Juegos para hacer matemática

Clase 1
¡A jugar!

Objetivos

● Tomar conciencia de la importancia del juego como mediador para la exploración,

comprensión de estrategias y reflexión de los alumnos potenciando sus aprendizajes.
● Reconocer distintos momentos en el trabajo con juegos y su relación con la resolución
de problemas.

Contenidos

● Condiciones didácticas del juego para producir aprendizajes. Objetivo didáctico para el
docente y para el jugador.
● El rol del juego en la enseñanza de la matemática y los lineamientos curriculares
vigentes.

El juego en la enseñanza de la matemática

Partimos de entender a la clase de matemática en el marco del Diseño Curricular

Jurisdiccional, como un espacio privilegiado para que los alumnos produzcan ideas a partir de
las que ya disponen. En este sentido, el trabajo matemático en la clase se desarrolla como una
construcción colectiva (Sadovsky, 2005) que puede promoverse ofreciendo a los estudiantes
oportunidades para resolver distintos problemas que permitan ampliar el uso de los
conocimientos que ya tienen, considerar distintas maneras de resolverlos, generar momentos
para comunicarlos, discutirlos y analizarlos. Por tal razón, entendemos que el trabajo con
juegos en el aula genera un contexto altamente potente para constituirse como fuente de
nuevos problemas, favoreciendo el desarrollo de conocimientos matemáticos en los alumnos.

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 Todos sabemos, tanto por haber leído a Piaget y a otros estudiosos del pensamiento
infantil como por haber observado a nuestros hijos, sobrinos, nietos o alumnos, que los niños
(y los no tan niños), aprendemos jugando. El juego, además de centrar el interés de los
participantes, moviliza procesos mentales diversos como observación, reflexión, comparación,
planificación, verificación, asociación y síntesis, entre otros. Además, el juego si no es una
mera competencia, posibilita también el aprendizaje de actitudes sociales positivas como el
respeto por las reglas y por los compañeros.

Es importante que los juegos que se proponen para trabajar en el aula tengan un fin
didáctico -a diferencia del juego social-: es necesario concebirlos con propósitos pedagógicos.
Es decir, como herramientas cuidadosamente planificadas y útiles para el aprendizaje. Para
que el juego no se convierta en una simple instancia de recreación –con todo el valor que ello
comporta-, ni tampoco imponga una organización de la enseñanza centrada alrededor del
juego, es necesario que éste sea parte de un proyecto de trabajo secuenciado y coherente.

Por eso, a lo largo de estas semanas de cursada analizaremos y reflexionaremos sobre

el trabajo con juegos en la clase de Matemática como sostén de situaciones de enseñanza
planificadas y con explícitas intencionalidades de aprendizaje.

Para Comenzar

Es importante destacar que el juego tiene la cualidad de convocar al trabajo a todos los
alumnos, lo cual nos facilita instalar en el aula un tipo de práctica que permita a los alumnos
aprender matemática haciendo matemática, es decir: explorar, transformar, anticipar,
argumentar, representar, conjeturar, replicar, extender, buscar relaciones, establecer
condiciones, generalizar, etcétera. Pero para que el juego se transforme en un contexto de
aprendizaje generalmente es necesario que se tengan en cuenta algunas condiciones como
jugar en reiteradas oportunidades o un espacio “Después del juego” para el intercambio y
debate acerca de las estrategias utilizadas durante el desarrollo del mismo.

También será interesante que el docente proponga un juego reiteradamente, y no solo

con fines exploratorios, generando momentos de reflexión acerca de las estrategias que son
útiles en ese juego o las condiciones que hacen posible la utilización de esas estrategias. En
este sentido, es imprescindible organizar un momento específico para la confrontación,

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 explicitación, discusión y síntesis de los diferentes procedimientos que permitan analizar su
pertinencia y eficacia.

Dependiendo del tipo de juego, el docente podrá organizar, por ejemplo, una discusión
alrededor de algunas de las siguientes cuestiones:

• ¿En qué consiste el juego?

• ¿Qué hay que lograr para ganar?
• ¿Qué estrategias se utilizan para jugar?
• ¿Todas las estrategias sirven?
• ¿Qué habría que saber para poder jugar?
• ¿Qué cuestiones matemáticas podemos aprender con este juego?

Finalmente, se podrán anotar en el pizarrón o en un afiche las ideas más relevantes que
los alumnos elaboraron a partir del debate para tenerlas disponibles como portadores en el
aula y registrar en los cuadernos las conclusiones intermedias o finales que surjan a partir de
cada juego. De este modo, los estudiantes podrán recurrir a ellas para buscar información y
para estudiar.

Algunas cuestiones a considerar...

Es importante tener en cuenta que ningún juego se juega una sola vez; de ser así
impediría el progreso de los alumnos en el uso de estrategias mejores que las ya utilizadas y
aprendidas en ocasión de la discusión de la partida anterior. También es importante que el
docente organice actividades en las que los alumnos puedan volver a utilizar los conocimientos
aprendidos con los juegos en tareas diferentes. Por lo que posteriormente es conveniente
proponer a la clase un trabajo sobre resolución de problemas que involucren el contexto del
juego a través de partidas simuladas para pasar paulatinamente a la descontextualización de
las situaciones y presentar actividades que involucren el trabajo en contextos
intramatemáticos. Por ejemplo, si se trata de un juego como el propuesto para esta clase, la
“Guerra de fracciones”, que involucra la comparación de fracciones expresadas en formato
numérico, posteriormente se pueden proponer actividades de ordenamiento o búsqueda de
fracciones equivalentes.

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 Por otro lado, es posible asignar tareas para desarrollar en forma individual, fuera del
horario escolar, relacionadas con los juegos. Si se proponen juegos como tarea para la casa –
lo que en primaria permite incorporar a la familia o en secundaria al grupo de amigos– es
posible que el docente retome el trabajo desde la reflexión. Esto puede permitir la aparición de
estrategias elaboradas por otros integrantes y poner a los alumnos en situación de describir y
defender o rechazar estrategias que no son propias. Por otra parte, estas propuestas dan
ocasión a la familia de participar en el proceso de aprendizaje de los niños, en un apoyo
articulado con la tarea del docente.

Actividades

Actividad N° 0. Presentación.
Para conocernos un poquito mejor antes de iniciar el curso, les pedimos
que cada uno de ustedes se presente con sus datos personales (incluyendo
dónde y en qué grado o año dan clases, si lo están haciendo) y lugar de
residencia en el foro de presentación; pero además queremos que
compartan una breve anécdota personal relacionada con jugar en la
escuela. Puede tenerlos de protagonistas en sus distintas épocas de
alumnos o en su actual rol de docentes. ¡A recordar y escribir algo
divertido!

Actividad N° 1 (obligatoria). Jugar a la Guerra.

Los juegos de Guerra con cartas nos proporcionan una rica oportunidad
para trabajar con la comparación. En esta clase les proponemos jugar en
una versión de naipes con fracciones.
En esta actividad Uds. deberán:

A. Jugar a la Guerra de fracciones.

B. Leer la bibliografía de la clase.
C. Participar del Foro “Jugamos a la Guerra” respondiendo a las
siguientes consignas, en no más de 10 renglones:
● ¿Jugar a este juego le permitió reflexionar acerca de sus
propios saberes sobre comparación de fracciones? ¿Cuáles?
● ¿Algunas de las jugadas que se presentaron considera que son

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 “interesantes” para una discusión posterior? ¿Por qué?
● ¿Cree que podría ser apropiado “jugar a la guerra” en su grupo
clase actual? ¿Con qué intencionalidad presentaría el juego?

Instrucciones para participar en el foro

Para participar en el Foro resulta enriquecedor que los aportes sean el

producto de haber jugado a la guerra y leído la bibliografía de clase.
La contribución de cada docente quedará acreditada tomando como
criterio de evaluación que:
➔ las contribuciones se diferencien de las de sus colegas o favorezcan
el debate y el intercambio.
➔ propongan y presenten argumentos que se sustenten en las
lecturas de la clase.

Fecha de participación en el foro: del 2 al 15 de agosto de 2018

¡Buena experiencia para todos!

Bibliografía

Lectura Obligatoria

TORRES, M. (2001) El juego en el aula: una experiencia de perfeccionamiento

docente en Matemática a nivel institucional. Revista Summa, 38. pp. 23-29.

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 Autor(es): Ana María Canalejo, Alejandro Cristín, Laura Pezzatti, María José Presa,
Matías Saucedo.

Cómo citar este texto:

Canalejo et al (2018). Clase 1: ¡A jugar!. Juegos para hacer matemática. Dirección

de Formación Continua - DGCyE.

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