Sobre la musicalidad de la historia

Explicar la elección de una materialidad, que en cierto modo sigue amando esconderse, implica
realizar un pequeño viaje por los elementos que componen mi noción de historia. Creo que todos y
cada uno de ellos, a pesar de su inmensa diversidad, convergen en un lugar donde iluminan un
pequeño espacio de la experiencia humana. Estos lugares, aun escasos, son esos elementos que
tradicionalmente podemos llamar materialidades, que en mi caso corresponden a la literatura
griega antigua, el arte bizantino, los relatos orales del Chile contemporáneo y la cultura material
japonesa. He de admitir que aún no existe un espacio único, donde pueda decantar todos los
elementos de análisis practico y teórico que me inspiran estos lugares. Aun así, quizás podría
aventurar que antes que una materialidad, prefiero una problemática, que bien se adapta cuando
considero que mis objetivos profesionales son la museologia y la educación.