FILOSOFÍA DE LA RELIGIÓN PROFESOR: JOSE CASTAÑEDA ESTUDIANTE: IVAN DARIO CANO QUIÑONEZ
PSICOLOGÍA DE LA RELIGIÓN
La psicología no es una especulación como lo es un discurso filosófico, lo que
pretende es ser científica o comprobable y que se remite a la experiencia; además de ocuparse de la estructura de la personalidad de las personas, la psicología principalmente, se encarga del estudio de los procesos mentales, los trastornos y enfermedades, a las cuales intenta buscar la formulación de tratamientos a dichos trastornos o enfermedades mentales.
Desde el campo de la psicología, la religión no es más que un producto de la
estructura psicológica del ser humano, es decir que la religión surge a partir de experiencias del ser humano, abordada en un conjunto de conductas observables a nivel social y cultural.
Además, la psicología comprende que el hecho religioso no es solamente una
especulación teórica, un hecho social o un fenómeno histórico, también comprende, que la religión es un asunto personal del individuo, del modo como el hombre se hace consiente del mundo y su realidad, y esto tiene que ver con la estructura psicológica del ser humano.
Y por consiguiente, la religión es un producto de la conciencia humana y un
fenómeno propio de la estructura mental de algunos seres humanos, es decir es una experiencia de carácter psicológico, mediante experiencias o fantasías que están incluidas dentro del fenómeno religioso.
También, es vista como un modo de acercamiento al hecho religioso, a través
de la experiencia; no tiene como tarea la elaboración de un juicio de valor a cerca de la autenticidad sobre la verdad de la presencia de lo numinoso de la conciencia humana, solo analiza el acontecimiento religioso sobre algún hecho religioso.
La psicología define a la religión como un trato frecuente de la observación de
lo numinoso en la estructura de la conciencia o en la estructura del inconsciente humano, como un elemento que se presenta en la conciencia o del inconsciente humano o condición del sujeto humano. Para Freud, la religión es una ilusión psicológica, es un modo infantil e inmaduro de la conciencia humana y en ese sentido entiende también al fenómeno religioso como una neurosis que se expresa en una forma psicológica de huida de un principio de realidad.
Además, para Freud, la religión es una neurosis y los fenómenos religiosos
(misas, rosarios, adoración, cultos, ángeles, demonios, etc.) son síntomas de dicha neurosis, donde Freud la ve como una protección que crea el ser humano, para una solución de sus problemas reales de la vida cotidiana, que mueve al ser humano hacia deseos, y se constituye en el motor fundamental a la creación de ilusiones y creencias religiosas, y para ello Freud utiliza el psicoanálisis, con el fin de intentar curar esta neurosis.
En cambio Jung, consideró a todas las religiones (incluyendo el cristianismo)
mitologías colectivas no reales en esencia, pero ejerciendo un efecto verdadero sobre la personalidad humana y en sí, todas las religiones son cosa imaginaria pero buena. La religión responde a una necesidad universal de toda la humanidad, además la experiencia religiosa, deriva de la experiencia del inconsciente colectivo, y por lo tanto responde a una necesidad universal de toda la humanidad, una necesidad de dar sentido a la vida, de trascendencia; sea la persona en cuestión, atea o creyente; esto lo intenta demostrar los junguianos en el gran interés de las personas por las ciencias ocultas, los ovnis, etc; que aunque renuncien a la religión institucional de su cultura, continúa fascinada por los fenómenos trascendentales.
En resumen, los junguianos están fascinados por encontrar en la religión
fenómenos simbólicos de expresión del inconsciente colectivo universal, por lo tanto respetan a la religión, aunque no en un sentido teísta, ya que esta responde a una necesidad humana común, la búsqueda de sentido y trascendencia.