La Gran Reconciliación

Hoy sabemos que La razón no es suficiente para comprender el mundo que nos
rodea. Por siglos el progreso de la humanidad se sustentó principalmente en
las cualidades cognitivas propias del hemisferio izquierdo del cerebro como: el
intelecto, la lógica, la razón, el análisis, el pensamiento lineal, vertical, secuencial,
temporal y objetivo. Los dos hemisferios cerebrales tienen maneras muy diferentes
aunque complementarias de procesar la información, ninguno es más importante que el
otro. Hoy en día, gran parte de los cambios que estamos viviendo, se están dando a
partir de la integración de cualidades propias del hemisferio derecho, que se distingue
por ser: global, holístico, aleatorio, intuitivo, sentimental, subjetivo, no verbal, sintético,
atemporal, múltiple, horizontal, lúdico y creativo.
Estamos comenzando a percibir la realidad desde una Visión Global. Gracias a
esto, estamos valorando la importancia de vivir de forma ecológica, como partes
interdependientes de un todo, conscientes de que no solo nuestras acciones, sino
hasta nuestros pensamientos, afectan la totalidad. Por primera vez la ciencia está
avalando lo que han percibido los místicos de todos los tiempos: que Somos Uno con
Todo cuanto Existe. A través de los avances de la física cuántica estamos
comprendiendo que La realidad va mucho más allá de la materia, la cual es solo un
aspecto visible de un Universo hecho de energía que no ha dejado de expandirse
desde que se creó. Esto ha generado la percepción de que la Conciencia no se
encuentra en nuestras mentes, que Somos Conciencia, más aún, que somos parte de
una Conciencia Universal o Campo de Conciencia Unificado.
Estamos desarrollando nuestra capacidad de percibir a través de la intuición, de
escuchar las señales de nuestro cuerpo, de conectarnos con nuestros sentimientos y
entender el lenguaje del corazón, buscando un Equilibrio entre Mente, Cuerpo y
Espíritu. Estamos recuperando el valor que el juego, la imaginación, las artes y la
comunicación no verbal tienen para nuestro desarrollo integral.
Así mismo, tanto hombres como mujeres estamos concientizando la importancia de
integrar dentro de cada uno, de forma equilibrada, nuestros aspectos masculinos y
femeninos. Comenzamos a ver que, para evolucionar, debemos aceptarnos en nuestra
totalidad, reconocer nuestras sombras, los miedos, el dolor y la culpa; pero también
nuestra capacidad de vivir desde el amor, la alegría, el gozo y la plenitud.
Estamos viviendo el comienzo de una Gran Reconciliación, donde empezamos a ver
como complementos aquello que percibíamos como opuestos; a partir de esta
visión, lo que en el pasado generó conflicto ahora podría traer Paz. Esto está
cambiando el rumbo de la evolución, creando una orquesta en donde Todas las partes
comienzan a ejercer su rol en el Gran Concierto Universal. Estamos comenzando a
asumir que el cambio se genera a partir de cada individuo que decide verse como un
Ser creador de Potenciales Infinitos, que reúne en sí todas las cualidades que han
hecho que el Universo siga creándose y expandiéndose de forma ilimitada.