SÍNTESIS DE LA ESTRUCTURA Y FUNDAMENTO DE LOS TALLERES E.S.I.

Los Talleres tienen su origen en la necesidad de la inclusión de la educación sexual en la currícula

establecida en la ley nacional Nº 26.150.
Asimismo, se encuadra en la ley nacional de PROTECCION INTEGRAL DE LOS DERECHOS
DE LAS NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES Nº 26061.
La educación sexual integral, no sólo abarca el aspecto biológico y psicológico, sino que es un
paradigma amplio, que la ley ordena que sea abordado desde la interdisciplinariedad, abarcando
también los aspectos del derecho, del género, de la sexualidad; es decir que se entiende como
educación sexual integral, la que articula aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y
éticos.
Se utilizan como insumos los materiales teóricos del ministerio de Educación de la Nación
(disponibles en la web) y material bibliográfico del Ministerio de Educación de la Ciudad de
Buenos Aires, enviado oportunamente a todas las instituciones. Estos materiales tienen la
diversidad como pilar fundamental.
Se promueve la articulación con las materias de ciencias naturales los aspectos biológicos y de
salud integral, con historia, educación cívica y geografía la perspectiva de género y derechos en
nuestra sociedad. Se entiende de fundamental importancia la articulación con la vida afectiva.
La estructura es la siguiente
Primer taller:
Abordando la construcción social del concepto de género, la lógica discursiva y la violencia que
surge a partir de la arbitraria discriminación por género.
Segundo taller
En este segundo momento comienza a abordarse la problemática sexual, pero apuntando a la
claridad de aquellas cuestiones que por no tratarse en profundidad, favorecen el conocimiento
espontáneo, no científico, por parte de los adolescentes. Por eso se trabajan los mitos que se
difunden en la sociedad, y se aclaran los derechos sexuales y reproductivos.
Tercer taller
En el tercer y último taller, trabajamos conceptos de planificación familiar, maternidad y paternidad
tempranas, embarazo no deseado, como así también las enfermedades y contagios a los que pueden
estar expuestos y, por supuesto, la forma de resguardarse explicitando no solo los peligros, sino
también los recursos con que se les puede hacer frente.