Machu Picchu, es una majestuosa fortaleza inca, que fue mandado a edificar

por Wiracocha, el octavo rey de Cusco.

Cuando los Chankas, comandado por Uscovilca, invadieron el Machu

Picchu, Wiracocha fue obligado a huir. Kusi, hijo de Wiracocha, forma un
ejército y derrota a Uscovilca en una sangrienta batalla y decide entregar el
botín de guerra a su padre quien lo trata con mucho desprecio, no acepta el
obsequio y sugiere que se lo entregue a su sucesor, su hermano Urko.

Humillado, Kusi regresa a Cusco para tomar el poder, reconstruir la ciudad y

planear la muerte de su hermano que se dio tras un tiempo.

Al enterarse Wiracocha del homicidio de su hijo, decide habitar en su palacio

para siempre, hasta que el Consejo Real sugiere a Kusi que atrajera a su padre
invitándolo a observar personalmente la transformación que había realizado
en Cusco.

Wiracocha accede a la propuesta y cuando llega a Cusco y queda asombrado

por la renovada ciudad que encontró hasta el punto de nombrar a Kusi con el
apelativo de Pachacutec que significa "Transformador del mundo". Ante este
acto Kusi agradeció el cumplido e inmediatamente despojó la corona de su
padre y se la puso en la cabeza y se autonombró rey e hizo que su padre se
arrodillara ante él, bebiera cerveza de maíz (chicha) y finalmente lo mandó a vivir
sus últimos años de vida desterrado en Machu Picchu.

Cuenta la leyenda, que la creación de Machu Picchu, tuvo ayuda

extraterrestre, pues las paredes de piedra, son formados por rocas inmensas,
que el hombre no podría levantar sin al ayuda de maquinarias.

Otro indicio, que apoya esta teoría, es que Machu Picchu, tiene la forma la cara
de un inca hecho de piedra, y visto desde la montaña Huayna Picchu, se puede
ver como Machu Picchu, adopta la forma de un cóndor volando.