¡La Construcción de la Gran Obra de Dios!

Aquel día en que la Madre Clelia Genghini decidió arriesgarse a volver a la

fuente de vida en el Instituto, El Señor decidió entregarle aquel tesoro de cielo
del que ninguno se había atrevido aventurarse; revelándole aquellas puntadas
delicadas y precisas que había dado desde antes de haber iniciado la fundación
en aquella Casa de amor de la Santísima Virgen.

-He descubierto que la vida se construye desde la sencillez del cotidiano -

percibo en el pensamiento de esta madre abierta al descubrimiento de la
sorpresa de Dios en este proyecto juvenil.
Esta madre deseaba tocar lo pequeño para descubrir la grandeza de Dios en
aquello que podría pasar desapercibido para aquellas almas que deseaban
encontrar un misterio lleno de alcances heroicos fuera de lo habitual; tan solo su
aventura nos ha llevado a volver nuestra mirada hacia aquel sueño de Dios que
se construyó bajo el manto maternal de la Santísima Virgen.

Parece que recorriera junto a ella estas puntadas reveladas por Dios en donde
por un instante nos encontramos con Juanito Bosco corriendo en la casa de los
Moglia cerca de aquella chiquita que lo observaba y del cual el cuidaba,
expresando aquellas palabras que quizás resonaron en su cabeza durante tanto
tiempo “yo no estoy destinado para esto”, por cierto, que este sueño de los 9
años aun lo tenia muy presente y en el no había niñas, quizás por esto
rehusaba a cuidarla.

Madre Clelia, aun no entiendo este camino de preparación a este proyecto

inspirado por Dios; ¿acaso Don Bosco no quería a las niñas?
- Podría parecer esto una realidad, pero tan solo Don Bosco buscaba el bien
señalado por la Señora del sueño y su madre lo había educado en cuanto a las
niñas con mucha reserva, por tanto, su manera de parecer ante ellas era típica
actitud de su respuesta a la educación recibida.
Ya que nuestros corazones se han unido para descubrir este hermoso misterio
quisiera contarte algunas puntadas que fueron preparando el corazón de Don
Bosco para ser el hilo con quien se tejería nuestro Instituto. ¿Quisieras
escucharlos?
- Claro Madre, deseo ahondar en esta realidad viva del Instituto
- Bueno, así transcurre estas puntadas, Dios preparó el corazón de Don Bosco
enviándolo por obediencia a cuidar de unas niñas que eran sostenidas por la
Marquesa de Barolo, también sube a unos suburbios de Turín en donde se
encuentra nuevamente con mujeres que depositan en sus manos el sufrimiento,
comprendiendo así sus necesidades y deseos más íntimos, pero no solo eso,
inicia a sentir en su corazón el deseo de anunciar el mensaje de Dios a las
chicas haciendo imprimir una edición llamada “avisos a las muchachas
cristianas; pero piensas que ha terminado, no lo es porque Dios envía
nuevamente a la cárcel a Don Bosco ya no para encontrarse con una realidad
que hace palpitar su corazón por los muchachos, ahora es por la mujer que con
tantas caídas por falta de instrucción han llegado hasta allí; quizás se volvió a
repetir aquellas palabras “si tan solo hubiera alguien que los ayudará no estaría
aquí”… ¿ Quién se ocuparía de ellas?... no podría ser cualquier mujer; el estaba
con sus muchachos y necesitaría de una mujer que leyera su corazón e hiciera
de su sueño realidad.

Por el momento Dios daba puntadas en aquel pequeño pueblo de Mornese

donde nacía una pequeña flor sembrada por María Auxiliadora, ella iniciaba a
despuntar en la sencillez en la que Jesús construye los mejores regalos para su
Padre. Muchos pudieron pensar igual que lo hicieron con Jesús ¿de este pueblo
puede salir la persona elegida por Dios para ser madre de aquellas jovencitas
necesitadas de orientación humana y cristiana?... quizás muchos pensaron que
nada bueno podría salir de ese pueblo que perdido entre los viñedos se
encontraba, pero tal vez muchos de los que pensaron así no descubrieron que
lo extraordinario se encontraba en el pobre pesebre de Belén.
Así como el pequeño niño Jesús crecía en sabiduría y gracia, esta niña llamada
María Mazzarello crecía en amor a Jesús Sacramentado y a la Santísima
Virgen María.
Fueron muchas aventuras las que pasó con su familia en el cambio de vivienda;
de los I Mazzarelli a la Valponasca; lugar donde se acrecentó su amor por
Jesús eucaristía; del cual hacía actos heroicos para poder alimentarse de este
pan de Ángeles que daban vida a sus practicas de amor entre su familia y la
proporcionaba de fuerzas para el trabajo constante entre los viñedos con su
Papá…
Esta hermosa flor que apenas iniciaba a despuntar nos dejó ver las espinas que
la adornarían y fueron aquellas actitudes por las que tuvo que luchar para
crecer en la humildad, recogimiento, desprendimiento de todo aquello que no le
pertenecía a nuestro buen Dios. ¿ piensas que lo hizo sola?- El Señor con su
predilección por ella no podría dejarla sola, sin un labrador que la
acompañaría.- me preguntas ¿Cuál es su nombre?- te lo diré, es Don Pestarino,
sí, el llamado el “prebin”; hombre de fe y de mucho ardor apostólico, que fue
conduciendo a María Mazzarello a un deseo de hacer amar a Jesús a todos los
que no le amaban y de amarlo por los que no lo hacían, pero no solo El Señor
lo tomo a el, también lo hizo con su papá quien la guió por caminos de
profundidad espiritual y de instrucción muy valiosa para la vida, como enseñarle
a leer, darle la primera instrucción del catecismo y estar junto a ella de manera
silenciosa para acompañarla en su proceso de identificación con los
sentimientos y actitudes de Cristo.
Por lo tanto, crecía en virtud y amor por Jesús a quién decide entregarle su vida
haciendo el voto de castidad para siempre sintiendo en su corazón el impulso
de pertenecerle solo a Él y estar desasida de todo lo del mundo, así es que
cubierta con el manto de la Santísima Virgen inicia la identificación de los
rasgos de su Madre del cielo quien la llamaba a ser la piedra viva del naciente
Instituto.
María Mazzarello fue un lirio nacido del corazón de María que poco a poco
haría florecer el corazón de la Santísima Virgen contagiando su virtud a sus
semejantes.

-Madre así que el corazón de Maín ardía de caridad, dulzura y templanza; ya

que se mostraba afable con quienes la trataban y se dominaba cuando su
carácter impetuoso quería aparecer ante los demás. Ahora entiendo el deseo de
encontrarse con Jesús por aquella ventana, el de enamorarse más de Él y
pedirle que la hiciera amor para amar con ella a los demás pues reconocía que
su amor era muy poco para derramarlo sobre aquel pueblo que lograba
observar por su ventana; ya no solo veía a Jesús sino a sus hermanos en el
que la Virgen cubría con su Manto, expresado en el espíritu apostólico que El
Señor ponía en el corazón de Maín, contagiando a su familia este deseo de
amar a Jesús y a los demás, siendo ellos los primeros en ser testigos de este
espíritu misionero que nos enseña el evangelio.
-Si, así es, El Señor fue trazando caminos que parecían que no se encontrarían
entre sí pero que poco a poco se iban encontrando y teniendo sentido en la vida
de esta mujer de Dios, quien iba descubriendo que el camino seguro para
llegar a Jesús era el de la humildad y aunque a veces parecía difícil al
reconocer su debilidad y deseo de conversión aún en las pequeñas cosas, el
Dios que tanto la amaba y le exigía le envío el consuelo en las Hijas de la
Inmaculada, mujeres que se querían santificar en el mundo con el fin de hacer
amar a Jesús y a María, de cooperar a la gloria de Dios y de la religión con el
buen ejemplo.
Aquella mujer Angela Macagno dirigía con mucha prudencia y espíritu
apostólico a estas jóvenes que habían decidido consagrarse en esta Pía Unión;
entre ellas la más pequeña era María Mazzarello, quien pronto se dejaría
entrever en ella la preferencia por las chiquillas dejándonos ver así una vez más
la mano delicada de Dios que iba tejiendo en su corazón inclinaciones
predilectas para la misión confiada en el bien de la Iglesia.
Poco a poco se iba encendiendo en el corazón de Maín el deseo del bien por
las chicas del pueblo, y en el taller de Mornese El Señor iba avivando en este
corazón una gran alegría de responder a Dios como muestra de su amor en un
servicio pronto y con gran eficacia, por medio de sacerdotes como Don
Frassinetti, Don Olivieri, Don sturla y el mismo Don pestarino con conferencias
que encendían en el pueblo el fervor y en María Mazzarello era fuego que se
traslucía en sus obras, palabras y pensamientos.
Así es que la gran obra de Dios iba dando las puntadas más precisas en su
pequeña hija a la cual iba llevando bajo el manto de María Auxiliadora quién
desde pequeña debió escuchar de ella por la capilla dada en su honor en los I
Mazzarelli.
Al Señor le gusta trabajar en la sencillez y en la paciencia, por esto debes tener
paciencia en la obra que Dios realiza en ti pues muchas veces no se entiende lo
que va sucediendo y otras tantas piensas en que no tiene sentido hacerlo
porque no se conecta con nada, pero si tienes paciencia, poco a poco podrás
observar la gran obra que nuestro buen Dios quiere hacer en ti.

Estas son las más hermosas delicadezas de Dios, en donde a Don Bosco El
Señor daba toques de bien por las muchachas y un sueño de encontrar aquella
mujer que pudiera conectar su corazón con el de Él y sin saberlo El Señor ya
estaba preparando desde pequeña a la piedra viva de gratitud a la Auxiliadora
con las más hermosas virtudes y un celo apostólico en bien de las niñas.

Dos corazones colmados de gracias especiales y unidos en el bien de los y las

jóvenes, en donde El espíritu sopla una vez más por donde quiere haciéndolo
hacia una sola dirección en la misión que confía.

- Así es que nuestro Dios nos demuestra una vez más su predilección de
amor en lo pequeño y lo sencillo, desafiando al mundo cargado de
grandes portentos humanos y atractivos para los supuestos poderosos y
sabios del mundo.

La sencillez en el signo creíble de la predilección de Dios por la persona.

Alabemos y demos gloria a Dios por el bien que hace en los corazones
dispuestas a contribuir en el bien de la Iglesia y en la salvación de muchas
almas.

Lina María Noreña Ocampo

Aspirante Hija de María Auxiliadora