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Funciones básicas

Para poder introducir los requisitos, habilidades, funciones y desarrollo afectivo, que
necesita un niño para introducirse al aprendizaje formal, es necesario definir en
forma teórica lo que se entiende por madurez escolar para el aprendizaje.
La “madurez escolar”, se refiere a la posibilidad de que cuando un niño entre a un
colegio posea un adecuado desarrollo mental, fisiológico, para enfrentar los
diferentes aprendizajes.
En el niño inmaduro, el progreso será lento, experimentará fuertes sensaciones de
inseguridad y probablemente presentará en un futuro, conductas de evitación frente
al estudio, que se reflejará en negativa a estudiar y presentará angustia asociada a
la situación de aprendizaje (López de Lérida-Milicic, 1974).

La mayoría de las destrezas que una persona adquiere son el resultado de dos
procesos específicos: maduración y aprendizaje. La definición de estos dos
términos tiene más bien características acentuantes que excluyentes. Sin embargo,
el aprendizaje de cada persona es en gran manera dependiente del grado de
maduración, es decir, de su disposición para aprender. Al hablar de madurez nos
referimos a los fenómenos de maduración y de aprendizaje en forma conjunta, pero
en relación a una exigencia determinada, en este caso al ingreso a primer año
básico.
El término madurez escolar es un término global, que incluye tanto la madurez
emocional que posibilita la adaptación del niño a una situación nueva como
la madurez para el aprendizaje de la lectura.

Madurez escolar: se refiere a la posibilidad que el niño posea cierto nivel de


desarrollo físico, cognitivo, emocional y social, que le permita adaptarse y
enfrentar adecuadamente a los requerimientos y exigencias del aprendizaje
formal.

En el año 1925, el Report Comitee on Reading, utiliza el concepto por primera vez
y viene a significar que el niño posee las actitudes que le permitirán los aprendizajes
básicos en un tiempo prudencial.
Existen diferencias individuales importantes, de un niño a otro y cada uno tiene un
momento en el que está listo para aprender a leer.

Dentro de este concepto abordaremos la relación e interdependencia entre el


desarrollo cognitivo y socio afectivo.

Las funciones básicas en el ámbito intelectual es uno de los primeros requisitos que
deben desarrollar en la etapa de párvulos y primera infancia.

1. Estas destrezas o habilidades se desarrollan en 2 campos:

 Habilidades Cognitivas
 Habilidades socio-afectivas

Antes de analizar cada una de ellas, es importante determinar que existen factores
externos que condicionan directamente en este desarrollo.

Factores Ambientales

 Estimulación pobre
 Limitación en el vocabulario
 Estimulación excesiva
 Precarias condiciones socioculturales
 Familias disfuncionales
 Estilos parentales
Factores relacionados a la salud

 Problemas hereditarios: biológicos congénitos y adquiridos, como por


ejemplo Síndrome de Down, deficiencias tiroideas, diabetes infantil, entre
otros. Cuando el padre o la madre o un pariente cercano, han presentado
características de inmadurez en su desarrollo los hijos pueden heredar estas
características, con mayor tendencia en el sexo masculino.

 Problemas adquiridos: Como por ejemplo, traumatismo de parto, meningitis,


epilepsia refractaria, enfermedades metabólicas, entre otros.

Definición funciones básicas


Las funciones básicas son habilidades, destrezas, requisitos del desarrollo
cognitivo del niño necesarias para enfrentar el aprendizaje formal escolar.
Estas evolucionan según la madurez del SNC propio de cada niño, esto
quiere decir con un ritmo y tiempo diferente.

Actualmente no existe unanimidad en el criterio de clasificación de las


destrezas o funciones básicas, necesarias para el aprendizaje formal.
Según distintos autores, las funciones básicas están clasificadas de distinta manera.
Según A.M. Poppovich en el año 1968, las clasifica en:
Lenguaje, percepción, esquema corporal, orientación espacio temporal. Lateralidad.
RELLENAR Con definiciones
En base a nuestra experiencia, especialmente para el aprendizaje de la
lectoescritura nos hemos basado en la clasificación de Marianne Frostig.
Marianne F. , (Austiaca) se formó inicialmente como trabajadora social, gimnasia
rítmica y posteriormente estudio educación y psicología en Los Ángeles,
California EEUU, donde fundo un centro de terapia educativa (1947), el cual
existe hasta nuestros tiempos. Ese centro se formó para la intervención de niños
con dificultades de aprendizaje.
Ella desarrollo una prueba estandarizada, llamada test de percepción visual de
Marianne frostig (1964), cuyo objetivo es evaluar las siguientes áreas:
Coordinación visomotora, percepción figura –fondo, constancia perceptiva,
percepción de posición en el espacio y relaciones espaciales. Es una prueba de
fácil administración y para nosotros ha sido predictiva y están han sido las
razones por lo que la hemos usado. Además, permite observar la actitud del niño
frente al trabajo, la tolerancia, manejo de la frustración y la capacidad de
comprensión de instrucciones simples asociada a la ejecución.

Coordinación visomotora
Es la capacidad de coordine la visión con el movimiento del cuerpo,
especialmente de la mano) nuestros ojos coordinan la acción de la mano.

Percepción figura –fondo


Es la capacidad de visualizar y discriminar dos planos, la hoja y la figura o
símbolo que esta sobre ella.

Constancia perceptiva
Es la habilidad que permite reconocer figuras con diferentes tamaños, texturas
y posición en el espacio, esto implica poseer los rasgos esenciales de un objeto.

Posición el espacio
Es la habilidad de percibir rotaciones e inversiones en figuras comunes
Relaciones espaciales
Estas funciones requieren análisis visual del espacio entre dos objetos (cerca-
lejos, dentro-fuera, delante-atrás, arriba-abajo)

En estudios publicado se detectaron que estas cinco funciones son predictores


de potencial de dificultades en el proceso del aprendizaje formal de la
lectoescritura.

RELLENAR DIFICULTADES EN EL APRENDIZAJE

Dificultades en el aprendizaje
En el aprendizaje se observan las siguientes dificultades:

La incapacidad para organizar pequeñas actividades, (se le caen cosas, pierde


cosas). Son niños que poseen escasa motivación frente a las actividades
estructuradas, tendiendo a ser renuentes a realizarlas, son poco perseverantes,
generando en ocasiones rechazo a las actividades (tijeras, manejo de las tijeras,
dibujo con lápiz y papel, rompecabezas entre otros).
El nivel de actividad en estos niños puede ser alto o bajo, suelen fatigarse con
facilidad tendiendo a la dispersión. A nivel de cerebro, no pueden categorizar o
priorizar los estímulos del entorno, generando respuestas inadecuadas ya que
no comprenden o no pueden evaluar los estímulos de forma adecuada.
Conductualmente suelen ser impulsivos, con baja regulación o planeamiento de
sus conductas o emociones. Les cuesta manejar el error o la frustración,
tendiendo a actuar las emociones o a inmovilizarse, estos mecanismos le
generan un alto nivel de stress.
En psicopedagogía, la relación entre la estimulación entre un niño común y un
niño con NEE especiales es 1:5.
Los niños que presentan una disarmonía y/o déficit en las funciones básicas
suelen presentar características especiales desde muy pequeños, lloran
frecuentemente e la primera infancia, presentan alteraciones del ciclo del sueño,
tienen una torpeza motora y su ejecución es lenta o precipitada. Se caen con
frecuencia sin que exista un obstáculo, sus movimientos son bruscos (empujan,
golpean sin medir la fuerza), en la etapa escolar esto es interpretado como
agresivos (pseudoagresivos, ya que no existe la intención de agredir).
En ocasiones se observa que les cuesta regular el tono muscular (hipertónico o
hipotónico).
En su lenguaje presentan dificultad en el tono de la palabra hablada (chilla o
susurra), suelen presentar dislalias y la expresión de sus ideas es
desorganizada.

Dificultades socioafectivas
En el ámbito socio-afectivo, debido a las características escritas anteriormente,
la integración social es compleja, tienen mayor exposición al fracaso, no logran
desarrollar estrategias de acercamiento, tampoco comprenden las reglas dadas
por el adulto o generadas por sus pares, en ocasiones no pueden seguir el ritmo
de los juegos, tendiendo a desintegrarse de las actividades colectivas.
Algunos niños son hiper-reactivos a los ruidos, a las sensaciones de tacto,
situación que también interfiere en las interacciones sociales. También existen
Niños que lloran frente a cualquier dificultad propia de la edad, ya que no cuenta
con las herramientas o habilidades para resolverlas (mecanismo regresivo),
buscando al adulto ya que poseen escasa autonomía e independencia.

Como hemos visto, la adaptación de ellos es compleja, por lo tanto, tienden a


repetir las actividades y juegos que ya conocen (placer), siendo reacios a los
cambios. Emocionalmente suelen presentar cambios de humor sin factores
externos que lo condicionen, ya que perciben el mundo cambiante y
amenazante, generándole esto mucho stress, que siempre es percibido por el
adulto.
Dado las características o antecedentes antes mencionados, el niño con
disarmonía o inmadurez, está expuesto con mayor frecuencia al fracaso
generándole un bajo concepto de sí mismo y con el transcurso del tiempo puede
llegar a un concepto y valoración de sí negativo.

 Alumnas harán un esquema vacío


 Break
 Laboratorio, estudio de caso, juegos y fichas de entrenamiento de bolsas
(buscar material)
 Ticket de salida

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