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AGORAFOBIA
I. DEFINICIONES DE AGORAFOBIA
III.COMPONENTES DE LA AGORAFOBIA
Existen una gran variedad de situaciones temidas y que las personas con agorafobia
acaban evitando por las reacciones que desencadenan. .
Sin embargo, las situaciones no siempre se evitan, sino que se pueden afrontar con
ansiedad y/o con conductas defensivas para prevenir o manejar la amenaza asociada a la
ansiedad/pánicoma.
C. La ansiedad anticipatorio
D. El miedo al miedo
Las personas con agorafobia tienen miedo a aquellas situaciones en las que pueden tener
sensaciones de ansiedad o ataques de pánico. Suele surgir normalmente en situaciones
externas temidas y también como consecuencia de las reacciones corporales producidas
por el calor, el hambre, la fatiga, el estrés... que desencadenan a la vez reacciones
corporales como debilidad en las extremidades, tensión, visión borrosa, malestar
Agorafobia
La gran mayoría de las personas que sufren agorafobia informan tener o haber tenido
ataques de pánico. Éste consiste en un intenso miedo, terror o malestar acompañado
frecuentemente con una sensación de peligro o catástrofe inminente y de un impulso a
escapar.
En los casos graves las personas con agorafobia pueden pasar la mayor parte del tiempo
en casa en compañía de familiares y llegar incluso al aislamiento total. Estas personas se
ven incapacitadas para realizar actividades diarias.
Los trastornos más frecuentes que pueden convivir junto con la agorafobia son
trastornos de ansiedad generalizada o los depresivos. Menos frecuentes son la fobia
social y fobia específica.
Las mujeres tienen porcentajes más altos de coexistencia de la agorafobia con otros
problemas en el caso del trastorno de ansiedad generalizada, trastornos fóbicos y
depresión mayor. Si embargo, en los hombres tienen una mayor incidencia en el abuso
de sustancias.
Existen casos que usan el alcohol y/o los fármacos para afrontar sus problemas de
ansiedad, pánico y evitación. Éstos pueden reducir la ansiedad a corto plazo pero el
efecto se invierte a más largo término y contribuir al mantenimiento de los miedos y de
la ansiedad.
Uno de los factores es la atribución errónea de sensaciones inducidos por otros factores
a las situaciones ambientales en las que ocurren. Un ejemplo sería asociar el malestar
emocional a las situaciones externas, en vez de asociarlas a los eventos interpersonales
que realmente lo causan (problemas médicos, cambios hormonales, hipoglucemia...), o
atribuir erróneamente un ataque de ansiedad/pánico a una situación ambiental cuando
realmente vendría desencadenado por un período de estrés.
Agorafobia
Otros factores estudiados son las características de personalidad, que pueden contribuir
al surgimiento y/o mantenimiento de la agorafobia; experiencias traumáticas directas
fuera de casa como ataques de pánico, desmayos, asfixia, náuseas o sudoración intensa;
o también se ha estudiado la vulnerabilidad genética como factor de relevancia.
a. Eventos estresantes
La gran mayoría de personas con agorafobia informan haber pasado por un periodo
de estrés o acontecimientos vitales importantes en la época en que comenzó la
agorafobia: conflictos interpersonales con el marido o algún familiar,
divorcio/separación, nacimiento/aborto, muerte o enfermedad de una persona
significativa, reacción al consumo de drogas, enfermedades/operaciones
importantes, estrés laboral o escolar, problemas económicos, entre otros.
Los agorafóbicos utilizan una gran variedad de estrategias, aparte del escape y la
distracción, para afrontar los ataques de pánico: medicarse, beber alcohol, aguantar,
relajación, pensar que el ataque pasará pronto, etc. La conducta de escape se ve
reforzada por la reducción de ansiedad, por la sensación de seguridad o hasta por la
atención y apoyo de otros.
Hay personas que desarrollan un trastorno del pánico pero sin agorafobia, es decir,
no presentan evitación agorafóbica y mantienen una actitud de afrontamiento frente
a las dificultades. Estas personas tienen un mayor sentido de control personal, una
mayor tolerancia de la ansiedad y obtienen menos beneficios de la conducta de
evitación (apoyo social, reducción de la ansiedad...).
V. MANIFESTACIÓN DE LA AGORAFOBIA
Taquicardia
Ráfagas de calor/frio
Temblores
Pérdida de sensibilidad
Ahogo o falta de aire
Hiperventilación, Mareo
Vértigo
Sensación de irrealidad
Dolor u opresión en pecho
Calor, sudor, sofoco, fatiga o cansancio.
Nauseas, dificultad para tragar
Sensaciones en el estomago (como mariposas en la panza)
Visión borrosa o sensación de ver luces, Pinchazos
Calambres, entumecimiento, tensión, piernas débiles
Palidez
Sensación de orinar o evacuar.
Cada persona al experimentar toda una serie igual o distinta de respuesta fisiológica en
cada uno de sus ataques de pánico, busca la ayuda de la manera posible e inmediata para
salir de tal situación disminuyendo o cortando las emociones y que a su vez le mantenga
a salvo. A todo esto, aparecen automáticamente los "pensamientos catastróficos" que
Agorafobia
Ahogarse o asfixiarse:.
Desmayarse:
Miedo al miedo:.
Crisis de angustia
● Tipos de Agorafobia
F40.0 Agorafobia
El término "agorafobia" se utiliza aquí con un sentido más amplio que el original y que
el utilizado aún en algunos países. Se incluyen en él no sólo los temores a lugares
abiertos, sino también otros relacionados con ellos, como temores a las multitudes y a la
dificultad para poder escapar inmediatamente a un lugar seguro (por lo general el
hogar). El término abarca un conjunto de fobias relacionadas entre si, a veces solapadas,
entre ellos temores a salir del hogar, a entrar en tiendas o almacenes, a las multitudes, a
los lugares públicos y a viajar solo en trenes, autobuses o aviones. Aunque la gravedad
de la ansiedad y la intensidad de la conducta de evitación son variables, este es el más
incapacitante de los trastornos fóbicos y algunos individuos llegan a quedar
completamente confinados en su casa. A muchos enfermos les aterra pensar en la
posibilidad de poder desmayarse o quedarse solos, sin ayuda, en público. La vivencia de
la falta de una salida inmediata es uno de los rasgos clave de muchas de las situaciones
que inducen la agorafobia. La mayor parte de los afectados son mujeres y el trastorno
comienza en general al principio de la vida adulta. Están presentes a menudo síntomas
depresivos y obsesivos y fobias sociales, pero no predominan en cuadro clínico. En
ausencia de un tratamiento efectivo la agorafobia suele cronificarse, aunque su
intensidad puede ser fluctuante.
La edad de comienzo se sitúa aproximadamente entre los 25 y los 30 años, aún así
existen casos en que el inicio puede darse en cualquier momento entre los 5 y los 58
años. Las personas entre los 45 y los 64 años tienen menos riesgo de desarrollar una
agorafobia.
La agorafobia suele comenzar con ataques de pánico o una ansiedad que van creciendo
gradualmente en intensidad a lo largo de las sucesivas ocurrencias hasta convertirse en
un ataque de pánico. Las personas que sufren este trastorno, en un comienzo, suelen
consultar a los centros de salud primaria y a diversos especialistas en medicina, que en
Agorafobia
ocasiones, no les encuentran nada anómalo. Finalmente, los casos moderados o graves
terminan por solicitar ayuda psiquiátrica y/o psicológica.
A. Psicológicos
Técnicas Conductuales
Técnicas Cognitivas
C. Terapia farmacológica