Sunteți pe pagina 1din 2

El origen del color azul

Los colores son un elemento de la vida diaria puede revelar muchos aspectos de

la misma cultura. A menudo, vemos que el pigmento está asociado con un cierto

estado de ánimo. En el idioma anglosajón, “estar azul” significa rendirse a la

tristeza. En muchas otras culturas, el color de la ropa puede ser un instrumento

capaz de pasar a una amplia gama de información. Cuando hablamos aquí del

“origen del azul” no podemos hablar de la fecha exacta en que el color fue

inventado. De hecho, diferentes personas de todo el mundo emplean técnicas,

plantas, aceites y otras sustancias para obtener este mismo tono. Hace cinco mil

años, los egipcios utilizaban una piedra semi-preciosas (lapis lázuli) para hacer tal

coloración. Por el contrario, los romanos, acostumbrados al color, lo asociaban al

color de ojos claros de los bárbaros. En la época medieval, el rojo, negro y blanco

fueron utilizadas supuestamente para la construcción de luminarias y otros tipos

de telas. El uso del color rojo en la ropa de la nobleza indica la condición de un

individuo. Los campesinos y las personas en similares condiciones financieras

hacían uso de telas de color azul. Para obtener el color, se empleaba un pigmento

llamado ‘isatis’. En ese momento, los artesanos dejaban la planta fermentando con

orina humana. Algún tiempo después, algunos observaron que la adición de

alcohol podría acelerar la reacción. En consecuencia, varios artesanos se

emborracharon con la excusa de que tenían que dar colorante azul a alguna tela.

Con el tiempo, esta práctica hizo que los alemanes asociaran la embriaguez con

‘estar azul’. En el contexto de la exploración, los europeos conocieron el pigmento


índigo indiano, obtenido con el uso de una planta de este. Antes de ello, los

europeos tenían grandes dificultades para producir tintas de color azul al darse

una fuerte escasez de piedra lapis lázuli. Con el fin de proteger sus intereses

comerciales, esta vez muchos comerciantes habían establecido la prohibición de

la venta de telas azules que no hubieran sido fabricados a partir del isatis. En el

siglo XVIII, una experiencia con la oxidación del hierro por accidente terminó

ofreciendo el pigmento azul. Desde un punto de vista económico, el

descubrimiento vino a abaratar el proceso de la coloración e incluso la fabricación

de pinturas que se usan en la fabricación de marcos y lienzos. Ya en el contexto

de la Revolución Industrial, vemos que el desarrollo de la química estuvo

involucrado en la fabricación de varios tonos y colores manipulados artificialmente,

entre ellos el azul.

S-ar putea să vă placă și