Sunteți pe pagina 1din 19

RESPETABLE LOGIA SIMBÓLICA

“CHAKÁN – PUTUN” No. 24

ORIENTE DE CHAMPOTÓN CAMPECHE


ESTE BOLETÍN, ESTA DIRIGIDO A UD.
Y/O A QUIENES TIENEN APTITUDES,
CUALIDADES, ATRIBUTOS Y DESEOS
DE PERTENECER A LA MASONERÍA

2
QUIERE USTED PERTENECER A LA MASONERÍA

¿Quiere usted pertenecer a la Masonería?


¿Sabe usted lo que significa ser Masón?
¿Sabe usted qué es la institución que se conoce con el nombre de Masonería?
¿Es usted un hombre libre y de buenas costumbres?
¿Desea usted perfeccionarse, cultivarse y ser mejor?
¿Es usted un hombre de buenos principios morales?
¿Tiene usted cualidades y aptitudes evolutivas y de superación?
¿Practica usted la bondad, la filantropía, la solidaridad, la caridad y la justicia?
¿Es usted o desea ser buen hijo, buen padre, buen hermano, buen ciudadano, buen
patriota?
¿Desea usted el bien de su municipio, de su estado, de su patria?
¿Desea usted superarse y tener éxito en la vida?
¿Tiene usted sentimientos humanitarios?
¿Tiene usted un trabajo o profesión que le permite desarrollarse honestamente?

Si las respuestas a estas interrogantes es “SI”, lo felicitamos y sin duda alguna le


debe interesar el contenido de este boletín, le suplicamos leerlo con detenimiento,
estudiarlo, analizarlo, compararlo con otras organizaciones y si al final desea usted
pertenecer a la Institución Masónica, adelante, las puertas de la Masonería están
abiertas a quienes como usted anhelan superarse y a la vez ser hombres útiles a sí
mismos, a su municipio, a su estado, a su patria.

¿QUIERE USTED PERTENECER A LA MASONERÍA?

Esta carta esta dirigida a Usted porque siempre se ha interesado en la Augusta


Orden Francmasónica. Es lógica su inquietud, saber cuales son los principios y fines de
esta antigua Orden que supervive a pesar de los vaivenes políticos, económicos,
religiosos y sociales de nuestro mundo civilizado.
Se preguntará acaso: ¿por qué supervive y en qué se sostiene? ¿qué fuerza
misteriosa la protege de la maledicencia que la ataca sin razón? ¿Es la Masonería una
secta política o religiosa? ¿es misteriosa, oculta o espiritista? ¿a qué se dedica y que
hace? Todas estas incógnitas pueden quedar despejadas si lee esta misiva y el Boletín
anexo cuyo único fin consiste en aclarar el concepto que pudiese tener de la
Francmasonería (masones libres).
La masonería es una escuela de superación espiritual e intelectual, de honor y de
virtud. Su meta: el conocimiento de la verdad, el desarrollo de la solidaridad humana
mediante la formación de una conciencia universal de fraternidad entre los de la tierra.
La Masonería condena la persecución política y religiosa, la violencia en todas sus
formas, la explotación del hombre por el hombre, la maledicencia e impiedad. Exige en
sus miembros la práctica de virtudes morales y sociales que enaltezcan su espíritu,
buscando siempre paz y sosiego para la mente y el cuerpo. La tranquilidad espiritual se
consigue a través de la realización de buenas obras y acciones.
Para ingresar a la Orden se requieren condiciones morales, físicas e
intelectuales:

3
Son condiciones morales: la creencia en la inmortalidad del alma, en la existencia de un
ser supremo, al que genéricamente denominamos Gran Arquitecto del Universo. No se
exige la abjuración de principios religiosos, políticos o filosóficos, pero si absoluta
moralidad y práctica de la bondad, caridad, solidaridad y justicia, así como el
reconocimiento de la igualdad, libertad y fraternidad, nobles principios universales que
han permitido a los pueblos concientes de su deber, luchar por sus ideales, forjando
una patria libre, soberana y justiciera. Por principio un masón es libre y soberano: no
acepta la coacción de dogmas y tiranías. Muy diferente es la disciplina institucional
ajustada a normas que modela el carácter y amplía la cultura filosófica y humanista con
el objeto de realizar obra trascendental en la vida diaria.
La libertad es uno de los más nobles principios que nos han legado nuestros
mayores y por eso debemos luchar siempre para que este derecho inalienable e innato
en cada persona se mantenga incólume. Un masón no acepta tiranías; las soporta con
estoicismo en espera de que la verdad triunfe y la maledicencia caigan por su propio
peso. Un masón no permite que sus derechos sean pisoteados, combate y muere en
defensa de la verdad que es su divisa.
Teniendo noticias de sus deseos de ingresar a nuestra Institución conciente de
que a ciencia cierta desconoce las bases y principios que nos rigen creo prudente
informarle del paso que pretende dar, posiblemente al enterarse del modo en que
operamos cambie de parecer y decida no ingresar a nuestras filas.
Para principiar le diré que la masonería no es un club, no es un partido político ni es
una religión.
No es un club, pero requiere de cuotas para su subsistencia.
No es un partido político, pero imparte conocimientos de la vida política que rige nuestro
país.
No es una religión, pero pide a sus miembros la creencia de un ser supremo, fuerza
universal, etc.
Tampoco es una beneficencia pública, pero en ocasiones ayuda aquel o aquellas
personas que se encuentran en desgracia o desamparadas.
Las raíces de la masonería están tomadas del lejano pasado; sus ideales y enseñanzas
son puramente éticas, educacionales y espirituales, las cuales a través del tiempo se
han consolidado en un sistema de vida.
A la masonería no se debe de ingresar con la idea de obtener ganancia monetaria, ni
utilizarla como trampolín para puestos públicos o por simple curiosidad. Aquel que
ingresa con algunas de esas ideas, pronto se va defraudado porque encuentra todo lo
contrario.
La masonería exige dedicación, tiempo y dinero, es una Institución cuyos principios
fundamentales están basados en la fraternidad que debe existir entre los hombres de
buena voluntad y en la firme creencia de que existe un ser superior que nos rige a
todos.
De aquí la razón del énfasis que se le da a la práctica de la bondad, la tolerancia, la
filantropía, la justicia y otras virtudes que distinguen al hombre bueno y culto.
Se puede decir que la masonería es una escuela donde se enseña el camino de la
superación del hombre, un camino largo y espinoso donde hay que vencer los vicios y
perjuicios que el hombre trae consigo al nacer en este mundo. Un camino que toma la
vida en recorrerlo pero que al final convierte al hombre neófito en un hombre inteligente,
bueno y justo; además de prepararlo para el viaje eterno.
4
Sin embargo, la masonería no pretende ser una fábrica para ser hombres buenos,
aunque en efecto así es, ya que la masonería exige que el pretendiente sea un hombre
cabal y de buenas costumbres, sin distinción de religión, raza o inclinaciones políticas.
Es mentira que la masonería sea una orden secreta, sus miembros son ampliamente
conocidos así como el lugar, la fecha y hora de sus reuniones. Sus únicos secretos
consisten en ciertos signos y palabras que se utilizan para identificarse en casos de
emergencia y para ayudarse mutuamente.
A través de su historia la masonería ha tomado como norma el que los pretendientes a
ingresar lo hagan por convicción y no por curiosidad, los que ingresan por esta última
razón salen desilusionados.
Es de vital importancia informarle que al ingresar a nuestra fraternidad contrae ciertas
obligaciones monetarias, obligaciones que usted deberá estar en condiciones de cubrir
sin afectar sus gastos familiares.
También debo advertirle que en ocasiones se le asignarán trabajos de colaboración.
Colaboración y tiempo que usted dedicará después de sus ocupaciones laborales y
personales.
Espero que esta información que le estoy proporcionando sea suficiente para
darse cuenta que la masonería no va contraria a la moral, a la religión o partido político
alguno.
Deseamos que lo expuesto en este boletín sea suficiente para haber definido lo
que es la masonería.

Que el Gran Arquitecto del Universo lo ilumine.


FRATERNALMENTE
JOSE VALDEMAR PORTILLO LOPEZ
Gran Maestro de la Gran Logia de Tamaulipas.

La masonería es grandiosa como síntesis de la fraternidad universal, en su seno


conviven y se armonizan en íntima solidaridad, todos los hombres libres, biológica y
espiritualmente normales, de todas las razas y colores, de tendencias diferentes, de
credos políticos, sociales y religiosos diversos, de actividades y profesiones diversas
que varían hasta lo infinito en la filosofía, en las ciencias y en las artes; toda esta
variedad de elementos humanos comunica a la masonería una vida activa, multiforme y
palpitante cuya luz suprema es el trabajo para bien de la humanidad, síntesis de todas
las altas tendencias y actividades humanas, biológicas o espirituales. Este todo viviente
armonioso y progresivo en marcha incontenible hacia su meta evoluciona dentro del
triángulo en cuyos vértices resplandecen los principios de vinculación LIBERTAD,
IGUALDAD Y FRATERNIDAD.

UNA INTRODUCCIÓN NECESARIA

No son pocas las ideas erróneas y los prejuicios que se han difundido sobre la
verdadera naturaleza de la Institución que lleva el nombre simbólico de Masonería. Esto
se debe especialmente a su carácter oculto y misterioso que, si constituye para unos un

5
motivo de atracción, lo es para otros igualmente de desconfianza haciendo el blanco
para las flechas de sus adversarios que aún cuando sean sinceros la desconocen.
No trataremos en este estudio de discutir sobre lo que no es la masonería
combatiendo los errores y las diferentes objeciones que se le hacen, nos esforzaremos
en hacer ver con la mayor claridad posible y sencillez lo que es realmente la masonería.
Sobre todo lo que es en su esencia más verdadera, íntima, espiritual y universal,
en sus principios que descansan sobre las leyes del universo y de la evolución humana,
en su finalidad constantemente progresista y constructora.
En nuestro deseo hacer ver el espíritu vivificante que anima a la masonería y que
constituye su principio y su razón de ser, resaltar que nuestra Institución es una escuela
filosófica, ecléctica, impersonal y constructiva como camino individual hacia la verdad
como arte de la vida, en su más alta y dilatada acepción, como doctrina y factor de
armonía y de progreso para cada hombre, particularmente para la sociedad y el medio
en que se encuentra y para toda la humanidad. En nuestro estudio se hará evidente el
error de atribuirle un carácter político, antisocial y antirreligioso.

¿ QUE ES LA MASONERÍA ?

A pesar de que la masonería es una Institución de respetable antigüedad y que


de ella se han ocupado ampliamente historiadores, filósofos y escritores, existe en la
actualidad una desorientación y desconocimiento casi completo de lo realmente es esta
Organización que tiene sucursales en casi todo el mundo, y de cuáles son sus
finalidades y los medios que utiliza para lograrlos.
La mayoría de quienes han escuchado en alguna ocasión referencias vagas
hacia la Institución Masónica se la presentan como una especie de mafia tenebrosa que
se dedica a incorporar a sus filas a los oportunistas, los cismáticos, los hombres sin
credo ni religión, los politicastros sin escrúpulos y a los incautos, para sus
conspiraciones secretas. Equivocadamente se supone que el objetivo principal de la
actividad masónica consiste en atacar a la religión y el secundaria es conseguir puestos
lucrativos en el Gobierno, la Industria, el Comercio o donde quiera que sus adeptos
puedan introducirse con sus maniobras encubiertas. Se habla de que la intimidación y
el terror son las armas con que son manejados eficazmente los juramentos de esta
sociedad secreta y aún brotan de aquí de allá leyendas que hablan de terribles y
espeluznantes “venganzas masónicas”.
Muy distinta es la idea que se forman de la masonería quienes han tenido algún
trato con miembros de la Institución. En muchos casos han creído descubrir que se
trata de gente inofensiva, incapaz de “matar una mosca”, idealistas y hasta ingenuos,
que se reúnen semana a semana en sus logias como otros lo hacen en el café o en la
cantina, “para darle una arreglada al mundo”. Como no se ve que para estas personas
cambie en forma alguna su situación económica, a veces precaria, ni que se realicen
jamás los proyectos loables que dejan traslucir en pláticas, se deduce que la masonería
es una especie de club en que se vuelcan, la frustración e impotencia de los ideales
fallidos y las metas inalcanzadas y se busca en la discusión libre de variados temas un
desahogo a las inquietudes y cierto solaz en el intercambio de conceptos filosóficos.
Para quienes han asistido a ceremonias masónicas, o han leído artículos
ilustrados de los fastuosos actos que llevan a cabo, los masones quedan catalogados
como una gente ociosa que vive en el mundo artificial de fantasía y teatralidad, sin más
6
finalidad que la de conferirse mutuamente ridículos y altisonantes títulos que halagan su
vanidad.
Finalmente, hay quienes ven en la masonería poco más que un club social, o
clubes de beneficencia, aunque con cierto sabor arcaico de misticismo, que únicamente
sirve para darle el marco y el ambiente a las altruistas finalidades de ayuda mutua y
solidaridad fraterna que se supone debe existir entre sus miembros.
Como puede verse la imagen que se forja una mente que trata de juzgar una
Institución viéndola desde afuera, no puede nunca ser exacta en verdad, debemos
admitir que aún para muchos de los masones que forman parte de la Institución, el
concepto tampoco es muy claro, y ello se debe precisamente a que han transportado al
campo masónico sus aspiraciones particulares y han convertido a sus logias en un
reflejo de lo que esperaban encontrar en la masonería.
La verdad es que escasean lamentablemente las fuentes fidedignas de
información sobre lo que es y lo que no es la masonería y esta deficiencia no siempre
se subsana por medio de la interrogación directa, pues lo más probable es que se
reciban contestaciones contradictorias y vagas por el temor de muchos masones a decir
más de la cuenta, violando las normas de discreción que recomienda la orden.
Tampoco se sale de apuros leyendo obras de consulta de filosofía masónica o
aún los rituales, pues en toda la literatura que se publica se supone que el lector es
masón y por lo tanto se omite todo aquello que le ha de ser bien conocido, pero que es
precisamente lo que más interesaría al que tiene deseos de investigar la conveniencia o
inconveniencia de incluirse en la masonería o de seguir o no perteneciendo a ella.
Para intentar llenar esta deficiencia se ha elaborado este estudio que no trata ni
con mucho, de ser un libro de consulta de masonería. Existen buenas obras de este
tipo que ayudarán a quien desea obtener información específica sobre un aspecto
particular del tema. Lo que aquí nos hemos propuesto es presentar un panorama
general, ante quien nunca hubiese oído hablar de la masonería. No se trata de una
propaganda a favor o en contra, sino simplemente una exposición escueta de hechos y
datos fáciles de comprobar, pero que hasta ahora, no estuvieron reunidos.
Quedará mucho aún por decir, y en algunas de las cosas que aquí
mencionaremos habrán de meditarse, pero tenemos la convicción leal y sincera de que
no son las más importantes las que falten y que la información condensada en este
estudio será más que suficiente para el fin que se persigue, que es el de orientar
debidamente a quienes desea conocer lo que es esta gloriosa Institución Universal.

LIGEROS ASPECTOS HISTÓRICOS

Dejando a un lado muchos y muy antiguos antecedentes históricos de la


masonería, oscuros e inconexos, señalaremos aquí que la Francmasonería surgió de
las corporaciones de los obreros de la construcción en la edad media, los canteros
alemanes y los constructores ingleses de esos tiempos no constituían únicamente
asociaciones de oficio, sino verdaderas hermandades en donde se enseñaba y
ejercitaba una teoría secreta de sus respectivas artes y oficios. Muchos autores han
probado que los Francmasones no han inventado su liturgia y sus símbolos y que
tampoco los han copiado de otras sociedades secretas y arcaicas, sino que les han sido
trasmitidos, por sucesión directa, de las sociedades gremiales de que proceden.

7
Se pretende que la masonería es tan antigua que ya existía y se practicaba en las
Pirámides de Egipto, en los Templos de la India, en las cavernas de los esenios, en las
criptas secretas de los Mayas, en la academia de Pitágoras y en muchas otras
sociedades iniciáticas de muy remota antigüedad.
La masonería, en su forma actual, tomó cuerpo en Inglaterra a fines del siglo
XVII. Con anterioridad, existían en Alemania, Francia e Italia las cofradías de
constructores, o “masones”, en donde enseñaban no solamente las artes y las ciencias
que debían dominar un maestro constructor, sino que se impartían principios de moral y
de buena conducta, que garantizaran la armonía dentro de las corporaciones.
Los lustros de duración de las monumentales obras que ejecutaban los
“Masones” (entre las cuales se cuentan las más preciadas joyas del estilo gótico),
favorecían que se estableciesen relaciones muy estrechas entre los numerosos artistas
y obreros, los cuales formaban verdaderos “equipos” bajo la dirección de sus grandes
maestros arquitectos, que eran solicitados para ejecutar obras en ciudades distantes y
en diferentes países. Natural es que, en sus viajes, buscasen la ayuda de otros
miembros de su misma profesión, también agremiados en cofradías, y que asistiesen a
reuniones de sus “logias”. De esta necesidad de viajar y ser reconocidos, y atendidos,
como de las precauciones que cada agrupación debía tomar para no admitir entre sus
miembros a un operario que fuese a romper la armonía por su mala conducta, o a
explotar en su beneficio personal los conocimientos técnicos que se impartían en las
logias, surgieron los signos secretos de reconocimiento, la jerarquización en tres
grados, con obligaciones y prerrogativas distintas, y el sigilo y discreción para realizar
las reuniones de Masones.
Por la necesidad de viajar y conocer diversos países y costumbres, los
Francmasones tuvieron contacto con distintas maneras de pensar y diferentes
organizaciones políticas, lo cual les confirió un punto de vista excepcionalmente amplio
hacia los problemas religiosos, filosóficos, económicos, sociales y políticos de su época.
Hubieron de admitir, con igualdad de derechos, a los hombres de distintas
nacionalidades, credos y razas, y sentó las bases a los principios humanistas de la
naciente Orden.
En los siglos X, XII y XIV, se emprendieron en Escocia e Inglaterra grandes obras
y para su realización se importaron constructores alemanes quienes llevaron consigo
los usos y costumbres de las logias alemanas. A su influjo, nacieron las logias
escocesas e inglesas.
Hacia principios del siglo XVIII, la construcción había decaído grandemente y,
consecuentemente, languidecían las logias de los masones operativos; entonces en
1717, se constituyó en Londres una Gran Logia bajo el patrocinio de un grupo de
hombres de gran ilustración, que veían con pena la decadencia de las logias de
constructores. Fue entonces cuando nació, propiamente la Francmasonería de nuestros
tiempos, la cual ha conservado cuidadosamente el espíritu de las antiguas cofradías,
sus principios constitucionales, los usos y costumbres tradicionales, apartándose de la
construcción material. Admitió en sus filas a los hombres de todos los oficios y
condiciones sociales, a la vez que daba una interpretación elevada y filosófica de sus
símbolos, así la Francmasonería adquirió un carácter más amplio, susceptible de
extenderse por todo el mundo, de operativa pasó a ser especulativa.
Al ser electo Jorge Payne para cargo de Gran Maestro, emprendió la meritoria
tarea de reunir todos los preceptos existentes y formar una colección de 39 ordenanzas
8
generales, que fueron revisadas por el Dr. Jaime Anderson, Teólogo e historiador y
sirvieron de base a la Constitución Pública de 1723, que es el primer fundamento legal
de la Masonería.
Prosperó a partir de ese momento la Orden, contando entre sus iniciados a
distinguidos miembros de la nobleza y de la familia real de Inglaterra. Entre 1739 y
1772, surgieron ciertas desavenencias internas que dieron origen a una separación en
dos ritos: el rito escocés antiguo y aceptado y el rito de York o de real arco.
De Inglaterra, la nueva Francmasonería se extendió rápidamente a otros países.
En Francia apareció entre 1721 y 1732 alcanzando un auge inusitado. Se formaron
nuevos ritos y se crearon grados filosóficos siendo ésta al principio, una innovación mal
recibida en los demás países, ya que infringía los antiguos límites que únicamente
establecían los primeros tres grados.
En las logias masónicas se gestó la Revolución Francesa y de los principios
masónicos se sirvieron los revolucionarios como bandera en la lucha contra la tiranía.
En la actualidad, con la excepción de España y Rusia, en todos los demás países
del mundo tiene raíces profundas la masonería y cuenta con mayor número de
miembros que cualquier otra sociedad internacional de este tipo.

¿ CUÁLES SON LAS FINALIDADES DE LA INSTITUCIÓN MASÓNICA ?

Cuando por primera vez oímos a una persona decir: “fulano es masón” la
pregunta que surge inmediatamente en nosotros es : “¿qué cosa significa ser masón?”,
“¿es esto una religión o una secta?”, ”¿o un club filosófico?”, “¿o un partido político?”.
Daremos contestación a estas interrogantes:
Masón significa constructor, o sea el que fabrica a cal y canto un edificio, pero
aunque antiguamente este título se les aplicaba a los miembros de las asociaciones de
constructores que dieron a Europa sus mejores edificios de la edad media y del
renacimiento, actualmente hemos de entenderlo en su aceptación figurada diciendo que
masón es un constructor del templo simbólico de la ciencia y de la virtud, que constituye
su propia personalidad.
En otras palabras, un masón es un individuo que trabaja en perfeccionarse y
evolucionar, tanto en sus conocimientos como en su comportamiento moral, y para ello
sigue los caminos que le indica la antigua asociación que se conoce con el nombre de
masonería o más correctamente Francmasonería.
La Institución Francmasónica tiene como finalidad principal la de constituirse en
guía de quienes buscan y anhelan este perfeccionamiento para lo cual va desgranando
una a una sus sabias enseñanzas, en dosis graduadas y de acuerdo con el adelanto de
cada uno de sus miembros. A través del estudio razonado y crítico de la filosofía moral
se obtiene un mejor conocimiento de las virtudes y del modo de practicarlas.
Pero entonces, ¿cabe decir que la masonería es una escuela? Desde luego que
no, si entendemos como escuela un lugar donde se imparten clases sobre materias
especificas, basándose en libros de texto y se capacita a los alumnos para
desempeñar un trabajo que les permita ganarse el sustento. La masonería es algo más
que eso. En primer lugar, su filosofía educativa es totalmente distinta a la de cualquier
escuela, puesto que en vez de exigir el aprendizaje de tales o cuales postulados y
principios, estimula la exposición libre, la discusión ilustrada y el desarrollo de la
imaginación y del pensamiento original, como medio para conseguir que cada quien
9
llegue por su estudio independiente y su meditación profunda, a sus propias
conclusiones lógicas y la afirmación de sus convicciones. Por lo tanto, usa ampliamente
del símbolo y de la alegoría, pero no ofrece de ellos ninguna explicación fija y
dogmática, sino que deja en libertad al iniciado para que ejercite sus propias facultades
deductivas e inductivas para descifrarlos y aprender por si mismo las provechosas
lecciones que encierran.

¿ LA MASONERÍA INTERVIENE EN LA POLÍTICA?

Con mucha frecuencia se formula la pregunta de si la masonería desarrolla


actividades de índole política. Esto es lo primero que se les ocurre a quien lee en las
páginas de la historia la larga lista de estadistas, reformadores, revolucionarios y
patriotas que fueron masones.
Quienes piensan que la masonería es una organización política están
equivocados, como suele equivocarse quien examina superficialmente las cosas y no
penetra tras las apariencias para aquilatar su verdadero significado.
Es cierto que en la logias masónicas se han formado hombres como Voltaire,
Washington, Bolívar, Juárez y Madero; pero también en ellas han surgido grandes
sabios y artistas como Franklin, Newton, Mozart, Beethoven, Wagner, Edison, Kant,
Einstein, y otros tantos más que nunca se ocuparon de la política, como no fuese desde
un plano filosófico y humanista.
La masonería ha enseñado a estos hombres a luchar primero consigo mismos,
para limar sus asperezas y fortificar sus almas. Les ha mostrado el camino de la
convivencia fraterna, el respeto mutuo, la dignidad y el heroísmo. Ha inflamado sus
corazones con el amor a sus semejantes y la santa indignación contra la injusticia y la
tiranía que degrada al hombre y encadenan su pensamiento. Por eso es que en su
seno se han gestado tantas iniciativas trascendentales para el adelanto de la
humanidad y de ella han surgido, de tiempo en tiempo, grupos fuertes y de gran
cohesión que han logrado imprimir a sus naciones y al mundo, los más importantes
impulsos evolutivos.
La masonería es esto y mucho más pero lo que no es, ni ha sido jamás, es un
partido político, ni una organización militante al servicio de tal o cual encumbrada
personalidad, ni una mafia de subversivos, aunque sus detractores así le hayan descrito
con demasiada frecuencia. Jamás podría ser cualquiera de estas cosas sin perder
inmediatamente su sentido humanista y universal, quedando a merced de las
contingencias temporales y la mezquindad de las lides personalistas. La masonería
está por encima de la política y sobre todo de la politiquería.
Individualmente, los masones si intervienen activamente en la política de sus
países cuando la ignorancia, el fanatismo o la ambición, tratan de sojuzgar a los
pueblos.
Con respecto a las batallas que libran los masones en el mundo, la Institución
masónica se mantiene tan independiente como lo puede ser una universidad con
relación al trabajo profesional de sus egresados. Existe sin embargo, una diferencia
importante: mientras la universidad se limita a preparar al estudiante y una vez que le
ha entregado su titulo pierde casi todo contacto con él y con el buen o mal trabajo que
desarrolle, en cambio la masonería sigue abrigando con sus alas a sus miembros,
dándoles ocasión de que nunca cesen de estudiar y perfeccionarse, velando por que se
10
consolide los lazos de fraternidad y comprensión mutua y juzgando severamente la
actuación de cada uno de ellos cuando violan los principios morales proclamados por el
ideario de la orden.

¿ ES LA MASONERÍA ANTIRRELIGIOSA?

Mencionamos al iniciar nuestro estudio que es un error atribuirle a la masonería


un carácter antisocial y antirreligioso. Aunque proclame la verdad por encima de todas
las creencias, y la libertad de buscarla por encima de toda limitación y de todo
dogmatismo, no quiere decir con esto que se halle naturalmente en contra de alguna o
cualquier particular convicción o creencia, al contrario, la libertad más amplia y más
plena en materia de religión, es uno de sus principios fundamentales y toda convicción
sincera se halla igualmente respetada en su seno.
Los principios de laicidad y de libertad de conciencia que en ella se afirman,
cuando sean como deben, acompañados por ese espíritu de plena libertad no pueden
nunca interpretarse en sentido antirreligioso; más bien hacen ver y comprender la
religión verdadera y única que se halla en la base de los sentimientos religiosos de toda
la humanidad.
En otras palabras, su objeto fundamental es educar al hombre y hacerle mejor, o
según se expresa simbólicamente, trabajar la piedra bruta ( que representa el carácter y
la personalidad en su estado de imperfección), y hacer de la misma una piedra labrada
que pueda llenar su función constructiva en el edificio de la sociedad y de la vida
universal.
Con frecuencia nos encontramos con un sinnúmero de preguntas que las hacen
los mismos masones y a veces, las más de ellas, los que no son, entre ellas la de que
si aceptamos y pregonamos que los masones no forman ninguna sociedad religiosa.
¿Cómo es que han sido excomulgados por la iglesia católica? Nos llevaría tiempo
ahondar ampliamente sobre el verdadero sentido de la famosa bula de excomunión,
tendríamos que empezar por definir lo que es excomunión y después qué es bula, pero
eso lo dejaremos para otra ocasión apropiada para ello: Pero si quisiéramos dejar clara
la idea de que si es cierto que en 1738 el Papa Clemente XII excomulgó a todos los
católicos que se unieran a la masonería. También es cierto que en octubre de 1974, el
Vaticano emitió un documento que puso fin a tres siglos y medio de hostilidad de la
iglesia católica en contra de la masonería, documento que fue publicado por el
semanario Vaticano Observatore Della Domenica, en el cual expresa la declaración del
arzobispo Ferdinando Lambruschini: “ Nadie puede negar que hoy la Masonería tiene
como fin metas humanitarias”.
En una carta expedida en julio de ese mismo año, el cardenal Franco Seper, jefe
de la congregación de Vaticano para la doctrina de la fe, dijo a los obispos de gran
número de naciones, que podían aliviar las sanciones eclesiásticas contra la masonería
en sus comunidades según lo consideraran conveniente.
Dejaría la Masonería de ser universal en sus finalidades, si se mostrara partidaria
o enemiga de alguna religión. En su seno se admiten a hombres de todas las religiones
y se respetan las creencias de cada uno y su forma personal de rendir culto a Dios. Por
lo mismo, están proscritas las discusiones sobre los méritos relativos de tal o cual forma
de culto, como no sea para reconocer que todas ellas representan modalidades del
sentimiento de veneración del hombre hacia esa entidad suprema a quien cada quien
11
llama con distinto nombre. La Masonería resume toda esas apelaciones a un común
denominador y le llama “ GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO”, Sin establecer ningún
culto especial para adorarle, pues considera que todos son buenos cuando nacen de
los anhelos puros de un hombre.

CONCLUSIONES

La vida, expresada en el sentimiento altruista que nos impulsa a procurar la


felicidad de otra persona, en la conformidad de pareceres y propósitos, en la justicia,
en el trabajo y en el repechar conjunto de todos los hombres, nos demuestra el lado
positivo de la humanidad, a pesar de que el mundo ha producido hazañas científicas y
técnicas extraordinarias, viajes espaciales dirigidos por computadoras, transplantes de
órganos humanos, pueblos unidos por grandes puentes, la televisión acercando la
grandeza del mundo; la humanidad sin embargo, sufre profundas desilusiones y
angustias.
El alunizaje de los masones astronautas ha determinado en el espíritu del
hombre, la confianza y la esperanza en un mundo mejor, donde el adelanto de la
ciencia ponga fin a los malos angustiantes como el odio, la envidia y la ambición.
El mundo vive en situaciones inquietantes. Hoy existen más pobres y más ricos
que antes, son mil millones de niños hambrientos y es mayor el abandono moral de
muchos padres a sus hijos. Todavía más; hay jóvenes que tratan de ubicarse, más
obreros preocupados por salarios insuficientes, mayor número de estudiantes en
verdadera anarquía intelectual y moral, los periodistas mercenarios, los religiosos
profanizados, los capitalistas insensibles al dolor ajeno, los políticos que olvidan sus
responsabilidad y deberes para con la patria, los gobernantes corrompidos e impunes;
son más los métodos de violencias psicológicas mejor llamados de la fuerza y de la
irracionalidad, guerrilleros en elevada escalada terrorista convertidos en dueños de
sectores otrora insospechados de tal actitud y también nuestro mundo cuenta con
grandes potencias prepotentes y con dictaduras de derecha e izquierda. Ese es el
espectáculo que ofrece el mundo de hoy al hombre contemporáneo.
¿Qué está pasando en nuestro mundo?,¿ Es posible que el hombre proceda con
tanta barbarie y no trate de buscar un camino que lo conduzca al reencuentro de la paz,
de la armonía y de la felicidad?
Para conseguirlo es necesario vivir con menos hipocresía, con menos ambición y
menos fanatismo.
Una Institución capaz de iluminar la conciencia de los heroicos habitantes del
mundo actual, es la masonería. En todas las actividades de los hombres están
presentes los símbolos masónicos, que no siempre son bien interpretados. De ese
desconocimiento surgen las imperfecciones humanas en los pensamientos, en los actos
y en las realizaciones.
La incapacidad de los regímenes totalitarios de derecha a izquierda, hacen de la
masonería una institución de responsabilidad y abnegación, decidida a abrir nuevos
horizontes, sin dogmas ni esclavos, en la tarea del perfeccionamiento individual y
colectivo.
Sus principios sostienen la libertad de conciencia como condición fundamental de
la naturaleza humana, el amor y el desarrollo de la virtud, su filosofía orienta
intelectualmente a los hombres que intenten desentrañar las verdades de sus
12
herramientas de trabajo; con ellas, ofrecen al entendimiento humano, efectivo y definido
progreso material y moral.
Tratando de buscar una explicación que interprete y condense el sentido filosófico
de la masonería, puede decirse que se trata de una sociedad universal, filosófica y
progresista que tiende a perfeccionar a sus miembros o iniciados, dentro del altruismo y
la tolerancia. Es en principio, racionalista, sin perjuicio de las ideas privadas de sus
adeptos que se respetan como privilegios sagrados de fuero interno.
El estudio de la moral humana, de las ciencias y de las artes con su aplicación a
la prosperidad colectiva, constituyen la razón principal de sus finalidades. Considera
que estimulando los sentimientos generosos se puede conseguir que desaparezcan
gradualmente los odios de razas, los antagonismos de nacionalidad, de opiniones, de
creencias y de intereses. Aspira a unir a todos los hombres por los vínculos a las
obligaciones contraídas en común, haciéndolos hermanar en un afecto de recíproca
comprensión.
Por eso la masonería insiste en que sus miembros sean hombres inteligentes,
capaces de explicar el sentido de su filosofía y de buscar la verdad con entera libertad
de pensamiento, para que cada uno pueda transformarse en un artífice de la moral
humana.
La Masonería es una asociación moral en cuanto a su doctrina, a sus trabajos y a
sus inspiraciones. Sus fines consisten en el cumplimiento de la moral universal, es
decir, en los principios relacionados con las leyes de la naturaleza.
Esta doctrina, al proceder con tanto desinterés y honradez en el desempeño de
sus obligaciones, resulta para sus adeptos una corriente filosófica que nunca se puede
terminar. En los templos se predica la caridad que consuela y alivia, el perdón de las
injurias, la tolerancia que previene de los actos sin reflexionar y se fomenta la amistad,
grata expansión del alma que ayuda a sobrellevar los inconvenientes de la vida y de la
igualdad, que complementa su obra sin efímeras vanidades.
La Masonería es tan precisa y tan tolerante en este sentido que se dirige en línea
recta hacia la razón y a la conciencia, trazando a sus integrantes el camino por seguir
para librarse de los males que los afectan.
La moral masónica, complementada con la filosofía del simbolismo, expresa al
sentimiento y al razonamiento luces de virtud que suavizarán los rigores de la vida en
esa suprema aspiración espiritual.
La moral masónica contiene la práctica de todas las virtudes, la finalidad de la
orden se funda en la perfección del individuo, despertando en él, sentimientos de
verdadero amor a sus semejantes, le enseña a dominar sus instintos y pasiones, lo
mantiene al margen del vicio y cultiva en su alma la inclinación por la ciencia y la virtud.
La moral masónica es evolucionista. Para que su filosofía sea más racional y
positiva, se forma de acuerdo con las necesidades sociales y se inspira en el progreso
de la ciencia. Sobre la base de esos principios, obtiene el mejoramiento de todas las
condiciones que humanizan la vida; los hombres se educan y son perfectibles en
cualidades con un mayor nivel de bondad y sabiduría. Su reflejo personal implica mayor
mejoramiento para el mundo que lo rodea y, dentro de esas normas esenciales, la
masonería prepara a sus adeptos, para fortalecerle su desarrollo en el seno de la
sociedad en que actúan, señalándoles el fin que deben perseguir.
Por eso la masonería es una escuela de hombres útiles para la conquista de un
futuro mejor, crisol de almas y un estímulo del pensamiento. El masón es un cerebro en
13
plena vibración, un ser de noble concepciones y de actitudes dispuestas a llenar con su
pensamiento y acción todo lo practicable del código moral de la masonería.
De este sentimiento elevado, han de surgir los verdaderos artífices de la
humanidad, porque ser masón es saber brindarse por las disposiciones más elevadas
de la instrucción, es saber educar para el bien de la inteligencia, es saber concebir los
más bellos y calificados ideales del derecho y de la moralidad y es tener habilidad para
ejecutarlos, con unción evangélica, en bien de la sociedad humana.
Ser masón es amar la luz y detestar las tinieblas. Es ser partidario de la ciencia y
por lo tanto, combate la ignorancia. Rinde culto a la razón y ejerce la caridad sin
distinción de clases; lucha contra la hipocresía y el fanatismo, predica la tolerancia y
disciplina del pensamiento para no herir susceptibilidades de los demás.
Los masones contemporáneos, al igual que nuestros antepasados, debemos
pasar a través de los años, quizás de los siglos, ejerciendo las enseñanzas. Las obras
de nuestras vidas quedarán para la posteridad como ejemplos de lo que son, de lo que
serán y de lo que pueden ser.
Con estas virtudes serán los masones, dentro de la humanidad, los escogidos,
los selectos obreros del templo de la virtud, destinados a cumplir un estilo de
superación intelectual y moral.
La masonería constituye una confraternidad en la que se unen sus miembros
dispuestos a trabajar por el progreso efectivo del hombre. Confirmando esta concepción
de la filosofía masónica, se puede definir a la masonería, como una escuela filosófica,
en donde por medio de símbolos y jeroglíficos el hombre se transforma en buen padre,
buen amigo y buen patriota.
No puede considerarse a la masonería como una religión, porque toda religión
supone la existencia de un cuerpo de doctrinas destinadas a lo sagrado, sobrenatural y
divino, además de la perfección del ser humano.
La Masonería se ocupa sólo de perfeccionar al hombre en el mundo tangible y
presente, con las experiencias del pasado, proyectándolo al servicio del porvenir.
Se puede afirmar que se trata de un humanismo, que no impone dogma, pero
cada masón puede practicar los propios de sus creencias.
El principio de la tolerancia en que descansa la teoría del Gran Arquitecto del
Universo, es una concepción filosófica, que obedece a que todos, sin distinción de
credos, cada uno pueda imaginárselo, como un Dios personal, como una fuerza de la
naturaleza, o simplemente no encontrar en ella nada más que una salida para
condescender con las creencias de los demás.
Así como la Masonería no tiene ni propicia religión alguna, carece también de
doctrina política o económica determinada. Como institución, no puede intervenir; en
cambio, los masones, encausados por sus enseñanzas dentro de los principios
fundamentales en que está orientada su filosofía, ellos sí intervienen.
En lo que ha sido y será siempre observante la Masonería, es en el cumplimiento
de los ideales de libertad, igualdad y fraternidad. En los dos primeros ha podido
realizarlos, en parte, con su influencia en los movimientos de emancipación política y
religiosa de los pueblos y con su lucha por la liberación de la enseñanza y la
secularización de las costumbres, lo que ha permitido la democratización de las
sociedades en donde han tenido actuación sus hombres.
El más importante de los ideales, el de la fraternidad, es una aspiración
permanente de la orden que considera poder alcanzar extendiendo la cadena de
14
hermandad por todos los rincones de la tierra, para que puedan subordinarse las
pasiones e intereses de la vida al concepto noble y altruista de amor a la humanidad.
Estos son a grandes rasgos, las definiciones importantes que es necesario que
se conozca para que nuestra organización sea respetada y reconocida como escuela
de perfección y de formación de hombres útiles a sí mismos, a su familia, a la sociedad,
a su municipio, a su estado, a su patria.

GRAN LOGIA DE LIBRES Y ACEPTADOS MASONES


DE TAMAULIPAS

GRAN EJERCICIO MASÓNICO


JUAN BARRÓN CHAIRES 92-93
ENCINO No. 100 COL. ÁGUILA
APARTADO POSTAL No. 419
C.P. 89230 TAMPICO, TAM. MÉXICO

15
CODIGO MORAL MASONICO

 Venera al Gran Arquitecto del Universo


 El verdadero culto que se da al Gran Arquitecto consiste principalmente en las
buenas obras.
 Ten siempre tu alma en un estado puro, para aparecer dignamente delante de tu
conciencia.
 Ama a tu prójimo como a ti mismo.
 Haz bien por amor al mismo bien.
 Estima a los buenos, ama a los débiles, huye de los malos, pero no odies a
nadie.
 No lisonjees exageradamente a tu hermano pero reconoce sus aciertos. Acepta
su reconocimiento con modestia, como un aliciente.
 Escucha siempre la voz de tu conciencia.
 Practica la caridad.
 Respeta al viajero nacional o extranjero; ayúdale: su persona es sagrada para ti.
 Evita las querellas, prevé los insultos, deja que la razón sea tu guía.
 No seas ligero en airarte, porque la ira reposa en el seno del necio.
 Detesta la avaricia, pero administra tus bienes materiales con cuidado, para que
a tu vejez sustenten tus necesidades, protejan a tu familia y beneficien a tus
Hermanos en desgracia.
 Sigue la senda del honor y de la justicia.
 Si tienes un hijo, regocíjate; pero sé consciente del depósito que se te confía.
Haz que hasta los diez años te obedezca, hasta los veinte te ame y hasta la
muerte te respete. Hasta los diez años se su maestro, hasta los veinte su padre y
hasta la muerte su amigo. Piensa en darle buenos principios tanto como bellas
maneras; incúlcale rectitud esclarecida y honestidad sin tacha.
 Si te avergüenzas de tu destino, tienes orgullo; piensa que aquel ni te honra ni te
degrada; el modo con que cumplas te hará uno u otro.
 Lee y aprovecha, ve e imita, reflexiona y trabaja, ocúpate siempre en el bien de
tus hermanos y trabajarás para ti mismo.
 Conténtate de todo, por todo y con todo lo que no puedas mejorar con tu
esfuerzo. Pero cuando te sientas capaz de hacerlo, pon todas tus facultades en
la tarea.
 No juzgues ligeramente las acciones de los hombres; no reproches y antes
procura sondear bien los corazones para apreciar sus obras.
 Se entre los profanos libre sin licencia, grande sin orgullo, humilde sin bajezas; y
entre los hermanos, firme sin ser tenaz, severo sin ser inflexible y sumiso sin ser
servil.
 Habla moderadamente con los grandes, prudentemente con tus iguales,
sinceramente con amigos, dulcemente con los niños y eternamente con los
pobres.
 Justo y valeroso defenderás al oprimido, protegerás al inocente, sin reparar en
los servicios que prestares.

16
 Exacto apreciador de los hombres y de las cosas, no atenderás más que al
mérito personal, sean cuales fueren el rango, el estado y la fortuna.

CELEBRES MASONES MEXICANOS

* Benito Juárez.

* Lázaro Cárdenas

* Maximiliano de Hasburgo.

* Franscisco I. Madero.

* Emilio Portes Gil

* Belisario Domínguez

* Manuel Ávila Camacho

* Adolfo López Mateos

* Miguel Hidalgo.

* José María Morelos.

* Vicente Guerrero

* Nicolás Bravo. Presidente

* Guadalupe Victoria.

* Valentín Gómez Farías.

* Venustiano Carranza.

* Plutarco Elías Calles.

* Álvaro Obregón.

* Mario Moreno, "Cantinflas". Actor, director y comediante mexicano.

MASONES UNIVERSALES

Edwin Aldrin, - Astronauta (Módulo Lunar Apolo XV)

Salvador Allende, - Presidente de Chile

17
J.C Bach,. - Compositor

Baden Powel - Fundador de los Boy Scout

Ludvig van Beethoven, - Compositor

Simón Bolivar, - Libertador de Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú y Bolivia

Napoleon Bonaparte, - Militar, Emperador de Francia

Sir Arthur Conan Doyle, - Escritor

Rúben Darío, - Poeta

Walt Disney, - Cineasta

alejandro Dumas, - escritor, dramaturgo y periodista

Alexander Fleming, - Científico, Nóbel de medicina (penicilina)

Henry Ford, - Industrial,Fundador de la Ford

Benjamin Franklin, - Físico, Político, Presidente de USA

Sigmund Freud, - Psiquiatra introductor de psicoanálisis

Giuseppe Garibaldi, - Unificador de Italia

Harry Houdini, - Mago

José Martí, - Libertador de Cuba

Wolfgang A Mozart,. - compositor

Franklin D Roosevelt,. - Presidente de USA

Jose de San,Martín, - Libertador de Argentina, héroe de Chile y Perú

Marc Twain, - Escritor

George Washington, - Primer Presidente de USA

Oscar Wilde, - Poeta y dramaturgo

18
Sr. __________________________________

Consideramos que es usted una persona libre


y de buenas costumbres, un hombre de principios y
excelente calidad moral.

Es por ello que le hacemos llegar este


documento.

Contacto:

rlschakanputun24@hotmail.com

Facebook: Respetable Logia Simbólica Champotón

19

S-ar putea să vă placă și