Sunteți pe pagina 1din 4

Lengua y Literatura

Unidad: El terror y lo extraño PROFESOR(A): Yenni Flores

DRÁCULA, EL ORIGEN 7° Timbre n°___

Nombre: _______________________________________ Fecha: ___________

Objetivo de aprendizaje: OA 11 Aplicar estrategias de comprensión de acuerdo con sus propósitos de


lectura: > Resumir. > Formular preguntas. > Identificar los elementos del texto que dificultan la comprensión
(pérdida de los referentes, vocabulario desconocido, inconsistencias entre la información del texto y los
propios conocimientos) y buscar soluciones.

Actividad de inicio: ¿Qué sabemos sobre los vampiros?

Actividad 1: Subraya 10 ideas relevantes en el artículo que


leerás a continuación.

EL CONDE DRÁCULA VLAD IV


EL EMPALADOR DE RUMANIA

Pocos personajes habrán alcanzado una tan amplísima


gama como este vampiro salido de la imaginación del escritor Bram Stocker.
Y también será difícil encontrar una concordancia más pobre entre este muerto
viviente y el personaje histórico al que le robó el nombre. Porque Vlad IV apodado
por sus súbditos como Drácula por ser un ser despreciable y sanguinario, nada
tenía que ver con el longevo conde que cada noche salía a beber su dosis de
hemoglobina necesaria para seguir “viviendo” por los siglos de los siglos.

En fin, a no ser por Stocker y, sobre todo, por el séptimo arte, que entró en esta
historia increíble, el verdadero Vlad apenas sería conocido en otros lugares que no
fuesen sus apartadas montañas de los Cárpatos, como mucho, algunas comarcas
próximas.
Lengua y Literatura
Unidad: El terror y lo extraño PROFESOR(A): Yenni Flores

En cuanto a las comparaciones, el auténtico Drácula sería mucho más aterrador


que el de ficción y, por desgracia, la presencia de un crucifijo frente al rey de
Valaquia, se demostró inútil para poder salvar a ninguna de sus numerosas
víctimas.
El auténtico Drácula fue un noble rumano oriundo de Valaquia que dejaría el
recuerdo insufrible de los cruentos padecimientos a los que sometió a los suyos, a
su propio pueblo (toda una población aterrorizada), como a los extranjeros. Pocos
dudaban de la enajenación de Vlad IV y el placer que experimentaba sometiendo
a tortura a cientos de sus súbditos. Por eso, sus crímenes hicieron que se le
conociese como Drácula, que significa el hijo del Diablo (y, también, dragón). El
verdadero Drácula, como personaje real, pasaría a la Historia como Vlad IV, el
Empalador.
Vlad se sentó en el trono de su país a los 18 años, bien es cierto que, al principio,
como soberano títere de los turcos. De su contacto con los otomanos, por cierto,
aprendió el horrible suplicio del empalamiento que después, en cuatro años de
locura, utilizaría hasta la saciedad. Una vez que se pudo liberar de sus carceleros,
volvió a Valaquia y, en 1437, se autoproclamó Cristo Dios, gran voivoda (príncipe)
de Hungro-Valaquia.
Insaciable en su necesidad de matar y hacer sufrir, se enemistaba constantemente
con todos los que le rodeaban en un afán — ¿de supervivencia? — por
incrementar el número de sus futuras víctimas. Una vez éstas adquirían una
realidad evidente, Vlad las mataba de mil y una maneras, sobre todo a través del
empalamiento. Pero su fértil imaginación y sus instintos sádicos no se tomaban un
respiro y ensayaba nuevos sistemas de mandar al mundo de los difuntos a miles
de potenciales víctimas.
Así, un día hirvió vivo a un gitano acusado de ladrón, y obligó a su familia a que se
lo comiesen después. El número de sus víctimas se contaron por miles que
aparecían incluso aumentadas por “el boca a boca” de los aterrados habitantes del
lugar. En Schylta ordenó matar a 25.000, y en una ciudad cercana, el día de San
Bartolomé de 1460, empaló a 30.000. A una concubina que le comunicó su
embarazo, ordenó que le abrieran el vientre a ver si era verdad.
Provisionalmente puso fin a este estado de cosas el rey Matías de Hungría, que lo
encerró durante una docena de años por ver si se calmaba en su frenesí
sangriento. Fueron sus propios súbditos los que, asqueados de sus
procedimientos torturadores, lo denunciaron al rey de Hungría. En su prisión, Vlad
no demostró, precisamente, arrepentimiento alguno; por el contrario, sobornaba a
sus guardianes para que le proveyeran de ratones y otros animales a los que, para
Lengua y Literatura
Unidad: El terror y lo extraño PROFESOR(A): Yenni Flores

no olvidarse de su obsesión, se distraía empalándolos. Salió en libertad en 1474,


y, al parecer, con ganas de pelear, ya que se metió en una nueva guerra con los
turcos, luchando frente a los cuales murió, en una cruenta batalla, a los 45 años
de edad. Los otomanos le cercenaron limpiamente la cabeza y la enviaron,
previamente conservada e introducida en miel, al sultán de Constantinopla.
Como se advierte al principio, y a pesar de sus monstruosidades, nada abona la
acusación contra Vlad IV de ser un bebedor de sangre, o de desdoblarse en
vampiro. El error, propagado a través de la celebérrima novela de Bram Stocker
más de tres siglos después, pudo deberse a que, en rumano, Drac significa diablo;
y en Molda via Drakul es sinónimo de vampiro, ese animal que necesita beber
sangre caliente para sobrevivir. Resulta obvio que, comparado con el auténtico
Vlad IV, el pobre personaje de la citada novela y de tantos films era un buen
cadáver que regresaba pronto a su ataúd. Vlad IV acabó mal, muy mal.
Y, sin embargo, en la memoria colectiva de Transilvania, se fue transmitiendo la
leyenda del gran héroe nacional Vlad IV, el cual —para algunas gentes—, si las
cosas se ponen feas, volverá de nuevo para salvar a su pueblo. Aunque, entre ese
mismo pueblo, también la leyenda del “Empalador” se ha utilizado siempre para
asustar a los niños revoltosos.
El cine se apresuró muy pronto a trasladar a la pantalla a un personaje tan
atractivo e interesante. Bien es cierto que nos referimos al Drácula-vampiro de
Stocker. En 1931 el director Tod Browning rodó su Drácula con el mejor actor que
llegaría a identificarse con el conde-cadáver: Bela Lugosi, que, curiosamente, era
de origen húngaro y, por lo tanto, de una tierra próxima a la Valaquia y a los
Cárpatos donde reinó el auténtico Vlad IV.
Antes y después (en la historia del cine hay un título, Nosferatu, de Murnau, en los
años 20, que es un clásico) los vampiros con forma humana llenarían las
pantallas, pero prácticamente nadie se atrevió, que se sepa, a trasladar a
imágenes la auténtica biografía del Empalador, quizás porque las mordeduras del
conde-vampiro son de alguna manera asumibles y los suplicios de Vlad no.

AMPLIACIÓN DEL TEMA: Todos los pueblos han creído en los vampiros desde
los primeros momentos históricos. Las leyendas se remontan a muchos siglos
antes de Cristo, en las antiguas, Siria y Babilonia… y siempre el vampirismo
incluye el beber sangre, el fluido generador de vida.
Los aztecas derramaban sangre en las bocas de sus ídolos. En la India, los rajas
bebían sangre de las cabezas cortadas. En China, la familia montaba guardia
Lengua y Literatura
Unidad: El terror y lo extraño PROFESOR(A): Yenni Flores

junto al cadáver por miedo de que un perro o un gato saltaran sobre él y lo


transformaran en un vampiro.
Esta creencia encuentra eco en un libro titulado Antidote Against Atheism
(“Antídoto contra el ateísmo”) escrito en el siglo XVIII por el Dr. Henry Moore.
Narra la historia de Johannes Cuntius de Silesia, cuyo cadáver fue arañado por un
gato negro antes del entierro. Naturalmente, más tarde se supo que Cuntius había
reaparecido y bebido sangre. Cuando lo desenterraron, su cuerpo apareció en
buen estado de conservación, como es típico en los vampiros.

Fuente: https://historiaybiografias.com/dracula/
Actividades

a) ¿Qué características de la literatura de terror representa Drácula?


b) ¿Qué significa la frase “será difícil encontrar una concordancia
más pobre entre este muerto viviente y el personaje histórico al
que le robó el nombre”?
c) ¿Por qué a Vlad IV le llamaban “El empalador de Rumania”?
d) Nombra un hecho macabro realizado por Vlad IV.
e) ¿Cuál es la diferencia entre Vlad IV y Drácula de Stocker?
f) ¿Qué significa Drácula, según la lectura?
g) ¿Por qué se hizo famosa la historia de Drácula?
h) ¿Por qué no se atrevieron a trasladar a Vlad IV a la literatura o al
cine?
i) ¿Cuál es el origen de los vampiros según cada cultura expuesta en
la lectura?

S-ar putea să vă placă și