RESUMEN DE LA RESOLUCIÓN 3280 DE 2018.

Bien cabe resaltar la importancia de la educación y el positivo efecto que esta tiene sobre el
cambio. Cuando hablamos de la educación, hablamos de la búsqueda del conocimiento que
nos lleve a la determinada respuesta de una situación, sea cotidiana o «extraordinaria» por así
decirlo. Ahora bien, si llevamos esa educación al plano de la salud, lo que se buscaría es
concientizar al individuo del impacto que tiene este mismo en la sociedad en torno a la salud,
que esté al tanto de las posibilidades de transformación del entorno en el que vive en pos del
mejoramiento de este mismo, por medio de la salud.
No hace falta recalcar el hecho de que salud en Colombia es deplorable y que cuando no es así,
es sólo un negocio que beneficiará al cabo, a unos pocos; por esto es importante la
apropiación de saberes en términos de salud. La apropiación de saberes autónomos y que sean
de fácil comunicación y entendimiento para todas las personas con las que convive el individuo
y qué, con estas, forma una sociedad. Es indispensable el llevar saberes acerca de la salud a las
distintas comunidades en los distintos niveles, no sólo individual sino grupalmente, pues así el
impacto será mucho mayor en la población.
La resolución 3280 de 2018, nos plantea esto mismo, aún con mucho más detalle, incluso
hablando y organizando la educación o sesiones educativas que serán dirigidas al público en
distintos niveles cognitivos asociados a la edad y madurez del individuo mismo pero, no sólo
teniendo en cuenta estos como único factor importante. Lo plasmado en la anteriormente
mencionada resolución, en cuanto a educación y comunicación para la salud, es que las
personas que convivan en una sociedad, tendrán acceso a jornadas pedagógicas donde se les
brinde información de utilidad y necesaria para el desarrollo de sus competencias (en términos
de salud) tanto individual como grupal y autónomamente. Con estas jornadas pedagógicas no
se busca menos que un apropiamiento por parte del individuo mismo y la comunidad en que
convive, con el fin de mejorar las condiciones de la calidad de vida esta misma, desde los
infantes hasta los ancianos. Por esto, recurre a niveles cognitivos evidentes y los clasifica de la
siguiente forma; primero, Primera infancia e infancia; segundo, Adolescencia; tercero,
Juventud; cuarto, Adultez; quinto, Vejez. Esta clasificación debe su ser al que en cada una de
estas etapas, la enseñanza que se busca implementar, varia según la edad y la capacidad
cognitiva de cada persona, por ejemplo, en la etapa de Primera infancia e infancia, la
educación no va dirigida al infante mismo, sino a su cuidador, buscando que este pueda
brindarle una mejor crianza no sin dejar de buscar una promoción de la salud en ella. Por otro
lado, en la Adultez se habla de un mantenimiento de la salud, de la promoción de esta y de un
aporte al goce total del derecho de la salud.

Existen también dentro de dicha resolución, unos tipos de educación que la comprenden,
estos son: La educación individual, La educación grupal y La educación colectiva, sin embargo,
el hecho de que existan tipos de educación, no quiere decir que el o los individuos podrán
asistir solamente a un tipo de esta. La educación individual, como bien sugiere su nombre va
dirigida a un individuo o a una familia (se incluye a la familia en este por el hecho de que se
trabaja en ella desde el núcleo mismo de la familia y así es considerada como unidad). La
educación grupal, va a dirigida a comunidades o grupos de familias que comparten una
situación de salud. Por último, la educación colectiva, que está dirigida a comunidades que
comparten una situación de salud en especial y que conviven en el mismo entorno o
pertenecen a una etnia.
Para llevar a cabo este trabajo, se cuenta con personal que maneja las distintas áreas de la
salud y cuenta con habilidades de liderazgo para transmitir de forma segura los conocimientos
que se desean llevar a la comunidad. Este personal está por supuesto capacitado tanto en las
áreas de la salud, como en las ciencias sociales y humanas, acompañados por personas
pertenecientes al gremio de la salud pero que se desenvuelven de manera eficaz en el área de
la pedagogía. Las RIAS juegan un papel importante en esto, dado que a partir de ellas se
establecerá el proceder del personal de salud propio de las distintas comunidades.
Este mismo personal deberá cumplir ciertos criterios para poder llevar a cabo su trabajo. Estos
son:
 Capacidades para desarrollar procesos educativos teniendo en cuenta las RIAS.
 Habilidades para hacer la comunicación efectiva.
 Capacidad analítica para juzgar circunstancias específicas en el entorno de trabajo.
 Ser empáticos, respetuosos y confidentes con las personas que se desea educar.
 Flexibilidad y sutileza para abordar grupos específicos en situación de vulnerabilidad.
 Conocimiento del SGSSS.
 Conocimiento de la oferta de servicios sociales y comunitarios.
También es de suma importancia que el personal que desempeñe esta tarea, tenga
conocimientos base de cada uno de los anteriormente mencionados niveles de cognición, por
ejemplo.
Primera infancia: Derechos de los niños, desarrollo humano a temprana edad, manejo y
prevención de enfermedades a temprana edad, consejería en maternidad, patrones de
crecimiento vigentes.
Infancia: Derechos de los niños, desarrollo humano y problemas presentes en este, patrones
de crecimiento vigentes y conocimiento de las RIAS en mayores de 2 años.
Adolescencia: Derechos humanos, derechos sexuales y reproductivos, desarrollo humano,
promoción de la salud mental y habilidades de liderazgo y para la vida, partición social y estilos
de vida saludables. Prevención de las drogas, y conocimiento de las RIAS en mayores de 2
años.
Juventud: Experiencia tratando con jóvenes y sus familias en los distintos contextos. Derechos
humanos, sexuales y reproductivos. Prevención de ETS e ITS. Maltrato, abuso, salud mental y
prevención del suicidio, prevención de adicciones, patrones de crecimiento vigentes y
conocimiento de las RIAS en mayores de 2 años.
Adultez: Experiencia en atención y educación en población adulta, conocer los enfoques del
curso de vida, reconocer efectos acumulativos para la salud, influencia de sucesos en la salud.
Derechos humanos, sexuales y reproductivos.
Vejez: Ciclo de entrenamiento cognitivo y emocional, programas para la estimulación
cognitiva, promoción del mantenimiento de la salud, Derechos humanos y libertades
fundamentales de las personas adultas mayores, envejecimiento activo, entre otros.

La duración de las distintas jornadas de comunicación y educación, serán:

Individual: de 20 a 30 min.
Grupal: Integradas por ciclos de entre 3 y 6 sesiones desarrolladas entre 1 y 3 meses con una
duración de 90 a 120 min.
Colectiva: Mínimo 2 ciclos a lo largo de un año. Entre 9 y 12 sesiones. El número de sesiones y
contenidos, será definido con la comunidad participante. Si el área es rural, se realizará
mínimo 1 ciclo al año por grupo poblacional. En la zona rural urbana, mínimo 2 ciclos por año
y en áreas de difícil acceso, 1 ciclo por año. Estas sesiones tardarían entre 2 y 3 horas.

El personal también deberá tener en cuenta consideraciones predispuestas en la resolución

que son:

 Realizar las sesiones educativas en los entornos que garanticen una mejor cobertura.
 No duplicar acciones con la misma población o en el mismo entorno.
 Las jornadas deberán llevarse a cabo en jordanas extracurriculares en medida de lo
posible.
 Considerar opciones de virtualidad.
 Generar y aportar material didáctico para cada tipo de población y disponer de lugares
amplios.
 Contemplar la participación de padres en los ciclos para niños.
 La definición de las condiciones para el desarrollo de las sesiones deberán ser
concretadas con la población sujeto.

Las capacidades y los contenidos de los siglos de educación para la salud podrán ser ajustados
de acuerdo con la identificación de capacidades, necesidades e inquietudes identificadas en
cada entorno y comunidad, las orientaciones pedagógicas, metodológicas y didácticas están en
las RIAS.