DEL COLEGIO A LA UNIVERSIDAD

Ser Montessoriano lo defino como ser una persona responsable y disciplinada. Son
precisamente estos principios los que me han ayudado en mi formación profesional, debido a
todos los cambios drásticos que sufrimos cuando damos el paso del colegio a la universidad.
Aquí en la universidad somos totalmente autónomos en nuestras decisiones y depende solo de
cada uno el rumbo que tomamos en la vida.
Cuando comencé las clases en la universidad, estaba muerta del miedo. Recuerdo que mi
primera clase fue de Biología, yo esperaba que ese día nos pasáramos las dos horas
conociéndonos y hablando de como iba a ser el semestre y todo eso... Pero no fue así, el
profesor a duras penas se presentó e inmediatamente inicio a explicar su tema y al terminar
justo las dos horas, dejó una lectura de más 20 hojas doble cara para el día siguiente,
automáticamente dije: "Pensé que era mentira cuando mis profesores me lo decían".
Seguidamente salí corriendo a buscar el salón donde me tocaba ver mi otra clase, química (el
profesor era el terror de primer semestre). Al entrar a la clase sentí una presión grandísima ya
que soy consciente del esfuerzo que estaban haciendo mis padres en pagarme un semestre
carísimo y de pronto no ser capaz de superarlo, admito que sentí mucho miedo, miedo que
siento día a día por esa gran responsabilidad, y es también el que me impulsa a estudiar cada
día con mayor ahínco.
Durante los cuatro semestre que llevo hasta el momento, me ha tocado estudiar muchísimo para
poder sacar adelante mis estudios como hasta ahora lo he hecho, eso sí, casi nunca tengo tiempo
libre, pero es donde he visto que los principios inculcados en el colegio de
RESPONSABILIDAD Y DISCIPLINA, son los que han dado lugar a estos resultados.
Desde el colegio aprendí a ser organizada con el estudio, y a tener presente que si quería ir a
una fiesta el sábado primero debía dejar las tareas de toda la semana listas el viernes sin
importar si me tocaba trasnochar o madrugar para lograrlo, esa misma disciplina y
responsabilidad la aplico en la universidad, aunque otros estén de rumba yo tengo claro que
solo lo puedo hacer si tengo listas mis responsabilidades universitarias ya que esas son mi
prioridad.
Hoy en día valoro muchísimo la exigencia de parte de mis profesores, cuando ellos veían que
me estaba poniendo floja, en seguida comenzaban a llamarme la atención y a exigirme más,
eso ha hecho que no baje la guardia aquí en la universidad, pero tengo la fortuna de que cuando
creo yo misma que me estoy poniendo floja me acuerdo de ellos y me exijo más, porque es
claro que aquí nadie me lo va a decir.
Del Colegio aprecio todo lo que aprendí ya que muchas veces decía :"Yo voy a estudiar
medicina, eso a mí no me va a servir para nada", pero me han hecho tragarme las palabras, por
ejemplo, di una electiva de historia que fue literalmente todo lo que aprendí con el profesor
cuello, pase por una materia que se llama Bioestadística y fue todo lo que me enseñó el profesor
Denuer en estadística, en química me sirvieron mucho los libros del profesor Ramón, que
incluso pedí que me regalaran el de decimo porque yo no lo tenía y así con todas las materias.
Pero más que lo académico aprecio la formación personal, ya que es la que me ha dado los
elementos necesarios para sostenerme, he visto como muchos de los que iniciaron con migo
se han ido quedando y no porque no tengan capacidades para esta carrera, NOOOO todo lo
contrario, son estudiantes brillantes con más de 400 puntos en el ICFES, pero no han tenido la
disciplina y dedicación para sacar sus estudios adelantes, se han dejado llevar por el después
estudio, y esos son los resultados, seguramente no fueron tan privilegiados como yo de tener
unos profesores que les enseñaron y le inculcaron los principios de RESPONSABILIDAD Y
DISCIPLINA.
Por ello invito a todos mis compañeritos montesorrianos que me siguen en este camino del
estudio, entendiendo a los profesores ya que ellos lo único que quieren es el bien para nosotros.
Éxitos y Gracias mil Gracias para toda la comunidad Montessoriana.

Yoismar Daza.