Sunteți pe pagina 1din 1

¿Socialista o católico?

RONNY PADRÓN | EL UNIVERSAL


miércoles 22 de febrero de 2012 06:16 PM
"...nadie puede al mismo tiempo ser buen católico y socialista verdadero" Nº 120. Carta Encíclica
QUADRAGESIMO ANNO de su santidad PÍO XI. Promulgada el 15 de mayo de 1931, con ocasión de los 40 años
de la Encíclica Rerum Novarum, de allí su nombre en latín (en el cuadragésimo año).

Para la Iglesia católica una encíclica papal es, en el sentido más estricto, una carta (generalmente sobre algún
aspecto de la doctrina católica) enviada por el Papa y dirigida por éste a los obispos católicos de un área en
particular o, más frecuentemente, a los obispos del mundo, y a menudo se designa a un público más amplio. Las
encíclicas papales indican una alta prioridad para un tema en un momento dado. En pocas palabras, son directrices
que deben ser respetadas por quienes se consideren católicos apostólicos romanos.

Es el caso que desde hace mucho la jerarquía de la Iglesia católica, representada por el Sumo Pontífice, ha
manifestado con absoluta claridad la oposición existente entre la doctrina cristiana y el socialismo. Muy a pesar del
siniestro afán socialista por confundir en torno a esta realidad, resulta muy pertinente para la Venezuela de hoy
poner ciertas cosas en su justo lugar. Veamos.

El socialismo es incompatible con la doctrina católica entre otras razones por su hostilidad en relación a dos
instituciones, pilares de la civilización cristiana, esto es, la propiedad y la familia. Son varios los Papas que han
emitido condena contra al socialismo mediante esclarecedores textos pontificios, desde Pío IX (1846-1878) con su
Encíclica "Noscitis et Nobiscum", de 1849 identificando al socialismo con un "Trastorno absoluto de todo orden
humano". Pasando a León XIII (1878-1903) a través de la "Quod Apostolici Muneris", de 1878 cuando lo refiere
en estos términos "...aquella secta de hombres que, bajo diversos y casi bárbaros nombres de socialistas,
comunistas o nihilistas, esparcidos por todo el orbe, y estrechamente coligados entre sí por inicua federación, ya
no buscan su defensa en las tinieblas de sus ocultas reuniones, sino que, saliendo a pública luz, confiados y a cara
descubierta, se empeñan en llevar a cabo el plan, que tiempo ha concibieron, de trastornar los fundamentos de
toda sociedad civil".

O la misma QUADRAGESIMO ANNO. Nº 116. Cuando afirma: "No vaya, sin embargo, a creer cualquiera que las
sectas o facciones socialistas que no son comunistas se contenten de hecho o de palabra solamente con esto. Por
lo general, no renuncian ni a la lucha de clases ni a la abolición de la propiedad, sino que sólo las suavizan un
tanto". Idem, Nº 118 "Pero la sociedad que se imagina el socialismo ni puede existir ni puede concebirse sin el
empleo de una enorme violencia, de un lado, y por el otro supone una no menos falsa libertad, al no existir en ella
una verdadera autoridad social, ya que ésta no puede fundarse en bienes temporales y materiales, sino que
proviene exclusivamente de Dios, Creador y fin último de todas las cosas" (Diuturnum, 29 de junio de 1881).

De colofón se nos dice en el Concilio Vaticano II, a través de la Constitución Pastoral sobre la Iglesia en el Mundo
Moderno: Gaudium et Spes, de 1965:

"...Por este motivo hay que calificar de falsas tanto las doctrinas que se oponen a las reformas indispensables en
nombre de una falsa libertad como las que sacrifican los derechos fundamentales de la persona y de los grupos en
aras de la organización colectiva de la producción".

Porque nunca es tarde para buscar la verdad. "(...)... El que tenga oídos, que oiga". Mateo 13, 1-9. ORA y
LABORA.
http://www.eluniversal.com/opinion/120222/socialista-o-catolico

S-ar putea să vă placă și