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LECTURAS SOBRE NUTRICIÓN (2004) 11 (3): 55-71 Lecturas sobre Nutrición Nº 46

Revisión de tema

Trastornos de la deglución en el paciente


en estado crítico
Luis Carlos Domínguez Torres, MD1, Gabriel Gómez Morales, MD2

1
Residente IV año Cirugía General. Hospital Universitario San Ignacio. Pontificia Universidad Javeriana. Bogotá, Colombia.
2
Jefe Depto. de Cirugía General. Hospital Universitario San Ignacio. Pontificia Universidad Javeriana. Bogotá, Colombia.

Palabras clave: deglución, paciente crítico, factores de riesgo, traqueostomía, intubación orotraqueal,
videofluoroscopia, endoscopia digestiva alta, enfermedad cerebrovascular, revisión.

Introducción mente integrados que transportan la co-


Los trastornos de la
deglución son alteracio- mida y el líquido desde la boca hasta el
nes frecuentes y Los trastornos de la deglución consti- estómago (1).
usualmente subestimadas tuyen una variada gama de alteraciones,
que se asocian con un
aumento en la morbilidad de múltiples orígenes, que representan
y mortalidad de los una disfunción en la eficiencia y/o seguri- Componentes (2)
pacientes que ingresan a
las unidades de cuidado dad de la función deglutoria. La presencia
intensivo. Este tipo de de estas alteraciones se correlaciona di- Tallo cerebral
alteraciones se
correlacionan con un
rectamente con un pobre estado nutricio-
incremento en el número nal, aumento en la morbilidad y mortalidad, El control central e iniciador de una
de neumonías, falla
neumonía y discapacidad entre los sobre- adecuada deglución se encuentra en las
ventilatoria y muertes en
vivientes de patologías que ameritan cui- neuronas ubicadas a nivel de la médula
este tipo de pacientes. El
presente documento dado crítico. La frecuencia en su dorsal, específicamente en el núcleo del
revisa en una sección
presentación, aunque no completamente tracto solitario y, ventralmente, en el nú-
inicial los aspectos
fisiopatológicos más determinada en los pacientes que egresan cleo ambiguo. El primero recibe aferencias
importantes de estos
de las unidades de cuidado intensivo, pue- de la corteza, del vago y del glosofaríngeo
trastornos en los
pacientes que ameritan de alcanzar una prevalencia entre el 45- especialmente. El segundo, es un núcleo
cuidado crítico, en el
65% 8 de los pacientes con eventos accesorio en el proceso deglutorio y prin-
entendido de una diversa
etiología con una vía final cerebrovasculares. El conocimiento ade- cipalmente actúa mediando la respuesta
común: aspiración y
cuado de la fisiología y biomecánica de de la fase esofágica de la deglución (3).
desnutrición, neumonía,
muerte. Luego se la deglución, de la evaluación clínica,
describen los principales
radiológica y endoscópica y de los prin- Corteza cerebral
métodos diagnósticos de
acuerdo a la información cipios generales de tratamiento, permi-
más reciente y relevante y, ten al médico que se ve enfrentado en Interviene en parámetros de la se-
finalmente en una tercera
parte se describen las la práctica hospitalaria al cuidado de cuencia de la deglución, tales como la ini-
estrategias orientadas a pacientes críticos, tener nuevas herra- ciación, tiempo y duración de la misma,
romper esta secuencia,
las cuales dependen de mientas de manejo para una patología a través de áreas motoras premotoras y
un integrado equipo de de creciente presentación y considera- motoras suplementarias. Igualmente la
trabajo, que involucra al estimulación eléctrica de dichas áreas
médico, a otros ble morbilidad.
prestadores de la salud y contribuye al mantenimiento de la
a la familia.
Fisiología de la deglución masticación. Se ha demostrado además
que el hemisferio derecho interviene en
La deglución normal es definida como el mantenimiento de la función oral du-
un proceso fisiológico ordenado que in- rante la deglución y que el izquierdo lo
cluye una secuencia de movimientos alta- hace en la fase faríngea.

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Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

En animales, las lesiones del aérea el evento desencadenante es en principio


precentral y de la porción inferior del giro la peristalsis mediada a través del vago,
frontal tienen significativas consecuencias sin embargo, existe una peristalsis secun-
a nivel de la coordinación facial, lingual, daria, mediada de manera autónoma por
masticatoria y deglutoria. Además, ha sido el esófago (3).
demostrado que en las regiones adyacen-
tes a la cisura de Silvio y a la corteza late- Biomecánica de la deglución
ral precentral, la estimulación durante
Fases de la deglución (1, 2)
craneotomías para tratamiento de la epi-
lepsia han resultado en respuestas
Existen cinco fases:
deglutorias y salivatorias de considerable
importancia (3). Fase I: Fase oral preparatoria inicial

Cerebelo Comprende la generación de estímu-


los visuales y olfatorios que promueven la
Contribuye a generar estrategias salivación, antes de que el alimento entre
compensatorias en la deglución a través en contacto con la cavidad oral (figura 1).
de patrones cognitivos bien desarrollados
que, eventualmente, tienden a ser auto- Fase II: Fase oral preparatoria
máticos, cuando nuevos parámetros de secundaria
longitud, duración y posición son sobre-
impuestos al patrón generador. Representa el contacto inicial del ali-
mento con la saliva y su rompimiento a
Vías ascendentes partir de movimientos masticatorios
rotatorios de la cavidad oral (figura 2).
La información aferente para la deglu-
ción entra a la corteza y el tallo provenien- Fase III: Fase oral
te de vías olfatorias y visuales de los pares
craneales V, VII, IX y X. Es la fase oral propiamente dicha, en
la cual se forma un bolo alimentario cohe-
Vías descendentes sivo el cual es transferido en sentido
anteroposterior.
La información sensitiva es procesa-
da en la corteza y el tallo y, particularmen- Fase IV: Fase faríngea
te a partir de las proyecciones interneuro- Representada por la presencia del bolo
nales —de las neuronas medulares alimenticio en la faringe. En esta fase el
ventrales— hacia motoneuronas ubicadas cierre de la vía aérea progresa en sentido
en el núcleo ambiguo, el núcleo del inferior a superior en la laringe y el bolo es
hipogloso y el núcleo trigeminal. En gene- dirigido en sentido caudal protegiendo de
ral toda la respuesta eferente está media- esta forma a la vía aérea de la exposición
da por el V, VII, IX y X par, y varía en fun- alimentaria (1) (figura 3)
ción de la viscosidad, volumen y densidad
del alimento. Fase V: Fase esofágica

La propagación de la contracción Representada por el paso del bolo


esofágica ocurre a través del plejo alimenticio de la faringe al esófago (fi-
mentérico de Auerbach. Se reconoce que gura 4).

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Lecturas sobre Nutrición Nº 46

Secuencia temporal (1, 2, 17)


Después de una suficiente prepara-
ción, el bolo es movido en un sentido
anteroposterior desde el centro de la len-
gua. El borde posterior del bolo es mante-
nido por la depresión del velo del paladar
hasta la parte posterior de la lengua. La
elevación del velo separa la orofaringe de
la nasofaringe, así como las porciones la-
terales de la lengua presionan en un sen-
tido que dirige la fuerza hacia el punto
medio de la misma, facilitando una distri-
bución lingual arqueada, en la que diver-
sos mecanorreceptores ubicados en todo
su trayecto envían estímulos aferentes al
Figura 1
tallo y la corteza para iniciar la fase faríngea
Fase oral preparatoria. La acción vo-
de la deglución.
luntaria de la musculatura de la len-
En este momento, la porción medial gua lleva el bolo alimenticio anterior-
de la lengua presiona el paladar y la epi- mente, mientras el paladar y la
glotis se eleva permitiendo el paso del bolo musculatura posterior de la lengua
alimentario a la faringe. Con el inicio de la previenen el paso prematuro de ali-
fase faríngea, la vía aérea es protegida por mentos hacia la faringe y la
una secuencia que inicia con la aducción regurgitación nasal. Rubin JS,
de las cuerdas vocales verdaderas, segui- Broniatowski M, Kelly JH, eds. The
swallowing manual. San Diego: 2000;
da por una aproximación de las falsas
1-20.) En: Schindler: Laryngoscope,
cuerdas vocales. La laringe, simultánea-
volume 112(4). April 2002; 589-602.
mente comienza a moverse en un sentido
superior y anterior, que cuando adquiere
una fuerza máxima contribuye a colapsar
el vestíbulo laríngeo y asiste la inversión bre el esfínter cricofaríngeo y su apertura,
epiglótica, la cual es el último nivel de cie- favorecida por la elevación de la laringe
rre. Así, la epiglotis es invertida por una permiten el paso del bolo al esófago, el
combinación de eventos que incluyen la cual posteriormente avanzará por estímu-
propulsión del bolo alimentario en sentido lo peristáltico.
inferior, con el movimiento laríngeo en sen-
tido superior. Interacción de estructuras anatómicas (2)

En esta secuencia de eventos, el múscu- Aproximadamente 25 pares de múscu-


lo cricofaríngeo se relaja a través de los los estriados reciben inervación de los
efectos biomecánicos combinados del nervios craneales V, VII, IX, X y XII. Estos
movimiento superior y anterior de la larin- músculos actúan mediante funciones
ge, y por la presión ejercida sobre él por el agonistas y antagonistas, sinergistas y co-
bolo alimentario. Simultáneamente, el contractoras coordinadas por un estímulo
constrictor de la faringe se contrae y per- mecánico de carácter dinámico que es el
mite que sea mantenido el cierre velofa- alimento. Intervienen entonces, de mane-
ríngeo con el consecuente avance en ra secuencial, los músculos linguales,
sentido distal del bolo alimentario. Igual- masticatorios y faríngeos fundamental-
mente, la presión negativa generada so- mente, a través de un sistema coordinado

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Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

Figura 2 Figura 4
Fase de transporte oral. El movimien- Transición faringoesofágica. La inver-
to peristáltico de la lengua en sentido sión epiglótica y la contracción de la
anteroposterior permite que el bolo musculatura laríngea sellan comple-
pueda llevarse hacia la faringe. La tamente la vía aérea y el bolo pasa
musculatura del paladar sella la posteriormente a través del esfínter
nasofaringe. Rubin JS, Broniatowski esofágico superior completamente
M, Kelly JH, eds. The swallowing ma- relajado. Rubin JS, Broniatowski M,
nual. San Diego: 2000; 1-20.) En: Kelly JH, eds. The swallowing manual.
Schindler: Laryngoscope, volume San Diego: 2000; 1-20.) En: Schindler:
112(4). April 2002; 589-602. Laryngoscope, volume 112(4). April
2002; 589-602.

que involucra el trabajo de la lengua, el


hioides y la laringe sincrónicamente.
De gran importancia es el papel de los
constrictores superior, medio e inferior de
la faringe, los cuales favorecen el avance
en sentido caudal del bolo alimentario, y
de la adecuada relajación del cricofarín-
geo, especialmente en el mecanismo de
inversión epiglótico.
En general, en la preparación del bolo
intervienen el V-VII par, en la propulsión el
Figura 3 X-XII y en la elevación del paladar el X. La
Fase faríngea. El bolo es dirigido ha- vía aérea es protegida por aposición de
cia la vallecula. La musculatura las cuerdas vocales verdaderas y falsas y
suprahioidea se dirige en sentido de los aritenoides contra la base la epiglo-
superior y anterior. Rubin JS, Bronia- tis. El movimiento del hioides y la laringe
towski M, Kelly JH, eds. The está mediado por los nervios V y VII, C1-
swallowing manual. San Diego: 2000; C3, lo cual aumenta la protección de la vía
1-20.) En: Schindler: Laryngoscope, aérea y contribuye a mantener relajado y
volume 112(4). April 2002; 589-602. abierto el esfínter esofágico superior (5).

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Lecturas sobre Nutrición Nº 46

Propiedades del bolo pasivamente o por acción de los múscu-


los infrahioideos (5).
Las propiedades físicas del bolo son
detectadas a través de receptores sensiti- Trastornos de la deglución en
vos y mecánicos ubicados en la orofaringe, el paciente crítico
los cuales envían señales aferentes hacia
la corteza y el tallo. En general existen cua- Los trastornos de la deglución se en-
tro propiedades del bolo: volumen, visco- tienden como un grupo de patologías
sidad, densidad y temperatura. La primera que representan un problema de eficien-
se refiere al tamaño, y tiene particular im- cia y/o seguridad en la función deglutoria
(20)
portancia por cuanto determina la excur- . Pueden clasificarse de manera ge-
sión de los grupos musculares, su neral en tres tipos. Un grupo inicial de pa-
contracción, relajación y la elevación de cientes que mantienen un control cortical
la laringe e inversión de la epiglotis. La se- y/o del tallo cerebral alterados (software),
gunda y tercera, determinan la duración pero que no presentan cambios anatómi-
del tránsito oral y faríngeo. Finalmente, la cos (hardware) importantes que impiden
cuarta propiedad ha sido asociada con el o dificulten el proceso deglutorio normal;
incremento de la conciencia sensorial du- un segundo grupo, en el que no existen
rante la enfermedad, según el alimento se alteraciones centrales, pero en el que se
disponga de manera fría o caliente (2). encuentran alteraciones anatómicas im-
portantes y, finalmente, un tercer grupo en
el que se encuentran alteraciones de tipo
Función respiratoria durante la mixto (2).
deglución
De esta forma, y como se verá más
La relación entre la deglución y la res- adelante, la rehabilitación de este tipo de
piración es un proceso sincrónico que en trastornos implica un adecuado conoci-
condiciones normales debe proveer un miento de la función neurológica, de la
mecanismo protector que impida el paso biomecánica de la deglución, y de los efec-
de alimentos a la vía aérea. La espiración, tos e interacciones de las propiedades del
antes y después de la fase faríngea, se bolo alimenticio con la anatomía normal y
cree que sirve como un cierre inherente y alterada. Inicialmente se describirán los
un mecanismo de depuración de partícu- principales factores y etiologías que afec-
las que potencialmente pueden entrar a la tan cada uno de los componentes de la
vía aérea; sin embargo, ha sido demos- deglución, según sean periféricos (biome-
trado que con el envejecimiento existe cier- cánicos) o centrales (tabla 1) y posterior-
ta deglución de saliva durante la fase mente se discutirán las alternativas
inspiratoria del ciclo respiratorio (4). De esta diagnósticas y terapéuticas para las con-
manera, la relación entre sistema respira- diciones más relevantes propuestas en la
torio y digestivo es directa y se ve afecta- presente revisión.
da por elementos tales como las
propiedades del bolo, los movimientos Factores relacionados con
posturales y las patologías previas del pa- alteraciones en la biomecánica
ciente (1). de la deglución
Efectos de la intubación endotraqueal
En resumen, la respiración es inhibida en la función deglutoria
principalmente durante la deglución
(apnea deglutoria) y, después de ésta, las La deglución puede afectarse de ma-
estructuras retornan a su posición original nera directa o indirecta (4, 6). Directamente,

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Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

a través del impacto del tubo orotraqueal aérea de la aspiración de secreciones


sobre las estructuras laríngeas, secunda- y alimento, como anteriormente se
rio a la intubación traumática y prolonga- creía. Además, el incremento en la pre-
da o por agitación del paciente, lo cual sión intratraqueal, favorece un aumen-
causa un efecto abrasivo del tubo contra to secundario de la presión en la laringe
la mucosa laríngea. durante la deglución, lo cual puede de-
rivar en malacia, estenosis o fístula.
• Las manifestaciones directas del trau-
ma laríngeo son el edema de las cuer-
das vocales y supraglótico, la • Igualmente, la traqueostomía funcio-
presencia de tejido de granulación en nalmente separa el tracto digestivo del
la laringe, la subluxación de uno o respiratorio, impidiendo la coordina-
ambos cartílagos aritenoides, el espas- ción de la respiración y la protección
mo laríngeo y la parálisis permanente de la vía aérea al alterar el reflejo de
o temporal del nervio laríngeo recurren- cierre glótico parcial o totalmente y la
te. Cada una de estas anormalidades aducción de las cuerdas vocales, y al
puede comprometer la competencia favorecer no sólo la aspiración
glótica necesaria para mantener la pro- prandial, sino también el reflujo gas-
tección de la vía aérea y la fonación. troesofágico.
La presencia de edema glótico y
supraglótico, por su parte, reducen la
habilidad del paciente para sentir la • Las traqueostomías alteran además la
presencia de secreciones en la larin- presión subglótica de la vía aérea,
ge e hipofaringe, lo cual a su vez inhibe dado que la alteración en la resisten-
parcial o totalmente la respuesta cia espiratoria favorecida por las cuer-
faríngea deglutoria y favorece la aspi- das vocales, las cuales ayudan a
ración silente al tracto respiratorio. Por mantener los volúmenes pulmonares
otra parte, la sola presencia del tubo durante la fase espiratoria, se ve alte-
orotraqueal altera los movimientos na- rada y altera el ciclo respiratorio, ha-
turales de la musculatura intrínseca y ciendo cada vez más necesaria una
extrínseca de la faringe y laringe per- inspiración temprana, la cual afecta
petuando, con el tiempo, la debilidad, secundariamente la coordinación en-
rigidez y atrofia de la musculatura. tre respiración y deglución.

• Los efectos indirectos de la intubación • La excursión laríngea, en sentido


orotraqueal están relacionados con la anterosuperior durante la deglución, fa-
coordinación entre la deglución y la cilita el cierre vertical del vestíbulo
respiración, perpetuados por los dife- laríngeo, protegiendo la vía aérea y
rentes tipos de ventilación que alteran abriendo en esfínter esofágico supe-
la fisiología normal y favorecen la as- rior. La traqueostomía altera la eleva-
piración de secreciones y alimento. ción laríngea.

Efectos del tubo de traqueostomía en


la protección de la vía aérea y la • La traqueostomía desensibiliza los re-
deglución (4, 1, 7, 16) ceptores laríngeos e hipofaríngeos, re-
sultando en una respuesta retardada
• La presencia de un tubo de traqueos- del reflejo deglutorio, lo cual facilita la
tomía no protege completamente la vía aspiración.

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Lecturas sobre Nutrición Nº 46

Tabla 1
Factores de riesgo asociados en los trastornos de la deglución
en el paciente crítico

Intubación orotraqueal.
Polineuropatía del paciente crítico.
Enfermedades neurológicas asociadas.
Medicamentos (antipsicóticos, antihistamínicos, neurolépticos,
benzodiacepinas, drogas que perpetúan RGE).
Edad >70 años.
Sexo masculino
Enfermedad cerebrovascular.
Cirugías asociadas.
EPOC y enfermedades crónicas de la vía aérea superior.
Reflujo gastroesofágico.
Sondas de nutrición enteral.

Polineuropatía del paciente crítico (4) la fase oral preparatoria, en el transporte


oral y en la fase esofágica de la deglu-
La polineuropatía del paciente crítico ción. Además, la hipoquinesia asociada
puede resultar en atrofia muscular por des- de la musculatura faríngea favorece un
uso, la cual causa debilidad y rigidez de incremento en el residuo faríngeo el cual
todos los músculos estriados, incluyendo predispone al paciente a la aspiración.
los de la laringe y faringe. Factores que Otras enfermedades son la esclerosis la-
favorecen esta condición son la inmovili- teral amiotrófica (ELA) y las enfermeda-
dad, los corticosteroides, los agentes que des del tejido conectivo, las cuales
causan bloqueo neuromuscular y los se- afectan la capacidad deglutoria del pa-
dantes. ciente neurológico.

Los medicamentos causan efectos


Enfermedades preexistentes y importantes sobre la deglución. En particu-
medicamentos (3) lar, uno de los principales efectos es la
xerostomía. La sequedad oral altera el
La enfermedad de parkinson, la cual tránsito del bolo alimenticio e incrementa
afecta la capacidad de iniciar y realizar el residuo faríngeo. Fisiológicamente esta
tareas motoras complejas, se encuentra alteración se ve favorecida por la presen-
acompañada de alteraciones en los ner- cia de medicamentos antimuscarínicos,
vios craneales reflejadas en la capacidad los cuales resultan en una actividad
de deglución y del lenguaje. Cerca del 15- anticolinérgica importante que reduce la
20% de los pacientes con enfermedad de producción de saliva controlada por la
parkinson, demuestran estudios positivos estimulación parasimpática; por los efec-
para aspiración. La rigidez y bradiquinesia tos de la deshidratación resultantes de la
de estos pacientes producen retardos en administración de diuréticos; por el uso

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Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

de neurolépticos, antipsicóticos y antihis- • Disfunción del cricofaríngeo, represen-


tamínicos que promueven alteraciones en tado en una incompleta relajación del
el estado de conciencia y cusan síntomas segmento cricofaríngeo pese a una
extrapiramidales y; por el uso de medica- normal relajación del esfínter.
mentos que favorecen el reflujo gastroeso-
fágico, como la teofilina, bloqueadores de Cirugías asociadas
canales de calcio, nitratos y benzodiace-
pinas. Estos efectos son dosis depen- La presencia de resecciones del piso
diente y varían en función de cada de la boca, linguales (parciales o totales),
paciente. resecciones del paladar, resecciones
faríngeas, hemilaringuectomías, laringuec-
Edad tomías supraglóticas y totales, así como
los procedimientos en la base del cráneo,
Son varios los cambios que se pre- afectan significativamente el componente
sentan en la función deglutoria de las per- anatómico de la deglución.
sonas con la edad. Un estudio realizado
en 161 pacientes en la etapa inmediata- Factores corticales y del tallo
mente siguiente al evento cerebrovascu- cerebral
lar, demostró que son factores de riesgo
importantes el sexo masculino y la edad Enfermedad cerebrovascular
superior a 70 años (21). Los trastornos re-
lacionados de manera más importante Las lesiones corticales izquierdas han
con esta característica, son especialmen- sido asociadas significativamente con
te evidenciados en la fase oral de la de- apraxia oral y bucofaríngea. Algunos estu-
glución, situación que aunada a las dios han mostrado que la coordinación
alteraciones descritas previamente en la mandibular, lingual y labial, es predominan-
fase faríngea, perpetúan los trastornos temente una función del hemisferio izquier-
deglutorios en este grupo de pacientes. do; sin embargo, esta hipótesis permanece
Son: en discusión, dado que se ha encontrado
en otros estudios que cerca de dos ter-
• Disminución en la fuerza masticatoria. cios de los pacientes con lesiones
hemisféricas derechas también manifies-
tan las mismas alteraciones (3).
• Disminución en la presión lingual ne-
cesaria para derivar el bolo alimenticio
Ahora bien, las lesiones cerebrovascu-
a la faringe.
lares que afectan el tallo cerebral, aunque
son menos frecuentes que las corticales,
• Aumento en los depósitos de tejido conllevan una mayor incidencia de altera-
conectivo en el cuerpo de la lengua, lo ciones en la deglución y de aspiración,
cual restringe el control del bolo dada la injuria sobre las fibras corticobul-
alimentario y promueve la entrada pre- bares, las cuales controlan la musculatu-
matura del mismo en la vallecula. ra faríngea, o sobre el núcleo del tracto
solitario y el núcleo ambiguo. Las lesiones
• Las personas ancianas usualmente medulares tienen cinco a diez veces me-
requieren múltiples degluciones para nos probabilidad de desarrollar este défi-
avanzar el bolo faríngeo. cit que las lesiones en el tallo (3, 19).

• Déficit en la discriminación sensitiva de Las alteraciones de la deglución se


la faringe y laringe. presentan en el 45-65% de los pacientes

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Lecturas sobre Nutrición Nº 46

con accidentes cerebrovasculares (8). este estudio mostró cómo los pacientes
Igualmente, la presencia de estas altera- que presentaron múltiples infartos, lesio-
ciones se correlaciona directamente con nes en el tallo o lesiones subcorticales y
un pobre estado nutricional, con aumento lesiones de la arteria cerebral anterior, tu-
en la morbilidad y en la mortalidad, neu- vieron tres veces más riesgo de desarro-
monía y con discapacidad entre los sobre- llar broncoaspiración que quienes no los
vivientes. presentaron (10).

De todas estas complicaciones, la as- Por otra parte, la presencia de enfer-


piración de contenido alimentario o de medades crónicas de la vía aérea y el pul-
secreciones hacia el tracto respiratorio re- món, frecuentemente observadas en este
presenta uno de los principales problemas tipo de pacientes, también son un factor
y se constituye como un importante factor de riesgo para la neumonía aspirativa, par-
de riesgo para neumonía. La aspiración, de ticularmente por su importante asociación
por sí, representa un complejo fenómeno con una disminución de la efectividad de
que ocurre antes, después, o durante la la tos y de la capacidad de difusión del
fase faríngea de la deglución, siendo más oxígeno (10).
frecuentemente observada en los pacien-
tes con compromiso del hemisferio dere- Factores adicionales que perpetúan
cho y de la circulación anterior (8). este riesgo son la hipersalivación, la pre-
sencia del reflujo gastroesofágico, y varias
La magnitud de este problema está alteraciones faríngeas y laríngeas causa-
representada en un estudio realizado en das por la presencia de sondas de alimen-
121 pacientes con eventos cerebrovascu- tación enteral 1010.
lares mayores admitidos al hospital 24
horas luego del inicio de sus síntomas. Se Finalmente, es preciso anotar que
encontró, que cerca de 51% de los pacien- muchos de los cambios en la deglución
tes, inmediatamente ingresaron, tuvieron de los pacientes con eventos cerebro-
riesgo de broncoaspiración, analizada vasculares pueden aparecer tardíamente,
clínicamente y por estudios de videofluo- usualmente asociados con el deterioro
roscopia. Aproximadamente 22% del total progresivo especialmente visto en aque-
de pacientes presentaron broncoaspira- llas personas que no tienen un adecuado
ción durante la primera semana y 15% soporte de rehabilitación integral en aspec-
durante el primer mes, A los seis meses tos tales como apraxias, hemianopsias,
de seguimiento, el 8% conservaba aún un tratamiento integral de la incontinencia, la
riesgo importante (9). parálisis y la debilidad, el uso crónico de
benzodiacepinas y otros ansiolíticos, y en
Igualmente, un estudio retrospectivo aquellos pacientes en los cuales enferme-
que analizó 378 pacientes con eventos dades tales como la epilepsia secunda-
cerebrovasculares mayores, encontró que ria, tienen un tratamiento subóptimo (7-9).
los principales factores asociados al de-
sarrollo de neumonía aspirativa (entendi- Enfoque diagnóstico de las
da como aquella sin características alteraciones de la deglución
distintivas, excepto la predisposición a la
aspiración) están presentes en los pacien- En general, existen tres enfoques que
tes con antecedentes de hipertensión permiten abordar a cualquier paciente con
arterial y diabetes mellitus, grupo en el cual alteraciones en la deglución: la evaluación
la presencia de aspiración se observa en- clínica, la evaluación endoscópica, y la
tre el 48 y 55% de los pacientes. Además, evaluación videofluoroscópica.

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Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

Evaluación clínica de apertura de la vía aérea. Igualmente, la


presencia de tos durante la deglución, re-
Es el método más limitado. Este tipo vela el posible riesgo de aspiración (5).
de evaluación, usualmente en la cama del
paciente, ha demostrado en múltiples es- La evaluación de los pares craneales,
tudios una especificidad cercana al 40%, especialmente el trigémino, el facial, el
en los pacientes que presentan broncoas- glosofaríngeo, el vago y el hipogloso, per-
piración (2, 11). miten dar a conocer una idea global de la
integridad del componente biomecánico,
Sus principales componentes son: i) como parte importante del estudio.
una detallada historia que permita deter-
minar los factores que afectan el proceso
La utilización de la auscultación cervi-
de la deglución, ii) la valoración del esta-
cal como método de cuantificación del
do mental y físico del paciente y iii) la ob-
movimiento laríngeo ha sido evaluada
servación de la capacidad de deglución
ampliamente. La ausencia de un sonido
propiamente dicha (12).
deglutorio tiene un valor bastante aproxi-
mado para definitivamente señalar la au-
El primer factor ha sido suficientemente
sencia de fase faríngea de la deglución (2).
detallado en el apartado anterior. En cuan-
to al segundo, éste se fundamenta inicial-
mente en la determinación de las En los pacientes con traqueostomías la
funciones neurológicas centrales, como la evaluación puede ser más difícil, especial-
capacidad cognitiva del paciente, su len- mente porque la confirmación de aspiración
guaje, estado emocional, capacidad de al árbol respiratorio puede ser provista al
aprendizaje, motivación y cooperación, desinflar el balón de la cánula y rápidamen-
calidad de la voz y adaptación para el te, sin retirar el aporte de oxígeno ni perder
aprendizaje de la capacidad deglutoria. la vía aérea, observar la presencia de resi-
duos alimentarios en las secreciones
Posteriormente, la obtención de ele- traqueales. Se han utilizado ingeniosamente
mentos de la biomecánica de la deglución alimentos teñidos de colores que resaltan
del paciente, a partir de la capacidad del a su paso a la vía aérea. Sin embargo, en
movimiento de la boca, de la lengua, y de ningún caso deben utilizarse colorantes
los músculos de la masticación, permiten como el azul de metileno (2, 11).
determinar la consistencia, cantidad y ca-
lidad del alimento ideal, que determinaran El hielo tampoco debe utilizarse en la
posteriormente el control del bolo evaluación clínica de la deglución, puesto
alimentario, su velocidad de deglución y que uno de los objetivos primarios al eva-
capacidad de control para cada caso. La luar la capacidad del paciente, es hacerlo
presencia de alteraciones deglutorias para con alimentos que expresen las propieda-
sólidos, semisólidos o líquidos ha sido uti- des del bolo alimentario, anotadas en la
lizada como un elemento inicial en el abor- primera parte de este documento.
daje de estos pacientes (3, 18) (tabla 2).
Es preciso anotar además, cómo re-
El examen de la cavidad oral permite cientemente se han desarrollado mecanis-
determinar el residuo alimentario no de- mos evaluativos de la disfagia a partir de
glutido. Esto es importante, porque una escalas, como la representada en el pro-
moderada cantidad de alimento no deglu- yecto Swal-Qol y Swal-Care, que concep-
tido, puede ser aspirado después de la tualiza y mide los tres componentes
deglución primaria, usualmente en la fase anteriores y ofrece la posibilidad de esti-

64
Lecturas sobre Nutrición Nº 46

mar la calidad de vida, calidad de aten- lidad del 86%, y que caracterizan a los pa-
ción y satisfacción del paciente en los adul- cientes en tres grandes grupos (11):
tos que cursan con disfagia de origen
orofaríngeo, a partir de pruebas de tipo • Grupo I: pacientes que al deglutir pre-
psicométrico, las cuales representan una sentan tos o atoramiento, pero que no
potencial utilidad para el establecimiento se desaturan.
de tratamientos ulteriores de manera más
específica y detallada (23-25). • Grupo II: pacientes que al deglutir pre-
sentan tos o atoramiento y se desatu-
Por otra parte, de muchos años atrás, ran.
la saturación arterial de oxígeno ha jugado
un papel importante en la determinación del • Grupo III: pacientes asintomáticos, o
compromiso cardiorrespiratorio durante la aspiradores silentes, sin signos clíni-
deglución en los pacientes con compromi- cos de aspiración, pero que se desa-
so central u orofaríngeo de la misma. Ha turan al deglutir.
sido bien estudiada la hipoxemia relacio-
nada con la deglución (7). Por ejemplo, se En términos generales, los pacientes
han empleado pruebas que utilizan la de- que no caen en ninguna de las tres cate-
glución de 50 ml de agua, con una sensibi- gorías, brindan suficiente seguridad fren-

Tabla 2
Signos clínicos que sugieren la presencia de alteraciones en
la deglución

Dificultad para manejar secreciones.


Presencia de secreciones o de comida en la cavidad oral.
Dificultad para iniciar el proceso de deglución.
Tos antes, durante o después de deglutir.
Presencia de voz húmeda luego de deglutir.
Reducción o ausencia de movimiento laríngeo o tiroideo durante la deglución.
Múltiples intentos de deglución durante un solo episodio de masticación.
Presencia de líquidos o comida en la nariz durante o después de deglutir.
Muy lenta o muy rápida rata de ingesta.
Preparación oral para la deglución muy prolongada.
Tiempo significativamente aumentado para completar la ingesta de alimentos.
Posiciones inusuales del cuello durante la deglución.
Dolor al deglutir.
Disminución de la sensación oral o faríngea.

Fuente: Marik P, Kaplan D. Aspiration pneumonia and dysphagia in the elderly. CHEST 2003; 124
(1): 328-336.

65
Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

te a la aspiración cuando degluten. Se estrecheces o cuerpos extraños, median-


considera significativo el descenso en 2% te la administración de cantidades que
de la saturación de oxígeno. oscilan entre 50-250 cc. En el modificado,
por el contrario, se utilizan diferentes
viscosidades, que varían desde comple-
Evaluación endoscópica
tamente líquidas hasta sólidas, y se utili-
zan bolos que van entre 1 y 20 cc. El
Este método permite la evaluación di-
propósito de este estudio es determinar la
recta de la faringe y de la laringe duran-
respuesta del sistema a una variedad de
te la deglución. Usando un endoscopio
consistencias de alimentos y de tamaños,
transnasal es posible identificar la com-
lo que permite identificar la presencia de
petencia velofaríngea, la aducción de las
aspiración, su mecanismo y la técnica para
cuerdas vocales, y a través del contacto
reducirlo o eliminarlo. Los materiales usual-
del endoscopio con las diversas estruc-
mente utilizados son tres tipos de alimen-
turas anatómicas identificar su capaci-
tos diferentes, de fácil deglución, que son:
dad sensitiva. Igualmente es útil en la
completamente líquido, semisólido y sóli-
identificación de residuos laríngeos y
do, mezclados con el medio de contraste.
faríngeos, y provee una adecuada infor-
mación acerca de la competencia del
Mediante este estudio, es posible de-
cierre glótico (2).
terminar la función de la lengua, la com-
petencia del cierre velofaríngeo, la
Un estudio clínico realizado en el de-
elevación de la laringe, el cierre del vestí-
partamento de otorrinolaringología de la
bulo laríngeo, la apertura del esfínter cri-
Universidad de Yale en 2002, incluyó 53
cofaríngeo, y su relación con la aspiración
pacientes poseventos cerebrovascula-
a la vía aérea.
res mayores y comparó la efectividad
en el diagnóstico de la endoscopia ver-
Evidencia clínica que compara la
sus los signos clínicos en la detección
videofluoroscopia versus los
temprana de alteraciones de la deglu-
signos clínicos en la detección de
ción en estos pacientes. Se demostró,
alteraciones de la deglución
que los signos clínicos tienen una sen-
sibilidad del 86%, especificidad del
Los datos que a continuación se pre-
30%, VPP del 14% y VPN del 73%, to-
sentan han sido obtenidos a partir de dos
dos significativamente inferiores al re-
grandes revisiones publicadas reciente-
sultado que ofrece la endoscopia en el
mente en la literatura, que comparan la vi-
diagnóstico (22).
deofluoroscopia en la detección de las
alteraciones de la deglución en los pacien-
Evaluación videofluoroscópica (2) tes con eventos cerebrovasculares frente
a los signos clínicos, y la correlación que
Es el método de evaluación que pro- existe entre cada uno de ellos con el mo-
vee mayor información. Usualmente se mento clínico en el que se realizan.
utiliza el trago de bario modificado (cine-
esofagograma modificado), que difiere del La primera revisión considera 89 estu-
convencional en cuanto a la cantidad y vis- dios publicados desde 1966 hasta 1995,
cosidad de los diferentes líquidos utiliza- 40 de ellos descriptivos, y 49 controlados,
dos en el estudio. Tradicionalmente, el sólo tres de ellos aleatorizados (13). En este
trago de bario convencional utiliza líquidos trabajo, se comparan los signos clínicos
de alta densidad, cristales o tabletas, para con la videofluoroscopia y se demuestra
evaluar la motilidad del esófago, fístulas, la pobre sensibilidad y especificidad que

66
Lecturas sobre Nutrición Nº 46

tienen los primeros, frente a los estudios identifica alteraciones en un 65% en los
imagenológicos, y la superioridad de es- primeros tres días y aumenta su valor
tos últimos en la detección de las altera- diagnóstico al 80% a la semana, dismi-
ciones deglutorias orofaríngeas en los nuyendo progresivamente a 64% a los
pacientes con eventos cerebrovasculares diez días (14).
mayores.
En resumen, la videofluoroscopia es
En general, se construyeron cuatro superior a los signos clínicos en la detec-
grupos de signos clínicos, y se compara- ción de alteraciones deglutorias y provee
ron frente a la videofluoroscopia en la de- mayor información en cuanto a las carac-
tección de alteraciones en la deglución. terísticas de la lesión primaria de la mis-
Los grupos fueron los siguientes: signos ma, y su correlación con el riesgo de
orales (alteraciones del V, VII, IX par y aspiración, siendo de un valor superior a
disartria), signos orofaríngeos (alteracio- los primeros durante los diez primeros días
nes del IX par y sensación faríngea), sig- del evento. Sin embargo, ambos son mé-
nos laríngeos (disfonía, pérdida del reflejo todos complementarios, cuya sensibilidad
tusígeno) y otros signos neurológicos y especificidad no ha sido demostrada en
(ataxia, paresias, incontinencia urinaria y la literatura revisada.
alteraciones perceptuales, entre otros). Se
encontró, que la positividad que manifies- Principios de manejo de los
ta un signo oral se correlaciona con la vi- trastornos de la deglución en
deofluoroscopia, con una sensibilidad que el paciente crítico
varía entre el 40-60% y una especificidad
del 14 al 85%. Para este primer grupo, la Se considera en esta sección la reha-
más alta correlación existe entre la paráli- bilitación del paciente con lesiones de ori-
sis del VII par y los hallazgos videofluoros- gen central y las debidas a alteraciones
cópicos, con una sensibilidad del 100% y del sistema biomecánico de la deglución
una especificidad del 14%. consecutivas a la colocación de traqueos-
tomías y de tubos orotraqueales. Se reco-
Dentro del segundo grupo, existe una nocen algunos principios de manejo
correlación entre la positividad de los sig- correspondientes a este tipo de patolo-
nos orofaríngeos con la videofluoroscopia, gías, todos con una base común y carac-
que demuestra una sensibilidad del 47- terizados por el trabajo interdisciplinario de
100% y una especificidad del 48-60%. Para múltiples proveedores de la salud (tabla
el tercer grupo una sensibilidad del 68-90% 3). No se considera en este apartado la
y una especificidad del 32-80%, y para el rehabilitación de los pacientes sometidos
último grupo una sensibilidad del 0-63% y a resecciones quirúrgicas.
una especificidad del 36-100%, respecti-
vamente. Paciente en traqueostomía y
posextubación
El segundo trabajo muestra 26 artícu-
los que correlacionan los signos clínicos La meta en el manejo de los pacientes
y la videofluoroscopia con el momento clí- con traqueostomías, y recientemente
nico de análisis. En él se concluye que la extubados es restablecer la función nor-
incidencia de trastornos de la deglución mal de la laringe y de la hipofaringe tan
evidenciados clínicamente durante las pronto como sea posible. El momento de
primeras 72 horas del evento es del 67% introducción de la vía oral es crítico para
y disminuye a 43% a la semana, compa- reducir el riesgo de broncoaspiración. En
rativamente con la videofluoroscopia que el paciente recientemente extubado, la fre-

67
Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

cuencia de aspiración silente y la pérdida ble. La rehabilitación integral de este gru-


de una tos efectiva usualmente demandan po de pacientes debe; sin embargo, incluir
un manejo especializado con terapia res- un enfoque sistemático que permita pre-
piratoria. ver el momento adecuado para la
decanulación y cierre de la traqueostomía.
Los principios del tratamiento de los Inicialmente, la fonación es restaurada pro-
pacientes con traqueostomías usualmen- gresivamente, y apoyada a través del uso
te giran en torno a la restauración del de adecuados ejercicios de deglución,
mecanismo de cierre glótico, del restable- estímulo de la tos y fortalecimiento de la
cimiento de las presiones subglóticas y del musculatura laríngea y faríngea, bien sea
flujo aéreo transglótico (1). La asistencia por ejercicios al lado de la cama del pa-
con válvulas de una sola vía para el ha- ciente o por electroestimulación.
bla, contribuyen a restablecer la fisiolo-
gía respiratoria y laríngea. Durante el ciclo Manejo del paciente con
respiratorio, estas válvulas se abren y per- enfermedad cerebrovascular
miten el paso de aire, en el momento de la
inspiración, hacia la vía aérea superior. El manejo de los pacientes con enfer-
Durante la expiración, la válvula se cierra y medad cerebrovascular debe iniciarse con
el aire es dirigido hacia las cuerdas voca- el establecimiento de un adecuado pro-
les y es disponible para la fonación y la grama de prevención y manejo, mediante
limpieza de la laringe (2). la identificación temprana de la población
en riesgo, que busque disminuir funda-
El valor de la oclusión de los tubos de mentalmente las tasas de aspiración, sin
traqueostomía quizá no se relacione con sacrificar el estado nutricional del pacien-
la mejoría en los factores biomecánicos te. Sin embargo, este valor no ha podido
tales como la elevación laríngea o el cie- ser determinado completamente en la li-
rre de la glotis durante la deglución. Sin teratura, y aún no sabemos cuánto sea el
embargo, un cierre del tracto aerodigestivo índice de reducción en el número de neu-
ayuda al paciente a reaccionar efectiva- monías aspirativas en los pacientes some-
mente frente al riesgo de aspiración (1). tidos a este tipo de programas.

No se debe iniciar la vía oral en estos Tal vez, uno de los primeros elemen-
pacientes hasta tanto no se restaure la tos es identificar, lo más rápidamente po-
fisiología normal del tracto respiratorio su- sible, el riesgo de aspiración de un
perior. Mientras tanto, la alimentación a paciente, idealmente mediante técnicas
través de sondas enterales y gastrosto- videofluoroscópicas, las cuales han de-
mías es una opción razonable. Simultá- mostrado ser superiores a la evaluación
neamente se debe incluir en el equipo de clínica. El objetivo fundamental de esta
trabajo la cooperación de fonoaudiología evaluación es inicialmente la determina-
y terapia respiratoria, con el fin de res- ción de los pacientes con riesgo de
taurar el adecuado sistema biomecánico broncoaspiración, independientemente
de la deglución, y así restablecer la ca- de su estado nutricional o de su riesgo de
pacidad deglutoria normal en estos pa- desnutrición. La evidencia clínica reciente
cientes. no permite establecer una clara correla-
ción entre los trastornos de la deglución y
La restauración de la función glótica la desnutrición en los pacientes con enfer-
se consigue en el paciente con traqueos- medad cerebrovascular, pero sí permite
tomía a través del uso de balones cada establecer una clara asociación entre as-
vez más pequeños hasta donde sea posi- piración, neumonía y muerte (1, 12).

68
Lecturas sobre Nutrición Nº 46

Tabla 3
Principios generales de manejo de los pacientes con
alteraciones de la deglución

1. Mejoramiento de la seguridad, eficiencia y efectividad de la deglución.

• Modificación de la consistencia y volumen de sólidos y líquidos.


• Estrategias compensatorias: modificaciones en la postura deglutoria,
ejercicios terapéuticos de deglución.
• Electroestimulación de la musculatura laríngea.
• Establecimiento de protocolos de decanulación en los pacientes con
traqueostomías.
• Adecuado manejo de las secreciones de la vía aérea superior.
• Educación a la familia y proveedores de cuidado crónico.
• Presencia de grupos de trabajo multidisciplinario (neurología, neu-
mología, terapia ocupacional y del lenguaje, enfermería,
fonoaudiología, etc.).

2. Adecuada hidratación y soporte nutricional y/o metabólico.

3. Mejoramiento de la higiene oral.

4. Manejo farmacológico.

Fuente: Marik P, Kaplan D. Aspiration pneumonia and dysphagia in the elderly. CHEST
2003 124:1:328-336

La evidencia clínica es inconclusa y angiotensina (IECA), los cuales modulan


escasa al respecto, pero permite inferir que la actividad de la sustancia P —la cual se
el manejo de los pacientes con enferme- ha visto implicada en el aumento del tiem-
dad cerebrovascular debe estar regido por po de latencia del inicio de la deglución
programas que sean capaces de estable- en los pacientes críticos—, sin que hasta
cer estrategias preventivas de la aspira- el momento se hayan encontrado benefi-
ción de secreciones y alimentos, desde el cios significativos. Los anticálcicos tam-
momento mismo de ocurrencia del even- bién han demostrado alguna actividad en
to, y que el manejo nutricional de dichos este mecanismo fisiopatológico. Igual-
pacientes queda supeditado a esta con- mente, en aquellos pacientes en quienes
dición inicial. Así pues, las diferentes vías se hace necesario el uso de medicamen-
de alimentación enteral están regidas por tos antipsicóticos, se aboga por el uso de
esta situación, bien sea temporal o defini- medicación antiextrapiramidal (18, 20).
tivamente, e igualmente deben establecer-
se tempranamente en el tratamiento de Conclusiones
estas lesiones.
La deglución, entendida como un pro-
Recientemente han sido incluidas múl- ceso fisiológico capaz de permitir un trán-
tiples modalidades de tratamiento sito del alimento de manera segura y
farmacológico entre las que se cuentan eficiente entre la boca y el estómago, im-
inhibidores la enzima convertidora de plica un componente de origen central y

69
Trastornos de la deglución en el paciente en estado crítico

otro de origen periférico, todos integrados diadas en la literatura referente a las alte-
a través de sucesivas fases que caracteri- raciones de la deglución, por lo que el en-
zan la adecuada biomecánica de la de- foque de tratamiento se dirige a la
glución. Los factores relacionados con la corrección específica de cada una de és-
alteración de esta última en los pacientes tas. Los principios de manejo incluyen ante
críticos, incluyen de manera directa un todo el concurso de un grupo multidisci-
amplio grupo de circunstancias entre las plinario de trabajo y usualmente giran en
que se cuentan de manera más importan- torno a la restauración del mecanismo de
te la colocación de tubos orotraqueales y cierre glótico, del restablecimiento de las
el uso de traqueostomías. Estos factores presiones subglóticas y del flujo aéreo
mecánicos, sumados a la coexistencia de transglótico en los pacientes que recien-
comorbilidad neurológica, al uso de me- temente han sido sometidos a la coloca-
dicamentos y a la edad, entre otros, re- ción de tubos orotraqueales o al uso de
presentan una fuente importante de traqueostomías, previo al inicio de la vía
morbilidad, mortalidad, discapacidad y oral. El manejo de poblaciones específi-
disminución de la calidad de vida conse- cas, como la de aquellos pacientes con
cutiva a los trastornos de la deglución en- enfermedad cerebrovascular debe iniciar
tre los pacientes que ameritan cuidado con el establecimiento de adecuados pro-
crítico. El diagnóstico de esta patología gramas de prevención y manejo simultá-
puede realizarse de múltiples formas en- neos con el inicio del evento. Finalmente,
tre las que cuentan la clínica, el uso de el tratamiento implica el manejo de las
endoscopia digestiva alta y la utilización condiciones comórbidas, así como el me-
de cinedeglución o videofluoroscopia, joramiento de la higiene oral, el adecuado
siendo ésta última superior a las dos pri- soporte nutricional y/o metabólico y en al-
meras. La morbilidad expresada en aspi- gunos casos el uso de fármacos, los cua-
ración, neumonía y desnutrición, han sido les hasta el momento no han demostrado
las tres variables más ampliamente estu- plenamente su efectividad.

Abstract
The swallowing disorders are a frequent problem in the critically ill patient and associated
to an increased morbidity and mortality. ICU patients with the disorder have a higher
probability to develop nosocomial pneumonia, ventilatory failure and so, a higher mortality.
First, this paper review the pathophysiology and other important risk factors involved with
the disorder which has different etiologic pathways with the same outcome for the patients:
aspiration, malnourishment and death. Secondly, we described the rationality for the
diagnostic strategies. And finally, the article makes some recommendations to work with
the patient at risk and with the disorder to prevent morbidity and mortality, with a
multidisciplinary team, included the patient’s relatives.

70
Lecturas sobre Nutrición Nº 46

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Correspondencia: ggomez@javeriana.edu.co - ldominguez@javeriana.edu.co

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