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157-168
*
Artículo de investigación. Como citar: Calderon, S. F., Santana, J. A., Riveros, M. F., & Borbón, J. C. (2019). Análisis psicométrico del cuestio-
nario de conductas antisociales en la infancia y adolescencia (CASIA) aplicado a población colombiana adolescente escolarizada. Diversitas:
Perspectivas en Psicología, 15(1), 157-168. https://doi.org/10.15332/s1794-9998.2019.0001.12
**
Dirección postal: Corporación Universitaria Iberoamericana, Dirección Calle 67 # 5-27, Bogotá, Colombia. CP 110231. Correspondencia:
efriveros45@hotmail.com
157
Sergio Fabián Calderón, Javier Andrés Santana, Fernando Riveros Munévar, Juan Carlos Borbón
Abstract
The objective of this cross-sectional study, quantitative and psychometric court, was to analyze
the psychometric properties of the CASIA in Colombian adolescent population schooled of seventh,
eighth, ninth and tenth. The study was conducted with a sample of 356 adolescents whose ages
were between 11-18 years belonging to 4 schools in primary and secondary education, located in the
city of Bogota and Mosquera. The results showed six factors that explained the 51.51 % of the total
cumulative variance, a Cronbach’s alpha of 755 and a coefficient of two halves of Guttman, 749 were
obtained, indicating a reliable and consistent for the Colombian population level, with a structure set
clear, which differs with the original studies but shows theoretical congruence with the construct.
las construcciones del contexto sociocultural en el experiencias traumáticas en la etapa infantil, tales
que se gesta (Kazdin, 1988). como el abuso físico y sexual infantil, la carencia
e inestabilidad de figuras parentales y reiteradas
De la misma forma, Frías, López y Díaz (2003) con- pérdidas de contexto, y la conexión con la mani-
sideran que los jóvenes, por aspectos inherentes a festación de conductas antisociales. Los jóvenes
su naturaleza, supeditan en cierta medida su inte- que presentan comportamientos antisociales y de-
gración social, y por el contrario buscan indepen- lictivos en edades tempranas y que se perpetúan
dencia con el fin de hallar identidad. Los jóvenes en el tiempo (niños pequeños y/o preadolescentes),
son miembros que señalan las problemáticas de la conforman un grupo en alto riesgo para continuar
sociedad; sin embargo, y aunque no legitimen las con las mismas o similares conductas y, progresiva-
reglas en su totalidad, por lo general siguen las nor- mente, de mayor gravedad en la adultez (Gendreau,
mas impuestas. La integración de los jóvenes en la Little, & Goggin, 1996).
sociedad girará en torno a las normas a las que ellos
le otorguen legitimidad, y por ende se adherirán a Un estudio llevado a cabo por Sobral et al. (2000)
espacios y condiciones particulares. Lo que es cla- en Santiago de Compostela en el cual se tienen en
ro es el alto porcentaje de población adolescente cuenta los posibles factores que afectan o generan
participante en actos antisociales y delictivos y que la aparición de conductas antisociales, halló que
es una problemática potencial para el óptimo desa- dichas conductas tienen poca relación con el nivel
rrollo individual, social y económico de una nación socioeconómico de los estudiantes evaluados, con-
(Morales, 2008; Organización Mundial de la Salud trario a la alta relación encontrada con los factores
[OMS], 2003). sociales, la poca filiación parental, el trato con otros
jóvenes delincuentes y los lazos afectivos creados
Los factores de riesgo asociados e identificados en el contexto escolar. Cabe tener en cuenta en los
dentro de la magnitud del fenómeno, según Hawkins resultados arrojados por la investigación de Sobral
et al. (1998), hacen énfasis en que éstos determinan et al. (2000), los hombres evaluados fueron quienes
las condiciones del individuo o su ambiente, las cua- más reflejaron respuestas antisociales en compa-
les anticipan con mayor probabilidad de aparición y ración con las mujeres quienes solamente eviden-
desarrollo del comportamiento violento, lo que en ciaron un bajo nivel de empatía. Estudios recientes
este caso puede considerarse un flagelo. Con base llevados a cabo en Perú (Almonacid & Rosario, 2017;
en la propuesta realizada por Correa, Manjarrés, Reyes, Noé, & Gonzales, 2016) reafirman al clima
Montes-Fontalbo y Polo-Suarez (2003), se concluye familiar como una variable relacionada de forma
que los factores familiares que están relacionados importante con la conducta antisocial.
con la violencia juvenil, son aquellas variables in-
mersas en el eje familiar. Es quizá, la posición desde Finalmente, se ha mostrado que los comportamien-
donde el joven inicia socialmente su experiencia tos antisociales ampliamente conceptuados se re-
de vida, su estatus socioeconómico y sus oportuni- lacionan con otros desórdenes, a saber, ansiedad,
dades educativas, relacionado en gran medida con depresión y déficit de atención e hiperactividad
el ajuste de diversas áreas, a saber, la social, la (Angold et al., 1999; Maughan et al., 2004). De la
psicológica y la cultural. Estudios muestran también misma forma, es importante explorar más adelante
que los patrones de personalidad están asociados el papel que tienen los factores genéticos y am-
también a la conducta antisocial (Morán, Carmona, bientales en la explicación de la relación entre ES
& Fínez, 2016). (Estimulo social) y el comportamiento antisocial.
Esto, teniendo en cuenta que Tuvblad, Grann &
En ese orden, Quiroga y Cryan (2005) señalan que Lichtenstein (2006) mostraron que la heredabili-
parte de los fenómenos psicopatológicos en la adul- dad del comportamiento antisocial varía en fun-
tez obedecen a factores relacionados con la fun- ción del ambiente, muestran así las interacciones
cionalidad de las experiencias familiares durante entre el genotipo transportador de serotonina de
la niñez. De igual forma, Stone (1993, citado por una familia de estratos bajos y la predicción de
Quiroga & Cryan, 2005) menciona la importancia de la delincuencia adolescente (Aslund et al., 2013).
El estudio mencionado finaliza planteando la ne- sociales se presentaban entre el 13 % y el 40 % de
cesidad de una recopilación más exhaustiva de los adolescentes colombianos, las delictivas entre
información entorno a la interacción de factores el 4 % y el 15 % y que existía una mayor prevalencia
biológicos y ambientales para entender el papel de ambas conductas en varones. Cabe resaltar que,
del nivel socioeconómico en el desarrollo del com- a pesar de las altas cifras halladas, son escasas las
portamiento antisocial (Koenen, Uddin, Amstadter, investigaciones realizadas en Colombia con respec-
& Galea, 2010; Piotrowska, Stride, Croft, & Rowe, to a la representación de la conducta antisocial en
2015; Raine, 2002). la adolescencia, probablemente por instrumentos
no válidos y confiables para el país, encontrándo-
Otras investigaciones que resaltan la importancia se sin embargo en dichos estudios la utilización
del estudio de la conducta antisocial y delictiva del Cuestionario de Conductas Antisociales en la
muestran que el 16,6 % de los adolescentes tenían Infancia y Adolescencia (CASIA).
un nivel alto de conductas antisociales, el 10 % se
inscribe en el perfil de alto riesgo y el 6,6 % en el Dicho cuestionario fue elaborado por María Teresa
perfil antisocial (Garaigordobil & Maganto, 2016), o Gonzales Martínez en el año 2012. Este instrumento
que los adolescentes con alta conducta antisocial de evaluación clínica para población infantil y ado-
se implican más en situaciones de bullying y cy lescente (entre 8 y 15 años de edad), buscó identi-
berbullying en todos sus roles (víctimas, agresores ficar la aparición de conductas antisociales que se
y observadores) y usan significativamente más es- podían relacionar con trastornos de la personalidad.
trategias agresivas como estrategia para resolver
conflictos (Garaigordobil, 2017). A pesar del uso de la escala, estudios sobre sus
propiedades psicométricas son escasos. Se resal-
Enfatizado en el contexto colombiano, se encuen- ta entonces, la investigación que realizó González
tra la investigación realizada por Sanabria y Uribe (2012) —autora del mismo—, en España, con una
(2010) en la ciudad de Cali, en donde se estudia- muestra de 504 sujetos de edades entre los 8 a 15
ron las manifestaciones de la conducta antisocial y años, de los cuales el 55 % pertenecían a un medio
delictiva en dos grupos de adolescentes (hombres urbano y el 45 % a un medio rural, quien obtuvo una
y mujeres), jóvenes (entre los 12 y los 18 años de confiabilidad de 0,81. Del mismo modo, utilizó la
edad), que fueron clasificados como infractores de validez de criterio externo cuyos resultados fueron
ley y no infractores. Los resultados refieren que satisfactorios y significativos a un nivel de confian-
3.677 jóvenes presentaron algún tipo de conducta za del 0,01. La conclusión acerca del instrumento,
delictiva, siendo el hurto el acto delictivo más pre- según Gonzales (2012), es que presentó niveles al-
valente en ambos sexos. tos de confiabilidad y validez. En Colombia suele
utilizarse como escala de evaluación sin conocer
Asimismo, un estudio realizado por Rodríguez, sus datos de validez y confiabilidad, por tal razón,
Espinosa & Pardo (2013) en Ibagué (Colombia), in- esta investigación tuvo como objetivo analizar las
dicó que el 84 % de los adolescentes habían manifes- propiedades psicométricas del Cuestionario de
tado conductas de tipo antisocial y el 12 % restante Conductas Antisociales en la Infancia y Adolescencia
conductas delictivas, concluyeron que, si la familia (CASIA) aplicado a población colombiana adolescen-
no servía de grupo nuclear formativo en la adquisi- te escolarizada.
ción de habilidades sociales para el establecimiento
de vínculos sociales, se debía delegar esa función al
ente de educación, el cual debía brindar espacios Método
de socialización para la promoción del apego, las
creencias en los lineamientos tradicionales, el ca-
Tipo de estudio
rácter de compromiso y la actuación participativa.
Se planteó un estudio instrumental, de acuerdo con
Por su parte, Uribe, Sanabria, Orcasita, & Barreto la categorización de Montero & León (2007), por
(2016) realizaron un estudio en cinco ciudades co- cuanto está encaminado al análisis de las cualidades
lombianas, y encontraron que las conductas anti- psicométricas de una prueba.
obtenidos con autovalores superiores a 1, número En la tabla 3 se muestran los niveles de extracción
de factores que se confirmaron con el método pa- de cada reactivo.
ralelo de Horn por medio del programa R.
Tabla 3. Extracción de cada reactivo del CASIA.
Los resultados de la tabla 2 muestran un KMO su- Dados los resultados de la tabla 3, se encuentra
perior a 0,7 y una significancia en la prueba de que la totalidad de reactivos superó el valor de
esfericidad de Bartlett inferior a 0,05, lo que re- 0,3, el cual fue el valor mínimo establecido para
fiere un tamaño muestral apropiado para realizar conservar los ítems, lo que se recomendó incluirlos
el análisis factorial, el cual se realizó por medio en su totalidad. Tras esto se obtuvieron los datos
de la extracción de componentes principales con de los factores obtenidos y la varianza total expli-
rotación Varimax (dicho método de rotación fue cada (tabla 4).
elegido debido a las ortogonalidades de la matriz).
Item12 0,669
% de la
Componente Total % acumulado
varianza Item7 0,672
1 1,701 8,504 8,504 Item13 0,635
2 1,666 8,331 16,835 Item18 0,216
3 1,637 8,185 25,019 Item1 0,825
4 1,619 8,096 33,116 Item3 0,626
5 1,559 7,794 40,910 Item20 0,446
6 1,553 7,763 48,673
Fuente: elaboración propia.
7 1,466 7,330 56,003
8 1,181 5,903 61,906 La matriz de la tabla 5 muestra que de los 8 compo-
nentes obtenidos, 2 de ellos no presentaron carga
Fuente: elaboración propia. de reactivos, por lo cual, realmente se obtuvieron
6 componentes (número de factores confirmados
Los resultados de la tabla anterior muestran que se por medio del análisis paralelo de Horn), proce-
obtuvieron 8 componentes extraídos, que explicaron diendo a realizar nuevamente el análisis factorial
el 61,91 % de la varianza obtenida. Posteriormente se ajustado a 6 factores fijos (tabla 6).
realizó la matriz de componentes rotados (tabla 5)
Tabla 6. Componentes extraídos y varianza explicada,
para verificar la agrupación de los reactivos a la luz
ajustada a 6 factores.
de los componentes.
Item19 0,713
Tabla 7. Matriz de componentes rotados, ajustada a 6 Tabla 8. Correlaciones entre elemento-total de la prue-
componentes. ba y Alfa si se elimina el reactivo.
Componente Correlación
Alfa de Cronbach si se
elemento-total
1 2 3 4 5 6 elimina el elemento
corregida
Item9 0,646 Item1 0,296 0,748
Item14 0,609 Item2 0,294 0,747
Item18 0,553 Item3 0,378 0,741
Item4 0,548 Item4 0,237 0,751
Item8 0,691 Item5 0,157 0,754
Item16 0,528 Item6 0,417 0,738
Item17 0,705 Item7 0,169 0,754
Item7 0,648 Item8 0,217 0,752
Item11 0,516 Item9 0,343 0,743
Item13 0,622 Item10 0,242 0,750
Item2 0,493 Item11 0,322 0,745
Item10 0,736 Item12 0,387 0,741
Item19 0,664 Item13 0,302 0,746
Item5 0,782 Item14 0,455 0,733
Item6 0,441 Item15 0,312 0,746
Item12 0,695 Item16 0,421 0,736
Item1 0,708 Item17 0,302 0,747
Item3 0,483 Item18 0,291 0,747
Item15 0,316 Item19 0,280 0,748
Item20 0,484 Item20 0,469 0,731
Tabla 9. Estadísticos de confiabilidad por dos mitades. que permitan cuantificar estas conductas, objetivo
al que se intentó aportar en este estudio.
Confiabilidad por dos mitades
Alfa de Cronbach Parte 1 Valor 0,525
En este orden de ideas, los resultados de la presente
investigación mostraron desde el análisis factorial
N de elementos 10a
que la totalidad de los reactivos son apropiados para
Parte 2 Valor 0,666
medir el constructo ya nombrado, mostrando además
N de elementos 10b 6 factores claramente constituidos que explicaron el
N total de elementos 20 51,51 % de la varianza total acumulada. Los factores
obtenidos difieren parcialmente de la versión origi-
Correlación entre formas 0,609 nal y del manual de la prueba del Cuestionario de
Coeficiente de Longitud igual 0,757 Conductas Antisociales en la Infancia y Adolescencia
Spearman-Brown Longitud desigual 0,757 (CASIA) (Gonzales, 2012), en tanto que en ellos halla-
ron 8 factores. Sin embargo, la diferencia radica en
que un factor obtenido en el presente estudio recogió
Dos mitades de Guttman 0,749 los reactivos de dos factores, fenómeno que ocurrió
a. Los elementos son: Item1, Item2, Item3, Item4, dos veces (una vez por cada categoría independien-
Item5, Item6, Item7, Item8, Item9, Item10. te, lo que explica el pasar de 8 a 6 factores), pero que
b. Los elementos son: Item11, Item12, Item13, al revisarlo semánticamente guardaban coherencia y
Item14, Item15, Item16, Item17, Item18, Item19,
Item20.
conservaban las dos categorías no independientes,
ya que ambas son consideradas componentes del
Fuente: elaboración propia. constructo de conducta antisocial: 10 ítems se re-
fieren a conductas en las que existe un componente
de agresividad, y los otros 10 ítems, hacen referencia
Discusión a conductas cuya característica específica es que
transgreden el orden social, y las normas sociales,
Es preciso mencionar que existen una multiplici- éticas y morales que regulan el comportamiento in-
dad de factores respecto a la condición antisocial. teractivo con los demás. Lo anterior, a pesar de la
Estudios realizados demuestran la alta comorbili- discrepancia de 8 a 6 factores, muestra la coherencia
dad de trastornos asociados al desarrollo biológi- entre los reactivos y su organización factorial acorde,
co y social de los adolescentes y la probabilidad lo que permite afirmar la validez de la escala para
de caer en conductas delictivas (Gendreau et al., medir la conducta antisocial.
1996). Teniendo en cuenta que la manifestación de
conductas antisociales en los niños, niñas y adoles- Por otro lado, los datos de confiabilidad (alfa de
centes, parte de una transgresión de las normas Cronbach = 0,755) y consistencia interna (dos mi-
sociales y de la violación de los derechos de los de- tades de Guttman = 0,749) muestran una escala
más, con una importante significación social, puesto consistente en sí misma y con datos apropiados de
que repercuten los efectos de manera negativa en confiabilidad para la población escolarizada obje-
el contexto social y familiar del sujeto, el abordaje to de investigación. Estos datos de confiabilidad
en términos de evaluación e intervención demanda son similares a los hallados en la versión original
la actuación de diferentes áreas de la Psicología: del Cuestionario de Conductas Antisociales en la
clínica infantil, educativa, social, entre otras. Tal y Infancia y Adolescencia (CASIA) (Gonzales, 2012),
como menciona Gonzales (2012), la sociedad actual donde se determinó la fiabilidad a través de la con-
se ha visto inmersa en diversos tipos de comporta- sistencia interna del mismo, mediante un alfa de
miento que traen consigo consecuencias negativas Cronbach = 0,812.
tanto en el ámbito social y familiar del individuo.
Dicho así, los procesos evaluativos y de intervención Respecto a las limitaciones que tuvo el estudio se
en esta población, requieren del uso y disposición puede concluir que, aun cuando el tamaño muestral
de instrumentos de evaluación útiles y objetivos era apropiado (Lloret-Segura, Ferreres-Traver,
Hernández-Baeza, & Tomás-Marco, 2014) y la ma- tal que puedan realizarse diagnósticos preventivos
triz de correlaciones mostraba un adecuado ajuste y procesos de intervención necesarios para la dis-
para los análisis factoriales (KMO = 0,736; Bartlett minución de las mismas y un manejo acertado del
sig. = 0,000), la muestra puede contar con sesgos, comportamiento infantil y adolescente colombiano.
tanto por ser una muestra con alta o baja conducta Esto supondrá un aporte importante y de interés
antisocial, lo cual sumado a que el muestreo fue para el campo clínico e investigativo en materia de
no probabilístico y pertenecientes a dos municipios niñez y adolescencia, mediante la contribución a
de una misma región, aumenta la probabilidad de determinar los contenidos de aparición, desarrollo
observar dichos sesgos. Por esto se recomiendan y mantenimiento de tales conductas con el fin del
futuros estudios con muestras más amplias y de di- mejoramiento de la convivencia social e interacción
ferentes lugares del país, para garantizar la repre- interpersonal en las diferentes áreas de ajuste de
sentatividad de la población. Otra limitante radica niños, niñas y adolescentes.
en que no se realizó una prueba piloto, que hubie-
se permitido aclarar términos que probablemente
no se ajustan a la población colombiana, ya que Referencias
la prueba es originaria de España lo cual permite
Almonacid, J. & Rosario, F. (2017). Clima Social
recomendar para otra fase de esta línea de investi-
Familiar y Conductas Antisociales en ado-
gación la necesidad de iniciar por adaptaciones del
lescentes de nivel secundario del distrito de
lenguaje de la prueba.
Puente Piedra, Lima 2017. (Tesis de pregra-
do). Universidad Cesar Vallejo. Recuperado
Frente a posibles investigaciones futuras, se reco-
de http://repositorio.ucv.edu.pe/bits-
mienda tener en cuenta aspectos de adaptación
tream/handle/UCV/3166/Almonacin_MJC.
cultural de la prueba, especialmente en términos
pdf?sequence=1&isAllowed=y
no apropiados para Colombia, estudios de validez
de criterio (comparando resultados de esta prueba
Angold, A., Costello, E.J., & Erkanli, A. (1999).
y el Cuestionario A-D de conductas antisociales y
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población escolarizada regular y personas que se
org/10.1111/1469-7610.00424
encuentren bajo responsabilidad penal). Ya que,
en las posibles aplicaciones del instrumento, se Aslund, C., Comasco, E., Nordquist, N., Leppert,
recomiendan estudios descriptivos acerca de la J., Oreland, L., & Nilsson, K.W. (2013). Self‐
presencia de conductas antisociales en los mismos reported family socioeconomic status, the 5‐
niños escolarizados, comparativos según regiones HTTLPR genotype, and delinquent behavior
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frente a otros países latinoamericanos o de otros Correa, D. M., Manjarrés M., N. P., Montes Fontalvo,
continentes. J., & Polo Suárez, C. R. (2003). Factores fa-
miliares, educativos y políticos asociados a
Finalmente, este estudio arroja datos preliminares la violencia en jóvenes del sector urbano del
de la validez y de la consistencia del Cuestionario de municipio de Ciénaga (Magdalena). Psicología
Conductas Antisociales en la Infancia y Adolescencia desde el Caribe, 11, 57-74.
(CASIA) en población Colombiana adolescente esco-
larizada entre 7º a 10º grado. Con lo cual se espera Erickson, M. T. (1992). Behavior disorders of children
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continuar en esta línea de investigación, tanto en
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