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David Orr es el fundador del Proyecto Meadowcreek, un centro de educación ambiental en Fox,
AR, y actualmente se encuentra en la facultad de OberlinCollege en Ohio. Reimpreso del
excelente periódico trimestral Anales de la Tierra de OceanArksInternational , vol. VIII, No. 2,
1990.
Si hoy es un día típico en el planeta Tierra, perderemos 116 millas cuadradas de selva tropical,
o aproximadamente un acre por segundo. Perderemos otras 72 millas cuadradas por invadir
desiertos, como resultado de la mala gestión y la superpoblación humanas. Perderemos de 40
a 100 especies, y nadie sabe si el número es 40 o 100. Hoy la población humana aumentará en
250,000. Y hoy agregaremos 2,700 toneladas de clorofluorocarbonos a la atmósfera y 15
millones de toneladas de carbono. Esta noche, la Tierra estará un poco más caliente, sus aguas
más ácidas y el tejido de la vida más raído.
La verdad es que muchas cosas de las que dependen su salud y prosperidad futuras están en
grave peligro: la estabilidad climática, la resistencia y la productividad de los sistemas
naturales, la belleza del mundo natural y la diversidad biológica.
Vale la pena señalar que este no es el trabajo de personas ignorantes. Es, más bien, en gran
medida, el resultado del trabajo realizado por personas con licenciaturas, licenciaturas,
licenciaturas, maestrías y doctorados. ElieWiesel señaló algo similar al Foro Global en Moscú el
invierno pasado cuando dijo que los diseñadores y perpetradores del Holocausto eran los
herederos de Kant y Goethe. En la mayoría de los aspectos, los alemanes eran las personas
mejor educadas de la Tierra, pero su educación no sirvió como una barrera adecuada para la
barbarie. ¿Qué estaba mal con su educación? En palabras de Wiesel: "Enfatizaba teorías en
lugar de valores, conceptos en lugar de seres humanos, abstracción en lugar de conciencia,
respuestas en lugar de preguntas, ideología y eficiencia en lugar de conciencia".
Lo mismo podría decirse de la forma en que nuestra educación nos ha preparado para pensar
sobre el mundo natural. Es una cuestión de no poca consecuencia que las únicas personas que
han vivido de manera sostenible en el planeta durante algún tiempo no hayan podido leer o,
como los amish, no hagan de los fetiches la lectura. Mi punto es simplemente que la educación
no es garantía de decencia, prudencia o sabiduría. Más del mismo tipo de educación solo
agravará nuestros problemas. Este no es un argumento a favor de la ignorancia, sino más bien
una afirmación de que el valor de la educación ahora debe medirse en comparación con los
estándares de la decencia y la supervivencia humana: los problemas que ahora se perfilan ante
nosotros en la década de los 90 y más allá. No es la educación lo que nos salvará, sino la
educación de cierto tipo.
MEDIOS DE SANE, FIN DE MAD
¿Qué salió mal con la cultura contemporánea y con la educación? Hay algo de conocimiento en
la literatura: el Fausto de Christopher Marlowe, que cambia su alma por el conocimiento y el
poder; El Dr. Frankenstein de Mary Shelley, quien se niega a responsabilizarse por su creación;
El Capitán Ahab de Herman Melville, quien dice "Todos mis medios están en su sano juicio, mi
1
https://www.eeob.iastate.edu/classes/EEOB-590A/marshcourse/V.5/V.5a%20What%20Is%20Education%20For.htmEste ensayo
está adaptado de su discurso de graduación a la clase de graduados de 1990 en Arkansas College
motivo y mi objeto están locos". En estos personajes encontramos la esencia del impulso
moderno para dominar la naturaleza.
Históricamente, la unión propuesta por Francis Bacon entre el conocimiento y el poder
presagia la alianza contemporánea entre el gobierno, las empresas y el conocimiento que ha
causado tantas travesuras. La separación del intelecto de Galileo prefigura el dominio de la
mente analítica sobre la parte que se le da a la creatividad, el humor y la integridad. Y en la
epistemología de Descartes, uno encuentra las raíces de la separación radical del yo y el
objeto. Juntos, estos tres sentaron las bases de la educación moderna, fundamentos ahora
consagrados en mitos que hemos llegado a aceptar sin cuestionarlos. Déjame sugerirte seis.
Primero, existe el mito de que la ignorancia es un problema que se puede resolver. La
ignorancia no es un problema solucionable, sino una parte ineludible de la condición humana.
El avance del conocimiento siempre lleva consigo el avance de alguna forma de ignorancia. En
1930, después de que Thomas Midgely Jr. descubriera los CFC, lo que anteriormente había sido
una pieza de ignorancia trivial se convirtió en una brecha crítica y potencialmente mortal en la
comprensión humana de la biosfera. Nadie pensó en preguntar "¿qué hace esta sustancia a
qué?" hasta principios de la década de 1970, y para 1990 los CFC habían creado un
adelgazamiento general de la capa de ozono en todo el mundo. Con el descubrimiento de los
CFC se incrementó el conocimiento; pero al igual que la circunferencia de un círculo en
expansión, la ignorancia también creció.
Un segundo mito es que con suficiente conocimiento y tecnología podemos manejar el planeta
Tierra ... "Administrar el planeta" tiene un bonito toque para él. Apela a nuestra fascinación
por las lecturas digitales, las computadoras, los botones y los diales. Pero la complejidad de la
Tierra y sus sistemas de vida nunca pueden manejarse de manera segura. La ecología de la
pulgada superior de la capa superior del suelo es aún en gran parte desconocida, al igual que
su relación con los sistemas más grandes de la biosfera.
Lo que podríamos gestionar es nosotros: deseos humanos, economías, políticas y
comunidades. Pero nuestra atención está atrapada por aquellas cosas que evitan las
decisiones difíciles que implica la política, la moral, la ética y el sentido común. Tiene mucho
mejor sentido reformarnos para adaptarnos a un planeta finito que intentar reformular el
planeta para adaptarlo a nuestras infinitas necesidades.
Un tercer mito es que el conocimiento está aumentando y, por implicación, la bondad
humana. Se está produciendo una explosión de información, por lo que me refiero a un
aumento rápido de datos, palabras y papel. Pero esta explosión no debe tomarse para un
aumento en el conocimiento y la sabiduría, que no se puede medir tan fácilmente. Lo que se
puede decir con sinceridad es que algunos conocimientos aumentan mientras que otros tipos
de conocimientos se pierden. David Ehrenfeld ha señalado que los departamentos de biología
ya no contratan profesores en áreas como la sistemática, la taxonomía o la ornitología. En
otras palabras, se está perdiendo un conocimiento importante debido al énfasis excesivo
reciente en la biología molecular y la ingeniería genética, que son áreas de investigación más
lucrativas, pero no más importantes. Todavía nos falta la ciencia de la salud de la tierra que
Aldo Leopold pidió hace medio siglo.
No es solo el conocimiento en ciertas áreas lo que estamos perdiendo, sino también el
conocimiento vernáculo, por lo que me refiero al conocimiento que las personas tienen de sus
lugares. En palabras de Barry López:
"[Me siento] obligado a darme cuenta de que algo extraño, si no peligroso, está en marcha.
Año tras año, el número de personas con experiencia de primera mano en la tierra disminuye.
Las poblaciones rurales continúan desplazándose a las ciudades ... De esta pérdida de
conocimiento personal y local, el conocimiento del cual se deriva una geografía real, el
conocimiento sobre el cual un país debe permanecer en última instancia, ha sido algo difícil de
definir, pero creo que es siniestro e inquietante ".
En la confusión de los datos con el conocimiento es un error más profundo que el aprendizaje
nos hará mejores personas. Pero el aprendizaje, como dijo una vez Loren Eiseley, es
interminable y "en sí mismo nunca nos hará éticos [personas]". En última instancia, puede ser
el conocimiento del bien que está más amenazado por todos nuestros otros avances. A fin de
cuentas, es posible que nos volvamos más ignorantes de las cosas que debemos saber para
vivir bien y de manera sostenible en la Tierra.
Un cuarto mito de la educación superior es que podemos restaurar adecuadamente lo que
hemos desmantelado. En el plan de estudios moderno, hemos fragmentado el mundo en
partes y partes llamadas disciplinas y subdisciplinas. Como resultado, después de 12 o 16 o 20
años de educación, la mayoría de los estudiantes se gradúan sin un amplio sentido integrado
de la unidad de las cosas. Las consecuencias para su persona y para el planeta son grandes. Por
ejemplo, habitualmente producimos economistas que carecen del conocimiento más
rudimentario de la ecología. Esto explica por qué nuestros sistemas contables nacionales no
restan los costos del empobrecimiento biótico, la erosión del suelo, los venenos en el aire o el
agua y el agotamiento de los recursos del producto nacional bruto. Agregamos el precio de la
venta de un bushel2 de trigo al PNB, mientras que olvidamos restar las tres fanegas3 de la capa
superior del suelo perdidas en su producción.
En quinto lugar, existe el mito de que el propósito de la educación es darte los medios para la
movilidad ascendente y el éxito. Thomas Merton una vez identificó esto como la "producción
en masa de personas literalmente no aptas para nada, excepto para participar en una farsa
elaborada y completamente artificial". Cuando se le pidió que escribiera sobre su propio éxito,
Merton respondió que "si sucediera que una vez escribí un bestseller, esto fue un puro
accidente, debido a la falta de atención y la ingenuidad, y cuidaría muy bien de nunca hacer lo
mismo otra vez ". Su consejo para los estudiantes fue "ser lo que quieras, ser locos, borrachos y
bastardos de todas las formas y formas, pero a toda costa evitar una cosa: el éxito".
El hecho claro es que el planeta no necesita más personas "exitosas". Pero necesita
desesperadamente más pacificadores, curanderos, restauradores, narradores y amantes de
todas las formas. Necesita gente que viva bien en sus lugares. Necesita gente de valor moral
que quiera unirse a la lucha para hacer que el mundo sea habitable y humano. Y estas
necesidades tienen poco que ver con el éxito como nuestra cultura lo ha definido.
Finalmente, hay un mito de que nuestra cultura representa el pináculo del logro humano.:
Nosotros solos somos modernos, tecnológicos, y desarrollados. Esto, por supuesto, representa
la arrogancia cultural del peor tipo y una mala interpretación de la historia y la antropología.
Recientemente, esta visión ha tomado la forma de que ganamos la guerra fría y de que el
triunfo del capitalismo sobre el comunismo está completo. El comunismo fracasó porque
produjo muy poco a un costo demasiado alto. Pero el capitalismo también ha fracasado
porque produce demasiado, comparte muy poco, también a un costo demasiado alto para
nuestros hijos y nietos. El comunismo fracasó como una moralidad ascética. El capitalismo
fracasó porque destruye la moralidad por completo. Este no es el mundo feliz que muchos
anunciantes y políticos imprudentes describen. Hemos construido un mundo de riqueza
2
Medida de áridos (Brit = 36,37 litros; US = 35,24 litros)
3
Fanega de tierra. En Andalucía (España), unidad de superficie, equivalente a 6.440 metros cuadrados.
En Castilla y León (España), en la provincia de Burgos (España), comarca de La Bureba, unidad de
superficie equivalente a 2000 metros cuadrados. Es decir, 5 fanegas de terreno de cultivo hacen 1
hectárea.
sibarita para unos pocos y la pobreza de Calcuttan4 para una subclase en crecimiento. En el
peor de los casos, es un mundo de grietas en las calles, violencia insensata, anomia y el tipo de
pobreza más desesperado. El hecho es que vivimos en una cultura desintegradora. En palabras
de Ron Miller, editor de Revisión holística:
"Nuestra cultura no nutre lo que es mejor o más noble en el espíritu humano. No cultiva
la visión, la imaginación o la sensibilidad estética o espiritual. No fomenta la gentileza,
la generosidad, el cuidado o la compasión. Cada vez más a finales del siglo XX, la visión
del mundo económico-tecnocrático-estatista se ha convertido en un monstruoso
destructor de lo que es amar y afirmar la vida en el alma humana ".
4
Habitante de Calculta
5
Love Canal, un vecindario situado en Niagara Falls (Nueva York), protagonizó uno de los mayores
desastres ambientales que se conocen, al situarse sobre un cementerio de residuos industriales que
acabó contaminando sus aguas. Hoy, casi 40 años después, la zona se sigue recuperando.
usarlo de manera responsable. Algunos de ellos no se pueden usar de manera
responsable, es decir, de manera segura y con buenos propósitos.
Cuarto, no podemos decir que sabemos algo hasta que entendamos los efectos de
este conocimiento en personas reales y sus comunidades. Crecí cerca de Youngstown,
Ohio, que fue en gran parte destruido por decisiones corporativas para "desinvertir"
en la economía de la región. En este caso, los MBA, educados en las herramientas de
compras apalancadas, beneficios fiscales y movilidad de capital han hecho lo que
ningún ejército invasor podía hacer: destruyeron una ciudad estadounidense con total
impunidad en nombre de algo llamado "resultado final". Pero el resultado final para la
sociedad incluye otros costos, los de desempleo, crimen, tasas de divorcio más altas,
alcoholismo, abuso infantil, ahorros perdidos y vidas destrozadas.
Mi quinto principio sigue y se extrae de William Blake. Tiene que ver con la
importancia de los "detalles minuciosos" y el poder de los ejemplos sobre las palabras.
Los estudiantes escuchan sobre la responsabilidad global mientras se educan en
instituciones que a menudo invierten su peso financiero en las cosas más
irresponsables. Las lecciones que se enseñan son las de la hipocresía y, en última
instancia, la desesperación. Los estudiantes aprenden, sin que nadie lo diga, que son
incapaces de superar la brecha aterradora entre los ideales y la realidad. Lo que se
necesita desesperadamente son profesores y administradores que brinden modelos de
integridad, cuidado, consideración e instituciones que son capaces de encarnar los
ideales total y completamente en todas sus operaciones.
En tercer lugar, reexaminar cómo funciona su dotación. ¿Se invierte de acuerdo a los
principios de Valdez? ¿Se invierte en empresas que hacen cosas responsables que el
mundo necesita? ¿Se puede invertir parte de ella a nivel local para ayudar a
aprovechar la eficiencia energética y la evolución de una economía sostenible en toda
la región?
Finalmente, propongo que establezca una meta de alfabetización ecológica para todos
sus estudiantes. Ningún estudiante debe graduarse de esta o de cualquier otra
institución educativa sin una comprensión básica de: