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UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE HONDURAS

02- -03-- 2019 GOLPES DE ESTADO

CAMPUS SIGUATEPEQUE

PRESENTADO POR:
DANNY EDIL LOPEZ PAZ

NUMERO DE CUENTA:
201810080112

CORREO ELECTRONICO
ferreterialospaisas2010@hotmail.com

CATEDRATICO:
NOLVIA LIZZETH AMAYA MATEO

ASIGNATURA:
HISTORIA DE HONDURAS
INTRODUCCION

El presente documento trata de exponer de forma abreviada y entendible la forma


en que se han gestado muchos golpes de estado en nuestro país y como estos han
afectado el desarrollo y la economía local. El papel que ha jugado las fuerzas
armadas de Honduras desde sus inicios en cada escenario y que han marcado con
sangre las ambiciones de algunos presidentes que no consideraron que era lo más
conveniente para su país. Desde la Independencia de Centro América de España,
Honduras vivió un permanente estado de inestabilidad política. Al principio el Estado
de Honduras era muy débil, y no tenía pleno dominio sobre su territorio. Los demás
países de Centro América intervenían en la política interna, así como Honduras
intervenía en la de estos. Y los países centroamericanos frecuentemente prestaban
sus territorios para las fuerzas insurgentes de los países vecinos.
GOLPE DE ESTADO (1904)
Domingo Vázquez toma posesión del mando el 18 abr. 1893, y el 22 feb. 1894 la
revolución liberal que encabeza Policarpo Bonilla entra triunfante en la capital. Se
emiten leyes liberales. Se envía auxilio al presidente de Nicaragua, general Zelaya,
para que sofoque una rebelión. Se fomenta la educación de la mujer. Se establece
la República Mayor de Centroamérica formada por El Salvador, H. y Nicaragua, que
fracasa debido a un golpe militar de Tomás Regalado, en El Salvador, cayendo el
presidente constitucional Rafael Antonio Gutiérrez. En 1899 sube a la presidencia
el general Terencio Sierra (1899-1902).
Se da un golpe de Estado en 1904. Se persigue a los liberales. Es comunicado el
laudo del rey de España en el asunto de fronteras con Nicaragua, emitido el 23 dic.
1906. La revolución liberal entra triunfante a Tegucigalpa en 1907. Sube a la
presidencia Miguel R. Dávila. Se fomenta el cultivo del tabaco y elaboración de
puros. Se desata la guerra civil. Hay intervención de EE. UU. y asciende Francisco
Bertrand como presidente provisional. Después fue electo Manuel Bonilla, que
fomenta la educación popular. Se inicia la era de concesiones a las compañías
extranjeras. Muere el 21 mar. 1913 y continúa el periodo presidencial Francisco
Bertrand. El maestro chileno Dr. Manuel Soto organiza la escuela primaria. Se
procura la conciliación de la familia hondureña.
El 1 feb. 1933 asciende al poder Tiburcio Carias Andino. Gobierna con mano fuerte
(1933-48). Durante su mandato de paz, orden y progreso material, se fomenta la
agricultura. Se construyen edificios públicos. El 1 en. 1949 toma posesión de la
presidencia de la República Juan Manuel Gálvez, demócrata, sin odios. Gobierna
con los hondureños más capacitados. Funda los Bancos: Nacional de Fomento y
Central. Por enfermedad se ausenta del país. Se hace cargo interinamente el
vicepresidente julio Lozano Díaz.
GOLPE DE ESTADO (1956)
Fue en 1956 cuando comienzan en Honduras los golpes de Estado, teniendo como
protagonistas a las Fuerzas Armadas (FF AA). Antes habían ocurrido
derrocamientos de gobiernos, pero las acciones eran promovidas por caudillos
políticos con las banderas Nacional o Liberal que se alzaban en armas en busca del
poder. En estas revueltas utilizaban a humildes campesinos que los fanatizaban con
la bandera de color rojo o azul, según su militancia. De esta forma hubo decenas de
miles de muertos que la historia registra como “cincuenta años de matanzas”. Días
antes de que culminara su mandato en 1954, el presidente nacionalista Juan Manuel
Gálvez salió del país supuestamente enfermo y dejó en el mando a su
vicepresidente Julio Lozano.
Como no hubo acuerdo en una reunión de la Asamblea Nacional Constituyente para
designar al sucesor de Gálvez, porque los diputados nacionalistas no llegaron, se
rompió el orden constitucional y Lozano Díaz asumió todos los poderes.
“EL PRIMER GOLPE”
A Lozano Díaz se le pegó el gusanito del poder. Con la finalidad de legalizarse,
convocó a elecciones el 7 de octubre de 1956. Los comicios para instalar una
Asamblea Nacional Constituyente fueron ganados por amplia mayoría (más de 300
mil votos de diferencia) por el Movimiento Nacional Reformista, liderado por Lozano
Díaz. A todas luces hubo fraude.
Esta fue la principal causa para que por primera vez las Fuerzas Armadas
incursionaran en el poder dándole a Lozano golpe de Estado el 21 de octubre de
1956.
El golpe lo encabezaron el general Roque J. Rodríguez, director de la Escuela
Militar; coronel Héctor Caraccioli, comandante de la Fuerza Aérea Hondureña y el
mayor Roberto Gálvez Barnes, ministro de Fomento. Este golpe fue bien visto por
unos sectores, pero por otros no.
El 24 de mayo de 1957 en el Ejército fue planificado un golpe contra la Junta Militar.
Esta intentona fue encabezada por el coronel Armando Velásquez Cerrato, quien
libró un combate con la policía en una de las calles de Tegucigalpa, luego se refugió
en la embajada de Guatemala. La intentona golpista fracasó.
La Junta Militar convocó a elecciones para una Asamblea Nacional Constituyente
que se realizaron el 22 de septiembre de 1957. Esta Asamblea nombró al liberal
Ramón Villeda Morales como presidente constitucional para el período 1957/1963.
El 19 de septiembre de 1957 la Asamblea Constituyente le concedió a las Fuerzas
Armadas “autonomía militar”, supuestamente en agradecimiento a su “gesta” de
1956 cuando depusieron a Lozano Díaz.
VILLEDA MORALES, UN OBJETIVO MILITAR
Villeda Morales, que tomó posesión de su cargo el 21 de diciembre de 1957, fue
víctima de una intentona golpista en 1959, liderada por el coronel Armando
Velásquez Cerrato que reafirmaba su interés por llegar al poder por esta vía menos
elegante.
Pero Villeda Morales estaba condenado a no terminar su período presidencial. El 3
de octubre de 1963 el general Oswaldo López Arellano comandó un cruento golpe
de Estado contra el presidente constitucional.
El organismo castrense adujo como causas del golpe a la “supuesta infiltración
comunista de que era objeto el gobierno de Villeda Morales, la existencia de la
Guardia Civil como una amenaza contra el Ejército y el lanzamiento de un
candidato- Modesto Rodas Alvarado- que predicaba el odio y no la unidad de la
familia hondureña”.
EL GOLPE MÁS SANGRIENTO (1963)
De todos los golpes de Estado que registra la historia política hondureña el del 3 de
octubre de 1963 ha sido el más sangriento.
Algunos historiadores hablan de hasta tres mil muertos siendo los miembros de la
Guardia Civil, cuerpo armado leal al presidente depuesto, Ramón Villeda Morales,
los más afectados. Estos guardias, que habían sido desarmados por orden superior
un día antes, estaban durmiendo la madrugada del 3 de octubre cuando fueron
atacados a balazos por el Ejército. Los historiadores responsabilizan al Partido
Nacional de haber estado detrás de este cruento golpe de Estado, aunque hay
quienes aseguran que el presidente Villeda Morales ya sabía del plan, aunque él lo
negó posteriormente. El propósito del golpe era, entre otros, evitar que llegara al
poder Modesto Rodas Alvarado, padre de Patricia Rodas, protagonista de este
último golpe.
GOLPE DE ESTADO 1963
Precisamente ocho días después del golpe de Santo Domingo, el 3 de octubre de
1963, las fuerzas armadas de Honduras reprodujeron el drama en Tegucigalpa. El
libreto apenas sufrió cambios de menor importancia. También aquí la acción
comenzó a las tres de la madrugada, y los principales actores fueron nuevamente
los oficiales de la fuerza aérea. Dos escuadrones de aviones de caza volaron sobre
el palacio presidencial, advirtiendo al Presidente que debía rendirse si no quería
sufrir un bombardeo, mientras las tropas del ejército dominaban a la guardia civil.
A las 5 de la mañana la voz del comandante en jefe de las fuerzas armadas, coronel
de la fuerza aérea Oswaldo López, proclamó por radio a la nación que las
“patrióticas fuerzas armadas habían intervenido para acabar con las flagrantes
violaciones de la Constitución y la evidente infiltración comunista”. En respuesta al
creciente “clamor e inquietud del pueblo, ya la anarquía”, agregó López, las fuerzas
armadas habían resuelto salvar a la patria e impedir el fraude que se preparaba
para las elecciones presidenciales que debían realizarse el 13 de octubre. El
presidente Ramón Villeda Morales, cuyo período presidencial debía expirar ochenta
días después, y Modesto Rodas Alvarado, el favorito en la sucesión, fueron llevados
por la fuerza aérea al exilio en Costa Rica. Se suspendió el llamado a elecciones;
se disolvió el Congreso; fue abolida la Constitución de 1957; y López se proclamó
presidente provisional.
Pero cada vez era más difícil gobernar el Estado en vista de la existencia de dos
organizaciones políticas autónomas: el Partido Liberal y las fuerzas armadas. Desde
el principio los oficiales conservadores discreparon públicamente con el Presidente.
En el transcurso del año 1959 Villeda apenas logró sobrevivir a cuatro intentos de
derrocarlo. El último fue obra de la policía, la que posteriormente fue disuelta para
formar una nueva guardia civil de 2.500 hombres. A medida que los jefes de las
fuerzas armadas gravitaban nuevamente alrededor de su tradicional base, el Partido
Nacionalista, el aprensivo Presidente y su Partido Liberal comenzaron a convertir a
la guardia civil en una suerte de contrapeso. Cuando Villeda Morales resolvió que
esta última supervisara las elecciones presidenciales, la enemistad entre la guardia
civil y las fuerzas armadas precipitó la crisis, pues las fuerzas armadas, tradicionales
garantes y celosos defensores de la integridad de las instituciones del país, se
habían visto privadas de una de sus habituales funciones.
Durante la campaña apareció otra amenaza a las fuerzas armadas, en la persona
del candidato presidencial del Partido Liberal, Modesto Rodas Alvarado. Alentado
por el abrumador apoyo de los campesinos, los obreros y la baja clase media,
prometió acelerar el ritmo de las reformas y transformaciones. Prometió suspender
la colaboración con los nacionalistas, aplicar inflexiblemente los programas agrario
e impositivo que habían sido formulados poco antes por el presidente Villeda y
aprobados de acuerdo con el programa de la Alianza para el Progreso. Los
alarmados moderados se separaron de los liberales y organizaron el Partido
Republicano Ortodoxo; pero a pesar del cisma, que anticipaba que Rodas triunfaría
fácilmente. Cuando se señaló que las fuerzas armadas podían tomar partido si el
programa provocaba resistencia de la derecha, Rodas se vanaglorió que estaba
dispuesto a poner al ejército en su lugar, además de que no ocultó su simpatía por
la guardia civil.
Pero es probable que el principal factor del golpe haya sido la ambición de un
hombre: el coronel Oswaldo López, jefe de las fuerzas armadas, el mismo hombre
que doce horas antes del golpe militar dio seguridades públicas en el sentido de que
no habría ningún golpe. El coronel López había llegado al más elevado cargo de las
fuerzas armadas a edad relativamente temprana, y de acuerdo con la tradición de
la política hondureña aún tenía que escalar un rango en su carrera militar: la
presidencia de la república.
Los jefes del Partido Nacionalista se creían gobernantes de Honduras por derecho
propio. Antes de 1956 su partido había dominado la política nacional, y
consideraban que habían demostrado suficiente magnanimidad al permitir que los
liberales gozaran de seis años de usufructo del tesoro y los cargos públicos. El grave
problema que afrontaban consistía en que el gobierno y el programa del presidente
Villeda había convertido al Partido Liberal en la organización más popular, de modo
que no había perspectivas de que los nacionalistas pudieran retornar al poder a
través de elecciones libres.
Por el contrario, el Partido Nacionalista y sus dirigentes encaraban la desagradable
perspectiva de seis años más sin favores oficiales, sin los emolumentos de los
cargos públicos y sin oportunidades de practicar el peculado… todo lo cual podía
implicar la destrucción del partido y la ruina financiera y pública de su dirección. Era
la perspectiva por demás desagradable, y no podía aceptarla. En su desesperación
y de acuerdo con una añeja tradición, llamaron al ejército para que se ocupara de
“salvar a la patria”.
Así, la decisión de los nacionalistas de impedir a toda costa la victoria liberal selló
la suerte política de Rodas y de su partido. La actitud de los nacionalistas era que
los liberales ya habían tenido su oportunidad bajo el gobierno de Villeda; ya era
tiempo de que el gobierno volviera a manos más responsables. Como era imposible
obtener democráticamente este resultado, se exhortó a los partidarios militares del
Partido Nacionalista a que apelaran a la fuerza. El golpe fue aplaudido públicamente
por los políticos del Partido Nacionalista y por los grupos de comerciantes y
terratenientes.
Poca duda cabe sobre la naturaleza del gobierno que ocupó el poder en Honduras
el 3 de octubre de 1963. Se trata evidentemente de un régimen que nació con el fin
de bloquear las reformas consideradas perjudiciales para las fuerzas armadas y
para los intereses de los sectores propietarios y comerciales. El coronel López se
autoproclamó Presidente, y ejerce, como el coronel Peralta en Guatemala, los
poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Gobierna asesorada por un gabinete de
nueve hombres –un coronel y ocho civiles de acentuada posición antiliberal.
Los comunistas y los castristas conocidos, tratados ahora como criminales y no
como infractores políticos, han sido eliminados de las organizaciones estudiantiles
y obreras. La guardia civil fue desarmada y disuelta. El ejército regular ha asumido
el poder de policía, y ha reprimido eficazmente las demostraciones de los
estudiantes y los obreros contra el gobierno.
¿Hasta cuándo permanecerán en el poder las fuerzas armadas? “Hasta que se
hayan eliminado las condiciones que determinaron el movimiento contra Villeda”, ha
dicho el Coronel López. Cuando dio el golpe calculó que ello insumiría un año
aproximadamente, después de lo cual sería necesario levantar un nuevo censo
electoral, después de lo cual debía redactarse una nueva ley electoral, después de
lo cual se elegiría una nueva Asamblea Constituyente para que reparara una nueva
Constitución, después de lo cual se celebrarían elecciones presidenciales y
parlamentarias.
La duración del período implicado en todas estas actividades y la aparente falta de
futuro político para los liberales impulsó a Washington (por lo menos durante cierto
tiempo) a suspender las relaciones diplomáticas, interrumpir la ayuda militar y retirar
el personal del programa de ayuda. Pero esta actitud no ha ejercido una influencia
moderadora sobre los sombríos planes de López, y antes de terminado el año
Washington reconocía al nuevo gobierno.
GOLPE DE ESTADO (1972)
Asumió la Jefatura del Estado del 3 de octubre de 1963 al 5 de noviembre de 1965.
Una Asamblea Nacional Constituyente, dominada por diputados nacionalistas, lo
eligió Presidente de la república, hasta el 5 de junio de 1971. En su gestión se
crearon la Empresa Nacional Portuaria, el Banco de los Trabajadores y el Instituto
Nacional de Jubilaciones y Pensiones del Magisterio. También se produjo la guerra
entre Honduras y El Salvador.
En 1972 derrocó al Dr. Ramón E. Cruz, y en este nuevo período ocurrió el “Soborno
bananero”, por el que López perdió el poder en 1975. Durante su mandato como
Jefe de Estado observó la debida compostura de buen Gobierno, practicó
elecciones para integrar la Asamblea Nacional Constituyente y esta Asamblea en
funciones le otorgó el grado de General de Brigada y lo constitucionalizo.
(PRESIDENTE ELECTO POR LA CONSTITUYENTE)
6 de junio de 1965- 6 de junio de 1971
Su nuevo mandato, como Presidente Constitucional, continuó en la misma forma
que su mandato anterior; le dió amplio apoyo al desarrollo caminero y carretero, lo
mismo que a la cultura. López Arellano logró que los Partidos Políticos Liberal y
Nacionalista, firmaran un Pacto de Unidad Nacional, que lo llamaron “CONVENIO
POLITICO ENTRE EL PARTIDO NACIONAL Y LIBERAL DE HONDURAS”, aquel
Pacto fue celebrado el 7 de enero de 1971. Pero luego el Lic. Ricardo Zuniga
Agustinus, por temor a quedarse sin empleo, celebró otro Pacto al que llamaron “EL
PACTITO’, siendo este la verdadera causa de la caída del Dr. Ramón Ernesto Cruz.
4 de Diciembre de 1972- 22 de Abril de 1975
Toma el Poder de la Nación nuevamente por un Golpe de Estado (golpe de seda),
verificado el 4 de diciembre de 1972, deponiendo el Dr. Ramón Ernesto Cruz, quien
muestras de un magnífico mal gobernante. López Arellano en este período se
divorcia de los Partidos Liberal y Nacional para convertirse en un ciudadano
partidario del Populismo, el que lo llevo a su fracaso total. El 22 de abril de 1975 el
alto mando militar lo depuso, poniendo en su lugar al Coronel Juan Alberto Melgar
Castro.
GOLPE DE ESTADO (1975)
La caída del poder del Gral. López Arellano, ocurrida el 22 de abril de 1975, marcó
no solo el cambio en la estructura de las fuerzas armadas, en cuyo seno había
tomado mando un Consejo Superior, sino el ascenso de la burguesía intermediaria
con posiciones más cercanas a los de los grupos refractarios al ensayo reformista,
que con el escándalo bananero se tornaría más tibio y vacilante en su parte principal
lo que es la reforma agraria.
Por disposición del Consejo Superior asume la Jefatura de Gobierno el Gral. Melgar
Castro, militar que tenía buena imagen adentro del ejército.
La agitación social en el campo y las amenazas de represión a los dueños de las
tierras iban en aumento, mientras que el régimen daba largas al asunto agrario.
Numerosos campesinos fueron encarcelados por su participación en tomas o
recuperaciones de tierras, a consecuencia de lo cual la Unión Nacional de
Campesinos UNC, determino organizar para el 25 de junio de ese año una marcha
de hambre hacia Tegucigalpa con afiliados del Norte, Sur, Oriente y Olancho.
La matanza de Santa Clara y los Horcones
La fallida marcha desembocó en la muerte violenta de 14 personas en Juticalpa,
Olancho. En Juticalpa, los campesinos pernoctaron el 24 de junio en el centro Santa
Clara. A las diez de la mañana del día siguiente, un grupo de alumnos dirigidos por
el profesor Guillermo Hayes Mejía, Supervisor Departamental de Educación
Primaria en Olancho, llegó a este centro con el objeto de reclamar sus aulas de
clase.
Luego que llegaron frente al edifico, al parecer el Profesor saco un arma para exigir
que se le abrieran las puertas. Atrás de los escolares venia un grupo de los Agentes
del Departamento de Investigación Nacional, vestidos de civil, y estos
acompañando la acción de Hayes, penetraron al interior del edificio por otro de los
portones de este centro y comenzaron a dispararle a las personas que estaban
adentro.
La matanza de los Horcones ocurre después de este hecho. Luego de lo de Santa
Clara, el Gobierno nombra una Comisión Militar por la resonancia que tuvo esta
matanza. Esta comisión fue la que hizo el informe narrado a continuación. “Fueron
sacados de un presidio de Juticalpa varias personas y los llevaron a la hacienda de
“Los Horcones” propiedad de José Manuel Zelaya. Los llevaron para interrogarlos,
pero luego los mataron y mataron a los testigos que había por ahí también. El
teniente Benjamín Plata fue el que estaba al mando; ordeno que se metieran los
cadáveres en un pozo con dinamita. Se les encontró responsabilidad directa al
Mayor José Enrique Chinchilla, Subteniente Benjamín Plata, Manuel Zelaya y Carlos
Bahr. Se establece también que estas personas obedecían a una trama dirigida por
un sector perteneciente a la FENAGH Federación Nacional de Agricultores y
Ganaderos y miembros de la empresa privada, para crear un clima de
enfrentamiento y caos en Olancho.” Fueron remitidos a la penitenciaria central, y
salieron libres en 1980.
CAÍDA DE MELGAR CASTRO
En el Consejo Superior de las Fuerzas Armadas se fueron creando una serie de
contradicciones; de un lado un grupo de oficiales partidarios de las medidas
reformistas; del otro, el grupo opuesto a las mismas y adicto a la política
conservadora.
El Gral. Melgar, deseoso de seguir en el poder, intento vertebrar un movimiento
político con el apoyo del Partido Democrático Cristiano, Partido Innovación y Unidad
PINU y grupos pertenecientes al Partido Liberal, cosa que disgustó a los militares
más conservadores.
Por lo tanto, estos influyeron al Consejo Superior y le enviaron un memorando al
Gral. Melgar diciéndole que las medidas que se tomaron para reformar y orientar el
gobierno, no fueron aplicadas y que más bien él estaba ayudando a las políticas
contrarias a ellos. El memorando decía también que estaban poniendo en duda su
sinceridad y buena intención con las fuerzas armadas, y le exigieron manifestar con
que política quería el gobernar.
Melgar fue separado de la Jefatura de Gobierno el 7 de agosto de 1978, en lo que
se consideró el final del ensayo reformista.
GOLPE DE ESTADO (1978)
Otra junta militar tuvo en sus manos los destinos políticos y administrativos de
nuestra República. El triunvirato tomó posesión el 7 de agosto de 1978 y fue
presidido por el Jefe de las Fuerzas Armadas, el Gral. Policarpo Paz García. Lo
integraban también el comandante de la Fuerza Aérea, Coronel Domingo Álvarez
Cruz y el Comandante de la Fuerza de Seguridad Pública (FUSEP) el teniente
coronel Amílcar Zelaya Rodríguez.
Una de sus primeras medidas fue cancelar el Consejo Asesor, diciendo que iban a
utilizar esos fondos para otras cosas más importantes como ser la salud y
educación. Ya se había preparado un proyecto de Ley Electoral y de las
Organizaciones Políticas, el que luego sería objeto de drásticas modificaciones,
habiéndose fijado el 20 de Abril de 1980 como fecha para la elección de la Asamblea
Nacional Constituyente.
LA CONSTITUYENTE DE 1980
Las elecciones se llevaron a cabo normalmente, concurrieron a las urnas 954,464
personas, cantidad equivalente al 77% del total de electores inscritos. Con 495,789
sufragios a su favor el liberalismo obtuvo 35 diputados constituyentes; el partido
nacional 33, producto de 423,623 votos, y 3 diputados del PINU, por el que votaron
35,052 ciudadanos.
PROTAGONISMO DE LAS FUERZAS ARMADAS
Las Fuerzas Armadas dispone de unos 30 mil soldados, distribuidos en 3 brigadas
de infantería, 4 batallones de artillería, un regimiento de caballería blindada, Fuerza
Aérea, Fuerza Naval, Batallón de Ingenieros, Fuerza de Seguridad Publica,
Comando de Apoyo Logístico, Escuelas de Infantería, Comando y Estado Mayor,
Aplicación de Oficiales, Aviación Militar, Nacional de Policía, Paracaidismo y de
Comunicaciones.
Desde el golpe de estado del 21 de octubre 1956, y con una beligerancia que
incluye: el golpe del 3 de octubre de 1963 y el gobierno del Gral. López Arellano; El
golpe del 4 de diciembre y nuevo mandato de López Arellano; Luego el 22 de Abril
de 1975 el Coronel Melgar Castro; la Junta militar de 1978 y la presidencia
provisional del Gral. Policarpo Paz García, las fuerzas armadas han jugado un papel
decisivo en la vida del país.
Su estructura, su carácter de cuerpo en posesión de las armas nacionales y sus
vinculaciones internacionales, hacen de ellas un poder de incontrastable fuerza
política, expresada públicamente en varias ocasiones.
GOLPE DE ESTADO 2009
El golpe de estado del 28 de junio del 2009, fue el límite de una situación en la cual
estaban involucrados el presidente, funcionarios, empresarios, iglesia y pueblo en
general. El presidente constitucional Manuel Zelaya Rosales hizo una propuesta de
consultar a los ciudadanos por medio de votaciones (votaciones que se realizarían
el domingo 28 de junio del 2009) si aceptaban en colocar una cuarta urna en las
elecciones generales que se realizarían en noviembre del mismo año. El motivo de
consulta era para saber si la población estaba de acuerdo en hacer modificaciones
a la constitución de la república. Cuando redactaron la constitución de la republica
de honduras, los constituyentes de la época dejaron claro que esta podía ser
modificada en casi toda su totalidad, excepto cuatro artículos a los cuales les
llamaron artículos pétreos, según los constituyentes esto debía quedar así por la
inestabilidad que hay con los partidos políticos hondureños. Esta consulta vino a
desatar un gran problema que según muchos historiadores y sociólogos estaba
anunciada, en la mañana del 28 de junio, el ejército militar allano la casa
presidencial de honduras, de donde sacaron al presidente y luego lo trasladaron a
la fuerza aérea para que abordara un avión y sacarlo del país. La población
hondureña quedo dividida en tres sectores: los ciudadanos que estaban a favor de
la cuarta urna (resistencia), los que estaban en contra de la cuarta urna (golpistas)
y los que se catalogaban neutros (no tenían un panorama claro de la situación
hondureña).
El golpe de Estado del 28 de junio del 2009 fue un acontecimiento que afecto a
todos y cada uno de los hondureños desde los más pobres hasta los más ricos. La
economía se vio seriamente afectada por este incidente de magnitudes enormes,
ya que las vías de transporte y comunicación fueron interrumpidas por largos
periodos de tiempo, Honduras dejo de recibir ayudas del extranjero por un largo
tiempo y la separación de la OEA. Así como también la economía se vio afectada y
los derechos de las personas fueron irrespetados. Fue un tiempo de crisis que la
Historia de Honduras nunca olvidara, porque muchos de nuestros compatriotas
fueron asesinados secretamente dejando sus muertes impunes. La libertad y el
derecho de libre circulación de las personas fue incumplido con los Toques de
Queda, esta situación puso en riesgo la vida de muchas mujeres, niños, hombres.
Fue un periodo de retroceso en nuestra historia, regresamos a los gobiernos
totalitarios. Que este Golpe de Estado nos quede como una lección, no se puede
ser indiferente con lo que paso. Aprendamos de las lecciones de la historia, para no
volver a cometer los mismos errores. Se necesita investigar ya que todos
necesitamos más información la verdad, ya que una gran cantidad de medios de
comunicación ha manejado de manera conveniente la información.
La crisis política originada a partir de los sucesos del 28 de junio del 2009 tuvo su
causa inmediata en una consulta, promovida por Zelaya, que se realizaría ese día.
El objetivo era promover la instalación de una “cuarta urna”. El 23 de junio el
Congreso aprobó una ley por la cual se prohibiría la promoción de la consulta. A
pesar de la prohibición del Congreso, el Presidente Zelaya continuó adelante con la
consulta y ordenó que se distribuyesen las tarjetas de votación. El 26 de junio, la
Corte Suprema, a pedido del Ministerio Público, aprobó por unanimidad de votos
acusar como autor responsable al ciudadano José Manuel Zelaya, de los delitos de
traición a la patria, abuso de autoridad y usurpación de funciones en perjuicio del
Estado de Honduras; por lo cual dictó orden de captura y allanamiento contra el
presidente.
El 27 de junio, el día anterior a la votación, el Congreso designó una comisión
especial para investigar a Zelaya, supuestamente “por desconocer los fallos de las
instancias jurisdiccionales y violentar el Estado de Derecho”. Solamente cuatro
diputados izquierdistas se opusieron a la moción de la Asamblea. La madrugada del
día 28, las fuerzas armadas al mando del teniente coronel René Antonio Bueso,
allanaron la residencia presidencial, para posteriormente detener al presidente
Zelaya. Luego, fue trasladado a la base de la Fuerza Aérea al sur de Tegucigalpa
para ser llevado finalmente a Costa Rica.
Para un mayor entendimiento de lo sucedido en el país de Honduras se deberá
estudiar los antecedentes, es decir las causas que generaron el movimiento de
militares y el desalojo del Presidente Constitucional Manuel Zelaya. Lo realizado el
28 de junio por el Congreso Nacional no es una sucesión, como lo reconocen todos
los Poderes del Estado y otros órganos públicos, tampoco es una promoción, como
lo califica el Decreto porque el que vanamente se pretende destituir al Presidente
Zelaya, ni es una sustitución porque la designación del supuesto sustituto no se hizo
como manda la Constitución de la República.
El Congreso Nacional, entonces, violó la Constitución de la República. Simplemente
destituyó, sin potestades constitucionales para ello, al Presidente de la República,
desconociendo su investidura legitimada por el voto directo del pueblo hondureño
en elecciones democráticamente realizadas y aceptadas como legales por el
Tribunal Nacional de Elecciones. Por tanto, la designación del Presidente del
Congreso Nacional para ejercer el Poder Ejecutivo es el producto de una violación
a la Constitución de la República. Se trata, en definitiva, de un Golpe de Estado.

Año Nombre del Presidente Antecedente

1827 Dionisio de Herrera Herrera El presidente de


Guatemala José Arce
envía tropas y derrocan al
presidente de Honduras

1957 Julio Lozano Díaz Fue derrocado por las


Fuerzas Armadas de
Honduras por querer
disolver el congreso
nacional

1963 Ramón Villeda Morales Fue en su gobierno


donde se prohibía la
reelección presidencial.
Ha sido uno de los más
sangrientos en la historia
de Honduras.

1972 Ramón Ernesto Cruz Oswaldo López Arellano


de las FFAA fue el
encargado de realizar
dicho golpe.

1978 Juan Alberto Melgar El ejecutivo fue tomado


Castro por una junta militar,
luego entregado al
general Policarpo Paz.

2009 José Manuel Zelaya En su intento de legalizar


la reelección el congreso
ordeno su destitución y
en su lugar fue nombrado
Roberto Micheletti.

CONCLUSIONES
A lo largo de la historia de Honduras se ha visto envuelto en una serie de interés de
grupos de poder que pretenden perpetrarse en el poder sin considerar los daños
que le causan al desarrollo del país, la mayor parte de los golpes perpetrados han
sido las fuerzas armadas de Honduras las que han sido protagonistas hasta cierto
modo han abusado de sus poderes adquiridos mediante el uso de su poderío
armamentístico.
RECOMENDACIONES
Sin duda que el país no está en las condiciones de repetir estos escenarios por lo
cual debería de tomarse muy en cuenta por aquellos que intenten repetir historias
desagradables en donde los más pobres son los más afectados.
BIBLIOGRAFÍA
https://histounahblog.wordpress.com/historia-del-golpe-de-estado-en-honduras-de-
28-de-junio-del- 2009/
http://lib.ohchr.org/HRBodies/UPR/Documents/Session9/HN/IACHR_Inter-
AmericanCommissionofHumanRights%20_8SP.pdf
http://www.prensalibre.com/hemeroteca/golpe-de-estado-en-honduras

ANEXOS

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