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Juana Rainone era una empleada de la ANSES que durante los últimos
años ejerció funciones directivas. Su sueldo estaba compuesto por una
parte remunerativa, que se contempla a la hora de pagar el haber
jubilatorio, y otra que no. Cuando Rainone dejó de trabajar demandó al
organismo que actualmente dirige Diego Bossio para que también
contabilice las sumas no remunerativas para calcular su jubilación.
FALLO ORIOLO
Ahora la Corte dice que el decreto firmado por Carlos Menem, de 1993, al
fijar que los suplementos eran no remunerativos ni bonificables,
desconoció la “arquitectura salarial del régimen policial”. Y que los DNU
de los años 2005, 2006 y 2007 y el decreto de 2008, que ratificaron el
carácter no remunerativo y no bonificable de esos adicionales,
mantuvieron la “ilegitimidad” del decreto menemista en tanto su
aplicación desconoce “la estructura salarial” prevista en la ley 21.965 que
norma el régimen salarial policial.
La Corte agrega que, aun cuando los DNU de 2005, 2006 y 2007 “que
fueron convalidados por ambas cámaras del Congreso Nacional” y el
decreto 2008 hayan dicho que los suplementos creados por el decreto
1993 “son particulares, no remunerativos y no bonificables, su carácter
general en tanto se aplican según su jerarquía a la generalidad del
personal policial desnaturaliza tal calificación a la luz del artículo 75 de la
ley 21.965”, dice la sentencia del máximo tribunal.
SALAS
MAKLER
1°) Que contra la sentencia de la Sala II de la Cámara Federal de la Seguridad Social que
ordenó un nuevo cálculo del haber inicial del jubilado, delimitó los períodos sujetos a
reajustes y fijó las pautas de movilidad aplicables a cada uno de ellos, el actor, la
demandada y la señora fiscal general ante la cámara dedujeron sendos recursos ordinarios
de apelación, que fueron concedidos y son admisibles (art. 19, ley 24.463).
2°) Que respecto del nivel inicial de la prestación, el a quo ordenó que se determine el
promedio, expresado en haberes mínimos y fracción, por el que efectivamente aportó el
titular durante los últimos quince años de cotizaciones, cantidad que debía luego
multiplicarse por el haber mínimo vigente al tiempo de obtenerse el beneficio
3°) Que son procedentes los agravios que el actor dirige contra el referido límite de quince
años, pues de tal modo se excluyen del cálculo extensos períodos anteriores durante los
cuales aportó a categorías superiores y se obtiene un promedio que no refleja
adecuadamente el esfuerzo contributivo realizado, por lo que corresponde ordenar que en el
cómputo previsto se tomen en consideración la totalidad de los aportes autónomos
realizados, solución que se adecua a las previsiones de la ley 18.038.
4°) Que las cuestiones propuestas por la ANSeS y por el Ministerio Público resultan
sustancialmente análogas a las examinadas y resueltas por mayoría del Tribunal en el
precedente publicado en Fallos: 323:555 ("González"), a cuyas consideraciones cabe
remitir por razón de brevedad.
FALLO TARDITTI
La Corte en el caso Tarditti otorgó el derecho al retiro y a la pensión a los que se incapacitan
o mueren en actividad.
Muchos trabajadores dejan de trabajar cuando comienza una enfermedad y luego de algunos
años al ocurrir el deceso son afiliados irregulares sin derecho y no generan pensión.
Esta situación provocó en la Justicia previsional el deseo de construir algunas reglas que
permitan otorgar una pensión a viudas de afiliados con muchos años de aportes y que no
califican como afiliados regulares o irregulares con derecho. Una de esas construcciones la
denominamos "densidad de aportes". En el fallo comentado se argumenta que una persona
de 40 años, por ejemplo no puede ser considerado afiliado regular con 30 años de aportes por
la imposibilidad de reunirlos. Entonces se dice que si los 30 años de aportes en el caso de un
hombre que pudo trabajar desde los 18 años de edad hasta los 65, se pueden ubicar dentro de
un período de 47 años (65-18), una persona que muere a los 54 años si aportó un 63,83%
(30/47) de los 36 (54-18) años posibles, es decir 22 años, es afiliado regular y lo novedoso
del fallo es que ahora si reúne solo 11 años (50% de 14 años) se lo considera afiliado irregular
con derecho y genera un pensión para el cónyuge. Como el causante tenía 20 años con aportes
se lo considera afiliado irregular con derecho.
FALLOS PINTO ANGELA Y GARCIA CANCINO
La Corte Suprema de Justicia de la Nación en los fallos: sostuvo que la regularidad del afiliado
requisito de treinta años de servicios exigidos por el artículo 19 de la ley 24.241, para obtener la
En el citado precedente “Pinto”, si bien destacó que el art. 1 inc. 3 del decreto 460/99, redujo a
doce meses los aportes que debía reunir el causante dentro de los últimos sesenta previos al
fallecimiento, siempre que completase al menos un 50% del mínimo de servicios requeridos en
el régimen común (15 años), consideró también que no obstante los servicios computados no
están comprendidos dentro de los últimos 60 meses previos al deceso, en atención a la cantidad
de años de servicios con aportes realizados por el causante, no cabía imputar falta de solidaridad
La cantidad de años de servicios para considerar a un aportante regular con derecho debe
resultar en una cantidad tal, que sea equivalente a 30 años en una vida laboral posible de 47
años