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3. El sacerdote o el diácono, u otro ministro 3. Sacerdos, vel diaconus vel alius minister,
idóneo, puede hacer una monición muy breve potest brevissimis verbis introducere fideles in
para introducir a los fieles en la misa del día. Missam diei.
Acto Penitencial Actus paenitentialis (*)
4. A continuación se hace el acto penitencial, al 4. Deinde sequitur actus paenitentialis ad quem
que el sacerdote invita a los fieles, diciendo: sacerdos fideles invitat, dicens:
1 Fratres, agnoscámus peccáta nostra, ut apti
Hermanos: simus ad sacra mystéria celebránda.
Para celebrar dignamente estos sagrados Fit brevis pausa silentii. Postea omnes simul
misterios, reconozcamos nuestros pecados. formulam confessionis generalis perficiunt:
O bien: Confíteor Deo omnipoténti et vobis, fratres,
El Señor Jesús, que nos invita a la mesa de la quia peccávi nimis cogitatióne, verbo, ópere et
Palabra y de la Eucaristía, nos llama ahora a omissióne:
la conversión. Reconozcamos, pues, que et, percutientes sibi pectus, dicunt:
somos pecadores e invoquemos con esperanza mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa.
la misericordia de Dios. Deinde prosequuntur:
O bien, pero sólo en los domingos y durante la Ideo precor beátam Maríam semper Vírginem,
Octava de Pascua: omnes Angelos et Sanctos, et vos, fratres, oráre
En el día que celebramos la victoria de Cristo pro me ad Dóminum Deum nostrum.
sobre el pecado y sobre la muerte, Sequitur absolutio sacerdotis:
reconozcamos que estamos necesitados de la Misereátur nostri omnípotens Deus et,
misericordia del Padre para morir al pecado dimissís peccátis nostris, perdúcat nos ad
y resucitar a la vida nueva. vitam aetérnam.
Se hace una breve pausa en silencio. Después, Populus respondet:
todos dicen en común la fórmula de la confesión Amen.
general:
Yo confieso ante Dios todopoderoso
y ante vosotros, hermanos, que he pecado
mucho de pensamiento, palabra, obra y
omisión:
Y, golpeándose el pecho, dicen:
Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran
culpa.
Luego prosiguen:
Por eso ruego a santa María, siempre Virgen,
a los ángeles, a los santos y a vosotros,
hermanos, que intercedan por mí ante Dios,
nuestro Señor.
El sacerdote concluye con la siguiente plegaria:
Dios todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos
lleve a la vida eterna.
El pueblo responde:
Amén.
2 Vel:
5. El sacerdote invita a los fieles al acto 5. Sacerdos fideles invitat ad actum
penitencial: paenitentialem:
Al comenzar esta celebración eucarística, Fratres, agnoscámus peccáta nostra,
pidamos a Dios que nos conceda la conversión ut apti simus ad sacra mystéria celebránda.
de nuestros corazones; así obtendremos la Fit brevis pausa silentii. Postea sacerdos dicit
reconciliación y se acrecentará nuestra Miserére nostri, Dómine.
comunión con Dios y con nuestros hermanos. Populus respondet:
O bien: Quia peccávimus tibi.
Humildes y penitentes, como el publicano en Sacerdos:
el templo, acerquémonos al Dios justo, y Osténde nobis, Dómine, misericórdiam tuam.
pidámosle que tenga piedad de nosotros, que Populus:
también nos reconocemos pecadores. Et salutáre tuum da nobis.
Se hace una breve pausa en silencio. Después el Sequitur absolutio sacerdotis:
sacerdote dice: Misereátur nostri omnípotens Deus et,
Señor, ten misericordia de nosotros. dimíssis peccátis nostris, perdúcat nos ad
El pueblo responde: vitam aetérnam.
Porque hemos pecado contra ti. Populus respondet:
El sacerdote prosigue: Amen.
Muéstranos, Señor, tu misericordia.
El pueblo responde:
Y danos tu salvación.
El sacerdote concluye con la siguiente plegaria:
Dios todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos
lleve a la vida eterna.
El pueblo responde:
Amén.
3 Vel:
El sacerdote invita a los fieles al 6. Sacerdos fideles invitat ad actum
arrepentimiento: paenitentialem:
Jesucristo, el justo, intercede por nosotros y Fratres, agnoscámus peccáta nostra, ut apti
nos reconcilia con el Padre. Abramos, pues, simus ad sacra mystéria celebránda.
nuestro espíritu al arrepentimiento, para Fit brevis pausa silentii. Postea sacerdos, vel
acercarnos a la mesa del Señor. diaconus vel alius minister, sequentes, vel alias,
O bien: invocationes cum Kyrie, eléison profert:
El Señor ha dicho: «El que esté sin pecado, Qui missus es sanáre contrítos corde: Kyrie,
que tire la primera piedra.» eléison.
Reconozcámonos, pues, pecadores y Populus respondet:
perdonémonos los unos a los otros desde lo Kyrie, eléison.
más íntimo de nuestro corazón. Sacerdos:
Se hace una breve pausa en silencio. Después el Qui peccatóres vocáre venísti: Christe,
sacerdote, u otro ministro idóneo, dice las eléison.
siguiente invocaciones u otras semejantes: Populus:
Tú que has sido enviado a sanar los corazones Christe, eléison.
afligidos: Señor, ten piedad. Sacerdos:
El pueblo responde: Qui ad déxteram Patris sedes, ad
Señor, ten piedad. interpellándum pro nobis: Kyrie, eléison.
Sacerdote o ministro: Populus:
Tú que has venido a llamar a los pecadores: Kyrie, eléison.
Cristo ten piedad. Sequitur absolutio sacerdotis:
El pueblo responde: Misereátur nostri omnípotens Deus et,
Cristo ten piedad. dimíssis peccátis nostris, perdúcat nos ad
Sacerdote o ministro: vitam aetérnam.
Tú que estás sentado a la derecha del Padre Populus respondet:
para interceder por nosotros: Señor, ten Amen.
piedad.
El pueblo responde:
Señor, ten piedad.
El sacerdote concluye con la siguiente plegaria:
Dios todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos
lleve a la vida eterna.
El pueblo responde:
Amén.
(Otras invocaciones para la tercera fórmula
del Acto penitencial).
6. Siguen las invocaciones Señor, ten piedad, a 7. Sequuntur invocationes Kyrie, eléison, nisi
no ser que ya se hayan utilizado en alguna de las iam praecesserint in aliqua formula actus
fórmulas del acto penitencial. paenitentialis.
V. Señor, ten piedad. V. Kyrie, eléison.
R. Señor, ten piedad. R. Kyrie, eléison.
V. Cristo, ten piedad. V. Christe, eléison.
R. Cristo, ten piedad. R. Christe, eléison.
V. Señor, ten piedad. V. Kyrie, eléison.
R. Señor, ten piedad. R. Kyrie, eléison.
7. A continuación, si está prescrito, se canta el 8. Deinde, quando praescribitur, cantatur vel
himno: dicitur hymnus:
Gloria a Dios en el cielo, Glória in excélsis Deo
y en la tierra paz a los hombres et in terra pax
que ama el Señor. homínibus bonae voluntátis.
Por tu inmensa gloria Laudámus te,
te alabamos, benedícimus te,
te bendecimos, adorámus te,
te adoramos, glorificámus te,
te glorificamos. grátias ágimus tibi
te damos gracias, propter magnam glóriam tuam,
Señor Dios, Rey celestial, Dómine Deus, Rex caeléstis,
Dios Padre todopoderoso. Deus Pater omnípotens.
Señor, Hijo único, Jesucristo, Dómine Fili Unigénite, Iesu Christe,
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; Dómine Deus, Agnus Dei, Fílius Patris,
tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad qui tollis peccáta mundi, miserére nobis;
de nosotros; qui tollis peccáta mundi, súscipe
tú que quitas el pecado del mundo, atiende deprecatiónem nostram.
nuestra súplica; Qui sedes ad déxteram Patris, miserére nobis.
tú que estás sentado a la derecha del Padre, Quóniam tu solus Sanctus,
ten piedad de nosotros; tu solus Dóminus,
porque sólo tú eres Santo, tu solus Altíssimus, Iesu Christe,
sólo tú Señor, cum Sancto Spíritu: in glória Dei Patris.
sólo tú Altísimo, Jesucristo, Amen.
con el Espíritu Santo, en la Gloria de Dios
Padre.
Amén.
8. Acabado el himno, el sacerdote, con las 9. Quo hymno expleto, sacerdos, manibus
manos juntas, dice: iunctis, dicit:
Oremos. Orémus.
Y todos, junto con el sacerdote, oran en silencio Et omnes una cum sacerdote per aliquod
durante unos momentos. Después el sacerdote, temporis spatium in silentio orant. Tunc
con las manos extendidas, dice la oración sacerdos, manibus extensis, dicit orationem
colecta. collectam, qua expleta, populus acclamat:
La colecta termina siempre con la conclusión Amen.
larga:
Si la oración se dirige al Padre:
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que
vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Si la oración se dirige al Padre, pero al final de
ella se menciona al Hijo:
Él, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los
siglos.
Si la oración se dirige al Hijo:
Tú que vives y reinas con el Padre en la
unidad del Espíritu Santo y eres Dios por los
siglos de los siglos.
Al final de la oración el pueblo aclama:
Amén.