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Algunos ejemplos de Asociatividad de

operadores rurales.
Algunos ejemplos de Asociatividad de operadores rurales.

En Colombia y Perú se han desarrollado iniciativas de Asociatividad de operadores, juntando a


distintas comunidades bajo un solo operador (la asociación), quienes dependen de una sola fuente
y están articuladas a una sola red de distribución, destacando la calidad del servicio y la rentabili-
dad del modelo Asociativo. Según se observa en el cuadro adjunto:

No. de Población No de
Operador / Nombre Tarifa Fuente/Sistema
localidades conexiones
Asociación de Usuarios Basica:30M3 Rio/Gravedad
5 3,000 Hab 457
Guachavita, Colombia USD 1.50

Asociación de Usuarios Rio/Gravedad


15 11,100 1,350
Sucuneta, Colombia USD 0.25 x M3

Asociación de Usuarios 1,203 Rio/Gravedad


37 9,600
Los Andes, Colombia USD.0.6 x M3

Asociación El Ingenio, 583 Galería filtrante/-


10 3,214
Ica, Perú USD.2.20 mensual Gravedad

Cabe mencionar que la Asociación del Ingenio, en el Perú, se ha fortalecido en la última década.
Actualmente tiene más de 900 conexiones, atiende a más de cinco mil habitantes, y su tarifa es de
USD 3.00 en promedio. Con ese mismo esquema existe la asociación del caserío La Huaca, en
Sullana, Piura, y la asociación PESAR de Celendín, en Cajamarca.

A su vez, existen otros modelos de Asociación de Operadores, o JASS individuales, quienes no


comparten el mismo sistema de agua, pero se asociación para mejorar su gestión con algunas
“economías de escala” mínimas. Así, existen modelos como el de la Asociación Hondureña de
Juntas de Agua (AHJASA), es un modelo exitoso el cual se ha replicado en El Salvador y Guate-
mala, en donde el esquema es reunir varias JASS de distintos lugares y crear una “Asociación
Civil” encargada de brindar asistencia técnica para la administración, operación y mantenimiento,
este esquema de Asociatividad se mantiene por casi dos décadas, con el apoyo de la cooperación
internacional.

En resumen, con los modelos de gestión asociativos, el servicio es administrado por una entidad
central elegido por las Juntas operadoras; en donde los usuarios fijan el precio del agua, y con los
ingresos se paga la operación y el mantenimiento y las eventuales utilidades son reinvertidas en el
sistema. Así mismo, la asistencia técnica, o el subsidio que brinda el Estado, se podrá canalizar de
manera más rápida y eficiente.
La conformación de una “Asociación de Operadores”, tiene ventajas directas para las comuni-
dades rurales en la medida que puedan identificar:

• Ventajas de economías de escala, para favorecer la operación y gestión en un mayor número


de sistemas y por tanto de comunidades y usuarios con mejores niveles de servicio. Cuanto mayor
el número de asociados que atiende la Asociación de operadores, menor será la tarifa promedio
para mantener el equilibrio financiero de su gestión.

• Ventajas de representación, en tanto puedan concertar y representar mejor a un determinado


conjunto de JASS rurales, frente a sus interlocutores inmediatos como el Gobierno local, el Gobier-
no Regional y eventualmente el Gobierno Nacional.

• Ventajas para su fortalecimiento institucional, en la medida que las entidades de cooperación


y los gobiernos locales, desde el Área Técnica Municipal (ATM) brinda asistencia técnica, teniendo
una contraparte sólida y empoderada en sus funciones.

• Oportunidades para las JASS asociadas en identificar nuevos espacios de intervención, espe-
cialmente, nuevos modelos de operación asociado de los servicios; o el saneamiento seguro, de
calidad, y la prevención de la contaminación del medioambiente, o constituir pequeñas empresas
operadoras de los servicios de agua y saneamiento, y promotoras del desarrollo productivo local.

Fuente: Castillo R,O. ”Los modelos de gestión comunitaria del agua y saneamiento en Latinoaméri-
ca y El Caribe”. Universidad Autónoma de Chile, Instituto chileno de Estudios Municipales, CSIC.
Santiago de Chile, 2016.
Véase también: Mejía et. Al 2016.

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