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COMO ARTICULAR LAS CATEGORIAS DE LA DIDÁCTICA EN EL DISEÑO Y

DESARROLLO DE UN PROYECTO PEDAGÓGICO DE AULA ORIENTADO AL

DESARROLLO DE LA PROPIA VOZ DEL NIÑO EN EL NIVEL PREESCOLAR.

INES ILIANA ARROYAVE PORRAS

UNIVERSIDAD DE LA AMAZONIA

FACULTAD CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA INFANTIL

FLORENCIA-CAQUETÁ

2018
COMO ARTICULAR LAS CATEGORIAS DE LA DIDÁCTICA EN EL DISEÑO Y

DESARROLLO DE UN PROYECTO PEDAGÓGICO DE AULA ORIENTADO AL

DESARROLLO DE LA PROPIA VOZ DEL NIÑO EN EL NIVEL PREESCOLAR.

INES ILIANA ARROYAVE PORRAS

Texto argumentativo como producto de evaluación para el primer momento de auto

aprendizaje.

Lic. Abad Perdomo Anturi

UNIVERSIDAD DE LA AMAZONIA

FACULTAD CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA INFANTIL

FLORENCIA-CAQUETÁ

2018
COMO ARTICULAR LAS CATEGORIAS DE LA DIDÁCTICA EN EL DISEÑO Y

DESARROLLO DE UN PROYECTO PEDAGÓGICO DE AULA ORIENTADO AL

DESARROLLO DE LA PROPIA VOZ DEL NIÑO EN EL NIVEL PREESCOLAR.

El proceso de enseñanza es una acción intencionada, basada en efectuar el proyecto histórico-

social de una comunidad y que emplea para su ejecución un currículo que tiene como función

principal describir las intenciones educativas. Mencionado en palabras de Sequeira (1986), “es el

medio por el cual la institución educativa despliega y coordina los patrones de enseñanza de las

experiencias educativas, cuya responsabilidad asume” (p. 04), aclarando que se va a enseñar,

empleando estrategias como planes de estudio, programas y la elección de una metodología que

sustente teóricamente la práctica educativa que se llevará a cabo. En la ejecución de dicho

proceso o práctica, es necesario tener en cuenta el significado real de la palabra enseñar, que es

estudiada por la didáctica y que según Sequeira (1986) “es la ciencia y el arte de enseñar y se

ocupa de los principios que todo educador debe conocer para realizar ese proceso que llamamos

enseñanza” (p.03), asumiendo la tarea de estudiar, supervisar y evaluar el proceso que se lleva a

cabo para lograr un aprendizaje significativo.

Por tal motivo, la didáctica cuenta con unas categorías que le permiten evaluar la calidad

de la relación del proceso docente-educativo y está ligada a diversos factores como los

macrosociales, en donde, partiendo de las necesidades y problemas sociales y educativos, se

describe el tipo de sociedad y hombre que se quieren formar y el tipo de educación necesaria

para lograr el fin deseado. Desde allí es donde nacen los proyectos pedagógicos de aula dentro de

las instituciones educativas, que en palabras de Gonzales (2002) son “una propuesta didáctica
fundamentada en la solución de problemas, desde los procesos formativos, en el seno de las

instituciones” (p.01), diseñados principalmente para buscar, desde la diversidad cultural,

social, política y económica la creación de estrategias que permitan resolver los inconvenientes

que impiden que el alumno llegue a el conocimiento y lo interiorice de manera adecuada, y por

ende no pueda potenciar la creación y fortalecimiento de su propia voz dentro y fuera del aula.

De acuerdo a lo anterior, la didáctica y sus categorías, son el puente entre el modelo, los

referentes teóricos y el accionar curricular, en donde están incluidos los proyectos pedagógicos

de aula. Siendo esta, la que estudia y da respuesta a los interrogantes que enmarcan el proceso

docente-educativo tales cómo, que, para que, como y con qué medios enseñar y los resultados

obtenidos con los procesos implementados. Preocupándose siempre por la protección y

continuidad cultural y el crecimiento tanto intelectual como social y ético de los niños, que se

verá reflejado en el desarrollo y perfilamiento de su identidad, en la construcción, el uso, y

apropiamiento de su voz a la hora de opinar y hacerse sentir útil y partícipe dentro de su

sociedad.

Para argumentar lo mencionado anteriormente es necesario recalcar la labor docente frente al

desarrollo de un proyecto pedagógico de aula, (principal objeto de estudio de la didáctica). Como

lo contempla el MEN (2014) en el documento 20:

“Lo que hace la maestra, el maestro y el agente educativo es propiciar experiencias

pedagógicas y diseñar ambientes en las que estén presentes el juego, la exploración del medio, el

acercamiento a la literatura y a las expresiones artísticas, para provocar situaciones en las que las

niñas y los niños jueguen, creen, inventen, imaginen, se relacionen, comuniquen, construyan

conocimientos, planteen hipótesis, tomen decisiones y expresen sus emociones e ideas” (p.82).
De este planteamiento surge la importancia de conocer la relación existente entre la

aprendibilidad, que es según Gallego y Pérez (1998) “una atribución, una cualidad que le

confiere cada estudiante a un saber para hacerlo objeto de aprendizaje. Considerando en que

contribuye dicho saber con lo que desea aprender” (p. 09). ; La enseñabilidad de un saber, vista

por Gallego y Pérez (1998) como “una construcción que hace cada profesor, una atribución que

depende del tipo de estructuras conceptuales, metodológicas, estéticas, actitudinales y

axiológicas desde donde elabora dicha atribución” (p. 16) y la educabilidad, que en palabras de

Gallego y Pérez (1998):

“va de la mano con las lógicas de las intencionalidades curriculares…y lleva implícito el

reconocimiento del otro y que el educar que se desprende de esa concepción de educabilidad, se

traduce en un acompañamiento del educando, para que ingrese desde sí y por sí mismo…al

proceso de la realización de su proyecto de vida” (p.26).

Es desde estas concepciones, como se construyen verdaderos vínculos entre el saber, el

docente y educando. Mediante el suministro de una información de la que no disponen

naturalmente, ayudándolos a transformar esa información en conocimiento, permitiéndoles

comprender su entorno, su cultura y darle significado a sus experiencias.

En conclusión, la didáctica y sus categorías permiten desarrollar un proceso de enseñanza-

aprendizaje efectivo, que motive a los profesores a ver los problemas y necesidades de su labor

como oportunidades para avanzar hacia la construcción de proyectos pedagógicos de aula que

faciliten el abordaje de los niños en el mundo del saber, el lenguaje, la literatura, el arte, entre

otros; y a los infantes, a desarrollar de manera confiada y segura su propia voz, que enmarque su

personalidad. Partiendo de la diversidad y de las particularidades de cada estudiante, como


principios fundamentales de la formación humana, con la finalidad de implementar procesos

educativos incluyentes que aporten paz, tranquilidad y felicidad tanto a los niños como al mundo.
BIBLIOGRAFIA

 Cardona, G, L. y Vela, E, M. (2007). Educación y Comunicación. Florencia. Editorial


Digital Edith ‘ores.

 Doc. No. 20. Sentido de la educación inicial. Serie De Orientaciones Pedagógicas


Para La Educación Inicial En El Marco De La Atención Integral. Ministerio de
Educación Nacional (2014).

 Gallego, B, R. y Pérez, M, R (1998). Aprendibilidad, enseñabilidad, educabilidad:


una discusión. Revista Colombiana de Educación.

 González, E. (2002). El proyecto de aula o acerca de la formación en investigación.


Universidad de Antioquia. Medellín.

 May, F, B. La enseñanza del lenguaje. Ed. Paidós. Buenos Aires. 1975.

 Ministerio de Educación Nacional (2009). Al tablero. El periódico de un país que


educa y se educa. (p.10). recuperado de:
http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-192210.html .

 Sequeira, A. (1986). Didáctica y curriculum. Revista Educación. Recuperado de:


https://revistas.ucr.ac.cr .

 Soto, R, E. (2012). Un acercamiento a la didáctica general como ciencia y su


significación en el buen desenvolvimiento de la clase. Edit. Atenas, vol. 4, núm. 20,
pp. 1-18. Universidad de Matanzas Camilo Cienfuegos. Matanzas, Cuba.

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