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TEORÍA PSICOANALÍTICA ,

Alfredo Eidelsztein

Modelos, esquemas y grafos


en la enseñanza de Lacan
Eidelsztein, Alfredo

Modelos, esquemas y grafos en la enseñanza de Lacan

- ¡a ed. - Buenos Aires: Letra Viva, 2010.

158 p.; 23x16 cm.

ISBN 978-950-649-302-8

1. Psicoanálisis . l. Título
C DD 150.195

EDICIÓN AL CUIDADO DE LEANDRO SALGADO

A Graciela

© 2010, Letra Viva, Librería y Editorial


Av. Coronel Díaz 1837, (1425) C. A. de Buenos Aires, Argentina
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Por las ediciones anteriores:


Primera edición © 1992, Manantial S.R.L.
Primera reedición © l 995 , Manantial S.R.L.

Por contactos con el autor: www.eidelszteinalfredo.com.ar

Impreso en Argentina - Printed in Argentina

Queda hecho el depósito que marca la Ley l 1.723

Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra bajo cualquier m étodo, incluidos la
reprografía, la fotocopia y el tratamiento digital, sin la previa y expresa autorización por
escrito de los titulares del copyright.
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Indice

INTRODUCCIÓN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9

TOPOLOGÍA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13

MODELOS . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . ... . . . . . . ... . 25


Modelo óptico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25

45
ESQUEMAS . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... . . . . ..
Esquema "~' ... . . . . ................ ... .............. . ... 45
Esquema "Z" .......................... . . .. . . . ... . . . .. .. 71
Esquema "R" .. . ... .. ...................... . ........... . 81

115
GRAFOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Grafo del deseo . .. . ...................... . ............. . 115

CONCLUSIONES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 155

BIBLIOGRAFÍA . . . . . . . . . . .. . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . 157
Introducción

El título de este libro indica claramente que en él se trata de la cuestión de


los modelos, esquemas y grafos en la enseñanza de Jacques Lacan. Intentaré
establecer la relación que esta serie de producciones guarda con los princi-
pales conceptos psicoanalíticos que Lacan elaboró y muchas veces creó.
Tanto los modelos, como los esquemas y los grafos, son formas de pre-
sentar estos conceptos y sus relaciones de manera "sincrónica"; en ellos
todos los conceptos puestos en juego están dados simultáneamente. Por
el contrario, cualquier presentación discursiva implica necesariamente la
"diacronía", ya que todo discurso responde a una estructura fundamental
consistente en ser una cadena de términos, lo que produce como efecto
ineludible que los conceptos y sus articulaciones sean expuestos primero
uno, luego el otro, y así sucesivamente. La presentación discursiva, aunque
no lo parezca, contribuye poco a que el lector articule, porque éste tiene
que conservar en su memoria todo lo que fue dicho o leído con anterioridad.
Los modelos, esquemas y grafos intentan favorecer la articulación de los
conceptos por parte del lector. Pero tan sólo cumplen esta función cuando
se los puede manejar con cierta comodidad.
Trataré de dar cuenta de la estructura de cada uno de ellos, ya que no
es la misma, ni siquiera en su sentido más general. Por ejemplo, a pesar
de ser ~~.mb0s "esquemas", el esquema"~' tiene la estructura de lo que en
matemábc::is se llama un grupo, mientras que el esquema "R" tiene una
estructura topológica.

En el estudio de estas producciones lacanis,11as la pregunta por la r e-


lación que guardan entre sí va a ser uno de los temas fundamentales. E l
que los modelos hny11n aparecido primero (Seminario 1), los esquem as

o
ALl"lllmO EIDl,LBZTl'IN 1 MODELOS, l•:SQUEMAS Y GRM'OS ¡.;¡-.. 1.,\ t-:NSEÑANZA DE LACAN lNTROO UCC IÓN

después (Seminario 2) y sólo al final de esta _serie lo hayan hecho los grafos proyectiva y las superficies del analysis situs, no ha de tomarse como ocu-
(Seminario 5), no da información sobre su relación recíproca, o sea, no rre con los modelos ópticos de Freud, con rango de metáfora, sino como
a lcanza para concebir cómo se relacionan. representando realmente la propia estructura". 3
La enseñanza de Lacan tiene, entre otras, la siguiente particularidad: la La forma de concebir la relación entre los tres registros lacanianos es
forma en que se imbrican la sincronía y la diac;ronía de sus concepciones, entonces topológica, mientras que la relación entre los f'reudianos es tópica.
o sea, la relación que guardan entre sí los conceptos fundamentales en Veremos en el transcurso de los capítulos en qué consiste esta diferencia.
cada etapa de su desarrollo y en su progreso. El estudio de los modelos, Lo que reclama Lacan, respecto de la articulación psicoanalítica de los
esquemas y grafos es una buena vía para seguir y estudiar la articulación tres registros, es que deben implicar al sujeto del inconsciente y, siguiendo
entre lo que se caracteriza por estar marcado por una lógica sincrónica y su enseñanza, hay que tener en cuenta que lo que se quiere representar
aquello que lo hace por una lógica diacrónica. (la noción de sujeto del inconsciente tal como se presenta en la experiencia
Pero, ¿cuáles son las nociones que Lacan intenta articular a través de analítica) debe estar presente en lo que se elige para representarlo; sino
los modelos, los esquemas y los grafos? caeríamos en lo que aquí le critica a Freud: no superar el rango de metáfora;
Desde su primer Seminario y hasta el último, Lacan elabora las conse- se hace necesario aquí el uso de la topología. Esta condición la encontramos
cuencias de haber introducido en el psicoanálisis la estructura de sus tres ya en "Intervención sobre la transferencia" de 1951, en la que en un párrafo
registros: lo Real, lo Simbólico y lo Imaginario . Es en el último Seminario, memorable Lacan dice: "Es decir que el concepto de la exposición es idéntico
el de Caracas, donde afirma "mis tres no son los suyos" (de Freud). 1 En al progreso del sujeto, o sea, a la realidad de la curación."~
este trabajo propongo que el "retorno a Freud" que Lacan propugnó desde Esta exigencia de que la estructura del sujeto debe ser la misma que la
el comienzo de su producción, consistente en una rectificación de cómo se estructura de aquello que se elige para representarlo la reencontramos en
concebían los conceptos psicoanalíticos en ese momento, tiene otra cara u la estructura de los escritos de Lacan, de los que tanto se habló respecto
otra faz . Ella es el debate, permanentemente sostenido con Freud, respecto del estilo que les imprimió su autor, olvidando que lo que encontramos en
de la validez de la utilización de los tríos freudianos: "Inconsciente, Pre- ellos es la estructura misma del sujeto del inconsciente. En el Seminario 5,
consciente y Conciencia" o "Yo, Superyó y Ello", versus el trío de Lacan. "Las formaciones del inconsciente", encontramos a este respecto:"[ ... ] en
¿cuál es el tipo de relación que mantienen estos tres registros de La- las dificultades de este estilo - quizá puedan entreverlo- algo que responde
can entre sí? lCómo representar esta relación? ¿cuál es la relación de los al propio objeto en cuestión. Como se trata, en efecto,[ ... ] no simplemente
registros freudianos entre sí? La respuesta puede también servir para hablar de la palabra sino hablar siguiendo el hilo de la palabra [ ... ]". 5
responder a la cuestión primeramente planteada: ¿cuál es la relación entre La lectura de los escritos de Lacan es, entonces, "formación del analista"
los tríos frcudianos y el lacaniano? ya que se enfrenta en ellos la misma estructura con la que se debe operar
Los tres registros deben ser presentados juntos, mas ¿cómo? En otra cita en la práctica analítica.
del mismo "Seminario de Caracas" se ve cómo elabora el propio Lacan esta
cuestión: "Aquí está: mis tres no son los suyos. Mis tres son lo simbólico, Por lo antedicho, el primer capítulo de este libro tratará, en forma muy
lo real y lo imaginario. Me vi llevado a situarlos como una topología, la del general, la cuestión de la topología, su relación con las nociones matemá-
nudo, llamado borromeo. ticas y su estructura fundamental. Sólo será una forma de asegurarnos el
"El nudo borromeo pone en evidencia la función del al-menos-tres. contar con los elementos que Lacan toma de los desarrollos más avanzados
J\nuda los otros dos desanudados. de su época, en cuanto a la noción de estructura y a su formalización. Aun-
"Eso le di yo a los míos. Se los di para que supieran orientarse en la práctica. que el estudio de la topología escapa al tema de este libro, para responder
Pe ro, ¿se orientan mejor que con la tópica legada por Freud a los suyos? a las cuestiones en el nivel en que las plantea y trabaja Lacan debemos
"Hay que decirlo: lo que Freud dibujó con su tópica, llamada segunda, hacer el esfuerzo de adentrarnos en el campo de la formalización moderna,
uc.lolcce de cierta torpeza. Me imagino que era para darse a entender dentro lo que nos obliga a introducir conceptos fundamentales de topología.
do los límites de su época. " 2 Es muy temprana la presencia, en la obra de Lacan, del recurso a la
En otra cita afirma: "Esta topología que se inscribe en la geometría
3. "El objeto de l ps ico:in fdi sis", en Reseñas de enseñanza, Manantial, pág. 38.
1, " l•:I 8<'rnin:uio de Caracas", en Escisión, excomunión, disolución, Manantial, pág. 26'1 . 4 . "Tntcrvcnci6n Holi1·0 111 tr1111 Hfrrc ncia", Escritos 1, Siglo XXI, pág. 212.
" l•:I Horn inHrio el e CaracRs", ob. ci t., págs . 264-265. fi. l~ I Sc mi11J11'Í(), l illl'O n, " l ,J tH fi¡1 ·11 111cio11ns del inconscinnte", PRidós, pág. 32.

1() 11
Ál.l•'ltlWO E11m1.~Z '1'1; 1N 1 M ODELOS, ESQ UEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

t opología; no es, como podría ser creído, el punto de abstracción culminante


de este psicoanalista sin par en la historia del psicoanálisis. Así, por ejem-
plo, ya en "Función y campo de la palabra y el lenguaje en psicoanálisis"
de 1953 se encuentra: "Decir que este sentido mortal revela en la palabra Topología
un centro exterior al lenguaje es más que una metáfora y manifiesta una
estructura. Esa estructura es diferente de espacialización de la circunfe-
rencia o de la esfera en la que algunos se complacen en esquematizar los
límites de lo vivo y de su medio: responde más bien a ese grupo relacional
que la lógica simbólica designa topológicamente como un anillo.
"De querer dar una representación intuitiva suya, parece que más que
a la superficialidad de una zona, es a la forma tridimensional de un toro "El espacio, considerado independientemente de
a lo que habría que recurrir, en virtud de que su exterioridad periférica y nuestros instrumentos de medida, no tiene, pues,
su exterioridad central no constituyen sino una única región." 6 ni propiedades métricas ni propiedades proyecti-
La topología le es necesaria a Lacan, no sólo vinculada con lo simbóli- vas; sólo tiene propiedades topológicas ... "
co, aquí planteado alrededor de la función de la palabra, sino también en HENRI POINCARÉ
relación con lo imaginario. En "El mito individual del neurótico", que es
un escrito anterior de Lacan, encontramos, por ejemplo: "¿Qué es el yo,
sino algo que el sujeto experimenta primero como algo que le es ajeno a
él mismo en su propio interior?" 7 Esta concepción de la relación entre lo ¿Qué es la topología? Es una rama de las matemáticas, en el seno de la
interior y exterior es ya topológica. cual se distinguen varios tipos de topologías.
Pero, ¿para qué nos sirve la topología? Esta pregunta puede ser res- Antes de comenzar a desarrollar las propiedades de cada una de las
pondida con estas otras: ¿qué de lo que dice un paciente debe ser tomado topologías, conviene efectuar una distinción en el seno de la geometría
en cuenta?, o ¿cómo hacer para no caer en aquello que se critica de ciertos que nos servirá como introducción al tema: es la distinción entre geome-
enfoques analíticos, como, por ejemplo, el que su horizonte no vaya más allá tría euclidiana y geometrías no euclidianas, de las cuales tomaremos la
de hacer descripciones de formas, tanto de carácter como de personalidad? geometría proyectiva y la topología.
Así también y en cuanto a la posición psicoanalítica respecto de la parti- En el comentario de las propiedades de estas tres geometrías acentuaré
cularidad única de cada sujeto, ¿cómo se opera con nociones de estructura cómo la noción de "conservación" es considerada en cada una de ellas, cómo
generalizables? y, si no lo hacemos, no habría nada para comunicarse entre se considera lo que se conserva y cómo se lo hace. En un enfoque de las
analistas; pero ¿cómo se articula lo particular de cada caso con lo general cuestiones geométricas hecho desde la perspectiva de "las transformacio-
o universal de la estructura? Todas estas preguntas se apoyan en una fun - nes". Es la forma de acceder a la estructura que les corresponde.
damental: ¿cómo se accede a la estructura? Las nociones de la topología y
especialmente sus invariantes topológicos serán la vía. La geometría euclidiana o métrica, que es aquella que hemos estudiado
Teniendo así introducida la topología, sobreviene la pregunta respecto en los colegios, dice que las propiedades de una figura son aquellas que se
de las propiedades topológicas de modelos, esquemas y grafos en la ense- conservan en todo desplazamiento de la misma y que, como tales, tienen
ñan za de Jacques Lacan, ¿son todos topológicos? y ¿cómo evoluciona el que ver con su forma y con su tamaño. Históricamente hablando, es la
recurso de la topología en la enseñanza de Lacan? primera geometría, y el término que la designa tiene una etimología muy
Las respuestas a estas dos preguntas serán los hilos conductores de clara: medición de la Tierra. "La geometría euclídea es métrica, pues
ste libro. supone que todo segmento o ángulo puede medirse y ser expresado por
medio de una distancia o ángulo patrón." 1
He aquí un ejemplo de una figura geométrica que conserva sus propie-
dades "euclidianas" luego de sufrir un desplazamiento:
(l . "!•' un ción y campo de la palabra y del lenguaje en psicoanálisis", Escritos 1, Siglo XXI,
p l'lf(8 307-308.
1. T . Ewa n Fau lkn or, ( l110 11 H1l. rf11 proyccLiva, Oossat, pág. l.
'/ , " l ~ I m ilo ind .i vidu al de l neurótico", Intervenciones y textos, Ma nantial, p:'íg. 57.
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Tcwoi,ot: fA
ÁLl<'lllmO ElllELSZ'l'EIN 1 M ODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

quien al representar un punto por medio de un conjunto de números (coor-


denadas cartesianas) hizo posible la aplicación de los métodos del álgebra
B a la resolución de los problemas geométricos" .6 Esto implica el paso de la
intuición imaginaria a la representación simbólica. Paso éste que orienta y
determina como meta el progreso de la enseñanza de Jacques Lacan.
En este punto quizá convenga intercalar un comentario respecto de l
"álgebra lacaniana". La sustitución, tanto en modelos como en esquemas
y grafos, de las nociones psicoanalíticas por letras"[ ... ] que no por casua-
lidad rompe el elemento fonemática que constituye la unidad significante
A
hasta su átomo literal. Pues está hecha para permitir veinte y cien lecturas
diferentes, multiplicidad admisible hasta el límite en que lo hablado perma-
B' nece tomado en su álgebra". 7 Todo hablante, o sea, también el científico, no
Fl G UH.A 1 podrá evitar la relación significante/significado que sus nociones implican
por estar hechas con palabras; el álgebra, al operar sólo con letras, evita
el t r iangulo ABC es equivalente, en esta geometría, al triángulo A'B'C, ya toda relación con el significado y por eso permite veinte y cien lecturas.
qu e, luego del desplazamiento, se conservan forma y tamaño. Este es el motivo por el cual no se deben traducir las letras del álgebra
lacaniana, al no tener un significado, entonces no tienen un equivalente
La geometría proyectiva"[ ... ] fue uno de los logros fundamentales del en cada lengua: debe conservarse la letra elegida por Lacan.
pensamiento geométrico[ ...]". 2 Estudia las propiedades que se conservan a Se debe precisar, sin embargo, que la geometría proyectiva no llega a
través de la proyección y la sección. En esta geometría no juegan ningún rol ser puramente cualitativa. Poincaré lo dice así: "Que una línea sea recta,
la distancia, el ángulo (que implica medida) ni la congruencia (la relación no es un h echo pur amente cualitativo; no se lo podría asegurar sin hacer
entre figuras idénticas de forma, cuyas partes correspondientes son idén- mediciones o sin deslizar sobre esa línea un instrumento llamado regla,
Licas) . Es la geometría que está en juego en los problemas de perspectiva que es una especie de instrumento de medida". 8 Dado que la proyección
y en el estudio de las sombras. requiere de la recta para poder realizarse, entonces la geometría proyectiva
"Quedó demostrado que los t eoremas de las geometría proyectiva eran está a medio camino entre la geometría euclidiana (métrica) y la topología
independientes del concepto de distancia y que este concepto mismo podía (puramente cualitativa).
xpresarse mediante elementos proyectivos más simples. " :J He aquí un ejemplo de dos figuras que desde la perspectiva de la geo-
"La longitud de los segmentos y los ángulos varían, y los contornos de metría proyectiva tienen las mismas propiedades aunque sus formas y
los objetos sufren una deformación visible. Sin embargo, se conserva la tamaños son absolutamente distintos:
p ropiedad de que ciertos puntos están sobre una misma recta , la propiedad
de una r ecta de ser tangente a una cur va, etc." 4
"Se vio que los teoremas de la geometría métrica constituían casos par-
Li culares de teoremas más generales de la geometría proyectiva, y que la
¡;·comet r ía euclídea abarcaba sólo una par te del campo a l que se extendía
111 geomet r ía proyectiva. " 5
En la h istoria de la geometría, que se enlaza con la t ripartición que intento
definir y comentar (ya que primero apareció la mét rica, luego la proyectiva
y, finalmente, la topología) se destaca el aporte h echo por Descartes, "[. .. ]

FIGURA 2
/\ lcksa ndrov, Kolmogorov y otros, La m at emática : su contenido, métodos y significado.
Tomo 3, Alian za Universitaria, pág. 239.
6. Ibíd.
:!. C:oo rn ctría proyectiva, ob. cit. pág. 2.
7. "Subver s ión de l Ruj oto ... ", Escri tos 2, Siglo XXI, pág. 797 , el subrayado es mío.
~ . J.11 ni 11tc rn á lica: su contenido .. ., ob. cit., pág. 160.
8. Henri Poin c11r6, (J lti 1110H pon1mmi cntos , Espasa-Calpe , p ág. 50.
fi . ( :oon wtrfn proycctiv::i, ob. cit., p{ig. 2.

1.11
1/)
ALl"lliWO E1DELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUBMAS Y GHAI<'OS BN LA ENSEÑANZA DE LACAN T OPOLOGÍA

Finalmente, la topología, cuya denominación primera fue analysis y para la deformación de una esfera:
situs y su etimología es 'tratado sobre el lugar', estudia los invariantes
topológicos, absolutamente cualitativos y no métricos, Las propiedades
que se conservan o los invariantes topológicos son aquellas propiedades
fundamentales de las figuras estudiadas en cada una de las otras ramas de
la geometría. Las figuras o superficies son tomadas como espacios topoló-
gicos. La noción de espacio topológico será definida más adelante. ~ ~
Existen varios tipos de topologías, y la reciente definición es válida
sólo para aquella topología que es una rama de la geometría: la topología
general o topología combinatoria (o de los complejos).
Utilizando la metáfora de M. Frechét y Ky Fan presentan en su libro FIGURA 4
Introducción a la topología combinatoria, la geometría euclidiana sería
equivalente a un hombre vestido con traje de colores, la geometría proyec- En términos más generales, y más allá de la distinción entre topologías,
tiva lo sería al cuerpo desnudo y la topología al esqueleto humano. Como podemos decir que la topología es una rama de las matemáticas que se ocupa
se desprende fácilmente de esta metáfora, partiendo de la geometría ele- de determinadas propiedades, como la vecindad, el límite y la continuidad,
mental, pasando por la proyectiva hacia la topología, se obtienen cada vez de colecciones relacionadas a elementos físicos o abstractos.
dimensiones con propiedades menos numerosas pero más esenciales. Estos términos del lenguaje geométrico, como la vecindad, el límite y
La relación entre estas tres disciplinas, la geometría elemental, la pro- la continuidad, son de uso frecuente en otras ramas de las matemáticas
yectiva y la topología, puede ser articulada a la teoría psicoanalítica, en "[ ... ]y es algo más que un modo de expresión; la representación geométrica
la que es muy enriquecedor sostener la oposición entre geometría del yo hace «intuitivos» muchos hechos del análisis por analogía con el espacio
versus topología del sujeto. Esta oposición la analizaremos en los próximos ordinario, y permite usar los métodos geométricos de demostración, gene-
capítulos. En este mismo sentido, intentaremos relacionar la serie que va ralizados al espacio de n-dimensional" .9
de los esquemas freudianos, hasta los modelos, los esquemas, los grafos Para entender mejor en qué consiste este procedimiento debemos de-
lacanianos.
tenernos primero en la noción de espacio. En esto vamos a seguir a Ale-
Ejemplo de figuras con las mismas propiedades o invariantes desde la ksandrov. Este autor distingue, en el campo de la ciencia, dos nociones de
perspectiva de la topología para la deformación de una figura plana: espacio. El espacio real ordinario, al que define como la forma universal
de existencia de la materia, y el espacio abstracto, una colección arbitraria
de "objetos homogéneos" que no necesariamente son objetos en el sentido

~
común del término, sino que pueden ser fenómenos, estados, funciones,
figuras, valores de variables, entre los cuales existen relaciones similares
a las relaciones espaciales usuales (continuidad, distancia, etc.). "[ ... ] al
considerar una colección de objetos como un espacio hacemos abstracción de
todas las propiedades de los objetos a excepción de las determinadas por las
relaciones en cuestión. Estas relaciones determinan lo que podemos llamar

~ estructura o «geometría» del espacio. Los propios objetos juegan el papel


de «puntos» del espacio; las «figuras» son conjuntos de «puntos»." to
Si las relaciones que estudiamos son las topológicas y dejamos de lad o
~ todas las otras, entonces el conjunto abstracto de objetos se llamará espacio
topológico abstracto, que será el objeto más específico de la topología.
Aclaremos un poco más esto último. "Un espacio topológico [ ...] es un a
FIGURA 3
9. Aleksanclrov .. ., ob. cil., p;íg-. 191.
10. Lbfd ., pág. 192 , ol f11d )l'11y11 d o OR rn fo.
1(¡
17
L\J,Fl(EDO E10ELS:c m1 N 1 M ODELOS, ,,~::;Qu~~MAS y GRAFOS EN LA ENSENANZA DE LACAN
T OPOLOG ÍA

eolección de puntos (un conjunto arbitrario de elementos) en el que se


puede dividir en partes no adherentes entre sí. (Por ejemplo, un seg-
ha definido una relación de proximidad, [ ... ] Es una generalización de la
mento es conexo, pero un segmento sin su punto medio no lo es.)
relación de proximidad de figuras en el espacio ordinario.
"l .. .] Como ha demostrado el posterior desarrollo de la topología, es "3. Frontera. La frontera de un conjunto M en un espacio R es el con -
precisamente sobre la propiedad de proximidad o adherencia sobre la que junto de los puntos adherentes tanto a M como a su complemento
se basan las demás propiedades topológicas. R-M, es decir, a la parte restante del espacio R. (Es, evidentemente,
"El concepto de adherencia expresa la noción de que un punto está un concepto perfectamente natural de fronteras.)
infinitamente próximo a un conjunto. Por tanto, toda colección de objetos
en la que existe un concepto natural de continuidad, o de lo infinitamente "4. Punto interior. Un punto de un conjunto M se llama interior si no
próximo, es un espacio topológico." 11 pertenece a su frontera, es decir, si no es adherente a R-M.
He aquí una formalización 'simple' de las nociones topológicas funda-
mentales: "5. Aplicación o transformación continua. Una transformación de un
conjunto M se llama continua si no rompe las adherencias. (Difícil-
"Una definición rigurosa de espacio topológico general se puede dar de
la siguiente forma: mente se podría dar una definición más natural de transformación
continua.)." 14 Esta transformación es la representada por los dibujos
"Se dice que un conjunto arbitrario R de «puntos» es un espacio topo-
de la deformación del triángulo y de la esfera, dados más arriba.
lógico general si para todo conjunto M contenido en él están definidos sus
puntos adherentes, de suerte que se cumplan las condiciones siguientes, Para completar un bagaje mínimo de nociones topológicas, debemos
es decir, los axiomas del espacio. agregar, a las ya enunciadas, la siguiente:
"l. Todo punto de M se cuenta entre sus puntos adherentes. (Es perfec- "Un conjunto se llama cerrado si contiene todos sus puntos
tamente natural suponer que cada punto de un conjunto es adherente a adherentes." 15
12
éste.)" Otra definición, del mismo autor, pero más precisa es la siguiente: La topología es ta n fundamental que su influencia se hace sentir en la
"Decimos que A es un punto adherente a un conjuntoM, siM contiene pun- mayoría de las otr as r amas de las matemáticas. Aun se la encontró muy
tos cuya distancia a A es menor que cualquier número positivo [ ... ] ". 13 útil en disciplinas no consideradas parte de las matemá ticas en sentido
"2. Si un conjunto M 1 contiene a un conjunto M 2 , todos los puntos ad- estricto (como por ejemplo la m ecánica ) y, como intentar emos demostrar,
h erentes de M 2 lo son de Mr (De modo más breve, pero menos preciso: el en psicoanálisis.
conjunto mayor no debe tener menos puntos adherentes.) Hay que destacar la r elación íntima existente entre aspectos de la topolo-
"[ ... ] Con la ayuda del concepto de proximidad o adherencia es fácil gía y la lógica simbólica. Si bien el pensamiento geométrico ha sido siempre
definir una serie de conceptos topológicos muy importantes. Estos son, abstracto, debido al mismo carácter del concepto de figura geométrica, con
al mismo tiempo, los conceptos más fundamentales y generales de la geo- la topología se eleva a un nuevo grado de abstracción.
metría, y sus definiciones son intuitivamente muy claras. Demos algunos
~j emplos.
En el seno de la topología hay que distinguir entre:

" l. Conjuntos adherentes. Decimos que los conjuntos M y M son ad- 1. Topología diferencial o conjuntista.
1 2
herentes si uno de ellos contiene al menos un punto adherente del 2. Topología algebraica o abstracta (o general).
otro. (En este sentido, por ejemplo, la circunferencia de un círculo 3. Topología general o combinatoria (o de los complejos).
es adherente al interior.)
l. La topología diferencial o conjuntista tiene por t ema toda suerte
"2. Continuidad o, como se dice en matemática, conexión de una figura.
de conjuntos de puntos, especialmen te los conjun tos cerrados; está
Una figura, es decir, un conjunto de puntosM, se dice conexa si no se
basada en la teoría de conjuntos y lleva asociado el nombre de Georg
Cantor y la obra que éste desarrolló en el ú ltimo cuarto del siglo
11 . lbfd. , pngs. 193-1 94, el subraya do es núo.
I!¿ , ll1fd . , pag. 194.
1:1. lh íd., p1íl-(. 262, e l s ubrayado es mío. 11 . lbícl., pág8. 194 - 1!)/) ,
1r, . Jbfd ., png. :w~ .
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i\1.1•' R!!;l)O E1Dl!;LSZTE:IN 1 M O DELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN T O POLOG ÍA

XIX; tiene aplicación en el análisis matemático, especialmente en No, porque se creó una nueva adyacencia, o sea, una transformación CH
el cálculo diferencial (de ahí su denominación). continua cuando no se pierde ni se crea ninguna adyacencia (no se deb e n
2. La topología algebraica o abstracta es el estudio topológico de los producir fusiones ni roturas nuevas); en la figura sí tendríamos una r otu ni
espacios abstractos cualesquiera e implica, como ya hemos dicho, haciendo el camino inverso del que marcan las flechas .
la generalización del concepto de espacio. "La posibilidad de una El ejemplo de figuras topológicas dado más arriba pertenece a la topo-
tal generalización se basa en la uniformidad de las leyes algebrai- logía general o combinatoria y entre las figuras que estudia esta rama do
cas, gracias a lo cual se pueden resolver muchos problemas con un la geometría encontramos la banda de Mobius (sobre la que me extender é
número arbitrario de variables. Ello nos permite aplicar razona- ampliamente en los capítulos sobre los esquemas "l.:' y "R"), el toro, la
mientos geométricos que son válidos en tres dimensiones al espacio botella de Klein y el cross-cap. Este último será estudiado en relación con
n-dimensional." 16 el esquema "R".
3. La topología general o combinatoria (o de los complejos) es una Antes de pasar a las representaciones de las figuras topológicas y dado
rama de la geometría que estudia topológicamente las superficies el tema de nuestro trabajo, debemos tener en cuenta la siguiente salvedad,
(los complejos son generalizaciones de las mismas) . Estudia las siempre repetida y usualmente olvidada: "[En topología] Las figuras y
propiedades que un objeto mantiene luego de sufrir deformación, diagramas juegan un papel estrictamente auxiliar; en ellas no se pueden
como estiramiento y compresión, pero no rotura o rasgado. Fue el expresar las situaciones de ninguna geometría no euclidiana, ya que di -
único campo de la topología relativamente terminado de desarrollar chas figuras representan rectas ordinarias en el plano ordinario, y este
a fines del siglo pasado. plano es completamente euclidiano dentro de los límites de exactitud de
la figura". rn
"Toda transformación de una figura que no destruye la adyacencia de Representación en el plano euclidiano de la banda de Mobius:
las distintas partes de la figura se llama continua; si ocurre que no sólo se
conservan las adyacencias sino que no se crean otras nuevas, la transfor-
mación se llama topológica.[ .. .] en una transformación topológica no hay
ni rotura ni fusiones. [ .. .]Así, pues, las transformaciones topológicas son
unívocas y continuas en ambas direcciones." 17
Entre las nociones fundamentales de la topología general encontramos:
orientabilidad, característica de Euler, homomorfismo, especularizabilidad;
como así también: frontera, ciclo y homología, que iremos definiendo, según
las necesidades que surjan, en los próximos capítulos.
La siguiente es la representación de una transformación de una figura, 18
l es ella continua? FIGURA 6
el toro:
:-,._
- _,,,.-----·. . . .:

-
J.
/· .
FIGURA 5

16. l bfd ., pág. 169. FIGURA 7


17. l bfd., págs. 232-233.
18. lbfd ., póg. 232. 1D. Ibfd ., pt,f(. 1;¡;¡,
.,, 1
"()
ALFIU:DO EIDELSZTEIN / MüUELOS, ESQUléMAS Y GRAFOS EN LA ENS"~ÑANZA DE LACAN TOPOLOGÍA

la botella de Klein: Vemos que en el caso de la esfera, la curva cerrada implica un corte que
divide la superficie en dos, lo que, en el caso representado, no sucede en el
toro, que sólo se ha convertido en algo como un cilindro, pero no dividido
en dos partes. Al toro le hacen falta dos cortes cerrados que no tengan
ningún punto en común, para estar seguros de haberlo dividido en dos
partes. El caso de un solo corte que divide al toro en dos es, por ejemplo,
el siguiente:

FIGURA 8
~
el cross-cap: ~

F IGURA 9b

Por lo tanto, curva cerrada o corte es una propiedad topológica que


debemos agregar a las anteriores. Como dice Poincaré respecto de la to-
pología en ella "todo se basa en la cortadura". 20
La topología es, desde una perspectiva, la rama de la geometría que
implica una exdusión absoluta de toda dimensión mensurable; permite,
a su vez, tratar, de una forma absolutamente distinta de como lo hace el
F1GUllA 9
sentido común, el problema de la relación espacial entre lo exterior y lo
interior, ya que opera con otra noción de espacio; siendo los invariantes
Como con la figura 5, hagamos otro ejercicio para aproximarnos a las
topológicos aquellos que permanecen luego de las deformaciones de las
diferencias en cuanto a los invariantes topológicos. Si partimos de esta
superficies, erradica también todo problema vinculado con la forma .
parte del teorema de Euler: "No se puede trazar una curva cerrada sobre
De ahí su utilización en psicoanálisis; nuestro sujeto no es mensurable,
una superficie sin dividir ésta en dos", nos podemos preguntar, si hacemos
como ninguna de las categorías que le aplicamos. Las relaciones entre
caso omiso de sus propiedades no topológicas ¿qué diferencia al toro de la
lo interior y lo exterior (la noción de espacio que le conviene) son abso-
esfera? Efectuando una representación de un posible caso de una curva o
lutamente distintas de cómo son planteadas por la geometría elemental
línea cerrada sobre una esfera y otra sobre un toro, se obtiene:
(aunque rige correctamente todos nuestros desplazamientos en el mundo
objetivo), y no implica descripción ni forma alguna, ya que la noción de
estructura las excluye.
En cuanto a la cuestión respecto de si los modelos, esquemas y grafos
en la enseñanza de Lacan son topológicos, anticipamos al tratamiento
detallado de cada una de estas cuestiones que los modelos no lo son, dado
que "cuya analogía [ ... ] va a fundar su valor de uso [ ... ] " 21 y que la analogía
que se basa en la semejanza de formas, por ser una comparación hecha por
/ ' la imaginación, no es topológica. Si se piensa en el modelo del ramillete
20. H. Poincaré, Últimos pensamientos, ob. cit., págs. 56-57.
21. "Observación flobn•s el informe de Daniel Lagache: "Psicoanálisis y estructura de IR por
F 1c:unA 9a sonn lid fl<I", J•:Hc·ril.oH 2. SigloXXl , p ~)g . 652 .

"' u;i
ALl"li lmO E1D1, l.SZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAl'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

invertido, presentado en el Seminario 1, se hace evidente su valor analógico


de "modelo" no topológico, ya que, para anticipar un ejemplo, el Estadio
del espejo es representado por un espejo. MODELOS
Los esquemas, tal como los utiliza Lacan, son topológicos, ya que como
tales son geometrizaciones topológicas, cualitativas y no numéricas, de
nociones psicoanalíticas expresadas como puntos y sus relaciones como
segmentos o vectores, pero entre ellos se debe diferenciar al esquema "U' El modelo óptico
y al "Z", del "R" y del "1" ya que estos últimos implican superficies y los
dos anteriores no.
Finalmente el grafo, tal como lo concibe Lacan, es indudablemente
topológico, entre otras razones, por la concepción de "lugar o espacio" que
allí está implicada. Sin embargo, es topológico en forma distinta de la de
los esquemas. Analizaré los modelos, esquemas y grafos en los siguientes
capítulos dedicados particularmente a cada uno de ello.

------ -- ---- -- .... , x'


,. ,, '

\
\

\
\

Espejo
cóncavo

....
, ,
'' .... .... ,,
'' ....
.... ,,
'' ....
.... ,
").'

- - - - - y'
--------- ---
El modelo óptico 1
F IGURA 10

Antes de comenzar a analizar el modelo óptico, se lo debe localizar en el


seno de la enseñanza de Jacques Lacan. Este modelo fue producido en e l
Seminario 1, Los escritos técnicos de Freud, el que marca, para su propio
autor, el surgimiento de la enseñanza de Lacan y establece que lo producido

l. En Ja ed ición CHfl tOllfl nfl de l Seminario 1, por error, aparece invertido el orden de prese nta
ción de los OR(J111111111 H dn l .11cnn. l•:I de la página 191 debe ir a la página 212 y viceve rsa .

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ALFIUWO E1DEL8ZTl'lN 1 MODEL08, ESqUC:MA8 Y GllAPü8 EN LA ENSEÑANZA Dll LACAN E 1. M0 1m 1.o 0 1>·1·1co

anteriormente pasa a tener estatuto de "antecedente" . El Seminario 1 es cóncavo, o sea, algo parecido a la superficie interna y bien pulida de un a
el primero en el que Lacan cuenta con "sus tres" . esfera hueca. Se llaman imágenes reales porque para el sujeto percipien te
Con la introducción a la teoría psicoanalítica de lo simbólico, lo ima- estas imágenes se comportan como objetos y no como imágenes, implica n
ginario y lo real se abre la posibilidad de un nuevo enfoque a la cuestión una ilusión óptica, es decir, el observador es engañado. Las imágenes vir-
fundamental de la constitución de la realidad. Esta temática será elabo- tuales son las cotidianas imágenes producidas por un esp~jo plano (como
rada conjuntamente al análisis de Lacan del caso "Dick" de Melanie Klein el de nuestro botiquín de baño) y no implican ilusión óptica alguna, ya
(publicado por ella en La importancia de la formación de símbolo en el que para el sujeto observador estas imágenes se comportan como tales, o
desarrollo del yo, obra de 1930). sea, como imágenes.
¿Qué le sucede a Dick que la realidad consiste para él en una cantidad Una forma intuitiva de poder diferenciar ambos tipos de imágenes es
tan pobre de objetos libidinizados, siendo que el mundo, para la genera- tomar en cuenta en qué plano se produce la imagen respecto del plano en
lidad de los niños, está cubierto de objetos? y ¿cómo pudo modificar este el que se halla el objet o. En los dos tipos de imágenes se produce una doble
estado de cosas la interpretación de Melanie Klein? Son preguntas que inversión simétrica. Tanto en el espejo plano como en el espejo esférico se
pueden orientar el análisis de lo que Lacan hace al aplicar "sus tres" a produce una inversión de izquierda a derecha o viceversa, pero mientras
una renovada concepción de la realidad en psicoanálisis. que en el espejo plano la simetría se produce en otro plano que el del objeto,
Hay, además, una pregunta que tiene un alcance más general y que en el espejo cóncavo se produce en el mismo plano pero invirtiéndose la
vincula la producción anterior de Lacan en derredor del estadio del espejo imagen de abajo a arriba o viceversa. Se puede representar así la forma
con la teoría freudiana del narcisismo. ¿cómo el fo puede ser un objeto, de producción de la imagen virtual en espejo plano:
más aún, el primer objeto (Freud), si es una imagen (Lacan)? Propongo
que esta pregunta nos oriente en la lectura del esquema óptico.
La disciplina que estudia la relación entre los objetos y las imágenes, la
óptica, tiene una respuesta que aportar a esta pregunta. El recurso de la

~
óptica está doblemente justificado: no sólo por poder dar una respuesta a
nuestra pregunta, sino también por haber sido el modelo que Freud adoptó --
cuando presento "sus tres". Lacan no deja pasar la oportunidad que esta
coincidencia implica.
En la clase del Seminario 1 que lleva por título "La tópica de lo imagi-
nario", Lacan cita extensamente a Freud cuando nos enseña que la forma
corr ecta de interpretar el aparato psíquico, tal como aparece en su primera
tópica, es "[ .. . ]como un microscopio compuesto, un aparato fotográfico o Fmun.A lla Fl GU!lA llb
algo semejante. La localidad psíquica corresponderá entonces a un lugar
situado en el interior de este aparato, en el que surge uno de los grados La prueba que basta realizar para comprobar que esto es así consiste
preliminares de la imagen. En el núcroscopio y en el telescopio son estos en apoyar una mano en un espejo plano, haciendo coincidir así el objeto
lugares puntos ideales; esto es, puntos en Los que no se halla situado ningún y su imagen en el espejo. Si uno retir a la mano, su imagen se verá detrás
~lemento concreto del aparato". l Freud parte de un modelo óptico para dar del espejo y resultará más chica que la mano. Como esto es así nadie se
cuenta de la espacialidad que le corresponde al aparato psíquico; Lacan lo sorprende al ver, en el espejo del botiquín, su cara más chica de lo que ésta
hará en forma equivalente. es en la realidad, sabemos que se ve más chica porque está en otro plan o
Tomando, entonces, las nociones de la óptica, diremos que para ella las que en el que n os hallamos nosotros.
imágenes son de dos tipos: las imágenes reales y las imágenes virtuales. La imagen real se produce en el mismo plano en el que se encuentra el
Las imágenes reales son aquellas producidas, por ejemplo, por un espejo objeto. Comporta una inversión simétrica como la de la imagen virtual, pero
esta inversión no implica cambio de plano. Tomando el mismo esquema
~ ita de El Seminario, libro 1, Los escritos técnicos de Freud, Paidós, pág. 122, que re- que Lacan toma de la óptica, que se denomina experiencia del r am il loL"
¡H·odu ce pa rte de La interpretación de los sueños , Obras complet as, Amorrortu, Tomo V, invertido, se observa:
p11gs. n29-53 0; Biblioteca N ueva, Tomo I, pág. 541-.

·w
Au··itc:oo 81u1·:1.,sz·m1N \ M o o1·:LOS, 1·:st~u 1:: MAS Y URAl"OS 1::N LA 1-:NSl!:NANZA DE LACAN 8L MOl) ¡,;1.0 ÓPTI CO

estructura del yo. Decir que sirve de "modelo" debe ser entendido en toda
su trascendencia conceptual. Efectivamente, el modelo óptico es un modelo
que Lacan crea para responder por una articulación de lo simbólico, lo
imaginario y lo real; pero es una forma de hacerlo que hay que diferenciar
de aquella implicada en los esquemas y en los grafos. Los modelos reposan,
por su estructura misma, en la analogía. En "Observación sobre el informe
de Daniel Lagache ... ", Lacan afirma respecto del modelo óptico: "Plantee-
mos primero el aparato un poco complejo cuya analogía, como es la regla
en estoB casos, va a fundar el valor de uso como modelo":i y también: "Sin
hacernos ilusiones sobre el alcance de un ejercicio que sólo toma su peso
por una analogía grosera con los fenómenos que permite evocar [ ... ]". 4 El
modelo óptico es un apólogo de las relaciones recíprocas de lo simbólico,
FlGURA 12 lo imaginario y lo real.
En el mismo escrito, Lacan nos da su concepción respecto de la relación
En la imagen, las flores están hacia arriba y las flores reales están hacia que guardan entre sí este modelo óptico y los modelos creados por Freud.
abajo, lo que significa que se ha producido una inversión (la otra inversión, "En este modelo, y hasta en su naturaleza óptica, no hacemos sino seguir
izquierda/derecha, no es tan observable dado que la forma del ramillete el ejemplo de Freud, con la salvedad de que en nosotros no ofrece siquiera
la oculta), pero esta inversión se ha hecho en el mismo plano; lo que se materia para prevenir contra una confusión posible con algún esquema de
puede observar en el punto en el cual, podríamos decir, los tallos del objeto una vía de conducción anatómica. " 5 Se desprende de esta cita que Lacan
ramillete se tocarían con los tallos de la imagen ramillete. considera que las producciones freudianas tienen la estructura de mode-
La experiencia del ramillete invertido, tal como Lacan la encuentra los, pero que Freud previno de no confundirlos con ninguna localización
en la óptica, tiene las siguientes características: un objeto peculiar, un anatómica. Este modelo de Lacan ni siquiera, al decir de su propio autor,
ramillete de flores, en el interior de un cubo al que se le han quitado tanto da esa prevención.
la cara que enfrenta el espejo cóncavo, para que se produzca la imagen, Como veremos de aquí en más, son muchas las analogías en juego en el
como la cara que enfrenta a quien lee el esquema de la experiencia, para modelo óptico; entre ellas destacamos la que implica que el Estadio del espejo,
que observe la existencia del ramillete en el interior del cubo; ramillete lo especular, sea representado por un espejo. En próximos capítulos se verá
que, justamente no puede observar el sujeto de la experiencia, quien está que la estructura de los esquemas y los grafos es de una índole muy distinta, a
representado por el símbolo del ojo. Para tal sujeto será una sorpresa el partir de lo cual se justificará la definición que ahora avanzamos: los modelos
hecho de que en determinado momento de su paso por delante del cubo con en general, y el modelo óptico en particular, tienen estructura imaginaria.
un jarrón vacío encima colocado frente al espejo, aparezca, en el interior
del cuello del jarrón, un bello ramillete de flores. Se debe tener en cuenta Lacan aportó al psicoanálisis una clave que faltaba a la teoría del nar-
que el sujeto cree estar viendo un ramillete real, que no sabe de dónde cisismo de Freud: esa es la del Estadio del espejo. En su fundamento, la
salió, porque, hasta hace un instante, ese jarrón estaba vacío . La elección noción de Estadio del espejo está destinada a contradecir todos los desa-
del ramillete como objeto es debida a que la estructura de un ramillete rrollos posfreudianos respecto del "yo autónomo" .
es apta para engañar al sujeto, justamente por carecer de bordes nítidos El Estadio del espejo es una construcción que "[ ... ] consiste en poner
y precisos. de manifiesto la conexión de cierto número de relaciones imaginarias
El hacer referencia a "un determinado momento del paso del sujeto de la fundamentales en un comportamiento ejemplar de determinada fase de
experiencia frente al aparato" es para indicar que sólo en una determinada desarrollo.
posición se produce la ilusión. En el esquema, esto se lee como la posición
del sujeto, representado por el ojo en el cono de reflexión. Fuera de este
cono, la ilusión no se produce; demasiado cerca de los bordes, se produce 3. "Observación sobre el informe de Daniel Lagache: "Psicoanálisis y estructura de la perso-
nalidad", Escritos 2, Siglo XXI, pág. 652.
con tantas distorsiones que la experiencia puede llegar a fallar. 4. lbíd., pág. 659.
La experiencia del ramillete invertido sirve como modelo de la génesis y 5. lbíd., pág. 653 .

28 w
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"Ese comportamiento no es otro que el que tiene el niño ante su imagen la identificación con la imagen engañosa del semejante, la que en tanLo
en el espejo desde los seis meses de edad [ ... ]"ºy que Lacan caracteriza que ilusoriamente completa y unificada vela que este otro se encuentra en
como de "[ ... ] asunción triunfante de la imagen con la mímica jubilosa el mismo estado de "miseria original". La imagen del semejante funciona
que la acompaña y la complacencia lúdica en el control de la identificación como imago salvadora frente a la impotencia biológica.
especular [ ... ]". 7
Una consecuencia de este proceso es el tipo peculiar de relación que se
Es interesante observar lo que sucede si la experiencia no es articula- establece respecto de este otro que llamamos el semejante. Esta relación,
da conceptualmente. En 1888 se publicó en París L'art et la poésie chez basada en una lógica del "o yo o el otro", implica"[ ... ] la imposibilidad do
l'enfant, de Bernard Perez, en él se dice: "El niño de pocos meses, puesto coexistencia con el otro." 11 y la podemos describir como una sola imagen
frente a un esp~jo, se comporta de una manera muy distinta de la de para dos, que permite su articulación con la "lucha a muerte por puro
los monos de las especies superiores, perros o gatos. Estos animales no prestigio", tal como la encontramos en Hegel.
experimentan sorpresa ni placer al ver reflejada su imagen. No la reco- Tomando a Alexandre Kojeve, quien despertó un gran interés por Hegel
nocen como imagen, y la confunden con la realidad o pasan delante de con sus clases en la Ecole Pratique de Hautes Etudes de París a las que
ella con indiferencia. Por el contrario, el niño, delante de la imagen en el asistió, entre otros grandes, Jacques Lacan, podemos citar: "El hombre
espejo, reconoce las personas y las cosas y se maravilla alegremente de se 'reconoce' humano al arriesgar su vida [en una lucha a muerte] para
este reconocimiento". 8 Esta observación, tan precisa en sí misma, al no satisfacer su Deseo humano, es decir, su Deseo que se dirige sobre otro
ser articulada ni a Hegel ni a Freud, como lo hace Lacan, no llevó a nada: Deseo. Pero desear un Deseo es querer superponerse a sí mismo al valor
quedó en una mera e intrascendente curiosidad psicológica. deseado en ese Deseo. Porque sin esta sustitución se desearía el valor, el
Las relaciones imaginarias que son articuladas por Lacan a la conducta objeto deseado y no el Deseo mismo. Desear el Deseo de otro es pues en
frente al espejo, consisten en"[ ... ] que el sujeto se identifica en su senti- última instancia desear que el valor que yo soy o que 'represento' sea el
miento de sí con la imagen del otro, y la imagen del otro viene a cautivar valor deseado por ese otro: quiero que él 'reconozca' mi valor como su va-
en él este sentimiento. "!J y: "En el otro se identifica el sujeto, y hasta se lor; quiero que él me 'reconozca' como un valor autónomo". 12 No hay que
experimenta en primer término t ... ]". 10 Esto determina un efecto de alie- perder de vista que este deseo de "imponerse al otro en tanto que valor
nación fundamental. Alienación en el doble sentido de "ser otro" (en la supremo" 13 implica el "o yo o el otro" porque a este nivel no hay pacto
perspectiva en la que se lo entiende en Hegel y Marx. Entfremdung, en posible; esta dialéctica no puede evolucionar en un "yo te reconozco a ti y
tanto pérdida de identidad) y de "estar loco" (alienación mental). Esto tú me reconoces a mí". No hay pacto posible dentro de esta relación dual
permite concluir junto con Arthur Rimbaud: "Yo es otro". y su falta implica la intención agresiva.
El sujeto se identifica en el otro porque su Yo se constituyo a partir de En "Acerca de la causalidad psíquica", Lacan define de manera destaca-
la "nueva acción psíquica" consistente en la identificación a la imagen ble esta función de la identificación en el otro, proveniente de la articulación
unificada que aporta el semejante; la imagen del semejante tiene tal valor de las nociones de Hegel con su Estadio del espejo y con el narcisismo de
cautivante para el sujeto por las condiciones peculiares de su nacimiento. Freud: "Conque -punto esencial-, el primer efecto de la imago que apa-
Lo que Freud denominó Hilflosigkeit, el estado de desamparo del lactante, rece en el ser humano es un efecto de alienación del sujeto. En el otro se
Lacan lo denomina "prematuración del nacimiento" y Bolk (autor citado identifica el sujeto, y hasta se experimenta en primer término, fenómeno
por Lacan) lo llama "fetalización". Consiste, por un lado, en el atraso del que nos parecerá menos sorprendente si nos acordamos de las condiciones
desarrollo del neuroeje durante los primeros seis meses, y por el otro, fundamentales del Umwelt humano, y si evocamos la intuición que domina
en la anticipación funcional que, respecto de este atraso, representa la toda la especulación de Hegel." 14
maduración precoz de la percepción visual. Esta discordancia temporal Si se articula la intención agresiva para con el otro semejante y la
implica que el sujeto no puede controlar ni dominar un cuerpo que se le estructura alienada del yo, se llega al punto en que esta agresión puedo
presenta como fragmentado, lo que, sin embargo, puede serle ocultado por tomar como objeto al propio yo, y convertirse en una "agresión suicida"
6. "Acerca de la causalidad psíquica", Suplemento de Escritos, Argot, pág. 97 .
tal como la concibe Lacan; fue uno de los pilares sobre los que se apoy
7. Ibíd.
8. Citado por A. Mura en El dibujo de los niüos, Eudeba, p ág. 26. 11. El Seminario, libro 3, Las psicosis, Paidós, pág. , 62.
9. "Acerca de la causalidad psíquica", ob. cit., pág. 92. 12. La dialéctica cl e.1 a mo y de l esclavo en Hegel, La Pléyade, págs. 14-15.
10. lbíd., pág. 93 . 13. Ibíd. , pág. Hi .
14. "Acerca do 111 l'ltlt H11 lid 11 d p t1íq 111 <·11" , ob . cil., pág. 171.
;30 ;¡ 1
EL MODELO ÓPTICO
ALFREDO EIDELSZTEIN J MODELOS, ESQ UEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE Lf.CA N
aún, la de una "adaptación a la realidad" . No se puede hablar, ni siquiera
la nueva distinción que introdujo en el seno de la psicopatología, con su en el nivel del mundo animal, de una adaptación a la realidad.
"paranoia de autopunición" . La noción de realidad debe, en todo caso, ser puesta en cuestión y "los
De aquí surge la crítica que le hace Lacan a Hegel por la forma en que dos narcisismos" son una forma de hacerlo. El primer narcisismo habla-
éste entiende la dialéctica del amo y del esclavo. Para que exista una salida r ía de la función de las gestalten (buenas formas) en el mundo animal
en la que uno de los implicados en la "lucha a muerte por puro prestigio" (funcionamiento que opera a través de la proyección) . El Umwelt, mundo
renuncie a hacerse reconocer por miedo a perder la vida, debe haber un circundante del animal, no es "la realidad" como objetiva, sino que es la
"pacto previo" que dé la posibilidad de tal renuncia, ya que sin ella, el que r ealidad según se constituye por la proyección de la forma corporal de
intentara rendirse, al bajar su arma, siempre sería asesinado. El recurso al cada especie. Por ejemplo, ni para los animales que viven en la selva existe
pacto previo indica que la dialéctica dual es como tal sin salida, salvo por "una realidad" que sea como tal la selva: la selva será distinta para cada
la vía de lo simbólico, como pacto preexistente, que implica la posibilidad especie animal según su "narcisismo", o sea, según la proyección de su
de resolución de la agresividad. específica forma corporal.
Se ingresa así en la necesidad de la consideración del plano legal . En la Cuando hablamos de narcisismo humano, nos referimos a otra cosa. El
óptica hay leyes precisas para entender la producción de las imágenes, tanto n arcisismo humano, o sea, la relación, siempre relativamente fallida, del
las reales como las virtuales, como por ejemplo, la relación biunívoca (a cada sujeto con su propia imagen, está intermediado por la función del Otro. Para
elemento de un conjunto le corresponde uno y sólo uno del otro conjunto y introducir la función del Otro, le es requerido a Lacan desarrollar, producir,
viceversa) entre cada punto de la imagen con cada punto del objeto. el "Esquema del florero invertido" o "Esquema de los dos espejos":
Siendo esto así, en esta experiencia de la óptica se pueden encontrar
los tres registros de lo simbólico, lo imaginario y lo real. Las imágenes, y -------------- x'
especialmente las imágenes engañosas del espejo esférico, representan lo ,,. ,, '
,,.
imaginario, la estructura ilusoria del yo, mientras que el aparato óptico más ''
los objetos "inaccesibles" (las flores reales sólo son accesibles visualmente ''
''
al sujeto de la experiencia a través de la imagen ilusoria), lo r eal y las leyes
de la producción de imágenes, lo simbólico. Además, el hecho de que la ' \
\
\
ilusión sólo se produzca si el sujeto está en determinada posición, permite Espejo
articular este aspecto de la experiencia con una noción muy importante cóncavo
que se aplica a la experiencia analítica: la noción de escena. Se entiende I
I

al sujeto de la experiencia analítica como posicionado en una escena y no


como caracterizado por esencias o sustancias. , ,
... ...
Entonces, ¿por qué Lacan necesita elaborar otro esquema, el Esquema '' ... ... ,,
,,
del florero invertido? ¿Por qué no le alcanza con el esquema del ramille- '
'
... ;

").,
te invertido, tal como lo encuentra desarrollado por la óptica, si éste le , y'
permite articular lo simbólico, lo imaginario, lo real y una concepción de --------------
sujeto no sustancial? FIGURA 13
Para responder a esta pregunta se puede hacer uso de la oposición que
en el Seminario 1 es denominada "los dos narcisismos" . El pensar en dos El comentario de la estructura del modelo óptico se dividirá en: a) las
narcisismos, uno animal y otro humano, es criticable, dado que para el modificaciones que Lacan hace sobre el "Esquema del ramillete invertido"
animal no opera el orden simbólico, entonces los otros dos registros ya no de la óptica para convertirlo en el "Esquema del florero invertido" y b)
pueden ser equiparados a los mismos registros tal como operan para el ser r esponder por la lógica del modelo en su funcionamiento como tal.
humano. Lo real y lo imaginario de los animales no tienen nada que ver Las modificaciones son: 1) la inversión de las posiciones entre florero y
con lo real y lo imaginario de los humanos, por el solo hecho de no articu- ramillete, y 2) el cambio de la posición del ojo que no queda enfrentando
larse en una estructura con lo simbólico. A pesar de lo cual, la idea de dos al espejo esférico y que obliga a introducir un espejo plano enfrentando al
narcisismos tiene la ventaja de hacer desaparecer una idea más in genua ojo y al espejo esféri co.
33
:-12
ALF'REDO EIDELSZTE!N j MODELOS, ESQUEMAS Y GHAF'OS EN LA ENSl':ÑJ\NZA DE LACAN
EL MODELO ÓPTICO

l. Esas tan llamativas y hasta ridículas flores paradas sobre la caja


representan la multiplicidad de objetos alrededor de los cuales se va --- --.. . . . . . .x:
a constituir la imagen del jarrón cuyo cuello las abraza. Comparando,
""
autorizados por la estructura analógica del modelo, por un lado, el
jarrón/continente con el cuerpo con sus agujeros representando las
'
zonas erógenas y, por el otro, las flores/contenidos con los objetos ' \
\
parciales pulsionales, podremos concluir que es alrededor de los ob- \
1
jetos parciales de la pulsión que, para el psicoanálisis, se constituye Espejo
el cuerpo. Sorprende poder encontrar esta función del objeto en un cóncavo
esquema tan tempranamente aparecido en la obra de Lacan.
....
2. A su vez, el jarrón dentro de la caja, también inaccesible al sujeto
X ' , ,,
en la nueva posición que tiene en el esquema, representa el cuerpo '' .... ,,
'
como organismo biológico perdido para el sujeto humano, más allá
de los avatares de las historias particulares.
....
- - - - - - y'
.... -
-----------
FIGUHA 1.4
Una de las consecuencias del cambio de posición del sujeto es que, si
éste no enfrenta el espejo esférico, no es cautivado por la ilusión de la Significa que, por la mediación del otro humano, la imagen real del sujeto
imagen real. Es dable observar que, en las representaciones del esquema se hace virtual. Aquí se debe tener en cuenta, además de lo que enseña la
completo, esta imagen no está dibujada (el florero abrazando el ramillete óptica respecto de las imágenes virtuales, que en la lengua la acepción de
a la izquierda del espejo plano), y, sin embargo, opera porque es la que virtual es: "que tiene existencia aparente y no real".
capta y reproduce el espejo plano. Como se ve claramente, el "Esquema simplificado" no es más simple
Acá conviene hacer una interpolación. Tomando en cuenta el modelo ópti- que el "Esquema de los dos espejos"; en realidad es el mismo esquema,
co tal como aparece en el escrito de Lacan "Observación sobre el informe de sólo lo diferencia la línea punteada S - - - - - - SV "Simplificado" en francés
Daniel Lagache .. ."del año 1958, se nota que lo que ahí es designado i(a), la no sólo quiere decir más simple, sino también simbolizado. Aquí Lacan
imagen real con la que se identifica el yo, no figura en el esquema, aunque sí ha simbolizado lo que representaba el ojo con la letra S, el sujeto mítico
i'(a), la imagen virtual que de la imagen real se produce por el espejo plano. previo a la incidencia de lo simbólico, y con SV, el sujeto virtual, un sujeto
Para el ser humano, la imagen narcisística sólo es accesible a través de que se ve pero desde la posición en la que lo vería otro. Este uso del tér-
la mediación del Otro , aquí r epresentado por el espejo plano. mino "simplificado" será de gran importancia a la hora de distinguir las
El Otro es el medio por el cual el sujeto humano encuentra su "propia" estructuras de los esquemas "l.:' y "Z".
imagen, pero es también lo que separa al sujeto de su imagen. Propongo el siguiente esquema para representar la noción de mediación
Partiendo de que el espejo plano, a diferencia del espejo esférico, produce del Otro:
imágenes virtuales, concluimos que por la mediación del Otro, la imagen
real ilusoria, engañadora, pasa a ser una imagen virtual, no engañadora
como tal. Esta función del Otro, representada por el espejo plano, se halla S A
escrita en el siguiente esquema por la línea punteada "S- - - - - - SV" de la
parte superior del "Esquema simplificado de los dos espejos":
La flecha inferior nos indica que antes de recibir el reconocimiento del
Otro, primeramente se debe producir que el Sujeto eleve a algún otro a la
:ondición de Otro, que lo r econozca como su Otro, como por ejemplo en el
"T u eres mi mujer" en e l que primero se eleva a "una" mujer a la calidad
do " mi" mujer y roción AO podrá recibir de ella el reconocimiento, bajo la
f"o rrnu do propio nio nH1 \j(•, 11 11 l<> r nu1 invo1t ida.
34
:w
EL MODELO ÓPTICO
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQU•:MAS Y GRAPOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

Esta función de la mediación del Otro debe ser articulada a la noción


de locura, que, distinguida de psicosis, implica la exclusión de la media-
ción del Otro y, por tanto, la inmediatez de las identificaciones, un creerse
Gf)
que, como tal, suprime la función de la mediación del Otro. Como dice
Lacan, un hombre que se cree rey está loco, pero si un rey se cree que es "Los objetos reales, que pasan por intermedio del espejo y a través de
rey también; finalmente un hombre que se cree hombre está loco, como él, están en el mismo lugar que el objeto imaginario." 18 O sea, que lo ima-
todos. La locura es entendida, entonces, como una dimensión esencial del ginario y lo real se hallan en el mismo nivel.
hombre, más allá de las estructuras clínicas; la noción de alienación, como Conviene hacer una salvedad: que lo simbólico determine la relación
estructura del yo, ya lo indica. de lo imaginario y lo real no implica que sea más importante. Estamos
En términos de Lacan: "[ ... ]la relación simbólica define la posición del frente a una relación interdependiente, donde no hay lo uno sin lo otro,
sujeto como vidente". 15 pero no reversible, o sea donde las relaciones de cada uno para con el otro
En cuanto al funcionamiento del modelo, hay que decir que la difícil no son las mismas.
adecuación de lo imaginario y lo real no depende ahora de la posición del El pequeño esquema propuesto más arriba coincide con la estructura
sujeto, sino de cómo incidan sobre él los rayos que refleje el espejo plano. general del modelo de los dos espejos y, a su vez, también permite articular
"De la inclinación del espejo depende pues que veamos, más o menos estas elaboraciones lacanianas con la tópica freudiana . Esta indica no sólo la
perfectamente, la imagen" . 16 Así pasa a ser el otro humano como tal y la existencia de las tres instancias, sino, fundamentalmente, que las mismas se
relación con éste, lo activo, en cuanto a la determinación del imaginario car acterizan por hallarse en un determinado orden de localización mutua.
del sujeto. A esta altura de su obra, ¿cómo concibe Lacan el orden simbólico? El
Esta relación con el Otro como propiamente humana es lo que Lacan plano simbólico consistirá en el intercambio legal, que se encarna en los
concebirá como lo simbólico, que determinará la relación recíproca de lo intercambios verbales. Y es lo que opera como guía de la posición imaginaria
imaginario y lo real. Así entendemos el posicionamiento de Dick, el paciente bajo la forma del Ideal del yo . No sólo guía. Podemos decir que el orden
de Melanie Klein; se encuentra una desintrincación de lo imaginario y lo imaginario no podría estructurarse sólo con el Estadio del espejo; requiere
real, lo real está deslibidinizado. Es la consecuencia de una "patológica" del Ideal del yo. "El !ch-Ideal, el ideal del yo, es el otro en tanto hablante,
incidencia de lo simbólico, y la vía de operar sobre ello es, consecuentemente 'l otro en tanto tiene conmigo una relación simbólica, [ .. . ]" 19
lo simbólico. Se halla aquí la ventaja del uso de la noción de posición que El Ideal del yo no sólo guía al sujeto en lo imaginario, sino que también
este modelo autoriza; ya no se enfrenta ninguna esencia de Dick, sino una permite identificar al sujeto. En este sentido "identificar" no es "identi-
determinada posición en la estructura. ficación con", sino dar u obtener identidad, tal como opera la cédula de
A partir de esto último, y teniendo en cuenta cómo Lacan define la identidad o cuando se dice que hemos identificado a alguien en una foto .
relación entre lo imaginario y lo real: "Semejante esquema ilustra que Para terminar de entender cómo concibe Lacan el Ideal del yo, cómo iden-
lo imaginario y lo real actúan al mismo nivel." 17 propongo el siguiente Li flca al sujeto, propongo tomar lo que en el seno del seminario se puede
esquema de las relaciones recíprocas entre los tres registros: considerar una interpretación. Los lectores del Seminario 1 recuerdan la
lnrga serie de intervenciones de O. Mannoni, gran parte de las cuales son
pura corregir o rectificar lo que Lacan dice. Frente a este estado de cosas,
s Lucan dice: "¿Qué es el vínculo simbólico? Para poner los puntos sobre
l11s íes, digamos que, socialmente, nos definimos por intermedio de la ley.
ITR Hi Luamos, a través del intercambio de símbolos, nuestros diferentes yoes los
11 nos respecto de los otros: usted es Mannoni y, yo, J acques Lacan; estamos
on determinada relación simbólica que es compleja, según los diferentes
Es la misma que plantea el modelo óptico, pero con un giro de un cuarto
planos en que nos coloquemos, según estemos juntos en la comisaría, en
de vuelta en sentido contrario a las agujas del reloj:
t1HLa sala, o de viaje". 2º A buen entendedor ...
15. El Seminario, libro 1, Los escritos técnicos de Freud, ob. cit., pág. 214.
16. lbíd., pág. 213. 18. lbfrl .
] 7. lbíd., pág. 214. 11), l hfd. , póg. 2 1().
'IO. l l>fd ., p1'gH. ~ 1 : 1 - :.l l il .
:~7
;10
EL MODELO Ó l'TICO
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ~jNSENi\NZi\ Drj LACAN

Reproduzcamos aquí el modelo óptico tal como aparece en "Observación


Si el Ideal del yo es el vínculo social legalizante, es evidente que debe HObre el informe de Daniel Lagache ... ":
ser introyectado por el sujeto, a su vez, el yo proyecta sobre los objetos su
forma, tal como fue dicho para la descripción del "narcisismo animal" . - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -•..X~
Esta forma de oponer introyección y proyección ordena enormemente las
nociones de Ideal del yo y Yo ideal que Freud propone en "Introducción ''
''
del narcisismo". Allí dice: "Podemos decir que uno ha erigido en el interior ''
de sí un ideal por el cual mide su yo actual, mientras que en el otro falta '
'\
esa formación de ideal". 21 Aquí se refiere al Ideal del yo y en: "Lo que él
proyecta frente a sí como su ideal es el sustituto del narcisismo perdido de
su infancia, en la que él fue su propio ideal." 22 , se refiere al Yo ideal.
En relación con la concepción del Ideal del yo, es muy importante tener I

en cuenta su evolución en la enseñanza de Lacan. Respecto de la concepción I

presentada en el Seminario 1, diré que conviene pensarla como un prejui- X '


,,
cio. Este prejuicio también se halla en la obra de Freud en su concepción '
' ,,
-.
'
de "identidad de percepción" e "identidad de pensamiento". Con la teoría ....
... ______________ _- - - • y'
").

del significante decimos que en lo simbólico es imposible la identidad. La


imposibilidad de hallar un significante que le dé identidad al sujeto Lacan FIGURA 15
la escribe S. En el comentario al Esquema "Z" volveré sobre esta cuestión.
Si se compara la línea punteada que une al sujeto con el sujeto virtual lCuál es la función y el alcance del Ideal del yo en este modelo? Sin
en el "Esquema simplificado de los dos espejos": olvidar que un nombre para este modelo es: "Esquema de las relaciones
del Yo ideal con el Ideal del yo", concluyo que la interrelación entre el
s --------sv 1deal y la estructura del modelo es estrecha. Desde esta perspectiva se
puede formular una pregunta que guíe en este terreno. lPor qué si el Ideal
del yo es simbólico, se lo llama "del yo", yo que, como tal, es una función
que representa que sólo desde una posición simbólica, el Ideal del yo, puede imaginaria? Lo es porque, más allá de lo que Lacan llegó a despejar de su
verse la imagen real reflejada como virtual, con aquella que ocupa un lugar función, a la altura del Seminario 1, se hace cada vez más clara su función
homólogo en el Esquema de los dos espejos, tal como aparece en el escrito i rnaginaria idealizante.
"Observación sobre el informe de Daniel Lagache ... ": Si recordamos que: "El !ch-Ideal, en tanto hablante, puede llegar a
i;ituarse en el mundo de los objetos a nivel del Ideal-Ich, o sea en el nivel
donde puede producirse esa captación narcisística [ ... ]" 24 , vemos que lo
S - - - - - - - - S, 1
que acabamos de decir, ya estaba entrevisto por Lacan, si bien a nivel de
In patología. Esto corresponde, a su vez a lo que Freud encuentra en el
se puede leer con facilidad que respecto al S (sujeto barrado por la inexis- f"onómeno de la Verliebtheit, el flechazo, el estar perdidamente enamorado
tencia en la batería del Otro de un significante que lo represente, que le de alguien, que corresponde a una "subducción de lo simbólico", y que,
dé identidad simbólica) el Ideal del yo ocupa ese lugar faltan te en el Otro Hüg(m la teoría de la estructura alienada del yo, permite a Lacan coincidir
y hace del S un S. "El Ideal del Yo es una formación que viene a ese lugar co n la afirmación popular de que "cuando se está enamorado, se está loco";
simbólico[ ... ] (el lugar del sujeto como elisión significante)".2ª ul e namoramiento es una alteración de la función del Ideal del yo.
A esta lógica responde que Lacan pueda escribir, en "Observación sobre
ol informe de Daniel Lagache ... ", la relación entre ambos ideales de la
21. "Introducción del narcisismo'', Obras completas, Amon·ortu, Tomo XIV, pág. 91 ; Biblioteca 11 i¡tuiente manera:
Nueva, Tomo l, pág. 1092.
22. !bid. •111 . 1°:1 Se minario , l"ibro 1. Los escritos técnicos de Freud, ob. cit., pág. 215.
23. "Observación sobre el informe de Daniel Lagache ... ", ob. cit., pág. 657.
39
;18
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSENANZA DE LACAN

EL MODELO ÓPTICO
Ideal-Yo-ideal
Ambos esquemas requieren la aclaración de la siguiente cita de Lacan:
Se destaca en esta puesta en continuidad la coincidencia de la función "En O, coloco la noción del yo (moi) inconsciente del sujeto." 26 que impli-
del Ideal simbólico con la del Yo, en cuanto al desconocimiento del sujeto ca lo que el sujeto esencialmente desconoce. Desconocimiento que Lacan
del inconsciente. llama en francés méconnaissance y que no implica "no saber" sino un "no
querer saber nada de eso". El moi inconsciente es equiparable a uno de los
Para seguir a Lacan en su concepción de la dirección de la cura, tal elementos novedosos que Freud buscaba introducir con su segunda tópica:
como ella es elaborada en el Seminario 1, se debe continuar con el análisis los aspectos inconscientes del yo.
del modelo de los dos espejos o de los ideales de la persona, a partir del Así se pueden concebir los movimientos de la primera fase del análisis;
desarrollo del "Esquema simplificado de los dos espejos": a) "[ ... ]paso de O a O', de lo que, del yo, le es desconocido al sujeto a esa
imagen en la cual reconoce sus cargas imaginarias. " 27 , a través, como fue
Espejo plano
dicho, de las inversiones de las posiciones entre el sujeto y el otro que es el
~,,
\\
analista, inversiones que encarnan la función de mediación del otro a nivel
Espejo
cóncavo • •
,,
\\ de la palabra, a través de la cual el sujeto se reconoce; b) "[ ... ]el sujeto se
realiza en la medida en que el drama subjetivo es integrado en un mito que
o· 11
o 11 1/
// tiene valor humano extenso, incluso universal'', 28 o sea, no sólo la función
.t1 de mediación del otro sino también toda la estructura legal, que para el
psicoanálisis es el complejo de Edipo y, finalmente, c) "[ ... ]todo lo que era
Esquema simplificado de los dos espejos
del ego debe ser realizado en lo que el sujeto reconoce de sí mismo." 29 O
FIGURA 16 sea: Wo Es war, soll !ch werden.
Concluyendo, en una teoría del fin de análisis, se podrían destacar los
Lacan lo equipara a una báscula del deseo, a partir de la cual se puede siguientes elementos: a) "[ ... ] no hay resolución posible de un análisis,
definir la puesta en marcha del dispositivo freudiano como:"[ ... ) el discurso cualquiera sea la diversidad, la multiplicidad de matices de los aconteci-
desamarrado; la oscilación de espejo que permite el movimiento de báscula mientos arcaicos que pone en juego, sin que al final llegue a anudarse en
entre O y O', al fin de los análisis que han sido conducido correctamente. " 25 torno a esa coordenada legal, legalizan te, llamada complejo de Edipo. ":lo
Esto conduce a inversiones dialécticas, cambio de las posiciones subjetivas b) "Una vez realizado el número de vueltas necesarias para que aparezcan
por efecto del intercambio simbólico, en el curso del análisis, tal como los objetos del sujeto, y para que su historia imaginaria sea completada
Lacan sostiene desde "Intervención sobre la transferencia", desarrollado [ ... )Lo que primero estuvo en O, y luego en O', y después de nuevo en O,
en su Esquema del análisis: debe trasladarse ahora al sistema completado de los símbolos. Así lo exige
la salida del análisis." 31
Es en estas nociones de "sistema completado de los símbolos" y de "his-
toria imaginaria completada" donde reencontramos la función idealizante
del Ideal del yo. Sólo el Ideal del yo puede dar la ilusión de identidad al
sujeto, si reconocemos como su verdadera función la de ocultar la falta de
significante en el Otro, o sea, completarlo.
Si en el Grafo del deseo, como veremos más adelante, el Ideal simbólico
se escribe I(A), es porque cumple la función ilusoria de completar al Otro
marcado por la falta de significante, Otro que se escribe (A). Se debe tener
U11 esquema del a11álisis
26. lbid., pág. 412.
FIGURA 17 27. Ibid., pág. 275.
28. Ibid., pág. 282.
25. Ibid., pág. 260. 29. Ibid., pág. 288.
30. Ibid., p ág. 292.
40 31. Ibid., pág. 29'1 .

ti 1
EL MO DP,LO ÓPTI CO
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS ~~ N LA ENSENANZA DE LACA N

el analista. Hacerlo caer del supuesto lugar de poder reconocer al sujeto.


en cuenta que cuando Lacan disponga de estas elaboraciones cambiará su Atravesar, a partir de la caída del lugar que la transferencia otorga al
concepción de fin del análisis. Esto se observa muy claramente al prestar analista, la posición en que se estaba, de esperar recibir la comprobación
atención a los títulos de los apartados del escrito "Observación sobre el de la omnipotencia del Otro.
informe de Daniel Lagache ... ", de los cuales el tercero es: "Los ideales Finalmente, algunas palabras sobre la utilización del modelo óptico en
de la persona" y el cuarto: "Por una ética". El fin del análisis se trata de el Seminario 10, La angustia, todavía inédito. Las nociones que he desa-
una ética porque la experiencia analítica es una experiencia que va más rrollado hasta aquí no permiten dar cuenta de gran parte de ese trabajo,
allá de los ideales, como la palabra ética lo indica. Si ética se diferencia de pero, sin embargo, efectuaré algunas articulaciones. Lo primero que se
moral lo hace en tanto que toda moral se apoya en los ideales más o menos destaca es que Lacan lo utiliza como un esquema y ya no como un modelo,
sociales, lo que está bien o lo que está mal; por el contrario, cada decisión o sea, ya no se basa en ninguna analogía con los fenómenos que se quiere
ética se toma sin apoyo de ideal alguno. evocar; el peligro es que el lector no lo advierta y haga él una analógica
Para concluir, entonces, con el comentario del modelo de los dos espejos entre el modelo óptico del Seminario 1 y el esquema, que sobre algunas
o de los ideales de la persona, presentaré cómo concibe Lacan el fin del lecturas posibles del mismo, desarrolla Lacan en el Seminario 10.
análisis a la altura de "Observación sobre el informe .. ."; allí aparece: Ya no hay más espejos, el espejo plano A ya no es un espejo y es leído
como la partición de los lados respectivos "del sujeto" y "del Otro" de la
siguiente manera:
180"
A

que luego es aprovechado para representar la operación de división del


sujeto:

A S
1'(a)- 180"

s JA

Fl G URA 18
que finalmente le permite a Lacan escribir su fórmula del fantasma en
A partir de la siguiente cita: "Sin entrar en unos detalles que parecerían el lado del Otro:
un recurso forzado, puede decirse que al borrarse progresivamente hasta
una posición a 90º de su punto de partida, el Otro, como espejo en A, puede A S
llevar al sujeto desde S 1 a venir a ocupar, por una rotación casi doble, la
posición S2 en I, desde donde sólo virtualmente tenía acceso a la ilusión del
florero invertido en la figura 2; pero que en ese recorrido la ilusión debe g JA
desfallecer con la búsqueda a la que guía [ ... ] ", 32 se hace claro que no sólo
a
el S da un giro de 180º, sino que la teoría de fin del análisis también.
Sólo se llega al fin del análisis si se logra effacer (en francés entre otras
acepciones, "presentar cada vez menos superficie") al Otro, encarnado por El cuerpo, en ta nto que dentro del cubo, y por lo tanto no accesible a
la m irada del sujeto, es elaborado como n o especularizable, como -cp, no
32. "Observación sobr e el in fo rme de Dan iel Lagach e ... ", ob. cit., pág. 659.
48
ALFREDO Ernm.BZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS y GRM'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

especularidad aquí imaginarizada, que más adelante articularé a una de


las figuras de la topología, el cross-cap o plano proyectivo, ya que también
se caracteriza por estar compuesto de una parte especularizable y otra no ESQUEMAS
especularizable.

El esquema "L"

Abandonamos los modelos que hemos definido como analógicos, ya


que su funcionamiento se basa en la analogía entre lo que se representa y
lo que se usa para representar, o sea, como dice Soren Kierkegaard "[ ... ]
la analogía es algo imperfecto dentro del concepto" .1 Los modelos tienen
estructura imaginaria y esto hace concluir que no son topológicos.
Con respecto a los esquemas, los trataré tal como lo propone Lacan a la
altura de su Seminario 2, en el que los define de la siguiente forma: "Este
esquema no sería un esquema si presentara una solución. Ni siquiera es
un modelo. Es sólo una manera de fijar las ideas, que una imperfección de
nuestro espíritu discursivo reclama." 2 Lacan dice que se deben trabajar las
nociones que va a proponer y, fundamentalmente, sus interrelaciones, en
forma sólo discursiva, pero que por la "imperfección de nuestro espíritu
discursivo" debemos hacer uso de los esquemas, que, en tanto son sustitutos
de discurso, se caracterizan por tener varias lecturas, que no reposan ni en
la forma ni en la posición, salvo que las tomemos como elementos simbólicos
y que, entonces, deben ser "leídos" ellos también. En este mismo sentido,
en la primera clase del Seminario 6, El deseo y su interpretación, inédito,
Lacan dice respecto de los esquemas: "[ .. .]lo primero que debe exigirse a
un esquema es ver en qué puede servir a propósito de la conmutación." 3 Y
es por esto mismo que en el Seminario 4 dice respecto de los términos del
esquema ":C': "[. .. ]estos términos[ ...] imponen una estructura, es decir

l. El concepto de la angustia, Hyspamérica, pie de pág. 58.


2. El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, Paidós,
pag. 333.
3. Clase del L2-11 -l 95B.
41 45
ALr'REDO EIDELSZTE;IN 1 MODELOS, ES~UEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN
EL ESQUEMA "e'
que si cambiamos alguno de posición, deberíamos situar de otro modo, y
esquema "l:' o "Z", es decir, que estos esquemas son confundidos. No sólo
no en cualquier parte, todos los demás. " 4
serán trabajados como distintos, sino que el esquema "Z" será tomado
Los esquemas de Lacan implican la representación espacial de funciones
como una esencial rectificación de las nociones en juego en el "1:'.
y sus relaciones. La cuestión es establecer acerca de qué tipo de espacio
se trata. Esto último se anuda a la pregunta respecto de si los esquemas
son topológicos o no. Tomemos en cuenta lo que Lacan elige para abrir su (Es)S·-----~----.,e€) otro
seminario del año 1956/57 sobre ''Las relaciones de objeto y las estructuras ~,
freudianas", aún inédito. En la primera clase, Lacan vuelve a presentar
a sus alumnos el esquema "[;', tal como lo hizo en los dos años lectivos ' '
' , ·.§;
'?i'
anteriores. Antes de comenzar a elaborar las nociones así presentadas, da
cuenta de la estructura misma del esquema. Dice allí: "[ ... ]aquí estamos, '
armados por lo tanto de cierto número de términos y de esquemas. La
espacialidad de estos últimos no debe tomarse en el sentido intuitivo del
término de esquema, sino en otro sentido, perfectamente legítimo, que es
topológico -no se trata de localizaciones, sino de relaciones de lugar, por
(yo) a 0 .. U@ Otro
ejemplo interposición o sucesión, secuencia." 5 El esquema "L:' o "Lambda"
Entonces, la noción de espacio en los esquemas, tal como los concibe
FIGURA 19
Lacan, es topológica, ya que ésta no implica analogía ni medición alguna,
aunque sí se toma en cuenta la proximidad, vecindad o continuidad, en
Lo primero que debe decirse del esquema "l:' es que su nombre "Lamb-
oposición a discontinuidad o interposición, nociones éstas implicadas en
da" se justifica por el hecho de que esa letra del alfabeto griego, que se
la concepción de espacio topológico.
escribe 'A, tiene una forma especialmente apta para superponerse a la
El paso de la utilización de modelos a la utilización de esquemas es equi-
estructura del esquema. Su equivalente latino es la letra L, que tal vez
valente a ciertos cambios producidos en el campo de la ciencia relacionados
haga alguna referencia a la inicial del apellido de su creador.
con la introducción del álgebra. Veamos dos aspectos de este hecho; 1) la
Un comentario inicial de este esquema servirá para poder hacer una
introducción del álgebra en matemáticas, que consiste en la expresión de
pregunta fundamental sobre su estructura. El vector AS, o sea el segmento
las relaciones entre números por el uso de símbolos generales, puede ser
de la línea orientado que va de A a S, representa en el esquema el eje sim-
definida entonces como una generalización de la aritmética, la cual, al sus-
bólico; el vector a a' representa el eje imaginario, el vector g;;_, representa
tituir cifras o figuras por letras o signos, permite que sean generalizados
una interrelación de lo simbólico con lo imaginario, y el vector Ali, otra.
y autoriza operar con elementos desconocidos llamados incógnitas; 2) su
utilización en la geometría que se conoce como geometría analítica, en la
cual al"[. .. ] representar un punto por medio de un conjunto de números
(coordenadas cartesianas) hizo posible la aplicación de los métodos del
álgebra a la resolución de problemas geométricos." 6 Como en psicoanálisis ~Eje
se trata de conceptualizar simbólicamente y no de imaginar, es necesario imaginario
efectuar el paso que implica el sustituir modelos por esquemas.
En este capítulo se analizarán los siguientes esquemas: el esquema
"Lambda" o "[;', el esquema "Z", el esquema "R" o "Rho". Por la estruc-
tura de esta lista, se hace evidente que los esquemas "1:' y "Z" son dos
esquemas distintos. Es común escuchar o leer, al menos en Buenos Aires:

4. El Seminario, libro 4, Las relaciones del objeto, Paidós, pág. 135.


5. Ibíd., págs. 11-12.
6. T. Ewan Faulkner, Geometría proyectiva, Dossat, pág. 2.
FH IU l(A 20
16 ti 7
ALFREDO EIDELSZTEIN J MODELOS, ESQUEMAS Y GRAJ<'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA "l.:'

Siendo esto así, surge la siguiente pregunta: si este esquema es el imposible. La respuesta a la pregunta anterior (¿lo imaginario habla?) es
que continúa el trabajo de Lacan para dar cuenta de la estructura de lo sí, y eso justifica la oposición que hace Lacan entre palabra y lenguaje. La
simbólico, lo imaginario y lo real, ¿dónde está lo real en este esquema? Se función de la palabra es simbólica y el uso del lenguaje, imaginario. Par-
concluye que no está. tiendo de esta oposición será fácil, y libre de contradicción, la ubicación del
¿Por qué no está representado lo real en el esquema "I:'? Primero: se polémico "muro del lenguaje". A su vez, si se sostiene que lo imaginario
recordará que si bien el modelo óptico articula lo real, lo simbólico y lo habla, ya implica más que lo puro especular.
imaginario, no figura, no se inscribe en él la imagen real, aquella que Lacan Con respecto a la estructura general del esquema "I:', lo primero que se
unos años después escribirá i(a). Segundo: Lacan presenta su esquema debe decir es que es un esquema de estructura cuatripartita, es un esquema
"I:' en la clase XIX del Seminario 2, El yo en la teoría de Freud y en la tetrádico y, si se presta atención a esta cuestión en todos los otros esquemas,
técnica psicoanalítica, y ahí se encuentra una definición de lo real que se grafos y representaciones que de aquí en más Lacan elabora, se constatará que
debe utilizar para responder a esta pregunta. Lo real es caracterizado por todos coinciden en tener cuatro elementos, cuatro vértices y cuatro lugares:
Lacan como lo que no habla, y lo real no habla porque vuelve siempre al
mismo lugar, o sea, no hay ningún tipo de alteridad en su nivel; la alte-
ridad, lo radicalmente otro, es simbólico. En el esquema "E' lo real no se
representa porque no habla y el esquema "E' es el esquema "de la palabra
y el lenguaje" y, por lo tanto, de la alteridad, del otro.
En el Seminario 2 se abre otra vertiente de la concepción de Lacan sobre
lo real, es la de "lo indeterminado" y se designa así al azar. En aquellos
juegos de azar que se caracterizan porque al comienzo de cada jugada se
vuelven a restablecer las condiciones de las anteriores, como por ejemplo
en el tiro de los dados y en la ruleta, siempre, salga lo que salga, existe la
misma probabilidad de obtener cualesquiera de los resultados posibles.
Luego de 1.000 veces que salió el Oen la ruleta, este número tiene la misma
probabilidad de salir que cualquier otro. No hay ley que determine, que
anticipe, el resultado, y esto es una dimensión de lo real: "Siempre puede
salir cualquier cosa real. " 7 Y la relación del sujeto con esta dimensión de
lo real es elaborada alrededor de la noción de apuesta. "El símbolo surge
en lo real a partir de una apuesta. "8 La función cada vez más esencial que
tendrá "la pregunta" en las elaboraciones lacanianas comenzará aquí a ser
articulada. "La apuesta está en el centro de toda pregunta radical acerca
del pensamiento simbólico. Todo se reduce al to be or not to be, a la elección
entre lo que va a salir o no, a la pareja primordial del más y el menos." 9 l(A) $
Pero, entonces, surge otra pregunta: si lo real no se representa porque FIGUH.A 21
no habla y sí se representan lo imaginario y lo simbólico, entonces, ¿10
imaginario habla? Este interrogante se justifica por el prejuicio existente s a '/. M
cp . - - - -
que implica sostener que lo simbólico es el lenguaje, que lo imaginario son 1 s
las imágenes y lo real, los objetos. La primera salvedad que se debe hacer 1 g
1
a este prejuicio es que accedemos a lo simbólico, a lo imaginario y a lo real 1
por medio de lo simbólico; caso contrario la frase que se está leyendo sería ni r
1
1
1. a!
7. El Seminario, libro 2, ob. cit., pág. 289.
8. Ibíd., pág. 288. a' A 1'7 Alp

9. Ibíd. F 10U ltA 21


'18 '19
EL ESQUEMA "U'
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MmmLOS, r;SQUEMAS y GRAFOS EN LA ENS"~ÑANZA DE LACAN

lesquiera. La noción de estructura es definida así: "Una estructura[ ... ] es


No se olvidará que, a su vez, las redes de la sobredeterminación, que un conjunto de elementos elegidos caprichosamente, pero entre los cuales
Lacan trabaja en su escrito "La carta robada" y en la clase que lleva el se definen una o varias[ ...] operaciones." 15
mismo nombre del Seminario 2, requieren del cuaterno: a, {3, y y o para Como dijimos en el capítulo "Topología", hay que diferenciar entre las
alcanzar a establecer las coordenadas fundamentales del sujeto. nociones de estructura que se utilizan en matemática y entre éstas, al
Junto a Lacan, se afirma que una estructura cuatripartita es exigible rnenos hay que diferenciar estructuras de grupo de estructuras topológi-
para conceptualizar al sujeto de la experiencia analítica. ;as. Las estructuras de grupo consisten en "un conjunto en el que se ha
Antes de responder a la lógica del cuaterno, veamos la primera articu- definido una operación 'x' e 'y' y que satisface las tres propiedades a), b) y
lación del cuaterno en la obra de Lacan. En "El mito individual del neu- · ) ." 16 Las propiedades o axiomas son: a) la ley asociativa, b) la existencia de
rótico", Lacan articula la estructura cuaternaria como una superación de un elemento neutro y c) la existencia para todo elemento de su elemento
la insuficiencia de la estructura terciaria del complejo de Edipo freudiano, inverso. Entre las nociones fundamentales con las que opera la teoría de
al que, según él, debe completarse con el narcisismo, el modo imaginario, grupo está la de "simetría", que veremos muy implicada en la estructur a
para dar el cuarteto, ¿cuál es el elemento que el narcisismo agrega al trío del grupo de Klein. Las estructuras topológicas son aquellas en las que,
edípico? La muerte. "¿Cuál es el cuarto elemento? Pues bien, lo designaré ndemás de la operación de grupo, se define un concepto de proximidad
esta noche diciéndoles que es la muerte." 1º en tre sus elementos y si la proximidad de elementos del grupo implica la
A partir de la función de la muerte como cuarto elemento, podemos de sus productos y la de sus inversos, entonces, es topológica.
analizar la profunda influencia de la filosofía hegeliana en la primera La representación de la noción de estructura, implicada en el grupo de
época de la enseñanza de Lacan. Esto se debe, entre otros motivos, a que Klein, es la siguiente:
la obra de Hegel está esencialmente marcada por la función de la muerte.
Al respecto, James Carse enMuertey existencia, una historia conceptual de ._~~~~~~~-+ - X
la mortalidad humana afirm a: "[ ... ] Hegel es el pr imer o en intentar llevar '..+..
1
la muerte al centro de la vida, para ver lo vivo no como lo no-muerto, o lo 1
todavía-no-muerto, sino como lo mortal." 11 y "[para Hegel] no soy hecho 1
1
mortal por un Otro hostil, sino que soy mortal como un Otro para mí mis-

~l
mo. Este es exactamente el punto en nuestra larga narración en el que la
mortalidad es descrita primeramente como un a parte de la estructura del
yo. Ningún filósofo antes de Hegel había alcanzado tal concepción" . 12 El
-1/x
propio Lacan sostiene que"[ .. . ] la metafísica hegeliana no había hesitado
en constr uir toda la fenomenología de las relaciones humanas alrededor FIGURA 22
de la mediación mortal, tercero esencial del progreso por el cual el hombre
se humaniza en la r elación con su semejante." 13 En la misma nota, Barbut ilustra sobre la utilización de este tipo de
Ahora sí, ¿por qué cuatro? Lacan en su Seminario 14, La lógica del uHt ructura de tal "riqueza y potencia" en geometría, en lógica, en psico-
fantasma, aún inédito, en la clase del 14 de diciembre de 1966, recomienda logía experimental y en etnología, como por ejemplo en C. Lévi-Strauss.
la lectura del artículo de Marc Barbut, "Acerca del sentido de la palabra ,Justamente Lacan toma a Lévi-Strauss cuando desarrolla la noción de
estructura en matemáticas" . En ese trabajo Barbut propone, como repre- nH tructura en el aquí ya citado "Observación sobr e el informe de Daniel
sentante del uso de la noción de estructura en las matemáticas, al grupo lingache .. . " . Ahí dice : "Como por nuestra parte hacemos del término
de Klein, "célebre en matemáticas y presente en múltiples actividades 11HLructura un empleo que creemos poder autorizar en el de Claude Lévi-
humanas" 11 y que se aplica a las permutaciones de cuatro elementos cua- HLrau ss [ ... ]." 17 Además, se encuentr a una total confirmación de esta

10. "El mito individual del n eurótico", en Intervenciones y T extos, Manantial, pág. 58. u.. lbíd., p ág. 7.
11. Muerte y existencia, una historia conceptual de la mort alidad humana, Fondo de Cultura 1U. Ni colás Bourbaki, "La arquitectura de las matemáticas", en Las grandes corrientes del
Ecónomica, pág. 373. pen samien t o matemático, Eud eba , p á g. 41.
12. Ibíd., pág. 378. I '/ . "Observa ción sobre el informe de Daniel Lagach e: "P sicoanálisis y estructura de la perso
13. "El mito individual.. .", ob. cit., pág. 58 . 1rn l idad". F.sc rit oH2, SiJ.{IOXXl. p ~\g. 628 .
14. Ma rc Ba rbou t , fi ch a intern a de la Socied ad An alítica de Bue nos Ai 1·0H ., p t'1 ~ . (i .
51
fi ()
ALFREDO E!DELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA m; LACAN E L i;:s~uEMA "e·

"autorización" de Lacan sobre la noción de estructura, a esta altura de su con él; él no es esencialmente, si miramos de cerca, otra cosa." Confirma
obra, si se observan dos esquemas de Lévi-Strauss a) y b), con la misma osta articulación de la noción de estructura en matemática con las nociones
estructura que el esquema "U': lingüísticas esta definición de Lacan: "[ .. .] la estructura definida por la
a) el que aparece en "Las estructuras elementales del parentesco": 18 articulación significante como tal." 2º
Ahora discutiré una idea que se sostiene con bastante frecuencia entre

PxX_____, )!-Qy
Pyx~
)!-Qx los lectores de Lacan. Es la que afirma que el esquema "U' es una utilización
de la figura topológica que se conoce con el nombre de "banda de Mobius",
cuya representación es la siguiente:
Rx ~Sy Ry "----- ~Sx
FIGURA 23

y b) el que aparece en "Antropología estructural": 19

FIGURA 25
e-----------
Podemos describirla así: superficie de una cara que se obtiene torciendo
FIGURA 24 u na banda larga rectangular de papel y uniendo con goma los extremos.
Si se aplica al esquema "U' una rotación de un cuarto de vuelta en el
Es evidente la relación de "parentesco" entre el esquema "U' y la no- sen tido de las agujas del reloj y lo comparamos con una representación
ción de estructura tal como se la encuentra en matemáticas, a partir de "aplanada" (una representación plana) de la "banda de Mobius", efecti-
Bourbaki y en antropología, en Lévi-Strauss. vamente notamos su parecido:
Si el cuaterno es utilizado en Matemáticas y Antropología, Lacan no
olvida su uso en Lingüística. En su Seminario 5, Las formaciones del in-
consciente, en la clase primera del 6 de noviembre de 1957, al comentar
el cuaterno del Seminario 2: a, j,3, y y o, dice: "Nosotros tenemos entonces
A [)

;
;
;

;~I
1
1
1
allí ese grupo mínimo de cuatro elementos significantes que tienen como ; 1

propiedad que cada uno de ellos es analizable en función de sus relaciones / t


con los otros tres, es decir, para confirmarlo, tal como recientemente en-
contró Jakobson que el grupo mínimo necesario para que se hayan dado
las condiciones primeras, elementales, de lo que se puede llamar el análisis
lingüístico. Ahora Uds. lo verán, este análisis lingüístico tiene una relación
íntima con lo que nosotros llamamos análisis a secas, incluso se confunde B e
B anda de Mobius "aplanada" Esquema 'T' rotado
18. Claude Lévi-Strauss, Las estructuras elementales del p arentesco, Capítulo XII, Paidós,
FIGURA 26a FIGURA 26b
pág. 238.
19. Claude, Lévi-Strauss, "Las estructuras sociales en el Brasil central y oriental", Antropo-
logía estructural, Eudeba, pág. 113 'W. "Observación sobre el informe de Daniel Lagache ...", ob. cit., pág. 629.

52 53
ALFREDO EmELSZTEIN i MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN
EL Ei:iQUEMA "I.:'

Se debe decir que este parecido sólo es superficial ya que sus estructuras
son esencialmente distintas. Lo estableceremos a ~rtir del análisis del entre el sujeto y el Otro [ ... ]". 23
Otro argumento en el mismo sentido está dado por el hecho de que el
punto de "entrecruzamiento" de los vectores AS y a'a en el esquema "I:',
vector AS, que es pleno hasta enfrentar al vector a'li,, por el entrecruza-
con el punto de "entrecruzamiento" de los segmentos AC y BD:
miento, por el choque con el mismo, pasa a ser línea punteada. En realidad
D
el vector a~ divide el esquema en dos, representándose así el obstáculo
A
se-----~---­ a' que inscribe; esto se hace evidente si se le aplica al esquema un cuarto de
lt, giro en sentido a las agujas del reloj, así:
''
'' s
.......
)t- ..............
\ ............. ª,

a A B e '\
FIGURA 27a FIGURA 27b
a
Se debe tener en cuenta que la discontinuidad del segmento BC cuando
encuentra a AD en la banda de Mobius es la forma de escribir que BC pasa
"por debajo" de AD, no sucediendo lo mismo en el esquema "l:', en el que A
ningún vector pasa por debajo del otro, sino que se chocan por estar en el FIGURA 28
mismo nivel.
De una cita del libro de Jeanne Granon-Lafont, La topologie ordinaire Es importante establecer la continuidad o discontinuidad implicadas
de Jacques Lacan, obtenemos que en la representación de la banda de en las figuras que se analizan, ya que el concepto de continuidad, como ya
Mobius "una discontinuidad de la línea no evoca su interrupción, sino vimos, es fundamental en las consideraciones topológicas. El esquema "I:'
el paso bajo otra línea en un momento de su trayecto. El por arriba-por implica discontinuidad, mientras que la banda de Mobius, no.
debajo es necesario para hacer desaparecer la ilusión de la profundidad. El esquema "I:' se distingue de la banda de Mobius, además, por el hecho
[ ... ]Así, las convenciones de dibujo dan a la puesta en plano un estatuto de que esta última es una superficie, una superficie topológica, mientras
de escritura." 21 Lacan, por el contrario, al momento de presentar el es- que el esquema "l:' no implica superficie alguna. Si fuese una superficie,
quema "I:' en el Seminario 3, dice "Nuestro esquema, les recuerdo, figura habría que distinguir dos triángulos; el formado por Sa y el punto de in-
interrupción de la palabra plena entre el sujeto y el Otro, y su desvío por t ersección y el triángulo Aa' y el punto de intersección. Así:
los dos yo, a y a', y sus relaciones imaginarias." 22 Y en la presentación del
mismo esquema en la primera clase del Seminario 4, dice: "Este esquema s a'
inscribe en primer lugar la relación del sujeto con el Otro,[ ... ] es la relación
de palabra virtual por la que el sujeto recibe del Otro su propio mensaje,
bajo la forma de una palabra inconsciente. Este mensaje le está prohibido,
es objeto por su parte de un profundo desconocimiento, está deformado,
detenido, capturado, por la interposición de la relación imaginaria entre
el a y el a' [ ... ] La relación imaginaria, que es una relación esencialmente
alienada, interrumpe, aminora, inhibe, invierte[ ... ] la relación de palabra A
a
21. Cf.•Jeanne, Granon-Lafont, La topologie ordinaire de Jacques Lacan, Point Hors Ligue, FIGURA 29
pág. 31.
22. El Seminario, libro 3, Las psicosis, Paidós, pág. 26.
" :1. 81 So minnri o, libro 11, l.n roln ción d e objc lo. ob. ci t., p ág. 12, subrayado mío.
f)4 (51)
E L m.iQU l, MA "t.;'

ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN donde Lacan señala muy evidentemente la presencia de los cuatro lados
del cuadrado (o de los cuatro segmentos que unirían los cuatro puntos del
Ambas superficies, o sea, ambos triángulos deberían representar cada esquema que son vecinos, tomados de a dos):
uno algo distinto. Esto no es así. Jamás Lacan hizo referencia a una lectura
de esta índole, jamás hizo referencia a triángulo alguno en le esquema "U' Lado superior
y el intentarlo entra en contradicción con todas las enseñanzas que Lacan
intenta transmitir con este esquema.
No por ello queda fuera del campo de aplicación de las nociones topo-
lógicas. No es una figura como las que estudia topología combinatoria o
de los complejos, aquella que es una rama de la geometría, pero sí será
comprendida por la topología general o abstracta, para la cual un conjunto o
de puntos puede ser tomado como espacio topológico. Las nociones funda-
mentales de la topología se le aplican, como por ejemplo: no opera ninguna Lado
Lado derecho
noción de cantidad ni mensurabilidad, la forma del esquema tampoco en- izquierdo
tra en cuenta, nada cambiaría si fuese más alargado, más estirado o más
grueso. A su vez, no guarda ninguna relación de analogía con aquello que
representa; por ejemplo "N' no es más grande que "a", el sujeto "S" no
está por encima del yo, "a". En su escrito "De una cuestión preliminar a
( ) o
todo tratamiento posible de la psicosis", Lacan dice: "La 'L' [ ...]tiene una
estructura combinatoria que no hay que confundir con su aspecto espacial.
Como tal, es ciertamente el significante mismo que debe articularse en el
Otro, y especialmente en su topología de cu at ernar io". 24 Lado inferior
Hemos dicho que si diferenciamos entr e nociones de estructura en
matemática, lo hacíamos fundamentalmente entre estructura de grupo FIGURA 30
y estructura topológica. Hemos utilizado las nociones de estructura de
grupo para relacionar el esquema "U' con el grupo de Klein, tal como lo Los paréntesis indican el lado izquierdo, los redondeles, el lado derecho,
había usado, por ejemplo, C. Lévi-Strauss; pero en esta cita posterior de los círculos plenos, el lado superior y los círculos vacíos, el lado inferior.
Lacan, nos dice que más bien hay que pensarlo como estructura topológica. Esto último se confirma, además, porque Lacan llama muchas veces al
¿Por qué? Veremos más adelante, en la articulación del esquema "U' con esquema "U' como "nuestro cuadrado" o "nuestro cuadrado mágico" en
las estructuras clínicas, que la cuestión de la "distancia" será tomada en el transcurso de los años de más uso de este esquema, alrededor de los
cuenta. Distancia no métrica sino topológica, en la cual no es lo mismo si Seminarios 2, 3 y 4.
dos puntos están separados que si están infinitamente cerca. Como la dis- Habiéndose establecido que es como un cuadrado al que se le han quita-
tancia no cuantitativa, es tomada en cuenta en la estructura del esquema do los dos lados laterales, surge la pregunta de la razón de esta maniobra
"U', éste tiene estructura topológica. que voy a llamar la introducción de sendos intervalos. El motivo es que
El esquema "U' consiste en cuatro puntos y cuatro vectores que los Lacan lo desarrolla para dar cuenta de la correcta concepción de la expe-
conectan de una manera particular. Para mayor claridad haremos de cuen- riencia analítica, como experiencia intersubjetiva, en contra de la teoría
ta que el esquema es 'como' un cuadrado, en el sentido de tener cuatro de la relación de objeto . Para dar una idea de lo que esta última implicaba
vértices, cuatro lados y dos diagonales, pero sin olvidar que se erradica en el momento de la creación del esquema "U', tomaré unos párrafos del
toda dimensión de superficie, tal como sucede en la representación del Diccionario de psicoanálisis de J. Laplanche y J .-B. Pontalis. "El término
grupo de Klein. 'relación de objeto' se encuentra ocasionalmente en los escritos de Freud;
El esquema "U' , entonces, es como un cuadrado al que se le ha quitado así pues, resulta inexacto decir, como se ha hecho, que Freud lo ignora;
el lado izquierdo, que uniría S con a y el lado derecho, unión de a ' con con todo, puede sin duda afirmarse que no forma parte de su aparato
A. El sustento de lo antedicho está representado en el mismo esquema, conceptual.

24. "De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis", oh. cit., pág. 533.
57

{)()
ALFREDO ErnELSZTEIN 1 Monr:LOS, ~:sQu~;MAS y GRM'OS ~;N LA ENSENAN7.A OE LACAN
EL ESQUEMA "U'

"Sin embargo, a partir de los años 30, el concepto de relación objeta! ha


adquirido una importancia creciente en la literatura psicoanalítica, hasta
el punto de constituir actualmente, para muchos autores, la referencia PxX Qy

Py""x-----
Qx

teórica fundamental .
"La promoción del concepto de relación objeta! ha conducido a un
cambio de perspectiva tanto en el campo clínico como en el técnico y el
genético. " 25
Rx ""Sy FIGUIV\
Ry
32
" " Sx

En el Seminario 2 se encuentra: ''A la famosa relación de objeto con


En el segundo esquema, por la línea punteada se corta el esquema,
la que hoy nos relamemos, se tiende a convertirla en un modelo, pattern
dejando A y C por un lado y B y D por el otro.
de la adaptación del sujeto a sus objetos normales". 26 La crítica de Lacan
a la noción de relación de objeto no estará basada en el hecho de que no
es una noción freudiana, aunque es cierto que no lo es; tampoco la crítica : B
porque implica un cambio esencial de toda la doctrina, aunque lo implica,
sino porque es incorrecta. Esto va a ser dicho y articulado con el esquema
"l.!'.

sG,t----~----Jt6
''
'' e- 1

'' 30
~ ' FIGUHA

La lectura que propongo del esquema "I.:', al partirlo verticalmente, se


autoriza en el diagrama del grupo de Klein.
a @ .,_-------~-X

F IGUllA 31 1
Cada extremo escribe la fundamental separación que una correcta 1
1
concepción teórica requiere de la función del S y del a por un lado, y del 1

~i
A con el a', por el otro.
Para comenzar con su análisis, retomaré los esquemas de Lévi-Strauss.
En ambos está indicado el hecho de que son pasibles de ser partidos por la
mitad en sentido vertical (separando el lado derecho del izquierdo). En el -1/x
siguiente esquema, los lados derecho e izquierdo están indicados por las FIGUHA 34
letras "x" de un lado y las letras "y" del otro, respectivamente.
La líneas punteadas permiten una maniobra de corte vertical, en el sen-
tido que inscriben los lados derecho e izquierdo, dejando las dos versiones
de "x" a la izquierda y de"- x" a la derecha.
Efectuando tal corte vertical al esquema "I.:', se obtiene el lado izquierdo,
25. Laplanche y Pontalis, Diccionario de psicoanálisis, Nacional Quimantu, pág. 375, subra-
yado mío ..
que llamaré del sujeto y el lado derecho, del otro . Esto corrige las nocio-
26. El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, ob. cit., nes de la teoría de la relación de objeto en tanto que ésta, la verdadera
pág. 333. relación de objeto, a partir del esquema "I.:', ya no es dual, por el hecho
58 fi9
ALFREDO EmELSZTEIN J MODELOS, ~:SQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA "l.:'

de que tanto el lado del sujeto como el lado del otro, son dobles. Del lado lenguaje." 28 El lenguaje adquiere una función imaginaria, en tanto y en
del sujeto se deben diferenciar el sujeto del inconsciente (S) y el yo (a); del cuanto "objetiviza" al sujeto como "yo" y al otro.
lado del otro, se obtendrá al otro como semejante (a') y al Otro (A) como No debe sorprender que ubiquemos dimensiones del lenguaje en planos
alteridad radical. No puede haber una correcta concepción y conducción opuestos del esquema. Ya Ferdinand de Saussure había establecido en su
del análisis si se confunden los extremos heterogéneos, tanto del lado del Curso que el lenguaje es, en sí mismo, el mixto heterogéneo de la lengua,
sujeto como del lado del otro. En el esquema "U', Lacan escribe que, si bien por un lado, y la palabra o habla, por el otro.
se establecen los lados del sujeto y del otro, respectivamente, cada uno de En el capítulo sobre el modelo óptico, decíamos que eran ciertas propie-
éstos implica una composición de dos elementos heterogéneos. dades de las imágenes las que permitían la objetivación; ahora esa función
Volviendo un poco atrás, resta decir que el esquema "l.:' es un cuaterno le es conferida al lenguaje. Veremos que en el desarrollo de la enseñanza
muy peculiar, o sea, "más o menos" un cuaterno. Si tenemos en cuenta los de Lacan, el pasaje de funciones de lo especular al lenguaje no se agota en
extremos del vector que inscribe la relación imaginaria, observamos que ambos el que ahora comentamos, como tampoco la ampliación de lo imaginario,
son denominados con la misma letra: a. Sí el vector a1i tiene por extremos dos que, si incluye el lenguaje con su función objetivante, ya no es sólo el
lugares denominados con la misma letra, ¿son dos lugares o sólo uno? Desde la Estadio del espejo.
perspectiva del esquema, son dos lugares, ya que uno índica el vértice superior Por otra parte, sí se articulan "imaginario" y "realidad" es porque en
derecho y, el otro, el vértice inferior izquierdo. Pero, al ser denominados por el eje aa' ubicaremos el fantasma, aun en su dimensión exclusivamente
la misma letra, son presentados también como un solo lugar. imaginaria, que podemos llamar 'fantasmagorías'.
Esta paradoja del esquema es la paradoja propia de la dialéctica entre Oponiéndose a la función objetivante del lenguaje, la palabra cumple la
el otro semejante, el otro del modo imaginario y el yo, entendido como el función del reconocimiento subjetivante, que implica una dialéctica pro-
precipitado de las identificaciones con la imagen del otro. La verdadera pia, la del vector AS que Lacan describe así: "En la verdadera palabra, el
pregunta entonces es: ¿el yo y el otro imaginario son dos o uno? Respon- Otro es aquello ante lo cual se hacen reconocer. Pero sólo pueden hacerse
deré con una cita del seminario de Lacan: "Esa forma del otro posee la r econocer por él porque él está de antemano reconocido. Debe estar reco-
mayor relación con su yo, es superponible a éste y la escribimos a'. Tene- n ocido para que puedan hacerse reconocer[ ... ] [y] el reconocimiento de
mos, pues, el plano del espejo, el mundo simétrico de los ego y de los otros u n Otro absoluto, al que se apunta más allá de todo lo que pueden conocer,
homogéneos". 27 Dado que a' y a son intercambiables entre sí, entonces no y para quien el reconocimiento sólo tiene valor precisamente porque está
implica cambio de estructura cuando Lacan escribe uno u otro en cada más allá de lo conocido". 29 Lo que abre la posibilidad de recibir del Otro
extremo del eje de la relación especular (cf. Seminario 2, clase XXIV). el reconocimiento es el paso previo de reconocer al Otro, lo que está cla-
Comenzaré el estudio del eje imaginario por la vía de esta paradoja. r amente indicado en todos los ejemplos que da Lacan, al comenzar todos
Se debe decir que el eje a'a no sólo inscribe la dialéctica del Estadio del ellos con un "Tú eres ... " .
espejo, también inscribe la función del lenguaje, que, para distinguirla de El más allá de lo conocido en el reconocimiento será lo inconsciente
la función de la palabra, Lacan la denomina "muro del lenguaje", tal como de la concepción freudiana, sí al inconsciente freudiano le articulamos la
fue planteado más arriba. Esto autoriza otra interesante pregunta: si el teoría de la palabra que Lacan está construyendo y el deseo de reconoci-
lenguaje es, obviamente, simbólico, ¿cómo, justamente, lo vamos a ubicar miento de Hegel.
en el eje imaginario? El propio Lacan enuncia: "Tenemos, pues, el plano Respecto de esto último, el deseo de reconocimiento de Hegel, tomamos
del espejo, el mundo simétrico de los ego y de los otros homogéneos. De él de Kojeve : "Tal aceptación de la muerte se produce cuando el hombre
debe distinguirse otro plano, que llamaremos el muro del lenguaje. arriesga conscientemente su vida en función del solo deseo de 'reconoci-
"Lo imaginario cobra su falsa realidad, que, sin embargo, es una rea- miento' (Anerkennen), de su mera 'vanidad'. El deseo de reconocimiento
lidad verificada, a partir del orden definido por el muro del lenguaje. El es el deseo de un deseo, vale decir, no de un ser dado ( = natural), sino
yo tal como lo entendemos, el otro, el semejante, todos estos imaginarios de la presencia de la ausencia de tal ser. " 30 También: "Así en la relación
son objetos. Cierto es que no son homogéneos con lunas: constantemente entre el hombre y la mujer, por ejemplo, el Deseo es humano sí uno desea
corremos el riesgo de olvidarlo. Pero son efectivamente objetos, porque son
nombrados como tales en un sistema organizado, que es el del muro del 28. Ibíd., el subrayado es mío.
29. El Seminario, libro 3, Las psicosis, ob. cit., págs. 78, 79.
27 . Ibíd., pág. 366, el subrayado es mío. 30. La idea de muerte en Hegel , La Pléyade, págs. 101-102.

60 61
EL ¡,;,<¡~ U EMA " lj'

ALFREDO EmELSZTEIN 1 Mom:ws, ESQUI;;MAI:> y GRAFOS r:N LA ENSEÑANZA DE LACAN


Desde la perspectiva antropológica esto es la interdicción del incesto y el
no el cuerpo, sino el Deseo del otro, si quiere 'poseer' o 'asimilar' el Deseo intercambio de las mujeres, lo que Lévi-Strauss denomina "las estructuras
tomado en tanto que Deseo, es decir, si quiere ser 'deseado' o 'amado', o elementales del parentesco" y que Freud elabora a partir de la noción de
más todavía, 'reconocido' en su valor humano, en su realidad de individuo complejo de Edipo.
humano." 31 Recordemos que Lacan, en el vector AS , coloca como para- Esta función del Otro, A, para un sujeto, puede ser encarnada por una
digma "Tú eres mi mujer" . El deseo, y aun el deseo sexual, en tanto que pluralidad de sujetos anónimos, como, por ejemplo, el conjunto de los
dimensión intersubjetiva implica la noción hegeliana de la mediatización sujetos que constituyen el "auditorio", para el "conferenciante", quien
del otro como esencial para la condición del ser humano. puede recibir su mensaje desde este Otro, ya que si el auditorio abandona
Se puede obtener una concepción simple de la mediatización del Otro, el lugar, puede planteársele al sujeto en cuestión la pregunta: si todos se
tema que ya hemos trabajado en el capítulo sobre el modelo óptico, si des- van, lél se hallará en el lugar del conferenciante?
doblamos el vector A ~ S en dos momentos lógicos, el primero consistente Esta concepción del Otro simbólico lo hace garante de la verdadera
en elevar a un otro a la función de Otro que se puede escribir S ~ A, y posición simbólica del sujeto, lo hace garante de la verdad del sujeto.
el segundo que consiste en recibir de este Otro el lugar simbólico, A ~ La función del Otro de ser garante de la verdad y el que la verdad tenga
S. Queda así el Otro en posición 'media' en el reconocimiento del Sujeto. posibilidad de garantía será profundamente criticada por Lacan cuando
Sólo se adquiere el lugar simbólico de 'esposo' si una mujer en especial, a desarrolle su esquema "Z".
la que se reconoce primero 'mi mujer', reconoce al hombre en ese lugar. En cuanto al Sujeto, S, Lacan aprovecha la homofonía que tiene en fran-
Desde ya debemos destacar que ésta no es la concepción del deseo que se cés la letra S con lo que Freud en su segunda tópica denomina Es, o sea,
halla en Freud y a la que, por lo tanto, Lacan representará a otro nivel el Ello, para indicar que el sujeto en cuestión es el sujeto del inconsciente,
en su esquema "I.;'. que no sabe lo que dice y que no es tomado como una totalidad sino en su
Este poder discrecional que detenta el Otro a nivel simbólico, el poder abertura. Este sujeto es lo que Lacan llama "nuestra suposición básica, la
asignar o no un lugar al sujeto, se basa en la estructura de la comunicación de los analistas" . Desde el analista, detrás del discurso que recibe, se hace
humana que Lacan rectifica. La teoría de la comunicación enuncia que el operar la suposición de un sujeto.
emisor codifica y emite el mensaje que el receptor recibe y decodifica. Desde La prueba de la existencia de un sujeto pasa por la posibilidad de que
la teoría lingüística estructural, articulada a la concepción del sujeto tal como puede mentir. Si se puede plantear la pregunta lestará mintiendo?, en-
se desprende de la experiencia analítica, Lacan la rectifica proponiendo que Lonces se está frente a un sujeto. Aquí hay que diferenciar entre engaño
el emisor recibe su propio mensaje en forma invertida desde el receptor. y mentira. El engaño, propio del modo imaginario y posible en el mundo
Es a consecuencia de esta concepción que Lacan localizará la transfe- animal, no va más allá de la maniobra del tero, que pone los huevos en un
rencia en el vector AS, en tanto el esquema "I.;' puede dar la estructura lugar y grita 'tero, tero' en el otro para engañar a sus enemigos; mientras
de la experiencia analítica. "[ ... ] En esta línea se establece todo lo que que la mentira, que sólo es posible a nivel simbólico, tiene que ver con el
corresponde a la transferencia, y lo imaginario juega precisamente un i-;ujet o, implica la posibilidad de mentir sobre una mentira, algo así como
papel de filtro, incluso de obstáculo. ":.12 poner los huevos en un lugar y en el mismo gritar 'tero, tero', que deja
A no sólo representa al otro sujeto que por su posición de alteridad lll interlocutor sin la posibilidad de saber si se dice la verdad, queriendo
radical motiva que se lo llame el Otro y que es capaz, a su vez, de reco- hacer creer que se dice una mentira, o viceversa. Desde esta per spectiva,
nocer a nivel simbólico, o sea, desde donde se recibirá el verdadero lugar HC plantea como paradigma el chiste que Freud trabaja en El chiste y su

(mensaje) en lo simbólico, y que es lo inconsciente (por eso siempre se lo relación con el inconsciente: "En una estación ferroviaria de Galitzia, dos
recibe en forma invertida), sino también la estructura legal en general, judíos se encuentran en el vagón. 'lA dónde viajas?' , pregunta uno. 'A
como el armazón fundamental de las relaciones intersubjetivas, y en es- Cracovia', es la respuesta. 'iPero mira qué mentiroso eres! -se encoleriza
pecial"[ ... ) el pacto que une al hombre con la mujer[ ... ] del pacto mayor •L otro-. Cuando dices que viajas a Cracovia me quieres hacer creer que
que pone de acuerdo al elemento macho con el elemento hembra [ .. . ]".:l3 viajas a Lemberg. Pero yo sé bien que realmente viajas a Cracovia. ¿Por
qué mientes entonces?"' 34
De los tres textos de Freud que Lacan destaca como fundamentales para
31. La dialéctica del amo y del esclavo en Hegel, La Pléyade, pág. 14.
32. El Seminario, libro 4, La relación de objeto, ob. cit., pág. 82.
:1t1 . Obras co mp letas, Tomo VTll , Amonortu , pá g. 108; Biblioteca Nueva, Torno I , pág. 875.
33. El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, ob. cit.,
pág. 296. 63
62
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 Mom~LOS, ESQUEMAS y GRA~'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL r-:squr;MA "I.:'

la elaboración de la noción de lo inconsciente: La interpretación de los sue- lo que indica la condición de determinado que tiene el yo, tanto por el otro
ños, La psicopatología de la vida cotidiana y El chiste y su relación con lo imaginario como por el Otro simbólico; 3) del punto S sale un vector, el del
inconsciente, es este último el más apto para elaborar lo inconsciente como deseo; es un vector que sale porque "el deseo torna activo al hombre"; llega
articulado a la dimensión del Otro. Mientras que los sueños y los lapsus un vector desde el A indicando que si bien entre S y A hay una relación de
pueden parecer más intersubjetivos, a Freud no se le escapa "El chiste como interdependencia (no existiría el uno sin el otro), esta relación no implica
proceso social" (título de un apartado de su libro). Recordemos su distinción reversibilidad; el A determina al S y no viceversa, y 4) del punto a' sale un
con "lo cómico": "En lo cómico intervienen en general dos personas; además vector hacia a indicando que el otro está en el origen de la identificación
de mi yo, la persona en quien yo descubro lo cómico[ ... ]. Al proceso cómico del yo, y llega un vector desde S, el vector del deseo.
le bastan esas dos personas: el yo y la persona objeto [ ... ]. El chiste como Por lo tanto, si se encaran los vectores que articulan ambos ejes, se tiene
juego con las propias palabras y pensamientos prescinde al comienzo de el vector Ali,, que indica que si bien lo imaginario es fechado por Lacan
una persona objeto,[ ... ] requiere de otra persona a quien poder comunicar en los primeros meses de vida y la función de la palabra es evidentemen-
su resultado. Ahora bien, esta segunda persona del chiste no corresponde te posterior, desde la perspectiva estructural, lo simbólico, en tanto que
a la persona objeto, sino a la tercera persona, al otro de la comicidad. "35 La registro, tiene una posición de antecedente lógico respecto de lo imagina-
comunidad conceptual y hasta terminológica entre esta cita de Freud y los rio. También en este vector se inscribe el que lo simbólico determine lo
lugares del esquema "I:' es verdaderamente llamativa. imaginario, en el sentido de que lo simbólico es la causa de lo imaginario ,
Del texto de Freud sobre el chiste se obtiene, además, una forma de como efecto. Si esto es así, se debe concluir que si se desea operar sobre lo
presentar otra dimensión que Lacan adscribe al Otro, A. Una de las con- imaginario, hay que hacerlo sobre lo que lo determina.
diciones que hace apta a una persona para ocupar el lugar tercero del otro En cuanto al vector fu'., donde se localiza el deseo que torna activo al
del chiste es que pertenezca "a la misma parroquia" que la primera. En hombre y que Lacan define como: "Y ese deseo es lo que al mismo tiempo
términos de Lacan, el pertenecer a la misma parroquia se entiende como está en la fuente de toda especie de animación. "~i;, se debe destacar que en
"compartir el Otro". este nivel se inscribe la concepción freudiana del deseo (que no coincide
Pasemos ahora a lo que se desprende como enseñanza de los dos vec- con la hegeliana); por lo tanto hace de a', el destinatario de este deseo, el
tores que articulan al eje simbólico con el eje imaginario: Ali, y &;'. Antes objeto.
de hacerlo conviene distinguir del esquema, en su conjunto, cada uno de Propongo diferenciar las nociones freudiana y hegeliana de deseo a
los vértices con sus respectivos vectores. partir de cómo las articula Lacan en su esquema "I:'. El deseo hegeliano,

,,
s-------~----­
'.. ------7•' que se inscribe en vector AS, articula un elemento simbólico con otro
elemento simbólico; en cambio el deseo freudiano, que se inscribe en el
vector fu'., articula, como ya dijimos, lo simbólico con lo imaginario. En
el desarrollo de la enseñanza de Lacan este problema será encarado y

,, resuelto al producirse, en su seno, la noción de objeto a causa del deseo,


ya no imaginario. El esquema "R" será el lugar en el que estos cambios
empezarán a elaborarse.

-~A
Estamos leyendo a a' ya no como la imagen del otro imaginario, sino
también como el objeto del deseo; hay aún otra acepción que darle, a' es
a
también el objeto libidinal, entendiendo Lacan, a esta altura de su obra,
a la libido como imaginaria. "Libido y yo están del mismo lado. El narci-
FIGURA 35
sismo es libidinal." 37
a' tendrá, entonces, dos valores: 1) como el otro de la dialéctica imagina-
Así se hace más evidente que: 1) del punto A sólo salen vectores, ninguno ria, el semejante, y 2) el objeto del deseo, al que en nuestros días haríamos
llega, lo que debe ser interpretado como que el Otro es un lugar determi-
nante y no determinado; 2) al punto a sólo llegan vectores, ninguno sale, :¡(). El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, ob. cit.,
pág. 335.
35. Ibíd., Tomo VIII, pág. 137; Tomo I, pág. 889, el subrayado es núo. :¡7 . rbrd ., png. 11s1 .

64 61)
ALFREDO E!DELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ~~NSENANZA DE LACAN EL " sc:¡uEMA " 1 ~'

coincidir con el objeto propio del 'marketing' y que, consecuentemente, Resta decir que en el mismo Seminario se encuentra una articul aciün
es teorizado por Lacan, en este momento de su enseñanza, como imagi- de la insistencia significante y la pulsión de muerte y que el tenerla e n
nario. cuenta aporta un giro novedoso a lo que se describió como dirección do 111
¿Por qué el deseo freudiano, tal como aparece en el esquema "~' está cura y fin de análisis.
representado por una línea punteada, o sea, es inconsciente? La respuesta Esta articulación implica:
es qu~ puede saberse cuál es el objeto que se desea, pero todo objeto a'
oculta, como tal, la falta a nivel del otro imaginario y esto es lo inconsciente l. "La experiencia freudiana parte [ ... ) por postular un mundo d
de esta dimensión del deseo. deseo[ ... ] El deseo se instituye en el interior del mundo freudiano
De lo antedicho se desprenden una concepción de la dirección de la cura en el que se despliega nuestra experiencia, lo constituye, y no hay
y una crítica a la forma en que se la venía concibiendo. Si lo determinante instante del menor manejo de nuestra experiencia en que esto puedu
es lo que llamamos el Otro y lo determinado es a, entonces un psicoanálisis ser borrado. "12
debe proceder sobre Ay desde A, para operar sobre S. En el eje imaginario 2. "El mundo freudiano no es un mundo de cosas, no es un mundo dol
aa' ubicaremos la transferencia como resistencia, a la resistencia al paso ser, es un mundo del deseo como tal." 13 Y: "El deseo es una relación
de la palabra de A a S y, si es el analista el que se ubica en el punto a', la de ser a falta. Esta falta es, hablando con propiedad, falta de ser.
resistencia será del analista. No es falta de esto o de aquello, sino falta de ser por la cual el se r
"El análisis debe apuntar al paso de una verdadera palabra, que reúna existe." 41; el significante no remite a un objeto, sólo remite a otro
al sujeto con otro sujeto, del otro lado del muro del lenguaje. Es la relación significante, lo que nos lleva a:
última del sujeto con Otro verdadero, con el Otro que da la respuesta que no 3. "El deseo, función central de toda experiencia humana, es deseo d
se espera, que define el punto terminal del análisis." 38 "El análisis consiste nada nombrable" 45 , que es taxativamente definido en el Seminario
en hacerle tomar conciencia de sus relaciones, no con el yo del analista, 7, La ética del psicoanálisis, en la clase que se llama "La pulsión
sino con todos esos Otros que son sus verdaderos garantes y que no ha de muerte", como "el campo innombrable del deseo radical" 46 quo
reconocido. Se trata de que el sujeto descubra de una manera progresiva lleva a concluir con un sesgo novedoso lo que Lacan define como
a qué Otro se dirige verdaderamente aun sin saberlo, y de que asuma fin de análisis:
progresivamente las relaciones de transferencia en el lugar en que está y 4 . "Pueden apreciar que la acción eficaz del análisis consiste en que el
donde en un principio no sabía que estaba. ":3n Ya en el Seminario 1 estaba sujeto llegue a reconocer y a nombrar su deseo. Pero no se trata de
presente esta concepción de la dirección de la cura, a través de la noción reconocer algo que estaría allí, totalmente dado, listo para ser cap-
de "palabra plena"; allí Lacan dice: "La palabra plena es la que apunta, tado. Al nombrarlo, el sujeto crea, hace surgir, una nueva presencia
la que forma la verdad tal y como ella se establece en el reconocimiento en el mundo. Introduce la presencia como tal, y, al mismo tiempo,
del uno por el otro. La palabra plena es la palabra que hace acto. Tras cava la ausencia como tal. Únicamente en este nivel es concebible
su emergencia, uno de los sujetos ya no es el que era antes. Por ello, esta la acción de la interpretación." 47
dimensión no puede ser eludida en la experiencia analítica." 40
Y, como se vio en el capítulo anterior, para el fin del análisis Lacan reto- El reconocimiento por parte del Otro del ser del sujeto debe ser enten-
ma el Wo Es war, soll !ch werden freudiano, al que le va a dar el siguiente dido como produciendo un ser que sólo se sostiene en su "falta de ser" .
sentido: "Al final del análisis es él quien debe tener la palabra (en el sentido En el uso de los términos de "presencia" y "ausencia" se reencuentra e l
de tomar la palabra), y entrar en relación con los verdaderos Otros. Ahí Fort! Da! freudiano, paradigma de sus elaboraciones sobre el "más allá dol
donde el S estaba, ahí el !ch debe estar." 41 Se entenderá como la supresión principio de placer" y la pulsión de muerte. "Todo se reduce al to be or not
ideal de la distancia entre S y a por la vía de la elevación de la dialéctica,
que al comienzo del análisis se encontraba en a, hasta S. 42. Ibíd., pág. 333.
43. Ibíd.
38. Ibíd., pág. 369. 44. Ibíd. , pág. 334.
39. Ibíd., pág. 370. 45. Ibíd., págs. 334-335.
40. El Seminario, libro 1, Los escritos técnicos de Freud, Paidós, pág. 168. 46. El Seminario, libro 7, La ética del psicoanálisis, Paidós, pág. 262.
41. El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, ob. cit., 47. El Seminario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica , ob. ci t ..
370. pág. 312, ol 1111hrny11clo oH 1n fo.
(;7
66
ALFREDO EJOELSZTEIN 1 MODELOS , ESqUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ESQU EMA " ~'

to be, a la elección entre lo que va a salir o no, a la pareja primordial del parte, la pérdida de la distancia entre A y a produce el delirio. "Esta dis-
más y el menos. Pero tanto presencia como ausencia connotan ausencia tinción entre el Otro con mayúscula, es decir, el Otro en tanto que no es
o presencia posibles. Desde el momento en que el sujeto mismo llega al conocido, y el otro con minúscula, vale decir el otro que es yo, fuente d
ser, debe esto a cierto no ser sobre el cual eleva su ser. Si él no es, si no es todo conocimiento, es fundamental. En este intervalo, en el ángulo abierlo
algo, ~ todas luces está dando fe de cierta ausencia; pero seguirá siendo entre ambas relaciones debe ser situada toda la dialéctica del delirio. " n1
siempre deudor de esa ausencia, quiero decir que de ella tendrá que dar La tercera dimensión psicopatológica corresponde a la histeria . En el
pruebas, por no poder dar pruebas de la presencia. " 48 Seminario 3, Las psicosis, Lacan afirma: "¿Quién es Dora? [ .. .] La cuestión
Esto es llevar hasta sus últimas consecuencias la noción de "diferen- de saber dónde está el yo de Dora está así resuelta: el yo de Dora es el señor
cial" u "opositiva" para el significante de Ferdinand de Saussure. En su K. La función que cumple en el esquema del estadio del espejo la imagen
Curso de lingüística general encontramos: "Esto es más cierto todavía especular, en la que el sujeto ubica su sentido de reconocerse, donde por ve~
en el significante lingüístico; en su esencia, de ningún modo es fónico, es primera sitúa su yo, ese punto externo de identificación imaginaria, Dora
incorpóreo, constituido, no por su sustancia material, sino únicamente por lo coloca en el señor K." 52 En el esquema "U' podemos entonces inscribir
las diferencias que separan su imagen acústica de todas las demás". 19 El muy bien la "identificación invertida" propia de la histeria, en la cual el
ser del "ser" sólo le viene de su no ser, es en su diferencia con "no ser" . yo estará en a'.
A su vez, al recordar el "Tú eres ... " que inaugura la dialéctica del re-
conocimiento, se debe tener presente el trabajo que posteriormente hará El esquema "U' que marca el paso trascendente del uso de los modelos
Lacan al convertir este "Tú eres ... " (T'est ... ) en su homófono francés : imaginarios a los esquemas simbólicos, será extensamente usado por Lacan
Tué, que significa asesinado, matado por su paso por lo simbólico. El Otro, en los Seminarios 2, 3 y 4. Pero, a par tir de allí, será objeto de una profunda
capaz de reconocer, también se ausenta a consecuencia de su presencia crítica. Crítica, no de su estructura, sino de las nociones que escribe y de
en lo simbólico. cómo las articula. Profunda autocrítica de Lacan que está en la base de la
Articulando esto último a lo antedicho, se puede entender por qué el producción de los esquemas "Z", "R" y del "Grafo del deseo" .
fin de análisis es entendido con Lacan a través de las famosas palabras de
Edipo en Colona: "¿Ahora cuando nada soy, acaso me convierto en hom-
bre?" Con el psicoanálisis, tal como lo concibe Lacan desde su retorno a
Freud, contestamos que sí.

Del esquema "I.;', además de la concepción de la cura y el fin del análisis,


también se puede desprender una forma de representar algunas dimen-
siones psicopatológicas . De las tres que se trabajarán, las dos primeras
implican el achatamiento del esquema, o sea, la pérdida de la separación
de S y a por un lado y de A y a ' por el otro. Esta pérdida de distancia debe
ser entendida como pérdida de distancia topológica, tal como la que repre-
sentamos y estudiamos en el capítulo sobre topológia.
La pérdida de la distancia topológica, o sea, la pérdida de separación,
entre S y a por el rebajamiento de S a a produce, como efecto, la locura.
"Un loco es precisamente aquel que se adhiere a ese imaginario, pura
y simplemente." 5º Un loco, y no la estructura psicótica, es aquel que se
adhiere a su a (moi) sin la intermediación de la función del Otro. Por otra

48. Ibíd., pág. 288-289.


49. Curso de lingüística general, Losada , pág. 201.
50. El Semina rio , libro 2, El yo en la teoría de Frcud y en la técnica psicoanalítica, ob. cit., 51. El Semi na rio, libro:~. L11H pHiCoHiA, ob. ci t., pág. 63.
pág. 365. 52 . l bíd ., pf\g. 2tlfl -:.!fi() ,

68 (i!)
El esquema "Z"

S a

a' A

Esque1na "Z"
F!GURJ\ 36

Partiendo de la ubicación del esquema "Z" en el seno de la obra de


Lacan, se indicará cómo éste corrige al esquema "I..:'. Esta modificación es
necesaria para pasar luego a los esquemas "R" e "I" y al grafo del deseo.
El esquema "Z" aparece en el escrito "De una cuestión preliminar a
todo tratamiento posible de la psicosis", texto redactado entre diciembre
de 1957 y enero de 1958, o sea, simultáneamente con el Seminario 5, Las
formaciones del inconsciente, en el que, justamente, Lacan produce su
grafo del deseo.
Que Lacan ya haya dictado el Seminario 3, Las psicosis, implica que,
lu ego de proponer su esquema "I..:' en el Seminario 2, ya haya producido:
n) la distinción entre Estadio del espejo y el orden imaginario, ya que este
ú ltimo implica, además del Estadio del espejo, también la significación; b)
lu teorización de la falta de un significante que, si bien en ese momento
Hignifica patología (la forclusión del Nombre-del-Padre implica la psico-
11 is), inaugura el tratamiento lógico de esa cuestión; c) la distinción entre

71
ALFHEDO E1DELSZTEIN j MODELOS , F.SQUEMAS Y GRM'OS EN LA ENSENANZA DE LACAN EL ESQUEMA " Z"

significantes, a partir del significante del Nombre-del-Padre, distinción condición neurótica o psicótica del sujeto depende de lo que se desarrolla
entre significantes que antes sólo comprendía el Ideal del yo, y d) la con- en el Otro. Por esta razón es que el esquema "Z" debe ser producido antes
cepción del orden simbólico como conjunto ca-variante, que, por el uso de del esquema "R", que se podría definir, provisionalmente, como el esquema
la noción de "conjunto", que excluye la posibilidad de la existencia del de la neurosis.
conjunto universal, se deduce que no es una totalidad y que cada signifi- Antes de comentar lo que Lacan escribe en cada punto del esquema
cante en cuanto tal, al pertenecer a un conjunto "ca-variante", "[ ...] en "Z", se deben tener en cuenta varias premisas que fundan la posibilidad
tanto sistema correlativo de elementos que toman su lugar sincrónica y de construir este esquema y que, por lo tanto, se pueden considerar equi-
diacrónicamente unos en relación a otros?[ ... ]" 1 no significa nada. Estas valentes a axiomas . Son las siguientes:
cuatro dimensiones operan plenamente en los esquemas "Z'', "R" e "I"
producidos en "De una cuestión preliminar ... ". l. "[ ... ]la condición del sujeto S (neurosis o psicosis) depende de lo que
tiene lugar en el Otro A." 6 Por "condición del sujeto" se entiende,
Como ya fue dicho no corresponde confundir el esquema "l:' con el por un lado, el 'ser sujeto' y, por el otro, la cuestión de 'qué tipo
"Z". Esto se hace evidente en la definición que da Lacan de este último. de sujeto' está implicado. El término que en francés se tradujo por
"La L del cuestionamiento del sujeto en su existencia tiene una estructura 'tiene lugar' es se déroule que significa "toma lugar en el tiempo
combinatoria que no hay que confundir con su aspecto espacial. Como tal, hablando de una continuidad ininterrumpida de eventos de pensa-
es ciertamente el significante mismo que debe articularse en el Otro, y miento" (Dictionnaire Petit Robert). Esto implica la articulación de
especialmente en su topología de cuaternario."i Luego analizaré el cuestio- tiempo y espacio en el Otro, por lo que propongo como traducción
namiento del sujeto que implica el esquema "Z" respecto de lo planteado más ajustada 'se desenvuelve', que incluye ambas dimensiones, en
en el "1:', pero desde ya se debe tener en cuenta que este esquema tiene vez de 'tiene lugar', ya que siempre nuestro sujeto requiere, para ser
"estructura combinatoria" y entonces si se descuida su aspecto espacial, correctamente concebido, de la dimensión temporal. No hay sujeto,
que no es lo importante, se lo podría representar sintácticamente: tal como lo concibe el psicoanálisis, sin la dimensión temporal.
2. "Lo que tiene lugar allí (en el Otro) es articulado como un discurso
(el inconsciente es el discurso del Otro). " 7 Se entiende por la vía
1 1 1 1 del "discurso" la cuestión de una sintaxis y el que sea "articulado"
S a a' A implica que esté compuesto por artículos (los elementos) y las ar-
ticulaciones (sus leyes).
Si es sintaxis de un cuaternario, es significante en sí mismo. Podría supo- 3. "En ese discurso ¿cómo se interesaría el sujeto si no fuese parte
nerse que "l:' y "Z" son el mismo esquema, ya que Lacan dice:"[ .. .] aplica- interesada?" 8 Aquí el trabajo que hace Lacan sobre los significantes
remos dicha relación en el esquema 'L' ya presentado y aquí simplificado". 3 es fundamental. La etimología, tanto para el castellano como para
Pero se debe observar, tal como se hizo a la altura del "Esquema simplificado el francés, de 'interesado' (intéressé) es "ínter sum: estar entre, en
de los dos espejos", que "simplificar" en francés tiene el sentido de: "ser medio de, en el intervalo de" (Dicccionario Sopena Latín). O sea,
objeto de una esquematización" y esto supone su paso al significante. Y, si nuestro sujeto se localiza en los intervalos de los elementos del
es tal debe ser entendido en un espacio que es topológico. discurso del Otro. Cuando en el capítulo sobre el grafo del deseo
Lacan lo desarrolla para dar"[ .. . ] la formulación científica de la relación retomemos la cuestión del intervalo, veremos cómo esta noción ya
con ese Otro del sujeto" 4 : " [ . •• ] que la condición del sujeto S (neurosis o estaba implicada en nociones freudianas fundamentales respecto
psicosis) depende de lo que tiene lugar en el Otro N' ;5 debe ser entendido del deseo inconsciente.
más allá de las estructuras clínicas, pero también en el sentido de que la 4. El sujeto está interesado en el discurso del Otro,"[ .. . ] en cuanto quv
está estirado en los cuatro puntos del esquema [ ... ]" .9 Aquí hay qu
1.El Seminario, libro 3, Las psicosis, Paidós, pág. 268.
2. "De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis", Escritos 2, Siglo
XXI, pág. 533, el subrayado es mío. fb (d.
3. lbíd., pág. 530. '/ lbfd., págs. 530-531 .
4. lbíd. 11 lbfd. , pág. 531.
5. lbíd. lhfd.

72 n
.E L Esqu1; MA " Z"
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MüDEWS, Jo:SQUEMAS Y GllAJo'OS l'N LJ\ •:NSEÑANZA DE LACAN

sistere, que así separado ex significa afuera, sistir, sostenerse , ser do


corregir la traducción. En francés dice tiré, cuya tercera acepción
significante pero fuera de cada significante.
en el Dictionnaire Petit Robert es "Desplegar sobre el papel (una
figura) escribiendo, dibujando, grabando. Trazar una línea, un rasgo. 4.2) "[ ... ] a, sus objet~ a', su yo[ .. .]''. 11 Esto confirma la lectura qu
Trazar un plano (tirar un plano)". Evidentemente nuestro sujeto hicimos del vector Sa' del esquema "l.:', ya que fue dicho que inscr ibía
no está 'estirado', sino que está 'trazado' en el sentido en el que se el deseo del sujeto por los objetos que, si bien son concebidos como
traza un plano o un esquema. En castellano este sentido se conserva imaginarios, no hay que confundirlos con el semejante especular. .El
en el sustantivo 'tiralíneas', un aparato para trazar líneas. que "a" sea el objeto desde que Lacan utiliza esta álgebra, quizá sea
una de las justificaciones posibles del hecho de que, a pesar de qu
En los cuatro puntos del esquema está trazado el sujeto, ya no el sujeto de a partir del fin del Seminario 6, El deseo y su interpretación, aún
un lado y el Otro sujeto del otro lado; esto implica que el esquema "Z" ya no inédito, y del Seminario 7, La ética del psicoanálisis, Lacan desarrolla
representa la intersubjetividad, en el sentido de un sujeto enfrentado a otro su novedosa noción de "objeto a", y aunque la noción sea "nueva",
sujeto y, por lo tanto, "N.' ya no es sujeto; veremos más adelante qué es. lo sigue llamando "a".
lDe qué forma está trazado el sujeto en los cuatro puntos del esquema
"Z"? 4.3) "[ ... ] a', su yo, a saber lo que se refleja de su forma en sus objetos
El yo, que definimos como precipitado de las identificaciones al
[ ••. ]" . 12

4.1) "[ ... ]a saber S, su inefable y estúpida existencia [ ... ]." º Por lo que
1 otro semejante, es la fuente del mecanismo de la proyección. El yo, por
ya se dijo de las nociones que fundan el esquema "Z", sabemos que la estructura, se proyecta en sus objetos. Aquí se reencuentra la crítica a
inefable y estúpida existencia del sujeto es en el discurso del Otro. la concepción que ubica la proyección como el mecanismo psicótico, que
se desarrollará en el análisis del presidente Schreber, del Seminario 3,
Inefable: inexpresable en palabras, ya lo dijimos, a) los significantes en Las psicosis. El déficit del análisis de Freud está causado por no tener
cuanto a tales no significan nada, sólo son un conjunto ca-variante aún las nociones de "Introducción del narcisismo" .
y entonces ninguno de ellos puede (lógicamente) significar al sujeto,
ya que ni siquiera se pueden significar a sí mismos, lo que implica 4.4) " [ ... ]y A el lugar desde donde puede planteársele la cuestión de su
la imposibilidad de plantear la identidad en el nivel de lo simbólico, existencia." 13 Primero se debe despejar un problema de traducción.
y b) el sujeto se ubica en los intervalos entre los significantes, por En francés dice: "poser a lui la question [ .. .]"que conviene traducir
eso será definible como "lo que representa un significante ante otro por "planteársele la pregunta".
significante" . Es preciso recordar aquí lo dicho en el capítulo sobre
Modelos, donde justamente la noción del Ideal del yo definida como
"prejuicio" implicaba la existencia de un elemento de lo simbólico que La novedad que se plantea aquí, además de la indicada de la desubj e-
da ser al sujeto y que aquí será criticado por el propio Lacan. Se está Livización de "N.', es consecuencia de que ahora la existencia es inefable
frente al desarrollo lógico con el que Lacan sostiene su autocrítica. y estúpida. Si en el Otro ya no hay elementos que, como tales, puedan
reconocer, dar identidad simbólica al sujeto, entonces se convierte en e l
Estúpida: este término tiene dos acepciones, que también son localiza-
lugar desde donde el sujeto puede recibir su pregunta, que es justamente
bles en su etimología. La más corriente, referida a una inercia m ental,
Lodo lo contrario. Esto se postula en condicional, no es necesario que a
vinculable con la imbecilidad o con la idiocia, no es con la que está
Lodo sujeto le sea hecha la pregunta, es contingente. Respecto de la con-
trabajando Lacan. La otra, mucho menos común, implica "marcado
dición de "lugar" que Lacan le asigna al Otro, hay que tener presente Jo
de estupor, paralizado de sorpresa, boquiabierto" (Dictionnaire Petit
que dice a este respecto en "Subversión del sujeto y dialéctica del deseo
Robert), que describe al sujeto tal como se lo deduce del hecho de
e n el inconsciente freudiano": "[ .. .] lieu (place plutot qu 'espace) [ ... J ". ~
1

que no encuentra el significante que lo signifique.

Existencia: también lleva a la m isma dialéctica que implican inefable y 11 . Ibíd.


12. lbíd.
estúpida, ya que Lacan, par tiendo de Heidegger, lo utiliza como ex-. 1;1. lbí.d.
l '1. "Su bversion du fl~~j o t ot el i11 locticruo du désir dans l'inconscient freudien'', Écrits, clu Sou i 1,
10. lbíd. p ;~¡i;. 806.
71)
74
ALFREDO EmELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ~~squ EMA "Z"

en castellano fue traducido por: "[ ... ] lugar (sitio más bien que espacio) siempre creación simbólica, es la relación que va de A a S. " 18 La creación
[ ••• ] " ,
15
donde creo que "sitio" no da justamente el sesgo que "place" sí en juego respecto del sujeto es la creación de la nada (creación ex-nihilo) ,
hace. En francés son muchas las acepciones de esta palabra, pero casi todas y sólo el significante puede crear de la nada.
tienden a indicar una dimensión del espacio con coordenadas simbólicas, En la relación entre A y S, se debe decir que aa' funcionan como "1... 1
como en castellano: ubicación, situación, localidad. Evidentemente, si se el velo del espejismo narcisista, [ ... ]" 19 ; es por eso que, sintácticame nt,
opera con un espacio que no vale como porción de lugar sino, en tanto y hablando, se interponen entre ellos y, aprovechando la sintaxis, se puedo
en cuanto articulado a lo simbólico, tal como si se marcara un punto en también leer:
un plano a partir de sus coordenadas cartesianas, se está de lleno en las
consideraciones de base de la topología. Si el Otro es "lugar", es "lugar
del significante" o "lugar de la palabra" y ésta es la noción de espacio que (x y)
corresponde al sujeto de la experiencia analítica. Saa ' A
En Freud, indica Lacan, se encuentra una elaboración muy precisa de
estas cuestiones en la noción de "ein anderer Schauplatz", "la otra esce-
na", que, tomada de Fechner, implica una concepción del espacio para el Escritura, esta última, en la que los términos simbólicos comprenden y
inconsciente. Freud, para lo que llama la "localidad psíquica", desarrolla el ordenan los imaginarios. "Pues quitadlo de allí (al Otro en su lugar A), y el
famoso esquema del peine, en el que postula que: "En rigor, no necesitamos h ombre no puede ya ni siquiera sostenerse en la posición de Narciso." 2º Idea
suponer un ordenamiento realmente espacial de los sistema psíquicos."Hi ésta ya presentada por Lacan en el Seminario 2, en la última clase que se llama
Con la introducción de las nociones topológicas, se concluye que no es que "A, m, a, S", donde se encuentra la misma función de lo simbólico respecto
no necesitemos un ordenamiento realmente espacial, sino que necesitamos de lo imaginario y donde, además, algo obvio para el lector francés, no en la
un ordenamiento espacial distinto del que utilizamos en la "realidad". El traducción, es que "amas" es un término de la lengua francesa que significa:
intento de Lacan es el de sustituir la "tópica freudiana" por una concepción nebulosa aparente que un instrumento poderoso permite resolver.
del espacio logicizable con el sujeto del inconsciente. "[ ... ]y aun falta decir que es a título de elementos de un discurso parti-
cular como esa cuestión en el Otro se articula. " 21 Si el análisis se mantiene
¿cómo se plantea esta pregunta de la existencia del sujeto? "Pues es en el nivel de la estructura y en este caso aún más allá de las estructuras
una verdad de experiencia para el análisis que se plantea para el sujeto clínicas, se refiere a "todo" sujeto como efecto del significante; pero no
la cuestión de su existencia [ ... ] en cuanto pregunta articulada: '¿Qué hay que olvidar, posición psicoanalítica por excelencia, que también es de
soy ahí?', referente a su sexo y su contingencia en el se1; a saber que es estructura que todo sujeto es "particular, único", en tanto articulado por
hombre o mujer por una parte, por otra parte que podría no ser, ambas un discurso único, un discurso particular.
conjugando su misterio, y anudándolo en los símbolos de la procreación El complejo de Edipo conjuga las preguntas por el sexo y el ser, o, sus
y de la muerte ." 17 equivalentes, por la procreación y la muerte. Si antes se habló de creación,
El ¿qué soy ahí? respecto del sexo y del ser conjuga su misterio al anudar- no se olvidará que el Creador por excelencia es Dios, sustituto del padre. La
lo a los símbolos de la procreación y la muerte. ¿por qué? Para responder se nrticulación de la función paterna a las preguntas sobre el ¿qué soy ahí?,
hace claro que Lacan habla de procreación y no de gestación. La gestación trae consecuentemente el recurso a las estructuras clínicas, y hasta se pued
implica el animal y su equivalente es el embarazo, pero la procreación decir que abre una dimensión clínica: la clínica de la pregunta. "La tópica
implica el símbolo y no hay procreación fuera de él. Es la noción necesaria f"rcudiana del yo muestra cómo una o un histérico, cómo un obsesivo, usa
para responder a la pregunta ¿de dónde sale o surge un sujeto? Ya en el de su yo para hacer la pregunta, es decir, precisamente para no hacerla. La
Seminario 2 Lacan afirmaba: "La realización simbólica del sujeto, que es t•HLructura de una neurosis es esencialmente una pregunta[ .. .)." 22

1H. El Seminario, libro 2, El yo en la t eo1ia de Freud y en la técnica psicoanalítica, Paidós,


15. "Subversión del sujeto y dialéctica del de seo en el inconsciente freudiano", Escritos 2, Siglo pág. 474.
XXI, pág. 785 1!J. "De una cuestión preliminar ... ", ob. cit., pág. 532.
16. "La interpretación de los sueños", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo 1, pág. 545; ~w . tbíd. pág. 533.
Amorrortu, Tomo V, pág. 530. ·-~ 1 . lbfd. ,pág.531.
17. "De una cuestión preliminar ... ", ob. cit., pág. 531. "'i. l•~ I Scmimirio, libro :1, l.1n1 p tii<"OHÍi~. 1'11idó8, p:íg. 249.

76 7
EL ESQUEMA "Z"
ALFR~:DO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQU~:MAS Y GH.IWOS EN LA P.NSEÑANZA DE LACAN

para Dora, el "alhajero" representaría, en forma inconsciente, el órgano


Si cada sujeto hace la pregunta sobre el ser y el sexo con el símbolo del sexual femenino? Lacan en "La pregunta histérica" del Seminario 3 dice:
padre, con el significante del Nombre-del-Padre, no habría posibilidad de "Los dos sueños de Dora son, al respecto, absolutamente transparentes,
tal pregunta en la psicosis, dada la forclusión de este elemento. "Estamos no se habla de otra cosa: ¿Qué es ser una mujer? y específicamente: ¿Qué
seguros que los neuróticos se hicieron una pregunta. Los psicóticos, no es es un órgano femenino?" 26 ¿Acaso el"[ ... ] enigma de la feminidad." que-
27

tan seguro. Quizá la respuesta les llegó antes que la pregunta; es una hipó- rrá decir que lo inconsciente es una sede de representaciones a la que le
tesis. O bien la pregunta se formuló por sí sola, lo cual no es impensable. " 23
falta "vagina"?
Y: "Se trata de concebir, no de imaginar, que sucede para un sujeto cuando Segundo: hay que recordar que el falo no es el órgano sexual masculino,
la pregunta viene de allí donde no hay significante, cuando el agujero, la el falo no es la representación inconsciente de la posición sexual del hombre.
falta, se hace sentir en cuanto tal. " 2~ El falo es un símbolo, pero no del pene. He encontrado sólo dos indicaciones
A su vez, la pregunta en la neurosis se polarizará hacia el sexo en la en la obra de Freud sobre este punto, pero ellas existen: 1) "Un recuerdo
histeria (tanto para las histéricas como para los histéricos), bajo la forma: infantil de Leonardo da Vinci", donde dice: "[ ... ] si los antiguos figuraban
¿qué es una mujer? y en la neurosis obsesiva sobre la contingencia del ser, alado al falo [ ... ]"; 28 2) "El tabú de la virginidad": "En muchas comarcas
bajo la forma de la muerte. de la India, la recién casada debía sacrificar su himen al lingam de madera,
Al abordar, más adelante, el grafo del deseo, se verá que la pregunta y según el informe de San Agustín, en el ceremonial nupcial romano (¿de
¿qu¿, soy ahí? se sustituye por Che vuoi?: la lógica de este cambio se ela- su época?) existía la misma costumbre[ ... ], pues la joven esposa sólo tenía
borará en ese capítulo. que sentarse sobre el gigantesco falo de piedra de Príapo". 29 Lingam es el
símbolo fálico del culto del Dios Siva, cuyo culto está asociado a la idea de
Quisiera hacer un comentario en relación con la posible articulación de creación y de generación. Más aún, en sánscrito linga quiere decir signo
lo que dice Lacan respecto de los símbolos de la procreación y la muerte, y o símbolo distinguido. La referencia a Príapo también indica fertilidad y
de lo que dice Freud respecto de la imposibilidad de inscripción inconscien- potencia. El falo dentro de los cultos fálicos implica más que la fertilidad,
te de la propia muerte y de la diferencia sexual anatómica. Inicialmente la energía creativa y el principio generativo. Muchas veces representado
parecería que nos hallamos frente a una diferencia conceptual importante el lingam por el genital femenino.
entre ambos autores. Pero, para demostrar que esto no es tan así, sugiero Lo que Freud sostiene es: "No es posible dar ningún contenido nuevo
hacer el siguiente análisis. a los conceptos de masculino y femenino. Ese distingo no es psicológico
Se dice frecuentemente que Freud sostiene que no hay inscripción in- [ ..• ]". 3 º Lo que el inconsciente no puede inscribir es la oposición sexual,
consciente del órgano sexual femenino. Esto es sólo parcialmente cierto. Si aunque sí registra la diversidad anatómica; si bien es cierto que el órgano
se tienen en cuenta los textos fundamentales para estas cuestiones, tales sexual masculino es más fácilmente imaginarizable que el femenino, es la
como: "La organización genital infantil", ''Algunas consecuencias psíquicas relación entre los sexos lo que no llega a poder ser inscripta.
de la diferencia sexual anatómica" y la 33ª Conferencia de introducción al Respecto de la inscripción o no de la propia muerte a nivel inconscien-
psicoanálisis, "La feminidad", donde se establece que la posición freudiana te debemos retener que lo que Lacan nos enseña es que la función de la
indica otra cosa, Primero: debe tenerse presente que a todo lo largo de su muerte, incluida la propia, a diferencia de Freud, es una modalidad de la
obra, Freud habla del simbolismo inconsciente del órgano sexual femeni- pregunta por la contingencia del ser, es una elaboración de la pregunta:
no, que arranca en La interpretación de los sueños y adquiere un estatuto ¿qué soy en el discurso del Otro? Y la pregunta por el ser es inevitable si,
trascendente en la puesta a prueba clínica de este texto: el "caso Dora". como ya fue dicho,"[ ... ] lo que llega a la existencia por medio del símbolo
Si se toma en cuenta lo que Freud afirma en el primero de los textos arri-
ba indicados: "En el siguiente estadio de la organización genital infantil
hay por cierto algo masculino, pero no algo femenino [ ... ]".25 ¿se debería 26. El Seminario, libro 3, Las psicosis, ob. cit., pág. 244.
27. "La feminidad", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo II, pág. 933 ; Amorrortu , Tomo
concluir que Freud ya no sostendría su interpretación respecto de que, XXII, pág. 108.
28. ''Un r ecuerdo infantil de Leonardo da Vinci", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo
II, pág. 487; Amorrortu, Torno XI, pág. 117 .
23. Ibíd., pág. 288. 29. "El t a bú de la virginiclfld", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo 1, pág. 979; Amol'l'Ol'llt,
24. Ibíd., pág. 289. TomoXl,pág. 199.
25. "La organización genital infantil", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo I, pág. 1197; :lO. "La l'c mcn id 11d", ' 1'0 111 11 XX11 , oh ril.. , p(1 ~. l OG.
Amorrortu, Tomo XIX, pág. 149.
7!)
78
AL~'REDO EmELSZTE!N ! MODELOS, ESQUEMAS Y CRAPOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

[ ... ] no es[ ... ] la muerte". 31 La muerte de la que hablamos es la muerte


introducida por el significante y no la biológica que, en sí misma, sólo es
la continuación del ciclo vital.
Finalmente, para concluir con el análisis del esquema "Z", recordemos
que:

l. este esquema corrige esencialmente las nociones que dan sustento


El esquema "R"
al esquema "U';
2. su estructura es sintáctica, o sea, relación entre términos signifi-
cantes determinada por una legalidad vinculada fundamentalmente
con el lugar;
3. el sujeto S se ubica entre su ser de intervalo y la modalidad particular
de articular, o sea, responder a la pregunta por el deseo del Otro.
Aquí ya tenemos el fundamento de lo que en el grafo del deseo será
la relación entre el sujeto del deseo y el fantasma, que trabajaremos
<p
,----
1s
i M

oportunamente, y
1 g
1
4. el Otro A ya no es un sujeto, es un lugar necesario para concebir al 1
sujeto con el que se enfrenta el psicoanálisis. mr
1
1
la'
1 A
p
Esquema "R"
FIGURA 37

Antes de comentar y analizar las enseñanzas que implica el esquema


" R", que Lacan presenta en su escrito "De una cuestión preliminar a todo
Lratamiento posible de la psicosis", debe tenerse en cuenta un hecho muy
peculiar: este esquema es producido simultáneamente con el grafo del
deseo. No en la misma época, sino en los mismos días. Se debe responder
11 esta particularidad.

Si el esquema "Z" es una corrección al esquema "U' necesaria para poder


producir el esquema "R", o sea, si se inserta la relación entre el esquema
" (.;', el "Z" y el "R" dentro de la lógica diacrónica, la relación entre el "R"
y el grafo del deseo no es de la índole de aquellas que se ubican en la dia-
1Tonía de las concepciones de Lacan. Son dos "producciones" simultáneas
pnra responder a dos cuestiones diversas mediante lógicas diversas. El
1•:-;quema "R" es la teorización de la función paterna en la articulación, en
ni anudamiento peculiar de lo simbólico, lo imaginario, y lo real que es la
ll l' Urosis. En cambio, el grafo del deseo responde al requerimiento de teo-
1+1.nr las consecuencias de la introducción en el psicoanálisis de la noción
do cadena significante, que fundamentalmente se inicia con la distinción
31. El Seminario, libro 2, El yo en el teoría de Freud y en el técnica psicoanalítica, ob. cit.,
págs. 316, 317. n11Lro necesidad, dorn11ncl11 y CloACO .

80 81
ALl'REDO EmELSZ1'EIN 1 MODELOS, ESQUEMAS y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA m: LACAN EL ESQUEMA "R"

También hay que tener en cuenta, con respecto a la relación entre el Lacan desarrolla la articulación del Edipo y la castración haciendo de
esquema "R" y el grafo del deseo, que el esquema "R" es una superficie la función paterna la operatoria de un significante: el Nombre-del-Padre,
y como tal es abordado desde la topología que se denomina general, o en y desarrolla, para dar cuenta de esta operatoria, la metáfora paterna, que
la otra denominación, combinatoria (o de los complejos), mientras que es la consecuencia de aplicar sobre el Edipo freudiano la lógica del signi-
el grafo del deseo se aborda desde la topología algebraica o abstracta (o ficante, tal como la concibe Lacan.
general) y la teoría matemática de los grafos y redes. A su vez, no todo La estructura general de una metáfora es:
es diferencia, también hay comunidades muy importantes que se deben
considerar, como por ejemplo que ambos tienen una estructura esencial-
mente cuatripartita. -S- • - S'
S'
--+s
X
8 s
Luego de esta breve distinción de funciones y comparación de estructu-
ras entre el esquema "R" y el grafo del deseo, sobre los que me extenderé
en la elaboración de cada uno de ello, debemos pasar a las nociones que En su lado izquierdo, la fórmula implica:
es necesario manejar para trabajar con el esquema "R": me refiero a la
metáfora paterna. 1) Heterogeneidad: hay dos elementos simbólicos (las letras mayúsculas
En las mismas semanas en que Lacan dicta las clases del Seminario 5. indican lo simbólico; dos significantes: S y S', este último repetido) y
en las que elabora las nociones de la metáfora paterna, escribe "De una un elemento imaginario (la "x" como significación desconocida hasta
cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis"; es evidente producido el efecto metafórico).
que debemos comenzar por aquella.
2) Efecto de sustitución en la cadena: la significación es producida por
Como dijimos en el capítulo sobre el esquema "Z", la función paterna
la sustitución de S' por S, es decir, S ocupa el lugar que S' tenía en
conjuga la sexualidad y la muerte. Freud articula esta conjunción con su
teoría del complejo de Edipo y a su respecto elabora su mito de la horda la cadena.
primitiva. Hace derivar de la culpa por el asesinato/muerte del padre la 3) Implicación de un tercer significante: si S sustituye a S' en el lugar
dimensión de la deuda, la ley y, consecuentemente, el acceso a las mujeres. que S' tenía en "una cadena", hace falta al menos otro significante
El cuestionamiento del sexo se hace a través de la vía del complejo de cas- que proporcione tal función de cadena, como segundo término. Sólo
tración, cuyo agente también es el padre, e introduce la función del falo. existen dos posibilidades: a) S" S' o b) S' S", o sea, que el otro ele-
Con Lacan, y desde su Seminario 3, sabemos que, sólo con el significante mento constitutivo de la cadena, que por claridad aquí es llamado
del padre, el sujeto, tanto hombre como mujer, puede preguntarse sobre S", esté antes o después de S'. Como para Freud, quien suponía que
su ser, lqué soy?, bajo sus dos formas fundamentales: lqué es una mujer?, la condensación implicaba el desplazamiento, aquí la metáfora debe
o sea la pregunta por el sexo, y sobre la contingencia del ser, la pregunta ser antecedida lógicamente por la metonimia, no hay metáfora posi-
sobre la muerte, el to be or not to be? ble sin una previa conexión de un significante con otro significante.
Entonces: En el Seminario 5, Las formaciones del inconsciente, Lacan, a este
respecto, afirma: "[ ... ] para que todo juego metafórico sea posible,
Complejo de Edipo --+ asesinato/muerte --+ ley --+ procreación hace falta que se funde sobre algo donde haya algo a sustituir sobre
Padre aquello que es la base, es decir la cadena significante,[ ... ] en tanto
{ Complejo de castración --+ función fálica --+ sexualidad
que lugar de la metonimia. " 2
No se deben confundir estos dos lugares implicados por la noción de
En su Seminario 4, Las relaciones de objeto, Lacan afirma:"[ ... ] a pro- cadena significante, con las dos barras representadas en la fórmula de la
pósito de P mayúscula (significante paterno) en forma de pregunta-¿Qué metáfora: " - . -". Lacan despliega la lógica de la sustitución, utilizando,
es un padre? El padre es en efecto el eje, el centro ficticio y concreto del metafóricamente, la simplificación matemática.
mantenimiento del orden genealógico[ .. .]."' -

l. El Seminario, libro 4, Las relaciones de objeto, Paidós, pág. 400. ·1, . l~ I Scminurio , lih1·0 f1, l•! I dm1no .v Ali interp retación, p ág. 67.

82 83
ALPREDO EJDELSZTEIN J MODELOS, ESQUEMAS Y GRM'OS EN LA ~~NSEÑANZA DE LACAN EL gSQUEMA "R"

s La "s" de la parte derecha de la fórmula debe entonces ser distinguida de


La barra (-) de: la incógnita que representa en la parte izquierda "x", indicando que se ha pro-
S'
ducido, por el juego de los significantes, el atravesamiento de la barra(-).
implica el eslabón de la cadena donde se produce la sustitución que, como El paréntesis, que sustituye en las fórmulas de Lacan a la elipse de las
ya dijimos, debe ser entendida así: fórmulas de F. de Saussure, indica lo inconsciente. Es función del signi-
ficante colocar un término sobre el significado y ésta es una operatoria
inconsciente para el sujeto hablante.
s S" S" s
- - - o así: - - -
S' S' Pasemos ahora a la metáfora paterna:

S' Nombre-del-Padre -Deseo


- - -de-la-Madre
- - - - - N om b re- d e 1- l>a d re ( A J
La barra(-) de: Deseo de la Madre Significado al Sujeto Falo
X

Teniendo en cuenta lo dicho respecto de la precedencia lógica de la


no es la misma barra que la anterior, es la barra del algoritmo saussureano, metonimia respecto de la metáfora, debe haber, respecto del significante
definida como"[. .. ] barrera resistente a la significación", 3 lo que significa del Deseo de la Madre, al menos otro significante en juego que constituya
que"[ ... ] es en la cadena del significante donde el sentido insiste, pero que la base de la cadena significante donde se producirá la sustitución meta-
ninguno de los elementos de la cadena consiste en la significación de la que fórica, y este significante que se correlaciona con el Deseo de la Madre,
es capaz en el momento mismo." 1 Si se puede decir que Freud ubicaba en ~ s el significante del Ideal. La sustitución de la metáfora paterna debe
"su algoritmo" la resistencia entre Inconsciente y Preconsciente, Lacan operar, entonces, sobre una cadena así: Deseo de la Madre. Ideal, o así:
lo hace entre significante y significado. Ideal. Deseo de la Madre. Es por esta lógica que se puede sostener que el
Nombre-del-Padre implica un elemento tercero. El esquema "R" permitirá
El lado derecho de la fórmula implica: articular estas nociones de una forma muy clara.
Efecto de significación: es por la vía de la metáfora por donde es intro-
ducida"[ ... ] una especie nueva en la significación [ ... ]". 5 Es como tal, la Respecto de: Deseo de la Madre
creación del sujeto "[ ... ] lo que liga a la metáfora con la cuestión del ser Significado al Sujeto
6
[ . .. ]" y, por la metáfora"[ ... ] pero que se convierte en el sujeto verdadero

a medida que ese juego de los significantes va a hacerle significar. " 7 debemos decir que implica las siguientes consideraciones:
Aquí también debemos recordar la preeminencia lógica de la metonimia
respecto de la metáfora, ya que el "ser" que aporta la metáfora es la res- 1) En la metáfora se constituye la atribución primera. Lo que implica:
puesta a la "falta en ser" que introduce la metonimia y que, por eso mismo, a ) la omnipotencia del Otro: quien ocupe el lugar del Otro dispondrá del
esta última se articula con el deseo. El significante aislado no produce la " todo poder" de hacer del grito llamada, de hacer pasar la necesidad bio-
falta en ser. En este sentido no hay que olvidar que se puede introducir un lógica a la materialidad significante, por el desfiladero del significante;
significante en la vida de un animal, como por ejemplo en la experiencia b) toda metáfora se origina en una injuria , "porque es de ella que pro-
del estímulo condicionado de Pavlov, pero no por eso hay falta ni deseo. Es cede la injusticia gratuitamente hecha a todo sujeto de un atributo[ .. .]" ,8
en este sentido que la metáfora puede aportarle "ser" al sujeto, intentando nLributo en el sentido de juicio de atribución, que Lacan ejemplifica con:
así colmar la falta introducida por la metonimia. "el perro hace miau, el gato hace guau"; por la inversión recíproca del
3. "La instancia de la letra en el inconsciente".. ., Escritos 1, Siglo XXI, pág. 477. gTito propio de cada especie se comprueba que éste ha sido mortificado
4. Ibíd., pág. 482. (desnaturalizado) por el pasaje al nivel del significante.
5. "La métaphore du sujet", Écrits, du Seuil, pág. 891, traducción personal. 2) Sólo retroactivamente a la operatoria de la metáfora paterna el De-
6. "La instancia de la letra ... ". ob. cit, pág. 508.
7. "De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis", Escritos 2, Siglo
XXI, pág. 533. H. "La mélaphoro clu Ht\jot", oh. <: it., pÁg. 891, traducción personal.

84 8!)
ALF'REDO EIDELSZ'l'EIN 1 Mom:LOS, ~~S(WEMAS y GllMOS EN LA f~NSEÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA " R"

seo de la Madre será cabalmente deseo, o sea, sólo devendrá deseo luego una disimetría en el significante. Esta disimetría significante determina las
de operar la sustitución metafórica. Sólo luego de que el significante del vías por donde pasará el complejo de Edipo. Ambas vías llevan por el mismo
Nombre-del-Padre sustituya el significante Deseo de la Madre en su lugar, y sendero: el sendero de la castración". u
de introducir así la función de la ley en el Otro por la vía de la interdicción En el Seminario 4, Las relaciones de objeto, Lacan hace girar la dia-
(en el niño: no te acostarás con tu madre y en la madre: no reintegrarás léctica edípica alrededor del objeto fálico (noción de objeto que justifica
tu producto), se articulan ley y deseo. Sin esta articulación la madre per- el nombre del seminario) y articula íntimamente a este último con el
manece en el lugar del Otro omnipotente y su deseo opera como capricho. objeto en juego en la fobia y en el fetichismo. En el Seminario 5, el que
Desear no es querer, puede haber un querer que, al no articularse a una está dictando simultáneamente con la redacción del escrito que estamos
interdicción fundamental, no esté referido, entonces, a una falta original, comentando, da un paso más, en la dirección de la cita del Seminario 3,
eso es el capricho del Otro, que no implica su castración. haciendo operar al significante fálico. Allí, elabora la relación existente
Esto es lo que escribe la siguiente parte de la fórmula: entre necesidad, demanda y deseo; es el Seminario "Las formaciones del
inconsciente" porque éstas derivan de la función de la cadena significante,
Nombre-del-Padre eje de las elaboraciones de este Seminario.
Deseo de la Madre El deseo es el más allá de toda demanda, es el resto, lo que de la necesi-
dad nunca podrá pasar en el nivel de la demanda, y si todo deseo humano
es deseo del deseo del Otro, la existencia de un más allá de la demanda
Si no opera, podríamos intentar escribir el resultado fallido de la si-
va a implicar, en último término, a través del deseo del Otro, una falta
guiente forma:
estructural en el Otro, cuya inscripción se hará a través del significante
fálico, marca de esta barradura del Otro, y va a hacer del deseo, deseo
Madre
sexual. La articulación de la falta en el Otro con un significante que la
Objeto de su deseo
inscriba se estudia en detalle, más adelante, en el capítulo sobre el grafo
del deseo, en relación con S (A).
Y éste es el resultado fallido, justamente porque la función del Nombre-
del-Padre, es privar a la madre de su objeto. 9 Analizaremos ahora la estructura general del esquema "R".
Como se observa claramente, el esquema "R" implica una superficie con
3) Significación fálica: forma de cuadrado. Destaquemos el hecho de que, de todos los esquemas
de Lacan que hemos visto hasta ahora, éste es el primero que consiste en
A una superficie. Si recordamos lo dicho en el capítulo sobre el esquema "l:',
falo respecto del cual decíamos que implicaba la noción de estructura que en
m atemáticas se llama "grupo", ahora pasaremos a la noción de estructura
En la significación fundamental producida por la metáfora paterna, que que en matemáticas se. llama "topológica".
es fálica porque la operatoria del significante Nombre-del-Padre se hace Discutiremos más tarde qué tipo de superficie es ésta. Dediquemos ahora
vía el significante fálico, el>. unas líneas para recordar que Freud asignó a la noción de superficie impli-
Ya en el Seminario 3, Las psicosis, respecto de la función del falo, Lacan cada en su concepción de inconsciente la expresión ein anderer Schauplatz,
afirma: "El acceso de la mujer al complejo edípico, su identificación imagi- la otra escena, recordando que Platz en alemán significa 'lugar', y donde el
naria, se hace pasando por el padre, exactamente igual que el varón, debido inconsciente requiere de la noción de 'otro lugar'. El lo dice así: "El escenario
12
a la prevalencia de la forma imaginaria del falo, pero en tanto que a su vez de los sueños es otro que el de la vida de representación de la vigilia." e
ésta está tomada como el elemento simbólico central del Edipo. " 10 Y avanza introduce la noción de "localidad psíquica" que requiere su concepción del
aún más en su consideración del significante fálico:"[ .. .] porque el falo es un aparato psíquico, destacando que no coincide con la anatómica y que debemos
símbolo que no tiene correspondiente ni equivalente. Lo que está enjuego es
11. lbíd.
9. Cf. El Seminario, libro 5, El deseo y su interpretación, págs. 199-201. 12. "La interprclación rl o loR Rueños", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo 1, pág. 544;
10. El Seminario, libro 3, Las psicosis, Paidós, pág. 251 , el subrayado es mío. Amonorlu. 1'0 1110 V, p 1'1f1 . 1)2!).

86 87
EL 1csQ UicMA " R"
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA f;NSEÑANZA DE LACAN

tomarla como localizaciones ideales, debiéndose entender este "ideal" como ¿y qué estructura tiene este campo de la Realidad? Es evidentemente
no perteneciente al registro de la realidad del sentido común. imaginaria y, como lo imaginario, se apoya en lo simbólico. En este escrito,
Vamos a producir esquemas parciales para ir señalando las caracterís- donde Lacan intenta dar cuenta de su concepción de las psicosis, y para esto
ticas de este esquema. debe despejar los prejuicios que abundan respecto de la estructura y de la
diferencia de la realidad y de lo real (por eso este esquema se llama "R"),
Lacan nos indica con su esquema la estructura imaginaria de la realidad. A
M
eso responde el sombreado, que además de indicar que la realidad 'tacha',
'encubre' como una pantalla lo real, también indica cómo la realidad está
superpuesta al campo de lo imaginario y apoyada en lo simbólico, como
todo lo imaginario. Entiendo el sombreado del esquema, tal como se indica
en los círculos de Euler, la superposición de los mismos.

p
FIGURA 38

El triángulo trazado con línea plena es el orden simbólico. Lo confirma


a) que sea denominado "S", o sea orden simbólico; b) que sus vértices
sean elementos simbólicos, 1, M, P, en mayúsculas según la convención de
Lacan, y c) la letra "A:', el Otro con mayúscula, el inconsciente, como otro FIGURA 40
nombre del mismo triángulo. El triángulo punteado es lo no simbólico.
Pero, ¿qué es lo que está implicado por este triángulo de lo no simbólico? Para el esquema "R", el sombreado por superposición de las superficies del
Podría suponerse que es esto: t riángulo imaginario y del cuadrángulo de la realidad debe entenderse así:

FIGURA 39
FIGURA 41

Dado que Lacan escribe "I", "R" y "S" en cada uno de estos tres polí-
A su vez, va en la misma dirección el hecho de que "a" y "a."', "vértices
gonos, se podría pensar que cada uno de ellos representa lo Imaginario,
internos" de lo imaginario, comprendidos por los vértices simbólicos "M"
lo Real y lo Simbólico, respectivamente. Pero no es así. En una muy im-
e "1" sean uno de los lados del cuadrángulo sombreado que se apoya en
portante cita a pie de página de "De una cuestión preliminar ... " Lacan
lo simbólico.
nos indica que "R" no es lo Real, sino "el campo de la realidad", 13 realidad
Otro argumento que debe ser tomado en cuenta respecto de la condi-
que, como lo indica el esquema, lo tacha; el campo de la Realidad cubre,
ción de imaginario del cuadrángulo de la realidad, es que si el triángulo
encubre el campo de lo Real.
imaginario no t uviese como límites cp, M e 1, lo imaginario no se apoyaría
13. "De una cuestión preliminar ... ", oh. cit., pág. 535 .

88 89
ALl•'ltEI)() EllJELSZTEIN 1 MüDf,;LOH, E8QU~;MA8 y GRAFOS ~;N LA ENS~:ÑANZA DE LACAN
EL E:-lQUEMA "R"

en lo simbólico sino en la realidad, algo así como que el famoso "criterio manera que se toquen sólo en vértices o a lo largo de un borde entero (como
de realidad" sostendría el imaginario del ser humano, contrario al sentido en el caso del esquema "R"). La teoría homológica fue extendida desde las
de toda la enseñanza de Lacan. Citémoslo en este punto: "Para volver a figuras euclidianas a los espacios topológicos arbitrarios. La idea básica de
la fórmula que había gustado tanto a Freud en boca de Charcot, 'esto no homología proviene del matemático francés Henri Poincaré y consiste en
impide existir' al Otro en su lugar A. dividir el espacio en puntos, segmentos de línea, triángulos (procedimiento
"Pues quitadlo de allí, y el hombre no puede ya ni siquiera sostenerse conocido como triangulación) u otros componentes geométricos, para así
en la posición de Narciso." 14 poder establecer y "medir" el número de las interrelaciones de esos com-
Finalmente, debemos decir que hay en el escrito mismo una indicación ponentes, en una vía situable algebraicamente. La teoría homológica se
que corrobora lo que sostenemos. Lacan define la estructura del esquema ocupa de asignar a cada espacio, o a las generalizaciones del mismo, sus
"R" como un "[ ... ] doble ternario [ ... ]" 15 el ternario simbólico MIP y el invariantes. Por lo tanto, podemos decir que está basada en las estructuras
ternario imaginario cpaa'. algebraicas asociadas a la topología de las regiones geométricas.
Entonces, ambos ternarios son homólogos. Lacan nos indica que tam-
bién lo son: la pareja a-a' con M-I y S bajo cp con P bajo A.
Que el triángulo imaginario "cpaa"' sea homólogo del triángulo simbólico
"MIP", debe ser entendido como que el triángulo simbólico cubre el ima-
ginario, mejor dicho, cada elemento del ternario imaginario es recubierto
por cada uno de los elementos simbólicos correspondientes, según lo indica
el esquema "R", a saber:

a) la dupla "MI" recubre a su homóloga, la dupla "aa "',o sea, las duplas
p
correspondientes a las bases de ambos triángulos y,

FIGURA 42
b) la dupla:~ recubre a la___!___
Entonces distinguiremos en el triángulo imaginario, el triángulo Sim, p s
que llamaremos triángulo del sujeto en lo imaginario, del cuadrángulo de
la realidad, MimI. Si se observa detenidamente, se verá que justamente o sea los vértices de ambos triángulos.
"m" e "i" quedan dentro de lo que sería el campo del triángulo del sujeto, Esto puede ser representado con mucha claridad si replegamos en el
por la continuación de ambos extremos del lado "mi" (cf. figura 42). esquema un triángulo sobre el otro, haciendo más chico al triángulo ima-
La relación entre ambos ternarios, el imaginario y el simbólico, es ginario, que así queda como interno:
definida por Lacan como una homología. Esta noción topológica será de
gran importancia para entender la lógica que sostiene la estructura del A
esquema "R", como también la del grafo del deseo . . p
Una definición general de homología debe partir de una diferenciación
entre homología y analogía. Esta última significa igualdad de relaciones
o sea, proporción y semejanza; en cambio homología es larelación entre
elementos que se corresponden en las figuras semejantes. Una apretada
definición topológica de homología podría ser ésta: una región dada es
homóloga de otra cuando puede ser asociada a ésta, de tal manera que
sean cualitativamente equivalentes, constituyendo así lo que se llama un M
complejo, compuesto, por ejemplo, por triángulos puestos juntos de tal
FIGURA 43
14. Ibíd., pág. 533
15. Ibíd., pág. 534.
91
90
AU'REDO E1m;IBZTEIN 1 MODELOS, ESQUl>MAS Y GllAPOS EN LA ENS~~ÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA "R"

En francés recouvír, que es el término que utiliza Lacan, significa, ade- vinculado con la función materna que Lacan, como Freud, vinculan con
más de sus acepciones comunes, dominar, arbitrar por la autoridad, reglar. los lazos de amor y odio; el "a"' que aparece en esta posición:
Es lo que hacen los términos simbólicos (con sus relaciones) respecto de
los términos imaginarios y las suyas. 1
Antes de comentar las relaciones homológicas, debemos indicar lo que a'
representa cada una de las letras del esquema:

I: registro Imaginario. las figuras del otro"[ ... ] en las que el yo se identifica, desde su Urbild
especular hasta la identificación paternal del ideal del yo." 18 El Ideal sim-
R: registro Real, que en el esquema está velado por la Realidad; R, bólico opera desde el principio y determina la identificación imaginaria,
entonces será la realidad. como se desarrolló en el capítulo sobre el modelo óptico, pero no concluye
su operatoria hasta que se coordina con la operatoria paterna.
S: orden Simbólico, la estructura del lenguaje y el sistema legal que
implica.
M: "[ ... ]el significante del objeto primordial [ ... ]", 19 el estatuto simbó-
lico del Otro primordial, por ejemplo: la madre, o sea, su presencia y su
A: el Otro, que debe ser distinguido de "S" (de S, I, R), en tanto ''A:.' es ausencia (fort-Da). La madre tomada como significante y, en consecuencia,
el inconsciente particularizado para un sujeto, ''A:.' es el lugar desde donde el objeto pasa a ser el deseo de ella.
el sujeto puede recibir la pregunta por su inefable y estúpida existencia;
mientras que "S" es el orden simbólico más allá de cada sujeto, la estruc- P: "[ ... ] como la posición en A del Nombre-del-Padre [ ... ]" 2º, es decir,
tura y las propiedades de cada lengua para el conjunto de los hablantes no es la posición del Nombre-del-Padre en el orden simbólico, lo que se
de la misma. La noción de lugar que el "N' implica, es topológica. En "Ob- podría entender como lo cultural, sino la relación:
servación sobre el informe de Daniel Lagache ... ", Lacan dice: "Es sabido
que ese resorte de la palabra en nuestra topología lo designamos como el A
Otro, connotado con una A mayúscula [ ... ]". 16
p

a-a' y m-í: estas dos parejas de términos están diferenciadas, pero hasta
aquí eran una. Tomando en cuenta los dos lados del cuadrángulo de la que implica la función de "P" en "N', "[ .. . ]es decir del significante que
realidad, podemos ver que implican un redoblamiento de lo que estaba en el Otro, en cuanto lugar del significante, es el significante del Otro en
implicado en el vector a-;J;' del esquema "~' y del "Z". cuanto lugar de la ley." 21
<f!/S: " [ ... ] la significación del sujeto S bajo el significante del falo [ ... ] ". 22
"m" será el moi, el yo, precipitado de las identificaciones narcisísticas, Aquí hay que hacer varios señalamientos: a) lo que está escrito en el es-
"í" la imagen del semejante complemento indiscriminado e indiscriminable quema no es el significante fálico, sino la significación fálica, que ya vimos
de "m", pero ahora "a" inscribirá el objeto. "a" será el objeto imaginario en que es el producto de la operatoria de la metáfora paterna, ¿por qué esta
su doble vertiente: el "a" que aparece en esta posición. sustitución del significante fálico, en el texto, por la significación fálica
en el esquema? La significación fálica es "fálica" a consecuencia de que
M la función del significante del Nombre-del-Padre opera a través del signi-
ficante fálico, sino sería "significación" pero no "fálica", y entonces, ¿por
a
qué Lacan no escribe en el esquema el significante fálico? Para responder
a esta pregunta, es necesario aclarar que hay comentaristas de la obra
es " [ ... ] donde colocar las figuras del otro imaginario en las relaciones
de agresión erótica en que se realizan [ ... ]" 17 , o sea, el objeto imaginario 18. Ibíd.
19. lbíd.
20. lbíd.
16. "Observación sobre el informe de Daniel Lagache", Escritos 2, Siglo XXI, pág. 657. 21. Ibíd., pág. 56~ .
17. "De una cuestión preliminar ... ". ob. cit., pág. 535. 22. Ibíd., pág. rrnri .

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ALFREDO E1m~LSZTEIN J MODELOS, ESClUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA "R"

de Lacan que, al abocarse al estudio del esquema "R", justamente susti- 8) "Pues el falo, como lo hemos mostrado en otra parte, es el signifi-
tuyen, sin más aclaración, lo que escribe Lacan: cp, la significación fálica, cante de la pérdida misma que el sujeto sufre por la fragmentación
por <1> el significante fálico. Esto es confundir y olvidar las características del significante [ ... ]" 1 º
fundamentales de este último.
9) "Es la función privilegiada del significante del falo, en el modo de
Voy a tomar una serie de citas de Lacan en las que figuran las propie-
presencia del sujeto en el deseo, la que es ilustrada aquí[ ... ]" 31
dades de este significante:
10) "[ ... ] el falo [ ... ] significante del deseo [ ... ]"ª 2
1) Recordemos lo que ya dijimos al citar el Seminario 3, "[ ... ] porque
el falo es un símbolo que no tiene correspondiente ni equivalente.
Lo que está en juego es una disimetría en el significante". 28 De todas estas citas extraeremos las características del significante fálico,
tal como se articula en el esquema "R" . Es un significante que tiene una
2) Agreguemos lo que Lacan desarrolla en "La significación del falo", función privilegiada, que no tiene correspondiente ni equivalente, o sea,
escrito basado en una conferencia pronunciada simultáneamente implica una disimetría en el significante, ya que todos los otros significantes
con las últimas clases del Seminario 5, en el cual afirma: "Pues ~l sí lo tienen. Tal como dice Lacan en "La dirección de la cura", es un signi-
falo es un significante, un significante cuya función, en la economía ficante impar, esto quiere decir que no tiene par, que es único como tal. En
intrasubjetiva del análisis, levanta tal vez el velo de la que tenía esta misma dirección, en el Seminario 5, el significante fálico es denominado
en los misterios. Pues es el significante destinado a designar en su significante pivote, significante carrefour, significante particular y dice en la
conjunto los efectos del significado, en cuanto el significante los clase del 7-5-58: "[. .. ]el falo no es un significante como los otros[ ... ]" .
condiciona por su presencia de significante." 24 Es una parte del cuerpo, lo significable, elevado a significante, 'la libra
de carne' con la que el cuerpo paga que una parte suya se haga significante,
3) "El falo es el significante privilegiado de esa marca en que la parte
elevación que, al ser llamada aufhebung,justifica que él mismo permanezca
del lagos se une al advenimiento del deseo." 25
por siempre 'latente', no expresado a nivel fenoménico.
4) "Todas estas expresiones no hacen sino seguir velando el hecho de Es el significante del deseo, del deseo del Otro, pero justamente debe-
que no puede desempeñar su papel sino velado, es decir como signo él mos recordar que, al ser el deseo articulado pero no articulable, se justifica
mismo de la latencia de que adolece todo significable, desde el momen- que su significante no pueda aparecer sino velado. A su vez, si es el sig-
to en que es elevado (aufhebung) a la función de significante." 26 n ificante del deseo del Otro, debe producirse la operatoria de la metáfora
que introduce la falta del deseo en el Otro, para que el significante fálico
5) "Se convierte entonces en la barra que [... ],cae sobre el significa- cumpla su función.
do, marcándolo como la progenitura bastarda de su concatenación Si opera el significante que introduce la falta en el Otro, que lo priva
significante." 27 del objeto, que lo barra como deseante, el significante fálico marcará la
6) "El faló como significante da la razón del deseo [ ... ]" 28 significación y hará del deseo, deseo sexual.
El falo es un significante impar, no se articula con los otros significantes,
7) "Que el falo sea un significante es algo que impone que sea en el lugar n o es S, de ningún S,, ni viceversa, y es por esto que no puede ser escrito
del Otro donde el sujeto tenga acceso a él. Pero como ese significante en el esquema "R". Tanto M, I como P se presentan en el esquema "R" en
no está allí sino velado y como razón del deseo[ ... ]" 21¡ sus articulaciones; sólo puede escribirse la significación que él determina,
por lo tanto, la significación fálica, cp.

23. El Seminario, libro 3, Las psicosis, Paidós, pág. 251. I: es el Ideal del yo, el significante operando como lo ideal. Tiene dos
24. "La significación del falo", Escritos 2, Siglo XXI, págs. 669-670, el subrayado es mío. vertientes, la vertiente MI, lógicamente, la primera, para cuya descrip-
25. lbíd., pág. 672, el subrayado es mío.
26. Ibíd., el subrayado es mío.
27. lbíd., el subrayado es mío. :30. "Sur la théorie du symbolisme d'Ernest Jones", Écrits, pág. 715, traducción personal.
28. lbíd., el subrayado es mío. 31. "La dirección de la cura y los principios de su poder'', Escritos 2, Siglo XXI, pág. 588.
29. Ibíd., pág. 673, el subrayado es mío. :32. Ibíd., pá g. 67'1 , ol 1rn brnyndo es mío.

94 95
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 Mom:LOs, F.:SQUEMM:i y GHAFOS ~~ N LA ~; NSEÑANZA DE LACAN EL ,,SQUEMA "R"

ción tomaré la siguiente cita. de Lacan: "Pero ese lugar original del suje- del Otro, justamente para mantenerlo en esta posición omnipotente. Toda
to, lcómo lo recobraría en esa elisión que lo constituye como ausencia? demanda es un acto de amor al Otro omnipotente y todo deseo, por ser
lCómo reconocería ese vacío como la Cosa más próxima, aun cuando lo deseo del deseo del Otro, atacará a este Otro, castrándolo.
excavara de nuevo en el seno del Otro, por hacer resonar en él su grito?
Más bien se complacerá en encontrar en él las marcas de respuesta que "S" es el sujeto en lo simbólico, tal como lo indica el que esté escrito con
fueron poderosas a hacer de su grito, llamada. Así quedan circunscritas una letra mayúscula, aunque se lo encuentra en el triángulo imaginario. lPor
en la realidad, con el rasgo del significante, esas marcas donde se inscribe qué? El significante del sujeto está "forcluido" en la neurosis. Esto último se
la omnipotencia de la respuesta. No es en vano si se llama insignes a esas lee en la homología, que Lacan destaca, entre el vértice del lugar de P en A y
realidades. Este término es aquí nominativo. Es la constelación de esas el vértice significante del sujeto bajo significación fálica. "El cuarto término
insignias la que constituye para el sujeto el Ideal del yo. (el otro respecto de M, I y P) está dado por el sujeto en su realidad, como tal
"Nuestro modelo [el modelo ópticoJ muestra que es tomando como precluido (forcluido) en el sistema y que sólo bajo el modo del muerto entra
punto de referencia 1 como enfocará (dirigirá) el espejo A para obtener en el juego de los significantes, pero que se convierte en el sujeto verdadero
entre otros efectos tal espejismo del Yo Ideal. "~:3 a medida que ese juego de los significantes va a hacerle significar.":35 O está
De esta preciosa cita sobre el Ideal del yo quiero destacar, aclarando forcluido el significante del Nombre-del-Padre, y esto es la psicosis, o está
que dejo para el análisis de "S" lo que se refiere al "lugar del sujeto": 1) forcluido el significante del sujeto, y esto es la neurosis.
quien encarna el lugar del Otro, M, por poder hacer del grito del niño una Siempre, en el Otro, falta un significante y en el caso de la neurosis
llamada, o sea, el paso de la respuesta biológica a una "demanda" signifi- es justamente el significante del sujeto el que funciona como significante
cante, será omnipotente, 2) las marcas significantes de las respuestas de faltante, que podemos escribir como la "S" del significante barrada para
este Otro omnipotente serán insignias que operarán como nombres del indicar su exclusión: S, o como -1, el significante que falta. Para decirlo
sujeto ("insignia" deriva del latín insigne que significa marca distintiva); en términos más próximos a los freudianos, diremos que nadie es "yo" en
nombres que por no ser lo producido por el Nombre-del-Padre no ubicarán el inconsciente o, lo que es lo mismo, que el deseo inconsciente nunca se
al sujeto en el sistema legalizante del parentesco, 3) estas marcas, rasgos expresa en primera persona.
que luego Lacan trabajará como "unarios", quedan, como lo indica clara-
mente el esquema "R", circunscritas en la realidad de la cual justamente Pasemos ahora al estudio del esquema "R" tal como se desprende de la
el lado MI es la base o el soporte. Gracias al comentario de la fórmula de la nota al pie de página del año 1966.
metáfora paterna indicamos la necesidad de considerar el significante del Lo primero que debemos tener en cuenta es que el cuadrángulo de la
Deseo de la Madre articulado con el significante "I", pues,"[ ... ] el niño en Realidad es definido como una banda de Mobius. Pero reconozcamos que
cuanto deseado constituye el vértice 1 [ ... ]" .ª4 Entonces, "I" son las marcas no se parece en nada a la que presentamos en el capítulo de topología. Sin
de la omnipotencia del Otro, Otro que la función del padre vendrá a castrar; embargo hay que observar que la banda se constituye a partir de una tira
además, es el niño como objeto deseado por la madre quien se identifica al de la siguiente manera: 3 n
significante de ese objeto. El significante paterno, al sustituirse al materno,
lo convertirá en significación. A su vez, el "I", articulado en el segmento B e
IP, es el Ideal paterno postedípico, que, como lo indica el esquema, no deja
A D
de vincularse con los ideales maternos.
La relación de significantes MI inscribe lo que Lacan llama "relación de
amor", amor en tanto que "toda demanda es demanda de amor". No porque
toda demanda en sí demanda amor, sino porque el horizonte de toda de-
manda es el amor. Si el Otro, al hacer atravesar el grito por los desfiladeros
del significante, tiene el poder de hacerlo demanda, consecuentemente toda
F IGURA 44
demanda, más allá de su contenido, remitirá siempre a esta omnipotencia
35. lbíd., pág. 53:3,
33. "Observación sobre el informe ... ", oh. cit., pág. 659. 36. Aleksandrov, l(olniof.{orov, Laurentiev y otros, La matemática: su contenido, métodos y
34. "De una cuestión preliminar ... ", oh. cit., pág. 536. signifi c11do, '1'01110 :l , /\ 1i1111:i:n, png. 237.

96 97
EL ESQUEMA "R"
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODF;LOs, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

Si pegamos AB con CD, aplicando primero una torsión tal que B se une
con D y A con C, obtenernos una banda da Mobius. .-~~~~~~--.M
Siguiendo el esquema propuesto por M. Gardner en "Comunicación
extraterrestre", 37 vemos cómo se unen los bordes de un cuadrado para
construir un tubo:

A A
rn I

FIGURA 47

Además en la nota al pie de página, Lacan nos dice: "Especialmente


los puntos para los que no por casualidad (ni por juego) hemos escogido
las letras con que se corresponden m M; i 1 y que son los _9,,Ue enmarcaron
B B el único corte válido en este esquema (o sea el corte mi, MÍ), indican sufi-
FIGURA 45 cientemente que este corte aísla en el campo una bande de Moebius. ":is
Si el cuadrángulo de la Realidad es una banda de Mobius, o sea, una
superficie topológica, hay que sacar las consecuencias de esto. La banda
Se debe tener en cuenta que los lados de trazo más grueso se unen de Mobius se caracteriza por los siguientes invariantes topológicos: tiene
entre sí, coincidiendo la dirección de sus flechas respectivas. Así se unen una sola cara, un solo borde, es no orientable, su número cromático es seis
en la banda de Mobius: y su número de Betti es uno. Tomaremos de éstos, los dos primeros.
La Realidad para el ser humano, a consecuencia de la articulación de
lo Simbólico, lo Imaginario y lo Real, tal como se da en la neurosis, es una
A B superficie con un borde y dos dimensiones, aunque no lo parezca. Tal como
lo permite concebir el ejemplo dado por Lacan, como por los topólogos, es
una superficie de proyección, como una pantalla sobre la que se proyecta,
en la que lo proyectado parece tener las tres dimensiones, aunque sólo
tiene dos. A diferencia de una pantalla cinematográfica, que tiene dos
caras, la banda de Mobius posee una sola; basta comenzar a pintar lo que
parece una de sus dos caras para darse cuenta de que termina pintándose
toda la banda (lo que parecerían dos caras) sin atravesar ningún borde.
Esto sólo se hace evidente tomando en cuenta toda la banda, ya que si
B A
la tomamos en forma parcial, ilusoriamente parece poseer dos caras, tal
FIGURA 46 como lo indica este dibujo:

Volviendo al cuadrángulo de la Realidad del esquema "R", vemos que


efectivamente las letras de sus vértices y la línea gruesa que interrumpe
la línea punteada de lo imaginario indican que es una banda de Mobius.

38. "De un cuo1Jtión proli m in nr ... ", ob. cit., pie de pág. 535.
37. Martín Gardner, Comunicación extraterrestre, Cátedra, pág. 34.

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ALFREDO EIDELSZTEIN \ MODEWS, ES'iUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSENANZA DE LACAN EL ESQUEMA "R"

punto impropio que la paralela a ella que pasa por 0). Obtenemos, por
tanto, un modelo del plano proyectivo si lo imaginamos como un círculo de
radio 'infinitamente' grande con centro en O y si suponemos que todo par de
puntos, diametralmente opuestos A, A ' de la circunferencia de este círculo
están unido en el único punto 'del infinito' de la recta AA'. La circunferen-
cia de nuestro círculo se convierte entonces en la recta del infinito, pero
debemos tener en cuenta que cada par de puntos diametralmente opuestos
de esta circunferencia representa en realidad un solo punto. Es evidente,
pues, que el plano proyectivo es una superficie cerrada sin bordes.
"Si tomamos una curva de segundo orden en el plano proyectivo -una
hipérbola, por ejemplo (véase figura 13) [fig. 49]- es obvio que en dicho
plano, es una curva cerrada (cortada en dos ramas por la recta del infi-
F1GUl{A 48
nito). Teniendo en cuenta que los puntos diametralmente opuestos de
la circunferencia de nuestro círculo fundamental son un mismo punto,
De acuerdo con el esquema, el lápiz "parece" que pasa de una cara a la
podemos ver sin dificultad que el interior (sombreado) de la hipérbola en
otra de la banda, y sin embargo si realizamos todo el trayecto de la banda
la figura 13 [fig. 49] es homeomorfo al interior de un círculo ordinario y
descubrimos que es una y la misma cara.
que su complemento, la parte no sombreada en la figura, es homeomorfo
El resto del plano del esquema "R", lo no sombreado, por deformación
a una banda de Mobius." 39
continua puede ser convertido en un círculo; aquí serían dos semicírculos
"Así, pues, desde el punto de vista topológico, el plano proyectivo es el
que tienen sus bordes pegados a los bordes de la banda de Mobius. Esta
resultado de pegar un círculo (en nuestro caso el interior de una hipérbola)
superficie, la resultante del pegado de una banda de Mobius y un círculo,
con una banda de Mobius a lo largo de sus bordes. De aquí se sigue que
es un plano proyectivo.
el plano proyectivo, es decir, el objeto básico de estudio de la geometría
Tomaré una larga cita de Aleksandrov sobre el plano proyectivo, que
proyectiva plana, es una superficie cerrada de una cara."~º
es muy clara y que será muy útil para seguir a Lacan en su ubicación del
objeto a en el esquema R. A'
"La transición del plano ordinario al plano proyectivo consiste en
completar el plano con nuevos elementos abstractos, los llamados puntos
impropios o 'infinitamente distantes'. Al añadir esos puntos, la operación
de proyectar un plano sobre otro (por ejemplo, la proyección sobre una
pantalla mediante un proyector) se convierte en una transformación uno
a uno. El proceso de completar el plano con los puntos impropios [ ... ]
se desarrolla de la siguiente forma. Toda línea recta se completa con un
solo punto impropio ('en el infinito'), y dos rectas tienen el mismo punto
impropio si, y sólo si, son paralelas. Una recta completada con el punto
del infinito se convierte en una línea cerrada, y el conjunto de todos los A
puntos de infinito de todas las posibles rectas forman por definición una FIGURA 49
línea impropia o línea de infinito.
"Puesto que las rectas paralelas tienen en común el punto del infinito, en Otra forma de "imaginarizar" el plano proyectivo consiste en identificar
la representación del proceso de completar el plano con puntos impropios los puntos diametralmente opuestos, tal como propone Ian Stewart en su
es suficiente considerar las rectas que pasan por un punto arbitrario del libro Conceptos de matemática· moderna:
plano, por ejemplo, el origen de coordenadas O (figura 13) [fig. 49, en la
pág. siguiente]. Los puntos impropios de estas rectas agotan ya los puntos 39. Aleksandrov , Kolrnogorov .. ., ob. cit., págs. 239-240.
impropios de todo el plano proyectivo (puesto que toda recta tiene el mismo "º· lbíd .. pág. 2'10 .
100 101
AU'REDO EIOELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA l'NSENANZA DE LACAN
EL ESQU~~MA "R"

En el esquema "R" debemos invertir lo que se describe en la figura 13


de Aleksandrov [fig. 49], el sombreado es la banda de Mobius y lo no som-
breado es la superficie homeomorfa de un círculo (la que se puede obtener
por deformación bicontinua y biunívoca).
En el plano proyectivo se constituye así un mixto muy particular: un
disco o círculo euclídeo y una banda de Mobius topológica. Esta heteroge-
neidad es la del objeto a respecto del orden simbólico que lo engendra. En
"El atolondradicho ... " encontramos: "La topología esférica de este objeto
FIGURA 50 llamado (a) es lo que se proyecta sobre el otro compuesto, heterogéneo, que
el cross-cap constituye. " 44
En el esquema "R" deberíamos hacerlo así: Hay una relación entre el plano proyectivo y el cross-cap o casquete
atravesado (o "gorro cruzado"), es que tienen las mismas propiedades
topológicas y Lacan las toma en cuenta.
En este punto conviene hacer una aclaración. Un plano proyectivo o
un cross-cap pueden ser entendidos, como ya dijimos, como la unión de
un plano euclidiano y una banda de M6bius. A su vez se debe tener en
cuenta que una banda de Mobius puede tener una torsión izquierda o una
torsión derecha.

FIGU!{A 51

El término "imaginamos" lo subrayo para que recordemos lo que dUimos


de las representaciones en topología, éstas son imaginarizaciones de lo que
Banda con lOrsión derecha Banda co11 torsión izquierda
se concibe. Las representaciones son imaginarizaciones, no las nociones
topológicas en sí. Lacan en "El atolondradicho ... " dice: "Ello nos lleva FIGURA 52
a la sorpresa de que evitáramos apoyar con la imagen nuestra banda de
Moebius, pues tal imaginación vuelve vana toda consideración que hubiera Jamás una banda con torsión derecha podrá convertirse, por una trans-
requerido un dicho otro por hallarse articulado a ella [ ... ]" 41 y agrega: "Así, formación continua, en una con torsión izquierda y viceversa. Esto hace
un objeto tan fácil de fabricar como la banda de Moebius en tanto que se que la banda de Mobius no sea especularizable, ya que el espejo produce
imagina, pone al alcance de todas las manos lo que es inimaginable en siempre una inversión en el sentido de la orientación de la torsión.
cuanto su decir al olvidarse, hace al dicho soportarse." 12 Este uso del espejo y de la noción topológica de lo "especularizable"
Lo que aquí se imaginariza son los "puntos infinitamente distantes" debe ser netamente distinguido del uso que del mismo hace Lacan en su
que son, obviamente, imposibles de representar. Lacan los llama "puntos "estadio del espejo". La segunda utilización irá imponiéndose cada vez
fuera de línea". 43 más sobre la anterior y a la altura del Seminario 12, Problemas cruciales
para el psicoanálisis, (inédito), Lacan nos dice que la primera concepción
41. Escansión Nº 1, Paidós, pág. 54. sobre el espejo queda subsimida y ordenada por la segunda.
42. lbíd., pág. 55. Esta no especularidad de una parte del cross-cap es lo que permite
43. Ibíd., pág. 42.
'11 . [bíd. , pf1¡.¡. '1fi .
102
103
AL~'REDO ElDELSZTEIN j MODELOS, l•:S\tUl,MJ\S Y Gl{J\f<'OS ~;N LA ENSEÑANZA DE LACA N
Et.. 1,:st'¡ u~~ MA "R"

asociarla al objeto a, que carece también de imagen especular, como lo de Mobius, se obtiene un plano proyectivo (como en la figura 121) l.fig.
comentaremos en el capítulo sobre el grafo del deseo. 56) [. .. ]".47 Subrayo "si intentásemos", porque es imposible hacerlo, es
Para entender su relación, citaré a Stewart: "El plano proyectivo es imposible realizar esta figura en el espacio tridimensional.
una banda de Mobius y un disco, cosidos arista por arista. Para realizar
esta operación en el espacio de tres dimensiones se debe retorcer la bandas
de Mobius hasta que su arista sea circular, lo que la obliga a cortarse a sí
misma formando un 'casquete atravesado' (cross-cap) [ ... ]". 45

FIGURA 55

FIGURA 53
"El plano proyectivo es, pues, un 'casquete atravesado' al que se le ha §)
cerrado el agujero [ ... ] ". 46

---------- FI G URA 56

------- Entonces, ¿dónde, finalmente, ubicamos el objeto a en el esquema "R"?


Ya dijimos que la realidad tacha lo Real y que, por lo tanto, si el objeto a
es real debe estar tachado por la realidad; pero ¿no podríamos localizarlo
por su función o a través de la misma?
El objeto a es el marco del fantasma que sostiene el campo de la realidad
por su extracción misma. En el comentario del modelo óptico habíamos
FIGURA 54
dicho que los objetos a, como objetos parciales pulsionales, sostenían la
constitución del cuerpo para el ser humano, pero recién aquí se afirma que
Si tratamos de enfocar este problema desde la perspectiva de la "cons-
es por su extracción. Debemos concluir que el objeto a es localizable en
trucción" del cross-cap puede hacérsenos menos inasible. El procedimiento
el esquema en función del corte. "[ ... ]y que se reduce, como lo real aquí
es conocido en topología como cirugía, corte y pegado.
interesado, al corte mismo[ ... ]" .48
"Las superficies no orientables se obtienen mediante el cosido de bandas
En el esquema "R", el corte está representado por mi, Mi, que Lacan
de Mobius. Para ello, se hace un agujero en la esfera. Este tiene una sola
denomina el único corte válido en este esquema.
arista circular (borde): la banda de Mobius tiene también una sola arista
circular, que unimos con la otra. Si intentásemos hacer esto en el espacio
tridimensional se encontraría que la banda de Mobius tiene que cortarse
a sí misma, formando un 'casquete atravesado'. [ ... ] Añadiendo una banda

47. Ibíd., pág. 207 , el subrayado es mío.


45. lan Stewart, Conceptos de matemática moderna, Alianza, pág. 181.
48. "De una cuostión prel iminar .. .", ob. cit., pie de pág. 536.
46. Ibíd., pág. 182.

104 105
ALFREDO EJDELSZTE!N j MODELOS, ESQUEMAS Y Gl{M'US f;N LA l':NSEÑANZA DE LACAN
EL ESQUgMA "R"

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A
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FIGURA 59
FIGURA 57
Al respecto dice: "Precisamente porque el objeto a es extraído del campo
El localizar al objeto a en el corte debe ser articulado a la cuestión de la realidad, es que él le da su marco. Si tomo de la superficie del pizarrón
siguiente: ¿dónde se localiza un corte? [aclarando que la extracción no es en un plano como el pizarrón sino en un
Si analizamos el esquema siguiente: plano proyectivo] este trozo que represento con un cuadrado sombreado,
obtengo lo que podemos llamar un enmarcado: enmarcado del agujero y
enmarcado, también, del resto de la superficie. Este enmarcado, por otra

DA XAº B B'
parte, lo puede materializar una vulgar ventana. Pues bien, el objeto a es
un tal jirón de superficie y es su sustracción de la realidad la que la enmar-
ca. [ ... ] Sólo a condición de que el objeto a sea extraído, se constituye la
ventana del fantasma. Así es, pues, cómo el fantasma es marco. También
es pantalla. El término hay que tomarlo con sus dos valores: detiene la luz ,
estorba la mirada, disimula y, al mismo tiempo, tiene una función óptica
FJGUllJ\ 58 positiva, permite que se forme una imagen." 51

Veamos qué sucede si el objeto a no es extraído; a eso responde el Es-


Concluimos que: 1) el corte no puede estar enAB ni en A'B'; 2) tampoco quema "I", construido en el momento en que Lacan estaba gestando la
puede estar en el espacio entre AB y A'B', y 3) sin estar en ninguno de noción de objeto a. Así como Lacan elabora la relación entre las estructuras
estos lugares producidos por él, el corte les da a los tres su característica clínicas en el modelo óptico y el "U', así también lo hace en el "R" pero en
fundamental. ese momento será para dar cuenta de la oposición neurosis-psicosis.
En topología esto está bien comprendido. Poincaré lo afirma así:"[. .. ] en Lacan intenta articular con el modelo óptico y con el esquema "U' las
otras partes del analysis situs, [ ... ]todo se basa en la cortadura." 1 n Lacan, estructuras clínicas que se despejan en la práctica analítica; el esquema
en "Subversión del sujeto ... " nos lo transmite así: "Observemos que este "R", la articulación de los tres registros por la vía del significante del
rasgo del corte prevalece con no menos claridad en el objeto que describe Nombre-del-Padre; e intentará ubicar la estructura del sujeto Schreber
la teoría psicoanalítica [ ... ]". 5 º al término de su proceso psicótico en el esquema "I". A pesar de ser cons-
Finalmente quiero hacer mención de una cita muy precisa y aclaratoria truido sobre las particularidades de la psicosis de Schreber, creo que el
de Jacques-Alain Miller en su "Mostración en Premontré". Allí, comentan- análisis de este esquema permite establecer consideraciones importantes
do la nota al pie que estamos analizando, produce el siguiente esquema: sobre la psicosis en general.

49. Últimos pensamientos, Espasa-Calpe, págs. 56-57.


50. "Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano", Escritos 2, Siglo
XXI, pág. 797.
51. MatonlllH 1, Mnn11nt.i11 I, p;\g. 171, el subrayado es mío.
106
107
EL ESQUEMA "R"
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

lo imaginario (cuya estructura es la significación fálica más el estadio del


espejo) a la dialéctica especular.
M Este agujero en lo imaginario por la falta de la significación fálica es la
consecuencia, no sólo de la forclusión del Nombre-del-Padre, condición de
su producción, sino"[ ... ] (que) tendremos que concebirlo como producido
(se dirige a nosotros) en un segundo grado por la elisión del falo [ ... ]; 53 es por esto que Lacan
goce transex~st;:¡ escribe CP significante fálico, con subíndice O en el agujero imaginario.
0

1magen Estos dos agujeros están representados en el esquema por los interiores
de la de las dos ramas de la hipérbole, desplazadas en el esquema, a lo largo de
una de las rectas de la asíntota.
¿Por qué Lacan utiliza estos dos elementos geométricos en el esquema
"I", que no utilizó en el "R"? Por ello más arriba decíamos "geometriza-
ción" en lugar de "topologización". Para contestar esta pregunta veamos
g
á c5 primero qué significan algunos de los términos utilizados. Asíntota: del
griego, quiere decir "sin caída" (que podemos hacer equivaler a la no caída
o extracción del objeto a) y que en geometría equivale a una línea recta a
la cual se acerca, pero nunca llega a ella, el ramal infinito de una curva.
Se representa así:
donde se mantiene lo creado l
(ama a su mujer)
m

ESQUEMA "I" ~'"'°''~


./~curva
FIGURA 60

"En el punto donde[ ... ] es llamado el Nombre-del-Padre, puede pues


responder en el Otro un puro y simple agujero, el cual por la carencia del

~fo<olli~
efecto metafórico provocará un agujero correspondiente en el lugar de
la significación fálica." 52 Comentemos esta frase ya que la construcción
del esquema "I" se basa en ella. Primero: cuando, dada cierta coyuntura,
"es llamado el Nombre-del-Padre", lo que le permitía al sujeto psicótico
mantener la estructura estabilizada, no le alcanza, ya que requiere del F1GURA 61
Nombre-del-Padre y no de otra suplencia; segundo: "puede pues res-
ponder [ ... ]" es potencial, o sea, no necesario. Es por esto que debe ser
recalcado que éste es el esquema para Schreber, motivo por el cual no le En el esquema "I" una de ellas está partida y cada una de sus partes,
dedico un capítulo en especial a este esquema; tercero: "un puro y simple desplazada sobre la otra para que pueda seguir siendo posible el recorrido
agujero en el Otro", agujero como la geometrización de la falta y no como "Z", pero salido de eje.
la topologización de la falta. Un agujero puro y simple por la ausencia
de toda elaboración simbólica de esa falta; cuarto: provocará un agujero
correspondiente de la significación fálica, un agujero en lo imaginario que
implicará la "regresión tópica al estadio del espejo", o sea, la reducción de

52. "De una cuestión preliminar ... ", ob. cit., pág. 540. 53. lbíd., pág. 552 .

109
108
EL i;SQU!;MA "R"
ALFREDO EIDELSZTEIN i MODELOS, ESQUEMAS Y GRM'OS EN LA ENSEÑANZA üE LACAN
de su conjunción. " 55 Recordemos que las series divergentes son aquellas
s a abiertas a lo infinito. También se lo indica en cuanto que los cuatro extre-
mos del sombreado del esquema "I" están abiertos. En "El atolondradi-
cho ... ", Lacan articula"[ ... ] la inscripción que hice mediante una función
hiperbólica de la psicosis de Schreber [ ... ]" con que "[ ... ] nada existente
hace límite a la función [ ... ]". 56
De la cita anterior también podemos tomar la definición de los cuatro
A términos del esquema "Z", que afirmamos operando tanto en la neurosis
a'
como en la psicosis, pero que no son iguales en ambas estructuras. "El
FrcunA 62 mantenimiento en el esquema "I" del trayecto Saa 'A simboliza en él la
opinión que hemos sacado del examen de este caso de que la relación con
La hipérbola, del griego exceso, se representa así: el otro en cuanto con su semejante [ ... ] son perfectamente compatibles
con la relación salida de su eje con el gran Otro, y todo lo que implica de
anomalía radical [ ... ]." 57 O sea que se mantiene el trayecto. Si tomamos
el párrafo que sigue al ya citado: "Todo el espesor de la criatura real se
vértice vértice
interpone en cambio para el sujeto entre el goce narcisista de su imagen y
¡¿' eje

foco
)'I
o
centro
\,¡
.,
transversal

foco
la enajenación (alienación) de la palabra donde el Ideal del yo ha tomado
el lugar del Otro," 58 entonces, el "Z" queda constituido de la siguiente
\,¡
forma:
¡¿'
rama de la
hipérbola rama de la
eje conjugado hipérbo la

FTGUHA 63 M

Debe tenerse en cuenta que tanto el eje transversal como el eje conjugado
son líneas de largo indefinido, Tanto la asíntota como la hipérbola indican lo
indefinido, lo infinitizado introducido en el esquema"!", respecto del cual,
el esquema "R" es un cuadrado en el cual destacamos la función de marco, 111

de borde del fantasma. Conviene recordar aquí cómo Freud distinguía la FIGURA 64
función del fantasma, de la fantasía inconsciente, en la neurosis y en la
psicosis en "Introducción del narcisismo". Allí sostenía que el retiro de la Lacan los define de la siguiente manera:
libido era orientado en la neurosis a la fantasía y al yo en la psicosis.
La no extracción del objeto a es la consecuencia fundamental de la no i (goce narcisista M (Otro divino)
operatoria del Nombre-del-Padre, dejando al niño en el lugar del objeto de de su imagen)
la madre, quien así reintegra su producto. "Aquí la identificación[ ... ] por
la cual el sujeto ha asumido el deseo de la madre[ ... ]" 54 La no extracción
del objeto a implica, además, que no se ha prohibido al niño su relación m (yo delirante) I (Ideal del yo que ha
con el objeto primordial.
tomado el lugar del Otro)
Lacan indica doblemente la infinitud, al decir: "[ ... ]el lazo hecho sen-
sible, en la doble asíntota que une al yo delirante con el otro divino, de su 55. lbíd., pág. 553.
divergencia imaginaria en el espacio y en el tiempo a la convergencia ideal 56. "El atolondradicho ... ", Escansión Nº 1, Paidós, pág. 36.
57. "De una cu estión preliminar ...". ob. cit., pág. 555.
54. Ibíd., pág. 54 7. 58. Ibíd., pág. 553.

11 0 111
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRM'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL ESQUEMA "R"

En cuanto a la relación recíproca de esas funciones representadas


rp~ M
por estas letras, encontramos una indicación en: "Es tanto como decir
que la distorsión que manifiesta entre las funciones que identifican en él
las letras tomadas del esquema "R" no puede apreciarse sino en su uso
de rebote dialéctico." 59 La noción a la que me refiero es 'distorsión', que
( a

p
en la lengua significa desequilibrio entre varios factores que entran así m
t
en tensión; este desequilibrio no debe ser entendido, como dice Lacan,
como el desorden posterior a un terremoto, sino siguiendo las leyes de la
estructura, y nosotros la debemos oponer a 'torsión', tal como ésta opera .
\\,ª·
l,~
I/ -¿¡ 'Y' 1
i
p
y ordena los términos del esquema "R", en la banda de Méibius que le da
su estructura.
¿Qué tipo de distorsión nos lleva del esquema "R" al esquema "I"? La FIGURA 65
consecuencia del cavado de los dos agujeros en lo simbólico y en lo imagi-
nario produce la siguiente distorsión, al menos para el caso del presidente , Lacan, respecto de los objetos a-a', que están en una posición tan pecu-
Schreber: liar, a la cual podemos describir como salidos de su lugar por una fuerza
centrífuga, nos dice: "En lo cual se dibuja la dimensión de espejismo, que
1) Desaparición de la función del sujeto bajo significación fálica, que subraya aún más el tiempo indefinido en que se aplaza su promesa, y que
Lacan denomina "muerte del sujeto" y su sustitución por la función profundamente condiciona la ausencia de mediación de que da testimonio
de la imagen narcisista, proceso denominado "regresión tópica al el fantasma. Pues puede verse que parodia la situación de la pareja de
estadio del espejo" . sobrevivientes postreros que, a consecuencia de una catástrofe humana,
se encontraría, con el poder de volver a poblar la tierra, confrontada a lo
6
2) Desaparición de la función del "Pt, que definimos como lo inconsciente que el acto de la reproducción animal implica de total en si mismo." º O
y su sustitución por el funcionamiento del Ideal del yo. sea, el encuentro de la pareja del fantasma schreberiano queda postergado
infinitamente y el esquema lo escribe mediante la posición descentrada
3) El giro en el sentido contrario a las agujas del reloj de todas las res-
respecto del eje de la asíntota, ahora "aa"' están fuera de eje, uno, del
tantes funciones, claramente escrito por Lacan al horizontalizar las
lado "goce narcisista de la imagen" y el otro, del lado "El Ideal en el lugar
letras "I", "R" y "S" que en el esquema "R" hacían el equivalente de
la otra diagonal del cuadrado; como también de las indicadas en 1) del Otro".
y 2), o sea, el "i", imagen narcisista, y el "I", Ideal del yo. Al tener
este giro un carácter "centrífugo" deja por fuera del esquema de la
realidad a los objetos a-a'.

4) "M" es el único término que no cambia de lugar, indicando esta


permanencia el hecho de no atravesar por los efectos del complejo
de castración.
5) La infinitización ocurrida como consecuencia de la inexistencia del
marco del fantasma.

En el siguiente esquema vemos esta "distorsión centrífuga" :

59. Ibíd. 60. fbíd ., p ág. 55 •.


113
112
GRAFOS

El grafo del deseo

"Así se hilvana mi discurso- cada término sólo se


sostiene por su relación topológica con los demás ... "
JACQUES LACAN, El Seminario, Libro 11, pág. 96.

i(a)

! (A) s
EL GRAFO DEL DESEO
FIGURA 66

115
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, l<:SQUl<:MAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO D8L DESEO

El grafo del deseo, entre los modelos y los esquemas, ha sido la creación
de Lacan que más ha sido tomada en cuenta por los psicoanalistas que
orientan su práctica con las enseñanzas de aquél y también la más comen- 5
tada por los estudiosos de su obra. A pesar de lo cual creo que se justifica
un desarrollo más del mismo, ya que posee propiedades que regularmente
Isla J
han sido olvidadas, especialmente su estructura topológica.
Comencemos por indicar que aunque su nombre 'grafo' nos lleva a la 6
teoría matemática de los grafos, Lacan nos enseña que debemos tomar
grafo también como gramme en francés, que, proveniente del griego, sig-
nifica letra, escritura, tal como se lo utiliza, por ejemplo, en castellano en FI GURA 68
'telegrama'. El grafo es, entonces, un tipo particular de escritura.
Antes de comentar el uso que Lacan hace del grafo del deseo debemos En este esquema se han sustituido ambas márgenes del río y las dos
introducir la teoría matemática de los grafos y redes y estudiar sus pro- islas por un punto y cada puente por un segmento de recta o arco. Para
piedades topológicas. mayor claridad se han colocado números a los puentes y se ha nombrado
Lo que en Matemática se conoce como "teoría de los grafos y redes" cada punto del grafo según el sector que representa.
surge, entre otros, de los siguientes famosos problemas: 1) del problema Al hacer lo mismo con el problema de las tres casas vecinas, obtenemos
de los puentes de Konigsberg, resuelto por el matemático Euler, 2) del el siguiente grafo o red:
problema de los cuatro colores para la coloración de mapas, aún no re-
suelto y 3) del problema de la conexión de tres casas vecinas a tres redes -- ----- -2---, 3

''.·<-~~1', ··:
de servicios, como, por ejemplo, electricidad, gas y agua. El primero de
los problema mencionados es el que resulta del intento de responder a la
siguiente pregunta: lPuede una persona salir de su casa, tomar un cami-
GE4GP~ t

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1 2 3 ,' :
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1
no y retornar a la misma atravesando sólo una vez cada uno de los siete
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u/~
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M
puentes que unen las dos márgenes del río Pregel y las dos islas que se '.' ' '
"" "" '- '--G _, ,'.""E
',' - A
encuentran en la ciudad de Konigsberg (hoy Kaliningrado)? He aquí un
mapa de esa región:
"·- .: ·- - - - ---------<~/
1 G E A
3 FIGURA 69 FIGURA 70

Respecto de este grafo conviene decir que no hace falta que las líneas
que conectan los puntos sean rectas, por eso las llamamos arcos (trozos
de líneas curvas) y que la imposibilidad de la conexión, para nuestro gra-
fo, entre la casa 2 y el depósito de agua, se resuelve si se autoriza que las
líneas se superpongan.
4 En la teoría de los grafos, los puntos son llamados vértices y las líneas
son llamadas aristas. Evidentemente, si se pueden sustituir territorios
FIGURA 67 por puntos y puentes por arcos, en los grafos las superficies y las longi-
Ludes no son tomados en cuenta; en los ejemplos antes desarrollados es
A partir de este mapa, se puede confeccionar un esquema que simplifica evidente que ninguno se solucionaba por el aumento o disminución de las
mucho el problema: superficies o distancias.
Pasemos ah ora a una definición de grafo o red: llamaremos grafo o red

116 ] 17
EL GHJ\FO DEL DESEO
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRM'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

Para poner a prueba estas nociones, analicemos la red que aparece en


a la terna de vértice, arista y función, tal que a cada arista le corresponden
el escrito de Lacan, "El seminario sobre La carta robada ."
dos vértices así como la función específica que éstos estén unidos.
Si intentásemos aprovechar la teoría de los grafos para el problema de
la ordenación y distribución del tráfico vehicular en una ciudad, se hace
necesario agregar la dimensión de la dirección de las aristas, ya que hay
calles que poseen direcciones permitidas y otras prohibidas. Las esquinas
serían los vértices, las calles las aristas, que en este caso deberían estar
orientadas, pudiendo darse el caso que dos vértices estuviesen unidos por
dos aristas de dirección contraria. A los grafos que tienen en cuenta la
dirección se los llama grafos orientados o disgrafos y ~s evidente, a partir
de un grafo, que cada par de vértices queda convertido en un par ordena-
do. Por ejemplo, el grafo de una manzana rodeada por cuatro calles, todas FIGURA 73
ellas de doble mano, es el siguiente:
De este grafo o red podemos decir que es un grafo orientado, que posee
·~~~~~~~~·
dos lazos, cuatro vértices (ya que no es el mismo '2' el que aparece luego
de un 'l' que el que aparece luego de un '3' según surge de ese mismo
escrito) y, finalmente, agreguemos algo más, es un grafo planar, o sea, se
puede realizar sobre el plano de dos dimensiones.
Recordemos que el grafo de las tres casas vecinas y los tres servicios

.'. FrGUllJ\ 71
. públicos no se podía realizar en el plano bidimensional, pero es evidente que
sí por fuera de él, o sea, en un espacio tridimensional, en el que una arista
pudiese pasar por debajo de otra (observemos en este sentido lo trabajado
en el capítulo sobre el Esquema "J.¡', respecto del punto de intersección
del vector AS con el vector a;_). Todo grafo puede realizarse en el espacio
Tomaremos los ejemplos de los dos grafos más sencillos: tridimensional. A los grafos que requieren de las tres dimensiones del
espacio, se los llama grafos no planares.

o Grafo A Grafo 8
¿Qué tipo de grafo es el grafo del deseo? En el Seminario 6, El deseo y
su interpretación, Lacan dice: "[ ... ]nuestro grafo[ ... ] esto que no es otra
cosa que posición topológica de elementos y de relaciones [ ... ]". 1 Repro-
duzcamos aquí sólo su estructura de grafo, sin las funciones que Lacan
asigna a los vectores y a las aristas.
Fr GURJ\ 72

En el grafo A la única arista comienza y termina en el mismo vértice:


a este tipo de aristas se las llama lazo . El caso del gr afo B tiene la parti-
cularidad, dentro de la teoría de los grafos, de ser una cadena, o sea, una
serie de aristas en la que cada una incide en el vértice precedente y en
el siguiente y además todos los vértices son dist intos. Es evidente que
nosotros no debemos dejar de articular el grafo B a la noción de cadena
significante, ya que poseen la misma estructura. l. Inédito, clAso dol 26-"11 -58.

11 9
118
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODEL08, ESQUEMAS Y GRAFOS f~N LA ENSENANZA DE LACAN
EL GRAFO DEL DESEO

problema más fundamental aún. lA qué vectores arriban las aristas que
salen por la derecha del grafo? lDe qué vectores provienen las aristas que
arriban por la izquierda del grafo? Por la definición misma de vector y
arista, es obvio que cualquier arco que salga de un vértice o que llegue a
un vértice no es una arista, lo es sólo un arco que conecta un par de ellos.
Hay dos soluciones, una planar y otra no planar, que pasan por articular
entre sí estos dos pares de aristas 'anormales':

--11 ¡¡- ' -11 it-


~ i \ ~ t
~ /?'i---¡t
.·-11 ~r : ,~, ~\
lt---":
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. . ': t' . ¡· :: :. i ¡· ,:
.
l \ • 1
\ . 1 1 1 1 • 1
'
' , ,
\ \

': : ~ -
, '
_______ ___ __ _.... . . , "<·:--_ ./'/
FIG URA 74

Según las nociones de la teoría de los grafos, el grafo del deseo se podría A B
geometr izar así: FIGURA 76

Más adelante analizaremos psicoanalíticamente ambas soluciones para


~. ·---- determinar cuál elegir y, en función de ello, poder establecer si el grafo del
deseo es planar o no planar (la solución A es planar y la Bes no planar).

ti

J1• Para aproximarnos cada vez más al conocimiento de las características
que debemos tener en cuenta al analizar el grafo del deseo, pasemos ahora

i i al estudio de las propiedades topológicas de las redes o grafos. Para poder


hacerlo debemos introducir aún otras nociones más. En una red, un cami-

-11 •
·Jr~

no es una sucesión de aristas que une un vértice con otro, en el que cada
arista termina en el comienzo de la siguiente. Una red en la que un vértice
cualquiera puede unirse mediante un camino con cualquier otro vértice se
llama conexa, esto significa que la red no se descompone en partes. Toda

i t
red está formada por partes conexas (teniendo en cuenta que dos vértices
unidos por una arista es una red conexa). Recordemos que en el capítulo
sobre topología definimos la conexión como sinónimo de continuidad.
Dos vértices de un grafo son adyacentes si son extremos de la misma
F rGURA 75
arista y dos aristas lo son cuando tienen un vértice en común. El grado o
valencia de un vértice corresponde al número de aristas que inciden en él,
Evidentemente es un grafo orientado, que parece no tener lazos; pero,
un vértice al qu e in cide una arista se llama vértice pendiente. Dos aristas
les planar o no? Para resolver esta pregunta debemos antes resolver un
serán paraJelns 1-1 i coinciden ambos extremos de las aristas.
120
121
EL GRAFO DEL DESEO

AL~'REDO ErnEt.szn:1N 1 Mo1mLus, "s~¡ut, MAS Y GRA~'OS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN


y más aún con el famoso y no resuelto problema del mapa de los cuatro
Analicemos ahora estos grafos: colores. Dado un mapa cualquiera ¿se le puede colorear con 4 colores de
manera que ningún par de caras adyacentes a una misma arista tengan el
mismo color? Como se ve con facilidad, éste es el camino inverso del que
se realizó desde el mapa de Kónigsberg hasta su grafo, ya que pasamos
de la teoría de los grafos a una consideración sobre los mapas. El número
mínimo de colores necesario para colorear una superficie, sin que los ad-
yacentes a una misma arista coincidan, es un invariante topológico, que
se conoce como número cromático.
Una vez definidos vértices, aristas y caras, podemos arribar a otra
propiedad topológica de los grafos: la Fórmula de Euler. Se refiere a la
FIGURA 77 relación que existe entre vértices (V), aristas (A) y caras (c), que puede ser
expresada de las siguientes formas:
¿son ellos distintos? Sus formas evidentemente son distintas pero sus
estructuras no. Ambos tienen 8 vértices, 11 aristas, 1 lazo, 1 par de aristas c+V=A+l
paralelas y 3 vértices pendientes. Son dos grafos idénticos, o sea, isomorfos. o
Podría decirse que se trata de dos dibujos del mismo grafo. V - A+c=l
La mayoría de los ejemplos hasta aquí tratados corresponde a represen- 2
taciones gráficas de los grafos o redes que permiten clarificar las ideas y Podemos comprobar estas fórmulas en los tres siguientes grafos:
contribuir a la intuición del lector, pero conviene no confundir la estructura
del grafo con su 'dibujo'. Así, también dijimos que conviene no confundir
.""' .
CC~J
./

®
las superficies topológicas con sus representaciones.
Cuando representamos un grafo en un plano, se llamará cara a toda
división del plano ocasionada por un circuito cerrado de aristas. Como se 1/1
• •
ve con claridad, es posible asociar los vértices con puntos, las aristas con
~\ ~/
líneas y las caras con regiones del plano. Las redes o grafos de vértices y •
aristas finitos, conexas y planares se parecen a mapas y así se los designa A B c
en la teoría matemática de los grafos. Este es un ejemplo de un grafo que, F1<:UHA 79
intuitivamente, coincide con un mapa:
Los resultados los tabulamos así:

f/·1 c V A

( ~/ ""·/).
A: 4 6 9
B: 4 6 9

~- ·---""
\ ."---------7
C:

A: 4
B: 4
+ 6=
+ 6=
7 10

9
9
+
+
16

1
1
FIGURA 78 C: 7 + 10 = 16 + 1

Llegados a este punto, recién podemos darnos cuenta de la relación que


2. fan Stow11rl, Concrplos ele m at em á tica moderna, Alianza, pág. 192.
la Teoría de los Grafos tiene con el problema de la coloración de mapas
123
122
EL GRAFO DEL D ES~;O
AU'REDO EIDELSZTEIN 1 Mom:LOS, 1·:s Q u1-:MAS y Glli\FOS EN LA E NSEÑANZA DJi: L ACAN

Presumimos que los distingue el agujero que el toro posee y la esfera


En los tres casos comprobamos que la fórmula es cierta y fue Euler
no, pero el agujero no es del toro sino del espacio circundante y, por otra
quien descubrió que es cierta para todo mapa; la Fórmula de Euler se
parte, debemos recordar que en nuestra consideración topológica de la es-
convierte así en una propiedad topológica aplicable también a los espacios
fera y del toro, sólo nos ocupamos de las superficies y no de sus interiores.
topológicos conocidos como superficies, que estudia la topología y que ya
Entonces, ¿cómo distinguirlos? Existe una solución: toda curva cerrada
hemos descrito en el capítulo correspondiente. La tabla correspondiente
sobre la esfera la hace a ésta desconexa, la divide en dos superficies, aunque
a esas superficies, a partir de la Fórmula de Euler, es la siguiente:
hay curvas cerradas que no dividen al toro en dos:

Superficie3 Fórmula de Euler

Esfera 2
Toro o
Botella de Klein o
Plano proyectivo 1 FIGURA 81

Las propiedades: curva cerrada, conexo y desconexo son topológicas.


Para comprobarlo, cada superficie es triangulada y se comprueba que Entonces, ésta es una vía que sirve para distinguir topológicamente una
para cada transformación continua de ella se mantiene el número de Euler. esfera de un toro. Mas ¿cómo podemos saber si una superficie posee un
Para la banda de Mobius no se da el número de la Fórmula de Euler porque agujero? o sea, si se le ha aplicado una curva cerrada. Supongamos que
su único borde impide la triangulación ; obsérvese que las otras superfi- tenemos un camino como ya lo hemos definido; cualquier camino puede
cies se caracterizan todas por carecer de bordes. (Recor dar lo dicho en el ser reducido hasta convertir se en un punto, salvo que haya un agujero.
capítulo sobre esquema "R" respecto de la triangulación). "[ ... ] los agujeros pueden detectarse por la observación de los caminos
del espacio y por las maneras de deformarlos."~ "Un camino es un espacio
Habiendo podido establecer que para los grafos: 1) la forma y la medida topológico es una línea que une dos puntos del mismo. No importa que

---
no cumplen función alguna, 2) que la dimensión de conexión implica la culebree, ni que se corte a sí mismo; pero no debe estar 'roto'. Necesitamos
noción de continuidad fundamental en la topología y 3) que operan para que sea un camino continuo." 5
ellos la Fórmula de Euler y el número cromático, ambos invariantes to- Para ejemplificar esto último, consideremos los cuatro siguientes casos:
pológicos, concluimos que son en sí mismos topológicos . Pero aún queda
, '
otro desarrollo por hacer, para poder dar la estructura fundamental del
grafo del deseo. Supongamos que queremos distinguir topológicamente ~ J
,
entre una esfera y un toro. ,,

º 11

e~ "~ FIGURA 82
FJGURA 80
4 .. Ibíd., pág. 218.
3. Y para los grafos planares = 2 5 . . Ibíd .
125
124
ALFRJ;;f)O F,11mLSZTEJN 1 MODELOS, L'SQU~;MAs y GKAl'OS EN LA "'NSEÑANZA DE LACAN
EL GRM' O DEL DESEO

En todos se cumple una función: la forma en que se recorre el camino.


ubica y articula la pulsión, el fantasma, el síntoma, etc.? Apoyemos esta
Tomándolo en cuenta, podemos decir que los lazos de los caminos A y B
pregunta en una cita de Lacan de "Subversión del sujeto ... ", que dice así:
podrían reducirse a un punto y que e no, por el agujero que rodea, y que,
"Tenemos entonces que llevar mucho más allá ante nosotros la topología
además, no podría, por la forma de su recorrido, tampoco alejarse del
que hemos elaborado para nuestra enseñanza durante este último lustro,
agujero; mientras que D sí (en el dibujo se representa este alejamiento
con las otras líneas dibujadas en D). o sea introducir cierto grafo[ .. . ] habiendo sido construido y perfeccionado
a los cuatro vientos para ubicar en su nivelación la estructura más am-
También podemos considerar la transformación continua de un camino,
pliamente práctica de los datos de nuestra experiencia. Nos servirá aquí
o sea, su transformación topológica. Si a partir de la deformación continua
para representar dónde se sitúa el deseo en relación con un sujeto definido
de un camino se puede llegar a otro, se dice que ambos son homotópicos.
Observemos los dos siguientes casos: a través de su articulación por el significante." 6
La respuesta es que es el grafo del deseo porque la estructura funda-
mental del grafo nos es dada por la noción y subsiguiente 'localización'
del deseo. ¿Podremos pensarlo ayudados por las nociones topológicas que
hemos desarrollado hasta aquí? Resolvámoslo mediante algunas citas de
Lacan, la primera del Seminario 8, La transferencia, "Excusándome de
aquellos que son recién llegados, puedo dar por conocidas por mi auditorio,
en su característica general, las elaboraciones que ya he dado de la posi-
ción del sujeto, que son indicadas en el resumen topológico que nosotros
A o llamamos, convencionalmente, el grafo.
"La forma general ahí está dada por el splitting, el desdoblamiento
FIGURA 83 fundamental de dos cadenas significantes donde se constituye el sujeto." 7
La otra cita es del Seminario 6, El deseo y su interpretación: "Después de
Evidentemente los caminos de A serán homotópicos mientras que los haber establecido la función de las dos líneas del grafo, quisiera introducir
de B no, ya que el agujero que está entre ellos en el plano impide que, por un elemento esencial que concierne a lo que yace en el intervalo. Lo que
deformación continua (sin cortes), se pase de uno al otro. llamamos deseo es la distancia que el sujeto puede mantener entre las dos
En el plano euclidiano, si dos caminos salen y arriban al mismo punto, líneas, es ahí que respira durante el tiempo que le queda por vivir. " 8 De
y si además no tienen un agujero entre ellos, siempre son equivalentes. ambas citas concluimos que el lugar del sujeto, como sujeto del deseo, es
En el toro no sucede lo mismo. Al comparar los dos caminos trazados en el el intervalo, el agujero, entre ambas líneas del grafo. Lo que podría ser
toro de la figura siguiente, en la que ambos salen y llegan al mismo punto r epresentado así:
A, vemos que no son equivalentes.

--- -- ----
~
~

FIGURA 84
FlGUllA 85
Llegados a este punto podemos hacer la primera pregunta sobre ol
6. Escritos 2, Siglo XXI, pá g. 784, el subrayado es mío.
grafo del deseo en relación con las nociones psicoanalíticas que permito 7. Le Sé minai ro, liv rc VUI, Le transfert, Seuil, pág. 201 , traducción personal, el subrayado
articular. ¿por qué el grafo del deseo es sólo 'del deseo' cuando t ambi é n es mío.
H. l.ucnn ornl , Xli vl1 11• ll1\v11d11 l•:di ciones , subrayado m ío, pág. 69.
126
127
EL GRAFO DEL DESEO
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN
fundamental consiste en que se constituye en derredor de un agujero, y
Localizar al sujeto del deseo en el intervalo permite articular en, forma Lacan, desde el comienzo mismo de su enseñanza, nunca dejó de destacar
novedosa, la cuestión del acting-out. Cada vez que el analista, por sus que el deseo, tal como se desprende de_ las elaboraciones freudianas, no es
maniobras, produzca un cierre de este 'espacio vital' entre ambas cade- una relación de ser a objeto sino una relación de ser a falta (cf. Seminario
nas, producirá consecuentemente una expulsión del sujeto por fuera de 2, "El deseo, la vida y la muerte"). El grafo, con su estructura fundamental,
la experiencia, un 'por fuera' en el que el sujeto intentará recuperar su está destinado a destacar y a demostrar la imposibilidad de descuidarlo
lugar como deseante. en nuestras consideraciones. Dada su estructura, podemos afirmar que es
Así como localizamos en el intervalo, en el agujero, al sujeto, lo propio imposible reducirlo por deformación continua a un punto.
haremos con el objeto. No el objeto hacia el cual se tiende, sino el objeto Esta última conclusión la opondremos a la estructura de la célula ele-
causa del deseo. Causa del deseo del hombre que, como siempre, es deseo mental del grafo.
del deseo del Otro, que, con la expresión de un "¿Qué me quiere?", Lacan No es nueva la consideración del sujeto vía su estructura intervalar. No
inscribe como la razón que obliga al pasaje de su grafo 2 al grafo 3, pasaje es nueva en Lacan ni en este escrito. Cuando comentamos la definición que
que requiere de la salida del circuito imaginario (que más adelante comen- Lacan hace del sujeto (S) en el esquema "Z" al definirlo como "parte intere-
tamos) y de la entrada del intervalo que el segundo piso del grafo implica.
1
sada en ese discurso (del Otro)" sostuvimos que "interesado" deriva de: inter
Analicemos ese grafo 3: sum, que en latín significa "estar entre", en medio de, en el intervalo de; o
sea, el sujeto ya fue concebido "en el intervalo" pero en el intervalo entre
los significantes; aquí lo es en el intervalo entre las cadenas significantes.
El que el sujeto del deseo implicase la noción de intervalo ya estaba
presente en las elaboraciones freudianas, pero, como en tantísimas otras
ocasiones, sólo Lacan las retomó. En el Cap. VII de La interpretación de
los sueños, "La psicología del proceso onírico" , en el punto C, "Acerca del
cumplimiento de deseo'', Freud dice así: "¿Por qué durante el sueño lo
inconciente no puede ofrecer nada más que la fuerza pulsionante para un
cumplimiento de deseo? La respuesta a esta pregunta está destinada a
arrojar luz sobre la naturaleza psíquica del desear; debe procurársela con
el auxilio del esquema del aparato psíquico." 9
El esquema al que se está refiriendo Freud es el que presenta varias
páginas antes en este libro sobre los sueños, el conocido "esquema del
peine", cuya representación es la siguiente:

Grafo 3 P Mn Mn' Mn" M

l(A)

FIGURA 86
$ / \
Este "¿Qué me quiere?" es la reelaboración de la pregunta "¿Qué soy 'FIGURA 87
ahí?" que trabajamos en el capítulo sobre el esquema "R", pero ahora
articulada a la función "deseo del Otro". 9. ObrHR co n1p lut.1H1 , llib lioloca N u ev a, Tomo I, pág. 558; Amorrortu, Tomo V, pág. 557.
El grafo del deseo es el grafo del deseo porque su estructu ra topológica
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128
ALFREDO EIDELSZTEIN J MODELOS, ESQUI>MAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

Retomemos la cita de Freud: "Supuestos que han de fundamentarse misma, vale decir, en verdad, restablecer la situación de la satisfacción
11
de alguna otra manera nos dicen que el aparato obedeció primero al afán primera. Una moción de esa índole es lo que llamamos deseo [ ... ]."
de mantenerse en lo posible exento de estímulos, y por eso en su primera Es evidente que Freud localiza el deseo en el intervalo de las huellas
construcción adoptó el esquema del aparato reflejo que le permitía des- mnémicas y que el esquema de sus concepciones coincide en su estructura
cargar enseguida, por vías motrices, una excitación sensible que le llegaba con la parte izquierda de la fórmula de la metonimia tal como aparece en
desde afuera. Pero el apremio de la vida perturba esta simple función: "Instancia de la letra .. .", a la cual Lacan también articula el deseo porque
a él debe el aparato también el envión para su constitución ulterior. El es en ella donde localiza la "falta en ser en la relación de objeto".
apremio de la vida lo asedia primero en la forma de las grandes necesida-
des corporales. La excitación impuesta {setzen}por la necesidad interior
buscará un drenaje en la motilidad que puede designarse 'alteración Huella
interna' o 'expresión emocional'. El niño hambriento llorará o pataleará Huella
mnémica mnémica'
inerme. Pero la situación se mantendrá inmutable, pues la excitación que

L
parte de la necesidad interna no corresponde a una fuerza que golpea de
manera momentánea, sino a una que actúa continuadamente. Sólo puede ,
sobrevenir un cambio cuando, por algún camino (en el caso del niño, por deseo
el cuidado ajeno), se hace la experiencia de la vivencia de satisfacción que
cancela el estímulo interno. Un componente esencial de esta vivencia es la
aparición de una cierta percepción (la nutrición, en nuestro ejemplo) cuya FIGURA 89
imagen mnémica queda, de ahí en adelante, asociada a la huella que dejó
en la memoria la excitación producida por la necesidad."'º Una concepción de lo inconsciente entendida como una cadena sig-
En el esquema de referencia de Freud esto equivale a: nificante, tal como se desprende del esquema freudiano y de la fórmula
lacaniana de "Instancia de la letra ... ", trae aparejadas contradicciones.
Podemos recordar los inconvenientes que le implicó a Freud el problema
de la orientación espacial del esquema en una sola línea, que lo obligó a
Huella Huella producir complicados agregados para dar cuenta de la "regresión" en el
mnémica mnémíca' sueño; en Lacan veremos que la noción de intervalo, el espacio entre dos

I~
vallas o marcas simbólicas, no puede ser equivalente a la noción de agu-

/1Excitación Percepción
jero y, por otra parte, hay variadas indicaciones de Lacan que prefiguran
la necesidad de pasar de una cadena significante al grafo de al menos dos
cadenas, entre las cuales he elegido la siguiente: "De modo que el sujeto se
halla siempre en varios planos, apresado en redes que se entrecruzan."
Pensemos el intervalo como si fuese un eslabón faltante en la cadena,
más que en el espacio entre los eslabones. Un eslabón faltante produce el
12

(necesidad) (nutrición) corte de la cadena, su interrupción, pero no alcanza a constituirse en un


agujero, sólo lo sería en un encadenamiento de varias cadenas, de la índole
FIGURA 88 del siguiente esquema:

"La próxima vez que esta última sobrevenga, merced al enlace así esta-
blecido se suscitará una moción psíquica que querrá investir de nuevo la
imagen mnémica de aquella percepción y producir otra vez la percepción
11. Ibíd. Tomo I , pág. 558; Tomo V, págs. 557-558 .
12. El Sem inario, libro 2, El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica, Paidós,
10. Ibíd. plíg. 28!) .

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ALFREDO E!DELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

Justamente, esto constituye una parte del grafo del deseo, en la cual
Lacan localiza el síntoma como formación del inconsciente, de estructura
metafórica (s(A)) (estructura sobre la que hicimos un extenso análisis en
el capítulo sobre el esquema "R"):

~
1 - - - - -....

FIGURA 90
En realidad conviene concebir el inconsciente como una serie de cade-

---~ ..
nas articuladas entre sí. Recordemos la siguiente cita de "Instancia de la,
letra ... ": "Pero basta con escuchar la poesía,[ ... ] para que se haga escuchar
en ella una polifonía y para que todo discurso muestre alinearse sobre los
varios pentagramas de una partitura.
"Ninguna cadena significante, en efecto, que no sostenga como pendien-
do de la puntuación de cada una de sus unidades todo lo que se articula de
r
FIGURA 92

contextos atestiguados, en la vertical, si así puede decirse de ese punto. " 13


Si la estructura del inconsciente y del deseo, tal como los revela la expe-
Por otra parte, también se hace necesario criticar la noción de incons-
r ien cia a nalítica, requier e de al menos dos cadenas, se debe concluir que el
ciente entendido como una cadena significante, ya que, si esa fuese su
grafo con su lógica debe considerarse que opera siempre "completo", en el
estructura, ¿cómo podríamos entender entonces la metáfora? La metáfora
sentido de "grafo completo" y que los grafos 1, 2 y 3 son recursos didácticos
es la sustitución de un significante (el sustituido) por otro (el sustituyente)
utilizados por Lacan. Es por esta razón que el vértice inferior derecho, por
que viene al lugar que el anterior tenía en la cadena significante. Pero ¿de
el cual el vector de la intención comienza, lleva por nombre S, barradura
dónde venía el sustituyente? No hay otra respuesta lógica que, de otra
del sujeto, que, como efecto del lenguaje, está al comienzo de cualquier
cadena significante. Algo que puede ser representado así: '
consideración sobre él. El círculo de la demanda, que más adelante ana-
lizaremos, rompe su circuito porque "[ ... ] el sujeto no se constituye sino
sustrayéndose a ella y descompletándola esencialmente [ ... ]".14
¿cómo concebir la estructura de al menos dos cadenas significantes que
son siempre necesarias para operar con la noción de lo inconsciente, sin
recurrir a ejemplos de caso por caso? Lacan hace uso, para este fin, de las
nociones lingüísticas de código, mensaje, enunciado, enunciación y shifter,
~ que le van a brindar una renovada forma de pensar al sujeto tal como debe
serlo a partir del inconsciente estructurado como lenguaje. Tales nociones
las elabora Roman J akobson en sus conferencias: "Overlapping of code
and message in language" de 1950 y en "Les catégories verbales" del mis-
mo año, que forman parte del escrito "Shifters, verbal categories and the
Russian verb'', redactado en 1956 y publicado en 1957. En el mismo año,
FIGURA 91
Lacan ya hace uso de las nociones allí aparecidas.

14. "Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano", Escritos 2, Siglo
13. Escritos 2, ob. cit., págs. 470-471, el subrayado es mío. XXI, pág. 786.

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J\i.FIUWO EIDELSZ'l'EIN / MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

En el escrito referido, Jakobson distingue las nociones de mensaje y de de entrecruzamiento, que por convención derivada de la estructura de la
código, siendo esta última subyacente de la anterior. Ambas tienen una cadena significante, tanto en castellano como en francés, será el de la de-
doble función:"[ ... ] a la vez que pueden ser utilizados pueden ser referidos recha, como último término tiene la virtud de determinar a los anteriores
(i.e. señaladas)." 15 Sobre la base de estas nociones Lacan produce la célula así como fue anticipado y determinado por éstos en la cadena. Esto suele
elemental del grafo, que es representada en el grafo 1 de su escrito "Sub- entenderse como obvio, pero presenta algunos problemas.
versión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano":

~
____... s1
._ s2 --....
s S'
t +
FIGURA 94

Si aceptamos que la representación de la retroacción, tal como se deriva


del grafo 1, es el esquema anterior, se inaugura un circuito en el cual si el
último término puede dar sentido al primero, también debe ser considerado
que este primero determina al último, o sea, que a través del primero, el
último se modifica a sí mismo. Entonces:
$ ¿',

Grafo 1
FIGURA 93
~
__..s1 _ ___.... s..,----....
A este grafo lo concibe así: "He aquí lo que podría decirse que es su célula
elemental (cf. grafo 1). Se articula allí lo que hemos llamado el punto de t-
basta por el cual el significante detiene el deslizamiento, indefinido si no, FIGURA 95
de la significación. Se supone que la cadena significante está soportada por
~

el vector S.S'. Sin entrar siquiera en la fineza de la dirección retrógrada Esto hace de los puntos de entrecruzamiento el siguiente circuito ce-
en que se produce su cruzamiento redoblado por el vector t..S, véase úni- rrado o lazo de aristas:
camente en este último el pez que engancha, menos propio para figurar lo
que hurta a la captación en su nado vivo que la intención que se esfuerza
en ahogarlo en la onda del pre-texto, a saber la realidad que se imagina
en el esquema etológico del retorno de la necesidad.
~
o o
"La función diacrónica de este punto de basta debe encontrarse en la
frase, en la medida en que no cierra su significación sino con su último FIGURA 96
término, ya que cada término está anticipado en la construcción de los
otros, e inversamente sella su sentid~or su efecto retroactivo. " 16 A partir Esta representación nos da la clara idea de que la función del punt~ de
de esta cita obtenemos que el vector S.S' representa la cadena significante basta, como de cierre o detención, debe ser complejizada. A su vez hay otro
y que el vector t.--:S, la intención. Es de gran utilidad para la concepción problema en el grafo 1 o célula elemental y es el siguiente: si es un grafo
de la noción freudiana de Nachtraglich o retroacción. El segundo punto y evidentemente los "puntos de entrecruzamiento" son equivalentes a lo
que en teoría de grafos se llama vértices, entonces, ¿hacia dónde van y de
15. Roman J a kobson, Ensayos de lingüística general, Seix Barral, pág. 307.
1.6. "Subver sión del sujeto ... ", ob. cit., pág. 785. dónde vi enen las aristas que de ellos salen y que a ellos llegan? El mismo

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ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

problema que planteamos respecto de la estructura general del grafo del destaquemos la estructura topológica del circulo, para poder así dar
deseo. Propongo la siguiente solución, totalmente justificada en la obra todo su alcance a la estructura del grafo del deseo.
de Lacan.

~ Volvemos a la célula elemental tal como la representamos antes:

o FIGURA 97
o o ~
o
Sostengo que está justificada porque: FIGURA 98

1) El que Lacan la llame célula elemental del grafo es habitualmente Es un grafo 'planar, orientado (dígrafo), con dos vértices, cuatro aristas y
entendido en el sentido de que es la 'unidad fundamental' del grafo dos lazos. Como los lazos son aristas que parten y llegan al mismo vértice,
del deseo completo y que, efectivamente, es una acepción de célula; podríamos decir que no requieren tiempo para su trayectoria (no requiere
respecto de esto no se debe olvidar que 'célula' también significa ningún tiempo el recorrido que sale de un punto para llegar a él mismo)
que 'comporta una membrana que aísla el citoplasma y su núcleo' y si no tienen un agujero al que entornan, pueden ser reducidos al mismo
en biología o, tal como se usa para célula de memoria, 'elemento vértice, de esta forma:
repetitivo que tiene un funcionamiento propio'. Efectivamente, se
desprende que si a esta célula no se le asocia otra función, nada indica
qué detendría su repetición infinita o cómo lo haría.
~
~ ·~
2) En el escrito en francés, donde en castellano dice: "La función dia-
crónica de este punto de basta debe encontrarse en la frase, en la .
medida que no cierra su significación[ .. . ]" en lugar de "cierra", que
también indica lo que sostengo, dice boucle que en francés tiene, entre FIGURA 99
otras, la siguiente significación: 'Se dice de los objetos en forma de
anillo', o más específicamente: 'Lo que se enrula en forma de anillo, Finalmente, nos quedan dos vértices y dos aristas que nos permiten
línea curva que se recorta o se vuelve a cortar' . establecer sin dudas que se trata de un círculo. Círculo, que para indicar
3) Más adelante, en el mismo escrito, Lacan afirma: "La sumisión del su condición de 'sin salida', Lacan metaforiza como "círculo infernal de
sujeto al significante, que se produce en el circuito que va de s(A) a la demanda", haciendo referencia a los círculos del infierno de la Divina
A para regresar de A a s(A), es propiamente un círculo en la medida Comedia de Dante Alighieri: "[ ... ] allí son los gritos, los llantos y los la-
en que el aserto que se instaura en él, a falta de cerrarse sobre nada mentos, y las blasfemias [ ... ] ", 18 a pesar de los cuales los condenados no
sino su propia escansión, dicho de otra manera a falta de un acto en hallan salida alguna a sus tormentos.
que encontrase su certidumbre, no remite sino a su propia anticipa- 4) El que Lacan lo denomine punto de basta o punto de almohadillado,
ción en la composición del significante, en sí misma insignificante." 17 además de hacer referencia a la función del punto, como signo de puntua-
Lacan sostiene en esta cita que, a falta de un acto, la estructura de ción, también remite al problema del círculo, dado que el punto de basta
la célula determina que ella sólo puede arribar a su propia anticipa- es aquel nudo de colchonero que se caracteriza por la circularidad que se
ción y así volver a girar en círculo. Pero es importante, además, que establece entre todos los puntos o botones del mismo.
5) Por último, recordemos que la noción utilizada por el mismo Roman

17. lbíd., pág. 786, el subrayado es mío. 18. Danto Alif{hiori, l.11 divin fl comedia, Porrúa, pág. 12.

136 1:17
ALFREDO EIDELSZTEIN J MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAJ<'O DEL DESEO

Jakobson, overlapping, indica cómo las nociones de código y mensaje pue- allá de cada cadena significante particular lo podremos hallar, no es arti-
den ser utilizadas y, a su vez, referidas una por la otra, estableciéndose así culable, no puede entrar en sí mismo en ninguna cadena, es el más allá de
la autorreferencia y la circularidad. cada una de ellas. Es por esto que Lacan designa la demanda con la letra
Pero, ¿de qué círculo se trata? y, ¿qué hace salir al sujeto del mismo? "D" mayúscula y el deseo con "d" minúscula, que puede sorprender, dado
En el capítulo sobre el esquema "R" sostuvimos que ese esquema, como que las letras mayúsculas son destinadas para designar lo simbólico; esto
el grafo del deseo, fueron concebidos y desarrollados por Lacan en la misma coincide, obviamente, con la condición simbólica de la Demanda, pero ¿y
época y hasta se podría decir que en las mismas clases del Seminario 5, Las el deseo? Este lleva "d" minúscula, dado que es lo que no puede pasar a
formaciones del inconsciente, del año lectivo 1957-1958. Si retomamos la lo simbólico, es el margen, el más allá que éste produce pero que es impo-
forma en que diferenciamos los destinos de cada uno de ellos, tal como lo sible que reincorpore en su seno. Es el resto ineliminable del pasaje de la
propusimos en aquel capítulo, podremos hallar alguna respuesta a las dos necesidad por los desfiladeros del significante.
preguntas antes sugeridas. El esquema "R" es la teorización de la función El que la célula elemental sea un círculo debe ser ahora aprovechado
paterna en la articulación, en el anudamiento peculiar de lo simbólico, para evitar el eterno retorno de la concepción que dice que primero estaba
lo imaginario y lo real, que es la neurosis. El grafo del deseo responde al la necesidad y luego vino el verbo, concepción que, erróneamente, suele
requerimiento de teorizar las consecuencias de la introducción al psicoa" asociarse con la noción freudiana deAnhlenung , apuntalamiento. El plan-
nálisis de la noción de cadena significante, que fundamentalmente es la tear que la necesidad pasa por los desfiladeros del significante no es más
distinción entre necesidad, demanda y deseo. que una licencia de exposición, dado que no hay tal necesidad operando
La estructura del grafo del deseo, respecto de la articulación recíproca antes del significante para ningún sujeto humano y el círculo de la demanda
de las nociones de necesidad, demanda y deseo, es la siguiente: evita tal error en forma categórica. Al esquema anterior hay que oponerle
el de la célula elemental del grafo.

deseo

ef=.iJ FIGURA 101


Necesidad

FIGURA 100 Más que puro margen, Lacan va a localizar al deseo en el intervalo entre
dos cadenas significantes, a las que ya hicimos referencia y que responden
Conviene aquí tener presente, para justificar el esquema que precede, a la oposición entre "enunciado" y "enunciación" o, mejor dicho, a la opo-
la siguiente cita de Lacan: "El deseo se esboza en el margen donde la de- sición entre los sujetos respectivos de cada uno de ellos.
manda se desgarra de la necesidad [ ... ]", 19 y si articulamos estas nociones
con el esquema anterior, podemos decir que es el deseo inconsciente lo que
permite al sujeto salir del círculo infernal de la demanda. Este margen debe
ser entendido, y el esquema lo facilita, como un "más allá" que Lacan en
"La significación del falo" explicita así: "Lo que se encuentra así enajenado
(alienado) en las necesidades constituye una Urverdriingung por no poder,
por hipótesis, articularse en la demanda pero que aparece en un retoño, que
es lo que se presenta en el hombre como el deseo (das Begehren)." 2º
~ J deseo
El deseo, si bien está articulado, en el sentido de que sólo en el más

19. "Subversión del sujeto ... ", ob. cit., pág. 793.
20. Escritos 2, Siglo XXI, pág. 670.
FIGURA 102

138 139
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

El enunciado es, según Jakobson, "el hecho relatado" y la enunciación, claro, como para el paciente de Freud, que aunque se agregue un 'yo no',
"el hecho discursivo". El enunciado es entonces un conjunto de frases y la es posible que se desee igual. Si el rey suele ocupar el lugar del tonto, el
enunciación, el acto por el que se las enuncia actualmente. sistema legal no.
"El inconsciente, a partir de Freud, es una cadena de significantes que Seguiremos ahora con el estudio del grafo del deseo en su estructura
en algún sitio (en otro escenario, escribe él) se repite e insiste para inter- general. No lo haremos siguiendo la estructura de los cuatro grafos pre-
ferir en los cortes que le ofrece el discurso efectivo y la cogitación que él sentados por Lacan. Es común ver que se los ha interpretado como algo
informa. " 21 En esta cita de Lacan de "Subversión del sujeto ... " vemos cómo equivalente al "desarrollo". Es necesario concebirlo a partir de la noción
él distingue entre dos cadenas significantes, una la del discurso efectivo, de que la estructura no es evolucionista, sino que está, toda ella, de entra-
la otra del inconsciente. Pero lo importante es preguntarse quién es el su- da, si bien es cierto que no con la misma incidencia sobre el sujeto; esto
jeto de eso que se repite e insiste. Para abordar ese problema, Lacan hace último despeja, al menos un poco, las cuestiones referidas a los niños y
uso de la noción lingüística de shifier, o sea la partícula"[ ... ] que designa su psicoanálisis.
al sujeto de la enunciación (en el enunciado), pero que no lo significa." 22 El grafo del deseo consta fundamentalmente de cuatro puntos de entre-
Lacan elabora aquí la función de la partículaje, pronombre personal de la cruzamiento, o sea, cuatro vértices, y los lados, aristas, que lo relacionan.
primera persona del singular, que respecto de la pregunta: "lQuién habla? Tiene además indicadas las aristas intermedias a estos dos pisos. Es un
cuando se trata del sujeto del inconsciente", 23 siempre encontramos como grafo conexo, ya que desde cualquier vértice podemos llegar por vía con-
respuesta un: no yo, o sea el f'ading, la desaparición, la elisión del sujeto tinua a cualquier otro.
en lo inconsciente. Lacan nos indica que la posición de los dos puntos de entrecruzamiento
Dada la existencia en francés de las partículas moi y je, y siendo el moi del piso superior es "homóloga" a la de los dos del piso inferior. La noción
destinado por Lacan para la localización imaginaria, se produjo en muchos de homología fue ampliamente desarrollada en el capítulo sobre el esquema
lectores la suposición de que entonces el je indicaba al sujeto del inconsciente. "R". Allí se dijo que homología es una relación de equivalencia cualitativa
Ya hemos discutido esta idea en el capítulo sobre el esquema "Z"; amplia- entre elementos que se corresponden en las figuras relacionadas, que deja
remos aún más el concepto. Lacan sostiene que el sujeto del inconsciente de lado toda comparación analógica que implique proporción, semejanza,
debe ser localizado, lo será en la discordancia entre el sujeto del enunciado etcétera.
y el sujeto de la enunciación, el sujeto dividido "entre-dos-sujetos", 24 lo que
nos recuerda "la escisión del yo" tal como la plantea Freud.
Recordemos lo que Freud toma co'mo ejemplo del "crimen de lesa ma-
jestad". El nos relata así lo que le dice al "Hombre de las ratas", en cuanto
a la idea de la muerte de su padre, respecto de la cual"[ ... ] se defiende de
la posibilidad de haber exteriorizado con ello un 'deseo'. Es que fue sólo
una 'conexión de pensamiento'. -Yo le objeto: Si no era un deseo, lpor
qué la revuelta? -Bueno, sólo por el contenido de la representación: que
mi padre pueda morir. -Yo: Trata a ese texto como a uno de lesa majes-
tad; según es sabido, se castiga igual que alguien diga 'El emperador es
un asno' o que disfrace así esas palabras prohibidas: 'Si alguien dice ... ,
tendrá que habérselas conmigo'." 25 En esta interesante intervención de
Freud, queda claro que el sistema legal castiga al sujeto de la enunciación
aunque el crimen lo cometa el sujeto del enunciado. Es porque queda

21. "Subversión del sujeto ... ", ob. cit., pág. 779. FIGURA 103
22. lbíd.
23. lbíd., pág. 780.
A los cuatro vértices los denomina, en relación con su posición homo-
24. Ibíd.
25. "A propósito de un caso de neurosis obsesiva", Obras completas, Biblioteca Nueva, Tomo lógica, código y mensaje, tal como Jakobson, en el trabajo ya citado, con-
11, pág. 725; Amorrortu, Tomo X, pág. 142. sidera los "vehículos de comunicación lingüística"; pero Lacan efectuará
1'10 111
ALFREDO EIDELSZTEIN \ MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS E N LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

salvedades a las nociones que tomará del lingüista citado. Coloquemos "Observemos la disimetría del uno (A) que es un lugar (sitio más bien
código (C) y mensaje (M) en los dos pisos del grafo: que espacio) con respecto al otro (s(A)), que es un momento (escansión más
bien que duración). " 28 Esta cita, aclaratoria de la estructura de cada uno
de estos puntos de entrecruzamiento ya fue presentada. Que s(A) tenga
estructura de tiempo fue articulado con la noción de punto de basta, es
un tiempo de corte en la diacronía, o sea un tiempo en el cual no cumple
ninguna función la duración del mismo. (A) como lugar fue articulado con
la noción de tesoro del significante, ya sea como lugar ya sea como espacio,
que como dijimos respecto del tiempo, hace caso omiso de la extensión y sólo
contempla las nociones de continuidad, discontinuidad, corte y frontera.
Tiempo y espacio son considerados, entonces, topológicamente.
Aprovechando este desarrollo alcanzado, podemos hacer con Lacan una
articulación de estas nociones con las estructuras clínicas, en este caso
la psicosis. Si en la neurosis el emisor recibe su propio mensaje en forma
invertida desde el Otro, o sea, se produce la ilusión de que el mensaje es
del emisor hacia el Otro, en la psicosis se revela que el mensaje es del
Otro. El psicótico recibe el mensaje desde el Otro, como por ejemplo en
FIGURA 104 el caso de las voces alucinatorias, fenómeno en el cual el Otro le habla al
sujeto, que indica que este último no ha podido recubrir esta dimensión
Veamos las diferencias que Lacan propone para que sean útiles y no de la estructura haciendo suyo el mensaje. Lacan nos dice, articulando el
contradictorios en psicoanálisis. Al código (C), lo connotará (A): "[ .. . ] es grafo a las estructuras clínicas, respecto de la célula elemental: "Mensajes
el lugar del tesoro del significante, lo cual no quier e decir código, pues no de código y códigos de mensaje se distinguirán en formas puras en sujeto
es que se conserve en él la correspondencia unívoca de un signo con algo, de la psicosis, el que se basta por ese Otro previo. " 29 Si la cadena superior
sino que el significante no se constituye sino de una reunión sincrónica y implica lo inconsciente, en la psicosis no podemos sostener un sujeto del
numerable donde ninguno se sostiene sino por el principio de su oposición inconsciente, si bien tenemos un sujeto determinado por el Otro, un sujeto
a cada uno de los otros." 26 Respecto del mensaje, nos dice: "El otro, con- de la palabra. Corresponde, entonces, articular la psicosis con la célula
notado s(A), es lo que puede llamarse la puntuación donde la significación elemental del grafo. ·
se constituye como producto terminado ." 27
En ambos casos conviene destacar las diferencias que introduce Lacan Es necesario ahora responder a la siguiente pregunta ¿en qué son
en aquello que importa de la lingüística. La diferencia entre código y homológicos los dos puntos de entrecruzamiento de la cadena superior
tesoro del significante la podemos derivar de los sentidos que el término de los que acabamos de comentar? Antes de contestarla debemos hacer
'tesoro' posee. Por un lado, indica la reunión de cosas preciosas, de valor, algunas puntuaciones previas, para que esta pregunta adquiera todo su
acumuladas para ser conservadas y que, por más grande que sea, nunca alcance. Primero: debemos recordar que la cadena superior era "la otr11"
indica totalidad. El tesoro más grande que uno pueda imaginar no implica cadena que debe ser tenida en cuenta para responder a la estructura
la totalidad de esos elementos. Por otro lado, el tesoro es también el lugar del deseo y del inconsciente; segundo: los puntos de entrecruzamiento,
donde esos elementos son conservados juntos. En cuanto al mensaje, la dife- como los vértices del grafo, son denominados por Lacan como nociones
rencia fundamental es que Lacan lo connota como "del Otro", significación psicoanalíticas. Indiquemos en el grafo cuáles son y así podremos arti-
del Otro o "s(A)'', modificación de la teoría de la comunicación humana, cular esas nociones a la forma en que resulten concebidos "código" y
ya comentada en este libro, que responde a la concepción que dice que el "mensaje" inconscientes.
emisor recibe su propio mensaje en forma invertida desde el Otro.

26. "Subversión del sujeto ...", ob. cit., pág. 785. 28. lbíd., págs. 785-786 .
27. Ibíd. 29. fbfd ., pl'ig. 786, el subrayado es núo.

1t12 1tl :1
EL GRAFO DEL DESEO
ALFREDO EIDEI.'3ZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

Los artificios gramaticales son los únicos que nos permiten comprender
el ida y vuelta implicado por circuito pulsional, que se apoya en un "hacer"
y "hacerse", según la estructura de cada pulsión: chupar, cagar, mirar y
oír. Recordemos en el texto freudiano esta dialéctica en el "pegar" y el "ser
pegado" de "Pegan a un niño". Doblemente podemos articular esto último
a la pulsión. Por un lado, lo que se dijo sobre los artificios gramaticales y,
Fantasma
por otro lado, no olvidemos que la fórmula de la pulsión (S <> D), inscribe
como uno de sus términos la demanda, respecto de la cual debemos re-
cordar: "[ .. .] la inversión propia de la estructura de la demanda[ ... ] uno
recibe su propia demanda en forma invertida." 31
Localizar en el punto de entrecruzamiento superior derecho la pulsión,
permite retomar el punto desde donde se partió, la oposición y articulación
de necesidad, demanda y deseo. Al esquema efectuado para introducir la
lógica de la relación de estos tres términos (cf. esquema 100), el grafo del
deseo permite oponerle este otro, que se adecua a lo que impone la expe-
Imagen del otro
riencia psicoanalítica:

Ideal $
FIGURA 105

Veamos cómo operan entonces "tesoro del significante", (A), y "punto


Necesidad
de cierre de la significación de la cadena significante", s(A), en el incons-
ciente, y, consecuentemente, cómo se articulan tiempo y espacio para el
sujeto del inconsciente. FIGURA 106
"Pero si nuestra gráfica completa nos permite situar la pulsión como teso-
ro de los significantes, su notación (S O D) mantiene su estructura ligándola En el inconsciente, el sujeto no puede ser localizado en el nivel del
a la diacronía. Es lo que adviene de la demanda cuando el sujeto se desvanece enunciado, tal como lo elaboramos en relación con la noción de shifter;
en ella. Que la demanda desaparece también, es cosa que se sobreentiende, pulsión es "donde se le designa por una ubicación orgánica: oral, anal,
con la salvedad de que queda el corte, pues éste permanece presente en lo etc." ,32 según el efecto particular de la demanda (D), pero sin olvidar que
que distingue a la pulsión de la función orgánica que habita: a saber su ar- también allí "el sujeto se desvanece" .33
tificio gramatical, tan manifiesto en las reversiones de su articulación con la Lo orgánico, así comprometido, tiene estructura de corte, tal como la
fuente tanto como con el objeto (Freud en este punto es inagotable)." 30 Esta noción freudiana de zona erógena indica, caso contrario, por ejemplo, para
cita confirma que Lacan ubica en el punto de entrecruzamiento superior la pulsión oral se debería establecer el estómago como la zona corporal
derecho a la pulsión y que, consecuentemente, articula la pulsión a la fun- correspondiente y no los bordes labiales o dentales.
ción del tesoro de los significantes; pero aquí más que los significantes son La función del corte también permite establecer la estructura del objeto
los artificios gramaticales los que están en juego. Si no son los significantes, de la pulsión, cuya lista bien indica su condición de parcial: pecho, heces,
sino la gramática lo que la pulsión toma del A, entonces inscribe lo que del
31. Le Séminaire, livre VIII, Le transfert, ob. cit., pág. 238. traducción personal.
lenguaje es mudo, que constituye así "el silencio pulsional".
32. "Subversión del sujeto ... ", ob. cit., pág. 796.
30. lbid., págs. 796-797. 33. Tbíd .
145
1'14
ALFREDO EIDELSZTEIN j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

mirada y voz son parciales, debemos aclarar, sin por ello estar destinados "El grafo inscribe que el deseo se regula sobre el fantasma así establecido
a ser parte de ninguna totalidad, por más genital que se la quiera; son [ ... ]En relación con la cadena significante inconsciente como constitutiva
parciales que restan parciales por ser ésa su estructura misma. del sujeto que habla, el deseo se presenta como tal en una posición que
Respecto del objeto, Lacan nos indica, además: "Un rasgo común a esos sólo se puede concebir sobre la base de la metonimia determinada por la
objetos en nuestra elaboración: no tienen imagen especular, dicho de otra existencia de la cadena significante[ ... ] y que no es otra cosa que la posi-
manera, de alteridad." 34 y agrega una llamada al pie de página en la que bilidad de deslizamiento indefinido de los significantes bajo la continuidad
dice: "Cosa que justificamos más tarde por medio de un modelo topológico de la cadena significante.
tomado de la teoría de las superficies en el analysis situs (nota de 1962)."35 ''Ahora bien, es en la medida misma donde cierta cosa se presenta como
Que el objeto de la pulsión no tenga imagen especular fue anticipado en el revalorizando la suerte de deslizamiento infinito, el elemento disolutivo
capítulo sobre el modelo óptico, en cuanto a la no representación por parte que aporta por ella misma en el sujeto la fragmentación significante, que
de Lacan de la imagen i(a), sino tan sólo de la producida a partir de ella por toma valor un objeto privilegiado, que detiene este deslizamiento infinito.
el espejo plano, la que es designada i'(a). Su elaboración la continuamos en Un objeto puede tomar así en relación con el sujeto este valor esencial que
el capítulo sobre el esquema "R", el que, al ser articulado por Lacan como constituye el fantasma fundamental. " 37 El fantasma, o mejor dicho su ob-
plano proyectivo o cross-cap, también nos permitió desarrollar la noción de jeto, sostiene al sujeto en el desvanecimiento en que lo sume su estatuto de
especularidad en topología. Aquí Lacan avanza aún más ya que nos enseña sujeto del deseo. De esta cita de Lacan de su Seminario La transferencia,
que a no tiene imagen especular y que, consecuentemente, i(a), la imagen obtenemos, también, una referencia a la función del fantasma como límite,
especular, funciona como su vestimenta; esta imagen funciona como recubri- límite al deslizamiento metonímico, que sin él tendería al infinito (cf. la
miento de aquello que no tiene imagen en el espejo. "Es a ese objeto inasible articulación de los esquemas "R" e "I") .
en el espejo al que la imagen especular da su vestimenta. Presa capturada "Con esta estructura, el fantasma cumple una función respecto del
en las redes de la sombra, [ ... ]". 36 El objeto a no es especularizable aunque deseo homóloga a la que cumple la imagen del cuerpo [i(a)] respecto del
centra todo esfuerzo de especularización. yo (m), con la salvedad de que el grafo señala, además, una inversión de
desconocimientos en que se fundan respectivamente uno y otro." 38 Esto
Conviene intercalar aquí un comentario sobre la estructura y relación implica que en la vía imaginaria, campo del desconocimiento, estas dos re-
recíproca entre las líneas intermedias de las dos cadenas significantes. Al laciones se ocultan respectivamente sus propias estructuras en su relación
estudiar la homología de los puntos de entrecruzamiento de ambas cadena.e;. recíproca. Conviene no dejar de señalar que, al no tener el objeto a imagen
Lacan nos propone que la relación que mantienen entre sí el deseo, d, y especular, la inversión de la posición entre me i(a) tiene como función que
el fantasma (S <>a) es homóloga a la que mantienen la imagen especular, i(a) quede del lado del grafo donde a falta como imagen.
i(a), y el yo, m, pero implicando una inversión, representada en el grafo: Los objetos a faltan como imagen especular porque son agujeros, es
por eso que, por ejemplo, el objeto mirada es el más oculto en la visión, ya
que si algo no se ve en el campo escópico es el objeto a, donde no vemos
que no se ve.
Agujeros, entonces, organizados específicamente según la lógica de
cada pulsión, oral y anal, articuladas a la demanda, y escópica e invocante,
articuladas al deseo.
A su vez, al referirnos a m e i(a) conviene articularlos a lo que dijimos
(S <>a) - d sobre que el grafo del deseo se construye en derredor de un agujero. El
i(a) -yo proceso imaginario permite un recorrido sobre el grafo que oculta esta
función central del agujero y es por ese motivo que Lacan llama a ese
recorrido "cortocircuito": "Este proceso imaginario que de la imagen es-
FIGURA 107
pecular [i(a)] va a la constitución del yo por el camino de la subjetivación
34. Ibíd., pág. 798.
35. Ibíd., pie de pág. 798.
37. Le Senunaire, livre VIII, Le transfert, ob. cit., págs. 201-202, traducción personal.
36. Ibíd., pág. 798.
38. "81.1bvors i611 clol ¡;ujeto ... ", ob. cit., pág. 796.
146 147
-
EL GRAFO DEL DESEO
ALFREDO EIDELSZTEIN 1 MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN _µ. ENSEÑANZA DE LACAN

por el significante, está significado en nuestro grafo por el vector i(a).m será S(A), y se leerá: significante de una falta en el Otro, inherente a su
de sentido único, Rero articulado doblemente, una primera vez en corto- función misma de ser el tesoro del significante. Esto en la medida en que
circuito sobre SJ(A), una segunda vez en la vía de regreso sobre s(A) .A. al Otro se le pide (che vuoi) que responda del valor de ese tesoro, es decir
Lo cual demuestra que el yo sólo se acaba al articularse no como Yo (je) que responda sin duda desde su lugar en la cadena inferior, pero en los
del discurso, sino como metonimia de su significación [ ... ]". 39 Veamos la significantes constituyentes de la cadena superior, dicho de otra manera,
representación en su grafo: en términos de pulsión. " 4º
He aquí un interesante problema, la relación entre s(A) y S(A). lCómo
pueden homologarse si uno es significación y el otro significante? "En
cuanto a nosotros, partiremos de lo que articula la sigla S(A): ser en primer
lugar un significante." 41 "[S(A)], este significante será pues el significante
por el cual todos los otros significantes representan al sujeto: es decir que a
42
falta de este significante, todos los otros no representarían nada." Como
lo dice Lacan en la cita anterior a ésta, ambos son respuesta del valor del
tesoro del significante. Es decir, para que produzca la significación del Otro
(s(A)), todo significante hará referencia a éste. Lo que el grafo indica de
la siguiente manera:

I(A) .t
FIGU RA 108 11..->---d

Como el circuito imaginario se recorre sin pasar por la cadena supe-


rior, queda el yo atrapado en la deriva de las significaciones, s(A), ya que
su estructura hace que una significación sólo remita a otra significación.
Este circuito, como tal, reproduce el "círculo infernal de la demanda" tal
como lo describimos. FIGURA 109

La localización de la pulsión en el nivel de la cadena inconsciente será La cadena superior determina las significaciones producidas en la
retomada por Lacan en el Seminario 11, Los cuatro conceptos fundamen- inferior, pero el grafo indica claramente que no se articulan significacio-
tales del psicoanálisis, mediante otra vuelta de tuerca de la noción de corte. nes en la cadena superior. Así se concluye un proceso de vaciamiento del
Dirá que el inconsciente en su pulsación temporal, o sea, en su estructura inconsciente. Si ya dijimos que S O D, la pulsión, se articula a la deman-
de abertura y cierre, es superponible a la pulsión como corte. Es evidente da, no implica a los significantes, ahora, S(A), implica el vaCiamiento de
que lo que nos permite la articulación de inconsciente y pulsión es que significaciones del inconsciente.
ambos poseen una estructura que implica discontinuidad topológica. Para el caso de la neurosis, entonces, S(A) determina s(A) y, teniendo
Volviendo a nuestro análisis de los puntos de entrecruzamiento de esta última el estatuto de significación fálica, conviene articular aquí, como
la cadena superior, pasemos al "punto de cierre de la significación de la una función posible de S(A), el significante fálico <D. Como el piso superior
cadena significante" o sea, al punto homólogo a s(A) en la cadena supe- en la psicosis no opera, lo que ya fue dicho, deducimos la imposibilidad de
rior. "Lo que el grafo nos propone ahora se sitúa en el punto en que toda la significación fálica en la psicosis.
cadena significante se honra en cerrar el círculo de su significación. Si
hay que esperar semejante efecto de la enunciación inconsciente, aquí 40. lbíd., pág. 798.
41. lbíd. p ág. 799.
39. Ibíd. , pág. 789. 42. Tbícl .
149
148
ALFREDO EIDELSZTEIN i MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

Nos queda articular estos desarrollos con el complejo de castración. Del a. El deseo se regula sobre él, pero de una forma imaginarizada. "El fan-
lado del Otro tenemos que: S(A) es un significante muy peculiar, ya que: "Es tasma en su estructura definida por nosotros, contiene el (-<p), función
como tal impronunciable, pero no su operación [ ... ]" 43 y es "Simbolizable imaginaria de la castración bajo una forma oculta y reversible de uno de sus
por la inherencia de un (-1) al conjunto de los significantes. " 44 Esto es equi- términos al otro. Es decir[ ... ] imaginariza (si se nos permite este término)
50
valente a lo que en matemática representa ~, que, imposible de sustituirse alternativamente uno de esos términos en relación con el otro. " O sea,
por ninguna cifra, ya que todo el número elevado al cuadrado se positiviza, la función del fantasma, y por eso hay que atravesarlo en la dirección de
puede igualmente sostener esto último que se ha dicho de sí. Es como tal"[ ... ] la cura, es imaginarizar la falta estructural, ya sea la falta del sujeto o la
significante de la falta de ese símbolo[ ... ]",45 sin olvidar que esa falta es falta falta del objeto. En el fantasma (-<p) cae, ya sea del lado del S, ya sea del a.
en el Otro y por ello puede ser designada como: no hay Otro del Otro. Si el fantasma imaginariza la castración, entonces se sustituye a S(A). En
Además, como la otra cara del complejo de castración tenemos que: "[ ... ] la perversión se"[ ... ) instituye la dominancia, en el sitio privilegiado del
51
el goce está prohibido a quien habla como tal, o también que no puede de- goce, del objeto a del fantasma que sustituye al A." A su vez "El neuró-
cirse sino entre líneas para quienquiera que sea sujeto de la Ley, puesto que tico, en efecto, histérico, obsesivo o más radicalmente fóbico, es aquel que
52
la Ley se funda en esa prohibición misma. " 46 Es por esto que el significante identifica la falta del Otro con su demanda, <l) con D." Sustituye también
fálico <t> puede ser también el "significante del goce". Queda por decir que S(A) en su vertiente del significante fálico, por la demanda del otro. El
también el falo se articula a " [ .. . ] [la] función imaginaria de la castración neurótico, en lugar de desear el deseo del Otro, demanda la demanda del
[ ••. ]"
47
pero en este caso no como significante sino como (-<p) . Otro, lo que facilita que en su cura se oculte la angustia frente al deseo del
El lado izquierdo del grafo se puede designar como el lado de las res- Otro tras la frustración, inherente a la demanda y no al deseo.
puestas a S(A) (aunque no se debe olvidar que i(a) está del lado derecho,
pero es también una respuesta). En este lado tenemos I(A) , como última Para concluir, resta responder a la pregunta que formulamos más arriba:
respuesta. ¿Por qué es la última? ¿Por qué I(A) está en esta posición? ¿cómo deben unirse las aristas que parten de los cuatro vértices de entre-
I(A) está como último término del lado de las respuestas del grafo porque cruzamiento? Creemos que la respuesta correcta es la que proponen Rinty
así Lacan nos permite articularlo con la función del "rasgo unario" que, D' Angelo, Eduardo Carbajal y Alberto Marchilli en "Una introducción a
en el extremo del grafo, indica su función inaugural en la identificación Lacan". Es la respuesta que hace del grafo del deseo un grafo no planar.
del sujeto. Como último término, está en el mismo nivel que S pero, como
las funciones de I(A) y de S son contrarias, no las une ningún vector (cf.
Seminario 9, "La identificación", clases 2 y 3).
El Ideal simbólico ya no es "del Yo" como en Freud, sino que es del \
Otro, (A), y que como tal, hay que tomar como anulación de la castración 1

que S(A) inscribe; anulación indicada por el hecho de que pasamos de (A)
a (A), anulación de la castración simbólica por medio de un elemento sim-
bólico. "[ ... ]un significante como insignia de esa omnipotencia[ ... ]" 48 (cf.
I
lo elaborado en el capítulo sobre el esquema "R", especialmente lo dicho I
sobre el esquema "I"). ' . I I
' '' ' ..... / /
Finalmente tratemos el fantasma y su relación con el deseo. (S O a) . . . -·:. -::.. -=- - - :: :::: ::
~ /

....
/

simboliza el momento de un eclipse del sujeto, "[ ... ] por no ser indicable
sino en el fading de la enunciación." 49 en relación con el lugar del objeto FIGURA 110

43 . lbíd. Los cuatro términos que Lacan escribe sobre estas cuatro aristas lo
44. Ibíd.
45. lbíd., pág. 801.
indican así:
46. lbíd.
47. Ibíd., pág. 805. 50. lbíd., pág. 805.
48. lbíd., pág. 787 . 51. lbíd. , pág. 803.
49. lbíd., pág. 796. 52. Ibícl.
151
150
ALFREDO EIDELSZTE!N j MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN EL GRAFO DEL DESEO

Goce

Significante

~
FIGURA 111
FIGURA 113

Distingue en la cadena significante inferior, "significante" y "voz"; en


Lacan, en el Seminario 11, luego de elaborar la pseudo paradoja del "yo
la cadena superior, "goce" y "castración", que es lógico unir de esta forma:
miento" con las dos cadenas del grafo, nos propone entenderla así: "Esta
voz, en tanto objeto pulsional, con goce, y significante con castración, indi-
imagen nos permite figurar el deseo como lugar del empalme del campo
cando así que la pérdida de satisfacción que la pulsión en el ser hablante
implica, está directamente en conexión con el significante. de la demanda, donde se presentifican los síncopes del inconsciente, con la
realidad sexual." ,53 el mismo propósito que se manifiesta en su grafo.
La estructura que propongo como la resultante de la conexión de las
aristas pendientes es la del "ocho interior": A pesar de la puesta en continuidad de ambas cadenas bajo la estructura
del ocho interior; no se debe olvidar que entre ambas permanece el agujero;
agujero que, como tal, impide que ambas cadenas sean homotópicas, o sea,
que por deformación continua de una no se la puede superponer a la otra.
Ambas cadenas jamás harán un círculo.
Hay otras ventajas de concebir que las aristas pendientes del grafo del
deseo se unen en "ocho interior"; son las siguientes: a) la unión en ocho
interior resuelve el problema del comienzo y fin de cada cadena, al poner-

~
las en continuidad; caso contrario deberíamos responder cómo y cuándo
comienza y termina cada cadena y la clínica psicoanalítica contradice la
posibilidad de un comienzo y un fin para las cadenas; b) el que las cadenas
se unan en ocho interior resuelve el problema de la relación de los dos in-
tervalos, el intervalo entre los significantes y el intervalo entre las cadenas,
al ponerlos en continuidad; c) el ocho interior articula demanda y deseo,
ya que es en "ocho interior" como podemos articular las dos vueltas, de
FIGURA 112
estructura totalmente distinta, que se le pueden dar al toro. Lacan no sólo
las aprovecha para articular demanda y deseo, sino también para articular
Que "voz" y "goce" se pongan en conexión, al unir las aristas pendien-
deseo del sujeto y demanda del Otro.
tes mediante la estructura del ocho interior, permite articular en el grafo
del deseo la función del superyó. Sus propiedades de mandar a gozar y
prohibir el goce quedan implicadas, al unir el lugar del A y del S(A). Su
representación en el grafo sería la siguiente: 53. El Seminario, libro 11, Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis, Paidós, pág.
168.

152 153
Conclusiones

"Quisiera solamente sellar la suerte de inci-


tación que puede imponer nuestra topología
estructural."
JACQUES LACAN, "El atolondradicho ... ",pág. 58.

Se ha realizado, en este texto, un recorrido parcial en el seno de la obra


de Jacques Lacan. En el mismo se han presentado y analizado muchas de
las nociones psicoanalíticas que este autor introdujo o sacó del olvido en
que habían caído o, fundamentalmente, releyó desde la perspectiva de un
retorno al filo subversivo, en cuanto a la concepción del sujeto, del texto
freudiano.
También se analizaron los instrumentos que Lacan se dio y legó a los
psicoanalistas para profundizar, cada vez más, su condición y posición
psicoanalíticas, siempre en peligro de desaparecer.
Se intentó demostrar que estos instrumentos, aquí modelos, esquemas
y grafos, fueron concebidos por Lacan con el propósito de que la estructura
de los mismos se aproxime cada vez más a la estructura del sujeto con el
que labora el psicoanálisis.
Es un hecho irrefutable que Lacan sostuvo que todo paso que se realice
en la teoría psicoanalítica, más allá de su contenido, aleja al psicoanalista
de su verdadera función, si la estructura del paso y la posición en la que
queda quien lo enuncia, no aproxima a la estructura del sujeto.
Modelos, esquemas y grafos son producciones que, cada una de ellas,
demuestran este propósito de Lacan y que, además, el pasaje de unos a
otros lo confirma. Cada uno de ellos se aproxima cada vez más, en su es-

155
ALFREDO EIDELSZTEIN i MODELOS, ESQUEMAS Y GR/\FOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN

tructura y en la posición de enunciación en que queda quien lo enuncia,


al núcleo totalmente peculiar de la praxis analítica.
El recorrido realizado en este libro es parcial en varios sentidos. Fun-
damentalmente, lo es porque la posición de Lacan que acabamos de ex-
plicitar, y su elaboración consecuente, se extienden más allá del punto en Bibliografía
que culminan estas páginas. Queda por fuera el análisis de las superficies
topológicas en su utilización en psicoanálisis; otro tanto respecto de los
nudos. Se deben encontrar las causas que justifican el paso del grafo del
deseo a las superficies topológicas y de éstas a los nudos.
Finalmente, lo que queda por fuera de este libro es la respuesta a una
pregunta, que no se llegó a formular en él, respecto del uso que Lacan hace
de la topología: ¿en qué se distingue de la utilización que de ella hacen los
matemáticos?
La cita de "El atolondradicho ... " es una indicación, entre otras, que nos
Aleksandrov, A.D., Kolmogorov, A.N., Laurentiev M.A y otros, La matemática: su
dejó su autor, respecto de: 1) que la pregunta debe ser formulada: "nuestra
contenido, métodos y significado, Alianza Universitaria.
topología estructural" ¿en qué consiste?, y 2) su posible respuesta: "nuestra
topología estructural". Barr, Stephen, Expériences de topologie, Lysimaque.
A la clasificación de topologías que ya hemos comentado, ¿debemos ¡;tgre- Beskin, N.M., Representación de figuras espaciales, Mir.
gar la "topología estructural" que Lacan propuso para que el psicoanálisis
Chambadal, Lucien, Diccionario de matemáticas, Grijalbo.
siga consistiendo en una verdadera subversión del sujeto?
Dienes, Z.P y Golding, E.W, La geometría a través de las transformaciones, Tomo I:
Topología/ geometría proyectiva y afín, Tomo 2: Geometría euclidiana,
Tomo 3 : Grupos y coordenadas, Teide.
Enciclopaedia Britannica, artículos sobre: topología, homología, etc.
Faig, Carlos, El saber supuesto, Alfasi ed.
Faulkner, T. Ewan, Geometría proyectiva, Dossat.
Flemant, Claude, Teoría de los grafos y estructuras de grupo, Tecnos.
Frechet, M. y Ky Fan, Introducción a la topología combinatoria, Eudeba.
Gardner, Martín, Comunicación extraterrestre, Cátedra.
Granon-Lafont, Jeanne, La topologie ordinaire de J. Lacan, Point Hors Ligne.
Howart, Juan, Introducción a la topología general, OEA.
Kasner E. , y Newman J., Matemáticas & imaginación, Hyspamérica.
Kaufman, A., Puntos y flechas, teoría de los grafos, Marcombo.
Kelley, John, Topología general, Eudeba.
Lionnais, F. de, Las grandes corrientes del pensamiento matemático, Eudeba.
Listing, Johann, "Introduction a la topologie", Analytica 60, Navarin Editeur.
Marchilli, Alberto y otros, Una introducción a Lacan, Lugar editorial.

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ALFREDO EIDELSZTEIN i MODELOS, ESQUEMAS Y GRAFOS EN LA ENSEÑANZA DE LACAN
Miller, J.-A., "La topología en la enseñanza de Lacan" y "Suplemento topológico a
'De una cuestión preliminar'", Matemas I, Manantial.
Pantauso, Roberto, "La repetición", Lecturas de Lacan, Lugar editorial.
Poincaré, Henri, Últimos pensamientos, Espasa Calpe.
Porge, Erik y otros, Littoral 4; Abordajes topológicos, La torre abolida.
Shively, Levi S., Introducción a la geometría moderna, CECSA.
Souri, Pierre, Cadenas, nudos y superficies en la obra de Jacques Lacan, Xavier
Boveda ed.
Stewart, Ian, Conceptos de matemática moderna, Alianza Universitaria.
Toranzos, Fausto, Introducción a la teoría de los grafos, OEA.
Wilson, Robin J., Introducción a la teoría de grafos, Alianza Universidad.

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Esta obra se terminó de imprimir durante octubre de 2010
en los Talleres Gráficos "Planeta Offset", Saavedra 565,
Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Este libro desarrolla temáticas a menudo omitidas en la producción
de los .psicoanalistas lacanianos. Se encuentra entre las primeras
publicaciones sistemáticas y rigurosas sobre los modelos, e$quemas y
grafos elaborados por Jacques Lacan, intentando dar cuenta de la
lógica que justifica su uso en la clíajéa psicoanalítica.

Puede sorprender que un libro sobre psicoanálisis abunde en refe-


rencias de disciplinas que parecen ajenas, o al menos alejadas, del
quehacer del psicoanalista, como aritmética, geometría, topología y
teoría de grafos. Sin embargo, es innegable que cualquier práctica
que se pretenda con valor para ubicarse entre las ciencias modernas,
no debe descuidar la formalización del saber sobre la que se sostiene.
De lo contrario, se puede producir en ella un "efecto Babel": que ya
nadie sepa cómo se articulan los conceptos que se usan y por qué.
Son muchos los que verifican que cierta Babel ya se afincó en las
discusiones e intercambios entre los psicoanalistas discípulos del
maestro francés.

En esta obra se intenta favorecer un uso racional de los conceptos de


Lacan, mediante un análisis sistemático de las herramientas por él
introducidas y así evitar la confusión sin hacer uso del dogma ni de
las frases repetidas de memoria.

ALFREDO EIDELSZTEIN es psicoanalista, Doctor de la U.E.A. , miembro de Aper-


tura, Sociedad Psicoanalítica de Buenos Aires, La Plata y Salta. Es docente a cargo
de cursos de posgrado y doctorado desde hace más de 20 años en Argentina,
Brasil, Chile, Costa Rica, México y España. Además de la presente obra es autor de
los siguientes libros, todos publicados por esta casa editorial: Las estructuras
clínicas a partir de Lacan (obra en volúmenes), El grafo del deseo (obra traducida al
inglés y publicada en el Reino Unido), La pulsión respiratoria (Comp.), y La
topología en la clínica psicoanalítica".-

ISBN 978-950-649-302-8

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