del US Bureau of Reclamation (USBR,
1973) ..................................................................................................................................................33
Tabla 10. Especificaciones para la Clasificación Detallada de Terrenos por su Aptitud para Riego (Sistema
de Bureau of Reclamation de los EE.UU, 1953, 1973) ...................................................................36
Tabla 11. Clasificación de Suelos de Acuerdo a su Salinidad en Base a la Conductividad Eléctrica en
Extracto de Saturación (CEe) ..........................................................................................................40
Tabla 12. Clasificación de Suelos Según su PSIe (Massoud 1971) ..................................................................40
Tabla 13. Sistema de Clasificación de Suelos por Salinidad y Modicidad ......................................................41
Tabla 14. Límites Permisibles de Metales en Suelos ......................................................................................44
Tabla 15. Límites de Tolerancia de Boro para los Cultivos (Wilcox 1960) .....................................................45
Tabla 16. Clasificación de los Cuerpos de Agua según su Aptitud de Uso .....................................................46
Tabla 17. Valores Máximos Admisibles de Metales Pesados y otros Parámetros en Cuerpos Receptores .46
Tabla 18. Límites Permisibles de Metales Pesados y otros en Aguas para Uso Agrícola y riego (Sistema
FAO).................................................................................................................................................48
Tabla 19. Límites de contenido de algunos Plaguicidas y otros Compuestos Químicos en el agua .............49
Tabla 20. Características de los Suelos según su Cobertura Vegetal Nativa .................................................51
Tabla 21. Métodos Analíticos de Laboratorio y Algunas Determinaciones de Campo para Suelos y Aguas
con Fines de Riego ..........................................................................................................................69
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ANEXO 1. CLASIFICACION DE SUELOS CUALITATIVA Y SEMICUANTITATIVA PARA FINES DE RIEGO,
(PROYECTOS DE MICRORIEGO Y RIEGO)
En base a las características o atributos del suelo evaluados en el terreno durante la fase de Identificación
para un proyecto de riego (Proyecto de Microriego y Riego) y luego de realizar una evaluación Cualitativa y
Semicualitativa de estos atributos superficiales (Pendiente, Microrelieve, Anegamiento, Textura Y
Salinidad/Sodicidad, Inundación, Erosión, etc., e internos (con ayuda de una calicata abierta), donde se
determina la Profundidad efectiva del suelo, Textura, Pedregosidad, Salinidad/Sodicidad, color del suelo
(para determinar procesos de óxido/reducción, por la presencia de horizontes impermeables o una capa
freática superficial, y otros. Se realizará una Clasificación de Suelos con fines de riego.
En la tabla 1 se muestran una evaluación cualitativa y semicuantitativa para clasificar los suelos para fines
de riego, en base algunos atributos e indicadores detectados durante la fase de identificación
Tabla 1. Evaluación y Clasificación de Suelos por su Aptitud para Riego, en Base a Determinaciones
Cualitativas y Semicuantitativa en el Terreno.
LIMITADAMENTE
CARACTERISTICAS DE ARRABLES NO ARABLE
ARABLE (Muy poco
LOS TERRENOS (Apta para Riego) (No Apta para Riego)
Apta para Riego)
Arenosa a Arcillosa Muy Arenosa o Muy
Franco a Arcilloso muy
Permeable (arcillosa Arcillosa, sin estructura
TEXTURA DEL SUELO permeable (arcillosa
con estructuras con (problemas de
Al Tacto (0-3 cm de con estructura granular Arenosa o Arcillosa
granular a bloques sub drenaje excesivo o muy
profundidad) a bloques sub granular
granular con materia escaso,
con materia orgánica)
orgánica) respectivamente)
PROFUNDIDAD
EFECTIVA (cm) A
materiales
100-75 0-75 25-50 < 25
permeables (arena,
ripio, grava, arcilla
etc.)
Se observa de poca a
moderada presencia
Se observa alta
No se observan sales de sales (poco
No se observan sales salinidad 8aflramiento
(no hay afloramientos afloramiento
SALINIDAD (capa (no hay afloramientos salino extenso)con
salinos). blanquecino), no hay
superficial) salinos). eriales o presencia
No hay plantas presencia de plantas
No hay plantas halófilas marcadas de plantas
indicadoras de salinidad halófilas asociada a
halófitas
plantas indicadoras
de salinidad
Existe (Agregados Existente (sin
superficiales, estructura, fojo y
débilmente blandos al pisar, con
No existe (Suelo No existe (Suelo estructurados, en costras superficiales,
SODICIDAD
Normal) aparentemente normal) subsuelo estructura drenaje pobre, sin
laminar)y presencia vegetación o con
de plantas resistentes especies resistentes a la
a la sodicidad sodicidad.
13 – 25
0 – 13 25 – 55
PENDIENTE (%) Moderadamente > 55 Muy Escarpado
Plano ha Inclinado Escarpado
escarpado
PROFUNDIDAD DE LA >150 5 – 100
- -
CAPA FREATICA (cm): >125 50 – 75
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FRANCO O MAS
FINO
ARENOSO
Restringido (por
DRENAJE INTERNO Bueno Restringido capas u horizontes -
impermeables)
Inundación ocasional Inundación ocasional Inundación frecuente
Inundación muy
INUNDACION (3 – 5 años) (3 – 5 años) (1 – 3 años)
frecuente destructiva
No limitante No limitante Dañina
Nota: es necesario aclarar que para cada suelo, no es imprescindible considerar todos los parámetros
indicados en la tabla, así por ej: si se trata de áreas con topografías accidentada, no es necesario
considerar para los suelos ubicados en terreno muy escarpados la salinidad, sodicidad o problemas de
inundación.
pág. 22
ANEXO 2. EVALUACION Y CLASIFICACION DE AGUAS PARA FINES DE RIEGO
Para evaluar la salinidad del agua para riego, y consiguientemente su clasificación, requiere determinar la
concentración total de las sales disueltas en esta. Esta concentración deberá ser determinada a través de la
medición de la Conductividad Eléctrica (CE) del agua, este parámetro puede ser expresado en dS/m
(deciSiemens por metro) o alternativamente en mmho/cm (milimhos por centímetro) o µmhos/cm
(micromhospor centímetro) dado que en el agua a menudo los valres de CE son muy pequeños.
dS/m = mmhos/cm
µS/cm = µmhos/cm
En base a la CE del agua, se puede evaluar y clasificar su calidad según su Salinidad con fines de riego, donde
se recomienda utilizar las directrices, propuestas por la FAO (1987).
Tabla 2. Directrices para Evaluar los Problemas de Salinidad del Agua de Riego (Sistema de la FAO, 1987).
Donde:
En el suelo cuando la velocidad de infiltración es baja (< 3 mm/h) puede ocurrir que las plantas no
dispongan de la suficiente cantidad de agua, aparte de originar otros problemas como el anegamiento,
formación de costras superficiales, falta de aireación, exceso de malas hierbas, podredumbre radical, etc.
En el sentido que al igual que ocurre con la salinidad se produce una reacción en el suministro de agua
aunque provocado por causas diferentes: con una infiltración deficiente, se reduce la cantidad de agua que
penetra en la zona radical (Riozozfera), mientras que con la salinidad se reduce la disponibilidad de agua
que ya está contenida en la zona radical.
pág. 23
La velocidad de infiltración depende de las características físicas y químicas del suelo, pero también puede
ser influenciada por el agua de riego que se aplica a este. Una concentración de sales importante en el agua
de riego, aumenta la velocidad de infiltración, mientras que una concentración baja de sales o una
proporción alta de sodio con respecto al calcio y magnesio en esta, disminuye su velocidad. Los iones de
calcio y magnesio son favorables para una buena estabilidad estructural del suelo, mientras el ion sodio es
desfavorable.
En ese sentido, para evaluar los problemas de infiltración en el suelo, provocados por la claridad de agua de
riego, se utiliza el conocido índice SAR O RAS (Relación de Adsorción de Sodio), que valora la proporción
relativa de sodio con respecto al calcio y magnesio y viene definido por la fórmula:
𝑁𝑎⁺
𝑅𝐴𝑆 =
√(𝐶𝑎2+ + 𝑀𝑔2+ )/2
Dónde:
Nota.- Este índice RAS debe ser corregido según el procedimiento que se detallara más adelante.
Para la evaluación y clasificación del agua de riego, con respecto a los problemas de infiltración, se
recomienda utilizar las siguientes directrices, propuesta por la FAO (1987), que se basa en función de la CE y
de la RAS de agua de riego.
Tabla 3. Directrices para Evaluar la Calidad del Agua de Riego Según los Problemas de Infiltración (Sistema
de la FAO)
En base a las directrices de la tabla, se puede pronosticar que para determinado valor de RAS la velocidad
de infiltración disminuirá a medida que se reduce la salinidad del agua (CEa)
pág. 24
Por otro lado es muy importante considerar lo siguiente:
Como se ha indicado anteriormente, el índice RAS calculado, considera los problemas de infiltración del
agua en el suelo, como resultado de un contenido excesivo de sodio en el suelo con respecto al calcio y
magnesio. Sin embargo esta relación, no toma en cuenta la variación del contenido de calcio en el suelo,
que puede aumentar (por disolución de minerales de calcio) o disminuir (por precipitación, generalmente
en forma de carbonatos).
La disolución de Calcio, es favorecida con el aumento del contenido de agua y con la presencia de dióxido de
carbono disuelto en el agua, mientras que su precipitación se produce con la presencia de calcio abundante
junto con carbonatos y sulfatos.
Por lo arriba indicado, después de regar, el contenido de calcio disuelto en el suelo puede modificarse (por
dilución o por precipitación). Mientras que la cantidad de sodio soluble en el suelo, permanece constante,
ya que su solubilidad y precipitación no son afectadas por estos factores indicados. En cambio, su
concentración, puede variar, aumentando (por efecto de la extracción el agua por la planta) o disminuyendo
(por efecto de aumentar la cantidad de agua).
Como el índice RAS expuesto anteriormente, no toma en cuenta las modificaciones del contenido de calcio
ocurridas después del riego, se recomienda calcular el RAS corregido, el que considera el equilibrio
esperado después del riego, por los procesos de dilución y precipitación arriba indicados. Este RAS corregido
presupone la existencia en el suelo de minerales de calcio y la ausencia de precipitaciones de magnesio.
𝑁𝑎⁺
𝑅𝐴𝑆 =
√(𝐶𝑎2+ + 𝑀𝑔2+ )/2
Donde:
El valor de Ca x²⁺, representa la concentración final de calcio que permanece en la solución del suelo luego
del riego, teniendo en cuenta la conductividad del agua aplicada, el contenido de bicarbonato en relación a
su propio contenido de calcio y la presión parcial del dióxido de carbono ejercida en los primeros milímetros
del suelo.
pág. 25
USDA (1954), pues sobre valora la salinidad del agua y asigna un riesgo de sodicidad creciente a medida que
se incrementa la salinidad; estas recomendaciones son hechas por muchos autores, entre ellos porta et al.
(1994), FUENTES (1998).
NOTA.- No se recomienda utilizar el RAS ajustado de la propuesta de FAO de 1976, ya que se ha comprobado que
sobrevalora la peligrosidad del sodio. Tampoco se recomienda utilizar el diagrama del USDA (1954), pues sobrevalora
la salinidad del agua y asigna un riesgo de sodicidad creciente a medida que se incrementa la salinidad; estas
recomendaciones son hechas por muchos autores, entre ellos Porta et al. (1994), Fuentes (1998).
Tabla 4. Concentración de Calcio (Cax2+) en el Agua del Suelo, contenida en el suelo cerca de la superficie,
que resultaría de regar con agua de una determinada CE y un determinado valor de HCO 3-/Ca2+ (FAO)
0,25 4,51 4,65 4,76 4,92 5,06 5,22 5,44 5,62 5,91 6,15 6,52 6,82
0,30 4,00 4,12 4,21 4,36 4,48 4,62 4,82 4,98 5,24 5,44 5,77 6,04
0,35 3,61 3,72 3,80 3,94 4,04 4,17 4,35 4,49 4,72 4,91 5,21 5,45
0,40 3,30 3,40 3,48 3,60 3,70 3,82 3,98 4,11 4,32 4,49 4,77 4,98
0,45 3,05 3,14 3,22 3,33 3,42 3,53 3,68 3,80 4,00 4,15 4,41 4,61
0,50 2,84 2,93 3,00 3,10 3,19 3,29 3,43 3,54 3,72 3,87 4,11 4,30
0,75 2,17 2,24 2,29 2,37 2,43 2,51 2,62 2,70 2,84 2,95 3,14 3,28
1,00 1,79 1,85 1,89 1,96 2,01 2,09 2,16 2,23 2,35 2,44 2,59 2,71
1,25 1,54 1,59 1,63 1,68 1,73 1,78 1,86 1,92 2,02 2,10 2,23 2,33
1,50 1,37 1,41 1,44 1,49 1,53 1,58 1,65 1,70 1,79 1,86 1,97 2,07
1,75 1,23 1,27 1,30 1,35 1,38 1,43 1,49 1,54 1,62 1,68 1,78 1,86
2,00 1,13 1,16 1,19 1,23 1,26 1,31 1,36 1,40 1,48 1,54 1,63 1,70
2,25 1,04 1,08 1,10 1,14 1,17 1,21 1,26 1,30 1,37 1,42 1,51 1,58
2,50 0,97 1,00 1,02 1,06 1,09 1,12 1,17 1,21 1,27 1,32 1,40 1,47
3,00 0,85 0,89 0,91 0,94 0,96 1,00 1,04 1,07 1,13 1,17 1,24 1,30
3,50 0,78 0,80 0,82 0,85 0,87 0,90 0,94 0,97 1,02 1,06 1,12 1,17
4,00 0,71 0,73 0,75 0,78 0,80 0,82 0,86 0,88 0,93 0,97 1,03 1,07
4,50 0,66 0,68 0,69 0,72 0,74 0,76 0,79 0,82 0,86 0,90 0,95 0,99
5,00 0,61 0,63 0,65 0,67 0,69 0,71 0,74 0,76 0,80 0,83 0,88 0,93
7,00 0,49 0,50 0,52 0,53 0,55 0,57 0,59 0,61 0,64 0,67 0,71 0,74
10,00 0,39 0,40 0,41 0,42 0,43 0,45 0,47 0,48 0,51 0,53 0,56 0,58
pág. 26
20,00 0,24 0,25 0,26 0,26 0,27 0,28 0,29 0,30 0,32 0,33 0,35 0,37
30,00 0,18 0,19 0,20 0,20 0,21 0,21 0,22 0,23 0,24 0,25 0,27 0,28
ESTUDIO DE CASO: Aguas Represa ESCANA, Yamparéz - Comunidad Escana, Dpto. de Chuquisaca:
- Evaluar la calidad del Agua de riego (de la Represa Escana) según el riesgo de problema de
infiltración. La muestra de agua analizada dio los siguientes resultados:
pág. 27
Ca ²⁺: 0,42 meq/l
Mg²⁺: 0,33 meq/l
Na⁺: 0,16 meq/l
CO₃H: 0,88 meq/l
Solución:
𝐻𝐶𝑂 3− (𝑚𝑒𝑞/𝑙) 0.88
Calculando la relación HCO₃⁻/Ca²⁺: 𝐶𝑎 ²⁺(𝑚𝑒𝑞/𝑙)
= 0.42 = 2.095
𝑁𝑎⁺
Para calcular el RAS corregido RASc = ,
√𝐶𝑎 𝑥 ²+𝑀𝑔 ²⁺)/2
Primero hallamos Ca x²⁺, con la tabla 19 (sistema de FAO, para corregir el RAS):
- Se debe realizar para este caso, interpolaciones, ya que los valores de CE y HCO₃⁻/Ca²⁺, del
agua analizada, son valores intermedios entre los valores respectivos de cada eje de tabla
indica realizar el procedimiento siguiente:
2,5 −2 2.095− 2
Para hallar valor de Cax²⁺: = despejando Cax²⁺=1,118
1,047−1.135 Cax2+ −1.135
0.16
Calculando el RASc = = RAS = 0,19
√1.118 +0.33)/2
Conclusión: Según las directrices el agua evaluada para riego, según los posibles problemas de
infiltración, presenta una restricción de uso de la clase severa.
2.3. Evaluación y Clasificación de Agua para Riego según la Toxicidad Iónica de Sodio, Cloro, Boro y otros
(Nitratos, Bicarbonatos y pH)
Los iones más peligrosos en el agua de riego en relación a las plantas, son el cloro, sodio y boro. La magnitud
de los daños dependerá de la concentración, volumen de agua absorbida y tolerancia del cultivo. Los
efectos son más inmediatos cuando aumenta la temperatura (en clima cálido o estación calurosa).
Así mismo, se consideran para esta clasificación el pH y los contenidos de nitratos y bicarbonatos para
cultivos sensibles.
Para la evaluación y clasificación del agua de riego, con respecto a los problemas de toxicidad iónica de
elementos, se recomienda utilizar las siguientes directrices, propuesta por la FAO (1987).
pág. 28
Tabla 5. Directrices para Evaluar la Calidad del Agua de Riego, Según los Problemas de Toxicidad Iónica
(Na, Cl, B, Nitratos, Bicarbonatos) a los Cultivos (Sistema de la FAO, 1987)
Sodio (Na)
Riego por superficie RAS <3 3 -9 >9
Riego por aspersión meq/l <3 >3 -
Cloruro (Cl⁻)
Riego por superficie meq/l < 4,0 4 – 10 > 10
Riego por aspersión meq/l < 3,0 > 3,0 -
Bicarbonato (HCO₃⁻)
Riego por aspersión meq/l < 1,5 1,5 – 8,5 > 8,5
pH Amplitud normal: de 6,5 – 8,4
Nota: se debe considerar que la mayoría de los cultivos arbóreos y plantas leñosas son sensibles al
sodio y al cloruro; en estos casos y para riego por superficie conviene utilizar los valores indicados. En
cambio, la mayoría de los cultivos anuales no son sensibles a estos iones; para ellos se debe utilizar la
tabla de tolerancia a la salinidad presentada en el Apéndice 1.
2.4 Evaluación y Clasificación de Aguas para Riego según el riesgo de obstrucciones en el riego localizado
Para Sistema de Riego Localizado, también es necesario evaluar el riego de Obstrucción, que puede sufrir la
salida del agua en los emisores (válvula). Estas obstrucciones pueden ser producidas por sólidos en
suspensión, sustancias químicas y microorganismos contenidos en el agua de riego. Cuando actúan a la vez
varios de estos elementos, la solución del problema será más difícil.
Tabla 6. Directrices Orientativas para Evaluar la Calidad del Agua de Riego Según el Riesgo de Obstrucción
en Riego Localizado (Sistema de la FAO, 1987)
pág. 29
FÍSICA
Sólidos en suspensión mg/l < 50 50 – 100 > 100
QUÍMICA
pH < 7,0 7,0 – 8,0 > 8,0
Sólidos Solubles mg/l < 500 500 – 2.000 > 2.000
Manganeso mg/l < 0,1 0,1 – 1,5 > 1,5
Hierro mg/l < 0,1 0,1 – 1,5 > 1,5
Ácido sulfhídrico mg/l < 0,5 0,5 – 2,0 > 2,0
BIOLOGÍA
Poblaciones bacterianas Max. Num./ml < 10.000 10.000 – 50.000 > 50.000
Las precipitaciones químicas en los emisores, se producen por exceso de carbonatos o sulfatos de calcio o
magnesio y también por la oxidación de hierro, así mismo estos riesgos son favorecidos por altas
temperaturas y pH altos.
Existe también el riesgo de precipitación del calcio, que puede ser valorado mediante el Índice de
Saturación Langelier (IL), según el cual el carbonato calcio precipita cuando alcanza su límite de saturación
en presencia del bicarbonato. Este índice está definido por la siguiente formula:
IL = pHreal – pHc
El pHc es un valor teórico calculado del pH del agua de riego en contacto con el calcio y en equilibrio con
CO₂ del suelo. Se calcula usando la formula siguiente con valores hallados de la Tabla 18.
PHc = X + Y + Z
Donde:
El riesgo de obstrucción por precipitación del calcio del agua, según el índice de Langelier se determina con
la siguiente tabla.
pág. 30
>1 Muy alto
Suma de
Concentraciones
meq/I
Ca2+ + Mg2+ + Na+ X
Ca2+ + Mg2+ Y
CO3- + CO3H- Z
0,05 2,00 4,60 4,30
0,10 2,00 4,30 4,00
0,15 2,00 4,10 3,80
0,20 2,00 4,00 3,70
0,25 2,00 3,90 3,60
0,30 2,00 3,80 3,50
0,40 2,00 3,70 3,40
0,50 2,10 3,60 3,30
0,75 2,10 3,40 3,10
1,00 2,10 3,30 3,00
1,25 2,10 3,20 2,90
1,50 2,10 3,10 2,80
2,00 2,20 3,00 2,70
2,50 2,20 2,90 2,60
3,00 2,20 2,80 2,50
4,00 2,20 2,70 2,40
5,00 2,20 2,60 2,30
6,00 2,20 2,50 2,20
8,00 2,30 2,40 2,10
10,00 2,30 2,30 2,00
12,00 2,30 2,20 1,90
Ejemplo de la 15,00 2,30 2,10 1,80 evaluación del Riesgo de
20,00 2,40 2,00 1,70
Obstrucción en Riego Localizado
30,00 2,40 1,80 1,50
50,00 2,50 1,60 1,30
80,00 2,50 1,40 1,10
pág. 31
ESTUDIO DE CASO: Agua Represa ESCANA, Yamparaes – Comunidad Escana, Dpto. de Chuquisaca:
- Evaluar el Riesgo de Obstrucción en Riego Localizado del Agua de la represa Escana. La muestra de
agua analizada dio los siguientes resultados:
pH: 5,78
CEa: 0,117 dS/m
Ca²⁺: 0,42 meq/l
Mg²⁺: 0,33 meq/l
Na⁺: 0,16 meq/l
CO₃H⁻:0,88 meq/l
CO₃⁼: 0,0 meq/l
Sólidos en suspensión: 614,00 mg/l
Sólidos disueltos: 114,40 mg/l
Sólidos totales: 728, 40 mg/l
Solución
Sin embargo, esta agua, de acuerdo a su contenido de sólidos en Suspensión se clasifica en la categoría
Agua con Problema Grave de Riesgo de Obstrucción en Riego Localizado.
ANEXO 3. NORMAS PARA LA DETERMINACION DE CLASES Y SUB CLASES DE TIERRAS POR SU APTITUD
PARA RIEGO (SISTEMA DE CLASIFICACION DE SUELOS DEL BUREAU OF RECLAMATION DE LOS
EE.UU.)
pág. 32
La presente propuesta de Normatividad, recomienda el empleo del Sistema de Clasificación de Suelos de
Bureau of Reclamation de los EE.UU. (USBR, 1953, 1973) y sus adecuaciones a nuestro medio. Así mismo
esta evaluación de suelos para riego, permite determinar, la viabilidad técnica y económica del mismo.
Esta clasificación, utiliza las clases para los diferentes grados de aptitud del suelo para riego. La Clase de
Tierra apta para el Riego, es un agrupamiento de tierras que ofrecen semejanzas con respecto al grado de
las limitaciones y riesgos en el uso de la tierra para fines de riego.
Tabla 9. Clases de Tierras Según su Aptitud para el Riego, Sistema del US Bureau of Reclamation (USBR,
1973)
Debe aclararse que las Clases de Tierras aptas para el riego (1, 2, 3), indican de manera general las
limitaciones y riesgos que puedan afectar el Uso Agrícola de la Clase, pero no indica de alguna limitación
específica para el riego.
Clase 1
Las tierras de la Clase 1 (Arable), son Muy Apropiados para el Riego es decir son de mayor aptitud para la
agricultura bajo riego, producen rendimientos relativamente altos de un gran número de cultivos adaptados
a las condiciones climáticas de una región. Las superficies son planas a casi planas con suelos profundos, de
pág. 33
texturas medias variables y bien estructuradas, que permiten una fácil penetración de las raíces, aire y agua;
presentan un buen drenaje interno y una buena capacidad de retención de humedad.
También presentan una buena fertilidad natural y están libres de problemas de salinidad/sodicidad o
elementos tóxicos.
La incorporación de estas tierras a la agricultura es relativamente de bajo costo con un potencial económico
relativamente alto.
Clase 2
Las Tierras de la Clase 2 (Arable), son Moderadamente Apropiadas para el Riego en comparación con la
Clase 1, presentan algunas limitaciones, que reducen el número de cultivos y que requieren algunas
prácticas de manejo.
La capacidad productiva de estos suelos es menor que la Clase 1, por lo tanto su preparación y explotación
agrícola son más costosas.
Clase 3
Las Tierras de la Clase 3 (Arable), son poco Apropiadas para el Riego que los suelos de la clase 1 y 2, por que
presentan severas limitaciones de los factores: suelo, topografía y drenaje; reduciendo el número de
cultivos y requiriéndose de prácticas especiales de manejo y conservación, por ello tiene mayor costo de
explotación por lo que se disminuye su capacidad de pago.
Clase 4
Las Tierras de la Clase 4 (Limitadamente Arable), son Muy Poco Apropiadas para el Riego por que presentan
limitaciones muy severas, que registren el número de cultivos que se adaptan a estas condiciones.
Estas tierras requieren un manejo muy cuidadoso y/o de prácticas especiales de conservación de tierras. Las
tierras de Clase 4 deben ser capaces de producir por lo menos unas pocas cosechas.
Clase 5
Las Tierras (No Arable), no Atas para Riego por las severas limitaciones que presentan, sin embargo tienen
un valor potencial que justifica su clasificación tentativa, para luego de la realización de estudios especiales,
completar su clasificación.
Por medio de trabajadores es posible corregir los factores limitantes y lograr tierras más aptas para el riego.
De no ser posible corregir las limitaciones pasan por la Clase 6
Clase 6
Las Tierras de la Clase 6 (No Transformable), no son Aptas para el Riego presentan limitaciones muy severas
que no son posibles de corregir, por lo tanto no cumplen los requisitos de las clases 1, 2, 3 y 4.
pág. 34
Sin embargo, considerando los avances en las tecnologías y metodologías de riego, es posible considerar
que los suelos de clase 4 y 5, puedan ser utilizados bajo riego con métodos más modernos como aspersión o
goteo u otro, donde aspectos como una nivelación adecuada del suelo ya no es tan importante.
* Rizósfera, es la capa superficial hasta donde alcanzan las raíces de un cultivo o planta.
En la Clase de Tierra I, no se reconocen sub clases, en razón de que los suelos de esta, son los mejores y por
con siguiente no presentan limitaciones.
A continuación se detallan las principales limitaciones que presentan los suelos para RIEGO:
Son suelos cuya limitación dominante en su uso está en la zona radicular, pueden ser de textura: liviana o
muy pesada, pedregosidad, baja capacidad de retención de humedad, drenaje deficiente, baja fertilidad,
acidez, alcalinidad, etc.
Son suelos en que la topografía es el factor más limitante para su uso. Las fuertes pendientes, onduladas,
disectadas, o una combinación de estas características, determinan su clasificación en esta subclase
(especialmente para riego por gravedad).
Son suelos en los que el drenaje deficiente es factor dominante en su uso. Los criterios que determinan que
un suelo pertenezca a esta sub - clase son: drenaje deficiente (suelos arcilloso o arcillo limosos) o drenaje
excesivo (arenoso).
Los suelos de Sub – Clase son los que presentan exceso de agua siendo este el factor de riesgo o limitación
dominante en su uso. Entre los criterios para determinar que suelos pertenecen a esta sub – clase están los
pág. 35
siguientes: Drenaje deficiente (presencia de horizontes) impermeables, humedad constante, nivel freático
alto e inundaciones.
El uso de la letra “w” para esta limitación está relacionada con el término agua (wáter) del inglés.
Está conformado por suelos en que el principal problema de uso reside en la susceptibilidad a la erosión
(suelos con alto contenido de arena y limo) o suelos ubicados en pendiente.
En la tabla 10, se presenta a continuación a matriz de especificaciones generales para la Clasificación de las
Tierras Según la Aptitud para Riego.
Tabla 10. Especificaciones para la Clasificación Detallada de Terrenos por su Aptitud para Riego (Sistema
de Bureau of Reclamation de los EE.UU, 1953, 1973)
SUELOS
Comprende
tierras que no
Franco arenoso Arenosa franco Arenosa franco
TEXTURA DEL SUELO (0-30 cm de Arenosa franco Arenoso franco a tienen los
a Franco a Arcilloso muy a Arcilloso
profundidad) a Arcilloso Arcilloso requisitos
arcilloso permeable permeable
mínimos de las
anteriores.
PROFUNDIDAD EFECTIVA (cm)
A materiales permeables (arena, Suelos
ripio, grava, etc.) 100 75-100 0-75 25-50 - superficiales o
muy pedregosos
CANTOS o PIEDRAS (6,0-25 cm) 5% del volumen 10% del 15% del 35% del
% del suelo) volumen del volumen del volumen del
suelo suelo suelo
pág. 36
AFLORAMIENTOS ROCOSOS
60 30 15 9 - -
(separación entre ellos en m.)
Ninguno o muy
MICRORELIEVE Ligero Moderado Acentuado Muy acentuado -
ligero
DRENAJE
PROFUNDIDAD DE LA CAPA
FREÁTICA (cm):
- -
FRANCO O MAS FINO > 150 100-150 50-100 25-50
ARENOSO > 125 75-125 50-75 25-50
DRENAJE
Bueno Bueno Restringido Restringido - -
SUPERFICIAL
PROFUNDIDAD A UNA CAPA
>210 180-210 150-180 45-150 - -
IMPERMEABLE (cm)
Problemas
AIREACIÓN Sin problemas Restringida Restringida - -
leves
Medio lento
Lento (suelo (suelo saturado Extremadamente
Medio (suelo Medio (suelo
saturado 3-5 por 1 semana - lento (suelo
saturado por saturado por
DRENAJE INTERNO días) Rápido 10 días) Muy saturado por
pocos días 2-3 pocos días 2-3
(suelo saturado rápido (el suelo semanas o
días) días)
pocas horas) nunca está meses)
saturado)
pág. 37
Inundación Inundación Inundación Inundación
Inundación muy
ocasional ocasional ocasional frecuente
INUNDACIÓN frecuente
(3-5 años) (3-5 años) (3-5 años) (1-3 años)
destructiva
No limitante No limitante No limitante Dañina
Nota: este Sistema de Clasificación de Suelos para riego, debe ser considerado con preferencia solo en el
caso de que los proyectos de riego por gravedad (inundación, melgas, surcos y otros).
A continuación se presentan algunas aclaraciones o metodologías, que se requiere para algunos parámetros
en la tabla propuesta.
C.I.C es la capacidad de Intercambio Catiónico, La unidad de expresión es cmol (+) kg⁻¹ (centimol de carga (+) por Kg
de suelo) o meq/100 g (miliequivalente/100 gr de suelo). En ambas unidades el valor no cambia.
T.B.I es el Total de Bases Intercambiables o Cambiables, se expresa en unidades cmol(+).kg⁻¹ (centimmol de carga
(+) por kg de suelo) o meq/100 g de suelo). En ambas unidades el valor no cambia.
El fósforo disponible (Pd) es conocido también por fósforo asimilable o aprovechable por las plantas, siendo el
termino correcto el de fósforo disponible (del total de P solo una parte está disponible)
La determinación del grado de salinidad de los suelos a falta de métodos prácticos de campo, se debe
realizar a través de la determinación de la Conductividad Eléctrica (CE) en laboratorio, el método de
obtención deberá ser a través del extracto de saturación, consiguiéndose entonces la CEe en unidades de
dS/m (deci Siemens por metro) o mmhos/cm (milimhos por cm), o sus unidades derivadas.
Por otro lado, la tolerancia de los cultivos a la salinidad, se basa generalmente en la Conductividad Eléctrica
del suelo determinado en extracto de saturación.
- Si la CEe del suelo y subsuelo (referido a un perfil de 100 cm), son similares, no hay problemas para
caracterizar el suelo.
- Si la CE de los subsuelo es mayor que los primeros centímetros, se caracterizara el perfil por el valor
que corresponde al promedio de los 100 cm., ya que la distribución de sales es un proceso dinámico
cuando se incorpora al riego.
- Si la CE de los rimeros centímetros es mayor que el subsuelo, no corresponde castigar a todo el
perfil. Se lo caracterizara por el valor menor, recomendado la necesidad de lavar los primeros
centímetros del perfil, previo a la instalación de algún cultivo.
pág. 38
Al igual que la salinidad, el parámetro de Alcalinidad o Sodicidad del Suelo solo se puede evaluar a través de
métodos indirectos, es decir en laboratorio en una muestra de suelo. Este parámetro deberá ser
determinado mediante de la siguiente relación, propuesta por Richards et al. (1954):
Donde la Razón de Adsorción de Sodio (RAS) debe ser calculada a partir de la siguiente relación matemática:
𝑁𝑎⁺
𝑅𝐴𝑆 =
√𝐶𝑎 ++ + 𝑀𝑔⁺⁺)/2
Donde:
Las concentraciones de los cationes solubles (Ca, Mg y Na) imprescindiblemente deben ser determinadas a
través del análisis en extracto de suelo saturado, a fin de conseguir una aproximación real de las
condiciones de alcalinidad en humedad natural del suelo; en ese sentido, el extracto del suelo saturado
permite aproximarse a las condiciones naturales de humedad de los suelos.
Otras consideraciones que se deben tomar en cuenta, en la evaluación de la alcalinidad, son las siguientes:
- Si el suelo presenta el problema en los primeros centímetros, se lo caracterizara por el valor que le
corresponde.
Considerando, que en las regiones áridas y semiáridas y subhúmedas del país, debido al déficit hídrico
existente en la mayor parte del año, es necesario el riego de cultivos o forrajes. Además en estas zonas, es
común la presencia de suelos con problemas de lalinidad/sodicidad. Por lo tanto, es importante para definir
el grado de la presencia o acumulación de sales en el suelo, determinar su presencia y clasificarlas,
considerando que estas afectan a los rendimientos de los cultivos y al propio suelo.
pág. 39
El sistema que mejor considera el grado de afectación de las sales a los cultivos es el de la United States
Salinity Laboratory de Riverside que establece los siguientes grados de salinidad en base a la CEe dS/m.
El PSI elevado en los suelos, afecta principalmente a sus propiedades y no directamente a los cultivos,
aunque indirectamente estos se ven perjudicados por el deterioro de ciertas propiedades como estructura,
permeabilidad, pH, etc. Así mismo, altos PSI, pueden afectar a determinados cultivos sensibles al sodio
adsorbido por el complejo de cambio y cuya presencia provoca en ellos problemas de toxicidad (ver
Apendice1).
pág. 40
Con el objetivo de efectuar una clasificación especifica de suelos, en función a sus contenidos de sales y
sodio, se propone el Sistema de la FAO, modificado por Moreau (1998):
SS SS-A SS-A*
Conductividad
15 S S-A S-A*
4 N A A*
0 15 30
Donde:
N Suelos Normal
S Suelo Salino
A Suelos Sódico
A* Suelos Altamente Sódico
S-A Suelo Salino Sódico
S - A* Suelo Salino Altamente Sódico
SS Suelo Altamente Salino
SS – A Suelo Altamente Salino Sódico
SS - A* Suelo Altamente Salino Sódico
Diversos estudios realizados por varios autores en el país, evidencian la presencia de metales pesados en los
sedimentos y suelos del Altiplano boliviano y del Bosque Paleozoico de la Cordillera Oriental, los mismos en
la mayoría de los casos han sido relacionados principalmente con las actividades mineras que se desarrollan
a estas regiones. Por otro lado con las aguas de riego en algunos sectores del Altiplano y los Valles,
contienen una serie de metales pesados y otros, luego de su aplicación al suelo pueden ir acumulándose
paulatinamente en estos, con el riesgo de que de acuerdo a su biodisponibilidad sean transferidos a los
productos agrícolas, forrajes y luego, dentro de la cadena trófica afecten a los animales y al hombre,
causando una serie de enfermedades o daños.
pág. 41
Entre los metales más tóxicos para el medio, se debe considerar principalmente al mercurio, plomo, cadmio,
cobre. Níquel y cobalto y por otro lado el arsénico. El Hg, Pb, Cd y As, son particularmente tóxicos para los
animales. Los restantes (Cu, Ni, y Co) son más tóxicos para las plantas (fitotóxicos). Por otro lado, varios de
estos elementos son también tóxicos para el hombre ya que de acuerdo al tipo de contaminante pueden
afectar a los huesos, riñones, sistema nervioso, mutaciones y problemas cancerígenos y otros males (Orsag,
2003).
Como varios de los elementos contaminantes son necesarios para el crecimiento y desarrollo de las plantas
en pequeñas cantidades (Cu, Zn y Co) entre los metales pesados, y el B entre los no metales, requieren ser
determinados con precisión, ya que en cantidades un poco mayores son tóxicos y por consiguiente el límite
entre ambos márgenes es muy angosto (Orsag, 2003).
En este sentido, otro factor inherente al suelo que afecta su productividad agrícola es la concentración de
metales pesados en niveles tóxicos. Dado la complejidad del comportamiento de estos elementos en los
suelos, respecto a su disponibilidad para las plantas, hasta la actualizad no existe ningún sistema de
clasificación de suelos respecto a este factor. Sin embargo algunos autores presentan límites referenciales
de contenidos de algunos metales pesados, que permiten la evaluación distinguiendo concentraciones
permisibles y toxicas.
Así, tal como lo indican García y Dorronsoro (1998), la toxicidad de un suelo debida a los metales pesados y
elementos asociados es una consecuencia directa de sus concentraciones en las fases bioasimilables de
este; es decir, la solución del suelo y las formas adsorbidas. Esta fracción asimilable se equipara a la extraída
con ayuda del Ácido Dietilentriamino pentaacético (DTPA) o el Ácido Etilendiamino Tetraacético (EDTA) y a
ella se deberían referir los diferentes niveles de toxicidad. Pero por la dificultad de extracción, es por lo que
las normativas prefieren evaluar la cantidad total del elemento toxico presente. Se supone que existe un
equilibrio entre la fase soluble y la cantidad total presente (Lindsay, 1979, calcula que el 10% del total se
encuentra en fase soluble). Pero en esta correspondencia intervienen numerosos factores tanto del
elemento toxico, como de las características del propio suelo. Por ejemplo, para una misma concentración
de elementos tóxicos en un suelo, la concentración de la fase asimilable, será mucho más elevada para un
suelo ácido que para uno neutro o alcalino.
Hay que diferenciar que la concentración del metal en la fase asimilable en el suelo es una medida directa
de la peligrosidad real o presente, mientras que la concentración total del mismo, solo es válida para
evaluar la peligrosidad potencial o futura representando una manera indirecta y aproximada de la toxicidad
actual de un suelo.
En la tablea siguiente se presenta los parámetros de Límites Permisibles de Contenidos de Metales Pesados
en suelos propuestos por varios autores, siendo los cuatro primeros los que se basan en una revisión de
normas de la FAO/OMS, europeos y otras. Se debe considerar que para cada agente contaminante un solo
pág. 42
valor no puede representar el nivel de toxicidad válido para todos los tipos de suelos, para todos los cultivos
y para todos los diferentes usos, debiendo ser considerados como preliminares para las evaluaciones en
nuestro medio.
pág. 43
Tabla 14. Límites Permisibles de Metales en Suelos
Zinc (Zn) 300 3-50 300 400 150-300 200 3000 300
a) FAO, por Siles María (1997) y Kloque (1980) 1. Nivel de referencia en Holanda. Nivel indicativo por encima
b) Kloque (1980) del cual hay contaminación demostrable.
2. Nivel C en Holanda. Superado este valor el suelo ha de ser
c) Concentración Total Crítica (CTC), Rams y Steines (1994)
saneado.
d) Concentración Crítica (CC), Unión Europea 3. Máximo aceptable en suelos agrícolas (CE, 1986)
pág. 44
5.2. Directrices para la Evaluación del Boro en los Suelos
El boro es un micronutriente importante para las plantas, cuyo intervalo de concentraciones entre
los límites de carencia y toxicidad es muy reducido. Las deficiencias limitan los rendimientos y la
calidad de las cosechas, pero su exceso crea igualmente problemas graves.
Las carencias en boro se presentan en suelos con régimen de humedad percolante, o reacciones
ácidas, mientras que las toxicidades van asociadas a suelos de climas semiáridos y áridos (Porta et
al., 1994).
Para la evaluación de los contenidos de boro en el suelo, para su detección de riesgo de toxicidad
para las plantas, al igual que en la salinidad y alcalinidad, se recomienda que su determinación sea
en extracto de suelo saturado, tal como lo establece Wilcox (1960). Este autor determina los
siguientes límites de tolerancia de boro en relación a las plantas:
Tabla 15. Límites de Tolerancia de Boro para los Cultivos (Wilcox 1960)
Concentración de Boro en
Extracto de Saturación del Producción de los Cultivos
Suelo (mg/1)
<0,7 Los cultivos no se ven prácticamente afectados.
0,7 -1,5 Límite de marginalidad
1,5-2,0 Problemas de toxicidad más o menos acusada,
según la planta de que se trate.
Distinguiendo los problemas de toxicidad, varios autores establecen los criterios de tolerancia de
cultivos de acuerdo a análisis de boro en extracto de saturación, entre ellos FAO (1987), Bresler y
Cois (1982) y Wilcox (1960), que en el apéndice 1 se detalla.
Para la clasificación de las aguas de los diferentes cuerpos de agua para fines de riego, respecto del
contenido de metales pesados y otros como arsénico, se considera la normativa de los Criterios de
Clasificación establecidos en el Reglamento en Materia de Contaminación Hídrica (RMCH) de la Ley
1333 de Bolivia.
El RMCH define en el Capítulo III, artículo 6o, de la Ley 1333, como parámetros básicos a los
siguientes:
pág. 45
- Cianuros CN-1 - Níquel
(SI) Es aplicable, puede tener todos los usos indicados en las clases correspondientes.
(*) No en represas usadas para abastecimiento de agua potable
(**) No para navegación a motor
(***) No aplicable a acuíferos.
Tabla 17. Valores Máximos Admisibles de Metales Pesados y otros Parámetros en Cuerpos Receptores
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DQO mg/I <5 < 10 <40 <80
Sólidos Disueltos -
mg/I 1000 1000 1500 1500
Totales
Aceites y Grasas mg/I Ausente Ausente 0,3 1
Nitratos mg/I 20,0 c. N03 30,0 c. N03 50,0 c. N03 50,0 c. N03
Nitrógeno Total mg/I 5 c.N 12 c.N 12 c.N 12 c.N
Cloruros mg/I 0,02 0,1 0,2 0,2
Sulfatos mg/I 300 c. S04 400 c. S04 400 c. S04 400 c. S04
Boro mg/I 1.0 c.B 1.0 c.B 1.0 c.B 1.0 c.B
Sodio mg/I 200 200 200 200
Calcio mg/I 200 300 300 400
Magnesio mg/I 100 c. Mg. 100 c. Mg. 150 c. Mg. 150 c. Mg.
Arsénico mg/I 0.05 c. As. 0.05 c. As. 0.05 c. As. 0.05 c. As.
Mercurio mg/I 0.001 Hg. 0.001 Hg. 0.001 Hg. 0.001 Hg.
Plomo mg/I 0.05 c. Pb 0.05 c. Pb 0.05 c. Pb 0.1 c. Pb
Cadmio mg/I 0.005 0.005 0.005 0.005
Cromo Total mg/I 0.6 c. Cr + 3 0.6 c. Cr + 3 1.1 c. Cr + 3
Cromo Hexavalente mg/I 0.05 c. Cr. Total 0.05 c. Cr. + 6 0.05 c. Cr. + 6 0.05 c. Cr. + 6
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6.2. Evaluación según Normativa FAO
Tabla 18. Límites Permisibles de Metales Pesados y otros en Aguas para Uso Agrícola y riego (Sistema
FAO)
LIMITE
PARÁMETRO UNIDAD
PERMISIBLE
PH 6,5 - 8,4
N LM S
3,0 >3,0 -
Hierro mg/1 5
Manganeso mg/1 0,2
Zinc mg/1 2
Cobre mg/1 0,2
Níquel mg/1 0,2
N LM S
RAS
<3 3-9 >9
Referencias:
N = Ninguna
L M = Ligera – Moderada
S = Severa
pág. 48
6.3. Evaluación y Clasificación de Aguas para fines de Riego según el Contenido de Pesticidas
Para la evaluación de calidad química del agua para riego según la concentración de residuos de
plaguicidas, deberá emplearse la siguiente tabla orientativa de límites permisibles para algunos
usos (No se encontró parámetros para aguas de riego):
En caso de que se sospeche contaminación de la fuente de agua, debe tomarse las medidas
preventivas y correctivas pertinentes que garanticen la calidad química del agua para riego.
Tabla 19. Límites de contenido de algunos Plaguicidas y otros Compuestos Químicos en el agua
Estándar
Especificaciones
Guía de la Nacional y
microbiológicas,
Calidad Unión Estados Guía para
químicas y Especificaciones
Limite Ambiental Europea - Unidos - pesticidas en
organolépticas químicas del
SUSTANCIA Máximo Canadiense, EEC, 1998. USEPA, 2000 agua.
en agua para agua potable
2002 (µg /I) (µg /I) Alemania,
manejo
(µg/I) 1994
poscosecha
(µg/I)
1 2 3 4 5 6 7
Glifosato en Aqua
65 . - -
para Vida Acuática
Glifosato en Agua
280
par Agricultura (cría)
Aldrin y Drieldin 0,03 µg/I
Benceno 10 µg/I
Hexaclorobenceno 1 µg/I
Clordano 0,2 µg/I
Etilbenceno 300 µg/I
Tolueno 700 µg/I
Xileno 500 µg/I
Trihalometanos
0,2 µg/I
totales
Metoxicloro 20 µg/I
2,4-D 30 µg/I
Coliformes fecales Ausencia
Cianuros, como CN- 0,07 mg/I
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Cloro residual libre 0,2-1,50 mg/I
Heptacloro y epóxido
0,03 mg/I
de Heptacloro
Metoxicloro 20 mg/I
2,4-D 50 mg/I
SAAM 50 mg/I
Trihalometanos
0,2 mg/I
totales
*Separados o combinados.
FUENTES:
Este método considera la relación existente entre las plantas nativas y algunas características del
suelo en el que se desarrollan, como ser salinidad, sodicidad, textura, problemas de anegamiento o
inundaciones, fertilidad y otros, ya sea en su capa superficial o en su perfil.
pág. 50
Tabla 20. Características de los Suelos según su Cobertura Vegetal Nativa
pág. 51
Ranunculus
pilosus suelos húmedos profundos del altiplano, de topografía plana, Arable
(warankaysu, indica pH ligeramente ácido a neutro, (Apta)
ch'apu ch'apu)
Muhlenbergia
Arable
fatigiata (Chiji Suelos pesados, medianos, asociado con Festuca
(Moderadamente
negro, grama dolichophylla. Se presenta preferentemente en topografía plana
Apta)
dulce)
Astragalus
Arable
garbancillo Terrenos de textura mediana a pesada de gramadales
Planicie algo (garbancillo, (Moderadamente
sobrepastoreados o campos de cultivo abandonados.
secas Apta)
porotillo, yoscka)
Gomphrena Arable
meyeniana (Santa Suelos descubiertos algo secos. (Moderadamente
Maria, Peregrina) apta)
Arable
Poa candamoana Suelos francos, en pastizales andinos.
(Apta)
Alopecurus
Planicie
bracteatus (Cola Suelos muy húmedos, zonas inundables. No arable (no apta
inundable
de león)
Margiricarpus Arable
Suelos medianos y ligeros, erosionados, pobres en materia
pinnatus (kanlli, (Moderadamente a
orgánica, tanto en laderas como en planicies.
kailla) Pobremente apta)
Arable
Sisyrinchium Suelo algo seco de pajonal del altiplano y puna. También en
(Moderadamente a
andícola (Lirio lirio) laderas.
Pobremente apta)
Limitadamente
Stipa ichu (Sikuya, Suelos pobres, arenosos. Suelos superficiales. Suelos algo
Arable (Muy poco
ichhu) degradados, habita en zonas de planicie y ladera.
Apta)
Limitadamente
Bouteloua simplex Suelos pobres erosionados o degradados, tanto de planicies
Arable a No Arable
(Cola de zorro) como de laderas.
(Muy poco Apta)
Planicie, Arable
Ladera y pie Festuca Suelos livianos, areno arcillosos, en suelos de erosión (Moderadamente a
de Serranía orthophylla (Iro iro, avanzada. También en laderas con suelos arenosos, resistente Pobremente apta) en
Iro icho, Paja a la sequía, indicadora de suelos arenosos y pH ligeramente suelos livianos a
brava) ácido. areno arcillosos de
planicie
Adesmia
Suelos secos, rocosos y pedregosos de ambientes secos,
miraflorensis No arable (No apta)
también forma parte de tholares.
(Añahuaya)
Limitadamente
Sporobolus poiretti Suelos superficiales, en pampas y laderas con microclima
arable (Muy poco
(Pasto fuerte) favorable.
Apta)
Arable (Apta a
Urtica ureas Suelos fértiles con abundante materia orgánica, al pie de
Moderadamente
(Ortiga, kisa) serranías; desde el altiplano, cordillera y valles altos.
apta)
Arable
Stipa brachyphylla
Suelos algo secos, textura mediana, en laderas y pie de ladera. (Moderadamente
(Lawa pasto)
apta)
Muhlenbergia Limitadamente
Suelos pedregosos, textura mediana, generalmente en laderas.
angustata (Ichu arable (Muy poco
pág. 52
pichana) Apta)
Lupims chlorolepis Suelos de ladera rocosa y seca, y en algunos campos en
Ladera de No arable (No apta)
(tarwi silvestre) descanso.
serranía
Plantago montícola
En laderas rocosas No arable (No apta)
(llantén)
Calamagrostis
Suelos con afloramiento rocoso, pedregosos de ladera y
heterophylla (Muto No arable (No apta)
pajonales andinos.
cebadilla)
Stipa obtusa Limitadamente
Junto a Stipa ichu, en laderas algo secas. arable (Muy poco
(T’ishfia)
Apta)
Aristida
adscenciones
Suelos degradados, en laderas secas y rocosas. No arable
(Afiastuya
wichinca)
Muhlenbergia Limitadamente
Suelos pedregosos de los andes, generalmente en laderas,
angustata (Ichu arable (Muy poco
suelos medianos.
pichana) Apta)
Adesmia
En suelos de laderas y quebradas pedregosas o rocosas y
spinosissima No arable (No apta)
secas.
(Aflahuaya)
Nasella meyeniana Suelos pobres de laderas y en quebradas, al pie de rocas y
No arable (No apta)
(Llama pasto) arbustos.
Calamagrostis
heterophylla (Muto Suelos rocosos, pedregosos de laderas y pajonales andinos. No arable (No apta)
cebadilla)
Eleocharis
Suelos húmedos de zonas inundables, al borde de lagunas y en
albibracteata No arable (No apta)
los bofedales.
(quemillo)
Poa spicigera (Poa
Suelos húmedos de pajonales, al borde de los bofedales. No arable (No apta)
Planicie k’acho)
inundable
Calamagrostis
antoniana Suelos de textura mediana, algo húmedos, dentro de zonas
No arable (no apta)
(Crespillo gris, planas inundables (pajonales de puna)
Huylla ichu)
En vista de que los diferentes métodos de análisis de suelos y agua que se utilizan en los
laboratorios públicos y privados del país, son heterogéneos, es necesario en una primera etapa
discutir, concensuar y homogeneizar los métodos de laboratorio para los diferentes parámetros
pág. 53
físico-químicos de suelos, aguas y otros. Posteriormente, se debe definir las e strategias para
trabajar en la calidad de los diferentes análisis y de esta manera poder proporcionar a los usuarios
resultados confiables. Para tal fin, es indispensable que los laboratorios del país sean parte de una
red nacional o internacional que les permita controlar periódicamente sus resultados y, por otro
lado, buscar la acreditación de los mismos.
En ese sentido, a continuación, se presenta una base de análisis recomendados para analizar suelos
y aguas para fines de riego y con énfasis en salinidad y sodicidad y presencia de metales pesados.
- Determinación de pH
Asimismo, es útil la determinación semicuantitativa de la reacción del suelo, a través del empleo
de papel indicador de pH, que es un tipo de papel impregnado de una mezcla de sustancias
químicas (indicadores) y que, al ser sumergido en una disolución, adopta un color el cual va a
depender de la concentración de protones existentes en la disolución.
Estas formas directas de medición pueden ser aplicadas tanto para suelos como para aguas.
Para el contenido de carbonato tanto de la capa arable como de los horizontes subyacentes se
puede aplicar el ensayo con ácido clorhídrico diluido o con jugo puro de limón, se puede
categorizar la descripción con el siguiente detalle (FAO, 1977):
pág. 54
Intensidad y Tiempo de Duración de la Contenido de
Efervescencia Carbonatos en %
La efervescencia apenas se nota y es de muy corta <0,3
duración o ninguna.
Efervescencia más fuerte y duran un corto 0,3-2,0
tiempo.
Efervescencia muy fuerte y dura mayor tiempo. >2.0
El azufre está presente en el suelo principalmente en forma de anión (SO4 2-), En función a la
precipitación de Sulfato de Bario en forma de cristales blancos finos que se forman sobre la solución
de suelo ácido al añadirle Cloruro de Bario, determinamos la presencia de sulfatos.
Para tal fin, en un Erlenmeyer de 200 ml, agitamos durante dos minutos, 50 ml de agua destilada
con 20 g de la muestra de suelo secado al aire. Una vez que el suelo se ha sedimentado, filtramos la
suspensión. 10 ml de esta suspensión filtrada, se coloca en un tubo de ensayo y la acidificamos con
1 ml de ácido clorhídrico al 5%. A esta solución de suelo acidificado le añadimos 1 ml de Cloruro de
Bario de 10 o 12% y observamos su reacción.
La presencia de Cloruros, determinamos en una solución del suelo, con ayuda de Nitrato de Plata
NO3Ag. Luego de añadir este compuesto a la solución del suelo, se forma un precipitado blanco
pesado de Cloruro de Plata.
Para tal efecto, en un Erlenmeyer de 200 ml, agitamos durante dos minutos 50 ml de agua destilada
con 20 g de la muestra de suelo secado al aire. En 10 ml de la solución filtrada de suelo, añadimos 1
ml de Ácido Nítrico al 5%, y 1 ml de Nitrato de Bario al 10%.
La presencia de sodio en el suelo, se determina en base al principio de que este catión tiene la
capacidad de pintar la llama de un mechero de Bunsen, con un color característico de amarillo
intenso.
Para tal efecto, en un Erlenmeyer de 200 ml, agitamos durante 2 minutos, 50 ml de agua destilada
con 20 g de la muestra de suelo secado al aire. Luego de dejar sedimentar la tierra en su solución
sopamos el ojo de un alambre de platino, el cual lo acercamos al fondo de la llama y luego la
pág. 55
recorremos a la punta de la llama para distinguir su coloración.
Para realizar un trabajo exitoso, es necesario realizar una limpieza adecuada del ojo del alambre de
platino, el cual debe estar bien calentado y no debe colorear la llama. Esto se logra alterna ndo su
sopado en ácido clorhídrico y calentándolo en la llama varias veces. El alambre limpio es necesario
guardarlo dentro de un tubo de ensayo con ácido clorhídrico diluido y cerrado con ayuda de un
corcho (ver figura).
Este método consiste en el empleo de dos cilindros metálicos, uno interno y otro externo. El cilindro
interno que es el principal debe tener un diámetro de 30 cm o más y una altura de
aproximadamente 40 cm, el cilindro exterior conocido como cilindro amortiguador (“buffer”) debe
tener un diámetro entre 55 a 65 cm., con una altura similar al anterior. Las paredes de los cilindros
deben ser lisas, con extremos afilados para facilitar la penetración al suelo.
Antes de iniciar el ensayo se debe adicionar agua al cilindro “buffer”, posteriormente se debe
aplicar al cilindro interior una lámina de plástico a fin mantener estancado un instante el agua que
se echa sobre éste y al mismo nivel del agua del cilindro buffer. El ensayo se inicia sacando
rápidamente el plástico para dar inicio a la infiltración. La infiltración se mide con un piezómetro o
con regla milimétrica. El nivel del agua no debe bajar de los 4 cm, por lo que se debe adicionar agua
hasta alcanzar el nivel cada vez que sea necesario.
Inicialmente las lecturas deben ser realizadas a intervalos entre 1 a 5 minutos (depende del tipo de
suelo en textura y estructura) después de dos a tres mediciones los intervalos deben ser
incrementados. Para la mayoría de los suelos las lecturas pueden ser hechas a 5, 10, 20, 30, 45, 60,
90 y 120 minutos, hasta que la tasa de infiltración sea constante o casi constante.
Este método consiste en estancar agua en dos represas concéntricas de tierra a través de diques
construidos con una altura de 5 a 10 cm. El principio y procedimiento de medición es igual al
anterior método, siendo la principal ventaja la utilización de mayores áreas.
pág. 56
La cuantificación y clasificación de la velocidad de infiltración, partiendo de los datos de lámina
infiltrada versus el tiempo de infiltración, determinada por cualquiera de estos dos métodos, se
deberá realizar calculando los parámetros empíricos de la ecuación de Infiltración de Kostiakov y
determinado la Infiltración básica.
Donde:
La textura del suelo deberá ser determinada a través del método del Hidrómetro, también llamado
Densímetro de Bouyoucos. El densímetro utilizado debe ser modelo ASTM número 152 H, con la
escala de Bouyoucos en gramos/litro (American Society Material).
Calculados los porcentajes correspondientes de arena, limo y arcilla, la clase textural del suelo
deberá ser determinada por el Triángulo Textural del USD A.
Si el suelo posee cantidades considerables de yeso u otras sales, éstas deben ser eliminadas
mediante lavado con agua destilada. En general los suelos que contienen hasta 40 meq/100 g de
calcio y magnesio (soluble más cambiable), pueden ser dispersados sin eliminar las sales solubles.
pág. 57
determinarse a través del método de columnas de suelo inalteradas o mediante su determinación
directa en campo.
Para este método, si la permeabilidad es lenta, deben evitarse errores por evaporación del
percolado. Si fuera posible, las pruebas deben efectuarse a temperatura constante. Cuando s ea
necesario y especialmente para muestras de mucha profundidad, se pueden introducir manómetros
a diferentes profundidades, los cuales deben instalarse en zonas de transición entre horizontes o
capas de diferentes texturas.
La aplicación de este método está limitada en suelos debajo de una capa freática. Asimismo, este
método solo es aplicable cuando se puede mantener la forma de la cavidad durante la prueba. En
muchos suelos de textura fina las cavidades mantienen su forma sin soporte, pero en arenas y otros
materiales sin cohesión, puede ser necesaria una pequeña estructura de material poroso.
Este método está limitado a mediciones debajo de la capa freática y es aplicable solamente donde
se puede mantener una cavidad de forma inalterable durante la prueba.
El método de Hillel (1972), utiliza para determinar “in situ” la Conductividad Hidráulica del suelo,
tensiómetros instalados a diferentes profundidades del suelo con el objeto de medir el potencial
matricial y la dirección del flujo del agua en el suelo (previamente saturado de agua) y con ayuda
de la sonda neutrónica determinamos la variación del contenido de agua en este.
El pH o reacción del suelo deberá ser medido a través del método electrométrico.
La determinación del pH en suelos (acidez activa o actual), deberá ser efectuada por el mét odo
potenciométrico, utilizando un electrodo de vidrio, como electrodo indicador. El electrodo de vidrio
no está sujeto a interferencias por agentes oxidantes o reductores en la solución de la muestra
(Fischer y Peters, 1970).
pág. 58
8.2.1.4 CAPACIDAD DE INTERCAMBIO DE CATIONES (CIC)
Para suelos no calizos y sin problemas de sodio elevado, se recomienda el empleo de los métodos
de determinación con Cloruro Cálcico (C^Ca) o con Cloruro de Amonio (CINH4).
Para suelos calizos es apropiado el método de determinación de la CIC con Bario. Los carbonates de
calcio y dolomita, tienen la solubilidad limitada al pH de la solución extractante. Además el bario
recubre las partículas de carbonato y dolomita impidiendo su disolución. Con todo se disolverá algo
de calcio y magnesio procedentes de estos minerales, por lo que se efectúa una segunda extracción
en donde se obtendrá solo calcio y magnesio procedentes del carbonato y dolomita.
Es un método, modificado de Chhabra et al. (1975), para la medición de la CIC de suelos tropicales
como los Alfisoles, Ultisoles y Oxisoles. Este método solo aplica una extracción con una solución no
amortiguada de Tiourea de Plata (0.1 M Ag +). La determinación de calcio, magnesio, potasio, sodio,
aluminio e hidrogeno se realiza en el extracto. Se recomienda su uso como procedimiento de rutina
para medir la CIC y los cationes cambiables en suelos, en los que dominan las superficies de
intercambio con carga variable.
Este método se aplica para los Andisoles. La muestra de suelo se satura mediante lavados con
Cloruro de Amonio, ajustado a un pH entre 4 y 8; saturada la muestra se equilibra con una solución
de la misma composición pero con una concentración entre 0.005 y 0.1 M. el desplazamiento el
catión índice se lleva a cabo mediante lavados con una solución de Nitrato de Sodio.
Este método es la modificación al método Wada y Okamura (1980), utilizada también para hacer la
determinación de la CIC en Andisoles, el cambio consiste en utilizar Cloruro de Estroncio 0.01 M
para la saturación y equilibrio, y Ácido Clorhídrico para el desplazamiento del cat ión índice.
Este método plantea un procedimiento directo de extracción del catión índice y por diferencia de
peso el cálculo del exceso de saturante que permanece retenido en el suelo. Para la etapa de
saturación primero se desplaza los cationes y aniones intercambiables con una solución 0.5 M de
Nitrato de Amonio y, enseguida, la saturación con el catión y anión índices utilizando para tal efecto
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una solución de nitrato de amonio de concentración que semeja la fuerza iónica de la solución del
suelo, este dato se obtiene midiendo el potencial osmótico del extracto del suelo previamente
saturado, mediante una membrana de presión.
El catión y anión índices son desplazados con una solución isotónica de Cloruro de Potas io y
posteriormente determinados. Con este dato la CIC de la muestra es igual al amonio determinado
en el volumen desplazado, menos el amonio retenido en exceso y que se ha detectado por
diferencia de peso.
El método emplea una solución saturante de Acetato de Sodio normal pH = 8.2. La composición y el
pH de la solución no eliminan la interferencia debida a carbonatos. El desplazamiento del catión
índice se realiza con unan solución normal de Acetato de Amonio ajustado a pH = 7.0.
Método de Bascomb (1964)
Es una modificación operatoria al método de Mehlich, que consiste en eliminar la etapa de lavado
mediante el desplazamiento del Bario Adsorbido y el exceso de saturante con una Solución de
Sulfato de Magnesio. Es un método sin los errores inherentes a la etapa de lavado y que presenta
como procedimiento para desplazar al catión índice el llamado mecanismo compulsivo u obligado
por efecto del anión sulfato y la consiguiente precipitación del bario desplazado.
En este método la solubilización del yeso y del carbonato es del orden de 5.8 y 4.0 meq/1
respectivamente. Además la afinidad del sodio con respecto al calcio es lo suficientemente alta para
un completo intercambio de las bases del suelo y la saturación del complejo con sodio. Al hacer la
extracción del catión índice los errores son minimizados por utilizarse Nitrato de Magnesio. El
magnesio tiene la ventaja de no ser retenido en posiciones no intercambiables ni extrae cationes de
posiciones no intercambiables. Este método es adecuado tanto para suelos salinos, sódicos,
calcáreos como yesíferos.
Para suelos con mayor grado de modicidad, se recomienda el uso el método de Gupta et al. (1985).
Los suelos sódicos con pH mayor a 8.4 y con presencia de minerales zeolíticos deberán ser tratados
con este método en la determinación de su CIC.
Este método cambia la relación sodio/cloruro de la solución saturante, la eliminación del 60% de
etanol como medio de preparación y el ajuste del pH, haciéndolo semejante al de la solución del
suelo. Para desplazar el catión índice y el exceso de saturante, este método propone el uso de la
misma solución normal de nitrato de magnesio pero a un pH de 8.6.
Para la determinación del contenido de Materia Orgánica total de un suelo (MO), se recomienda el
empleo del método de Walkley - Black. Este método valora la materia orgánica más activa, la cual
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tiene mayor significado agrícola. El método consiste en la oxidación de la materia orgánica sólo con
el calor de reacción que genera al mezclar el ácido sulfúrico concentrado y la solución diluida de
Dicromato de Potasio. Con este procedimiento se recupera 70-84% del carbono orgánico total y solo
detecta una pequeña fracción del carbono elemental o inorgánico.
Para fines de la evaluación de la fertilidad potencial del suelo, siendo uno de los parámetros que se
requiere para este fin, se debe solicitar al laboratorio el valor del carbono orgánico total en el suelo,
acompañado del valor de materia orgánica expresados en porcentajes.
La cantidad de fósforo disponible o aprovechable, del suelo para la planta, debe ser determinada a
través de métodos recomendados de acuerdo a ciertas características del suelo.
Este método, ampliamente empleado, utiliza la mezcla de HC1 y NH4F que para la finalidad de
remover las formas de fósforo (P) fácilmente solubles en medio ácido, en gran parte de los fosfatos
de calcio y una proporción de los fosfatos de aluminio y de hierro. El NH4F disuelve los fosfatos de
aluminio y de hierro al formar un ión complejo con estos iones metálicos en solución ácida. Se
recomienda este método de laboratorio para suelos ácidos.
Este método sirve básicamente para determinar el fósforo en suelos arenosos que tiene una
capacidad de intercambio menor a 10 meq/100g, de pH ácido (menor a 6.5) con un contenido
relativamente bajo de materia orgánica (menor a 5%). Este método no es recomendable para suelos
alcalinos.
pág. 61
8.2.1.8 DETERMINACIÓN DE TOTAL DE BASES CAMBIABLES (TBI) Y PORCENTAJE DE
SATURACIÓN DE BASES (%SB)
Para fines de la evaluación de la fertilidad potencial del suelo, siendo dos de los parámetros que se
requiere para este fin, se puede solicitar al laboratorio el valor del Total de Bases Intercambiables
(TBI) y Porcentaje de Saturación de Bases (%SB o V), o bien pueden ser calculados por el mismo
evaluador.
Los cálculos de estos parámetros, que pueden ser realizados por el evaluador o por el responsable
de laboratorio, se realizan bajo las siguientes relaciones:
2
(Ca Mg 2 Na K
)
)(meq/100g TBI(meq/10 0g)
%SB CIC(meq/10 0g)
100 CIC(meq/10 0g)
100
Las sales solubles del suelo, son los constituyentes inorgánicos del suelo. En forma natural todos los
suelos agrícolas contienen sales solubles, condición que guardan también las aguas. Las sales son
utilizadas por las plantas como nutrientes, aun cuando su uso sea selectivo y preferente. Sin
embargo cuando su contenido y/o forma en que se encuentran, excede ciertos límites pueden
dañar a plantas y animales.
Para conocer los constituyentes de las sales solubles del suelo además del nivel de salinidad, se
recomienda la obtención del extracto acuoso de la pasta de suelo saturado mediante agua destilada
en laboratorio.
A partir de este extracto de saturación de suelo, realizada en laboratorio, se determinan todos los
parámetros inherentes a la cuantificación y evaluación de salinidad del suelo, es decir la
determinación de: la Conductividad Eléctrica (CEe), la Reacción del suelo (pH), los cationes y
aniones solubles y boro.
pág. 62
punto de saturación se obtiene agregando agua destilada a la muestra de suelo hasta que este
adquiera cierta consistencia.
El peso de suelo requerido dependeré del número y clase de determinaciones que se efectuaran en
el extracto, del método analítico a emplearse, del contenido salino del suelo y de la textura del
mismo. Dewis y Freitas (1970) sugieren que para proveer de 25 a 30 mI de extracto de saturación la
cantidad de suelo requerida en función de la textura es como sigue: para migajón arenoso de 400 a
600 g; arena migajosa de 250 a 400 g; franco de 150 a 250 g; migajón limoso y migaron arcilloso de
100 a al 50 g; arcilloso de 50 a 100 g.
Recomendación en el tratamiento de muestras para el extracto:
Las muestras de suelo no deberán secarse a la estufa antes de la extracción de sales solubles
porque el calentamiento a 105°C convierte al menos una parte de yeso (CaSO4.2H 2O) en yeso de
parís (CaSO 4.1/2H 2O) el cual tiene mayor solubilidad en agua que el anterior.
El pHe o reacción del suelo en extracto de saturación, deberá ser medido a través del método
electrométrico.
Para determinar la Conductividad Eléctrica (CEe) del suelo en el extracto de saturaci ón se debe
aplicar el método de la Conductivimetría, el cual emplea el principio del Puente estándar de
Wheatstone. La CE está íntimamente relacionada con la suma de cationes o aniones que se
determina químicamente y en general tiene correlación estrecha con los sólidos totales disueltos. Es
una determinación rápida y relativamente precisa que ni altera ni consume la muestra de extracto.
Para la determinación de cationes solubles, alternativamente se pueden aplicar los mét odos
que a continuación se indican:
Este método hace el empleo de un equipo Espectrofotómetro de absorción atómica. A través del
cual se pueden determinar en conjunto y en forma rápida las concentraciones individuales de los
cationes solubles calcio, magnesio, sodio y potasio.
ii) Calcio y magnesio por titulación con EDTA (Versenato) (USSL, 1954)
Este método acomplejante es más laborioso que la determinación mediante absorción atómica, sin
embargo por ser un método de titilación se puede usar en cualquier laboratorio.
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tetraacetato (llamado también Versenato).
Es el método que hace el uso del equipo Fotómetro de flama, debiendo ser alimentado con gas
(acetileno, propano o natural, dependiendo del modelo del equipo).
d) CARBONATOS Y BICARBONATOS
e) CLORUROS
Se recomienda el empleo del método de Valoración de Mohr (Bower y Wilcox, 1965). En el método
de Mohr para la determinación de cloruros en una muestra, se precipita el ión cloruro en forma de
cloruro de plata, por valoración con solución de nitrato de plata estándar en presencia de ión
cromato en pequeña concentración. El punto final se señala por la primera aparición perceptible y
permanente de un precipitado de cromato de plata, de color rojo ladrillo, por toda la solución. El
cromato de plata se forma por adición de un ligero exceso de nitrato de plata, sólo después que
prácticamente ha sido precipitado todo el ión cloruro en forma de cloruro de plata (Fischer y Peters,
1970).
f) SULFATOS
Este método, mediante el uso de Cloruro de Bario, se precipitan los sulfatos y se forma una
suspensión de Sulfato de Bario. El grado de turbidez de ésta suspensión es determinado mediante el
uso de un espectrómetro y la comparación con una curva de calibración.
g) BORO
La determinación de boro en el extracto de suelo saturado deberá efectuarse a través del método
de Colorimetría de ácido carmínico. Este método requiere imprescindiblemente de un equipo de
espectrofotometría y su instrumental respectivo (tubos de centrifuga, matraces, vasos, pipetas y
buretas), debe evitarse el uso de vidrio a base de silicatos de boro.
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Los cálculos de estos parámetros, que pueden ser realizados por el evaluador o por el responsable
de laboratorio, se realizan bajo el procedimiento siguiente:
Este parámetro de la sodicidad deberá ser determinado mediante de la relación propuesta por
Richards et al. (1954):
Donde la Relación de Adsorción de Sodio (RAS) debe ser calculada a partir de la siguiente relación
matemática:
Na
RAS
(Ca Mg ) / 2
Donde:
RAS = Relación de Adsorción de Sodio
Na+ = Concentración de sodio soluble en meq/I
Ca2+ = Concentración de calcio soluble en meq/I
Mg2+ = Concentración de magnesio soluble en meq/I
Las concentraciones de los cationes solubles (Ca, Mg y Na) imprescindiblemente deben ser
determinadas a través del análisis en extracto de suelo saturado, a fin de conseguir una
aproximación real de las condiciones de alcalinidad en humedad natural del suelo; en ese sentido, el
extracto de suelo saturado permite aproximarse a las condiciones naturales de humedad de lo s
suelos.
Tal como lo indican García y Dorronsoro (1998), la toxicidad de un suelo debida a los metales
pesados y elementos asociados es una consecuencia directa de sus concentraciones en las fases
bioasimilables de este; es decir, la solución del suelo y las formas adsorbidas. Esta fracción
asimilable se equipara a la extraída con ayuda del Ácido Dietilentriamino pentaacético (DTPA) o el
Ácido Etilendiamino Tetraacético (EDTA) y a ella se deberían referir los diferentes niveles de
toxicidad. Pero por la dificultad de extracción, es por lo que las normativas prefieren evaluar la
cantidad total de elemento tóxico presente. Se supone que existe un equilibrio entre la fase soluble
y la cantidad total presente (Lindsay, 1979, calcula que el 10% del total se encuentra en fase
soluble). Pero en esta correspondencia intervienen numerosos factores tanto del elemento tóxico,
como de las características del propio suelo. Por ejemplo, para una misma concentración de
elementos tóxicos en un suelo, la concentración de la fase asimilable, será mucho más elevada para
un suelo ácido que para uno neutro o alcalino.
Hay que diferenciar que la concentración del metal en la fase asimilable en el suelo es una medida
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directa de la peligrosidad real o presente, mientras que la concentración total del mismo, solo es
válida para evaluar la peligrosidad potencial o futura representando una mane ra indirecta y
aproximada de la toxicidad actual de un suelo.
Se incluyen dentro de un mismo apartado debido a sus similitudes químicas, lo que se traduce en un
mismo protocolo de análisis para ambos grupos.
Para las determinaciones analíticas de los parámetros del agua para fines de riego, como son: pH,
Conductividad Eléctrica, Cationes solubles (calcio, magnesio, sodio y potasio), Aniones solubles
(cloruros, sulfatos, carbonatos, bicarbonatos) y boro, los mismos que son necesarios para la
evaluación de su calidad para el riego, los procedimientos metodológicos en laboratorio son los
mismos que los usados en el extracto de saturación.
La determinación de sólidos en el agua para riego principalmente consta de los parámetros: Sólidos
Totales, Sólidos Disueltos Totales y Sólidos Suspendidos Totales. La metodología analítica aplicada
para cuantificar estos contenidos corresponde al Método Gravimétrico, siendo imprescindible un
equipo de Mufla.
Los sólidos en suspensión comprenden todas aquellas sustancias que están suspendidas en el seno
del agua y no decantan de forma natural. Para su determinación se filtra la muestra de agua bien
homogenizada a través de un papel filtro (0,45 pm) que se seca a peso constante a temperatura de
105°C. El incremento de peso del filtro antes y después de filtrar la muestra indicará el contenido en
materias en suspensión de la muestra problema.
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Los cálculos de estos parámetros, que pueden ser realizados por el evaluador o por el responsable
de laboratorio, se realizan bajo el procedimiento siguiente:
1o) Si los resultados de los acciones solubles están en unidades de ml/1 se deben convertir a
unidades de meq/1.
Ejemplo de cálculo:
Datos:
Cationes y aniones solubles: Muestra de agua del río Pulqui (Presa Escana), Yamparaes -
Chuqisaca
Na
Se emplearala relaciónmatematica: RAS
(Ca Mg ) / 2
Pero para aplicar la normativa se debe calcula la RAS corregida, a través de la relación:
Na
RAS c
2
(Ca Mg 2 ) / 2
Donde:
RASc = Relación de Adsorción de Sodio (corregido)
Na+ es la concentración de sodio soluble en meq/I
Cax 2+ es la concentración final de calcio soluble en meq/I (es determinada a través de la Tabla 4 (FAO).
Mg2+ es la concentración de magnesio soluble en meq/I
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Calculo de RAS c:
HCO3
(meq/I) 0.88
Calculando la relaciónHCO3 /Ca 2 : 2.095
Ca 2
(meq/I) 0.42
Primero hallamos Cax 2+, con la tabla 4 (sistema actual de la FAO, para corregir el RAS):
Se debe realizar, para este caso, interpolaciones, ya que los valores de CE y HC0 3 /Ca2+, del
agua analizada, son valores intermedios entre los valores respectivos de cada eje que la tabla
indica. Realizar el procedimiento siguiente:
0.2 - 0.1 0.117 - 0.1
Para hallar valor en HCO 3 /Ca 2 inferior : Despejando X1 1.135
1.16 -1.13 X 1 -1.13
2.5 - 2 2.095 - 2
Para hallar valor de Cax 2
: Despejando Cax 2
1.118
1.047 -1.135 Cax 2 -1.135
0.16
Calculando la RAS c RAS 019
(1.118 0.33) / 2
Con el fin de tener una idea de la cantidad de sales en peso (gramos) que se llega a introducir en el
suelo con cada litro de agua que se aplica en el riego, se puede aplicar la siguiente relación conociendo
la Conductividad Eléctrica del agua:
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método analítico con uso de energía radiante, así por ejemplo:
También se pueden emplear otros métodos como son el Método de Emisión por Excitación con Flama.
Asimismo, el que aplica la Espectrofotometría de emisión en plasma de inducción acoplada (ICP-OES),
que es la técnica analítica más sofisticada para la cuantifícación de metales pesados. Otro con técnica
más avanzada es la Activación Neutrónica, Instrumental neutrón activation análisis (ESLAA), y el de
Emisión de un Plasma de inducción acoplada con un detector de Espectrofotometría de masas (ICP -
MS). Toda esta tecnología analítica sofisticada permite la determinación de elementos en el rango de
ultratrazas.
Tabla 21. Métodos Analíticos de Laboratorio y Algunas Determinaciones de Campo para Suelos y
Aguas con Fines de Riego
EXPRESADO
RECURSO PARÁMETROS METODOLOGÍA ANALÍTICA
COMO
Textura Clase textural Densímetro de Bouyoucos
Conductividad Hidráulica cm/hora 1. Columnas de Suelo Inalteradas (en laboratorio)
(K) 2. Conductividad hidráulica medida con piezómetros (en
campo)
3. Conductividad hidráulica usando el método del pozo
(en campo) o el método de Hillel (1972)
Velocidad de Infiltración cm/hora 1. Cilindro Infíltrómetro doble (en campo)
2. Método de Represamiento (en campo)
pH o Reacción del suelo Unidades de pH, en 1. Potenciométrico (en laboratorio o campo)
relaciones 2. Papel indicador de pH (en campo)
suelo/agua 1:1 o
1:2.5
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SUELO Capacidad de Intercambio cmol(+)/kg S o 1. Cloruro Cálcico o Amónico (para suelos no calizos)
Catiónico (CIC) meq/lOOg S 2. Con Bario (para suelos calizos)
3. Pleysier y Juo (1980) (para suelos ácidos tropicales
como los Alfisoles, Ultisoles y Oxisoles)
4. Método de Wada y Okamura (1977, 1980) (para
suelos Andisoles)
5. Matsue y Wada (1985) (para Andisoles)
6. Cochrane y Gomes de Souza (1985) (para suelos
ácidos)
7. Método de Bower, Reitemeier y Fireman (1952) (para
suelos alcalinos)
8. Método de Bascomb (para suelos alcalinos)
9. Método de Polemio y Rhoades (adecuado tanto para
suelos salinos, sódicos, calcáreos como yesíferos)
10. Método de Gupta, Singih y Abrol (1985) (para suelos
con mayor grado de modicidad, pH >8,4)
Materia Orgánica (MO)y % Walkley - Black
Carbono Orgánico Totales
Nitrógeno Total (Nt) % Kjeldahl ( versiones: macro, semi-micro y micro, según el
caso)
Fósforo Disponible o ppm 1. Bray P-l (para suelos ácidos)
Aprovechable (Pd) 2. Olsen y Colaboradores (1954, 1965) (para aplicar a
suelos neutros, calcáreos y alcalinos)
3. Mehlich 1 o Método de ácido Doble (para suelos
alcalinos)
Total de Bases cmol(+)/kg S o Cálculo
Intercambiables (TBI) meq/lOOg S
Porcentaje de Saturación % Cálculo
de Bases (%SB o V)
Sólidos Suspendidos mg/1 Gravimetrico
AGUA Totales (SST)
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Boro (en Extracto de rng/I Colorimetría de Ácido Carmínico
Saturación *)
Porcentaje de Sodio % Cálculo
Intercambiable (PSI):
SUELO -
Relación de Adsorción de Cálculo
Sodio (RAS)
- Calculo (según FAO)
Relación de Adsorción de
AGUA
Sodio Corregido (RASc)
Contenidos de Metales ppm u otros Solución extractante de Ácido Dietilentriamino
SUELO Pesados pentaacético (DTPA) o el Ácido Etilendiamino
(biodisponibilidad) Tetraacético (EDTA)
SUELO Y Pesticidas Orgánicos y Cromatografía de gases
AGUA Policlorobifenilos
Contenidos de Metales ppm u otros 1. Espectroscopia de Absorción Atómica
Pesados 2. Método de Emisión por Excitación con Flama
3. Espectrofotometría de emisión en plasma de
inducción acoplada (ICP-OES)
AGUA 4. Activación Neutrónica, Instrumental neutrón
activation análisis (INAA)
5. - Emisión de un Plasma de inducción acoplada
con un detector de Espectrofotometría de
masas (ICP - MS).
* Para el caso del suelo
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