Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
I. PETITORIO:
Por convenir al derecho de defensa de mi patrocinado, vengo a solicitar la declaración de
nulidad del acto procesal consistente en la Sentencia Interlocutoria de fecha 08 de abril
de 2019, recaída en esta causa, seguido en el expediente N°03760-2018-PA/TC,
UCAYALI, por contravenir de manera descarada normas procesales que son de orden
público, así como por citar normas que no son aplicables a la cuestión controvertida,
incumpliéndose con esto uno de los requisitos de validez de toda resolución judicial.
1
Léase el cuarto fundamento de la resolución interlocutoria.
2
(12)Para tal efecto y atendiendo al principio pro actione, debe interpretarse que el legislador,
al considerar el inicio del plazo para interponer la demanda en la fecha de notificación de la
resolución que queda firme, simplemente ha dispuesto que el justiciable está facultado para
interponer la respectiva demanda de amparo sin necesidad de esperar que se notifique la
resolución que ordena se cumpla lo decidido, mas no está postulando que el computo de los 30
días hábiles a que se refiere la norma comienza a partir de la fecha en que se notifica la resolución
que queda firme. (13) La misma norma, por otra parte, no indica en ningún momento que el
plazo concluye a los treinta días hábiles de producida la notificación de la resolución judicial
firme. Lo que la norma analizada consagra es un plazo que finaliza treinta días después de
realizada la notificación de la resolución que ordena se cumpla lo decidido. En otras palabras y
siempre que la resolución judicial que se juzga lesiva quede firme, se puede interponer la
demanda antes de que se expida o notifique la posterior resolución que ordena se cumpla con lo
decidido, pero de tal circunstancia opcional no se sigue que ello resulte obligatorio, en cualquier
caso. Por lo tanto la notificación de la resolución firme que causa el agravio no puede
considerarse, en la generalidad de os casos, como fecha de inicio del cómputo del plazo de
prescripción de proceso de amparo a efectos de que comience a correr el plazo de treinta as
hábiles.
Finalmente, debe estimarse que todas las normas procesales son de orden público, pues
deben ser cumplidos por todos aquellos involucrados en un proceso, en el modo, forma y
plazo que se estipula, siendo que regula un proceso, son aplicables en la misma medida
para todas las partes, juez y terceros. Esto ya ha sido reconocido por el propio Tribunal
Constitucional, en la sentencia recaída en el expediente Nº 141-95-HC/TC, donde se
estableció que: “las normas procesales son de orden público y, por ende, de
imperativo y obligatorio cumplimiento por los sujetos que en ellas se encuentren
comprendidos”, este entendimiento del Propio Tribunal Constitucional nos reconduce
nuevamente a lo dispuesto en el artículo VIII del Título Preliminar del Código Procesal
Constitucional, exigiendo al ilustre Tribunal que aplique el derecho (positivo) que
corresponde.
Tal como lo prescribe el articulo 122 numeral 3, del Código Procesal Civil, una resolución
judicial debe contener “La mención sucesiva de los puntos sobre los que versa la
resolución con las consideraciones, en orden numérico correlativo, de los fundamentos
de hecho que sustentan la decisión, y los respectivos de derecho con la cita de la norma
o normas aplicables en cada punto, según el mérito de lo actuado;"
Así mismo, este mismo artículo señala que “La resolución que no cumpliera con los
requisitos antes señalados será nula3, salvo los decretos que no requerirán de los
signados en los incisos 3., 5. y 6., y los autos del expresado en el inciso 6”
3
Conteniendo entre estos requisitos, lo exigido por el numeral 3 del artículo 122 del Código Procesal
Civil.
En el caso concreto, lamentablemente el ilustre Tribunal ha vulnerado mas de un derecho
procesal fundamental, entre ellos: derecho al recibir una resolución ajustada a derecho, a
la tutela procesal efectiva y al debido proceso, con todo lo que este ultimo contiene.
Esto es así, porque el ilustre Tribunal ha citado disposiciones normativas impertinentes,
tales como:
a).- El literal b del fundamento 49 de la sentencia recaída en el expediente 987-
2014-PA/TC, que señala como supuesto de emisión de una sentencia
interlocutoria, el hecho de que “la cuestión de derecho contenida en el recurso
no sea de especial trascendencia constitucional”. En el caso concreto, la
sentencia interlocutoria no declaró la improcedencia de la demanda por una causal
semejante, sino por la de extemporaneidad, siendo supuestos completamente
distintos, imposibles de ser confundidos.
b).- El literal b del artículo 11 del Reglamento Normativo del Tribunal
Constitucional, que señala el mismo supuesto del mencionado en el párrafo
anterior.
12)Para tal efecto y atendiendo al principio pro actione, debe interpretarse que el
legislador, al considerar el inicio del plazo para interponer la demanda en la fecha de
notificación de la resolución que queda firme, simplemente ha dispuesto que el justiciable
está facultado para interponer la respectiva demanda de amparo sin necesidad de
esperar que se notifique la resolución que ordena se cumpla lo decidido, mas no está
4
En el sentido amplio de la acepción “judicial”.
postulando que el computo de los 30 días hábiles a que se refiere la norma comienza a
partir de la fecha en que se notifica la resolución que queda firme.
(13) La misma norma, por otra parte, no indica en ningún momento que el plazo concluye
a los treinta días hábiles de producida la notificación de la resolución judicial firme. Lo
que la norma analizada consagra es un plazo que finaliza treinta días después de
realizada la notificación de la resolución que ordena se cumpla lo decidido. En otras
palabras y siempre que la resolución judicial que se juzga lesiva quede firme, se puede
interponer la demanda antes de que se expida o notifique la posterior resolución que
ordena se cumpla con lo decidido, pero de tal circunstancia opcional no se sigue que
ello resulte obligatorio, en cualquier caso. Por lo tanto la notificación de la resolución
firme que causa el agravio no puede considerarse, en la generalidad de os casos, como
fecha de inicio del cómputo del plazo de prescripción de proceso de amparo a efectos de
que comience a correr el plazo de treinta as hábiles
5
STC 1417-2005-AA/TC.
6
STC 2877-2005-PHC/TC.
Ya superada algunas dificultades conceptuales, en el caso Vásquez Romero7 , ha aplicado
la idea de la especial trascendencia constitucional, que tiene una relación directa con el
contenido constitucionalmente relevante de los derechos fundamentales.
Siendo ello así, queda claro que esta categoría jurídica tiene un basto contenido
jurisprudencial y doctrinario, bien definido y de ninguna manera confundible con el
instituto procesal de la extemporaneidad.
Para poder declarar procedente la demanda es suficiente que se cumpla con el primer paso
o primer estadio. Siendo ello así, es inconcebible que el Tribunal Constitucional declare
improcedente la demanda de amparo bajo el argumento de que se configura la causal de
falta de especial trascendencia constitucional, tanto más si ni siquiera se han pronunciado
sobre los hechos ni sobre el petitorio de la demanda.
7
STC 00987-2014-PA/TC.
POR LO TANTO:
Ruego a su señoría, declarar fundada mi solicitud y retrotraer la causa hasta el estado de
calificación, por estar ajustado a derecho y conforme a ley.
Primer Otrosí digo: Pese a que aún no se me ha notificado con la sentencia
interlocutoria, vengo a presentar esta solicitud de nulidad, por saber de su existencia, al
estar subido al sistema de seguimiento de expedientes ante el Tribunal Constitucional.
Con ello se comprueba que la nulidad presentada se solicita en la primera oportunidad
que se tiene.
Segundo Otrosí digo: Señalo como domicilio procesal la casilla electrónica N°71112, a
donde se me deberá notificar todas las resoluciones expedidas por su despacho.