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Hoy

Hoy lloro porque tú no estás,


hoy te lloro y te imploro que vuelvas,
que ya no puedo más,
una terrible enfermedad
me carcome por dentro,
no hay antídoto que cure mi mal,
solo alguien puede curarme,
solo alguien puede salvarme.
Si tan solo pudiera ver tu rostro
solo una vez más y decirte tantas cosas
que nunca mencioné pero sé que
es un sueño que nunca se cumplirá
y solo en ayer quedaremos.

Anónimo

Un reclamo
¿Por qué te has ido lejos,
tan lejos de mi vida mi niña bonita
si yo tanto te quería?
¿Por qué te empeñas
en causarme más heridas,
si sabes bien la historia,
que sin ti me moriría?,
¿Por qué me culpas de engaños y falasias,
si solo soy culpable de amarte sin medida?
¿Por qué te has ido lejos
sin saber que me querías?
Me alejas de tus besos y dejas mi alma herida,
¿Por qué mejor ya no regresas y me haces compañía?
No entiendes que mi vida depende de tu vida.

Anónimo

Te dejo partir
Comprende flor de primavera,
yo te quise, tú este amor dejaste morir;
tus labios fríos, esquinante mirada,
contradecían lo que decías sentir.
Acostado con tu recuerdo, soñé como vivir;
me querías, y hoy arruinas mi fantasía.
Falaz tu amor o el destino; no sabría decir,
en mis brazos brillaron tus lagrimas.
”Sé que me querías”.
Del amor que cultivamos siento melancolía,
ya no quiere volar el jilguero enamorado
que nació entre tus labios y murió para tus labios
cuando en mis sueños eras manantial soñado.
Tú tal vez, día a día, me sigas soñando
y mis besos los extrañes ya fríos.
Me lo dice el rocío que en tu faz cayera,
yo te quise, tú fuiste quien me perdiera…
Bien lo sabias nunca te he mentido,
no quiero que me lastimen,
soy precavido lo sabes muy bien,
no quiero quererte más, te dejo partir.

Enviado por: Roger Adco Peralta

El tiempo pasa
El tiempo pasa, y con el mi vida se consume,
cual si fuese un delgado humo se desvanece.
Tú te habrás marchado,
más tu recuerdo permanece,
y los fúnebres años han pasado,
sin que yo te haya olvidado.
Tu nombre y tu figura, me persiguen,
y aún la atrevida aurora, trae consigo tu imagen.

Anónimo

Despedida
Te fuiste despidiendo y diciendo
" ya no te quiero" solo para saver
si yo te quería de verdad pero
yo siempre te lo dije,
con eso me demostraste
tu falta de confiansa, ahora no sé qué hacer,
solo despedirme porque
una relacion sin confianza
no es amor verdadero.
He tomado una decisión,
ya no caminaré de tu mano,
lucharé para no pensar en ti.

Enviado por: Mirella

Adiós Amor, me voy lejos de ti


Luche por tu amor, Pero falle
Solo te diré antes de marchar
Que aunque pase el tiempo
Nunca te dejare de amar.
Adiós, mi bella Princesa de Amor
Seras mi añoranza diaria
En mis sueños estaras real
Y sé que tu corazón sabe
De que mi amor fue sincero
De que mi amor fue leal.

Cruel distancia que daño


Nuestro amor
Que ha cerrado nuestra relación
Solo pediré a Dios
Que te cuide y te conceda
La dicha de ser feliz.

Cuídate mucho cariño


Gracias por todo el amor
Que me brindaste
Eres y serás mi verdadero
Amor que nunca olvidare.

Adiós

A quien dedico hoy todo mi amor


ya no tiene lugar en su corazón
para entender mi dolor,
y no puede reparar lo destruido,
a unque una vez juntos lo construimos.
A quien escribo hoy está tan lejos,
como el mismo cielo,
aunque esté a mi lado su alma,
se ha escapado para buscar otro amor lejano.
A quien lloro hoy no sabrá curar mi dolor,
porque del cariño se olvidó,
otro camino él busco, y hoy que lo encontró
sólo vendrá a decir adiós.

tierras raras es el nombre común de 17 elementos químicos: escandio, itrio y los 15


elementos del grupo de los lantánidos (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio,
samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio).
Hay que notar que en esta clasificación no se considera la serie de los actínidos.

Aunque el nombre de «tierras raras» podría llevar a la conclusión de que se trata de


elementos escasos en la corteza terrestre, esto no es así. Elementos como el cerio, el
itrio y el neodimio son más abundantes.

La parte "tierra" en el nombre es una denominación antigua de los óxidos.

Aplicaciones
El cerio también es componente de la aleación que genera las chispas en los
encendedores mecánicos y en los catalizadores del proceso Haber-Bosch de la síntesis
del amoníaco.

Actualmente se investigan aplicaciones en síntesis orgánica de compuestos


organometálicos de estos elementos.

En resonancia magnética nuclear se utilizan compuestos, por ejemplo del lantano, como
aditivos para separar señales de compuestos que de otro modo se detectarían juntos.

Combinados con halogenuros metálicos se usan en la fabricación de lámparas de


descarga HMI (Hydrargyrum medium-arc iodide).

Radiodiagnóstico
Además en radiodiagnóstico se utilizan como material fosforescente en las pantallas
intensificadoras de imagen (en los chassis que todavía se usan con película, emulsión y
revelado fotográfico).

La expresión tierras raras se aplica a los elementos del grupo IIIB de la Tabla periódica
de los elementos, con números atómicos (S) 21, 39, y 57-71. Estos elementos son
metales de transición escasos en la naturaleza. Los elementos de tierras raras utilizados
en pantallas radiológicas son gadolinio (S = 64), lantano (S = 57) e itrio (S = 39), los
cuales funcionan como material fosforescente. En las fórmulas siguientes de los
compuestos respectivos de esta propiedad, después de los dos puntos se especifica un
elemento activador.

 Oxisulfuro de gadolinio (Gd2O2S: Tb), activado por terbio (Z = 65). Se emite


una coloración verde cuya longitud de onda es de 540 nm.
 Oxisulfuro de lantano (La2O2S: Tb), activado por terbio (Z = 65). Se emite una
coloración verde cuya longitud de onda es de 540 nm.
 Oxisulfuro de itrio (Y2O2S: Tb), activado por terbio (S = 65). Se emite una
coloración azul de longitudes de onda entre 450 y 500 nm.
 Oxibromuro de lantano (LaOBr: Tm), activado por tulio (S = 69). Se emite una
coloración azul de longitudes de onda entre 450 y 500 nm.
 Tantalato de itrio (YTaO4: Tm), activado por tulio (S = 69). Se emite una
coloración azul-ultravioleta de longitudes de onda entre 450 y 500 nm.

Las pantallas de tierras raras ofrecen una ventaja única con respecto a las de wolframato
de calcio: su eficacia de conversión es mayor. El propósito de fabricar las pantallas de
tierras raras es ofrecer varios niveles de velocidad, si bien todas ellas son, como
mínimo, dos veces más rápidas que su alternativa de wolframato de calcio. Esta mejora
de la eficacia de conversión se consigue sin pérdida de resolución acompañante. Sin
embargo -cuando se usan las pantallas de tierras raras más rápidas- los llamados
«ruidos» cuántico y radiográfico pueden llegar a ser apreciables. Como son más rápidos
con las pantallas de tierras raras es posible que se apliquen factores técnicos reducidos,
lo cual repercute en menor dosis al paciente.

Las denominadas “tierras raras” son un grupo de 17 elementos químicos


indispensables para la tecnología moderna. Se los emplea en campos tan dispares como
la elaboración de imanes para los discos duros, en las lámparas halógenas o en la
construcción de equipos de diagnóstico por resonancia magnética nuclear. A pesar de lo
que su nombre indica, no son mas escasos que el plomo o el oro, pero a menudo
resultan difíciles de separar de los minerales que los acompañan. El principal productor
mundial es China, pero esto podría cambiar en los próximos años. ¿Que sabes sobre
las “tierras raras”?

Las tierras raras, que tienen una gran cantidad de aplicaciones en la tecnología
moderna, no son otra cosa que óxidos metálicos. La denominación “tierra” proviene de
la antigua denominación que se daba a los óxidos, y en cuanto a lo de “raras”, no se
refiere a la poca o mucha cantidad que existe de ellos, sino a lo complicado que resulta
en algunos casos separar el elemento de los minerales que lo acompañan. Las tierras
raras (o REE, por Rare Earth Elements) comprenden un grupo de elementos químicos
de la serie de los lantánidos, integrado por las “tierras raras livianas” o “Light Rare
Earth Oxides” (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, promecio y samario) y las
“tierras raras pesadas” o “Heavy Rare Earth Oxides” (europio, gadolinio, terbio,
disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio). Por lo general también se incluyen
entre las tierras raras al itrio y el escandio, y salvo el promecio, los demás se encuentran
en forma de óxidos metálicos contenidos en unos 25 minerales. No todos son
explotables comercialmente, pero algunos como la bastnaesita (flúor carbonato de
tierras raras), monazita (fosfato de tierras raras) y xenotima (fosfato de itrio) pueden ser
procesados con relativa facilidad.

Producción mundial de tierras raras, con China a la cabeza.

Está claro que la industria en general y la electrónica en particular requieren cada año
más cantidad de estos elementos para funcionar. Su uso se incrementa año a año, ya que
constantemente se encuentran nuevas aplicaciones para ellos. Sus usos son muy
variados, y generalmente se emplea el neodimio, holmio y disprosio como parte de la
construcción de láseres; el samario forma parte de los imanes permanentes más
potentes que se conocen (utilizados en nuevos motores eléctricos y discos duros); el
iterbio y el terbio se emplean en los dispositivos magneto-ópticos utilizados en los
ordenadores y el europio, junto al itrio, se utilizan en las pantallas color para producir
los tonos de rojo. Las turbinas eólicas y los trenes de levitación magnética de alta
velocidad utilizan electroimanes fabricados con una aleación de neodimio y boro.
Otros miembros de esta familia intervienen en la refinación del petróleo, la fabricación
fibras ópticas y cerámicas superconductoras, la industria nuclear, las comunicaciones
por microondas, etcétera. Esta lista no es exhaustiva ni mucho menos, pero sirve para
darnos una idea de la importancia que tienen estos elementos en la actualidad.

El precio de estos elementos ha subido exponencialmente en los últimos años.

Si bien se pueden encontrar tierras raras en prácticamente todo el mundo, no siempre es


posible o rentable explotar los yacimientos. China concentra en la actualidad el 95%
de las producción mundial, y países como los Estados Unidos o el Japón, que son
grandes consumidores de estos elementos, dependen de China para abastecerse. La
demanda de tierras raras, lejos de disminuir, irá aumentando con el tiempo.
Muchos productos de consumo que serán populares en el futuro más o menos cercano,
como los coches eléctricos, requieren de numerosos elementos del grupo de los
lantánidos como parte de sus baterías y motores. Las turbinas eólicas, que posiblemente
producirán una buena parte de la energía eléctrica que hoy se genera quemando
combustibles fósiles, requieren de poderosos electroimanes que solo pueden construirse
gracias a tierras raras como el praseodimio, neodimio, samario y disprosio.

Los potentes imanes de los discos duros son posibles gracias a las tierras raras
La extracción de tierras raras raras comienza, obviamente, cuando la industria empieza a
descubrir usos para esos elementos. Tímidamente al principio, en los últimos años del
siglo XIX, y con más intensidad a partir de la década de 1960 cuando empieza a
aplicarse en las más modernas tecnologías, los yacimientos de estos elementos
comienzan a cobrar una gran importancia. Pero si bien China concentra casi toda la
producción actual, lo cierto es que sólo posee el 35% de las reservas mundiales. En
Estados Unidos, por ejemplo, acaba de ser reacondicionada la que en su tiempo fue la
mayor mina de tierras raras del mundo y que había sido cerrada aprovechando los bajos
costos del material importado de China. El incremento de la demanda previsto para los
próximos años ha hecho que en varios países se comience a barajar la posibilidad de
extraer estos óxidos, muchas veces bajo las protestas de las organizaciones defensoras
del medio ambiente, para evitar que China pueda controlar el precio mundial de lo que
ya nadie duda es el insumo del futuro.

¿Qué son la tierras raras?

La denominación tierras proviene de la antigua


denominación que antes se daba a los óxidos, mientras que el término de raras procede del siglo
pasado y se refiere a las dificultades que existen en los procesos de separación entre ellas para ser
usadas. Las tierras raras (o REE, en inglés, por rare earth elements) comprenden un grupo de
elementos químicos de la serie de los lantánidos, integrado por las tierras raras ligeras (lantano,
cerio, praseodimio, neodimio, promecio y samario) y las tierras raras pesadas (europio, gadolinio,
terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio). Generalmente también se incluyen entre
ellas al itrio y al escandio.

Las tierras raras son por tanto, mezclas de óxidos e hidróxidos de los elementos del bloque F de la
tabla periódica de elementos. Estos elementos tienen radios iónicos muy parecidos y muestran
comportamientos químicos igualmente semejantes que hacen difícil su separación. Aunque el
nombre de tierras raras (TR) podría llevar a la conclusión que se trata de elementos con escasa
abundancia en la corteza terrestre, esto no es así. Algunos elementos, como el cerio, el itrio y el
neodimio son más abundantes que el plomo, y el tulio, que es el más escaso, es aún más común
que el oro o el platino.

¿En dónde se usan?

Si bien el consumo actual se concentra mayoritariamente en la industria automotriz, donde se


utilizan en la fabricación de imanes o magnetos que requiere un vehículo, son los nuevos usos en
las tecnologías avanzadas los que señalan su mayor expansión en los últimos años.

La fabricación de imanes permanentes de alto rendimiento representa hoy el 21% del consumo de
las TR, seguido por los catalizadores en el refino de combustibles, que acaparan otro 20% del
mercado.

Otra aplicación reciente, donde los magnetos también juegan un importante papel, es en la última
generación de turbinas eólicas. Además, los sectores de eficiencia energética y de defensa son los
que les han otorgado su carácter estratégico. De esta manera, las tierras raras tienen un amplio
horizonte donde colocarse. Así, en el sector energético su uso se deriva fundamentalmente hacia
aquellos elementos asociados a la iluminación y en particular a la tecnología LED, que consigue
ahorros de energía muy importantes, junto a una gran calidad de iluminación. En este caso, los
metales especiales aportan sus características de buenos conductores de la energía.

En el sector de defensa, se usa neodimio para fabricar telémetros láser, sistemas de orientación y
de comunicaciones, mientras que el erbio se destina al desarrollo de amplificadores en transmisión
de datos de fibra óptica. El samario se utiliza en imanes que requieren una estabilidad en altas
temperaturas.

Además, la industria en general y la electrónica en particular


solicitan cada año más cantidad de estos elementos para fabricar sus productos. Su uso, por tanto,
se incrementa cada año, ya que constantemente se encuentran nuevas aplicaciones para ellos. Así,
el neodimio, el holmio y el disprosio se emplean como parte de la construcción de láseres. El
samario en los imanes permanentes más potentes que se conocen (aplicados en los nuevos motores
eléctricos y discos duros). El iterbio y el terbio se emplean en los dispositivos magneto-ópticos
utilizados en los ordenadores y el europio, junto al itrio, se utilizan en las pantallas de color para
producir los tonos de rojo. Los trenes de levitación magnética de alta velocidad utilizan
electroimanes fabricados con una aleación de neodimio y boro.

¿Cuál es la causa de su generación en la corteza terrestre? ¿Son abundantes?

Se ha mencionado que el tulio (el más escaso) resulta tan común como el bismuto y más abundante
que el arsénico o el mercurio, por ejemplo, que no los consideramos raros. Se puede decir que
existe una relativa abundancia de depósitos minerales que contienen TR distribuidos por todo el
mundo.

Aunque se encuentran apreciables cantidades de tierras raras en centenares de minerales, solo en


contados casos pueden ser procesados para obtener productos comerciales. De esta manera, algo
así como 20 minerales cumplen estas condiciones y de ellos, tan solo la batnasita, las monacitas,
las arcillas aluminosas, la xenotima, la loparita, y la parisita se han utilizado industrialmente.

Los yacimientos económicos están constituidos por muchos minerales. La monacita es uno de los
más importantes y se presenta casi siempre como partículas de arena de alta densidad, de color
oscuro y composición variable. Estos eran los antiguos yacimientos que suministraban al mundo sus
necesidades en TR, pero en la actualidad, aunque aparentemente se renueva el interés en su
investigación, su participación en la producción total ha descendido de manera importante. El
problema de su aprovechamiento radica en que contienen minerales radioactivos de complicado
almacenamiento.

Mayor interés poseen los yacimientos de origen ígneo (procedentes directamente del interior de la
corteza terrestre), asociados con las carbonatitas y rocas silicatadas peralcalinas. Además, y con
mucho menos interés, se ha de contar con los elementos procedentes de las pegmatitas asociadas
con granitos muy aluminosos. Pero más importantes son las derivadas de las rocas anteriores que,
por disolución y posterior precipitación de las TR que albergan, dan lugar a yacimientos
removilizados. De esta manera se han descubierto gigantescos depósitos ligados a la lixiviación de
carbonatitas en Brasil (Araxá), Rusia (Tomtor) y Australia (monte Weld). Además, y derivadas de
las últimas exploraciones, se han encontrado arcillas enriquecidas en TR (3.000 ppm TR)
procedentes de la disolución selectiva de granitos que las contenían.

También hace tiempo apareció un yacimiento muy importante en el sur de China y desde entonces
no han cesado los descubrimientos en distintas partes del mundo. Estos yacimientos, aunque
aparentemente pobres en su contenido en TR, su magnitud y facilidad de extracción los convierten
en una gran promesa. Por otra parte, hay que significar también la detección de concentraciones
importantes (500-2.000ppm TR) en los fondos marinos.

Hoy por hoy, como anteriormente se ha mencionado, la casi totalidad de la producción mundial
procede de China y, en concreto, de un solo yacimiento, Bayan Obo, que supone entre el 40% y
60% de su producción. El resto se deriva de las batsanitas de Mountain Pass en California, las
loparitas rusas y los subproductos de la explotación de arenas titaníferas de India, Brasil y Malasia.
Según las apreciaciones del Servicio Geológico de EE UU, la producción mundial de tierras raras en
2011 se elevó a 133.000 toneladas.

¿Realmente son escasas? ¿Se exagera en ello?

En el siglo XIX, Brasil ya producía tierras raras, en las explotaciones de arenas de monacita en el
Estado de Bahía dedicadas a otros usos distintos a los de hoy. Hasta 1915 este país mantuvo su
producción, cediéndole en esa fecha su lugar a la India, que a su vez fue desplazada por Estados
Unidos, hasta la irrupción de China.

La extracción de TR en gran escala comienza cuando la industria descubre otros usos para esos
elementos. Tímidamente es en los últimos años del siglo XIX, y con más intensidad, a partir de la
década de 1960, cuando empiezan a aplicarse en las modernas tecnologías, cobrando entonces los
yacimientos de estos elementos una gran importancia. Si bien China controla casi toda la
producción actual (más del 97%), sin embargo, tan sólo posee el 35% de las reservas mundiales.

Aunque se pueden encontrar TR en prácticamente todo el mundo, no siempre es posible o rentable


explotar estos yacimientos. China concentra en la actualidad la casi totalidad de las producción
mundial, y países como Estados Unidos o Japón, que son grandes consumidores de estos elementos,
dependen de China para abastecerse. La demanda de TR, lejos de disminuir, irá aumentando con
el tiempo.

Muchos productos de consumo que serán comunes en el


futuro más o menos cercano, como los coches eléctricos, requieren de numerosos elementos del
grupo de los lantánidos para la fabricación de sus baterías y motores. Las turbinas eólicas, que
previsiblemente producirán una buena parte de la energía eléctrica que hoy se genera quemando
combustibles fósiles, precisan poderosos electroimanes que solo pueden fabricarse gracias a TR
como el praseodimio, el neodimio, el samario y el disprosio.

Hace muy pocos años China, con el argumento de proteger sus recursos propios y conseguir mayor
valor añadido a sus producciones, comenzó a imponer una serie de restricciones y aranceles a sus
exportaciones de tierras raras, obligando a varias multinacionales a trasladar sus instalaciones de
producción a ese país. Esta situación provocó que otras economías industrializadas, como la de
Estados Unidos, Japón y el bloque de países de la Unión Europea, buscaran alternativas para
derribar estas medidas comerciales, con exploración de nuevas reservas que permitieran a
Occidente recuperar parte de la oferta de estos recursos.

“Las tierras raras son demasiado importantes para nosotros como para mantenernos al margen”,
dijo recientemente el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, cuando su país junto a varias
otras naciones presentaron ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) una acción conjunta
para intentar revertir la decisión proteccionista del gigante asiático. En los tres últimos años,
Estados Unidos ha reacondicionado la que en su tiempo fue la mayor mina de TR del mundo y que
había sido cerrada, al no ser capaz de aguantar los precios provocados por la invasión china de los
mercados, aprovechando sus bajos costes de producción. El incremento de la demanda previsto
para los próximos años ha desencadenado una carrera en la búsqueda de yacimientos por todo el
mundo, especialmente en Australia y Norteamérica. De esta manera, nuevos proyectos se están
desarrollando poco a poco, en lugares que antes no suministraban estas sustancias minerales.

¿Cuál es su porvenir? ¿Existen posibilidades de encontrar tierras raras en España?

En el mundo de la producción de los minerales, al final, el desenlace siempre es muy parecido.


Ahora con dos efectos, uno, el monopolio ejercido por el gigante económico del momento, China,
sobre el control casi absoluto de la producción primaria, donde parece que la hegemonía debía ser
duradera, y otro, la tendencia imparable, de las tecnologías punteras que necesitan en sus
aleaciones de estos metales tan singulares. Sin embargo, la realidad es otra. La economía de los
minerales también es muy singular. Las inversiones hacia nuevos destinos minerales es mucho más
precavida (cuando son grandes) y, sobre todo, mucho más lenta que en la mayoría de otros
sectores industriales. La culminación de una inversión en un nuevo proyecto minero rara vez se
realiza antes de los ocho años, dado que la exploración necesita de muchos elementos y la
incertidumbre es grande, además de costosa. Luego, la consecución de la financiación es un
proceso lento y cuidadoso, que requiere introducir en ella una gran cantidad de garantías. Los
permisos ambientales, aun cuando no existan enconadas oposiciones, también precisan de
inversiones adicionales y, sobre todo, tiempo. Curiosamente, el tramo más fácil es a menudo el
desarrollo tecnológico y la construcción física de las instalaciones.

Estados Unidos y la Unión Europea han tomado conciencia de la necesidad de poseer unas fuentes
de suministro seguras y en ello se encuentran. No va a ser demasiado difícil encontrar nuevos
yacimientos que superen el nivel de rentabilidad económica impuesto por las cotizaciones
actuales. De hecho, en el año 2012 se han contabilizado más de 400 nuevos proyectos de
exploración de tierras raras en 43 países, algunos de ellos en fase de desarrollo. Además, si el
Estado está como garante, se van a facilitar las operaciones, sobre todo las económicas y
ambientales. Así, la apertura del yacimiento californiano de Mountain Pass significará un respiro
para las necesidades de parte de las TR que demanda EE UU, mientras se van incorporando nuevos
proyectos alrededor del mundo, como ya ha ocurrido especialmente en Canadá y Australia, en
donde existen trabajos en avanzado estado de desarrollo.

Sin embargo, actualmente queda por resolver el reto de contar fuera de China con plantas capaces
de terminar el proceso de producción de las TR, separando sus componentes que, en la etapa de
producción minera, se obtienen como concentrado. Después, a partir de ellos, mediante su
extracción por solución y extracción en húmedo, se llega a los productos finales necesarios para la
industria de transformación. Ello significa una costosa y larga etapa que condiciona a los pocos
productores actuales a a mandar sus propios concentrados a las plantas chinas, entrando de esta
manera en el régimen de regulación por cuotas de exportación.

En España hace largo tiempo que se conocen las arenas monacíticas del Norte, en Galicia
fundamentalmente, investigadas por el IGME en los años setenta y ochenta del pasado siglo, sin
que los resultados fueran totalmente satisfactorios. Además, existe un yacimiento primario, Monte
Galiñeiro, descubierto por la Junta de Energía Nuclear e investigado por la compañía Río Tinto en
la década de los 80. Actualmente una empresa sudafricana, Umbono Capital, pretende seguir la
investigación de sus recursos.
aDIÓS aMOR, mE vOY lEJOS dE tI
lUCHE pOR tU aMOR, pERO fALLE
sOLO tE dIRÉ aNTES dE mARCHAR
qUE aUNQUE pASE eL tIEMPO
nUNCA tE dEJARE dE aMAR.

sOLO pEDIRÉ a dIOS


qUE tE cUIDE y tE cONCEDA
lA dICHA dE sER fELIZ.

cUÍDATE mUCHO cARIÑO


gRACIAS pOR tODO eL aMOR
qUE mE bRINDASTE
eRES y sERÁS mI vERDADERO
aMOR qUE nUNCA oLVIDARE.aDIOS

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