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DIDACTICA PROYECTUAL
Características de la docencia en la síntesis creadora del Diseño.
Carmen Montellano Tolosa
Escuela de Diseño de la Universidad Tecnológica Metropolitana.
Santiago de Chile. 1999
Introducción
Este libro expone el ejercicio docente desarrollado en la universidad para formar personas
creativas en el ámbito profesional del Diseño. Cada línea se ha escrito pensando que puede ser
de utilidad y guía para todos los docentes interesados en activar y conducir la creatividad de
sus alumnos. Responde a la necesidad que tiene la Educación Superior para determinar cuáles
son aquellas características de la docencia universitaria que hacen posible desarrollar la
creatividad profesional.
La tesis con la cual se desarrolla plantea que la Didáctica Proyectual que se utiliza en la carrera
de Diseño, es un sistema de ocho características educativas que corresponden a cada uno de
los factores involucrados en este definido proceso docente. La didáctica del Diseño está
concebida como una actividad docente-creadora, por lo tanto, posee particularidades
específicas y elementos condicionantes que la hacen diferente a la didáctica tradicional.
El concepto básico de la Didáctica Proyectual aquí descrita, se fundamenta en la
reestructuración mental del estudiante para ser un creador, no se sustenta en lo que el
alumno debe saber para ser un diseñador. Este libro no se refiere a los contenidos ni a las
materias propias de la profesión del Diseño, sino que esclarece, en profundidad, aquellas
modalidades didácticas que conforman la interacción docente en este dominio.
Sobre el Diseño existe abundante bibliografía referida a la Historia del Diseño, es decir, al
trabajo innovador hecho por connotados diseñadores. En relación a la disciplina del Diseño, la
bibliografía examina la Teoría y la Metodología del Proceso de Diseño con bastante extensión.
Sobre la Docencia del Diseño se encuentra menos información y además, toda ella referida a
las materias y contenidos de algunas asignaturas de la carrera. No se encuentran referencias
sobre la Didáctica Proyectual centradas en el pensamiento creador. No se ha establecido, a
nivel internacional, una didáctica especializada en creatividad ni se registra bibliografía sobre
una docencia que pretenda el desarrollo del estudiante en este dominio específico. Ante esta
carencia me pregunté: ¿por qué no aprovechar mi experiencia en este campo para intentar
una sistematización de sus particularidades docentes?
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A su vez, la compilación del trabajo docente me llevó hacia otras interrogantes: ¿cuáles son las
características individuales que la profesión exige en los alumnos para ser profesionales de
esta índole?, ¿cuáles son las especificidades de esta actividad creativa? Ante el cúmulo de
cuestiones que se plantean al respecto, este libro intenta responder con una visión aclaradora
sobre los aspectos fundamentales que constituyen esta didáctica. El ejercicio docente en este
particular proceso de creación es una especialización educativa concreta. El conocimiento y la
comprensión que.los profesores de la carrera tenemos sobre la actividad creativa del Diseño,
hace que la práctica de esta disciplina haya llegado a constituir un sistema didáctico apropiado
a su propósito.
Este ensayo se ha escrito desde el interior del sistema educativo, según el modo de impartir la
enseñanza del Diseño de los docentes que son diseñadores. Observando nuestra propia
práctica educativa, he logrado identificar una serie de elementos conceptuales y operativos
que son particulares para el desarrollo de la actividad creadora en esta profesión. Este
esfuerzo racionalizador significó hacer una atenta observación de la actividad académica que
se realiza en la carrera de Diseño de la universidad. Es el quehacer académico suficiente para la
evolución del potencial creativo individual, por lo tanto, este trabajo recoge la experiencia
práctica de muchos años de docencia universitaria en este campo; una versión propia sobre
esta experiencia y las generalizaciones inducidas desde ella.
No sería justo pensar que este logro educativo solamente sea producto de un maestro único,
ni tampoco consecuencia de la casualidad. Esta didáctica es fruto del trabajo conjunto de un
grupo de académicos quienes, desde diferentes especialidades, coincidimos con un sistema
docente que forma y educa para la profesión creativa en Diseño. Un profundo entendimiento
de esta realidad formativa significa saber cómo Plantearse y actuar para conseguir el aumento
de la facultad creadora de los alumnos y con ello el desarrollo del proceso de diseño completo.
Este texto postula precisar las razones teóricas que respaldan las características de esta
educación profesional. Intenta fundamentar los principios con los cuales se aborda una
docencia de esta naturaleza y transmitir la finalidad y los conocimientos que la sustentan. Se
refiere a los conceptos fundamentales de cada una de estas propiedades docentes y en
consecuencia, a las tareas que por cada una de ellas, nos significa realizar a los profesores de
Taller, es decir, al quehacer en el aula. Este libro refleja una experiencia docente capitalizada
con muchísimos casos y ejemplificada con algunos de ellos también expone sus errores y
aciertos.
Esta experiencia universitaria busca contribuir con la formulación de un modelo educativo que
sea apropiado para desarrollar la creatividad en nuestro país. Los capítulos siguientes aportan
la Información y el conocimiento correspondiente a cada una de las particularidades de esta
educación.
Carmen Montellano Tolosa
Santiago, Chile, otoño de 1998
EL TALLER
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Los estudiantes
La enseñanza del diseño
La asignatura del Taller de Diseño
Las características de la Didáctica Proyectual.
Capacidad proyectual.
La carrera de Diseño se inserta en el sistema de la Educación Superior. Un diseñador es
un profesional universitario formado para la actividad proyectual. Su ámbito
problemático es la formulación de proyectos que hagan posible la configuración
innovadora de aquellos productos percibidos, usados y valorados por el ser humano.
Por lo tanto, para llegar a ser un profesional diseñador, la universidad- demanda que el
estudiante desarrolle proyectos que signifiquen un aporte novedoso en las cualidades
formales de los productos. El ámbito profesional internacional del Diseño exige que el
alumno de la carrera desarrolle un amplio conocimiento, que aprenda variadas teorías,
metodologías y tecnologías, pero fundamentalmente requiere que desarrolle al
máximo su capacidad proyectual. Para lograr esta finalidad, la carrera de Diseño se
ocupa en remodelar la mente del alumno de modo que forme en sí mismo variadas
cualidades personales, en especial, la síntesis creadora individual.
El ámbito de especialización del profesional depende del producto, ya que éste puede
ser la comunicación visual, el diseño industrial, el equipa miento del espacio, el
producto unitario, el vestuario personal y otros. El diseñador propone nuevas
configuraciones de acuerdo con los requerimientos de su área temática, respondiendo
a los nuevos conceptos que las sustentan; son éstos los que facilitan crear ciertos
objetos para mejorar alguna situación o crear algún producto que requiera variar su
forma para optimizar su uso o su comunicación y de ese modo, hacerlos más
interesantes, más poéticos o más apropiados.
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alumnos requieren ser educados de una manera especial: necesitan ser formados para
crear.
Una breve mirada histórica a la profesión del Diseño aprecia variadas tendencias y
diversos enfoques con los cuales se ha abordado su enseñanza. No obstante las
diferentes posturas conceptuales y metodológicas de la docencia universitaria, en la
didáctica del Diseño existe un factor esencial que no ha variado con el tiempo ni con
los sistemas. ( Este componente fundamental es la capacidad de síntesis creadora
individual, indispensable característica personal que debe poseer un diseñador, sea
cual fuere su formación o su forma de trabajo. La creatividad individual es el factor
unificador de toda la modalidad proyectual o innovadora en Diseño a partir de la cual
se conforma y organiza la acción educativa de este profesional en las universidades. La
educación superior reconoce el lugar relevante de la síntesis creadora personal y la
función de ésta en la inteligencia necesaria para la configuración de productos útiles y
comprensibles para las personas.
2
André Ricard. Diseño ¡Por qué! Colección. Punto y línea. Editorial G. Gili. Barcelona, 1982, p.3.
3
Bernhard Bürdek. Historia, teoría y práctica del diseña industrial. Editorial G. Gili. Barcelona, 1994,
p.174.
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cosa que no sea solamente bella, sino también ajustada, requiere de capacidades
creativas adicionales4.
6
Guillermo Wegener U. Diseño, Universidad e Industria. En Revista Trilogía, N° 20, p. 43 aSO. Instituto
Profesional de Santiago. Santiago, Chile, 1992.
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deben ser comprobadas mediante el uso simulado o, bien, con un testeo en la misma
realidad.
Los estudiantes
Reestructuración mental
Los alumnos que se incorporan a las universidades son las personas más aptas y
capaces para hacer estudios a nivel superior. Esta aptitud está medida y confirmada
por los puntajes que obtienen en las pruebas de selección al Sistema de Educación
Superior. Ingresan alumnos provenientes de toda clase de establecimientos de
educación media; también entran a la universidad individuos que provienen de
diferentes estratos socioeconómicos. A pesar del alto rendimiento de ellos, no siempre
los alumnos seleccionados llegan lo suficientemente preparados para las profesiones
que requieren de la creatividad como eje fundamental. No todos han tenido aún la
oportunidad ni la / libertad para una actuación cultural que implique mirar el mundo
desde su propio ángulo personal ni expresar su particular talento creador. Los jóvenes
ingresan a la universidad con un potencial creador que ni siquiera han vislumbrado.
Dentro de la cultura actual, la educación secundaria todavía conduce a la eliminación
de la creatividad y a la sustitución de los actos psíquicos originales por
convencionalidades externas. Esto induce a la inseguridad personal y obliga que los
estudiantes tengan modos de pensar y maneras de actuar bastante estereotipadas. Los
alumnos admiten que los sistemas convencionales educan para la aprobación
dependiente más que para la confianza en el propio juicio. Los criterios de valor
necesarios para pensar y actuar por sí mismos no es considerada en la formación de
los niños ni en los jóvenes.
Los alumnos llegan a primer año de la carrera con un buen bagaje cognitivo pero con
escaso desarrollo de su potencial creativo latente. En el inicio de la carrera,
generaciones de estudiantes responden a los patrones de moda, hacen lo que ven en
el medio, imitan lo que hacen sus compañeros y muchas veces, los alumnos tratan de
hacer diseños en la forma en que ellos suponen que le "gustará al profesor"; pero la
creatividad en el Diseño es otra cosa. De ahí que se puede suponer que hay una gran
cantidad de factores adversos con los cuales, la creatividad natural que los jóvenes
poseían siendo niños, ha sido paulatinamente desterrada. Todos los estudiantes
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reconocen en sí mismos tener el interés por la profesión, sensibilidad al entorno, ser
buenos para el dibujo, tener curiosidad y algún tipo de entrenamiento teórico y
tecnológico. No obstante estas cualidades, existen otros factores del medio cultural
externo que a muchos de ellos, les inhibe sistemáticamente su potencial creativo
inherente.
Se ha visto que las instituciones de enseñanza básica y media son organismos donde
mayoritariamente, el criterio formativo y educativo se edifica en el concepto de
aprender imitando y memorizando. Esta clase de educación también se funda en el
control sobre la conducta del alumno basada en la obediencia. Los jóvenes tienen que
aprobar la enseñanza y su paso por las casas de estudio con la aceptación de todas las
normas establecidas, sin dar lugar a la reflexión del fundamento de tales normas ni de
la relevancia de su aplicación. No se desarrolla la motivación ni la fundamentación
conceptual necesaria para la actuación independiente y autorregulada, ni menos, para
desarrollar su creatividad.
Como en muchas partes se teme a la innovación, es necesario romper los mitos, los
prejuicios y los estereotipos existentes en la sociedad que dicen relación con las
personas creativas. Es un mito la relación existente entre persona creativa y el artista
bohemio del siglo pasado. Es un prejuicio creer que los diseñadores son irresponsables
o incumplidores. Es un estereotipo pensar que los creativos son rebeldes y anárquicos.
El miedo de la sociedad a lo diferente todavía es muy común, porque en el fondo, es
miedo a lo desconocido. Sin embargo, no es indispensable ser un extravagante ni un
indisciplinado para ser un diseñador. En la cuestión de las aptitudes, habilidades,
capacidades y de estilos personales se encuentra de todo. Nada ni nadie tiene que
depender de otros, ni ser o actuar obligatoriamente de una determinada manera. Al
contrario, mientras mayor sea la cantidad y variedad de opiniones y de visiones que se
expresen durante su formación, más interesante se torna abordar un trabajo
innovador y de este modo, obtener múltiples soluciones para un mismo tema.
La totalidad de los alumnos que ingresan a la carrera de Diseño son estudiantes con
excelentes puntajes, muy imaginativos y capaces. Son jóvenes que todavía están en un
proceso de crecimiento y maduración, por lo tanto, es posible desarrollar sus
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facultades latentes. A través de cinco años de ejercicio creativo en esta disciplina, se
comprueba que se produce un cambio general de actitud. La docencia de la profesión
les permite el pleno desarrollo del potencial creador. A los profesionales docentes de
la carrera nos corresponde el trabajo de reconvertir individuos sumisos en
profesionales autónomos. Con objeto de extraer desde elinterior del alumno la
posibilidad de reflexionar y actuar con autenticidad, es necesario darle la oportunidad
de pensar, de crear, de innovar y de construir su trabajo en base a sus propios criterios
en un ambiente universitario propicio. Esta docencia permite, simultáneamente, una
integración interior y una apertura hacia el exterior adecuadas para la manifestación
de todo el potencial individual. Lo interesante de la docencia proyectual es el progreso
personal que logra con cada uno de los estudiantes que ingresan a la carrera:
Con la docencia del Diseño, el sujeto que ingresa como un alumno pasivo y
repetitivo se transforma en alumno activo, optimista y propositivo.
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Los estudiantes que en su mayoría viven en la cultura de la imitación y de la
repetición, como alumnos de Diseño, se atreven a proponer y a crear,
rechazando las imitaciones y los estereotipos
Por lo tanto, podemos afirmar con toda propiedad, que de un modo efectivo se
logran grandes cambios en su manera de ser existencial.
Logros efectivos
Los profesores constatan que los alumnos de los cursos superiores de la carrera
superan 'las inhibiciones iniciales. Los propios alumnos demuestran que son
naturalmente creativos y que pueden enfrentar la profesión con pensamiento propio.
Saben expresar sus ideas, opiniones y juicios de valor. Están en contacto con su propia
interioridad, utilizan operaciones mentales integradas y se sienten seguros como seres
humanos. Consideran que la desaprobación de sus compañeros o de los profesores a
alguna idea o a alguno de sus diseños, puede ser otra visión ante el problema y no
implica una descalificación o un rechazo a su persona. Por lo tanto, se atreven a
proponer, a crear, a equivocarse y a volver a probar. Saben reflexionar, crear y evaluar
con criterio personal el producto que han diseñado. Su madurez les permite "ser y
hacer" como ellos estiman adecuado. Siendo así, responsables de sus actos,
independientes y autónomos, son sujetos íntegros y creativos que pueden llegar a ser
excelentes profesionales. Se autoevalúan como personas capaces de proponer
cambios adecuados y pertinentes al entorno artificial.
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óptimos y útiles al usuario en variados aspectos. Por lo tanto, la docencia profesional,
no sólo entrega un conocimiento preestablecido sino que, fundamentalmente,
pretende extraer de cada alumno, variados resultados formales que sean atractivos,
nuevos y que cumplan con su propósito. Para llevar a cabo este objetivo principal, los
profesores trabajan conscientes que la didáctica apropiada para ello debe tener una
serie de características que la hacen diferente a la clase expositiva tradicional.
Básicamente, la sesión expositiva pretende que el alumno aprehenda, es decir, que
incorpore y asimile un saber que está afuera. Esta concepción es diferente a la de
crear; para crear hay que educar, extraer ideas e imágenes desde adentro hacia afuera.
Se refiere, de modo concreto, al cultivo de varias facultades inherentes y latentes en
los estudiantes.
Enseñar a diseñar consiste en guiar y conducir el proceso creador del alumno hacia una
meta clara, preestablecida, precisa y esperada. Sólo la conducción atenta y cuidadosa
del profesor experimentado encamina el proceso de diseño a resultados conscientes,
profesionales, adecuados y pertinentes. Este aspecto docente encierra sus buenas
dificultades porque en el acto creador, en general, predomina la intuición, la
inconsciencia, la emocionalidad y la sensibilidad, por cuanto en él, se exploran zonas
más profundas de la mente. La imaginación creadora asocia conceptos e imágenes que
son, tanto elementos conscientes como subconscientes, por eso, esta docencia
presenta una situación académica donde la función del profesor se torna muy
delicada. Una docencia mal llevada puede conducir a una ineficacia proyectual. Diseñar
sin la guía de un profesor de Diseño, tanto el proceso de configuración como el
resultado del tema, pueden transformarse en caprichos, en soluciones estériles o en
fantasías inconscientes, indescifrables, que no reportan conformidad al usuario final ni
beneficio alguno al empresario industrial.
Por todo lo anterior, la educación del profesional tiene que ocuparse de desarrollar
tres aspectos del pensamiento proyectual:
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Por lo específico de todo lo anterior y por lo diferente que es llevar a cabo una
formación profesional establecida en base a la activad proyectual, la carrera centra la
docencia profesional en la asignatura denominada Taller de Diseño.
Asignatura central
En el Taller de Diseño los académicos realizan todas las fases del proceso proyectual al
ocuparse del desarrollo completo de la habilidad creativa personal. Para lograr todas
las cualidades individuales necesarias para profesión, los profesores aplican una serie
de estrategias docentes que hace factible tanto el desarrollo del pensamiento como la
actitud creadora en los alumnos. Las características de la enseñanza que imparte el
Taller son un conjunto de pensamientos, actitudes y procedimientos que constituyen
la Didáctica Proyectual y son el oficio propio del profesor de Taller para lograr este fin.
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aula; realizan cada una de las etapas de sus proyectos sin la vigilancia ni presión del
profesor, ya sea dentro o fuera del recinto de la universidad. La sesión de aula es un
momento esencial en todo el procedimiento docente.
El concepto de taller
La denominación "taller" es el símil del workshop inglés y del werkstatten alemán, en
el cual se resume el concepto de un trabajo docente donde se comparte el
conocimiento y la experiencia. El Taller de Diseño ha sido considerado siempre como
una asignatura teórico-práctica, sin embargo, esta definición no es suficientemente
explícita ni determina por completo el tipo de docencia adecuada para el quehacer
proyectual del Diseño. La actividad creadora, en general, es un compendio de tan
variados factores que ésta sola categorización no la abarca. Es un error considerar al
Taller como situación docente para hacer una clase expositiva y luego hacer ejercicios
prácticos como si éstos fueran una práctica que comprueba una teoría. En el Taller
esto no se entiende como dos situaciones diferentes, porque en realidad, el trabajo
creador es otra cosa. El Taller es una instancia oportuna para resolver problemas de
diseño en forma teórica y práctica simultáneamente. Proyectar y desarrollar productos
le confiere un nuevo carácter a la docencia universitaria.
En la disciplina del Diseño hay una fusión de la teoría y la práctica; éstas no se anulan,
al contrario, ambas se enriquecen al entremezclarse en el acto de proyectar. El Taller
evita la dicotomía entre teoría y práctica siguiendo la concepción que plantea
Habermas. Es la madurez del creador la que le permite unir la sensibilidad con la razón
y la decisión. Asimismo, la integridad del diseñador hace posible comprender las
propias bases materiales de la racionalidad en vez de interpretarlas como una
consecuencia o superestructura de dichas bases. En relación a esto, Gui Bonsiepe
declara: Conviene recordar que una práctica sin trasfondo teórico degenera
rápidamente en un placentero conformismo y ágil oportunismo, mientras que una
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teoría sin raíces en la práctica concreta no va más allá del mero ejercicio verbalista. El
diseño es una invitación al hacer pensando y al pensar haciendo7.
El Taller siempre ha sido productor del conjunto "pensar y hacer" creador mediante el
desarrollo de proyectos, con resultados concretos, originales y adecuados. Diseñar es
sinónimo de crear y antónimo de Imitar. Consecuentemente con eso, el Taller es un
lugar de diversas ideas, es el sitio donde nacen las nuevas formas de los productos,
donde los profesores dan la bienvenida a lo diferente. Desde esta modalidad operativa
v los alumnos deben hacer frente a la creación resolviendo problemas de diseño como
si fueran verdaderos profesionales. Por eso, el trabajo docente del Taller es la
producción tangible de diseños elaborados por cada alumno. En el Taller se produce
variedad y cantidad de resultados nuevos a diario, cada semestre, cada año; se crean
objetos y productos diferentes a lo que se ha visto antes.
En forma muy general, en el Taller de Diseño hay tres aspectos que se atienden
simultáneamente:
El sujeto o las personas que se educan en la profesión.
7
Gui Bonsiepe. El diseño de la Periferia. Debates y Experiencias. Edit. G. Gili Barcelona, 1985, p. 14.
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La transformación o los procesos educativos mediante la acción reflexiva-
activa.
Lo que cada vez se evalúa y califica es el producto diseñado como el resultado de cada
proyecto. No obstante, al profesor le importa el progreso y la maduración del
estudiante en la medida que éste desarrolla cada uno de sus diseños. Se evalúan los
diseños y también los procesos, criterios y fundamentos con los que cada cual/os
resuelve, dado que los principios del caso se constituyen formalmente en el desenlace
del proyecto. Lo que no se evalúa es a la persona del alumno por criterios ajenos al
proceso proyectual.
Si se consideran las cualidades necesarias para formar la personalidad creativa con las
condicionantes requeridas por el proceso proyectual, en conjunto con las estrategias
para obtenerlos, tenemos los antecedentes suficientes para definir las características
educacionales que se requieren en este ámbito. El Taller se ocupa de la realización de
procesos educativos que propenden a una serie de propósitos que trascienden el
diseño mismo pero que se revierten en él. La estrategia educativa del profesor de
Taller oscila en dar libertad y exigir disciplina en los alumnos. El Taller demanda
madurez y exactitud para la evaluación de lo creado. Por lo tanto, el proceso docente
se efectúa en conjunto con el proceso de diseño, utilizando diferentes sistemas y
métodos proyectuales. Coherente con todo lo anterior, la docencia del Taller está
condicionada por tres situaciones:
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Características de la Didáctica Proyectual
Ocho características
La tesis de este libro plantea que la Didáctica Proyectual que se lleva a cabo en el Taller
de Diseño precisa de ocho características educativas. Estas son válidas para todos los
niveles de Taller, para cualquier tema que se aborde, no importando cuáles sean las
exigencias ni la envergadura del proyecto y tampoco, las posturas teóricas que asuma
el claustro académico. Las características que se exponen son indispensables para
organizar la mente y la actitud del alumno, preparándolo para la actividad creativa
profesional. Se han dibujado en un esquema circular radial porque todas ellas son
simultáneas afectan todo el quehacer didáctico y su aplicación se irradia en el entorno
humano. Las tres primeras se refieren al alumno, las dos siguientes al proceso de
diseño, las otras dos al profesor con el grupo y la última, a las consecuencias sociales
de los productos que se generan en este proceso didáctico. Se han ordenado en este
texto con una disposición secuencial, desde el interior del alumno, eso es, desde su
psicoestructura hasta su actuar externo que afecta al medio social. Es decir, desde la
base de la conciencia individual hasta las implicancias profesionales en la sociedad:
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3. Es una didáctica experiencia: significa que cada alumno realiza su propio proceso
proyectual. En el Taller se comparte la experiencia de proyectar, es el lugar donde se
piensa, se hace, se corrige lo hecho, se vuelve a pensar, hasta que el resultado del
proyecto se considere apropiado. Es necesario que el alumno se convenza
profundamente mediante la práctica y viva el proceso de creación comprobando sus
resultados. La función del profesor es desarrollar proyectos concretos con resultados
evaluables.
8. Por último, la educación del Taller es selectiva: pretende que cada alumno se exija
el máximo rendimiento, desde el inicio de la carrera hasta los niveles profesionales. Le
corresponde al profesor seleccionar a los más competentes y creativos.
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A continuación, cada uno de los ocho aspectos de esta enseñanza se presenta por
separado. El desarrollo de los capítulos se refiere al establecimiento de los principios
que fundamentan las particularidades de esta didáctica y las funciones que, por cada
una de ellas significa realizar a los diseñadores profesores de Taller.
[El texto continúa desarrollando cada una de estas características. El libro completo
está a disposición de quien lo requiera en la oficina de la Especialización )
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