Sunteți pe pagina 1din 2

EL ARGUMENTO

Muchas historias tienen argumento. El argumento es lo que pasa en una historia. Éste
está determinado por los personajes, cuyas acciones impulsan la narración. Mientras
que en literatura los argumentos pueden no parecer ser un elemento demasiado
significativo o que muestre el punto de vista de la historia, en realidad son el
fundamento del tema de la historia y de las intenciones del autor. Por lo tanto el
argumento es un elemento importante para comprender la literatura.

El argumento ha sido llamado tradicionalmente fábula; los griegos lo llamaron mito.


El argumento es la reproducción breve del contenido de la obra. El resumen del
contenido atiende exclusivamente al curso de los acontecimientos… extrae sólo, en
forma de relato, lo que es importante para la estructura de la acción (Kayser, 1970,
98). Para obtener un buen argumento, se debe reducir el desarrollo de la acción con la
mayor sencillez posible.

Al redactar el argumento, debemos resumir la acción o trama central, tomando sólo en


cuenta al protagonista y a los personajes secundarios más importantes. No hay que
entrar en acciones secundarias, detalles, descripciones, diálogos, reflexiones. Los
buenos argumentos ni siquiera mencionan nombres de personajes, sino que usan
nombres genéricos: un hombre, una niña, el abogado, un príncipe, su amigo, la madre.
El argumento debe redactarse en un párrafo muy breve, de 5 a 15 líneas. Lo que más
ocurre al tratar de redactar un argumento es que obtenemos resúmenes o narraciones
de una o más páginas. De esos resúmenes o narraciones extensas, podemos extraer el
verdadero argumento.

Leamos el ejemplo de una fábula o argumento (de la obra La Estrella de Sevilla, de


Lope de Vega) que presenta Wolfgan Kayser:

Un rey se apasiona por una muchacha, pero es humillado por el hermano de ésta. Un
noble da al rey su palabra de vengarle, pero sabe luego que el ofensor es su íntimo
amigo y futuro cuñado, ya que la muchacha era su propia novia. A pesar de todo
cumple su palabra y mata a su amigo. El rey tiene que cumplir la suya, por la que le
había prometido la impunidad. Los dos amantes renuncian a su amor (Ibid., 98-99).

TIPS PARA DEFINIR EL ARGUMENTO:

1. Toma notas y sintetiza el argumento ¿Que pasa en la historia? Haz un resumen en


orden cronológico para señalar en dónde hay tensión y cuándo aumenta ésta.

2. Determina de qué trata el argumento. ¿Quiénes son los personajes de la historia y


qué quieren o desean?, ¿qué los motiva?, ¿cómo consiguen sus objetivos?

3. Toma nota de los conflictos en la historia. Los conflictos son dos fuerzas opuestas
que luchan por un mismo objetivo. Si tu protagonista quiere algo, ¿cuáles son los
conflictos que él se encuentra y que evitan que logre sus objetivos? Los conflictos
pueden aparecer por la presencia de otro personaje, un objeto inanimado o una fuerza
de la naturaleza, como una tormenta de nieve o un huracán. También pueden ser
internos, como el hecho de que tu personaje tenga miedo de volar.

4. Determina cómo los conflictos impulsan la historia para que avance. Por ejemplo,
un personaje quiere regresar a casa por las fiestas, pero su avión ha sido retrasado por
la niebla. ¿Cómo es que este conflicto obliga a tu personaje a reaccionar?, ¿qué es lo
que hace para lograr su objetivo y regresar a casa? Toma nota de cómo estos
conflictos se resuelven y qué tan efectivo es el clímax que se obtiene con ellos. Define
tus intenciones como autor en términos de cómo la protagonista resuelve los
conflictos en la historia y qué es lo que quiere decir esto en el mensaje final.

5. Define cómo el argumento refleja los temas principales de la historia. Por ejemplo,
si la trama o argumento gira en torno a un hombre que sobrevive a la salvaje Alaska,
¿será que el autor esta tratando de decir algo acerca de la naturaleza o de la relación
del hombre con ella? Si el tema es acerca de la indiferencia de la naturaleza hacia el
hombre, ¿en qué forma el argumento respalda este tema?

S-ar putea să vă placă și