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Las etapas de impugnación en el proceso

penal

1. Introducción
La administración de justicia o actividad jurisdiccional tiene por finalidad
prevenir, solucionar o dirimir conflictos de ahí que se hayan creado
instrumentos de aplicación y de ejecución que permitan materializar
los derechos que tienen todos ser humano.

Actividad tan importante como esta; incuestionablemente recae sobre el poder


judicial, sin embargo tal actividad no se encuentra expedita de fallas, por el
contrario se caracteriza por su factibilidad, en tal sentido se busca una forma
de rectificar, enmendar los posibles errores que pudieran generarse en
la administración de justicia.

Algunos autores prefieren emplear el calificativo de recursos, como aquel


medio de impugnación que nos permite enmendar los errores que se dan en la
administración e justicia contribuyendo también, a lograr la recta, pronta justa
y cumplida aplicación del derecho y la justicia en caso concreto.
2. Concepto
Los medios de impugnación, son concebidos por la Enciclopedia Jurídica
OMEBA al referirse a la impugnación procesal, como: "... el acto de combatir,
contradecir o refutar una actuación judicial, cualquiera sea su índole
(testimonial, pericial, resolutiva, etc.) Todos los recursos que se interponen
contra las resoluciones judiciales constituyen actos impugnación procesal.".

Del mismo modo se entiende por recurso: "... el medio procesal concebido a
cualquiera de las partes procésales, que se crea o considere agraviada,
perjudicada por una resolución judicial (ya sea civil, criminal o de otra
jurisdicción donde no esté prohibido), para acudir ante el juez o tribunal
superior y volver a discutir con toda amplitud el caso aun cuando la parte se
limite a repetir sus argumentos de hecho y de Derecho, con el objeto de que
en todo o en parte sea rectificada a su favor el fallo o resolución recaídos."

En su Manual de Derecho Procesal el Dr. Palacio, afirma que recurso es el


acto procesal en cuya calidad la parte que se considera agraviada pro una
resolución judicial, pide su reforma o anulación total o parcial, sea al mismo
juez o tribunal que la dicto o al juez o tribunal jerárquico superior.

Se colige de lo apuntado que recurso significa regresar, es un recorrer (al decir


de Couture) correr de nuevo el camino ya hecho, el medio de impugnación es
consecuencia del principio de la doble instancia, que las resoluciones de los
jueces inferiores puedan ser examinadas de nuevo a pedido de las partes por
los tribunales superiores.
3. Antecedentes de los Medios de Impugnación.
Los recursos han atravesado por una serie de etapas, en el devenir histórico,
así en el derecho antiguo los medios de impugnación o los recursos son
inimaginables debido a la carácter religioso de las sanciones, decisiones, etc.,
que dirimían conflictos nos referimos a que el juicio mismo es una expresión
de la divinidad teniendo ese carácter infalible.

En una etapa posterior ya surgen los recursos como un medio de revisión de


la sentencia. En el antiguo proceso español tenía en este sentido un ansia
ilimitada de justicia, por ello la cosa juzgada era tan débil que siempre existía
la posibilidad de plantear otro recurso.

4. Naturaleza Jurídica de los Medios de Impugnación.


Tres son los sistemas principales sobre la naturaleza de los medios de
impugnación:
 Una, considera que en los medios de impugnación hay una renovación de
la instancia, de tal modo que sin restricciones se examina la sentencia que
ha sido impugnada y todo el proceso en que fue dictada (sistema adoptado
siglos atrás).

 El segundo consiste en limitar estrictamente la apelación a la revisión de la


sentencia impugnada, a través de los agravios y solo a la materia que ellos
tratan.

 Finalmente el sistema mixto; que sigue un término medio entre ambos, ya


que revisa la sentencia impugnada pero admite excepciones
supervenientes y también la recepción de pruebas que no pudieron
recibirse en la primera instancia.
5. Justificación de los medios de Impugnación.
Discuten los jurisconsultos la utilidad de los medios de impugnación (entre
quienes la aceptan y la rechazan). Quienes aceptan la existencia de los de
impugnación, más propiamente de los la existencia de las dos instancias,
sientan base en:

 Es necesaria la existencia de una institución que pueden corregir los errores


y las injusticias que con tanta frecuencia se cometen en la primera instancia.

 Los medios de impugnación tiende a satisfacer las exigencias de una


justicia mejor.

El medio de gravamen y el doble grado de la jurisdicción sienta base en:

A. Una sentencia puede estar viciada por un doble orden de motivos: vicios
de actividad, que consisten en irregularidades en algunos de los actos
externos que componen la sentencia y en el proceso que la
antecede; y defectos de juicio que hacen referencia a las equivocaciones
o desviaciones que sufre el juez en la labor lógica que lleva a cabo en la
sentencia.

En el primer caso la sentencia supone una actividad contraria a la ley; en


el segundo lo único que existe es una sentencia que atribuye a la ley una
voluntad distinta de la que realmente tiene.

Si frente a la sentencia dictada con defectos de actividad se puede hablar


de sentencia inexistente o anulable, y cabe la posibilidad de una reacción
jurídica, ante una sentencia con defecto de razonamiento no cabría
ninguna reacción jurídica.
Nace entonces el llamado medio de gravamen que trata de remediar la
posibilidad de que el error judicial dé lugar a una sentencia equivocada.
El gravamen existe cuando hay una diferencia entre lo pedido al juez y lo
que nos concede y cuando dicha diferencia nos perjudica. El gravamen
no sólo es material o se refiere a la distinta manera de entender la
aplicación de la ley material al caso concreto; igualmente se refiere a
cuestiones o peticiones de orden procesal.

El medio de gravamen es el mecanismo procesal adecuado para luchar


contra las sentencias que consideramos equivocadas y, por
tanto, perjudiciales.
Nadie que no sienta el perjuicio, o nadie que no se sienta afectado
desfavorablemente por la resolución judicial, puede interponer recursos,
porque éstos requieren como base legitimadora lo que conocemos
como interés procesal.
Para interponer el medio de gravamen basta tan sólo con sentirse
perjudicado por la resolución, y para interponer un medio de impugnación,
además es necesario alegar la ilegalidad de la resolución judicial o su
injusticia objetiva.

B. La doctrina procesal moderna maneja un concepto de impugnación


mucho más estricto que el expresado anteriormente. Desde el punto de
vista técnico, y más profundamente procesal, aquiescencia se debe
contraponer también a medio de gravamen; la aquiescencia sería la
posición contraria a dos posiciones que aparecen como diferenciadas: la
impugnación y el medio de gravamen.

C. El medio típico de gravamen, el recurso de apelación, tiene un sentido


mucho más amplio. No sólo es el mecanismo procesal para luchar contra
la sentencia perjudicial, sino que es el mecanismo para conseguir
el doble grado de jurisdicción o el medio para conseguir una decisión
teóricamente más adecuada a la voluntad de la ley.
La búsqueda de una "justicia superior" más favorable determina lo que
hoy llamamos doble grado de jurisdicción.

Pero, al igual que el doble grado de jurisdicción propicia una mejor


consecución de la Justicia, la necesidad de ejecutar definitivamente las
sentencias y la de alcanzar un grado de certeza y seguridad suficientes ha
determinado que las resoluciones judiciales no puedan ser permanentemente
recurridas.

Todo esto determina las consecuencias jurídicas:

1) Después de la segunda sentencia no se permite una tercera; la sentencia


que resuelve la cuestión es la de segunda instancia y es con respecto a ella
contra la que caben los recursos extraordinarios por infracción procesal y de
casación, que son medios de impugnación.
2) El segundo grado de la jurisdicción no implica que la decisión dictada en
primera instancia sea injusta objetivamente o ilegal. La "injusticia" que mueve
la existencia del doble grado de jurisdicción es el gravamen o perjuicio que
supone la dictada en primera instancia.
3) El juez del segundo grado de jurisdicción debe tener los mismos poderes
de conocimiento que el juez que dictó la resolución recurrida.

6. Ineficacia Provisional de la Sentencia.


Una nueva etapa se abre una vez dictada y notificada la sentencia de primera
instancia, en esta nueva etapa existe la posibilidad de que las partes puedan
interponer cualquier medio de impugnación que proceda.
Así mismo en esta etapa, una vez realizada la impugnación, esta produce la
cesación de los efectos de la resolución impugnada.
En nuestra legislación los recursos, en amparo los artículos 213 y 214
del Código de Procedimiento Civil, se entienden de la siguiente manera:
Art. 213.- (RECURRIBILIDAD DE LAS RESOLUCIONES JUDICIALES).
I. Las resoluciones judiciales serán recurribles mediante impugnación de la
parte perjudicada.
II. Sólo cuando la ley declare irrecurrible una resolución será permitido negarse
al examen del recurso o someterlo a conocimiento del juez que
correspondiere. (Arts. 215, 250, 283, 295, 731, 765)

7. Sentencia Sometida A Impugnación.


La sentencia impugnada no es una verdadera sentencia sino acto que puede
devenir en sentencia. Las partes constan de la facultad, como ya se dijo, de
interponer cualquier recurso (en el plazo establecido).
La sentencia impugnada puede ser confirmada, en tal caso
la función jurisdiccional puede darse por cumplida a partir de la sentencia de
segunda instancia.
La sentencia también puede ser revocada a tal efecto la sentencia de primera
instancia con la sentencia de segunda instancia no guarda relación ya que el
resultado de ambas es diferente (una afirma algo la otra la niega), pero se
debe notar el carácter necesario de la primera sentencia para la producción de
la cosa juzgada.
Pero se debe distinguir la naturaleza de la sentencia impugnada, cuando el
recurso no se refiere al mérito de la sentencia como sucede en la apelación,
sino en la forma como sucede en el recurso de nulidad.
En tal situación el impugnado queda sometido en cuanto a su validez externa
o de forma y no en cuanto al contenido intrínseco, ya que si la impugnación
fuera infundada el contenido queda intacto y no depende para nada de la
sentencia de segunda instancia.
En el caso que la sentencia de segunda instancia anulara la sentencia anterior
sus efectos son constitutivos y la invalidez de fallo supone reintegrar las cosas
al estado que tenían antes de ser este dictado.
Se nota el carácter múltiple de la naturaleza de la sentencia sometida a
impugnación, debiendo ser analizadas sus soluciones de manera separada
cada situación diversa.
8. Error In Judicando y Error In Procedendo.
Algunos tratadistas sostienen que la distinción entre estos dos tipos de errores
no existe, ya que la sentencia injusta no lo es por falsa aplicación de ley
sustancial, sino por no aplicar la ley procesal que obliga a juzgar según el
derecho vigente, es decir que se trata siempre de un error en el procedimiento
y no en cuanto al fondo del conflicto.
La unidad mencionada sienta bases en la afirmación de que no hay más que
un destinatario de la norma legal, el juez y creer que a él va dirigida la ley, para
que el mismo la aplique en el caso concreto, pero ello es falso ya que en el
impulso procesal y en la forma del proceso no solo interviene él ya que el
simplemente es un intermediario (entre la norma y los sujetos de derecho),
sino también las partes; siendo destinatarios del derecho todos los habitantes
de un país al cual se aplica. Es decir existen dos clases de error, el error IN
JUDICANDO y el error IN PROCEDENDO.
El error In Judicando, consiste en la desviación que no afecta a los medios de
hacer el proceso, sino a su contenido, no se trata de la forma sino del fondo
del derecho sustancial que está en juego en él; el error in judicando consiste
habitualmente en la aplicación de una ley que no tiene ese carácter
(inaplicabilidad), pudiendo constituir en una impropia utilización de
los principios lógicos y empíricos del fallo, la consecuencia del error in
judicando no afecta a la validez formal de la sentencia, ya que desde ese punto
de vista, la misma, puede ser perfecta sino a su propia justicia; cuya
consecuencia natural es la sentencia injusta.
El error In Procedendo consiste en la desviación o apartamiento de los medios
señalados por el derecho procesal para su dirección del juicio, por error de las
partes o por error propio, puede con ese apartamiento disminuir las garantías
del contradictorio y privar a las partes de una defensa plena de sus derecho,
el error in procedendo comprende la forma de los actos su estructura externa
su modo natural de realizarse; la misma que logra la nulidad.
La sentencia como se expuso con anterioridad tiene un doble carácter uno
como acto jurídico (la sentencia a la par de cualquier otro acto jurídico) y de
juicio.
Puede presentar, la sentencia, defectos de construcción debido a la violación
e reglas procésales (forma), y en razón del error de juicio tanto de hecho como
de derecho (fondo).
Dos son los términos muy importantes que deben ser desarrollados: la
sentencia injusta (agravio) y la nulidad. La nulidad es la desviación de los
medios de proceder, esos medios de proceder no son fines en sus mismos ya
que el procedimiento por el procedimiento no se concibe, solo se concibe como
posibilidad formal de obtención de ciertos fines.
Existe ilegalidad de un acto la que puede resultar de la falta de las condiciones
necesarias y relativas, siendo el recurso de nulidad el que remedia tal
situación.
La sentencia injusta es el mal, daño o perjuicio que el recurrente expone ante
el juez superior por habérselo irrogado la sentencia del inferior dicho en otros
términos es la injusticia, el perjuicio ya sea de carácter material o moral siendo
la parte a quien la sentencia perjudica a quien le infiere agravio y acude a
mayor juez a expresar agravios, siendo en el caso concreto el recurso de
apelación el pertinente para la reparación de agravios, el Código de
Procedimiento Civil en el artículo 219 señala:

"Art. 219.- (PROCEDENCIA DEL RECURSO).


Procederá el recurso ordinario de apelación en favor de todo litigante que
habiendo sufrido algún agravio en la resolución del inferior, solicitare que el
juez o tribunal superior lo repare.
La rebeldía declarada en primera instancia no privará al demandado contumaz
del derecho de apelar de la sentencia."
Calamandrei manifiesta en su libro "Casación Civil", que estos errores no
tienen correspondencia con los de algún otro acto y por ello no puede dar lugar
a la impugnación sino simplemente a remedios internos al proceso a los cuales
se da el nombre de medios de gravamen ?continuando señala? que
pertenecen a las impugnaciones la revocación y la oposición de tercero, siendo
medios de gravamen la apelación y la casación.
Pero nosotros no debemos olvidar que la doctrina reconoce que los medios de
gravamen puede ser utilizados como impugnaciones ya que de dicha manera
se hace valer el error in procedendo.
9. Clasificación de los Medios de Impugnación.
La clasificación obedece a un carácter ordinario y extraordinario. Los
ordinarios se hallan previstos para los casos corrientes y tiene por objeto la
reparación de cualquier irregularidad procesal o error de juicio (error in
procedendo y error in judicando).
Los extraordinarios son de carácter excepcional y respecto a las cuestiones
específicamente determinadas por ley. El código civil establece en el artículo
214 que sin perjuicio de los recursos establecidos en leyes especiales, las
resoluciones judiciales podrán reclamarse mediante los recursos de
reposición, apelación y casación, conforme a lo dispuesto en el mismo código,
sin perjuicio de los recursos especiales previstos por la ley.
Nuestra legislación ha previsto los siguientes recursos ordinarios:
a.- Reposición
B.-Reposición con alternativa de Apelación
c.- Explicación y Complementación
d.- Apelación
e.- Compulsa
f.- Consulta
g.- Casación
Del mismo modo como recursos extraordinarios tenemos:
a.- Revisión Extraordinarias de Sentencias
b.- Recurso Directo de Inconstitucionalidad
c.- Recurso Indirecto de Inconstitucionalita
d.- Recurso contra Tributos y otras Cargas Publicas
e.- Recurso Directo de Nulidad
f.- Recurso de Habeas Corpus
g.- Recurso de Amparo Constitucional
10. Recurso de Reposición y Recurso de Reposición con
Alternativa de Apelación.
Entenderemos por el recurso de reposición, aquel que tiene por objeto que es
el mismo órgano que dictó una providencia o auto interlocutorio la revoque, es
decir que, por medio del recurso de reposición, se pretende que el mismo juez
o tribunal (en el caso de las Cortes Superiores o la Corte Suprema de Justicia)
que dictó una resolución la modifique y revoque por ser contraria al derecho.
De esta manera el juez subsana, el anterior pronunciamiento errado, con una
nueva providencia o auto interlocutorio.
En ese entendido, este medio de impugnación tiende (o tiene como finalidad)
ha evitar el recurso ante el órgano jurisdiccional jerárquico, toda vez que el
error, que noto el juez, en la providencia o auto interlocutorio, que no fuese
modificada o dejada sin efecto, será observada y objeto de apelación por la
parte que se considere agraviada; ya que se evita dilaciones y gastos en la
segunda instancia. Castellanos Trigo al respecto señala que favorece la
celeridad y la economía procesal

Este recurso debe interponerse y fundamentarse por escrito ante la


misma autoridad. Igual derecho tiene la parte contraria, cuando la resolución
modificare o dejare sin efecto la recurrida, tal como establece el artículo 218
de este Código.
En el régimen del Procedimiento Civil Compilado, el "recurso de reposición",
se conocía como revocatoria por contrario imperio según determinaba el
artículo 283 del indicado cuerpo legal.
Sin embargo, en el Procedimiento antiguo como en el nuevo existe la misma
figura procesal, solo que, en este último se conoce como "recurso de
reposición".
De ahí que, las apelaciones de autos interlocutorios o recurso de reposición,
debe interponerse en la forma alternativa prescrita por el II Parágrafo del
artículo 216 de este Código, pidiendo reposición del auto lesivo o en caso
contrario, la concesión de la alzada. Para ello es necesario que el litigante
perjudicado exponga sus razones ante el juez que resolvió el auto
interlocutorio, a fin de que aquel silos encuentra fundadas, revoque su
determinación, y si no, conceda la apelación.
La simple apelación sin expresión de motivos es improcedente. Así
entendemos los artículos 215 y 216 de este Código.

11. Recurso de Apelación.


El Procesalista Hugo Alsina apunta que la apelación "es el medio que permite
a los litigantes llevar ante el tribunal de segundo grado una resolución
estimada injusta, para que la modifique o revoque según el caso".
Por su parte Menéndez y Pidal manifestaba que la apelación "es un recurso
ordinario en virtud del cual la parte que no se conforma con la decisión de un
juez, puede llevar el litigio, o cienos puntos concretos de mismo, a la resolución
de otro juzgador".
El Maestro procesalista Dr. Palacio con propiedad manifiesta que el "recurso
de apelación es el remedio procesal tendiente a obtener que un tribunal
jerárquicamente superior generalmente colegiado revoque o modificado una
resolución judicial que se estima errónea en la interpretación o aplicación del
derecho o en la apreciación de los hechos o de la prueba".
El recurso de apelación es concedido a cualquiera de las partes que ha sufrido
agravio por la sentencia del juez inferior, para reclamar de ella y obtener su
revocación por el juez superior.
El principio, admitido en nuestro Derecho, del doble grado de jurisdicción,
consiste en lo siguiente: todo juicio, salvo en los casos expresamente
exceptuados por la ley, debe de poder pasar sucesivamente por el
conocimiento pleno de dos tribunales, y ese doble grado, en la intención del
legislador, representa una garantía de los ciudadanos en tres aspectos:
En cuanto que un juicio reiterado hace, ya por sí, posible la corrección de los
errores:

 En cuanto a que los dos juicios se confían a jueces distintos


 En cuanto que el segundo juez aparece con más autoridad que el
primero (el pretor, respecto del conciliador; el Tribunal, respecto del
pretor; el Tribunal de Apelación respecto del Tribunal de Primera
Instancia).
 En virtud de la apelación, la causa fallada por el juez inferior es traída
al juez superior. Este tiene el mismo conocimiento pleno del negocio
que el primer juez; esto es, examina la causa bajo todos los aspectos
que pudieran ser objeto de examen por parte del primero.
 El conocimiento del segundo juez tiene por objeto, aparente e
inmediatamente, la sentencia de primer grado, que deberá ser
declarada justa o injusta en hecho y en derecho; pero en realidad tiene
por objeto la relación decidida, sobre la cual el segundo juez ha de
resolver ex novo, basándose en el material reunido ahora y antes. La
apelación, tradicionalmente hablando, tiene dos efectos: el suspensivo
y el devolutivo.

11. 1. Fundamento del Recurso de Apelación.


Algunos jurisconsultos consideran inadecuada la existencia de la múltiple
instancia (planteando la única instancia), otros por el contrario entienden que
la múltiple instancia es necesaria.
Los que admiten la existencia de la doble o múltiple instancia sientan base o
se fundan:
 La múltiple instancia tiende a corregir los errores de la imperfección
humana. El juez en su calidad de ser humano, se encuentra tendiente a
cometer errores.
 La múltiple instancia tiende a asegurar la aplicación de la buena justicia,
corrigiendo las posibles imperfecciones cometidas por el juez.
 La múltiple instancia presupone la existencia de un tribunal superior que
generalmente es colegiado, generando de esta manera seguridad a las
partes, debido a la intervención de dicho tribunal.
 La existencia del tribunal superior el cual cuenta con mayor experiencia
limita las posibilidades de error.

Los partidarios de la inexistencia de la múltiple instancia, es decir el


establecimiento de una sola instancia, sostienen que la múltiple instancia da,
en términos generales, lugar a que los abogados y los litigantes de mala fe se
sirvan de los recursos para dilatar y embrollar los juicios, no hay razón para
suponer que los magistrados del tribunal de alzada tengan mayor ciencia o
rectitud que en los de primera instancia; trayendo al mismo tiempo pérdida de
tiempo energías y mayor la administración de justicia, advertimos:
 La única instancia evita las dilaciones de mala fe.
 La única instancia consta de mayor celeridad.
 La única instancia al ser rápida no genera gastos económicos.
 La única instancia evita el descrédito para la justicia de ahí que prevé evitar
las contradicciones entre jueces.

Pero no debemos olvidarnos que los recurso entre ellos el de apelación


permiten o consagran la más poderosa arma a favor de la defensa en juicio,
pues se afirman las posibilidades del individuo, proteger al individuo contra
cualquier agravio otorgando una mayor seguridad a la justicia y generar
confianza en el conglomerado social (sentido político).
En el caso de nuestra legislación, se basa en el sistema de la múltiple
instancia, la estructura procedimental es la del juez unipersonal en primera
instancia, cuya sentencia debe ser revisado por un tribunal colegiado en
segunda instancia, contra el que a su vez pueden interponerse recursos
extraordinarios ante un tribunal superior que cumple funciones casatorias,
limitadas al control de la correcta aplicación de la norma legal.

11. 2. Naturaleza del Recurso de Apelación.


En la doctrina existen diferentes posiciones sobre la apelación unos,
configuran a la apelación como un nuevo proceso distinto al de primera
instancia, más conocida esta posición como la tesis Renovadora; la apelación
desde esta perspectiva consta de un carácter autónomo, independiente,
especial y autentico; toda vez que la alzada constituye un proceso aparte y de
ahí que se autorice a título de ejemplo el ofrecimiento de nuevas pruebas en
la apelación, entendiendo tal situación a que el grado de autonomía lo hace
factible de nuevas pruebas.

Otros por el contrario manifiestan que se trata del mismo proceso, el cual se
encuentra dividido en distintos grados, conocida tal posición como la tesis
Revisora; la apelación tiene como meta o finalidad revisar y depurara el
material litigioso y el pronunciamiento definitivo de primera instancia, de modo
que con él no se procura reiterar el juzgamiento de origen sino controlar lo ya
decidido o resuelto, ya que no se reiteran los tramites del proceso principal
sino que se siguen otros diferentes distintos a los primeros teniendo por objeto
comprobar la exactitud o no de los resultados obtenidos en el proceso
originario.
Al margen de lo mencionado no debemos olvidar que la apelación supone la
vigencia del sistema doble de la instancia ella no implica un nuevo juicio en el
sentido de que en la sustanciación de recurso, el juez o tribunal de alzada se
halla habilitado para practicar las pruebas arrimadas en la primera instancia,
como para producir nuevas pruebas; la apelación consiste y constituye un
procedimiento cuyo objeto consiste en verificar sobre la base de la resolución
impugnada al error o al acierto de la primera instancia.

11. 3. Objeto de la Apelación.


El objeto de la apelación es el agravio y su necesidad de reparación por acto
del tribunal o juez superior, el acto provoca torio del apelante no supone que
la sentencia sea verdaderamente injusta, vasta que el apelante le otorgue tal
consideración, para que el recurso le sea otorgado y surja la segunda
instancia, en inferencia el objeto de la apelación es la operación de revisión a
cargo del superior sobre la justicia o injusticia de la sentencia apelada.

11. 3. 1. Apelación como protesta.


El impulso instintivo de desobediencia de parte del perdedor, se sustituye en
el derecho procesal por un instrumento técnico que recoge esa misma
protesta, el alzarse por sublevarse se sustituye por la alzada por apelar.
Su basa también en un concepto de libertad individual sobre la base de la
defensa del hombre contra el poder, el individuo solo defendido por la ley
contra el abuso y el exceso de sus jueces.

11. 3. 2. Objeto de Revisión.


El recurso de apelación es un medio de reparación de los errores cometidos
en la sentencia apelada o de los errores cometidos en la instancia apelada;
dicho de distinta manera cual es el objeto exacto de la revisión, es la instancia
anterior en su integridad o es simplemente la revisión de la sentencia.
Si la revisión es solo de la sentencia, la segunda instancia no puede consistir
no puede consistir en una revisión de todo el material de hecho, ni de las
cuestiones de derecho contenidas en la primera instancia, el recurso de
apelación no permitirá deducir nuevas pretensiones, ni excepciones ni adoptar
nuevas pruebas.
Es solo con el material de primera instancia que habrá de ser considerada por
el juez superior la apelación.
Si la revisión fuera de los errores cometidos en la instancia anterior, siempre
serían posibles nuevas proposiciones de derecho y la admisión de nuevas
pruebas que ya sea que por negligencia, error o ignorancia no fueron
aportadas en la instancia anterior.

11. 3. 3. Contenido de la Segunda Instancia.


Domina la idea de que la segunda instancia es solo un modo de revisión y no
una renovación plena del debate, son prohibidas conforme la tradición romana
las nuevas demandas Jus Novorum pero también son restringidas las
excepciones y las pruebas.
En nuestro derecho esta solución se subraya con un conjunto de elementos
particulares que efectivizan la segunda instancia.
Plantea la doctrina las siguientes consideraciones: Primero la situación
evidente en la apelación en relación en la cual la segunda instancia se decide
con lo material de la instancia anterior, no admitiéndose ni siquiera nuevos
documento, siendo esta institución característica del derecho de indias.
Segundo debe subrayarse la terminante exclusión de las nuevas demandas,
por tal se entiende la proposición de nuevas peticiones no contenidas en
la demanda inicial.
Pero no viola la prohibición de nuevas demandas aporta una nueva
fundamentación de derecho.
En nuestra legislación, en recurso de apelación de efecto suspensivo las
partes tiene la facultad de presentar nuevos documentos de prueba o pedir la
apertura de plazo probatorio.
En conformidad al artículo 232 del Código de Procedimiento Civil, una vez
radicado el proceso ante el juez o tribunal que deba conocer y resolver el
recurso interpuesto las partes tienen varias facultades entre ellas como ya se
mencionó el de presentar nuevos documentos, pedir apertura de plazo
probatorio y finalmente observar el efecto de la apelación.
Se admite la prueba documental posterior a la demanda solo bajo juramento
de no haber tenido antes conocimiento de ellos, conforme al artículo 331 del
Código de Procedimiento Civil, como la presentación de documentos en la
segunda instancia importa una excepción a la regla debe por consiguiente
actuar el juzgador con criterio restrictivo; aceptando la autorización de
documentos de fecha posterior al llamamiento de autos para sentencia en
primera instancia, pues la prohibición de hacerlo involucraría cercenar el
derecho de las partes a la defensa, para quienes el contenido de tales
documentos puede resultar decisivo con respecto a la suerte del recurso
interpuesto.
Art. 232.- (FACULTAD DE LAS PARTES).
I. Sólo dentro del plazo perentorio de cinco días, computables desde la fecha
de la providencia de radicatoria, podrán las partes presentar nuevos
documentos o pedir apertura de plazo probatorio.
II. Podrán asimismo pedir se devuelva el proceso al inferior si éste hubiere
concedido indebidamente la apelación en el efecto suspensivo siendo ella
procedente sólo en el devolutivo En este caso se ordenará rectificar el error y
proceder conforme a ley. (Arts. 224, 234).
Art. 331.- (DOCUMENTOS POSTERIORES, O ANTERIORES
DESCONOCIDOS).
Después de interpuesta la demanda sólo se admitirán documentos de fecha
posterior, o, siendo anteriores, bajo juramento de no haber tenido antes
conocimiento de ellos. En tales casos se correrá traslado a la otra parte para
los efectos del artículo 346, inciso 2.

11. 4. Los Sujetos de la Apelación.


El recurso de apelación tiene por objeto determinar quiénes pueden deducir
recurso y quienes no pueden deducir recurso, es decir quien
tiene legitimación procesal en la apelación el recurso interpuesto por quienes
no legitimación es decir carecen de ella.
No surte efectos ya que como acaba de verse la apelación solo surte o
funciona a propuesta de la parte legítima, pero estando subordinada a la
facultad de apelar al hecho de no haber visto satisfechas sus pretensiones
deducidas en el juicio (de ahí que solo puede haber recurso a la insatisfacción
de alguna de las aspiraciones de las partes). Los sujetos titulares del recurso
son las partes, tal afirmación no es tan cierta ya que existe la eventualidad de
que las partes se encuentren privadas de recurso.
La apelación solo está reservada (regla)a las partes, los terceros no tiene
legitimación para apelar, esta afirmación se apoya en la razón de que la
apelación es una facultad otorgada al litigante sino también en la que los
terceros generalmente no sufren agravios por la sentencia, ya que la cosa
juzgado por, regla, no los alcanza.
En contra partida el día que se les obligue al sometimiento con la sentencia
podrán alegar validamente que el proceso es, bajo su consideración, Res Inter
Alios Judicata; tal posibilidad los libera del perjuicio con siguiente no pudiendo
entonces hablarse de agravio respecto de ellos.
Pero si bien es cierto que en principio la sentencia solo afecta a las partes en
determinados casos ella proyecta efectos hacia terceros, en ese caso en
principio se admite el recurso de apelación a favor del tercero siendo el agravio
la medida de la apelación.
Obviamente si el tercero es ajeno a los limites subjetivos de la cosa juzgada y
no resulta afectado por ella no puede interponer el recurso de apelación ya
que si no hay agravio no hay apelación.
En nuestra legislación bajo los presupuestos señalados los terceros pueden
interponer el recurso de apelación en amparo del artículo 222 del Código de
Procedimiento Civil:
Art. 222.- (DERECHO EXTENSIVO).
El recurso de apelación podrá también ser concedido a cualquier interesado a
quien causare perjuicio evidente la sentencia o auto definitivo, y demostrare
documentalmente su calidad de interesado. En este caso el término para
interponer el recurso será el fijado por el artículo 220 computable desde la
última notificación a las partes.

11. 5. Efectos de la Apelación.


Los efectos de la apelación se vinculan por un lado con la ejecución de la
resolución que es objeto del recurso y con la oportunidad en que aquel debe
sustanciado y decidido, en el primero de los aspectos señalados el recurso
puede tener efecto suspensivo o devolutivo según qué respectivamente
paralice o no el cumplimiento o ejecución de la resolución que se impugna.
Es decir puede suceder que interpuesto el recurso se produzca la inmediata
sumisión del asunto al juez superior? es lo que se conoce como efecto
devolutivo-, pero en previsión natural de que la sentencia pudiera ser la
revocatoria de la anterior normalmente se suspenden los efectos de la
sentencia que es objeto de recurso (efecto suspensivo); o en amparo del
principio de celeridad para evitar las interrupciones del procedimiento principal
el efecto sea diferido.
En nuestra economía procesal la Ley De Abreviación Procesal Civil Y De
Asistencia Familia complemente los efectos del recurso de apelación, en:
suspensivo, devolutivo y diferido.

11. 5. 1. Efecto Suspensivo.


El recurso de apelación con efecto suspensivo, suspende la competencia del
primer juez, este efecto tiene por principio las consecuencias de la sentencia
y hace que el juez se desprenda de los autos, sin perjuicio que mantenga una
competencia residual para hacer aclaración de su decisión, pudiendo en
ciertos caso declarar medidas precautorias o de seguridad, empero no puede
ejecutar la sentencia mientras no se resuelva el recurso planteado.
La apelación con efecto suspensivo procede en contra: de las sentencias
pronunciadas en procesos ordinarios, de las sentencias pronunciadas en
procesos de desalojo, de los autos de carácter definitivo que cortaren todo
procedimiento ulterior (artículo 224 del Procedimiento Civil).

11. 5. 2. Efecto Devolutivo.


Al contrario del anterior efecto, hace que el juez apelado mantenga una cierta
hegemonía en el proceso a los fines del cumplimiento provisional de lo resuelto
por él.
En este efecto pese al recurso ordinario de apelación y encontrándose
impugnada la resolución del juzgador se puede ejecutar provisionalmente la
resolución sin perjuicio de los tramites normales de la apelación, este efecto
tiene por objeto la no paralización del proceso para evitar interrupciones
innecesarias en el mismo, normalmente se concede contra las resoluciones
judiciales de menor importancia o trascendencia en el proceso civil , de la
misma forma contra las sentencias de procesos donde no se
discute derechos dudosos o contradictorios, procede también en contra de los
autos interlocutorios que se pronuncian durante la tramitación del proceso y
finalmente contra las resoluciones dictadas en la fase procesal de la ejecución
de la sentencia.

11. 5. 3. Efecto Diferido.


Lo que la ley 1760 busca es dar agilidad a la tramitación procesal en
un ambiente de practica procedimental jurídica, este efecto funciona como una
reserva para el caso en que el expediente sea luego elevado en alzada,
interpuesta contra la sentencia definitiva, es decir que consiste en permitir al
apelante que sin perjuicio del cumplimiento de la resolución apelada, se
reserva la concesión de la alzada hasta el estado de una eventual apelación
de la sentencia, es entonces como un recurso condicionado a la apelación
principal, en cuyo caso corresponderá tratar ambas apelaciones,
evidentemente primero será la diferida por tratarse de algún trámite anterior a
la sentencia.
Este efecto tiene por finalidad la celeridad evitando interrupciones en el
procedimiento principal. El juez puede ejecutar provisionalmente la resolución
objeto de impugnación sin perjuicio del recurso interpuesto el mismo se
activara en una eventual apelación de la sentencia siempre y cuando el
apelante de la sentencia sea el mismo del efecto deferido. Para referirnos
sobre la procedencia de este tipo de efecto, es menester dar cita al artículo 24
de la ley 1760:
"ARTICULO 24o.- (PROCEDENCIA). La apelación en efecto diferida,
procederá contra las siguientes resoluciones:
1. Autos interlocutorios que resolvieren excepciones previas;
2. Autos que resolvieren incidentes;
3. Resoluciones sobre proposición, producción, denegación y diligenciamiento
de la prueba, y, en general.
4. Resoluciones que no cortaren el procedimiento ulterior."
12. Recurso de Casación.
Este es un recurso de carácter extraordinario, y conforme lo anota
el Profesor Decker Morales este es un recurso de importancia práctica y
teórica, la cual se es resuelta por Excelentísima Corte Suprema de Justicia de
la Nación, y ataca a las sentencias de segundo grado o Autos de Vista
pronunciados por las Cortes Superiores de Distrito, cuando alguna de las
partes consideren que el juez o tribunal, a tiempo de resolver la litis, infringieron
leyes expresas y terminantes; dicho de otro modo tiene mucha importancia
puesto que es una facultad reservada al Tribunal Supremo, declarándolo
improcedente, infundado, anulado o casando la resolución objeto de la
casación.
El objeto de este recurso es dual, el primero consiste en invalidar una
sentencia, cuando en ella se hubiese infringido una ley, para que el tribunal de
casación dicte una nueva resolución en el fondo aplicando correctamente la
ley infringida y el segundo consiste en anulación que realiza el tribunal de
Casación; la resolución recurrida o un proceso cuando al dictárselo o tramitarlo
se hubieren violado formas esenciales que se encuentren establecidas por la
ley como motivos de invalidez. Con el recurso de casación o nulidad
establecido por el artículo 250 se persigue:
a) La necesidad de velar por la uniforme y correcta aplicación e interpretación
de las leyes procurando hacer efectiva la igualdad de la ley para todos.
Mediante este recurso, el Estado reafirma su propósito de asegurar a los
particulares la realización de sus intereses privados amparados por el
derecho objetivo.
b) Constituye, el indicado recurso, un objetivo institucional, ya que mediante el
fallo del máximo Tribunal de Justicia, se concreta la garantía básica de
nuestra organización constitucional que declara la igualdad de las partes en el
proceso.
c) El interés de dar término a las controversias judiciales mediante decisiones
inapelables, ya que la sentencia, como concepto primario, es el acto por el cual
el Estado resuelve con carácter definitivo una controversia.
El recurso de casación, es de carácter extraordinario, porque entendemos que
los intereses litigados por las partes que intervienen en el proceso, están
suficientemente garantizados por las leyes procesales en las dos instancias
reconocidas.
El antedicho recurso, es distinto al antiguo recurso de injusticia notoria. Este
tenía por objeto reparar una injusticia en favor del litigante agraviado. El
primero, como hemos dicho, tiene en nuestro sistema procesal, otra finalidad
y es el restablecimiento del imperio de la ley.
Es por eso que llena una función pública que se la ejerce con absoluta
prescindencia de los intereses de los litigantes discutidos en la litis y, sin temor
a la represalia de los otros poderes.
Teniendo en cuenta su carácter extraordinario, no es procedente, cuando en
la substanciación del proceso, no han sido agotados los recursos ordinarios.
No constituye una tercera instancia, porque en su trámite están excluidos las
cuestiones de hecho y nuevas causas de nulidad que no hayan sido
reclamadas ante los tribunales inferiores, tal como establece el numeral 3) del
artículo 258 del Código de Procedimiento Civil.
Ricardo Reimundin, uno de los procesalistas más destacados que es citado
por Decker Morales, señala que el recurso de casación configura el ejercicio
de un verdadero y propio derecho de impugnación perteneciente al particular,
esto constituye una expresión particular de la acción.
No obstante, puede darse el recurso de casación en interés de la ley; el
Ministerio Público puede denunciar de oficio la sentencia si cree que debe ser
anulada en interés de la ley.
Los efectos de esta nulidad no se extienden a la partes, las cuales continúan
obligadas por la sentencia que para ellos ha adquirido irrevocablemente
el valor de cosa juzgada; la nulidad se dicta en interés exclusivo de la ley para
que el error de derecho se corrija y no se produzca en otras sentencias.
Lo sostenido por el procesalista nombrado, fuera de constituir una novedad
interesantísima, nos permite hacer una interrogación.
Podrá el Ministerio Público, hacer uso del recurso de casación, cuando en el
Auto de Vista existe violación o una torcida interpretación de la ley, si el
litigante perdidoso del derecho que la ley le concede.
El recurso de casación en cuanto se refiere al fondo (error iniudicando), no
afecta a los medios de hacer el proceso sino a su contenido. En otros términos,
no se trata de formas procesales sino del fondo mismo de la sentencia o de
sus fundamentos sustanciales.
Este error puede producirse cuando en el auto de vista se aplica una ley
derogada, o no se aplica la que rige para la resolución del caso concreto, o
finalmente cuando se falsea su interpretación, la letra o el espíritu de la ley.
En el recurso de casación en la forma (error in procedendo), se puede incurrir
en dos aspectos:
1.- el primer error radica en la desviación de las formas procesales
determinadas de antemano por el Derecho Procesal;
b.- en el error pueden incurrir las partes, apartándose de esas formas
procesales, motivando una disminución en las garantías de la sustanciación
del proceso y privando a las partes de la defensa plena del derecho.
En la casación de forma, el tribunal deberá anular lo obrado hasta el vicio más
antiguo, vale decir que debe realizar lo que se llama en el derecho procesal
francés- renvoir; mandar devolver los autos al inferior para que éste se
pronuncie con arreglo a derecho.
En la substanciación de los recursos de casación o nulidad, de acuerdo a la
doctrina procesal, se aplican los siguientes principios:
Principio de especifidad, que consiste en que no hay nulidad sin la existencia
de una ley específica que la determina, según establece el artículo 251. En
otros términos, no hay nulidades por analogía o por extensión.
Principio de trascendencia que determina que no hay nulidad de forma si la
violación no tiene trascendencia. Este principio encierra la máxima no hay
nulidad sin perjuicio, o que, es necesario que la infracción haya ocasionado un
gravamen. Este principio está avalado por la numerosa jurisprudencia
Nacional.
Cuando toda violación de forma no se reclama en su debida oportunidad, se
considera convalidada con el consentimiento. Recibe el nombre de principio
de convalidación.
Finalmente, existe también el principio de protección que comprende la
esencia misma de la nulidad como medio de impugnación procesal.
Sintetizando se aseverar el recurso de casación no es más que un medio de
protección de los intereses jurídicos de las partes que litigan, cuando en la
resolución, el juez o tribunal se aparta de las formas procesales sin tener en
cuenta que ellas siempre han sido consideradas por la jurisprudencia Nacional,
como de orden público.
13. Recurso de Compulsa.
Cabe realizar una diferenciación entre compulsa y recurso de compulsa, la
primera consiste en el acto de examen de dos o más documentos
comparándolos entre sí, compulsa es sinónimo cotejo, de ahí que se entienda
como la copia de un documento o de unos autos sacada judicialmente y
confrontada con su original.
Por el contrario el recurso de compulsa es conocido también como el recurso
de queja o recurso por denegación; es un medio de impugnación que opera
en contra del juez de primera instancia ante la no admisión de otro recurso
(por lo general el recurso de casación o de apelación).
Este recurso tiene por finalidad que el superior controle la decisión del inferior
en lo atinente a la admisibilidad de la apelación y casación denegada (el
presente trabajo se desarrollara entorno a materia civil, debido a que la misma
desarrolla ampliamente dicho recurso).
La compulsa (en materia procesal) es el recurso que interpone la parte
afectada cuando el juez deniega la admisión de la apelación, el recurso de
casación o cualquier otro recurso permitido por ley, tiene por objeto sostener
y afirmar las disposiciones legales sobre la admisión de la apelaciones,
casaciones y demás recursos.
Este medio de impugnación se justifica jurídicamente, porque de nada serviría
que la ley concediera los recursos de apelación o casación, cuando en su caso,
el juez los deniega arbitrariamente y su viabilidad está condicionada y
subordinada a la preexistencia de la negativa del recurso.
La compulsa trata en efecto "de un recurso contra lo ya resuelto sobre el
recurso"; mediante él no se pretende como en los restantes medios de
impugnación la revisión integral de una resolución como objetivo inmediato,
sino la apertura de la posibilidad de esa revisión (posibilidad que fue
clausurada en la instancia apelada) o bien el reexamen del efecto con que la
apelación ha sido concedida.

13. 1. Razón de ser de la compulsa.


Una vez que el órgano jurisdiccional se ha pronunciado sobre un recurso de
apelación, concediéndolo no puede ya revisar su decisión, ni esta puede
tampoco ser impugnado por vía de apelación.
Tanto la reposición como la apelación, en efecto son recursos que persiguen
la revisión integral de lo resuelto, por parte de una instancia abierta a esa
revisión; si la apelación es concedida el órgano judicial, ya se ha desprendido
del conocimiento de la materia apelada y no puede, por ende, sobre su criterio.
Pero si es denegada ha generado un obstáculo procesal que él no puede
remover porque precisamente a resuelto no tiene ejecutoriedad la resolución
recurrida.
Y la apelación no resulta apta tampoco, ya que para su admisibilidad es
necesario, que está abierta la instancia que ha de producirse sobre ella y esto
no será viable si previamente no se deja sin efecto la denegatoria con un medio
idóneo.

13. 2. De la Procedencia.
De acuerdo al ordenamiento jurídico procesal, este medio de impugnación
procede cuando indebidamente se niega el recurso ordinario de apelación y el
recurso de casación y finalmente cuando se concede el recurso de apelación
sólo en efecto devolutivo, debiendo ser en el suspensivo.

13. 3. De la Negativa de la Apelación.


El juez de primera instancia como sostuvimos, puede negar la concesión del
recurso de apelación cuando el mismo se encuentra interpuesto fuera de plazo
legal, o si la resolución es irrecurrible, al amparo del artículo 213 del código de
procedimiento civil que señala:
Art. 213.- (RECURRIBILIDAD DE LAS RESOLUCIONES JUDICIALES).
I. Las resoluciones judiciales serán recurribles mediante impugnación de la
parte perjudicada.
II. Sólo cuando la ley declare irrecurrible una resolución será permitido negarse
al examen del recurso o someterlo a conocimiento del juez que
correspondiere.
En este caso la compulsa no trata de asegurar la doble instancia como
institución, ya que es bien sabido que en ella no está comprometida la garantía
constitucional de la defensa en juicio, sin embargo en caso de existir una
instancia de alzada, si a criterio del apelante ella debe serle abierta, para
conocer sobre el fondo del decisorio, es necesario que aquel tenga, a su
disposición un medo idóneo para que se establezca, en definitiva si los motivos
por los cuales se ha cerrado esa posibilidad de revisión están a no ajustados
a derecho.

13. 4. De la Negativa de Casación.


El juez o tribunal de casación puede negar este, cuando este recurso se
hubiere interpuesto después de vencido el termino de ocho días (conforme
prevé el código de procedimiento civil) o cuando el recurso se interpone contra
una resolución no contemplada en el artículo 255 del mismo cuerpo de ley, y
finalmente cuando se interpone directamente el recurso de casación sin antes
haberse apelado.

13. 5. De la Mala Concesión del Efecto.


En este caso el juez, ha concedido el recurso de apelación pero solo en el
efecto devolutivo, debiendo haberse concedido en el efecto suspensivo. Es
muy delicado saber conceder el recurso adecuado ya que sus efectos
benefician o causan perjuicios irreparables a las partes.
Los efectos de la apelación tienen gran significación o importancia en la
tramitación del proceso, el efecto devolutivo pese a la apelación interpuesta,
se ejecuta provisionalmente la resolución impugnada, lo que no ocurre en el
efecto suspensivo, de ahí que sea muy delicado conceder el recurso correcto.

13. 6. De la Competencia, Interposición y Sustanciación.


Es menester, antes de desarrollar el presente punto dar cita al artículo 284 del
Código de Procedimiento Civil, que expresa:
Art. 284.- (INTERPOSICION Y SUSTANCIACION).
El recurso de compulsa deberá interponerse ante el juez o tribunal inmediato
superior, el cual lo sustanciará de acuerdo a las disposiciones que siguen.
El precepto citado, señala que el recurso de compulsa se interpone ante el
juez o tribunal superior, con respecto del juez o tribunal que negó el recurso
de apelación y casación, o concedió mal el efecto de la apelación recurrida,
más al contrario si el superior e inferior se encuentran en diferente asiento
judicial, el recurso de compulsa se interpone ante el mismo juez o mejor citado,
se anuncia de compulsa, pero el recurso en si lo resuelve siempre el órgano
superior.
La fundamentación del recurso de compulsa, debe dirigirse a probar que el
recurso fue mal denegado o el efecto establecido se encuentra equivocado,
no correspondiendo en ese momento sobre la injusticia o nulidad del fallo, por
lo que la argumentación del recurso de compulsa debe ceñirse a expresar los
error en que incurriera el juez o tribunal de grado inferior al impedir la apertura
de la instancia ante la alzada, mediante una crítica eficaz razonada o
un análisis concreto y argumentado.

Inicialmente se encuentran legitimados de interponer el recurso de compulsa,


las partes y un tercero en forma excepcional cuando la negativa se funda
justamente en su calidad, la cual resulta discutible, siendo el superior quien
resuelva tal situación.
La parte de interponer en el recurso de compulsa lo es solamente el
compulsante o perjudicado, la contraparte no tiene intervención en el
procedimiento, sin embargo el mismo puede participar cuando éste alegue
algún interés legítimo, pudiendo en todo caso realizar en tal situación una
actividad de control.
Ante la eventualidad de que el recurso de compulsa se interpusiera contra el
juez o tribunal con asiento en el mismo lugar que el del superior en grado, el
compulsante ocurrirá ante éste dentro del plazo fatal de tres días computable
desde que se le hubiere notificado con la negativa, refutando los fundamentos
que tuvo el inferior en tal caso el superior decretará en el acto que se eleve el
proceso en el día, siempre que no se trate de ejecución de sentencia; y
resolverá el recurso de inmediato y sin trámite alguno, por ejemplo cuando él
se compulsa a un juez de partido de la Capital y la Corte de Distrito se
encuentra en el mismo asiento judicial o lugar.
Dicho en términos más sencillos el perjudicado con la negativa del recurso
debe interponer directamente la compulsa ante el juez o tribunal superior en
grado, de acuerdo a nuestra legislación se entiende por superior en grado,
tomando en cuenta la jerarquía de los órganos judiciales, por lo que si se
pretende compulsar a un Juez Instructor el superior, el superior es un Juez De
Partido, y de este la Corte Superior de Distrito, y respecto a este la Corte
Suprema de Justicia.
13. 7. Del Resultado.
El órgano jurisdiccional que debe resolver el recurso de compulsa, solo tiene
dos formas de resolución: Declaración Legal, Declaración Ilegal; ya que solo
analiza cómo se exteriorizo en líneas anteriores, razonada y jurídicamente si
el recurso fue o mal denegado al inferior.
En la hipótesis de que el recurso de apelación o casación fuera denegado
indebidamente, debe ser declarado legal, y entonces declarar que es
admisible, el juez o tribunal debe abocarse al conocimiento de la causa en
apelación o casación, solicitando el proceso, sino tuviera en su poder por
haberlos ya pedido, disponiendo la radicatoria del expediente para los tramites
consiguientes, comunicándosela al inmediatamente al inferior.
Sintetizando, el recurso de compulsa es aquel que se interpone por el
compulsante o afectado, cuando el juez de primera instancia niega la admisión
del recurso de apelación o del recurso de casación, con el recurso de compulsa
se sostiene y afirma las disposiciones legales sobre la admisión de la
apelación, casación y los efectos otorgados al recurso de apelación.
Es un remedio procesal ya que, al decir de Couture, "nadie de ninguna manera
puede quedar en manos del propio juzgador que pronuncio la decisión, la
posibilidad o no de admitir el recurso, pues de lo contrario dicho instituto
quedaría desnaturalizado al depender de la voluntad del magistrado que
profirió el acto atacado..."
Este recurso es muy importante ya que en materia penal, aun cuando no está
contemplado en el nuevo Código Procesal Penal, es un recurso muy arraigado
en la práctica forense, pues tiene por objeto resguardar y preservar los
derechos de los litigantes, que teniendo necesidad de recurrir ante el superior
en grado, los jueces y tribunales, no obstante la procedencia legal de la
impugnación, les haya sido negada, indebidamente el recurso o se haya
concedido en forma errónea.
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