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Universidad Santa María

Comunicación Social

Historia de las Américas

Profesor Integrantes

José Torres Sepúlveda Nairim 26.893.281

Romario Torres 25.735.801


Capítulo 1

En la era precolombina se desprende que la llegada de los grupos europeos (los


conquistadores), tuvo un impacto tremendo sobre los pueblos indígenas. Los
españoles obtuvieron en sus territorios americanos una fabulosa cantidad de oro y
plata, que sustentó la hegemonía de la dinastía Habsburgo en Europa y contribuyó
al nacimiento de una economía global. En la primitiva economía global, que
entonces empezaba a tomar estructura, era puntual hallar productos que por su
eminente rentabilidad comprobaran el comercio a larga distancia. Había pocos:
especias, esclavos y metales preciosos. Por esta razón Cristóbal Colón, agregó en
sus cartas a los Reyes Católicos constataciones de la riqueza hallada en tierras
americanas, como lo fue las primeras importaciones de metal precioso que llegaron
a Europa procedentes de América fueron de oro, y solo a partir de la década de
1531-40 la plata comenzó a registrar su espectacular escalada.

Llegada la conquista a su fin, dio el paso a la colonización, con el desarrollo de la


vida urbana, los conquistadores se apoderaron de tierras en nombre de la corona,
ejerciendo ellos el poder inmediato sobre los territorios y pueblos conquistados. Los
españoles recrearon en las nuevas tierras un sistema feudal: recibieron tierras y a
la gente que las habitaba en recompensa por su participación en las exploraciones
y guerras de pacificación. Este sistema se institucionalizó en el régimen de la
encomienda, que concedía a los indígenas de un territorio al conquistador que la
poseía siempre que éste velara por el adoctrinamiento cristiano de sus indios. Los
abusos a los que se prestaba el sistema de encomiendas llevaron a la creación de
los repartimientos de indios en 1512. La corona intentó nuevamente proteger a los
indígenas de los excesos de sus amos españoles mediante las Nuevas Leyes de
1542, las cuales derogaron el carácter hereditario de las encomiendas.

La colonización española y la portuguesa, tuvieron un fin común basado


esencialmente en el sector capitalista. Sus objetivos fueron capitalistas,
organizando la producción y los hallazgos para que luego estos se transformaran
en ganancias potenciales y así poder colocar mercancías y establecerse en el
mercado mundial. No promovieron un sistema de producción capitalista porque en
América no había un ejército de trabajadores libres en el mercado. De esta manera,
los colonizadores para poder explotar de forma capital a América, se vieron
obligados a recurrir a relaciones de producción no capitalista: la esclavitud de los
indígenas. Producción y descubrimientos por objetivos capitalistas; relaciones
esclavas o semi‑esclavas; formas y terminologías feudales (al igual que el
capitalismo mediterráneo) son los tres pilares en que se asentó la colonización de
América. La colonización tiene objetivos capitalistas, basados en obtener
ganancias, combinadas con relaciones de producción no capitalistas.

La conquista del territorio americano y de sus habitantes, y su incorporación a los


dominios de la corona de España, fue la obra de conquistadores feudales, de los
consecutivos de aquellos que habían luchado contra los moros y que antes habían
engrosado los ejércitos de las cruzadas. La conquista de América por España forma
parte del proceso general de expansión del feudalismo y se verifica cuando éste ya
ha entrado en decadencia. España volcó sobre América los elementos de su
régimen feudal descompuesto. El poder de la monarquía se afianzó al entregar a
sus vasallos vastos territorios, cuantiosas riquezas y millares de seres humanos
sometidos a las rudezas y crueldades de la servidumbre. La explotación del trabajo
de indios y negros, en forma servil y esclavista, constituyó su base social a lo largo
de años. Oficialmente la esclavitud de los indígenas no fue abolida por la corona
española hasta 1530.

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