Abstracto

Este documento, hecho posible por el apoyo de la Administración Nacional de

Telecomunicaciones e Información (NTIA) del Departamento de Comercio, describe el trabajo
de la Oficina de Análisis Económico (BEA) para desarrollar estimaciones para la construcción de
una nueva cuenta satélite de economía digital. Estas estimaciones son el primer paso para una
medida integral de la contribución de la economía digital al producto interno bruto (PIB). Las
estadísticas de PIB de BEA incluyen la actividad económica asociada a la economía digital, pero
no permiten a los usuarios de datos identificar por separado la contribución de la economía
digital al crecimiento económico. Estas nuevas estimaciones complementan las estadísticas
oficiales al proporcionar una imagen específica del papel de la economía digital en la economía
general de los EE. UU.
BEA construyó las estimaciones presentadas en este documento dentro de un marco de uso de
la oferta siguiendo un proceso de tres pasos. Primero, BEA desarrolló una definición conceptual
de la economía digital. En segundo lugar, BEA identificó categorías específicas de bienes y
servicios dentro del marco de uso de la oferta de BEA relevante para medir la economía digital.
En tercer lugar, BEA usó el marco de uso de la oferta para identificar las industrias responsables
de la producción de estos bienes y servicios, y la producción estimada, el valor agregado, el
empleo, la compensación y otras variables para estas industrias.
Este informe presenta el trabajo inicial de BEA para sentar las bases de una cuenta satélite de
economía digital. Conceptualmente, una cuenta satélite de economía digital debe incluir todos
los bienes y servicios relacionados con la economía digital. Sin embargo, las estimaciones
preliminares presentadas aquí se basan en bienes y servicios que son principalmente digitales.
Existen numerosos desafíos para estimar la contribución económica de los bienes y servicios
"parcialmente digitales" que se presentan en este informe. Estos desafíos son oportunidades
para futuras investigaciones para expandir estas primeras estimaciones en una cuenta satélite
de economía digital completa. De 2006 a 2016, BEA estima que el valor agregado real de la
economía digital creció a una tasa anual promedio de 5.6 por ciento, superando la tasa de
crecimiento anual promedio para la economía general de 1.5 por ciento. En 2016, la economía
digital contribuyó notablemente a la economía en general: representó el 6,5 por ciento del PIB
actual, el 6,2 por ciento de la producción bruta en dólares, el 3,9 por ciento del empleo y el 6,7
por ciento de la remuneración de los empleados.
Información del autor:

Este documento es un documento de trabajo y comparte conocimientos preliminares y

estadísticas. El objetivo del documento es obtener retroalimentación. Las opiniones expresadas
en esta presentación son las de los autores y no reflejan necesariamente las opiniones de BEA o
NTIA.

INTRODUCCIÓN
Con el rápido crecimiento de Internet a partir de mediados de la década de 1990, el panorama
digital se ha expandido y ha cambiado la forma en que las empresas operan y cómo los
consumidores realizan transacciones con las empresas y entre ellas. Las computadoras ahora
son omnipresentes y la economía depende de las tecnologías digitales e Internet de maneras
que las personas no podrían haber anticipado incluso hace unos años. Las telecomunicaciones
nacionales
y la Administración de Información (NTIA) informa que el 75 por ciento de los estadounidenses
informaron usar Internet en 2015 en comparación con solo el 44 por ciento en 2000.1 Estas
tecnologías continúan cambiando la forma en que las personas trabajan, se comunican,
compran bienes y servicios y realizan tareas cotidianas. Existen pocas dudas sobre la importancia
de la tecnología digital en las empresas estadounidenses y su papel en el fomento del
crecimiento económico y la competitividad nacionales. Medir el impacto de la economía digital
es esencial para comprender la economía en general dada la creciente dependencia de las
empresas y los consumidores de los productos y servicios digitales.
Estudiar el impacto de la digitalización en la economía no es una idea nueva. La Oficina de
Análisis Económico (BEA), otras agencias del Departamento de Comercio y otras organizaciones
han estado investigando y publicando informes que miden el impacto de la "economía digital",
la "economía de Internet" o la "nueva economía" por casi dos decadas. La Administración de
Economía y Estadística tiene informes sobre la medición de la economía digital emergente desde
1998. En 2001, la Oficina del Censo de EE. UU. Publicó un informe citando el mismo
razonamiento utilizado por los defensores de la medición de la economía digital en la actualidad.
En 2016, el Departamento de Comercio de EE. UU. Formó el Consejo de Asesores de Economía
Digital inaugural (DEBA) formado por distinguidos líderes de la industria y la academia. Los
miembros de DEBA aportan una amplia gama de experiencia y conocimiento sobre la economía
digital y cómo se relaciona con las empresas y la política económica. En su primer informe, el
DEBA recomendó desarrollar medidas del impacto de la digitalización en indicadores
económicos como el PIB y la productividad, así como el alcance de la digitalización en varios
sectores de la economía.2
Este informe ofrece las primeras estimaciones de economía digital de BEA en el marco de las
cuentas nacionales. Estas nuevas estadísticas proporcionan una comprensión más profunda del
tamaño y la importancia económica de la economía digital para que los responsables de la
formulación de políticas, las empresas y otras partes interesadas puedan tomar decisiones
informadas. Identifican y resaltan las actividades digitales que actualmente están incluidas en
las estadísticas del producto interno bruto de BEA. Los datos pueden ser utilizados por
empresas, investigadores y otros. Este informe representa un importante paso hacia el
desarrollo de BEA de una cuenta satelital de economía digital.
1
Consulte el explorador de datos nacionales digitales de la Administración Nacional de
Telecomunicaciones e Información en:
https://www.ntia.doc.gov/data/digital‐nation‐data‐explorer#sel=internetUser&disp=map.
2
Véase el Departamento de Comercio de EE. UU. "Primer Informe de la Junta de Asesores de
Economía Digital." (2016) Disponible en:
https://www.ntia.doc.gov/files/ntia/publications/deba_first_year_report_dec_2016.pdf.
Las estimaciones iniciales de BEA muestran que la economía digital ha sido un punto brillante
en la economía de EE. UU., Creciendo a una tasa anual promedio de 5.6 por ciento por año de
2006 a 2016 en comparación con un crecimiento de 1.5 por ciento en la economía en general.
La economía digital representó 6.5% ($ 1,209.2 mil millones) de PIB actual ($ 18,624.5 mil
millones) en 2016. En comparación con industrias o sectores tradicionales de EE. UU., La
economía digital estaba justo debajo de los servicios profesionales, científicos y técnicos, que
representaron 7.1 por ciento ($ 1,326.3 mil millones) del PIB actual en dólares, y justo por
encima del comercio mayorista, que representó el 5.9 por ciento ($ 1,102.6 mil millones) del PIB
actual en dólares (cuadro 1).

Ese mismo año, la economía digital apoyó 5,9 millones de empleos, que representaron el 3,9
por ciento del empleo total de EE. UU. (150,3 millones), similar a industrias como finanzas y
seguros, comercio mayorista y transporte y almacenamiento (gráfico 2). Los empleados que
trabajan en la economía digital ganaron $ 114,275 en compensación anual promedio en
comparación con $ 66,498 de compensación anual promedio por trabajador para la economía
total de los EE. UU.
El resto de este informe comprende tres secciones. La primera sección discute la metodología
de estimación con más detalle. La segunda sección presenta estimaciones preliminares de
economía digital. El informe concluye señalando áreas potenciales de investigación para avanzar
en la medición de la economía digital hacia la construcción de una cuenta satélite integral.
Metodología
BEA preparó estas estadísticas dentro del marco de uso de la oferta, siguiendo la metodología
utilizada en la producción de otras cuentas satélite BEA, incluidas las de viajes y turismo, artes y
producción cultural y recreación al aire libre.3
El proceso de estimación incluye tres pasos principales:
(1) Desarrollar una definición conceptual de la economía digital;
(2) Identificar bienes y servicios dentro del marco de uso de la oferta relevante para medir la
economía digital definida en el primer paso; y
(3) Use el marco de uso de la oferta para identificar las industrias responsables de producir estos
bienes y servicios, y estime la producción, el valor agregado, el empleo, la compensación y otras
variables asociadas con esta actividad.
Durante el segundo paso de este proceso, BEA revisó las categorías detalladas de bienes y
servicios del marco de uso de la oferta para identificar aquellos bienes y servicios que forman
parte de la economía digital.4
Algunas categorías de bienes y servicios incluyen una combinación de bienes y servicios tanto
digitales como no digitales. Por ejemplo, la categoría de productos de juguetes y juegos
electrónicos, incluidos los videojuegos caseros (excluidos los cartuchos, discos y cintas) incluye
tanto videojuegos digitales como juguetes electrónicos no digitales. Conceptualmente, las
medidas de la economía digital deberían incluir videojuegos digitales; sin embargo, debido a
limitaciones de datos y recursos, las estimaciones presentadas aquí incluyen las categorías de
bienes y servicios que BEA considera principalmente digitales.
(1) Definir la economía digital
Al igual que la idea de medir la economía digital ha existido durante muchos años, también lo
han hecho los desafíos asociados con su medición. Uno de los desafíos más fundamentales es la
falta de una definición precisa y universal que aclare qué actividades deberían incluirse al medir
la economía digital. Parte de lo que hace que la definición de la economía digital sea difícil es la
naturaleza rápidamente cambiante de la tecnología. Lo que es relevante un día podría ser
obsoleto el siguiente a medida que las empresas y los consumidores adoptan nuevas tecnologías
para realizar tareas y comunicarse. Idealmente, la definición de economía digital permitiría la
naturaleza cambiante de lo que abarca a lo largo del tiempo.
3
Para obtener más información sobre la metodología y las cuentas satélite, consulte "Medir la
economía de la nación: una perspectiva de la industria" de BEA. Una cartilla sobre las cuentas
de la industria de BEA. Disponible en:
https://www.bea.gov/industry/pdf/industry_primer.pdf.
Las cuentas de la industria son un componente de las cuentas económicas de EE. UU. Que
proporcionan información sobre el valor y la composición del producto producido en los Estados
Unidos y sobre los tipos de ingresos generados por esa producción. El marco de contabilidad
nacional excluye bienes y servicios provistos a costo cero.
4
BEA clasifica los bienes y servicios utilizando un sistema basado en el Sistema de Clasificación
Industrial de América del Norte (NAICS).

En este documento, BEA define la economía digital principalmente en términos de Internet y las
tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) relacionadas. Para desarrollar una
definición, BEA confió en la pericia de los analistas y en la literatura y estadísticas existentes
sobre la economía digital. El sector de TIC de BEA sirvió como punto de partida para la definición
de BEA de economía digital.5 Si bien no todos los bienes y servicios de TIC tienen un alcance
total, el sector de las TIC y la economía digital se superponen en gran medida. Las estimaciones
presentadas en este informe incluyen el sector de TIC de BEA, así como los bienes y servicios
adicionales que se considera están en el alcance de la economía digital. Como en el pasado,
cuando BEA desarrolló estadísticas sobre el sector de las TIC, BEA hizo referencia a la literatura
de medición de la economía digital de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos (OCDE)6.BEA incluye en su definición (1) la infraestructura digital necesaria para que
una red informática existen y operan, (2) las transacciones digitales que tienen lugar usando ese
sistema ("e-commerce"), y (3) el contenido que los usuarios de la economía digital crean y
acceden ("medios digitales").
Infraestructura de habilitación digital
Las redes informáticas, como Internet, son la base de la economía digital. La infraestructura de
habilitación digital se compone de los materiales físicos básicos y los arreglos organizacionales
que respaldan la existencia y el uso de redes informáticas y la economía digital, estos incluyen:
 Hardware informático: elementos físicos fabricados que constituyen un sistema
informático que incluye, entre otros, monitores, discos duros, semiconductores,
productos de comunicaciones inalámbricas y productos de equipos de audio y video.
 Software: los programas y otra información operativa utilizada por dispositivos tales
como computadoras personales y servidores comerciales, que incluyen tanto software
comercial como software desarrollado internamente por las empresas para su propio
uso.
 Equipos y servicios de telecomunicaciones: los equipos y servicios necesarios para la
transmisión digital de información a distancia por cable, telégrafo, teléfono,
radiodifusión o satélite.
 Estructuras: Esto incluye la construcción de edificios donde los productores de
economía digital crean bienes de economía digital o suministran servicios de economía
digital. La categoría de estructuras también incluye edificios que brindan servicios de
soporte para productos digitales. Esto incluye la construcción de centros de datos,
plantas de fabricación de semiconductores, instalaciones de cables de fibra óptica,
interruptores, repetidores, etc.
 Internet de las cosas (IoT): dispositivos con acceso a Internet, como electrodomésticos,
maquinaria y automóviles con hardware incorporado que les permite comunicarse
entre sí y conectarse a Internet.
5
El sector de BEA ICT consiste en fabricación de productos electrónicos y de computadora
(excluyendo la fabricación de instrumentos de control, navegación, medición y
electromedicina); editores de software; radiodifusión y telecomunicaciones; procesamiento de
datos, alojamiento y servicios relacionados; publicación en Internet y difusión y portales de
búsqueda en la web; y diseño de sistemas informáticos y servicios relacionados. La definición de
BEA es generalmente coherente con la definición internacionalmente aceptada del sector de las
TIC utilizada y desarrollada por las oficinas de estadística de la OCDE y las Naciones Unidas.
6
Para obtener información sobre el trabajo de medición de la economía digital de la OCDE,
consulte http://www.oecd.org/sti/ieconomy/.
BEA también participa en el grupo de trabajo de la OCDE sobre Medición del PIB en una
economía digitalizada.
  Servicios de soporte: servicios necesarios para el funcionamiento de la infraestructura
digital, como los servicios de consultoría digital y los servicios de reparación de
computadoras.
Comercio electrónico
BEA utiliza el término "comercio electrónico" para describir, en términos generales, todas las
compras y ventas de bienes y servicios que se producen a través de redes informáticas. El
comercio electrónico refleja la naturaleza de una transacción de bienes o servicios. BEA
considera que el comercio electrónico incluye transacciones ordenadas digitalmente,
entregadas digitalmente o habilitadas para plataforma. Estas transacciones incluyen:

 Comercio electrónico de empresa a empresa (B2B): comercio electrónico que utiliza

Internet u otros medios electrónicos para realizar transacciones de bienes y servicios
por parte de empresas a otras empresas. Los fabricantes, mayoristas y otras industrias
participan en el comercio electrónico entre empresas y entre empresas para producir
bienes y servicios para el consumo final.
 Comercio electrónico de empresa a consumidor (B2C): comercio electrónico que utiliza
Internet u otros medios electrónicos para realizar la venta de bienes y servicios por parte
de las empresas a los consumidores o al comercio electrónico minorista.
 Comercio electrónico punto a punto (P2P): la economía "compartida", también
conocida como comercio electrónico habilitado por plataforma, implica el intercambio
de bienes y servicios entre consumidores facilitados a través de una aplicación digital.
Estos incluyen, pero no se limitan a, despacho de paseo, alquiler de alojamiento,
servicios de mensajería y entrega, paisajismo, preparación de alimentos, alquiler de
bienes de consumo, servicios de lavandería y servicios de conserjería.
Medios digitales
El tercer componente de la economía digital son los medios digitales. Cada vez más, los
consumidores renuncian a la compra física o al alquiler de productos como libros, periódicos,
música y videos, y optan por acceder a estos productos en línea en formato digital. BEA define
los medios digitales como el contenido que las personas crean, acceden, almacenan o visualizan
en dispositivos digitales, específicamente:
 Medios digitales de venta directa: las empresas pueden vender productos digitales
directamente a los consumidores a cambio de una tarifa, ya sea elemento por elemento
o mediante un servicio por suscripción.
 Medios digitales gratuitos: algunas compañías ofrecen medios digitales a los
consumidores sin costo alguno, como YouTube o Facebook. Típicamente, las empresas
que ofrecen estos servicios obtienen ingresos al vender espacio publicitario al margen
del producto digital, como el modelo seguido por muchos medios impresos o canales
de televisión abierta. Además, algunos consumidores crean contenido en línea original
para el consumo entre pares, conocido como medios digitales P2P.
 Big data: algunas compañías generan grandes conjuntos de datos como parte de sus
operaciones normales. Esto también podría incluir el uso de medios digitales como
mecanismo para reunir información sobre el comportamiento o las preferencias del
consumidor. Estas empresas pueden obtener ingresos vendiendo esta información, a
veces denominada "Big Data", o aprovechando de otra manera.
 (2) Identificar bienes y servicios de economía digital
Usando esta definición y los datos detallados existentes de las tablas de uso de la oferta, BEA
identificó bienes y servicios para su inclusión en las estimaciones iniciales de la economía digital.
BEA clasifica los datos en las tablas de uso de suministros utilizando un marco basado en NAICS
que incluye alrededor de 5,000 categorías de bienes y servicios. (Véase el Recuadro sobre la
Metodología de BEA para estimar las Tablas de Suministro y Uso). BEA se basó en la experiencia
de los analistas y en investigaciones externas para seleccionar más de 200 categorías de bienes
y servicios para su inclusión en las estimaciones preliminares presentadas en este informe.8 El
resto de esta sección analiza algunas de las diferencias entre los bienes y servicios identificados
en la definición conceptual de economía digital y los bienes y servicios BEA incluidos en las
estimaciones iniciales.
Como se señaló en la introducción, algunas categorías de productos y servicios basados en el
NAICS incluyen bienes y servicios digitales, así como bienes y servicios no digitales. Si bien la
definición conceptual de BEA de la economía digital incluye todos los bienes y servicios digitales,
BEA no intentó incluir la parte digital de esas categorías de bienes y servicios que incluyen
componentes digitales y no digitales en las estimaciones preliminares, sino que prefiere
centrarse únicamente en categorías de bienes y servicios que son exclusiva o principalmente
digitales. La división del resultado de las categorías "parcialmente digitales" en porciones
digitales y no digitales requerirá datos de fuentes adicionales y otros recursos para identificar
con precisión la proporción del producto que está en el alcance de la economía digital, como se
discutirá en la última sección de Este reporte.
Siguiendo este enfoque, BEA incluyó una lista casi completa de hardware, software, servicios de
soporte y bienes y servicios de telecomunicaciones de economía digital en la porción de
infraestructura de las estimaciones de economía digital. BEA no incluyó estructuras e
infraestructura de IoT en las estimaciones iniciales
debido a la dificultad de determinar la asignación adecuada de estas categorías en componentes
digitales y no digitales. Para las estructuras y la infraestructura de IoT, BEA no tiene datos
disponibles para separar la actividad de economía digital de todas las demás actividades. El caso
de la infraestructura de IoT presenta desafíos adicionales. Por ejemplo, la conectividad de un
refrigerador habilitado para Internet puede permitir al propietario rastrear y
compre alimentos cuando se estén acabando o registre el uso del electrodoméstico. Sin
embargo, la función principal del refrigerador es mantener la comida fría, salida que BEA no
clasificaría como parte de la economía digital.
El producto del comercio electrónico se mide generalmente como el margen de comercio al por
mayor o al por menor en los bienes y servicios "ordenados digitalmente" vendidos a través de
Internet o en algún otro mercado electrónico. El margen es igual al ingreso total obtenido de las
ventas en línea menos el costo del productor de los bienes y servicios. Para este informe, BEA
incluyó en las estimaciones los márgenes para las transacciones minoristas B2B y B2C de
establecimientos de mercado electrónicos. BEA también incluyó algún producto no relacionado
con el margen en forma de tarifas para corredores que conectan compradores y vendedores.
BEA no incluyó explícitamente el valor de las transacciones P2P o "plataformas habilitadas"
debido a la falta de datos sobre el valor de estas transacciones. BEA captura en las tablas de uso
de la oferta el valor de las actividades P2P, como el envío y el alojamiento, pero no está claro
qué valor de estas actividades BEA debe atribuir a la economía digital.
7
En el momento de este informe, las tablas de referencia de 2007 contenían los últimos datos
de referencia disponibles y utilizaban un sistema de clasificación de productos basado en el
SCIAN de 2007.
8
Ver la tabla del apéndice
Más información sobre los desafíos de medir el rendimiento de la transacción P2P se incluye
más adelante en la sección de este informe sobre áreas para estudio futuro.
Como se mencionó anteriormente, los medios digitales son el contenido que los usuarios de la
economía digital crean y acceden. Desde esta categoría, las estimaciones en este informe
incluyen servicios de transmisión de datos, publicación en Internet y difusión por Internet. Los
servicios de transmisión y descarga incluyen tanto servicios basados en suscripción que
permiten el acceso ilimitado a contenido digital como compras únicas de contenido, como
alquilar y transmitir una sola película o comprar una canción para descargar. La publicación en
Internet captura las tarifas cobradas a los consumidores por el acceso a contenido digital como
periódicos o revistas en línea. La transmisión por Internet captura las tarifas que los
consumidores pagan por las suscripciones a la radio por Internet, transmisiones por Internet o
"transmisiones simultáneas" en las que las televisoras de gran tamaño transmiten
simultáneamente por Internet. Las estimaciones incluyen publicación en Internet y licencias de
transmisión, que son los ingresos que los editores reciben mediante el uso de licencias de su
contenido a otras plataformas. Por ejemplo, un sitio web puede alojar contenido de otro editor.
Es posible que el sitio web de alojamiento deba pagar una tarifa de licencia al editor original por
los derechos de alojar el contenido.
Otros sitios web ofrecen medios digitales gratuitos a los consumidores, pero recaudan los
ingresos a través de la publicidad. Si bien las cuentas nacionales de BEA captan estos ingresos
publicitarios, las estimaciones en este informe no incluyen estos ingresos. Actualmente, BEA no
cuenta con los datos necesarios para identificar qué parte de los ingresos por publicidad está
asociada con estos sitios web.
Metodología BEA para Estimar Tablas de Abastecimiento-Uso.
Metodología BEA para Estimar Tablas de Abastecimiento-Uso.
Actualmente, el sistema estadístico de EE. UU. No cuenta con un sistema de clasificación
Las tablas de
separado uso
para de la oferta
productos son un
básicos, elemento
que son grupos integral y esencialsimilares
de productos de las cuentas económicas
definidos por las
de los EE. UU. Primero, son los bloques de construcción para otras cuentas
características del producto (producto) en sí mismo y no por el proceso de producción. En económicas.
laDestacan entre
actualidad, BEAellos las cuentas
utiliza un sistemade ingresos y productos
de clasificación de BEA (NIPA),
de productos quepara
básicos presentan
asignarlasa
estimaciones del PIB basado en el gasto. En segundo lugar, las tablas
cada producto básico el código de la industria en la que el producto básico es el productode uso de la oferta
muestranLacómo
principal. baseinteractúan las industrias;
de este sistema específicamente,
de clasificación de productos muestran
básicos cómo las industrias
es el código NAICS
de proporcionan
seis dígitos. información y usan la producción de cada una para producir PIB. Son un
conjunto completo y equilibrado de estadísticas económicas, y presentan una contabilidad
BEA prepara tablas de referencia
completa de uso dey la
de la industria lasoferta aproximadamente
transacciones cada cinco años en
de uso final.
función de los datos fuente de la más alta calidad, especialmente los Censos Económicos
de El
la núcleo
Oficinade
dellas tablas
Censo dedeEE.uso
UU.deEnlagran
oferta consta
parte de dos
debido a sutablas básicas
rica fuente dede contabilidad
datos, las tablas
nacional: una tabla de "oferta" y una tabla de "uso". La tabla de suministros
de referencia de uso de la oferta son la fuente de información estadística más importante muestra los
productos disponibles para el consumo interno. La tabla de uso muestra
para las actualizaciones integrales de los NIPA y son ampliamente utilizadas por otras las entradas a la
producción
agencias dedeestadística.
la industriaBEA(insumos
lanzóintermedios) y los productos
las tablas comparativas de que
uso consumen los usuarios
de suministros más
recientes en 2015. Estas cuentas cubren 2007 y usan el NAICS 2007 para la clasificación. Ala
finales. La tabla de uso es la tabla solicitada con más frecuencia debido a sus aplicaciones
momento de esta publicación, BEA las estimaciones
está preparando del PIB.
el punto de referencia 2012 y la
actualización
BEA utiliza elintegral
Sistema de las cuentas deutilizando
de Clasificación la Industriael de
NAICS 2012,
América con una
del Norte fecha
(NAICS) de
para
lanzamiento planificadaLos
clasificar las industrias. para finalesUnidos,
Estados de 2018.Canadá y México desarrollaron conjuntamente
este sistema de clasificación con el objetivo de mejorar la comparabilidad de sus estadísticas
económicas. NAICS clasifica las industrias según sus procesos de producción. Los códigos
NAICS comprenden seis dígitos, que de izquierda a derecha indican el sector general a una
industria detallada.

(Continúa en la página siguiente)

 (3) Identificar industrias de economía digital y preparar resultados.
BEA estimó el valor agregado, el producto, la remuneración y el empleo nominales por industria
para la economía digital. Después de identificar los bienes y servicios incluidos en la economía
digital, BEA identificó las industrias que producen esos bienes y servicios utilizando la tabla de
suministros. El producto bruto de la economía digital por industria representa el valor total del
producto bruto dentro del alcance producido por cada industria a través de los bienes y servicios
de la economía digital. El valor agregado para la economía digital se deriva de la relación entre
el producto de la industria para la economía digital y el producto total de la industria. Esto
significa que se supone que la relación entre el producto intermedio y el asociado con la
producción de la industria para la economía digital es la misma que la relación entre la
producción industrial total intermedia y la producción total de la industria. La compensación y
el empleo para la economía digital se derivan mediante el mismo procedimiento que el valor
agregado. Específicamente, la relación entre la producción de la economía digital de una
industria y la producción total se aplica al empleo total y la compensación para la industria.
BEA preparó índices de precios y cantidades para el producto bruto y el valor agregado de la
economía digital en tres pasos. En primer lugar, los índices de producción bruta se obtienen
desinflando cada bien y servicio digital producido por una industria que se incluye como parte
de su producción bruta de la tabla de oferta. En segundo lugar, BEA obtuvo índices para insumos
intermedios al desinflar todos los productos de la tabla de uso que son consumidos por la
industria como insumos intermedios en la producción de bienes y servicios digitales. Las fuentes
nacionales e internacionales de insumos intermedios se deflacionan por separado utilizando el
supuesto de proporcionalidad de importación o comparabilidad. En tercer lugar, BEA calculó los
índices de valor agregado de la industria utilizando el método de doble deflación en el que el
valor agregado real se calcula como la diferencia entre el producto bruto real y las entradas
intermedias reales dentro de un marco de índice de Fisher.

Resultados
Producto interno bruto (PIB) o valor agregado.
El PIB es el valor de los bienes y servicios producidos por la economía de la nación menos el valor
de los bienes y servicios utilizados en la producción. El PIB por industria, o el valor agregado, es
una medida de la contribución de la industria al PIB general. Según las estimaciones iniciales, la
economía digital fue un motor de crecimiento del PIB durante el período cubierto por estas
estadísticas. En 2016, el valor agregado de la economía digital (ajustada a la inflación) totalizó $
1,302.2 mil millones, 82.2 por ciento mayor que en 2005. Desde 2006 hasta 2016, el valor
agregado real para la economía digital superó el crecimiento general de la economía cada año y
mitigó la recesión en el PIB durante la recesión en 2008 y 2009 (cuadro 3). En cinco de esos años,
incluidos 2015 y 2016, los dos más recientes de la serie, la economía digital creció más del 6 por
ciento.

La fuerza relativa de la economía digital real la llevó a contribuir consistentemente más al

crecimiento económico que su participación en la economía. Por ejemplo, en 2016, el
crecimiento real de la economía digital del 6,6 por ciento representó el 28 por ciento, o 0,41
punto porcentual, del crecimiento total del 1,5 por ciento del PIB real.
De 2006 a 2016, la economía digital real creció a una tasa anual promedio de 5.6 por ciento,
mientras que el PIB real creció a solo 1.5 por ciento (cuadro 4). Dentro de la economía digital, el
hardware y la categoría de comercio electrónico y medios digitales crecieron más rápido que los
otros componentes, en promedio, en 11.8 por ciento y 8.6 por ciento anual, respectivamente.
Las telecomunicaciones crecieron el más lento de los componentes, con un promedio de 3.6 por
ciento anual. En general, el crecimiento promedio anual en el valor agregado real de los bienes
digitales, en un 9.1 por ciento, superó a los servicios digitales en un 5.0 por ciento.
De 2005 a 2016, el valor agregado actual en dólares de la economía digital representó un
promedio del 6.2 por ciento del PIB actual en dólares estadounidenses cada año. En 2016, el PIB
actual en dólares de la economía digital ascendió a $ 1,209.2 mil millones, o el 6.5 por ciento del
PIB actual de los Estados Unidos ($ 18,624.5 mil millones) (cuadro 5).
En 2016, la infraestructura habilitante digital, o el hardware, software, telecomunicaciones y
servicios de soporte que permiten la existencia de la economía digital, representaron $ 1,072.6
billones (88.7 por ciento) del total estimado de $ 1,209.2 billones en valor agregado de la
economía digital en dólares actuales. Los servicios de soporte de economía digital totalizaron $
362,2 mil millones (30,0 por ciento), las telecomunicaciones totalizaron $ 320,4 mil millones (26
por ciento), el software totalizó $ 258,8 mil millones (21,4 por ciento) y el hardware totalizó $
131,3 mil millones (10,9 por ciento) (gráfico 6). El comercio electrónico y los medios digitales
representaron los restantes $ 136.5 mil millones (11.3 por ciento) del valor agregado de la
economía digital total actual. Los servicios dominaron la economía digital, en relación con los
bienes, y representaron el 87,5 por ciento del valor agregado actual en dólares de la economía
digital.
Producción bruta
El producto bruto es una medida de las ventas o los ingresos de la producción para la mayoría
de las industrias. El producto bruto real de la economía digital creció a una tasa anual de 4,4 por
ciento entre 2006 y 2016, más rápido que la economía total, que creció a una tasa anual
promedio de 1,1 por ciento durante este período. El efecto compuesto del crecimiento más
rápido de la producción en la economía digital en relación con la economía en general se ve
claramente cuando la producción se indexa a un año base (cuadro 7). Desde 2010, el crecimiento
del producto bruto real de la economía digital promedió 4.9 por ciento anual y superó el
crecimiento promedio anual del producto bruto real de 2.3 por ciento en la economía de EE.
UU., En general, ampliando la distancia entre los índices de producción bruta mostrados en el
gráfico 7.
Durante esta recuperación económica, los precios de los bienes y servicios de la economía digital
disminuyeron a una tasa promedio anual de 0.4 por ciento (cuadro 8). Los precios de todos los
bienes y servicios en la economía aumentaron a una tasa anual promedio de 1.5 por ciento.

Aunque el producto real en la economía digital se aceleró más rápido que el producto real para
la economía en general, la caída de los precios de los bienes y servicios digitales causó un
crecimiento del producto bruto en dólares en la economía digital y la economía general fue
aproximadamente igual hasta 2014 (gráfico 9) . En 2015 y 2016, el crecimiento de la producción
total de la economía actual en dólares se desaceleró mientras que el crecimiento en la economía
digital fue leve (desde un crecimiento anual promedio de 4.3 por ciento durante el período de
2006 a 2014 a 4.7 por ciento de 2015 a 2016). La producción bruta nominal de la economía
digital alcanzó $ 1,97 billones en 2016, totalizando el 6,2 por ciento de la producción bruta
nominal total de EE. UU.

Datos disponibles

Toda la serie temporal de estimaciones de economía digital (2005-2016) está disponible en

la página de economía digital en el sitio web de BEA. Los datos incluyen datos reales, en
dólares actuales y de precios para el valor agregado y el producto bruto por industria y por
producto. También hay datos disponibles sobre empleo en la economía digital y
compensación por industria.
Empleo y compensación
En 2016, la economía digital empleó a 5,9 millones de trabajadores, lo que representa el 3,9 por
ciento del empleo total. De todos los trabajadores de la economía digital, el 88.2 por ciento
trabajaba en industrias proveedoras de servicios, especialmente en el diseño de sistemas
informáticos y servicios relacionados (1.870.000 empleados), otros minoristas (984.000
empleados, principalmente en comercio electrónico) y radiodifusión y telecomunicaciones
(869.000 empleados). Del lado de la producción de bienes, la industria de fabricación de
computadoras y productos electrónicos apoyó la mayoría de los trabajos de economía digital
(572,000). De 2011 a 2016, el empleo en la economía digital creció a una tasa promedio anual
de 3.7 por ciento en comparación con una tasa anual promedio de 1.7 por ciento para la
economía en general (cuadro 10).

En 2016, la compensación total, incluidos los salarios y beneficios, para estos trabajadores fue
de $ 674.0 mil millones, o el 6.8 por ciento de la compensación total de la industria. Los
trabajadores de la economía digital ganaron una compensación promedio anual de $ 114,275
en comparación con el promedio de $ 66,498 en toda la economía.

Posibles áreas para un estudio futuro

Las estimaciones actuales de economía digital proporcionan información sobre el impacto de la
economía digital en la economía de los EE. UU. Sin embargo, BEA tiene la oportunidad de
expandir estas estadísticas en una cuenta satélite de economía digital integral para reflejar más
completamente la contribución de la economía digital al crecimiento económico. Posibles áreas
para un estudio futuro, discutidas brevemente a continuación, son:

 Incluir bienes y servicios digitales adicionales;

 Incorporación de clasificaciones estadísticas actualizadas, metodologías y datos fuente;
 Medir con precisión las transacciones P2P;
 Contabilidad de las entradas digitales a la producción; y
 Estimación del excedente del consumidor relacionado con la economía digital.

Incluyendo bienes y servicios digitales

A BEA le gustaría expandir estas estimaciones para incluir el valor de los bienes y servicios de la
economía digital de aquellas categorías de bienes y servicios que incluyen una combinación de
componentes digitales y no digitales. Para algunas categorías, dividir el resultado en segmentos
digitales y no digitales puede ser especialmente desafiante debido a la falta de datos de origen
o porque todavía hay que investigar sobre cómo valorar la conectividad u otras características
digitales de un bien o servicio. BEA también puede necesitar datos para dividir el valor de las
categorías de bienes y servicios entre las diferentes categorías de economía digital. Además, las
ponderaciones pueden variar de un año a otro para algunas categorías de bienes y servicios
debido al rápido ritmo de avance tecnológico en la economía digital.

Incorporación de clasificaciones estadísticas actualizadas, metodologías y

datos de origen.
El rápido avance de la tecnología digital plantea también otros desafíos. La economía digital está
evolucionando más rápido que los estándares de clasificación estadística, estadísticos e
información de origen de los EE. UU. Por ejemplo, las estimaciones en este informe utilizan las
tablas de referencia de 2007 de BEA y el sistema de clasificación NAICS de 2007, lo que significa
que las estimaciones de BEA pueden no reflejar completamente el estado actual de la economía
digital. Este desafío puede complicarse a medida que la tecnología continúa avanzando.

Medición precisa de transacciones P2P

Existen otros desafíos para medir correctamente la contribución del comercio electrónico de
P2P a la economía más allá de la dificultad de separar el valor atribuible a la economía digital.
En la economía colaborativa, los consumidores alquilan sus bienes y servicios privados a otros
consumidores. El alquiler por parte de los consumidores de sus bienes privados, como
automóviles para servicios de transporte y casas de hospedaje, plantea dudas sobre cómo BEA
debe tratar ciertos bienes de consumo duraderos y si los considera como bienes estrictamente
para consumo de consumo final.9 Transacciones P2P borrosas la frontera entre productores y
consumidores y cuestiona cómo dividir el producto de la economía digital entre las industrias
NAICS estándar10 .
9
PWC “La economía colaborativa”, serie de inteligencia del consumidor,
10
Ver Ahmad y Schreyer
Además, el reparto de ingresos entre los intermediarios comerciales y los proveedores de bienes
y servicios asociados puede introducir errores de medición. Según Airbnb, sus ganancias pueden
ser tan bajas como el 3 por ciento de cualquier transacción total, lo que significa que la mayoría
de los flujos de producción bruta a particulares. Esto plantea dos posibles problemas de
medición: (1) los intermediarios comerciales pueden diferir en sus informes de ingresos
(ingresos brutos versus ingresos netos), y (2) los costos operativos y / o las ganancias de los
hogares pueden estar informados erróneamente o no estar disponibles. La presencia de
cualquiera de estos temas complicaría los esfuerzos para medir el comercio electrónico P2P.

Contabilización de las entradas digitales a la producción.

La digitalización ha revolucionado la forma en que las empresas producen, comercializan,
venden y diseminan bienes y servicios. Las empresas emplean cada vez más insumos digitales
para impulsar actividades de producción clave, que incluyen: adquisición en línea de insumos
intermedios, gestión de sistemas logísticos, publicidad en línea o digital, sistemas de
comunicación interna (Voz sobre Protocolo de Internet o VoIP, mensajería en línea,
teleconferencias, etc.) y financieros, software operacional y de gestión de clientes. En el futuro,
es posible que BEA desarrolle una nueva categoría de insumos para insumos digitales a la
producción bajo los actuales marcos de producción de KLEMS (K-capital, L-mano de obra, E-
energía, M-materiales y servicios adquiridos S) .11 La información sobre el uso comercial de los
insumos digitales para la producción probablemente sea útil para BEA para ponderar las
categorías de bienes y servicios que incluyen componentes digitales y no digitales.

Estimando el excedente del consumidor

Este informe no mide los cambios en el excedente del consumidor relacionados con el consumo
de bienes y servicios de la economía digital. El PIB mide el valor de mercado de los bienes,
servicios y estructuras producidos por la economía de la nación en un período. Es decir, mide la
cantidad que los hogares, las empresas y los gobiernos gastan en bienes y servicios finales. Estas
cuentas no miden el excedente del consumidor, o la diferencia entre lo que los consumidores
están dispuestos y pueden pagar por un bien o servicio, y el precio que pagan.
En la economía actual, muchos servicios que en el pasado estaban disponibles para comprar
ahora están disponibles sin costo a través de Internet. Por ejemplo, los consumidores pueden
comparar rápida y fácilmente los precios de los vuelos o el alojamiento utilizando sitios web y
aplicaciones de viajes en lugar de llamar a una agencia de viajes o pasar el tiempo para llamar a
cada aerolínea y hotel. Incluso algunos bienes ahora se han convertido en servicios. En lugar de
comprar un CD o un DVD, los medios digitales permiten a los consumidores acceder o descargar
contenido gratis o por una tarifa. Wikipedia y Google han cambiado la forma en que las personas
aprenden sobre el mundo y buscan información. Además, un solo teléfono inteligente
reemplaza una gran cantidad de bienes individuales que los consumidores anteriormente
compraban individualmente, como una cámara, un reproductor de música, una consola de
videojuegos, etc. Existe un gran interés entre las partes interesadas de la economía digital en
determinar el impacto de estos cambios. En el futuro, BEA puede explorar formas de medir el
impacto del impacto de la economía digital en el bienestar del consumidor.

Conclusiones
Los bienes y servicios digitales han impulsado el crecimiento del PIB en la última década. BEA
continuará monitoreando la producción y el consumo de bienes y servicios digitales a medida
que la economía de EE. UU. Se transforma con la era digital. La economía digital plantea desafíos
de medición, algunos nuevos y antiguos, a los métodos tradicionales de cálculo del PIB y otras
medidas económicas. El desarrollo de BEA de estas estimaciones iniciales hacia una cuenta
satélite de economía digital es un importante paso adelante en el suministro de estadísticas que
muestran el impacto de la economía digital en la economía de los EE. UU. Más amplia.
 INTERRUPCIÓN
EXPONENCIAL
EN LA ECONOMÍA
DIGITAL

DOCUMENTO PREPARADO POR LA VICEPRESIDENCIA PARA LOS

SECTORES Y EL CONOCIMIENTO DEL BANCO INTERAMERICANO DE
DESARROLLO.
ESTADÍSTICAS CLAVE
 La economía digital tiene un valor de 11,5 billones de dólares a nivel
mundial, lo que equivale al 15,5 por ciento del PIB mundial. Para el año
2025, la economía digital será de 23 billones de dólares a nivel mundial, o
24.3% del PIB mundial.
 En las últimas tres décadas, cada dólar invertido en tecnologías digitales
sumó US $ 20 al PBI en promedio, 6.7 veces más que las inversiones no
digitales que agregaron US $ 3 por cada dólar invertido.2
 Para 2020, se prevé que el mercado mundial de servicios en la nube
pública alcance los 383 mil millones de dólares, frente a los 209 mil
millones de dólares en 2016.3
 Según los últimos datos de la CEPAL de las Naciones Unidas, el 46% de los
presupuestos de TIC en América Latina se asignaron a la computación en
la nube en 2012, muy por encima del promedio mundial del 34%4

1
Huawei y Oxford Economics (2017), "Derrame digital: medición del verdadero
impacto de la economía digital" en www.huawei.com/minisite/gci/en/digital-
spillover/files/gci_digital_spillover.pdf.
2
Ídem.
3
Gartner (2017), comunicado de prensa "Gartner dice que el mercado mundial
de servicios en la nube pública crecerá un 18 por ciento" en
www.gartner.com/newsroom/id/3616417
4
UN CEPAL (2014), "Cloud Computing en América Latina: situación actual y
análisis de políticas" en www.cepal.org/en/publications/36740-cloud-
computing-latin-america-current-situation-and-policy-proposals
INTRODUCCIÓN

Se espera que la Revolución Digital, también conocida como la Cuarta Revolución Industrial,
supere todas las transformaciones económicas previas en escala, alcance y complejidad.5 Las
tecnologías disruptivas están evolucionando a un ritmo exponencial e impulsan el crecimiento
en industrias clave como las finanzas, la energía, el transporte, la educación, la salud y el
comercio. A medida que estas tecnologías se vuelven más accesibles y asequibles, tienen el
potencial de afectar significativamente el crecimiento, los mercados laborales y la distribución
del ingreso.6
La economía digital está emergiendo en América Latina y el Caribe (ALC) y, para garantizar la
prosperidad a largo plazo de la región, los países deben ser receptivos
a las oportunidades y riesgos asociados con las tecnologías disruptivas. Adaptar y aprovechar
con éxito sus efectos transformadores pagaría dividendos a largo plazo en
la economía en términos de crecimiento, innovación e inclusión social.
La adaptación a la nueva economía digital requerirá importantes mejoras de infraestructura y el
alojamiento de marcos regulatorios. Mientras que se espera que la penetración de banda
ancha móvil alcance el 66% en 2025 en ALC (61% a nivel mundial), aumentar la inclusión y el
acceso a la infraestructura digital sigue siendo un desafío clave.7 Mientras tanto, la adaptación
del entorno regulatorio es más lenta que el cambio tecnológico.

5
Schwab, Klaus. "La Cuarta Revolución Industrial: lo que significa y cómo responder". Revista
de Asuntos Exteriores. Diciembre de 2015.
6
Leipziger, Danny y Victoria Dodev (2016). "Tecnologías disruptivas y sus implicaciones para la
política económica: algunas observaciones preliminares" en
https://www2.gwu.edu/~iiep/assets/docs/papers/2016WP/LeipzigerDodevIIEPWP2016-13.pdf
7
GSMA. La economía móvil 2018. www.gsma.com/mobileeconomy/wp-
content/uploads/2018/02/The-Mobile-Economy-Global-2018.pdf
Este documento aborda cinco tecnologías disruptivas que están impulsando la transformación
económica masiva y que serán áreas críticas para la formulación de políticas públicas y la
implementación en la región en los próximos años, cloud computing, blockchain, big data,
inteligencia artificial e Internet de las cosas.
DIAGNÓSTICO Y TENDENCIAS
Computación en la nube
La computación en la nube ha sido una de las tendencias tecnológicas más
disruptivas de la última década. Ha cambiado el juego por la forma en que
los gobiernos, las empresas y los consumidores compran y mantienen su
infraestructura de TIC. Los gobiernos y las empresas están dejando de ser
anfitriones de sus propios centros de datos para que otras empresas se
encarguen de ellos, lo que les permite centrarse en sus competencias básicas
y, al mismo tiempo, reducir su huella de carbono. Como resultado, la
computación en la nube ha democratizado el acceso al poder de cómputo
y tecnologías avanzadas que anteriormente estaban reservadas para
grandes empresas con bolsillos profundos, reduciendo las barreras de larga
data para la entrada en el mercado y ayudando así a la proliferación de
nuevas empresas y el crecimiento y la competitividad de pequeñas y
medianas empresas (PYME). Para ilustrar el impacto potencial: Deloitte
estima que entre 2010 y 2015, en los cinco países más grandes de la Unión
Europea, la adopción de la computación en la nube ha generado un impacto
de € 763 mil millones en la economía y la creación de empleos directos e
indirectos 2.3 millones.8
La computación en la nube también está allanando el camino para nuevas
aplicaciones disruptivas, ya que permite la implementación de otras
tecnologías digitales, como análisis de big data, inteligencia artificial y
blockchain, que a su vez apuntalan modelos comerciales innovadores y
disruptivos. Los modelos comerciales ejemplares y conocidos de la nueva
economía digital que han sido habilitados por la computación en la nube
incluyen: Uber, Airbnb, Ama-zon, Facebook y MercadoLibre, entre muchos
otros.

8Comisión Europea (2017), "Midiendo el impacto económico del cloud computing en

Europa" en https://ec.europa.eu/digital-single-market/en/news/measuring-economic-
impact-cloud-computing-europe
 Los beneficios directos e indirectos de la computación en la nube se pueden
resumir en tres áreas: 1) competitividad económica y sostenibilidad; 2)
mayor velocidad de ampliación de la empresa y mayor cantidad potencial,
calidad y valor de los servicios; y 3) ahorros en el gasto público y privado en
infraestructura de servidor y tiempo de gestión que pueden reinvertirse en
competencias centrales y tecnologías de aumento.
2. Blockchain
Blockchain es una tecnología emergente que tiene el potencial de
revolucionar los negocios, el gobierno y toda la economía, transformando la
forma en que los contratos y las transacciones se registran en un mundo
cada vez más digital e interconectado. Blockchain es una base de datos
distribuida a través de múltiples nodos que forman una red donde se
registran todos los registros de cada transacción. El elemento innovador es
que los datos se agrupan en bloques que están continuamente vinculados
linealmente entre sí, asegurando la integridad de los bloques anteriores
utilizando técnicas criptográficas. Además, antes de ser agregado a la
cadena, cada nuevo bloque es validado automáticamente y en tiempo real
por todos los nodos integrantes que son parte del proceso distribuido. Por
lo tanto, mediante el diseño intrínseco, la tecnología evita la manipulación
posterior de los datos almacenados en los bloques de la cadena, lo que
garantiza su inmutabilidad.
Se espera que el gasto global en soluciones de blockchain continúe con una
tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de 81.2% hasta 2021, cuando
los ingresos superen los US $ 9.2 mil millones.9 Comparado con otras
regiones, América Latina experimentará el crecimiento más rápido en gastos
con un plazo de cinco años CAGR de 152.5% de 2016 a 2021.

9IDC (2017), Nueva Guía de gastos de IDC, ve el gasto de Blockchain en todo el mundo
creciendo a $ 9.2 mil millones en 2021, en
www.idc.com/getdoc.jsp?containerId=prUS43526618
 Mientras tanto, se estima que el mercado global de la cadena de bloques
aumentará de US $ 210.2 millones en 2016 a US $ 2.3 mil millones para el
2021, a una tasa compuesta anual de 61.5%.11
Más allá de los impactos tecnológicos y económicos, se espera que
blockchain transforme la forma en que los sectores público y privado hacen
negocios. Por ejemplo, en el sector financiero, blockchain podría ayudar a
eliminar intermediarios como corredores o procesos de aprobación. En el
comercio, la tecnología permite una integración simple y escalable de
sistemas digitales de diferentes organizaciones en una base de datos común.
En el gobierno, blockchain tiene el potencial de aumentar la transparencia
de los procesos gubernamentales, mejorando la verificabilidad y
auditabilidad de las transacciones gubernamentales y reduciendo la
posibilidad de corrupción al garantizar la inmutabilidad de los datos. El
intercambio de datos gubernamentales con el público, así como la
divulgación de su historial completo, facilita la verificabilidad y auditabilidad
de las transacciones. Por ejemplo, en las compras públicas, la tecnología
permite garantizar que el proceso de adquisición cumpla con los requisitos
legales, evitando que datos como los criterios de selección o precios
entregados por los ofertantes se manipulen más tarde, reduciendo así la
posibilidad de corrupción.
3. Big Data
La cantidad de datos generados en el mundo se ha desplomado en los
últimos años y se espera que continúe su crecimiento exponencial en el
futuro previsible. Después de años de ser considerada una tecnología
emergente, el big data finalmente ha llegado a la corriente principal y se ha
convertido en uno de los pilares clave que posibilitan los esfuerzos de
transformación digital en todos los sectores públicos y privados a nivel
mundial.

11Investigación y Mercados (2017), Mercado de Blockchain crecerá a una tasa

compuesta anual de 61.5% para el año 2021 - Análisis por proveedor, aplicación, tamaño
de la organización, Vertical y región - Investigación y mercados, en
www.businesswire.com/news/home/20170425005753/ es / BlockchainMarket-Grow-
CAGR-61.5-2021—
 Los datos grandes se caracterizan por un alto volumen (cantidades masivas
de datos), velocidad (alta velocidad de generación de información y flujo) y
/ o variedad (mezcla de diferentes tipos de datos estructurados, no
estructurados, semiestructurados). También se puede caracterizar por una
gran variabilidad (flujos de datos inconsistentes con picos periódicos) y
complejidad (dificultad para vincular, combinar, limpiar y transformar
datos).
Diariamente, los gobiernos generan y recopilan un gran volumen de datos,
como a través de sus sistemas de recaudación de impuestos, administración
de sistemas nacionales de salud, pensiones y pagos de subsidios, registrando
datos de tráfico, entre otras actividades.12 Vinculando fuentes de datos
existentes de diferentes autoridades y analizando las posibles correlaciones,
patrones y tendencias en los datos, los gobiernos no solo pueden obtener
información sobre cómo mejorar la prestación de servicios a los ciudadanos,
sino también cómo mejorar la equidad de las políticas públicas mejorando
la aplicación de la ley. Por ejemplo, en impuestos, las herramientas de big
data y analíticas podrían ayudar a reducir la evasión y el fraude fiscal al
detectar patrones sospechosos en los datos financieros.
En el sector privado, big data y análisis ayudan a las empresas a mejorar su
productividad y aumentar las ventas, y promueve la creación de nuevos
modelos comerciales. Al combinar datos de fuentes internas y externas y
aplicar big data y técnicas analíticas, las empresas están mejor equipadas
para monitorear, administrar, diagnosticar, predecir y optimizar su
desempeño. Por ejemplo, en la gestión del talento, las herramientas
analíticas y de big data ayudan a las empresas a medir el impacto de los
incentivos de rendimiento.
Se espera que las compras comerciales en todo el mundo de hardware,
software y servicios relacionados con big data y análisis mantengan una tasa
de crecimiento anual compuesta (CAGR) de 11.9% hasta 2020, cuando los
ingresos serán de más de $ 210 mil millones, según los pronósticos de
International Data Corporation (IDC). Comparado con otras regiones,

12Munné R. (2016) Big Data en el sector público. En: Cavanillas J., Curry E., Wahlster W.
(eds) Nuevos horizontes para una economía basada en datos. Springer, Cham.
 América Latina y el Caribe experimentarán el crecimiento más rápido en el
gasto con una tasa compuesta anual de 16.2% entre 2015 y 2020.13 Se
espera que el mercado de datos grandes crezca de US $ 28,65 mil millones
en 2016 a US $ 66,79 mil millones para 2021, a una alta CAGR de 18.45%.
Para capturar todo el potencial del big data en América Latina y el Caribe, se
deberán abordar varios problemas. A nivel gubernamental, se deben
considerar los marcos regulatorios y las políticas relacionadas con la
privacidad, la seguridad, la propiedad intelectual e incluso la responsabilidad
para garantizar la protección de los derechos de las personas y las empresas.
A nivel organizacional, no solo se debe poner en marcha la tecnología y el
talento adecuados, sino que también se debe optimizar el entorno
organizacional para el uso de big data.}
4. Inteligencia artificial
La inteligencia artificial (IA) se puede caracterizar como sistemas
computarizados que se han diseñado para interactuar con el mundo al
emular las capacidades humanas y los comportamientos de inteligencia
como la percepción visual, el reconocimiento del habla, la evaluación de la
información y las decisiones de acción. Las capacidades ampliadas de AI han
sido impulsadas por tres factores: la disponibilidad de big data, algoritmos
mejorados de aprendizaje automático y computadoras más potentes.15
Ejemplos específicos de la "AI estrecha" aplicada incluyen juegos
estratégicos simulados, automatizados

13IDC (2017), Big Data y Business Analytics Revenues Forecast alcanzarán los $ 150,8 mil
millones este año, liderados por las inversiones en banca y fabricación, según IDC, en
www.idc.com/getdoc.jsp?containerId=prUS42371417.
14 Mercados y Mercados (2017), Mercado Big Data por Componente (Software y
Servicios), Tipo (Estructurado, Semi-Estructurado y No Estructurado), Modelo de
Despliegue, Vertical y Región (América del Norte, Europa, Asia-Pacífico, América Latina
y Medio Oriente y África) -Global Forecast hasta 2021, en
www.marketsandmarkets.com/Market Reports / big-data-market-1068.html.
15OficinaEjecutiva del Presidente de los Estados Unidos, Consejo Nacional de Ciencia y
Tecnología (2016), "Preparación para el Futuro de la Inteligencia Artificial" en
obamawhitehouse.archives.gov/sites/ default / files / whitehouse_files / microsites /
ostp / NSTC / preparation_for_the_future_of_ai. Df
 traducción de idiomas, reconocimiento de imágenes, autos sin conductor,
reconocimiento facial y robótica en la fabricación, entre otros.16
La capacidad de las herramientas de IA para automatizar los procesos
depende de cinco consideraciones clave: 1) comprender la naturaleza del
problema que se está resolviendo, es decir, comprender si se deben hacer
predicciones o inferencias causales para resolver un problema; 2) considerar
los tipos de datos requeridos para abordar el problema; 3) garantizar la
disponibilidad de grandes volúmenes de datos de entrenamiento que
permitirán a los algoritmos desarrollar sus capacidades predictivas antes del
despliegue; 4) evaluar la calidad de los datos que se integran a través de las
bases de datos relevantes; y 5) proteger las herramientas de IA de los piratas
informáticos diseñando sistemas y procesos de flujo de datos que tengan
protecciones de privacidad incorporadas. 17
Aunque la investigación indica que solo el cinco por ciento de las
ocupaciones puede automatizarse por completo con la tecnología actual,
casi todas las ocupaciones experimentarán algún tipo de cambio.18 Sin
embargo, para ALC, se estima que el 50 por ciento de los empleos pueden
automatizarse ya que se concentran en trabajo -Integración intensiva,
extracción de recursos naturales y servicios administrativos de nivel
medio.19 Es imperativo que los sectores público y privado de ALC trabajen
juntos para abordar estos cambios en el mercado laboral de una manera que
promueva la expansión de la economía y la innovación digitales, al tiempo
que garantiza desarrollo económico inclusivo para aquellos vulnerables a
tales cambios.

16Ídem.

17Brookings Institute (2017), Kevin C. Desouza, Rashmi Krishnamurthy y Gregory S.

Dawson, "Aprender de la experimentación del sector público con la inteligencia
artificial" en www.brookings.edu/blog/techtank/2017/06/23/learning- de-sector
público-experimentación-con-inteligencia-artificial /.
18 McKinsey Global Institute (2017), "¿De dónde vendrá el crecimiento de América
Latina?" En
www.mckinsey.com/~/media/mckinsey/global%20themes/employment%20and%20g
owth / how% 20to% 20counter% 20three% 20threats% 20to% 20growth% 20in%
20latin% 20am rica / mgi-discussion-paper-where-will-latin-americas-growth-come-
from-april 2017.ashx.
19BID (2017), Revista de Integración y Comercio: Volumen 21: No. 42: agosto de 2017-:
"Robot-lución: el futuro del trabajo en la integración latinoamericana 4.0" en
publications.iadb.org/handle/11319/8487.
5. Internet de las cosas
Con la rápida penetración de Internet de banda ancha, la disminución de los
costos de conexión y la expansión de la aplicación de Wi-Fi, cada vez es más
fácil conectar cualquier dispositivo a Internet. Estos incluyen relojes,
teléfonos celulares, auriculares, automóviles, y las posibilidades son
infinitas. Pronto, cientos de miles de millones de dispositivos conectados
extenderán la economía digital a todos los sectores, alterando los procesos
y modelos comerciales existentes. International Data Corporation prevé una
trayectoria de menos de 20 mil millones de dispositivos en la actualidad, a
30 mil millones en 2020, a 80 mil millones en 2025; y para 2025, habrá
152,200 nuevos dispositivos conectados por minuto.20
Se espera que el gasto mundial de Internet de las cosas (ITC) mantenga una
tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 14,4% durante el período
de previsión 2017-2021, superando la marca de 1 billón de dólares en 2020
y alcanzando los 1,1 billones de dólares en 2021. América Latina se espera
que logre el crecimiento general más rápido en gasto de IoT entre todas las
regiones geográficas, con una CAGR estimada de cinco años de 28.3% .21Se
espera que el mercado de IoT crezca de US $ 170.57 mil millones en 2017 a
US $ 561.04 mil millones para 2022, en una CAGR de 26.9% .22
En el sector público, IoT podría ayudar a la sociedad y mejorar la
gobernabilidad al aumentar la eficiencia de la provisión de servicios públicos.
Al utilizar los datos de los sensores recopilados por dispositivos habilitados
para IoT, como medidores inteligentes y semáforos, los gobiernos obtienen
información sobre las necesidades de los ciudadanos y pueden implementar
cambios de manera rápida y efectiva. Por ejemplo, en el transporte público,
el uso de datos de dispositivos de seguimiento GPS distribuidos podría
permitir la supervisión en tiempo real de los autobuses y proporcionar a los
pasajeros información mejor sobre los tiempos de espera.
20Forbes (2016), IoT Actualización de mitad de año de IDC y otras empresas de
investigación, en www.forbes.com/sites/gilpress/2016/08/05/iot-mid-year-update-
from-idc-and-other -researchfirms / # 7a632e6955c5.
21InternationalData Corporation (2017), IDC pronostica el gasto mundial en Internet de
las cosas para alcanzar $ 772 mil millones en 2018, en www.idc.com/getdoc.jsp?
containerId = prUS43295217.
22Mercados y mercados (2017), mercado de Internet de las cosas (IoT) por solución de
software (análisis de transmisión en tiempo real, solución de seguridad, gestión de
datos, supervisión remota y gestión de ancho de banda de red), servicio, plataforma,
área de aplicación y región - Pronóstico global al 2022, en
www.marketsandmarkets.com/Market-Reports/internet-of-things-market-573.html
En el sector privado, IoT tiene el potencial de mejorar la eficiencia operativa
de las empresas al reducir costos y generar nuevos ingresos. Por ejemplo, en
el sector agrícola, una red de sensores distribuidos en el campo podría
ayudar a controlar los niveles de temperatura y humedad y controlar los
sistemas de riego. En el área de la logística, los sensores podrían ayudar a
controlar el uso y el estado de las flotas e informar las decisiones de
reabastecimiento y mantenimiento. En el cuidado de la salud, las redes de
varios sensores ofrecen la capacidad de monitorear los comportamientos y
síntomas de los pacientes en tiempo real y a un costo relativamente bajo, lo
que permite a los médicos realizar diagnósticos mejores.
Aunque el futuro de IoT es prometedor y sus beneficios potenciales son
numerosos, la velocidad de su adopción en ALC depende de la disponibilidad
de plataformas de infraestructura adecuadas, así como del desarrollo de
marcos legales y regulatorios adecuados.
EL ROL DEL SECTOR PRIVADO
Para aprovechar los beneficios de estos nuevos desarrollos tecnológicos y
liberar todo el potencial de la economía digital, el sector privado y los
gobiernos de ALC deben unir fuerzas para desarrollar un ecosistema digital
habilitador que aborde varias áreas clave, que incluyen:
1. Aumentar la inversión privada, especialmente en infraestructura de
conectividad que permite un acceso equitativo;
2. Diseñar marcos regulatorios apropiados que brinden incentivos para la
innovación y mitiguen consecuencias no deseadas;
3. Invertir en capital humano para asegurar la disponibilidad de las
habilidades requeridas para escalar estas nuevas tecnologías y allanar una
transición sin problemas para aquellos que pasan de trabajos de tecnología
heredados o automatizados a trabajos de nueva economía;
4. Ajustar los sistemas y procesos de compras públicas;
5. Aprovechar las tecnologías disruptivas para desarrollar contenido y
aplicaciones localmente relevantes y útiles para los usuarios; y
6. Apoyar startups innovadoras desde la incubación a través de escalado.