ASOCIACION DE GRUPOS EVANGELICOS UNIVERSITARIOS DEL PERU

COMUNIDAD BIBLICA UNIVERSITARIA UPLA HUANCAYO

CRISTO MI MODELO DE MISION INTEGRAL

Creo que uno de los temas muy tratados en la que se pone mucho enfasis en
nuestros grupos estudiantiles y en la que esta basado el trabajo de AGEUP es la
Misiòn Integral, por consiguiente se me ha parecido pertinente hablar de este tema
que a mi parecer me es muy importante para continuar con la extension del Reino
de Dios pero que esta siendo muy poco comprendido por la iglesia y aun por la
generacion estudiantil de estos tiempos.

Hablar de Misiòn es muy importante para mì, ya que desde que he conocido a
Cristo se me ha hablado mucho de cumplir con la Misiòn de Dios, pero poco se
me ha dado a entender de que manera y como hago la Misiòn.

Llevo tres años y medio dentro del grupo estudiantil y he podido aprender y
entender cual es el enfoque de la misiòn de la iglesia en estos tiempos y como se
debe llevar a cabo, tomando como el mejor modelo de Misón a Cristo el Dios
hecho hombre que se despojo de si mismo para ir en busca de perdido,
restaurando la comunión con su creador, consigo mismo, con su projimo y con la
creación.

En este Ensayo me enfocare en uno de los puntos que me parece principal e

indispensable para llevar a cabo la Misión Integral no sólo en el entorno estudiantil
sino en toda area de nuestras vidas.
Generalmente cuando pensamos en la misión de la iglesia, viene a nuestra mente la
Gran Comisión con que cada uno de los evangelios culmina (Mat. 28:16-20; Mc. 16:15-
16; Lc, 24:47-49; Hch. 1:8; Jn. 20:21-23. Y luego si somos evangélicos pasamos a
interpretar esta Comisión a la luz del movimiento misionero moderno de los últimos 200
años”
Quiero en esta oportunidad considerar misión, en el sentido ministerial del Mesías; es
decir de lo que Jesús hizo, su accionar y su tarea cotidiana; y, no tanto en el mandato
ineludible que ha dejado a su iglesia. Esta forma de mirar la misión pienso en mi humilde
concepto sería un desafío a encarnarse y sentirse desafiado a seguir el modelo de
Jesús, que hoy en día, de manera consciente o inconsciente muchas veces es dejado
de lado. Mirar la misión desde esta óptica también ayudará a conocer y entender la
amplitud de la tarea que hoy toca cumplir a la Iglesia y a nosotros como brazo extensivo
de ella.
Al mirar de esta manera creo que “Para entender misión debemos dirigir nuestra
atención a Jesús y a la naturaleza propia de su misión en la tierra.
El Hijo de Dios se encarnó, tomó nuestra carne y sangre y vivió como nosotros, con la
excepción que no cometió pecado”.

Un cuadro general del ministerio de Jesús encontramos en Mt. 4:23 “Y recorrió Jesús
toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino,
y sanando toda enfermedad y dolencia en el pueblo”; y, Mt. 9:35 “Recorría Jesús todas
las ciudades y aldeas,enseñando en las sinagogas de ellos y predicando el evangelio
del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo”.
Comparando los dos textos notamos que las actividades desarrolladas por Jesús son las
mismas, dándonos estas entonces un cuadro general de la misión de Dios a la cual
había sido enviada y que le tocaba cumplir.
La primera cosa que se nota es que la misión es una actividad o acción continua y
constante. Jesús realizó este tipo de tarea, es por eso que el texto bíblico, dice: “Y
recorrió Jesús” o “recorría Jesús”.
Lo que nosotros debemos entender hoy es que cuando se habla de trabajo misionero,
se refiere a un trabajo constante, que debe traducirse en la vida y propósito de su
existencia aquí; un trabajo que por cierto debe desarrollarse o ejecutar sin excusas de
ninguna índole.
La segunda cosa que podemos notar es que se mencionan tres actividades continuas
en las cuales estaba abocado Jesús: “Enseñando en las sinagogas de ellos”,
“Predicando el evangelio del reino”, y “sanando toda enfermedad y toda dolencia en el
pueblo” (Mat. 4:23; 9:35). Éstas también deben seguir siendo cada dia nuestra forma de
seguir extendiendo el evangelio de Xto de manera vivida de modo que todo aquel que
nos vea sea confrotado por nuestro testimonio.
Creo que puedo decir que veo en estos tiempos un desanimo o quizas dejadez por parte
de los cristianos en cuanto a la manera de desarrollar un vida con sentido de misión ya
que lo que decimos no es coherente con lo que hacemos, nuestra agenda esta lleno
actividades y planes de trabajo pero muchas de ellas desarrolladas a medias sin el
proposito correcto y peor aun sin el compromiso que se requiere, estamos dejando de
lado nuestros tiempos con Dios y ahora corremos en pos de nuestros logros poniendo a
un lado la direccion del Padre.
Puedo decir con muchas tristeza que nuestro tiempo con Dios es la menos tomada en
cuenta y a la que menos comprometidos estamos, y lo digo porque los resultados se
muestran en cada actividad o responsabilidad no llevada a cabo con ese mismo sentir
que tenia Jesús cuando recorria las calles o cuando enseñaba en las sinagogas,nuestra
fuente de vida esta vacía y el amor está frio, cada acto que hacemos es basado en
propios esfuerzos humanos y no hay amor en cada acto que se hace, el compromiso a
no es con Dios sino con el Hombre , esto me hace recordar Apocalipsis 2:1-7 el
mensaje a la Iglesia de Efeso, cuanto hay que volver a ese Primer amor que hace que tu
vida cobre el sentido o proposito por el cual hago las cosas ,que todo cuanto haga tenga
sentido de Misión.
La misión de Dios entonces se convierte en una tarea muy delicada que requiere mucho
de mi amor, entrega, sacrificio y aun el costo que necesita ser considerada con mucho
cuidado.
En la mayoría de los casos se entrega el mensaje sólo como un cumplimiento al
mandato, sin considerar la seriedad de que los oyentes deben prestar atención y
reaccionar ante lo escuchado.
Creo que es muy amplio este tema, pero por ahora solo dejare esta pregunta que dara
pie a que se continue con el tema ¿Considero mi vida más que la de Cristo?.....

Aracely Ñavincopa Calderón