Límites de exposición para campos magnéticos y eléctricos Cristian Acosta

Límites de exposición para pampos eléctricos y magnéticos

1. Introducción.
Debido a la fácil adquisición, utilidad y por ende la producción en masa de varios dispositivos
electrónicos durante los últimos años, genera que el ser humano constantemente este expuesto
a la presencia de campos eléctricos y magnéticos que dependiendo de las circunstancias pueden
llegar a ser perjudícales para la salud del individuo sin siquiera que este se percate de ello. Para
evitar este tipo de situaciones o minimizar los efectos nocivos, en Colombia se diseña un manual
denominado RETIE que contiene toda la reglamentación para regular todos aquellos aspectos
que están relacionados con la manipulación de la energía eléctrica.
En este escrito se abordará principalmente el capitulo 14 el cual habla acerca de los riesgos y
las condiciones que se deben de tener a lo hora de exponerse a la presencia de campos
magnéticos y eléctricos.

2. Campo eléctrico.
Un campo eléctrico se puede definir como un espacio en donde partículas con carga
experimentan una serie de alteraciones (fuerzas) que les permiten interactuar entre ellas. En
la vida cotidiana puede presentarse en diferentes contextos a nivel doméstico en un timbre y a
nivel industrial en un transformador (en donde también existe influencia del campo
magnético), sus unidades se dan en N/C o V/M y la intensidad del mismo variará en función de
la distancia al cuadrado de las cargas y la magnitud de las mismas.

El RETIE clasifica en dos a los tipos de exposición que se pueden dar para este caso y en un
máximo de tiempo de hasta 8 horas:

a) Exposición de tipo ocupacional (para aquellas personas que operan en sitios de

constante presencia de campo eléctrico).

b) Exposición general (para cualquier tipo de persona que no labora en el ámbito de la

electricidad)

Para el primer tipo de exposición la intensidad máxima de campo eléctrico es de 8.3 Kv/m
mientras que para el segundo tipo la intensidad máxima es de 4.16 KV/m, está variación
principalmente se da porque en el primer grupo se tienen a personas que son conscientes de
potenciales riesgos, además de que cumplen con unos requisitos de salubridad y una
instrumentación adecuada para mitigar posibles efectos nocivos.

Por el contrario en el segundo grupo esto no sucede, gran parte de la población no conoce que
puede estar expuesto a la presencia de este tipo de campos ni de sus efectos en la salud, además
de que también se debe tener en cuenta que se está englobando a una población muy variada
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entre si misma, pues si bien es cierto que algunas personas pueden exponerse a niveles un poco
mayores también es cierto que otras no pueden debido a complicaciones de salud, por lo que
4.16 Kv/m es una intensidad que es aceptable para la gran mayoría de los casos.

3. Campo magnético.
Un campo magnético se puede definir como un espacio que se genera debido a la presencia de
un conductor por el cual circula una determinada corriente, se usa para representar las fuerzas
que se generan debido al anterior fenómeno descrito, sus unidades son T y su intensidad está
en función de la corriente que circula por el conductor.

Para el caso del campo magnético el RETIE vuelve a clasificar los tipos de exposición en los
mismos dos grupos y se tiene que para el primero un flujo de 1000 uT y para el segundo un flujo
de 200 uT que corresponden a los valores máximos de densidad de flujo magnético.

4. Mediciones.
Para cada diseño de líneas de tensión superiores 57.5 Kv en donde estén edificaciones cerca se
debe realizar un análisis del campo electromagnético especialmente en lugares donde este la
presencia de personas, además de realizar los respectivos calculos para cada uno de los pisos
de la edificación.

5. OMS y riesgos de los campos eléctricos y magnéticos.

La problemática que plantea la OMS con respecto a los campos electromagnéticos se debe
principalmente a la masificación de elementos tales como la radio, los celulares o las antenas
de televisión que los generan y que están en el día a día de la vida de las personas, cabe aclarar
que en la mayoría de los casos estos campos tienden a tener una intensidad débil sin embargo
lo que preocupa es la constante exposición a estos, pues es bien sabido que los campos
electromagnéticos de frecuencias bajas pueden llegar a inducir pequeñas corrientes que
circulan en el interior del cuerpo humano y si en dado caso la intensidad es lo suficientemente
intensa es posible que induzca una corriente que pueda llegar a afectar procesos biológicos del
organismo (sueño, ritmo cardíaco, presión arterial, entre otros...)
Otros efectos que anexan a la presencia de este tipo de campos es la: ansiedad, depresión y la
fatiga, sin embargo, los estudios no llegan a una conclusión clara con respecto a la relación de
estos con respecto al campo electromagnético, si no que más bien se dice que podría estar
relacionado con factores ambientales (ruido), psicológicos (precio) y sociales (redes sociales)
que se generan por culpa de los dispositivos en sí.
Por último, el tema más controversial que se relaciona a la presencia de estos campos es en el
hecho de que pueden aumentar las probabilidades de contraer cáncer, sin embargo, al igual que
en el caso anterior varios estudios afirman que los campos generados por estos dispositivos
son lo suficientemente bajos como para representar un problema real en la salud humana.
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https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/electromagnetic-fields-and-public-health-
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- National Cancer Institute. (2019). Campos electromagnéticos y cáncer. [online] Available at:
https://www.cancer.gov/espanol/cancer/causas-prevencion/riesgo/radiacion/hoja-informativa-
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